Propuesta 2 texto narrativo

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Era un día de calor, pero no soleado presentí que llovería y se avecinaba tormenta. Acababa salir de mi casa y me dirigía al parque, al gran parque, el que tenía que cruzar para llegar a la escuela y mi punto de encuentro con Eugenia, mi mejor amiga. Siempre quedábamos a la misma hora pero recibí un Whatsapp de ella ancho cuando me iba a acostar que decía: - Mañana quedamos más pronto a las 8:15 - ¿Por qué? - Porque tengo que hablar contigo - Vale te quiero, buenas noches - Agur Me quede extrañada con su comportamiento, ni siquiera me había dado las buenas noches. Y encima se había despedido de mí con un triste agur. ¿Qué sería lo que me tenía que contar? Cuando la vi al cruzar la esquina de la panadería me di cuenta que estaba disgustada, se encontraba sentada en nuestro banco verde, el que habituábamos siempre, y en sus manos apoyaba la cabeza, algo malo estaba pasando. Me acerque a ella y la dije: - ¿Qué pasa? Porque tienes esa cara. A lo que ella me respondió: - Creo que lo mejor es que te lo diga de una vez, aunque no es sencillo de decir, haber es que… - Es que ¿Qué? termina de hablar de una vez que me estas asustando. ¿ Le ha pasado algo a tus padres? - No, no es nada de eso. Es que Manolo te engaña… Sale con otra chica cuando no está contigo. - ¿Qué? ¿Con quién? - Con julia, el otro día les vi besándose en el metro. Me sentí desfallecer, Eugenia me tuvo que sujetar en sus brazos para no caer, me apoye en el árbol que está al lado del banco, se me nubló la vista, me sentía utilizada y pasé de enjuagarme las lágrimas a estallar de ira en un segundo, sentí lastima de mi misma y entendí porque se lloraba por amor junto con unas ganas

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Era un día de calor, pero no soleado presentí que llovería y se avecinaba tormenta. Acababa salir de mi casa y me dirigía al parque, al gran parque, el que tenía que cruzar para llegar a la escuela y mi punto de encuentro con Eugenia, mi mejor amiga. Siempre quedábamos a la misma hora pero recibí un Whatsapp de ella ancho cuando me iba a acostar que decía:

- Mañana quedamos más pronto a las 8:15 - ¿Por qué?- Porque tengo que hablar contigo- Vale te quiero, buenas noches- Agur

Me quede extrañada con su comportamiento, ni siquiera me había dado las buenas noches. Y encima se había despedido de mí con un triste agur. ¿Qué sería lo que me tenía que contar?

Cuando la vi al cruzar la esquina de la panadería me di cuenta que estaba disgustada, se encontraba sentada en nuestro banco verde, el que habituábamos siempre, y en sus manos apoyaba la cabeza, algo malo estaba pasando.

Me acerque a ella y la dije:

- ¿Qué pasa? Porque tienes esa cara. A lo que ella me respondió:- Creo que lo mejor es que te lo diga de una vez, aunque no es sencillo de decir, haber es

que…- Es que ¿Qué? termina de hablar de una vez que me estas asustando. ¿ Le ha pasado algo a

tus padres?- No, no es nada de eso. Es que Manolo te engaña… Sale con otra chica cuando no está

contigo.- ¿Qué? ¿Con quién?- Con julia, el otro día les vi besándose en el metro.

Me sentí desfallecer, Eugenia me tuvo que sujetar en sus brazos para no caer, me apoye en el árbol que está al lado del banco, se me nubló la vista, me sentía utilizada y pasé de enjuagarme las lágrimas a estallar de ira en un segundo, sentí lastima de mi misma y entendí porque se lloraba por amor junto con unas ganas irreconocibles de querer matar a alguien. Se me pasó un poco el dolor de la noticia.

- ¿Por qué que he hecho mal? ¿Cómo puede estar pasando esto? ¿Por qué me traiciona de esta manera?

Eugenia mi fiel amiga me sujetaba por los hombros y me miraba fijamente a los ojos.

- Tú no has hecho nada mal y si ha hecho eso es porque no te merece y punto. Porque tu vales mucho más de lo que te puedas imaginar. Con esto solo te ha demostrado que no vale la pena, no quiero que te angusties por él. Eres la mejor nunca lo olvides y me vas a tener a tu lado siempre en las buenas y en las malas.

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En ese momento me di cuenta que me había hecho un gran favor al contármelo, no pude más que en pequeños balbuceos darla las gracias.