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LA IGLESIA DE JESUCRISTO DE LA RESTAURACIÓN

TESOROS ESCONDIDOS Y PROMESAS – PÁGINA 1

SELECCIONES DE

Publicado por

IGLESIA DE CRISTO COMUNIDAD DE LOS SANTOS DE LOS ÚLTIMOS DÍAS

TRADUCIDO AL ESPAÑOL POR EL PRESIDENTE FABIO CRUZ



© - Esta publicación se encuentra bajo copyright de la

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Enero de 2010

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Esta publicación se ha preparado para el uso interno de la IGLESIA DE

JESUCRISTO DE LA RESTAURACIÓN, para los miembros de la misma dentro del contexto de los programas autorizados de la Iglesia. El uso de este material por cualquier otra persona, su copia o distribución, así como su transferencia por cualquier motivo y por cualquier medio sin el permiso escrito se halla estrictamente prohibido, y puede estar sujeto a las sanciones penales correspondientes



LOS ARTÍCULOS DE FE

NOSOTROS creemos en Dios el Eterno Padre, y en su Hijo Jesucristo, y en el Espíritu Santo. CREEMOS que los hombres serán castigados por sus propios pecados, y no por la transgresión de Adán. CREEMOS que por la Expiación de Cristo, todo el género humano puede salvarse, mediante la obediencia a las leyes y ordenanzas del Evangelio. CREEMOS que los primeros principios y ordenanzas del Evangelio son: primero, Fe en el Señor Jesucristo; segundo, Arrepentimiento; tercero, Bautismo por inmersión para la remisión de los pecados; cuarto, Imposición de manos para comunicar el don del Espíritu Santo. CREEMOS que el hombre debe ser llamado por Dios, por profecía y la imposición de manos, por aquellos que tienen la autoridad, a fin de que pueda predicar el evangelio y administrar sus ordenanzas. CREEMOS en la misma organización que existió en la Iglesia Primitiva, esto es, apóstoles, profetas, pastores, maestros, evangelistas, etc. CREEMOS en el don de lenguas, profecía, revelación, visiones, sanidades, interpretación de lenguas, etc. CREEMOS que la Biblia es la palabra de Dios hasta donde esté traducida correctamente; también creemos que el Libro de Mormón es la palabra de Dios.

CREEMOS todo lo que Dios ha revelado, todo lo que actualmente revela, y creemos que aún revelará muchos grandes e importantes asuntos pertenecientes al reino de Dios. CREEMOS en la congregación literal del pueblo de Israel y en la restauración de las Diez Tribus; que Sión (la Nueva Jerusalén) será edificada sobre el continente americano; que Cristo reinará personalmente sobre la tierra, y que la tierra será renovada y recibirá su gloria paradisíaca. RECLAMAMOS el derecho de adorar a Dios Todopoderoso conforme a los dictados de nuestra propia conciencia, y concedemos a todos los hombres el mismo privilegio: que adoren cómo, dónde o lo que deseen. CREEMOS en estar sujetos a los reyes, presidentes, gobernantes y magistrados; en obedecer, honrar y sostener la ley. CREEMOS en ser honrados, verídicos, castos, benevolentes, virtuosos y en hacer el bien a todos los hombres; en verdad, podemos decir que seguimos la admonición de Pablo: Todo lo creemos, todo lo esperamos; hemos sufrido muchas cosas, y esperamos poder sufrir todas las cosas. Si hay algo virtuoso, o bello, o de buena reputación, o digno de alabanza, a esto aspiramos.

JOSÉ SMITH JR.



NUESTRA MISIÓN

CREEMOS y aceptamos como válidos, para nosotros como Iglesia, los Artículos de Fe escritos por el Profeta José Smith. En virtud de ello, solemnemente proclamamos y testificamos que: NUESTRA MISIÓN ES: Proveer la oportunidad de crecimiento espiritual a los Santos de los Últimos Días relegados, sin importar su filiación S.U.D. de origen. NUESTRA MISIÓN ES: Cumplir el divino mandato de predicar la “plenitud” eterna del Evangelio Restaurado de Jesucristo a “todo… pueblo” en todo el mundo, incluyendo a las comunidades lésbico-gay alrededor del planeta. NUESTRA MISIÓN ES: Promover el conocimiento del amor de Dios por cada persona de la humanidad. Somos testigos de que el Todopoderoso crea la unidad desde la diversidad en la medida que se revela a sí mismo a personas de todas las naciones, tribus, lenguas y pueblos de acuerdo a su entendimiento, cultura, tiempo y sociedad. NUESTRA MISIÓN ES: Extender las bendiciones del Santo Sacerdocio, de acuerdo a la inspiración del Dios Todopoderoso, a todos aquellos que son llamados de Dios a la obra salvadora del Santo Sacerdocio, incluyendo a las mujeres.

NUESTRA MISIÓN ES: Permitir la Revelación en todas sus formas, para trabajar en un llamamiento y para determinar la duración de los llamamientos del Sacerdocio y en los oficios de la Iglesia, porque testificamos que Dios es la cabeza de esta obra y no el hombre. NUESTRA MISIÓN ES: Hacer uso del sagrado Poder Sellador del Santo Sacerdocio de Dios para unir todas las relaciones amorosas por tiempo y eternidad tal como la inspiración de Dios lo dirija. NUESTRA MISIÓN ES: Promover una actitud sana y positiva entre los Santos de los Últimos Días acerca de su expresión individual humana de afecto hacia otros a fin de que cada uno pueda liberarse de la falsa culpa de modo que la Fe personal pueda crecer sin inhibición. NUESTRA MISIÓN ES: Estar “…dispuestos a llevar las cargas los unos de los otros para que sean ligeras… llorar con los que lloran… consolar a los que necesitan de consuelo, y ser testigos de Dios en todo tiempo, y en todas las cosas y en todo lugar… aun hasta la muerte.”



SECCIÓN 1

El 4 de octubre de 1985, el Señor hizo saber por medio del Anciano Antonio A. Feliz las respuestas a varias preguntas que la Presidencia pro-tempore realizó al Señor. En respuestas a sus humildes oraciones, el Señor también dio algunos conceptos revelados los cuales han sido considerados apropiados para incluir al comienzo de esta compilación. 1 Así dice el Señor, el Poderoso de Israel, si, el Novio que espera por su Desposada: He aquí, por estas palabras sabréis que el final está a las puertas. 2 De cierto, estas palabras son dadas a mis siervos quienes magnifican su sacerdocio hasta la renovación de sus almas; por esta causa, Yo hablo y mi voz es escuchada hasta los confines de la Tierra por medio de la boca de mis siervos en estos últimos días. Ya sea por mi propia voz o la de mis siervos, es lo mismo; porque no habrá nadie que no oiga, porque Yo lo he hablado. 3 Porque he restaurado en la Tierra por última vez todo lo que fue y será necesario para aquellos que creen en mi nombre, a fin de que sean salvos en el Reino de mi Padre. 4 Si, aun he causado que la plenitud de mi Santo Sacerdocio con todas sus Llaves sean restaurados por medio de mi siervo José Smith hijo, y aun ahora, hago que este mismo sacerdocio sea extendido a todos los pueblos de la Tierra, si, aun a todas las personas. 5 Y esto es llevado a cabo por medio de mis siervos a quienes he llamado para establecer esta porción de mi Reino, si, la IGLESIA DE JESUCRISTO DE TODOS LOS

SANTOS DE LOS ÚLTIMOS DÍAS. 6 Este Sacerdocio, el cual es sin principio de días ni fin de años, se halla en medio de vosotros para la bendición de quienquiera que tenga Fe en mi Santo Nombre, se

arrepienta y reciba el Espíritu Santo para serle de guía y así, venga a mí. 7 Porque de cierto, aquellos que esto hagan, y diligentemente obedezcan mis grandes Mandamientos serán bendecidos por mi Padre; porque Yo soy el camino y por mi intermediación serán redimidos por el Padre y heredarán todo lo que el Padre tiene, si aun coherederos conmigo, porque soy el Hijo, el Primogénito del Padre. 8 Si, aquellos de entre vosotros que habéis recibido mi Santo Sacerdocio os digo: Magnificado vuestro Oficio y llamamiento; y de esta manera magnificaréis el Santo Sacerdocio que poseéis. 9 Si, mi voz llega hasta los perdidos y despreciados de la Tierra así como a los poderosos. Lo que he hablado en días pasados será ahora cumplido. Porque ya sea por mis siervos, o por terremotos, o por estas palabras, es lo mismo. 10 No hay ojo que no verá, ni oído que no oiga, ni corazón que no será traspasado. Porque yo soy Dios, y mi evangelio será predicado en todo el mundo, en cada nación, a todo pueblo, lengua y tribu como señal de que el fin ha de venir. 11 Una promesa que ahora doy a todos aquellos que humildemente busquen saber si estas palabras son de hombres o si provienen de mí:



12 De cierto, así dice el Señor, acontecerá que todos aquellos que pregunten al Padre en mi nombre si estas cosas son dadas por Su Espíritu, sabrán por el poder del Espíritu Santo que son justas y verídicas. 13 Si, sabréis con una certeza de corazón que deben, de aquí en adelante, continuar buscando diligentemente para vivir de toda palabra que procede de la boca de Dios o serán malditos. 14 Preguntad y se os contestará, buscad y hallaréis; llamad y se os abrirá. 15 Porque de cierto Yo soy el Buen Pastor y conozco mis ovejas, y mis ovejas escuchan mi voz; si, y si sois de mis ovejas, sabréis aun ahora que esta es mi voz la cual os ha hablado, porque la recibiréis por el Espíritu Santo. 16 Oíd ahora ¡Oh! Israel, y segad salvación para vuestras almas. Esto concierne a todo aquel que ha sido amonestado a fin de que amoneste a su prójimo. Si, meted vuestra hoz con fuerza y bendecid a otros para que aparezcáis sin culpa en el último día. Si procurad bendiciones para vosotros mismos. Porque de cierto, la diligencia será

recompensada con investiduras de lo alto porque soy el Señor de las dádivas. 17 No miréis vuestra culpa, sino, mejor abridme, porque estoy a las puertas. Venid a mi todos los que estés cansados y yo os daré reposo. Apacentad mis ovejas y os recompensaré con el perdón de vuestros pecados. 18 ¡Oh! Mis hijos, mi amor por vosotros es tan extenso como la eternidad y son otros los que os desprecian, porque yo, si, Dios, ¡no os condeno! 19 ¡Oh Mis Santos! Recordad que el sacrificio trae consigo las bendiciones del cielo. De modo que cuanto más sea consagrado al cumplimiento de una obra diligente, recompensaré con muchas bendiciones, si, aun el conocimiento de Dios. 20 Salid de Babilonia, ¡oh! Sión; preparad la vía del Señor; vestíos con ropajes hermosos porque el Prometido viene. Amén.



SECCIÓN 2

Una Epístola general a Todos los Santos de los Últimos Días concerniente al Santo Sacerdocio de Dios, por el Presidente Antonio A. Feliz. 1 Mis queridos Santos—El Profeta José Smith declaró haber recibido el sacerdocio de manos de Juan el Bautista, y también de Pedro, Santiago y Juan, los antiguos tres “jefes” de los Apóstoles del Señor. Él dijo que esto se llevó a cabo en la primavera de 1829. Esto sucedía once meses antes de la organización de la Iglesia institucional que salió a luz a partir del sacerdocio establecido. 2 El sexto día de abril de 1830, esta institución fue “… organizada y establecida de acuerdo con las leyes…” (S.U.D. D&C 20:1) del estado de Nueva York y fue llamada simplemente “Iglesia de Cristo”. 3 Ambas cosas son entidades separadas. El primero es sin principio o fin y procede de Dios; la segunda es a partir del primero y es reconocida por la ley del país. 4 Ciertamente el sacerdocio es conferido desde arriba y las iglesias meramente acuerdan en reconocer tal poder dentro de sus organizaciones; ellas no lo controlan-- ¡no pueden! 5 Este Sacerdocio es mucho más que lo que la mayoría de los líderes de las religiones del mundo pueden imaginar. Es el poder por el cual los mundos han sido, son, y serán creados. Es lo que da vida a todas y cada una de las iglesias que pueden ser llamadas parte de la Iglesia de Cristo (ver S.U.D. D&C 10:66-67). 6 Cuando José y Hyrum fueron martirizados el 27 de junio de 1844, los Doce Apóstoles, por derecho, se encontraban en posición de quórum presidente de la Iglesia. Los Doce son un

quórum equivalente en autoridad al Quórum de la Primera Presidencia de la Iglesia (ver S.U.D. D&C 107: 23-24). 7 Brigham Young era entonces el presidente del Quórum de los Doce Apóstoles y, como tal, fue legalmente sostenido como “… el presidente de los Doce Apóstoles, un miembro de los Doce y de la Primera Presidencia de la Iglesia…” Esto tuvo lugar en 1844 en Nauvoo, solo semanas después de la muerte de los dos presidentes; muerte que disolvió la anterior Primera Presidencia. 8 Sin embargo, el Profeta José Smith había seguido antes la dirección del Señor y había señalado a su sucesor. Los Doce, siendo un quórum equivalente en autoridad a la Primera Presidencia, eran quienes debían guiar a la Iglesia hasta el tiempo en que el sucesor designado por el Profeta se encontrara preparado, llamado, sostenido y ordenado al oficio y llamamiento que le pertenecía por revelación dada a José Smith hijo. 9 Las instrucciones en las revelaciones habían sido claras, el presidente precedente debía seleccionar a su sucesor por revelación, esta es la manera por la cual la sucesión de la Primera Presidencia tendría lugar: 10 Y esto sabréis con certeza, que no se os ha nombrado a ningún otro para que reciba mandamientos y revelaciones, hasta que él sea llevado, si persevera en mí. 11 Pero de cierto, de cierto os digo, que ningún otro será nombrado a este don sino por medio de él; porque si le fuere quitado, no tendrá poder sino para



nombrar a otro en su lugar (S.U.D. D&C 43: 3-4) 12 Para estar seguro, José Smith, el profeta de la restauración, confirió sobre los Doce (en la sala superior de la tienda de ladrillos rojos de Nauvoo) todas las llaves, poderes y autoridades que él mismo había recibido. El Señor sabía que ellos tendrían la onerosa tarea de presidir la Iglesia luego de que José Smith y Hyrum Smith fueran asesinados. 13 Al tiempo que el Profeta había dado a esos doce hombres la autoridad para ejercer temporalmente la presidencia de la Iglesia, él había también escogido a su sucesor permanente como fuera antes indicado. 14 El 17 de enero de 1844, José Smith hijo, designó a su hijo José Smith III para ser su sucesor como profeta – presidente de la Iglesia. La bendición patriarcal dada a José Smith III por el Profeta es solamente uno de los varios testimonios de este hecho. En otra ocasión, el Profeta presentó su hijo a los Santos como su sucesor en la arboleda cercana al Templo de Nauvoo (ver Historia de la I.R.J.S.U.D.).

15 José Smith hijo era el profeta del Señor cuando pronunció ésta bendición sobre la cabeza de su hijo, José Smith III. Como tal estaba, entonces, actuando en total acuerdo con las instrucciones sobre la sucesión de la Presidencia, como ha sido antes indicado. 16 José Smith III tuvo una muy larga vida, y fue literalmente un baluarte tanto espiritual como temporalmente para sus hermanos. Fue un gran consuelo para su madre, porque ella tenía la esperanza de que él pudiera aceptar el llamamiento un día futuro como primer Presidente de la Reorganización, tal como se llamaba el movimiento en aquellos días.

17 Sus memorias testifican del cumplimiento de la profecía de que ángeles le ministrarían. El fue levantado ante la vista de aquellos que le seguían como su Profeta, Vidente y Revelador. El probó ser muy sabio durante su muy atareada administración de los asuntos de la Iglesia, a la luz de las varias facciones que se reunieron en el movimiento de la Reorganización. 18 Probablemente el más significante desarrollo que cumplió “… las promesas hechas a su padre…” fue el hecho de que José Smith III guió a los santos que permanecieron en Nauvoo de vuelta al Condado de Jackson, Missouri, y estableció el centro de la Iglesia tal como fuera profetizado por su padre. 19 Mientras tanto, la Iglesia de Utah, bajo el liderazgo de los Doce (en la cual el Presidente de la Iglesia es escogido de manera automática, es el Presidente de los Doce al momento de la sucesión) esperaba poder volver a Missouri también. No obstante, José Smith III era el presidente quien, de hecho, cumplió dichas promesas y profecías. 20 Lo significante para vosotros, mis queridos santos de Dios, es como todo esto tuvo lugar; porque en el entendimiento de ello reposan los principios sobre los cuales se basa el establecimiento de la IGLESIA DE

JESUCRISTO DE TODOS LOS SANTOS DE

LOS ÚLTIMOS DÍAS. 21 Reconozcamos algunos hechos importantes: a- Varios miembros de la Iglesia en Nauvoo no siguieron a Brigham Young y los Doce, sino que permanecieron en dicha ciudad esperando que el “Joven José” se convirtiera en el futuro presidente de la Iglesia porque recordaban el anuncio del Profeta..



22 b- El Presidente de la Estaca Nauvoo fue uno de los que permanecieron en dicha ciudad junto a otros que habían sido ordenados a varios oficios del Sacerdocio mientras el Profeta aun estaba vivo; 23 c- Ellos continuaron las funciones en sus respectivos oficios y llamamientos como Ancianos en el Santo Sacerdocio y comenzaron a recibir revelaciones; 24 d- La más alta autoridad del sacerdocio entre ellos, el Sumo Sacerdote Presidente, el Presidente de Estaca fue uno de los que recibió revelaciones instruyéndole que esperara a que José Smith III aceptara su llamamiento; 25 e- Ellos continuaron predicando el evangelio, ordenando a otros de la forma en que lo habían aprendido; 26 f- Cuando el tiempo apropiado llegó, ellos reorganizaron la Iglesia POR REVELACIÓN con el cumplimiento de las promesas dadas de que José Smith III se convertiría en su Presidente. 27 El hecho es que, quien sea ordenado al oficio de Anciano en el Santo Sacerdocio, posee las llaves del Sacerdocio de Melquisedec en cierto grado, si solamente un Anciano quedara sobre la faz de la Tierra, el podría ir y organizar el Reino de Dios por medio de la REVELACIÓN. 28 El Anciano John A. Widtsoe en su libro “Teología Racional” en la página 103 1 escribió acerca de esto: Como ilustración del gran poder, autoridad y tarea conferida por el Sacerdocio, debemos llamar la atención sobre el hecho de que, si por situación alguna todos los poseedores del Sacerdocio en la iglesia fueran destruidos, a excepción de un Anciano, sería la tarea y

1 N. del T. La numeración de página corresponde a la

edición en inglés. La traducción es libre, ya que no

contamos en castellano con la mencionada obra.

derecho de ese Anciano, BAJO LA REVELACIÓN DIVINA el reorganizar la iglesia entera con todos los grados del Sacerdocio y sus Oficios. 29 Esto es, en esencia, lo que tuvo lugar en Nauvoo cuando el liderazgo de la Iglesia se fue y llevó consigo a la mayoría de los Santos al Oeste. Estas personas quedaron abandonadas; fuera de contacto con los líderes de Utah por años. 30 Y, cuando observaron que Brigham Young había tomado sobre sí la reorganización de la Primera Presidencia sin esperar que el “joven José” estuviera preparado para suceder a su padre, ellos buscaron la dirección del Señor y la respuesta fueron una serie de revelaciones instruyéndoles esperaran hasta que José Smith III se encontrara listo. 31 Esto mismo es lo que ha sucedido con nosotros. Las iglesias del movimiento de la restauración han olvidado a las personas del mundo que no son heterosexuales, y no realizan proselitismo entre ellos en su misión de predicar el evangelio de la restauración a las naciones de la Tierra. De hecho, cuando los Ancianos de la Iglesia de Utah descubren que están enseñando a personas que son gays o lesbianas, tienen la instrucción de dejarles y no predicarles más el evangelio. 32 Esas iglesias no están llevando el evangelio restaurado a toda nación lengua y PUEBLO. Sin embargo, no es Dios quien está reteniendo el evangelio restaurado a las comunidades homosexuales del mundo. 33 La experiencia también ha enseñado que no es Dios quien desea ver a los gays y lesbianas Santos de los Últimos Días dejando de trabajar fervorosamente en beneficio de otros simplemente porque sinceros y honestos líderes de las iglesias



de la restauración actúan como ellos piensan que es correcto. 34 De manera muy similar a los Santos que fielmente esperaron en Nauvoo por José Smith III hasta que él se convirtiera en el próximo presidente de la Iglesia, nosotros que no somos heterosexuales, hemos sido dejados de lado por aquellos que presiden la Iglesia que amamos cuando ellos escogieron darnos vuelta la espalda y negar el evangelio restaurado a nuestro pueblo, a saber, las comunidades lésbico-gay del mundo. 35 Ha sido en el mismo espíritu de humildad en búsqueda de la voluntad de Dios que nosotros también hemos esperado por la guía divina de manera muy similar a los Santos de Nauvoo que esperaron de Dios a otro profeta para guiarles tal y como les había sido prometido. 36 Siguiendo el proceso que siempre se ha estilado por parte de Dios cuando el Santo Sacerdocio ha estado sobre la Tierra, el Más Alto Dios escoge llamar a los poseedores de Su Sacerdocio una vez más; POR REVELACIÓN por medio de un alto poseedor del sacerdocio, Dios nuevamente ha dado dirección concerniente a la reorganización de la Iglesia. 37 En esta ocasión no hubo un Presidente de Estaca; hubo solamente un Sumo Sacerdote, quién había sido Obispo y Sellador en el Santo Templo de Dios. De todas maneras, el proceso seguido, fue el mismo que en la Reorganización de 1860. 38 En esta ocasión, a- Varios miembros de la iglesia fueron dejados a su propia suerte, todavía siendo poseedores del sacerdocio, pero, sin una iglesia que reconociera ese poder;

39 b- Había varios poseedores del Sacerdocio de Melquisedec que permanecían dentro de las comunidades gay del mundo: uno de ellos era un Sumo Sacerdote a quien se le habían conferido otros poderes de sellamientos y presidencias, así como también algunos otros sumos sacerdotes, ancianos y setentas; 40 c- En cuanto comenzaron a ejercer sus funciones en los respectivos Oficios del Sacerdocio, comenzaron a recibir revelaciones de Dios; 41 d- El de más autoridad entre ellos, el Sumo Sacerdote Presidente era el que recibió revelación instruyéndoles para organizar una iglesia y esperar por mayor luz y conocimiento. 42 Mis queridos Santos, debemos continuar siguiendo el proceso remanente y predicar el evangelio, ordenando a otros y actuando de la manera que se nos ha enseñado. Si lo hacemos, el día vendrá cuando el cumplimiento de las promesas y profecías acerca de nuestra obra, en esta parte de la restauración será visto por nuestros propios ojos. 43 No había una “rama organizada regular” de la Iglesia entre las comunidades lésbico-gay del mundo que sostuviera la obra de esos humildes Ancianos que habían sido guiados en su labor. De esta manera, el Señor mandó, POR REVELACIÓN, que una iglesia fuera levantada en la cual, por consenso, actuara ahora como una “rama de ella debidamente organizada” (ver S.U.D. D&C 20: 65). 44 La obra de ordenar, llamar y apartar misioneros puede continuar y ahora se extenderá a TODO PUEBLO, incluyendo a aquellos que han sido rechazados por las otras iglesias del movimiento de la restauración.



