ASOCIACION ECUATORIANA DE COMERCIANTES Y DISTRIBUIDORES DE PRODUCTOS AUDIOVISUALES Y AUXILIOS MUTUOS.

La brecha que separa a los países ricos de los países pobres es cada vez más profunda, ya no solo es económica y tecnológica,

ahora este inmenso abismo es cultural.

Proyecto de Responsabilidad Económica Social y Cultural

PROYECTO DE LEGALIZACION Y REGULARIZACION DEL COMERCIO DE MUSICA Y PELICULAS A TRAVES

DE MEDIOS DIGITALES CD´S Y DVD´S.

Presentado por:

LA ASOCIACION ECUATORIANA DE COMERCIANTES Y DISTRIBUIDORES DE PRODUCTOS AUDIOVISUALES Y AUXILIOS MUTUOS.

ACUERDO MINISTERIAL No.

IEPIMINISTERIO DE INCLUSION ECONOMICA Y SOCIAL

MINISTERIO DE CULTURA DEL ECUADOR

REPRESENTANTE LEGAL: LIC. OMAIRA MOSCOSO PEZO

FEBRERO/ 2011Quito – Ecuador

ASOCIACION ECUATORIANA DE COMERCIANTES Y DISTRIBUIDORES DE PRODUCTOS AUDIOVISUALES Y AUXILIOS MUTUOS.

1.- Proyecto de Responsabilidad Social

ANTECEDENTES

¿Porqué los ecuatorianos no compran películas originales…? ¿Es un asunto cultural? ¿Es como dicen algunos intolerantes de la doble moral burguesa, que afirman que los ecuatorianos estamos mal enseñados a hacer las cosas chuecas? ¿O es un asunto de simple y llana pobreza?

¿Cuántos ecuatorianos pueden pagar 18 o 25 dólares por una película original…?

Todos quisiéramos comprar cine original, porque los empaques son muy profesionales y lucen muy bien en las repisas… pero tenemos que pagar luz, agua, arriendo, comida, ropa, medicinas, uniformes, pasajes para ir todos los días al trabajo… y con 250 dólares de sueldo no alcanza…

Desde el punto de vista del ciudadano común lo que la necesidad ordena, lo prohíbe la pobreza. Como dice la voz popular: Una cosa es querer y otra muy distinta, poder. La voluntad sobra, lo que falta es la plata.

Los elevados índices del comercio de copias ¨ilegales¨ de música y películas en cd´s y dvd´s, ha sido, históricamente, una característica común de los países pobres y menos desarrollados, lo que se debe, en gran medida, al bajo nivel de ingresos y capacidad adquisitiva de la población.

Es inaudito escuchar a algunos funcionarios del Estado repetir los discursos de los grupos monopólicos y las transnacionales en defensa de los productos “originales”, que nadie obliga a comprar música, libros o películas a las personas. Que todo es decisión del consumidor.

Entonces ¿Porqué una libre decisión de consumo debe ser coaccionada por una acción represiva impuesta desde el Estado, a petición de las empresas, y no por la sacrosanta ley, soporte del capitalismo, de la oferta y la demanda?

¿Acaso estos funcionarios buscan proteger los intereses del pueblo ecuatoriano, que después de cientos de horas de trabajo tiene derecho a un justo y sano esparcimiento, a un costo razonable y proporcional a su nivel de ingresos? (derechos contemplados en la constitución y que no pueden ser soslayados a pretexto de la aplicación irreflexiva e inconsulta de una ley).

Las diferencias de ingreso en la sociedad ecuatoriana también se traducen en desigualdad de acceso a la cultura. Mientras los grupos de mayores recursos acceden continuamente a libros, cine y espectáculos artísticos en vivo, la población de bajos ingresos accede a la cultura básicamente a través de la televisión, la radio y las copias de cine en dvd. ¿Qué libertad de elección de consumo de productos culturales tiene una persona que solo tiene la posibilidad de elegir entre la mediocre y pésima programación que le ofrece la televisión nacional, que ha reducido el concepto de comunicación al más degradante, burdo y superficial espectáculo de aberrante despilfarro, chismes vergonzosos, pésimas telenovelas en las que se gastan indecentemente los presupuestos públicos y que reproducen los más miserables aspectos de la conducta humana… Sin que el Estado haya sido capaz de generar la más mínima y coherente alternativa.

