SEGURIDAD · 2012-01-10 · Verde Europea. Es el broche de oro de un proceso solida-rio en el que...
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Año 31 Nº 124 Cuarto trimestre 2011SEGURIDAD
Filtros protectores para soplete autógenol Estado muscular y capacidad de reacción l Bacterias resistentes a antibióticos en
medios acuáticos l La acción preventiva en las Administraciones Públicas
y Medio Ambiente
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3Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
Del 28 de noviembre al 9 de diciembre de
2011 se ha celebrado la decimoséptima con-
ferencia de las partes (COP17) de la Con-
vención de Naciones Unidas para el Cam-
bio Climático, en la ciudad de Durban (Su-
dáfrica).
Cada vez que finaliza una de las cumbres
sobre cambio climático queda una sensación
en la opinión pública. De la decepción en Co-
penhague a la esperanza en Cancún, y en es-
te caso, la incertidumbre en Durban.
Las negociaciones han sido duras y, de he-
cho, la cumbre finalizó con día y medio de
retraso sobre la fecha prevista, dado que no
se había alcanzado ningún acuerdo. Kioto
se prorrogó prácticamente en solitario por
la UE con la adhesión de algunos países,
mientras que Canadá ha abandonado el pro-
tocolo.
Finalmente se alcanzó un acuerdo para ini-
ciar un proceso de desarrollo de un proto-
colo, u otro instrumento acordado con fuer-
za legal bajo la Convención, aplicable a to-
das las partes, y que entre en vigor a partir de
2020. Ese acuerdo deberá estar listo en 2015.
El proceso queda abierto a discusión en el
seno de las Naciones Unidas hasta la próxi-
ma conferencia, que tendrá lugar en Doha
(Catar) del 26 de noviembre al 7 de diciem-
bre de 2012.
Dentro de las actividades de FUNDACIÓN
MAPFRE destinadas a mejorar la salud, re-
duciendo la contaminación ambiental y las
emisiones de gases de efecto invernadero,
hemos abordado en el último trimestre di-
versos eventos relacionados con el ahorro
energético y la movilidad sostenible.
En primer lugar, FUNDACIÓN MAPFRE ha
acogido las III Jornadas sobre Ciudad, Ener-
gías Renovables y Eficiencia Energética. Es-
tas jornadas tienen como principal objetivo
crear un foro de conocimiento, reflexión y
generación de propuestas y su posterior di-
fusión, para analizar oportunidades para la
generación de empleo y desarrollo dentro
del marco de las energías renovables y efi-
ciencia energética en las ciudades.
Otro de los eventos organizados por nues-
tra Fundación en este trimestre ha sido el Fo-
ro sobre el Vehículo Eléctrico e Industria Aso-
ciada, en el que se ha constatado la realidad
del coche eléctrico como un medio de trans-
porte cada vez más próximo a su uso gene-
ralizado.
El vehículo eléctrico es una oportunidad
energética pues se mejorará la eficiencia glo-
bal del sistema, disminuyendo a la vez nues-
tra dependencia energética del exterior; per-
mite reducir las emisiones de gases conta-
minantes y de ruido, y supone una oportunidad
tecnológica, al desarrollarse la industria au-
xiliar del automóvil, nuevos servicios y el im-
pulso a las redes eléctricas inteligentes. u
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTERevista de FUNDACIÓN MAPFRE
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Año 31 Nº 124 Cuarto trimestre 2011SEGURIDAD
Filtros protectores para soplete autógenol Estado muscular y capacidad de reacción l Bacterias resistentes a antibióticos en
medios acuáticos l La acción preventiva en las Administraciones Públicas
y Medio Ambiente
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COP17: Cumbre del cambio climático en Durban
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Editorial
Mesa presidencial y delegados en una de las sesio-nes de la COP17 celebrada en Durban (Sudáfrica).
FEDERACIÓN INTERNACIONAL DE LA PRENSA PERIODICA
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 20114
SUM
AR
IO SEGURIDADy Medio Ambiente
HIGIENE INDUSTRIAL
EEssttaaddoo mmuussccuullaarr yyccaappaacciiddaadd ddee rreeaacccciióónn24SISTEMA MOTOR. Análisis que investiga
cuál es la influencia del estado
muscular del individuo en la
respuesta motora rápida a una
solicitación externa.
FFiillttrrooss pprrootteeccttoorreess ppaarraassoopplleettee aauuttóóggeennoo10VISIBILIDAD Y PROTECCIÓN. Trabajo que
propone un nuevo modelo de filtro
protector para realizar trabajos de
soldadura oxiacetilénica que garantiza
la fotoseguridad retiniana y la
visibilidad del campo de trabajo.
ENTREVISTA
VViittoorriiaa--GGaasstteeiizz,, CCaappiittaall VVeerrddeeEEuurrooppeeaa ppaarraa 22001122 6CIUDAD SOSTENIBLE. Javier Maroto, alcalde
de Vitoria-Gasteiz, describe en esta
entrevista el camino que ha seguido la
capital vasca para obtener el premio
«European Green Capital 2012» y los
retos futuros que tiene ante sí.
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ERGONOMÍA
5Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
64 INSTITUTO DE PREVENCIÓN, SALUD Y MEDIO
AMBIENTE
Concesión de las ayudas a la investigación de laconvocatoria 2011.
XI edición del Encuentro Euroamericano «Riesgoy Trabajo».
FUNDACIÓN MAPFRE concede becas deformación a 50 profesionales iberoamericanos
en España.
VI Semana de Prevención deIncendios.
Foro sobre el VehículoEléctrico e Industria Asociada.
FUNDACIÓN MAPFRE, en elVIII Encuentro Iberoamericanode Medio Ambiente (EIMA8).
Guía «Conoce y valora el cambio climático».
Fallo de los premios anuales2011 de FUNDACIÓN MAPFRE.
Foro Mundial 21 sobre agua,energía y desarrollo sostenibleen Lisboa.
NOTICIAS
NORMATIVA
74 BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO. Selección delegislación publicada sobre seguridad laboral y medioambiente en España.
75 DIARIO OFICIAL DE LA COMUNIDAD. La normativasobre seguridad y medio ambiente en la ComunidadEuropea.
76 NORMAS EA, UNE, CEI EDITADAS. Normativa desectores profesionales.
78 CALENDARIO DE CONGRESOS Y SIMPOSIOS.
AGENDA
NORMATIVA Y LEGISLACIÓN
BBaacctteerriiaass rreessiisstteenntteess 32MEDIO AMBIENTE. Proyecto de
investigación sobre la fortaleza de las
bacterias resistentes a los antibióticos
en aguas residuales.
LLaa aacccciióónn pprreevveennttiivvaa eenn llaassAAddmmiinniissttrraacciioonneess PPúúbblliiccaass44
NORMATIVA. Informe sobre
la tutela jurídica de la
normativa preventiva
en materia de
seguridad y salud de
los empleados del
Estado.
MEDIO AMBIENTE
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 20116
Entrevista
Javier Maroto, alcalde de Vi-toria-Gasteiz, nos ha conce-dido una entrevista en vís-peras de la celebración, en2012, del título concedido aesta ciudad como CapitalVerde Europea. Es el brochede oro de un proceso solida-rio en el que han interveni-do, entre otros, los movi-mientos asociativos de laciudad, los grupos ecologis-tas y una clase política api-ñada en torno a un objetivo:avanzar hacia un sistemaurbano cada vez más soste-nible para hacer realidad la«ciudad verde del futuro».Vitoria-Gasteiz está en víasde conseguirlo.
Javier Maroto, alcalde de Vitoria-Gasteiz, «Green Capital» para 2012
«El impacto económico para
como Capital Verde Europea va a ser importantísimo»
VITORIA-GASTEIZ
Paseo de la Senda, un ejemplo de la coexistencia pacífica entre viandantes y ciclistas.
Vitoria-Gasteiz es la Capital Verde Eu-
ropea para 2012. ¿Cuáles son los ejes
básicos de las iniciativas a adoptar en
el marco de esa celebración?
—En Vitoria-Gasteiz afrontamos nues-
tro reinado verde como una oportuni-
dad única e histórica, para potenciar y
desarrollar el futuro de nuestra ciudad.
Bajo esta premisa, estamos trabajando
sobre un ambicioso programa basado
en 20 actuaciones concretas para 2012
y en 10 grandes planes estratégicos que
permitirán a Vitoria-Gasteiz seguir sien-
do puntera en medio ambiente duran-
te la próxima década.
Este completo programa como Euro-
pean Green Capital 2012 va a atraer la
organización de eventos a la ciudad, va
a fomentar la actividad comercial y hos-
telera y va a conseguir que miles de tu-
ristas de todo el mundo nos visiten y nos
conozcan. Y lo más importante: va a ge-
nerar empleo. Tenemos ante nosotros
una gran oportunidad para la creación
de puestos de trabajo.
¿En qué medida esas iniciativas serán
aprovechadas y redundarán en crite-
rios de sostenibilidad medioambiental
más allá del año 2012?
—La consecución de este galardón no
ha de suponer para Vitoria-Gasteiz el fi-
nal de un proceso. Precisamente, los 10
planes estratégicos están pensados pa-
ra más allá de 2012. Este decálogo de ac-
tuaciones va a permitir avanzar hacia un
sistema urbano más sostenible y hacer
realidad la ciudad verde del futuro.
Estos 10 planes están centrados en: pro-
tección y restauración de los recursos
naturales; prevención de inundaciones;
un nuevo anillo verde interior; movili-
dad y espacio público; mejora de la ges-
tión de residuos; reducción de la conta-
minación urbana; lucha contra el cam-
bio climático; mejora del ciclo del agua;
fomento de la cultura de la sostenibili-
dad en la sociedad y en la empresa, y re-
habilitación urbana.
Queremos convertir nuestra apuesta por
el VERDE, con mayúsculas, en la princi-
pal ventaja competitiva y el principal di-
ferencial de la ciudad. Una apuesta co-
mún de la ciudad y sus ciudadanos.
En su opinión, de entre las razones es-
grimidas por el jurado para la designa-
ción de Vitoria-Gasteiz como Capital
Verde Europea, ¿cuál es la más relevante,
la que más define a la ciudad como mo-
delo medioambiental a seguir?
—Primero, debemos recordar que con-
seguimos este premio gracias al trabajo
del equipo técnico del Ayuntamiento de
Vitoria-Gasteiz, que nos posicionó para
llegar hasta lo que hoy somos. También
7Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
«Va a atraer laorganización de eventos ala ciudad, a fomentar la
actividad comercial y hostelera y a conseguir
que miles de turistas de todo el mundo
nos visiten»
ferencia a otras urbes ya que la inmen-
sa mayoría de los municipios se ven re-
flejados en ciudades como la nuestra.
Tal vez lo más destacable en Vitoria-
Gasteiz sea el compromiso de la ciuda-
danía en materias como movilidad, con-
sumo de agua o reciclaje. ¿Cómo se lo-
gra ese compromiso, cómo se afianza
como seña de identidad social?
—No hemos llegado hasta aquí por ca-
sualidad. El premio European Green Ca-
pital 2012 es el resultado de más de 30
años de compromiso sostenible en nues-
tra ciudad. Se ha conseguido gracias a
las políticas medioambientales aplica-
das en estos años y gracias al compro-
miso de una ciudadanía que, con sus
buenas prácticas en materia de recicla-
je, movilidad o consumo de agua, se ha
convertido en ejemplo para Europa.
En Vitoria-Gasteiz lo verde es nuestra
marca de ciudad.
Está demostrado que las políticas me-
dioambientales son rentables, pero ha-
bría que cuantificar esa rentabilidad.
lo hemos logrado gracias al movimien-
to asociativo y vecinal de la ciudad, a los
grupos ecologistas, a los grupos políti-
cos de la actual Corporación Municipal,
así como de las anteriores, gracias a la
colaboración institucional y gracias a to-
dos y cada uno de los ciudadanos de Vi-
toria-Gasteiz. Es un premio de todos y
que, por tanto, se diseña para todos.
En Vitoria-Gasteiz la sensibilidad y el res-
peto hacia el medio ambiente ha sido
siempre una seña de identidad. En nues-
tra ciudad destaca el anillo verde, de más
de 640 hectáreas de superficie y que pre-
vé abarcar hasta 960, un Plan de Movi-
lidad Sostenible de éxito, una nueva red
de autobuses, tranvía, más de 100 kiló-
metros de carriles bici, una extensa red
de parques y paseos urbanos, una ges-
tión sostenible del agua y hábitos y po-
líticas de reciclaje muy instaurados, en-
tre otros muchos aspectos.
¿Qué distingue a Vitoria-Gasteiz de Es-
tocolmo y Hamburgo, ciudades que la
precedieron como capitales verdes eu-
ropeas, en el marco de la sostenibili-
dad?
—Estocolmo y Hamburgo son ciudades
grandes y muy conocidas. Vitoria-Gas-
teiz no tiene el nombre que tienen ellas,
pero por una razón de dimensión, bási-
camente. Sin embargo, y a pesar de ello,
hemos ganado este premio. El 80% de
los europeos vive en ciudades del tama-
ño de Vitoria-Gasteiz, de ahí que nues-
tro modelo sea exportable a otras ciu-
dades. Nuestra experiencia servirá de re-
¿Podría decir en qué medida han sido
y son rentables para Vitoria-Gasteiz?
—Debo decir que la mayor rentabilidad
a la que podíamos aspirar es haber sido
elegidos European Green Capital 2012.
El trabajo de todos estos años ha tenido
su fruto y ahora debemos seguir traba-
jando y disfrutar, con orgullo, de este
premio. Ser Green Capital 2012 es una
gran oportunidad de Vitoria-Gasteiz pa-
ra el futuro. Tenemos un gran reto por
delante.
En el marco temporal de la celebración
como Capital Verde, ¿se va a gastar más
o se va a invertir mejor?
—Con el título de European Green Ca-
pital 2012 vamos a poner a nuestra ciu-
dad en el mapa. Y el impacto económi-
co que este título nos va a reportar es im-
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 20118
Entrevista
«El decálogo deactuaciones para 2012 va a permitir avanzar
hacia un sistema urbanomás sostenible y hacer
realidad la ciudad verdedel futuro»
«En Vitoria-Gasteiz lasensibilidad y el respeto
hacia el medio ambiente ha sido siempre
una seña de identidad»
Vitoria desde el Humedal de Salburua, zona de cultivo recuperada como entorno de valor ecológico.
portantísimo. Con el programa green que
hemos preparado vamos a conseguir
atraer la organización de eventos a Vi-
toria-Gasteiz, a fomentar la actividad co-
mercial y hostelera y a conseguir que mi-
les de turistas de todo el mundo visiten
y conozcan nuestra ciudad. Según nues-
tras previsiones, terminaremos el año
2011 con un incremento de turistas de
entre al 7 y el 8%. Sólo durante el Con-
greso Nacional de Medio Ambiente (CO-
NAMA), celebrado en nuestra ciudad a
finales de noviembre, y con el que más
de 700 congresistas nos visitaron, Vito-
ria-Gasteiz alcanzó una ocupación ho-
telera del cien por cien.
El próximo 2012 la ciudad se va a llenar
de eventos y actos durante todo el año,
entre los que están previstos el Foro Ci-
vitas; el acto de elección de la próxima
European Green Capital 2014; el Con-
greso Internacional Ciudad Starlight; se-
manas temáticas de energía, movilidad
y prevención de residuos; encuentros
empresariales; la reunión de Fedenatur;
la IV Conferencia Española de Pasive-
hauss; el Congreso de Transporte Urba-
no o el Encuentro de Parques Tecnoló-
gicos de España, entre muchos otros.
El año green va a ser una oportunidad y
un reto para la ciudad.
El hecho de que Vitoria-Gasteiz sea una
ciudad relativamente pequeña y bien
dotada por la naturaleza, ¿desmerece
algo el éxito de su política?
—Al contrario. Pero la realidad es que la
historia de Vitoria-Gasteiz ha estado li-
gada, desde siempre, a lo verde. La capi-
tal alavesa ha estado, tradicionalmente,
contenida en su expansión gracias a una
planificación urbana realizada casi siem-
pre con mesura, en la que lo verde siem-
pre ha tenido un gran protagonismo. La
extensa red de parques y paseos urbanos
existente otorga a Vitoria-Gasteiz el hon-
roso reconocimiento de ser una de las
ciudades europeas con mayor superficie
de espacios verdes por habitante. La sen-
sibilidad y el respeto hacia el medio am-
biente ha sido una seña de identidad de
Vitoria-Gasteiz desde hace ya décadas.
¿En qué punto se encuentra el anun-
ciado objetivo de reducir las emisiones
de gases de efecto invernadero?
—El cambio climático es uno de los ma-
yores desafíos del siglo XXI. Queremos
conseguir, en el año 2020, reducir las
emisiones de gases precursores del efec-
to invernadero (GEI) y mitigar los efec-
tos del cambio climático mediante ac-
ciones de eficiencia y producción ener-
gética. Los objetivos a alcanzar son: reducir
las emisiones de C02 en 2020 en al me-
nos un 20% respecto a las emisiones del
municipio en 2006 y reducir las emisio-
nes de C02 en 2020 de los equipamien-
tos y servicios municipales en al menos
un 30% sobre las emisiones en 2006. u
9Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
El premio Capital Verde Europea fue
concebido por la Comisión Europea
como un galardón para promover y reco-
nocer los esfuerzos de las ciudades que
mejor se ocupan del medio ambiente y del
entorno vital de sus habitantes. La ciudad
que cada año ostenta la capitalidad ejerce
de modelo de actuación verde y comparte
sus prácticas con otras ciudades.
La idea se concebió en Tallin (Estonia),
donde 15 urbes europeas y la Asociación
Estonia de Ciudades firmaron un memo-
rando conjunto proponiendo la creación
del premio. En la actualidad, más de 40
grandes ciudades europeas, incluyendo
21 capitales, apoyan la iniciativa. El pre-
mio está abierto, además de a los 27 paí-
ses miembros de la Unión Europea, a los
países candidatos oficiales (Turquía, Mon-
tenegro, Macedonia, Croacia e Islandia),
así como a los países del Espacio Econó-
mico Europeo (Islandia, Noruega y Liech-
tenstein).
El premio, instaurado en 2010, es conce-
dido a una ciudad que:
z Tenga un recorrido consistente de con-
secución de estándares medioambien-
tales reconocidos.
z Esté comprometida con objetivos ambi-
ciosos para mejoras adicionales medio-
ambientales y el desarrollo sostenible.
z Pueda actuar como un modelo para ins-
pirar a otras ciudades y promover las me-
jores prácticas en otros municipios.
Las ciudades premiadas en los años 2010
y 2011 fueron Estocolmo y Hamburgo,
respectivamente. En 2013, y tras la capi-
talidad de Vitoria-Gasteiz, la ciudad fran-
cesa de Nantes ostentará el premio.
El premio Capital Verde Europea
«El 80% de los europeosvive en ciudades
del tamaño de Vitoria-Gasteiz, de ahí quenuestro modelo seaexportable a otras
ciudades»
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201110
Higiene industrial
SOPLETE AUTÓGENO
Protección de riesgos laboralesde trabajadores que utilizan
En el mundo laboral existen profesiones de especial riesgoen las que se realizan procesos de soldadura, que pueden de-teriorar la retina. Los gremios más afectados son los trabaja-dores de empresas automovilísticas, siderometalúrgicas, ins-taladores de aire acondicionado y calefacción. Aunque la nor-mativa vigente obliga a la empresa a proporcionar a susempleados los elementos protectores frente a la radiaciónnociva emitida por el soplete, no los suelen utilizar debido alexcesivo oscurecimiento de las lentes, ya que la falta de vi-sión origina accidentes laborales por quemaduras o errores.Por ello, prefieren soldar sin protección, lo que les hace pro-pensos a sufrir graves daños retinianos irreversibles, inclusoescotomas absolutos de importancia relevante.
Este trabajo propone nuevos filtros protectores que permi-tan, a la vez, la fotoprotección retiniana y la visibilidad delcampo de trabajo. Para ello se ha analizado el espectro deemisión del soplete y se han diseñado los filtros necesariospara absorber las bandas nocivas emitidas por éste, dandolugar a un prototipo. Posteriormente se han evaluado variosaspectos de la percepción visual con la interposición del nue-vo filtro propuesto por la Universidad Complutense de Ma-drid (UCM) y de otro filtro convencional para soldadura. Losresultados obtenidos muestran que el filtro UCM es una len-te de protección óptima para realizar trabajos de soldaduraoxiacetilénica, siendo propuesto como filtro de referencia alos organismos competentes para su homologación.
Por CRISTINA BONNIN-ARIAS, EVA CHAMORRO-GUTIÉRREZ, GUILLERMO RAMÍREZ-MERCADO, LUIS-LUCIO
LOBATO-RINCÓN, JUAN JOSÉ NAVARRO VALS Y CELIA SÁNCHEZ-RAMOS.
Para una mejor comprensión de
este trabajo es preciso recordar
algunos conceptos relaciona-
dos con la luz y otras radiaciones. Se de-
nomina espectro electromagnético a la
distribución energética del conjunto de
las ondas que se extienden desde la ra-
diación de menor longitud de onda, co-
mo los rayos gamma y los rayos X, pa-
sando por la luz ultravioleta, la luz visi-
ble y los rayos infrarrojos, hasta las on-
das electromagnéticas de mayor longi-
tud de onda, como son las ondas de radio.
Concretamente, se denomina luz visi-
ble a la región del espectro electromag-
nético que el ojo humano es capaz de
percibir y que corresponde a un rango
de longitudes de onda que va desde
380nm (longitud de onda corta) a 780nm
(longitud de onda larga). Cercano al ex-
tremo de 380 nm se encuentran las ra-
diaciones ultravioleta y próximos a los
780nm están las radiaciones infrarrojas
(figura 1).
11Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
lanosomas del epitelio pigmentario, que
genera ondas de choque. Éstas causan
un daño irreparable a los fotorrecepto-
res y al epitelio pigmentario, denomi-
nado daño fotomecánico.
El efecto nocivo en el tejido puede re-
sultar de unas fuerzas mecánicas com-
presoras o tensoras, que conducen a la
formación de burbujas que son letales
tanto para el epitelio pigmentario como
para otras células. El efecto es causado
por altas irradiaciones (en el rango me-
La energía electromagnética de una
onda con determinada longitud de on-
da λ (en el vacío) tiene una frecuencia
asociada y una energía de fotón. Por lo
tanto, las ondas electromagnéticas de
alta frecuencia tienen una longitud de
onda corta y mucha energía, mientras
que las ondas de baja frecuencia tienen
longitudes de onda larga y poca energía
(figuras 2 y 3).
Ya en 1966 Noell demostró que la luz
ultravioleta y azul (longitudes de onda
corta del espectro visible) afectan nega-
tivamente a los ojos (retina) debido a
que, como se explicó en el párrafo ante-
rior, estas radiaciones poseen mayor
energía que las de mayor longitud de on-
da. Así, clásicamente se han diferencia-
do tres tipos de lesiones producidas por
la luz: las fotomecánicas (efectos de cho-
que de las ondas luminosas), las foto-
térmicas (calor local producido por las
ondas) y las fotoquímicas (cambios en
las macromoléculas). Actualmente se
conocen con bastante precisión los cam-
bios en la retina inducidos por la luz
(Wenzel, 2005; Wu, 2006). Por tanto, de
todo lo anterior se deduce que la luz, si
bien es necesaria para la visión, puede
dañar partes del sistema visual al ser ab-
sorbida por sus tejidos. La porción de
energía absorbida en cualquier tejido
depende de la transparencia de éste pa-
ra radiación incidente y es un factor im-
portante a la hora de determinar el tipo
de efectos fotobiológicos que produce.
La acción mecánica subyace básicamente
del impacto rápido de energía en los me-
gawatios/cm2) y cortos periodos de ex-
posición (en el rango nanosegundos a
picosegundos) durante los cuales la ener-
gía es absorbida tan rápidamente por los
gránulos de melanina en el epitelio pig-
mentario que la dispersión de calor no
puede tener lugar.
Por otro lado, conviene definir el da-
ño fototérmico. Un quantum de ener-
gía radiante (un fotón) puede ser ab-
sorbido por una molécula solo si la ener-
gía del fotón equipara a la diferencia de
energía entre el nivel de energía normal
de una molécula y el máximo nivel de
energía permitido. Los estados rota-
cionales y vibracionales de los quan-
tum de las moléculas predominan so-
bre los estados de excitación por las lon-
gitudes de onda más largas en el espectro
«visible» y en el infrarrojo cercano (700-
1400nm). La vibración de energía ga-
nada por la molécula es rápidamente
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201112
Higiene industrial
Figura 1. Esquema de las radiaciones electromagnéticas, diferenciando en los distintos
tipos de espectros según la longitud de onda.
Mayor Longitud de onda
Menor energía
Menor Longitud de onda
Mayor energía
Longitud de onda
Amplitud
Figura 2. Esquema que diferencia gráficamente radiaciones con longitudes de onda
larga y corta, respectivamente.
10-5
INFRARROJO VISIBLE ULTRAVIOLETA
0,5X10-5 10-8
Figura 3. Diagrama de longitudes de onda de tres tipos de radiaciones.
disipada mediante colisiones con otras
moléculas, aumentando de forma mo-
mentánea el nivel local de la misma
energía cinética, un proceso que es vis-
to como un aumento de la temperatu-
ra. Las lesiones térmicas no son produ-
cidas por el incremento de energía ci-
nética hasta que la irradiancia de la
radiación es suficientemente alta como
para aumentar la temperatura en, al
menos, 10ºC por encima del nivel am-
biental de la retina. Consecuentemen-
te, la reacción térmica depende de los
umbrales de irradiancia. El daño tér-
mico es mucho mayor en el centro de
la lesión, donde el aumento de la tem-
peratura es mucho más elevado.
Por último, es importante reseñar que
el riesgo del daño fotoquímico, como
una forma diferente de interacción en-
tre la energía radiante y las moléculas
biológicas, tiene lugar cuando la radia-
ción incidente tiene una longitud de on-
da en la porción de alta energía del es-
pectro «visible»: daño fotoquímico. Un
electrón en estado excitado puede vol-
ver al estado inhibido disipando la ener-
gía extra, rompiendo una unión en otra
molécula mediante un intercambio di-
recto de electrones o un intercambio
directo de hidrógeno, produciendo es-
pecies reactivas de oxígeno. El proceso
también puede ocasionar otros radica-
les libres, importantes en la producción
de tejido dañado (Margrain et al., 2004).
Ningún daño agudo tiene lugar por de-
bajo de un cierto umbral de nivel de irra-
diancia.
Por otro lado, y ya adentrándonos en
el tema específico de este artículo, pa-
saremos a hablar de «la soldadura». La
American Welding Society (AWS) defi-
ne la soldadura como una coalescencia
localizada de metales (o termoplásticos),
producida mediante el calentamiento
de los mismos a las temperaturas de sol-
dadura requeridas, con o sin aplicación
de presión, o mediante la aplicación de
únicamente presión y con o sin el uso de
material de aportación. En lenguaje me-
nos técnico, una soldadura se produce
cuando las piezas separadas de metal
que se van a unir se combinan y forman
una sola pieza al ser calentadas a una
temperatura lo suficientemente alta co-
mo para causar la fusión (Jeffus, 2009).
Se pueden distinguir dos tipos básicos
de soldadura, la heterogénea y la ho-
mogénea, según sea el metal de aporta-
ción distinto o igual a los que se preten-
de unir; siguiendo el criterio del tipo de
energía aportado para la unión, se dife-
rencian los soldeos por calor, por pre-
sión o por la conjunción de ambos, pa-
ra lo cual se utilizan distintos dispositi-
vos de soldadura. Este trabajo se centra
específicamente en el soplete oxiaceti-
lénico para soldadura a gas. (figura 4)
La soldadura a gas genera calor cuan-
do arde una mezcla de oxígeno con un
determinado gas, frecuentemente ace-
tileno (C2H2), en la boquilla de la tobe-
ra de un mechero de soldar. El calor apor-
tado en este tipo de soldadura se debe a
la reacción de combustión, que resulta
ser fuertemente exotérmica, pues se al-
canzan temperaturas del orden de los
3500º C. (Molera Solá, 1992). Por otro la-
do, existen otros tipos de dispositivos de
soldadura, como el de arco eléctrico o el
de arco de plasma; este último genera
una gama de alta temperatura de 10.000
a 30.000º C. Esta emisión de energía pue-
de resultar más dañina para el cuerpo
humano y causar más complicaciones
oculares que las técnicas convenciona-
les de soldadura por arco eléctrico (Choi
et al., 2006) (figuras 5a y 5b).
Filtros protectores para sopletes
13Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
Procesos de Soldadura
Heterogénea
SoldaduraBlanda
SoldaduraFuerte
Homogénea
Por fusiónPor presión Por presión y fusión
En frío Soplete Aluminotérmica
ResistenciaArco eléctricoEn caliente
SopleteAluminotérmica
Figura 4. Esquema de clasificación de los diferentes tipos de soldadura.
según el instituto nacional de estadística, en el año 2004 trabajaban en españa 1.200.000
personas en los sectores más expuestos a lossopletes de soldadura
gitudes de onda corta del espectro visi-
ble e infrarrojas) que, por la energía que
transmiten, pueden producir daños ocu-
lares (Choi et al., 2006). Las radiaciones
ultravioleta B (UVB) y ultravioleta C (UVC)
pueden producir fotoqueratitis y foto-
conjuntivitis, que se caracterizan por un
dolor intenso, lagrimeo, sensación de
arena en los ojos, fotofobia, etc. Estos
efectos son agudos pero reversibles. La
luz o radiación visible puede producir
lesiones térmicas y/o fotoquímicas en
la retina, con pérdida de visión total o
parcial (efectos agudos que pueden ser
irreversibles). La exposición repetida a
radiaciones infrarrojas (IR) puede pro-
ducir cataratas de origen térmico, por
las altas temperaturas (efectos crónicos
e irreversibles). El número de personas
expuestas, durante muchas horas al día,
Ahora bien, teniendo en cuenta lo des-
crito en los párrafos anteriores y dentro
del marco de los riesgos laborales, de-
bemos destacar que existen profesiones,
como los soldadores, que se encuentran
especialmente expuestas a sufrir daños
fototóxicos por la coincidencia de fac-
tores fototérmicos, fotomecánicos y fo-
toquímicos. En general, las personas ex-
puestas a la fototoxicidad de la luz de-
sarrollarán una incapacidad laboral, en
un 90% absoluta, con el grave perjuicio
que este hecho conlleva para su perso-
na y para el resto de la sociedad. En con-
creto, este tipo de patologías son irre-
versibles, siendo las más frecuentes el
desprendimiento de retina, los agujeros
maculares y la fotofobia.