45 ¡El Santo Sacerdocio está en medio de nosotros! Es el mismo sacerdocio que fue primeramente poseído por el Padre Adán y la Madre Eva. Es el Santo Sacerdocio según el Orden del Hijo de Dios. 45 A través de los tiempos, la apostasía ha sido usualmente una pérdida de la plenitud del sacerdocio, mientras una porción permaneció para el beneficio del hombre. A través de la apostasía, el género humano perdió su derecho de poseer la plenitud del sacerdocio entre ellos en los días cuando Enoc y su pueblo fueron llevados “hacia el cielo” y Noé y su familia quedaron sobre la Tierra para cumplir la misión de predicar el evangelio entre los que permanecían en el mundo. 47 Este mismo tipo de apostasía se dio en los días de loa Apóstoles originales del Señor, en el meridiano de los tiempos; cuando los Doce Apóstoles murieron no hubo nueva revelación que instruyera a los Ancianos para reorganizar la iglesia, la plenitud del sacerdocio se perdió al tiempo que los miembros del Sacerdocio de Melquisedec fallecieron. 48 Lo que permaneció fue esa porción del sacerdocio que algunos aceptaron como suya. De modo que las iglesias católicas de hoy tienen obispos, presbíteros, maestros y diáconos pero no claman poseer ninguno de los oficios del Sacerdocio de Melquisedec. Al tiempo que han agregado oficios a su sacerdocio, estos no son (ni fueron establecidos para serlo) oficios del Orden de Melquisedec. 49 Es por ello que se necesitaba la restauración POR REVELACIÓN. Mis queridos Santos, la llave es comprender que el Santo Sacerdocio se encuentra repartido en estos órdenes: Melquisedec, Aarónico y Levítico.

50 El Sacerdocio Aarónico es una parte (o un Orden) del de Melquisedec, o el Santo Sacerdocio. Cuando los antiguos habitantes de Israel perdieron el Sacerdocio de Melquisedec porque perdieron a los profetas entre ellos, el Señor les concedió mantener una porción del sacerdocio. 51 Lo que les fue permitido retener es el Sacerdocio Aarónico. Sin embargo, debido a que todavía se hallaban bajo el Antiguo Testamento o Antiguo Convenio, ellos solamente usaron una porción del Sacerdocio Aarónico, que les fue permitido mantener entre ellos. 52 Dicha porción (u Orden) que denominaron Sacerdocio Levítico porque los varones de la Tribu de Leví fueron los escogidos para ser ordenados en él. Fue el Sacerdocio Levítico la poción del Santo Sacerdocio que entonces administraba las ceremonias del Templo en los antiguos templos hebreos, y fue la autoridad dada a los antiguos para ofrecer sacrificios y holocaustos. 53 Dichos sacrificios de sangre tenían por objeto enseñar al pueblo acerca del futuro sacrificio que Jesucristo eventualmente sufriría en el Jardín de Getsemaní y sobre la cruz del Calvario generaciones después. 54 Efectivamente, dicha porción del Santo Sacerdocio que es recibido por ordenación al Sacerdocio Aarónico en la iglesia, es el mismo sacerdocio que gobernó las antiguas ceremonias administradas por los Levitas. Recordad sin embargo, que ellos solamente utilizaban una parte de sus poderes. 55 El Sacerdocio de Aarón que ahora poseemos entre nosotros es mucho mayor que el que ejercían los antiguos sacerdotes Levitas. Hoy, así como en los días del ministerio mortal de Juan el Bautista,



estamos bajo el Nuevo Convenio o Nuevo Testamento. 56 Ciertamente, este sacerdocio, DEBIDO A SUS LLAVES RESTAURADAS, hoy posee las llaves del evangelio preparatorio; posee la autoridad de preparar para el sacerdocio mayor y sus convenios. Para aquellos que lo reciben, será como el curso de escuela que les preparará para mayores y más santas porciones del sacerdocio, si, el Santo Sacerdocio llamado el Sacerdocio de Melquisedec. 57 ¡José Smith fue y es un Profeta del Dios viviente! Lo que él hizo fue correcto y fue para la mejora de la humanidad así como para el progreso personal de cada uno de vosotros. 58 Juan, el que es llamado el Bautista en las escrituras, regresó a la Tierra desde donde Dios le bendijo estar en su estado resucitado, para poder transmitir las llaves (el poder de conferir el sacerdocio) del Sacerdocio Aarónico a José Smith y Oliver Cowdery. Él hizo esto bajo la supervisión de Pedro, Santiago y Juan. 59 Esto sucedió el 15 de mayo de 1829 a orillas del Río Susquehanna, cerca de Harmony, Pennsylvania. ¡Pensad en ello! … El hombre que bautizó a Jesús de Nazareth dos mil años atrás, fue autorizado para resucitar, y enviado por Pedro, Santiago y Juan a este mundo mortal para ordenar a dos personas por medio de la imposición de manos al mismo sacerdocio por el cual él había bautizado al Cristo. 60 De manera similar, Pedro, Santiago y Juan también impusieron sus resucitadas manos sobre las cabezas para que Apóstoles una vez más caminasen sobre la Tierra. Es verdad que las Llaves del Sacerdocio se encuentran de nuevo sobre la Tierra, y es por ello que vosotros podéis

ser ordenados a ese mismo sacerdocio en la actualidad. 61 Para aquellos que están por ser ordenados a alguno de los Oficios del Sacerdocio, o para quien anticipa alguna ordenación cercana… mi consejo para vosotros en este momento de sus vidas es estudiar diligentemente las secciones de Doctrina y Convenios que revela al mundo conceptos acerca del Sacerdocio. Especialmente deberían tratar de saber y entender las tareas de los varios oficios en el Sacerdocio. 62 Dicha información puede ser encontrada en las Secciones 20 y 107. También, deberían familiarizarse con las Secciones 84, 88 y 121, 124 y meditar y ponderar los significados escondidos que pueden ser encontrados en los versículos acerca del Sacerdocio. Dios les bendecirá con entendimiento. 63 También deberían escudriñar revelaciones dadas específicamente a la Iglesia de Jesucristo de Todos los Santos de los Últimos Días y la profundidad de que lo que se ha revelado de modo que os preparéis para que el Espíritu Santo os enseñe personalmente. 64 Como Santos de Dios, cuando reciban aun una pequeña porción del Sacerdocio, estaréis tomando responsabilidades importantes sobre vosotros. Por favor entiendan que esto es solo una empresa sagrada que no debe tomarse a la ligera. 65 Ciertamente esta acción requerirá: 1. un compromiso de servir a los otros; 2. amor incondicional por los otros, un anhelo por la investidura de caridad, el amor puro; y 3. el desarrollo de una íntima y una perdurable relación con el Señor, la fuente de todo el poder del sacerdocio, mundos sin fin.



66 Este último ítem incluye una familiaridad con las escrituras, porque toda escritura puede ser usada como medio de revelación, una suerte de herramienta usada para recibir mensajes de Dios. 67 Mientras trabajéis en estas tres bases, vosotros creceréis en bondad, conocimiento, fe y poder. Sin estos tres factores básicos, podréis ser ordenados a los oficios en el sacerdocio, pero no tendréis poder en el Santo Sacerdocio y vuestras labores sufrirán las consecuencias. 68 Es grandemente significante, mis queridos santos, que todas las ordenanzas del sacerdocio requieren que la persona sea bendecida por otra, y no puede administraste por sí mismo ninguna ordenanza. 69 En el bautismo, uno no puede bautizarse a sí mismo; otro debe efectuar ese servicio por él. En la confirmación, uno no puede autoimponerse las manos sobre la cabeza para recibir el Espíritu Santo; otro debe realizarlo por él y (sólo en este caso) aun mandarle que reciba al Espíritu Santo. Así es con todas las ordenanzas del sacerdocio: no podemos hacerlas para nosotros mismos. Todas requieren del dedicado servicio de uno que posea el Sacerdocio en favor de la persona que recibe la ordenanza. Esto es simbólico de la manera en la que trabaja el sacerdocio.

70 Recordad en todas vuestras obras en el sacerdocio: NADA ES MÁS IMPORTANTE QUE HACER AQUELLO QUE ESTÉIS HACIENDO CON AMOR A UNO MISMO Y HACIA LOS OTROS. Esta es la investidura de caridad que debería ser la deseada meta de todo aquel que posea el Santo Sacerdocio. 71 ¿Por qué? La razón es que no podéis realmente servir a tu prójimo, hombre y mujer, de buena manera sin el don de la caridad. Hasta que no seáis bendecidos con este especial don de amor puro hacia los otros, estaréis intentando servir a otros; cuando el don finalmente sea vuestro, entonces realmente serviréis a otros y (en ese servicio) serviréis a Dios. 72 Ahora entended que el Señor es Jesucristo. Él es mi amigo y Él es vuestro amigo. Si le permitís ser una parte importante de vuestras vidas, Él les guiará al Dios que nos ha creado a todos. El Dios Todopoderoso le ha dado (a Jesucristo) a todos nosotros, por lo cual puede ayudarnos a regresar a Su presencia: esa es la asignación y llamamiento del sacerdocio de Cristo. 73 Sed uno con Él y permitidle hacer aquello para lo cuál ha sido llamado. El Santo Sacerdocio está aquí y os asistirá para hacer vuestra parte. Que Dios les bendiga en esta gran aventura de la perfección.



SECCIÓN 3 (Tomada del Diario Personal, Antonio A. Feliz, diciembre de 1982 a junio de 1983, pp. 96 a 106). “Hoy, 15 de mayo de 1983 en Parkville, Missouri otra manifestación bendijo mi vida mientras escudriñaba Doctrina y Convenios 10: 67-68. Esta experiencia fue la causa de mucha emoción y asombro porque nunca había esperado algo que ésta fuera mi suerte en la vida. En respuesta a la búsqueda de mi alma sobre los antes mencionados versículos, recibí la siguiente revelación.” 1 De cierto, así ha dicho el Señor a mi siervo Antonio. Tu vida hasta aquí ha sido una preparación para la misión que ha sido reservada para ti. El tiempo que reste de tu vida mortal será usado en una obra maravillosa la cual he preparado desde la fundación del mundo. 2 Has vivido gran dolor y tristeza, y mucho sufrimiento te es aun requerido en la obra cotidiana, pero todo ello resultará en que yo, sí Dios, te bendiga a fin de que puedas cumplir la misión de tu preordenación. 3 Por consiguiente: presta especial atención a la Voz de mi Espíritu: El tiempo ha de llegar cuando aquellos Santos, preparados por medio de las obras de mi Espíritu, puedan entender, vendrán a conocer mi Voluntad concerniente a los derechos y poderes de mi Santo Sacerdocio. 4 Mi Espíritu ha testificado a tí acerca de la verdad en días pasados: El Sacerdocio es eterno, porque me pertenece, las iglesias que Yo Dios he determinado sean organizadas para el beneficio de la humanidad viven solo a causa de mi Santo Sacerdocio. Las Iglesias provienen del Sacerdocio; si, Mis iglesias… 5 Has de saber esto, hijo mío: las iglesias, tal como las conoces, cesarán de existir una por una. Pero mi Santo Sacerdocio es sin principio de días ni fin de años. 6 Para estar seguro, el Sacerdocio es conferido por y para algunos a algunos

pocos. Pero solamente Yo, por medio del poder de mi Espíritu, soy el que concede PODER EN EL SACERDOCIO. 7 Hijo mío, cuando has visto a otros sobre los cuales Yo he conferido el sacerdocio, y ellos han tenido poder en su sacerdocio, vos os habéis confundido. Has creído que solamente mis Santos congregados en Salt Lake City podrían recibir tal poder. Entiende que las leyes de los territorios no limitan mi poder. 8 Ciertamente, Hijo Mío, has visto en estos tiempos pasados entre mis Santos a mis Siervos, que se aferran a principios celestiales, pero aun no estabas preparado para entender. 9 Aun así tres veces yo testifiqué a tu espíritu, por el poder de mi Espíritu, que la presidencia de los Santos congregados en el Lugar Central también poseen las llaves de la Presidencia y el Poder de mi Santo Sacerdocio. 10 Sí, se os ha mostrado por mi poder, sí, mi inerrable poder, que este sacerdocio en ellos ha venido por medio de los hijos de mi Siervo, José Smith hijo. Sin embargo aun cuándo he hablado a tu espíritu, por medio del patriarca por el cual tu mente fue abierta, tu has creído que solamente mis siervos de los Doce, congregados en Salt Lake City han sido reconocidos por mí. 11 No por ello cambies, Hijo Mío, el testimonio que de mí vino en tu juventud acerca de mis siervos los profetas



congregados en Salt Lake City. De cierto, ellos me sirven satisfactoriamente y son profetas ante el mundo como pocos de mis siervos lo han sido. 12 Pero he aquí, la visión que te he dado de la maravillosa unidad en todos ellos, sí, aun con otros: porque de cierto Yo Doy Dios, y veo por todos ellos. Mi hijo, sabed que yo estoy complacido con los profetas, sí, aun los de todas mis iglesias. 13 Tú y otros con poca preparación solamente ven una porción; sabed ahora Hijo Mío que yo he hecho que todos ellos sean. Por lo que cada uno de ellos es fiel a la porción de luz que han recibido y merecido. Así será hecho contigo de acuerdo a la misma fidelidad. 14 Enseñarás y confundirás a los sabios por medio de ésta doctrina: El Sacerdocio es mayor que una iglesia, y tus consiervos limitan su poder en el Santo Sacerdocio al grado de crear falsos límites al mismo. 15 Dichos límites al Sacerdocio cercenan la influencia y bendición para mis Santos en sus iglesias. De cierto, esas iglesias existen debido a las varias limitaciones que los hombres han establecido sobre mi Santo Sacerdocio. 16 Ningún poder o autoridad puede ser ejercido o mantenido sino en virtud de mi Santo Sacerdocio. Porque mi Santo Sacerdocio se halla inseparablemente ligado a los derechos y poderes del Cielo. El Poder del Sacerdocio es conferido desde lo alto, las iglesias meramente lo usufructúan. Ellas no controlan mi Santo Poder. 17 Sabed esto: es mejor haber establecido esas iglesias que permitir que mi Santo Sacerdocio fuera tomado nuevamente de la Tierra y perdiera su plenitud.

18 Mi Santo Sacerdocio es uno y no se halla divido o limitado a una iglesia o grupo de iglesias. No obstante, mis Santos son miembros de alguna de ellas y necesitan la ministración de mi Santo Sacerdocio. 19 De cierto, nuevamente digo: Mi Espíritu ha hablado a todos aquellos que desean escuchar mi voz. No importa de que Iglesia provengan. Porque todos son mis hijos y yo soy su Padre y Dios, y todas las iglesias han recibido de mi Santo Sacerdocio. Si, aquellos que conocen mi poder son uno. 20 Y nuevamente, tal como has inquirido, te doy el conocimiento de que no hay confusión en este asunto tal como te lo he mostrado. Porque Yo Dios, revelo mis palabras a mis siervos, mis Santos Profetas. No seáis confundidos en estos, mis dichos, porque puedan parecer diferente doctrina de acuerdo a mis varios Santos. 21 Aquí te es revelado un misterio: Mi palabra es dada por medio de vasos que Yo he preparado. Y, tal como todos los vasos son diferentes, uno de otro, la sazón de sus expresiones difiere entre uno y otro, a pesar de su fuente común. 22 Así, la sazón de mi Santa Mente y Voluntad es revelada por y mediante el estilo de hablar de mi vaso a quien he escogido para recibir revelaciones de mi palabra y para mis Santos. Hijo Mío, Yo escojo a quien quiero para este propósito; para mis Santos congregados en Salt Lake City, Yo hablo por medio de su presidente, y para mis Santos congregados en el Lugar Central, Yo hablo por medio de su presidente. 23 De cierto, aun en los días de mi siervo Ghandi, Yo escogí revelarme por su intermedio a mis hijos de las naciones de India mejor que por alguien a quienes ellos no pudieran entender.



24 Sí, aun Yo te hablo, y tú escribes de acuerdo a tu lenguaje, entendimiento y circunstancias de tu propia existencia, porque eres escogido para ser mi Vaso; sí, mi Vaso para aquellos de mis Santos que son como tú. Hijo Mío, esto es por el orden, en consecuencia de que todos puedan oír mi voz en su propia lengua, de acuerdo a sus vidas y circunstancias particulares. 25 He aquí yo no soy un Dios de confusión; si no fuera así, no pondría de manifiesto mi palabra de acuerdo a su entendimiento. Pero, de cierto, Yo Soy Dios, y es menester necesario hablar a todos en lengua y entendimiento de cada uno. 26 Y ahora, en la medida en que habéis inquirido de mi el saber concerniente a vuestro estado frente a mis santos ojos: He aquí, os muestro la insensatez de vuestros pensamientos. Mi hijo Antonio, eres un vaso en mi Santa Mano; Yo Soy Dios; mis vasos necesitan ser puros; de cierto te digo que me has complacido en tu purificación, de no ser así no podrías hacer de ninguna manera lo que haces, sí, incluso en este momento. Es por esta razón que te ha sido requerido ofrecer sacrificios por medio del dolor y mucha aflicción. De cierto, mi hijo, Yo Soy tu Padre y tu Dios y conozco tu mente y corazón. 27 La Paz sea a tu alma, has sido fiel en los principios que os llevan a la eternidad. Sabed hijo mío que todos los poderes,

sacerdocios y llaves conferidas anteriormente sobre tu cabeza, continúan en tí. No os consternéis con la condenación que otros hayan puesto sobre ti. ¿A quién has de obedecer? ¿No soy yo tu único Dios? Tu Dios no te condena. 28 Ahora ve y enseña estas cosas tal como mi Santo Espíritu te dirija; porque algunos no recibirán de ti, y sufrirán aun tanto como tu, hasta que lleguen al conocimiento por sí mismos. Yo estaré contigo e iluminaré tus palabras de acuerdo a la fe de los otros. 29 Evitad toda contención. De ella emana la impureza. No contendáis por la doctrina. Enseñad antes que toda doctrina que eleva y guía al cumplimiento de los principios que llevan a la eternidad es mía. Todo lo que hagáis que sea en amor y así retendréis el Espíritu en esta obra. 30 Tu ministerio será bendecir a aquellos que son como tú, porque ellos son como mi Amado, el que es llamado Juan. 31 Nuevamente mi hijo, las bendiciones que se te han prometido mediante mi Santo Sacerdocio vendrán y fructificarán en tu ministerio. Yo Dios haré que esto sea de mucho bien para el beneficio de mis Santos que son como tú. Es por eso mismo que te fueron conferidos los poderes selladores y el sumo sacerdocio. Has sido empoderado, confiado e iluminado. Ve y haz tú lo mismo entre los que son como tú eres. Amén.



SECCIÓN 4 En Lake Elsinore, California, el 9 de marzo de 1985, habiendo terminado el bosquejo inicial de un libro del cual sintió la inspiración del Señor de ser escrito, el Anciano Antonio A. Feliz registró en su Diario: “Mientras estudiaba detenidamente el manuscrito del libro, el cual me sentí inspirado y guiado por el Señor para escribir, fui bendecido una vez más por el Altísimo y recibí la siguiente…” revelación. 1 Así dice el Señor a ti, mi siervo Antonio: estoy bien complacido con la obra que haz realizado en cuanto a los escritos sobre los cuales has estado trabajando. No te desanimes, sino conténtate. Porque de estos pequeños comienzos surgirá una obra maravillosa que he preparado desde antes de la fundación del mundo, para que tu la hagas. 2 En lo que concierne a ti mismo con aquellas cosas que he causado para llenarte de pensamientos y acciones que realizas, aun en este momento, actúa sobre dichos pensamientos a fin de que se hinche tu corazón. 3 Se gozoso de que el sufrimiento es aun tu compañero; porque no te hallas suficientemente preparado para el cumplimiento de tu misión. Continúa ponderando estas cosas en medio de tu aflicción y serás bendecido. 4 Y ahora, he aquí, así como habéis, aun ahora, inquirido acerca de mi ley, llamada la Ley de Adopción, te revelo la forma en la cual esta ley será reactivada para la bendición de los justos que se hallan junto a ti; si, aquellos que son como mi Amado Juan. 5 Ahora Hijo Mío, lo que aquí es revelado a ti es más sagrado y no debe ser visto por ningún ojo, mas a ti te lo mostraré. Aun así, harás según yo te ordene. Porque todavía hay mucho para ser hecho en preparación

para el día en el que esta Santa Ley puede bendecir nuevamente a mis santos. Se fuerte; se fiel y no confíes en el brazo de la carne. Recuerda que Yo Soy Dios y tú no fallarás en esta obra. 6 Hijo Mío, tú eres llamado para responder las preguntas de aquellos que buscan la luz y el conocimiento, sabed que algunos serán solamente curiosos, y mi Espíritu no estará con ellos; sí, aun algunos de ellos serán enviados para destruir tu obra. Apóyate en mi Santo Espíritu y serás bendecido para discernir los espíritus de los hombres y mujeres que te busquen por tus enseñanzas. 7 Se humilde y los deseos de tu corazón se cumplirán. Porque te será revelado uno que será como tú, quien testificará también de esta obra. 8 Ahora id, confiad en mi voz, si mi Santa Voz que te habla en medio de tu sufrimiento. La Paz sea contigo, porque se te han confiado las semillas de esta obra. Sabed hijo mío que mi amor por ti no ha cambiado. ¿No soy acaso tu Dios? ¿No soy acaso tu verdadero Dios? Se verídico y fidedigno y serás llamado guardián de muchos. 9 Satán verdaderamente no tendrá poder sobre ti, tal como te fuera prometido en ocasiones anteriores. No temáis, Orad al Padre en mi nombre y serás hecho fuerte, tan fuerte como aun no lo sabes. Amén.



SECCIÓN 5

El día 5 de julio, el Anciano Antonio A. Feliz, determinado a aproximarse al Anciano A. LaMar Hamilton, en ese entonces líder de Afirmación (Gays y Lesbianas mormones), con el objetivo de unirse a otros poseedores del sacerdocio excomulgados de la I.J.S.U.D. con el propósito de reactivarse en sus oficios, ya que aun continuaba siendo su llamamiento y obligación. Cuando se reunieron, la semana siguiente, la idea de establecer una restauración de la iglesia fue discutida y descartada por el Anciano A. Feliz por considerarla inapropiada. Sin embargo, el Anciano Hamilton estuvo de acuerdo en presentar el concepto de administrar la ordenanza del Sacramento en el hogar de algún otro poseedor del sacerdocio excomulgado, a fin de determinar sus puntos de vista. En busca de la mente y voluntad del Señor por sí mismo, el Anciano A. Feliz hizo la proposición de administrar el Sacramento para sí mismo y otros sin la necesidad de organizar una iglesia, luego de orar y ayunar recibió la siguiente revelación. 1 Venid y escuchad la voz de aquel que os ama; si, vuestro Señor y Dios: es conveniente para vosotros observar todo convenio que hayáis hecho. 2 Por tanto, mi hijo, te purificarás por medio de la oración y la renovación de las ordenanzas de mi Santa Casa tal como las he revelado a vosotros. Haced esto en privado y en total sobriedad ante mí. 3 Luego de que hayáis renovado los Convenios del Templo y los otros

convenios que he hecho tomar sobre tí, continuaréis escribiendo en el Espíritu y serás bendecido. 4 Ve ahora, haz lo que se te ha mandado y sabed que yo soy vuestro Dios; el Dios que te recuerda, y que hará que obres un prodigio maravilloso, si, una obra maravillosa y un prodigio entre los tuyos. Amén.



