Revolución Mexicana

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Instituto de Enseñanza Superior Nro 1 “Alicia Moreau de Justo” Problemas de Historia Americana Contemporánea Segundo Trabajo Práctico: La Historiografía de la Revolución Mexicana 1)Analiza las distintas interpretaciones del movimiento zapatista a partir de los textos de Alan Knight y Arturo Warman. 2)Lea el capítulo 4 del libro Pueblo en vilo de Luis González.Analiza este capítulo a partir de las corrientes historiográficas reseñadas por Alan Knight en su texto Interpretaciones recientes de la Revolución Mexicana. Profesora: Carla Horton Alumno: Nicolás Rubens Año: 2011

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Análisis cuidadoso y meticuloso de la obra de grandes historiadores que han contribuido a realizar una aproximación histórica del significado de la revolución. Se destaca Alan Knight junto a otros referentes de la historiografía

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Instituto de Enseanza Superior Nro 1 Alicia Moreau de Justo

Problemas de Historia Americana Contempornea

Nicols Rubens

Instituto de Enseanza Superior Nro 1 Alicia Moreau de JustoProblemas de Historia Americana Contempornea

Segundo Trabajo Prctico:

La Historiografa de la Revolucin Mexicana

1)Analiza las distintas interpretaciones del movimiento zapatista a partir de los textos de Alan Knight y Arturo Warman.

2)Lea el captulo 4 del libro Pueblo en vilo de Luis Gonzlez.Analiza este captulo a partir de las corrientes historiogrficas reseadas por Alan Knight en su texto Interpretaciones recientes de la Revolucin Mexicana.

Profesora: Carla Horton

Alumno: Nicols Rubens

Ao: 2011

(Extensin mxima 6 pginas 1,5 interlineado, Times Roman , tamao 12)

1. Interpretaciones del movimiento zapatista (Knight y Warman).

Al comprender que la revolucin mexicana es dificil de ver como un nico movimiento homogneo que se encamina hacia un camino insoslayablemente difano (lo cual nos presentara una visin extremadamente teleollogica), empezamos a vislumbrar la complejidad del proceso. Las dificultades que ha presentado a diferentes historiadores son representativas de esa complejidad. El historiador britnico Alan Knight, una autoridad en lo que concierne a la historia de Mxico, encuentra dos posturas diferenciadas en lo que refiere al papel del zapatismo en la revolucin: la llamada vieja ortodoxia lo entiende como un ejemplo poderoso de un movimiento ms difundido, mientras que el revisionismo lo estudia como una aberracin singular.

La vieja ortodoxia, analiza Knight, es la visin conformada por la primera generacin de historiadores de la Revolucin, partcipes de la misma, u observadores, quienes dejaron una mirada que se acerca a una Revolucin popular, campesina, agraria, nacionalista; una autntica revolucin social, con fuerte contenido de clase. Siguiendo el anlisis del mismo autor, encontramos una segunda generacin de historiadores que adhiere a la interpretacin de la generacin anterior, pero reemplazando el partidismo por cierta objetividad acadmica y la concentracin del relato en los grandes hombres. Por ltimo, el anlisis se centra en una tercera generacin de historiadores que se han esforzado por revisar la historia escrita hasta el momento y se encuentran multiplicidad de visiones; han reforzado un tema o una metodologa, presentan una mirada local o regional y, en general, intentan ver la historia desde abajo, evitando la concentracin en las lites y los lderes.

La heterogeneidad de la Revolucin mexicana abre una serie de caminos interpretativos que vuelve difcil no llevar al caos un realto de la misma; la cantidad de movimientos insurgentes, organizados o no, que confluyen en ste perodo histrico conforman una particularidad que llev en muchos casos a realizar los estudios regionales -de esos que proliferaron, segn Knight, en la tercera generacin de historiadores-. Pero, como bien enfatiza Knight, una mayor cantidad de estudios no necesariamente implica un mejor anlisis, y ya que el progreso no es lneal (si es que existe tal cosa), una generacin posterior de historiadores no necesariamente alude a una generacin ms crtica o mejor dotada de elementos interpretativos para realizar un estudio histrico.Como haba adelantado al comienzo del trabajo, las dos posturas frente al zapatismo son las que terminan definiendo la postura del autor. Los revisionistas, segn Knight, se han empecinado en mostrar al zapatismo como una anormalidad, un movimiento nico y destacado que fracas inexorablemente ante una realidad -que puede ser revolucionaria o no, dependiendo el caso- que impona como referentes a la lite burguesa modernizante que tuvo al campesinado revolucionario como carne de can. La postura de Alan Knight es clara, l se posiciona ms cerca de la vieja ortodoxia que si bien comete errores que refieren a amateurismo, sostiene bases slidas en su visin bsica de revolucin agraria que gener cambios importantes en el Estado. As, Knight se posiciona entre los que aceptan los alcances del movimiento zapatista como tal, pero sostienen que no fue el nico movimiento agrario genuino de la Revolucin; no es una anomala o una aberracin singular. En Caudillos y Campesinos, el autor hace referencia a otros movimientos rurales a los que iguala, de alguna manera, con el zapatismo, en aras de sostener su posicin.

