Prevención de los daños del alcohol en los jóvenes...

SERIE: MATERIALES PARA LA REFLEXIÓN SOBRE POLÍTICAS PÚBLICAS

EN ADICCIONES N° 9

Fundación de drogas australiana

Prevención de los daños del

alcohol en los jóvenes:

intervenciones familiares.

Traducción del original: ‘Preventing alcohol harms in young

people: Family-based interventions. A resource for workers’.

Instituto para la Atención y

Prevención de las Adicciones

Dirección Ejecutiva de

Políticas Públicas

2013; Año de Belisario

Domínguez

2 N°9 Prevención de los daños del alcohol en los jóvenes: intervenciones

familiares. / Materiales de Reflexión sobre Políticas Públicas en Materia de

Adicciones | Dirección Ejecutiva de Políticas Públicas

Serie: Materiales para la reflexión sobre políticas públicas en materia de adicciones N° 9: Prevención de los daños del alcohol en los jóvenes: intervenciones familiares. Traducción del original ‘Preventing alcohol harms in young people: Family-based interventions. A resource for workers’: Ehécatl Paz Aguilar

Instituto para la Atención y Prevención de las Adicciones en la Ciudad de México Dirección Ejecutiva de Políticas Públicas Dirección de Desarrollo de Políticas Públicas Mayo, 2013




PRESENTACIÓN

El Instituto para la Atención y Prevención de las Adicciones en la Ciudad de México (IAPA) tiene

como objetivo general reducir el uso, el abuso y la dependencia de sustancias psicoactivas,

mediante el desarrollo de políticas públicas y programas sociales, a través del diseño de proyectos

de investigación, prevención, formación, tratamiento, rehabilitación e integración social,

impulsando la participación de los sectores público, social y privado, para contribuir a elevar el

nivel de salud y el desarrollo humano de los habitantes de la ciudad de México.

Una de las líneas de trabajo del IAPA está orientada a la búsqueda, recopilación y sistematización

de información local, nacional e internacional que sirva como referente para el diseño e

implementación de las políticas públicas orientadas a reducir el consumo de sustancias

psicoactivas.

Convencidos de la necesidad de difundir mayor información sobre el tema y con el fin de

contribuir en la construcción de políticas públicas y apoyar la toma de decisiones sobre programas

y actividades dirigidas a la atención integral de las adicciones, ponemos a su disposición la Serie:

Materiales para la reflexión sobre políticas públicas en materia de adicciones, que se difundirá de

manera electrónica.

Esperamos que sea de sea de utilidad para los que trabajamos en la solución de este complejo

problema, e invitamos a todos los interesados a participar en este proyecto enviando sus

comentarios y propuestas de información para próximos números, al correo electrónico

[email protected].

A t e n t a m e n t e

Dirección Ejecutiva de Políticas Públicas




“Prevención de los daños del alcohol en los jóvenes: las

intervenciones familiares. Un recurso para profesionales"1

(Traducción del original Leung R, Kennedy V, Kelly AB, Toumbourou JW and

Hutchinson D 2010 ‘Preventing alcohol harms in young people: Family-

based interventions. A resource for workers’, prepared by the Australian

Drug Foundation for NSW Health. Published by NSW Health: Sydney. ©

NSW Health & Australian Drug Foundation 2010.”)

1 Todos los apéndices y anexos de este documento se pueden obtener en línea:

http://www0.health.nsw.gov.au/resources/mhdao/pdf/NSWpreventionpaperwww.pdf




Un recurso para los “profesionales”.

Este recurso ha sido gestionado por salubridad (salud) de Nueva Gales del Sur (NSW2) para

proporcionar información sobre el papel de la familia en la prevención de los daños relacionados

con el alcohol en los jóvenes. Tiene como objetivo informar a las personas interesadas en el tema

de drogas y el alcohol, a los profesionales en los campos de salud mental y trabajo comunitario;

psicólogos, consejeros, promotores de la salud, funcionarios y gestores de proyectos de

prevención , trabajadores sociales, y al equipo responsable de los proyectos de acción sobre

drogas en la comunidad (CDAT3).

