SABIAS PALABRAS DE BENEDICTO XVI · 2011. 11. 17. · ca de nuevo en nues-tros corazones y sepamos...

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BOLETIN N.º 283 Diciembre 2009

El Consejo Diocesano desea a

toda esta gran familia de Anfe, una

Navidad llena de gozo. Que Jesús naz-ca de nuevo en nues-

tros corazones y sepamos llevar la

paz allí donde vayamos.

SABIAS PALABRAS DEBENEDICTO XVI

El Papa alerta de que los hijos de divorciados pueden convertirse en los nuevos huérfanos

“La mayoría de los niños que hoy se sienten huérfanos no es porque no tienen padres sino porque tienen de-masiados padres”.

“Hay fuerzas y personas de la sociedad actual que parecen decididas a demoler la familia, cuna natural de la vida humana”.

Para resolverlo, ha pedido a las familias que no se dejen engañar por los falsos modelos de vida que promueve el cine y la televisión.

Además, ha animado a saber perdonar, a acoger a los hijos que sufren y a dar belleza y amor a la vida de los demás.

Septiembre 2009

REINA DE LAS FAMILIAS

El día 27, último domingo del año, celebra la Iglesia la Fiesta de la Sagrada Familia. Esta fiesta, lejos de entrar en el conflicto social de identidad de la familia considerada hoy en nuestro país, se sale completamente del contexto actual. Lo que interesa es que el hombre tenga claro lo que es y lo que establece la familia: el amor a Dios y el amor a los hombres. El amor a Dios y el amor de Dios repartido entre los hijos, entre los padres, entre los esposos.

El amor de Dios vivido encarnado entre un hombre como José o una mujer como María, tan siquiera todavía adolescentes, pero que se aman entre sí y aman a Dios. De esa manera nuestras familias no se desintegrarían con tanta facilidad, ni se rom-pería la vida familiar tan fácilmente.

El Señor, en el fragmento del evangelio de este día nos llama muy fuertemente a vivir en familia,

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a potenciar en familia esos lazos del amor que a veces damos muy por supuestos pero que no se pueden dar tan por supuestos. Un padre necesita decir a sus hijos que los quiere porque él necesita decirlo. Una madre necesita decir a sus hijos que los quiere porque ella necesita decirlo. Y así el resto de la familia necesita amar porque cada uno necesita amar, necesita decirlo, necesita expresarlo y entonces se vive un clima de paz, de amor. ¡Jesús, María y José: Rogad por las familias!

EL ÁRBOL DE NAVIDAD

Hay dos historias que hablan de] origen del árbol de Navidad. Una de ellas sitúa el comienzo de la tradición en la región francesa de Alsacia, donde hace cuatro siglos vivía un caritativo sa-cerdote que, cada noche de Navidad, repartía entre los menesterosos de su Pueblo alimentos, ropa dinero que recolectaba en los meses anteriores. Un día, mientras preparaba los paquetes para cada persona, el sacerdote admiró la hermosa noche y tuvo la idea de colgar los regalos en un abeto próximo al templo. En tan bella y serena noche los pobres se reunieron bajo el árbol para entonar villancicos.

Tan agradable resultó la reunión que, desde entonces, el árbol se convirtió

en uno de los centros de la fiesta navideña.

La otra tradición viene de Inglaterra, siglo XVIII, bajo el reinado de Jorge III. Su esposa, la reina Carlota, se carac-terizaba por su bondad con los súbditos y en 1765 decidió instalar en uno de los salones mas grandes del palacio un árbol adornado con guirnaldas, luces, juguetes y toda clase de regalos.

Una bonita tradición que no debe, eclipsar o hacer olvidar la de nuestros belenes o nacimientos.

Queridas adoradoras:

En este mes de diciembre comenzamos el tiempo de Adviento. Empezamos un tiempo litúrgico y un año nuevo.

Comenzamos fijándonos en la figura de la Virgen María, el día de la Inmaculada Concepción. La Virgen es el prototipo de entrega a Dios, ella fue toda de Dios. Inmaculada en su Concepción, sin pe-cado en su concepción, toda pura para entregarse a Dios, a los planes de Salva-ción de Dios. Todos nosotros debemos

prepararnos como ella para vivir nuestra vida cristiana entregados a Dios. Debemos purificar nuestra existencia para que Dios pueda nacer en nosotros. Este es el otro gran acontecimiento, el Adviento. El Adviento es el tiempo en el que todos los cristianos aprove-chamos los medios de salvación para vivir cada día más entregados a Cristo. Adviento: tiempo de conversión, tiempo de preparar nuestros corazones, de vaciarlos de pecados y llenarlos de Gracia de Dios.

Con el adviento comien-za el nuevo año para nosotros los cristianos, nuevo año litúrgico. Co-menzaremos el ciclo C en las lecturas dominica-

les. La liturgia comienza siempre prepa-rándonos al nacimiento de Cristo.

Aprovechemos todos estos acontecimientos para retomar con ilusión nuestra vida cristiana, para retomar con ilusión nuestro ser adoradores del Señor. Contemplemos en la Sa-grada Hostia la presencia de Cristo que viene a nacer en nuestros corazones; que quiere habitar en los corazones de todos los hombres y mujeres del mundo que los tengan abiertos a su presencia,


libres de todo pecado y con la ilusión de estar llenos de Dios.

Tiempo de adviento, tiempo de espera, unidos a la Virgen María que esperó, como cualquier madre, el nacimiento de Jesús, su hijo. Muchas de vosotras sois madres y mejor que nadie entenderéis lo que significa esta espera, este aguardar el momento del nacimiento del niño. Es una mezcla de muchas sensaciones: alegrías, temores, esperanzas, vigilancia, preparación... Lo cierto es que esa sería la actitud con la que debemos vivir el adviento. Todos los cristianos podemos esperar con gozo, con esperanza, con ilusión, con esfuerzo personal, el nacimiento de Jesús.

Hemos de estar atentos, pues el mismo Señor sigue pasando cerca de nuestra vida, con suficientes referencias, y cabe el peligro de que en alguna ocasión no le reconozcamos. Se hace presente en la enfermedad o en la tribu-lación, que nos purifica si sabemos aceptarla y amarla; está, de modo oculto pero real, en las personas que trabajan en la misma tarea y que necesitan ayuda, en aquellas otras que participan del calor del propio hogar, en las que cada día encontramos por motivos tan diversos... Jesús está detrás de esa buena noticia, y espera que vayamos a darle las gracias, para darnos otras nuevas. Son muchas las ocasiones en que se hace el encontradizo... ¡Qué pena si no supiésemos reconocerle por ir excesivamente preocupados o distraídos, o faltos de piedad, de presencia de Dios!

