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SECRETARIA DE EDUCACIÓN PÚBLICA SERVICIOS EDUCATIVOS DEL ESTADO DE CHIHUAHUA UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL UNIDAD 081 “LA AUTOESTIMA EN NIÑOS CON NECESIDADES EDUCATIVAS ESPECIALES” TESINA: MODALIDAD ENSAYO QUE PRESENTA ERISELDA NAVARRETE REMBAO PARA OBTENER EL TÍTULO DE LICENCIADA EN EDUCACIÓN CHIHUAHUA, CHIH., AGOSTO DE 2003
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SECRETARIA DE EDUCACIÓN PÚBLICA SERVICIOS EDUCATIVOS
DEL ESTADO DE CHIHUAHUA UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL
UNIDAD 081
“LA AUTOESTIMA EN NIÑOS CON NECESIDADES EDUCATIVAS
ESPECIALES”
TESINA: MODALIDAD ENSAYO QUE PRESENTA
ERISELDA NAVARRETE REMBAO
PARA OBTENER EL TÍTULO DE LICENCIADA EN EDUCACIÓN
CHIHUAHUA, CHIH., AGOSTO DE 2003
SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA
SERVICIOS EDUCATIVOS DEL ESTADO DE CHIHUAHUA
UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL
UNIDAD 08-A
“LA AUTOESTIMA EN NIÑOS CON NECESIDADES
EDUCATIVAS ESPECIALES”
TESINA MODALIDAD ENSAYO QUE PRESENTA:
ERISELDA NAVARRETE REMBAO
PARA OBTENER EL TITULO DE LICENCIADA EN EDUCACIÓN
AGRADECIMIENTOS
A DIOS, por permitirme vivir hasta hoy y
darme la oportunidad de disfrutar este
momento.
¡GRACIAS!
A mi esposo e hijos, por estar conmigo en mis éxitos y fracasos; por apoyarme y darme aliento cuando he estado a punto de desfallecer, por su amor, cariño, comprensión y paciencia, gracias mis amores!
A mis padres y hermanos que siempre me han brindado su cariño y apoyo incondicional; por todos sus sacrificios para apoyarme hasta el final, muchísimas gracias! A mis maestras, por todas sus enseñanzas, por compartir sus experiencias con nosotros, siendo un apoyo y ejemplo en todos los aspectos y no sólo en lo académico; mil gracias! A mis familiares y todas aquellas personas que de alguna manera me apoyaron a lo largo de esta carrera; por su disposición y ayuda desinteresada, muchas gracias!
LA AUTOESTIMA EN NIÑOS CON NECESIDADES EDUCATIVAS
ESPECIALES
Página
INTRODUCCIÓN .................................................................................... 6
ARGUMENTACIÓN Y TEORÍA DE LA TESINA
A. La socialización ................................................................................. 9
B. La afectividad del niño ........................................................................ 11
C. Necesidades básicas ......................................................................... 13
D. Las emociones ................................................................................... 15
E. Autoconcepto y autoestima .............................................................. 20
F. La comunicación .................................................................................. 26
G. La integración educativa ..................................................................... 29
H. Las necesidades educativas especiales .............................................. 35
I. Los estilos de aprendizaje ..................................................................... 40
J. Evaluación psicopedagógica ............................................................... 42
K. Adecuaciones curriculares ................................................................... 45
L. Pedagogía constructivista ................................................................... 47
M. La evaluación ..................................................................................... 59
N. Sugerencias ........................................................................................ 63
CONCLUSIONES .................................................................................... 67
BIBLIOGRAFÍA ....................................................................................... 69
INTRODUCCIÓN
En la actualidad se necesitan hombres y mujeres activos, propositivos,
autónomos, personas capaces de enfrentar asertivamente las diferentes
situaciones que se presenten en su vida, entre las cuales se encuentran las
personas que presentan necesidades especiales asociadas o no a una
discapacidad.
Para que las personas con necesidades educativas especiales logren
llevar una vida autónoma dentro de su contexto social, la autoestima juega
un papel preponderante en su formación, ya que les permite conocerse y
valorarse llevándolos a actuar de manera más autónoma al conocer y
aceptar sus habilidades y capacidades así como sus limitaciones, pues la
autoestima positiva permite que el sujeto se trace metas viables a sus
capacidades y luche por alcanzarlas.
Por ello, en el presente ensayo hablaremos de la construcción de la
autoestima y de la influencia que ésta representa en las conductas y
actitudes del individuo en especial en los que presentan alguna discapacidad
y/o necesidades educativas especiales.
En el transcurso de mi práctica docente he atendido a diferentes niños
con necesidades educativas especiales asociadas a diferentes causas
biológicas, sociales, emocionales entre otras, que impactan directamente en
el aprendizaje del alumno y nos dan una visión de lo que el niño pudiera
lograr con apoyo en ciertas áreas de su desarrollo en un tiempo determinado.
Sin embargo, conforme vamos apoyando al niño, nos damos cuenta
que en ocasiones los avances de los niños no son los esperados aún cuando
estemos apoyando de manera “adecuada” según las necesidades del
alumno, o por el contrario, el niño muestra avances que no esperábamos en
él, logrando acceder adecuadamente en más corto tiempo y con más
“desventajas” a los contenidos o propósitos del grado que cursa.
Al analizar la situación nos damos cuenta que algunos niños aún
cuando tienen todas las “capacidades” no avanzan porque tienen un imagen
negativa de su persona, son niños que se sienten rechazados por sus
padres, maestros, o los mismos compañeros, no sienten la motivación
necesaria para esforzarse por aprender.
Por lo general son niños desatendidos por sus padres quienes tienen
a su vez un nivel de autoestima muy bajo, por lo tanto no pueden desarrollar
un adecuado autoestima en sus hijos, propiciando que el niño construya una
imagen negativa de su persona, al percibir las bajas expectativas que tienen
respecto a su aprendizaje, por lo tanto muestran desinterés y apatía hacia las
actividades escolares.
En cambio, cuando los padres o maestros principalmente, le han
hecho ver al niño que es importante aprender y que él puede hacerlo, lo
apoyan y respetan, el niño siente la confianza en sí mismo en sus
capacidades y se esfuerza por alcanzar sus metas, buscando diferentes
caminos para lograrlo, y esto sólo lo logra cuando su nivel de autoestima es
adecuado, y le permite valorar tanto sus capacidades como sus debilidades
aceptándose como es.
Por ello, la tesis que desarrollo en este ensayo es: la escuela debe
intervenir por el desarrollo afectivo de sus alumnos, debe emplear
estrategias que favorezcan en todo momento la construcción de un
adecuado nivel de autoestima, ya que ésta impacta directamente en el
avance de los niños con necesidades educativas especiales respecto a
su aprendizaje, socialización e integración en el contexto escolar.
La estructura de este ensayo obedece a la siguiente lógica: primero
encontramos la parte introductoria donde justifico la tesis a la que hace
referencia el ensayo. En el segundo apartado presento argumentos teóricos
y prácticos que sustentan mi tesis la cual está fundamentada en algunos
planteamientos de Wallon, Teresa Franco, Judith Mece, Dorothy Corkille,
principalmente quienes hablan de la afectividad y la construcción e
importancia del autoestima en el individuo, así como algunos planteamientos
de Ismael García Cedillo, Jesús García Vidal, y otros documentos de la SEP
que tratan de la integración educativa y sus implicaciones. Además de Cesar
Coll, tomo algunos elementos teóricos que explican la construcción del
conocimiento desde la perspectiva del constructivismo, ya que éste nos
brinda elementos que ayudan a favorecer un adecuado nivel de autoestima
a la vez que se trabajan los contenidos escolares. Por último, contiene la
serie de conclusiones a las cuales he llegado.
Además con este documento nos daremos cuenta que los planes y
programas actuales de la educación básica contemplan dentro del curriculo
la necesidad de favorecer el desarrollo afectivo de los alumnos, y como parte
de éste encontramos el autoestima, en la cual si la educación se preocupa
por favorecerla de manera positiva en todos sus alumnos logrará todos los
propósitos que se plantea, llevándolos a un desarrollo armónico e integral.
LA AUTOESTIMA EN NIÑOS CON NECESIDADES EDUCATIVAS
ESPECIALES
A. La socialización
El hombre al nacer no es un ser social pero posee la capacidad para
serlo ya que cuenta con una herencia genética y social que lo convierte en
un ser humano, siendo el único ser vivo que presenta estas características.
Todo individuo comienza su proceso de socialización cuando al
nacer, las personas que le rodean satisfacen sus necesidades primordiales
para que pueda mantener una adecuada salud física y emocional que le
permita sobrevivir hasta que él por sí mismo, pueda trabajar para
satisfacerlas, pues no podría sobrevivir si al momento de nacer quedara
aislado y sin la ayuda de alguien para cubrir sus carencias.
De esta manera el individuo entra en un proceso de socialización
donde mediante la interacción con los demás, va desarrollando su manera
de pensar, sentir y de actuar, aprendiendo las normas, los valores,
costumbres, y creencias que existen en su sociedad y le ayudan a una mejor
convivencia con los miembros de la misma.
Mediante el proceso de socialización, se dan las bases para que el
individuo tenga una participación eficiente dentro de la sociedad, al hacer
suyas las formas de vida que ahí prevalecen, dando la oportunidad de que la
especie humana se perpetue más allá de una generación, pero para ello es
necesario establecer medios de control que aseguren una relación
armoniosa, tratando de evitar acciones que alteren negativamente las
relaciones humanas estableciendo leyes a las cuales deben ajustarse.
Para que la sociedad pueda transmitir o dar a conocer dichas leyes a
las nuevas generaciones, tiene que valerse de diferentes instituciones que
desempeñan una función específica en el control de la ley, y una de esas
instituciones es la escuela donde se desarrolla gran parte del proceso de
socialización del individuo.
Es así que la educación es el pilar de toda sociedad ya que
mediante ella se trata de transformar la conducta, la manera de pensar del
individuo para que adopte las disposiciones determinadas por la sociedad,
adaptándolas a su manera de concebir el mundo convencido de que debe
actuar en su entorno de manera autónoma, respetando los derechos de los
demás, es decir, debe sentirse satisfecho con su manera de actuar y a la vez
respetar las reglas de interacción que demanda la sociedad.
En la actualidad es necesario que se formen hombres y mujeres
productivos, competitivos, críticos, propositivos, solidarios y autónomos, lo
cual sólo se logrará mediante la educación, es por esto que los artículos y
leyes que reglamentan la educación en México, establecen que se deberá
desarrollar a la vez todas las capacidades del ser humano, propiciando en el
individuo su desarrollo armónico e integral.
Por lo anterior la educación debe apoyar al sujeto para que
prospere en cada uno de los aspectos de su personalidad, ya sea emocional,
física, intelectual o socialmente hablando ya que esto le llevará a alcanzar
una armonía dentro de la sociedad y brindarle la posibilidad de mejores
condiciones de vida.
Por tal motivo la educación y principalmente la básica, debe
reconocer y comprender el valor que tienen el aspecto afectivo dentro del
proceso enseñanza aprendizaje, puesto que el niño aprende según su
interés hacia el objeto de estudio, y este interés dependerá de las emociones
y estado de ánimo que tenga.
B. La afectividad del niño
El niño establece un vínculo afectivo entre él y el objeto de
conocimiento concluyendo que el desarrollo afectivo va a la par del
desarrollo intelectual, ya que la afectividad y la inteligencia son fenómenos
paralelos y entrelazados que conforman a un sujeto social, por lo que se
hace necesario que el docente conozca además del proceso de desarrollo
intelectual del individuo el proceso del desarrollo afectivo.
El desarrollo afectivo se da mediante la socialización y
comunicación que establece el individuo con quienes le rodean, desde su
gestación el niño empieza percibir las emociones de su madre dándose
cuenta si es un niño deseado o no.
Al nacer el niño pertenece a un pequeño grupo (la familia) donde
empieza su proceso de socialización, estableciendo los primeros lazos
afectivos con su madre o aquella persona que satisface sus necesidades,
manifestándolos a través de su sonrisa, llanto, entre otros, comunicando así
si se encuentra cómodo o incómodo.
Durante los primeros meses el niño establece un contacto
emocional con su madre, respondiéndole con sonrisas cuando le gratifican
las respuestas a sus necesidades, sin embargo para que esto suceda es
necesario una disponibilidad afectiva por parte de la madre para que exista
una estimulación recíproca, indispensable en cualquier relación afectiva.
La relación afectiva entre madre e hijo se hace cada vez más
intensa, conforme pasan los meses, el niño percibe que él es parte de su
madre, y al estar con personas extrañas entra en un estado de ansiedad,
recobrando la tranquilidad sólo en los brazos de su madre, pudiendo llegar a
la muerte si no existiera la figura materna o sustituto de la misma.
