Reseña de La Loca de La Casa, De Rosa Montero

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Breve reseña del híbrido narrativo-ensayístico de Rosa Montero, intitulado la loca de la casa. Un libro divertido que indaga en los vaivenes de la imaginación del narrador, desde ejemplos y anécdotas muy amenas.

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Un credo, un relato y una orate(Razones para seguir viviendo con La loca de la casa)Confusin de gnerosHoy la literatura est viviendo un tiempo especialmente mestizo en el que predomina la confusin de gneros: este mismo libro que estoy escribiendo es un ejemplo de ello.Rosa MonteroLasobreabundanciadeescritostericosdelaliteraturahaoriginadolanecesidaddevisitar elfenmeno literario desde caminos diversos. Estas calles nuevas, a veces trochas, a veces bosques,como dira Umberto Eco, forman una geografa nueva, a cuyo diseo han contribuido ctavio !a",Mario #argas Llosa, $orges %aunque menos did&ctico y m&s descaradamente irreverente', (arcaM&rque", $olao), enLatinoam*rica+ comoyaanteshabanhecho ,"orn,,ntonioMachado,Unamuno, !edo -alinas, Mara .ambrano), en Es/aa0.Estafamilia, delacual a/enas/ro/ongoalgunosmiembros, endetrimentodeotrosnomenosim/ortantes, ha encontrado en La loca de la casa, de Rosa Montero, a una hi1a e1em/lar. El /ro/sito de La loca de la casa est& claro2 Cuando empec a idear este libro, pensaba que iba a ser una especia de ensayosobreliteratura, sobrelanarrativa, sobreel ofciodel novelista. Proyectabaredactar, en fn, una ms de esas numerosas obras tautolgicas que consistenen escribir sobre la escritura. Luego, como los libros tienen cada uno su propiavida, sus necesidades y caprichos, la cosa se ue convirtiendo en algo distinto,msbiensea!adiotrotemaal proyectooriginal" nosloibaatratar deliteratura, sino tambin de la imaginacin. #$%&', los temas anteriores se agregan dos m&s2 el libro hablara de la locura y la /asin amorosa. !ero lo esencial se mantiene2 s es un libro sobre la narrativa, de ideas desarrolladas con mucha gracia, 0 3tesequehablodeescritoresen/landeconstructores delanuevageografadelateoraliteraria con recursos a1enos a los de la academia menos conservadora de la cual son el me1ore1em/lo las universidades his/anohablantes %y anglo/arlantes', ra"n /or la que omito a (arca$erro,,mado ,lonsoo4ernando L&"aro 5arreter,consideradostericosinsoslayablesenlafilologa his/ana contem/or&nea. (ordana 5rn6covic, en Imagined ialogues! aclara que buena/artedelainvestigacinacad*micaoccidental est&regida/or esesistemadepapersylaformalidad metodolgica de las universidades norteamericanas.40con encanto y, a ratos, con esa coquetera que la autora e7ige /ara que la escritura de mu1eres sea decalidad, /or encima de cualquier se7o o /lanteamiento se7ista. !ara coronar sus ideas, la autora se vale de un e1ercicio narrativo. 8e las tres versiones de la historia del /ersona1e Rosa Montero con M, historia que alcan"a maestra en su tercera reescritura.9an interesante es este relato, que la obra ha ganado un /remio %de los muchos que ha ganado' de novela. El asunto sor/rende2 se ha /remiado al e1em/lo, al te7to subordinado. %:-ubordinado; aqu se refiere al /lan ensaystico del te7to, a la organi"acin del con1unto, no a la calidad'.Un libro inicitico y valienteEste libro, amable y suavemente erudito, e7/one sus ideas con mucho de lo que los ling. Es decir, su e7/resin es sencilla desde la /ers/ectiva did&ctica, /ara que cualquier ser humano le siga el /aso. ,dem&s, sus /&ginas son muy c&lidas gracias a que el yo de la obra %en una esfor"ada tensin lucha /or igualarse y des/egarse, a la ve", de la Rosa Montero de carne y hueso' recurre al t/ico de la modestia, mostrando sus tor/e"as amorosas, su mala memoria y su /resunta inferioridad con res/ecto a su /resunta hermana. 5on todas esas qui1otadas, uno termina sinti*ndola como un ser humano alcan"able. Esto tiene un gran valor /ara motivar a las almas esquivas del arte, /ara hacerles reconsiderar lo que significa la literatura, lo que ella es y lo que tambi*n /uede llegar a ser.La familiaridad hacia la autora tambi*n se manifiesta en su firme"a al colocar sin el menor rubor, sin deudas con c&nones ae1os, como cuando afirma de /asada, que, a /esar de lo que dice ?uan ?os* Mill&s, el "lises de ?oyce =es una novela que solo me interesa, y no demasiado, como artefactomodernista>%@@A'.