REVISTA DE LA ACADEMIA COLOMBIANA

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REPUBLICA DE COLOMBIA REVISTA DE LA ACADEMIA COLOMBIANA de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales PUBLICACION DEL MINISTERIO DE EDUCACION NACIONAL SECCION EDITORIAL NOTAS DE LA DIRECCION A. PROPOSITO DEL VOLllME'S^ lY DE ESTA REVISTA Con el presente iiínnero, déoiwotcreero de In serie que se inició ii fines de 1036, entra esta ptiblicación a sil tomo IV con el prcsfitjio con que ha venido desarrollándose hasta ahora merced al concurso ge neroso del Ministerio de Educación. Nacional y ven ciendo numerosos obstáculos provenientes, ¡n'vici- palmentc, de la. inercia del medio ambiente, indife rente y aun hostil en muchas cireunstaiicias, para ésta, clase de actividades. Ciertamente, j)odeinos considerar como un inila- qro la supervivencia hasta la fecha de la publica ción de la Academia Colombiana de Ciencias Exac tas, Físicas y Naturales; pues si se tratara de una revista política o literaria que se conformara al es píritu del país, ello no siynificarío sino el natural resultado de un esfuerzo más o menos constante; pero como se trata de una publicación estriota/ncn- te científica., que no sirve a intereses de partido ni encaja con el ambiente ligero y superficial de nues tro medio, tal supervivencia significa que algo pro videncial guia nuestros pasos en esta empresa. Por ese motivo somos optimistas, relativamente hablando, y entramos en esta nueva etapa con con fianza y animoso aliento; pues si el é.rito anterior es prenda de acierto, tal vez en el futuro logremos con el mismo esfuerzo un resultado jyositivo que no desdiga de los tres años que ya llevamos de lucha y contrariedades. Y al pensar en lo ya realizado, considerando cuán to podremos realizar aún si la vida de esta Revista se sostiene, un entusiasmo jiuevo nos invade, pues la sola idea de diez tornos de labores, siquiera como los tres anteriores, basta para hacernos Imaginar en los tiempos venturos una posible grande obra de cul tura y civilización para nuestra cara Patria. Y esta obra podría llegar a ser permanente, scjjíi- rándola de esfuerzos de carácter personal, para in crustarla, por decirlo así, en el idearumi no sólo de nuestra Academia, sino del propio Ministerio de Educación Nacional. Entonces, en esa fecha feliz, si acaso alcanzáramos a ella, podríamos decir que no se aró en el mar ni se edificó ch el viento. « CONFERENCIAS DE EXTENSION CULTURAL No confenta. nue,stra Academia con ¡a obra de di fusión que ha emprendido esta Revista, hubo de pen sar que un cielo de conferencias amenas c ilustra tivas diciadas con el intento de ir poco a poco edu cando u nuestro público en un ambiente más o me nos científico, habría de convenir a los jjropósitos que abriga el Ministerio de Educación. Con esta idea se contempló en su seno, en meses anteriores, la po sibilidad de una serie de exposiciones de carácter científico pero dictadas en forma didáctica y con fines de divulgación popular, jtara que tuvieran lu gar en el Foyer del Teatro de Colón. .A.sí se discutió y aprobó un programa que se co municó a dicho Ministerío, y que tuvo cumplida, rea lización. Este programa fue desarrollado por los aca démicos señores Dr. Darío Rozo M., Dr. Antonio María Barriga Villalha, Dr. Enrique Pérez Arbeláez, Dr. Calixto Torres Umañu, Dr. Daniel Ortega Ri- caurte, Dr. Armando Dugand y Profesor Dr. José Cuatrccasas. En tres conferencias sucesivas el académico Darío Rozo M. disertó sobre la obra realizada por el Ins tituto Geográfico Militar y Catastral en el levanta miento de la carta del país tncdianfe el empico do ios últhnos procedimientos acreofotogra?nétricos; y para la explicación de ellos dividió su exposición en tres partes: Fotogrametría, Geodesia y Cartografía y Astronomía de campo. El Profesor, académico Ba rriga Villnlba, expuso en una brillante conferencia sus últimos trabajos referentes a la medida de la velocidad de ¡a sangre en el sistema arterial de los mamíferos, coa el título: la física del corazón. El doctor Calixto Torres Umaña, miembro muy distin guido de la Academia, hizo una exposición muy cotn- pletn y documentada sobre el clima de los altipla nos andinos, como la Sabana de Bogotéi, en relación con la salud de sus habitantes. El académico Totres Umaña demostró de modo original que las condicio nes climatéricas, en general, de estas alturas son nwy favorables al desarrollo de la vida humana. Jms conferencias de los dos primeros expositoresJú ilustradas con proyecciones y ointas oifi^>tatográ- V 1— aoatf^L