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El Ecuador es un país ávido de imágenes que lo reflejen, que le permitan mirarse así mismo, como en un espejo de azogue, reconocerse, mirarse con dignidad. Identificarse con su yo más intimo, con sus sueños y frustraciones, con sus triunfos y derrotas. No con la imagen pobre y dantesca de los desastrosos productos que han proliferado irrespetuosamente en la televisión con el membrete de producción nacional y son como las imágenes de los periódicos amarillistas; que lejos de reflejarnos nos deforman y degradan.

La constitución ecuatoriana concebida y aprobada en Montecristi percibe los derechos culturales, como aquellos derechos que garantizan el desarrollo libre, igualitario y fraterno de los seres humanos y en la capacidad singular que tenemos de poder simbolizar y crear sentidos de vida que podemos comunicar a otros. Estas realidades se tienen que afrontar con tratamientos diferenciados dentro de los derechos culturales colectivos que se constituyen en bienes jurídicos que son protegidos por la constitución. Así como el acceso a la diversidad cultural de todos los grupos humanos sin discriminación étnica, económica o regional.

2.- Prognosis

La política de las grandes empresas distribuidoras, al elegir mercados para ingresar, se centra en identificar la situación económica y la capacidad adquisitiva de los países, desechando los mercados más pobres. El problema de la oferta de mercadería considerada ilegal (counterfeits) y su consumo se dejó a discreción de los estados afectados, que encontraron en esta actividad económica una válvula de escape a la presión social generada a partir de la ineficiencia de sus propias políticas públicas.

La globalización, la tecnología y el Internet han dado pie a la aparición de los productos digitales, que abren nuevamente el debate sobre la comercialización de productos que no cumplen con las leyes de Propiedad Intelectual. Esta vez el problema es diferente. Las empresas productoras reclaman la intervención de los Estados porque los consumidores tanto de países ricos como de países pobres han optado por copiar productos, con el consiguiente efecto negativo sobre sus ingresos. Aunque la incidencia de esta actividad económica es mayor en los países pobres, la diferencia, no parece deberse únicamente a la mayor capacidad de compra de los países ricos, sino a la convicción de los consumidores de los países ricos de ser penalizados por un sistema judicial más eficiente y estricto que ha criminalizado drásticamente esta actividad.

Los países del tercer mundo, de los cuales forma parte el Ecuador, tienen la particularidad de contar con sistemas judiciales poco eficientes, susceptibles a la corrupción y permisivos, esto ha determinado que, en cierto tipo de actos y actividades discrecionales, se cree una especie de consenso social de lo que es correcto y lo que no lo es. Esta situación, sumada a la pobreza, el desempleo, la marginalidad han originado un proceso de legitimización, por parte del Estado, de múltiples actividades comerciales como las copias de dvd`s y cd`s que han sido legalizadas implícitamente por las autoridades fiscales nacionales como el Servicio de Rentas Internas (SRI), que contemplan en sus listados, con fines tributarios, estas actividades económicas; las autoridades seccionales y de seguridad ciudadana como los Municipios, Gobernaciones y Cuerpo de Bomberos también

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otorgan permisos legales para la instalación de negocios dedicados el comercio lícito de copias de estos productos, práctica que tiene un precedente jurídico de más de 20 años. ¿Porque después de todos estos años de haber percibido impuestos de estos sectores, ahora nadie dice esta boca es mía…?

Esta flexibilidad estatal que, como repetimos, busca válvulas de escape a su incapacidad de solucionar graves problemas sociales, como el desempleo y la falta de oportunidades, provocó un enorme daño en los cimientos de las industrias culturales locales que ven como, la escasa recuperación que puede generar la comercialización de sus productos, realizados gracias a enormes esfuerzos, (en un Estado que da a la cultura una mera función decorativa, sin políticas, y con una incipiente gestión cultural, sin estrategias de defensa de la producción nacional, situación que no ha cambiado en la actualidad), esfuerzos que se diluyen al no poder competir de manera equilibrada con los bajos precios derivados de las injustas relaciones comerciales impuestas por un mercado que no practica ninguna responsabilidad social y se apropia indebidamente del fruto de su trabajo, provocando su quiebra, obstaculizando no sólo el desarrollo de las industrias culturales, estancando el desarrollo cultural en general, ya que las empresas culturales no pueden crecer y extenderse de manera sostenible.