Esto ocurre porque la llama de alta
temperatura que se irradia durante la
soldadura emite una amplia serie de on-
das electromagnéticas (ultravioleta, lon-
a la luz dañina emitida por los sopletes
de soldadura es muy elevado, ya que en-
tre las profesiones más afectadas sobre-
salen, precisamente por el tiempo de ex-
posición, los obreros de la construc-
ción y de las empresas siderometalúrgicas,
así como los instaladores de aire acon-
dicionado y calefacción. Según el Insti-
tuto Nacional de Estadística (INE), el nú-
mero de personas que trabajaba en es-
te sector en España en el año 2004 era de
1.200.000 (MCA-UGT).
La normativa vigente obliga a la em-
presa a proporcionar los elementos pro-
tectores frente a la radiación violeta-
azul para el trabajo con sopletes. Si bien
las gafas y las pantallas de protección
se encuentran a disposición de los tra-
bajadores, en su mayoría no son utili-
zadas. El motivo principal de su falta de
uso es el excesivo grado de oscureci-
miento de las lentes que incorporan los
filtros protectores convencionales, los
cuales absorben no solo las bandas no-
civas, sino también el 99% de todo el es-
pectro visible. Es importante destacar
este hecho porque ayuda a entender las
manifestaciones de los trabajadores que
se quejan de que con las gafas protec-
toras convencionales su visión es casi
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201114
Higiene industrial
Figura 5a. Llama de luz emitida por un soplete. Puede apreciarse el color azul de la llama, lo que
indica la emisión de grandes proporciones de longitudes de onda corta (muy energéticas y
dañinas para el tejido).
Figura 6. Diferencia de imagen al observar la escena con el filtro para soldadores propuesto en este
trabajo (imagen izquierda) y con el filtro para soldadores tradicional (imagen derecha).
Figura 5b. Trabajador metalúrgico realizando
soldadura.
nula, lo cual aumenta exponencialmente
el riesgo de quemaduras (Kim, 2007).
(figura 6). En la gráfica correspondien-
te se observan las curvas de absorción
de dos filtros de soldadura convencio-
nales, de los cuales el de menor absor-
bancia transmite el 1% del espectro vi-
sible (figura 7).
Por tanto, en este trabajo se planteó
como objetivo diseñar un nuevo filtro
para soldadores que proporcione el mis-
mo nivel de protección que un filtro con-
vencional para soldadores pero que per-
mita, a su vez, una buena percepción vi-
sual del área de trabajo.
MATERIAL Y MÉTODO
Para este trabajo se evaluó a 36 perso-
nas de ambos sexos, 22 hombres y 14 mu-
jeres, en edad laboral. La media de edad
de la muestra fue de 44±14 años. Las me-
didas de absorbancia se realizaron con
dos espectrómetros distintos: el Spectra-
pro-750 (SOPRA), para medir el espectro
de emisión de la llama del soplete oxia-
cetilénico, y el Humphey Lens Analyzer
350 (Zeiss Humphrey Systems), para la
caracterización de los filtros. Además se
utilizaron distintos tipos de filtros ópti-
cos: en primer lugar, para el diseño del
nuevo filtro protector UCM, se usaron fil-
tros de absorbancia selectiva para longi-
tudes de onda comprendidas entre 380 y
500nm con el fin de determinar la absor-
bancia requerida por el nuevo dispositi-
vo protector frente a la emisión del soplete
oxiacetilénico. Posteriormente, para la va-
loración de los diferentes aspectos de la
función visual, se usaron el filtro de nue-
vo diseño y un filtro protector conven-
cional, homologado, que se encuentra a
disposición de los soldadores. (figura 8)
Se consideró conveniente evaluar la
agudeza visual, la sensibilidad al con-
traste, la discriminación del color y la es-
tereoagudeza. Para la valoración de es-
tos aspectos de la función visual se utili-
zaron tests habitualmente empleados
para realizar estas evaluaciones según
las indicaciones del fabricante y en vi-
sión próxima y en condiciones de ilumi-
nación fotópica. Concretamente, para
valorar la agudeza visual se empleó el test
Traditional Runge Pocket Near Vision
Card (Precision Vision, USA) (figura 9);
para evaluar la sensibilidad al contraste
se utilizó el test VCTS (Vistech Consul-
Filtros protectores para sopletes
15Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
100
90
80
60
50
40
30
30
20
10
0 100 350 400 450 500 550 600 650 700
Tra
ns
mit
an
cia
(%
)
Longitud de onda (nm)
Figura 7. Curvas de absorción de filtros convencionales para soldadura. Se exponen en este gráfico
el de mayor absorbancia (línea roja) y el de menor absorbancia (línea negra).
100
90
80
60
50
40
30
30
20
10
0 100 350 400 450 500 550 600 650 700
Tra
ns
mit
an
cia
(%
)
Longitud de onda (nm)
Filtro propuesto UCM
Filtro Convencional
Figura 8. Curvas de absorción espectral de los filtros utilizados en el trabajo. Línea negra: filtro
convencional. Línea verde: filtro propuesto UCM.
Figura 9. Test de agudeza visual próxima.
Plus 5.0 Professional Edition para reali-
zar una estadística comparativa desti-
nada a evaluar los efectos de los filtros
interpuestos en las diferentes medidas
de función visual. Todas las compara-
ciones fueron realizadas asumiendo un
error de alfa de 0.05.
tans, INC, 1988, Stereo Optical Company)
(figura 10); la discriminación del color
fue evaluada mediante el test Farnsworth-
Munsell D-28 HUE (figura 11), y, final-
mente, para valorar la estereoagudeza se
utilizó el test de Titmus (figura12).
Todas las valoraciones fueron realiza-
das de forma binocular. Los sujetos fue-
ron examinados en las condiciones ha-
bituales de trabajo, es decir, con la gra-
duación óptica que utilizaran para realizar
trabajos en visión próxima, con inde-
pendencia de que dicha graduación fue-
ra o no la óptima. Cada uno de los pará-
metros de función visual se evaluó bajo
tres condiciones: 1) sin la interposición
de filtros de protección, 2) con la inter-
posición de un filtro protector conven-
cional para soldadores, y 3) con la inter-
posición del filtro de protección pro-
puesto por la Universidad Complutense
de Madrid (UCM). El orden de las prue-
bas y la interposición o no de los filtros
se realizó de forma aleatoria.
Se utilizó el programa Statgraphics
RESULTADOS
Medidas del espectro deemisión de soplete, sin y coninterposición de filtro X-450
Realizadas las medidas del soplete
oxiacetilénico, se exponen a continua-
ción 3 registros de la emisión de dicho
soplete, en el rango de longitudes de
onda de 380nm a 750nm. Como puede
observarse en la figura 13a, la emisión
del soplete es relativamente estable aun-
que existen diferencias entre las tres
curvas presentadas (figura13a).
En la gráfica 13b puede observarse el
espectro de emisión de la llama oxiace-
tilénica, sin interposición de filtro (línea
roja), y la emisión del mismo soplete, pe-
ro con la interposición del filtro X-450
(línea verde). En la medida realizada con
filtro X-450 se puede observar que, para
las longitudes de onda corta compren-
didas entre 400 y 450 nm, se obtiene trans-
mitancia 0 (en unidades relativas), pero
permite el paso de las demás longitudes
de onda (del espectro visible), por lo que
posibilita la visión del campo de traba-
jo (figura 13b).
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201116
Higiene industrial
Figura 10. Test VCTS, para sensibilidad al
contraste de cerca.
Figura 11. Test Farnsworth-Munsell D-28,
para evaluar la percepción del color.
Figura 12. Test de Titmus
1500
1000
500
0 400 450 500 550 600 650 700 750
U.R
.
Longitud de onda (nm)
Soplete 1
Soplete 2
Soplete 4
Figura 13a. Curvas de emisión del soplete oxiacetilénico en el rango de longitudes de onda de
380nm a 750nm, sin filtros, medido tres veces (después de apagarlo y volver a encenderlo).
Resultados descriptivos ycomparativos de la agudezavisual
Tras interponer los diferentes filtros
de protección, observamos que el filtro
propuesto UCM no inducía cambios sig-
nificativos en los valores de agudeza vi-
sual próxima (tabla 1 y figura 14). Sin em-
bargo, con el filtro protector convencio-
nal sí se observó una importante
disminución en los valores de agudeza
visual próxima (tabla 2 y figura 14).
Resultados descriptivos ycomparativos de laestereoagudeza
No se observaron diferencias estadísti-
camente significativas en los valores de
estereopsis tras interponer el filtro pro-
puesto UCM al comparar con los valores
obtenidos de estereoagudeza sin filtro. Sin
embargo, al comparar la capacidad de per-
cibir la profundidad sin filtro y con el fil-
tro convencional, los resultados mostra-
ron baja capacidad de discriminación de
profundidad, con diferencias estadística-
mente significativas (tabla 3 y figura 15).
Resultados descriptivos ycomparativos de ladiscriminación del color
Para la determinación de este aspecto
de la función visual se ha utilizado el nú-
mero de errores de orden en la disposi-
Filtros protectores para sopletes
17Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
700
600
500
400
300
200
100
0 400 450 500 550 600 650 700 750
U.R
.
Longitud de onda (nm)
Emisión soplete
Soplete + 6 fi ltros
Figura 13b. Curvas de emisión del soplete autógeno (línea roja) y del mismo soplete oxiacetilénico pero
con la interposición del filtro óptico de absorción de longitudes de onda fototóxicas (línea verde). Para
esta gráfica comparativa se ha utilizado el registro denominado «soplete 2», de la figura 14 a.
1,4
1,2
1,0
0,8
0,6
0,4
0,2
0,0Ag
ud
ez
a v
isu
al
(es
ca
la d
ec
ima
l)
*
SF UCM Convencional
Figura 14. Valores de agudeza visual próxima
con/sin la interposición de filtros
protectores para soldadura: Sin filtro (SF) vs
Filtro convencional vs filtro propuesto UCM,
en escala decimal.
1000
800
600
400
200
0Dis
pa
rid
ad
bin
oc
ula
r (
se
g d
e a
rco
)
*
SF UCM Convencional
Figura 15. Valores de estereoagudeza sin
filtro (SF), con filtro UCM y con filtro
convencional. Los valores obtenidos con el
filtro UCM son muy similares a los
obtenidos sin interposición de filtro. En
cambio, con el filtro convencional aumenta
la disparidad binocular lo que se traduce en
una disminución de la estereoagudeza.
AV Sin filtro Filtro UCM Diferencias p-valor
Escala decimal 0,88 ± 0,35 0,82 ± 0,34 0,06 ± 0,13 0,999
Tabla 1. Valores de agudeza visual próxima, con/sin la interposición del filtro protector propuesto
UCM, expresada en escala decimal.
AV Sin filtro Filtro Diferencias p-valorconvencional
Escala decimal 0,88 ± 0,35 0,37 ± 0,22 0,5 ± 0,3 0,000
Tabla 2. Valores de agudeza visual próxima con/sin la interposición del filtro protector convencional,
expresada en escala decimal.
el daño retiniano porexposición a la
radiación emitida porun soplete de soldadura
es, a la vez, agudo ycrónico, ya que la
exposición a «luz intensade forma aguda» se
realiza a lo largo detoda la vida laboral del
trabajador
nificativas. Para una mejor visualización
de los resultados se han transformado
los datos en porcentaje de errores, que
se expresa en la figura 16 y en la tabla 5.
Como se puede comprobar en la co-
lumna relativa a las diferencias, el por-
centaje de errores con la interposición del
filtro tradicional es muy elevado, en tor-
no al 43%. Sin embargo, con el filtro pro-
puesto UCM, la pérdida de discrimina-
ción del color es solo del 5%. Una de las
características a reseñar en este aparta-
do es la necesidad de una explicación ex-
haustiva de la metodología para la reali-
zación correcta de la prueba. Se quiere
aclarar que siempre se realizó en primer
lugar la valoración sin filtro, como fase de
aprendizaje; en cambio, las dos pruebas
posteriores con la interposición del filtro
fueron realizadas en orden aleatorio.
Resultados descriptivos ycomparativos de lasensibilidad al contraste
Tras interponer el filtro propuesto
UCM se observó una diminución esta-
ción del test FM. Como puede compro-
barse en la tabla 4, la interposición de los
dos filtros reduce la discriminación del
color. Al compararse estos valores con
los obtenidos en la valoración sin filtro
las diferencias son estadísticamente sig-
dísticamente significativa de los valores
de sensibilidad al contraste en visión
próxima para las frecuencias espaciales
6cpg y 18cpg. Por otro lado, al interpo-
ner el filtro protector convencional, se
observó una mayor pérdida de los valo-
res de sensibilidad al contraste en visión
próxima para todas las frecuencias es-
paciales. Las diferencias entre el filtro
UCM y el filtro convencional fueron sig-
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201118
Higiene industrial
Nº Errores Sin filtro Filtro Diferencias p-valor
Filtro UCM 5 ± 4 6 ± 4 1 ± 3 0,006 *
Filtro Convencional 5 ± 4 17 ± 3 12 ± 5 0 *
Tabla 4. Número de errores obtenidos con el test Farnsworth-Munsell, con/sin la interposición de
filtros protectores para soldadura: filtro convencional vs filtro propuesto UCM.
Sin filtro Filtro Diferencias p-valor(“ de arco) (“ de arco) (“ de arco)
Filtro UCM 97 ± 95 89 ± 78 8,5 ± 40 0.999
Filtro Convencional 97 ± 95 279 ± 531 -184 ± 470 0.000
Tabla 3. Valores de disparidad binocular con/sin la interposición de filtros protectores para
soldadura: filtro convencional vs filtro propuesto UCM.
% Errores Sin filtro Filtro Diferencias
Filtro UCM 18 24 5
Filtro Convencional 18 61 43
Tabla 5. Porcentaje de errores obtenidos con el test Farnsworth-Munsell, con/sin la interposición de
filtros protectores para soldadura: filtro convencional vs filtro propuesto UCM.
80
60
40
20
0
Vis
ión
de
l co
lor (
% f
all
os
)
*
*
SF UCM Convencional
Figura 16. Porcentaje de fallos en el test de
visión de color con/sin la interposición de
filtros protectores para soldadura: sin filtro
(SF) vs filtro convencional vs filtro
propuesto UCM.
nificativas para las frecuencias espa-
ciales (tabla 6).
Al comparar los valores obtenidos por
el filtro UCM y el filtro protector con-
vencional se observan diferencias signi-
ficativas en todas las frecuencias espa-
ciales. Los valores del filtro UCM son sen-
siblemente más próximos a los obtenidos
sin filtro que los obtenidos con el filtro
convencional (figura 17).
DISCUSIÓN
El daño fotoquímico retinal fue des-
cubierto en 1965 por Noell, quien evi-
denció accidentalmente que las retinas
de las ratas albinas podían ser dañadas,
de forma irreversible, mediante exposi-
ciones de varias horas o días a luz am-
biental, dentro del rango de intensidad
de la luz natural. Este mismo daño tam-
bién se produce en ratas pigmentadas
cuando las pupilas son dilatadas. Otros
trabajos, como el de Wu et al., de 2006,
demuestran que el daño fotoquímico re-
tiniano ocurre con diferentes tipos de
morfología en diferentes animales.
Con el fin de analizar los efectos foto-
tóxicos de la luz en la retina se han uti-
lizado a menudo animales a los que se
expone a luz intensa de forma aguda.
Estos estudios han documentado que la
luz es capaz, en determinadas circuns-
tancias, de producir la muerte de los fo-
torreceptores y de las células del epite-
lio pigmentario por apoptosis y por un
mecanismo en el que está implicada la
rodopsina (Reme et al., 2005; Wenze et
al., 2005). Por otro lado, la exposición a
luz permanente (Noell et al., 1966; Law-
Filtros protectores para sopletes
19Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
Frecuencia p-valor p-valor p-valorespacial Sin filtro vs filtro Sin filtro vs filtro Filtro UCM vs filtro
UCM convencional convencional
1,5cpg 0,999 0,000 * 0,000 *
3cpg 0,417 0,000 * 0,000 *
6cpg 0,028 * 0,000 * 0,000 *
12cpg 0,316 0,000 * 0,000 *
18cpg 0,022 * 0,000 * 0,000 *
Tabla 6. Significancia estadística de la comparativa de los valores de sensibilidad al contraste en
visión próxima con/sin la interposición del filtro protector propuesto UCM y convencional.
100,00
10,00
1,00
0,10 1.5 3 6 12 18
Se
ns
ibil
ida
d a
l co
ntr
as
te
Frecuencia espacial (ciclos/grado)
Sin fi ltro
Filtro UCM
Filtro Convencional
Figura 17. Valores de sensibilidad al contraste en visión próxima con/sin la interposición de filtros
protectores para soldadura: sin filtro vs filtro convencional vs filtro propuesto UCM. *Significancia
p<0,05 entre los valores de SC sin filtro vs filtro analizado.
forma aguda causa un daño térmico,
mientras que la exposición a luz no tan
intensa pero de forma crónica produce
daño fotoquímico (Margrain et al., 2004).
El daño retiniano por exposición a la ra-
diación emitida por un soplete de sol-
dadura es, a la vez, agudo y crónico, ya
que la exposición a «luz intensa de for-
ma aguda» se realiza a lo largo de toda
la vida laboral del trabajador. Por este
motivo, se ha iniciado esta discusión con
la exposición de los trabajos más rele-
vantes en el estudio de los procesos neu-
rodegenerativos producidos por la luz.
En la segunda parte de esta discusión se
comentan algunas características del da-
ño retiniano por la radiación emitida por
los dispositivos para soldar.
Así pues, las primeras referencias re-
lativas a la lesión retiniana inducida por
soldadura figuran en trabajos realizados
por Terrien en 1902 (Choi et al., 2006).
En la bibliografía encontrada se expre-
sa que «(...) todos los procesos de solda-
dura implican los riesgos potenciales
que puede conducir a diversos daños y
patologías oculares» (Arend, 1996; Ten-
kate et al., 1997; Okuno, 2001; Kim et al.,
2007; Peng et al., 2007; Okuno, 2010). Se
ha indicado que el 38,3% de los acci-
dentes laborales en la construcción co-
rresponden a soldadura, demolición con
martillos y pulverizaciones (Woo, 2006).
El elevado porcentaje de soldadores afec-
tados se debe a que esta actividad cau-
sa daños y quemaduras en la piel y a que
los humos producidos al soldar causan
el deterioro de la función pulmonar, co-
mo, por ejemplo, disnea, rinitis, asma,
neumonía, cáncer de los pulmones, en-
tre otros (Meo et al., 2003). Pero los da-
ños producidos por la soldadura inclu-
will, 1973; Tso, 1973; Tso y Woodford,
1983; Dureau et al., 1999) produce un
adelgazamiento de la capa nuclear ex-
terna, indicativo de la disminución de
los receptores. El mecanismo exacto por
el que se producen estos cambios no se
conoce, aunque es probable que la le-
sión inicial se localice en los segmentos
externos de los fotorreceptores (Orga-
nisciak et al., 1994).
En resumen, según la revisión biblio-
gráfica de Wu, los factores que refuer-
zan la susceptibilidad del daño por luz
identificados hasta ahora en estudios
animales son: la longitud de onda (Grimm
et al., 2000 ); la intensidad de luz y dura-
ción de la exposición (O’Steen et al., 1979);
los efectos acumulativos de la luz (No-
ell, 1966; Organisciak et al., 2010); el rit-
mo circadiano (Duncan, 2002; Organis-
ciak et al., 2010); el estado adaptativo:
(Noell et al.,1966); la edad (O’Steen et al.,
1982) y la genética (Noell et al., 1971).
Respecto al análisis de las longitudes
de onda que producen el mayor nivel de
daño retiniano, se han realizado diver-
sos estudios. Noell et al., en 1966, de-
mostraron que el tejido retiniano se de-
terioraba cuando era expuesto a longi-
tudes de onda corta. Otros trabajos como
el de Okuno et al., en 2002, repiten este
mismo planteamiento y concluyen que
el sol, la soldadura por arco, el corte por
plasma y las lámparas de descarga pre-
sentan radiancias efectivas muy altas,
con tiempos de exposición permisibles
de solo 0,6 a 40 s, lo que sugiere que la
visualización de estas fuentes de luz es
muy peligrosa para la retina.
Se debe reseñar, para la mejor com-
prensión de esta discusión, que se con-
sidera que la exposición a luz intensa de
yen, además, irritaciones oculares, fo-
toqueratitis, cataratas, pterigion, entre
otros (Okuno et al., 2001; Meo et al., 2003).
Por este motivo es importante conocer
el nivel de radiación emitida por los dis-
positivos de soldadura para evaluar los
riesgos potenciales y tomar medidas de
protección en contra de ella (Okuno et
al., 2001). Además, los soldadores de-
ben ser instruidos acerca de la posibili-
dad de sufrir daños en el segmento an-
terior y posterior y de la necesidad de
usar gafas de protección adecuadas pa-
ra evitar estos daños (Arend et al., 1996).
Numerosos estudios coinciden en la
necesidad de utilizar las gafas o panta-
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201120
Higiene industrial
el estudio propone un filtro que protege altrabajador de las radiaciones nocivas pero que deja
pasar las longitudes de onda menos energéticaspara permitir la visión del campo de trabajo
llas protectoras para el proceso de sol-
dadura, puesto que los altos niveles de
radiación UV provocan grandes com-
plicaciones oculares (Arend, 1996; Ten-
kate et al., 1997; Okuno, 2001; Kim et al.,
2007; Peng et al., 2007; Okuno, 2010). Pa-
ra ello los sistemas protectores deben
proveer al trabajador de la protección
suficiente para realizar su trabajo diario
sin superar la máxima exposición ad-
misible (MPE). Para corroborar que los
equipos de protección ocular cumplían
con este requisito, Tenkate, en 1997, mi-
dió, con una película de polímero foto-
sensible, los niveles de exposición a la
radiación ultravioleta de un grupo de
soldadores. El polímero se adjuntó a la
superficie interna de la pantalla de pro-
tección ocular y reveló que la exposición
media estimada ocular (en el interior del
casco) fue de entre cuatro y cinco veces
la MPE. Estos resultados sugerían que
era necesaria una protección ocular adi-
cional para complementar los cascos
convencionales de soldadura.
En concordancia con el trabajo de Ten-
kate, se publicaron estudios donde se re-
portaron casos de daños retinianos en
soldadores que utilizaban correctamente
sus gafas de protección. El examen pos-
terior de los filtros protectores reveló que
solo absorbían las longitudes de onda
inferiores a 380 nm, y solo podrían ofre-
cer protección contra fotoqueratitis.
(Arend et al., 1996; Choi et al., 2006). Es-
to demuestra la necesidad de un estu-
dio pormenorizado de los requerimien-
tos del sistema de protección según el
tipo de radiación emitida.
Con posterioridad a estos trabajos,
Maier et al., en 2005, y Peng et al., en
2007, analizaron diferentes filtros de
protección y demostraron que éstos pro-
tegen a los trabajadores de la exposi-
ción de las radiaciones nocivas emiti-
das por los dispositivos para soldadu-
ra. Más aún, al finalizar el trabajo, Maier
concluye que la maculopatía de solda-
dura parece ser más bien una conse-
cuencia de la negligencia frente a las
normas de seguridad. En el presente tra-
bajo se ha medido la absorbancia de di-
versos equipos de protección ocular pa-
ra soldadores y, en concordancia con
los trabajos de Maier y Peng, se ha en-
contrado que la transmitancia del UV
es nula. Pero, después del análisis de los
resultados obtenidos en la valoración
de la percepción visual, se puede com-
probar que el hecho de que los trabaja-
dores no utilicen sus equipos de pro-
tección no debería ser considerado co-
mo «negligencia», sino como mecanismo
de autodefensa para evitar quemadu-
ras en las manos y brazos, ya que nues-
tros resultados indican que, con los sis-
temas de protección convencionales, la
agudeza visual disminuye hasta el 58%
respecto a la no utilización de filtros.
Teniendo en cuenta que el soplete emi-
te llamas a más 3500º C, la exigencia de
una visión óptima del campo de traba-
jo es indispensable para evitar quema-
duras en las manos y errores en las sol-
daduras que se están realizando.
Otro trabajo destacado, presentado por
Chou et al. en 1996, expone los resulta-
dos de un estudio realizado en una plan-
ta de ensamblaje de vehículos donde se
presenta como uno de los principales
Filtros protectores para sopletes
21Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
disminuye significativamente cuando se
interpone el filtro propuesto por la UCM,
pero sí cuando se utiliza el filtro con-
vencional, produciéndose pérdidas muy
importantes. Respecto a la percepción
del color, ambos filtros producen, de for-
ma estadísticamente significativa, una
disminución en la capacidad de discri-
minación, siendo más acentuada para
el filtro convencional (43%) que para el
filtro propuesto (5%).
CONCLUSIONES
z El soplete oxiacetilénico presenta una
emisión dos veces superior para las
longitudes de onda corta que para las
demás longitudes de onda. El filtro X-
450 es suficiente para absorber las lon-
gitudes de onda corta emitidas por el
soplete, llegando a transmitancia 0 en
el rango de 400-450 nm. Esto permite
diseñar un filtro óptico protector de
absorbancia selectiva que elimina al
máximo las longitudes de onda corta
y solo atenúa, en un porcentaje míni-
mo, el resto de las bandas del espec-
tro visible.
z Para favorecer la utilización de los equi-
pos de protección para soldadura se
requiere de un elemento protector que
no disminuya la agudeza visual de los
trabajadores. El filtro UCM mantiene
sin cambios estos valores, mientras
que el filtro convencional disminuye
en más de la mitad la capacidad de re-
solución de los trabajadores.
z Para evitar accidentes laborales por
quemaduras en la piel, producidos por
una pobre percepción del entorno, se
riesgos del trabajo con soldaduras, ade-
más de las radiaciones emitidas por el
soplete, los desprendimientos de partí-
culas de metal fundido que son despe-
didos en todas direcciones. Este hecho
obliga al trabajador a protegerse de los
residuos metálicos mediante la pantalla
protectora, que, como es obvio, también
incorpora el filtro ocular. Pero frecuen-
temente los soldadores deben trabajar
en sitios oscuros y en espacios peque-
ños, lo cual reduce su percepción visual;
en tales situaciones, algunos soldadores
se quitan las gafas protectoras para rea-
lizar su trabajo (Kim et al., 2007). En con-
cordancia con los resultados de Kim, el
presente estudio demuestra que los ele-
mentos protectores convencionales que
actualmente se encuentran a disposición
de los trabajadores disminuyen consi-
derablemente la percepción visual.
Para evitar la falta de visión sin nece-
sidad de retirar la pantalla protectora, en
este trabajo se propuso un filtro óptico
de banda selectiva que absorbe solo las
longitudes de onda corta en una alta pro-
porción y que es atenuador para el resto
de las longitudes de onda del espectro vi-
sible; al tiempo, los elementos protecto-
res bloquean la radiación UV. Finalmente,
se propone un filtro que protege al tra-
bajador de las radiaciones nocivas pero
que permite el paso de las longitudes de
onda menos energéticas para propiciar
la visión del campo de trabajo.
Así pues, en este estudio se han valo-
rado distintos aspectos de la percepción
visual y se ha observado que tanto la agu-
deza visual como la sensibilidad al con-
traste se ven apenas afectadas al inter-
poner el filtro propuesto UCM, mientras
que con el filtro convencional las pérdi-
das son elevadas. La estereoagudeza no
sugiere el uso del filtro para soldadu-
ra propuesto por la UCM, ya que per-
mite una mejor percepción del con-
traste en comparación con el filtro con-
vencional.
z Para realizar trabajos con mayor exac-
titud y precisión en profundidad y re-
lieve se sugiere el uso del filtro óptico
propuesto por la UCM, dado que no
afecta a la percepción de profundidad,
mientras que el filtro convencional dis-
minuye la estereoagudeza de forma
significativa.
z La interposición de ambos filtros pro-
tectores produce una disminución
en la capacidad de discriminación
del color, siendo más acentuada pa-
ra el filtro convencional que para el
filtro propuesto. No obstante, para
los trabajos de soldadura, la discri-
minación del color no es un pará-
metro especialmente relevante en
comparación con otros aspectos de
la función visual, por lo que no se con-
sidera este factor como determinan-
te en la comparación entre ambos fil-
tros protectores.
z Los distintos aspectos de la percep-
ción visual se ven drásticamente dis-
minuidos cuando se utiliza el filtro
protector convencional evaluado. Por
el contrario, la interposición del nue-
vo filtro protector propuesto por la
Universidad Complutense de Madrid
mantiene estables o disminuye leve-
mente las capacidades perceptivas
evaluadas, resultando ser un sistema
protector óptimo para trabajos de sol-
dadura, por lo que ha sido propues-
to como filtro de referencia a los or-
ganismos competentes para su ho-
mologación. u
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201122
Higiene industrial
el presente estudio demuestra que los elementosprotectores convencionales que actualmente se
encuentran a disposición de los trabajadoresdisminuyen considerablemente la percepción visual
AGRADECIMIENTOSEsta investigación ha sido financiada por FUNDA-CIÓN MAPFRE (Ayudas a la investigación 2010).
Filtros protectores para sopletes
23Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
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tes laborales. En el caso de la fatiga físi-
ca, la prevención de dichos estados de
fatiga es primordial, a los efectos de re-
gular la cantidad de actividad a realizar
en un trabajo, así como la adecuación
de pausas de reposo oportunas. [5-7] La
fatiga, al igual que otros factores, inter-
fiere la ejecución de la actividad.
Con dichas premisas, consideramos
de interés el comprobar tres fenómenos:
z En situaciones críticas, cuando se ne-
cesita una reacción rápida, saber si
hay diferencias en la respuesta moto-
ra entre músculos descansados y aque-
llos sometidos a una contracción man-
tenida previa.
z Saber si es relevante el nivel de fatiga
previa.
z Saber si la historia de contracción mus-
cular influye en la ejecución de un pro-
grama motor.