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Page 1: REVISTA DE LA ACADEMIA COLOMBIANA

REPUBLICA DE COLOMBIA

REVISTA DE LA

ACADEMIA COLOMBIANAde Ciencias Exactas, Físicas y Naturales

PUBLICACION DEL MINISTERIO DE EDUCACION NACIONAL

SECCION EDITORIAL

NOTAS DE LA DIRECCIONA. PROPOSITO DEL VOLllME'S^ lY DE ESTA

REVISTA

Con el presente iiínnero, déoiwotcreero de In serieque se inició ii fines de 1036, entra esta ptiblicacióna sil tomo IV con el prcsfitjio con que ha venidodesarrollándose hasta ahora merced al concurso generoso del Ministerio de Educación. Nacional y venciendo numerosos obstáculos provenientes, ¡n'vici-palmentc, de la. inercia del medio ambiente, indiferente y aun hostil en muchas cireunstaiicias, paraésta, clase de actividades.

Ciertamente, j)odeinos considerar como un inila-qro la supervivencia hasta la fecha de la publicación de la Academia Colombiana de Ciencias Exac

tas, Físicas y Naturales; pues si se tratara de unarevista política o literaria que se conformara al espíritu del país, ello no siynificarío sino el naturalresultado de un esfuerzo más o menos constante;pero como se trata de una publicación estriota/ncn-te científica., que no sirve a intereses de partido niencaja con el ambiente ligero y superficial de nuestro medio, tal supervivencia significa que algo providencial guia nuestros pasos en esta empresa.

Por ese motivo somos optimistas, relativamentehablando, y entramos en esta nueva etapa con confianza y animoso aliento; pues si el é.rito anteriores prenda de acierto, tal vez en el futuro logremoscon el mismo esfuerzo un resultado jyositivo que nodesdiga de los tres años que ya llevamos de luchay contrariedades.

Y al pensar en lo ya realizado, considerando cuánto podremos realizar aún si la vida de esta Revistase sostiene, un entusiasmo jiuevo nos invade, puesla sola idea de diez tornos de labores, siquiera comolos tres anteriores, basta para hacernos Imaginar enlos tiempos venturos una posible grande obra de cultura y civilización para nuestra cara Patria.

Y esta obra podría llegar a ser permanente, scjjíi-rándola de esfuerzos de carácter personal, para incrustarla, por decirlo así, en el idearumi no sólo denuestra Academia, sino del propio Ministerio deEducación Nacional. Entonces, en esa fecha feliz, siacaso alcanzáramos a ella, podríamos decir que nose aró en el mar ni se edificó ch el viento.

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CONFERENCIAS DE EXTENSION CULTURAL

No confenta. nue,stra Academia con ¡a obra de di

fusión que ha emprendido esta Revista, hubo de pensar que un cielo de conferencias amenas c ilustrativas diciadas con el intento de ir poco a poco educando u nuestro público en un ambiente más o menos científico, habría de convenir a los jjropósitosque abriga el Ministerio de Educación. Con esta idease contempló en su seno, en meses anteriores, la posibilidad de una serie de exposiciones de caráctercientífico pero dictadas en forma didáctica y confines de divulgación popular, jtara que tuvieran lugar en el Foyer del Teatro de Colón.

.A.sí se discutió y aprobó un programa que se comunicó a dicho Ministerío, y que tuvo cumplida, realización. Este programa fue desarrollado por los académicos señores Dr. Darío Rozo M., Dr. AntonioMaría Barriga Villalha, Dr. Enrique Pérez Arbeláez,Dr. Calixto Torres Umañu, Dr. Daniel Ortega Ri-caurte, Dr. Armando Dugand y Profesor Dr. JoséCuatrccasas.