El recurso incluye información y consejos prácticos. Los dos objetivos de esta publicación son:

Mejorar la comprensión de los interesados en los nuevos resultados de la investigación

sobre cómo las familias, en especial los padres, pueden prevenir el daño relacionado con

el alcohol entre los jóvenes, y

Proporcionar las "mejores prácticas", ejemplos de medidas eficaces, programas y

estrategias que se pueden utilizar en la práctica profesional para mejorar los servicios a las

familias.

Se solicitó a los autores, identificar a partir de literatura de investigación, algunas acciones,

programas y estrategias que han demostrado ser eficaces en la prevención de daños relacionados

con el alcohol (en los jóvenes). Los autores también han sondeado la opinión (las perspectivas) del

personal de la Oficina de Salud Mental, Alcohol y Drogas e Nueva Gales del Sur, (MHDAO4) y de

cinco informantes clave con experiencia en las áreas de drogas y consumo de alcohol, problemas

indígenas, diversidad cultural y lingüística (CALD5)comunidades, familias y programas sobre

crianza… Los informantes clave fueron entrevistados acerca de sus experiencias de trabajo con los

padres o familias y comentaron sobre las prácticas y los programas actuales.

La oficina de salud mental, alcohol y drogas de Nueva Gales del Sur proporcionó estudios de casos

en los programas que ponen en relieve las prácticas innovadoras.

2 Nueva Gales del Sur.

3 Proyectos de Acción de la Comunidad sobre drogas.

4 Oficina de Salud mental, Drogas y Alcohol.

5 Comunidades Aborígenes, lingüística y culturalmente diversas.




Objetivos conductuales en la prevención de daños relacionados con el alcohol.

Las directrices Australianas para reducir los riesgos de salud de beber alcohol publicadas por el

Consejo Nacional de Salud e investigación médica (NHMRC6 2009) recomiendan que los jóvenes

menores de 18 años no deben consumir alcohol (Tabla 1). La guía se basa en una evaluación de los

daños potenciales a los jóvenes, así como una amplia investigación epidemiológica (NHMRC 2009).

Esto plantea desafíos para los padres ya que muchos jóvenes menores de 15 años han probado el

alcohol. Del mismo modo, la recomendación de que los adultos no deben beber más de cuatro

bebidas estándar en cualquier sesión, puede ser difícil para algunos padres, ya que requerirá la

reducción de sus propios patrones de consumo.

La Tabla 1 compara las orientaciones de la NHMRC con los patrones actuales de consumo de

alcohol en Nueva Gales Sur. El cuadro revela que hay un número considerable de personas, de las

diferentes poblaciones de Nueva Gales del Sur, que consumen alcohol, en patrones que aumentan

su riesgo de daño. Cabe señalar que el cuadro proporciona sólo un resumen y no examina

cuestiones como la regularidad con la que los niños, los jóvenes y los padres se involucran en un

consumo de riesgo.

“TRABAJAR CON PADRES Y FAMILIAS ES UN ÁREA QUE PUEDE SER EFICÁZ SI SE SUMA A

LAS ESTRATEGIAS COORDINADAS DE PREVENCIÓN DEL CONSUMO DE DROGAS Y

ALCOHOL.”

Los profesionales deben estar familiarizados con las recomendaciones del Consejo Nacional de

Salud e Investigación Médica” (NHMRC) para que puedan comunicar los principales riesgos de

salud, a los padres, familias, cuidadores y jóvenes. La Tabla 1 identifica a los grupos de población

que los profesionales deben tener en cuenta en la planificación de sus actividades y los

comportamientos que deben fomentarse en los esfuerzos para reducir el uso nocivo de alcohol.

Las secciones posteriores de este artículo, son ejemplos de programas, estrategias y acciones, que

los profesionales pueden poner en práctica para mejorar los servicios para los padres y los

jóvenes.

6 Consejo Nacional de salud e investigación médica.




Las estrategias que podrían reducir con eficacia los daños relacionados con el

alcohol.

La evidencia sugiere en lugar de cualquier acción o servicio individual el uso de una combinación

de enfoques nacionales, estatales y comunitarios, tienen mayor posibilidad de reducir los daños

relacionados con el uso del alcohol. La gama de estrategias disponibles hace que sea posible

adaptar ésta combinación a las necesidades específicas de las comunidades particulares (Loxley et

al. 2004). El trabajo con las familias y los padres, es un área que puede ser eficaz a través de

estrategias amplias y coordinadas de prevención del alcoholismo y del uso de drogas.

