Protocolo al vestir

ROTOCOLO AL VESTIR EGD Juan Carlos Contreras Página 1

Nueve puntos clave para vestir una camisa:

1. El cuello de la camisa no debe oprimir nuestro cuello de una forma intensa. Una cosa es

que quede bien ajustado y otra que nos oprima el cuello.

2. Al girar nuestro cuello no debe girar el cuello de la camisa.

3. El puño de la camisa debe terminar donde empieza la palma de nuestra mano.

4. El puño de la camisa debe cubrir el reloj de muñeca y no dejarlo a la vista.

5. Los puños de la camisa no deben ser excesivamente rígidos o acartonados.

6. El hombro de la camisa debe coincidir con nuestro hombro, ni más corto ni más largo que

sobresalga de nuestro hombro.

7. Las mangas de la camisa deben cubrir al completo los brazos.

8. Al doblar el brazo el puño de la camisa no se debería desplazar más de uno o dos

centímetros.

9. El tamaño de la camisa debe ser el apropiado para poder movernos con soltura y poder

hacer movimientos y girar nuestro cuerpo sin que se salga la camisa por fuera de los

pantalones.


Vestir un zapato para hombre cómodo y elegante.

Los zapatos como cualquier otra prenda del vestuario hay que saber elegirlos en función del "lugar

y momento" en la que se van a lucir. No es lo mismo elegir unos zapatos para un ceremonia de

boda que para ir al trabajo o para salir de paseo por el campo.

Lo que si debemos pedir a un buen par de zapatos es que deben ser de un tamaño adecuado al del

pie, deben ser cómodos -eso de para presumir hay que sufrir es un tópico- y deben contar una

horma lo suficientemente amplia para que el pie no sufra presiones.

Los zapatos más clásicos suelen ser válidos para casi todas las ocasiones . Los

zapatos de corte más informal no deberían acompañar a una indumentaria formal o

de etiqueta.

El color para un zapato formal de vestir suele ser negro o de un color oscuro.

Hechos en piel y de cordones, con un cort e clásico tipo Oxford, Derby o similar.

Los zapatos menos formales pueden ser más atrevidos en color, corte y diseño.

Como los náuticos, los mocasines, etc.

Vamos a ver los principales tipos de zapatos atendiendo a su denominación.


Los zapatos Oxford son los zapatos elegantes por excelencia. Se pueden vestir con

todo tipo de vestuario desde ir de etiqueta a ir algo vestido con algo informal.

Suelen ser lisos o con algún calado. Los más utilizados con los de color negro y

marrón.

Los zapatos Derby son los hermanos casi "gemelos" de los zapatos Oxford. De corte muy parecido, son válidos para casi todas las ocasiones en función del "perforado" que lleve el diseño elegido. Los colores más utilizados son el negro y el marrón aunque están saliendo al mercado diseños y colores mucho más modernos

Los conocidos "monk strap" -zapatos con hebilla o similar- son zapatos sin cordones cada vez más

aceptados para utilizar con un vestuario formal o de etiqueta. También se pueden vestir en

multitud de ocasiones más.


Foto Zeus Factor - Alexander McQueen - Givenchy Modelos de zapatos Monk Strap Los zapatos más informales -loafer en inglés- suelen ser los que tienen un corte moderno y unos

colores más vivos. Pueden ser un tipo mocasín, o modelos similares sin cordones. Pueden llevar

algún pequeño detalle como borlas, hebillas, etc.

En esta categoría podríamos incluir también modelos como los conocidos náuticos y zapatos de

corte similar llegando, algunos modelos, a ser muy parecidos al calzado deportivo.

Es importante a la hora de elegir un buen zapato tener en cuenta: el color, el material -si es o no

de piel-, si tiene cordones o no, el grosor de la suela, si es cosido o soldado, el tipo de puntera y el

tipo de horma, así como el tipo de calado si lo tiene.

Mientras los modelos de zapatos más modernos son los que antes se pasan de moda. Los clásicos

nos pueden servir durante "toda la vida" útil del zapato para lucir en multitud de ocasiones.

Elegir un zapato para cada ocasión


Los zapatos son una parte muy importante del vestuario de una persona. Hay que tratar de elegir

un zapato elegante pero cómodo.

8 sugerencias para vestir bien una chaqueta

Las chaquetas, tanto de vestir como deportivas -sport- deben tener algunas características básicas

para que sienten bien y se vistan con elegancia.


Cómo vestir una chaqueta de forma elegante.

Una buena chaqueta para hombre debe cumplir algunas reglas o seguir unos determinados

patrones en cuanto a solapas, botones, mangas, etc.

Veamos algunos de los principales puntos en los que hay que fijarse para vestir bien una chaqueta:

A tener en cuenta:

Las solapas deben estar bien pegadas a la chaqueta. No deben estar curvadas, tener arrugas o

pequeños "montículos".

El cuello de la chaqueta no debe tapar el cuello de la camisa. Es decir, el cuello de la chaqueta no

debe montar el cuello de la camisa en su totalidad.