SECCIÓN 6

El 13 de agosto de 1985 en Los Ángeles, California, habiendo ya determinado participar en la organización de una iglesia y mientras se llevaban a cabo los preparativos para un encuentro organizativo que había sido agendado para el 14 de agosto de 1985, el Anciano Antonia A. Feliz se hallaba meditando sobre los llamamientos de Sumo Sacerdote, Obispo, Anciano y Patriarca, tal como se mencionan en Doctrina y Convenios, y recibió la siguiente revelación. 1 Mi voz para todos, si, todos aquellos que escucharán a mis siervos, los cuales sois vosotros. De cierto os digo, mis amigos; porque me deleito en llamar a los que llevan el peso de la restauración como Mis Amigos, en la medida en que permanezcan verídicos a sus convenios; por tanto si permanecéis unidos en amor, vosotros sois mis amigos, si, mis discípulos. 2 Escuchad vosotros que habéis sentido el impulso de mi Espíritu en cuanto al cumplimiento de tomar esta obra para todos los pueblos, si, todos: 3 Es agradable que vosotros escojáis escuchar mi voz en el nombre de esta iglesia, si, la IGLESIA DE JESUCRISTO DE

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DÍAS, porque vuestra misión está bajo este nombre. 4 No obstante, es conveniente que continuéis buscando mi voluntad en la organización y establecimiento de esta porción de la Restauración en la plenitud de mi evangelio en el mundo. ¡Oh! Pequeño Rebaño, no corráis más rápido de lo que vuestras fuerzas os lo permitan. 5 No depositéis vuestra confianza en el brazo de la carne en cuanto a esto. No es aun el momento de reunirse en quórumes del Santo Sacerdocio u otros cuerpos presidentes que serán establecidos a su debido tiempo. Esperad el momento, porque en ello hay sabiduría: tengo otros de mi Iglesia cuyos nombres vosotros aun no conocéis, pero os será revelado a vosotros en el tiempo apropiado, si ellos

permanecen fieles a mi, junto a vosotros trabajarán guiando la obra de mi ministerio donde otros han de ser escogidos. 6 Por ahora, es satisfactorio que apartéis por un tiempo a mi siervo Antonio como vuestro Sumo Sacerdote Presidente, porque en él se encuentran todos los dones y llaves de este oficio; también apartad para mí a mi siervo LaMar para ser el Obispo Presidente porque, en efecto yo le he bendecido con los dones y derechos de la presidencia de la obra temporal del sacerdocio; apartad para mi a mi siervo John para ser el Patriarca Presidente, si a fin de que sea un segundo testigo junto con el Sumo Sacerdote Presidente sobre las bendiciones espirituales del sacerdocio como un Evangelista para mis Santos. 7 Ellos han de ser las tres autoridades presidentes para servir por un tiempo como la Presidencia, hasta el tiempo en que esta obra requiera una más completa organización, porque he aquí, el día vendrá cuando esta obra requerirá la plenitud de la organización de mi sacerdocio, si, aun un Quórum de los Doce para ser testigos especiales de mi nombre por entre toda la Tierra. 8 Sed pacientes y humildes; porque todo en vuestra organización que sea más o menos que esto, viene del adversario y no proviene de mí. A pesar de todo, vuestras obras en cuanto a la ley de la tierra se hallan de acuerdo a mí, de modo que dirigiré a esta Presidencia temporaria.



9 De cierto os digo: Sed uno. Porque si nos sois uno, no sois míos. No confiéis en los hombres sino en Dios y en mí, Jesucristo, cuya iglesia sois vosotros, y seré vuestro guía y Dios. 10 Ved que todas las decisiones que sean de carácter permanente para la Iglesia, sean selladas por medio de la Ley del Consentimiento Común. Sí, enseñad esta Ley a los Santos para que puedan ser tanto administradores como miembros de esta iglesia, la IGLESIA DE JESUCRISTO DE

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DÍAS. Mis amigos, enseñad que es por ellos que he establecido esta iglesia, para que sean mis mayordomos por medio de la Ley del Consentimiento Común. 11 Haced todo en sabiduría, unidad y amor. Si esto es así, la obra será bendecida ante vuestros ojos, aun ante aquellos que han trabajado antes de vosotros, de lo contrario, seréis condenados en vuestros esfuerzos tal como con otros ha sucedido. 12 De cierto, hay mucho para ser realizado en preparación del establecimiento de la plenitud de mi evangelio entre todos los pueblos de la tierra y para el establecimiento de Sión. 13 En verdad, como he indicado hasta ahora: Sión no está ni más lejos ni mas cerca que la condición espiritual en que se hallan mis Santos. 14 Buscad las revelaciones con respecto al funcionamiento de mi Santo Sacerdocio y su ministerio. Porque de cierto he ordenando en días pasados acerca la forma en que vuestros concilios y quórumes deben funcionar. Mi Santo Sacerdocio es el mismo y mis mandamientos para su funcionamiento y ministerio se hallan sobre vosotros en esta nueva obra también.

15 Recuerda mi pequeño rebaño, vosotros sois mayordomos de una obra que es mucho más grande que cualquiera de vosotros o de todos vosotros juntos, y es necesario que sea realizada a mi propia manera. 16 No seáis apresurados en desarraigar miembros de esta iglesia. Porque aun eso, debe ser realizado en amor y unidad ante mi. Recordad: con el juicio con el que juzguéis seréis juzgados en el postrer día. 17 Porque la obra de la Restauración puede ser apresurada en su debido tiempo, las autoridades presidentes deben tener gran cuidado en no volverse demasiado cuidadosos concerniente a la membresía de aquellos que una vez os acompañaron con la misma fidelidad. No penséis que ellos se encuentran en herejías que frustren esta obra; porque Yo Soy Dios y os revelaré en mi propio tiempo lo que debáis saber acerca de mi voluntad sobre este quórum presidente unido. 18 Por consiguiente, no temáis acerca de esas posibilidades, porque de cierto, hay algunos que son vasos escogidos para obrar el bien, y serán alejados de las trampas que son obstáculos en el mundo, ellos retornarán a su debido tiempo a mí, solamente si no son rechazados por el liderazgo de la Iglesia. 19 ¡Ay de aquel que impida a uno de estos, mis pequeños, regresar en comunión plena con mis Santos! De tal está escrito: Será mejor que ate una piedra de molino a su cuello y se arroje en el mar antes que enfrentarse a mí en el último día. 20 Mi Pequeño Rebaño, sed de buen ánimo, porque Yo estoy con vosotros. Vosotros sois mis ovejas y yo vuestro Pastor, y mis ovejas me conocen. Vosotros sois de quienes dije: Otras ovejas tengo que no son de este redil, a



ellos también me brindaré y habrá un rebaño y un pastor. 21 ¡Oh! Vosotros Ancianos de Israel. Buscad traer a la luz y establecer la causa de Sión, porque es Sión lo que buscáis, y es solamente Sión la que traerá el amor y la unidad que vuestras almas solicitan en este tiempo. Sois mayordomos de las semillas de esta obra; trabajad diligentemente y vuestros frutos alimentarán a todos mis Santos, si, a todos alrededor del mundo. Amén.



SECCIÓN 7 Mientras se hallaba en sus labores normales y cotidianas, el 13 de agosto de 1985, el Anciano John R. Crane se sintió imbuido del dulce Espíritu y entendió que algo maravilloso estaba sucediendo pero no lograba darse cuenta de qué era. En el lapso de pocos minutos, el Anciano Antonio A. Feliz le llamó telefónicamente y le dijo que había recibido una revelación concerniente a la organización de una Iglesia que formaría parte de la Restauración. Entonces, en confirmación de la revelación recibida por el Anciano Antonio Feliz, el Anciano Crane recibió la siguiente revelación. Ésta fue presentada a la IGLESIA DE JESUCRISTO DE

TODOS LOS SANTOS DE LOS ÚLTIMOS DÍAS el 14 de agosto de 1985, y fue subsecuentemente aprobada el 28 de agosto por el voto unánime de la Iglesia. 1 Es agradable y necesario que vosotros [significando el grupo ahora constituido] establezcáis una Iglesia en mi Nombre para que todas las bendiciones puedan derivarse a todos mis hijos, especialmente aquellos que son ignorados o rechazados por la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, que también es mi Iglesia. 2 Mi Espíritu puede verterse sobre toda carne y si sois receptivos a él y deseosos de aprender y hacer mi voluntad, y si estáis de acuerdo en esta sola cosa, así será hecho. 3 En orden de obtener todas mis bendiciones para la Iglesia, es necesario poseer y completar la organización. A mi tiempo, llamaré y apartaré Apóstoles, Profetas, Maestros, Pastores, Evangelistas, y otros mayordomos para mi pueblo. Pero esto debe ser efectuado de acuerdo a Mis Mandamientos, de otra manera no seréis mi Iglesia. 4 Estoy preparando hermanos y hermanas para estos llamamientos. Debéis buscarles sinceramente, y cuando les halléis, vosotros veréis mi unción sobre ellos. Dicha unción confirmaréis con las ordenanzas exteriores de las ordenaciones y ratificaréis por medio del sostenimiento y la voz del cuerpo de la Iglesia. Entonces testificaré con la poderosa voz de mi Espíritu dándola libremente al cuerpo de la Iglesia y me deleitaré en otorgar en cada alma humilde y contrita que me busque en sinceridad y mansedumbre.

5 John, no supongas que porque hablo a uno no puedo hablar a todos los que me invocan con fe. La razón por la cual estás recibiendo esto en este momento es porque eres un diligente buscador de la verdad y estas dispuesto a actuar en la luz y el conocimiento que recibes. También, porque estás escribiendo y deseas compartir estas palabras con aquellos que las recibirán. Prepárate para recibirlas entonces. 6 Confortaos uno al otro. Exhortaos uno a otro a fin de que seáis de buen animo diciendo: Coraje hermano (o hermana), porque la batalla es del Señor. Nos hemos entregado a Sus manos y Él se encuentra entre nosotros. 7 Yo les mando que escudriñéis las Escrituras, porque he hablado una y otra vez y aun hablaré nuevamente a mis vasos escogidos aquí en esta tierra, aun vasos que vosotros todavía no conocéis. Sí, buscad en las palabras de los Profetas de Israel y en las dadas a los profetas modernos, sí, a mi siervo José Smith hijo, y a todos los profetas Santos de los Últimos Días, a mi siervo Antonio y a todos los buenos hombres y mujeres que buscan mi faz y ponderan mi voluntad. 8 Nuevamente os digo, escudriñad y atesorad estas palabras de Vida Eterna porque en ellas hay promesas y esperanzas



que os pertenecen a vosotros y los demás de vuestro pueblo. Diréis a los vuestros: 9 ¡Oh! Mi Pueblo cuántas veces os he congregado como la gallina junta a sus polluelos pero vosotros no. Ignoráis vuestros especiales dones y llamamientos para ministrar entre los hijos de los hombres, porque habéis sido cegados por Satán y las tradiciones y astucia de los hombres. Pero he aquí, Yo os digo que sois MI PUEBLO, de cierto, la sal de la Tierra. Vosotros sois la levadura que leuda el pan. 10 Así dice el Señor que llama a todos en todos los lugares en todos los tiempos, y os llama a vosotros ahora. He aquí, sí, en mi debido tiempo a mi amado discípulo John, Yo el Señor me encuentro a las puertas y llamo. Aquel que abriere la puerta me recibirá y yo haré morada con él y él conmigo. Sí, y esta promesa no es solamente para los hombres sino también para las mujeres. Porque tengo un propósito especial para vuestras hermanas en estos últimos días. 11 Nuevamente, mis palabras no han finalizado, porque mi voz alzaré ante todo aquel que desee recibirla. Porque, en efecto, derramaré mi Espíritu sobre toda carne y vuestros varones jóvenes soñarán sueños y vuestras mujeres jóvenes testificarán por el Espíritu que ellas me han visto y me conocen. 12 Nuevamente, como he dicho en el prefacio de mi “Libro de los Mandamientos” 2 a mi siervo José Smith hijo, No hay ojo que no verá; no hay oído que no oirá; ni corazón que no será traspasado. 13 Declararéis estas cosas a esta generación hasta mi venida. Lo que digo a uno, lo digo a todos. Amén.

2 N. del T. Nombre original de Doctrina y Convenios.



SECCIÓN 8

El 15 de agosto de 1985 en Los Ángeles, California, el Anciano John R. Crane fue movido por el Espíritu y recibió un segundo testimonio de la veracidad de esta obra, que es (junto a la obra de otras iglesias el movimiento de la Restauración) una porción de la restauración de todas las cosas en preparación de los pueblos de la Tierra para la Segunda Venida del Señor. La Parábola del Viñedo es dada a la Iglesia. 1 La palabra del Señor a mi siervo John. Has hecho bien tu obra. Continúa en la forma en que has comenzado, y serás el medio para traer Salvación y Vida Eterna a muchos de mis Hijos. 2 He aquí, cierto hombre era el amo de un viñedo que él había plantado. Durante toda la estación del crecimiento, el amo envió a sus siervos para cuidar la viña y nutrir las plantas. Cuando vino el tiempo de la cosecha, el amo observó que su viñedo había producido mucho fruto, por lo que mandó a sus siervos a recoger el fruto restante. 3 Después de mucha labor, los siervos regresaron cargando sobre ellos abundante fruto. El amo, sin embargo no se hallaba complacido, y les dijo: “Os envié siervos míos, a cosechar todo el fruto y vosotros me habéis traído solamente una parte de la cosecha. ¿Dónde se halla pues el resto de mis frutos que he plantado?” Entonces los siervos replicaron: “Amo de la Viña, aun resta cierto tipo de fruto en vuestro viñedo, pero no es buen fruto.” 4 Entonces, el amo llamó a otros siervos a cosechar el resto del fruto de su viñedo. Nuevamente, luego de mucha labor, estos otros siervos retornaron al amo cargando aun más frutos. Cuando el amo probó estos frutos, dijo a sus primeros siervos: “¿Qué queríais decirme cuando dijisteis, este no es buen fruto? Yo se lo que he plantado. Un buen vino no se hace con mala uva. Estos últimos son de los mejores frutos de toda mi Viña.” 5 Proclamad mi palabra con osadía. Yo he preparado el terreno. Vosotros debéis

plantar las semillas y mi Espíritu, y fructificarán en una plena cosecha, porque de seguro esta es una generación escogida para mí, y vendrán a mí y no se perderán. 6 Enseñadles el Evangelio de Jesucristo, a saber: Fe en Mi Nombre, arrepentimiento, y bautismo por inmersión, y el bautismo de fuego por el Espíritu Santo. Tú habéis dicho bien: no podéis enseñar a los hijos de los hombres. Solamente podéis guiarlos a Mí y a mi Espíritu, el que les guiará de allí en más. El mundo ha errado tocante a este punto, donde los hombres han supuesto que pueden llevar a cabo esta obra por sí mismos. De esa forma niegan mi poder y enseñanzas, tomando por mandamientos las doctrinas de los hombres. 7 Pero yo les mando que enseñen mi doctrina y mis mandamientos: aquellos que he hecho registrar en las Escrituras, aquellos que he hecho pronunciar por la boca de los profetas vivientes, y especialmente aquellos que he grabado a fuego en los corazones de los hombres y las mujeres que me buscan en mansedumbre. 8 Preparaos para ser consuelo y guía a mi siervo Antonio. Él necesita de vosotros más de lo que sabéis. Sed sabios y sabed tomar vuestro lugar ante él y ante mí, y cumplid vuestra tarea en toda diligencia y seréis como mis siervos de la antigüedad ya que es el deseo de vuestros corazones. Si, buscad magnificar vuestro llamamiento en toda humildad ante mí y yo os magnificaré con cosas que vosotros ni siquiera conocéis. Amén.



SECCIÓN 9 Durante los días en que se estaba conformando la Iglesia, surgió la pregunta concerniente a su posición en relación a la castidad y la moralidad sexual, lo cual preocupaba ampliamente a los líderes. La siguiente revelación fue dada al Anciano Antonio Feliz y al Anciano John Crane de forma simultánea mientras ambos se encontraban en el Espíritu tarde en la noche entre el 5 y 6 de setiembre de 1985 en Los Ángeles, California. Mientras el Anciano Crane estaba leyendo y escudriñando lo que le había sido dado, el Anciano Antonio Feliz estaba escribiendo la porción dada a él, y luego se dio el mismo proceso a la inversa, y así sucesivamente hasta completar la revelación entera. Los hermanos se maravillaron de cómo el Señor les había revelado de manera simultánea su voluntad. Luego que la revelación entera fue dada, mientras aun se hallaban en el Espíritu, ambos fueron ricamente investidos con el don de profecía concerniente al futuro impacto y entendimiento de esta comunicación de Dios acerca de tan importante tópico. El indescriptible amor del Salvador se puso de manifiesto a ellos en la comunicación de este muy especial mensaje a la Iglesia, la cual luego sería llamada por el Señor LA LEY DEL EVANGELIO. 1 LA PALABRA Y VOLUNTAD DEL SEÑOR a todos aquellos que buscan el don, de la caridad, si, el amor puro de Cristo; aquel que tiene oídos para oír, dejadle escuchar; aquella que se encuentre preparada para recibir, dejadla creer… 2 Mis pequeñitos, si, mis amigos; porque Vosotros sois mis amigos si me buscáis y realmente hacéis la voluntad de mi Padre, si, mi voluntad concerniente a las leyes y principios que os llevarán a la Eternidad. 3 Ahora, por tanto, sabed que cuando antes hablé acerca de la necesidad de mis Santos de guardar mis mandamientos, me esforcé en hablar a aquellos que han estado antes que vosotros acerca de los dos grandes mandamientos de los cuales dependen toda la ley y los profetas. 4 Pero, mi Iglesia (hablando colectiva y no individualmente) no entendió, porque supusieron que hablé a ellos de los mandamientos menores. Oíd ahora mis hijos: Mis mandamientos no son sino dos. Ama al Señor tu Dios con toda tu alma, mente y fuerza, y ama a tu prójimo como a ti mismo.

5 Todo lo que sea más o menos que esto, proviene de la interpretación de un maestro de la ley, y ellos no son capaces de apreciar la riqueza y la plenitud de mi palabra. 6 Si, ya he establecido el ejemplo para que todos lo sigáis. Escudriñad las Escrituras y sabed que Yo soy el camino, la verdad y la luz; si, aquel que me siga será bendecido por mi Padre y yo le conoceré y me verá y sabrá que Yo Soy. 7 No obstante nadie puede cumplir totalmente esos dos grandes mandamientos excepto que seáis bendecidos con una investidura para llevarlos a cabo; porque en ellos se hallan los principios que alcanzan la eternidad, He aquí, Yo os digo colectivamente que debéis buscar de manera individual dicha investidura; si, debéis buscar individualmente para que el cuerpo pueda ser investido colectivamente con la investidura de la caridad. Porque aun mi siervo Enoc así enseñó a su pueblo estas mismas cosas con diligencia.



8 Caridad es el amor puro de Cristo (significando que la caridad es típica de Cristo, sí, un atributo de mí). No obstante este amor puro de Cristo es un don otorgado por el Padre. 9 Este Don es derramado sobre todos aquellos que son justos y verídicos. Y, ¿cómo es que son ‘justos y verídicos’? Es por su diligente búsqueda de este Don; tal como mi siervo Santiago ha escrito, la religión pura es la aplicación del amor puro, llamado caridad; y, como antes he establecido: Los puros de corazón verán a Dios; si, ellos son los que vencen porque han practicado religión pura y son recompensados de acuerdo a ello; si, son investidos con este Don, el amor puro de Cristo. 10 Por consiguiente, sabed mi Pequeño Rebaño que estos principios que alcanzan la eternidad, si mis dos grandes mandamientos, son aquellos que empoderan con pureza de corazón y guían a la santificación. Santificación que justifica la redención en el Reino Celestial de Dios. 11 Si, mis pequeñitos, en el último día aquellos que hayan sido investidos con este amor puro se hallarán a mi diestra, como escribió mi siervo Mateo, porque ellos han sido investidos por mi Padre con este santo don de la caridad, y heredarán todo lo que mi Padre tiene. 12 Ahora, tened cuidado de aquellos que se encuentran el lado opuesto de la caridad (porque siempre hay una oposición en todas las cosas), que ellos cosechen destrucción así como lo hizo Sodoma. Porque mi siervo Mateo escribió que su naturaleza es típica de aquellos a quienes pondré a mi siniestra. 13 De cierto os digo que si la Ciudad de Enoc es mi ejemplo para los hijos de los hombres sobre los que me acompañarán a mi diestra, así la Ciudad de Sodoma es

ejemplo para los hijos de los hombres de aquellos que se hallarán a mi siniestra, porque de cierto os digo: ella no me dio de comer, no me dio de tomar, no me visitó, sino que deseó utilizarme tal como los animales para satisfacer su lujuria; sí, en aquel entonces siguió al padre de las mentiras. 14 Hijos Míos, los que así hacen, desechan la santidad y la pureza; sí, buscan constantemente hacer la voluntad de su dios mentiroso, si, Lucifer, el maestro de toda mentira y el hacedor de toda mentira. 15 Aquí os es revelado un misterio: en todas las épocas, Babilonia se ha disfrazado de Sión, si, esto es el caso de Sodoma. Porque prefieren seguir al malvado por su hipocresía y su total rechazo a los principios que llevan a la Eternidad. 16 Si, aquí tenéis una gran llave: aquel que rechaza estos principios que llevan a la eternidad, sufrirá como Sodoma. Porque, mis hijos e hijas, sabed que debe haber una oposición en todas las cosas; en esto se halla la mente de Dios revelada a vosotros. 17 ¡Oh! Mis hijos, esta es la llave. De ello depende todo lo que os ha sido antes revelado. Sin este entendimiento, vosotros seríais llevados hacia un lado y otro por todo viento de doctrina. Si, mi Casa es una Casa de orden, y así he de revelar mi voluntad concerniente a las leyes sobre las relaciones sexuales entre mis Santos, así os digo ahora: Haced todo cuanto hiciereis en amor y seréis bendecidos, sí, tan bendecidos como no podéis imaginaros; no podéis comprender en este momento cuan grandemente bendecidos seréis vosotros de forma individual y colectiva. 18 Ahora prestad especial atención a mis palabras, si, preparad el alma para la dulzura y pureza de la eternidad; porque



es de amor de lo que hablo a vosotros. De cierto, mis Santos deben ser uno conmigo, así como Yo soy uno con el Padre por medio del Espíritu Santo, y esto os es dicho a fin de que entendáis qué sucede cuando un hombre o mujer que se une a otro en la manera de la carne, esto será imagen de grandes cosas que vendrán en el Espíritu. 19 ¡Oh! Vosotros generación de víboras e hipócritas que buscan contaminar aquello que es sagrado y viene desde lo alto. Vosotros mentirosos que llamáis bueno a lo malo, y malo a lo bueno. Abominables son los mandamientos y tradiciones de los hombres que toman el amor y paz de Dios y lo convierten en mentira. ¡Ay de ellos! Porque de cierto Yo soy Dios, el mayor de todos, y no seré burlado. 20 A mi, el Señor Dios, me complace que mis hijos se unan mutuamente en la carne y en espíritu, a modo de anticipo y reflejo de cosas que vendrán, y que es bueno para todos el hacerlo. 21 Sin embargo os es requerido que sea hecho en amor y en perfecta hermandad, y en santidad ante mi. Si así lo hacéis, ambas personas serán bendecidas; de lo contrario se hallarán en condenación y los fuegos del infierno les esperan. 22 ¿Con qué podré compararlo? Es como una oración a Dios. Sí, una oración de fe complace a Dios, y es contestada con una bendición, pero una oración sin fe de nada sirve, y es una burla y abominación ante mi vista. 23 De la misma manera debería ser vuestra comunicación los unos con los otros, y así deberíais uniros uno al otro. Recordad que Dios ha creado todas las cosas para el gozo y la edificación de sus hijos, y en nada ofende el hombre a Dios excepto cuando éste no reconoce Su mano en todas las cosas. Cuando hagáis todas estas cosas, sí,

hacedlas para Dios: sí aun el poder de Dios que reposa sobre cada uno de vosotros, mis hijos, si, cada uno. 24 Yo os advierto que no sigáis las concupiscencias de la carne, ni la belleza de la carne, sino buscad los tesoros escondidos del Espíritu, si, los de mi propio Espíritu que moran en el corazón de cada hombre y mujer. 25 Porque en esto hay sabiduría: Yo me digno en revelaros a vosotros y a mis Santos la ley perfecta, pero como no todos pueden respetarla, enseñaos los unos a los otros en paciencia y humildad, sabiendo que todos los hombres son deudores ante Dios y que toda la rectitud de hombres y mujeres son harapos andrajosos ante mí. 26 Por tanto, que todo hombre y toda mujer examine su propio corazón bajo el influjo del Espíritu y entonces haga lo que le parezca sabio, recordando siempre orar por el influjo del Espíritu Santo. 27 Sí, algunos de vosotros podréis escoger vivir solteros por un tiempo, mientras que otros buscaréis un alma o almas en orden de formar vínculos bendecidos por Mí y por mi Espíritu. Si, tal como en el principio, no es bueno que el hombre esté solo. 28 Por tanto, buscad de entre todos mis hijos a aquellos en quienes mi Espíritu abunde y uníos a ellos en regocijo y oración, recordando que todas las buenas cosas provienen de Dios. 29 Vosotros sois todos hijos aun. Tenéis mucho que aprender. Que nadie condene o envidie a su prójimo. Que ninguno diga a su prójimo: ‘¡Mira lo que has hecho!’ Sino que todo hombre y toda mujer estime a su prójimo como a sí mismo y diga: ‘Lo que has hecho, es entre tú y el Señor’.