Tabla 1. El reto de reducir el consumo de alcohol en Nueva Gales del Sur

RECOMENDACIONES DEL CONSEJO NACIONAL DE SALUD E INVESTIGACIÓN MÉDICA PARA EL CONSUMO DE ALCOHOL (NHMRC 2009)

POBLACIÓN ESTIMADA EN NUEVA GALES DEL SUR QUE EXCEDEN LOS NIVELES RECOMENDADOS DEL CONSUMO SEGURO DE ALCOHOL.

1. Para los hombres y mujeres sanos, no más de dos bebidas estándar en un día.

Diez por ciento de los hombres y las mujeres en Nueva Gales del Sur beben más de dos bebidas estándar en un día (AIHW 2008a).

2. Para hombres y mujeres sanos, no más de cuatro bebidas estándar en una sola ocasión.

35 por ciento de los hombres y el 29 por ciento de las mujeres en Nueva Gales del Sur beben más de cuatro tragos estándar en una sola ocasión, en promedio es un 32 por ciento (AIHW 2008a).

3a. Para los niños menores de 15 años, es especialmente importante no beber.

Los datos de la encuesta de Salud de estudiantes de Nueva Gales del Sur muestran que el 72 por ciento de jóvenes de 12 a 15 años ha bebido una copa de alcohol alguna vez en su vida(es decir, 72 por ciento de los varones y el 73 por ciento de las mujeres (Centro de Epidemiología e Investigación 2009).

3b). Para los jóvenes entre los 15 a 17 años, la opción más segura es retrasar el inicio del consumo de alcohol durante el mayor tiempo posible.

El inicio promedio del consumo de alcohol en la adolescencia es de 16,9 años (AIHW 2008b). * McAllister (2003) informó también que, aunque la edad media de inicio es de 16 o 17 años, un número significativo de jóvenes inician el consumo de alcohol en edades de 14 o 15 años o menos (aproximadamente el 25 por ciento).*

4. El No beber es la opción más segura para las mujeres que están pensando embarazarse, están embarazadas o en lactancia.

Cuarenta y siete por ciento de las mujeres consumen alcohol durante el embarazo y / o lactancia (Wallace et al. 2007). *

7

7 Australian data reported as recent and representative NSW data not available




Figura 1. Un resumen de las estrategias de prevención recomendadas para

reducir los daños relacionados con el consumo de alcohol y drogas

(modificado de Loxley et al. 2004)

En la Figura 1 se destacan las estrategias específicas (Loxley et al 2004) que incluyen las

intervenciones Universales, familiares, las realizadas a edades tempranas y las intervenciones en la

edad adulta. Cuando se implementan en conjunto, estas tres estrategias de prevención pueden

prevenir y reducir los daños relacionados con el alcohol, ellas han demostrado que:




1. Las intervenciones universales, parentales y del cuidador tienen como objetivo mejorar las

habilidades de crianza y el funcionamiento familiar. Hay evidencia de que estas intervenciones

pueden reducir eficazmente los problemas asociados a las drogas legales como son el alcohol y el

tabaco.

2. Las estrategias de prevención focalizadas en la edad temprana incluyen proporcionar apoyo a la

madre y a las familias vulnerables para asegurar el desarrollo sano del niño a través de la infancia,

y la escuela pre-primaria y primaria.

3. Las Intervenciones enfocadas a adultos incluyen el tratamiento para los padres y otros

miembros de la familia, además de estrategias de reducción de daños a fin de mejorar la salud y

los resultados del tratamiento. Una serie de intervenciones en esta área tienen relevancia en los

problemas de consumo de drogas ilícitas.

“LOS MÓDULOS GENERALMENTE SE CENTRAN EN DESARROLLAR LA INTERACCIÓN

FAMILIAR POSITIVA, LA COMUNICACIÓN FAMILIAR Y LA DISCIPLINA EFICAZ.”

Muchos programas operan a través de estas grandes estrategias. En donde están bien

coordinadas a nivel de la comunidad, las estrategias universales y las focalizadas pueden

efectivamente mejorar la salud de la comunidad.