Como parte del desarrollo psicológico al poder desplazarse por sí
mismo, el niño empieza a concebirse como un ser aparte de su madre,
encontrando una especie de fascinación con el mundo, por lo que se separa
de la madre para explorarlo, pero no la pierde de vista, ya que el verla le da
seguridad y confianza para experimentar; en algunas ocasiones el niño
traspasa el apego con la madre a un objeto personal, estableciendo un
apego afectivo y cuando no lo tiene entra en un estado de ansiedad e
intranquilidad, ya que el objeto le brinda seguridad y le ayuda a superar la
separación con su madre.
La calidad de las relaciones que establezca el niño en los primeros
meses de vida son de vital importancia para que pueda relacionarse en
etapas posteriores, pues aún cuando posee distintas potencialidades
personales y sociales para interactuar con su medio, el éxito de esta
interacción depende de la estimulación que reciba en el ambiente familiar
principalmente y más tarde en el escolar.
Se ha comprobado que existe una relación estrecha entre el
desarrollo de las facultades mentales y las experiencias familiares y sociales,
por lo que es necesario que el individuo establezca una adecuada relación
afectiva ya que de ésta depende su estabilidad y salud emocional que le
ayudarán a establecer relaciones afectuosas y sinceras que favorezcan la
construcción de su autoestima.
La autoestima es de vital importancia para el ser humano, ya que
del nivel de ésta dependerán la calidad de sus interacciones, le apoya en el
desarrollo de su personalidad, y a su vez la calidad del nivel de autoestima
del individuo depende de la forma y calidad en que son atendidas sus
necesidades básicas.
C. Necesidades básicas
Todo ser humano presenta una serie de necesidades que
requieren ser satisfechas para lograr un óptimo desarrollo ; según Montagú
las necesidades que presentamos son:
-Necesidades básicas vitales, se refiere a las necesidades biológicas
del organismo que es preciso satisfacer para que el individuo pueda
sobrevivir y deben ser atendidas en la medida en que el organismo lo
requiera.
-Necesidades básicas emocionales son aquellas en las que el
individuo necesita sentirse amado, respetado, aceptado, comunicarse con
otros, pues de esto depende su salud mental.
-Necesidades derivadas o socialmente emergentes, son aquella en las
que el individuo debe satisfacer para sentirse bien respecto a la imagen que
proyecta hacia los demás y a la vez le permiten reafirmar la satisfacción de
las necesidades anteriores.
-Necesidades adquiridas, surgen de la relación que establece el
individuo de las necesidades derivadas, pero la satisfacción de éstas no es
necesaria para el mantenimiento de la salud mental1.
Las necesidades tienen una gran influencia en la vida afectiva 1 FRANCO, Teresa “Vida afectiva y educación infantil”. Editorial Narcea. p. 25
infantil. El desarrollo y satisfacción adecuada de las necesidades afectivas
son imprescindibles para asegurar el desarrollo posterior de su personalidad.
Maslow clasifica siete tipos de necesidades afectivas que se distinguen de
las vitales debido a que la capacidad de satisfacción es ilimitada e
intangible, por lo que no se puede saber cuando ya están satisfechas. Estas
son necesidades de:
a. Seguridad
b. Afecto y pertenencia a un grupo
c. Preservar la propia estimación
d. Información y saber
e. Comprender el mundo
f. Gozar de la belleza
g. Encontrarse a sí mismo2.
En la medida en que el niño vaya satisfaciendo estas necesidades, se
acercará cada vez más a una autorrealización completa que lo llevará a una
vida afectiva plena, favoreciendo su desarrollo integral pues la afectividad es
el principal motor que mueve al ser humano a actuar y buscar la satisfacción
de sus necesidades.
Por lo tanto es esencial la satisfacción adecuada de las necesidades
afectivas en todas la etapas del ser humano, ya que todos necesitamos
recibir amor, afecto, atención, aceptación, comprensión, reconocimiento,
respeto y apoyo, pero también brindarlo a alguien .
Cuando las necesidades afectivas no han sido cubiertas
satisfactoriamente, cuando no se ha recibido el amor, aceptación y
comprensión de alguien, tampoco tiene la capacidad de darlo, poniendo en
riesgo un desarrollo armónico e integral, convirtiéndose en personas 2 Ibídem. p. 23
inseguras, agresivas, desconfiadas, la falta de amor causa daños tanto
emocionales como físicos.
D. Las emociones
La afectividad es “el aspecto más fundamental de la vida psíquica y
la base a partir de la cual se forman las relaciones interhumanas y todos los
lazos que unen al individuo con su medio”3, por lo que en todas las acciones
que realiza el individuo físicas e intelectuales están presentes sus
sentimientos y emociones.
Para Wallon las emociones consisten en sistemas de actitudes que
responden a cierta situación 4, una emoción afecta a todo el organismo y
constituye una experiencia total en la persona, quien experimenta diferentes
estados emocionales desagradables como la ira, el miedo, la aflicción, los
celos y curiosidad; y agradables como la alegría, el placer, el gozo y el
afecto. Tanto los sentimientos como las emociones tienen origen en las
necesidades del ser humano como resultado de la insatisfacción de las
mismas.
El niño utiliza sus emociones como un medio de acción, como un
recurso para imponer su poder sobre los adultos. Asimismo, “muestra como
los efectos de la emoción se convierten en un medio de acción sobre el
ambiente que precede visiblemente a la edad de la deliberación o del cálculo.
El niño aprende a usar este medio de acción con una maestría creciente y
una conciencia cada vez más aguda”5, es decir el niño a través de sus
manifestaciones emocionales aprende a manipular a los adultos, pues
3 Diccionario de las Ciencias de la Educación. Vol. I. Editorial Santillana. México 1990. p. 57 4 WALLÓN, Henry. “ La evolución psicológica del niño. Editorial Grijalvo. México, 1963. p. 123 5 Ibídem. p. 29
descubre que por medio de ellas logra obtener con mayor facilidad lo que
desea.
Los niños pueden experimentar diferentes manifestaciones
emocionales como la ira, los celos, la aflicción, alegría, afecto y temor, los
cuales son provocados por diversos factores.
La ira es utilizada por el niño para llamar la atención ya que sabe
que mediante ella, se obtiene lo que desea dependiendo de la respuesta que
obtenga de los adultos al respecto. La emoción nace de las limitaciones que
se enfrenta el niño y se manifiesta de manera impulsiva o inhibida ya sea con
agresión física o verbal o bien mantenerla bajo control, guardándose para si
mismo la emoción creyendo que es mejor ocultar su ira que expresarla.
Los celos son una actitud de resentimiento hacia la persona que
cree él le están quitando el afecto de la persona que ama.
La aflicción es un trastorno emocional provocado por la ira de un ser
querido. Se caracteriza por un llanto excesivo o por un estado generalizado
de apatía.
La curiosidad, su principal característica es la inquietud que
presenta el niño para explorar y conocer el mundo que le rodea, a través de
la observación, la manipulación entre otros, satisfaciendo así sus deseos de
comprender su medio.
La alegría es una emoción agradable que se manifiesta a través de
la risa y lleva al placer gozo o felicidad. La alegría en los niños es más
frecuente cuando se encuentran acompañados ya que se contagian con la
risa de los demás.
El afecto es una emoción impregnada de sentimientos, simpatía y
cariño hacia una persona, cosa o animal. Dicha emoción debe ser bilateral al
ser dirigida hacia otra persona, proporcionando armonía a la relación.
El temor en los niños es provocado por diferentes fuentes como
personas desconocidas, ruidos fuertes o desconocidos, etc, se presentan de
manera repentina e inesperada. Los temores varían de acuerdo a las
diferencias del desarrollo mental y físico y de las experiencias individuales.
El temor puede manifestarse mediante la vergüenza, la
preocupación, la ansiedad y la timidez. La primera se da por la incertidumbre
del niño al no saber como consideran su conducta las demás personas, tiene
poca seguridad en si mismo, por lo que ante cualquier situación se muestra
nervioso, tartamudea y se ruboriza.
La preocupación puede mostrarse facial o verbalmente a través de
preguntas; esta puede disminuirse o evitarse si el niño entabla buenas
relaciones con lo demás y se siente aceptado y adaptado a ellas.
La ansiedad es un estado mental incómodo que surge de una
preocupación frecuente e intensa en el que el niño se siente incapacitado
para resolver lo que le preocupa, perdiendo la confianza en sí mismo. Si un
adulto la padece puede transmitirla con facilidad a los niños que están a su
alrededor, haciéndoles sentir culpables de su malestar, debido a que sienten
que no complacen los intereses de los adultos. La ansiedad se manifiesta a
través de la depresión, nerviosismo, irritabilidad, insomnio y sensibilidad
hacia lo que otros dicen o hacen.
La timidez es el temor a si mismos que experimenta el individuo al
establecer relaciones con los demás, ya que carece de confianza en su
persona y en las habilidades propias, manifestando constantemente cobardía
ante el fracaso. Esta inseguridad resulta de las experiencias negativas que
vive durante la infancia, principalmente en el seno familiar, cuando el niño
percibe cierto rechazo por alguno de sus padres, le hacen sentir que no hay
nada bueno en él mismo, ya que ve que su conducta no es aceptada, por lo
que le resulta sumamente difícil enfrentarse a las dificultades que la vida le
depara.
Los aspectos anteriores influyen directamente en la construcción de la
autoestima del niño, pues son parte de su personalidad y por ende la manera
en que las personas cercanas a él responden a sus manifestaciones
emocionales le ayudan a formarse un autoconcepto al respecto, llevándolo a
actuar de acuerdo a él.
Como bien sabemos las primeras relaciones sociales que
establece el individuo se dan dentro del seno familiar, donde aún antes del
nacimiento, el niño percibe los estados emocionales de su madre, los cuales
influyen en su desarrollo emocional, el niño aprende a comportarse y convivir
con los demás según el tipo de relaciones afectivas que establezca con las
persona más cercanas a él.
Por lo tanto, la discapacidad que presentan algunos niños con
necesidades educativas especiales, afectan a toda la familia, sometiéndola a
una serie de tensiones, donde los padres experimentan sentimientos
encontrados respecto a sus hijos y a la situación que viven.
Muchos padres se sienten incapaces y derrotados para atender a
sus hijos, pues no entienden ni están preparados para las conductas y
reacciones inesperadas de sus niños, donde muchas madres se creen
culpables del problema.
Las familias con estos problemas por lo general sienten que han
tenido una gran perdida, pues aquella familia perfecta con la que soñaban
esta destrozada y no saben por donde empezar a reconstruirla, por lo que
empiezan a escudarse en una serie de emociones como la negación al
problema, la impotencia, el enojo y/o el duelo, pasando por sucesivas
tensiones al hacer frente a estas intensas y contradictorias emociones.
Las familias adoptan diversas actitudes para ocultar su dolor y
tristeza, en ocasiones optan por la negación del problema llegando a pensar
en que todo está bien y con el tiempo pasará, por lo pronto buscarán ayuda
en centros especializados, participando con entusiasmo, con la idea de que
el tratamiento es por mientras el niño se componga. Otras familias optan por
la autocompasión, haciendo ver a los demás lo mucho que están sufriendo o
simplemente hay quienes permanecen en silencio pensando en su problema.
En estas situaciones los padres son los principales responsables
del estado emocional y la estabilidad de la familia en general, dependiendo
del rol que asuman, negador, autocompasivo, culpable, protector o cobrador,
pudiéndose dar diferentes roles al mismo tiempo, pero que constituyen una
manera de evadir la realidad impidiendo una comunicación adecuada,
produciendo ciertos resentimientos entre los miembros de la familia.
Cuando los padres cuentan con la información necesaria respecto
a la discapacidad de su hijo, la dinámica familiar no se conflictúa tanto, ya
que el niño es aceptado y los roles de cada uno de los miembros que la
conforman quedan bien definidos, existiendo por lo general una interacción y
comunicación positiva entre ellos, atendiéndose sus necesidades
individuales.
La forma en que el niño interpreta el trato que recibe de las
personas más allegadas a él, es de suma importancia ya que influye
directamente en la concepción que va formándose de sí mismo, pues de
acuerdo a ello se contempla y valoriza, conformando su auto concepto y
autoestima, puesto que va interiorizando su propia imagen comprendiendo
sus posibilidades y limitaciones, identificándose como parte de un grupo y a
la vez como miembro diferente a los demás.