Dios no manda al arcángel Gabriel cada vez que quiere darnos una misión. Basta con que estemos atentos a la realidad que nos rodea. Cada cristia-no, cada comunidad, cada parroquia, cada diócesis, la Iglesia entera… Todos tenemos que estar atentos para descubrir las llamadas de Dios en los acontecimientos de la vida, en los hechos más sencillos y en los más significativos.

Queridas adoradoras nos acercamos a unos días de alegría, de ilusión..., pero debemos también cultivar nuestra vida cristiana. Vivamos profundamente nuestras vigilias de adoración para que estando cerca del Señor nos ayude a vivir el Adviento y la Navidad con un verdadero espíritu de fe. Celebremos todas estas fiestas con la alegría que brota de estar cerca del Señor, de vivir la presencia de Cristo en el Sacramento del Altar. De poner ante él toda nuestra vida y la de nuestras familias en estas fiestas tan entrañables.

Quiero aprovechar para desearos a todas unas felices fiestas. ¡¡Feliz Navidad, feliz nacimiento de Cristo en nuestras vidas!!

Roberto, estaba parado y tenía una fa-milia numerosa... Y la Navidad estaba ya a las puertas y todos los días oía a sus churumbeles la misma cantinela: “Papá, acuérdate, que en la Navidad del Niño Jesús queremos... bueno, tú sabes las cosas que deseamos”

Aquel buen hombre hubiera dado todo su corazón y hasta su vida por hacer felices a sus hijos. Llevaba dentro de sí la inmensa amargura secreta e in-vasora de la misma madre Tierra. Su pensamiento rompió las cadenas de la pobreza y en el profundo silencio de la noche, cuando las estrellas se suspiran

sonriendo, el hombre saltó de su tugurio negro, que apenas alumbraba una vela temblorosa.

Y llegó la vigilia y el pobre Roberto, salió de casa, bajo el coro de los astros encendidos, y se puso como un beodo a deambular por las calles. La luna se había puesto y la noche hubiera quedado negra, si las grandes luminarias no estu-vieran anunciando con luces de múltiples colores la gran fiesta de la Navidad.

Por todas partes luces y escaparates tentadores con miles y miles de cosas: viandas, trajes, calzados, juguetes, toda


una variedad de regalos. Pero... él no tenía dinero y no podía comprar nada.” Encontraba por doquier gente cargada de paquetes, radiantes de felicidad, de la sonrisa fácil, del saludo espontáneo. Parecía que el cielo esa noche se había bajado a la tierra. Y Roberto pensaba y se decía: “¡Dios mío, a mis niños no puedo llevarles nada, nada! Y este pensamiento le amargaba el corazón y hacía que las lágrimas llenaran sus ojos y corrieran por sus mejillas. Ya era casi la media noche.

Vio una iglesia abierta y como un so-námbulo se entró en ella. ¡Cuánta luz y cuánta gente! Desde lo alto del altar un precioso Niño Jesús le sonreía. Recor-dó, que en Belén al venir a este mundo, Jesús no tuvo regalos y sin embargo, estaba contento lo mismo. Venía Él como regalo a la Humanidad. Esto le parecía a Roberto que le decía aquel Niño precioso. No tenía nada, pero... estaba allí para dar todo. Había mucha gente en fila para confesarse. Sintió también deseos de reconciliarse para acoger en su corazón a Jesús Niño. Y después... se acercó a la Mesa del

Banquete Eucarístico, al encuentro de Jesús Hostia. Su cuerpo entero vibró al contacto de Aquél, que es intangible. La felicidad de aquel momento llenaba su alma hasta los bordes.

Volvió a casa, transformado, alegre, sin nada, pero teniéndolo todo. Bajo el par-padear de las estrellas luminosas, una trémula alegría le paraba el corazón. Sentía en el aire, no sé qué vago aroma de una dulce presencia. Al abrir la puerta de la casa todos los niños se arremoli-naron junto a él. “Papá, papá, ¿qué nos has traído? Y se asentaron al rededor de la mesa prontos para coger lo que él pusiera sobre el viejo mantel. Todos esperaban ver cuánto traía oculto bajo su ajada capa.

“Hijos míos, os traigo un solo regalo, pero ¡qué regalo hijitos, qué regalo! Es todo para vosotros: mirad”. Abrió su capa y vio el prodigio, maravilloso, increíble, inaudito: de su pecho, radiante de es-pléndida luz, que besa los ojos y hace dulce el corazón, salía Jesús Niño, que sonreía a sus hijos, extasiados, atónitos, hipnotizados ante aquel milagro de amor. ¡Y lo adoraron!

Fray Gabriel de la Dolorosa Calvo BarriosDirector Espiritual de Anfe en Lucena

En la madrugada del día 1 de noviembre, falleció nuestro Consi-liario Nacional, don Vicente Souto Doval. También era Consiliario Diocesano de Tuy-Vigo.

Copio un párrafo de la carta que nuestra Presidenta Nacional nos ha dirigido a todas las presidentas diocesanas:

“Todas las que llevamos unos cuantos años en ANFE, casi no tenemos recuerdos sin “nuestro” don Vicente, primero como Consiliario Diocesano participando en todas las Jornadas y Plenos que se convocaban, y más tarde conjugando con su nueva faceta de Consiliario Nacional, acudiendo siempre a todos los sitios donde se le requería, demostrando así el cariño y el compromiso que tenía con la asociación.”

Quiero recordaros a todas las secciones, que nuestros Estatutos, en su artº 41 dice que, en todas las secciones de España “se celebre una Misa y Vigilia a favor de su alma”; por lo que, la próxima vigilia que cada sección celebre, debe aplicarse por su eterno descanso.

Las que solemos ir todos los años a las Jornadas Nacionales, le echaremos mucho de menos, era un sacerdote muy espiritual, amante de la Eucaristía, de la Santísima Virgen y del Sacramento de la Penitencia, se le “llenaba la boca” cuando hablaba de ello.

Desde el cielo estará intercediendo por toda ANFE. ¡Descanse en paz!

FALLECIÓ NUESTRO CONSILIARIO NACIONAL

Cuando no se está dispuesto a cortar con una mala situación, cuando no se busca con rectitud de intención solo la gloria de Dios, la conciencia se puede oscurecer y quedarse sin luz para entender incluso lo que parece evidente.