Tanto Alan Knight como Arturo Warman son representantes de esta tercera generacin de historiadores que analizan la Revolucin mexicana a la luz de la historiografa anterior. Warman, quien es tomado en cuenta en el artculo de Knight como uno de los historiadores que prob nuevas metodologas (en su caso, la historia oral) realiza un detallado artculo que pretende abrir el debate en lo que refiere al proyecto poltico de Zapata. Ya en la frase escogida para abrir el texto, Warman parece hacer nfasis en la unicidad del carcter de la revolucin zapatista (...revoluciones irn y revoluciones vendrn y yo segur con la ma..., frase atribuda al mismo Zapata), y a lo largo del texto reconoce que las propuestas del zapatismo van ms all de las compraciones inadecuadas que puedan realizarse con otros movimientos y que las propuestas del movimiento tenan una coherencia y un fin de transformacin de la sociedad que no se le atribuye generalmente. Tambin es partidario de defender una posicin de clase en el discurso zapatista.Para esta interpretacin, Warman se vale de un aparato de documentacin totalmente encomioso ya que, de por s, el material es poco y, como es sabido y siempre recordado, la documentacin de los vencedores siempre es ms completa y se encuentra ms disponible. As, con material conformado por documentaciones internas (circulares y cartas o comunicaciones personales) y propuestas del tipo panfletario que funcionaban como propaganda, Arturo Warman propone un anlisis que sostiene al zapatismo como un movimiento de clase que entenda al pueblo como el sujeto central de la revolucin. La reforma agraria, la ampliacin de los derechos sociales y la igualdad femenina, as como el municipio libre y la democracia directa como expresin mxima de la soberana popular, son los argumentos que presenta el historiador para proponer un carcter nico al movimiento zapatista, a la vez que lo inscribe en una revalorizacin de los sectores populares. Se ha infiltrado la idea, casi el dogma, de que los grupos campesinos, o ms estrictamente la clase campesina, no pueden generar un proyecto global para la transformacin de la sociedad compleja, dice Warman construyendo un discurso desde abajo que pretende encomiar al movimiento zapatista como un movimiento nico en medio de la tormenta.

Warman resalta la unicidad del caso zapatista, hacindolo sobresalir como proyecto poltico de clase; mientras que Knight, si bien se suma a la mirada desde abajo del movimiento revolucionario mexicano, entiende que el zapatista es un movimiento ms entre otros movimientos originados en el campo que tenan la intencin de recuperar las tierras que el gobierno de Daz estaba pasando a manos hacendadas y de caciques. Lo que habra que resolver es si la mirada de Warman pretende resaltar el movimiento zapatista como un elemento superador de la insurrecin agraria (aunque fracase), o si ms bien se encuentra conforme a las categoras analizadas por Knight, y en realidad el anlisis de la magnicidad del zapatismo lo reduce a una aberracin que lo vuelve presto al fracaso por una elite-revolucionaria que manej los hilos del campo. Su excesiva documentacin para el caso y su llamado a la reinterpretacin y el debate, parecen suponer que la primera opcin es la ms razonable.

2. Anlisis del captulo IV de Pueblo en Vilo (Luis Gonzlez) segn las corrientes historiogrficas reseadas por Alan Knight.Como se ha visto en lo referente a las interpretaciones de la revolucin mexicana, la tercera generacin de historiadores, como la categoriza Knight, se centr muchas veces en relatos regionales y, en muchos casos, en la implementacin de nuevas metodologas. Uno de los casos de estudio regional a los que refiere el historiador britnico es al de Luis Gonzlez en su microhistoria del pueblo de San Jos de Gracia (como se subtitula su libro, Pueblo en Vilo). Dentro de esta tercera generacin de historiadores, Knight alude a la extralimitacin de los revisionistas, que llegaban a dar vuelta cualquier interpretacin de la vieja ortodoxia casi sin criterio alguno. Este no es el caso de todos los autores, como se ha visto, y el mismo Alan Knight hace alusin a varios estudios revisionistas como valederos y tiles en sus reinterpretaciones.