A diferencia de los productos físicos, los productos digitales pueden reproducirse y transarse en el espacio virtual o real a costos muy bajos. Basta que una copia del producto digital haya sido colocada en el mercado para que pueda ser copiada infinitamente, lo que ocasiona pesadillas a los gerentes de las grandes transnacionales que ven mermados sus multimillonarios ingresos y han recurrido a la diplomacia, no tan diplomática del Departamento de Estado para criminalizar la libre circulación de información cultural y crear barreras al copiado a fin de asegurar sus ganancias. Una de estas barreras es la legal, mientras la otra es de carácter técnico. Dado que las barreras tecnológicas son superadas periódicamente por los comerciantes, quienes decodifican las seguridades digitales, se ha optado por emplear la barrera legal, bajo la denominación de: “Derechos de propiedad intelectual”.

3.- Diagnosis

El concepto de “Derechos de propiedad intelectual” envuelve un conflicto cultural, ideológico, social, político y comercial que se debate en múltiples ámbitos. En América Latina la aplicación de las leyes de Propiedad Intelectual conlleva una problemática compleja, con múltiples aristas, que rebasa el enfoque estrictamente jurídico y legal, por sus profundas implicaciones económicas, sociales y culturales, debe encontrar respuestas y soluciones en diferentes ámbitos partiendo de una prognosis sustentada en estudios del impacto de su aplicación.

Quizá este sea el mejor momento para realizar algunas preguntas: ¿Qué fuerzas se han puesto en movimiento para imponernos este principio como una norma jurídica?¿en qué marco histórico se imponen estas leyes? ¿Cuáles son sus consecuencias inmediatas y a largo plazo?

Vivimos en un mundo donde grandes compañías transnacionales, han monopolizado un infinito número de patentes y licencias, con el objetivo de controlar las industrias culturales e imponer a los mercados, de manera totalitaria, las reglas, límites y sanciones referentes a la utilización de sus obras y productos. Estas licencias

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convertidas en mercancías culturales, son el fruto del trabajo de creadores asalariados o independientes, que trabajan o han establecido relaciones de distribución con estos multimillonarios conglomerados, los mismos que han desarrollado una estructura jurídica, que ha sido impuesta a los países dependientes, con el objetivo de bloquear cualquier intento de libre circulación de información cultural y legitimar la explotación comercial de los derechos de propiedad intelectual de estos productos.

El valor básico del régimen de Buen Vivir, es la solidaridad. Se busca una economía distinta, una economía social y solidaria, diferente de aquella caracterizada por una supuesta libre competencia, que anima al canibalismo económico entre seres humanos y que alimenta la especulación financiera. Se hace indispensable el establecimiento de regímenes de transición y adaptación a la aplicación de las leyes que deben regir las relaciones sociales y económicas de la sociedad ecuatoriana. No se pueden adoptar medidas violatorias de los derechos constitucionales de las personas a pretexto de la aplicación a rajatabla de determinada ley. Únicamente partiendo de negociaciones que nos lleven al respeto legítimo de los derechos de los demás, podremos construir relaciones de producción, de intercambio y de cooperación que propicien la eficiencia y la calidad, sustentadas en la solidaridad. Se habla de productividad y competitividad sistémicas, es decir medibles en avances de la colectividad y no sólo de individualidades sumadas muchas veces en forma arbitraria. No se quiere una economía controlada por monopolistas y especuladores, como en la época neoliberal. El mercado es una relación social sujeta a las necesidades de los individuos y las colectividades, entendida como un espacio de intercambio de bienes y servicios en función de la sociedad y no sólo del capital.

Las instituciones del Estado no pueden convertirse en representantes y protectoras de los intereses de las transnacionales y de los grupos monopólicos locales que no se cansan de llenarse los bolsillos con el fruto del trabajo y el esfuerzo del pueblo ecuatoriano y que con sus desmedidos afanes expansionistas pretenden tomarse este mercado, liquidando la economía popular, extendiendo sus poderosos tentáculos fuera de las murallas de sus colosales y amurallados centros comerciales, ampliando tanto su concepto que pronto desaparecerán a las tiendas de barrio, han invadido amplios sectores populares con sucursales de sus poderosas cadenas comerciales y gracias a la economía de escala, liquidan a la competencia de los pequeños negocios, en un fenómeno monopólico que no se presenta ni en las economías más recalcitrantemente capitalistas. La lucha de los grandes grupos económicos al interior de las ciudades del Ecuador es ahora por la posesión del espacio urbano, ahora también quieren apropiarse de las industrias culturales. En la fiesta del reparto del mercado ya no se conforman con llevarse el pastel, ahora quieren adueñarse de los bocaditos y hasta de las migajas.