Es así que existen grandes diferencias entre los niños que
presentan una misma discapacidad, pues a algunos de ellos se les ha
estimulado tanto sus posibilidades que deja de ser un “discapacitado” en la
sociedad ya que la imagen que le han reflejado las personas cercanas es la
de un individuo “normal” sintiéndose capaz de resolver sus propios
problemas, aún cuando su aspecto físico o su “problema” esté presente.
En cambio a las personas a quienes se les han sobreprotegido o
brindado una imagen de dependencia, se acentúa más la discapacidad ya
que su autoconcepto no le permite interactuar como un miembro más de su
sociedad, creyendo que no es capaz de resolver por sí mismo algunas de las
situaciones a que pudiera enfrentarse, prefiriendo depender de los demás
para ciertas actividades.
E. Autoconcepto y autoestima
De esta manera, el “autoconcepto designa las creencias, las
actitudes el conocimiento y las ideas referentes a nosotros mismos. Está
organizado jerárquicamente en categorías y en dimensiones que definen el
yo y dirigen el comportamiento”6 es decir el individuo se conceptualiza de
6 MECE, Judith “desarrollo del niño y del adolescente” Compendio para educadores. SEP, México, 2000. p. 271
cierta forma en diferentes aspectos, por ejemplo ellos tienen un concepto de
lo que saben respecto a sus capacidades, diciendo que son personas
inteligentes o de bajo rendimiento.
En cambio la autoestima “es una evaluación de nuestro rasgos,
capacidades y características. Es un juicio personal de valor, indica hasta
que punto alguien se cree capaz, importante, exitoso y valioso.”7 De esta
manera la autoestima es el nivel de estimación que el individuo tiene hacia
todo aquello que él es y lo que hace, el afecto o aprecio que el individuo tiene
por sí mismo y a la vez por todo lo que realiza, la manera en que valora sus
acciones, ideas, sus pensamientos, su persona, la confianza que posee en sí
mismo.
Es por esto que la autoestima es uno de los aspectos del desarrollo
más importantes a tomar en cuenta con los niños con necesidades
educativas especiales, pues en la medida en que ellos se crean capaces en
esa medida lucharán por superar sus dificultades por más obstáculos que
tengan.
Sin embargo, la falta de información respecto al problema de estas
personas nos llevan a sobreprotegerlos, haciéndoles sentir que no son
capaces de realizar ciertas actividades, provocando que pierdan la confianza
en ellos mismos, donde desde niños están recibiendo esta imagen de los
demás.
El progreso de la toma de conciencia que el niño va haciendo de sí
mismo, es uno de los procesos centrales de la niñez, ya que a partir de ésta
el niño va formando su identidad personal, al respecto Allport organiza la
evolución del concepto de sí mismo en cinco etapas sucesivas. las primeras 7 Idem.
tres se desarrollan alrededor de los tres años y las otras dos entre los cuatro
y seis años.
- Primera etapa “sentido de sí mismo corporal”, el niño va conociendo
su esquema corporal y diferenciándose del medio ambiente conforme va
experimentando con su propio cuerpo, descubriéndose a sí mismo.
- Segunda etapa “sentido de auto identidad continuada” el niño amplía
el concepto de sí mismo al darse cuenta que tiene nombre propio, lo cual
hace que se conciba como un ser único e indivisible. El niño muestra
indignación cuando no se le llama por su nombre real, pues se enfada al
escuchar algún sobrenombre, llevándolo a un estado de frustración si
sucede con frecuencia, poniendo en riesgo su incipiente orientación
hacia la identidad personal.
- Tercera etapa “sentido de orgullo o autoestima” surge cuando el niño
demanda hacer las cosas por sí solo, sintiéndose orgulloso cuando logra
realizarlas con éxito, por lo que buscará acciones más independientes en
las cuales pueda comprobar sus habilidades y ver que tanto puede lograr
por si mismo; eso le brinda sentimientos de seguridad y de poder. Otra
forma de ratificar su autoafirmación es el negativismo donde el niño
asume una actitud de rechazar constantemente todo lo que dice,
confirmando así su poder, haciendo valer sus opiniones.
- Cuarta etapa “la extensión de sí mismo” se refleja en una conducta
posesiva y celosa, el niño se obsesiona por todo lo que le pertenece a tal
grado que no esta dispuesto a compartirlos con los demás por temor a
perderlos. Esta conducta debe entenderse como un signo de extensión
saludable de sí mismo, puesto que no se extiende hacia los objetos, sino
que es capaz de imaginar una situación en la que puede perderlos.
- Quinta etapa “la auto imagen”. La auto imagen global es muy primitiva
pues el niño la forma en base a lo que las personas que son importantes
para su vida piensan y actúan respecto a él, influyendo a manera de
espejo. A partir de la auto imagen que el niño tenga de sí mismo se
deriva su yo ideal y capacidad de autoestima. Es en esta etapa donde
se ubican los niños con N.E.E que se atiende por parte de la USAER, ya
que todos tienen un concepto de sí mismos y en general este es
negativo. 8
Es así como las bases de la construcción de la autoestima la
constituyen las impresiones que recibe el niño de todas aquellas personas
que son importantes para él, de la calidad de las relaciones que se
establezcan principalmente sus padres, hermanos y maestros ya que son
con quienes pasan más tiempo y más influencia tienen en su desarrollo.
En un principio de la niñez, los padres son las personas más
importantes para lo niños, para ellos son las personas más poderosas que
existen por lo tanto lo que ellos hagan o digan es de suma importancia en el
desarrollo de su autoestima, y los juicios que éstos hagan sobre sus hijos
son determinantes para que el niño se forme un auto concepto de sí mismo
lo cual le ayudará a interactuar con su contexto, por ello se debe evitar emitir
juicios negativos ya que el niño se apropia de esas expresiones y tratará de
que su comportamiento vaya de acuerdo a la imagen que le están reflejando
los demás.
Por esto es que los padres de los niños con necesidades educativas
especiales tengan o no discapacidad son de vital importancia, pues depende
mucho del trato que ellos les den y de los tipos de juicios que les digan para
que el niño vaya confiando y descubriendo sus capacidades, y de la forma 8 FRANCO. Op. Cit..p. 51
como propician y favorecen este descubrimiento.
Otro aspecto importante que influye en la construcción de la
autoestima es la represión de las emociones, ya que tradicionalmente la
manera de tratar las emociones negativas provoca que los niños pierdan la
confianza en nosotros, prefiriendo guardarse sus sentimientos e
inconscientemente van forjándose un concepto erróneo de sí mismo
pudiendo llegar a la conclusión de que debe ser una persona horrible por
experimentar emociones tan nocivas que son inaceptables por los demás,
desquebrantándose de esta forma su auto respeto.
Evitar esto, es sumamente difícil para las familias de las personas
especiales, pues en realidad la mayoría de los miembros se encuentran con
una serie de emociones encontradas que les son difíciles aceptar, por lo
tanto si como personas no aceptamos nuestras propias emociones,
difícilmente podremos encausar adecuadamente las emociones de los
demás, resultando una confusión de las emociones en los niños al no saber
distinguir que sus emociones son normales y todo mundo las experimenta.
Esto a su vez perjudica al individuo ya que almacena una serie de
presiones que forzosamente buscará mitigarlas o calmarlas a través de
diversos escapes, ya sea volcándose hacia su persona o presentando una
serie de conductas como jaqueca, sonambulismo, hiperquinecia, obsesiones,
o bien volviéndose hostil y/ o agresivo con los demás.
Si se le castiga por este hecho el niño se convence cada vez más de
que realmente es malo, sensibilizándose de tal manera que sólo percibirá
aquellas reacciones o respuestas que le confirmen la imagen negativa que
tiene de sí mismo, rechazando las que no concuerden con su imagen de
perdedor o fracasado.
“El niño que se ve como perdedor, espera fracasar y se comporta de
tal manera que hace menos probable el éxito. Una vez que deja de creer en
sí mismo queda en el camino de la derrota”9 por lo que una persona con baja
autoestima aunque trate de sobresalir para obtener juicios positivos, su falta
de confianza le impide lograrlo, por lo que es incapaz de realizar sus propias
ideas, ya que teme que no sean aprobadas por los demás, prefiriendo
dejarlas de lado y no exponerse a nuevas críticas.
Además para él es mejor actuar de acuerdo a las expectativas de los
demás, sofocando su talento y creatividad, optando por el conformismo como
la mejor manera de vivir en paz, lo cual se observa constantemente en la
mayoría de los niños con necesidades especiales que tiene un autoestima
pobre, pues no se esfuerzan por sobresalir, hacen sólo lo que se les va
indicando, perdiendo la iniciativa propia.
Para evitar lo anterior es de vital importancia propiciar que el niño
aprenda a tomar sus propias decisiones y defender sus puntos de vista,
contribuyendo a que se respete y valore, que adquiera la confianza y
seguridad suficiente que le permita percibirse como un ser único ya que esto
es la base de su estabilidad.
El reconocer los logros que tienen estos niños por mínimos que sean
ira favoreciendo la construcción de una imagen positiva de su persona, se
sentirá capaz de realizar cosas por sí mismo y ésto le irá dando confianza en
sus habilidades poco a poco, hasta que se sienta capaz de tomar sus propias
decisiones.
El niño debe sentir “que su punto de vista es tan válido para él como el
de uno para uno. Nuestra actitud debe equivaler a decirle: tu eres tu propia 9 CORKILLE, B. Dorothy. “El niño feliz.” 11° Edición. Editorial Gedissa. Mpéxico, 1985. p.42
persona y tus sentimientos son enteramente tuyos. Así se presentarán la
seguridad y el amor”10 lo cual fomentará la construcción de un adecuado
nivel de autoestima.
Es por esto que el respeto al niño es básico para el desarrollo de su
autoestima, pues cuando el niño es respetado aprende a respetar a los
demás, a la vez que se visualiza como un ser libre, en la medida en que esa
libertad no afecte a terceras personas, experimentando más satisfacciones
respecto a sus logros, favoreciéndose su seguridad, creatividad y
autovaloración al desarrollar su propio potencial.
Es necesario valorar y reconocer las acciones positivas de los niños y
comunicárselas para que ellos se conozcan y se acepten, pues una persona
que sabe quién es, también sabe a dónde quiere ir, por lo tanto no se da por
vencido hasta alcanzar su meta. “el conocimiento y comprensión de uno
mismo son el camino más importante para la autorrealización, proceso que
debe ser impulsado por padres, maestros y medio cultural en general.”11
F. La comunicación
La manera más eficaz que el niño se conozca y valorice es la
comunicación, pues ésta es determinante para el desarrollo emocional, pues
si es positiva ayuda al individuo a solucionar sus problemas liberando sus
tensiones, en cambio, cuando no existe una buena comunicación se
acumulan las tensiones, se reprimen sentimientos y emociones, que llevan
al individuo a aislarse de los demás, volviéndose una persona desconfiada,
tensa y llena de angustias internas.
10 Ibídem. P.127 11 ALONSO, Palacios Ma. Teresa. “La afectividad en los niños”. Editorial Trillas. México, 1996. p. 28
Por ello, debemos propiciar una comunicación que le permita al niño
expresar sus pensamientos, sus deseos, sus frustraciones y agresiones para
que libere todo aquello que pudiera dañar la construcción de su
personalidad, y tenga un sano desarrollo físico y emocional al aceptarse
como una persona única y diferente a las demás.
Para ello es necesario que las relaciones que establezca en las
diferentes instancias en que se desenvuelve, como el hogar, la escuela y la
comunidad en general le sea favorables para que construya un auto
concepto positivo de si mismo, donde encuentre un ambiente en el que
pueda comunicarse libremente manifestando sus problemáticas y busque
soluciones a la misma.
De aquí la importancia de que aparte del hogar, el ámbito educativo
propicie un ambiente adecuado para el desarrollo de la autoestima ya que
ésta influye en todas las acciones que el individuo realiza puesto que la
afectividad está ntimamente relacionada con el aspecto intelectual, lo cual
debemos tomar en cuenta dentro del proceso educativo y dar la relevancia
que tiene el aspecto afectivo social en el desarrollo integral del individuo y no
sólo centrarnos en el aspecto intelectual.
De hecho, la finalidad de la educación es el desarrollo armónico e
integral del individuo y para lograrlo debemos tomar en cuenta las diferencias
individuales entre nuestros alumnos reconociendo sus habilidades y
debilidades para favorecer el desarrollo de sus capacidades tanto físicas
emocionales, intelectuales y sociales que le permitan integrarse como un
miembro activo en su comunidad.
De esta manera el principal objetivo de la educación debe ser el de
brindar oportunidades a los alumnos para que desarrollen todas sus
potencialidades, habilidades y aptitudes que les permitan un desarrollo
integral.