En tres conferencias sucesivas el académico DaríoRozo M. disertó sobre la obra realizada por el Instituto Geográfico Militar y Catastral en el levantamiento de la carta del país tncdianfe el empico doios últhnos procedimientos acreofotogra?nétricos; ypara la explicación de ellos dividió su exposición entres partes: Fotogrametría, Geodesia y Cartografíay Astronomía de campo. El Profesor, académico Barriga Villnlba, expuso en una brillante conferenciasus últimos trabajos referentes a la medida de lavelocidad de ¡a sangre en el sistema arterial de los

mamíferos, coa el título: la física del corazón. Eldoctor Calixto Torres Umaña, miembro muy distinguido de la Academia, hizo una exposición muy cotn-pletn y documentada sobre el clima de los altiplanos andinos, como la Sabana de Bogotéi, en relacióncon la salud de sus habitantes. El académico TotresUmaña demostró de modo original que las condiciones climatéricas, en general, de estas alturas sonnwy favorables al desarrollo de la vida humana. Jmsconferencias de los dos primeros expositoresJúilustradas con proyecciones y ointas oifi^>tatográ- V

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Para iluatrar al público sobre la importancia deciertas cuestiones relacionadas con la Agriculturaloa profesores Péres Arbeláes y Armando Duganddisertaron sobre el problema industrial de la pitaen Colombia y el campo y los cultivos, el primero, ysobre las relaciones biológicas entre, las plantas ylos animales, el segundo. Esta última e.Tposición,por el método y la claridad con que fue dictada,puede considerarse como un modelo en su género.Las tres conferencias a que nos referimos se ihis-traron con proyecciones.

7 pora cerrar el ciclo de estas enseñanzas en forma admirable, el Dr. Daniel Ortega Ricaurte, Secretario de la Academia, dictó dos conferencias: unareferente a la labor realizada por la Oficina de Longitudes, de la cual hizo un muy justo elogio, y otrasobre la región amazónica, que él conoce perfectamente, como lo dcynostró en su afamado libro: "LaHoya del Amazona.s". La primera de estas conferencias se ilustró con proyecciones, la segunda con unainteresantisima película.

También conviene citar la cientiflca deposicióndel académico, Sr. Cuatrecasas, que versó sobreGeobotánica y que se acompañó con bellas vistas fotográficas de varias regiones del pais.

Como algunos de los señores académicos a quienesse había encomendado la taren de colaborar en esteciclo de conferencias culturales, no hubieran podidohacerlo por causas diversas que no es del caso explicar aquí, la Presidencia de la Academia se vio obligada, para no interrumpir la serie que se había convenido de antemano con el Ministerio de Educación,a reemplazar a los señores académicos ausentes, dictando lecciones breves sin importancia, y con carácter tan solo de divulgación.

Como es natural, esas sencillas charlas, desprovistas de todo aparato científico, merecieron crudascríticas de parte de algunos de ellos, críticas quesomos los primeros en compartir tratando de excusar la intervención indicada por la razón principalde que las intcrriipciones que se hubieran presentado2)or falta de expositores, habrían jmoducido desoon-cierto en el 2iúblico que concurrió a las conferenciasde que nos ocupamos.

Anotado ese pequeño tropiezo podemos concluirque a pesar de ello el ciclo cultural organizado yde.sam-olladn por la Academia fue un éxito positivosegún se desprende del contenido de la siguiente co-m.U7iicación:

•'Miuistevio ele Edneación Nacioual—Sección de Extensión Cultnial y Bellas Artes—N? 20264^Bo-gotó, 2 de diciembre de 19áO.

Señor Piesidente de la Academia Colombiana deCiencias.

"Con motivo de la clausura del ciclo de conferencias organizado por la Academia Colombiana deCiencias Exactas, Físico-Químicas y Naturales, quie-]'0 manifestar a TJd., una vez más, el vivo reconocimiento de la Dirección de Extensión Cultural y Bellas Artes por el fervoroso empeño y la tesoneraintiíügencia con que Ud. ha contribuido a la orga

nización y buen éxito de las conferencias científicas que en el ciirao do este año dictaron, sobre distintos e interesantes tomas científicos, miembros

destacados de la entidad que en buena hora ha sidopuesta bajo su experta rectoría.

"La numerosa y calificada asistencia que a estosactos de alta cultura concurrió, os el indico másexacto de la acogida que ellos han tenido. Conviene,pues, aprovecluir esta reviviscencia del fervor popular por la cultura para continuar la emi)resa en queUd. tan generosamente se ha comprometido. En losanales de iniestrn incipiente vida científica perdurará ejemplarmente el movimiento que tanto Ud.como los miembros de la Academia de Ciencias, han

encauzado en favor de la difusión cultural.

