REFORZANDO LA IMPORTANCIA DE LA MEDITACIÓN.

Meditación

Reserve usted algunos minutos para la meditación, antes de tomar actitudes o de asumir compromisos serios.

Procure un local que propicie e recogimiento, o silencio, y cierre los ojos, , buscando respirar profundamente, prestando atención en los movimientos de inspiración y, enseguida, de expiración.

Relaje los músculos, permitiendo que el cuerpo se mantenga lo más suelto posible.

Una música suave también es un auxilio precioso, pues consigue transmitirnos vibraciones de tranquilidad y de calma - elementos fundamentales para ese proceso.

Busque limpiar la mente de todos los pensamientos, dejándola como un inmenso salón vacio, esperando por innumerables e ilustres visitantes.

Piense en una actitud que usted pretende tomar, un compromiso que desee asumir, o una dificultad que precise resolver.

La sala enorme ahora está habitada apenas por esta importante cuestión, y así recibirá toda su atención. Toda su energía estará focalizada en esta resolución.

Analice las diversas posibilidades con calma, haciendo de la razón una gran aliada de los sentimientos.

Imagine las consecuencias de esta acción. ¿Será realmente buena para usted? ¿Podrán perjudicar a alguien, ocasionando sufrimiento? ¿O será un vehículo de felicidad y de paz?

Haga como una lista mental de todos los pros y contras de cada camino a ser seguido y, finalmente, pregunte a su corazón, a sus sentimientos, lo que ellos notan, como se sienten, si tienen alguna intuición a respecto de eso.

Siendo así, usted habrá hecho su parte, aplicando sus fuerzas en esta resolución, y dejando también la mente apta para oír los consejos que vienen de lo Invisible, de los amigos espirituales que desean su progreso.

Vendrán, entonces, las inspiraciones, que se mezclaran con sus propios pensamientos, con nuevas ideas, otras opiniones y orientaciones preciosas para su vida.

La decisión final será únicamente suya.

La persona que sabe meditar, y que procura hacer reflexiones constantes en sus días, estará siempre más lúcida, más conocedora de sus potencialidades y de sus límites, y tambien más se conocerá a sí misma.

Meditar es interiorizarse, es entrar en contacto con el verdadero yo.

* * *

Nunca estamos solos. Podemos contar siempre con el auxilio espiritual en nuestros días. Nuestros amigos continúan amándonos, aun mismo estando en un plano diferente de existencia, y por eso están siempre dispuestos a ayudarnos.

En el Libro de los Espíritus, Kardec presenta la siguiente cuestión: ¿Cómo distinguir si un pensamiento sugerido viene de un bueno o malo Espíritu?

Los Espíritus respondieron diciendo: Estudia el caso. Los buenos Espíritus no aconsejan sino el bien. Cabe a vosotros la distinción.

Redacción de Momento Espírita con base en el cap.31, del libro Episodios diarios, por el Espíritu Joanna de Ángelis, psicografia de Divaldo Pereira Franco

Traducido por: M. C. R