Aunque no todos los programas descritos en este apartado han sido evaluados con respecto a su

impacto en el uso de sustancias, los resultados preliminares sugieren que la evaluación en un

futuro puede determinar el impacto específico sobre el consumo de drogas y alcohol Los

Programas y Subsidios como el de Salud, Drogas y Alcohol de Nueva Gales del Sur pueden

proporcionar fondos para las actividades de evaluación. (www.health.nsw.gov.au /mhdao)

“LAS ESTRATEGIAS UNIVERSALES Y FOCALIZADAS INDUDABLEMENTE PUEDEN MEJORAR

LA SALUD DE LA COMUNIDAD.”




La evidencia para las estrategias universales, familiares, y de crianza.

Las intervenciones universales que involucran a los padres incluyen:

estrategias que mejoran la comunidad;

la intervención familiar;

a educación de los padres, y

leyes: regulación, vigilancia y cumplimiento.

Estrategias de mejoramiento de la comunidad.

Definición: Acciones coordinadas con el objetivo de promover ambientes sanos en la comunidad. A

menudo los padres son un componente. Aunque la evaluación de estas estrategias de prevención

es limitada se pueden obtener muchos beneficios cuando están bien coordinadas… Por ejemplo,

puede ser una ventaja integrar las intervenciones preventivas dirigidas a los padres y la familia con

las estrategias de otros sectores, como los de educación, salud mental y la prevención del delito

(Figura 1).

A nivel comunitario los esfuerzos para ayudar a las familias han incluido su movilización (por

ejemplo, Proyecto de Acción “Alcohol Kalgoorlie”, www.ndri.curtin.edu.au / investigación / kaap) y

las iniciativas comunitarias (por ejemplo, Good Sports, www.goodsports.com.au,eventos

comunitarios que proporcionan actividades alternativas al consumo de alcohol), pero no ha habido

una investigación extensa sobre su eficacia. El Proyecto de Acción “Alcohol Kalgoorlie” consta de

varios componentes, incluyendo la movilización comunitaria (trabajando con coaliciones

comunitarias), educación sobre el alcohol en la escuela y los esfuerzos para cambiar los

comportamientos y las actitudes de la comunidad local. Un programa comunitario similar se lleva

a cabo en los Estados Unidos de América (E.U.A.) incluyó un componente de educación a los

padres y mostró un retraso en el inicio del consumo de alcohol por parte de los jóvenes (Perry et

al. 1996).

Un recurso útil de la movilización de la comunidad es la Fundación Australiana de Drogas, Red

Comunitaria de Acción Contra el Alcohol, CAAN8, (www.caan.adf.org.au). Su objetivo es movilizar a

la comunidad a tomar medidas sobre los problemas de alcohol, tales como la comercialización, la

8 Acción coordinada para promover ambientes comunitarios sanos.




promoción, productos y oferta. Hay una página en el sitio web CAAN que detalla las acciones que

los miembros interesados de la comunidad pueden tomar. Un recurso para la comunidad

disponible en Nueva Gales del Sur es el CDATs9 (www.communitybuilders.nsw.gov.au /

drugs_action). Estos son los grupos comunitarios apoyados por Salud de Nueva Gales del sur para

aumentar y mejorar la sensibilización de la comunidad en general, acerca de las drogas y el

alcohol, y para ayudar a las comunidades a desarrollar sus propias respuestas a los problemas de

drogas locales.

Intervenciones familiares.10

Definición: Uno o más padres, hijos y otros miembros de la familia reciben información y / o un

curso de instrucción en conjunto destinado a fomentar

el desarrollo saludable de la familia.

Hay evidencia de la eficacia de las intervenciones en la

familia, que viene de los estudios controlados. La

mayoría -de los estudios de prevención a gran escala,

que utilizan intervenciones familiares se han llevado a

cabo en los E.U.A. (Foxcroft et al. 2003). El Programa de

Fortalecimiento a las Familias (SFP11) fue desarrollado

en los E.U.A., sobre la base de los principios de la

terapia conductual familiar. El programa se compone

de módulos de diferente duración que están diseñados

para hacer frente a los diferentes niveles de riesgo y los

problemas familiares. El programa es para las familias

con niños pequeños, para los jóvenes en los mediados

de su adolescencia y contiene una mezcla de estrategias enfocadas en los padres, los niños y la