Eduardo Galeano afirma en su Curso Intensivo de Incomunicación que a principios de los años ochenta, la UNESCO patrocinó un proyecto, nacido de la certeza de que la cultura no es una simple mercancía, sino un derecho social, y que la comunicación tiene la responsabilidad de la función educativa que ejerce. En ese marco, se planteó la posibilidad de crear un fondo internacional para la liberación de derechos de autor de obras fonográficas y cinematográficas consideradas patrimonio cultural de la humanidad, para que puedan ser comercializadas a bajo costo en los países del tercer mundo, con el ánimo de paliar de alguna manera los horrendos desequilibrios estructurales que imperan en el mundo actual.

Aunque el proyecto fue formulado en términos muy cuidados, el gobierno norteamericano montó de furia ante este atentado contra la libertad de expresión y la

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libertad de empresa. ¿Por qué tenía que meterse la UNESCO en los asuntos que pertenecen a las fuerzas vivas del mercado? Entonces, ante la amenaza de este país de retirarle el financiamiento a la UNESCO, se archivó la posibilidad de un sistema de transferencia cultural desvinculado del poder político y del interés mercantil, procediéndose a penalizar y perseguir todos los intentos de libre circulación de información cultural entre los estados. Por tímido que sea, cualquier proyecto de independencia puede amenazar, en alguna medida, la división internacional del trabajo, que atribuye a unos pocos la función activa de producir cultura y opiniones, y atribuye a todos los demás la función pasiva de consumirlas.

4.- Línea Base del Proyecto.

En estas circunstancias históricas la misión asumida por la Asociación de Comerciantes y Distribuidores de Productos Audiovisuales ¨ASECOPAC¨ es la de convertirse en los principales impulsores del proceso de legalización y regularización del comercio de productos audiovisuales en el mercado ecuatoriano, con la asesoría del Instituto Ecuatoriano de Propiedad Intelectual, el Ministerio de Cultura, el Ministerio de Inclusión Económica y Social, y la colaboración de las Instituciones del Gobierno Nacional con el objetivo de estructurar mesas de negociaciones buscando la confluencia de todos los involucrados en la cadena de valor de las industrias culturales, promoviendo la participación de todos los actores del sector interesados en la regulación y legalización del comercio de productos audiovisuales para establecer los mecanismos, la agenda y las etapas del proceso de legalización que nos llevarán a la plena vigencia del derecho de autor y los derechos conexos, adaptándolos a la realidad y circunstancias específicas de nuestra realidad económica y contexto social hasta convertirlos, a través de consensos, en políticas de estado, realizando estudios detallados sobre el impacto en la economía nacional.

Consideramos que la aplicación de las leyes de defensa de los derechos debe contemplar fases de transición que permitan la regularización paulatina del mercado a través de negociaciones con los sectores involucrados, con el fin de disminuir el impacto de la aplicación de estas políticas, evitando que se conviertan en causales del desempleo de más de 150.000 familias inmersas en la comercialización de música y películas en cd´s dvd´s en el territorio nacional.

5.- Impacto del Proceso de Legalización en la Comunidad.

Desde la perspectiva, del Buen Vivir (Sumak Kausai) establecido como principio básico de nuestra constitución, en lo referente al ejercicio de los derechos y garantías sociales, económicas y ambientales. Está consagrado el derecho al trabajo plasmado en los principios orientadores del régimen económico, que se caracterizan por promover una relación armoniosa entre los seres humanos individual y colectivamente:

Art. 325.- El Estado garantizará el derecho al trabajo. Se reconocen todas las modalidades de trabajo, en relación de dependencia o autónomas, con inclusión de labores de autosustento y cuidado humano; y como actores sociales productivos, a todas las trabajadoras y trabajadores.

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En esencia la construcción de una economía solidaria, al tiempo de recuperar varias soberanías como concepto central de la vida política del país.