Los hombros de la chaqueta deben ajustar y coincidir perfectamente con los hombros del cuerpo.

Aunque solo se suele conseguir un encaje perfecto en las chaquetas hechas a medida, hay que

tratar de conseguir una chaqueta que ajuste lo mejor posible a nuestros hombros.

Amplitud. La chaqueta no debe quedar tirante cuando está abotonada. Es decir, no debe hacer la

conocida X en la parte del estómago.


Foto protocolo.org Chaqueta arrugas X

Las mangas no deben tener arrugas. Solo debe hacer unos ligeros pliegues al doblar el brazo.

El botón central de una chaqueta debería quedar, aproximadamente, a la altura del ombligo.

El largo de la manga de una chaqueta debe cubrir la muñeca hasta el lugar donde empieza la

mano. No debería ser más larga.

Las mangas, aunque bien ajustadas, deben tener la holgura suficiente para dejarnos mover con

cierta soltura.

Vestir un traje de forma correcta

El traje es un tipo de vestuario que puede utilizarse para todo tipo de eventos, desde los más

formales a los más familiares y menos ceremoniosos.


Foto Fashion Beans Modelos de traje para hombre

Una traje perfecto para un hombre elegante.

Los trajes prêt-à-porter se ajustan a medidas estándar pero no quedan tan bien ajustados a la

figura del hombre como los trajes hechos a medida.

Para vestir de forma correcta un traje hay que tener en cuenta algunos puntos importantes.

Veamos cuáles son los más interesantes.

Los hombros.

Un traje bien seleccionado según nuestra talla hace que el hombro encaje perfectamente sobre el

nuestro, si quedar ni muy bajo ni demasiado alto.

Una traje de talla pequeña, hace que el hombro quede alto y tirante. Si es de una de talla

demasiado grande el hombro queda caído y demasiado flojo, dando lugar a la formación de

arrugas y pliegues.

El pantalón.


Un pantalón de talla correcta sienta bien a las caderas, la cintura y los glúteos. Se ajusta de forma

apropiada a nuestro cuerpo.

Si la talla del pantalón es muy pequeña, presiona los glúteos, la cintura y dificulta los movimientos.

Marca en exceso la figura. Además corremos el riesgo de romperlos al hacer el movimiento de

agacharse o sentarse. Si, por el contrario, la talla es grande sobra tela por todos los lados, no caen

rectos, se arrugan y quedan demasiado flojos y holgados.

La chaqueta.

Una chaqueta de talla correcta se adapta bien al cuerpo, marcando la figura de forma discreta.

Una chaqueta demasiado pequeña apenas se puede abrochar y, al hacerlo, se nota la tirantez de

los botones que marcan la famosa X -arrugas- en la parte frontal. Si la talla es muy grande la

chaqueta queda muy holgada, muy ancha y "baila" al hacer cualquier movimiento.


Las mangas.

Si el traje es de la talla correcta la manga llega hasta la altura la de la muñeca o un poquito por

debajo. Tiene que dejar ver el puño de la camisa uno o dos centímetros.

Si la talla es pequeña la manga queda corta y no llega ni a la altura de la muñeca. Si es grande, la

manga queda larga -y suele ser más ancha, también- y puede llegar a cubrir la mano o buena parte

de Longitud de la chaqueta.

Una chaqueta de nuestra talla debe tener una longitud aproximada hasta la altura de los nudillos

de la mano -la mitad de la mano-. También puede ser de una longitud que llegue hasta el primer

tercio de la longitud del muslo.

Si es pequeña, la chaqueta queda corta y no llega tan siquiera a la altura de la muñeca. Si es muy

grande, más que una chaqueta puede llegar a parecer una levita. Mucha caída que puede llegar

más abajo de la mitad del muslo. ésta.

El largo del pantalón.

Un pantalón de nuestra talla debe quedar bien de largo: por la parte delantera descansa sobre el

empeine sin hacer apenas ninguna arruga. Por la parte trasera cae sobre el talón sin llegar a tocar

el suelo.

Si es de talla pequeña el pantalón nos queda corto con un largo a la altura del tobillo y deja ver el

calcetín. Si la talla es muy grande el pantalón tiene mucha caída lo que da lugar a la formación de

muchos pliegues y arrugas. Además por la parte trasera roza con el suelo, lo que hace que se

estropee.


Cuello de la chaqueta.

Si la chaqueta está bien confeccionada el cuello debe ajustar de forma perfecta y dejar sobresalir

uno o dos centímetros el cuello de la camisa.

No está bien confeccionada o no es de la talla adecuada la chaqueta si queda un hueco importante

entre el cuello de la chaqueta y el de la camisa, o bien, cuando en la espalda o justo debajo de la

parte posterior del cuello se hace una arruga, pliegue o pequeña "chepa".

Este tipo de "bulto" o arruga puede aparecer por colgar la chaqueta en un perchero de un solo

punto lo que hace esa "marca" en la chaqueta -o en cualquier otra prenda que esté así colgada

durante algún tiempo-. Es mejor utilizar una percha o un elemento de formato similar.

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