(ran favor le hace a la obra la sub1etividad que le im/rime su autora, la mano suave de la autora, sus afectos. 3o se entienda, en virtud de los favores inici&ticos, que el libro su/one un ob1eto cansn o dej vu /ara los que corres/ondera llamarse iniciados.Bm/osible de1ar de re/ensar la imaginacin, de admirar la tragedia del atormentado Robert Calter %D=/robablemente mayor> que MelvilleE', genial /ero incom/rendido en su tiem/o. F5mo no com/artir sus ideas sobre la convivencia del genio con sus taras, incluso en las grandes obras de tales genios, =un trasunto de la vida GqueH) 1am&s es e7acta>, am*n de reconocer en esos fallos =el titubeante aliento de las cosas>I FJ qu* decir, hablando de esas /arado1as, de la curiosa historia de Klem/erer y la /edantera del 1oven Btalo 5alvinoI Esa cara de la historia de la genialidad, ante la que muchos historiadores retroceden, bien vale la /ena que se cono"ca.La escritura de RosaMontero encanta /or su estilo desenfadado %como han dicho tantos', alegre, vital) lleno de una lrica sutil, cuyas im&genes candorosas y coquetas que /arecen siem/re, digamos, tiernas al tacto, revelan una mente muy alerta, un /ensamiento claro y agudo. 5ierto es que alguna ve" su escritura trasluce /icarda o franco descontento+ /ero /ronto asoma el mati", el dulce rubor y se atem/era la frase, y en caso de no ser as, una lluvia de sus im&genes m&s frecuentes borra la huella amarga. La suave erudicinEl gusto /or las biografas y el dato curioso, que le viene a la autora /or su vena /eriodstica, llenael te7todemomentosluminososyoscuros, /erosiem/resor/rendentessobrelavidadevariosnarradores. Estas an*cdotas le dan /ie /ara desarrollar su credo sobre la /sicologa del novelista y el/oder de la imaginacin. Es claro que algLn crtico rancio /uede ver en ello un f&cil gancho /araatra/ar incautos. Me /arece que no hay tal. 8ebo 1ustificarme, /orque al decir que este libro es inici&tico, estara 1ustificando al crtico rancio+/ero m&s all& de ello, /arece haber una arqueologa biogr&fica del genio, la vida /rivada, la cuna dela genialidad2 Fde dnde m&s va a obtener sus argumentos sobre la imaginacin del artistaI 3o esun truco+ es una necesidad. ,unque usted ya cono"ca todas las an*cdotas %como afirma saberlas elcrtico rancio', ace/te que de all surgen /lausiblemente los argumentos que e7/lican las tesis de laautora. 3o se trata de un 1uego de trivia literaria, de un libro que e7hibe ca/richosamente an*cdotascuriosas /aramantener atentoal lector+ estamos en/resenciadeun/otentealegatosobrelaimaginacin narrativa y un /oco m&s, un credo literario) y aLn intelectual.LirismoEsebarni"/o*ticoquecubrelos /ara1es delos caminos intelectuales sobrelaliteraturaquealudamosal/rinci/io, esaamabilidadque/royectanlas/&ginasqueaqucomentamosofrecenmuchos e1em/los /ara terminar este encomio hacia esa diligente loca que habita en la casa erigida/or Rosa Montero. ,/enas tomo uno, ese en el que evoca los recuerdos del /asado, de escritoresconocidos y las an*cdotas asociadas a momentos comunes, aunque a/arentemente incone7os. La3avidad de 0MNM, embele"ados, todos miraban una estrella que m&s bien era sat*lite artificial. Enese momento se entrecru"an otras vidas, otras soledades hermanadas de las que ella aLn no /uedesaber nada, /ues de los otros %amigos, escritores' sabr& a su debido tiem/o2Peroaquellanocheyoloignorabatodo, aquellanochesimplementemirabaabsortael cielo(untoconmispadresymi hermanayotrosdosmillonesdemadrile!os) y las estrellas derramaban sobre nosotros una lu* probablementeantasmal, la lu* de las estrellas muertas hace trillones de a!os y que a+n nosllegaba palpitando a travs del negro y r,o espacio) esa misma lu* que qui*sseguir pasando por aqu, dentro de mucho tiempo, cuando nuestro -ol se hayaapagadoyla.ierranoseasinounyertopedrusco. /esalu*impasibleeimposible, quealg+nd,atambinsee0tinguir, llevarprendido, comounsoplo, el re1e(o infnitamente inapreciable de mi mirada. #$%2'35on todas las seas anteriores, es/ero que algLn curioso se adentre en la muelle geografa de los/ara1es imaginativos que rigen el arte narrativo, segLn Rosa Montero y su cm/lice demente. , mme ha servido /ara entender los bemoles del genio+ /ero, sobre todo me ha gustado la imaginacinde la autora, que nunca escatima en el libro comentado.$ibliografaMontero, R. %@OOP'. La loca de la casa. Editorial ,lfaguara. $uenos ,ires.