Desafortunadamente en el pasado estos fines sólo incluían a los
alumnos “normales”, segregando a aquellos que presentaban alguna
discapacidad, sin embargo a lo largo de la historia, la sociedad ha ido
cambiando sus concepciones respecto a las personas con discapacidad,
pero esto ha sido un proceso largo y difícil, ya que aún existen personas que
consideran a los discapacitados como nocivos y peligrosos para los demás, o
que son dignos de lástima y merecen caridad y benevolencia.
Son pocas los sujetos que piensan que las personas con
discapacidad son individuos iguales a los “normales” que cuentan con una
característica particular que es su discapacidad y por lo tanto, merecen la
misma oportunidad de acceder a los beneficios que tienen las personas
“normales” aún cuando los obstáculos sean mayores para ellos, por lo que
se deben buscar los medios apropiados que faciliten la adquisición de esos
beneficios y los lleven a una integración satisfactoria en todos los aspectos.
Lo anterior, entorpecía grandemente la construcción de un adecuado
autoestima, ya que se le hacía ver al individuo con discapacidad que era una
persona diferente a las demás, para evitar esto, nace la integración
educativa, la cual “es un esfuerzo para generar las condiciones que permitan
que los alumnos aprendan de acuerdo a sus potencialidades”12. Por lo que
es necesario cambiar nuestros esquemas al respecto y buscar la información
pertinente y objetiva que nos permita verlos primeramente como personas y
después entender sus limitaciones y resaltar sus posibilidades
12GARCÍA, Cedillo Ismael, ESCALANTE, H. M.C. otros “La integración educativa en el aula regular”. SEP. México, 2000. p.41
G. La integración educativa
De esta manera la discapacidad se convierte en un hecho sociológico
debido a que la manera en que actuamos respecto a ella obedece a un
condicionamiento social, por ejemplo al clasificar la discapacidad pudiera ser
útil a los especialistas, para definir su tratamiento, sin embargo se corre el
riesgo de etiquetar a la persona
El hecho de etiquetar presenta sus desventajas, pues además de
lastimar la autoestima de la persona con discapacidad, las etiquetas
impactan tanto en las percepciones, conductas y expectativas del propio
individuo con discapacidad y de las personas que le rodean, influyendo en el
auto concepto de la persona.
Como sabemos, la función de la escuela está de acuerdo a las
concepciones y fines de la sociedad, anteriormente se consideraba que las
dificultades físicas y sensoriales imponían límites al desarrollo cognitivo y los
problemas de aprendizaje se veían en término de deficiencia mental,
considerándolos diferentes a los demás, por lo que se desarrollo un sistema
educativo separado para ellos que tendía a etiquetarlos, segregarlos, y
entorpecía su incorporación en todos los ámbitos de la sociedad.
Anteriormente, las escuelas se enfrentaban a una gran diversidad de
aprendizajes y conductas de sus alumnos, ante las cuales se sentía
imposibilitada para educarlos, debido a que no estaban dispuestas ni
equipadas para hacerlo, por lo que muchos alumnos quedaban excluidos,
principalmente aquellos que presentaban alguna deficiencia la cual se
consideraba como un defecto, negándoles el acceso a la institución,
canalizándolos a escuelas especiales.
Esto afectaba principalmente a las personas que presentaban
dificultades físicas y sensoriales ya que creían que no tenían la capacidad
para aprender y a las personas con problemas de aprendizaje ya que eran
vistas como deficientes mentales, considerándolos incompetentes intelectual
y socialmente para asistir a la escuela, negándoles la oportunidad de llevar
una vida “normal” de acuerdo a sus posibilidades.
En la actualidad las concepciones sobre educación se han ido
reconceptualizándo, al observar los efectos que tiene en el individuo el asistir
a una escuela diferente a la de los demás miembros de su comunidad
viéndose la necesidad de transformar la escuela que antes era para los
“normales” en una escuela para todos.
Esta realidad ha cobrado más fuerza a partir de las declaraciones de
Salamanca, celebradas en Salamanca, España en 1994; cuyo principal
objetivo fue el de promover una escuela para todos, donde se atienda a la
diversidad y al atenderse a la diversidad se aceptan y respetan las
diferencias individuales, dando cabida a atender las diferencias respecto a
las discapacidades reconociendo que es una característica de las personas
que la presentan como cualquier otra característica de una persona normal.
Actualmente la Ley General de Educación tiene un apartado especial
donde en su artículo 41 menciona el derecho que tienen todos los
individuos con discapacidad de recibir las mismas oportunidades para
educarse, pues aún cuando tuvieran alguna “diferencia” respecto a los
demás, no dejaban de ser parte de una sociedad, y por lo tanto tienen los
mismos derechos y obligaciones que ellos.
Esto ha cobrado suma importancia para la construcción de la
autoestima de las personas con N.E.E. presenten o no una discapacidad ya
que el concepto de su persona que están recibiendo de quienes le rodean es
positivo, los están incluyendo dentro de su sociedad como un ciudadano
más, confiando en que pueden ser productivos para la misma.
Debido a este cambio en la concepción de las personas con
discapacidad se ha visto la necesidad de transformar la escuela de tal
manera que de cabida a todos los individuos que pertenezcan a su
comunidad favoreciendo la integración educativa, teniendo sus bases
principalmente en los siguiente fundamentos filosóficos: respeto por las
diferencias, derechos humanos e igualdad de oportunidades y escuela para
todos.
- Respeto por las diferencias que nos habla de “la necesidad de aceptar
las diferencias y de poner al alcance de cada persona los mismos
beneficios y oportunidades para tener una vida normal”13 ya que todos
somos diferentes y la discapacidad de los individuos es una
característica más de su persona, lo cual debemos aceptar y respetar
como tal, y al hacerlo estamos propiciando que el individuo con
discapacidad también se acepte con esas diferencias respecto a los
demás, dándoles la oportunidad de tener una vida normal.
- Derechos humanos e igualdad de oportunidades se refiere a que todos
tenemos derechos y obligaciones, y que uno de los derechos con que
contamos es el de recibir una educación de calidad y por lo tanto los
niños con alguna discapacidad merecen la misma oportunidad de recibir
educación en la escuela regular independientemente de que necesite
atención especial.
13 Ibídem. P. 42
Pero desafortunadamente aún existen muchas personas que creen
que la escuela es sólo para los “normales” negándoles la oportunidad de
recibir esa educación no recibiéndolos en la institución o simplemente
ignorándolos o sobreprotegiéndolos dentro de la misma, cayendo en el
extremo de no exigirles trabajo porque tienen la idea de que no pueden.
Esta actitud entorpece el auto concepto del alumno con N.E.E. ya que
al ver que se le pide menos que a los demás va interiorizando que no tiene la
capacidad de hacerlo, para evitar esto debemos conocer al alumno para
proporcionarle los recursos necesarios que le brinden la oportunidad de
acceder a los beneficios que tienen sus compañeros y a la vez poder
exigirles de acuerdo a sus posibilidades.
- Escuela para todos se asegura que todos tengan acceso a la escuela y
que además se satisfagan dentro de la misma sus necesidades de
aprendizaje, por lo tanto implica atender a la diversidad bajo dos
características importantes que son la cobertura y la calidad.
Los niños con necesidades educativas especiales, también tienen la
capacidad de aprender, y estas necesidades deben ser atendidas en la
escuela regular, ya que busca el desarrollo armónico del niño, deberá
desarrollarse el proceso enseñanza aprendizaje de tal manera que responda
a los estilos de aprendizaje de los alumnos, teniendo en cuenta que todos
aprendemos de diferente manera, no sólo los niños especiales.
Se comprobó que las escuelas especiales favorecían la segregación y
etiquetación de estas personas, dificultando su integración a la sociedad,
pues mientras asistieran a la escuela tenía su propio círculo social, pero al
momento de salir de ella, se enfrentaban con una realidad donde no tenían
los elementos necesarios para afrontarla, al mismo tiempo, la sociedad se
convertía en discriminadora, al no aceptarlos por ignorancia, al desconocer
las características de estas personas, impidiéndoles incorporarse
productivamente convirtiéndolas en personas pasivas y dependientes.
Con la escuela para todos se pretende que el individuo se integre
principalmente en el ámbito educativo y posteriormente en el social, por lo
tanto debe basarse en un currículo flexible que mediante su ejecución
proporcione al individuo los elementos afectivos, cognitivos sociales y físicos
que le permitan relacionarse con confianza e integrarse plenamente.
“Estos fundamentos filosóficos forman parte de las bases éticas y
morales de un ideal de hombre que ha de formarse en el aula con una serie
de atributos, características, habilidades y capacidades para integrarse a la
sociedad”14
Esta necesidad de integrarlos plenamente a su sociedad surge a partir
de los años setenta con la corriente normalizadora, la cual defiende el
derecho de las personas con discapacidad de llevar una vida tan normal
como el resto de la sociedad en todos los aspectos, familiar, escolar, laboral
y social, “todos los alumnos tienen derecho a que se les ofrezcan
posibilidades educativas, en las condiciones más normalizadoras posibles,
que favorezcan el contacto y la socialización con sus compañeros de edad, y
que les permita en el futuro integrarse y participar mejor en la sociedad”15
De aquí nace uno de los cuatro principios básicos de la integración
educativa que son:
14 Ibídem. p.43 15 MARCHESI, Alvaro y MARTÍN Elena. “Del lenguaje del trastorno a las necesidades educativas especiales en Antología UPN, “Necesidades educativas especiales asociadas a la discapacidad”. Chihuahua, 1999. p. 92
- El principio de normalización implica brindar aquellos servicios y ayudas
técnicas que necesitan los alumnos con discapacidad para que puedan
tener una vida de calidad, le permita ejercer sus derechos humanos y le
de oportunidad de desarrollar sus capacidades.
- El principio de integración pretende facilitarle a las personas con
discapacidad la apropiación de habilidades que les permitan interactuar
en todos los ámbitos de su sociedad. Su objetivo principal es ayudar en
el proceso de formación de estas personas de manera dinámica y
participativa para que ellos mismos elijan su propio proyecto de vida.
- El principio de la sectorización nos habla del derecho de toda persona
con discapacidad de tener acceso a los servicios que se brindan cerca de
su domicilio incluyendo la educación.
- El principio de individualización de la enseñanza reconoce que en el aula
existe un alumnado diverso en intereses, formas de pensar, de
aprender, de relacionarse y por lo tanto el proceso enseñanza-
aprendizaje debe responder a las necesidades y peculiaridades de cada
uno de los alumnos.
De acuerdo con estos principios “los alumnos con N.E.E. deben ser
educados cerca de sus casas, en un ambiente lo más normal posible, con las
adaptaciones necesarias para que puedan acceder a todas las experiencias
educativas y de esta manera integrarse a la sociedad en todos los ámbitos”16
si esto se lleva a cabo estaremos favoreciendo la construcción de una
adecuada autoestima ya que el niño con N.E.E. se sentirá respetado y
valorado por quienes le rodean al brindársele las mismas oportunidades que
a las personas de su comunidad. 16 GARCIA, Cedillo Ismael Op.Cit. p.45
H. Las necesidades educativas especiales
Con el proceso de integración nacen una serie de conceptos que
hacen posible que esta se lleve a cabo, uno de ellos son las Necesidades
Educativas Especiales (N.E.E.), las cuales se refieren a los apoyos
adicionales que necesitan algunos niños con o sin discapacidad para
acceder al currículo, es decir se hace énfasis en las necesidades que
presenta la escuela para que los niños logren los aprendizajes que se
proponen para ellos y no en las limitaciones personales originadas por
alguna discapacidad, por lo tanto “decir que un alumno presenta N.E.E. es
una forma de decir que para el logro de los fines de la educación precisa
disponer de determinadas ayudas o servicios para asegurar el logro de los
fines generales de la educación”17
De esta manera, el alumno presenta N.E.E cuando su rendimiento
escolar es muy por debajo o por encima de sus compañeros y que el
maestro de grupo haya agotado todos sus recursos en apoyarlo sin tener
resultados satisfactorios y por lo tanto necesita de un apoyo extra para que
estos niños accedan al currículo o ajustar este a sus características.
De tal forma las necesidades educativas especiales son relativas ya
que dependen de la organización y operación del proceso enseñanza
aprendizaje, es decir de las respuestas educativas que brinde la institución
educativa en que se encuentre el alumno.
Si se trata de favorecer la construcción de la autoestima en niños con
necesidades especiales, esto nos apoya, ya que no se visualiza la
problemática sólo en el niño, haciéndole ver que éstas son provocadas en
17 GARCIA, Vidal Jesús “Del modelo del trastorno al de las N.E.E. en Antología UPN. N.E.E asociadas a la discapacidad. Chihuahua, 1999. p. 225
muchas ocasiones fuera de su alcance como son:
- Ambiente sociofamiliar adverso, donde ciertas características del grupo
social o familiar donde vive el niño como pobreza, maltrato,
desintegración familiar, etc. que repercuten en la construcción positiva de
la autoestima y por ende en el aprendizaje del niño.