El trabajo de Luis Gonzlez analiza al pueblo de San Jos de Gracia en un estudio minucioso de la vida cotidiana del mismo. El captulo que aqui se pretende analizar, revisa las actitudes del pueblo ante la revolucin, entre 1910 y 1924. Es de destacar que el trabajo cuenta con un relato ameno que hace llamados constantes al lenguaje popular, en vistas de un estudios que utiliza los archivos de la historia oral y, aunque tambin tiene fuentes secundarias, se ve el uso de documentaciones personales. El resultado que se obtiene es un relato que se acerca al pueblo, que tiene una mirada desde abajo, que no recurre a las fuentes documentales de capataces, gobernadores o entidades mayores: son valiosos los comentarios sobre los rituales y la vida cotidiana que hace el mismo pueblo. El nico ingreso que parecera ser externo al propio pueblo y con valor documental para cualquier otro tipo de estudio es la llegada al pueblo del peridico el Pas, que es el medio de comunicacin que, a la vez que trae las noticias, sirve como elemento organizador al autor para atar a su llegada el organizamiento cronolgico de los hechos.Lo que no debemos olvidar, es que todo relato tiene un viso de subjetividad que alude a una posicin especfica del autor con respecto al caso. En el estudio del pueblo de San Jos de Gracia, el historiador parece conceder al pueblo una inocencia vinculada con la tradicin que se ir rompiendo con la llegada de la revolucin. As como Guerra, criticado duramente por Knight, Luis Gonzlez parece atribuirle tambin a la revolucin, no solo ciertos cambios que presentan visos de ilustracin sino tambin un agregado de violencia y bandolerismo que parece tener como vctima al pueblo. Cuando, en 1910, se observ al cometa Halley, se tema quue la cola del monstruo chocara con la tierra; para 1913, una lluvia de cenizas oscureci el ambiente, pero los cultos se encargaro den explicarle a la gente que se trataba de un fenmeno natural y pasajero. El tradicionalismo del pueblo lo mantiene por fuera de la revolucin hasta que sta se mete adentro y causa muertes, violaciones constantes, robos, hambre y pobreza. Con la modernidad parecen entrar las casas de azar, las borracheras y el efmero deseo de vivir que termina con cualquier trifulca de bar.En las esferas ideolgicas que estn por encima de la cotidaneidad, del hambre y los constantes saqueos, parece darse una contienda entre traidicn y modernidad que, para 1920 comienza a dar paso a la victoria de la modernidad: todava quedan algunas partidas de bandoleros en la comarca, que no impiden la normalizacin de las actividades (...) se prospera en las comunicaciones y los transportes, Luis Gonzlez advierte, as, que con el progreso viene tambin la paz. Al igual que con el combate dicotmico de Guerra (al que alud en el punto anterior) pero, al parecer, con una postura ms omnivalente, Gonzlez parece no ser directamente partidario de la tradicin al aplaudir la paz que trae el progreso, pero rpidamente se esfuerza en comentar que el comercio mejor lo acaparaban los terratenientes, y que algunos aventureros intentaban buscar trabajo en los Estados Unidos de entre-guerra para volver con una docena de palabras inglesas y pocos dlares.

As, el perodo revolucionario es visto por Gonzlez como un perodo de guerra de caudillos, con una sensasin de anarqua que era reproducida en los pueblos. Como si las relaciones pueblerinas se volvieran representativas de la sociedad del momento, y las contiendas generalizadas no fuesen ms que eso. La realidad que se presta a analizar el historiador establece un margen limitado, se propone una investigacin que da frutos sobre todo en el encanto de las comunicaciones orales, pero queda restringido a las andanzas de un nico poblado, el pueblo analizado se vuelve espacio de trnsito de la revolucin. Asimismo, y como adelantaba antes, la casi total omisin de los grupos revolucionarios es lo que da la sensacin de estado anrquico que se ve instaurado por los caudillos. Es de destacar, igualmente, que en el relato se encuentra presente la hostilidad del pueblo a casi todos los movimientos con excepcin del villismo y el zapatismo. Desde la ptica de Alan Knight, esto podra analizarse como una visin de estos movimientos como los distintos y, tambin, los fracasados. Tras la tormenta, vuelve la calma a San Jos de Gracia, pero tambin vuelve el malestar de los pobres, y hubo poco trabajo y malos sueldos. El final del captulo abre el camino a lo que ser la Cristiada. Parece que la calma, para Luis Gonzlez, siempre espera al huracn. KNIGHT, A.; Interpretaciones recientes de la Revolucin mexicana, p. 31.

dem, p.24.

dem, pp. 23-25. Knight se refiere a la tercera generacin como los historiadores que trabajaron los ltimos veinte aos, esto sera desde fines de la dcada del sesenta, hasta el ao que el autor escribi el artculo: 1988.

Knight menciona entre los defensores de esta postura, y por sobre los dems autores, a Jean Meyer y a Franois-Xavier Guerra, a quien si bien le reconoce sus aciertos, lo acusa de maniquesta.

KNIGHT, A.; Caudillos y campesinos en el Mxico revolucionario, 1910-1917, p. 39.

WARMAN, A.; El proyecto poltico del zapatismo, p. 9.

GONZALEZ, L.; Pueblo en Vilo, pp. 93-94.

dem, p. 110.

dem, p. 112.

dem, p.114.

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Bibliografa

* Gonzlez, Luis: Pueblo en Vilo, Fondo de Cultura Econmica, (1ed de FCE 1984).

* Knight, Alan: Caudillos y campesinos en el Mxico revolucionario, 1910-1917. en Brading, David: Caudillos y campesinos en la Revolucin Mexicana, Mxico, F.C.E., 1995.

* Knight, Alan :Interpretaciones recientes de la Revolucin Mexicana, Morelos, 1988.

* Warman , Arturo: El proyecto poltico del zapatismo en Katz, Friederich: Revuelta, Rebelin y Revolucin .La lucha rural en Mxico dels siglo XVI al siglo XX .vol 2 Mxico, ERA, 1988.

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