RELACIONES CONDUCTA - CEREBRO

16-9-2015

ÁREA:PSICOLOGÍA COGNITIVA

DOCENTE:HÉCTOR ORTÍZ ROMERO

INTEGRANTES:- AMBROCIO LUCERO SANDY- ÁVILA MORE CHRISTOPHER- DE LA CALLE VERA SUSSAN- RODRÍGUEZ FERNÁNDEZ IVÁN- RUÍZ RODRÍGUEZ MITCHELL

STEPHANYCARRERA:

PSICOLOGÍACICLO:

VI

El cerebro está constituido por estructuras organizadas en subsistemas con funciones autónomas y especializadas,

el daño en una de esas estructuras generan trastornos selectivos de funciones mentales. Es por ello que la

neurociencia pretende comprender la relación entre las estructuras cerebrales y sus respectivas funciones

mentales.

Los neuropsicólogos del siglo XIX no contaban con las técnicas que actualmente facilitan la visualización de los

tejidos del cerebro, es así que no tenían certeza de que las lesiones correspondían exactamente a la lesión que

provocaba la alteración conductual ya observada. Lo que dio lugar a que busquen otras alternativas para

determinar la existencia y la localización de la lesión cerebral como el método de correlación anatomo – clínica

de los primitivos diagramas e investigaciones psicométricas posteriores, este método comprendía la evaluación de

la conducta cognitiva, la obtención de datos independientes acerca de la localización de la lesión, y las

correlaciones entre anatomía y conducta. Posteriormente se realizaban las mismas tareas con diferentes pacientes

para deducir la localización de la lesión. Este establecimiento entre la ejecución de los test, la presencia y la

localización de sus lesiones constituyó el objetivo principal de la neuropsicología psicométrica.

La diferencia entre el enfoque clásico y la neuropsicología psicométrica es que en el primero se postulaba que el

componente alterado responsable del síndrome estaba localizado en la región cerebral dañada, mientras que en el

segundo solo constataba que por la consecuencia de esta ubicación de la lesión se obtenían puntuaciones bajas en

unos test de otros.

El fenómeno de la diásquisis consiste en que una lesión cerebral focal puede producir la disfunción de regiones

remotas. Lo que es probable que, este fenómenos es producido por la interrupción de fibras eferentes que

conectan la región dañada con áreas remotas que, una vez desconectadas se vuelven hipoactivas aun cuando las

neuronas se encuentran intactas.

En los últimos datos de investigación señala que las áreas anatómicas y los componentes de procesamiento de los

diagramas no coincidían por lo que hoy la neuropsicología cognitiva evidencia que los niveles de descripción de

los procesos mentales y los mecanismos cerebrales son cualitativamente diferentes. La meta de la neuropsicología

cognitiva es la de formular conclusiones acerca de los procesos cognitivos, no acerca de las relaciones conducta-

cerebro.

Según Sergent el cerebro tendría una estructura modular local a lo que superpone una organización global por lo

que la independencia modular solo podría ser relativa, estos módulos reciben sus input de diversas estructuras

cerebrales y transmiten sus productos computacionales a otras partes del sistema; a pesar de que las áreas

modulares parecen ejecutar procesamientos específicos de información ninguna parece estar especializada en un

único tipo de operación. Así mismo Sergent busca la relación entre la mente y el cerebro, lo que consistiría en

determinar si la descomposición de los subsistemas de procesamiento en una serie de componentes tiene

correspondencia en la organización cerebral, creando modelos estructurales que representen las diferentes etapas

o unidades de procesamiento que integren la realización de la conducta normal si esto está sustentado por una

estructura cerebral entonces se puede establecer la correlación entre el locus de la lesión y la unidad de

procesamiento alterada. La otra opción sería analizando la conducta que determine los componentes que

conforman un subsistema, en lugar de partir de un patrón de procesamiento establecido a priori se determinan los

componentes de un subsistema como resultado del análisis del patrón de déficit de los pacientes.

Analizando las posturas extremas en el estudio de las relaciones mente-cerebro: descendente por Fodor y

Phylyshyn basado únicamente en datos conductuales, considerando irrelevantes las propiedades de las respuestas

neuronales y patrones de conectividad. Ascendente basado en la idea de que es necesario determinar los detalles

de nivel celular, para que sus efectos complejos resulten evidentes. Requiriendo a partir de este análisis una

estrategia coevolutiva en la que cada nivel aporte datos que ayuden a mantenerse.

Existen tres niveles diferentes que se plantean; uno de ellos son los niveles de análisis que corresponden a Marr,

donde hacen referencia a la división conceptual de un fenómeno dado en tipos de preguntas que el científico se

puede plantear acerca de él. El segundo son los niveles de organización cerebral que hacen referencia a como se

plasman en el sistema nervioso los niveles de análisis de Marr; donde se encuentran las estructuras cerebrales y

los niveles fisiológicos. Por último tenemos los niveles de procesamiento, los cuales hacen referencia a dónde se

sitúa una operación en una secuencia de procesamiento de la información.

Estas aportaciones son indispensables para que las investigaciones acerca del procesamiento de información

obtengan un fundamento realista. Una de las ideas relevantes para el psicólogo cognitivo y para el neuropsicólogo

es que los datos procedentes de la investigación neurobiológica imponen límites esenciales a la investigación de

las ciencias cognitivas.

Ahora bien según Churchland y Senjnowski opinan que las investigaciones actuales de estas aportaciones

sugieren que las consideraciones de implementación desempeñan un papel vital en los tipos de algoritmos que

ideamos y en los tipos de explicaciones computacionales de que disponemos.