30 Que ningún hombre codicie lo que pertenece a su prójimo. Sí, lo que he dado a uno, no lo codicie su vecino, porque Yo el Señor soy el que da y el que quita, soy el que vuelve a dar, y soy el que da a todos abundantemente, sí a todos los que buscan mi nombre. Pero aquellos que busquen tomar lo que es de su prójimo, o que codicie el hombre o la mujer de su prójimo, Yo les digo que ese amor se enfriará y no habrá lugar para ellos en mi Reino en el último día, porque de cierto se hallarán a mi siniestra. 31 Recordad, hijos, todo lo que hagáis que sea hecho en el nombre del Señor confiando que Él proveerá y Él responderá a los rectos de acuerdo a los deseos de su corazón. 32 A vosotros, mi Iglesia, os digo que Yo les amo y que deseo revelarme a cada uno de vosotros. Sed pacientes y diligentes y buscadme aun mientras estéis en el mundo. Porque, he aquí, Yo vengo, no para juzgar al mundo, porque ese día de cierto vendrá también, sino que vengo para morar en cada corazón que me busque, y os daré ese dulce e inefable testimonio que siempre he prometido a mis Santos. 33 Ahora, Pequeño Rebaño: hay entre vosotros quienes aun no pueden ser alimentados con carne, nos os avergoncéis, porque mi amor por vosotros es tan vasto como la eternidad. Confiad vosotros en los consejos de aquellos que he puesto delante para que podáis crecer línea por línea, precepto por precepto; si, aun hasta el cumplimiento de esos principios que guían a la eternidad. 34 Aquellos, sin embargo, que busquen ser uno y se hayan comprometido a buscar mi Faz y a vivir mis Mandamientos, los cuales ya conocéis, y esperen el día en que serán bendecidos con el testimonio de mi aceptación bajo la Ley de Adopción. En efecto, cuando tengan al Espíritu Santo

por guía, y diligentemente demostrado su deseo de buscar pureza de corazón por medio de la religión pura y sean sin mancha ante mi, ellos serán suficientemente preparados para disfrutar de las promesas de eternidad que yo con anhelo pronuncio sobre vosotros. 35 Por tanto, la persona a la que se confía mi sagrado poder Sellador podrá, por mi voz y por la confirmación del Espíritu Santo, sellar a dos personas por tiempo y eternidad, siempre que sean rectos como mi siervo Juan, y ellos serán legítimos herederos del Convenio por medio de la Ley de Adopción. 36 Esta Ley es ahora revelada a vosotros para la Bendición e Investidura de mis Santos que deseen buscar el establecimiento de Sión. ¡Aquí son revelados a vosotros los misterios de la Eternidad! Regocijaos y sed alegres, porque para vosotros son las bendiciones de sabiduría y entendimiento. 37 Mis Santos, ¡cuántas veces he enseñado estos principios y sin embargo no habéis entendido! ¡Oh vosotros duros de oído! ¡Oh vosotros ciegos de corazón! No sabéis acaso que he permitido a Satán continuar en su obra con el propósito de que podáis diferenciar el bien del mal y que todo ello se sostiene por mi sola voluntad y poder? 38 Benditos aquellos que verdaderamente vienen a mi, porque lo hacen por una única puerta: Fe en mi nombre, arrepentimiento, bautismo, y caminar de acuerdo al influjo del Espíritu Santo. A ningún otro le es abierto. ¿No podéis verlo ahora mis Santos? ¿Cuánto tiempo seréis siendo conducidos por guías ciegos? ¿Cuándo vendréis a mi y escucharéis a mi Espíritu? 39 Yo he hablado estas cosas en anteriores revelaciones, pero Vosotros no habéis



comprendido, y habéis supuesto que podríais usar la razón o la emoción para persuadir a hombres y mujeres para venir a mí. No podéis ver que debéis enseñar los principios básicos que llevan a todos los hombres y mujeres a su Redentor –la fuente de toda verdad y rectitud-. De cierto no hay otra manera. Por tanto, entrad vosotros por la puerta. 40 Una advertencia, no obstante es dada ahora a vosotros –porque debe haber una oposición en todas las cosas- sí, tal como todas las bendiciones son dadas de acuerdo

a la obediencia de las leyes sobre las cuales se basan, de la misma manera todas las maldiciones vienen por la desobediencia de esas mismas leyes. 41 Mis hijos e hijas, vosotros habéis sido bendecidos con conocimiento y entendimiento y habéis sido liberados a vuestras propias naturalezas. Id ahora y buscad mi faz; vivid de manera tal que seáis investidos por mi Padre y Yo me os revelaré a vosotros, tanto individual como colectivamente. Amén y Amén.



SECCIÓN 10 El 10 de setiembre de 1985, el Anciano A. Feliz consultó al Señor buscando respuesta en cuanto a algunas preocupaciones expresadas en una reunión de la Presidencia pro-tempore. La Ley del Evangelio ha sido dada a la Presidencia pro-tempore anteriormente por el Señor y ellos preguntaron: “¿Qué haremos como Presidencia si la Iglesia rechaza lo que ha sido revelado concerniente a tu Ley?” En respuesta, el Señor dio, por medio del Anciano A. Feliz la siguiente revelación. 1 Escuchad la voz que aquel que fue crucificado por vuestros pecados, para que todos los que entren por la puerta puedan ser hijos e hijas de Dios, para que puedan ser uno en mí tal como Yo soy uno con el Padre, y el Padre es uno conmigo, de modo que todos seamos uno. He aquí, así os digo, escuchad al Novio que espera a su Prometida. 2 De cierto, así digo a la Iglesia: Yo soy Dios y no tengo variación. Lo que ha sido revelado a vosotros por medio de mis siervos proviene del seno de la eternidad y es ley perfecta; si, es mi Convenio del que antes he hablado, si, la Ley del Evangelio. Sí, es mi Ley y mi Mandamiento para aquellos que puedan ser llamados Santos. 3 No obstante, como no todos tienen Fe, enseñaos los unos a los otros acerca de mi Obra hasta que suficiente esperanza abunde para el desarrollo de la Fe. Porque, si no hay esperanza, no habrá Fe suficiente para la aplicación de esta Ley –la cual es mi Ley, la Ley del Evangelio-. 4 Por tanto, responderéis de acuerdo a las limitaciones del cuerpo de la Iglesia se la siguiente manera: ¡Aunque guardéis estrictamente la Ley de Castidad y no tenéis caridad, no sois nada! 5 Escucha ahora, ¡Oh! Israel: Tocante a los mandamientos dados en todos los tiempos anteriores acerca del adulterio, fornicación y castidad, estos no eran sino para que los doctores de la ley fueran guiados a la Ley del Evangelio o Ley Perfecta, porque esos

mandamientos son como la ley de obediencia y sacrificio. 6 Por lo que hasta que llegue el tiempo en que mis Santos puedan vivir este Nuevo Convenio, ellos guardarán todos mis anteriores mandamientos y estatutos dados por medio de mi siervo José Smith hijo, hasta que anhelen la investidura del don de la caridad. 7 Enseñad los principios al cuerpo: Sí, instrucción que os ha sido dada y que puede ser aplicable en principio para todos los que puedan ser llamados mis Santos. Aquellos que se encuentren listos para recibir la Ley del Evangelio así lo harán. 8 No obstante, los pecados de aquellos que no guarden mi ley perfecta deberán ser cargados por el cuerpo de la Iglesia porque, como no todos tienen suficiente Fe, mis anteriores mandamientos son de obligación para ellos. Porque estrecha es la puerta y angosto el camino que lleva a las Vidas Eternas, y solo los que han tomado al Espíritu Santo como su guía podrán llegar allí. Así, mis anteriores mandamientos, los mandamientos carnales que regulan el cuerpo, son dados hasta que la esperanza en sus corazones sea suficiente para tener Fe en mis palabras. 9 Yo estoy bien complacido con aquellos de mis Santos que se hallan preparados para guardar la Ley del Evangelio, porque ellos son permanentes por esta, mi perfecta ley. Otros, amigos míos, aun se



encuentran llenos en su hipocresía, y esta ley será piedra de tropiezo para condenación de ellos, porque solo se encuentran preparados para vivir por la Ley de Obediencia y Sacrificio solamente. 10 Ahora, no me consultéis más en torno a este asunto. He dicho lo que he dicho y no tengo cambio. Habéis recibido instrucción suficiente para hacer posible que los fieles alcancen la eternidad; no tengáis en poco aquello que es santo y proviene de lo alto.

11 Buscadme mientras estoy cerca, no sea que seáis vencidos por el malo por vuestra falta de Fe. Porque de cierto, Yo soy el Novio y vosotros –mi iglesia- mi Prometida. Engalanaos con vuestras hermosas vestiduras y preparaos para encontraros conmigo. Si, debéis escoger por vosotros mismos; de otra manera seréis fornicarios y adúlteros ante mí. Amén.



SECCIÓN 11 El 29 de setiembre de 1985, la hermana Pamela Calkins fue ordenada Anciana, cuando el Anciano A. Feliz le confirió el Sacerdocio de Melquisedec. Mientras los líderes de la Iglesia sintieron fuertemente de que aquello era correcto y bueno, el Anciano A. Feliz buscó la confirmación del Señor en cuanto a lo correcto de esta acción. También consultó al Señor sobre el carácter apropiado en Oficiar en las Ordenanzas del Templo. En respuesta a su oración, el Señor le dio la siguiente revelación el 4 de octubre de 1985. 1 Ahora, prestad estricta atención a la voz de mi Espíritu: Habéis hecho bien en la ordenación de mi sierva Pamela. Porque en ella se hallan los dones del oficio y llamamiento que le habéis conferido. Es por un sabio y santo propósito que ahora se encuentra entre mis hijos que el Padre me ha dado para guiarles en la obra de la restauración. 2 Sí, la Madre Eva tuvo este mismo llamamiento especial y fue la primera mujer sobre esta Tierra en poseer el Santo Sacerdocio. Sí, de no haber sido así, no habría podido cumplir sabiamente la misión como Segundo Testigo con el Padre Adán en el establecimiento del Reino de Dios sobre la Tierra, en el principio. 3 No solamente Eva, sino que han habido muchas otras mujeres rectas a través de las generaciones del tiempo que han poseído el Sacerdocio. Sus nombres han sido escondidos al mundo debido a las inseguridades, debilidades e injusticias de los hombres, porque cayeron ellos en las astucias del malvado, aun cuando poseían altos y santos llamamientos. 4 Sabed hijos míos que hay mucho que yo he deseado revelar a mi Iglesia por medio de mi siervo José Smith hijo, lo cual no ha sido aceptado por la iglesia; porque de cierto, aquello que fue revelado a la Iglesia es solo aquello que colectivamente se recibió luego de extremos sacrificios de parte de mi siervo José. Sí, sabed que José fue un siervo fiel ante mi vista, y que no

recae sobre su cabeza aquello que no aceptaron quienes él guiaba hacia mí. 5 Ahora, he aquí, vosotros sois mis hijos y Yo Soy vuestro Dios. Mi propósito es llevaros al Padre. Yo me hallo a las puertas y golpeo; si abrís, estoy invitado a entrar. Sabed esto: la acción del hombre es sagrada ante mí y ante el Padre. Debéis ir de acuerdo a vuestra propia esperanza, entendimiento y conocimiento hasta que todos tengáis Fe suficiente para abrir la puerta en cuanto a la ordenación de las mujeres. 6 Tal como he dicho en días pasados: no seréis bendecidos hasta que vuestra Fe haya sido probada; debéis ser probados en vuestra Fe antes que Yo Dios, pueda confirmar a vosotros la rectitud en todo lo que hayáis hecho. Id ahora, sabed que habéis hecho bien ante mi vista y habéis abierto la puerta de los misterios de la eternidad que serán destilados sobre vuestras cabezas. 7 Porque aun las glorias de la eternidad se hallan ocultas en esto que habéis hecho; porque sin este paso, no tendríais sabio entendimiento de lo que he designado revelar a mi Iglesia. 8 Ahora pues, enseñad a vuestro prójimo y enviadles donde vosotros mismos no podáis ir; solamente recordad hacer todas las cosas con sabiduría y orden, cuidándoos de no correr más rápido de los que vuestras fuerzas os lo permitan. Sin embargo, mi alma se deleita en aquel



que corre la carrera y toma su misión con toda la fuerza de su corazón. 9 Ahora, amigos míos: una vez que me habéis preguntado, haréis todo lo necesario para prepararos para las bendiciones que el Padre desea conferir sobre aquellos que se hallan prontos para recibirlas. 10 Por tanto sería complaciente que fuerais bautizados -en cuanto queráis- como un símbolo exterior de la renovación del Convenio con el Padre, en representación de mi muerte y resurrección. Si, y este símbolo será sellado por la imposición de manos y se os hablará por el poder de mi Espíritu. 11 También me complacería que aquellos de mi Iglesia que hayan tomado sobre ellos los Convenios adicionales de mi Santa Casa, los renueven de tiempo en tiempo de la misma manera que es hecho con los emblemas de mi Sacrificio. Ved que esas ordenanzas sean confirmadas sobre mis Santos con toda sobriedad de corazón y en la más profunda humildad. 12 De cierto, si hacéis estas cosas, mi Espíritu os acompañará y vosotros daréis testimonio de que Yo estoy entre vosotros; sí, ángeles os asistirán en vuestros lavamientos y unciones, y esas ordenanzas os prepararán para el fortalecimiento de Sión, de modo que su brillo sea refulgente como una ciudad asentada sobre una colina. 13 Y esto es la preparación con la que yo os preparo: Mi siervo Antonio, mi siervo John y mi sierva Pamela se unirán en el Espíritu Santo y Yo revelaré por medio de mi siervo poseedor de las llaves de este ministerio, aquellas cosas adicionales que debéis hacer para las ordenanzas de mi Santa Casa. 14 Porque, como ha sido establecido en vuestros corazones: Mi Santo Sacerdocio

es necesario para las hijas de Eva, a fin de que ellas estén autorizadas a levantar sus velos en mi Santa presencia. No obstante, sabed que siempre hay una oposición en todas las cosas. Con esta ordenanza vendrá la necesidad de mis hijas de reconocer su igualdad con los hijos de Adán en su naturaleza caída. 15 Todo esto debe ser hecho para la gloria, honor y majestad de Dios; porque hasta que nos seáis iguales en estas ordenanzas de mi Santa Casa, no podréis ser iguales en la realidad de la eternidad. Sí, la Madre Eva era igual al Padre Adán y todas sus hijas pueden reclamar ese derecho de acuerdo a su fidelidad. 16 Aquel que tiene oídos para oír, que escuche: aquella que tenga ojos para ver, que vea. Porque de cierto, Yo soy uno en el Padre y Él es uno en mí; de igual manera vosotros debéis ser uno para que lleguéis a ser uno conmigo, de otra manera no podréis representar a mi Prometida. 17 Hijos Míos, continuad buscándome mientras estoy cerca, y no vaciléis en esta obra, Hay mucho que debe ser hecho y vosotros aun sois un puñado. Nuevamente, no busquéis correr más rápido de lo que colectivamente vuestras fuerzas lo permitan. No obstante, mi Gracia se derramará en la fidelidad de mis Santos, de manera individual y colectiva. 18 Sí, aquellos que sean diligentes en guardar mis Mandamientos predicando el Evangelio Sempiterno, cuidando unos de los otros, alcanzarán Sión en sus corazones, porque de cierto –aun no se les ha dicho- Sión no está ni más lejos ni más cerca que la condición espiritual que mis Santos estén viviendo. 19 Al que sirva diligentemente, Yo le retribuiré de la misma manera; cuando hacéis lo que os digo, Yo, Dios estoy obligado; la recompensa es para que



aquellos que continúan en la carrera hasta el fin. 20 Hijos Míos, vuestra labor no es infructuosa. Sí, se os ha dado la carga de ocuparos de uno de los bastiones del enemigo. Porque de cierto, el impostor ha reinado y ha tenido poder sobre su reino, mas Yo estoy casi al cumplimiento de las promesas dadas a través de las eras. 21 Como fue revelado a mis siervos en días pasados, vuestra lucha no es contra carne ni sangre, sino que peleáis contra tronos, principados, poderes, dominios, maldad en formas elevadas y contra el Padre de las Mentiras. Sí, la batalla es en contra de aquellos que han llamado malo a lo bueno; tuvieron su oportunidad e hicieron mal. 22 Ahora, por tanto, vestíos con toda la armadura de Dios y buscad alcanzar la victoria; sí, llenad vuestras almas con los principios que os guiarán a la Eternidad, y no fallaréis. 23 Porque el Espíritu ahora da testimonio de que Yo me hallo en medio de vosotros y de que estaré con vosotros; sí, habéis sido iluminados y seréis investidos con poder de lo alto para esta última obra, la cual os es por signo antes de que el fin llegue. 24 Ahora, sed uno. Porque si no sois uno, no sois míos. Compartid vuestras cargas tal y como habéis hecho Convenio de hacerlo. Preparaos para llorar uno con el otro, porque deberéis llorar con aquellos que lloran. Confiad en mi Espíritu y seréis reconfortados; sí, es por una sabia causa y un santo propósito que los pesares serán vuestros compañeros. Mis Santos, no os dejaré sin consuelo. No os dejaré; porque vosotros sois mi Iglesia y Yo soy vuestro Señor y Dios. Ahora y Siempre. Amén.



SECCIÓN 12

El 22 de octubre de 1985, mientras sinceramente consultaba al Señor acerca de las revelaciones recibidas por miembros de la Iglesia que no pertenecían a ningún quórum o presidencia, la siguiente fue dada al Anciano A. Feliz. Durante las primeras semanas de la Iglesia, la Presidencia pro-tempore había estimulado a los miembros a buscar revelaciones de Dios. La Presidencia pro-tempore había sido instruida para esperar en torno a la organización de más cuerpos presidentes y quórumes. De acuerdo a la obvia necesidad para el desarrollo a largo plazo de los planes, el Anciano D. Bluto fue apartado para organizar dichos planes a fin de ser evaluado por la Presidencia y la Iglesia. La necesidad de una mejor organización de la obra misional y del bienestar eran evidentes para la Presidencia pro-tempore. La dirección del Señor fue dada en esta revelación. 1 He aquí, el tiempo ha de llegar cuando será necesario que la Presidencia provisoria procederá a formar mas completamente la obra en esta porción de la restauración, si, la de la IGLESIA DE JESUCRISTO DE TODOS

LOS SANTOS DE LOS ÚLTIMOS DÍAS. No obstante, es necesario esperar por una breve temporada, para que aquellos a quienes he escogido puedan aprontarse para los llamamientos que les esperan. 2 Dad oído ahora a la voz de vuestro Señor y Salvador, si, Jesucristo; porque de cierto Yo Soy la cabeza de esta Iglesia y a ningún otro así llamaréis. Si, vosotros sois el cuerpo y yo soy la cabeza. 3 De cierto, de cierto el que tiene ojos para ver y aquella que tenga oídos para oír, vean y escuchen: La visión de la unidad de los Santos de Dios es como una multitud de ángeles, vestidos en mantos blancos o túnicas, portando las ropas sagradas del Santo Sacerdocio de Dios, con doradas coronas de gloria sobre sus cabezas. 4 Ellos están ante el Señor y depositan sus coronas de gloria a los pies de Él. Aquellos, de los cuales la voz declara que son “Justos y legítimos herederos del Convenio por medio de la adopción y se han convertido en poseedores de todo lo que el Padre tiene y son coherederos con Jesucristo, el Hijo”.

5 Me parece ver esas huestes de seres en grandes hileras hacia el Trono de Dios. He visto también que hay otros en cierto orden a lo largo del camino. 6 “Esos son los que presiden”, la voz declaró y entendí que esos son los que en algún momento han de ser apartados Sumos Sacerdotes, Ancianos y Presidentes en el Reino, presidiendo sobre los Santos en la Obra del Reino durante la mortalidad. 7 Aquellos que presiden son los que se han asegurado que las multitudes permanecieran unidas, una vez que han sido apartados. Porque me ha parecido ver que algunos de ellos estaban en parejas mientras que otros no. No obstante, estaban adornados y vestidos al igual que el resto. 8 Y pregunté en mi corazón, y entendí: Ellos no son compañeros eternos, sino, mas bien son los justos y verídicos de entre las naciones de la Tierra; si, algunos de ellos han hecho antes solemnes votos y Convenios de asistir a otros en su regreso a la presencia de Elohim, y estaban entonces regresando. 9 Entonces, repentinamente, fui llevado más abajo y vi a muchos, muchos otros, todavía en grupos siendo organizados por los que habían sido apartados a lo largo del camino. Me fue dado entender que esas



eran congregaciones de Santos mientras estaban en su estado de mortalidad y estaban siendo guiados por el Santo Sacerdocio de Dios en las personas que ellos habían aceptado como sus líderes. 10 Pregunté en mi corazón si se me permitiría conocer al Profeta José Smith y se me hizo saber que no sería en ese momento. Esto me entristeció y repentinamente fui llevado a otro lugar donde vi la más maravillosa visión que jamás he imaginado en mi corazón. Si en ese momento mi corazón se hubiese detenido, hubiera sido la persona más feliz de todas; cuando se me instruyó retirarme yo solo deseaba quedarme. Y la voz declaró: “Hijo mío, conocéis en el corazón lo que debéis hacer”. 11 Cuando la visión finalizó, nuevamente me fe recordado que debía escribir lo que había visto y escuchado, a excepción de aquellas cosas que son inexplicables y que no es correcto decir y deben ser conocidas solamente de una manera, esas cosas me fue dicho no escribir ni decir a nadie. 12 Ahora, por consiguiente: Procederéis con la organización de Familias tal como os ha sido puesto en vuestros corazones; aquellos que presidirán, como lo he dicho antes, deben tener tiempo de prepararse, así como vosotros habéis sido preparados. 13 Sí, y ellos juntos a otros, serán enviados nuevamente a ordenar el camino, si, tal como lo has visto. Porque esos son los hijos y las hijas de Moisés y junto a los hijos de Aarón, prepararán a los Santos para el día final. 14 Yo estoy bien complacido con el comienzo de vuestras ofrendas colectivas en el trabajo al que habéis sido llamados. Prepárese todo, como ha sido ya dispuesto.

Porque hasta que no lo hagáis, no proveeré lo que he designado para investir a mis Santos. En efecto, el tiempo no es aun; actuad de acuerdo a mis palabras. 15 He aquí, en esto hay sabiduría: haréis como os he instruido y, luego, seréis bendecidos. Porque el día vendrá en que la Presidencia provisoria deberá llamar consejeros; si, cuando mi Espíritu así los dirija, separaréis la Presidencia del Sacerdocio de Melquisedec y la Presidencia del Sacerdocio Aarónico, con sus respectivos consejeros. 16 Éstos, junto al Patriarca de la Iglesia constituirán el comienzo del Quórum de los Doce para esta porción de la Restauración. Por un tiempo, es sabio que esas grandes presidencias funcionen como miembros del Quórum de los Doce, junto a aquellos a quienes he escogido para que luego sean llamados como testigos especiales de mi nombre hasta los confines de la Tierra. 17 Porque así es como se os requiere entender: La Tienda de Sión será agrandada, y vosotros extenderéis los cortinados de sus habitaciones. Sí, los días vendrán cuando seréis contados entre las Estacas de Sión. 18 Ahora, Hijos Míos ved que todo sea hecho en Sabiduría y orden. No podréis seguir los pies de aquel que ha sido llamado a la obra de predicar mi Evangelio, desde los días del pasado; sí, llamaréis y apartaréis a mi siervo Mark para ser misionero ante aquellos que han sido iluminados por los buenos y rectos de aquellas otras iglesias que claman por mi Nombre. Porque él producirá mucho y muy buen fruto en este viñedo entre aquellos que me acepten como su Salvador personal.



