SI A LA EVALUACIÓN

4
SI A LA EVALUACIÓN, PERO… Los maestros queremos una evaluación, pero una evaluación formativa, que sirva para detectar las potencialidades y las debilidades, y a través de algún mecanismo o proceso estas debilidades transformarlas en fortalezas. No queremos una evaluación impositiva, una evaluación punitiva, no queremos una evaluación coercitiva, una evaluación persecutiva. Queremos una evaluación, exigimos una evaluación, porque creemos y estamos convencidos que debemos rendir cuentas de nuestros desempeños, ante los estudiantes, padres de familia y la sociedad, pero la rendición de cuentas no solo es deber de los maestros, sino de todos los protagonistas y actores de la educación. Por lo tanto la evaluación debe ser integral, a todo el sistema educativo, comenzando desde la cabeza, el Ministro de Educación, las subsecretarías, direcciones nacionales y regionales, directores provinciales, y al sistema de supervisión; que rindan cuentas de sus funciones, que transparenten las “inversiones” (gastos) de los proyectos que han implementado, que se evalúe el avance de los mismos, que transparenten en que se “invirtieron” los dineros solicitados como prestamos al banco mundial. ¿No es acaso la cabeza en este caso el ministro Vallejo el que debería dar el ejemplo?. Por lo tanto No estamos de acuerdo con la evaluación del Ministro Vallejo, porque este se vuelve a la vez juez y parte, porque viola la constitución que tanto pregonan al desconocer el artículo 344 que dice:” Existirá una institución pública con autonomía , de evaluación interna y externa, que promueva la calidad de la educación”; el

Transcript of SI A LA EVALUACIÓN

Page 1: SI A LA EVALUACIÓN

SI A LA EVALUACIÓN, PERO…

 

Los maestros queremos una evaluación, pero una evaluación formativa, que sirva para detectar las potencialidades y las debilidades, y a  través de algún mecanismo o proceso estas debilidades transformarlas en fortalezas.

 

No queremos una evaluación impositiva, una evaluación punitiva, no queremos una evaluación coercitiva, una evaluación persecutiva.

 

Queremos una evaluación, exigimos una evaluación, porque creemos y estamos convencidos que debemos rendir cuentas de nuestros desempeños, ante los estudiantes, padres de familia y la sociedad, pero la rendición de cuentas no solo es deber de los maestros, sino de todos los protagonistas y actores de la educación. Por lo tanto la evaluación  debe ser integral, a todo el sistema educativo, comenzando desde la cabeza, el Ministro de Educación, las subsecretarías, direcciones nacionales y regionales, directores provinciales, y al sistema de supervisión; que rindan cuentas de sus funciones, que transparenten las “inversiones” (gastos) de los proyectos que han implementado, que se evalúe el avance de los mismos, que transparenten en que se “invirtieron” los dineros solicitados como prestamos al banco mundial.

 

¿No es acaso la cabeza en este caso el ministro Vallejo el que debería dar el ejemplo?.

 

Por lo tanto No estamos de acuerdo con la evaluación del Ministro Vallejo, porque este se vuelve a la vez juez y parte, porque viola la constitución que tanto pregonan al desconocer el artículo 344 que dice:” Existirá una institución pública con autonomía, de evaluación interna y externa, que promueva la calidad de la educación”; el artículo 349: “El estado garantizará al personal docente en todos los niveles y modalidades, estabilidad, actualización, formación continua y mejoramiento pedagógico y académico…”; viola la constitución al desconocer el “derecho al trabajo y al empleo”.

 

Ellos, quienes son los encargados de velar por el respeto a la constitución son los primeros en violarla.

 

¿Por que el ministro de educación no transparenta sus actuaciones y dice como es el convenio con las universidades particulares y cuanto va a “invertir” (a pagar a estas universidades) el estado por este proceso de evaluación?.

 

Page 2: SI A LA EVALUACIÓN

No conocemos nada de dicho convenio, pero lo que si conoce es la “gran relación” que existe entre el ministro y las empresas privadas de educación.