"Estoy seguro de qne en el año venidero su laborse verá compensada con creces, toda vez que el esfuerzo inicial está lieelio y las perspectivas para unmayor desarrollo de las distintas actividades científicas, a la par que iialagadoras, se muestran másviables. En consecuencia, sería conveniente que deuna vez se fuera idaneando un nuevo curso de extensión cultural para el año inóximo.

"Con sentimientos de consideración y aprecio, mees grato suscribirme de Ud. servidor y amigo.

Darío Achury Valenzuela—Director de ExtensiónCultural y Bellas Artes".

Las conferencias a que x'enimos refiriéndonos tuvieron lugar en el siguiente orden:duUo 31—Dr. Darío Rozo M. Trabajos del Instituto

Geográfico Militar y Catastral—Aereofotograme-tría.

Agosto Ui—Dr. Daiúo Rozo M. Id. id.—Geodesia yTopogi-afía.

Agosto 21—Dr. Darío Rozo M. Id. id.—Astroyiomiade campo.

Agosto 2S—Dr. Enrique Pérez Arbeláez—Soluciónindustrial del jiroblema de la pita en Colombia.

Septiembre If—Dr. Calixto Torres Umaña—Condiciones (le la vida humana en las alturas.

Septiembre 11—Dr. Jorge Atvarez Lleras—La Astronomía popular y la Cultura.

Septiembre 18—Dr. Antonio María Ba>riga Villal-ba—La física del corazón.

Septiembre 25—Profesor José Cuatrecasas—Los estudios geohotáiiicos en Colombia-

Octubre 2—Dr. Jorge Alvarez Lleras—Un viaje a laluna.

Octubre 9—Dr. Armando Dugand ü.—Relacionesentre plantas y animales.

Octubre 16—Dr. Dnxiiel Ortega Ricaurte—La obracientifica realizada por la Oficina de Longitudes.

Octítbi'e 23—Dr. Jorge Alvarez Lleras—La físicadel sol.

Octubre 30—Dr. Enrique Pérez Arbeláez—Suelo, árboles y nuevos cultivos en Colombia.

Noviembre 6—Dr. Jorge Alvarez Lleras—La radia-cióti solar e.7i la Sabana de Bogotá.

Noviembre 13—Dr. Daxiiel Ortega Ricaurte—Maravillas del Amazonas.

Novicmb7-e 20—Dr. Jorge Alvarez Lleras—La vida

071 los platictas.Co/íio se ve por ¡a a/itcrlor 7'claciÓ7i, el csfuei'zo

realizado por la Acade/nia en su ca¡npa7la de divul-gnciÓ7i cientifica, cu 16 co7ifcrc77c¡as oídas por se-¡ecfíaima y niDiierosa concu/Teneia, es digno de tenerse en cuenta, fO/»o lo insinúa c¡ se/~ior D¡)-ectorde E.vte.nsi6n CuUu>-a¡ y Bellas A/'tes, y merece continuar el año txenidero si el .Ministerio de Educación

Nacional persiste c« la ¡dea de p/-cstar ofrn vez sugenc7-080 y decidido apoyo.

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EL ATENEO N.ACIONAL DE ALTOS ESTUDIOS

En algií/t mhi/ero anterior de esta Revista hubimos de ocuparnos brevemente de la feliz iiiiciativadel MÍ7iisterio de Educación N(icio7ial que Í77iplicala C7-eación de este Instituto, y ahora que7-emos rc-p7-oducir el Deci-cto que lo 07-ga7iizó, ¡a Resoluciónj)or ¡ncdio de la cual se nombró al personal qne cula actualidad, lo integra y algunos conceptos sobresus fines y su iinpo/'tancia —del Director de la Sección de Exteusió/i- Culiimil y Bellas Artes de eseDespacho— porgne es nue.stro deseo que los lecto>'e8de esta j)ublicaciÓ7i vaya7i poco a poco, emtei'ándosede 1171 esfne/'zo tan plausible y del cual tie7ic tónfoque eape7-ar la Ciencia- nacional.