¿No sería nuestra vida bien distinta si fuéramos más conscientes de esa presencia divina? ¿No es cierto que desaparecería mucha rutina, malhumor, penas y triste-zas...? ¿Qué nos importaría entonces representar un papel u otro, si sabemos que a Dios le gusta y aprecia el que nos ha tocado?

Señor, no permitas que, por falta de vigilancia, otras cosas ocupen el lugar que sólo Tú debes llenar. Enséñame a mantener el alma libre para Ti, y el corazón dispuesto para cuando llegues


Sí, preparémosla junto a Santa María, nuestra Madre. Procuremos también prepararla en nuestro ambiente, en nuestros Turnos, fomentando un clima de paz cristiana, y brindemos muchas pequeñas alegrías y muestras de afecto a quienes nos rodean. Los demás necesitan pruebas de que, de verdad, somos verdaderas cristianas, verdaderas

adoradoras y estamos alegres.

Alegres porque somos adoradoras de todo un Dios, de que las noches de Vigilia son para nosotras un gozo; de que Cristo ha nacido en Belén, y pocas pruebas hay tan convincentes como la alegría habitual del cristiano. Una cara triste no atrae a nadie.

También cuando lleguen el dolor y las contradicciones. La Virgen las tuvo abundantes al llegar a Belén, cansada de tan largo viaje, y al no encontrar lu-gar digno donde naciera su Hijo; pero esos problemas no le hicieron perder la alegría de que Dios se hizo hombre y habitó entre nosotros.

Y lo más grande: ¡que se quiso quedar entre nosotros! Y gracias a ello pode-mos adorarlo cada mes, pidiendo por las necesidades de la Iglesia, por nuestros sacerdotes, por las vocaciones, por la

vida, por nuestras familias, por todo el que lo necesite. ¡Tenemos mucho poder en nuestras manos cada noche de Vigilia! Dios escucha siempre, pero la oración de la noche nunca es desoída. Siempre es eficaz.

¡¡Feliz Navidad para todos!!

PREPAREMOS LA NAVIDAD

DIFICULTAD CON LOS ESTUDIOS

En Octubre 1813, entró en el Seminario Mayor de Lyons. Su inadecuado cono-cimiento del latín le hizo imposible captar lo que los profesores decían o respon-der a las preguntas que le eran hechas. Al final de su primer término le pidieron que se marchara, y su dolor y desaliento eran inmensos. Por algún tiempo pensó en irse a una de tantas con-gregaciones de hermanos religiosos; sin embargo una vez más el Padre Balley vino en su rescate y sus estudios le fueron dados en privado en Ecculy. Pero no pasó el exa-men previo a la ordenación. Un examen privado en la rectoría de Ecculy probó ser más satisfactorio y fue tomado como suficiente, siendo juzgadas justamente sus cualidades morales que sobrepasa-ban cualquier falta académica.

En Agosto 13, 1815, Juan Bautista Vian-ney fue elevado al sacerdocio, a esa inefable dignidad de la que tan frecuen-temente hablaba diciendo: “El Sacerdote solo será entendido en el cielo”; tenía 29 años de edad.

Su primera Misa la dijo en la capilla del Seminario en Grenoble.

En su regreso a Ecculy la copa de felici-

Seguimos este mes del Año Sacerdotal con la interesante vida de San Juan María Vianney

EL SANTO CURA DE ARS

dad rebosó cuando se enteró que sería ayudante de su santo amigo y maestro, el Padre Balley. Pero las autoridades diocesanas determinaron que por un tiempo, el que luego pasaría gran parte

de su vida en un confesionario, no debía tener las facultades para confesar. Mas tarde, el Padre Balley habló con las au-toridades eclesiásticas y él fue su primer penitente.

Su hermana Margarita decía: “él no predicaba muy bien todavía, pero la gente acudía en masa cuando le tocaba a él predicar”.

En Diciembre de 1817, murió en sus brazos su querido amigo el Padre Balley, a quien lloró como si hubiese sido su padre. Él, que era tan desprendido de las cosas materiales, hasta el fin de su vida tendría un pequeño espejo de mano que perteneció a su maestro y padre, porque él decía que “Había reflejado su rostro”. Al poco tiempo de la muerte del Padre Balley, M. Vianney fue asignado al pueblo de Ars, un pequeño y aislado pueblo donde se pensó que sus limita-ciones intelectuales no podrían hacer mucho daño.

PÁRROCO DE ARS: 18181859

El pueblecito de Ars se encuentra en una planicie ondulada, que tiene en su


centro una pequeña colina donde se encuentra la Iglesia, sirviéndole como de plataforma. En el 1815 consistía de unas 40 casas. Su iglesia estaba extre-madamente dañada y de igual condición estaba la rectoría, que se encontraba a un lado del valle.

En los círculos clericales, Ars era mirado como un tipo de Siberia. El distrito era torpe, la desolación espiritual era aún mayor que la material. En los primeros días de Febrero de 1818, que el Abbe Vianney recibió la notificación oficial de su traslado a Ars. El Vicario General le dijo: “No hay mucho amor en esa pa-rroquia, tu le infundirás un poco”. El 9 de febrero, M. Vianney se dirigió hacia el lugar que sería por los siguientes 41 años el lugar de su sorprendente y sin precedente actividad. Caminó 38 Km. desde Ecculy hasta Ars. Le seguían en un carretón una cama de madera, un poco de ropa y los libros que le dejó el Padre Balley. Cuando pudo divisar la pequeña villa, hizo un comentario de su pequeñez y al mismo tiempo hizo una profecía: “La parroquia no será capaz de contener a las multitudes que vendrán hacia aquí”.

Los habitantes del pueblo en su mayoría buscaban los placeres del mundo y no tenían mucha fe, aunque quedaba un pequeño núcleo de personas que per-manecían fervorosas, entre las cuales estaba la señora de la casa más grande de Ars, Mlle. des Garets, quien dividía su tiempo entre la oración y las obras de caridad.

Al llegar, su primera preocupación era la de establecer contacto con su rebaño. Visitó cada casa de la parroquia. En estos

primeros días todavía encontraba tiempo para caminar por las praderas, con su breviario (libro de oración) en las manos, y su sombrero de tres esquinas debajo de su brazo, ya que rara vez se lo ponía. Para ganar la amistad de los habitantes les hablaba del estado de las cosechas, del tiempo, de sus familias etc.