19 En la misma misión, llamaréis a aquel que habéis visto en la visión. Porque es para un propósito mío que se os manda que presentéis rectamente la causa de ésta obra a él. 20 También, para la obra del ministerio debéis ir, aun para predicar mi Evangelio ante aquellos que han sido rechazados (los que han sido avergonzados, reprochados en su juventud) llamaréis y apartaréis a mi sierva Pamela para ser misionera entre todos aquellos que han sido confundidos por las tradiciones y astucia de los hombres. 21 De cierto os digo: “Ellos dos son el comienzo”. Porque también llamaréis en este ministerio tal como mi Espíritu lo indique en los concilios de la Presidencia temporaria, proveeréis de compañeros para que sean por segundos testigos; obra para la cual habéis sido llamados en general. No obstante, para ellos dos y sus compañeros –como ellos lo requieran- el llamado es específico y no general. 22 Porque he aquí: vosotros sois llamados a la obra de predicar mi Santo Evangelio, sí, el Evangelio de la Restauración; sí, así como fue dado a mi siervo David3 en los días del pasado, CADA MIEMBRO DEBE SER UN MISIONERO será vuestro lema, caminaréis y hablaréis no con lo que os sobra, sino que agrandaréis los cordeles de esta porción de Sión. 23 Porque de cierto, es conveniente que hagáis como habéis supuesto: Con un Santo Convenio os obligaréis unos con otros, sí, a estar dispuestos a cargar con el peso de los otros, para que puedan andar descansados; dispuestos a llorar con los que lloran; dispuestos a consolar a aquellos que 3 Se refiere al Presidente David Oman McKay (1873-

1970)

necesitan consuelo, y a ser testigos de Dios en todo tiempo, en todo lugar, aun hasta la muerte, a fin de que seas redimidos por Dios. 24 Por consiguiente, a los hijos e hijas de Aarón, o aquellos que poseen el Sacerdocio Aarónico, Yo os digo: Buscad sacar a la luz y establecer la causa de Sión. Porque, mis Santos, haré que todo lo que hiciereis se convierta en un perfecto entendimiento de la Ley del Mundo Celestial. 25 Sí, mi siervo LaMar –el Obispo Presidente de mi Iglesia- enseñará, guiará y administrará a los Santos concerniente a aquellos principios que guiarán al cumplimiento de mis dos grandes mandamientos. En esto hay sabiduría: el preparará cada cosa necesaria para aquellos que pertenecen a esta porción de la Restauración, a fin de que ellos entiendan y guarden la Ley de Diezmos y la Ley de Ayuno; porque estos son principios maestros para la comprensión de la Ley Celestial o Ley de Consagración. 26 En todos estos ministerios, recordad que no debéis correr más rápido de lo que vuestras fuerzas os lo permitan. No obstante, la recompensa es para aquellos que cumplan con estas cosas con toda la energía de su corazón. Haced todas las cosas en sabiduría y orden, y seréis bendecidos colectivamente. Como individuos, tened fuerza y ganaréis el galardón de aquellos que son diligentes en su tarea. 27 Ahora, Hijo Mío, acerca de lo que has deseado saber –aunque no lo hayáis preguntado, Yo sé los pensamientos de tu mente-: Dad oído a mi Palabra; porque esto es aquello que todos oirán. Sí, mi voz en



torno a este asunto es para la Iglesia en forma colectiva… 28 La visión de la unidad de los Santos de Dios es dada a Vosotros con un propósito: que podáis entender y saber que, Yo, el Señor de la Desposada he establecido en la Iglesia todas las Llaves de la Presidencia; a pesar de que otros en la Iglesia puedan tener dones del Espíritu que no sean necesarios para la obra de los presidentes. 29 Sabed esto: Aquellos que son puestos en orden, se hallan para presidir y son investidos con el discernimiento. Sí, mi siervo Antonio recibió este don en el momento de su ordenación al Oficio de Obispo. 30 De ahora en adelante velaréis para que todo aquel que sea llamado a cualquier autoridad de presidencia en mi Iglesia sea investido con el don de discernimiento bajo las manos de aquel que ya ha sido investido; dicho don es para ser usado libremente dentro de los límites de llamamiento y oficio específico. 31 Mis Santos: Sed vosotros humildes y Yo, el Señor vuestro Dios os guiaré a cada uno de la mano y daré respuestas a vuestras oraciones. No obstante yo contesto de acuerdo a mi voluntad, y esto es para que cada uno crezca aprendiendo de acuerdo a lo que reciba por revelación; porque yo os revelo mis palabras en vuestro propio idioma y de acuerdo a vuestra comprensión. 32 Sí, aquellos que no se encuentran suficientemente preparados, es necesario que busquen dentro de sus mentes la forma en la que perciben mis palabras. Sí, enseñadles que es necesario para ellos trabajar sobre el mensaje de modo que llegue a ser una bendición para ellos, y para

que la revelación pueda fluir a través de ellos como un vaso puro en relación a esto. 33 Llamad al Padre en mi nombre y Yo os responderé; buscad y hallaréis; golpead y se os abrirá. Porque yo desearía que todos fueseis profetas; sí quisiera que fueseis una nación santa, un real Sacerdocio para mí. 34 No obstante, que mis palabras sean recibidas solamente dentro de los lazos que Yo, Dios, la cabeza del cuerpo, he establecido. He dicho lo que he dicho y no hay variación en ello. Vosotros que deseáis el don de la revelación, buscad en las Escrituras y ponderad y orad por el entendimiento de este don. 35 En la medida en que todo sea hecho en unidad y orden con los fuertes lazos del amor y la pureza de la caridad –donde sea investido- He establecido en mi Iglesia algunos apóstoles y algunos profetas, algunos para presidir y otros para evangelizar. 36 Que todos trabajen en profecía; que todos obren en revelación; trabajad todos en sanidad; obrad todos en cada buen don de Dios. Sí, que todos mis Santos aprendan, de acuerdo a su propio esfuerzo en sus mentes –si necesario fuese- para magnificar ese sacerdocio al que todos y cada uno ha sido llamado. Sí, que la obra del ministerio siga adelante para que el Reino de los Cielos pueda venir. 37 Nuevamente os digo: Id ahora, velad por vuestro prójimo; donde no podáis ir, enviad a alguien. Sed uno; cuidad todos al cuerpo –porque de éste todos sois miembros- y el gozo de la mano es sentido y percibido por el ojo, y el dolor del pie es sentido por la espalda; aun así, todo es sentido y percibido por la cabeza. ¡Oh! Mis Hijos,



trabajad en ello y el Reino de Dios es vuestro. Porque al que mucho se da, mucho le es requerido. 38 No obstante, no temáis; porque Yo Soy el Novio y vosotros mi Prometida. Mi amor por vosotros no cambiará; Yo Soy el Esposo y con grandes mercedes os reuniré desde los confines de la Tierra hacia las Estacas de Sión. Sí, nos encontraremos como os he mostrado en la visión de la unidad de los Santos de Dios. Hay mucho más, pero no estáis preparados para recibir. 39 Id ahora: haced lo que os he mandado en revelaciones anteriores. Porque hasta que no hayáis hecho lo que ya se os ha solicitado, no revelaré más cosas a vosotros. Sí, buscad esas revelaciones; porque Yo, el Más Alto Dios del Cielo he hablado a vosotros; sí, aun a vosotros, que habéis sido despreciados, avergonzados y rechazados. 40 Y todo esto para que Yo pueda ser uno en vosotros, y vosotros en mí tal y como el Padre y Yo somos uno. Por tanto, acercaos a mí y yo me os revelaré aun más a vosotros para que el cuerpo entero pueda ser bendecido. Levantaos ¡oh! Israel. Vestíos con vuestras hermosas ropas, que el Prometido ha de venir a ti. Habéis sido iluminados y en vosotros se ha confiado; id ahora y haced de tal modo que seáis empoderados. Amén.



SECCIÓN 13

El domingo 8 de diciembre de 1985 en Los Ángeles, California, mientras se llevaban a cabo los preparativos para una reunión de la Presidencia pro-tempore, el Presidente A. Feliz estaba orando acerca de varios ítems que serían considerados en esa reunión. El primer rebautizo general había tenido lugar el día anterior y varios miembros habían testificado que Satanás estaba trabajando sobre sus debilidades individuales a fin de estorbar la obra del Señor. La primera conferencia general trimestral estaba establecida y la agenda y orden del día tenían sus respectivos negocios asignados para la sesión de este día. Preparativos para la administración de las Ordenanzas del Templo estaban siendo finalizados, y una declaración de prensa había sido distribuida a los medios acerca de la organización de la Iglesia. Mientras que se había ingresado la petición de reconocimiento legal al Estado de California de la nueva Iglesia, objeciones legales habían sido interpuestas por abogados de Salt Lake City representando a la I.J.S.U.D. El nombre aprobado por el Señor por medio de revelación no fue aceptado por el Estado de California y el Señor, en su misericordia, dio la siguiente revelación.

1 He aquí, así dice el Señor, el Omnipotente, el Santo de Israel: vosotros sois mi Iglesia y Yo soy vuestro Dios; todo lo que os digan los instruidos y los poderosos de otras instituciones reconocidas por el gobierno de la tierra, ningún valor tiene para vosotros. No obstante, lo que Yo, Jesucristo, la cabeza de la Iglesia os diga, vosotros haréis. 2 Por tanto, el que tenga oídos para oír, y la que tenga ojos para ver, que escuchen y vean como uno solo. Lo que os he dicho en días pasados, nuevamente os lo digo: Cualquiera que se arrepienta y venga a mí, es mi Iglesia. Cualquiera que declare más o menos que esto no es mío, sino que está en mi contra. 3 Mis hijos, en los días pasados, en los comienzos de mi Iglesia en esta, la dispensación del cumplimiento de los tiempos, el nombre de mi Iglesia era conocido como Iglesia de Cristo, sin más aditamento. Muchas veces mis vasos escogidos, vuestros consiervos, han usado otros nombres por los cuales mi Iglesia es conocida entre los gobiernos del mundo. 4 No obstante mi Pequeño Rebaño, no importa con cual nombre seáis reconocidos por los gobiernos de las varias tierras en las que estableceréis esta obra entre los pueblos

de la Tierra. Porque, en esto hay sabiduría y sabed que Yo Soy Dios. 5 Veréis que todas vuestras publicaciones cumplan con los estatutos de los gobiernos donde las publiquéis. Mientras que vosotros sepáis a qué Iglesia pertenecéis, no hay necesidad de contención de tipo alguno. 6 En vuestras más sagradas ordenanzas usaréis el nombre, cualquiera sea, el que reconozcan los gobiernos por medio de certificados y otros documentos de la Iglesia en los que hasta ahora habéis utilizado el nombre que primeramente recibisteis de mí, aun en las ordenanzas. 7 No me preocupa que otros estimen que vosotros sois sus enemigos e intenten destruir esta obra. Sí, esto os será de testimonio para vosotros, mi Pequeño Rebaño, que la Sabiduría del Más Alto Dios es más grande que los poderes de los sabios y eruditos de entre aquellos que se consideran poderosos entre los hombres. 8 He aquí, pensad en los tiempos cuando os sentasteis en concilio concerniente al futuro de esta porción de la Restauración. Sí, ¿acaso no inspiré vuestras mentes y corazones con profecías de este mismo



momento? ¿No habéis sabido aun por el poder de mi Espíritu que este día habría de llegar? 9 No temáis, tomad coraje y llenaos de Fe, porque Yo estoy con vosotros. Habéis reconocido los fútiles esfuerzos del maligno, sí, el acusador, el padre de las mentiras, sabed por ello que estáis haciendo mi Voluntad. 10 A mí me complace de que os congreguéis con un nuevo convenio como promesa. Porque sin ello, y los otros pasos que habéis tomado en obediencia a mi voz, vosotros no me podríais recibir por lo que hacéis, no en este tiempo. Porque es por la gracia que recibiréis precepto por precepto de modo que os podáis enseñar los unos a los otros. 11 Porque hay mucho que tengo listo para dar a la Iglesia en forma colectiva pero, tendréis que hacer lo que habéis convenido antes de que estéis listos. Por lo pronto es suficiente que aceptéis revelaciones, por lo que mi gracia os asistirá a todos. 12 El principio de la agencia es aquel que es dado al hombre para que la simiente divina que se halla en su interior pueda crecer. Así ha sido desde los días de mis siervos José y Oliver. Mis amigos, esto causó tensión porque es un principio de crecimiento. 13 No obstante, es central para el desarrollo de la caridad que el cuerpo aprenda a aplicar el principio de la agencia hacia la meta de la consagración por medio de la Ley del Consentimiento Común. Por medio de esta Ley mi voz escucharéis, tal como uno y no como muchos. 14 Por consiguiente, dejad que el cuerpo ahora actúe en la Conferencia de modo que sea un solo agente; sí, como el cuerpo de

libres agentes congregados, que son llamados la Iglesia. Porque de cierto, el llanto de mis Santos ha llegado hasta el trono de misericordia, para todos sean las bendiciones del Santo Sacerdocio. 15 Sí, constantemente suplican al Padre en mi nombre por bendiciones especiales administradas por medio de las más santas llaves del Sacerdocio –aun el Santo Poder de Sellar del Santo Espíritu de la Promesa-. 16 Y, puesto que Dios está limitado de acuerdo a la Fe de los Santos justos, a causa de sus oraciones, habéis de reuniros para activar la Llave del Sellamiento en vuestro favor. 17 No obstante, sabed ahora que lo que he hablado por medio de mi siervo José Smith hijo, concerniente a las bendiciones buscadas por los Santos, es un principio eterno: “He aquí, las bendiciones del sellamiento de mi Iglesia residen en aquel a quien han sido conferidas como el Sagrado Poder Sellador. 18 Por lo que, sin este santo poder ninguno de los otros oficios del Santo Sacerdocio pueden sellar a la Iglesia a la Vida Eterna, solo si el poder sellador no ha sido dado a ninguno en la iglesia.” 19 Por tanto, recibiréis las bendiciones de los Sellamientos de mi Santa Casa y los Sellamientos del Sacerdocio Patriarcal solo de aquel que haya recibido el sagrado poder de Sellar. 20 Porque es por medio de este santo poder que el linaje es declarado y por el cual la Ley de Adopción puede ser clamada, y también, el Orden Patriarcal puede ser organizado mediante el sellamiento de relaciones amorosas en mi Santa Casa.



Porque ambas son correctamente administradas por medio de aquel a quien este poder le fue confiado. 21 De cierto, de cierto el tiempo ha llegado para la investidura de mis Santos, en la medida en que han permanecido fieles en sus anhelos de las bendiciones espirituales del Santo Espíritu de la Promesa; sí, el poder sellador que se encuentra en el Orden Patriarcal del Santo Sacerdocio. Por tanto, yo os he puesto a mi siervo Antonio para ser el Sumo Sacerdote Presidente o el Presidente del Sumo Sacerdocio de toda mi Iglesia y para ser Patriarca para la Iglesia, porque de entre vosotros es el único poseedor del poder sellador del Santo Sacerdocio. Sí, le recibiréis como el presidente de la Presidencia Temporaria de la Iglesia. 22 Os doy a mi siervo LaMar para ser el Obispo Presidente; porque él será ministrado por santos ángeles asignados al ministerio de este oficio. Le tendréis también como Primer Consejero en la Presidencia Temporaria de la Iglesia. 23 Pongo entre vosotros a mi siervo John para ser el Evangelista Presidente de la Iglesia y Segundo Consejero de la Presidencia Temporaria de la Iglesia. Sí, recibidlo como un segundo testigo junto al

presidente; porque él es un fiel testigo aun desde su primer estado, anterior a esta vida. 24 Estos tres serán recibidos como la Presidencia del Sumo Sacerdocio de toda la Iglesia; y lo que ellos digan –porque se les ha mandado orar al Padre tres veces al día- será para vosotros la Palabra del Señor, la voluntad del Señor, y la voz del Señor en la medida en que hablen en unidad como quórum presidente sobre todo el sacerdocio en esta porción de la Restauración. 25 Por tanto, mientras que ellos oren tres veces al día en vuestro favor, vosotros les sostendréis individualmente con vuestras oraciones de Fe. Y, por consiguiente si así lo hacéis, prosperaréis en Fe, Caridad y Fuerza. 26 Recordad, mis hijos: vosotros sois mayordomos y trabajadores de mi viñedo. Buscad individualmente saber mi voluntad y actuad tal como mi voz os de testimonio a cada uno. Porque no hay otra manera en que verdaderamente podáis hacer como os he mandado en relación a estas cosas. 27 Que cada uno trabaje en su mayordomía para que el Reino de Dios pueda salir adelante; sí el Reino de los Cielos viene. Amén.



SECCIÓN 14 El 1º y 5 de enero de 1986, el Presidente Antonio A. Feliz estaba escudriñando las Escrituras aceptadas por la Primera Conferencia de la Iglesia, a incluir en Tesoros Escondidos y Promesas. En ambas ocasiones, recibió respuestas a las preguntes que surgieron de los miembros durante la sesión de negocios de la Conferencia. Estas dos comunicaciones responden a la resolución de la Primera Conferencia en torno a que la Presidencia pro-tempore debía buscar la mente y voluntad del Señor concerniente a su sostenimiento como profetas, videntes y reveladores por la Iglesia. El Señor reveló además un cargo sobre la Obra Misional entre las comunidades de las cuales vendrían miembros a la Iglesia de Jesucristo de la Restauración (LA IGLESIA DE JESUCRISTO DE

TODOS LOS SANTOS DE LOS ÚLTIMOS DÍAS). 1 He aquí, en esto hay sabiduría. No permitiréis que nadie de la Presidencia Temporaria sea ordenado a otro oficio que al que ya es responsable de desempeñar. No obstante, apartaréis otras personas a aquellos oficios a los que habéis sido llamados y para los cuáles se les ha sostenido por la Iglesia. Sed pacientes y mi Gracia os asistirá, pero todo deberá ser hecho a mi debida manera. 2 Ahora, he aquí es necesario que los Doce sean organizados, tal y como antes os ha sido revelado. No obstante, no serán apartados hasta que los oficios de profeta, vidente y revelador sea conferido. 3 Porque de cierto, los siete previamente designados, llamaréis, confirmándolo por la voz de la Iglesia, ordenándolos, apartándolos y ungiéndolos con mi Santa Unción. Cuando esto sea hecho, serán verdaderos profetas, videntes y reveladores; porque estos son los oficios del Santo Sacerdocio inherentes al oficio de Apóstol. 4 Un misterio es revelado a vosotros: De cierto en esto hay sabiduría, un Apóstol es un profeta, vidente y revelador por derecho. Dondequiera que una persona sea ordenada a alguno de estos altos y santos llamamientos, necesita ser ordenado al apostolado, porque vosotros estáis en mi Santo y Sempiterno Convenio, vosotros no pertenecéis a la Ley Levítica.

5 Sabes mis hijos que otros pueden funcionar con los dones de profecía y visiones en las cuales les sea mostrado el pasado, el presente y el futuro y ellos podrán recibir revelaciones. No obstante lo dispuesto, una persona puede ser ordenada solamente como Apóstol dentro de este derecho. 6 Hay mucho más que saber y entender concerniente a estos muy santos llamamientos, pero deberéis esperar a recibir. Porque el tiempo no es aun para estas ordenaciones. Mirad, sin embargo que todas las cosas sean hechas en sabiduría y en orden de que podáis ser preparados para el día en que Apóstoles sean llamados de entre vosotros. 7 Por tanto, tal como se me ha preguntado; id ahora, preparad todo lo necesario para que las bendiciones que buscáis puedan ser dadas a vosotros. Porque mi Pequeño Rebaño, vuestras vestiduras deben aun ser lavadas de la sangre y pecados de esta generación; sí, la generación a la cual se os ha llamado a ministrar. 8 Porque Yo, Dios, he escuchado los lamentos de los rectos subir hacia mí de entre medio de las ciudades, y esos lamentos lloran a mí por la ministración de mis Santos.



9 A fin de que seáis investidos con poder de lo alto y para que podáis estar preparados para los altos y santos llamamientos que os esperan, buscaréis cumplir mis mandamientos para alimentar a mis ovejas perdidas que necesitan testimonios y compañerismo. 10 Porque de cierto, os prepararéis uno al otro cuidando de vuestro prójimo, y así vuestras vestiduras serán lavadas y limpiadas de la sangre y los pecados de esta generación. 11 He aquí, el campo blanco está ya para la siega. Por tanto, llamad fuera de Babilonia a todos los despreciados y los que se hallan cargados para que os probéis a vosotros mismos que sois dignos de aquello que recibiréis. Para otros, vosotros seréis quienes les invitaréis a las bodas, pero el tiempo es breve ya. 12 Buscad la manera y encontraréis las vías para predicar mi Evangelio a esta generación. Porque he puesto en vosotros todos los talentos y habilidades para que realicéis una obra maravillosa entre vuestro pueblo. 13 Comenzaréis en este lugar, y si buscáis la manera, mi Espíritu os dirigirá y la vía se abrirá frente a vosotros. 14 El Evangelio del Reino necesita ser predicado por vosotros, de otra manera no será hallado entre aquellos que son como vosotros, y es para que habéis sido llamados. 15 Meted la hoz con vuestra fuerza, y así lavaréis vuestros vestidos de la sangre y los pecados de esta generación, de la cual habéis sido apartados para llevar a cabo esta obra. 16 De cierto os digo a vosotros todos: Cuán grande es vuestro llamamiento. Porque sois

llamados a ser una ciudad encima de una colina; sí, una luz para esta generación. Vosotros sois llamados para limpiar vuestros corazones y vuestros vestidos de lo contrario la sangre de esta generación será reclamada a vuestras manos en el postrer día. 17 He aquí, apartaréis de entre vosotros a aquel que ha poseído el llamamiento apostólico en días pasados, para que pueda ser interlocutor bajo la Presidencia Temporaria, id y dedicad las comunidades para la prédica del Evangelio del Reino. 18 Los Ancianos de Israel ofrecerán al Padre su Convenio unido magnificando sus llamamientos en el Santo Sacerdocio por medio de la prédica del Evangelio del Reino. 19 Iréis y mi Espíritu os dirigirá en la manera con la cual dedicaréis esas comunidades para la prédica del Evangelio del Reino; y esto os será de ejemplo entre vosotros; de aquí en adelante abriréis con las llaves las puertas para que el Evangelio del Reino pueda ser predicado cuando entréis en donde no hayáis estado antes. 20 Sí, sed pues vosotros limpios los que portáis los vasos del Señor. ¿Y cómo haréis para ser limpios? De cierto, por medio de magnificar vuestro llamamiento de predicar el Evangelio del Reino a los pueblos del mundo, como señal de que el fin ha de venir. 21 Porque he aquí, un día de ira, un día de terremotos, un día hambre, un día de fuego, un día de desolación y llantos ha de venir sobre toda la faz de la Tierra, dice el Señor vuestro Dios. 22 Y la voz de admonición deberá salir de las bocas de los Santos de Dios, y así



reunirán las bendiciones que buscáis. ¡Levantaos Oh Sión! Que vuestra Luz brille como el astro del día a esta generación para

que podáis ser encontrados limpios el último día. Porque sois mis Santos y Yo soy vuestro Dios. Amén.