Para responder a estas preguntas he-
mos examinado si los cambios en el pa-
En ciertas ocupaciones, tales co-
mo trabajar en cintas transpor-
tadoras, cadenas de montaje o
empaquetado, la exactitud en el gesto es
un componente básico de la tarea. Son
trabajos que requieren la ejecución de
actividades físicas de baja intensidad pe-
ro repetidas en el tiempo. Está consta-
tado por diferentes investigaciones que
estos trabajos, si se realizan en condi-
ciones de fatiga, pueden provocar dolor,
sobrecarga o daño muscular. [1-4]
Los requerimientos de una tarea se
comprenden mejor si se tiene una ma-
yor comprensión de cómo la ejecutamos
y de cómo nuestro sistema perceptivo
colabora en el reconocimiento de cam-
bios en las condiciones de ejecución –fa-
tiga, atención, discriminación– para así
adaptar el patrón automatizado a las
nuevas condiciones. La fatiga o las alte-
raciones atencionales pueden por tan-
to conllevar fallos en la tarea y acciden-
trón motor inducidos por fatiga previa
tienen algún efecto en los componentes
neurales o musculares en el patrón de
respuesta balística en una condición de
tiempo de reacción.
MÉTODOS
Sujetos y ámbito de estudioDieciséis sujetos (9 mujeres y 7 hom-
bres, de edades entre 27 y 52 años) to-
maron parte en el estudio. Todos eran
diestros, con visión normal o corregida.
DispositivoLos sujetos se encontraban de pie de-
lante de una pantalla de ordenador con
los brazos colgando cerca del cuerpo. Se
registraron señales electromiográficas
(EMG) en el brazo derecho mediante
electrodos de superficie colocados so-
bre deltoides anterior (DA) y sobre trí-
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201124
Ergonomía
ESTADO MUSCULAR
Estudio sobre las respuestas del sistema motor del individuo
La presente investigación pretende comprobar la influenciadel estado muscular en la respuesta motora rápida a una soli-citación externa. Se sabe que la velocidad de ejecución de unmovimiento balístico que incluye desplazamiento articular va-ría de acuerdo con el estado basal muscular. En este estudiorazonamos que los tiempos motor y premotor pueden estarinfluenciados por el hecho de que el músculo haya estado an-tes en posición de reposo o manteniendo una contracción queorigine fatiga.
en la capacidad de reacción
Influencia del
Por J.M. CASTELLOTE. Doctor en Medicina y Cirugía.
Investigador titular, Instituto de Salud Carlos III,
Madrid. MEL VAN DEN BERG. Ph.D. en Medicina.
Investigadora contratada, Instituto de Salud Carlos
III, Madrid. J. VALLS-SOLE. Doctor en Medicina y
Cirugía. Consultor senior del Hospital Clínic,
Barcelona.
25Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
tras la contracción de 30 segundos has-
ta un intervalo de cinco minutos.
Antes del comienzo del estudio, los su-
jetos practicaron un número suficiente
de intentos, sin fatiga previa, con retro-
alimentación de los registros de EMG. Pa-
ra la situación experimental, los sujetos
practicaron el gesto de apoyarse contra
la pared, sin empujarla para evitar fatiga
innecesaria. El registro de datos comen-
zó cuando los sujetos se sintieron cómo-
dos con el procedimiento en cada con-
dición. Se registraron 8-10 EC antes de
comenzar los ensayos experimentales.
Veinte minutos tras finalizar cada bloque
de ensayos LD o CD se registraron 8-10
ensayos finales (EF) idénticos al control.
Registro y análisis de datosPara cada ensayo registramos las se-
ñales generadas por la SI, la actividad
EMG y el movimiento. Los datos se reco-
ceps braquial (TB). Se colocó un acele-
rómetro en el epicóndilo humeral para
registrar movimientos del brazo y calcu-
lar variables cinemáticas.
ProcedimientoCada sujeto se estudió en una sesión.
Se hicieron dos bloques de cada sujeto,
de acuerdo con el tipo de contracción
que hubiera que realizar tras ensayos
control (EC), bien de larga duración (LD)
o de corta duración (CD). El orden de
pruebas fue aleatorio entre sujetos. El
tiempo entre pruebas fue superior a 30
minutos. El experimento comenzó ins-
truyendo a los sujetos sobre las condi-
ciones de los ensayos. En los EC, los su-
jetos fueron instados a realizar un movi-
miento de abducción hasta la horizontal,
como respuesta rápida tras la presenta-
ción de una señal imperativa (SI) en la
pantalla del ordenador. Los ensayos fue-
ron hechos siguiendo paradigmas de
tiempos de reacción (TR) sencillos. [8-9]
La señal imperativa se generó por el ex-
perimentador mediante una señal en el
teclado, sin aviso previo.
En cada bloque y tras los EC, los suje-
tos se colocaron de pie junto a una pa-
red para realizar una contracción máxi-
ma contra ella con la muñeca derecha
mediante un movimiento de abducción
con el brazo, bien durante 30 segundos
(LD) como fatiga prolongada o durante
10 segundos (CD) como contracción bre-
ve, mientras se mantenían en la misma
posición. Fueron instruidos para reali-
zar una contracción máxima. Al termi-
nar la contracción, los sujetos debieron
colocarse frente a la pantalla para reali-
zar los ensayos de TR. Estos se realiza-
ron a intervalos de tiempo específicos
gieron en un ordenador personal a una
frecuencia de 2.000 Hz para posterior
análisis con software específico. Para re-
gistrar la actividad de fondo de EMG, se
midió la amplitud promedio de la señal
rectificada de EMG, tanto de DA como
de TB, y se midieron durante los 200 ms.
que precedían a la presentación de la SI.
Para todas las condiciones en las se-
ñales registradas tras las SI, medimos las
siguientes variables:
z Comienzo de DA, como latencia de la
actividad EMG en DA. En aquellos en-
sayos en que los músculos podían estar
activos durante la SI, se consideró co-
mo el momento en que la actividad EMG
rectificada cambiaba más de 10µV/ms
en un lapso de 500 ms tras la SI.
z Comienzo de TB, como la latencia de
la actividad EMG en el TB. Los crite-
rios de medición fueron como para el
DA ya descrito.
z Comienzo de movimiento (CM). Se
mide desde la SI como el momento en
que hay un cambio en la señal acele-
rométrica.
z Retraso electromecánico (REM). Co-
mo la diferencia entre DA y CM.
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201126
Ergonomía
el estudio evalúa si los cambios en el patrón motorinducidos por fatiga previa afectan a los componentes
neurales o musculares en el patrón de respuestabalística en una condición de tiempo de reacción
Aspectos éticosEl estudio ha seguido los requisitos éti-
cos de la Declaración de Helsinki. Los
sujetos fueron informados del estudio y
dieron su consentimiento para partici-
par en el mismo.
Análisis estadísticoSe utilizaron procedimientos paramé-
tricos. La comparación entre tareas y se-
ries se realizó mediante análisis de va-
rianza de medidas repetidas, realizan-
do análisis post-hoc cuando se hallaron
diferencias. Las correlaciones entre ta-
reas se calcularon mediante correlación
de Pearson. La significancia estadística
se estableció para p<0.05.
RESULTADOS
Todos los sujetos realizaron las prue-
bas adecuadamente. Hay que mencio-
nar que la duración de cada estudio ha
sido prolongada al requerir, además de
la instrumentación del sujeto, enseñar-
le a ejecutar todas las partes de la tarea
y valorar la recuperación tras el esfuer-
zo. Pese a ello el estudio ha permitido
evaluar la respuesta por contracción
mantenida breve y por contracción man-
tenida prolongada (fatiga).
Las respuestas de deltoides anterior y
de tríceps braquial como tiempos de re-
acción se observan en las figuras 1 y 2 res-
pectivamente. En ellas se comprueba que
existe una reducción de tiempos de re-
acción en ambos músculos para las dos
intervenciones realizadas. Asimismo, se
comprueba cómo se recuperan los tiem-
pos de reacción y revierten a valores si-
milares a los valores control sobre el mi-
nuto cinco. De la misma forma, se obser-
va que hay mayor afectación cuando la
contracción previa era prolongada. A
efectos comparativos, de este análisis
descriptivo de datos, así como de la sub-
siguiente inferencia estadística, se com-
prueba la mayor afectación de deltoides
anterior respecto a tríceps, presentando
menores tiempos de respuesta, siendo
más evidente tras contracción manteni-
da (p<0.05). Los resultados también mues-
tran la mayor prolongación en la dura-
ción de la afectación de deltoides ante-
rior respecto a tríceps en ese menor tiempo
de respuesta tras contracción manteni-
da (figuras 1 y 2), (p<0.05). Las curvas en
las figuras 1 y 2 exponen una similitud en
la respuesta entre las condiciones de post-
contracción sencilla y de fatiga (figuras
1 y 2), (p>0.05).
El análisis de datos relativos a movi-
miento ha permitido comprobar que la
situación muscular previa también ha
afectado al mismo. En la figura 3 se ob-
Estado muscular y capacidad de reacción
27Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
110
100
90
80
70
60
500 50 100 150 200 250 300 350
TRÍCEPS
Fatiga
Post-concentración
Intervalo de tiempo después de la concentración máxima (ms).
Figura 2. Tiempo de reacción promedio de todos los sujetos para tríceps braquial (en ms) desde 30
segundos hasta 300 segundos tras la contracción. Normalización respecto a su control y leyenda
similar a la figura 1.
110
100
90
80
70
60
500 50 100 150 200 250 300 350
DELTOIDES ANTERIOR
Fatiga
Post-concentración
Intervalo de tiempo después de la concentración máxima (ms).
Figura 1. Tiempo de reacción promedio de todos los sujetos para deltoides anterior (en ms) desde
30 segundos hasta 300 segundos tras la contracción. El tiempo de reacción está expresado
normalizado tomando como 100% el promedio de valores control. Triángulos rojos: condición de
fatiga; rectángulos azules: condición de post-contracción moderada.
miento en la tarea mandada, se ha va-
lorado la correlación de sus tiempos de
respuesta. Si bien en la situación con-
trol la correlación es alta (R2= 0.8), tan-
to en los casos de fatiga como de breve
post-contracción se ha visto una me-
nor correlación (R2=0.4 y 0.5 respecti-
vamente). La correlación entre deltoi-
des y el subsiguiente movimiento ha si-
do alta en todas las condiciones (R2
entre 0.8-0.9).
serva la afectación del movimiento, que
se ha comprobado es también significa-
tiva (p<0.05) en paralelo a la afectación
de deltoides anterior.
Dentro del movimiento, se ha compro-
bado el valor del retraso electromecáni-
co, que ha resultado no modificarse por
el estado muscular previo (figura 4), care-
ciendo de significancia estadística (p>0.05).
Al participar deltoides anterior y trí-
ceps en una misma cadena de movi-
DISCUSIÓN
El presente estudio ha permitido ver
la transición de respuestas musculares
en dos umbrales progresivos de activi-
dad muscular previa. Durante el primer
minuto no se han observado diferencias
en tiempo premotor, tiempo motor o re-
traso electromecánico, pero ha habido
un acortamiento evidente de tiempo pre-
motor y tiempo motor sin cambios en el
retraso electromecánico entre los 90 y
150 ms en los ensayos respecto a las prue-
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201128
Ergonomía
0 50 100 150 200 250 300 350
Intervalo de tiempo después de la concentración máxima (ms).
130
120
110
100
90
80
70
60
RETRASO ELECTROMECÁNICO
Fatiga
Post-concentración
Figura 4. Duración del retraso electromecánico promedio de todos los sujetos (en ms) desde 30
segundos hasta 300 segundos tras la contracción. Normalización respecto a su control y leyenda
similar a la figura 1.
110
100
90
80
70
60
500 50 100 150 200 250 300 350
COMIENZO DEL MOVIMIENTO
Intervalo de tiempo después de la concentración máxima (ms).
Fatiga
Post-concentración
Figura 3. Tiempo de movimiento promedio de todos los sujetos (en ms) desde 30 segundos hasta 300
segundos tras la contracción. Normalización respecto a su control y leyenda similar a la figura 1.
bas control. Las diferencias dejaron de
ser significativas a los 300 segundos.
La influencia del estado muscular so-
bre los tiempos de reacción ya ha sido es-
tudiada bajo diferentes modelos, con re-
sultados variables. Algunos estudios se
han centrado en el tiempo premotor [10-
12], otros han descrito la ausencia de cam-
bios [13-15], mientras que un tercer gru-
po ha encontrado reducciones en dichos
tiempos [16-20]. Las diferencias pueden
haber sido debidas a los diferentes pro-
tocolos utilizados. Aquellos que han ob-
servado reducciones en los tiempos pre-
motores también han observado respues-
tas diferentes en el retraso electromecá-
nico. Yeung et al. [20] han mostrado un
retraso del mismo y lo consideran una
compensación para mantener el fin de la
tarea. Li et al. [19] usaron imaginería men-
tal para condicionar la respuesta. Caste-
llote et al. [17] emplearon un modelo en
el que el músculo se hallaba ya en activi-
dad isométrica o en oscilaciones rápidas.
Etnyre y Kinugasa [18] usaron también
un modelo de contracción isométrica pre-
via pero de muy breve duración. En to-
dos estos estudios las respuestas han si-
do medidas justo tras el acondiciona-
miento, mientras que en nuestro estudio
hemos ampliado los tiempos de medi-
ción hasta que han vuelto a situaciones
basales a los cinco minutos. Este fenóme-
no, consecuencia de la actividad previa,
no ha tenido una relación directa con el
nivel de la misma, lo que hace pensar que
no es tanto el estado basal de partida, si-
no más bien la condición y estado tonal
muscular los que influyen en la respues-
ta. Efectos similares se han observado tras
estímulos vibratorios, lo que permite con-
siderar que sea un estado funcional afe-
rente mediado por la médula espinal el
que condicione la respuesta cortical, vo-
luntaria, de acción motora. El fenómeno
se ha observado tanto en musculatura
proximal como medial de la extremidad,
aunque los efectos son más evidentes en
aquella postural (deltoides anterior). Los
fenómenos encontrados en movimiento
han ido en paralelo, haciendo pensar que
son secundarios al efecto premotor, ha-
bida cuenta de que no ha habido cam-
bios en el retraso electromecánico con-
siderado en su conjunto.
Por todo ello, consideramos de interés
aplicado el prestar atención a las activi-
dades de las personas que realizan traba-
jos de esfuerzo extenuante, que adoptan
posturas incómodas, o realizan movi-
mientos de forma rápida usando los mis-
mos músculos por periodos prolongados
de tiempo, ya que una falta en la preci-
sión posterior puede originar resultados
Estado muscular y capacidad de reacción
29Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
el estudio ha permitido evaluar la respuesta porcontracción mantenida breve y por contracción
mantenida prolongada (fatiga)
atención, requiriendo cierta consciencia
de la acción, consciencia que puede ser
externamente modificada [23] por parte
del sujeto; también se requiere una ca-
pacidad de reacción visual ante requeri-
mientos externos [24], capacidad que pue-
de estar limitada en condiciones de fati-
ga muscular. Ejemplos extremos se
fatales en la ocupación o puede ser cau-
sa de enfermedades ocupacionales. [21,22]
Ciertas tareas en cintas transportadoras,
tales como el portar productos de la cin-
ta a cajas, limpieza de fruta, empaqueta-
do o procesado de comida, no solo re-
quieren movimientos precisos y rápidos,
sino también una interiorización de la ac-
ción a ejecutar, ya que la misma ha de re-
alizarse con precisión en las coordena-
das espacio-tiempo, requiere capturar y
soltar objetos delicados y en ocasiones
además necesita una decisión mental so-
bre la tarea (como en el caso de seleccio-
nar fruta). El hecho de que los gestos se-
an repetidos ya reduce el estado óptimo
basal muscular ante un evento como una
respuesta requerida rápida. Un gesto si-
gue a otro, y aunque el trabajo sea ruti-
nario, existe poco tiempo para perder la
observan en la operación de máquinas y
conducción de vehículos. [25]
Por todo ello, estos resultados sugieren
que el sistema motor del sujeto modula
las respuestas rápidas ulteriores. El suje-
to no debe alcanzar en su ocupación es-
tados de fatiga elevados, ya que debe es-
tar preparado para responder a cualquier
alteración interna o externa, de tal forma
que pueda estar atento y anticipar ade-
cuadamente un cambio en las condicio-
nes o en la respuesta [17], tanto en térmi-
nos de precisión como de rapidez. En las
situaciones de riesgo, una equivocación
no solo puede originar un accidente, sino
que puede tener consecuencias legales. u
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201130
Ergonomía
PARA SABER MÁS
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debe prestarse atencióna las actividades de
personas con trabajosextenuantes, ya que una
falta en la precisiónposterior puede
originar resultadosfatales en la ocupacióno causar enfermedades
ocupacionales
Estado muscular y capacidad de reacción
AGRADECIMIENTOSEsta investigación ha sido financiada por FUNDA-CIÓN MAPFRE (Ayudas a la investigación 2010).
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201132
Medio ambiente
BACTERIAS
Estudio sobre su fortaleza en aguas residuales
resistentes a antibióticos
Por ELOY BÉCARES MANTECÓN, JAVIER MARTÍN VILLACORTA, MARÍA HIJOSA VALSERO, RICARDO
SIDRACH-CARDONA MARTÍNEZ. Área de Ecología, Facultad de CC Biológicas y Ambientales,
Universidad de León, 24071 León.
El incremento de la resistencia bacteriana a los antibióticos provocanumerosos problemas sanitarios, aumentando las tasas de
morbilidad y mortalidad de la población. Los mecanismos parareducir este aumento de resistencias implican tanto el uso racionalde los antibióticos como la eliminación de las bacterias resistentes,
que se excretan a través de las aguas residuales. Los objetivos de esteproyecto son: 1- Caracterizar la abundancia de bacterias fecalesresistentes a antibióticos en medios acuáticos que reciben aguasresiduales de una industria productora de antibióticos y de unadepuradora de aguas residuales. 2- Estudiar la capacidad de las
depuradoras de aguas residuales para eliminar o potenciar laresistencia a antibióticos. 3- Estudiar las tasas de variación de la
resistencia a antibióticos a lo largo del río. El estudio demuestra quelos vertidos de las depuradoras de aguas residuales tienen un efectosignificativo sobre el aumento de bacterias resistentes. Los vertidos
de las plantas de tratamiento de aguas residuales presentanmayores porcentajes de bacterias resistentes a antibióticos que las
aguas de entrada. En este estudio no se hallaron diferenciassignificativas en el incremento de resistencias cuando se comparan
sistemas convencionales (fangos activados) con sistemas de bajocoste (humedales construidos). Las diferencias en el diseño de loshumedales tampoco supusieron una diferencia significativa en la
variación de bacterias resistentes presentes en sus efluentes.
en medios acuáticos
33Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
cuente incremento de bacterias resis-
tentes conllevan un aumento en la ex-
creción al medio ambiente, tanto de bac-
terias resistentes como de antibióticos,
a través fundamentalmente de las aguas
residuales. La emisión de bacterias al
medio acuático favorece también el in-
tercambio genético con poblaciones pre-
viamente no resistentes, lo que aumen-
ta la dispersión de esta capacidad resis-
tente en las bacterias del medio ambiente
(Davison 1999).
Supervivencia de lasbacterias resistentes aantibióticos en mediosacuáticos
La bacterias resistentes llegan a los rí-
os a través de las aguas residuales. Uno
de los aspectos de interés es conocer la
capacidad de estas bacterias para so-
brevivir en condiciones naturales así co-
mo para intercambiar material genéti-
co en dichos ambientes. Aunque la mor-
talidad natural de las bacterias patógenas
o sus indicadores es muy elevada en los
medios extraenterales, su gran abun-
dancia (valores de 105-1010 UFC/ml en
aguas residuales) (McFeters et al., 1990)
y las condiciones ambientales (turbidez,
temperatura, etc.) pueden mantener via-
bles a estas poblaciones durante mucho
tiempo (Davies-Colley et al., 1999).
En el presente trabajo se pretende es-
tudiar la viabilidad de estas bacterias re-
sistentes a antibióticos a lo largo de un
río que recibe dos vertidos de diferente
naturaleza. Por un lado, el vertido de las
aguas residuales domésticas ya tratadas,
y por otro, el vertido de las aguas resi-
duales de una industria productora de
INTRODUCCIÓN
La resistencia aantibióticos comoestrategia adaptativa delas bacterias
La resistencia a antibióticos es uno de
los aspectos de creciente interés en la sa-
nidad humana. El rápido y constatado
aumento de infecciones causadas por
bacterias patógenas resistentes a anti-
bióticos está produciendo una «carrera
de armamento», evolutivamente ha-
blando (Van Valen 1973), en la que el de-
sarrollo de nuevas armas por el hombre
(antibióticos) se encuentra por detrás de
la capacidad de los microorganismos pa-
ra evitar su efecto (aumento de resis-
tencias).
La causa de la resistencia a antibióti-
cos es natural, es decir, las propias bac-
terias han desarrollado mecanismos pa-
ra inactivar las sustancias antibióticas
producidas como elemento de defensa
o estrategia competitiva con otros mi-
croorganismos (Martínez, 2009). Pero
esta resistencia, o estrategia adaptativa
de las bacterias, está potenciada por la
actividad humana con el uso de anti-
bióticos para el tratamiento de enfer-
medades humanas y animales. En este
caso, el mecanismo selectivo impuesto
por el hombre al aumentar la probabili-
dad de contacto de los antibióticos con
las bacterias ha provocado una rápida
selección de las poblaciones bacteria-
nas, favoreciendo aquellas resistentes
(Alonso et al., 2001). Aunque la resis-
tencia a antibióticos puede aparecer en
ausencia de antibiótico por mutación
genética (Henriques et al., 2006), ha si-
do el uso excesivo de antibióticos lo que
ha provocado un incremento alarman-
te de resistencias que incluso ha llevado
a adoptar medidas legales restringien-
do su libre adquisición (Kümmerer, 2004).
Este uso de antibióticos y el conse-
penicilinas y cefalosporinas. El objetivo
será conocer las tasas a las que los prin-
cipales grupos de bacterias fecales (co-
liformes totales, E. coli, enterobacterias
y clostridios sulfito reductores) desapa-
recen con la distancia, y comparar si es-
ta tasa de desaparición es paralela a la
tasa de desaparición de la resistencia a
antibióticos en las bacterias supervi-
vientes. A través de pruebas cruzadas
con diferentes antibióticos se estudiará
además la variación en la multirresis-
tencia, una prueba de la existencia de in-
tercambio genético dentro de las mis-
mas poblaciones de bacterias fecales del
río, tanto las suspendidas en el agua co-
mo las retenidas en los sedimentos. Los
estudios de resistencias irán acompa-
ñados del análisis químico de los anti-
bióticos potencialmente presentes, tan-
to en las aguas residuales brutas como
en el río.
Eliminación de bacteriasresistentes a antibióticos.Papel de las depuradorasde aguas residuales
Uno de los métodos para destruir bac-
terias patógenas, o sus grupos indicado-
res, de las aguas residuales es su trata-
miento en plantas depuradoras. Las de-
puradoras presentan condiciones hostiles
para la supervivencia de dichas bacterias
debido a su temperatura ambiente, las
condiciones físico-químicas de los reac-
tores y la gran abundancia de depreda-
dores (organismos bacterívoros y virus).
En general, las depuradoras reducen en
1-3 logaritmos la abundancia de bacte-
rias del agua de entrada (Hirata et al.,
2003). Sin embargo, esta reducción en la
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201134
Medio ambiente
EL ESTUDIO COMPARA LOS DISEÑOS MÁS UTILIZADOS DEHUMEDALES CONSTRUIDOS PARA ESTUDIAR SI ALGUNO DE
ELLOS PUEDE AFECTAR A LA ELIMINACIÓN DE ANTIBIÓTICOS
abundancia de bacterias no va acompa-
ñada de una reducción de bacterias re-
sistentes, sino al contrario. Las depura-
doras convencionales de tratamiento de
aguas residuales (fangos activados) tien-
den a aumentar el porcentaje de bacte-
rias resistentes en su efluente como con-
secuencia de la gran abundancia de bac-
terias en el reactor biológico y del tiempo
de contacto entre ellas, lo que incrementa
las tasas de intercambio genético (con-
jugación, transformación y transduc-
ción), y por tanto, el porcentaje de bac-
terias resistentes a antibióticos (Da Cos-
ta et al., 2006).
Debido a su excesivo coste, los siste-
mas de fangos activados son sustituidos
en zonas rurales por sistemas de bajo
coste como filtros percoladores o siste-
mas extensivos, como lagunajes o hu-
medales construidos.
Otro de los objetivos del estudio es
comparar los sistemas convencionales
de fangos activados con sistemas de ba-
jo coste como los humedales construi-
dos. Ambos sistemas se diferencian en
los tiempos de retención celular, densi-
dad de bacterias dentro de los reactores
y exposición a condiciones ambientales
(Ferrer et al., 2007).
En este estudio se pretende estudiar si
los sistemas «naturales» de tratamiento
de aguas residuales tienen la misma ca-
pacidad de incrementar las tasas de re-
sistencia que los sistemas convenciona-
les, y cuál es el papel de los diferentes
elementos de diseño (tipo de planta uti-
lizada, flujo hidráulico empleado) sobre
dicho aspecto. Está demostrado que los
sistemas naturales son más eficaces que
los convencionales en la eliminación de
bacterias indicadoras de contaminación
fecal y patógenas (García y Bécares, 1997),
pero no existen evidencias que cuanti-
fiquen la capacidad para intercambiar
genes resistentes a antibióticos dentro
de dichos procesos.
Por otro lado, aunque la capacidad de
los procesos convencionales para la eli-
minación de compuestos farmacéuticos
como los antibióticos es ya bastante co-
nocida (ej., Hijosa-Valsero et al., en pren-
sa), las evidencias sobre el papel de los
sistemas de bajo coste para eliminar an-
tibióticos son aún inéditas.
MATERIAL Y MÉTODOS
Toma de muestras deagua y sedimentos del ríoBernesga
La zona de estudio estuvo situada al
sur de la ciudad de León, en las inme-
diaciones del río Bernesga, zona en la
que se encuentra la Estación Depura-
dora de Aguas Residuales (EDAR) de Le-
ón y su alfoz, y el vertido de una indus-
tria productora de antibióticos (AB) de-
dicada a la elaboración de cefalosporinas
y penicilinas, que en la actualidad tam-
bién cuenta con su propia estación de-
puradora de aguas residuales.
Bacterias resistentes a antibióticos
35Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
Figura 1. Distribución de los puntos de muestreo en el río (distancias acumuladas en metros).
conseguir una muestra integrada, tanto
de agua como de sedimento.
Las medidas de temperatura, pH, oxí-
geno disuelto, potencial redox y con-
ductividad se realizaron in situ median-
te el empleo de sondas de electrodos
(WTW, Weilheim, Alemania).
Muestreo de las variablesmicrobiológicas
Tanto las muestras de agua como las
de sedimentos fueron procesadas en el
mismo día que fueron tomadas para su
análisis microbiológico. Se analizaron in-
dicadores fecales, esto es, E. coli, colifor-
mes totales (CT), Enterococcus y clostri-
dios sulfitoreductores. Los medios de cul-
tivo utilizados fueron: Chomocult coliform
agar (Merck 1.10426.0500) para E. coli y
CT, un medio cromogénico selectivo que
discrimina en la misma placa esos dos
grupos según el color de la colonia; para
Enterococcus se usó agar SB (Membrane-
filter enterococcus selective agar acc. to
Slanetz and Barley, Merck 1.05262.0500),
y para clostridios, sulfitoreductores agar
SPS (Agar selectivo para perfringens se-
gún ANGELOTTI, Merck 1.10235.0500).
En el río se fijó un punto de muestreo
antes y después de cada vertido (AB y
EDAR) (fig. 1), y dos puntos aguas abajo
del último vertido, a diferente distancia,
en los que se tomaron muestras tanto de
agua como de sedimento, y en los que
se midieron los diferentes parámetros
físico-químicos. También se tomaron
muestras y se hicieron mediciones de los
dos vertidos.
Las muestras de agua y sedimentos se
tomaron los días 24, 30 y 31 de agosto de
2010 (n=3), entre las 9.00 y las 13.00 ho-
ras. No se registraron lluvias durante la
campaña de toma de muestras ni du-
rante las dos semanas anteriores. Las lo-
calidades de muestreo se señalan en la
figura 1. En las localidades Río 1 (punto
1), Río 2 (punto 2), Río 3 (punto 3), Río 4
(punto 4), Río 5 (punto 5) y Río 6 (punto
6) se recogieron muestras a lo largo de
un transecto que cruzaba el río de orilla
a orilla. En el caso de las muestras de
agua, se cogían 1.000 ml en cada punto
del transecto. En el caso de las muestras
de sedimento, se utilizó un cilindro de
metacrilato de 9 cm de diámetro y 50 cm
de longitud para extraer el material. Des-
pués, todas las muestras correspondientes
a la misma localidad se mezclaban para
Análisis de la resistencia aantibióticos
El estudio de la resistencia a antibió-
ticos se llevó a cabo mediante dos mé-
todos diferentes: dilución en placa y di-
fusión en agar.
Dilución en placa
Mediante este método se analizaron
las resistencias de cada grupo bacteria-
no (excepto clostridios) a dos antibióti-
cos, amoxicilina (A) y cefalexina (C). El
número de colonias que crecen en las
placas con antibiótico se comparan con
las placas control de medio sin antibió-
tico con el fin de conocer el porcentaje
de bacterias resistentes. En el caso de los
humedales construidos solo se probó la
resistencia a amoxicilina, pero se apli-
caron dos concentraciones diferentes al
medio, 5 y 50 µg/ml (CT y E. coli) o 1 y 10
µg/ml (Enterococcus).
Difusión en agar (antibiograma)
Los discos antibióticos utilizados fue-
ron: dos β-lactamidos (penicilina, 10U
y ampicilina, 10µg), dos tetraciclinas (do-
xiciclina, 30µg y tetraciclina, 30µg), dos
macrólidos (eritromicina, 15µg y azitro-
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201136
Medio ambiente
Figura 3. Esquema de los tanques experimentales simulando diferentes diseños de humedales
construidos.
Figura 2. Toma de muestras. Core de
sedimento.
micina, 15µg) y un aminoglucosido (strep-
tomicina, 10µg), (BBL Sensi-Disc Anti-
microbial Susceptibility Test Discs, BD).
Las colonias que mostraban un com-
portamiento «resistente» o «intermedio»
fueron clasificadas como resistentes; de
otro modo, como «sensibles» (Constan-
zo, 2005).