Talos ))iezas dice7i así:Decreto por el cual se crea el Ateneo Nacionalde Altos Estudios.El Pz-esidentc de la República, en ejercicio de sus

atribuciones legales, y co7isiderando: Qne Colombia tiene una gloriosa tradición científica, representada, entre otros muchos títulos, por las iuvestiga-cioues do la Exi>edicióh Botánica qne dirigió donJosé Celestino Jlutis; los estudios y descubrimientos de Francisco José de Caldas; la Comisión co-rográíica que encabezaron el coronel Agustín Codaz-zi y don Jlamiel Anclzar; las especulaciones del insigne matemático doctor Julio Garavito, y la imponderable obra filológica ele don Rufino José Cuer-yQj 2^ Que, en desarrollo del precepto constitucional que impone al Estado procurar el cumplimientode los fines sociales de la cultura, os deber del Gobierno continuar esa tradición y fomentar el desarrollo de la cultura superior desinteresada, mediantela formación de núcleos de altos estudios y de investigación cientifica;—3^ Que, si las academias,universidades, etc. realizan en este sentido activida

des importantes que el jmís aijrecin debidamente, elGobierno debe, en cuanto de él dependa, coordinare impulsar las labores culturales de interés supremopaia el porvenir de la Patria;—4? Que. con este fin,es necesai'ia la creación de una institución qne nose dedique a la preparación profesional propiamentedicha, ni a actividades prácticas inmediatas, sinoúnicamente al cultivo de la ciencia pma, a la investigación de la verdad por si misma y al estudio delos grandes temas de la naturaleza y del pensamiento humano; y 5'' Que, al propio tiempo, es indispensable la existencia de una institución que provoquey facilite entre los que tengan ya una formación

científica, la continuación de esos altos estudios yel perfeccionamiento de los conocimientos adquiridos por ellos, dec/-eta:

Artículo 1'' Créase el Ateneo Nacio7uil de AltosE.sfudios, que tendrá el carácter de institución oficial dependiente del Ministerio de Educación Nacional, pero que será autónomo en su labor científica y régimen interior.—Artículo 2? Son fines e-seii-ciales del Ateneo mantener la tradición científicacolombiana y continuar las investigaciones de laExpedición Botánica, los estudios de la ComisiónCorográfica, las especulaciones matemáticas, los trabajos filológicos, y dedicarse al estudio de la etnografía, de la antropología y de la arqueología indígenas.—Artículo 3"^ Son también fines del Ateneo

Nacional de Altos Estudios el fomento de la altacultura en el jiaís y la enseñanza superior no profesional.—Articulo 4*? Para la realización de estosfines, podrá el Ateneo Nacional establecer laboratorios de investigación y estudio; publicar libros y tTa-bajos; emprender exploraciones en el país y en elextranjero; relacionarse con otros centros de análoga finalidad, y, en general, desenvolver su elevadaactividad en todos los ramos de la cultura.—Artículo5^ También podrá el Ateneo organizar cursos ylecciones pava aquellos individuos que, teniendo yauna formación científica, deseen perfeccionar susconocimientos y dedicarse a altas investigacioue.s nopi'ofesiouales, como también jm-a los estudiantes dela Universidad y otras entidades docentes que quieran asistir a ellos.—Artículo 6^ El Ateneo Nacional

de Altos Estudios organizará sus trabajos, de acuerdo con la índole de los mismos, en diversas Secciones, como Matemáticas, Física, Química, Ciencias naturales, Filología, Etuografia, Antropología, Arqueología, etc., según se lo i)ei-mitau sus recursos económicos y a medida que lo impongan las necesidades dela investigación.—Artículo 7*? Formarán parte delAteneo: a) los miembros directivos, a los que cori-es-penderá la organización de los trabajos; b) los colaboradores o personas llamadas por el Ateneo acooperar con sus estudios y enseñanzas en las labores del mismo; c) los estudiantes o alumnos de lasuniversidades y demás entidades culturales quequieran concurrir a los laboratorios y clases.—Artículo 8'' El Ministerio de Educación Nacional designará los primei-os miembros dhectivos del Ateneo entre las personas de reconocida competenciaen las ciencias y Jas letras. En lo sucesivo, en casode presentar.se una vacante o la admisión de nue

vos miembros, éstos serán nombrados por los miembros directivos. Los colaboradores serán nombradospor los miembros directivos, tambiéu en votaciónordinaria, a propuesta de los de la materia o esiJe-cíalidad a que el colaborador se dedique. Artículo99 El Ateneo Nacional de Altos Estudios tendrá susede oficial en la Biblioteca Nacional de Bogotá,donde establecerá sn Secretaría y celebrará sus sesiones periódicas. No obstante, podrá instalar laboratorios y centros de trabajo eii otros locales adecuados, ya pertenecientes al mismo Ateneo, ya a

