Programa Innovadors

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EL MUNDO / AÑO XXIV / MARTES 17 DE JULIO DE 2012 INNOVADORES 9 C onocerse a uno mismo es de las cosas más di- fíciles que existen para el ser humano. A mu- chos les cuesta toda una vida y otros no lo logran jamás. Son pocos los que lo consiguen, y ca- si nadie lo hace siendo joven. Aun así, para la Escola la Gran- ja nada de esto es un impedimen- to para hacer que los niños sean capaces de saber de qué pasta es- tán realmente hechos. Desde la convicción que ser emprendedor no es sólo crear empresas y que es una cosa básica para la vida, la Escola la Granja ha creado unas colonias en las que pretende «po- tenciar las habilidades básicas» que los niños necesitan para ser emprendedores «en sus vidas, tanto en el hábitat familiar como en el profesional». Es por eso que durante 11 ho- ras durante tres días seguidos –que cuestan 93 euros, con todo incluido, gracias a que la Fundació per l’Educació subven- ciona parte del precio total–, los niños tra- bajan las competen- cias necesarias para conseguir los objeti- vos del programa. Así pues, los participan- tes aprenden a cono- cerse más y mejor a sí mismos mientras jue- gan y se divierten. Para conseguirlo, los niños participan en varias actividades especialmente pensadas para conseguir los objetivos que se han planteado los organizadores. Desde tener que colaborar para pasar de un sitio elevado a otro sin tocar el suelo y con un tablón de madera para conseguirlo, has- ta ser guiado a ciegas por un bosque por otro alumno para po- tenciar la confianza y descubrir si se sienten más cómodos guian- do o siendo guiados. De entre todos los ejercicios, el que más dice sobre cómo son las personas es aquél en que se usa un caballo especialmente entre- nado. La codirectora de la Escola la Granja, Cristina Gutiérrez, ex- plica que «los caballos reflejan lo que la gente siente realmente y lo expresan ellos». La experiencia con estos animales ha servido a Gutiérrez para poder afirmar que «muchas veces los niños más tí- midos son líderes naturales y lo descubren cuando se les pone el caballo delante». En este sentido, Gutiérrez también afirma que los caballos son perfectos para que la gente «se conozca a sí misma». Este hecho puede llegar a conse- guir que los niños a los cuales la timidez le impide sacar todo su potencial como líderes, puedan vencerla y desarrollar al máximo sus capacidades. Todas la pruebas que los niños hacen durante los tres días son en grupo, de manera que es necesa- rio que alguien sepa liderar y, lo que es aún más importante, que todos sepan escuchar. Para redondear los efectos prácticos de los ejercicios, des- pués de cada uno, los niños deben reflexionar sobre cómo ha ido y los aciertos y errores que hayan podido haber. La intención final de la Escola la Granja es demostrar a los niños que el emprendimiento no es sólo crear empresas y conseguir el éxi- to profesional gracias a una bue- na idea y mucho esfuerzo, sino, simplemente, llevar a cabo cual- quier idea que se les pase por la cabeza, sea en el ámbito que sea. Según Gutiérrez, «ser emprende- dor lo es todo en la vida, es conse- guir hacerte un camino propio». Cabe destacar que las colonias de la Escola la Granja –que cuen- tan con educadores especializados en educación emocional– no están sólo pensadas para escuelas, que son las que ocupan las instalacio- nes entre octubre y marzo, sino que en verano también hacen «co- lonias de aventura emocional» con los mismos objetivos pero con una duración de siete días, por lo que los niños tienen más tiempo para conocer sus talentos y debilidades. De todos modos, el trabajo de > EDUCACIÓN Despertar el liderazgo natural de los niños y adolescentes La Escola la Granja propone unas colonias donde los alumnos trabajan con el fin de conocer sus talentos y capacidades y superar sus limitaciones. Por Marc Vidal Ordeig El trabajo en equipo y la superación de las barre- ras personales son dos de los ejes de las activi- dades de la Escola La Granja. / EL MUNDO Los caballos expresan los sentimientos y emociones de quienes tienen delante «Ser emprendedor no es sólo crear nuevas empresas, influye en todo en la vida» la Escola la Granja para enseñar a los niños a ser emprendedores no termina en estas colonias ya que a partir del mes de octubre empeza- rán lo que se conoce como Apa- drinamiento, una actividad que empezará con la colaboración de Infojobs. La empresa aportará re- cursos humanos para conferen- cias en la escuela Montessori de L’Hospitalet de Llobregat, en las que explicarán a los alumnos có- mo ha sido su experiencia profe- sional y los puntos donde han te- nido errores y aciertos en sus vi- das. También habrá charlas sobre qué buscan las empresas a la hora de contratar gente, por ejemplo. El objetivo final es acercar la es- cuela a la vida real, es decir, con- seguir que aquellos que dentro de unos años tomen el mando de la sociedad sean conscientes de có- mo son y puedan ayudar a sus conciudadanos a mejorar. La diversión y la variedad entran en las etiquetas del ropero infantil Todo empezó al intentar resolver un problema doméstico: cómo identificar unos zapatos. La exten- dida costumbre de los centros edu- cativos de pedir a los padres que to- da la ropa y complementos de los niños esté identificada con el nom- bre, especialmente cuando se van de convis, ha generado una amplia diversidad de herramientas (rotula- dores permanentes, cintas textiles, sellos para estampar...) para facili- tar esta tarea. Pero por lo general sólo sirven para las prendas de ves- tir y poca cosa más. De ahí que Stephanie Marko mo- viera cielo y tierra para encontrar algo con qué marcar los zapatos de uno de sus hijos de una forma dis- creta y permanente. La búsqueda fue un fracaso pero le sirvió para conocer a fondo la oferta existente en este segmento de mercado y adi- vinar que tenía grandes ideas para abrir un negocio. Se puso en con- tacto con María José Rivas, amiga, vecina y también madre, y dos años después nació Stikets. La compa- ñía, con sede en Igualada, se puso en marcha en enero del 2010 y ofre- ce etiquetas para marcar ropa, za- patos y objetos (desde biberones y tuppers hasta raquetas y mochilas). Debido a los materiales utilizados, las etiquetas Stikets son resistentes a la lavadora, lavavajillas o el con- gelador, sin desengancharse ni per- derse su efectividad. En un año y medio han recibido 7.000 pedidos, básicamente en España pero tam- bién de Uruguay, Chile, Francia, Alemania o los EEUU. A este últi- mo país han tenido que recurrir pa- ra poder abastecerse de algunas de sus materias primas. Stikets opera fundamentalmen- te a través de su página web pero también existen los llamados agen- tes stikets, personas que promocio- nan el producto, y las mamás sti- kets que lo difunden entre otras posibles compradoras, en ambos casos a cambio de una comisión dineraria o con productos gratis. Casi sin quererlo, el negocio de estas dos madres emprendedoras ha dejado de dirigirse únicamente al sector infantil porque reciben pedi- dos de centros de atención a las per- sonas mayores y de empresas. Entre las solicitudes más curiosas, Stepha- nie y María José recuerdan las del pedido en que sólo ponía «papá», «Debería ser para alguien cansado de que su hijo tomara prestadas sus prendas, sin permiso», explican di- vertidas. / M. TERESA COCA >STIKETS La empresa, con sede en Igualada y creada en 2010, ha recibido ya 7.000 pedidos Impreso por . Prohibida su reproducción.