Eliminación de bacteriasen sistemas naturales detratamiento (humedalesconstruidos)
Además de los muestreos realizados a
lo largo del río, se tomaron muestras de
la planta depuradora de macrófitos acuá-
ticos (humedales construidos) situada
en las instalaciones de la EDAR de León
y consistente en 8 tanques de 1 m2 cada
uno con diferente tipo de planta y dise-
ño (figuras 3 y 4). Cada tanque simula un
sistema y condición diferente de dise-
ño, tal como se indica a continuación:
z H1 y H5: cultivos hidropónicos de es-
padaña (Typha angustifolia) y carrizo
(Phragmites australis), respectiva-
mente.
z H2: Sistema de lámina de agua libre
con flujo superficial (FWS) plantado
con espadaña.
z H3: Sistema de lámina de agua libre
con flujo subsuperficial (FWSSF) plan-
tado con espadaña.
z H4: Sistema de lámina de agua libre
con flujo superficial, sin plantar (con-
trol del H3).
z H6: Sistema de flujo subsuperficial
(SSF) plantado con carrizo y con triple
carga que el resto de sistemas.
z H7: Sistema de flujo subsuperficial
(SSF) plantado con carrizo.
z H8: Sistema de flujo subsuperficial sin
plantar (control del H7).
El objetivo del estudio es comparar los
diseños más utilizados de humedales
construidos con el fin de estudiar si al-
guno de ellos puede afectar a la elimi-
nación de antibióticos, o a la generación
de bacterias resistentes a antibióticos, y
comparar ambos aspectos con un siste-
ma convencional de tratamiento como
el de los fangos activados.
RESULTADOS
Variables convencionalesde calidad de las aguas
Los valores de DQO, DBO5, SST y SSV
medidos en las muestras acuosas se in-
dican en la figura 5. Los valores de estos
parámetros son constantes y similares
en todas las localidades, con la excepción
del vertido Antibióticos. Este vertido se
caracteriza por presentar valores relati-
vamente altos de DQO, SST y SSV (regu-
lados por la Resolución de 20 de abril de
2009 de Castilla y León). A pesar de ello,
la descarga de estas aguas residuales no
hizo incrementar de manera notable las
concentraciones de DQO, SST y SSV en
el río (punto 2, figura 5). Esto se debe, en
gran medida, al efecto de dilución que se
produce, dado que el caudal del río en el
punto 1 (1,24-1,79 m3 s-1) es muy supe-
rior al caudal del vertido Antibióticos (0,09
m3 s-1). Por otra parte, el vertido de la
EDAR de León es un vertido con una car-
ga muy baja de DQO, DBO5 y sólidos en
suspensión, ya que se trata del agua de
salida de una EDAR que debe cumplir los
requisitos de la Directiva 91/271/CE; y
por ello, a pesar de su gran caudal (1,24
m3 s-1), no afecta de forma excesiva al cau-
ce del río, al menos en lo concerniente a
estos contaminantes (es decir, no se ob-
serva un gran aumento en las concen-
traciones del punto 4 con respecto al pun-
to 3; véase la figura 5).
Comunidades bacterianasdel río y resistencia aantibióticos
Caracterización de la comunidad
bacteriana
Tras la realización de los conteos de
bacterias en las placas sin antibiótico
(controles), se puede observar cómo tan-
to la depuradora de antibióticos como
Bacterias resistentes a antibióticos
37Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
Figura 4. Vista del sistema experimental de humedales construidos en verano.
tos 2 y 3: 1,8 m3 seg-1. Puntos 4 y 5: 3 m3
seg-1). De esta forma, se puede observar
cómo el número de bacterias que pasan
por cada punto del río es mayor a partir
de los vertidos en casi 3 logaritmos de
media (figura 7).
En el caso de los sedimentos también
se observa un incremento sustancial en
el número total de bacterias existentes
de todos los grupos según se avanza a lo
la EDAR de León aportan bacterias al
medio receptor, siendo la cantidad de
bacterias de todos los grupos mucho ma-
yor (de dos a tres logaritmos de diferen-
cia) a partir del vertido de la EDAR (pun-
tos Río 4, Río 5 y Río 6) (figura 6).
Estas diferencias se ven más claramente
si la abundancia de bacterias se expresa
en relación con el caudal del río y los ver-
tidos (cargas de bacterias). Los caudales
se midieron en el punto 1 (1,2 m3 seg-1) y
en el punto 6 (3 m3 seg-1), los vertidos de
AB y la EDAR son conocidos (0,09 y 1,2
m3 seg-1 respectivamente), y el resto de
puntos del rio puede ser calculado (pun-
largo del río y se van incorporando los
vertidos (figura 8).
z Estudio de resistencias por dilución en
placa
Las muestras de agua recogidas du-
rante el periodo de muestreo presentan
un patrón de resistencia a los antibióti-
cos dispar. En el caso de la cefalexina, el
grupo bacteriano que presenta mayor
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201138
Medio ambiente
Figura 5. Concentraciones medias de los parámetros convencionales de calidad de las aguas (DQO, DBO5, SST y SSV) en el río Bernesga. Las barras de
error indican el intervalo de confianza del 95%.
TANTO LA DEPURADORA DE ANTIBIÓTICOS COMO LA EDARDE LEÓN APORTAN BACTERIAS AL MEDIO RECEPTOR,
SIENDO MUCHO MAYOR A PARTIR DEL VERTIDO DE eSTA
Figura 7. Carga bacteriana (UFCs/día) en cada
punto de muestreo.
Figura 6. Log 10 de las Unidades Formadoras de Colonias
por mililitro en cada punto de muestreo del río.
Figura 8. Log 10 de las Unidades Formadoras
de Colonias por mililitro en cada punto de
muestreo de los sedimentos.
porcentaje de resistencia es el de los co-
liformes totales, alcanzando en deter-
minadas muestras valores de hasta el
100% después del vertido de antibióti-
cos, aunque estos porcentajes van dis-
minuyendo a lo largo del río (figura 9),
al contrario de lo que pasaba con el nú-
mero total de bacterias. En el caso de la
amoxicilina, tanto los coliformes totales
como E. coli muestran porcentajes de
resistencia bastante elevados, decayen-
do también según se avanza en el curso
del río. No se encontraron Enterococcus
resistentes salvo en el vertido de la EDAR
(figura 10).
En el caso de los sedimentos los pa-
trones son similares a los del agua: pa-
ra cefalexina, las mayores resistencias
se producen tras el vertido de antibióti-
cos, disminuyendo a lo largo del curso
del río, y el grupo bacteriano que mayor
porcentaje de resistencias presenta es
el de coliformes totales (figura 11), mien-
tras que para la amoxicilina, tanto coli-
formes totales como E. coli presentan
elevada resistencia, disminuyendo en
general a lo largo del curso del río. Tam-
poco se encontraron Enterococcus re-
sistentes a amoxicilina en los sedimen-
tos (figura 12).
z Estudio de resistencias múltiples me-
diante antibiogramas
De los 14 puntos de muestreo realiza-
dos entre el río, los sedimentos y los ver-
tidos, un total de 289 colonias de E. coli
fueron aisladas y se analizaron sus pa-
trones de resistencia a antibióticos. La
tabla 1 muestra los patrones de resis-
tencia obtenidos para las muestras de
agua del río, así como de los vertidos de
antibióticos y de la EDAR de León. En la
tabla 2 se muestran los resultados de los
sedimentos. Se puede observar cómo
tanto la eritromicina como la penicilina
tienen tasas de resistencia del 100% en
todos los puntos, mientras que en el ca-
so de la azitromicina el porcentaje de
bacterias resistentes no supera el 35%
en ningún punto. También se puede
apreciar cómo el porcentaje de resis-
tentes disminuye justo después del ver-
tido de antibióticos (punto Río 2), para
luego aumentar y mantenerse a lo largo
del río. En el caso de los sedimentos las
resistencias se mantienen bastante si-
milares a lo largo del río.
z Patrones de multirresistencia
En la figura 13 se puede ver la distri-
bución de estos porcentajes en los pun-
tos del río y de los vertidos. Se observa
que en todos los puntos el 100% de las
bacterias son resistentes a 2 o más anti-
bióticos, mientras que más del 80% pre-
sentan resistencia a 3 o más antibióti-
cos. También se puede apreciar cómo a
partir del punto 3 disminuye drástica-
mente el porcentaje de resistentes a 3
antibióticos, dejando paso a multirre-
sistentes con más de 4 resistencias.
En la figura 14 se reflejan los mismos
datos para el caso de los sedimentos,
siendo el patrón similar: en el punto 2
prevalecen en este caso los multirresis-
tentes con 4 resistencias, para luego des-
cender su número, aumentando el de
resistentes a 5 o más antibióticos.
Bacterias resistentes a antibióticos
39Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
Figura 9. Porcentajes de resistencia a cefalexina
en las muestras de agua del río.
Figura 10. Porcentajes de resistencia a
amoxicilina en las muestras de agua del río.
Figura 11. Porcentajes de resistencia a
cefalexina en las muestras de sedimento
del río.
Figura 12. Porcentajes de resistencia a
amoxicilina en las muestras de sedimento
del río.
del número total de bacterias, todos los
humedales, así como la EDAR, presen-
tan diferencias estadísticamente signifi-
cativas (Kruskal-Wallis, p<0,001) respecto
del influente (Infl.) para todos los grupos
bacterianos. Asimismo, los humedales
3, 4, 7 y 8 eliminan significativamente
mejor (Kruskal-Wallis, p<0,05) que la
EDAR todos los grupos bacterianos, sien-
do el H7 la configuración que mejor ren-
dimiento de eliminación presenta.
Análisis de las resistencias a
antibióticos en los humedales
construidos
Al realizar los análisis de resistencias de
los efluentes de los humedales se com-
prueba que no presentan tasas de resis-
tencia significativamente diferentes (Krus-
kal-Wallis, p>0,05) del efluente de la EDAR
ni del influente. Los coliformes totales (fi-
gura 16) presentan tasas de resistencia
muy altas, con valores medios en torno
Estos datos hacen pensar que las re-
sistencias cruzadas están ampliamente
desarrolladas en el ecosistema, puesto
que todas las colonias aisladas fueron
resistentes al menos a 2 antibióticos, y
muchas de ellas a más de 3 y más de 4,
encontrándose también un número sig-
nificativo de colonias resistentes a todos
los antibióticos probados.
Eliminación de bacteriasresistentes a antibióticosen humedales construidos
Caracterización de la comunidad
bacteriana
En los efluentes de los humedales cons-
truidos se puede observar la dominan-
cia de los CT como principal grupo bac-
teriano, seguido de E. coli, siendo los En-
terococcus el grupo menos abundante
(figura 15). En cuanto a la eliminación
al 100%, y en algunos casos (H7) incluso
se observan mayores crecimientos en la
placa con antibiótico que en la control.
También se advierte cómo un aumento
en la concentración de antibiótico se tra-
duce en un menor porcentaje de resis-
tentes. En el caso de E. coli (figura 17) se
observan patrones similares entre los di-
ferentes sistemas, pero con tasas de re-
sistencia algo menores, alrededor del 50%.
En general, también se observa una dis-
minución del porcentaje de resistencias
con el aumento de la concentración de
antibiótico, pero menor que en el caso de
los CT. En los Enterococcus (figura 18) se
puede apreciar una sensibilidad mucho
mayor al antibiótico, siendo los porcen-
tajes máximos menores del 10%.
Aunque la mortalidad de las bacterias
patógenas o sus indicadores es muy ele-
vada en medios extraenterales, su gran
abundancia (McFeters et al., 1990) y de-
terminadas condiciones ambientales pue-
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201140
Medio ambiente
Colonias de E. coli resistentes en cada punto de muestreo (%)Antibiótico Concentración Río 1 AB Río 2 Río 3 EDAR Río 4 Río 5 Río 6
(μg) (n=20) (n=5) (n=6) (n=19) (n=22) (n=29) (n=29) (n=29)
Ampicilina 10 75,0 40,0 83,3 94,7 81,8 82,8 75,9 65,5
Doxiciclina 30 25,0 20,0 0,0 52,6 61,9 58,6 69,0 55,2
Tetraciclina 30 35,0 20,0 16,7 63,2 59,1 75,9 58,6 65,5
Streptomicina 10 40,0 100,0 0,0 63,2 52,4 65,5 55,2 34,5
Eritromicina 15 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0
Azitromicina 15 11,8 0,0 16,7 31,6 9,1 17,2 17,2 20,7
Penicilina 10 (U) 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0
Tabla 1. Patrones de resistencia de las colonias aisladas de E. coli en el río y los vertidos.
Colonias de E. coli resistentes en cada punto de muestreo (%)Antibiótico Concentración Sedimentos 1 Sedimentos 2 Sedimentos 3 Sedimentos 4 Sedimentos 5 Sedimentos 6
(μg) (n=25) (n=7) (n=15) (n=27) (n=27) (n=29)
Ampicilina 10 100,0 100,0 100,0 81,5 44,4 82,8
Doxiciclina 30 80,0 100,0 46,7 66,7 55,6 55,2
Tetraciclina 30 92,0 57,1 66,7 70,4 51,9 48,3
Streptomicina 10 40,0 28,6 46,7 51,9 40,7 34,5
Eritromicina 15 96,0 85,7 100,0 100,0 100,0 100,0
Azitromicina 15 16,0 0,0 7,1 33,3 14,8 3,4
Penicilina 10 (U) 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0
Tabla 2. Patrones de resistencia de las colonias aisladas de E. coli en los sedimentos.
den mantenerlas viables durante mucho
tiempo (Davies-Colley et al., 1999). Este
hecho es especialmente relevante en los
sedimentos, que actúan como reservorio
de bacterias (Fernandes y Watanabe, 2008;
Alm et al., 2003; Howel et al., 1995) debi-
do a la disponibilidad de nutrientes (Da-
vies et al., 1995), a la protección adicio-
nal que éstos proporcionan frente a la luz
(Davies-Colley et al., 1999) y a la depre-
dación de los protozoos (Davies y Bavor,
2000). Diversos autores han encontrado
una elevada correlación entre la densi-
dad bacteriana en los sedimentos y el agua
de diferentes medios (playas y orillas de
agua dulce) (Fernandes y Watanabe, 2008;
Alm et al., 2003; Junco et al., 2005), lo que
indica la existencia de un flujo continuo
de microorganismos entre los dos me-
dios, y por tanto, de su material genético
(incluyendo los genes de resistencia). To-
dos estos factores pueden estar influyendo
en el hecho de la elevada resistencia en
los sedimentos de los puntos 2 y 3, que
van disminuyendo a lo largo del río.
En general, las depuradoras reducen
entre 1 y 3 logaritmos la abundancia de
bacterias del agua de entrada (Hirata et
al., 2003; Reinthaler et al., 2003). Sin em-
bargo, esta reducción no tiene por qué ir
acompañada de una reducción en el nú-
mero de bacterias resistentes, sino al con-
Bacterias resistentes a antibióticos
41Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
Figura 13. Distribución de los porcentajes de multirresistencia de los puntos muestreados en el río
(izquierda) y de los vertidos (derecha).
Figura 14. Distribución de los porcentajes de
multirresistencia de los puntos muestreados en el
sedimento.
Figura 16. Porcentajes de coliformes totales
resistentes a amoxicilina en los efluentes de los
humedales construidos (H#), el efluente de la
EDAR (EDAR) y el influente de ambos (Infl.).
Figura 15. Log 10 de las Unidades Formadoras
de Colonias por mililitro en los efluentes de los
humedales construidos (H#), el efluente de la
EDAR (EDAR) y el influente de ambos (Infl.).
Figura 17. Porcentajes de E. coli resistentes a
amoxicilina en los efluentes de los humedales
construidos (H#), el efluente de la EDAR (EDAR)
y el influente de ambos (Infl.).
Figura 18. Porcentajes de Enterococcus
resistentes a amoxicilina en los efluentes de los
humedales construidos (H#), el efluente de la
EDAR (EDAR) y el influente de ambos (Infl.).
gramas, encontramos rangos de entre el
3 y el 66% de E. coli resistentes a ampi-
cilina, el 100% de resistentes a eritromi-
cina, entre el 15 y el 33% de resistentes
a tetraciclina, el 30% resistente a strep-
tomicina y el 70% resistente a penicili-
na (Reinthaler et al., 2003; Lefkowitz y
Durán, 2009; Costanzo et al., 2005; Ca-
rrol et al., 2005; Schwartz et al., 2003), to-
dos ellos valores comparables con los
obtenidos en el presente trabajo.
La multirresistencia es otra caracte-
ristica comúnmente estudiada. Chelosi
et al. (2003) encontraron que más del
56% de las Gram negativas de sedimen-
tos marinos cultivadas tenían resisten-
cia a 5 o más antibíoticos. Lefkowitz y
Durán (2009) midieron la multirresi-
sencia de E. coli en plantas de tratamiento
de aguas residuales, obteniendo valores
en el efluente de un 60% de multirresis-
tentes a 2 o más antibioticos, y un 25%
a 4 o más. Otros autores también lo han
estudiado (Tendencia y de la Peña, 2001;
Pillai et al., 1997; Lin y Biyela, 2005; To-
roglu, 2005; Chapin et al., 2005), y los da-
tos obtenidos en este estudio se en-
cuentran en los mismos rangos.
CONCLUSIONES
El estudio demuestra que los dos ver-
tidos estudiados, el de la industria pro-
ductora de antibióticos y el de la EDAR
de León, contribuyen tanto al incremento
de la contaminación bacteriana del río
como al aumento en el porcentaje de
bacterias resistentes a antibióticos en di-
cho río. Dichos vertidos también incre-
mentan el porcentaje de bacterias resis-
tentes simultáneamente a varios anti-
bióticos (multirresistencia), aunque se
trario, y por tanto aumentando el por-
centaje de bacterias resistentes (Da Cos-
ta et al., 2006). Las bacterias cuantificadas
en este estudio son indicadores fecales, y
por tanto, de fácil detección en efluentes
de depuradoras de aguas residuales ur-
banas, donde la contaminación es mayo-
ritariamente fecal; no así en las aguas re-
siduales industriales, como es el caso del
vertido de antibióticos, por lo que, aun-
que en este efluente no se detecte un nú-
mero demasiado elevado de indicadores
fecales, es posible que se estén aportan-
do genes de resistencia al medio a través
de otro tipo de bacterias no detectadas, o
incluso no cultivables (Roszak, 1987; Ash,
2002). En el caso de los humedales cons-
truidos (sistemas naturales), está demos-
trado que son más eficaces en la elimina-
ción de bacterias indicadoras de conta-
minación fecal que los convencionales
(García y Bécares, 1997), como también
se ha demostrado en este estudio.
Los porcentajes de resistencia obteni-
dos en este estudio corresponden a los
rangos de resistencia hallados por otros
autores. Así, los Enterococcus han pre-
sentado resistencias muy bajas (del 0%
en la mayoría de los casos) a amoxicili-
na, coincidiendo con Fernandes y Wa-
tanabe (2008). Las resistencias de E. co-
li y los CT a este mismo antibiótico tam-
bién son comparables a las encontradas
por otros autores (Carrol et al., 2005; Fars
et al., 2005; Lefkowitz y Durán, 2009),
aunque en el caso de los CT son un po-
co más altos los datos obtenidos en es-
te estudio (cerca de un 20%). En el caso
de los efluentes de los humedales cons-
truidos, las resistencias de los CT obte-
nidas son más altas de lo observado por
otros autores. Si comparamos los resul-
tados obtenidos a partir de los antibio-
observa que en el río ya existe un im-
portante porcentaje de dichas bacterias
multirresistentes antes del impacto de
dichos vertidos.
En cuanto a la comparación de siste-
mas convencionales (EDAR de León) y
sistemas extensivos (humedales cons-
truidos), se comprueba que los últimos
son mas eficaces en la eliminación de
bacterias fecales. Aunque no se obser-
van diferencias estadísticas entre dichos
sistemas en cuanto a la producción de
bacterias resistentes a antibióticos, que-
da claro que una mayor eliminación de
bacterias por los sistemas extensivos su-
pone una menor carga de bacterias re-
sistentes al medio ambiente.
La comparación entre los diferentes
diseños de humedales indica diferencias
entre dichos diseños tanto en la elimi-
nación de bacterias como en la produc-
ción de bacterias resistentes. Aunque las
diferencias no son estadísticamente sig-
nificativas entre muchos de ellos, pare-
ce existir un mayor incremento de bac-
terias resistentes en los sistemas de flu-
jo subsuperficial convencional, en
comparación con los de flujo superficial
o los sistemas hidropónicos.
Queda evidente por tanto que las bac-
terias resistentes a antibióticos están pre-
sentes en los ríos incluso en ausencia de
vertidos próximos, pero su abundancia
incrementa drásticamente por el efecto
de dichos vertidos. Por otra parte se evi-
dencia que los humedales construidos
son mejores que los fangos activados
tanto en la eliminación de bacterias co-
mo en la carga de bacterias resistentes
al medio ambiente. u
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201142
Medio ambiente
AGRADECIMIENTOSA FUNDACIÓN MAPFRE, que subvencionó el pre-sente estudio. A Roberto Romero, de la Universi-dad de Almería, por su colaboración en el análisisquímico de los antibióticos. El Ministerio de Cien-cia e Innovación subvencionó la construcción delas plantas piloto de humedales (proyectosCTM2005-06457-C05-03 y CTM2008-06676-C05-03TECNO).
EN LOS EFLUENTES DE LOS HUMEDALES CONSTRUIDOSDOMINAN LOS COLIFORMES TOTALES COMO PRINCIPAL
GRUPO BACTERIANO, SEGUIDOS DE E.COLI Y ENTEROCOCCUS
Bacterias resistentes a antibióticos
43Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
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SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201144
Normativa
LA ACCIÓN PREVENTIVA
La tutela jurídica de la seguridad y salud de los empleados del Estado
en las Administraciones Públicas
LA DETERMINACIÓN DE LA NORMATIVAAPLICABLE ALEMPLEADO PÚBLICO ENMATERIA PREVENTIVA
La entrada en vigor del Estatuto Bási-
co del Empleado Público (EBEP) supu-
so una importante novedad normativa,
como se advierte ya al utilizarse la ex-
presión de «empleado público» en la rú-
brica que titula la propia ley, porque no
va dirigido solo a los funcionarios pú-
blicos, sino también a aquellos que de-
sarrollan su prestación de trabajo para
las Administraciones Públicas con suje-
ción a un contrato laboral. De ahí que,
en principio, a la hora de determinar las
normas preventivas aplicables al em-
pleado público se plantee la cuestión re-
lativa a la posible existencia de dos nor-
mativas distintas para cada uno de los
dos grandes tipos de empleado público.
En materia de seguridad y salud labo-
ral, el EBEP contiene dos referencias diri-
gidas tanto al personal funcionario como
al personal laboral, dado que los artícu-
los en los que se insertan utilizan la gené-
rica expresión de «empleado público». La
primera, en el artículo 14 del EBEP, dedi-
cado a los derechos individuales, en su
apartado l) prevé que los empleados pú-
blicos tienen derecho a «recibir protec-
ción eficaz en materia de seguridad y sa-
lud en el trabajo». La segunda, en el artí-
culo 54 del EBEP, dedicado a los principios
de conducta del empleado público, en su
apartado 9º establece que éstos «obser-
varán las normas de seguridad y salud».
Se trata, por tanto, de dos referencias ge-
néricas pero significativas, no tanto por
su novedad respecto a la normativa pre-
existente al EBEP, sino por la intención de
dispensar la misma tutela en materia de
prevención de riesgos laborales al perso-
nal funcionario y al personal laboral. In-
tencionalidad que se deduce de ambos
preceptos al formularse, tanto el derecho
individual como el principio al que han
de ajustar su actuación los trabajadores
públicos, con la expresión omnicom-
prensiva de «empleado público».
En el EBEP encontramos dos referen-
cias más en materia preventiva, pero di-
rigidas únicamente a los funcionarios
públicos, y concretamente a su esfera co-
lectiva. Por un lado, el artículo 37.1.j) del
EBEP señala que serán objeto de nego-
ciación, en su ámbito respectivo y en re-
lación con las competencias de cada Ad-
ministración Pública y con el alcance que
legalmente proceda en cada caso, entre
45Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
Por JUAN GIL PLANA. Doctor en Derecho. Profesor asociado Derecho del Trabajo y Seguridad Social U.C.M.
Las Administraciones Públicas constituyen el instrumento a través del cual sesirven con objetividad los intereses generales y se prestan los servicios públicos.Para llevar a cabo esta labor, se nutren de empleados que han de desarrollar suprestación laboral en condiciones que respeten la normativa sobre seguridad ysalud laboral, lo que convierte a las Administraciones Públicas, en cuantoempleadores, en sujetos obligados en materia preventiva. Este estudio se dedica aexponer las particularidades más significativas de la acción preventiva en el ámbitode las Administraciones Públicas.
el artículo 19 del Estatuto de los Traba-
jadores (en adelante ET) ya contenía si-
milares referencias en materia preven-
tiva. Por lo tanto, puede concluirse que
la aprobación del EBEP no introduce no-
vedades respecto a la normativa laboral
precedente.
Empleados públicos incluidosen la LPRL
Dejando al margen las anteriores pre-
visiones legales, la norma de cabecera
en materia de seguridad y salud laboral
es la Ley 31/1995, de 8 de noviembre,
de Prevención de Riesgos Laborales (en
adelante LPRL). En esta norma, al abor-
otras materias, las que se establezcan en
la normativa de prevención de riesgos la-
borales; es decir, se posibilita la nego-
ciación colectiva sobre la seguridad y sa-
lud en el trabajo siempre y cuando exis-
ta habilitación legal previa. Por otro lado,
el artículo 40.1.e) del EBEP prevé que las
Juntas de Personal y los Delegados de
Personal tendrán, entre otras funciones,
la vigilancia del cumplimiento de la nor-
mativa vigente en materia de prevención
de riesgos laborales y ejercer, en su caso,
las acciones legales oportunas ante los
organismos competentes.
Si nos fijamos en el régimen jurídico
al que se sujeta el personal laboral de las
Administraciones Públicas, y en con-
creto en la legislación laboral aplicable,
dar la concreción de su radio de acción
subjetivo, se establece que tanto la LPRL
como sus normas de desarrollo serán
de aplicación tanto en el ámbito de las
relaciones laborales reguladas en el ET,
como en el de las relaciones de carác-
ter administrativo o estatutario del per-
sonal al servicio de las Administracio-
nes Públicas, con las peculiaridades que,
en este caso, se contemplen en el EBEP
o en sus normas de desarrollo (art. 3.1
LPRL).
A efectos aclaratorios, se señala que
cuando en el EBEP se haga referencia a
trabajadores y empresarios, se entende-
rán también comprendidos en dichos tér-
minos, respectivamente, al personal con
relación de carácter administrativo o es-
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201146
Normativa
Latin
stoc
k
tatutario y a la Administración Pública
para la que presta servicios, respecto a los
preceptos de la LPRL que gozan del ca-
rácter de básico, siendo aplicable el res-
to de preceptos en defecto de normativa
específica dictada por las Administracio-
nes Públicas [art. 3.1 y DA 3ª.2.a) y c) LPRL].
No obstante, junto a la genérica inclusión
de los empleados públicos en el ámbito
de aplicación subjetiva de la LPRL, en és-
ta se efectúan una serie de matizaciones
que, salvo la referencia al personal do-
méstico (al que no se aplica la LPRL en
virtud de lo dispuesto en su artículo 3.4),
afectan a colectivos que trabajan en el
sector público.
En primer lugar, en los centros y esta-
blecimientos militares se aplicará lo pre-
visto en la LPRL junto a las singularida-
des que se recojan en la normativa espe-
cífica (art. 3.3 LPRL). Tratándose del
personal laboral, estatutario y de los fun-
cionarios civiles al servicio de estableci-
mientos dependientes de la Administra-
ción Militar, por mandato de la DA 9ª de
la LPRL, el desarrollo normativo especí-
fico se circunscribe a la «adaptación» de
las normas relativas a los derechos y obli-
gaciones preventivas así como las referi-
das a la consulta y participación de los
trabajadores en la prevención de riesgos
laborales a las exigencias de la defensa
nacional, a las peculiaridades orgánicas
y al régimen vigente de representación
del personal en los establecimientos mi-
litares, incluidas las escuelas militares [tal
y como dispone la STS de 27 de julio de
2005 (RJ 8344)]; adaptación que actual-
mente se encuentra recogida en el Real
Decreto 1932/1998, de 11 de septiembre.
En relación al personal militar, de acuer-
do con lo previsto en la DA 9ª bis LPRL, la
regulación de los derechos y deberes pre-
ventivos, la consulta y participación de
los trabajadores y el régimen de respon-
sabilidades y sanciones se «aplicará» de
conformidad con la normativa militar;
aplicación singularizada de dichos as-
pectos que se contiene en el RD 1755/2007,
de 28 de diciembre.
En segundo lugar, para quienes pres-
tan su servicios para los establecimien-
tos penitenciarios se contempla la «adap-
tación» de la LPRL a las actividades cuyas
características justifiquen una regulación
especial, con remisión a la Ley 7/1990, de
19 de julio, sobre negociación colectiva y
participación en la determinación de las
condiciones de trabajo de los empleados
públicos (art. 3.3 LPRL); remisión que, ac-
tualmente, habrá de entenderse referida
a la negociación colectiva prevista en los
artículos 33 a 38 del EBEP. Por lo tanto,
se aplicará la LPRL salvo a las actividades
singulares que demanden una regulación
particularizada. Actualmente, como ad-
vierte la doctrina, la seguridad y salud la-
boral no han sido objeto de una especial
y significativa atención en la negociación
colectiva desarrollada en este concreto
ámbito funcional. 1
En tercer lugar, la LPRL no será de apli-
cación a aquellas actividades cuyas par-
ticularidades lo impidan en el ámbito de
una serie de funciones públicas, a saber:
a) policía, seguridad y resguardo adua-
nero, b) servicios operativos de protec-
ción civil y peritaje forense en los casos
de grave riesgo, catástrofe y calamidad
pública, y c) Fuerzas Armadas y activi-
dades militares de la Guardia Civil. Sin
perjuicio de lo anterior, la LPRL se con-
vierte en norma de referencia para re-
gular la seguridad y salud de estos co-
lectivos al configurarla como fuente ins-
piradora de la normativa que proceda a
regular la prevención de los trabajado-
res en estas actividades (art. 3.2 LPRL).
Las medidas singulares adoptadas pa-
ra la Policía Nacional vienen recogidas
en el RD 2/2006, de 16 de enero, y en re-
lación a la Guardia Civil vienen previs-
tas en el RD 179/2005, de 18 de febrero;
se trata, por tanto, de medidas singula-
res promulgadas en el ámbito de la Ad-
ministración General del Estado (AGE).