SECCIÓN 15

El 20 de enero de 1985, el Anciano Crane tenía algunas preguntas para presentar ante el Señor. El se hallaba preocupado porque en la revelación fechada el 13 de agosto de 1985, el Señor le llamó para ser el “Evangelista Presidente”. Suponiendo que el Señor se encontraba molesto con él o pensando que su llamamiento había cambiado, y también preocupado por la reacción de los demás, llevó esta pregunta al Señor. El se encontraba también orando por un testimonio confirmatorio de la revelación dada al Presidente Feliz el 1º y 5 de enero de 1986, y fue recibida la siguiente Revelación. 1 John, tengo algo para comunicarte. Tus oraciones han sido contestadas y serás bendecido, porque he aquí, Yo te digo que eres uno de mis Santos cuyos clamores han llegado ante mi trono y a quien me complazco en contestar con una bendición sobre tu cabeza. 2 Has sido llamado para ser mi Patriarca/Evangelista Presidente (porque es el mismo oficio), sin embargo tenéis mucho para aprender concerniente a vuestras responsabilidades y eres llamado específicamente en este tiempo para trabajar exclusivamente como evangelista hasta que te revele más al respecto. 3 Para que las oraciones de mis Santos sean respondidas, mi siervo Antonio, por virtud del Santo Poder Sellador que solamente él posee, y le da autoridad para desatar en los cielos y en la tierra, así lo hará. 4 Sí, John, como nosotros somos uno, así deberéis ser uno con tus hermanos y hermanas, todos cuantos sean. Porque por esta causa el Evangelio es predicado a toda nación, lengua y tribu, porque mi Rebaño se halla disperso en todo el mundo, y espera que mi voz les llame a mi redil. 5 Mi discípulo amado Juan entendió este principio y así lo enseñó a los Santos de la antigüedad. El supo en su corazón que el día llegaría, mas no durante su vida terrenal, sino en los Últimos Días. Pero cuan grande

fue su deseo de predicar el evangelio a todas las personas, aun al grado de pedir permanecer en la Tierra para declararlo a todo el mundo a fin de que todos fueran herederos de la salvación, especialmente entre los oprimidos y rechazados, que de otra manera no tendrían la oportunidad de escuchar el Evangelio. 6 Sabed vosotros que mi discípulo amado vio este día y sintió especial gozo de que mi Evangelio Eterno vendría a aquellos como él. Sí, y nuevamente, mi siervo José Smith hijo también esperaba el día en que un grupo de mis Santos estarían preparados para recibir y aceptar los principios que él entendió en la vida mortal pero no pudo revelar por las tradiciones de los hombres. 7 ¿Hay algo demasiado grande para Dios? Y ¿cuál es el hombre que puede dar órdenes a Dios? Yo restauraré mi Evangelio y Reino al mundo en mi propio y debido tiempo, y a mi propia manera. 8 Yo he revelado todos los poderes, llaves, verdad y conocimiento necesarios para establecer mi Reino sobre la Tierra para siempre con mi siervo José Smith como Testigo. 9 Sin embargo, Yo Dios, no hago acepción de personas y deseo que estas cosas sean conocidas por todos, esto es, aquellos que se purifiquen ante mí y me pidan Fe.



10 Porque la Fe viene de mí, y es dada a mis siervos por el Espíritu, el cual pueden pedir, a fin de que Yo revele mi mente y voluntad a mis Santos tan pronto como ellos se hallen preparados para recibirla. 11 Mi siervo Antonio verdaderamente así lo ha hecho, y a causa de su fe, y la de mis Santos, me complazco en hacer conocer mi mente a él. Y tú, John, eres llamado para ser mi Segundo Testigo, porque he aquí, Yo Dios, envió muchos testigos y así pruebo todas mis palabras. 12 Y aquel o aquella que reciba mayor luz y conocimiento viene mayor responsabilidad y privilegio, y mayor condenación si no presta atención a mis palabras. 13 Y vosotros, mis Testigos, seréis llamados para juzgar en el postrer día a todos aquellos a quienes esta palabra sea llevada. Sí, aun los Doce, a quienes en mi debido tiempo llamaré y ordenaré para juzgar a aquellos que hayan recibido estas palabras. Y ellos juzgarán bajo la supervisión de los Doce llamados en el meridiano de los tiempos. 14 ¿Y podréis vosotros, mis Testigos, ese día juzgar a otros si vosotros mismos no os halláis limpios de la sangre y los pecados de esta generación? Sí, ¿y cómo podréis limpiaros a vosotros mismos si no compartís mi testimonio entre los de esta generación? 15 John, como has sido llamado para ser mi Testigo, no has de temer en alzar tu voz cuando lo mande para declarar las escrituras, y más especialmente aquellas dadas a vosotros y ante aquellos como vosotros, y también daréis solemne testimonio de lo que el Espíritu revele en vuestro corazón. 16 Sí, testificaréis ante los Santos de mi Iglesia que yo he llamado a mi siervo

Antonio para ser profeta entre ellos. Testificaréis que sabéis que Yo hablo a él al igual que lo hice con Moisés. 17 Y esto no es todo, porque he a menudo susurrado a él por medio de mi amado Juan y por medio de mi siervo José, porque ellos poseen las llaves de las verdades y ordenanzas que yo revelo ahora a mi Iglesia. Sí, Juan el Amado bajo la dirección conjunta de Pedro, Santiago y Juan (quienes poseen las llaves del Reino) y José Smith (quien posee las llaves de esta última dispensación). 18 Sí, John, éste es mi siervo Antonio. El será mi voz ante los Santos. Estas cosas atesorarás en tu corazón. 19 Buscarás obtener una bendición de sus manos, sí, y el conocimiento de tu situación ante mí, tu linaje, el llamamiento al que os he escogido, y aquello que de ti requeriré para que camines en rectitud ante mí. 20 John, testificarás también de mí, el Salvador. Decidles que les amo, y cuanto espero de ellos, y cuán paciente soy, decidles que tengo mucha luz y conocimiento para revelarles. Enséñales a prepararse a sí mismos, porque mis promesas seguras son. Yo vengo a toda alma que se halle preparada para recibirme. Amén.



SECCIÓN 16

ORACIÓN DEDICATORIA

Dada por el Anciano Mark D. Bluto por el Espíritu de Revelación. Al Anciano Bluto le fue previamente delegada esta responsabilidad por revelación. Fue dada a las 3:15 a.m., el jueves 28 de enero de 1986. Previamente a ello el Anciano Bluto había estado teniendo una batalla espiritual con las fuerzas de Satanás. Había intentado desde hacía 3 semanas sobreponerse a los intentos de alejarle del Reino. Durante la Noche de Hogar de ese lunes, las fuerzas de Satanás penetraron y prevaleció el espíritu de contención. El Anciano Bluto, no obstante antes de retirarse a su lecho, pasó una hora en oración a Dios para pedir perdón por lo sucedido esa noche. Oró para que el Espíritu Santo le diera la fuerza y la paz a su atribulada alma. En respuesta a su oración, el Señor le dio al Anciano Bluto una visión en sueños de un mundo unido bajo el liderazgo del Santo de Israel. El Anciano Bluto se despertó y rápidamente el Señor le dio esta oración de dedicación de las naciones para la prédica del Evangelio del Reino a las comunidades lésbico – gay del mundo. La conferencia Semi-anual de la Iglesia (marzo de 1986) resolvió incluir este documento en Tesoros Escondidos y Promesas y designarla como Revelación. 1 Oh Gran Arquitecto del universo, Dios Todopoderoso, Padre Eterno, que has enviado al Príncipe de Paz, quien es desde eternidades atrás y será en eternidades futuras, quien gobierna los Cielos arriba y vigila los hechos de los hombres en la Tierra. 2 Que tú, Oh Dios escuches a tu siervo, a quien has escogido de entre tus hijos para ofrecer esta oración para la dedicación de tu obra que has establecido por tu palabra revelada en las comunicaciones a tus hijos especiales, a quienes has amorosamente llamado “El Pequeño Rebaño”. 3 Tú has mandado a tu siervo a orar ante tu Santo Trono… Ahora, he aquí, Oh Santo, tu siervo ha oído tu voz y obedece ahora tu mandamiento. 4 Oh Señor Dios Todopoderoso, te imploramos que nos perdones todas las faltas, debilidades, vanidades y pecados de tus siervos. Guárdanos, Oh Señor, de las tentaciones del mundo. 5 Danos discernimiento para que podamos resistir al maligno, y escoger hacer lo bueno. Oh Padre Eterno, danos la fuerza mental para soportar las

circunstancias de prueba, y gracia para soportar todas las cosas en tu nombre. Hasta que tu Ungido, el Santo de Israel regrese a esta Tierra y traiga la Paz a sus Santos. 6 Ahora, grande y poderoso Padre Celestial, hemos venido a este lugar que tú, Oh Dios, nos has dado para dedicar y consagrar estas comunidades donde tu Pequeño Rebaño se ha congregado, para el recogimiento de tu Rebaño, aun tus hijos especiales quienes, a causa de sus relaciones amorosas entre ellos han sido echados fuera por las naciones. 7 Tú has preservado a tus hijos gays y lesbianas para llamarlos en esta fase final de la Restauración de todas las cosas. Acepta por tanto, Oh Señor, el tributo de estos indignos siervos, el tributo de corazones agradecidos por tus favores dados en el pasado, y si es tu voluntad, los favores que vendrán, porque tu bondad y misericordia hacia tus hijos ha de continuar. 8 ¡Oh Dios, que nos has llamado tus amigos, ahora te llamamos nuestro mejor, mas santo y perfecto amigo. Escucha pues nuestra plegaria!



9 Oh Dios, oramos a tí, como lo hizo tu Profeta José ante nosotros diciendo: “Pon sobre tus siervos el testimonio del convenio, para que al salir a proclamar tu palabra sellen la ley y preparen el corazón de tus santos para todos aquellos juicios que estás a punto de mandar en tu ira sobre los habitantes de la tierra, a causa de sus transgresiones, a fin de que tu pueblo no desmaye en el día de la tribulación”4 10 Te pedimos, Grande y Poderoso Elohim, que recuerdes a tus amados hijos e hijas que han sido expulsados por la forma en la que ellos aman, de las tierras de su herencia, y aquellos que han sido quebrados; Oh Misericordioso Señor, remueve el yugo de aflicción que injustamente se ha puesto sobre ellos. 11 Has sabido, Oh Dios que hemos sido fuertemente pisoteados y afligidos por la maldad de los hombres; y nuestros corazones se hallan apesadumbrados debido a la opresión. 12 ¡Oh Poderoso y Misericordioso Dios, congratúlate en elevarnos! Haznos para ti una nación de Santo y Real Sacerdocio de entre los pueblos de la Tierra. 13 Nosotros, por tanto, nos acercamos al Poderoso Trono de Dios y al unísono llamamos a tus hijos de entre las naciones. Llamamos primeramente a aquellos que han sido preordenados desde la fundación de la Tierra para esta obra. Permite que oigan tu voz, Oh Dios, y sigan tu Espíritu y se unan a nosotros en tu Reino. 14 Oramos para que tu Santo Espíritu genere en ellos el ardiente deseo de hacer tu Voluntad, Oh Dios, para magnificar su Sacerdocio donde sea que hayan sido llamados para hacerlo.

4 S.U.D. D&C 109:38

15 Llamamos y dedicamos a Ti las comunidades de las Américas, sí, los Estados Unidos, la tierra de la prometida Nueva Jerusalén. Llamamos y dedicamos sus pueblos que han estado esperando la prédica de tu Evangelio en su plenitud. 16 ¡Que tu Evangelio sea proclamado ante ellos! Desde la región más septentrional, Point Barrow, hasta la meridional, Key West. Desde el extremo occidental de la Samoa americana al extremo oriental, las Islas Vírgenes Americanas. 17 Llamamos a los hermanos y hermanas que han estado esperando tanto en las grandes ciudades como en los pueblos más pequeños. Oíd la voz del Señor: 18 “Yo, vuestro Dios Todopoderoso os llamo para que seáis mi pueblo y yo vuestro Dios. Os bendeciré y os preservaré. Nos amaremos el uno al otro. Y no seréis más pisoteados, porque yo pelearé vuestras batallas. Vuestros enemigos caerán a mis pies. Sí, vosotros sois pocos en número ahora, pero Yo os levantaré como a ejército poderoso. Por consiguiente, mis escogidos, venid y abrazaos a mí. Mis brazos extendidos están para vuestro regreso.” 19 Oh gran Dios, Padre Eterno, nosotros llamamos a tu Pequeño Rebaño de la gran nación del Norte, sí, Canadá, desde las comunidades céntricas hasta sus límites. Venid y oíd la voz del Señor. 20 “Mis hijos, yo les preparé para congregarlos y he de darles ayuda en vuestra soledad. Oíd la voz de mis siervos por quienes habéis estado esperando. Abrazadme, porque yo espero vuestro amor también. Les bendeciré y haré cosas por vosotros. Sí, os levantaré como siervos especiales entre los hijos de los hombres.”

21 Oh Grande y Majestuoso Rey del universo, llamamos a los hijos de las grandes naciones de los Lamanitas en el Sur, entre las naciones en Sudamérica, América Central y Méjico. En todas sus



comunidades haremos resonar tu santo mandato. 22 “Venid todos los que os halláis cargados y yo os daré descanso.”

23 Tu voz será proclamada con fuerza a ellos. Les será llevado el Evangelio a tus hijos gays y lesbianas de entre esas naciones. Les invitaremos a ser una Santa Parte de tu Obra y Reino y les diremos: Oíd la voz del Señor: 24 “Mi Pequeño Rebaño, mis preciados hijos Lamanitas, Yo, vuestro paciente Padre os llamo a que os reunáis por última vez en mi Reino. Oíd la voz de mis siervos. Dad oído a ellos porque, mi Pequeño Rebaño, Yo he escuchado vuestros lamentos de entre las naciones de la Tierra, y os daré el Pan de Vida que se halla dentro de mi Evangelio Sempiterno.”

25 “Si bien sois pocos en número, Yo os haré como el león entre las naciones y os estableceré como testigos para mi pueblo de que mi amor no ha fallado. Venid a mí, por consiguiente tomad vuestro merecido lugar entre mis Santos.”

26 Oh Exaltado, Padre Poderoso, llamamos a los hijos de tu Pequeño Rebaño de entre las naciones de Europa, de entre las naciones de Noruega, Suecia, Finlandia, Dinamarca, Holanda, Islandia, Groenlandia, el Imperio Británico y todo el commonwealth, de todas las naciones de Europa llamamos a tu Pequeño Rebaño y les decimos, 27 “ Oíd por tanto la palabra de aquel que os ha llamado para que salgáis de la oscuridad hacia su maravillosa luz, porque así dice el Señor a Vosotros: ‘Yo soy el principio y el fin. ¡He escuchado vuestro llanto! 28 Prestad atención por tanto, porque seguramente os llamaré y reuniré con vuestros hermanos y hermanas del Reino. Os haré fuertes entre ellos y os bendeciré con conocimiento. Venid a mí y dejad que os bendiga. Oíd mi Evangelio y

recibidlo y sabed que vosotros sois contados entre los de mi pueblo.’” 29 Tu siervo Mark escucha tus palabras Oh Dios, Padre Eterno, y en obediencia, por tanto en oración llamo a todos los hermanos y hermanas gays y lesbianas de entre todas las naciones oprimidas detrás de la cortina de hierro; sí, Rusia y todos los países satélites. 30 Venid y escuchad la voz de vuestro Gran Redentor. Aquel que juzgará a los impíos y os hará libres. Oíd la poderosa voz de vuestro mensajero, porque así dice el Señor de todas las naciones a vosotros: 31 “Mis hijos, veo vuestra opresión. Aquellos de vosotros oprimidos entre las de los oprimidos. Brevemente romperé el yugo de opresión y seguramente oiréis mi Evangelio y recibiréis la porción de mi herencia preparada para vosotros por el Unigénito. He preparado una mansión para vosotros a fin de que sepáis que Yo Soy. Venid a mí y regocijaos, porque mi banquete está preparado y seréis nobles invitados en él.” 32 Oh Poderoso Dios, Alfa y Omega, tus siervos oran a ti para llamar a las comunidades de Asia, China, toda Asia Menor, Indochina, Japón, y las dedicamos a Tí para la prédica de la Santa Palabra de Dios, sí, en Evangelio, y os llamamos de entre las naciones para tomar vuestro lugar por derecho entre vuestros hermanos y hermanas, y decimos, “Oíd la voz a las naciones; escuchad al que os llama; el Padre Eterno, sí, Dios.” 33 Porque así dice el Señor a vosotros: “Venid, Oh mis hijos de Asia que pertenecéis a mi Pequeño Rebaño, hijos de la mediación, porque habéis orado a vuestros ídolos por demasiado tiempo. Oíd mi voz y obedecedla, porque mis siervos os visitarán y oiréis mi Evangelio y veréis mi poderosa obra en sus manos. 34 Sois una perla de gran valor ante vuestro Dios, y seréis pueblo poderoso ante mí si escucháis la voz



de mis siervos y aceptáis la Expiación del Unigénito, sí, el Cordero que fue inmolado. Recibid mi Sacerdocio y conoced mi poder; porque os haré testificar ante muchos que Yo os amo y todos sois iguales ante mi vista.” 35 Vuestro siervo llama y dedica a Ti, Oh Dios del Juicio, las naciones de Oriente Medio; Israel, Líbano, Siria, Jordania, Arabia Saudita, todas las naciones árabes, y a vuestros escogidos. Oramos por la Paz en sus tierras y llamamos a los de entre ellos que pertenecen al Pequeño Rebaño, y les decimos, oíd la voz del Dios de la Paz, porque así dice el Señor: 36 “Mis escogidos, os amo hermanos de las tierras árabes. Pronto regresaré, mas el tiempo no es aun. Debéis recibir mi Evangelio de parte de mis siervos, y aceptar al Hijo como el verdadero Mesías. 37 Os llamo para que salgáis de vuestra ceguera y os envío la prédica de mi Evangelio por última vez porque el día del Señor se halla a las puertas. Arrepentíos y venid a fin de recibir las grandes bendiciones que prometí a vuestros padres Abraham, Isaac y Jacob. Uníos a mi Reino. Os llamo a venir a mí. Apuráos porque yo vengo rápidamente.” 38 Tu siervo dedica a Tí, Oh Gran Jehová, la prédica del Evangelio a las naciones de África en su diversidad, sí a nuestros hermanos negros de entre ellas. Llamamos a todos los amados pueblo de allí a Tu servicio, 39 Nuestros hermanos y hermanos que aman de la misma manera que nosotros: hombre con hombre, mujer con mujer. Dedicamos a vuestro Dios la prédica del Evangelio y os decimos, escuchad a vuestro Padre. Él os llama, porque así dice el Señor: 40 “Venid a las bodas del Cordero, Vosotros que amáis adorar por medio de la danza. Venid y sed felices, porque ésta es mi Voluntad, que seáis

iguales y que recibáis un lugar de honor a mis pies, porque Yo, vuestro Dios no hago acepción de personas. Venid a la celebración y alegraos porque no me he olvidado de vosotros. Enseñaréis a muchos el gozo del Espíritu y bendeciréis a todos mis hijos.” 41 Tu siervo oye y obedece, y llama a todas las Islas del mar, hasta las dispersas, y las dedico a Ti para el establecimiento del Reino. Les llamamos para que escuchen tu voz y la obedezcan. Porque así les dice el Señor: 42 “Mi bronceada y hermosa gente, regocijaos, porque el día de la redención se halla frente a vosotros, y vuestro Dios regresará y os levantará y bendecirá con paz y prosperidad. 43 Por eso, Pequeño Rebaño, los siervos que enviaré a vosotros os enseñarán mi Evangelio y os reunirán y os traerán a Sión. Con gozo en mi corazón, os daré la bienvenida.” 44 Oh Gran Dios del universo, finalmente nosotros sujetamos los esfuerzos del Enemigo. Sí, Satanás, el Diablo, el Padre de las mentiras, y a todas sus hordas de demonios. Les sujetamos por el poder unido del Santo Sacerdocio Según el Orden del Hijo de Dios para que no puedan frustrar la Obra de Tu mano y para que no tengan poder sobre la Iglesia. Les sujetamos para que no desvíen del camino a los que has escogido, y les desterramos de entre nosotros. 45 Oh nuestro Dios, hemos hecho tu voluntad y hemos dedicado las comunidades de toda la Tierra para la prédica del Evangelio para los hermanos y las hermanas gay y lesbianas alrededor de todo el globo. 46 Ahora dedicamos a todos los Santos de los Últimos Días a ti, para que vengan a ésta, tu obra. Bendícenos y dadnos sostén, porque somos débiles, pero Tú, Oh Dios, eres fuerte. Por consiguiente te suplicamos



que nos des fortaleza en nuestro Sacerdocio y número a fin de que tu Obra sea fuerte ante tu faz. 47 Bendice a los líderes de la Iglesia, sí, la IGLESIA DE JESUCRISTO DE TODOS LOS

SANTOS DE LOS ÚLTIMOS DÍAS. Guía a la Presidencia Temporaria por medio del espíritu de revelación. Bendice y sostiene a los Ancianos presidentes de tu Iglesia: guíalos y dirígelos para que puedan servir en el rebaño.

48 Mantennos con tu mano de rectitud. Danos el deseo de corazón de ser misioneros para llevar esta gran tarea que has puesto delante de nosotros. 49 Nos comprometemos, y dedicamos nuestras vidas para este fin en el nombre de tu hijo Unigénito, el Rey de Reyes, el Señor de Señores, el Príncipe de Paz, el Cordero de Dios, el Redentor de Israel, Rey de Todas las Naciones, sí, en el nombre de Jesucristo, el Hijo del Dios viviente. Amén y Amén.



SECCIÓN 17

El 14 de febrero de 1986, mientras escudriñaba el primer capítulo del Libro de Hageo, el profeta del Antiguo Testamento, el Presidente Antonio Feliz sintió una fuerte necesidad de orar para saber acerca de la voluntad del Señor concerniente a la edificación de un Templo. Las Revelaciones ya habían instruido en cuanto a los preparativos que debían ser hechos para administrar la Santa Investidura a los dignos de la Iglesia, pero no se había dado ninguna instrucción referente al Templo en sí mismo. La Presidencia Temporaria había determinado que el Señor proveería, si el liderazgo de la Iglesia hacía todo de su parte para preparar el tiempo en que serían bendecidos con un Santo Templo. En su compasión y misericordia, el Señor dio la siguiente revelación. 1 He aquí, así dice el Señor vuestro Dios, aquel que ha cosechado y cosechará; porque mis brazos se hallan extendidos para todo aquel que quiera congregarse junto a mí; de cierto, así os digo, mi siervo Antonio: 2 Estableceréis la reunión de una tesorería; sí una Tesorería Sagrada para la Santidad del Señor. Esto, junto a los otros bienes que llegarán de manos de las ofrendas de mis Santos han de crecer dice el Señor tu Dios. 3 No obstante, del mismo modo en que habéis tenido la necesidad de otros bienes, sí, el diezmo y las ofrendas de mis Santos, no tomaréis de la Tesorería Sagrada para ningún uso más que para el que yo os diga, a fin de establecer una santa casa entre vosotros. 4 Porque de cierto, Yo soy el Señor vuestro Dios; y no puedo investir a mis Santos a menos que no sea en los dominios de santidad; sí, dentro de mi Santa Casa. 5 Mi Santo Espíritu manifiesta en los corazones de mis Santos rectos la necesidad de las ordenanzas de mi Santo Templo; porque el Reino de Dios no se encuentra complete sin la plenitud de mi Santo Sacerdocio, la cual se encuentra en los confines de los dominios de santidad, sí, en el Templo de Dios.