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otras instituciones que con él colaboren.—Artículo109 Será Secretaiio permiuieiite del Ateneo el Director de la Biblioteca Nacional, quien llevará ellibro de actas de las sesiones de la entidad, los demás que sean necesarios para el desarrollo de lostrabajos y la correspondencia necesaria para las relaciones de la misma con sus miembros y centrosculturales.—Artículo 119 El Ateneo se sostendrá con

las asignaciones que le señale el Ministerio de Edil-cación Nacional y se le destinen en los presupuestosanuales; con las donaciones o legados que podrárecibir, con el producto de sus publicaciones, matrículas, etc. Dentro de los límites y normas que elpresupuesto naeiounl y el Ministerio de Educaeidnle fijen, el Ateneo distribuirá .sus fondos, mediantela obligación de presentar anualmente al Ministerio,según las normas que éste determine, cuenta detallada de la inversión de los mismos.—Artículo 129

Una vez constituido el Ateneo Nacional de Altos Es-

tiidios, procederá a foimar sus estatutos y el reglamento para su vida y légimen interiores, los que de-bei-áu ser sometidos a la ai)robación del Ministrode Educación Nacional—Artículo 139 Xan prontocomo sean aprobados por el Ministro de EducaciónNacional los estatutos del Ateneo, éste liará las diligencias necesarias para obtener personería jurídica, de acuerdo con las normas legales al respecto.

Resolución por la cual se determinan las Secciones y personal del Ateneo de Altos Estudios.Matemáticas: Profesor Jorge Alvai'ez Lleras, Pro

fesor Darío Rozo M., Profesor Julio Carrizosa Valen-znela, Profesor Belisario Ruiz Wilckes, ProfesorJuan de Dios Higuita, Profesor Jorge Rodríguez,Profesor Luis de Greíff Bravo.—Ciencias Naturales:Profesor Em-ique Pérez Arbeláez, Profesor José Cua-trecasas, Profesor Luis María Miirillo, Profesor Cé-•sar Uribe Piedrahita, Profesor Emilio Robledo, Profesor Hermano Apolinar María.—Física y Qnimica:Profesor Antonio M. Barriga Villalba, ProfesorJorge Ancízar Sordo, Profesor Eduardo Lleras Co-dazzi, Profesor Autonio García Banú.s.—Gccgrufíue Historia: Profesor .José Miguel Rosales, ProfesorGerbard Masui', Profesor José María Otts, ProfesorJustus Wolfram Shotellius, Profesor Julio GarzónNieto.—Filología y Lingüística: Monseñor José Vicente Castro Silva, Profesor José Manuel Casas Manrique, Padre Félix Eesti-epo, S. J., Profesor UrbanoGonzález de la Calle, I'rofesor José Jlaría RestrepoMillán.—Sociología y Etnología: Proi'e-sor Luis López de Mesa, Profesor Gerbardt Neumann.—Literatura: Dr. Guillermo Valeucla, Sr. lialdomero SaniaCano, Profesor Antonio Gómez Ke.strepo, ProfesorRafael Maya, Sr. León de Greíff.

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CONCEPTOS DEL DIRECTOR DE LA SECCIONDE EXTENSION CULTURAL Y BELLAS ARTES

SOBRE EL ATENEO DE ALTOS ESTUDIOS

La generación neogranadina de la Expedición Botánica en la crónica precaria de nuestra cultora

constituyó un a modo de Estado Mayor de la cultura y el saber colombianos. A pesar de la heterogeneidad de las tendencias que pi-esidian su constitución, fue ella un coitjunio armónico y la cristalización maravillosa de un movimiento inteleclua] cíe

cuya acción justa y ponderada liabria de resultarel ijrincipio de una ciencia americana. La Filología,la Botánica, la Sinología, la Historia, las Mateináli-cas, la Física y la Etnografía alcanzaron a la sazónun alto nivel que luégo ba sido imposible suiterar.Los estudios e investigaciones de Caldas, Zea, Joaquín Camacho, Mariano del Campo Larraoiido, JoséManuel Campos y Cote, .Jorge Tadeo Lozano y Eloyde Valenzuela son para las generaciones preeontesini legado iuvaluable, un ejemplo de elevada y stue-iia cultura que c?s preciso revivir y continuar. Magna emj)¡'esa ésta que pone dudas y temores en losánimos mejo3- templados; pero cpie es preciso acometer ahora mismo con la expectativa de que deléxito o infortunio de ella depende el avigoraniieiitoo el desmedro de nuestra propia nacionalidad.