La interpretación comunitariade la exclusión prevista en laLPRL
No obstante la regulación estatal an-
teriormente mencionada, la exclusión
en materia de seguridad y salud laboral
para determinadas actividades prevista
en el artículo 3.2 LPRL adquiere especial
relevancia en la tutela preventiva de los
empleados públicos, dado que estas ac-
tividades son prestadas por personas al
servicio de las Administraciones Públi-
cas. Se plantean varias dudas. La pri-
mera, si la trasposición de la normativa
comunitaria es correcta en este aspec-
to, dado que el artículo 2 de la Directiva
89/391/CEE señala que dicha norma co-
munitaria se aplicará a todos los secto-
res de actividades, públicas o privadas
(actividades industriales, agrícolas, co-
merciales, administrativas, de servicios,
educativas, culturales, de ocio, etc.), no
siendo de aplicación cuando se opongan
a ello de manera concluyente las parti-
cularidades inherentes a determinadas
actividades específicas de la función pú-
blica, por ejemplo, en las Fuerzas Arma-
das o la policía, o a determinadas activi-
dades específicas en los servicios de pro-
tección civil; sin perjuicio de que se tutele,
la seguridad y la salud de los trabajado-
res queden aseguradas en la medida de
lo posible, habida cuenta los objetivos de
La acción preventiva en las Administraciones Públicas
47Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
(1) En el ámbito estatal, el IV Convenio Colectivo delpersonal laboral de la Secretaria General de
Asuntos Penitenciarios dedica cinco artículos a laprevención de riesgos laborales en los que seestablecen una serie de consideraciones muy
genéricas que nada aportan respecto de laregulación contenida en la LPRL, entre otras: a) se
recogen una serie de derechos del trabajador –a laprotección eficaz de su integridad física y a unaadecuada política de Seguridad e Higiene en el
Trabajo, a la participación en la política preventiva yen el control de las medidas preventivas
adoptadas–, así como el deber de observar y poneren práctica las medidas de prevención de riesgos
que se adopten legal y reglamentariamente (art. 81.1); b) se establecen las Unidades de Seguridad y
Salud Laboral (art. 82); c) se contemplan supuestosde cambio de puestos de trabajo por accidente,
enfermedad u otras circunstancias que disminuyanla capacidad laboral de los trabajadores (art. 83).
nitario para determinar el ámbito de apli-
cación de la Directiva 89/391/CEE no es-
tá basado en la pertenencia de los traba-
jadores a los distintos sectores de activi-
dades considerados globalmente, como
las Fuerzas Armadas, la policía y el servi-
cio de protección civil, sino exclusiva-
mente en la naturaleza específica de cier-
tos cometidos especiales desempeñados
por los trabajadores dentro de dichos sec-
tores, que justifica una excepción a las
normas dictadas por la citada directiva,
en razón de la absoluta necesidad de ga-
rantizar una protección eficaz de la co-
lectividad. Consecuentemente, se apli-
cará la Directiva 89/391/CEE a los colec-
tivos que desarrollen esas y otras actividades,
dado que dichos cometidos se realizan en
condiciones habituales, conforme a la mi-
sión encomendada al servicio de que se
trata, y ello aun cuando las intervencio-
nes derivadas de dichas actividades sean,
por su propia naturaleza, imprevisibles y
puedan exponer a los trabajadores que
las realicen a algunos riesgos para su se-
guridad y/o su salud; de suerte que la ex-
cepción prevista en el artículo 2.2 de la di-
rectiva únicamente puede aplicarse en el
supuesto de acontecimientos excepcio-
nales en los cuales el correcto desarrollo
de las medidas destinadas a garantizar la
protección de la población en situacio-
nes de grave riesgo colectivo exige que el
personal que tenga que hacer frente a un
suceso de este tipo conceda una priori-
dad absoluta a la finalidad perseguida por
tales medidas con el fin de que ésta pue-
da alcanzarse [ver auto de 14 de julio de
2005, Personalrat der Feuerwehr Ham-
burg, asunto C-52/04 (TJCE 2005/249)].
En tercer lugar, respecto a los aconte-
la presente directiva. La segunda duda
que se suscita se circunscribe a determi-
nar si el alcance de la exclusión legal se
refiere a los colectivos de trabajadores
que desarrollan esas actividades o solo
al desarrollo de esas actividades consi-
deradas en sí mismas, quedando los su-
jetos que las desarrollan sujetos a la LPRL
en el resto de actividades que prestan.
Estos interrogantes han sido resueltos
por la jurisprudencia comunitaria, en-
tre otros pronunciamientos, en la STJ-
CE de 12 de enero de 2006, Comisión de
las Comunidades Europeas contra Es-
paña, asunto C-132/04 (TJCE 2006/12),
dictada, precisamente, respecto a la ex-
clusión anteriormente referenciada de
la LPRL. En esta resolución se procede a
enjuiciar el ajuste de la normativa espa-
ñola a la Directiva 89/391/CEE, utili-
zando la doctrina comunitaria ya con-
solidada en resoluciones precedentes.
En primer lugar, partiendo tanto del
objeto de la Directiva 89/391/CEE, con-
sistente en promover la mejora de la se-
guridad y la salud de los trabajadores en
el trabajo, como del tenor literal de su ar-
tículo 2.1, del que se deduce que el ám-
bito de aplicación de esta directiva debe
entenderse de manera amplia, se consi-
dera que las excepciones al ámbito de
aplicación de la norma comunitaria, pre-
vistas en el artículo 2.2, párrafo primero,
deben interpretarse restrictivamente [ver
SSTJCE de 3 de octubre de 2000, Simap,
C-303/98 (TJCE 2000/234); 5 de octubre
de 2004, Pfeiffer y otros, asuntos acu-
mulados C-397/01 a C-403/01 (TJCE
2004/272)]. En consecuencia, esta ex-
cepción al ámbito de aplicación de la Di-
rectiva 89/391, definido de manera am-
plia, debe recibir una interpretación que
limite su alcance a lo que resulte estric-
tamente necesario para salvaguardar los
intereses que según dicha directiva pue-
den proteger los Estados miembros.
En segundo lugar, se recuerda que el
criterio utilizado por el legislador comu-
cimientos excepcionales que requieran
la adopción de medidas indispensables
para la protección de la vida, de la salud
así como de la seguridad colectiva, y cu-
yo correcto cumplimiento se vería com-
prometido si debieran observarse todas
las normas contenidas en la Directiva
89/391/CEE, la necesidad de no poner en
peligro las imperiosas exigencias de pre-
servación de la seguridad y de la integri-
dad de la colectividad, habida cuenta de
las características que revisten algunas
actividades específicas, debe prevalecer
transitoriamente sobre el objetivo de la
citada directiva, que es garantizar la se-
guridad y la salud de los trabajadores. Sin
embargo, en una situación excepcional
de esta índole, la excepción comunitaria
no exime a las autoridades competentes
de velar por que la seguridad y la salud
de los trabajadores queden aseguradas
«en la medida de lo posible».
A tenor de estos razonamientos, el Tri-
bunal de la Unión Europea concluye que
la normativa española no ha traspuesto
correctamente la normativa comunita-
ria y, en consecuencia, la exclusión for-
mulada en la LPRL debe entenderse en el
sentido de no referirse a los colectivos que
desarrollan dichas actividades, sino al de-
sarrollo de las actividades en sí de las mis-
mas. Respecto de estas actividades, debe
asegurarse la tutela preventiva con el al-
cance compatible con la situación que
ponen en marcha dichas actividades, ce-
diendo la tutela preventiva ante el inte-
rés de la salvaguarda de la colectividad.
Se ha de indicar que el Tribunal de la
Unión Europea, al hilo de una cuestión
de la ordenación del tiempo de trabajo,
concretamente en el auto del TJCE de 14
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201148
Normativa
La entrada en vigor del EBEP supuso una novedadnormativa porque no va dirigido solo a los
funcionarios públicos, sino también a aquellosque trabajen para las administraciones públicAs
con sujeción a un contrato laboral
de julio de 2005, Personalrat der Feuer-
wehr Hamburg, asunto C-52/04 (TJCE
2005/249), ha establecido que las activi-
dades ejercidas por las fuerzas de inter-
vención de un servicio público de bom-
beros se encuentran incluidas en el ám-
bito de protección de la norma comunitaria,
y, en consecuencia, debe entenderse in-
cluida en el ámbito de aplicación de la
LPRL. También al hilo de una cuestión
relativa al tiempo de trabajo, la STJCE de
3 de octubre de 2000, Simap, asunto C-
303/98 (TJCE 2000/234), y el auto de 3 de
julio de 2001, Sergas, asunto C-241/99 (TJ-
CE 2001/219), han señalado que el per-
sonal médico y enfermero que presta sus
servicios en los equipos de atención pri-
maria están comprendidos en el campo
de actuación de la directiva marco, y, en
consecuencia, no resultan comprendi-
dos en ninguno de los supuestos de ex-
clusión previstos en dicha norma. Por el
contrario, en la STJCE de 5 de octubre de
2004, Pfeiffer y otros, asuntos acumula-
dos C-397/01 a C-403/01 (TJCE 2004/272),
se ha concluido que la actividad de soco-
rrista acompañante de una ambulancia
o de un vehículo sanitario de emergen-
cias, en un servicio de socorro a heridos
o enfermos organizado por una asocia-
ción como la Cruz Roja alemana, no pue-
de estar comprendida en la exclusión
mencionada en el apartado anterior
Otros colectivos nomencionados expresamenteen la LPRL
Existen una serie de colectivos de em-
pleados públicos que no son aludidos de
forma singular y expresa en la LPRL, y
respecto de los cuales la aplicación de la
normativa preventiva puede suscitar pro-
blemática.
La primera duda se suscita respecto del
personal integrado en la Administración
de Justicia, y se debe a su no integración
dentro de la Administración Pública al
amparo de lo previsto en el artículo 117
CE. Con independencia de su integración
o no dentro del sector público, el silen-
cio guardado por la LPRL respecto a es-
te colectivo debe interpretarse en senti-
do de aplicabilidad de esta norma si te-
nemos en cuenta que la jurisprudencia
comunitaria ha interpretado muy res-
trictivamente las exclusiones a la aplica-
ción de la LPRL, al limitarlas no a colec-
tivos determinados sino a determinadas
actividades, e incluso ha sostenido que
en el desarrollo de las mismas se deberá
tutelar la seguridad y salud laboral hasta
donde la confrontación con el interés co-
lectivo permita, de suerte que solo cede-
rá la normativa preventiva cuando ésta
sea incompatible con la salvaguarda de
ese interés. En línea con la aplicabilidad
de la normativa preventiva a este colec-
tivo, el Dictamen 6/2001, de 5 de diciembre,
de la Dirección del Servicio Jurídico del
Estado, concluye que no puede enten-
La acción preventiva en las Administraciones Públicas
49Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
institución al que esté adscrito el inves-
tigador [art. 4.1.B) RDPI].
La aplicación de la LPRL y su norma-
tiva de desarrollo no plantean problema
alguno respecto del personal investiga-
dor en situación de contrato en tanto en
cuanto se le reconoce el disfrute de los
derechos de carácter laboral, así como
los relativos a los de seguridad social que
se deriven del contrato que formalice
(art. 5.3 RDPI), entre los que se encuen-
tra el derecho a la seguridad y salud la-
boral.
Más problemática y difícil se presen-
ta la aplicación de la normativa preven-
tiva al personal investigador en situa-
ción de beca, respecto del que no se efec-
túa un reconocimiento similar al personal
investigador contratado. Por lo tanto, la
conclusión inicial sería la exclusión de
este colectivo. Sin embargo, al configu-
rarse los deberes que ha de observar cual-
quier personal investigador, se estable-
ce que deberán atenerse al régimen in-
terno o de funcionamiento del organismo
o institución en el que desarrolle sus ac-
tividades, y como novedad frente a la an-
terior regulación, se hace referencia ex-
presa a que deberán atenerse especial-
mente en lo relativo a las condiciones de
trabajo y las normas de prevención de
riesgos laborales [art. 6.d) RDPI], resul-
tando, por tanto, obligados a observar la
LPRL y demás normativa preventiva, lo
que, en mi opinión, supone la inclusión
del personal investigador en situación
de becario, dado que no es concebible
obligar a este colectivo a sujetarse a las
normas preventivas si no se parte de una
previa, aunque tácita, asunción de la apli-
cabilidad de dicha normativa a dicho co-
lectivo.
El personal que desarrolla acciones de
voluntariado a través de organizaciones
públicas, cuyo régimen jurídico viene
establecido en la Ley 6/1996, de 15 de
enero, del Voluntariado, es el tercer co-
lectivo respecto del que la aplicación de
derse excluido del ámbito de aplicación
de la LPRL al personal integrado en la Ad-
ministración de Justicia, dado que no hay
una referencia expresa a la exclusión de
la actividad de este colectivo, debiendo
considerarse, por tanto, que la expresión
«Administraciones Públicas» utilizada
por la LPRL no responde a su acepción
jurídica prevista en la Ley 30/1992, de 26
de noviembre, de Régimen Jurídico de
las Administraciones Públicas y del Pro-
cedimiento Administrativo Común, sino
que obedece a una concepción amplia
asimilable a la de empresario público que
tenga a su cargo personal vinculado por
un contrato de trabajo y/o personal vin-
culado en virtud de relación administra-
tiva o estatutaria.
La segunda duda se suscita con el per-
sonal investigador en formación –los de-
nominados becarios de investigación–
cuando desarrollan su investigación den-
tro de las Administraciones Públicas,
siendo uno de los supuestos más signi-
ficativos los becarios de investigación en
universidades públicas.
El régimen jurídico del personal in-
vestigador en formación viene estable-
cido en el Real Decreto 63/2006, de 27
de enero, que tiene por objeto estable-
cer el régimen jurídico general del per-
sonal investigador en formación y su re-
lación con las entidades públicas y pri-
vadas a las que estén adscritos (art. 1
RDPI). 2
Dentro del personal investigador se
distinguen dos situaciones jurídicas en
las que éste se puede encontrar, a saber:
la situación de beca, que se extiende a los
dos primeros años desde la concesión de
la ayuda [art. 4.1.a) RDPI], y la situación
de contrato, que, una vez superado el pe-
riodo de beca y obtenido el Diploma de
Estudios Avanzados o documento ad-
ministrativo que lo sustituya, compren-
derá, como máximo, los dos años si-
guientes, en la que se formalizará un con-
trato laboral con el organismo, centro o
la legislación preventiva se presenta pro-
blemática. En principio, este colectivo
no estaría incluido en la aplicación de la
normativa de seguridad y salud laboral
al definirse al voluntario como aquél que
desarrolla su acción de forma altruista y
solidaria sin recibir contraprestación
económica, sin perjuicio del derecho al
reembolso de los gastos que el desem-
peño de la actividad voluntaria ocasio-
ne [art. 3.1.a) y c) LV]. Por lo tanto, al ca-
recer de las notas de laboralidad queda-
rían excluidos de la tutela preventiva.
No obstante, esta inicial conclusión
se ve distorsionada al enumerarse los
derechos del voluntario y establecerse
que éste tiene derecho a realizar su ac-
tividad en las debidas condiciones de
seguridad e higiene en función de la na-
turaleza y características de aquélla [art.
6.g) LV], al tiempo que se establece que
la organización para la que desarrollan
la acción de voluntariado debe garanti-
zarles la realización de sus actividades
en las debidas condiciones de seguridad
e higiene en función de la naturaleza y
características de aquéllas [art. 8.2.f) LV],
lo que debe conducirnos a concluir que
este colectivo, como mínimo, se bene-
ficiará de la acción preventiva que lleve
a cabo la organización pública respec-
to a sus trabajadores. Al respecto se ha
indicado que como quiera que «es in-
dudable que este derecho de los volun-
tarios se constituye a imagen y seme-
janza de lo establecido en la normativa
laboral […], los voluntarios pueden exi-
gir de las organizaciones para las que
prestan sus servicios que pongan en mar-
cha planes de prevención de riesgos en
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201150
Normativa
(2) Ver, entre otros, Cristóbal Roncero, R.: «Elpersonal investigador en formación: un contrato
común con peculiaridades», Revista MinisterioTrabajo e Inmigración, nº 83, 2009, págs. 323-352,
Aguilera Izquierdo, R.: «El régimen jurídico delpersonal docente e investigador contratado por las
Universidades Públicas de Madrid», Revista EspañolaDerecho del Trabajo, 2003, nº 118, pág. 563-581.
los lugares de desarrollo de la prestación
en condiciones ciertamente parecidas
a las previstas por la Ley 31/1995; pues-
to que en ambos casos el bien jurídico
protegido es el mismo: la persona que
realiza una actividad para un tercero (de-
biendo asumir el tercero la obligación
de proteger la integridad física de quien
trabaja para él). En su caso, las respon-
sabilidades que se derivaran del in-
cumplimiento de las obligaciones de res-
peto de la normativa relativa a seguri-
dad e higiene en el trabajo tendrían, para
las organizaciones infractoras, natura-
leza penal (art. 316 y 147 del CP) y civil
(1.101 del CC)».3
LOS SERVICIOS DEPREVENCIÓN
Régimen jurídico
El capítulo IV de la LPRL se dedica a la
regulación de los servicios de preven-
ción encargados del cumplimiento del
deber preventivo que pesa sobre el em-
pleador, y, en consecuencia, sobre la Ad-
ministración Pública en su condición de
empleador laboral y funcionarial. Su de-
sarrollo reglamentario se encuentra en
el Real Decreto 39/1997, de 17 de enero,
por el que se aprueba el Reglamento de
Servicios de Prevención de Riesgos La-
borales (en adelante RSP).
En la configuración del servicio de pre-
vención se contemplan hasta cuatro po-
sibles modalidades a las que puede acu-
dir la empresa: la asunción personal por
el empleador de la acción preventiva; la
designación de uno o varios trabajado-
res; la constitución de un servicio de pre-
vención propio o la concertación de un
servicio de prevención con una entidad
especializada y ajena a la propia organi-
zación empresarial (art. 30 LPRL y art.
10 RSP).
De estas modalidades de organización
preventiva, la asunción personal por par-
te del empleador se sujeta a un requisi-
to previo consistente en que la empresa
no cuente con más de diez trabajadores
y aquél desarrolle de forma habitual su
actividad en el centro de trabajo, teniendo
la capacidad en materia preventiva en
función de los riesgos existentes en la
empresa (art. 30.5 LPRL), de suerte que
esta modalidad de organización del ser-
vicio de prevención se prevé para en-
tornos laborales muy reducidos desde
La acción preventiva en las Administraciones Públicas
51Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
(3) De Nieves Nieto, N.: «Voluntariado y empleo enel tercer sector», Revista Ministerio Trabajo yAsuntos Sociales, nº 33, 2001, págs. 294-295.C
orre
os y
Tel
égra
fos
mula de garantizar el cumplimiento del
deber preventivo no se dará en ninguna
Administración Pública.
La elección del servicio de prevención
por parte del empresario no se deja a su
total discrecionalidad, dado que los su-
puestos en que se puede utilizar cada
uno de ellos giran en torno a los supuestos
en los que se ha de constituir un servi-
cio de prevención propio, supuestos cu-
ya verificación obliga de forma ineludi-
ble a constituir dicha modalidad de ser-
vicio de prevención. En efecto, el artículo
14 del RSP establece tres supuestos en
los que no se puede constituir un servi-
el punto de vista del volumen de traba-
jadores y se sujeta a una presencia efec-
tiva del empleador en el lugar de traba-
jo así como una formación suficiente en
materia preventiva.
En el ámbito de las Administraciones
Públicas, esta modalidad del servicio de
prevención no se podrá constatar ni en
la Administración General del Estado, ni
en las comunidades autónomas, ni en la
mayoría de las entidades locales. Es más,
como quiera que en las entidades loca-
les con un número de trabajadores no
superior a diez, donde sería posible la
adopción de este tipo de servicio pre-
ventivo, dado que quien ejerce la posi-
ción del empleador es, al fin y a la pos-
tre, un cargo político electo, en muchos
supuestos no remunerado, que no está
habitualmente en la entidad local ni cuen-
ta con la formación especializada re-
querida, puede aventurarse que esta fór-
cio de prevención que no sea uno pro-
pio dentro de la organización de la em-
presa, a saber:
a) que se trate de empresas que cuenten
con más de 500 trabajadores,
b) que, tratándose de empresas de entre
250 y 500 trabajadores, desarrollen tra-
bajos con exposición a radiaciones io-
nizantes en zonas controladas, o tra-
bajos con exposición a agentes tóxi-
cos y muy tóxicos, y en particular a
agentes cancerígenos, mutagénicos o
tóxicos para la reproducción, de pri-
mera y segunda categoría, según el
Real Decreto 363/1995 y el Real De-
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201152
Normativa
el tribunal de la unión europea estableció que lasactividades de las fuerzas de intervención de un
servicio público o de bomberos están incluidas enel ámbito de protección de la norma comunitaria,
y por tanto, en el ámbito de la LPRL
creto 1078/1993, o actividades en que
intervienen productos químicos de al-
to riesgo y son objeto de la aplicación
del Real Decreto 886/1988, o trabajos
con exposición a agentes biológicos
de los grupos 3 y 4, según la Directiva
90/679/CEE, o actividades de fabrica-
ción, manipulación y utilización de
explosivos, incluidos los artículos pi-
rotécnicos y otros objetos o instru-
mentos que contengan explosivos,
c) que, tratándose de empresas no in-
cluidas en los apartados anteriores,
así lo decida la autoridad laboral, pre-
vio informe de la Inspección de Tra-
bajo y Seguridad Social y, en su caso,
de los órganos técnicos en materia
preventiva de las comunidades autó-
nomas, en función de la peligrosidad
de la actividad desarrollada o de la fre-
cuencia o gravedad de la siniestrali-
dad en la empresa, salvo que se opte
por el concierto con una entidad es-
pecializada ajena.
Sobre los parámetros de constitución
del servicio de prevención propio, la de-
signación de uno o varios trabajadores
emerge como una figura residual ope-
rativa cuando no se dan los supuestos
de constitución obligatoria del servicio
de prevención propio o no se haya cons-
tituido un servicio de prevención aje-
no (art. 12 RSP). Mientras que esta úl-
tima modalidad se podrá adoptar cuan-
do la designación de uno o varios
trabajadores sea insuficiente para la re-
alización de la actividad de prevención
y no concurran las circunstancias que
determinan la obligación de constituir
un servicio de prevención propio, o
cuando lo decida la autoridad laboral,
previo informe de la Inspección de Tra-
bajo, cuando no se haya optado por la
constitución de un servicio de preven-
ción propio o cuando se haya produci-
do una asunción parcial de la actividad
preventiva por parte del empresario (art.
16.1 RSP).
La particularidad de lasAdministraciones Públicas enrelación a la elección delservicio de prevención
La cuestión controvertida que se sus-
cita es si las Administraciones Públicas
quedan sujetas a la configuración y re-
gulación de los servicios de prevención
expuesta y si, por ejemplo, una Admi-
nistración Pública que supere los 500
trabajadores viene obligada a constituir
un servicio de prevención propio, no pu-
diendo recurrir a la concertación con en-
tidad especializada. En principio, pare-
ce claro que la respuesta ha de ser afir-
mativa. Sin embargo, la cuestión deja de
estar clara cuando se contemplan otras
dos previsiones contenidas en el RSP.
En primer lugar, los artículos 11, 14 y
16.1 del RSP carecen de carácter básico
respecto al personal civil con relación de
carácter administrativo o estatutario al
servicio de las Administraciones Públi-
cas, tal y como expone el apartado 2.a)
de disposición adicional primera del RSP.
Y en segundo lugar, la aplicación de la
regulación sobre las posibles modalida-
des de servicio de prevención que se pue-
den adoptar queda sujeta a la inexisten-
cia de normativa específica sobre la ma-
teria en el ámbito de las Administraciones
Públicas, tal y como señala la DA 4ª del
RSP, al prever que «en el ámbito de las Ad-
ministraciones Públicas, la organización
de los recursos necesarios para el desa-
rrollo de las actividades preventivas y la
definición de las funciones y niveles de
cualificación del personal que las lleve a
cabo se realizará en los términos que se
regulen en la normativa específica que al
efecto se dicte, de conformidad con lo dis-
puesto en el artículo 31, apartado 1, en la
disposición adicional tercera de la Ley de
Prevención de Riesgos Laborales, y en la
disposición adicional primera de este Re-
glamento, previa consulta con las organi-
zaciones sindicales más representativas,
en los términos señalados en la Ley 7/1990,
de 19 de julio, sobre negociación colecti-
va y participación en la determinación de
las condiciones de trabajo de los emplea-
dos públicos [actualmente el EBEP]», con-
cluyendo que solo «en defecto de la cita-
da normativa específica, resultará de apli-
cación lo dispuesto» en el RSP.
Si tenemos en cuenta el art. 31.1 de la
LPRL y las disposiciones adicionales 1ª y
4ª del RSP, debe concluirse que las Ad-
ministraciones Públicas pueden dictar
normativas específicas para regular, en-
tre otras materias, la organización de los
recursos necesarios para el desarrollo de
las actividades preventivas, pudiendo por
tanto elaborar y publicar un reglamento,
si se trata de la AGE, un decreto, si se tra-
ta de una comunidad autónoma, o un de-
creto de alcaldía o resolución de la Dipu-
tación, si se trata de una entidad local, so-
bre la configuración de su servicio de
prevención, que permita determinar la
modalidad preventiva que mejor se ajus-
te a sus características. Por lo tanto, la obli-
gatoriedad para adoptar un servicio de
prevención propio, o lo que es lo mismo,
la aplicación de lo dispuesto en el art. 14
del RSP, será exigible siempre que no exis-
ta un acuerdo dictado por el órgano com-
petente que regule la organización de los
recursos necesarios para el desarrollo de
las actividades preventivas de la forma
que mejor se adapte a las necesidades de
esta Administración Pública.
Esta conclusión viene acogida en el
criterio interpretativo administrativo
seguido por la Inspección de Trabajo,
que se encuentra contenido en la res-
puesta de fecha 20 de marzo de 2009 de
la Dirección General de Trabajo del Mi-
nisterio de Trabajo e Inmigración a una
consulta sobre reconocimientos médi-
cos a los policías locales, en la que se
señala que tanto la LPRL como el RSP
otorgan un tratamiento específico en
determinadas cuestiones respecto del
personal civil con relación de carácter
La acción preventiva en las Administraciones Públicas
53Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
publicado ni había entrado en vigor, en
el que se solicitaba que se declarase la
obligación de la Junta de Castilla y León
de constituir un servicio de prevención
propio y suficiente.
Este conflicto colectivo fue resuelto
por la sentencia del Tribunal Superior
de Justicia de Castilla y León, fechada en
Valladolid el 19 de junio de 2000 (AS
2000/2945), en atención a los siguientes
razonamientos.
En primer lugar, si bien «en el art. 30
de la Ley de Prevención de Riesgos La-
borales, de 8 de noviembre de 1995 (Ley
31/1995), al referirse a la protección y
prevención de riesgos profesionales, se
establece que el empresario designará
uno o varios trabajadores para ocupar-
se de dicha actividad y constituirá un
servicio de prevención o concertará di-
cho servicio con una entidad especiali-
zada ajena a la empresa, es decir, se da
opción a optar por un servicio propio o
un servicio de prevención ajeno», no es
menos cierto «que el art. 14 del RD 39/1997,
de 17 de enero, por el que se aprueba el
Reglamento de los servicios de preven-
ción, establece que habrá de constituir-
se un servicio de prevención propio cuan-
do se trate de empresas que cuenten con
más de 500 trabajadores o de empresas
que teniendo entre 250 y 500 desarro-
llen algunas de las actividades incluidas
en el anexo 1, que se caracterizan todas
ellas por ser peligrosas, penosas o insa-
lubres», de suerte que, a tenor de la lite-
ralidad de este último precepto, «pare-
cería que la Junta de Castilla y León ven-
dría obligada a constituir un servicio de
prevención con medios propios».
Sin embargo, y en segundo lugar, par-
administrativo al servicio de las Admi-
nistraciones Públicas. Entre las cues-
tiones que se consideran incluidas es-
taría «la organización de los recursos
necesarios para el desarrollo de las ac-
tividades preventivas y el funciona-
miento de los mismos». Aun cuando es-
te criterio administrativo se refiere a los
funcionarios públicos, no existe argu-
mento obstativo alguno para su exten-
sión al personal laboral de las Admi-
nistraciones Públicas, dadas las previ-
siones normativas en las que se
fundamenta, ya que éstas no hacen re-
ferencia a los funcionarios públicos si-
no a las Administraciones Públicas, re-
ferencia que engloba a todo su perso-
nal con independencia del vínculo
jurídico.
Y ésta parece ser la solución dada por
nuestra más alta instancia jurisdiccio-
nal, el Tribunal Supremo, respecto a unos
hechos que se exponen a continuación.
En el año 2000, la Junta de Castilla y Le-
ón, así como su Gerencia de Servicios
Sociales, siendo notorio que tenían ca-
da uno de estos entes administrativos
más de 500 trabajadores, no tenían cons-
tituido ni servicio de prevención propio
ni ajeno, lo que es puesto en evidencia
por la representación de los trabajado-
res en la Comisión Paritaria del primer
Convenio Colectivo para el Personal La-
boral de la Administración General de la
Comunidad de Castilla y León. Ante di-
cha reclamación sindical, el presidente
de la Comisión responde que en esos
momentos se estaba trabajando en la
elaboración de un decreto sobre la cre-
ación de los servicios de prevención, del
cual se daría conocimiento a la repre-
sentación social a través del Comité In-
tercentros.
Ante esta situación se plantea un con-
flicto colectivo por la representación de
los trabajadores, cuando el decreto de
organización de los servicios preventi-
vos se había elaborado pero no se había
tiendo de la muy cuestionable aplicabi-
lidad a la Junta de Castilla y León del Re-
al Decreto 1488/1998, actualmente de-
rogado y sustituido por el Real Decreto
67/2010, considera que «el art. 6 del RD
1488/1998 […] da opción a que se cons-
tituya un servicio de prevención propio
o se recurra a un servicio de prevención
ajeno, aunque se matiza también que
puedan ser compartidos los cometidos
por los servicios propios o ajenos», con-
cluye que «si como hemos dicho la Jun-
ta de Castilla y León no ha constituido
todavía los servicios de prevención pa-
ra sus trabajadores (obviamente esta Sa-
la no puede pronunciarse sobre el co-
lectivo de funcionarios), la demanda de
conflicto colectivo ha de ser estimada,
pero no en los términos en que se plan-
tea, es decir, que la Junta de Castilla y Le-
ón haya de constituir un servicio de pre-
vención propio, sino también que pue-
de hacerlo a través de servicios ajenos,
pues si no fuera así, es decir, si se la obli-
gara a constituir un servicio propio co-
mo se pretende, estaríamos limitando
las facultades organizativas que como
tal empresa le corresponden y que ade-
más cuenta con el apoyo legal a que an-
tes se hacía referencia; en esta línea se
dirige el decreto en ciernes de la Junta
de Castilla y León que va a regular la pre-
vención de riesgos laborales de la Ad-
ministración de la Comunidad de Cas-
tilla y León, y que obviamente afectará
al personal funcionarial y al laboral de
la misma».