- Del ambiente escolar en que se desenvuelve el niño; ya que la falta de
preparación del maestro, su metodología o relaciones interpersonales
conflictivas entre otros, pueden influir o no ser los adecuados para que el
niño adquiera confianza en sus habilidades, repercutiendo en su
aprendizaje.
- Condiciones individuales en el niño, características propias del niño que
estén influyendo en sus aprendizajes pudiendo ser discapacidad,
problemas emocionales, de comunicación o de tipo médico que si no se
les trata de manera adecuada propician que el alumno se forme un auto
concepto negativo.
Desafortunadamente, es triste observar que la mayoría de los niños
que presentan N.E.E. se debe a una metodología que no responde a las
demandas de estos niños y son pocos los maestros que reconocen esta
causa, por lo que el avance de los mismos es poco significativo, y esto a su
vez va mermando el auto concepto positivo del niño ya que frecuentemente
esta enfrentándose a situaciones que le hacen experimentar el fracaso en el
ámbito escolar y en ocasiones esto lo lleva a aislarse o ser rechazados por
sus compañeros.
Es así como el concepto de Necesidades Educativas Especiales
implica que todos los alumnos pueden tenerlas, presenten o no una
discapacidad y que no todos los discapacitados la presentan ya que hay
alumnos con discapacidad que acceden al currículo regular con los mismos
medios que sus compañeros. Además estas pueden ser temporales,
presentándose por un tiempo determinado o permanentes, presentándose a
lo largo de su escolarización. También reclama nuevos recursos educativos
para la escuela regular a fin de que pueda responder a las necesidades de
sus alumnos para que puedan desarrollarse plenamente.
Por esto son relativas las N.E.E. que presenta un alumno, ya que
dependen del nivel de competencia curricular de sus compañeros y de los
recursos con que cuente la escuela para satisfacer sus necesidades.
Además tiene un carácter interactivo pues dependen de la relación del niño
con su entorno; es decir, las necesidades educativas especiales toma en
cuenta tanto las condiciones particulares del alumno como las del entorno,
por lo que es muy importante que como docentes nos preocupemos por
analizar primeramente el entorno que rodea al niño para conocer las causas
de las necesidades que presenta, y este entorno incluye la propia práctica
docente en todas sus dimensiones principalmente en la afectiva, ya que de
esta depende el interés y motivación del alumno para aprender.
Por lo tanto, la integración educativa tiene que reorganizarse para que
las escuelas sean más activas, y se conviertan en promotoras, en centros
que aspiran a mejorar la calidad de la educación, pues la integración
educativa “es un proceso dinámico y cambiante, cuyo objetivo central es
encontrar la mejor situación para que un alumno se desarrolle lo mejor
posible”18 dando respuesta a la diversidad, con lo cual se favorecerá la
autoestima ya que se sentirá aceptado y respetado.
De esta manera se convierte en un esfuerzo de alumnos, maestros, 18 MARCHESI, Op. Cit. p.93
padres de familia y autoridades por mejorar el aprendizaje de todos los niños
y en especial a los que presentan N.E.E. para que éstos desarrollen
plenamente sus capacidades de tal manera que puedan compensar algunas
de sus limitaciones, propiciando que su desarrollo sea lo más integral y
armónicamente posible.
Es así como surge la necesidad de redefinir las relaciones entre
educación regular y educación especial, como un marco de referencia para el
establecimiento de las condiciones básicas para el desarrollo de la
integración educativa y la atención a las necesidades educativas especiales
dentro del ámbito de la escuela regular.
Las Unidades de Servicios de Apoyo a la Educación Regular
(USAER), son las instancias que gracias a un trabajo interdisciplinario,
permiten apoyar al maestro de grupo, a los padres de familia y al alumno en
su proceso de integración dentro e la escuela regular.
Este Programa se entiende “como una alternativa de trabajo que
promueve la participación conjunta de maestros regulares y profesionales de
educación especial en el propósito de analizar los problemas vinculados a la
implantación de la propuesta de integración educativa.19
Con las USAER se pretende que tanto maestros de escuela regular
como equipo de apoyo compartan sus experiencias y concepciones respecto
a la integración educativa, y que entre ambos analicen los problemas
mediante un trabajo colaborativo, apliquen estrategias, planeen las acciones
y las lleven a la práctica.
De esta manera la integración educativa se refiere a las medidas que 19 SEP. Integración educativa (programa de actualización) P.5
se toman para que los alumnos con N.E.E. con o sin discapacidad puedan
acceder al currículo de las escuelas regulares, y para esto tienen que evaluar
todos los aspectos del desarrollo del niño, poniendo énfasis en el afectivo, ya
que la mayoría de los niños que se atienden por parte de USAER presentan
un autoestima negativa lo que se convierte en la primer barrera para que
estos niños se interesen por aprender, ya que se les ha hecho verse como
incapaces de aprender.
Las necesidades educativas especiales deben ser atendidas en la
escuela regular y para esto debe estar dispuesta a flexibilizar su currículo, a
establecer una verdadera e intensa vida colegiada y a enriquecerse con la
participación de los padres de familia para que pueda dar respuesta
adecuada a las diferencias individuales respecto al estilo de aprendizaje de
cada alumno y por lo tanto realizarse las adecuaciones curriculares
pertinentes para cada alumno que así lo requiera.
Al estar comprometidos con la integración educativa todos los
participantes del proceso educativo, -maestros de apoyo, maestros de grupo,
padres de familia y alumnos,- estaremos trabajando en torno a las
necesidades del alumno con N.E.E. quien observará que es una persona
única y que además es importante para las personas que le rodean y se dará
cuenta que aun cuando no puede realizar ciertas actividades, puede hacer
otras con éxito lo que le dará confianza para seguir esforzándose.
Las diferencias individuales “hacen referencia a la variedad de
características de los diversos sujetos que conforman un grupo...la influencia
del medio es un factor decisivo , ya que el mundo exterior actúa de manera
muy particularizada en cada individuo”20 pues existen diferencias en cuanto a
la capacidad de aprendizaje, motivación, intereses, que repercuten en la
cognición, puesto que tenemos diferentes niveles de comprensión, diferentes
formas de procesar la información que se no presenta de acuerdo a lo
anterior, dando a cada quien un estilo diferente de aprender.
I. Los estilos de aprendizaje
Las diferencias individuales se acentúan más en los niños con
necesidades educativas especiales, ya que por lo general carecen de alguna
habilidad que los demás tienen, colocándolos en desventaja ante la similitud
de estilos de aprendizaje de sus compañeros, por lo tanto en el diseño y
planeación de las actividades que realiza el profesor, si éste no toma en
cuenta sus diferencias.
La diversidad en estilos de aprendizaje se encuentran en varios
aspectos como son la capacidad para aprender, la motivación, los intereses y
la cognición, además de las diferencias individuales que también influyen el
proceso de aprendizaje como son las diferencias biológicas y fisiológicas,
diferencias socio afectivas y las escolares.
La diversidad en la capacidad de aprendizaje se refiere a las
habilidades y destrezas que le permiten al alumno abordar y resolver una
tarea o problema, esta diferencia se encuentra en qué y cómo aprender y el
ritmo en que lo hace, por lo tanto debemos respetarla y brindar el apoyo
necesario para que el alumno tenga éxito en sus tareas.
La diversidad en la motivación responde a la historia particular de 20LOZANO, Rodríguez Armando. “Las diferencias individuales y los estilos” en Antología UPN. Los estilos de aprendizaje en el marco de las N.E.E asociadas a la discapacidad. Chihuahua. P.21
cada alumno, como las condiciones internas en relación con la actividad a
desarrollar, motivación extrínseca dependiendo de la estimulación que recibe
del ambiente que le rodea, que regulan y dirigen su comportamiento. La
motivación es uno de los aspectos más importantes para que el individuo se
involucre en su proceso de aprendizaje, es un rasgo personal que tiene el
individuo, y para ello tenemos que conocerlo para saber que actividades o
contenidos pueden motivarlo.
Los intereses tienen que ver con la motivación respecto al mundo
social y cultural, por lo que estos se nacen de las relaciones que establezca
el individuo con los demás y de las diferencias socioeconómicas y familiares
quienes juegan un papel central dentro de las mismas, por lo tanto los
intereses pueden variar de acuerdo a los cambios en las interacciones del
sujeto. Es por eso que debemos conocer al niño para saber que actividades
o contenidos le interesan y como pudiese motivarse para que alcance ciertos
objetivos.
También encontramos diversidad en la cognición, donde se toma en
cuenta la manera en que enfrenta la solución de problemas, “el aprendizaje”;
debiendo respetar su funcionamiento intelectual, es decir, su proceso de
razonamiento.
Otras variables que influyen determinantemente en el aprendizaje son
las diferencias biológicas y fisiológicas, en las que están implicadas el
sistema nervioso, enfermedades, género, la edad, entre otros.
Las diferencias socio-afectivas, incluyen la capacidad para adaptarse
e integrarse a su entorno, tipo de participación y cooperación, las relaciones
familiares, el autoconcepto y autoestima, la cuales son relevantes ya que
dependiendo de éstas es el interés y motivación que el alumno sentirá para
abordar su aprendizaje.
También encontramos las diferencias escolares, donde la historia
escolar y las experiencias en la escuela, tienen gran impacto en el estilo de
aprendizaje del alumno.
Dentro de esta diversidad de estilos cognitivos encontramos ciertas
similitudes que sirven de referente para que el profesor realice y revise de
manera crítica su forma de organizar, planear y realizar las estrategias
didácticas.
J. Evaluación psicopedagógica
El conocer las diferencias en los estilos de aprendizaje de los niños
con N.E.E. nos lleva a tener un punto de referencia para realizar las
adecuaciones curriculares pertinentes tomando en cuenta para esto también
la información de la evaluación psicopedagógica ya que,
Es un proceso que aporta información útil principalmente para los profesores de educación regular, quienes podrán así orientar sus acciones para satisfacer las necesidades de sus alumnos... ofrece elementos suficientes y oportunos relacionados con las capacidades, habilidades, gustos e intereses de los niños evaluados21.
La evaluación psicopedagógica aporta datos importantes sobre el
alumno, el aula, y la familia que permiten conocer las necesidades de los
alumnos y la ayudas que necesita para progresar.
La información que aporta sobre el alumno a grandes rasgos son
21 GARCÍA,Cedillo. Op.Cit. p 89
sobre su desarrollo, nivel de competencia, estilo de aprendizaje y motivación
para aprender. dentro del desarrollo los aspectos a evaluar son los
biológicos, seleccionando aquellos datos médicos que nos ayuden a dar
soluciones concretas a las necesidades de los niños.
Aspectos sobre el desarrollo intelectual profundizando en los datos
que nos hablen sobre las capacidades básicas como percepción, proceso de
razonamiento, entre otras, que nos ayuden a planear tareas que compensen
sus dificultades.
Sobre el comunicativo lingüístico es necesario conocer su
competencia lingüística en los diferentes niveles de lenguaje, así como su
competencia comunicativa.
Los aspectos sobre la adaptación e inserción social nos proporcionan
información sobre las capacidades de interacción del individuo en relación
con los demás, tanto con iguales como con los adultos, en los diferentes
ámbitos, el contexto escolar y el familiar.
La información que nos aporta el aspecto del desarrollo emocional es
de vital importancia, es necesario conocer la capacidad afectiva y equilibrio
emocional del niño. Debemos tener muy en cuenta la construcción de la
autoimagen, la autoestima, la confianza que tenga en sí mismo y en los
demás y el grado de bienestar, ya que esto repercute directamente con el
proceso de aprendizaje.
La información que interesa del nivel de competencia del alumno es la
que nos lleva a conocer las capacidades del alumno en relación con los
objetivos y contenidos del currículo, pues lo que se pretende lo que el
alumno es capaz de hacer y los tipos de ayuda que necesita para ello pues
esto constituye el enlace entre la evaluación y la intervención con el alumno.
Dentro de los estilos de aprendizaje es necesario que se conozca
cómo responde el alumnos a las actividades escolares, en qué condiciones
físico ambientales trabaja mejor, cómo se le facilita más el trabajo si en
equipo, grupo o individual,, qué materia y qué tipo de actividades le gustan
más, cúal es su nivel de atención, cúal es su ritmo de aprendizaje, qué
estrategia usa para enfrentar sus inquietudes o dificultades, a qué tipo de
refuerzos responde más y si valora su trabajo principalmente.