Sobre todo el oraba y añadía a la oración las más austeras penitencias. Hizo sus propios instrumentos de penitencia. Su cama era el piso ya que la cama que trajo de Ecculy la regaló.

Pasaría sin comer varios días. Hasta el 1827 no había nadie que hiciese las labores domésticas en la rectoría. Su plato principal eran papas y en ocasiones hervía un huevo. Hubo una ocasión en la que trató de vivir de hierba, pero luego confesó que tal dieta era imposible.

El decía: “El demonio no le teme tanto a la disciplina y a las camisas de pelo; lo que realmente teme es a la reducción de comida, bebida y sueño”.

El Santo Cura gozaba de la belleza de las praderas y los árboles, pero amaba mucho más la belleza de la Casa de Dios y las solemnidades de la Iglesia. Empezó por comprar un altar nuevo, con sus propios ahorros, y él mismo pintó el trabajo de madera con el que las paredes estaban adornadas.

Se hizo el propósito de restaurar y dar mayor esplendor a lo que el llamaba: “Los muebles de la Casa de Dios”. Para el Señor compró lo mejor en encajes , telas, tejidos para hacer las vestimentas sacerdotales, que aun se pueden admirar en Ars.

La Concepción: Es el momento en el cual Dios crea el alma y la infunde en la materia orgánica procedente de los padres. La concepción es el momento en que comienza

la vida humana.

Cuando hablamos del dogma de la Inmaculada Concepción no nos re-ferimos a la concepción de Jesús quién, claro está, también fue concebido sin pecado. El dogma declara

que María quedó preservada de toda carencia de gracia santificante desde que fue concebida en el vientre de su madre Santa Ana. Es decir María es la “llena de gracia” desde su concepción.

En Lucas 1:28 el ángel Gabriel enviado por Dios le dice a la Santísima Virgen Ma-ría «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.». Las palabras en español “Llena de gracia” no hace justicia al texto griego original que es “kecharitomene” y significa una singular abundancia de gracia, un estado sobrenatural del alma en unión con Dios. Aunque este pasaje no prueba la Inmaculada Concepción de

María ciertamente lo sugiere. El Apocalipsis narra sobre la «mujer vestida de sol» (Ap 12,1). Ella representa la santidad de la Iglesia, que se realiza plenamente en la Santísima Virgen, en virtud de una gracia singular. Ella es toda esplendor porque no hay en ella mancha alguna de pecado. Lleva el reflejo del esplendor divino, y aparece como


Conviene recordar, de vez en cuan-do, los Estatutos y el Reglamento por el que ANFE se rige, y saber el compromi-so que el día de nuestra imposición de insignia le hicimos al Señor. La insignia es muy bonita llevarla, a todas nos gusta, pero llevar una insignia, sea la nuestra o de otra asociación, implica un compromi-so que se hace al Señor y que estamos obligadas a cumplir.

Artº 4º.de nuestro Reglamento- Las adoradoras activas tienen los siguientes derechos y obligaciones:

• Asistir personalmente a una Vigilia ordinaria mensual completa en el Turno que se le asigne.

• Participar en las actividades de la Asociación en orden a conseguir los fines esta-tutarios de la misma (Asambleas de Sección, Diocesana y Nacional; Vigilias extraordinarias, etc.).

• Participar con voz y Voto en la Asamblea Diocesana y de Sección.

• Aceptar las disposiciones de los Estatutos nacionales y del Reglamento diocesa-no y las decisiones válidas de la Asamblea y Consejos Nacional, Diocesano y de Sección.

• Contribuir con la cuota que fije la Asamblea de la Sección.

Artº 5º.

• Cuando una adoradora haya dejado de asistir sin causa justificada a la Vigilia ordi-naria del Turno durante seis meses, será advertida por la responsable del turno.

Oídas las razones de la adoradora, si no puede comprometerse a asistir regular-mente a la vigilia ordinaria del Turno, se le invitará a pasar a honoraria si lo desea o será dada de baja en la Asociación

El día 18 de octubre, hemos tenido la suerte de celebrar en nuestro pueblo el Retiro-Convivencia de la sierra. ¡Qué alegría cuando han ido llegando tantas adoradoras: 180 de todas las Seccio-nes de la sierra y hasta algunas de la Campiña: Añora, Cardeña, Hinojosa del Duque, Pedro Abad, Pozoblanco, Villa-nueva del Duque, Villa del Río, Fernán

Núñez, Luque y Córdoba. También la futura Sección de Pedroche. Faltó El viso, que se había disculpado, con harto sentimiento, porque coincidía con algo ineludible en su parroquia.

El primero en llegar fue don Tomás Pajue-lo, nuestro Director Diocesano. Después de los saludos, besos y abrazos, dimos comienzo a nuestro día con el saludo de

la Vicepresidenta, Cati Rioboó (ya que la presidenta diocesana se encontraba en el Pleno Nacional que se celebraba en Zamora), y la bienvenida de nuestra Presidenta local, Angela Pérez, que muy emocionada dio paso a don Tomás para iniciar el rezo de Tercia y a continuación la meditación, todo en nuestra Casa de la Cultura, previamente preparada como

una pequeña Capilla.

Luego de un pa-seíto nos fuimos a la parroquia donde celebra-mos la Euca-r i s t í a . ¡Qué emocionante ver tantas ado-radoras en nues-tra parroquia celebrando la Santa Misa con tanta devoción! El Director de

nuestra Coral Polifónica, don Antonio Medrán, tuvo la gentileza de ofrecerse para dirigir los cantos, y era precioso oír cómo toda la iglesia cantaba unida alabando a Dios.

La convivencia fue maravillosa, da gusto encontrarse entre una familia tan nume-rosa y tan encantadora. La Presidenta de Pedro Abad, Rafaela García, cumplía ese día sus 86 añitos; la felicitamos, le

CRÓNICA DEL RETIROCONVIVENCIA EN DOS TORRES


cantamos y se le hizo un pequeño regalo en nombre de la Adoración, que ella agradeció muy emocionada.

Después, Charo González, miembro del Consejo Diocesano, nos dio una lección magistral de la Liturgia de las Horas. Nos explicó cómo hay que hacer bien la vigilia y nos aclaró ciertos puntos que, a veces, descuidamos.