Suma injusticia es alimentar la creencia de quelas generaciones contemporáneas del país son inferiores, en mucho, a la delicada misión de culturaque les corresponde llevai- a feliz término y remate.I'ero más que Injusto, el juicio es jirematiiro, puestoque a las actuales promociones no se lea ha brindado la oportunidad de actuar eficazmente y en conjunto en lina empresa de cultura nacional, y a faltade estímulos de orden material y espiritual su intervención en e.sta noble cruzada lia sido iiidividnuly transitoria. De aquí también que en el ámbito denue.stra historia no haya resonado la voz de la Ciencia tan frecuentemente como el hombre culto lo desea en su intimidad. Entretanto hemos tenido que

resignarnos a escuchar solaniente el estruendo de laarenga política, confundido con el murmullo de lascontroversias bizantinas. Entre nosotros, como enmuchas otras latitudes del espíritu contemporáneo,han primado el político sobi-e el hombre de ciencia,el frenesí sobre la serenidad, el demagogo sobre el"clerc". No implica e-sto una oposición fundamentalentre unas y otras actividades porque en nuestropasado histórico hay precedentes ilustres de estadualidad: Zea fue tríbulo hiperbólico y sosegadonaturalista; Jorge Tadeo Lozano fue, a la jiav quehombre de acción, zoólogo preclaro; Nariño, Torreay Caldas aunaron a su condición de científicos sucarácter de polemistas, oradores y guerreros. Perosí es preciso volver lioy por los fueros de la inteligencia para darle a ésta la jieraltada posición a quetiene derecho, para que sus frutos sean medrados ycopiosos y, finalmente, para que ella presida nuevamente nuestros destinos de nación que apenas seecha a andar por los anchos caminos de la culturaunivei'sa!.

Aute todo se requiere la creación de un clima propicio a las nobilísimas faenas de la inteligencia. ElMinisterio de la Cultura j>oi' haberlo comiirendidoasí, ha dado el primer paso en este sentido, creandoel Ateneo de Altos Estudios, cnya misión fiinda-

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ESCUDO DEL OBSERVATORIO ASTRONOMICO NACIONAL

Santa Fe de Bogotá

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Síenuo Virrey de Nvfa'.\Cram.-\daEe EV" S'̂ ÍT P^:DHO ^MENÜÍNVETA SE PVNDO E.STE OD-SERVATCUÍO AsTROMl^-^j

Mico ALO,4" Só'DE UATÍT\ D NORTE \ 4.';' DE I.ONOITVD^^'OESTh: OK.I, tlD-^E.RVVrORlÓ DIO rERNWro

Emblema adoptado por la Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físico-Quimicas y Naturales para los títulos o diplomas de sus miembros, como reconocimiento de los vínculos que la unen al Observatorio Astronómico Nacional de Bogotá, fundado por Mutis en el lugardonde vivió la Expedición Botánica, y como símbolo de su acción cultural por todo el país de que fue centro y foco este Observatorio en

épocas pretéritas.

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mental es la ele inauteiiev y oontímiav la tvadicióncientífica colombiana. Esta mieva institución es una

l)rolongación, a tvavés del tiempo, de aquella famosaSociedad de Medicina y Ciencias Natau'ales, cuyaobra colmó plenamente el ámbito de un siglo; de laSociedad Politécnica de Colombia, fundada en 1S75.

y de la no menos afamada Sociedad de ívatnvalis-tas Colombianó.'í, patvocinada por el espíritu vigi-