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La granja despierta el liderazgo de los niños y adolescentes

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EL MUNDO / AÑO XXIV / MARTES 17 DE JULIO DE 2012 INNOVADORES 9

Conocerse a uno mismoes de las cosas más di-fíciles que existen parael ser humano. A mu-

chos les cuesta toda una vida yotros no lo logran jamás. Sonpocos los que lo consiguen, y ca-si nadie lo hace siendo joven.

Aun así, para la Escola la Gran-ja nada de esto es un impedimen-to para hacer que los niños seancapaces de saber de qué pasta es-tán realmente hechos. Desde laconvicción que ser emprendedorno es sólo crear empresas y quees una cosa básica para la vida, laEscola la Granja ha creado unascolonias en las que pretende «po-tenciar las habilidades básicas»que los niños necesitan para seremprendedores «en sus vidas,tanto en el hábitat familiar comoen el profesional».

Es por eso que durante 11 ho-ras durante tres días seguidos–que cuestan 93 euros, con todoincluido, gracias aque la Fundació perl’Educació subven-ciona parte del preciototal–, los niños tra-bajan las competen-cias necesarias paraconseguir los objeti-vos del programa. Asípues, los participan-tes aprenden a cono-cerse más y mejor a símismos mientras jue-gan y se divierten.

Para conseguirlo, los niñosparticipan en varias actividadesespecialmente pensadas paraconseguir los objetivos que sehan planteado los organizadores.Desde tener que colaborar parapasar de un sitio elevado a otrosin tocar el suelo y con un tablónde madera para conseguirlo, has-ta ser guiado a ciegas por unbosque por otro alumno para po-tenciar la confianza y descubrirsi se sienten más cómodos guian-do o siendo guiados.

De entre todos los ejercicios, elque más dice sobre cómo son laspersonas es aquél en que se usaun caballo especialmente entre-nado. La codirectora de la Escolala Granja, Cristina Gutiérrez, ex-plica que «los caballos reflejan loque la gente siente realmente y loexpresan ellos». La experienciacon estos animales ha servido aGutiérrez para poder afirmar que«muchas veces los niños más tí-midos son líderes naturales y lodescubren cuando se les pone elcaballo delante». En este sentido,Gutiérrez también afirma que loscaballos son perfectos para que lagente «se conozca a sí misma».

Este hecho puede llegar a conse-guir que los niños a los cuales latimidez le impide sacar todo supotencial como líderes, puedanvencerla y desarrollar al máximosus capacidades.

Todas la pruebas que los niñoshacen durante los tres días son engrupo, de manera que es necesa-rio que alguien sepa liderar y, loque es aún más importante, quetodos sepan escuchar.