La ASECOPAC liderará los procesos de regularización y legalización de las actividades económicas que por ausencia de pago de derechos de autor se hallan inmersas en situaciones conflictivas y buscar una sistemática inserción de estos grupos informales en el estricto cumplimiento de las políticas de derechos de autor, como ha ocurrido en otros países de América Latina, que después de establecer acuerdos sociales, han conseguido la plena vigencia de las leyes de protección de la propiedad intelectual, mediante negociaciones multilaterales que se sustenten en un estudio profundo sobre la repercusión de la paulatina aplicación de las leyes de derechos de autor y sus efectos sobre la cultura, examinando las propuestas que buscan mantener, en el nuevo entorno, el equilibrio entre el ejercicio del derecho de autor y el derecho al acceso a la cultura de los grupos humanos contemplado en la constitución

Art. 377.- El sistema nacional de cultura tiene como finalidad fortalecer la identidad nacional; proteger y promover la diversidad de las expresiones culturales; incentivar la libre creación artística y la producción, difusión, distribución y disfrute de bienes y servicios culturales; y salvaguardar la memoria social y el patrimonio cultural. Se garantiza el ejercicio pleno de los derechos culturales.

Art. 380.- Serán responsabilidades del Estado:

3. Asegurar que los circuitos de distribución, exhibición pública y difusión masiva no condicionen ni restrinjan la independencia de los creadores, ni el acceso del público a la creación cultural y artística nacional independiente.

7. Garantizar la diversidad en la oferta cultural y promover la producción nacional de bienes culturales, así como su difusión masiva.

8. Garantizar los fondos suficientes y oportunos para la ejecución de la política cultural.

La constitución ecuatoriana percibe los derechos culturales como aquellos derechos que garantizan el desarrollo libre, igualitario y fraterno de los seres humanos y en esa capacidad singular que tenemos de poder simbolizar y crear sentidos de vida que podemos comunicar a otros. Estas realidades se tienen que afrontar con tratamientos diferenciados dentro de los derechos culturales colectivos que se constituyen en bienes jurídicos que son protegidos por la constitución. Así como el acceso a la cultura de todos los grupos humanos sin discriminación étnica, económica o regional.

La cultura es un bien patrimonio de la humanidad imprescindible para el desarrollo humano, para que el ciudadano pueda tener una visión crítica y participativa en la sociedad, para el Sr. Ban Ki-moon Secretario General de Naciones Unidas, el derecho a la Cultura es tan importante como el derecho al agua, como el derecho a la vida, ahora algunos funcionarios equivocados pretenden ser convertirla en una mercancía a la que solo pueden acceder quienes tienen dinero. Entonces la cultura jamás será de todos, estará condicionada a la capacidad adquisitiva de las personas, se convertirá en privilegio de muy escasos ciudadanos.

Cuantos ciudadanos de nuestro país pueden disfrutar del trabajo de los Hermanos Lumiere de Meliés de Truffaut, de Darren Aronofski, de la magia inmortal de Chaplin gracias a los dvd que se comercializan en las calles, no es gracias a políticas estatales de difusión cultural, ni a los funcionarios encargados de la formulación de

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las políticas culturales, ni por los medios de comunicación. La venta informal de información cultural se ha convertido en la principal fuente de democratización de la cultura en nuestro país, gracias a ella nos hemos aproximado a la esencia de a otras geografías, a otras culturas, a sus inventarios de valores y derechos a su visión de la vida, sus costumbres y tradiciones, a su memoria ancestral colectiva.

Como pudimos conocer los rituales dancísticos del Congo Belga y su impresionante concepción de la vida y la naturaleza, si no es a través de los documentales que se comercializan a bajísimo costo en la Bahía.

Nosotros no podríamos decidir que tipo de productos culturales podemos consumir, nos veríamos condenados a consumir únicamente los productos culturales de bajísima calidad producidos por los canales nacionales.

Al Gore no nos sonaba hasta ver un documental comprado en la Bahía llamado "Una verdad incómoda", que se ha convertido en el referente de los trabajos sobre la problemática del calentamiento global, en todas las instituciones educativas del país, entonces también deberían encarcelar por complicidad en el delito de piratería a miles de maestros de las escuelas y colegios del país que han cometido la atrocidad de utilizar este excelente documental para concientizar a los estudiantes sobre este inmenso problema que se cierne sobre la humanidad.

6.- Análisis de la Oferta y Demanda

DEMANDADe acuerdo a las cifras estimadas por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), el Ecuador tiene una población de 14’306.876 habitantes,con una tasa de crecimiento intercensal anual de 1,52%. Según los datos preliminares de población provincial, Guayas es la provincia que registró mayor número de habitantes con 3'142.308, seguido por Pichincha con 2'165.662 y en el tercer lugar se encuentra Manabí con 1'221.819. El Ecuador tiene una tasa de alfabetización de la población total 93 por ciento.