 

¿Por que no se tomó en cuenta a las universidades Públicas y a los Institutos Pedagógicos que son los responsables (en su mayoría) de la formación de los docentes?

 

¿Por qué se trae este tipo de evaluaciones (recordando las viejas políticas de la partidocracia, de copiar modelos extranjeros, sin considerar nuestra realidad nacional) que fueron experimentadas en México, en el Perú (miles de maestros enviados a la desocupación), y en que a mejorado su educación?. En Argentina se quiso implementar este mismo sistema, pero la lucha organizada de los docentes Argentinos impidió su proceso.

 

¿Por qué el ministro Vallejo no informa como está el proceso de concurso  de merecimientos (pruebas de evaluación) para las autoridades de los Colegios Fiscales? ¿Por qué no devolvió las pruebas que reclamaban los docentes para evidenciar sus falencias? O es que ya llenó esos nombramientos y con quienes?

 

¿Por qué el ministro Vallejo no informa de las 12000 partidas que ofreció el presidente Correa hace dos años, y que llamó  a “evaluar” a más de 20000 maestros? Y que no ha entregado ni 1000. ¿Es que acaso la evaluación resulta un buen negocio?

 

Si evaluamos al ministro por las 12000 partidas: pues no saca ni 9 sobre 100 por lo tanto el ministro debería haberse ido ya a su casa.

 

Pero el gobierno y el ministro se empeñan en decir la “evaluación va por que va? En lugar de conversar y dialogar con los actores de la educación. Esta actitud nos conduce a la sospecha y al rechazo.

 

Nuestra realidad educativa no es estandarizada, no es lo mismo la educación en la ciudad que en el campo, que en la montaña, que en los cordones fronterizos; existen alrededor de seis mil escuelas unidocentes (un solo maestro para los 7 años de educación básica), el 50% de estas carecen de luz eléctrica, más del 90% no tiene alcantarillado, y cerca del 45% no tiene agua; en esas condiciones se desenvuelve un importante sector del magisterio ecuatoriano.

 

¿Es que acaso estas pruebas estandarizadas tiene un trasfondo político? ¿El de culpar de la crisis de la educación a los docentes?

Page 3: SI A LA EVALUACIÓN

¿Es que los maestros somos los responsables de mas de 30 años de políticas neoliberales?.

 

Es que acaso, que cuando se derrumba un puente los responsables de dicho derrumbamiento son los obreros que lo construyeron y el sindicato al que pertenecen?. O son los Contratistas e Ingenieros que realizaron mal los planos y los cálculos estructurales, y utilizaron materiales de baja calidad?

 

Nosotros los trabajadores de la educación y sus organizaciones NO somos responsables de la crisis de la educación, los responsables de la crisis educativa son quienes han detentado el poder político es decir los presidentes y sus ministros, pues son ellos quienes generaron y dirigieron las políticas educativas, políticas neoliberales, que en nada a favorecido a la mayoría del pueblo ecuatoriano, sino que ha estado al servicio y en función de solucionar los problemas de los grandes empresarios, banqueros, de la oligarquía y la burguesía. Y dentro de los responsables está el ministro Vallejo que a dirigido las políticas educativas durante tres gobiernos consecutivos (Gutiérrez, Palacio y Correa)

 

Estamos de acuerdo con una evaluación, pero una evaluación que oriente hacia una nueva educación, que la misma no sea tecnicista, individualista, personalista; queremos una escuela nueva, una escuela equitativa, incluyente, una educación solidaria, que esté al servicio de la gran mayoría de los hombres y mujeres de nuestro país, una educación liberadora, emancipadora, que sirva para la construcción de una patria nueva, de una sociedad mas justa.

 

Esta no es una cadena, en la que si no reenvías te llegará la mala suerte.

“Este es el criterio de un maestro y seguro de los 120000 maestros de nuestra Patria”

Reenvía a tus contactos.