laute de Ezequiel llilcoecliea.El Ateneo de Altos Estudios lia iniciado ya sus

labores. A él se le ha eucomendado la continuación

de la obra magistral de Don Rufino José Cuervo:el "Diccionor'io dr Construcción y Rénimen", delcuál sólo alcanzó a publicar los primeros volííraeueshasta llegar a la "D", dejando preparados cientosde miles de papeletas que él no alcanzó a corregir,{mes el insigne luimanista creyó inútil sn trabajoheroico por habeise fnndado exclusivamente en lostextos generalmente defectuosos de la BibliotecaEivadeneyra. A nadie escapa que la continuaciónde esta obra entraña a la par que una máxima responsabilidad, nn tesonero esfuerzo que, como el señor Snárez lo dijera "pondría dudas y miedo en elmismo Tostado". Proseguir la obra monumental deCuervo significa, además de la revisión total de lasautoridades citadas jior su autor, la tarea de actualizarla, de acuerdo con los actuales priucipios de lalingüística. De aquí que se haya confiado esta magna y difícil empresa, a liombres de tánta autoridady competeucia en estas materias, como lo son el Padre Restrepo, S. J., y el Profesor Urbano Gonzálezde la Calle, profesoi' de sánscrito y humanidades enla Universidad Central de Madrid. Además, cuatroestudiantes de lingüística los secundarán en la preparación y revisión de materiales, para lo cual seles ha asignado una remuneración que si bien noeoi'reaponde a la magnitud del trabajo que se lesha encomendado, por lo menos constituye nna demostración por parte del E.stado, de estimular, a lamedida de los limitados recursos fiscales de que ahora dispone, el desarrollo de las actividades científicas en el país.

Es i>reciso consignar, de paso, el hecho de que elAteneo de Altos Estudios es una entidad abierta atodos aquellos que aspiren a colaborar en la obraque se propone realizar. El erudito, el investigador,el universitario, en esta institución de alta culturaencontrarán uu apoyo y un estímulo pei-manentespara la realización de sus propósitos, dentro delradio de la actividad científica que aquélla se propone llevar a término,

Dentro de los propósitos del Ateneo de Altos Es

tudios se cuenta la continuación —dentro de lo humanamente posible— de los trabajos botánicos deMutis y la publicación de la obra inédita de don

.Tullo Garavito. En e.stas labores cooperarán, asimismo, estudiantes especializados en el estudio de laflora colombiana y universitarios que, bajo la rectoría del Observatorio Astronómico, adelanten estudios de altas ^Matemáticas y Astronomía. Para ellogro de e.stos fines, el Ministerio de Educación adelanta contratos os{3eciales. Es también misión esencial del Ateneo de Altos Estudios la de proseguirla obra de aquellos famosos expertos en lenguas indígenas, conocidos de antaño con el bizarro nombrede "lenguaraces". Para el logro cumplido de estatareji será indispensable revisar y reeditar la "Gr<i-ináficu General del Nucco Reino, llamado Mosca" deFray Beimardo de Lugo, a la par que los trabajosdo los misioneros Varaix y Dadey y las apuntaciones del lenguaje chibcba escritas por el sacerdoteGonzalo Bei-miidez, primer catedrático de aquellalengua en Santa F6 de Bogotá.

INSTITUTO DE CIENCIAS NATURALES

Por Acncrdo reciente del Consejo Directivo de laUniversidad Nacional el antes llamado "Instituto

Botánico" ha cambiado su nombre por el de "Instituto de Ciencias Naturales", introduciendo mievasactividades en su organizacióji, que se extienden avarias ramas de Ja Zoología.

Con esta permutación de nombres y ampliaciónde su radio de trabajos, el Instituto de Ciencias Naturales habrá, sin duda, de alcanzar numerosos eimj)ortantes triunfo.s, ya que según se desprende delo aprobado por el Consejo Directivo de la Universidad, que dictó nn nuevo reglamento para tal institución, habránse de destinar nuevos recursos conese objeto.

Además de la oriciitiiciún que ¡a Universidad Nacional quiere darle a las labores de investigaciónen el campo de las Ciencias naturales, el nuevo personal director del Instituto está animado de idén-

ticos propósitos y piensa trabajar con tesón y actividad crecientes para que sus conquistas científicassigan la tradición que hasta ahora ha seguido coné.rifo innegable el extinto Instituto Botánico.

Entre este personal se distingue el Jefe de eseEstablecimiento, Br. Dr. Armando Dugand G., académico de niimcro de esta Academia de Ciencias, ypersona ?íieriítsí»in por muchos aspectos.

Gomo conocemos de cerca las capacidades técnicasy organizadoras del Dr. Dugand, su exquisito donde gentes, su no común consagración al trabajo, yJa obra- científica que ya ha realizado, no vacilamosen pensar que bajo su dh'ccción experta el nuevoInstituto conocerá días de gloria y de íntima satisfacción.

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