Como quiera que la demanda de con-
flicto colectivo solicitaba que se declara-
se la obligación de la Junta de Castilla y
León de constituir un servicio de pre-
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201154
Normativa
la confluencia de empleados públicos y empleadosprivados en un mismo centro de trabajo plantea
una serie de interrogantes a la hora de desplegarla tutela de seguridad y salud
de los empleados públicos
vención propio y la sentencia declara que
la Administración autonómica tiene obli-
gación de constituir un servicio preven-
tivo propio o concertarlo con una enti-
dad especialidad, se produce una dis-
cordancia entre lo solicitado y lo
sentenciado. Esto llevó a la representa-
ción de los trabajadores a plantear recurso
de casación ante el Tribunal Supremo,
que fue resuelto por la sentencia de 24 de
abril de 2001 (RJ 2001/5119), declarando
que la Administración autonómica tiene
la obligación de crear un servicio de pre-
vención propio y suficiente, no admi-
tiendo la posibilidad alternativa de acu-
dir a un servicio de prevención ajeno.
No obstante, el contenido declarativo
del fallo dispositivo de esta sentencia del
Tribunal Supremo, que parece contra-
rio a la afirmada posibilidad de las Ad-
ministraciones Públicas de libre deter-
minación de la organización del servi-
cio preventivo sostenida en este estudio,
no puede extrapolarse a cualquier otro
supuesto de forma automática si tene-
mos en cuenta los argumentos utiliza-
dos en la sentencia.
De un lado, acierta la sentencia del Tri-
bunal Supremo al criticar y desautorizar
la aplicación no razonada a las Admi-
nistraciones autonómicas del RD
1488/1998 que lleva a cabo la adapta-
ción de la normativa preventiva a la Ad-
ministración General del Estado, dado
que dicha aplicabilidad «no puede man-
tenerse a la vista de los artículos 1 y 2 del
citado Real Decreto, que fijan tanto el
objeto como el ámbito de aplicación del
mismo, ya que determina como único
objeto del Decreto adaptar a la Admi-
nistración General del Estado la Ley
31/1995 y el Reglamento 39/1997, silen-
ciando por completo a las comunidades
autónomas, exclusión que se confirma
en el artículo 2, que determina el ámbi-
to de aplicación en cuatro apartados que
comprenden a: la Administración Ge-
neral del Estado y organismos públicos
vinculados o dependientes de ella; cen-
tros y establecimientos militares; esta-
blecimientos penitenciarios, policía, se-
guridad y resguardo aduanero o servi-
cios operativos de protección civil y
peritaje forense. Es pues claro que el re-
curso acierta cuando denuncia infrac-
ción por aplicación indebida de la cita-
da norma legal».
De otro lado, revelándose como un ra-
zonamiento crucial para la cuestión con-
trovertida, partiendo del artículo 31.1 y
de la Ley DA 3ª de la LPRL, así como de
las D.A. 1ª y 4ª del RSP, concluye el Tri-
bunal Supremo que «es claro que las Ad-
ministraciones Publicas pueden dictar
normativas específicas para regular en-
tre otras materias la organización de los
recursos necesarios para el desarrollo de
las actividades preventivas», normativa
específica que, por ejemplo, para la Ad-
ministración General del Estado se con-
creta en el Real Decreto 67/2010, pero
que no existe respecto de la Administra-
ción autonómica ante la que se dirige el
conflicto colectivo, lo que explica el fallo
de la sentencia del Tribunal Supremo,
como expresamente se reconoce al afir-
mar que «esta falta de regulación espe-
cífica parece provisional ya que la pro-
pia sentencia recoge en el apartado sex-
to de hechos probados que hay constancia
La acción preventiva en las Administraciones Públicas
55Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
Latin
stoc
k
pasado como solución a las exigencias
del mercado y de la crisis económica, el
origen de la concesión administrativa tie-
ne su origen en el siglo XIX, dominado
por la ideología liberal, y responde a la
necesidad de acometer las demandas del
desarrollo técnico sin abandonar los pos-
tulado de un Estado, y por ende, de una
Administración no intervencionista; bus-
cando en los sujetos privados los recur-
sos financieros que los avances técnicos,
como el ferrocarril, demandaban para su
implementación. El distinto punto de
partida no nos impide afirmar que, en la
actualidad, la apariencia externa, la foto
superficial, en los supuestos de descen-
tralización productiva en el ámbito pri-
vado y en las concesiones administrati-
vas, nos expone imágenes muy pareci-
das: un centro de imputación jurídica
(empresario privado o Administración
Pública) traslada el desarrollo de una par-
te de su actividad, sea inherente o no, a
otro centro de imputación jurídica (nor-
malmente otro empresario privado, aun-
que no es descartable que se traslade ha-
cia otra Administración Pública).
La gestión indirecta de servicios pú-
blicos, como fenómeno de descentrali-
zación propio y particular de las Admi-
nistraciones Públicas, puede generar la
confluencia de empleados públicos y em-
pleados privados en un mismo centro de
trabajo, o la confluencia de empleados
privados en centros de trabajo públicos
o la confluencia de empleados públicos
en centros de trabajo privados o, inclu-
so, puede dar lugar a que se gestione un
servicio público en centros privados cons-
truidos sobre terrenos de titularidad pú-
blica. Estas posibles interacciones qué
duda cabe que plantean una serie de in-
terrogantes a la hora de desplegar la tu-
tela de la seguridad y salud de los em-
pleados públicos, así como a la hora de
cumplir la obligación preventiva que pe-
sa sobre la Administración Pública en su
condición de empleador.
de que se ha elaborado un decreto sobre
la materia que no ha sido todavía publi-
cado; por ello, cuando esta normativa es-
pecífica sea promulgada a ella, habría
quizá que atenerse en lo que es objeto
del presente litigio, pero en tanto llegue
hay que aplicar lo dispuesto en el Regla-
mento 39/1997 como expresamente or-
dena el párrafo segundo de la disposi-
ción adicional cuarta del mismo, que dis-
pone: «en defecto de la citada normativa
específica, resultará de aplicación lo dis-
puesto en este Reglamento». Y como pre-
misa de su fallo dispositivo, afirma que
«en consecuencia de todo lo razonado
precedentemente y aunque tenga una
validez provisoria, la aplicación del Re-
glamento conduce a la estimación del re-
curso, pues conforme al mismo artículo
14, la Junta de Castilla y León ha de cons-
tituir un servicio de prevención de ries-
gos profesionales propio».
LA COORDINACIÓN DEACTIVIDADES EN LASADMINISTRACIONESPÚBLICAS
Una de las tendencias que ha marca-
do y marca las relaciones laborales es la
dirigida a externalizar determinadas ac-
tividades del ciclo productivo, sean in-
herentes o no a la actividad principal de
la empresa. El fenómeno de la descen-
tralización productiva, aunque pudiera
parecer lo contrario, no es exclusivo de
la actividad productiva privada, no se
verifica únicamente en el ámbito de las
relaciones laborales privadas, sino que
también se constata en el ámbito de las
Administraciones Públicas, donde se re-
curre a la gestión indirecta de ciertos ser-
vicios públicos por medio de diferentes
técnicas, siendo la más significativa la
concesión administrativa.
Si la descentralización productiva apa-
rece en la década de los setenta del siglo
Distintas normas comunitarias e in-
ternacionales, que debían trasponerse
a nuestro derecho interno, han sido las
directas inspiradoras del art. 24 de la
LPRL que establece obligaciones gené-
ricas de coordinación y que ha sido de-
sarrollado mediante el RD 171/2004, de
30 de enero.
Supuestos de concurrencia
El art. 24 de la LPRL y el RD 171/2004
distinguen tres supuestos de concurrencia
de actividades empresariales, exigiendo
diferentes obligaciones de coordinación
en cada uno de ellos. En todo caso, di-
chas obligaciones son acumulativas, es
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201156
Normativa
decir, no se excluyen, sino que se su-
perponen de manera gradual.
a) Concurrencia de trabajadores de
varias empresas en un mismo centro
de trabajo
El primer supuesto de concurrencia
empresarial contemplado en el art. 24
de la LPRL es la coincidencia física de
trabajadores de varias empresas en un
mismo centro de trabajo. Según dicho
artículo, «cuando en un mismo centro
de trabajo desarrollen actividades tra-
bajadores de dos o más empresas, éstas
deberán cooperar en la aplicación de la
normativa sobre prevención de riesgos
laborales. A tal fin establecerán los me-
dios de coordinación que sean necesa-
rios en cuanto a la protección y preven-
ción de riesgos laborales y la informa-
ción sobre los mismos a sus respectivos
trabajadores en los términos previstos
en el apartado 1 del artículo 18 de esta
Ley. En este caso, resulta indiferente la
relación o vínculo jurídico que une a las
empresas, y cada una de ellas se en-
cuentra «en la misma posición respec-
to de las demás». La obligación nace, por
tanto, del hecho de compartir el mismo
centro o el mismo espacio de trabajo. Si
existía alguna duda sobre esta afirma-
ción, el art. 4.1 del RD 171/2004 ha ve-
nido a zanjarla definitivamente al se-
ñalar que «el deber de cooperación se-
rá de aplicación a todas las empresas y
trabajadores autónomos concurrentes
en el centro de trabajo, existan o no re-
laciones jurídicas entre ellos».
En relación con el deber de informa-
ción, conviene señalar, en primer lugar,
que, tras la entrada en vigor del RD
171/2004, este deber no se traduce ex-
clusivamente en una obligación de las
empresas hacia sus trabajadores – como
prevé el art. 24.1 de la LPRL–, sino tam-
bién de éstas entre sí. En efecto, el deber
de cooperación exige, según dispone el
art. 4.2 del RD 171/2004, la información
recíproca entre las empresas concurrentes
«sobre los riesgos específicos de las acti-
vidades que desarrollen en el centro de
trabajo que puedan afectar a los traba-
jadores de las otras empresas concu-
rrentes en el centro, en particular sobre
aquellos que puedan verse agravados o
modificados por circunstancias deriva-
das de la concurrencia de actividades».
La información abarcará también a los
accidentes de trabajo que hayan tenido
lugar como consecuencia de los riesgos
de las actividades concurrentes. El em-
presario, cuyo trabajador o trabajado-
res han sufrido el accidente, deberá in-
formar a los demás empresarios pre-
sentes en el centro de trabajo.
b) Concurrencia de trabajadores
de varias empresas en un centro de
trabajo del que un empresario es
titular
Respecto del empresario titular del
centro de trabajo, el art. 24.2 de la LPRL
establece la obligación de adoptar «las
medidas necesarias para que aquellos
otros empresarios que desarrollen acti-
vidades en su centro de trabajo reciban
la información y las instrucciones ade-
cuadas en relación con los riesgos exis-
tentes en el centro de trabajo y con las
medidas de protección y prevención co-
rrespondientes, así como sobre las me-
didas de emergencia a aplicar, para su
traslado a sus respectivos trabajadores».
De nuevo aquí es indiferente la relación
La acción preventiva en las Administraciones Públicas
57Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
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stoc
k
al resto de los empresarios. El em-
presario titular conoce, por tanto, los
riesgos propios de su centro de tra-
bajo y además los riesgos específicos
de las actividades desarrolladas en di-
cho centro. Con estos datos podrá re-
alizar la evaluación de los riesgos del
centro de trabajo, que pueden haberse
incrementado como consecuencia de
las actividades realizadas en él por
distintas empresas, y poner en mar-
cha las medidas correspondientes, in-
cluyendo las de emergencia. Realiza-
da la evaluación correspondiente, fa-
cilitará las oportunas instrucciones a
los empresarios concurrentes con el
fin de prevenir los riesgos existentes
en el centro de trabajo.
c) Concurrencia de trabajadores de
varias empresas en un centro de
trabajo cuando existe un empresario
principal
El tercer supuesto de concurrencia re-
gulado en el art. 24.3 de la LPRL hace re-
ferencia a la existencia de relaciones de
subcontratación entre las empresas con-
currentes. Según dicho precepto, «las em-
presas que contraten o subcontraten con
otras la realización de obras o servicios
correspondientes a la propia actividad de
aquéllas y que se desarrollen en sus pro-
pios centros de trabajo deberán vigilar el
cumplimiento por dichos contratistas y
subcontratistas de la normativa de pre-
vención de riesgos laborales». Los debe-
res de seguridad de la empresa que con-
trata o subcontrata en relación con los
trabajadores de las empresas contratis-
tas o subcontratistas aparecen así espe-
cialmente reforzados para otorgar una
o vínculo jurídico que une a las empre-
sas, aunque, a diferencia del supuesto
anterior, en este caso una de ellas ocu-
pa una posición preeminente al ser ti-
tular del centro de trabajo.
Son dos las medidas específicas que de-
be adoptar el empresario titular del cen-
tro de trabajo cuyos trabajadores desa-
rrollen actividades en él; cuando no ten-
ga trabajadores en el centro, únicamente
tendrá que cumplir la primera de las dos
medidas señaladas a continuación rela-
tivas al deber de información, a saber:
n Deberá informar a los otros empre-
sarios concurrentes «sobre los ries-
gos propios del centro de trabajo que
puedan afectar a las actividades por
ellos desarrolladas, las medidas refe-
ridas a la prevención de tales riesgos
y las medidas de emergencia que se
deben aplicar» (art. 7.1 RD 171/2004).
La información se refiere a los ries-
gos propios del centro de trabajo de
la empresa titular y no a los riesgos
específicos o derivados de la activi-
dad concreta desarrollada por cada
una de las empresas concurrentes. Y
lo mismo sucede en relación con las
medidas sobre las que debe informar,
que serán las adoptadas por el em-
presario titular en relación con sus
instalaciones, maquinaria, etc.
n Deberá dar instrucciones a los em-
presarios concurrentes para la pre-
vención de los riesgos existentes en el
centro de trabajo y sobre las medidas
que deben aplicarse cuando se pro-
duzca una situación de emergencia
(art. 8.1 RD 171/2004). El empresario
titular del centro de trabajo, con tra-
bajadores que desarrollan activida-
des en él, recibirá, al mismo tiempo
que facilitará a los demás, informa-
ción sobre los riesgos específicos de
las actividades que cada empresa de-
sarrolla en su centro de trabajo. Una
vez recibida esta información es cuan-
do dará las instrucciones pertinentes
protección a la seguridad y salud de los
trabajadores afectados.
Las obligaciones que corresponden al
empresario principal se intensifican cuan-
do realiza una contrata correspondiente
a su propia actividad. En estos casos, el
empresario principal, además de cumplir
con su deber de cooperación con las em-
presas concurrentes en el mismo centro
y con su obligación de información e ins-
trucción en el supuesto de que sea tam-
bién titular del centro de trabajo, debe vi-
gilar el cumplimiento de la normativa en
materia de prevención de riesgos labora-
les por los contratistas o subcontratistas.
El RD 171/2004, en su art. 10, ha trata-
do de precisar el alcance de dicho deber
de vigilancia. En este sentido, parece de-
jar claro que el deber de vigilancia con-
siste en comprobar que las empresas con-
tratistas y subcontratistas cumplen con
sus obligaciones en la prevención de ries-
gos laborales, y no en vigilar específica-
mente a los trabajadores de dichas em-
presas. Por otro lado, también matiza el
alcance objetivo del deber de vigilancia
al señalar las materias sobre las que ex-
presamente el empresario principal de-
berá exigir a los contratistas y subcon-
tratistas su cumplimiento. Así, el em-
presario principal, antes del inicio de la
actividad en su centro de trabajo, exigi-
rá a las empresas contratistas y subcon-
tratistas que «le acrediten por escrito que
han realizado, para las obras y servicios
contratados, la evaluación de riesgos y la
planificación de su actividad preventi-
va». Asimismo, exigirá a dichas empre-
sas que «le acrediten por escrito que han
cumplido sus obligaciones en materia de
información y formación respecto de los
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201158
Normativa
una sentencia del tribunal supremo obligó a la junta de castilla y león a crear un servicio
de prevención propio y suficiente, no admitiendola posibilidad de acudir a un servicio de
prevención ajeno
trabajadores que vayan a prestar sus ser-
vicios en el centro de trabajo». No se tra-
ta, por tanto, de velar por el cumplimiento
de toda la normativa en prevención de
riesgos laborales, sino exclusivamente
de las obligaciones relativas a la evalua-
ción de riesgos y planificación de la ac-
tividad preventiva e información y for-
mación de los trabajadores.
La problemática aplicación de la normativa preventivacoordinadora en laAdministración Pública
La aplicación de la normativa preven-
tiva en materia de coordinación de acti-
vidades a las Administraciones Públicas
cuando éstas deciden prestar los servicios
públicos mediante gestión indirecta no
supone en la mayoría de los casos ningún
problema. Piénsese en la contrata de la
limpieza de los edificios municipales, don-
de es claro que la confluencia de emple-
ados públicos y de trabajadores de la em-
presa de limpieza contratista obliga a la
Administración Pública a observar las obli-
gaciones preventivas en materia de co-
ordinación en su calidad de empresario
principal y titular del centro trabajo, así
como empresario que tiene trabajadores
en un centro de trabajo donde confluyen
trabajadores de otras empresas.
No obstante, se puede dar un supues-
to en el que la Administración Pública,
sin poner empleados públicos en la ges-
tión indirecta de un servicio, se limite a
ceder el terreno donde éste se va a desa-
rrollar, sin aportar ni siquiera una edifi-
cación. Por ejemplo, un Ayuntamiento
que cede unos terrenos para la gestión
indirecta del servicio público de perrera
municipal. ¿Cabe aplicar en este tipo de
supuestos la normativa preventiva en
materia de interacción empresarial?
La respuesta no es sencilla si nos ate-
nemos a la literalidad de las normas. El
art. 24 de la LPRL, así como su norma de
desarrollo, el RD 171/2004, se refieren a
la coordinación de actividades empresa-
riales, y en este supuesto no se verifican
dos actividades diferenciadas sino una
sola, el servicio público gestionado indi-
rectamente, por lo que no serían de apli-
cación las obligaciones, lo que conduci-
ría a concluir que no sería de aplicación
la referida normativa. Sin embargo, la
concreta regulación de la coordinación
preventiva va más allá de la concurren-
cia de actividades. Así, tanto el artículo
24.2 de la LPRL como los artículos 6 a 8
del RD 171/2004 establecen una serie de
obligaciones hacia el empresario titular,
que, aunque definido como quien tiene
la capacidad de puesta a disposición y de
gestión de centro, en el caso de las Ad-
ministraciones Públicas no debe olvidarse
que la titularidad del servicio público la
mantiene la Administración siempre y en
todo caso, lo que permitiría una respuesta
afirmativa al interrogante planteado.
Existe un pronunciamiento judicial que
aborda esta problemática respecto de un
trabajador, con categoría profesional de
oficial 1ª, contratado por una empresa pri-
vada, que sufre un accidente de trabajo
reparando el tejado de la entrada princi-
pal de un cementerio municipal, repara-
ción contratada por un Ayuntamiento con
la empresa del trabajador y en la que no
se había instalado apuntalamiento algu-
no, no habiendo recibido tampoco cur-
sos de formación. A consecuencia del ac-
cidente laboral, el trabajador, declarado
en situación de incapacidad permanen-
te total, plantea una reclamación judicial
indemnizatoria contra su empresa y con-
tra al Ayuntamiento, que es estimada par-
cialmente al condenar a la empresa pero
absolver a la entidad local.
Frente a la solución dada en instancia,
el trabajador acude en suplicación soli-
citando, entre otros motivos, que se con-
dene también al Ayuntamiento por in-
fracción de lo previsto en el artículo 24
de la LPRL en materia de coordinación
preventiva; desestimándose tal preten-
sión en la STSJ Extremadura de 2 de di-
ciembre de 2004 (AS 2004/3170), argu-
mentándose que los apartados 1º y 2º
del artículo 24 de la LPRL parten de la
La acción preventiva en las Administraciones Públicas
59Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
de la empresa o empresas que tienen tra-
bajadores en el mismo».
También se descarta la aplicabilidad de
las obligaciones como empresario prin-
cipal previstas en el art. 24.3 de la LPRL,
en la medida en que si bien dicho apar-
tado «impone a las empresas que con-
traten o subcontraten con otras la reali-
zación de obras o servicios correspon-
dientes a la propia actividad de aquéllas
y que se desarrolle en sus propios centros
de trabajo el deber de vigilar el cumpli-
miento por los contratistas y subcontra-
tistas de la normativa de prevención de
riesgos laborales», la propia configura-
ción de esta obligación preventiva «de-
muestra que para que operen los núme-
ros anteriores se exige, además, que la
empresa principal también desarrolle ac-
tividad en el centro […], pero tampoco
en virtud de ello puede extenderse la res-
ponsabilidad al Ayuntamiento deman-
dado, puesto que la juzgadora de instan-
cia entendió que la obra que se desarro-
llaba en el centro de trabajo donde se
produjo el accidente no correspondía a
premisa «de que en un mismo centro de
trabajo desarrollen actividades trabaja-
dores de dos o más empresas para, en
tal caso, imponerles la obligación de co-
operar en la aplicación de la normativa
sobre prevención de riesgos laborales, y
esa situación no se daba en el centro de
trabajo donde se produjo el accidente
de que tratamos, pues como tal no pue-
de considerarse el cementerio munici-
pal donde se realizaba la obra, sino so-
lo donde radicaba la obra misma, es de-
cir, el tejado de la puerta principal, que
es lo que la empresa demandada estaba
reparando, y en tal centro de trabajo no
consta que desarrollasen actividades más
que trabajadores de dicha empresa, la
de construcción, pues en la reparación
no participaban, o al menos no aparece
tal cosa en el relato fáctico de la senten-
cia recurrida, trabajadores del Ayunta-
miento también demandado. No se da,
pues, la situación necesaria para la apli-
cación de los dos primeros números del
artículo 24 de la Ley 31/1995, que parte
de que en un mismo centro de trabajo
presten servicios trabajadores de dos o
más empresas, no bastando con que el
lugar donde está establecido pertenez-
ca a empresa distinta de la que ejecuta
una obra o servicio. Así se deduce no so-
lo del mismo precepto, sino también del
Real Decreto 171/2004, de 30 de enero,
dictado en su desarrollo, que se basa en
que todas las empresas a que se refieren
desarrollen actividades en un mismo
centro, lo cual determina riesgos no so-
lo para los trabajadores de cada una de
ellas, sino también para las demás que
concurren en el mismo centro, por lo
que se impone la coordinación entre to-
das a fin de prevenir y, en la medida de
lo posible, evitar tales riesgos, y eso no
sucede si la empresa titular del lugar don-
de se asienta el centro no realiza activi-
dad alguna ni, por tanto, provoca riesgo
para sus trabajadores, pues ninguno tra-
baja en el centro de trabajo, ni para los
la propia actividad de la corporación mu-
nicipal». Y ahonda esta tercera posibili-
dad al afirmar que es cierto que la juris-
prudencia ha establecido que «es, por tan-
to, el hecho de la producción del accidente
dentro de la esfera de la responsabilidad
del empresario principal en materia de
seguridad e higiene lo que determina en
caso de incumplimiento la extensión a
aquél de la responsabilidad en la repara-
ción del daño causado, pues no se trata
de un mecanismo de ampliación de la ga-
rantía en función de la contrata, sino de
una responsabilidad que deriva de la obli-
gación de seguridad del empresario pa-
ra todos los que prestan servicios en un
conjunto productivo que se encuentra
bajo su control», pero tampoco aparecen,
a juicio del órgano de suplicación, «en el
relato fáctico de la sentencia recurrida, ni
el recurrente formula alegación ni razo-
namiento alguno en tal sentido, datos que
determinen que fuera el Ayuntamiento
quien controlara la realización de la obra»,
o, como precisando más, nos dice tam-
bién el Alto Tribunal en sentencia de 16
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201160
Normativa
Latin
stoc
k
de diciembre de 1997 (RJ 1997/9320), que
el trabajo se desarrollase en el centro de
trabajo de la empresa principal con sus
instrumentos de producción y bajo su
control, caso en que sería «perfectamen-
te posible que una actuación negligente
o incorrecta del empresario principal cau-
se daños o perjuicios al empleado de la
contrata, e, incluso, que esa actuación sea
la causa determinante del accidente la-
boral sufrido por éste y por ello en estos
casos el empresario principal puede ser
empresario infractor», añadiendo que
«aunque esta conclusión se establece en
un caso claro de contrata para una obra
o servicio correspondiente a la propia ac-
tividad, lo decisivo no es tanto esta cali-
ficación como el que el accidente se ha-
ya producido por una infracción impu-
table a la empresa principal y dentro de
su esfera de responsabilidad», lo cual, se
insiste, «no aparece aquí ni el recurrente
nos razona que suceda en este caso».
En definitiva, en la escasa doctrina ju-
dicial existente se concluye que la apli-
cación de los supuestos contemplados
en los apartados 1º y 2º de la LPRL, así
como en los artículos 4 a 9 del RD 171/2004,
está supeditada a la concurrencia de tra-
bajadores de la Administración Pública
con trabajadores de otras Administra-
ciones o empresas privadas. Mientras
que la operatividad del apartado 3º del
artículo 24 de la LPRL y el artículo 10 del
RD 171/2004 está condicionada no tan-
to a la existencia de concurrencia de tra-
bajadores, sino a que la Administración
ejerza un verdadero, real y efectivo con-
trol en el desarrollo de la prestación del
servicio público o de la actividad cuan-
do ésta no constituya en sí misma con-
siderada un servicio público.
LA PARTICULARIDAD EN EL ÁMBITOSANCIONADORPREVENTIVO DE LASADMINISTRACIONESPÚBLICAS
Una última cuestión debe ser objeto
de exposición, aun cuando no se trata
de un asunto que suscite dudas inter-
pretativas, lo cual no exime de los dis-
tintos pareceres críticos que se obser-
van en la doctrina científica sobre la par-
ticular configuración de las medidas que
se pueden adoptar ante la infracción por
parte de la Administración Pública de
la medida preventiva.
A diferencia de lo que acontece ante
la infracción de la normativa de seguri-
dad y salud laboral por parte de un em-
pleador privado, sujeto al régimen de
sanciones previsto en el Real Decreto
Legislativo 5/2000, de 4 de agosto, por
el que se aprueba el Texto Refundido de
la Ley de Infracciones y Sanciones del
Orden Social (LISOS), el artículo 45 de
la LPRL dispone que en el ámbito de las
relaciones del personal civil al servicio
de las Administraciones Públicas, las in-
fracciones serán objeto de responsabi-
lidades a través de la imposición, por re-
solución de la autoridad competente,
de la realización de las medidas correc-
toras de los correspondientes incum-
plimientos.
Por lo tanto, para las Administracio-
nes Públicas no se contempla la impo-
sición de sanciones económicas, sino
la aplicación de medidas correctoras.
Esta solución debe ser objeto de crítica
dado que la imposición de sanciones
pecuniarias se erige en un mecanismo
mucho más efectivo que la adopción de
medidas correctoras, de suerte que la
reparación de las infracciones a la nor-
mativa preventiva por parte de las Ad-
ministraciones Públicas mediante la téc-
nica de la corrección y no la de la san-
ción pecuniaria puede suponer una
quiebra en la tutela preventiva de los
empleados públicos, dado que las Ad-
ministraciones, ante la ausencia de san-
ciones, pueden considerar la posibili-
dad de contravenir la citada normativa
frente a los costes que supone su cum-
plimiento voluntario, e incluso, la adop-
ción de las medidas correctoras.
La adopción de las medidas correcto-
ras se establecerá con sujeción confor-
me al procedimiento que al efecto se es-
tablezca, que para la Administración Ge-
neral del Estado se encuentra previsto
en el Real Decreto 707/2002, de 19 de
julio. No obstante, el artículo 45 de la
LPRL establece que, en el ámbito de la
Administración General del Estado, ese
procedimiento deberá ajustarse a las si-
guientes pautas:
a) El procedimiento se iniciará por el ór-
gano competente de la Inspección de
Trabajo y Seguridad Social por orden
superior, bien por propia iniciativa o
a petición de los representantes del
personal.
b) Tras su actuación, la Inspección efec-
tuará un requerimiento sobre las me-
didas a adoptar y el plazo de ejecu-
ción de las mismas, del que se dará
traslado a la unidad administrativa
inspeccionada a efectos de formular
alegaciones.
c) En caso de discrepancia entre los mi-
nistros competentes como conse-
cuencia de la aplicación de este pro-
cedimiento, se elevarán las actua-
ciones al Consejo de Ministros para
su decisión final.
Aunque el Real Decreto 707/2002 con-
templa el procedimiento administrati-
vo para la imposición de medidas co-
La acción preventiva en las Administraciones Públicas
61Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
para las administraciones públicas no secontempla la imposición de sanciones económicas,
sino la aplicación de medidas correctoras,solución que debe ser objeto de crítica
La acción preventiva en las Administraciones Públicas
blica, con independencia de si el em-
pleado público afectado es un funcio-
nario o un trabajador laboral.
Ahora bien, del mecanismo de impo-
sición de medidas correctoras se exclu-
yen una serie de colectivos o de materias.
En primer lugar, a las entidades pú-
blicas empresariales no les será de apli-
cación el presente reglamento, que-
dando, en consecuencia, excluidas de
este procedimiento y sometidas al régi-
men ordinario derivado de la plena apli-
cación de la LISOS (art. 2.2 RD 707/2002).
En segundo lugar, se excluye a los cen-
tros y establecimientos militares y las
actividades a que se refiere el artículo
3.2 de la LPRL, quedando sujetos a lo
previsto en su normativa específica (art.
2.3 RD 707/2002).
En tercer lugar, no se aplicará a las
cuestiones de prevención de riesgos la-
borales que se susciten respecto del per-
sonal de los contratistas, subcontratis-
tas de obras o servicios o concesiona-
rios de cualquier índole que realicen su
actividad en instalaciones de la AGE o
de sus organismos autónomos, respec-
to de los cuales se aplicará siempre el
rrectoras ante la infracción de la nor-
mativa preventiva por la Administración
General del Estado, se establece su apli-
cación respecto al personal civil al ser-
vicio de las restantes Administraciones
Públicas únicamente en defecto de nor-
mativa propia, de suerte que las com-
petencias asignadas a los delegados del
Gobierno, a los subsecretarios de los de-
partamentos ministeriales y al Consejo
de Ministros corresponderán, en todo
caso, a los respectivos órganos de go-
bierno de cada Administración Pública
(D.A.2ª RD 707/2002). Por lo tanto, se
establece una aplicación subsidiaria de
este Real Decreto para el resto de las Ad-
ministraciones Públicas.