6 Por tanto, que la Presidencia continúe dirigiendo los asuntos de mi Iglesia hasta el fin de todas las cosas, con el propósito de preparar mi Santa Casa. 7 En torno a esto, sea ordenada mi sierva Pamela Calkins al Sumo Sacerdocio; porque es el Sumo Sacerdocio el que gobierna mi Santa Casa. Sed laboriosos y se os dirigirá en vuestras tareas para que todas las cosas sean hechas en orden, a fin de que Sión pueda ser investida de lo alto; porque el Señor Dios así lo ha dicho. 8 Oíd ahora, Oh Israel: Donde mucho se da, mucho se requiere, y si buscáis tener el conocimiento de Dios, deberéis primero soportar la prueba de vuestra Fe. ¿Por qué os haré prosperar y daros tierras, graneros, finos muebles y abundancia si vosotros no magnificáis vuestra mayordomía en estas cosas? 9 Por consiguiente, sois llamados a consagraros a vuestras mayordomías dentro de vuestros corazones, y a magnificar vuestros llamamientos por medio de la Fe. Y la promesa es segura: aquella que haga estas cosas traerá bendiciones sobre su cabeza, bendiciones que alcanzarán la eternidad. 10 Bien ha sido escrito que “el sacrificio atrae las bendiciones del cielo”, porque la Ley del Diezmo manifiesta vuestro amor por el Señor, vuestro Dios. La Ley del



Ayuno manifiesta vuestro amor por el prójimo por medio de vuestras ofrendas. 11 Y así como el amor engendra amor, de la misma manera la consagración de mis Santos traerá sobre sus cabezas bendiciones tan cuantiosas que no os halláis preparados para recibirlas, y fluirán hacia vosotros para siempre jamás. 12 Por tanto, aquellos que se encuentran preparados, han de llenar la Tesorería Sagrada con sus propios excedentes luego de haber diezmado un diezmo justo; así serán bendecidos de acuerdo con su Fe. 13 De cierto, en esto: aquellos que den “óbolo a la viuda” recibirán prosperidad y manifestarán su Fe de esta manera y ni una sola bendición les será retenida en esta vida ni en la eternidad. 14 Que mis santos se extiendan por medio de toda la plenitud y profundidad de Sión, del Norte al Sur, del Este al Oeste, y probadme en esto, si no han de ver el poder de su Dios. Porque de cierto, todas estas cosas son para la gloria, majestad e investidura de Sión. 15 Mis hijos e hijas, es Sión lo que vosotros buscáis; por tanto, sabed que Yo estoy llamando a mis Santos a que se reúnan bajo mis alas como la gallina junta

a sus polluelos. Sí, protección y amparo serán la recompensa, solamente si venís a mí, dice el Señor vuestro Dios. 16 Un misterio os es revelado a vosotros: La plenitud de mi Santo Sacerdocio consiste en las ordenanzas del sagrado Poder Sellador. Estas Santas Ordenanzas que pertenecen a la Casa de Dios no son encontradas en las comunidades de vuestro género y vosotros sois llamados a restaurar su plenitud entre ellas. 17 Vosotros podéis tener todas las bendiciones del Evangelio Restaurado tal como os ha sido revelado a través de mi siervo José Smith hijo, pero si no tenéis las ordenanzas selladoras de mi Santa Casa, no tenéis la plenitud. 18 Otras iglesias poseen sacerdocios y general Fe en los corazones de las personas pero, vosotros y solamente vosotros entre los de vuestro pueblo poseéis aquello que lleva al conocimiento de Dios, sí el Padre del Hijo; porque Hombre de Santidad es su nombre. 19 Sed discreto, porque esta sacralizad es lo que ha causado que tu pecho arda dentro de ti. Escudriñad estas cosas en vuestro corazón y, si buscáis en reverencia el entendimiento, mucho más os será revelado. Amén.



SECCIÓN 18

El 23 de enero de 1986, el Presidente Antonio Feliz recibió una visión de tal magnitud que le fue ordenado no revelar a nadie el contenido, ni siquiera una porción de ella. Fue instruido para “… sellar la revelación hasta que, el Señor en su Sabiduría la diera como instrucción para la iglesia…” El 28 de febrero de 1986, luego de ser personalmente comprometida por el Presidente Feliz concerniente a sus tareas como autoridad de la Presidencia Temporaria, la Anciana Pamela Calkins determinó que la Presidencia Temporaria pronto sería reorganizada. Días después, el 3 de marzo de 1986 en Salt Lake City, Utah, el Presidente Feliz se hallaba meditando sobre el impacto de la labor de la Anciana Calkins en los Ángeles, sobre la Iglesia y fue lleno del Espíritu. Releyendo la Revelación sellada, fue bendecido con instrucciones adicionales por parte del Señor. Entonces, en confirmación de ambas revelaciones combinadas, el 13 de marzo de 1986, el Presidente John Crane entregó a la Presidencia Temporaria una carta certificando lo que el Señor le había manifestado a él en lo que sería una especialización en su ministerio. Ambas revelaciones dadas al Presidente Feliz se incluyen (a excepción de algunos ítems que continúan sellados hasta el momento) en la siguiente revelación. 1 Así dice el Señor a tí, porque eres mi siervo Antonio; sí, he aquí: es oportuno que la Iglesia venga a saber prontamente de mi voluntad tal y como te la he hecho saber en la visión. De cierto, aquel que conociste en la visión será tu sucesor en la Presidencia del Sumo Sacerdocio. 2 Por tanto, dirás a mis Santos que hay un escogido por mí para seguir luego de ti como Presidente del Sumo Sacerdocio sobre toda la Iglesia y como presidente de la IGLESIA DE JESUCRISTO DE TODOS LOS

SANTOS DE LOS ÚLTIMOS DÍAS, la cual es conocida entre los hombres como la Iglesia de Jesucristo de la Restauración, no obstante, dirás a la Iglesia que esto no sucederá sino hasta que termines la obra que Yo, el Señor su Dios te he encomendado… 3 Cercano se halla el tiempo en el que verás que hay sabiduría en que mi siervo John Crane sea relevado de sus tareas como tu consejero en la Presidencia del Sumo Sacerdocio y de la Iglesia; sí, que sea relevado de la Presidencia Temporaria. 4 Yo el Señor estoy bien complacido con su labor en el trabajo de la Presidencia. Que mi siervo John ahora continúe actuando con toda diligencia como tu

segundo testigo. Que la Iglesia le siga sosteniendo como su Evangelista; porque es en ello en que sus dones abundan ricamente. 5 Ahora, por lo tanto, para que el trabajo en el ministerio siga adelante, os doy a mi sierva Pamela Calkins para llenar la vacante en la Presidencia Temporaria. Sí, la presentarás a la Iglesia en la Conferencia como tu Segunda Consejera y como miembro de la Presidencia del Sumo Sacerdocio de toda la Iglesia en conjunto contigo y mi siervo LaMar Hamilton, con quien me hallo bien complacido. 6 Vosotros tres, la Presidencia de los Sumos Sacerdotes, esperaréis un breve tiempo antes de realizar nuevas ordenaciones. Aquel que tenga ojos para ver, que vea; aquella que tiene oídos para oír, que escuche: mi casa es una casa de orden, dice el Señor vuestro Dios. 7 No puedo conferiros la santa ordenación sin un lugar al que pueda llamaros ante mi santa presencia. Por lo que he de extender todas las ordenanzas a tu pueblo tal como las realizan en este momento los Doce congregados en Salt Lake City.



8 Por lo tanto, luego de que los Santos de mi Pequeño Rebaño sean bendecidos con la sagrada Investidura de mi Santa Casa, el Presidente del Sumo Sacerdocio entrará ante mi solo, así dice el Señor vuestro Dios. 9 Entonces, las asambleas de mi Santo Sacerdocio serán ofrecidas ante el Más Alto Dios por aquel que presida mientras se hallen en los confines del lugar sagrado. Allí el Presidente se presentará frente al Señor, dice el Dios de Israel. Esto, hijo mío, será el comienzo del santo apostolado entre vosotros.

10 Hasta ese día, la paz sea a tu alma; mi Santo Espíritu guiará tus pasos y (aun cuando no lo puedes ver) sabed que Yo estoy contigo todo el tiempo; no estáis solo en la oscuridad. Esta es la manera de crecer, hijo mío. 11 Sabrás cuando llegue el tiempo para que estas palabras sean reveladas a la Iglesia, así como sabrás por mi Santo Espíritu cómo y qué hacer con vuestros recursos para que los dignos de la Iglesia puedan recibir las ordenanzas de mi Santa Casa. ¿Acaso algo hay imposible para mí? Dice el Dios Todopoderoso. No temáis, porque Yo he hablado, por lo cuál así se cumplirá. Amén.



SECCIÓN 19 El 27 de marzo de 1986, la Presidenta Pamela Calkins indicó a su compañera Lynn LaMaster, que debería prepararse para recibir las ordenanzas del Templo. La respuesta de Lynn fue “Realmente no sé lo que eso significa. ¿Qué debería hacer para estar preparada?” La Presidenta Calkins durante sus oraciones personales, fue dirigida por Dios para “enseñarle acerca de la Investidura, de su belleza y serenidad, de la paz y gozo espiritual recibido de esa manera”. Luego de ser dirigida, la Presidenta Calkins se acercó al Señor por medio del ayuno y oración con la pregunta, “¿Cómo debería enseñarle a Lynn (y a los otros) acerca del Templo?” En respuesta a su interrogante, el Señor bendijo a la Presidenta Calkins con la siguiente Revelación. 1 La Investidura es la bendición que doy a mis hijos que buscan ver mi faz. Es un don para el fortalecimiento y la guía que deben tener para tomar el camino apropiado que les traerá de regreso a mi presencia. Todas las bendiciones dadas en mi Santa Casa son dadas en orden, como peldaños, porque ¿cómo podréis llegar a donde Yo estoy si no seguís el camino que Yo he seguido? 2 Primero, la Iniciatoria: El COMIENZO. Si estuvieseis a punto de emprender un largo viaje, ¿acaso no os prepararíais con alimento y vestimenta para el camino? Así son mis ordenanzas iniciatorias: El alimento espiritual y la vestimenta que necesitaréis en vuestro largo viaje de regreso a mi presencia. Estas ordenanzas sirven para fortaleceros y protegeros, a fin de que sepáis que habéis tomado el camino correcto. 3 El lavamiento es para limpiaros de vuestro pasado, a fin de recordaros de que os halláis limpios de él y ahora solamente se aprueban las tareas que os sean requeridas de vosotros en el futuro. 4 Las unciones son un sellamiento y una protección para vuestro cuerpo físico, cada parte es ungida y bendecida para que vuestra mente pueda focalizarse más en lo espiritual que en lo físico, porque Yo me hago responsable de vuestros cuerpos con

mis propias manos. Y si padecéis, en mí lo hacéis. 5 El ser ataviado con la Vestidura del Santo Sacerdocio es para escudaros y protegeros contra el poder de Satanás. Él es real, no os dejéis engañar. Pero Yo os doy una vestidura santa para vuestra protección como un recordatorio de que siempre estoy con vosotros. Estas son entonces las ordenanzas iniciatorias, el comienzo. 6 Una vez que os halláis preparados para vuestro viaje, estáis listos para comenzar, pero, ¿hacia dónde vais? Éste es el propósito central de las enseñanzas de la Investidura: Llevaros a través de los estadios y niveles de crecimiento espiritual que son necesarias para convertirse en lo que Yo Soy. 7 Hacéis Convenios, cada uno apoyado sobre el anterior, formándoos una saeta, un indicador que os guía a mí. El camino no será fácil, pero los Signos e indicadores son claros, apuntan a mí, pero ello dependerá de que todo lo veáis y escuchéis con ojos y oídos espirituales. El cuerpo de la Investidura entonces, os guía hacia mí. 8 Las ordenanzas selladoras os unen unos a otros en vuestro amor. Esto es lo más importante, porque la cualidad que hace a un dios no es el poder, sino el amor, sí, el amor puro. Porque el amor puro es el



poder más grande de todos, por lo que os sello en vuestro amor el uno para el otro. 9 Porque el amor no es un elemento solitario. Se multiplica y crece con cada uno que se agrega al círculo, y el poder del amor de dos personas juntas es más que el poder de dos personas separadas. Y el poder de doce que se aman no puede ser detenido en este mundo ni en el venidero. 10 Como habréis de percibir, este amor no necesita ser un amor corporal, sino un amor espiritual, mental y de corazón. No obstante, Yo me deleito en la unión física de mis hijos a los cuales guío en uniones

de corazón, alma y mente, y a esos Yo bendigo con mis santas ordenanzas selladoras. 11 Y aquellos que continúan han de recibir el segundo sellamiento del Santo Espíritu de la Promesa y es más, serán compañeros para siempre, pareja y amantes por toda la eternidad. 12 Esto es entonces la Investidura, que cada uno que sienta la inspiración y se dirija a mí, será preparado, guiado en el viaje que conduce a mí y a la Vida Eterna como yo la poseo. Así ha de ser por siempre, Amén.



SECCIÓN 20 Durante un encuentro sumamente emotivo de la Presidencia Temporaria, en la tarde del 2 de abril de 1986, la Anciana Pamela Calkins compartió una Revelación concerniente a las ordenanzas del Templo. Debido a que la Anciana Calkins dirigía sus oraciones a sus Padres Celestiales, el Anciano LaMar Hamilton preguntó escépticamente si la revelación provenía del Padre Celestial o de la Madre Celestial. La Anciana Calkins entonces se refirió a experiencias en el pasado en las cuales había sentido que no le era suficiente orar a su Padre. También necesitaba consultar a su Madre, pero nada sabía acerca de ella. Conmovido por la respuesta, el Anciano Hamilton dijo, “¡Voy a enseñarte sobre la Madre!” Durante un sueño esa misma noche, el Anciano Hamilton se despertó a las 3:14 a.m. del 3 de abril y sintió la impresión de escribir lo que había visto y oído en el sueño. El Señor, por Revelación, más tarde designó que lo escrito era una Revelación. 1 Oíd, Oh vanidosos hombres de la Tierra. Aquí está Elohim, vuestro Padre y vuestra Madre. Nosotros somos vuestro Dios. Así ha sido desde el principio. Juntos creamos la Tierra por medio de nuestro Hijo Jesucristo. Juntos escuchamos vuestras oraciones y os contestamos como uno solo. 2 Nunca hemos estado separados. Siempre hemos estado cerca para vosotros. En ocasiones vuestro Padre habla desde el Cielo, y en otras lo hace vuestra Madre. Sí, hablamos como Uno. No penséis que vuestro Dios se halla en soledad. Juntos ejercemos la compasión. Juntos es derramada nuestra ira. Él no es sin Ella y Ella no es sin Él. 3 Se os ha enseñado orar al Padre. En ello no hay error. ¿No fue acaso vuestro hermano Jesús quien así os enseñó a orar al Padre? Jesús amó a su Padre, quien le enseñó a Él gracia, sabiduría y compasión. Los Santos han necesitado saber de Su amor por ellos. 4 ¿No nos conocen ellos como el severo, y como maestro de tareas? La Madre le enseñó justicia, honestidad y el trabajo diligente en nuestra obra. ¿No es acaso vuestro Padre justo, honesto y laborioso? ¿Y no es vuestra madre llena de gracia y misericordia y acaso no ama a sus hijos? Juntos somos completos y perfectos.

5 Estamos juntos porque ese es nuestro deseo. Aunque somos separados en nuestro propio derecho y autoridad, como lo fueron Adán y Eva, Abraham y Sarah, José y Emma. ¿No sabéis que la Madre es un Dios? Es una Sumo Sacerdotisa, y puede permanecer sola al igual que un Padre en el Cielo. 6 ¿No sabéis que nuestro deseo es actuar como uno y ser uno? Es también nuestro deseo que los hijos de Adán y Eva sean uno con nosotros así como Cristo es uno con nosotros. 7 Somos una familia, un Real Sacerdocio y Dioses o Dioses que serán. Algunos hijos han caído así como algunos dioses. Vuestra Madre y Padre lloran ante la pérdida de uno de vuestros hermanos y hermanas. 8 Ahora os enseñamos sobre vuestra Madre. Ella es mi esposa, mi Compañera Eterna y Yo la amo. Ella es fuerte pero delicada, y bella sin adorno. Ella es suave y flexible. Nuestros cuerpos se entrelazan al igual que nuestros espíritus. Nos complementamos mutuamente. 9 Juntos somos un continuum de características divinas capaz de TODO, sin límite y sin importancia de nuestro género.



10 Cuántas veces he intervenido con ella a favor de la humanidad. Asimismo ella ha intervenido conmigo. 11 El deseo de ella es tener a sus hijos e hijas en el hogar luego de su estadía en los mundos, y entonces mandarlos nuevamente en exultación. La Madre se lamenta junto a mí ante la irreversible pérdida de alguno de sus hijos entre los dominios de Satanás, el Caído. 12 Oíd ahora a vuestra Madre Celestial: “Hijo mío, desde niño tu te has preguntado sobre mí. Tus ojos han sido cerrados a mí debido a las enseñanzas de tus hermanos en la Tierra. Ellos se han creído superiores a sus hermanas debido a su fuerza física, y crearon doctrinas, leyes y prácticas tanto seculares como religiosas para someterlas y disminuirlas. 13 “En algunos lugares y en ciertas épocas vuestras hermanas han gobernado sobre familias y naciones. Algunas grandes mujeres han influido y gobernado en sus confines ejerciendo una gran influencia sobre los hombres y las naciones. 14 “Amad a vuestras hermanas, sanad sus heridas y tenedlas por iguales tal como los

hijos de amorosos padres respetan a sus hermanas”. 15 “¿Fue la Poligamia una abominación? Nosotros les contestamos Sí y No. La práctica tiene un origen divino. Pero nunca fue nuestro objetivo que las mujeres fueran sometidas a los hombres. Las mujeres debían ser iguales y debían ser soberanas sobre sus familias. 16 Y allí es cuando el hombre ejerció dominio innecesario y se volvió negligente y la práctica fue esencialmente detenida. ¡Ay de aquellos que subviertan Nuestra voluntad concerniente a esta práctica! 17 No te quejes más hijo mío, y no avergüences a mi hija que se dirige a mí en sus oraciones. Tú entiendes nuestro amor por todos nuestros hijos y especialmente por nuestro Rebaño Pequeño. 18 ¿Acaso no os acercáis a vuestra madre terrenal por solaz, cuando el consuelo de vuestro padre no es suficiente? No neguéis mi complacencia. En vez de ello, enseñad a mis hijos que Yo Soy, y que estoy siempre ansiosa de responder. Amén.



SECCIÓN 21 El 3 de abril, el Presidente Feliz, el Obispo Hamilton y los Ancianos Crane, Bluto y Snider se encontraban en el hogar del Anciano Crane conversando acerca de los dones del Espíritu. Los Ancianos Zinder y Bluto habían experimentado recientemente manifestaciones del don de lenguas en sus oraciones personales y se hallaban comentando estos incidentes. El Presidente Feliz entonces enseñó al grupo a partir de los inspirados escritos de Pablo en la Primera Epístola a los Corintios, y también enseñanzas del Profeta José Smith. La conclusión de la reunión fue que no se deberían negar esos dones, pero sí deberían ser ejercidos en público solamente cuando el Espíritu inspire a quien habla de que hay alguien presente que pueda interpretar. Los dones espirituales deberían ser ejercidos bajo la dirección del Sacerdocio. El Presidente Feliz especialmente hizo énfasis en la enseñanza de Pablo de que más que el don de lenguas, deberíamos buscar el don de profecía, que el Presiente Feliz definió como hablar cada uno en su lengua materna bajo la dirección del Espíritu (Ver la visión de la Unidad de los Santos de Dios). El 4 de abril de 1986 después de hacer de esto un tema de oración, el Anciano Crane recibió la siguiente revelación. 1 Oíd las palabras de Dios, la fuente de toda verdad y el origen de todo buen don. 2 He enseñado concerniente a las señales y dones del Espíritu que siempre acompañan a mis Santos y que siempre son dados como testimonio de la Fe. 3 Sí, son dados de acuerdo al grado de Fe que se tenga. Leed lo que ya se ha revelado acerca de ello por medio de las manos de mis siervos Pablo, Moroni y José Smith. Sí, leed también las palabras de Alma y Nefi, el hijo de Nefi. 4 Porque los antiguos nefitas fueron altamente favorecidos ante el Señor; sí, favorecidos sobre toda otra nación, tribu, lengua o pueblo en aquel tiempo. Todas las cosas les fueron dadas por conocimiento, de acuerdo a sus deseos, su Fe y oraciones, sí, acerca de las cosas como fueron, como son y como han de ser. 5 Muchos de entre ellos fueron visitados por el Espíritu de Dios, conversaron con ángeles, escucharon la voz del Señor, tuvieron el espíritu de profecía, y el don de la revelación, y muchos otros dones (el don de hablar en lenguas, el don de predicar, y el don del Espíritu Santo, así como el don de traducir) [Alma 9:20-21]

6 Leed esas palabras en Fe. Buscad la verdad con real intención. Orad acerca de esas palabras y Yo iluminaré vuestra mente por medio de los dones del Espíritu, sí, con el don de entendimiento. 7 Digo al Sacerdocio de la Iglesia que debería buscar esos dones y no negarlos, pero, no obstante, sabed que cada uno tiene su lugar. 8 ¿Quién es hombre que deba complacer a otros hombres? No busquéis esos dones para probar vuestra Fe o llamamiento a los demás, o para satisfacer curiosidad alguna. Esta es una generación malvada y adúltera que busca una señal. De cierto, si hacéis esto, de hecho ya tenéis vuestra recompensa: la alabanza de los hombres, que es fluctuante y variable como las olas del mar. 9 Buscad complacer a Dios, quien os ve en secreto. Porque mejor es buscar la aprobación de un Dios justo e invariable, que recompensa a todos aquellos que diligentemente le buscan, si con dones inefables. 10 Y cuando recibáis estos dones, orad por la confirmación del Espíritu Santo, que es el Testigo infalible que viene



solamente de Dios (del cual mi siervo José enseñó que Satanás no puede imitar), así sabréis con certeza si el don es bueno, porque todo buen don procede de Dios. 11 Sabed que la Fe, la Esperanza y la Caridad también son dones del Espíritu. Fe, Esperanza y Caridad no siempre son visibles, aun cuando sus efectos sí lo son. 12 Esos dones están disponibles para todos. Buscad primeramente esos dones. Recordad que sin Fe es imposible complacer a Dios. Tampoco sin esperanza, nacida del Espíritu, es posible alcanzar la Eternidad. Nuevamente, sin caridad seréis la sal de la tierra que ha perdido su sabor. 13 Sí, haced todo cuanto hiciereis en caridad y bajo la dirección de mi Espíritu. Escudriñad lo que se ha revelado en la Sección 124 de Doctrina y Convenios acerca del tema: Porque en lugar de bendiciones, vosotros, por vuestras propias obras, traéis maldiciones, ira, indignación y juicios sobre vuestra propia cabeza, a causa de vuestras insensateces y todas vuestras abominaciones que cometéis ante mí, dice el Señor. [D&C 124:48] 14 Y cuando hagáis todas las cosas en caridad y por el Espíritu, Dios, en su debido tiempo responderá por medio del Espíritu. Leed la Sección 131 y 2 Pedro 1. La palabra profética más segura significa que un hombre CONOZCA que está sellado a la Vida Eterna, por revelación y el espíritu de profecía, por medio del poder del Santo Sacerdocio. Es imposible que un hombre se salve en la IGNORANCIA. 15 Yo, el Señor, estoy listo para dar esos dones a todos. Cuando un hombre o una mujer rinde su corazón a Dios, ¿quién puede restringir a Dios de ser Él mismo por medio de ellos? Entonces, ¿quién puede restringir al Todopoderoso de

derramar estos dones a su deseo, así como nadie puede retener a una nube dejar caer la lluvia? 16 Yo he vertido mi Espíritu sobre mi Pequeño Rebaño y he bendecido a mis Santos con abundancia en los dones del Espíritu, sí, aun hasta que sobreabunde. O, en otras palabras, he llamado a algunos de mis hijos, de acuerdo a mi voluntad, quienes son bendecidos con abundancia de dones espirituales y talentos que reposan en los fundamentos de esta Iglesia. 17 Los burlones pueden ridiculizar y los tontos decir: “¿Por qué tiene esta Iglesia tantas revelaciones? ¿No podéis pensar acaso por vosotros mismos?” Pero si no hubiera revelación en la Iglesia, esos mismos dirían: “¿Cómo puede ser la verdad de Jesucristo cuando no posee revelación?” 18 Aquellos a quienes he escogido para ser testigos de mi nombre a esta generación deben prepararse para recibir estos grandes dones. También deben saber por qué y cómo estos dones son dados y recibidos. 19 Y este es el modelo: Dios realiza una obra al tiempo que se halla en la eternidad. O en otras palabras, Dios realiza una obra en este mundo material que tiene su contraparte en el mundo espiritual. 20 Dios establece su obra con un Convenio inquebrantable o promesa de bendiciones y conocimiento ampliado y poder por obediencia, y maldiciones y conocimiento empobrecido por la desobediencia. 21 Entonces, Dios llama a hombres y mujeres como testigos para que testifiquen ante el mundo sobre aquello que han visto en la carne y en el Espíritu.