9 Proyectos de Acción de la Comunidad sobre drogas. 10 Nota. La inclusión de la familia en el tratamiento de la adicción se considera importante por muchas razones ya que el consumo de sustancias es esencialmente un problema familiar y social más que individual. Dentro de este marco el uso de drogas incluye "otros significados", porque a) "ocurre” en las familias (y sus amigos), b) daña a otros, c) las familias y amigos participan y pueden perpetuar la adicción activa y d) los individuos son un recurso potencial para el tratamiento y recuperación). Este es un cambio significativo en el pensamiento que tiene una serie de consecuencias para la investigación y la prestación de servicios. 11

Programa de fortalecimiento de las familias.




familia. Los módulos generalmente se enfocan en el desarrollo de las interacciones familiares

positivas, la comunicación familiar y disciplina efectiva.

Las sesiones a los padres están centradas en:

el uso adecuado del refuerzo;

fomentar la iniciativa y la creatividad;

reducir las interacciones destructivas;

aumentar la cercanía;

disciplina constante y

reuniones familiares para anticiparse a los problemas.

Las sesiones infantiles están centradas en:

construcción de habilidades de comunicación,

promover metas saludables,

capacidad de resiliencia y solución de problemas,

resistir la presión de grupo y manejo de la ira

“LAS SESIONES SE CENTRAN EN HABILIDADES TALES COMO EL ESTABLECIMIENTO

DE REGLAS FAMILIARES ACERCA DE LAS DROGAS, MEJORAR LA COMUNICACIÓN

FAMILIAR Y REFORZAR HABILIDADES DE RECHAZO”.

El Programa de Fortalecimiento a las Familias de Iowa (ISFP12) adaptó la SFP para ofrecer una

versión más breve, conveniente para su difusión universal (a toda la población) en contextos como

las escuelas primarias. La SFP ha sido ampliamente utilizada en los E.U.A. y el Reino Unido, pero no

somos conscientes de que estos programas universales se lleven a cabo en Australia.

Evidencia de evaluaciones bien realizados indican que los programas ISFP reducen el consumo y el

abuso del alcohol en los jóvenes, en el mediano plazo (2-4 años; Spoth, Redmond y Shin 2001) y

reducen la frecuencia de la intoxicación (Spoth et al 2009.). La Iniciativa también tiene efectos

positivos para cuestiones más generales de comportamiento como la agresividad y la depresión y

12

Programa de fortalecimiento de familias de Iowa.




también mejora la calidad de las interacciones familiares. La Iniciativa necesita de recursos pero

parece costo-efectiva (Spoth, Guyll & Day 2002).

Educación para los padres

Definición: Uno o ambos padres reciben la información y / o un curso de instrucción destinado a

fomentar el desarrollo familiar saludable.

Existe evidencia de la eficacia de la educación para

padres, a partir de estudios controlados. Las

intervenciones que involucran la educación de los

padres, van desde la distribución de mensajes únicos,

usando estrategias sociales de mercadeo hasta cursos

de capacitación que involucran contacto profesional

en varias sesiones. Hayes et al. (2004) ofrece una

revisión de la literatura y las recomendaciones para

las intervenciones para ayudar a los padres a manejar

el uso de alcohol entre los adolescentes.

(www.aifs.gov.au/institute/pubs/resreport10/main.ht

ml).

El programa Preparing for the Drug Free Years

(Preparación para los años libre de drogas) (PDFY13)

(Spoth, Redmond y Shin 2001) es un programa que ha

sido desarrollado en los E.U.A. para ayudar a los

padres a reducir el riesgo en el consumo de

sustancias, mediante el fortalecimiento de los

factores de protección en la familia (por ejemplo,

fortalecimiento de apego, estableciendo normas claras de comportamiento). El programa PDFY

implica una serie de sesiones estructuradas dirigidas a los padres de los niños en el rango del

cuarto al octavo grado. Las sesiones se centran en habilidades tales como el establecimiento de

13

La preparación para los años libre de las drogas.

http://www.aifs.gov.au/institute/pubs/resreport10/main.html

http://www.aifs.gov.au/institute/pubs/resreport10/main.html




reglas al interior de la familia en materia de consumo

de drogas, mejorar la comunicación familiar y el

refuerzo de habilidades de rechazo.