Al utilizarse en el artículo 45 de la LPRL
la expresión «personal al servicio de las
Administraciones Públicas» al delimitar
el ámbito subjetivo de la imposición de
medidas correctoras, surge la duda de si
solo va dirigida a la infracción de la nor-
mativa preventiva que afecte a los em-
pleados públicos sujetos a una relación
funcionarial o estatutario o también se
extiende a la afectación de los emplea-
dos públicos sujetos a una relación la-
boral, respecto de los cuales, en princi-
pio, la comisión de una infracción pre-
ventiva acarrearía una sanción pecuniaria.
Esta duda ha sido despejada expresa
y directamente para la Administración
General del Estado, y subsidiariamente
para el resto de Administraciones Pú-
blicas, por el Real Decreto 707/2002, al
delimitar su ámbito de aplicación y se-
ñalar que dicha norma reglamentaria
afectará «a todo el personal empleado
en los distintos centros, dependencias
o lugares de trabajo de los mismos, con
independencia de que la relación que
se mantenga sea de naturaleza laboral,
estatutaria o funcionarial». En conse-
cuencia, la imposición de medidas co-
rrectoras será la solución prevista ante
la infracción de la normativa preventi-
va cometida por una Administración Pú-
procedimiento ordinario. No obstante
lo anterior, si de las actuaciones ins-
pectoras realizadas o de la información
previamente recabada se infiere que, de
alguna forma, puede resultar afectado
el órgano administrativo correspon-
diente, como titular de las instalaciones
o en virtud de las responsabilidades de
coordinación a que hace referencia el
artículo 24 de la LPRL, se le pondrá en
su conocimiento, tan pronto como sea
posible, a los efectos que procedan (art.
2.4 RD 707/2002).
En cuarto lugar, no será de aplicación
a los órganos de la AGE cuando actúen
en la condición de promotor de obras de
construcción, conforme al Real Decreto
1627/1997, de 24 de octubre, por el que
se establecen disposiciones mínimas de
seguridad y salud en las obras de cons-
trucción, que se regirán por sus normas
específicas (art. 2.5 RD 707/2002). u
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201162
Normativa
AGRADECIMIENTOSEste trabajo ha sido financiado gracias a una ayu-da a la investigación concedida por FUNDACIÓNMAPFRE. Mi agradecimiento también se extiendea Pilar Manzano Bayán.
C U R S O S · I N F O R M A C I Ó N · C O N V O C AT O R I A S · S E M I N A R I O S · J O R N A D A S ·NN
OOTTII
CCIIAA
SS
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201164
FUNDACIÓN MAPFRE ha fallado
la convocatoria 2011 de ayudas a
la investigación, becas Ignacio Her-
nando de Larramendi, Primitivo de
Vega y becas de formación en el ex-
tranjero para profesionales, con un
importe global superior a un millón
de euros. Este año se han concedido
un total de 75 becas. En las áreas de
Prevención y Medio Ambiente, y tras
analizar las 482 solicitudes presenta-
das, se ha resuelto la concesión de 20
ayudas a la investigación. En el caso
de las becas Ignacio Hernando de La-
rramendi, se han resuelto cuatro be-
cas, de 51 solicitudes provenientes de
Iberoamérica y Portugal. El comité de
valoración ha tenido en cuenta el cu-
rrículum investigador de los solici-
tantes, la innovación y originalidad de
la propuesta, la calidad y rigor cientí-
fico-técnico de los proyectos y su de-
sarrollo e impacto social. Con estas
ayudas, FUNDACIÓN MAPFRE con-
tribuye a la consecución de sus prin-
cipales objetivos: garantizar la calidad
de vida de las personas, perfeccionar
la formación y la investigación cientí-
fica en todo lo relacionado con la pre-
vención de accidentes humanos y ma-
teriales y la conservación del medio
ambiente. Se detallan a continuación
los proyectos a los que se han conce-
dido las ayudas.
Ayudas a la investigación
Prevención: 10
n Aguilar Camacho, Sylvia Elena
Prevención de riesgos laborales por
medio de las compras públicas en
Centroamérica.
Fundación Centro de Gestión Tec-
nológica e Informática Industrial
(CEGESTI). Costa Rica.
n Asensio Martínez, Ángela Cristina
Desarrollo de una metodología pa-
ra la evaluación de riesgos psicoso-
ciales y diseño para su validación.
Zaragoza.
n Bernaldo de Quirós Aragón, Mó-
nica
Análisis psicosocial de las agresiones
a los profesionales de los servicios de
urgencia y emergencia del SUMMA
112 de la Comunidad de Madrid.
Facultad Psicología. Universidad
Complutense de Madrid.
n Cantizano González, Alexis
Estudio y evaluación de la eficiencia
de las protecciones contra incendios
en construcciones tipo atrio.
Instituto de Investigación Tecnoló-
gica. Universidad Pontificia de Co-
millas de Madrid.
n Chamorro Gutiérrez, Eva
Riesgos personales producidos por
LEDs utilizados en dispositivos de
uso cotidiano.
Factoría I+D. Madrid.
n Garrido Manrique, Jesús
La prevención de los riesgos natura-
les a través del ordenamiento jurí-
dico y la ordenación territorial.
ETS Ingenieros de Caminos, Cana-
les y Puertos. Universidad de Gra-
nada.
n Laffón Lage, Blanca
Riesgo asociado a la exposición a na-
nopartículas de óxidos metálicos:
efectos celulares y moleculares en cé-
lulas neuronales.
Unidad de Toxicología. Universidad
de A Coruña.
n Sánchez Reche, Ana María
Evaluación de la seguridad y accesi-
bilidad en los parques infantiles –
SAFEPLAY.
Centro Tecnológico del Juguete (AJU).
Alicante.
n Vidueira Penín, José Miguel
Protección contra incendios en plan-
tas eólicas y aerogeneradores.
CEPREVEN. Madrid.
Concesión de las ayudas a la investigación de laconvocatoria 2011 Se han recibido más de mil solicitudes en el conjunto de las convocatorias
Las becas perfeccionan la
formación y la investigación
en prevención de accidentes
y la conservación del medio
ambiente
· C U R S O S · I N F O R M A C I Ó N · C O N V O C AT O R I A S · S E M I N A R I O S · J O R N A D A S
65Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
n Vilaplana Fernández, Joan Manuel
Exposición y vulnerabilidad a los
desprendimientos de roca en Mont-
serrat.
Departamento de Geodinámica y Geo-
física. Universidad de Barcelona.
Medio ambiente: 10
n Abascal Santillana, Ana Julia
Desarrollo de una metodología para
la predicción a medio-largo plazo de
derrames de hidrocarburos y su apli-
cación en la lucha contra la conta-
minación marina.
Instituto de Hidráulica Ambiental de
Cantabria. Universidad de Santan-
der.
n Bedoya Frutos, César
Evaluación del cumplimiento de las
exigencias básicas de ahorro de ener-
gía en viviendas: contribución solar
mínima de agua caliente sanitaria.
Escuela Técnica Superior de Arqui-
tectura. Universidad Politécnica de
Madrid.
n Delgadillo Méndez, Diana Alexan-
dra
Percepción territorial de las comuni-
dades locales del Cañón del Chica-
mocha. Implementación de progra-
mas de educación ambiental para la
conservación de los bosques secos.
Fundación Conserva. Bogotá (Co-
lombia).
n González Díez, Isabel
Diseño de prototipos de materiales
biosintéticos para su uso como mate-
riales de construcción.
Facultad de Química. Universidad de
Sevilla.
n Iglesias Martín, Irene
Los centros de recuperación de fauna
silvestre como centinelas de la con-
servación mediante la aplicación de
la epidemiología espacial.
Centro de Investigación en Sanidad
Animal (CISA). Instituto Nacional de
Investigación Agraria (INIA). Madrid.
n Irusta Mata, Rubén
Evaluación ecotoxicológica de pro-
ductos farmacéuticos y de higiene per-
sonal (PPCP´s) como medida para la
prevención de la contaminación en
ambientes acuáticos.
Departamento de Ingeniería Quími-
ca y Tecnología del Medio. Universi-
dad de Valladolid.
n Olivares Marín, Mara
Fabricación y caracterización de elec-
trodos altamente eficaces para su em-
pleo en la descontaminación de aguas
y la obtención de H2.
Facultad de Ciencias. Universidad de
Extremadura. Badajoz.
n Puig Ventosa, Ignasi
Minería urbana: extracción de recur-
sos de vertederos.
Fundación ENT. Barcelona.
n Valle Pérez, Carlos
¡Cuidado con tus aletas!
Instituto de Ecología Litoral. Uni-
versidad de Alicante.
n Vidal Sáez, Gladys
Control de la contaminación de aguas
servidas en áreas rurales de alta sensi-
bilidad sísmica a través de humedales
construidos. Incidencia en la elimina-
ción del potencial biológico evaluado
como disrupción endocrina (CON2ASER).
Centro de Ciencias Ambientales. Uni-
versidad de Concepción (Chile).
Becas Ignacio Hernando deLarramendi
Prevención: 2
n Gelvan de Veinsten, Silvia
Prevención del burnout de docentes
de nivel medio.
Asociación de Institutos de Enseñanza
Privada de la Provincia de Buenos Ai-
res (Argentina).
n Ramos Bonilla, Juan Pablo
Exposición personal a asbestos en ta-
lleres de frenos para vehículos de flo-
ta pesada en la ciudad de Bogotá.
Departamento de Ingeniería Civil y
Ambiental. Universidad de los An-
des. Bogotá (Colombia).
Medio ambiente: 2
n Lanfranconi, Mariana Patricia
Respuesta diferencial del fitoplanc-
ton marino frente a la contaminación
por hidrocarburos.
Facultad de Ciencias Naturales. Uni-
versidad Nacional de Patagonia. Chu-
but (Argentina).
n Cruz Bello, Gustavo Manuel
Análisis multitemporal de la degra-
dación ambiental de la cuenca del río
Necaxa. Puebla (México).
Departamento de Hidrobiología. Uni-
versidad Metropolitana. Iztalapa (Mé-
xico).
C U R S O S · I N F O R M A C I Ó N · C O N V O C AT O R I A S · S E M I N A R I O S · J O R N A D A S ·
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201166
NNOO
TTIICC
IIAASS
Los pasados 18, 19 y 20 de
octubre se ha celebrado
el undécimo Encuentro Eu-
roamericano «Riesgo y Tra-
bajo», organizado por FUN-
DACIÓN MAPFRE y la Uni-
versidad de Salamanca en
colaboración con el Institu-
to Nacional de Seguridad e
Higiene en el Trabajo y la
Junta de Castilla y León.
En esta edición se ha tra-
tado, entre otros temas, los
derechos fundamentales en
prevención de riesgos labo-
rales, la Estrategia españo-
la de Seguridad y Salud en
el Trabajo 2007-2012, la in-
novación y nuevas tecnolo-
gías aplicadas a la preven-
ción, el análisis de la nor-
mativa y su aplicación, ca-
sos de éxito en empresas y
la formación de los técnicos.
También se han contrasta-
do las distintas experiencias
a nivel regional e interna-
cional tanto en Europa co-
mo en América. Como no-
vedad, se ha contado con
dos mesas sobre el futuro
del técnico de prevención y
las nuevas fronteras de la se-
guridad y la salud laboral.
Las principales conclu-
siones del Encuentro han si-
do las siguientes:
n Respecto a la Estrategia
española de Seguridad y
Salud 2007-2012, se des-
taca, tanto en el diagnós-
tico de la situación como
en la elaboración y la eje-
cución del plan, el im-
portante nivel de diálogo
y consenso alcanzado, lo
que es considerado como
un factor favorable.
n Sobre «Política e iniciati-
vas de las comunidades
autónomas», se incide en
la necesidad de una ma-
yor coordinación y armo-
nización, sobre todo en la
interpretación y aplica-
ción de las normas, por
las distintas autonomías
españolas.
n En la mesa de debate «Más
allá de la prevención», re-
conociendo las dificulta-
des para implantar el es-
quema previsto en la nor-
mativa en la pequeña y
mediana empresa, se ha-
ce referencia a la necesi-
dad de superar el mero
cumplimiento de la nor-
mativa de prevención de
riesgos laborales. Se cree
conveniente aprovechar
sinergias que pudieran dar-
se en relación a otros as-
pectos, como la seguridad
vial o la seguridad en el ho-
gar. Se hace referencia a la
escasa utilidad práctica del
mero cumplimiento for-
mal y documental de las
obligaciones establecidas
y a la prevención como ins-
trumento de aportar valor
añadido a la empresa.
n En el panel «Innovación
y nuevas tecnologías apli-
cadas a la prevención» se
presentaron varios pro-
yectos, como FaSyS (Fá-
brica Absolutamente Se-
gura y Saludable), el pro-
yecto europeo de EPI’s
Inteligentes o los progra-
mas de investigación abor-
dados dentro de la plata-
forma PESI (Plataforma
Española de Seguridad In-
dustrial). Este tipo de pro-
yectos que cuenta con co-
laboración institucional
entre diferentes países
puede ser promocionado
por empresas que quie-
ren lanzar sus productos
o por grandes usuarios.
n La Organización Iberoa-
mericana de la Seguridad
Social (OISS) presentó la
Estrategia de Prevención
en Europa y América 2010-
2013, que constituye el pri-
mer intento de marcar una
línea común de preven-
ción de los países de Ibe-
roamérica que se ha pre-
tendido fuese adaptada a
la realidad y consensua-
da por Gobiernos, em-
presarios y sindicatos.
XI edición del Encuentro Euroamericano «Riesgo y Trabajo» El cambio de actitudes en prevención, tema clave de la reunión
Un tema recurrente
durante el encuentro
ha sido el papel clave
de la gestión del
cambio de
comportamientos
en seguridad
67Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
· C U R S O S · I N F O R M A C I Ó N · C O N V O C AT O R I A S · S E M I N A R I O S · J O R N A D A S
n Dentro de las estrategias
de prevención de EE UU
se ha descrito la acción de
la OSHA, que en 2011 ha
cumplido 40 años de vi-
da. A lo largo de esta tra-
yectoria se ha reducido la
siniestralidad en un 65%.
Su labor de inspección in-
cluye la visita a los pues-
tos de trabajo, toma de
muestras y entrevistas a
los trabajadores. Desta-
can los acuerdos con los
consulados de países ibe-
roamericanos para esta-
blecer programas de pre-
vención con trabajadores
inmigrantes.
n Sobre la Estrategia Euro-
pea, que contenía ocho
objetivos principales, en-
tre ellos la reducción del
25% de los accidentes de
trabajo, se indica que aun
es pronto para hacer una
valoración definitiva. En
el balance de 2010, en tér-
minos generales han exis-
tido avances, pero se ne-
cesitan esfuerzos para
consolidarlos. En estos
momentos se está ha-
blando de la Estrategia
2013-2020, aunque aún
no es posible concretar
las líneas esenciales de su
contenido.
n Dentro del panel «Nor-
mativa: análisis de su apli-
cación», y en relación con
el estado actual en pre-
vención técnica, se aludió
a la dualidad entre la in-
tegración como objetivo
de la Directiva Marco y la
externalización efectiva
derivada de la Ley de Pre-
vención de Riesgos Labo-
rales y las normas que la
desarrollan. Sobre los ser-
vicios de prevención aje-
nos, se menciona la con-
creción de funciones «cua-
si inspectoras» y la especial
incidencia en personal y
medios de la nueva nor-
mativa. Respecto a la ac-
tividad sanitaria de los ser-
vicios de prevención, se
ha hecho referencia a una
cierta devaluación de la
vigilancia de la salud. Asi-
mismo, se planteó la in-
fradeclaración de las en-
fermedades profesiona-
les, aspecto que recargaría
los costos de la sanidad en
las autonomías.
n En la presentación del pro-
yecto EUSAFE, dirigido a
la homologación de la for-
mación en prevención de
riesgos laborales en Euro-
pa, se indica la necesidad
de un esquema común de
cualificación a nivel euro-
peo que permita el reco-
nocimiento y movilidad
de los profesionales y un
marco equivalente de ca-
pacitación técnica. Se re-
conoce la importancia de
la adhesión al proyecto,
dado que en un futuro po-
dría surgir una directiva
europea en este sentido y
los planes de estudio uni-
versitarios se encuentran
en proceso de definición.
n Sobre la formación de ni-
vel técnico en España se
desarrolló un amplio de-
bate, planteándose, entre
otros, los siguientes as-
pectos: esta formación de-
be regularse y evitar la con-
fusión, estableciendo un
régimen transitorio para
los técnicos de prevención
acreditados actualmente;
se apunta la necesidad de
integrar la prevención en
el resto de las carreras uni-
versitarias y en la forma-
ción general; y se observa
una cierta preocupación
ante la posibilidad de que
se busquen subterfugios
que permitan reducir las
exigencias y garantías.
n Los casos de éxito plan-
teados han incidido en la
necesidad e importancia
del cambio de actitudes
en prevención, frente a los
aspectos técnicos que ya
se conocen o gestionan de
forma más eficaz.
Las conclusiones comple-
tas, así como las presenta-
ciones del congreso, están
disponibles para descarga en
la página web de FUNDA-
CIÓN MAPFRE (www.fun-
dacionmapfre.com/preven-
cion).
Imagen de la mesa presidencial durante la inauguración del XI Encuentro Iberoamericano.
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SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201168
El pasado 10 de octubre
se inició el programa
2011 de becas de formación
especializada en las áreas
de Prevención, Salud, Me-
dio Ambiente y Seguros, con
la recepción de los 60 beca-
dos en esta edición, cuya es-
tancia de un mes en Espa-
ña finalizó el pasado 11 de
noviembre.
Estas ayudas tienen como
objetivo principal contri-
buir a la formación y espe-
cialización de los profesio-
nales que trabajan en segu-
ridad y salud ocupacional,
prevención de incendios y
medio ambiente. También
pretenden potenciar el in-
tercambio tecnológico en-
tre las entidades españolas
y extranjeras a las que per-
tenecen los becarios.
Los programas de espe-
cialización técnica se con-
vocaron por primera vez en
el año 1985. Desde enton-
ces, y gracias a esta iniciati-
va, han disfrutado las mis-
mas cerca de 1.000 especia-
listas en prevención de
accidentes, incendios y me-
dio ambiente, así como más
de 400 profesionales sanita-
rios vinculados con la trau-
matología, la cirugía orto-
pédica, la valoración del da-
ño corporal, cerebral y
medular, y la gestión sanita-
ria, entre otras materias.
Como en anteriores edi-
ciones hemos contado con
la inestimable colaboración
de empresas e instituciones
que han acogido a los beca-
rios, entre las que se en-
cuentran el Instituto Nacio-
nal de Seguridad e Higiene
en el Trabajo, Acciona,John
Deere, FCC, Escuela Nacio-
nal de Protección Civil, AE-
NOR, ENRESA, ITSEMAP,
Comunidad Autónoma de
Madrid y la Sociedad de Pre-
vención de FREMAP.
El acto de entrega de las
becas fue presidido por Fi-
lomeno Mira Candel, Vice-
presidente primero de FUN-
DACIÓN MAPFRE, quien es-
tuvo acompañado por Luis
Jiménez, Director del Ob-
servatorio de la Sostenibili-
dad en España; Susana Ve-
lázquez, Consejera Técnica
de Dirección de Coopera-
ción Sectorial y Multilateral
de AECID; Carlos Álvarez,
Presidente del Instituto de
Prevención, Salud y Medio
Ambiente de FUNDACIÓN
MAPFRE, y Antonio Guzmán,
Director General del mismo.
También se inauguró el
XXIII curso superior de Di-
rección y Gestión de la Se-
guridad Integral, celebrado
por primera vez en 1988 y
por el que han pasado has-
ta el momento cerca de 500
alumnos.
FUNDACIÓN MAPFRE concede becas de formación enEspaña a 60 profesionales iberoamericanos El importe total de las ayudas concedidas en todos los ámbitos de actuación supera los 240.000 euros
Foto de grupo de los becarios de la convocatoria 2010 reunidos en la sede de FUNDACIÓN MAPFREen Madrid.
Mesa presidencial en el acto de entrega de las becas de forma-ción especializada 2011.
69Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
· C U R S O S · I N F O R M A C I Ó N · C O N V O C AT O R I A S · S E M I N A R I O S · J O R N A D A S
El Instituto de Prevención,
Salud y Medio Ambiente
de FUNDACIÓN MAPFRE or-
ganiza desde el año 2006 la Se-
mana de Prevención de In-
cendios, en colaboración con
la Asociación Profesional de
Técnicos de Bomberos (APTB).
Esta actividad cuenta con la
inestimable participación de
los Servicios de Extinción y Pre-
vención de Incendios de las dis-
tintas ciudades visitadas, así
como de sus Ayuntamientos y
Diputaciones.
Su objetivo es dar a conocer
a la población los conceptos
básicos de prevención sobre
incendios que les permitan re-
conocer los riesgos que pue-
den presentarse en sus hoga-
res, en sus centros de trabajo
y en su entorno, transmitien-
do pautas de actuación para
intentar evitarlos y disminuir,
en su caso, sus consecuencias.
En esta ocasión se ha presta-
do una especial atención a la
prevención de incendios en lu-
gares públicos.
Más de 50.000 escolares han
disfrutado de las distintas ac-
tividades celebradas, princi-
palmente las demostraciones
y charlas impartidas por los
Servicios de Extinción y Pre-
vención de Incendios de las di-
ferentes localidades. Entre otras,
han destacado las jornadas téc-
nicas para profesionales, los
simulacros de evacuación de
centros educativos, las sesio-
nes informativas sobre pre-
vención de incendios o las jor-
nadas de puertas abiertas a par-
ques de bomberos.
La edición 2011 se inició en
Águilas (Murcia) el pasado mes
de octubre y ha finalizado el 2
de diciembre en la localidad de
Castro Urdiales (Cantabria). La
campaña ha visitado además
las localidades de Getxo (Biz-
kaia), A Coruña, Motril (Grana-
da), Cabanillas (Guadalajara),
Gijón/Xixón (Asturias), Alcor-
cón (Madrid), Fuenlabrada (Ma-
drid), Móstoles (Madrid), Cór-
doba, Vitoria-Gasteiz, Alican-
te, Cáceres, Linares (Jaén), Bajo
Cinca (Huesca) y La Palma.
Este año se ha editado un nue-
vo folleto divulgativo y un pós-
ter con una serie de consejos
sobre la prevención de incen-
dios en lugares de pública con-
currencia que se suman a los
elaborados en las ediciones an-
teriores. Desde una dirección
web (www.semanadelapre-
vencion.com) se puede des-
cargar el material educativo de
la campaña y acceder a la in-
formación completa de las ac-
tividades.
También se encuentra dispo-
nible en la web el estudio Vícti-
mas de incendio en España 2010,
que recoge un importante es-
fuerzo realizado en colabora-
ción con los servicios de bom-
beros y otros organismos a ni-
vel nacional, con el objeto de
conocer datos fiables sobre el
número de víctimas por incen-
dio en España. Tanto los resul-
tados de este estudio como las
actividades desarrolladas en la
Semana de la Prevención han
contado con una amplia difu-
sión en los medios.
VI Semana de Prevención de Incendios La edición 2011 ha visitado 17 localidades en España
Más de 50.000escolares han
participado ensimulacros de
evacuación de colegioso visitado parques de
bomberos
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SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201170
El pasado 14 de noviembre se ce-
lebró en Madrid el Foro sobre el
Vehículo Eléctrico e Industria Asocia-
da, organizado por la Fundación de la
Energía de la Comunidad de Madrid
(FENERCOM), FUNDACIÓN MAPFRE,
el Instituto para la Diversificación y
Ahorro de Energía (IDEA). El objetivo
de dicha jornada fue el análisis de las
tendencias de futuro, así como las opor-
tunidades y las barreras tecnológicas
y económicas que ofrece este nuevo
modelo de movilidad.
La jornada fue inaugurada por el
Consejero de Economía y Hacienda
de la Comunidad de Madrid, Percival
Manglano, el Director General del IDAE,
Alfonso Beltrán García-Echániz, y el
Presidente del Instituto de Prevención,
Salud y Medio Ambiente de FUNDA-
CIÓN MAPFRE, Carlos Álvarez.
La sesión plenaria corrió a cargo An-
drés Monzón de Cáceres, Catedrático
de la ETSI de Caminos de Madrid y Di-
rector de TRANSyT-Centro de Investi-
gación del Transporte de UPM, que tra-
tó sobre la movilidad en las ciudades.
Dentro del programa se celebraron
tres mesas de debate, centradas en el
presente y el futuro del vehículo eléc-
trico, las infraestructuras eléctricas y
servicios precisos para el funciona-
miento de estos vehículos, y la indus-
tria asociada al sector. Esta última me-
sa estuvo moderada por Antonio Guz-
mán, Director General del Instituto de
Prevención, Salud y Medio Ambiente
de FUNDACIÓN MAPFRE.
La clausura contó con la interven-
ción del Presidente de la Asociación
de Fabricantes de Material Eléctrico
(AFME), Carlos Esteban, y el Director
General de Industria, Energía y Minas
de la Comunidad de Madrid, Carlos
López.
A este encuentro asistieron más de
250 profesionales, constatandose que
el coche eléctrico es una realidad que
cada vez se encuentra más cerca de su
implantación.
Foro sobre el Vehículo Eléctrico e Industria AsociadaEl coche eléctrico, más cerca
71Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
· C U R S O S · I N F O R M A C I Ó N · C O N V O C AT O R I A S · S E M I N A R I O S · J O R N A D A S
El Instituto de Prevención,
Salud y Medio Ambiente
de FUNDACIÓN MAPFRE ha
colaborado con la Fundación
CONAMA en la organización
del octavo Encuentro Iberoa-
mericano de Medio Ambien-
te (EIMA 8), celebrado el pa-
sado mes de octubre en São
Paulo (Brasil).
El foro tuvo como objetivos
consolidar un espacio de diá-
logo permanente sobre desa-
rrollo sostenible en América
Latina, proponer temas y ob-
jetivos que sirvan de base pa-
ra definir responsabilidades y,
también, identificar las herra-
mientas necesarias para su con-
secución.
El programa ha integrado los
temas a tratar en la Cumbre de
la Tierra de Río +20. El encuentro
se prolongó durante cuatro dí-
as, dedicando cada jornada a
un tema concreto: economía
verde, energía, agua y ciuda-
des. Esta última fue liderada
por FUNDACIÓN MAPFRE en
el foro «Planeando ciudades
sostenibles».
Entre los países invitados al
EIMA8 figuraron Argentina,
Bolivia, Chile, Colombia, Cos-
ta Rica, Guatemala, México, El
Salvador, Ecuador, Honduras,
Perú, Panamá, Paraguay, Uru-
guay y Venezuela.
Sesión plenaria del octavo Encuentro Iberoamericano de Medio Ambien-te (EIMA8).
El tratamiendo del cambio climático
dentro de la educación ambiental es
relativamente reciente y es una de las áre-
as más activas en la actualidad, dentro de
este campo.
FUNDACIÓN MAPFRE ha editado la guía
«Conoce y valora el cambio climático: pro-
puestas para trabajar en grupo». La publi-
cación está dirigida principalmente a es-
tudiantes de educación secundaria, si bien
puede ser de utilidad para otros colectivos
con inquietudes acerca de esta cuestión.
Sus objetivos son servir como material en
la elaboración de programas educativos y
de sensibilización y comunicación y pro-
mover la participación del público en la
elaboración de respuestas.
En la elaboración de los contenidos han
participado el Centro Nacional de Educa-
ción Ambiental (CENEAM), Colectivo de
Educación Ambiental S.L. (CEAM), Ecolo-
gía y Desarrollo (ECODES), Ecologistas en
Acción, Universidad Autónoma de Madrid,
WWF-España, Xarxa de Consum Solidari
(XCS) bajo la coordinación del grupo de in-
vestigación en Pedagogía Social y Educa-
ción Ambiental de la Universidade de San-
tiago dirigido por el profesor Pablo Meira.
Este grupo ha sido asimismo el autor de los
dos sondeos sobre percepción del cambio
climático en la sociedad española que se
han llevado a cabo recientemente con el
patrocinio de FUNDACIÓN MAPFRE.
La guía fue presentada el pasado mes
de octubre por Alicia Montalvo, Directo-
ra General de la Oficina Española de Cam-
bio Climático, y Antonio Guzmán, Direc-
tor General del Instituto de Prevención,
Salud y Medio Ambiente de FUNDACIÓN
MAPFRE.
Los materiales de la guía están disponi-
bles para su descarga en la página web
www.fundacionmapfre.com/prevencion.
Conoce y valora el cambio climático Guía dirigida a estudiantes de secundaria u otros colectivos, con propuestas para trabajar en grupo
Alicia Montalvo, Directora General de la OficinaEspañola de Cambio Climático, y Antonio Guz-mán, Directror General del Instituto, junto a algu-nos de los autores de la guía.
FUNDACIÓN MAPFRE, en el VIII Encuentro Iberoamericano de Medio Ambiente (EIMA8) Asistieron más de 500 representantes de empresas, administraciones públicas y entidades de la sociedad civil
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SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201172
FUNDACIÓN MAPFRE
concedió el pasado 22 de
diciembre sus cuatro pre-
mios anuales 2011, que se
enmarcan en áreas de inte-
rés general para la sociedad
en las que trabaja la institu-
ción: A Toda una Vida Pro-
fesional, Desarrollo de la Trau-
matología Aplicada, Mejor
Actuación Medioambiental
y Superando Barreras.
La dotación global de los
cuatro premios, que se en-
tregarán durante el mes de
abril en un acto institucio-
nal, asciende a 120.000 eu-
ros. Los premiados en la con-
vocatoria 2011 son:
n Premio «A Toda una Vida
Profesional», en reconoci-
miento social a una perso-
na mayor de 70 años por una
fecunda vida profesional vin-
culada al mundo de la salud,
se acuerda conceder al Doc-
tor José María Segovia de
Arana, de nacionalidad es-
pañola, por su reconocida
trayectoria en el mundo de
la gestión, la formación mé-
dica y la investigación, lo que
ha contribuido a la moder-
nización y consolidación del
actual modelo de la sanidad
pública española.