Por la tarde volvimos a la parroquia, donde tuvimos Exposición del Santísimo, re-zamos el Rosario y Vísperas, magnífica-mente dirigidos por don Tomás, como todo lo que dirigió durante el día: la meditación de la mañana, la homilía de la Eucaristía… Todo fue precioso. Nos puso por mo-delo al santo Cura de Ars, al que hizo referencia varias veces por ser el año sacerdotal. Nos dijo que “para el Señor todo lo mejor” como solía decir él. Insis-tió mucho en el valor de la oración y en nuestra misión de adoradoras, y es que hemos de tener al Señor el primero en nuestras vidas y será la gran ayuda para ir a los demás. Estuvo magnífico todo el día. Había adoradoras que todavía no lo conocían y quedaron encantadas. Nos dio las gracias a nuestra sección, y a todas por ser adoradoras. Nosotras le agradecemos a él el buen trato que nos da y el cariño que nos demuestra.

Pasamos un día feliz. Nuestra Sección disfrutó muchísimo; ha trabajo toda ella (38 adoradoras) unidas como una piña, cada una en lo que ha podido “ponien-do la inteligencia al servicio del amor” (A.Rovira), y sin cansarse para nada. También las honorarias (29 adoradoras)

ayudaron, que “tenemos unas honorarias muy activas” (como suele decir Angelita Reyes), y no se pierden nada; bueno, las hay que están postraditas, pero aún ésas han puesto sus casas al servicio de todas. ¡Qué bonito es ver cómo se da cada una sin que se les pida!

La verdad es que fue un día precioso, lo hemos disfrutado. Hasta el tiempo fue bueno, cálido, soleado…

“El Señor ha estado grande con nosotros y estamos alegres” (Salmo 126)

Mª Teresa y Mª Concepción

Hoy es un buen momento para que las adoradoras hagamos un balance del año que ha pasado y propósitos para el que comienza. Buena oportunidad para pedir perdón al Señor por lo que no hici-mos, por el amor que faltó en nuestras vigilias, por las desganas que hemos tenido; buena ocasión para dar gracias por todos los beneficios y el amor que el Señor ha derramado en nosotras cada noche en su compañía.

Cada día que pasa es un tiempo que Dios nos regala para llenarlo de mucho amor a Él y a todos los que nos rodean. Cada día que pasa es una oportunidad de trabajar más y mejor en la adoración a Jesús Sacramentado; de hacerlo todo por amor; de poner nuestro esfuerzo, el poco o mucho que tengamos, cada una debe dar según su capacidad, pero todas debemos aportar algo, no esperar a que todo se nos dé hecho.

El tiempo de que cada una de nosotras dispone es corto, pero suficiente para

decirle a Dios que le amamos y para dejar terminada la obra que el Señor nos haya encargado a cada una en ANFE. No es justo que lo malgastemos, ni que tiremos ese tesoro irresponsablemente por la ventana.

Cada año que pasa es una llamada para santificar nuestra vida ordinaria y un aviso de que estamos un poco más cerca del momento definitivo con Dios.

Son innumerables los motivos para ter-minar el año pidiendo perdón al Señor, haciendo actos de contrición y de desa-gravio. Han sido muchas nuestras faltas y nuestros errores. Sin embargo, son mayores los motivos de agradecimiento, en lo humano y lo sobrenatural.

En la Vigilia extraordinaria de Fin de Año, vigilia, que si Dios quiere celebraremos el día 30, es una oportunidad para reunirnos ¡todos los turnos! para dar gracias y pedir perdón. Tenemos que saber dejar la comodidad y sentirnos Aso-ciación y hermanas unas de otras.

El tiempo que todavía nos deje Dios en este mundo, intentemos hacerlo digno a sus ojos. Cumplir con el compromiso que un día le hicimos de serles fiel en ANFE.

Cualquier año puede ser el mejor año si aprovechamos las gracias que Dios nos tiene reservadas.

No desperdiciemos ni un solo día. Pida-mos a la Santísima Virgen que nos ayude a conseguirlo.


ORIENTACIONES PARA LA REALIZACION DE LA VIGILIA

Del 1 al 4 1ª semana Adviento Domingo I Manual pág. 47 y 215 ss.(*29 y 193 ss.)

Del 5 al 11 2ª semana Adviento Domingo II Manual pág. 87 y 215 ss.(*69 y 193 ss.

Del 12 al 18 3ª semana Adviento Domingo III Manual pág. 131 y 215 ss.(*111 y 193 ss.)

Del 19 al 23 4ª semana Adviento Domingo IV Manual pág. 171 y 215 ss.(*151 y 193 ss.)

Del 24 al 31 Usaremos el esquema de Navidad Manual pág. 319 (* 257)

•Liturgia de las Horas: ¿Qué semana nos toca?

(Las páginas que vienen entre paréntesis con un asterisco, pertenecen al Manual nuevo)

• Tiempo litúrgico. Adviento. Navidad (La oración conclusiva de cada festividad págs, 208 /209)

Lectio: Se usará como primera lectura y sirve de base para el tema de “Medita-ción”.

Éxodo 34, 1-10.

“El Señor ordenó a Moisés:

-Lábrate dos losas de piedra como las pri-meras: yo escribiré en ellas los mandamientos que había en

las primeras, las que tú rompiste. Prepárate para mañana, sube al amanecer al monte Sinaí y espérame allí, en la cima del monte. Que nadie suba contigo ni asome nadie en todo el monte, ni siquiera las ovejas y vacas pastarán en la ladera del monte.

Moisés labró dos losas de piedra como las primeras, madrugó y subió al amanecer al monte Sinaí, según la orden del Señor, llevando en la mano las dos losas de pie-dra. El Señor bajó en la nube y se quedó con él allí, y Moisés pronunció el nombre del Señor.

El Señor pasó ante él proclamando: el Señor, el Señor, el Dios compasivo y clemente, paciente, misericordioso y fiel, que conserva la misericordia hasta la milésima gene-ración, que perdona culpas, delitos y pecados, aunque no deja impune y castiga la culpa de los padres en los hijos, nietos y bisnietos.

Moisés, al momento, se inclinó y se echo por tierra. Y le dijo:

Si gozo de tu favor, venga mi Señor con nosotros, aunque seamos un pueblo testa-rudo; persona nuestras culpas y pecados y tómanos como heredad tuya.

Respondió el Señor:

- Yo voy a hacer un pacto. En presencia de tu pueblo haré maravillas como no se han hecho en ningún país ni nación: así, todo el pueblo que te rodea verá la obra impresionante que el Señor va a realizar contigo.”

( Unos momentos de silencio para meditar la lectura )

SEGUNDA LECTURA

Del Sermón 126 de san Agustín.