FUENTE: INSTITUTO NACIONAL DE ESTADISTICAS Y CENSOS 2011

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Si observamos los datos relacionados con la infraestructura de las viviendas en el Ecuador y lo tomamos como un indicador de las condiciones económicas en las que vive nuestra población, podemos determinar el alto nivel de pobreza que todavía padece la población ecuatoriana que apenas en un 43.17 % ha conseguido obtener una vivienda que reúna las condiciones básicas habitables.

FUENTE: INSTITUTO NACIONAL DE ESTADISTICAS Y CENSOS 2011

En relación con servicios básicos podemos apreciar la situación de atraso, a pesar de ser considerado un derecho humano universal, indivisible e imprescriptible el acceso al agua potable, en nuestro país es insuficiente e inadecuado e implica riesgos, representa un problema constante sobre la salud de la población, las dimensiones de los impactos a la salud, que en nuestras poblaciones supone no tener acceso a agua en buenas condiciones de salubridad son ya innegables. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que 80% de todas las enfermedades en el mundo en desarrollo, son causadas por la falta de agua limpia y saneamiento adecuado, siendo ésta una de las causas principales de enfermedades y muertes sobre todo en los niños. El agua potable es un recurso vital para el ser humano y forma parte integrante de los derechos humanos oficialmente reconocidos en los diferentes foros internacionales. El agua es un bien común universal, patrimonio vital de la humanidad, un derecho básico, individual inalienable.

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Mientras alrededor de la tierra gira un anillo de satélites llenos de millones y millones de palabras y de imágenes, los más afortunados miembros de la sociedad pueden disfrutar sus vacaciones en la playa atendiendo el teléfono celular, recibiendo el e-mail, haciendo compras por computadora. Sin embargo en el Ecuador apenas un 32,17% de la población puede darse el lujo de tener un teléfono.

En el ciberespacio, Ciudad celestial, se desarrolla una nueva etapa de la cultura de la humanidad, sin embargo en el Ecuador apenas 3257.848 personas han tenido alguna vez en su vida acceso al Internet o han utilizado una computadora.

Funcionarios que viven fuera de la realidad pretenden que estos ecuatorianos paguen 18 o 25 dólares por una película original… o debemos pensar en una solución inteligente para no privar a estos importantes sectores de la población de sus derechos constitucionales?

Art. 380.- Serán responsabilidades del Estado:

3. Asegurar que los circuitos de distribución, exhibición pública y difusión masiva no

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condicionen ni restrinjan la independencia de los creadores, ni el acceso del público a la creación cultural y artística nacional independiente.

7. Garantizar la diversidad en la oferta cultural y promover la producción nacional de bienes culturales, así como su difusión masiva.

8. Garantizar los fondos suficientes y oportunos para la ejecución de la política cultural.

En el Ecuador se realizó el primer censo en el año 1950 y el último en el año 2010, registrando hasta la presente 8 censos en total. Del examen de las cifras, a lo largo de este período, podemos observar la dinámica de crecimiento de la población sin embargo existen contradicciones, desequilibrios, actitudes centralistas y perniciosas que han sido la tónica de los gobiernos anteriores. Qué porcentajes de los presupuestos del Estado se invierte en Cultura? Cuál es la situación del trabajo cultural y de difusión del arte y la cultura en el Ecuador?, sin tomar como referente el excelente trabajo de las autoridades nacionales y seccionales en Quito, que es la excepción. Quito Capital Cultural de América en el 2011, el resto del Ecuador es paisaje rural…

El común denominador de los ecuatorianos es el total desconocimiento de la filmografía nacional, por no hablar ya de las de sus vecinos, peor de cine europeo, asiático, es una de las grandes carencias nacidas en la imposición y aceptación de modos y conductas ajenos a su idiosincrasia. Hay algo que es innegable, el cine que más se ve alrededor del planeta es el producido en Hollywood, es decir, un cine meramente de consumo, fácil de ver, fácil de digerir, que atrapa al espectador de cualquier manera, generalmente con excesos en efectos especiales. Entonces cuando el 95% de las pantallas están llenas de este cine, se pontifica la forma de vida estadounidense y el público termina, equivocadamente, pensando que ese es el ideal a alcanzar y que todo lo demás no sirve; y lo que es peor, la gente cree que eso es fácil de alcanzar, cuando sabemos que las diferencias entre países son abismales. Las salas múltiples son iguales aquí o en Hong Kong, allí se pueden encontrar una comedia, un romance, un western y una de terror, o sea, los mismos filmes para todos los gustos, en cualquier lugar del mundo. Ir a uno de estos cines es como estar en un Mc Donald"s, sus filmes reproducen la estética de la forma de vida del primer mundo.