22 El hombre o mujer que escucha el testimonio de los testigos, y cree en él, y entonces actúa de acuerdo a las promesas de Dios EN FE, recibirá entonces la bendición prometida como recompensa en esta vida o en la venidera, porque esos actos realizados EN FE alcanzan la eternidad. 23 Éstos también recibirán el testimonio confirmatorio del Espíritu Santo de que lo que han hecho es verdad y se halla de acuerdo a la voluntad de Dios.

24 Tal como enseña el Libro de Mormón, no recibiréis testimonio sino hasta después de probada vuestra Fe. Cuando ello ocurre, vuestra Fe crece junto al conocimiento y el poder, y estáis listos para subir un nuevo peldaño de Fe. De esta manera habréis de crecer en gracia sobre gracia. 25 Nuevamente os digo, no neguéis los dones de Fe, Esperanza y Caridad. Porque nos hallamos ligados, y el cielo se une a la tierra cuando efectuáis cualquier acto de sacrificio, motivados por la caridad, basados en la fe en mis promesas, mirando con Fe su cumplimiento. Amén.



SECCIÓN 22 El domingo 6 de abril, el Obispo Hamilton presentó una revelación recibida de parte de los Padre y Madre Celestiales, y la Presidenta Calkins presentó una revelación explicando en simples pero bellos términos la naturaleza de la Investidura del Templo. El Presidente Feliz dijo en la Reunión de Testimonios que él había orado para que sus consejeros recibieran revelaciones. El Presidente Feliz mencionó que el 4 de abril de 1986, también había recibido una revelación que brinda luz adicional a las dos anteriores. Fue instruido por el Señor para mostrarla solo a algunos individuos preparados para recibirla, y que ello fuera hecho dentro de la Casa del Señor. Le fue mandado también enseñar los siguientes dos puntos de la revelación a los Santos: (1) Los nombres “Padre Celestial” y “Madre Celestial” y todos los otros nombres de la Deidad son títulos y oficios y no se refieren a personas de ese género. Por lo que una pareja gay o lésbica que haya vivido el Evangelio y haya sido sellada por tiempo y toda la eternidad podría cumplir con esas funciones y, entonces cumplir con todas las promesas que atañen al juramento y convenio del Sacerdocio y obtener todas las bendiciones pronunciadas sobre ellos en el Templo. (2) Dios designa revelar grandes misterios a los Santos por medio de su conocimiento concerniente a los títulos u oficios de la Deidad. Luego de leer las revelaciones precedentes y de orar al respecto, el Anciano Crane recibió el siguiente testimonio, Esta sección también continúa la enseñanza sobre los dones del Espíritu comenzada en la revelación del 4 de abril (ver Sección 21). 1 La revelación dada individualmente a los miembros de la Presidencia Temporaria confirman mi aprobación sobre la organización de este quórum y también sobre mis Santos, quienes como Iglesia han recibido la Ley del Evangelio y por ello están preparados para recibir mayor luz y conocimiento. 2 Yo el Señor estoy bien complacido con la Iglesia, hablando colectiva y no individualmente porque se halla buscándome y buscando a mi Espíritu. ¿Y qué importa al mundo si yo escojo revelar todo mi conocimiento a mi Pequeño Rebaño, si ellos están preparados para recibirlo? 3 Porque hay algunos de mi Pequeño Rebaño que a su debido tiempo, y si perseveran con diligencia, vendrán a saber los misterios de la eternidad, aun llegarán a conocerlos en su plenitud. No os maravilléis, porque esta promesa fue dada a mi siervo Alma, en el Libro de Mormón. 4 “Y Alma empezó a explicarle estas cosas, diciendo: A muchos les es concedido

conocer los misterios de Dios; sin embargo, se les impone un mandamiento estricto de que no han de darlos a conocer sino de acuerdo con aquella porción de su palabra que él concede a los hijos de los hombres, conforme a la atención y la diligencia que le rinden. 5 Y, por tanto, el que endurece su corazón recibe la menor porción de la palabra; y al que no endurece su corazón le es dada la mayor parte de la palabra, hasta que le es concedido conocer los misterios de Dios al grado de conocerlos por completo.” (Alma 12:9-10) 6 Sabed, hijos míos que vuestra naturaleza fundamental es luz y verdad, sí, así ha sido, así es y así ha de ser. Mi Espíritu es también luz y verdad que todas las cosas ha buscado, que conoce todas las cosas, y que llena la inmensidad del espacio y mora en todas mis creaciones. 7 Esta sabiduría enseñé a mis Doce en los primeros tiempos de la Restauración. Leed esta entera Sección y el decimotercero



capítulo del testimonio de Juan en relación a mí: 8 “La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no la comprenden; no obstante, el día vendrá en que comprenderéis aun a Dios, siendo vivificados en él y por él. 9 Entonces sabréis que me habéis visto, que yo soy, y que soy la luz verdadera que en vosotros está, y que vosotros estáis en mí; de lo contrario no podríais abundar.” (D&C 88: 49-50) 10 Sabed que la verdad se allega a la verdad y que la luz se busca a sí misma y abandona al maligno. 11 Como enseñó mi siervo José: la Gloria de Dios es la inteligencia, en otras palabras luz y verdad. En cuanto la Luz y verdad se allegan a sí mismas, y así la Gloria de Dios se expande. El poder del Espíritu Santo es el poder que liga o sella verdad con verdad, luz con luz y espíritu con espíritu. O, en otras palabras: línea sobre línea, precepto sobre precepto y gracia sobre gracia. 12 Y ¿cuándo (o por qué proceso) somos ligados juntos? Donde sea que el Espíritu Santo ministre estos dones en cualquiera de sus manifestaciones. Esos que son llamados “dones del Espíritu”. En el evangelio preparatorio, somos ligados juntos cuando el Espíritu Santo da testimonio de la verdad por medio de palabras habladas o escritas bajo mi inspiración. 13 Como se estableció antes, nos hallamos unidos juntos, y el cielo se une a la tierra cuando realizáis cualquier acto de sacrificio

motivados por la caridad, basados en mis promesas, mirando hacia su cumplimiento. 14 En el Evangelio del Reino, nos hallamos unidos juntos por el Santo Espíritu de la Promesa, el cual ratifica las ordenanzas del Sacerdocio, y confiere poder en el Sacerdocio. 15 El poder de la divinidad se manifiesta en todas las ordenanzas del Santo Sacerdocio Según el Orden del Hijo de Dios, sí, aun las ordenanzas del Templo del Más Alto Dios. Porque esas ordenanzas enseñan como vencer al mundo y permanecer en la vida eterna. 16 Estas ordenanzas guían a los oficios en el Orden Patriarcal del Sacerdocio, o el Santo Orden de Dios. El Sacerdocio Patriarcal es un orden del Sacerdocio relacionado al establecimiento y continuación de relaciones o familias tanto en tiempo como en eternidad. Se halla inextricablemente conectado con el poder del Espíritu Santo, el Poder Sellador y el Santo Espíritu de la Promesa. 17 Este (es decir el Santo Espíritu de la Promesa) es el “clavo” que liga en última instancia a los Santos entre ellos, de acuerdo a su propia y libre voluntad y elección, entre ellos y a Dios y –aquellos que pueden- a Elohim. 18 Hay mucho para saber. Yo, el Padre os enseñaré por medio del Hijo, por este mismo Espíritu en la medida que entréis en mi Santa Casa y participéis de las ordenanzas y os unáis entre vosotros y a mí. Amén



SECCIÓN 23 El 7 de mayo de 1986, mientras se hallaba viendo la Conferencia General de la Iglesia S.U.D. en video casete, y estando en espíritu de ayuno y oración meditando acerca de varios temas pendientes que eran importantes para la Iglesia, el Presidente Antonio Feliz sintió la fuerte impresión de retirarse a su cuarto y buscar al Señor por las respuestas a las preguntas que pesaban sobre él. El Señor le dio muy específica y definitoria instrucción en la siguiente revelación. 1 Oíd ahora la palabra y la voluntad del Señor para la Presidencia Temporaria de mi Iglesia, sí, la IGLESIA DE JESUCRISTO

DE TODOS LOS SANTOS DE LOS ÚLTIMOS

DÍAS: 2 El tiempo ha llegado cuando aquello sagrado que habéis dedicado en el establecimiento de los cimientos del Santo Apostolado será ubicado en el centro de la sede de la Iglesia donde yo he puesto ese Santo Oficio. Sí, mi siervo Antonio habrá de tomarlo con él, y vendrá a mí solo; sí, aun a mi presencia y esperará en mí y yo le contestaré sus oraciones. 3 Además, es conveniente que no os demoréis en el asunto de establecer la Tesorería Sagrada; y que los diezmos y las ofrendas de mis Santos se institucionalicen financieramente; no seáis perezosos con las consagraciones de mi Pequeño Rebaño. Sí, el camino está abierto ahora para que obedezcáis y así ha estado por mucho tiempo; pero vosotros no habéis actuado con Fe. 4 Así dice el Señor a la Iglesia por palabra de Sabiduría y no por vía de mandamiento o constreñimiento: Sed prudentes en la gestión de vuestras mayordomías donde sea que hayáis sido bendecidos materialmente. Yo estoy bien complacido con algunos individualmente que así lo han hecho. 5 No obstante, no me hallo complacido con otros que han buscado ser como Ananías y Safira de la antigüedad. De cierto os digo habéis de recoger la cosecha,

sí y aquellos de entre vosotros que hayan mentido, no han mentido al hombre sino a Dios. 6 Es complaciente que cada uno de vosotros diezme de la manera en que mi Espíritu os lo ha impreso en vuestras propias mentes; sí, haced como se os ha enseñado mis hijos y mis hijas, y así no perderéis favor ante mi vista. 7 Es por un sabio propósito que ahora recordaréis depositar en el almacén de lo que consumís, y entonces consumir de lo que depositáis en el almacén. 8 Porque habéis sido instruidos en días pasados: Yo os digo que la Iglesia debe permanecer independiente de cualquier criatura que se halle por debajo del mundo celestial. 9 Mis hijos, aquí se encuentra vuestra salvación, tanto temporal como espiritual. Si alguno tomase de la abundancia que yo le de, y no diera su porción como lo establecen las revelaciones, será hallado entre los malvados, y estará en tormento en el postrer día. 10 De cierto, de cierto os digo a todos: Ponderad las palabras que os he dado en los pasados días por medio de revelación a fin de guiar a los santos a la salvación, sí, a todo aquel que pueda ser llamado Santo de los Últimos Días. Porque yo ya he hablado y lo que he dicho vosotros haréis. 11 Meditad sobre el Libro de Doctrina y Convenios en las Secciones 42, 56, 58 y



104; porque Sión no puede ser edificada ni siquiera dentro del corazón de dos, a menos que sea de acuerdo a los principios de la Ley del Reino Celestial. 12 Por lo tanto, que la obra de tomar el mensaje de la restauración de la plenitud de mi Santo Sacerdocio sea tomada por aquellos que han sido investidos con las bendiciones de mi Santa Casa entre las personas que han sido llamadas. Vuestras fieles labores lavarán vuestras vestiduras tal como se ha prometido. 13 También continuaréis la obra de vuestra santificación individual, continuaréis haciendo lo que corresponda de acuerdo a las instrucciones que os he dado desde el establecimiento de esta Iglesia; porque esto es para vosotros, los Santos de Dios, para ello se ha hecho a esta Iglesia existir.

14 No efectuaréis más ordenaciones ni apartaréis para más llamamientos en el Santo Sacerdocio hasta que Yo os lo diga; porque hay más. No obstante, esperaréis en mí por medio de aquel a quien he puesto como Presidente del Sumo Sacerdocio; sí, porque él es un vaso escogido para el Señor entre aquellos de esta porción de mí Reino. 15 Porque vosotros sois mi Iglesia, pero no sois todo mi Reino. No obstante, mi Reino será establecido entre vosotros. 16 Sed pacientes y permaneced en los llamamientos a los que habéis sido llamados y Yo os recompensaré a cada uno de acuerdo a su fidelidad para que recibáis gracia sobre gracia. Amén.



SECCIÓN 24

En la tarde del día 15 de mayo de 1986, mientras escudriñaba una revelación dada a Wilford Woodruff en Subset, Arizona en enero de 1880, el Presidente Antonio Feliz fue invadido con un “hermoso sentimiento de calidez y gozo puro” cuando, por casi dos horas y media, recibió una visión “… si fue en sueños o en vigilia, no lo sé”. Le fue permitido ver el futuro progreso de la obra de la Iglesia de Jesucristo de la Restauración y al terminar la visión el Señor le dio instrucciones específicas en la siguiente Revelación. 1 Escuchad la voz del Señor, sí, la voz de Jehová, el Cristo y la cabeza de esta Iglesia, que habla a la Presidencia Temporaria: Mis hijos, habéis escogido caminar de acuerdo al brazo de la carne en el establecimiento de ramas. Porque, como os fue mostrado el día de la visión, mi Espíritu no hablaba sino de los quórumes de mi Santo Sacerdocio. 2 No obstante habéis fundado esas ramas de acuerdo a las tradiciones de vuestros padres. Aun así, sabed que lo que estáis estableciendo es mi Reino y no meramente una iglesia, como otros suponen. 3 Nuevamente os digo: No depositéis vuestra confianza en el brazo de la carne, sino mejor confiad en mi Espíritu en lo que atañe a la obra de la Restauración. Oíd ahora la voz del Señor a mi siervo, si, porque él es mi portavoz a esta porción de mi Reino sobre la Tierra: 4 Prepararéis todo cuanto fuere necesario a fin de presentar los nombres de Robert McIntier, Michael Howard y David Swing si permanece fiel, a la Conferencia General de la Iglesia, para que la Iglesia pueda funcionar en su sacerdocio. 5 Prepararéis todo cuanto fuese necesario para que la Presidencia de la Iglesia pueda actuar como Presidencia del quórum de Sumos Sacerdotes de mi Iglesia; este quórum es ahora instituido en esta porción de mi Reino para la preparación de todos aquellos que son llamados a ella; para que puedan ser calificados para ejercer el oficio al cual Yo el Señor, vuestro Dios les he llamado.

6 Sí, el Presidente del Sumo Sacerdocio será el presidente de los Sumos Sacerdotes; porque así es ordenado desde toda eternidad; a fin de que pueda guiar, instruir y aconsejar a sus hermanos, sí, a todos los que posean este Sumo Sacerdocio, tan a menudo como las circunstancias así lo permitan. 7 Decid a los hermanos: Ésta es, sí, ésta es la preparación con las cual Yo os preparo: que el Reino de Dios pueda seguir adelante a fin de que el Reino de los Cielos pueda venir. 8 No obstante, no conferirás sobre nadie porción alguna del Poder Sellador que es el más sagrado; sí, porque nunca se halla más que en uno en la Iglesia en su plenitud al mismo tiempo, con todas las lleves de este Sacerdocio que es el Santo Orden de Dios. 9 De cierto, hijo mío habréis de cargar este peso en esta porción de mi Reino. ¿No dije acaso a mi siervo John Taylor que esto sería así? ¿No he hablado claramente en las revelaciones al respecto? 10 Sí, hijo mío, el día vendrá cuando los Doce tendrán -en esta porción de la Restauración- posesión de toda llave, derecho y autoridad en este sagrado poder, junto a ti, a fin de que puedan actuar como uno y por uno; sí, un quórum de santos ante mí; de otra manera no seréis mi Reino; el que tenga ojos para ver, deje que aquella vea y se regocije.



11 Porque, hijo mío, eres llamado con el llamado de Elías; sí, para ser mi mensajero a los Santos de los Últimos Días a fin de que puedan regresar a mí y para que ellos puedan alzar sus ojos desde los lugares de su expulsión, y puedan alcanzar al Más Alto Dios saliendo de las sombras de su culpa. 12 En este llamamiento eres llamado para hacer la obra de un salvador entre los desechado y perdidos; sí, eres llamado para liberar a los cautivos para que puedan romper las cadenas que les oprimen y así progresar hacia mi Santo Nombre. 13 Es el Reino de Dios lo que estáis edificando sobre la Tierra. ¿No hicisteis convenio de que esta sería vuestra consagración y mayordomía? 14 ¿No habéis sido dirigidos por mí para que los Santos de esta porción de la Restauración hicieran Convenios en lugares santos para que pudieran consagrarse al Santo Sacerdocio de Dios y no a la Iglesia? Porque vuestra obra no es solamente establecer una Iglesia. 15 Examinad también las revelaciones y mi Espíritu te dirigirá de modo que puedas preparar a mi siervo John Crane para que esté listo para que su nombre sea presentado en la conferencia anual de la Iglesia para ser ordenado al oficio del sacerdocio en el Orden Patriarcal como antes fue señalado para él. 16 De aquí en más, él –junto a ti- poseerá las llaves de las bendiciones patriarcales que serán dejadas sobre las cabezas de todo mi pueblo. Sí, quienquiera que bendigáis será bendecido, y a quien sea que maldigáis será maldito, dice el Señor. 17 Y lo prepararás como te he mostrado en la visión, y si no falla, el podrá pronunciar bendiciones sobre la cabeza de los Santos y por revelación declarar sus

linajes, de acuerdo a la Ley de Adopción que bendice de esta manera a esta porción de la Restauración. 18 Sabed que Yo estoy con vosotros y tendréis Fe suficiente para cumplir la tarea que tenéis delante; porque irás a aquel a quien has visto y declararás la palabra a él tal como Yo te la he dado. Mi hijo, próximo está la llegada del año desde que comencé a hablarte sin restricciones, en esto te hallas calificado dentro de tu llamamiento y elección. 19 Tus esfuerzos y tus palabras han llegado hasta mi presencia y son testimonio de tu sitial dentro de mi Casa, en la cual de cierto he preparado un lugar. No obstante, venid a mí. 20 De aquí en más continuarás predicando sin bolsa ni alforja; porque así fue con mi Apóstoles de los días pasados. Fortalece a tus hermanos; decidles: 21 Recordad que Sión nos se halla ni más lejos ni más cerca que la condición espiritual de mi pueblo pueda justificarlo; sí, sois llamados a la santidad. 22 Y la Santidad es unidad y amor empoderados por mi Santo Espíritu, sí, la santificación. 23 Ponderad estas cosas tal como se registran en las revelaciones para que el Reino de Dios pueda ser establecido entre vosotros, para que el Reino Celestial pueda venir. 24 Cuando hayáis hecho todas estas cosas, regresar a mi Santo Lugar nuevamente, y allí te daré más guía y dirección para el Reino de Dios sobre la Tierra en esta porción de la Restauración; el Reino se halla en vosotros. Amén.



SECCIÓN 25 El 6 de mayo de 1986, el Anciano Crane fue maravillado por la experiencia que los Santos compartieron durante su primera sesión de Ordenanzas Iniciatorias realizadas en la estructura temporaria que la Iglesia había construido con el propósito de efectuar las ordenanzas de la Casa del Señor. Le fue dado por el Espíritu gran regocijo en el corazón al ver que el Señor estaba cumpliendo sus promesas relativas a las ordenanzas del Templo y que los Santos estaban siendo grandemente bendecidos por ese intermedio. Fue en el Espíritu que recibió la bendición del siguiente testimonio y Revelación. 1 Yo digo a la Iglesia: He aquí el Tabernáculo que habéis preparado para mí. Sí, construido por mi mandato, usando el modelo mostrado a vosotros y construido con Fe, bajo gran sacrificio, teniendo espíritu de Caridad, mirando hacia delante con el ojo de la Esperanza de las bendiciones prometidas para ser obtenidas en él. Por ello, Yo el Señor recuerdo y acepto. 2 ¿No llenó mi Espíritu el Tabernáculo acaso? ¿Y no manifestaron muchos la presencia del Santo Espíritu? ¿Acaso no os ministraron mis ángeles durante vuestros lavamientos y unciones? ¿No se os ha bendecido con lazos de cercanía más fuertes entre vosotros? 3 Y este es solamente el principio de las bendiciones que recaerán sobre los Santos en la medida en que cumplan sus llamamientos y participen de las ordenanzas de mi Casa. 4 He aquí, Yo el Señor, enseño en todas las cosas; y este Tabernáculo es también modelo para mis Santos en los quórumes del Sacerdocio y en la Iglesia. 5 Recordad que un acto de sacrificio hecho con Fe, motivado por la Caridad y lleno de Esperanza ha de traer las bendiciones de los Cielos, aun los dones de mi Espíritu, los cuales ya habéis probado en vuestros servicios iniciales del Templo, y esos dones pueden elevaros a la

altura de las tareas a las cuales os he llamado, y las que os llamaré. 6 Y habiendo visto como mi Espíritu mejora y edifica el Tabernáculo (o edificio provisorio) hecho con elementos de esta Tierra, ¿cuanto más Yo el Señor, mejoraré y os edificaré a vosotros que sois mis Templos vivientes? 7 De cierto, aquellos que nombraré por la boca de mis dos testigos, son ambos llamados y elegidos para esta obra, y esto os maravillará, pero les digo: Yo he escogido a los débiles y simples de la Tierra para llevar a cabo mis propósitos, para que el mundo pueda saber que mi Obra es llevada a cabo por el poder de Dios y no del hombre. 8 Sí, vosotros mis escogidos sois débiles y simples en relación a las cosas de este mundo, pero os haré poderosos en las cosas del Espíritu. Si confiáis en mí, haréis gran obra en mi nombre como las que se hicieron durante mi ministerio terrenal y aun desde el principio del mundo. Sí, escudriñad las Escrituras, leed, orad, creed, buscad, y recibiréis. 9 Nuevamente, este es el día final. Os he enviado como trabajadores en mi viña por última vez, y hay muchos que escucharán mi voz y vendrán a mí. Pero, tenéis que llamarlos con mi voz y no con la vuestra, porque mis ovejas conocen mi voz y yo les conozco, y vendrán a mí.



10 Sí, mis testigos sois llamados para establecer la rectitud de Dios, aun el Reino de Dios sobre la Tierra, sí, mi Sión; no la rectitud del hombre, que trae discordia, deseos, maldiciones, e iniquidades de acuerdo a la carne. 11 Estableceréis mi rectitud, la cual viene como fruto del Santo Espíritu, porque de cierto mi obra se acortará en rectitud, no en la maldad. 12 Y es por la rectitud de Dios que esto es establecido, a fin de que el malvado sea sujetado. 13 Digo a aquellos que Yo escojo: buscadme temprano a fin de que me encontréis y no os debilitéis. Porque Yo el Señor ¿he prometido algo que no haya cumplido? ¿He llamado Yo el Señor, y no he contestado? 14 Todos vosotros seréis testigos de mi nombre. También seréis mis amigos, porque un amigo a diferencia de un siervo, conoce lo que su amo hace.

15 Y, de cierto os digo a vosotros así como dije a mis Apóstoles del pasado –y todo lo que haya dicho a los apóstoles en cualquier escritura es también para vosotros, porque hablo al oficio y no al hombre- ¿qué clase de hombres habéis de ser? Así como YO SOY. Porque las obras que me veis hacer, a su tiempo, vosotros también las haréis por mi mandato y con la dirección de mi Espíritu. 16 Ahora, mi siervo John, por quien recibes estas palabras no es bajo mandamiento o llamamiento, porque eso es potestad de mi siervo Antonio, pero Yo le mando que escriba esto como vía de exhortación y admonición y testimonio para ti, para que puedas saber que Yo estoy aquí, para que puedas encontrarme si me buscas, y puedas saber que mis palabras son verídicas y seguras mis promesas. Amén.

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