Respecto a la motivación para aprender debemos usar instrumentos
que nos den a conocer los aspectos descriptivos y explicativos del estilo de
aprendizaje y la motivación para aprender. es necesario investigar qué
actividades les gustan más, cuáles son sus expectativas o retos al respecto y
cómo reaccionan ante los éxitos o fracasos escolares y los niveles de
dificultad de las actividades que provocan que pierdan el interés en ellas.
Debemos valorar en los alumnos sus habilidades y sus esfuerzos para
realizar las actividades, ya que el niño que recibe estos reconocimientos se
sienten orgullos y motivados para enfrentar los retos siguen aún cuando
cometan errores, influyendo en él de manera paulatina ayudándole a
construir un concepto positivo de sí mismo respecto a sus propias
competencias hacia el aprendizaje.
El entorno del alumno influye sobre la construcción de la autoestima y
su proceso enseñanza aprendizaje, por lo que necesario conocerlos, los más
importantes son el contexto escolar y el contexto familiar, ya que son los que
más interacciones establece el alumno.
Del contexto escolar debemos conocer los factores que favorecen o
entorpecen el proceso de aprendizaje del alumno dentro del aula como en la
institución en general. Respecto al aula nos son útiles las informaciones que
nos proporcionen el estilo de enseñanza del profesor, las interacciones que
se dan con los compañeros y con el profesor, las expectativas sobre el
aprendizaje de maestro y compañeros respecto al alumno con necesidades
educativas especiales.
Del contexto sociofamiliar nos interesa conocer los aspectos que
favorecen o dificultan el proceso enseñanza aprendizaje del alumno para
intentar modificarlos con la ayuda de la familia, por lo que es necesario
conocer entre otras cosa los hábitos, de la familia, los roles que desempeña
cada miembro, y las pautas de educación que se dan en ella, el estilo de
comunicación, así como las condiciones socioculturales y económicas en las
que viven.
K. Adecuaciones curriculares
El conocer sobre estos aspectos nos dan una idea de las necesidades
del niño y del tipo de ayuda que necesita, dándonos una pauta para realizar
las adecuaciones necesarias que le ayuden a mejorar su calidad de vida y su
proceso enseñanza aprendizaje.
La adecuación curricular es definida “ como la acomodación o ajuste
de la oferta educativa común a las necesidades, contexto y o posibilidades
de los alumnos de un centro escolar”22, es decir, se trata de adecuar o
modificar parte del currículo escolar, para que el niño con N.E.E acceda a él,
sin perder de vista los objetivos generales de la educación.
22 PARRILLA,Latas Ángeles “Programas de desarrollo individual” en Antología UPN. Adecuaciones curriculares. Chihuahua. p. 35
Las adecuaciones curriculares pueden ir en dos sentidos; de acceso al
currículo las cuales consisten en modificaciones en la infraestructura o
proveer recursos especiales para que el alumnos con N.E.E. puedan acceder
al currículo ordinario
Las adecuaciones a los elementos del currículo las cuales son
modificaciones o eliminaciones a alguno o varios elementos que constituyen
el currículo como la metodología, la evaluación, los contenidos y los
propósitos de acuerdo a las posibilidades del alumno para que pueda
experimentar el éxito en las actividades que realiza.
De esta manera la adecuación curricular constituye una respuesta
específica y adaptada a las necesidades de los niños especiales que no
quedan cubiertas con el desarrollo del currículo común y que a su vez
permite al alumno realizar adecuadamente actividades que lo llevarán
mediante un camino distinto al de sus compañeros a alcanzar los fines de la
educación, que reside principalmente en el desarrollo integral del individuo
para que pueda integrarse activamente en su comunidad.
Es así como personal de escuela regular y de educación especial
unidos con padres de familia y alumnos debemos trabajar en torno a la
integración educativa, promover el respeto a la diferencias individuales y
aceptar la diversidad, transformando a la institución en una escuela
comprensiva donde se de cabida y respuesta a las necesidades de los
alumnos que la conforman.
Para poder formar esa actitud de respeto hacia la diferencia es
necesario primero que nada que el mismo individuo se visualice como una
persona única y diferente a las demás, sin importar tenga o no una
discapacidad. El individuo tiene que aceptarse y quererse a sí mismo para
poder aceptar a los demás tal como son y en esta situación juega un papel
muy importante la autoestima.
Para favorecer una autoestima positiva en los niños con necesidades
educativas especiales, el proceso de enseñanza aprendizaje debe estar
basado en un currículo abierto y flexible que de cabida a las adecuaciones
curriculares para poder responder a las necesidades y posibilidades de cada
alumno de tal manera que el alumno acceda a la educación a un ritmo propio
donde los avances sean comparados con él mismo niño respetando su ritmo
y estilo de aprendizaje.
Con lo anterior damos relevancia a lo que el individuo puede hacer y
de esta manera no se encontrará en desventaja con los demás e irá
valorando su propio esfuerzo y dándose cuenta de que es capaz de realizar
actividades por sí mismo fomentando así la construcción de un adecuado
autoestima y el respeto por las diferencias individuales.
L. Pedagogía constructivista
La pedagogía constructivista es la que mejor responde a las
demandas de las adecuaciones curriculares, ya que las concepciones de
enseñanza y aprendizaje se vinculan claramente con un planteamiento
curricular abierto y flexible rompiendo con la tradición de un currículo cerrado
y centralizado, pues para el constructivismo el aprendizaje escolar es un
proceso de construcción de conocimiento del alumno y la enseñanza se
concibe como una ayuda que hace posible este proceso de construcción.
Es así, que desde el constructivismo el aprendizaje es un proceso de construcción del conocimiento donde el alumno construye su conocimiento y nadie puede sustituirle en esa tarea... ya que la incidencia de la
enseñanza sobre los resultados del aprendizaje esta totalmente mediatizada por la actividad mental constructiva del alumno.23
De tal manera que el individuo construye sus conocimientos de acuerdo a
sus experiencias y vivencias al interactuar con el objeto de conocimiento
pues el conocer es un proceso dialéctico donde el individuo mediante los
mecanismos de asimilación y acomodación incorpora a sus esquemas la
información obtenida construyendo así sus conocimientos.
Para que la construcción de estos conocimientos sean significativos
para el individuo tiene que pasar forzosamente por un estado de
desequilibrio que le haga sentir la necesidad de poseer ese nuevo
conocimiento para poder llegar a un proceso de adaptación logrando el
desarrollo de la inteligencia a través de los mecanismos de asimilación,
acomodación y equilibrio mencionados anteriormente.
Mediante la asimilación el sujeto incorpora la nueva información
obtenida a través de la experiencia –que puede ser de tipo físico, cuando se
actúa sobre los objetos de conocimiento sin abstraerse propiedades del
mismo, lógico matemático abstrayendo propiedades de manera racional y el
social el cual es arbitrario y se obtiene a través de las relaciones
interpersonales- con la que ya posee para tratar de acomodarla dentro de
sus esquemas modificando sus estructuras para ajustarlas a la nueva
información, logrando con ellos un estado de equilibrio o adaptación de la
inteligencia, el cual servirá de base para la construcción de conocimientos
posteriores.
Por ello dentro del constructivismo es de vital importancia tomar en
23 COLL, Cesar. Constructivismo e intervención educativa en Antología UPN. Corrientes pedagógicas Contemporáneas. México, 1995. p. 16
cuenta los conocimientos previos del individuo ya que éstos le ayudan a leer
e interpretar la nueva información y determinan en gran medida qué
información seleccionará, cómo la organizará y que tipo de relaciones
establecerá con ellas, dando como resultado que cada individuo interpretará
de diferente manera la misma realidad o información dependiendo de sus
experiencias o conocimientos previos.
Otros aspectos importantes que maneja el constructivismo es la
disposición para el aprendizaje en términos de maduración o de
competencia cognitiva, el papel de la memoria y la funcionalidad del
aprendizaje realizado. El primero nos dice que la capacidad del niño para
aprender depende tanto del nivel de maduración en términos orgánicos del
niño como de las experiencias que ha tenido previamente.
El segundo se refiere a que el alumno necesita cierto grado de
memorización comprensiva para que pueda construir aprendizajes
significativos ya que estos implican modificar sus esquemas de conocimiento
estableciendo diversas relaciones entre los conocimientos que ya posee y
los nuevos elementos para modificarlos o enriquecerlos.
Por último la funcionalidad se refiere a la capacidad del individuo para
utilizar esos nuevos conocimientos para resolver o afrontar nuevos retos que
le lleven a la construcción de nuevos aprendizajes.
Cuanto más complejas y numerosas sean las conexiones establecidas entre el material y el aprendizaje y los esquemas de conocimientos de los alumnos; cuanto más profunda sea su asimilación y memorización comprensiva; ...tanto mayor será su impacto sobre la estructura cognoscitiva del alumno, y en consecuencia mayor probabilidad de que los significados construidos puedan ser utilizados en la realización de nuevos
aprendizajes.24 De acuerdo al constructivismo el profesor debe ayudar al alumno a
que construya significados y de sentido a lo que aprende para que sea
relevante y significativo para él; para esto utilizará una estrategia didáctica
basada en la ayuda pedagógica pudiendo valerse de diversas metodologías
didácticas que respondan a las particularidades de sus alumnos, de tal
manera que realice ajustes a la ayuda pedagógica con el fin de orientar y
guiar a sus alumnos, influyendo sobre sus procesos de construcción,
facilitándolo y llevándolo hacia el aprendizaje de ciertos contenidos.
Esto es importante tomarlo en cuenta cuando se atienden niños con
N.E.E. ya que las adecuaciones curriculares que éstos necesitan pueden
fundamentarse en estos supuestos teóricos avalando la práctica de ciertas
metodologías que responden a las necesidades de los alumnos.
De esta manera el aprendizaje escolar se concibe como “un proceso
de construcción de significados y de atribución de sentidos, cuyas
responsabilidad última corresponde al alumno, sin embargo, se puede y debe
enseñar a construir... pues nada puede sustituir la ayuda que supone la
intervención pedagógica para que esa construcción se realice.”25
El papel del maestro es entonces, la de un orientador, coordinador y
guía del proceso enseñanza aprendizaje del alumno, pues además de crear
las condiciones óptimas para que el alumno favorezca su actividad mental,
constructiva, rica y diversa, deberá orientar y guiar esa actividad para que el
alumno se acerque de manera progresiva a los contenidos tanto en lo que
significan y representan en los conocimientos culturales, para esto tendrá
que cerciorarse de que los contenidos elegidos sean potencialmente
24 Ibídem. p. 37 25 Ibídem. P.19
significativos, cuidando que el material de aprendizaje sea relevante y tenga
una organización clara para que alumno pueda asimilarlo.
El profesor siempre tendrá que estar alerta al observar el proceso
enseñanza aprendizaje para que pueda captar lo mejor posible la actividad
que realizan sus alumnos y lo que él hace de ellas, es decir, observar cómo
se entrelaza la actividad de los participantes durante la realización de la
misma, para saber si realmente se esta favoreciendo la actividad mental
constructiva del alumno y el como pudiera influir o está incidiendo sobre la
misma.
Sin embargo, es poco común que al analizar la práctica los docentes
nos incluyamos como un elemento de análisis, y por lo general sólo
analizamos lo que los alumnos hacen o dejan de hacer, y nos centramos en
el producto de la actividad mental del niño no en su proceso para llegar a
esa respuesta.
Por otro lado el profesor debe propiciar una relación positiva con sus
alumnos dentro de un ambiente de confianza, de aceptación, de afecto,
sinceridad con el fin de establecer las mejores condiciones para que se
desarrolle el acto educativo.
Debe reconocer y estimular los logros de los niños; invitarlos a que
participen, descubran, investiguen, que se sientan capaces de criticar, elegir
y crear, lo cual se logra sólo si el docente crea un ambiente de seguridad
física y psicológica que responda a las necesidades de los alumnos.
Debe estimular la cooperación, convivencia, el compañerismo y la
interacción social ayudando a que el niño descubra y desarrolle sus
capacidades para que adquieran confianza en si mismos y a su vez acepten
las diferencias individuales entre ellos manteniendo un espíritu de tolerancia
y ayuda mútua dentro del grupo.