La imagen de nosotros mismos que generalmente prevalece a través del cine, es la estereotipada que Hollywood ha acuñado cuando necesita ambientar sus filmes en locaciones paradisíacas y rodear a sus estrellas de personajes caricaturescos, simples hasta el absurdo, estúpidos, malvados o propensos a todo tipo de desviaciones y vicios. ¿Se ha desarrollado algún intento estatal por tratar de revertir esta realidad, perjudicial para la identidad nacional y la pretendida integración regional? ¿Cuántas instituciones Estatales serias y competentes, realizan proyectos culturales nacionales? Democratizar la cultura debería ser también descentralizar las instituciones y democratizar los presupuestos distribuyéndolos de forma equitativa.

Este es el público al que va dirigido nuestro trabajo, el cine ahora cumple mayoritariamente una función en la sociedad: la del mero entretenimiento. Aunque haya películas de otro tipo, estas no llegan al grueso de las personas. Esto se debe a que las distribuidoras internacionales imponen sus políticas de mercado, dejando de lado formas de cine independiente. Debemos generar mecanismos de resistencia ante la globalización que nos impone un abismo tecnológico cada vez más profundo entre países pobres y ricos, proceso que conlleva, el inminente peligro de la

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implantación de un modelo único y ajeno de pensamiento, sacrificando la diversidad y legitimidad de nuestras identidades nacionales y culturales.

El acceso a productos alternativos de bajo costo, reducen significativamente las barreras para el acceso a alternativas culturales, lo que ha provocado una progresiva democratización de la difusión cinematográfica, películas de calidad independientes, ofrecen visiones renovadas y críticas de nuestras culturas, lo que significará en un futuro la inserción en la difusión cultural de grupos sociales y de comunidades que nunca antes habían tenido acceso al cine, a la vez que contribuirá al desarrollo de nuestra incipiente cinematografía.

Se vuelve imprescindible asumir la tarea de retroalimentar nuestras identidades culturales y humanísticas, incentivando y difundiendo el cine y los fundamentos conceptuales necesarios para que este proceso de democratización tenga cohesión con la paulatina inserción de nuevos espectadores, procedentes de las más diversas comunidades sociales.

OFERTA

Cuando se plantea un desafío tan trascendente como convertirse en el mediador entre un país ávido de cultura cinematográfica y el medio que puede concretar esta aspiración, las perspectivas son múltiples, sobre todo si pensamos que un proyecto de esta naturaleza puede ser sustentable si se crean estrategias inteligentes y creativas de posicionamiento, si se parte de una posición honesta y de un profundo conocimiento del medio, a través de estrategias que conviertan a los comerciantes ecuatorianos en integrantes del proyecto cultural. Con voluntad política y compromiso con el sector es factible llevar adelante esta posibilidad.

La estética del cine se dedica a analizar y especialmente debatir cuestiones que tienen que ver radicalmente con nuestra constitución como seres morales. Se trata temas como el amor, la muerte, la vida, la experiencia, y no solo aspectos que tienen que ver con el arte y la belleza, como tradicionalmente se piensa a la estética, sino que se acercan un poco más a la ética y a la antropología social.

Cuantos ciudadanos de nuestro país pueden disfrutar del trabajo de los Hermanos Lumiere de Meliés de Truffaut, de Darren Aronofski, de la magia inmortal de Chaplin gracias a los dvd que se comercializan en las calles, no es gracias a políticas estatales de difusión cultural, ni a los funcionarios encargados de la formulación de las políticas culturales, ni por los medios de comunicación. La venta informal de información cultural se ha convertido en la principal fuente de democratización de la cultura en nuestro país, gracias a ella nos hemos aproximado a la esencia de a otras geografías, a otras culturas, a sus inventarios de valores y derechos a su visión de la vida, sus costumbres y tradiciones, a su memoria ancestral colectiva.

Como pudimos conocer los rituales dancísticos del Congo Belga y su impresionante concepción de la vida y la naturaleza, si no es a través de los documentales que se comercializan a bajísimo costo en la Bahía.

Nosotros no podríamos decidir que tipo de productos culturales podemos consumir, nos veríamos condenados a consumir únicamente los productos culturales de bajísima calidad producidos por los canales nacionales.