Si, en efecto; tú ves algo para llegar por ahí a creer en algo; la fe en lo invisible se apoya en lo que vemos. No seas desagradecido a quien te dio los ojos, por donde puedes llegar a creer lo que todavía no ves. Dios te puso en la cara los ojos, y la razón en el alma; despierta esta razón, despierta al que mora dentro de tus ojos, asómese a esas ventanas y mire por ellas la creación divina. Porque alguien hay que mira por los ojos. ¿No te sucede alguna vez que, cuando ese que dentro de ti mora en otros pensamien-tos, no ves lo que tienes delante de tus ojos? En vano están de par en par las ventanas, ausente quien por ellas mira. No son, pues, los ojos quienes ven, sino que alguien ve por los ojos; levántate, despiértale. No, no te fue rehusado; te

hizo Dios animal racional, te antepuso a las bestias, te formó a su imagen. ¡Qué! Esos tus ojos, ¿no van a servirte sino para hallar, como los animales, cebo para el vientre, y nada para la mente? Levan-ta, pues, la mirada de la razón, usa de los ojos cual hombre, ponlos en el cielo y en la tierra: en las bellezas del firmamento, en la fecundidad del suelo, en el volar de las aves, en el nadar de los peces, en la vitalidad de las semillas, en la ordenada sucesión de los tiempos; pon los ojos en las hechuras, y busca al Hacedor; mira lo que ves, y sube por ahí al que no ves. No creas son exhortaciones mías éstas; oye al Apóstol, que dice: los atributos invisibles de Dios se hacen visibles por la creación del mundo. (Rm 1, 20).

( Unos momentos de silencio para meditar la lectura )


† … En nuestra oración personal silenciosa, no olvidemos recordar ante el Señor a Don Vicente Souto, nuestro consiliario nacional, y pedirle que siga velando por nosotras para que mantengamos con fidelidad y coherencia nuestro compromiso adorador.

Que brille para él la luz de Cristo,

El lucero que no tiene ocaso. Amén

“El que es y el que era y el que viene”

(Ap 1, 8 b)

¿No oíste sus pasos silenciosos?

Él viene, viene, viene siempre.

En cada instante y en cada edad, todos los días y todas las noches,

Él viene, viene, viene siempre.

De pena en pena mía, son sus pasos los que oprimen mi corazón,

Y el dorado roce de sus pies es el que hace brillar mi alegría.

¡Feliz Navidad!

1 “El don de Dios”, J. L. Ruiz de la Peña, Santander, 1991, pp. 215.

Si hay una verdad grabada a fuego en el pueblo de Israel -también en el nuevo pueblo: la Iglesia- es que somos obra de Dios. “Hombre y mujer los creó, a imagen de Dios los creó” (Gn.1, 27). Es la primera afirmación de nuestra fe: “Creo en Dios Padre todopoderoso, creador del cielo y de la tierra”, el más firme convencimiento: no somos parte de un azar o casualidad , Dios tiene un plan que quiere cumplir con nosotros, el Dios Trinidad tiene una historia santa que realizar. Es un proyecto basado en términos como amor, dependencia, per-tenencia, correspondencia. Somos de

Dios, pero Él quiere que respondamos a ese amor, a esa entrega, a su fidelidad. Es lo que conocemos como “ALIANZA”, que configurará la religiosidad israelita. La Alianza conlleva una promesa: Dios con nosotros

1. Así muchas veces el

hombre romperá ese pacto, pero la fi-delidad de Dios se sobrepondrá a la in-fidelidad de su pueblo: ¡Dios es fiel! Con este texto que hoy meditamos compren-demos cómo a la pregunta de quién y cómo es Dios podemos responder: es alguien que ha elegido a Israel como el esposo elige a la esposa, que es santo y santificador, que libera para llenar de vida, cuyo juicio es la salvación.


La Alianza es la clave para entender la Creación, es su fin: lo importante no es cómo hemos sido creados, de qué modo, sino porqué. Para vivir en Alianza, por puro Amor de Dios hemos sido creados y en ese amor estamos llamados a vivir. Así Dios no sólo crea el mundo, sino que “tira de él”

2 hacia

delante, lo atrae hacia el “ser-más”. Por eso la Creación espera su momento definitivo, de lo que nos “habla” desde el principio: la Encarnación del Hijo de Dios. Dios Trinidad = Dios sociedad en el amor; por eso nosotros debemos ser imagen de esta Verdad, nunca ais-lados, sino viviendo y mostrando este amor creador de relación en medio de nuestro mundo. Jesucristo se convierte así en la clave de lectura de la Crea-ción y de la Alianza.

Nosotros queremos responder a esta llamada, a la Nueva Alianza sellada con la sangre de Cristo. Somos tam-bién parte de esta historia santa, no podemos per-manecer como espec-tadores, como Moisés puestos en la presencia del Señor le decimos: “¡Qué-date con nosotros!”. Ahora la salvación es el Salvador; es la vida misma de Jesucristo dándosenos; a ella se acce-

2 “Teología de la creación”, J. L. Ruiz de la Peña, Santander, 1986.

3 Ángelus, fiesta de la Conversión de san Pablo, Benedicto XVI, Roma, 2009.

de no por la vía de la mera imitación, sino por la vía de la apropiación o par-ticipación de su ser. Tal apropiación es factible únicamente en el seguimiento; éste se origina en una llamada gratuita a la que se responde por la fe y el amor, que son a la vez libre opción humana y don gracioso de la iniciativa salvadora de Dios. “Gracias al Bautismo cambia completamente nuestro modo de vivir [...] Convertirse es creer que Jesús vive conmigo y en mi.”

3

Nuestra actitud en las vigilias es como Moisés postrado por tierra pidiéndole a Dios que venga con su pueblo. A pesar de nuestras infidelidades y pecados, el Señor sigue siendo fiel y nosotras –cada noche- recibimos esta llamada a perse-verar, a interceder, a reparar, a adorar, a alabar.

Dios que nos creó para vivir en Alianza, nos llama a su seguimiento como Iglesia, respondiendo cada día “Sí” a su amor, a su deseo de que “seamos santos como Él es santo”. Es la Iglesia/Alianza: no sólo hacer, cumplir, sino también recibir el amor –la vida- de Dios. Un “diálogo” que produce frutos, que llena de Espe-ranza.

Para la reflexión personal

1.- ¿Soy consciente de que formo parte de una Historia santa de la cual tengo que ser partícipe activo? ¿Cómo vivo y celebro esta Alianza?

2.- ¿Doy gracias a Dios por haberme creado y darme la oportunidad de formar parte de esta Alianza? ¿Celebro el aniversario de mi Bautizo?

