Sesión 3 El Sufrimiento y El Pecado
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El drama humano: El pecado y el sufrimiento
Preguntas centrales:
• ¿Por qué si Dios es bueno permite tanto mal en el mundo?
• ¿Quiere pero no puede hacer nada o puede pero no quiere?
a) Trabajo personal:
• ¿Cuáles son en mi vida los 4 momentos más dolorosos?
• ¿Según yo cuales son los pecados más abominables ante Dios?
• Desde lo leído…
• ¿Qué es el pecado?
• ¿Qué es el pecado estructural?¿ Qué el pecado original?
Desmitificación de la imagen de Dios:
DIOS NUNCA MUERE
Dime quién eres Dios mío
Que tanto me haces sufrir
Dime corazón marchito
Por qué lloras sin cesar
Sólo en ti tengo esperanza
Bien de mi vida, mi único amor
Porque en ti veo que se alcanza
La paz querida del corazón
Si a tus oídos llegan mis ruegos
Mitiga el fuego de mi pasión
Calma la pena que me consume
Y da tu perfume a mi corazón
Dame por Dios tu amor
Y no hagas sufrir a mi corazón
Que te adora fiel
Con loca pasión
No me hagas sufrir, ténme compasión, por Dios
Dime quién eres Dios mío,
Que tanto me haces sufrir
Dime corazón marchito,
Por qué lloras sin cesar
Si a tus oídos llegan mis ruegos,
Mitiga el fuego de mi pasión
Calma la pena que me consume
Y da tu perfume a mi corazón
Pre-supuestos teológicos
• DIOS NO ES INTERVENCIONISTA- NI SÁDICO- NI INDIFERENTE
Problematización:
«O Dios quiere quitar el mal del mundo, pero no
puede; o puede, pero no lo quiere quitar; o no puede ni quiere; o puede y quiere. Si quiere y no puede, es impotente; si puede y no quiere, no nos ama; si no quiere ni puede, no es el Dios bueno y, además, es
impotente; si puede y quiere -y esto es lo más seguro-, entonces, ¿de dónde viene el mal real y por
qué no lo elimina?» “
Epicuro
Tenemos que diferenciar un mal que es consecuencia de nuestra finitud humana, que no supone imperfección, y otro que es evitable y es causa de un Dios que genera creaturas libres y que estas tienden estructuralmente al mal.
- Lo más diabólico del mal es
que tiene la capacidad de
hacer al hombre
experimentar el
sentimiento de abandono
del creador (JOB-Jesús);
oculta el rostro de Dios.
EL PECADO
El pecado es la ofensa al ser humano que ofende a Dios. Dado que el pecado es la “opresión de la verdad mediante al injusticia”: “oprimir la verdad de lo que uno es y de lo que son los demás” ( Cfr. Gonzales Faus)
>> La cólera de Dios se revelará desde el cielo contra la impiedad e injusticia de los hombres
que aprisionan la verdad en la injusticia<< Romanos 1,18
Revelación del pecado:
Pecado
Pecado estructural
Pecado personal
Pecado madre
Pecado original
Experien
cia
bíblica:
“He visto la opresión de mi
pueblo”
- Una primera toma de
conciencia de que
siempre somos
víctimas del pecado de
otros. Como realidad
empecatada
generamos
estructuras
pecaminosas.
PECADO
ESTRUCTURAL
“Anhelamos las
cebollas de Egipto”
- Reconocernos
nuestros
propios
pecados.
Aquellas
acciones que
nos alejan de
Dios y de
nuestros
hermanos.
PECADO
PERSONAL
“Cuando Israel era niño,
yo lo amé, y de Egipto
llamé a mi hijo. Pero
cuanto más los llamaba,
más se alejaban de mí;
ofrecían sacrificios a los
Baales y quemaban
incienso a los ídolos”
Oseas 11, 1-2
Israel reconoce que su
pecado de Raíz es la
infidelidad
PECADO MADRE
“Eres polvo y al polvo volverás
(Gn.3,19)
Reflexión del origen en clave de
pecado: Somos estructuralmente
pecaminosos. De origen tendemos
al pecado, esta tendencia está en lo
más profundo de nuestro corazón.
Es la contradicción del hombre que
somos y el que estamos llamado a
ser.
Aplicación
personal
¿Qué de mi
sufrimientos son
causa del pecado de
otros?-
¿ En qué pacto
con el pecado
estructural?
¿Cuál es mi pecado
madre?
(Aquel que está
incrustado en mi
estructura y es
producto de mi
historia)
¿De dónde vive el pecado?
Pecado estructural
“ Una situación que no permite a la mayoría ser persona y vivir como persona por estar sojuzgada y aplastada por
las necesidades vitales fundamentales; una situación de injusticia institucionalizada que impide positivamente la
fraternidad entre los hombres; una situación configurada por modelos de la sociedad capitalista y de la sociedad de
consumo, que impiden la solidaridad y trascendencia cristianas; una situación en la que el mundo y la
sociedad- lugares que median la presencia de Dios entre los hombres- SON LA NEGACIÓN DE LA ESENCIA
AMOROSA DE DIOS como realidad última fundante de toda realidad; una situación en la que no aparece la
imagen encarnada de Cristo, sino más bien la negación permanente de esta imagen; una situación de tales
características, desde el punto de vista cristiano, no tiene más que un nombre: PECADO”
Ignacio Ellacuría
Discernimiento del Espíritu del mal
Todo discernimiento supone reconocer en nuestros deseos y aspiraciones, aquellos que pueden atribuirse a Dios. Pero también aquellos en donde se cuela el MAL ESPÍRITU. Por tanto, desde la experiencia de la espiritualidad ignaciana el discernimiento supone escuchar nuestros deseos y preguntar constantemente ¿qué experimento? ¿A dónde me lleva?
Agente Impulso Vínculos Derrotero
MAL ESPÍRITU “Treta”
Desolación/ falsa
consolación ( Sub
angelo lucis)
ANTIREINO DE
DIOS, es todo
aquello que nos
aleja del Reino.
1ª Estrategia:
Se monta sobre
nuestras heridas,
sombras e instintos
exacerbados tales
como: poder, tener,
poseer, placer,
parecer.
2ª estrategia:
Usa fervores
indiscretos , ideales
exagerados,
mecanismos de
defensa,
compulsiones.
El lenguaje
ignaciano usa la
terminología treta a
todo aquello que
aleja de DIOS Y SU
REINADO; las
cuales son fuerzas o
impulsos que
necesitan nuestra
libre decisión para
historizarlo.
Podríamos decir lo
que contradice la
propuesta de Jesús:
1) Las obras de
justicia solidaria
(Mt. 25, 31ss)
2) La alegre
misericordia (Lc.
6,36)
3) La
incomprensión y
persecución (Mc
8, 34)
4) El amor de sí
mismo (Mt.
19,19)
Conclusiones…
El Dios de Jesús quiere y puede
intervenir en la historia pero lo hace
desde la encarnación
“Job y Jesús son a la vez testigos del hombre que sufre
y de un Dios silencioso muchas veces, pero son un camino para enseñarnos que aunque el amor y el mal
están irreconciliados para siempre, jamás el mal desarma al amor”
( Marcel Neusch)
“La historia no está predeterminada ni al bien, ni al mal. El mal no debe, pero puede triunfar
históricamente. No se trata solo de cambiar la propia conducta personal; se trata también de
cambiar las estructuras que producen el pecado en la sociedad y en la economía”
Antonio Kuri