Al Gore no nos sonaba hasta ver un documental comprado en la Bahía llamado "Una verdad incómoda", que se ha convertido en el referente de los trabajos sobre la problemática del calentamiento global, en todas las instituciones educativas del país, entonces también deberían encarcelar por complicidad en el delito de piratería a miles de maestros de las escuelas y colegios del país que han cometido la atrocidad

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de utilizar este excelente documental para concientizar a los estudiantes sobre este inmenso problema que se cierne sobre la humanidad.

La ASECOPAC debe liderar los procesos de regularización y legalización de las actividades económicas que por ausencia de pago de derechos de autor se hallan inmersas en situaciones conflictivas y buscar una sistemática inserción de todos los grupos informales en el estricto cumplimiento de las políticas de derechos de autor, como ha ocurrido en otros países de América Latina, que después de establecer acuerdos sociales, han conseguido la plena vigencia de las leyes de protección de la propiedad intelectual, mediante negociaciones multilaterales que se sustenten en un estudio profundo sobre la repercusión de la paulatina aplicación de las leyes de derechos de autor y sus efectos sobre la cultura, examinando las propuestas que buscan mantener, en el nuevo entorno, el equilibrio entre el ejercicio del derecho de autor y el derecho al acceso a la cultura de los grupos humanos contemplado en la constitución

7. Objetivos Generales

1. La ASOCIACIÓN ECUATORIANA DE COMERCIANTES DE PRODUCTOS AUDIOVISUALES Y CONEXOS “ASECOPAC”, es una organización de comerciantes autónomos, que busca preservar y salvaguardar los derechos constitucionales de todos sus afiliados, para que puedan ejercer el legítimo derecho al trabajo, contemplado en la Constitución y las Leyes de la República del Ecuador.

2. La ASOCIACIÓN ECUATORIANA DE COMERCIANTES DE PRODUCTOS AUDIOVISUALES. “ASECOPAC”, tiene como principio fundamental la Iniciación de negociaciones con las autoridades pertinentes, para poner en marcha los procesos sistemáticos y paulatinos de regularización de las actividades económicas de todos sus miembros, a nivel nacional, con el objetivo de, en un lapso prudencial, cumplir a plenitud con los preceptos legales de Derechos de Autor de los productos fonográficos, videográficos, películas, que en la actualidad incumplen con estas obligaciones establecidas en la Ley.

3. La ASOCIACIÓN ECUATORIANA DE COMERCIANTES DE PRODUCTOS AUDIOVISUALES. “ASECOPAC”, tiene como objetivo promover y defender los derechos de propiedad intelectual de los autores, compositores y cineastas ecuatorianos, mediante el cumplimiento estricto de los mandatos establecidos en la ley.

4. La ASOCIACIÓN ECUATORIANA DE COMERCIANTES DE PRODUCTOS AUDIOVISUALES. “ASECOPAC”, impulsará la creación de una estructura jurídica sólida, que busque mantener en el marco del equilibrio y de la más estricta justicia, las relaciones entre los actores sociales inmersos en el comercio de productos fonográficos y  videográficos, con  los sectores involucrados en la distribución y comercialización de estos productos.

5. La ASOCIACIÓN ECUATORIANA DE COMERCIANTES DE PRODUCTOS AUDIOVISUALES. “ASECOPAC”, a puesto a disposición de los cineastas, teleastas, realizadores y productores nacionales, la más completa red nacional de distribución y comercialización de productos audiovisuales, con estricto respeto de las normas vigentes de derechos de autor, convirtiéndose en un factor determinante de desarrollo, al abrir nuestro mercado y fuerza nacional de ventas -con cerca de

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60.000  puntos de comercialización-, al Cine Nacional con el inicio de un plan piloto que comenzó en el mes de febrero del 2010 con 20 tiendas en la ciudad de Quito e iniciando en Guayaquil en el mes de enero del presente año previo acuerdo de solo vender películas originales del cine nacional.

6. Nuestra Asociación tiene como objetivo fundamental la iniciación de negociaciones con las autoridades pertinentes para poner en marcha procesos sistemáticos y paulatinos de regularización de las actividades económicas de todos sus miembros a nivel nacional con el objetivo de, en un lapso prudencial y equilibrado, cumplir a plenitud con los preceptos legales de Propiedad Intelectual de los productos fonográficos y  videográficos  que en la actualidad incumplen con estas obligaciones establecidas en la ley.