3.- “A imagen de Dios los creó...” ¿Busco con sinceridad mi santidad personal, me esfuerzo por vivir según el Evangelio? ¿Es el amor la norma máxima de mi vida?

Para la oración personal (en el turno de vela)

A la Alianza sólo se responde desde la Conversión. Hombres y mujeres nuevos, con un corazón de carne y no de piedra, al estilo de Jesús, “que pasó haciendo el

bien”. Como miembros de una Nueva Alianza, le pedimos ese corazón:

Salmo 15 (14)

Señor, ¿quién puede hospedarse en tu tienda

y habitar en tu monte santo?

El que procede honradamente y practica la justicia,

el que habla sinceramente y no calumnia con su lengua,

el que no hace mal a su prójimo ni difama a su vecino,

el que desprecia al que Dios reprueba

y honra a los fieles del Señor,

el que no retracta lo que juró aún en daño propio,

el que no presta dinero a usura

ni acepta soborno contra el inocente.

El que así obra nunca fallará


CÓRDOBA

Vigilia de la Inmaculada

El domingo 6 de Diciembre, a fin de no coincidir con la de la Catedral, celebraremos solemne Vigilia de la Inmaculada Concepción, a las 21:30 horas en la Parroquia de la Trinidad donde tenemos nuestra Sede.

Esperamos la asistencia de las adoradoras de los turnos de las distintas parroquias, tanto activas como honorarias, así como cuantas personas podamos invitar ya que es a puerta abierta.

Que nuestra Madre Inmaculada no se quede esperando a sus hijas adoradoras. Es nuestra Madre y Maestra; en unión y ejemplo de Ella aprendamos a acompañar y adorar a Jesús Sacramentado. Es obligación de todos los turnos el estar unidos en las Vigilias extraordinarias.

Con gran ilusión y alegría, el viernes 30 de octubre celebramos en Benamejí el veinticinco aniversario de la inau-guración de esta sección. Celebración

que nos ha hecho reflexionar sobre lo rápido que pasa el tiempo. Parece que fue ayer cuando comenzamos con nues-tras vigilias de prueba y ya han pasado 25 años de nuestra inauguración. Hemos sentido una gran alegría interior, por este tiempo vivido en fidelidad a nuestro com-promiso de adorar y amar al Señor en la noche. Atrás quedaron los recuerdos

BODAS DE PLATA DE LA SECCION DE BENAMEJI.

de esas noches frías de invierno, del cansancio después de un día de trabajo, o el pensar que la familia quedaba sola en casa. El Señor ha suplido con creces

esos pequeños sacrificios que una ado-radora ofrece, porque todo pasa, pero Jesús es el único capaz de llenar nuestro corazón inquieto.

La recepción de adoradoras tuvo lugar en la plaza de la ermita de San Se-bastián, contamos con la presencia de las secciones de Lucena Jauja, Alme-

dinilla, Cabra, Zuheros, Rute, Luque, La Carlota , Córdoba y las secciones de la rama masculina de Palenciana y Bena-mejí, así como su Presidente Diocesano acompañado de su esposa.

Partimos de la ermita en procesión con las respectivas banderas hasta la parroquia.

A las 21:00 h. comenzamos con el rezo de Vísperas, Santa Misa, presidida por el Director Diocesano, don Tomás Pajue-lo, y concelebrada por nuestro director D.Vicente Castander, Mons. D.Paulino Cantero, Fray Gabriel de la Dolorosa (Lucena), D. Rafael Ruiz (Luque), D. José Antonio Jiménez (La Carlota) y D. Ángel Cristo Arroyo (Almedinilla).

Tras la Misa se expuso al Señor y co-menzamos un único turno de adoración, acabando con El Te Deum y la bendición con el Santísimo.

Al finalizar nuestra vigilia de adoración y acción de gracias, nuestra Presidenta Diocesana, Loli Gómez, en nombre del Consejo Diocesano, hizo entrega a la Presidenta de la sección de una placa conmemorativa recordando y dando gra-cias al Señor por estos 25 años.

Después de las felicitaciones de las distintas secciones, todos pasamos a tomar un refrigerio que las adoradoras de esta sección preparamos con gran cariño para obsequiar a todos los que nos acompañaron.

Agradecemos a los sacerdotes, al Con-sejo Diocesano y a todas las adoradoras/es, que nos acompañaron en esa noche, así como vuestras muestras de cariño.

Que el Señor siga bendiciendo a la Ado-ración Nocturna y nos vaya modelando adoradoras según el Corazón de María.

Sección de Benamejí

Diciembre 2009 - ANFE Diciembre 2009 - ANFE

En este mes se celebra

Cuenta en Cajasur para ingresar los donativos para la Beca del Seminario2024-0000-86-3000260541

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DECIMO SEXTABECA PARA EL SEMINARIO

Vigilia de Fin Año

La celebraremos el miércoles día 30, a las 21 horas, en la iglesia de la Trinidad.

Es una ocasión para agradecer a Dios el año que ha pasado, tanto si ha sido bue-no como si no. Lo que no nos haya ido tan bien, agradezcamos la purificación que hayamos padecido, porque si lo hemos sabido aprovechar, nos ha servido para acercarnos un poco más al cielo. Hacemos un llamamiento a las adoradoras de los distintos turnos para su asistencia.

CABRA

In memorian

Una vez más tenemos que manifestar nuestro dolor por el fallecimiento de dos her-manas: Antonia Mesa y Paquita Ríos.

Antonia fue la primera presidenta cuando se fundó Anfe en nuestra ciudad, cumpliendo con su cargo con la mayor atención y entusiasmo. Su asistencia fue tan fiel, que a las últimas vigilias venía en su carrito.

LA SECCIÓN

Suma anterior . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5.650’00 €

Carmen Lora Rey . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 30’00 €

Sección de Añora . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 200’00 €

Sección de Dos Torres . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 500’00 €

TOTAL . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6 .380’00 €

Día 6. II DOMINGO DE ADVIENTO. Que lleguéis al día de Cristo limpios e irre-

prochables.

Día 8. MARTES. SOLEMNIDAD: LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE LA

VIRGEN MARÍA, patrona de España. Establezco hostilidades entre tu

estirpe y la de la mujer.

Día 13. III DOMINGO DE ADVIENTO. El Señor está cerca.

Día 20.- IV DOMINGO DE ADVIENTO. De ti saldrá el jefe de Israel.