De acuerdo al constructivismo, el profesor debe representar para los
alumnos la ayuda, el estímulo y al mismo tiempo la autoridad dentro del
grupo para que pueda poco a poco ceder el control de las actividades
escolares a los alumnos vigilando que no se desvíen de los temas o
contenidos para alcanzar ciertos objetivos, teniendo que utilizar diversas
estrategias para ello. De esta manera desde el punto de vista del
constructivismo
El profesor es el que lleva a cabo una función mediadora entre la actividad del alumno y el saber colectivo, ejerce la influencia educativa dirigida a lograr una sintonización progresiva entre los significados que construye el alumno y los significados que vehiculan los contenidos escolares.26
Como se menciona anteriormente “se concibe al alumno como
responsable y constructor de su propio aprendizaje, donde es él quien
construye el conocimiento y nadie puede sustituirle en esa tarea”27 por tanto
se le observa como un sujeto activo, investigador, capaz de buscar
soluciones y tomar el control de su propio proceso de aprendizaje,
necesitando que se le ayude a construirlo a su propio estilo y ritmo, lo cual es
de vital importancia para los niños con N.E.E.
Para que las ayudas impacten en su proceso es necesario que el
alumno tenga disposición para aprender o construir cierto conocimiento para
que éste pueda ser significativo y pueda relacionar la información que recibe
con los conocimientos previos con que cuenta. “es el alumno en su totalidad
el que aparece implicado en el proceso de construcción y que sus
26 Ibídem. p.38 27 Ibídem. p. 34
representaciones o ideas previas sobre cualquier contenido están siempre
teñidas afectiva y emocionalmente.”28
Por estas razones es el alumno quien debe estar interesado en
construir cierto conocimiento, para que pueda lograrse de manera
satisfactoria, pues si el alumno no muestra interés y motivación no podrá
construir ningún conocimiento significativo, y esta motivación depende
mucho de la confianza que tenga el alumno en sí mismo para alcanzar sus
metas.
Es así, que el alumnos es el único responsable de la construcción de
sus aprendizajes de tal manera que el alumno tiene que aprender a aprender
explorando, investigando, manipulando, descubriendo, analizando,
planeando, tomando el control de su propia actividad defendiendo su
autonomía en la medida de lo posible.
Como podemos ver, tanto el profesor como alumno gestionan
conjuntamente el proceso enseñanza aprendizaje, ya que es necesario
conocer y comprender la construcción del conocimiento del alumno y cómo
pueden influir los profesores sobre este proceso de construcción, pues tan
importante es el alumno como constructor de su propio aprendizaje , como lo
es el maestro en su función como coordinador y guía del aprendizaje del
alumno y los contenidos escolares ya que éstos en conjunto hacen posible
la construcción de conceptos significativos y funcionales para el alumno.
Según el constructivismo, el aprendizaje significativo es el resultado
de las interrelaciones que se establecen entre el alumnos, el profesor y los
contenidos escolares por eso es de vital importancia analizar cómo se
realizan estos intercambios en torno a los contenidos de aprendizaje pues 28 Ibídem. P. 38
“en el transcurso de estas interacciones se explicitan, toman forma y
modifican los conocimientos previos de los alumnos, las actitudes,
expectativas y motivaciones de aprendizaje; el profesor lleva a cabo su
función mediadora entre el alumno y el saber colectivo culturalmente
organizado.”29
Las aportaciones del constructivismo nos ayudan como docentes a
comprender mejor el proceso de construcción de conocimiento de los
alumnos sirviendo de base para tomar decisiones respecto al proceso
enseñanza aprendizaje, hacia dónde orientar la ayuda pedagógica que se les
brinde a los alumnos, además nos brinda elementos para analizar la práctica
propia a través de la teoría y de esta manera realizar una planificación y
desarrollo del proceso educativo más acertado que den soluciones
satisfactorias sabiendo que está fundamentada en base a ciertos supuestos
teóricos que le brindan un sustento y coherencia lógica entre el desarrollo de
la práctica y la teoría.
Por lo tanto, la pedagogía constructivista es la que nos brinda más
elementos para trabajar con los niños con necesidades educativas
especiales de tal manera que se favorezca en ellos no sólo el desarrollo
intelectual, sino también el motriz, y afectivo social, ya que es el niño quien
tiene que construir sus aprendizajes y para ello, pone en juego todo su ser
pues son sus propios intereses los que están en juego y buscará diferentes
formas para solucionar sus inquietudes.
En la medida en que el niño vaya resolviendo sus “problemas” se dará
cuenta de que es capaz de hacer cosas por sí mismo, y esto le ayudará a
formarse un autoconcepto positivo y le dará confianza para enfrentar retos
cada vez más difíciles, dando como resultado la construcción de un 29 Idem.
adecuado nivel de autoestima.
Sin embargo, la realidad con los niños especiales en la escuela es
otra muy diferente, para empezar estos niños en su mayoría han sido
rechazados por sus padres quienes no aceptan en muchas ocasiones el
“problema” de su niño tomando una actitud que nada favorece la autoestima
de su hijo, pues en ocasiones lo tratan como si no supiera hacer nada
centrándose en sus limitaciones y en otras tratan de no ver la limitación
exigiéndole al niño mucho más de lo que en realidad puede hacer dando
como resultado que el niño construya un concepto erróneo de su propia
persona.
El niño se da cuenta de las expectativas que tiene sus padres
respecto a su conducta, y se siente obligado a desempeñar dicho papel, por
lo tanto, si los padres le incitan a desempeñar un papel positivo, el niño se
siente obligado a ser un ganador, si tienen las capacidades para hacerlo
podrá quedar bien en clase, en cambio, si no tiene esas facultades, se
sentirá presionado y mostrará fácilmente un agotamiento o bajo rendimiento.
Por esto es necesario involucrar a los padres de familia en el proceso
enseñanza aprendizaje de sus hijos, para que el padre se vaya informando y
conociendo directamente sobre el desarrollo de su hijo y puedan apoyarlo
mejor según la situación de sus hijos.
Los talleres de padres y las conferencias sobre el desarrollo humano,
incluyendo el aspecto emocional, que involucren tanto a padres como a
alumnos proporcionan un espacio muy importante para que ambos se
conozcan y se acepten como son, que fortalezca los lazos afectivos que hay
entre ellos, abriendo un espacio positivo para comunicarse, lo cual ayuda a
reorientar o fortalecer el concepto que el niño tiene de sí mismo.
Suele suceder con frecuencia que el niño con N.E.E. representa un
“obstáculo” para los profesores, no se interesan por conocerlo y por ayudarle
a que progrese en su proceso, teniéndolo insertado en su salón, sin tomarlo
en cuenta para las actividades, mostrando una actitud negativa hacia él, al
hacerle notar delante de sus compañeros que no puede realizar las
actividades que los demás hacen mostrando una actitud de indiferencia y
apatía en muchas ocasiones, dejando la responsabilidad de su proceso sólo
al equipo de apoyo.
Los niños en esta situación se encuentran en un ambiente negativo
para su autoestima, ya que empiezan a creerse que son diferentes a los
demás y que en realidad no pueden hacer nada, como resultado,
regularmente empiezan a ser rechazados por sus compañeros al ver el
rechazo que su profesor muestra por ellos, lo que provoca que el niño se
aísle, muestre apatía, angustia o desinterés por las actividades escolares y
sociales dentro de la institución, además de que propicia un aprendizaje
individual y competitivo sólo para agradar al maestro.
Es por esto que deben trabajar de manera colegiada el equipo de
USAER y maestro de grupo principalmente, para conocer a los alumnos y
poder comprender algunas situaciones por las que éste atraviesa y cómo
están influyendo en su proceso de aprendizaje, para esto nos sirve la
evaluación psicopedagógica, pues al hacerla tendremos elementos
indispensables que ayudarán a tomar decisiones asertivas para favorecer el
proceso del alumnos con N.E.E. dentro del aula.
Cuando el maestro establece un clima de confianza dentro del grupo,
creando un ambiente seguro para todos los alumnos tanto en lo físico como
en lo psicológico, los alumnos se sienten seguros para interactuar
adecuadamente con sus compañeros, ya que saben que se estimulará y se
apreciará sus esfuerzos y sus logros, se aceptarán sus sentimientos
negativos y positivos como parte de su personalidad, lo cual les llevará a
establecer una buena comunicación con los demás, expresándose sin temor
a ser criticados, juzgados o rechazados.
Para que esto se logre el maestro debe mostrar en su relación con el
alumno una disponibilidad afectiva la cual depende de la capacidad del
maestro para comprender la conducta que presenta el alumno haciéndoselo
ver. También debe transmitir a sus alumnos firmeza y seguridad emocional,
donde su autoridad nace de la relación y proximidad emocional con sus
alumnos.
Cuando el maestro tiene disposición afectiva, es capaz de
comprender al alumno y mostrarle que le interesa como persona, que
entiende sus sentimientos y actitudes, de esta manera el niño se siente
importante, comprendido que se le pone atención, motivándolo para mejore
sus relaciones personales estableciendo una comunicación positiva.
Para que el maestro pueda transmitir firmeza y seguridad emocional,
deberá conocer primero las causas de la conducta del niño, buscando la
mejor manera de que el alumno se de cuenta de que entiende sus
dificultades. Esto dará confianza al alumno y lo motivará a establecer una
relación de confianza mutua con su maestro, donde estarán concientes de
las posibilidades del alumno, exponiéndolo menos al fracaso.
Cuando existe una buena comunicación dentro de un grupo, éste se
vuelve unido, se apoyan unos a otros, lo cual favorece a los niños con N.E.E.
ya que de manera espontánea se va dando un aprendizaje colaborativo,
donde los mismos niños los incluyen y les apoyan para que culminen las
actividades, además de que se esfuerzan por alcanzar los objetivos
académicos dependiendo menos del maestro ya que los alumnos sienten
que su participación es valiosa y se toma en cuenta sus opiniones,
esforzándose por encontrar las soluciones a sus inquietudes, favoreciendo
su desarrollo personal.
Al diseñar las actividades de aprendizaje se debe tomar en cuenta los
intereses y necesidades de los alumnos para que puedan participar de
manera activa, éstas deben ser variadas para que motiven al alumno a
culminarlas para sentirse satisfechos al cubrir las expectativas que tenían al
respecto.
Las actividades académicas deben ser de acuerdo al nivel de cada
niño, a su estilo de aprendizaje, por lo que es necesario conocer el estilo de
cada uno de ellos, así como la competencia curricular con el fin de poder
establecer retos y exigencias adecuadas al nivel y capacidad del niño,
estimulándoles para que hagan por su cuenta lo que está en sus manos y
que les ayuden a superar sus niveles anteriores de aprendizaje, sin hacer
comparaciones entre los compañeros.
El evitar hacer comparaciones entre ellos, ayudará al niño a
aceptarse como un ser único y diferente a los demás, a ser tolerante con las
diferencias individuales dentro de su grupo, a esforzarse por realizar las
cosas lo mejor posible dentro de sus posibilidades, a superarse cada día
más, con una actitud positiva ante los retos y los tropiezos que pueda
enfrentar ya que conocerá sus ventajas y sus limitaciones, sus posibilidades
dentro del proceso enseñanza aprendizaje ya que será una persona
aceptada y respetada tal cual es.
M. La evaluación
La evaluación debe responder y respetar a los ritmos y estilos de
aprendizaje de los alumnos, debe ser un instrumento que valore al alumno
respecto a su propio proceso, sin ponerlo en desventaja respecto a sus
posibilidades, convirtiéndose en una evaluación abierta y flexible a las
necesidades que éste presenta.
La evaluación debe entenderse como un proceso sistemático que
permite obtener y procesar las evidencias del proceso enseñanza
aprendizaje con el fin de mejorarlo; siendo abierta y flexible ya que ayuda al
docente a analizar las condiciones en que se desarrolla su labor y las causas
que posibilitan o impiden el logro de objetivos.
Por esta razón la evaluación es una parte importante del proceso
educativo porque “permite conocer la evolución de los conocimientos, las
habilidades y las actitudes de los alumnos con respecto a su situación inicial
y a los propósitos previamente establecidos, ...permite valorar la eficacia de
las estrategias, las actividades y los recursos empleados en la enseñanza”30.
Por lo tanto, si la evaluación se basa en la comparación, tiene que ser
respecto al progreso del propio niño, no en comparación con los demás,
además atañe no sólo al niño, sino a todos los elementos y personas que
intervienen en el proceso enseñanza aprendizaje, de tal manera los
propósitos planteados deben ir en relación con las posibilidades del alumno,
tomando en cuenta sus necesidades y sus conocimientos previos a la hora
de fijarnos los objetivos a alcanzar con cierto contenido o actividad, tomando
en cuenta que en ocasiones es necesario adecuar algunos objetivos que se
plantean en los planes y programas. 30 SEP. Libro para el maestro 6o. Grado. México, 1994. p.61
De esta manera Wheeler nos dice que “la evaluación no sólo incluye el
proceso que determina cuales son los resultados reales comparándolos con
lo esperado; sino que implica además el juzgar si los cambios efectuados
son deseables” 31 por lo tanto debemos conocer al alumno tanto en sus
habilidades como actitudes entre otros, para valorar si realmente se impactó
sobre su aprendizaje, lo que cobra gran importancia a la hora de aplicar y
evaluar las actividades.