Para redondear los efectosprácticos de los ejercicios, des-pués de cada uno, los niños debenreflexionar sobre cómo ha ido ylos aciertos y errores que hayanpodido haber.

La intención final de la Escolala Granja es demostrar a los niñosque el emprendimiento no es sólocrear empresas y conseguir el éxi-to profesional gracias a una bue-na idea y mucho esfuerzo, sino,simplemente, llevar a cabo cual-quier idea que se les pase por la

cabeza, sea en el ámbito que sea.Según Gutiérrez, «ser emprende-dor lo es todo en la vida, es conse-guir hacerte un camino propio».

Cabe destacar que las coloniasde la Escola la Granja –que cuen-tan con educadores especializadosen educación emocional– no estánsólo pensadas para escuelas, que

son las que ocupan las instalacio-nes entre octubre y marzo, sinoque en verano también hacen «co-lonias de aventura emocional» conlos mismos objetivos pero con unaduración de siete días, por lo quelos niños tienen más tiempo paraconocer sus talentos y debilidades.

De todos modos, el trabajo de

> EDUCACIÓN

Despertar el liderazgo naturalde los niños y adolescentesLa Escola la Granja propone unas colonias donde los alumnos trabajan con el fin deconocer sus talentos y capacidades y superar sus limitaciones. Por Marc Vidal Ordeig

El trabajo en equipo y lasuperación de las barre-ras personales son dosde los ejes de las activi-dades de la Escola LaGranja. / EL MUNDO

Los caballos expresan lossentimientos y emocionesde quienes tienen delante

«Ser emprendedor no es sólocrear nuevas empresas,influye en todo en la vida»

la Escola la Granja para enseñar alos niños a ser emprendedores notermina en estas colonias ya que apartir del mes de octubre empeza-rán lo que se conoce como Apa-drinamiento, una actividad queempezará con la colaboración deInfojobs. La empresa aportará re-cursos humanos para conferen-cias en la escuela Montessori deL’Hospitalet de Llobregat, en lasque explicarán a los alumnos có-mo ha sido su experiencia profe-sional y los puntos donde han te-nido errores y aciertos en sus vi-das. También habrá charlas sobrequé buscan las empresas a la horade contratar gente, por ejemplo.

El objetivo final es acercar la es-cuela a la vida real, es decir, con-seguir que aquellos que dentro deunos años tomen el mando de lasociedad sean conscientes de có-mo son y puedan ayudar a susconciudadanos a mejorar.

La diversión y lavariedad entranen las etiquetasdel ropero infantil

Todo empezó al intentar resolverun problema doméstico: cómoidentificar unos zapatos. La exten-dida costumbre de los centros edu-cativos de pedir a los padres que to-da la ropa y complementos de losniños esté identificada con el nom-bre, especialmente cuando se vande convis, ha generado una ampliadiversidad de herramientas (rotula-dores permanentes, cintas textiles,sellos para estampar...) para facili-tar esta tarea. Pero por lo generalsólo sirven para las prendas de ves-tir y poca cosa más.

De ahí que Stephanie Marko mo-viera cielo y tierra para encontraralgo con qué marcar los zapatos deuno de sus hijos de una forma dis-creta y permanente. La búsquedafue un fracaso pero le sirvió paraconocer a fondo la oferta existenteen este segmento de mercado y adi-vinar que tenía grandes ideas paraabrir un negocio. Se puso en con-tacto con María José Rivas, amiga,vecina y también madre, y dos añosdespués nació Stikets. La compa-ñía, con sede en Igualada, se pusoen marcha en enero del 2010 y ofre-ce etiquetas para marcar ropa, za-patos y objetos (desde biberones ytuppers hasta raquetas y mochilas).Debido a los materiales utilizados,las etiquetas Stikets son resistentesa la lavadora, lavavajillas o el con-gelador, sin desengancharse ni per-derse su efectividad. En un año ymedio han recibido 7.000 pedidos,básicamente en España pero tam-bién de Uruguay, Chile, Francia,Alemania o los EEUU. A este últi-mo país han tenido que recurrir pa-ra poder abastecerse de algunas desus materias primas.

Stikets opera fundamentalmen-te a través de su página web perotambién existen los llamados agen-tes stikets, personas que promocio-nan el producto, y las mamás sti-kets que lo difunden entre otrasposibles compradoras, en amboscasos a cambio de una comisióndineraria o con productos gratis.

Casi sin quererlo, el negocio deestas dos madres emprendedorasha dejado de dirigirse únicamente alsector infantil porque reciben pedi-dos de centros de atención a las per-sonas mayores y de empresas. Entrelas solicitudes más curiosas, Stepha-nie y María José recuerdan las delpedido en que sólo ponía «papá»,«Debería ser para alguien cansadode que su hijo tomara prestadas susprendas, sin permiso», explican di-vertidas. / M. TERESA COCA

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La empresa, con sedeen Igualada y creadaen 2010, ha recibidoya 7.000 pedidos

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