TERMINA EL TIEMPO DE ADVIENTO

COMIENZA EL TIEMPO DE NAVIDAD

Día 24. JUEVES. VIGILIA DE LA NATIVIDAD DEL SEÑOR. Cantaré eternamente

tus misericordias, Señor.

Día 25. VIERNES. SOLEMNIDAD DE LA NATIVIDAD DEL SEÑOR. Un hijo se

nos ha dado. Hoy nos ha nacido un Salvador: el Mesías, el Señor.

Día 26. SÁBADO. San Esteban, protomártir. A tus manos, Señor, encomiendo

mi espíritu.

Día 27. DOMINGO. La Sagrada Familia: Jesús, María y José. El que teme al

Señor honra a sus padres.

Hoy también se celebra a San Juan, apóstol y evangelista.

CALENDARIO DE JORNADAS Y COLECTAS EN ESPAÑA

Día 27. Domingo. Fiesta de la Sagrada Familia:

“Jornada por la Familia y la Vida”

Diciembre 2009 - ANFE Diciembre 2009 - ANFE

Segundo viernes

Segundo viernes

Ultimo viernes

Tercer viernes

Tercer viernes

Tercer viernes

Tercer viernes

Cuarto Jueves

Ultimo sábado

Tercer sábado

Ultimo sábado

Tercer viernes

Ultimo sábado

Tercer miércoles

Segundo viernes

Primer lunes

Tercer jueves

Tercer miércoles

Segundo sábado

Segundo jueves

Primer martes

Tercer martes

Tercer jueves

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Tercer miércoles

Segundo sábado

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CORDOBA

• Sagrados Corazones (Trinidad) . . . . . . . . . .

• Santa Teresa (Trinidad) . . . . . . . . . . . . . . . .

• Santa María Madre de la Iglesia . . . . . . . . .

• Santa Isabel de Hungria. . . . . . . . . . . . . . . .

• Santa Isabel de Hungría (matrimonios) . . . . .

• Sta. Marina de Aguas Santas . . . . . . . . . . . .

• Sta. Marina de Aguas Santas (matrimonios)

MONTILLA

• María Auxiliadora. . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

• Ntra. Sra. de la Asunción . . . . . . . . . . . . . . .

• Ntra. Sra. de la Aurora y S. Francisco Solano

LUCENA • Santa Clara . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

POZOBLANCO • Ntra. Sra. de Luna . . . . . . . . . .

BAENA • La Inmaculada Concepción . . . . . . . . . . .

FERNAN NUÑEZ •Santa Marina de Aguas Santas

PUENTE GENIL • La Inmaculada Concepción . . . .

AÑORA • Ntra. Sra. de la Peña . . . . . . . . . . . . . . .

DOS TORRES • Ntra. Sra. de Loreto . . . . . . . . . . .

EL VISO • Santa Ana . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

HINOJOSA DEL DUQUE • Ntra. Sra. del Carmen

RUTE • Ntra. Sra. de las Mercedes . . . . . . . . . . . .

ZUHEROS • Santa Teresa . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

PEDRO ABAD • Santa Rafaela María . . . . . . . . . .

CABRA • Ntra. Sra. de la Sierra . . . . . . . . . . . . . .

BENAMEJI • La Inmaculada Concepción . . . . . . . .

PRIEGO DE CORDOBA • San Francisco de Asís . . .

CARDEÑA • Ntra. Sra. del Carmen . . . . . . . . . . .

VILLANUEVA DEL DUQUE

• Inmaculada Concepción de María . . . .

LUQUE • Ntra. Sra. del Rosario . . . . . . . . . . . . . .

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C O R D O B AMadres Dominicas (M Sta. M.ª de Gracia) Franciscanas Clarisas (M. Santa Cruz) . . Franciscanas Clarisas (M. Santa Isabel) . . . Franciscanas Capuchinas . . . . . . . . . . . . Madres Cistercienses (M. de la Encarnación) Madres Cistercienses (M. de Cister) . . . . . Adoratrices Escls. del Stmo. y de la Caridad Carmelitas Calzadas, A.O. . . . . . . . . . . . Madres Jerónimas . . . . . . . . . . . . . . . . . . Esclavas del Stmo. Sacramento y de laInmaculada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . M O N T I L L AFranciscanas Clarisas . . . . . . . . . . . . . . . Franciscanas Concepcionistas . . . . . . . . . L U C E N AMadres Agustinas Recoletas . . . . . . . . . . Madres Carmelitas Descalzas . . . . . . . . B A E N AMadres Dominicas . . . . . . . . . . . . . . . . . C A B R AMadres Agustinas Recoletas . . . . . . . . . . HINOJOSA DEL DUQUEFranciscanas Concepcionistas . . . . . . . . .

Ntra. S.ª del RosarioLa Inmaculada Santa ClaraS. Francisco y Sta. ClaraEncarnación del SeñorLa InmaculadaSta. María MicaelaSagrado CorazónPurificación Stma. Virgen

María Reina

Santa ClaraInmaculada

Virgen de la ConsolaciónVirgen del Carmen

María Madre de Dios

San Agustín

Purísima Concepción

Del 7 al 8Primer domingoDel 10 al 11Del 10 al 11Del 14 al 15Ultimo sábadoSin día fijoPrimer juevesDel 2 al 3

Del 27 al 28

Del 11 al 12Del 8 al 9

Primer viernesSegundo domingo

Del 8 al 9

Tercer jueves

Primer jueves

Segundo viernesTercer juevesUltimo viernesSegundo miércolesTercer sábadoUltimo viernesUltimo lunesSegundo lunesSegundo Viernes

10’0010,0010,00 9’0010’3010’0010’009’009’00

EL CAÑUELO • Ntra. Sra. de la Cabeza . . . . . LA RAMBLA • Ntra. Sra. de la Esperanza . . . .ALMEDINILLA • Virgen de los Dolores . . . . . . . ESPEJO • Virgen del Perpetuo Socorro . . . . .VILLA DEL RIO • Virgen de la Estrella CoronadaMORILES • Virgen del Rosario . . . . . . . . . . . . .ADAMUZ • Ntra. Sra. del Sol. . . . . . . . . . . . . . LA CARLOTA • La Inmaculada . . . . . . . . . . . .JAUJA • San José . . . . . . . . . . . . . . . . .

PALENCIANA • . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .PALMA DEL RÍO • . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Segundo SábadoÚltimo Martes

9’009’00

SABIAS PALABRAS DE BENEDICTO XVI · 2011. 11. 17. · ca de nuevo en nues-tros corazones y sepamos...

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