Han sido muchas las actua-
ciones de las que ha sido par-
ticipe, entre las que desta-
can las siguientes: crear la
estructura hospitalaria en la
Clínica Puerta de Hierro de
Madrid (España) que fundó
en 1964 y de la que fue Di-
rector hasta 1992; introdu-
cir en los hospitales de Es-
paña la inmunología como
disciplina clínica y de in-
vestigación; colaborar en la
constitución de la Facultad
de Medicina de la Universi-
dad Autónoma de Madrid,
donde fue Decano; impul-
sar y establecer el sistema
M.I.R. (Médico Interno y Re-
sidente) para la formación
de los médicos españoles.
Además, participó en la cons-
titución del Fondo de In-
vestigaciones Sanitarias de
la Seguridad Social (FIS), una
de las fuentes de financia-
ción más importantes para
la investigación de la bio-
medicina española.
Es miembro de la Real Aca-
demia de Medicina de Es-
paña y de la Sociedad Espa-
ñola de Medicina Interna,
de la de Gastroenterología y
de Alergia.
El Doctor Segovia posee la
Encomienda con placa de la
Orden de Alfonso X el Sabio,
la Gran Cruz de la Orden Ci-
vil de Sanidad, la Encomienda
de la Orden de Isabel la Ca-
tólica y el Premio Nacional
Rey Jaime I a la Medicina.
n Premio «Desarrollo de la
Traumatología» destinado
al mejor trabajo relaciona-
do con la investigación tras-
lacional o clínica en cirugía
ortopédica y traumatología,
se concede al proyecto «Va-
loración de la posición del
cotilo en la pelvis median-
te sistema navegado. Estu-
dio anatómico», llevado a
cabo por Jaime Baselga Gar-
cía-Escudero.
Se trata de un estudio ex-
perimental y técnico, bien
planteado e innovador, con
proyección internacional,
realizado en colaboración
con una empresa alemana
de prestigio. Colocar una
prótesis de rodilla o de ca-
dera en la posición exacta
no es sencillo pues inter-
vienen muchas variables,
como son la posición del pa-
ciente en la mesa de opera-
ciones, la posición del pro-
pio cirujano, la inclinación
inicial para efectuar los cor-
tes, sin olvidar que al intro-
ducir y colocar los compo-
nentes de la prótesis se ha-
ce con variaciones de unos
casos a otros.
Desde hace años se efec-
túan algunas intervenciones
con un navegador, lo que
significa informatizar las imá-
genes del paciente (radio-
grafía y sobre todo el TAC)
de forma previa a la inter-
vención, y en función de esos
datos diseñar cuál sería la
posición ideal de la prótesis.
Una vez establecida, se pro-
cede a la cirugía marcando
unos puntos que servirán de
coordenadas, a partir de las
cuales se realizan los cortes
con instrumentales ade-
cuados que señalan en cada
momento la posición en la
que se encuentran.
El Doctor Jaime Baselga, en
el Hospital Ruber Interna-
cional, ha realizado nume-
rosos trabajos para determi-
nar la mayor exactitud y efec-
tividad y, con ello, mejorar
un sistema de navegación pa-
ra el implante de prótesis de
cadera y, también, de rodilla,
adquiriendo un reconoci-
miento como cirujano de ar-
troplastias articulares.
n Premio a la «Mejor Ac-
tuación Medioambiental»,
en reconocimiento a una ins-
Fallo de los premios anuales 2011 de FUNDACIÓN MAPFRE La Alianza Trinacional para la Conservación del Golfo de Honduras (TRIGOH), galardonada con la MejorActuación Medioambiental
73Nº 124 Cuarto trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
· C U R S O S · I N F O R M A C I Ó N · C O N V O C AT O R I A S · S E M I N A R I O S · J O R N A D A S
Foro Mundial 21 sobre agua, energía y desarrollo sostenible Lisboa acoge la décima edición del evento
La Sociedad de Geografía
de Lisboa acogió los pasa-
dos 24 y 25 de octubre la déci-
ma edición del Foro Mundial
21 sobre agua, energía y desa-
rrollo sostenible.
El objetivo principal de este
foro es reunir a instituciones,
empresas, medios, universi-
dad y sociedad civil en un es-
fuerzo conjunto para crear un
plan de acción para la sosteni-
bilidad, principalmente me-
diante la gestión responsable
del agua y la energía. En pala-
bras de Amalio de Marichalar,
Presidente del Foro Soria 21, el
evento persigue «generar las
mejores ideas y propuestas con-
cretas en temas tan trascen-
dentes como el agua, la ener-
gía y cómo se combinan ideas
innovadoras con un plan de
acción efectivo que se presen-
tará a la Cumbre de Río+ 20».
En su declaración final, el Fo-
ro Mundial Lisboa 21 destacó
la necesidad de un cambio de
paradigma, ya que el modelo
actual de desarrollo está ago-
tado y no es sostenible. Tam-
bién reconoce que es necesa-
rio un liderazgo claro que en la
actualidad está ausente, a ni-
vel mundial, regional y local.
Se propone crear organismos
independientes para supervi-
sar los recursos naturales en el
ámbito de las Naciones Uni-
das, como una Agencia para el
Agua o un Centro de Desarro-
llo Sostenible, con la posibili-
dad de que se implanten en la
península Ibérica al no existir
ninguna agencia de la ONU en
España y en Portugal.
Además, se reclama con «ur-
gencia» un cambio del para-
digma ambiental del mundo y
se aboga por el intercambio de
información «fidedigna y de li-
bre acceso» sobre el agua, la
energía y el desarrollo sosteni-
ble, así como el impulso de un
debate para encontrar posibles
soluciones a la crisis actual.
También se aconsejó cumplir
las metas futuras estipuladas
internacionalmente para los
principales indicadores de de-
sarrollo sostenible ya que, se-
gún los expertos, los objetivos
definidos para 2015 «están le-
jos de ser conseguidos».
Se reconoce que el desarro-
llo y la innovación tecnológica
son la garantía para buscar me-
jores formas de transformar la
energía.
Por último, se insistió en la
importancia de los medios de
comunicación en relación al
agua para promover una in-
formación «clara y neutra», ade-
más de resaltar su papel para
concienciar a la sociedad. Tam-
bién se apuesta por incorpo-
rar la Carta de la Tierra como
«documento para la educación
en un desarrollo sostenible».
titución que haya llevado a ca-
bo un proyecto o acción que
contribuya al desarrollo sos-
tenible de la sociedad, se ha
acordado conceder dicho pre-
mio a «Alianza Trinacional pa-
ra la Conservación del Golfo
de Honduras» (TRIGOH), aso-
ciación privada no lucrativa,
dedicada a la conservación de
la diversidad biológica y al me-
joramiento de la calidad de vi-
da de las comunidades loca-
les, a través de la protección y
el uso sostenible de los recur-
sos marino-costeros del golfo
de Honduras.
Los ecosistemas naturales
del golfo contribuyen, en su es-
tado actual de conservación, a
la economía regional y nacio-
nal de los tres países que lo con-
forman y, sobre todo, al soste-
nimiento de la economía fa-
miliar de decenas de miles de
habitantes de la región. A tra-
vés de su labor, la Alianza tra-
baja para garantizar la soste-
nibilidad social, económica y
ambiental de la pesca, el tu-
rismo y el desarrollo costero y
portuario de la zona del golfo.
n Premio «Superando Barre-
ras», destinado a premiar a la
persona o institución que más
haya contribuido a la supera-
ción de barreras para la inte-
gración de las personas con
discapacidad, se concede a la
Federación Española de Sor-
doceguera (FESOCE), de Bar-
celona, institución que fue cre-
ada en el año 2009 por la falta
de representación de las per-
sonas con sordoceguera y sus
familiares. El objetivo que per-
sigus esta institución es con-
seguir la mejora de la calidad
de vida de las personas con sor-
doceguera, así como de sus fa-
miliares y cuidadores.
INFORMACIÓN
GENERAL
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 123 Tercer trimestre 201174
NORMATIVA Y LEGISLACIÓN1
Referencia de legislación publicada - (BOE)
RESOLUCIÓN de 1 de septiembre
de 2011, de la Secretaría General
de Universidades, por la que se
publica el Acuerdo del Consejo de
Ministros de 22 de julio de 2011,
por el que se establece el carác-
ter oficial de determinados títu-
los de Máster y su inscripción en
el Registro de Universidades, Cen-
tros y Títulos.
(B.O.E. Nº 225 de 19.09.2011)
REAL DECRETO 1237/2011, de 8
de septiembre, por el que se es-
tablece la aplicación de exencio-
nes por razones de defensa, en
materia de registro, evaluación,
autorización y restricción de sus-
tancias y mezclas químicas, de
acuerdo con lo establecido en el
Reglamento (CE) n.º 1907/2006
del Parlamento Europeo y del
Consejo, de 18 de diciembre de
2006, y en materia de clasifica-
ción, etiquetado y envasado de
sustancias y mezclas, de acuer-
do con el Reglamento (CE) n.°
1272/2008 del Parlamento Euro-
peo y del Consejo, de 16 de di-
ciembre de 2008.
(B.O.E. Nº 234 de 28.09.2011)
RESOLUCIÓN de 1 de septiembre
de 2011, de la Universidad San Jor-
ge, por la que se publica el plan
de estudios del Máster en Pre-
vención de Riesgos Laborales.
(B.O.E. Nº 235 de 29.09.2011)
RESOLUCIÓN de 20 de septiem-
bre de 2011, de la Universidad de
las Illes Balears, por la que se pu-
blica el plan de estudios de Más-
comercializar y utilizar productos
fitosanitarios, a fin de incluir las
sustancias activas fosfuro de cinc,
fenbuconazol, quinmerac, pirida-
ben, metosulam, triflumurón, y se
modifica la inclusión de la sus-
tancia activa pirimifos-metil res-
pecto a la restricción de uso.
(B.O.E. Nº 258 de 26.10.2011)
ORDEN PRE/2872/2011, de 25 de
octubre, por la que se modifica el
Anexo I del Real Decreto 2163/1994,
de 4 de noviembre, por el que se
implanta el sistema armonizado
comunitario de autorización para
comercializar y utilizar productos
fitosanitarios, a fin de incluir las
sustancias activas 6-benciladeni-
na, miclobutanil, cicloxidim, hi-
mexazol, dodina, tau-fluvalinato,
fenoxicarb, cletodim, bupirimato
y dietofencarb.
(B.O.E. Nº 258 de 26.10.2011)
RESOLUCIÓN de 20 de julio de
2011, de la Universidad de Sevi-
lla, por la que se publica el plan
de estudios de Máster en Seguri-
dad Integral en la Industria y Pre-
vención de Riesgos Laborales.
(B.O.E. Nº 259 de 27.10.2011)
RESOLUCIÓN de 25 de octubre de
2011, de la Universidad de Mur-
cia, por la que se publica el plan
de estudios de Máster en Preven-
ción de Riesgos Laborales.
(B.O.E. Nº 269 de 08.11.2011)
REAL DECRETO 1622/2011, de 14
de noviembre, por el que se mo-
difica el Reglamento sobre cola-
ter en Salud Laboral (Prevención
de Riesgos Laborales).
(B.O.E. Nº 238 de 03.10.2011)
LEY 33/2011, de 4 de octubre, Ge-
neral de Salud Pública.
(B.O.E. Nº 240 de 05.10.2011)
RESOLUCIÓN de 1 de septiembre
de 2011, de la Universidad de Cór-
doba, por la que se publica el plan
de estudios de Máster en Preven-
ción de Riesgos Laborales.
(B.O.E. Nº 242 de 07.10.2011)
ORDEN ITC/2699/2011, de 4 de oc-
tubre, por la que se modifica la
instrucción técnica complemen-
taria 02.1.02 «Formación preven-
tiva para el desempeño del pues-
to de trabajo», del Reglamento Ge-
neral de Normas Básicas de
Seguridad Minera, aprobada por
la Orden ITC/1316/2008, de 7 de
mayo
(B.O.E. Nº 245 de 11.10.2011)
ORDEN ARM/2834/2011, de 18 de
octubre, por la que se modifica la
Orden del Ministerio de Agricul-
tura, Pesca y Alimentación de 4 de
agosto de 1993, por la que se es-
tablecen los requisitos para las
solicitudes de autorizaciones de
productos fitosanitarios.
(B.O.E. Nº 254 de 21.10.2011)
ORDEN PRE/2871/2011, de 25 de
octubre, por la que se modifica el
Anexo I del Real Decreto 2163/1994,
de 4 de noviembre, por el que se
implanta el sistema armonizado
comunitario de autorización para
Del 1 de septiembre al 30 de noviembre de 2011
boración de las mutuas de acci-
dentes de trabajo y enfermedades
profesionales de la Seguridad So-
cial, aprobado por el Real Decre-
to 1993/1995, de 7 de diciembre.
(B.O.E. Nº 277 de 17.11.2011)
REAL DECRETO 1630/2011, de 14
de noviembre, por el que se regu-
la la prestación de servicios sani-
tarios y de recuperación por las
mutuas de accidentes de trabajo
y enfermedades profesionales de
la Seguridad Social. 18321
(B.O.E. Nº 281 de 22.11.2011)
ORDEN PRE/3271/2011, de 25 de
noviembre, por la que se incluyen
las sustancias activas bifentrina,
acetato de (Z,E)-tetradeca-9,12-
dienilo, fenoxicarb y ácido nona-
noico en el anexo I del Real De-
creto 1054/2002, de 11 de octubre,
por el que se regula el proceso de
evaluación para el registro, auto-
rización y comercialización de bio-
cidas y por la que se incluye la sus-
tancia activa acetato de (Z,E)-te-
tradeca-9,12-dienilo en el anexo
IA del citado Real Decreto.
(B.O.E. Nº 288 de 30.11.2011)
Regulación de laprestación de servicios
sanitarios y derecuperación por las
mutuas de accidentes detrabajo y enfermedades
profesionales de laSeguridad Social
75Nº 123 Tercer trimestre 2011 SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE
DIRECTIVA 2011/75/UE DE LA CO-
MISIÓN de 2 de septiembre de 2011
por la que se modifica la Directi-
va 96/98/CE del Consejo sobre
equipos marinos.
(D.O.C.E. Nº L 239/1 de 15.09.2011)
DIRECTIVA 2011/79/UE DE LA CO-
MISIÓN de 20 de septiembre de
2011 por la que se modifica la Di-
rectiva 98/8/CE del Parlamento
Europeo y del Consejo de forma
que incluya el fipronil como sus-
tancia activa en su anexo I.
(D.O.C.E. Nº L 243/10 de 21.09.2011)
DIRECTIVA 2011/80/UE DE LA CO-
MISIÓN de 20 de septiembre de
2011 por la que se modifica la Di-
rectiva 98/8/CE del Parlamento
Europeo y del Consejo de forma
que incluya la lambda-cihalotri-
na como sustancia activa en su
anexo I.
(D.O.C.E. Nº L 243/13 de 21.09.2011)
DIRECTIVA 2011/81/UE DE LA CO-
MISIÓN de 20 de septiembre de
2011 por la que se modifica la Di-
rectiva 98/8/CE del Parlamento
Europeo y del Consejo de forma
que incluya la deltametrina como
sustancia activa en su anexo I.
(D.O.C.E. Nº L 243/16 de 21.09.2011)
DECISIÓN DE LA COMISIÓN de 18
de agosto de 2011 por la que se
modifica la Decisión 2007/589/CE
en relación con la inclusión de di-
rectrices para el seguimiento y la
notificación de las emisiones de
gases de efecto invernadero de-
rivadas de nuevas actividades y
gases.
(D.O.C.E. Nº L 244/1 de 21.09.2011)
REGLAMENTO DE EJECUCIÓN (UE)
Nº 942/2011 DE LA COMISIÓN de
22 de septiembre de 2011 por el
que se establece la no aprobación
de la sustancia activa flufenoxu-
rón, de conformidad con el Re-
glamento (CE) nº 1107/2009 del
Parlamento Europeo y del Conse-
jo, relativo a la comercialización
de productos fitosanitarios, y se
modifica la Decisión 2008/934/CE
de la Comisión.
(D.O.C.E. Nº L 246/13 de 23.09.2011)
REGLAMENTO DE EJECUCIÓN (UE)
Nº 943/2011 DE LA COMISIÓN de
22 de septiembre de 2011 por el
que se establece la no aprobación
de la sustancia activa propargita,
de conformidad con el Reglamento
(CE) nº 1107/2009 del Parlamen-
to Europeo y del Consejo, relativo
a la comercialización de produc-
tos fitosanitarios, y se modifica la
Decisión 2008/934/CE.
(D.O.C.E. Nº L 246/16 de 23.09.2011)
REGLAMENTO DE EJECUCIÓN (UE)
Nº 974/2011 DE LA COMISIÓN de
29 de eptiembre de 2011 por el que
se aprueba la sustancia activa acri-
natrina con arreglo al Reglamen-
to (CE) nº 1107/2009 del Parlamento
Europeo y del Consejo, relativo a
la comercialización de productos
fitosanitarios, y se modifican el ane-
xo del Reglamento de Ejecución
(UE) nº 540/2011 de la Comisión y
la Decisión 2008/934/CE de la Co-
misión.
(D.O.C.E. Nº L 255/1 de 01.10.2011)
REGLAMENTO DE EJECUCIÓN (UE)
Nº 993/2011 DE LA COMISIÓN de
6 de octubre de 2011 por el que se
Diario Oficial de la Comunidad - (DOCE)Del 1 de septiembre al 30 de noviembre de 2011
Decisión de la Comisión Europea en relación con lainclusión de directrices para el seguimiento y lanotificación de las emisiones de gases de efecto
invernadero derivadas de nuevas actividades y gases
aprueba la sustancia activa 8-hi-
droxiquinoleína, de conformidad
con el Reglamento (CE) nº
1107/2009 del Parlamento Euro-
peo y del Consejo, relativo a la co-
mercialización de productos fito-
sanitarios, y se modifica el anexo
del Reglamento de Ejecución (UE)
nº 540/2011.
(D.O.C.E. Nº L 263/1 de 07.10.2011)
DECISIÓN DE EJECUCIÓN DE LA
COMISIÓN de 11 de octubre de
2011 por la que se permite a los
Estados miembros ampliar las au-
torizaciones provisionales conce-
didas a las nuevas sustancias ac-
tivas benalaxilo-M, gamma-ciha-
lotrina y valifenalato.
(D.O.C.E. Nº L 267/19 de 12.10.2011)
REGLAMENTO DE EJECUCIÓN(UE)
Nº 1022/2011 DE LA COMISIÓN de
14 de octubre de 2011 relativo a la
no renovación de la aprobación de
la sustancia activa ciclanilida con
arreglo a lo dispuesto en el Re-
glamento (CE) nº 1107/2009 del
Parlamento Europeo y del Conse-
jo, relativo a la comercialización
de productos fitosanitarios, y por
el que se modifica el Reglamento
de Ejecución (UE) nº 540/2011 de
la Comisión.
(D.O.C.E. Nº L 270/20 de 15.10.2011)
REGLAMENTO DE EJECUCIÓN
(UE) Nº 1045/2011 DE LA COMI-
SIÓN de 19 de octubre de 2011 por
el que se establece la no aproba-
ción de la sustancia activa asu-
lam, de conformidad con el Re-
glamento (CE) nº 1107/2009 del
Parlamento Europeo y del Con-
sejo, relativo a la comercializa-
ción de productos fitosanitarios,
y se modifica la Decisión 2008/
934/CE de la Comisión.
(D.O.C.E. Nº L 275/23 de 20.10.2011)
REGLAMENTO DE EJECUCIÓN(UE)
Nº 1078/2011 DE LA COMISIÓN de
25 de octubre de 2011 por el que
se establece la no aprobación de
la sustancia activa propanilo, de
conformidad con el Reglamento
(CE) nº 1107/2009 del Parlamen-
to Europeo y del Consejo, relativo
a la comercialización de produc-
tos fitosanitarios.
(D.O.C.E. Nº L 279/1 de 26.10.2011)
POSICIÓN (UE) Nº 11/2011 DEL
CONSEJO EN PRIMERA LECTU-
RA con vistas a la adopción de un
Reglamento del Parlamento Eu-
ropeo y del Consejo relativo a la
comercialización y el uso de los
biocidas.
(D.O.C.E. Nº C 320 E/1 de
01.11.2011)
REGLAMENTO DE EJECUCIÓN
(UE) Nº 1127/2011 DE LA COMI-
SIÓN de 7 de noviembre de 2011
relativo a la no aprobación de la
INFORMACIÓN
GENERAL
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 123 Tercer trimestre 201176
SEGURIDAD
l UNE-EN 61243-3:2011. Traba-
jos en tensión. Detectores de
tensión. Parte 3: Tipo bipolar
para baja tensión.
l UNE-EN 62271-206:2011. Apa-
ramenta de alta tensión. Parte
206: Sistemas indicadores de
presencia de tensión para ten-
siones asignadas superiores a
1 kV y hasta 52 kV inclusive.
l prEN 14564:2011. Tanks for
transport of dangerous goods
- Terminology.
l prEN ISO 13856-1:2011. Safety
of machinery - Pressure-sen-
sitive protective devices - Part
1: General principles for design
and testing of pressure-sensi-
tive mats and pressure-sensi-
tive floors (ISO/DIS 13856-1:2011.
l ISO 16602 DAM 1:2011. Protec-
tive clothing for protection against
chemicals - Classification, la-
belling and performance re-
quirements; Amendment.
l ISO/DIS 20471:2011. High-visi-
bility warning clothing for pro-
fessional use - Test methods
and requirement.
HIGIENE INDUSTRIAL
l UNE-EN 62479:2011. Evalua-
ción de la conformidad de los
equipos eléctricos y electróni-
cos de baja potencia con las res-
tricciones básicas relativa a la
exposición humana a los cam-
pos electromagnéticos (10 MHz
- 300 GHz).
l ISO/DIS 1999:2011. Acoustics -
Estimation of noise-induced he-
aring loss.
l ISO 16900-4:2011. Respiratory
protective devices - Methods of
test and test equipment - Part
4: Determination of gas filter
capacity and migration, de-
sorption and carbon monoxide
dynamic testing.
l ISO/TS 16976-3:2011. Respira-
tory protective devices - Human
factors - Part 3: Physiological
responses and limitations of
oxygen and limitations of car-
bon dioxide in the breathing en-
vironment.
l ISO/FDIS 17874-3:2011. Re-
mote handling devices for ra-
dioactive materials - Part 3:
Electrical master-slave mani-
pulator.
ERGONOMÍA
l ISO 16121-2:2011. Road vehi-
cles - Ergonomic requirements
for the driver's workplace in li-
ne-service buses - Part 2: Visi-
bility.
l ISO 16121-3:2011. Road vehi-
cles - Ergonomic requirements
for the driver's workplace in li-
ne-service buses - Part 3: In-
formation devices and control.
l ISO 16121-4:2011. Road vehi-
cles - Ergonomic requirements
for the driver's workplace in li-
ne-service buses - Part 4: Ca-
bin environment.
l ISO 26800:2011. Ergonomics -
General approach, principles
and concept.
MEDIO AMBIENTE
l UNE-EN ISO 5667-13:2011. Ca-
lidad del agua. Muestreo. Par-
te 13: Guía para el muestreo de
lodos (ISO 5667-13:2011).
l UNE-EN ISO 5667-23:2011. Ca-
lidad del agua. Muestreo. Par-
te 23: Guía para el muestreo pa-
sivo en aguas superficiales (ISO
5667-23:2011).
l UNE-EN ISO 14006:2011. Sis-
temas de gestión ambiental.
Directrices para la incorpora-
ción del ecodiseño (ISO 14006:
2011).
l UNE-EN ISO 25139:2011. Emi-
siones de fuentes estacionarias.
Método manual para la deter-
minación de la concentración
de metano por cromatografía
de gases (ISO 25139:2011).
l UNE-ISO 50001:2011. Sistemas
de gestión de la energía. Re-
quisitos con orientación para
su uso.
l UNE 77413:2011. Ecotoxicolo-
gía. Propiedades físico-quími-
cas. Caracterización de sus-
tancias químicas a partir de la
determinación de su presión
de vapor.
INCENDIOS
l UNE-EN 54-1:2011. Sistemas
de detección y alarma de in-
cendios. Parte 1: Introducción.
lUNE-EN 54-23:2011. Sistemas
de detección y alarma de in-
cendios. Parte 23 : Dispositivos
de alarma de incendios. Dispo-
sitivos de alarma visual (VAD).
l UNE-EN 1147:2011. Escalas
portátiles para uso en el servi-
cio contra incendios.
l UNE-EN ISO 1182:2011. Ensa-
yos de reacción al fuego de pro-
ductos. Ensayo de no combus-
tibilidad (ISO 1182:2010).
l UNE-EN ISO 1716:2011. Ensa-
yos de reacción al fuego de pro-
ductos. Determinación del ca-
lor bruto de combustión (valor
calorífico) (ISO 1716:2010).
l UNE-EN 1846-1:2011. Vehícu-
los contra incendios y de servi-
cios auxiliares. Parte 1: No-
menclatura y designación.
Normas EA, UNE, CEI editadasDel 1 de septiembre al 30 de octubre de 2011 Con la colaboración de
sustancia activa ácido 2-naftilo-
xiacético, de conformidad con el
Reglamento (CE) nº 1107/2009
del Parlamento Europeo y del
Consejo, relativo a la comercia-
lización de productos fitosanita-
rios en el mercado.
(D.O.C.E. Nº L 289/26 de 08.11.2011)
REGLAMENTO DE EJECUCIÓN (UE)
Nº 1134/2011 DE LA COMISIÓN de
9 de noviembre de 2011 relativo a
la no renovación de la aprobación
de la sustancia activa cinidón-eti-
lo con arreglo a lo dispuesto en el
Reglamento (CE) nº 1107/2009 del
Parlamento Europeo y del Conse-
jo, relativo a la comercialización
de productos fitosanitarios, y por
el que se modifica el Reglamento
de Ejecución (UE) nº 540/2011.
(D.O.C.E. Nº L 292/1 de 10.11.2011)
RECOMENDACIÓN DE LA COMI-
SIÓN de 8 de septiembre de 2011
relativa al apoyo de un servicio
eCall a escala de la UE en las re-
des de comunicación electrónica
para la transmisión de llamadas
de urgencia desde un vehículo, ba-
sado en el número 112
(«llamada eCall»).
(D.O.C.E. Nº L 303/46 de 22.11.2011)
UNE-ISO 50001:2011sobre sistemas de
gestión de la energíay requisitos con
orientación para su uso
INFORMACIÓN
GENERAL
SEGURIDAD Y MEDIO AMBIENTE Nº 124 Cuarto trimestre 201178
AGENDA2CONGRESO/SIMPOSIO FECHAS LUGAR INFORMACIÓN
Prevención de riesgos profesionales y medio ambiente
Del 31 de enero al 2de febrero de 2012
Del 9 al 10 defebrero de 2012
Del 6 al 7 de marzode 2012
Del 28 de febrero al2 de marzo de 2012
Del 14 al 16 demarzo de 2012
Del 18 al 23 demarzo de 2012
Del 28 al 30 demarzo de 2012
Del 17 al 18 de abrilde 2012
Del 25 al 27 de abrilde 2012
Del 16 al 18 de mayode 2012
Del 23 al 25 de mayode 2012
Del 26 al 28 de juniode 2012
Del 26 al 27 de enerode 2012
Del 1 al 3 de febrerode 2012
Del 2 al 5 de febrerode 2012
Del 14 al 16 defebrero de 2012
Del 21 al 25 defebrero de 2012
Del 28 de febrero al3 de marzo de 2012
Del 29 de febrero al2 de marzo de 2012
Del 29 de febrero al2 de marzo de 2012
Del 29 de febrero al2 de marzo de 2012
Del 6 al 9 de marzode 2012
Del 18 al 20 de abrilde 2012
Burdeos (Francia)
Guimarães(Portugal)
Manchester (Reino Unido)
Madrid (España)
Nueva York(Estados Unidos)
Cancún (México)
Las Vegas(Estados Unidos)
Ourense (España)
Bilbao (España)
Granada (España)
Bilbao (España)
Helsinki(Finlandia)
Miami (Estados Unidos)
Las Vegas(Estados Unidos)
Verona (Italia)
Gante (Bélgica)
Berlín (Alemania)
Bucarest(Rumanía)
Tokio (Japón)
Valencia (España)
Valencia(España)
Zaragoza (España)
Jaén (España)
http://www.preventica.com/
web: www.sposho.pt/sho2012
http://www.ioshconference.co.uk
web: www.sicur.ifema.es
web: www.istss.se
http://www.icohcongress2012cancun.org
web: www.iscwest.com
web: www.expourense.org
web: www.seslapbilbao2012.es
http://www.ugr.es/~safetygranada2012/safetygranada2012/Inicio.html
web: www.orpconference.org
http://www.euroshnet-conference.eu
web: www.miagreen.com
http://www.solarpowergenerationusa.com/
web: www.bioenergyweb.it
web: www.ifest.be
web: www.solarenergy-berlin.de/
web: www.romenvirotec.ro
http://www.fcexpo.jp/en/
web: www.egetica-expoenergetica.com
web: www.novabuild.es/
http://www.feriazaragoza.es/smagua_IN.aspx
web: www.bioptima.es
Seguridad
Preventica Bordeaux 2012
SHO2012. International Symposium onOccupational Safety and Hygiene
IOSH 2012
SICUR 2012
5th International Symposium on TunnelSafety and Security ISTSS 2012
30º Congreso Internacional sobre SaludOcupacional
ISC West 2012: Feria Internacional deSeguridad
PREVISEL 2012: Salón de la Prevencióny la Seguridad Laboral
XIX Congreso Seslap. El Futuro de laMedicina del Trabajo y de la SaludLaboral en juego
Safetygranada 2012
ORP 2012
4ª Conferencia EUROSHNET sobreSeguridad de los Productos
Medio Ambiente
MiaGreen 2012: Convención Verde delas Américas
Solar Power Generation 2012
BIOENERGY EXPO 2012
IFEST 2012 Gante Salón EnergíaSostenible
Solar Energy 2012
Romanvirotec 2012
FC Expo 2012 Tokyo: Feria Internacionalde Hidrógeno y Célula de Combustible2012
Egetica-Expoenergetica 2012: Feria delas Energías
Novabuild 2012: Feria deEcoconstrucción, Rehabilitación yUrbanismo Sostenible
SMAGUA 2012: Feria Internacional delAgua y Medio Ambiente
Feria Bióptima Jaén 2012: ForoBiomasa y Servicios Energéticos