El docente, al aplicar las actividades tiene que estar muy atento a los
cambios que se den durante y con la aplicación de éstas, para poder valorar
y reajustar la actividad, la actitud, la metodología y los recursos
principalmente, pues solamente así podremos transformar nuestra propia
realidad, y crear un ambiente donde las condiciones sean favorables para
que se desarrolle el proceso enseñanza aprendizaje adecuadamente,
llevándonos de esta manera a mejorar la calidad de la educación, porque nos
va a permitir diversificar y enriquecer nuestro estilo de enseñanza y estar
más atentos en los resultados de la misma.
Es así que, la evaluación nos permite tener información valiosa que
nos de una visión mas clara de las acciones a seguir, sin embargo para
obtener esta información es necesario utilizar diversos instrumentos
mediante los cuales recopilar toda aquella información acerca de las
condiciones en que se desarrolla el proceso enseñanza aprendizaje.
La elección de éstos dependerá de los propósitos cuyo logro se va a
evaluar, y para interpretar estos instrumentos necesitamos un “sistema de
evaluación que nos de a conocer si las conductas en forma de actitudes,
valores, habilidades y conocimientos, han sido inculcadas, inhibidas o
31 WHEELER. La evaluación en el desarrollo del currículo escolar. en Antología. UPN Aplicación de la alternativa de innovación. México 2000. p. 35
alteradas”32. Para lograr esto es necesario contar con algunos prerrequisitos
de la evaluación que son la valoración y la medición.
La valoración implica un juicio en relación con las conductas
esperadas, dándole el carácter cualitativo de la evaluación, siendo ésta la
que más nos ayuda para conocer el estado emocional del niño con
necesidades educativas especiales, valiéndonos de la observación para ello;
y la medición implica un tipo de escala que se clasifica de acuerdo con lo
que se sabe hacer proporcionando el carácter cuantitativo.
Además la evaluación debe contar con una serie de características
para que pueda ser creíble estas son la continuidad, la coherencia, la
comprensibilidad, la objetividad y la validez, las cuales van estrechamente
relacionadas unas con otras.
La continuidad se refiere a ese análisis permanente a cada paso que
se da para lograr un objetivo, es un avanza y retrocede durante el proceso
que permite identificar y reajustar lo que sea necesario para lograr la meta
propuesta.
La coherencia nos dice que en la misma medida en que damos
importancia a ciertos objetivos, es la que debemos dar al momento de
evaluar por lo tanto los instrumentos utilizados deben ir acordes con esos
objetivos.
La comprensibilidad nos habla de que debe hacerse una valoración de
la situación actual de los niños para poder organizar de acuerdo a ello el
proceso educativo, evaluarse continuamente el proceso, y por último
hacerse una valoración de los resultados reales, para ver lo que se ha 32 Idem.
aprendido y en la manera en que los nuevos aprendizajes se han
incorporado a sus conocimientos previos.
La objetividad nos remite a la importancia de que cada instrumento de
valoración que se utilice sea lo más objetivo y confiable que sea posible
con el fin de que sea una prueba fidedigna en el proceso de evaluación, ya
que ésta requiere de toda evidencia disponible para que puedan ser
analizados adecuadamente.
La validez nos indica hasta que punto los instrumentos utilizados nos
proporcionan información fidedigna o hasta que punto la información está
influenciada por alguna situación externa presente en ese momento.
De esta manera “el proceso de valoración debe ayudar a aclarar los
objetivos de manera que la participación de los alumnos en la valoración
ligará los propósitos a corto plazo de los alumnos con metas a largo plazo del
profesor”33, dando de esta manera un papel activo al alumno en el proceso
de evaluación, donde el profesor trate de valorar los propósitos de sus
alumnos, sus intereses y la disposición para lograr los objetivos que el
pretende.
Con esta manera de evaluar, conoceremos realmente el impacto del
proceso enseñanza aprendizaje en nuestros alumnos, podremos reorientar y
modificar nuestra practica ya que se habrá hecho un análisis completo de la
misma, además de que estaremos respetando las diferencias individuales de
nuestros alumnos y detectar situaciones que estén favoreciendo o
dificultando la construcción de su autoestima.
Así, se toma en cuenta sus necesidades no sólo en la planeación y 33 Ibídem. p. 45
desarrollo del proceso enseñanza aprendizaje sino también en la evaluación,
brindándoles la confianza de que como alumnos serán evaluados en su
propio proceso teniendo más posibilidades de éxito.
El alumno toma un papel activo dentro de la evaluación, por lo que
debemos dar oportunidad de que tomen decisiones y en ocasiones asuman
la responsabilidad de diseñar algunas actividades de aprendizaje o contenido
que quieran trabajar, desde la planeación, realización y evaluación del
mismo, pues esto les dará seguridad en su personalidad, pues les ayuda a
tener confianza en sí mismos, al constatar de lo que son capaces de hacer
reafirmando un auto concepto positivo.
N. Analizando para sugerir
Después de analizar el desarrollo afectivo del niño, la construcción de
la autoestima, los diferentes aspectos que implica la integración educativa,
así como la pedagogía constructivista y la evaluación hay una visión más
clara de cómo se puede influir a través de estos aspectos para la
construcción de un autoconcepto positivo en el niño con necesidades
educativas especiales que apoye a una autoestima positiva.
El análisis de todos los estos elementos, nos lleva como docentes a
comprender que al tener un concepto positivo de sí mismo el alumno con
N.E.E. tendrá una autoestima positiva valorando sus esfuerzos y su actuar,
lo cual es de vital importancia ya que el autoestima es un aspecto muy
importante de la personalidad del ser humano ya que le brinda al individuo
seguridad y capacidad para enfrentar las situaciones que se le presenten en
su vida de manera más acertada.
Por lo tanto se sugiere que:
-La escuela, como encargada de impartir la educación debe
preocuparse por que el alumno tenga un adecuado nivel de autoestima
favoreciéndola en cada una de las actividades que en ésta se realicen tanto
académicas, como socioculturales.
-La escuela como institución debe preocuparse por que se
establezcan adecuadas relaciones interpersonales entre los miembros, de tal
manera que favorezca positivamente el desarrollo de la personalidad de los
integrantes de la misma en especial de los alumnos entre ellos los que
presentan necesidades educativas especiales.
-Las relaciones interpersonales que se establecen dentro de la
primaria con todos los que la conforman son indispensables en el desarrollo
de la personalidad del niño ya que se valora de acuerdo a las impresiones
que recoge de los demás, además en esta edad, con sus acciones trata de
llamar la atención de los demás para que lo admiren y lo quieran, por lo que
juega un rol alternativo donde en unas ocasiones se muestra pasivo y en
otras activo.
-Dependiendo de las reacciones de los demás ante estas actitudes es
que el niño va definiendo su personalidad, y a la vez, proyecta la imagen que
percibe dentro de la familia, es decir la manera en que el se visualiza dentro
de la misma, pues aún cuando tiene diferentes referentes sobre su persona
de diferentes grupos sociales, el que impera es el familiar, por lo que es
indispensable que la escuela como núcleo social donde el niño pasa la
mayor parte del tiempo después del hogar, le brinde una imagen positiva.
-La escuela debe favorecer una adecuada comunicación para que
puedan darse interacciones positivas, pues dependiendo de los mensajes
que reciban al comunicarse, se forma la auto imagen positiva o negativa. La
escuela como encargada de la formación y educación de los individuos,
debe crear espacios que faciliten la comunicación entre alumnos, alumnos –
maestros, alumnos- padres, maestros- padres e implicados en el proceso
enseñanza aprendizaje pues, en la medida en que se haga, la actitud de los
niños mejorará y se expresarán con más confianza al conocerse mejor.
-Debe además estar pendiente de que el proceso enseñanza
aprendizaje realmente sea significativo e impacte en la construcción de
aprendizajes de los niños, lo que se logrará si éste es relevante, útil y
significativo para la vida inmediata y futura del alumno por lo que es
necesario conocer sus intereses y necesidades a la hora de planearlo,
ejecutarlo y evaluarlo.
-Dentro de las actividades escolares se deben propiciar el trabajo en
equipo y grupal, ya que favorece la cooperación entre los alumnos, el
aprendizaje cooperativo favorece las interacciones incrementando la
comprensión, aceptación y solidaridad entre iguales, incitándolos a ayudarse
para alcanzar la meta del grupo, reconociendo y valorando las aportaciones
individuales, integrándolos más como grupo.
-Durante su estancia en la escuela, se deberá propiciar que el niño se
sienta capaz de alcanzar sus metas respecto a lo educativo principalmente,
pues cuando se siente competitivo tiene mayor motivación intrínseca para
luchar por ellas por difíciles que les parezca, no les importa sacrificar
aspectos personales, trabajar tiempo extra, etc, empiezan a trabajar por su
cuenta y a persistir en las actividades hasta culminarlas.
-La participación de los padres de familia en el proceso enseñanza
aprendizaje de sus hijos es determinante, pues los niños asumen las
actitudes que manifiestan los padres al respecto, contagiando de esta
manera sus expectativas. Por lo que se debe buscar que los padres tengan
una influencia positiva en el desarrollo cognoscitivo de sus hijos brindándoles
orientación para que los estimulen, proporcionen el material apropiado, lo
inviten a la investigación, exploración, les apoyen en tareas escolares y
propicien un ambiente familiar de seguridad emocional, de respeto y afecto.
-Para lograr lo anterior se tiene que hacer un trabajo interdisciplinario
entre todos los involucrados – maestros de grupo, maestros de apoyo,
alumnos, directivos, equipo USAER y padres de familia para que el alumno
perciba un mismo concepto de su persona y ésto le ayude a construir su
autoconcepto y autoestima positivos que le ayudarán indiscutiblemente en la
calidad de sus aprendizajes, llevándoles establecer relaciones adecuadas
que faciliten su integración educativa principal objetivo para los niños con
necesidades educativas especiales.
CONCLUSIONES
Con el presente ensayo podemos darnos cuenta de la importancia de
la autoestima en el desarrollo del individuo, podría afirmarse que el
autoestima es principal aspecto del ser humano, que constituye el “motor”
que le lleva actuar de cierta manera, ya que el grado de desarrollo de ésta le
brinda al individuo seguridad y capacidad para enfrentar las situaciones que
se le presenten, buscando diferentes alternativas de solución a sus
problemas.
Dependiendo de la autoestima que tenga cada persona, será capaz
de confiar en sí mismo, de responsabilizarse de sus actos y a la vez
aceptarse como una persona humana, donde solamente él es el responsable
de sus acciones tengan consecuencias negativas o positivas.
Por esto es necesario que la escuela se haga cargo de propiciar en
sus alumnos la construcción de una adecuada autoestima, es imprescindible
que en la escuela hagamos que el niño se sienta capaz de realizar las cosas
por sí mismo; que exprese sus sentimientos, emociones, dudas
conocimientos e inquietudes y que éstos sean escuchados por quienes le
rodean haciéndoles sentir que son tan valiosas como las de cualquier ser
humano, ya que se refleja en la calidad de los aprendizajes de los alumnos.
Tener en cuenta lo anterior, es muy importante a la hora de trabajar
con los niños con N.E.E. porque ellos en su mayoría se dan cuenta de que
sus capacidades son diferentes a las de sus compañeros lo cual, en
ocasiones les provoca cierta inseguridad para relacionarse ya que
interpretan de las personas que les rodean las expectativas que tienen
acerca de ellos y al ver que éstas son bajas, tienden a esforzarse menos
para cumplirlas.
Además, en muchas ocasiones debido a estas expectativas los niños
son rechazados por sus compañeros, por lo tanto el docente es el principal
responsable de vigilar que esto no suceda dentro de su grupo y de la
institución, empezando por poner el ejemplo de aceptación a la diversidad,
aceptando las diferencias individuales tanto en el aprendizaje como en el
aspecto social y económico de sus alumnos, propiciando el respeto y
cooperación entre ellos.
El autoestima se construye principalmente por las impresiones que
recibe el niño de los demás, las experiencias que haya vivido en el logro de
sus objetivos y el cómo visualiza sus fracasos, por lo tanto es necesario que
tanto padres, maestros y personas que estén cercanas al niño le brinden
experiencias que le den seguridad y le hagan sentir que es valioso y digno de
ser amado por el sólo hecho de existir, sin importar sus diferencias
individuales sea un niño con N.E.E. o no, lo importante es su persona y como
tal merece respeto y amor.
BIBLIOGRAFÍA
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CORKILLE, B. Dorothy. “El niño feliz.” 11° edición. Editorial Gedissa, México
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