La eficacia de PDFY es evidente en:

cambios positivos en el comportamiento de

los padres;

disminución de la agresividad y la rebeldía;

mejora del rendimiento escolar;

Vínculos más estrechos con los grupos

sociales positivos y

menos eventos relacionados con las drogas

en la escuela.

Puede producir una reducción sostenida en el

consumo de alcohol de los jóvenes en el mediano

plazo (Spoth, Redmond y Shin 2001). El trabajo de

desarrollo y prueba de una versión australiana aún

no se ha llevado a cabo.

El programa Australiano Parenting Adolescents, a Creative Experience (“Criando adolescentes. Una

experiencia creativa”) (PACE14; Toumbourou y Gregg 2002) tiene algunos paralelismos con el PDFY,

en ambos se trabajan siete semanas y los padres se centran en la comunicación, el manejo de

conflictos y el desarrollo del adolescente. En un estudio de comparación (usando la práctica

habitual en las escuelas, como la comparación) de 577 familias con tres meses de seguimiento, la

capacitación de los grupos de PACE en las escuelas, se tradujo en la reducción de los conflictos

familiares, menos delincuencia y menos poli-consumo. Los grupos de PACE se ven facilitados por

una serie de personas, incluidos los profesionales en el tema de drogas y alcohol, el personal

escolar y los profesionales en familia. El manual Parenting Adolescents, A Creative Experience! (del

(PACE), Jenkin y Bretherton, está disponible en línea http://shop.acer.edu.au/acer-

14

Criando adolecentes, una experiencia creativa.




shop/group/LC/34) y los programas de capacitación pueden ser organizados a través de los

servicios sociales jesuitas en Victoria.

El programa The Resilient Families (Familias Resilientes) fue desarrollado en Australia para

proporcionar un modelo de educación que integrara la prevención del uso de las drogas y el

alcohol para padres enfocada en las escuelas, (libro de trabajo para los padres, y sesiones breves y

extendidas de educación para los padres del grupo-PACE, son facilitadas por profesionales

capacitados). El programa produce mejoras a corto plazo (1-2 años) en los factores que influyen en

el riesgo de consumo de alcohol (por ejemplo, problemas de adaptación escolar y problemas de

apego a la familia) y la participación de la familia se asocia con la disminución del consumo de

alcohol en adolescentes (Shortt et al. 2007).

Informantes clave consultados para esta investigación destacan la importancia de los padres como

modelos positivos en relación con el consumo de alcohol. Loxley et al. (2004) apoya esta idea,

poniendo en relieve la relación entre el uso de drogas y alcohol de los adolescentes con el modelo

que los adultos proporcionan, incluidos los padres (Figura 1). Esto enfatiza la importancia de

abordar al mismo tiempo el consumo de drogas o alcohol en los jóvenes y sus modelos adultos.

Los informantes consideraron importante la información sobre las drogas y el alcohol, además

todos creían que los padres necesitan:

Información sobre cómo comunicarse eficazmente con los adolescentes;

Información de crianza en general e información sobre la adolescencia y la salud mental

de los adolescentes.

Los informantes discutieron lo que consideraban como medios eficaces de comunicar la

información a los padres que pueden ayudar a prevenir o reducir la probabilidad de que sus hijos

desarrollaran problemas con el consumo de drogas y alcohol. Estos son:

Capacitar a los padres para ser educadores de pares acerca de las drogas y el alcohol y la

forma de comunicarse con los adolescentes (La información sobre un programa de

educación de pares para los padres a cargo del Centro Manly Drug Education and

Counselling (MDECC) (MDECC) se presenta en el Ejemplo de caso 1;

foros de discusión en las comunidades locales y




programas de educación y de información respecto a drogas y alcohol en las escuelas.

Leyes, regulación, vigilancia y aplicación.

Definición: El uso de la ley (leyes) su regulación, vigilancia y estrategias de aplicación para reducir

la oferta de alcohol e intervenir con los infractores para evitar el uso indebido de alcohol entre los

jóvenes y los problemas relacionados. Existe evidencia de la eficacia de las políticas como las de

aumentar la edad legal para el suministro y posesión de alcohol de 18 a 21 años. Se ha encontrado

que los padres son menos propensos a suministrar alcohol a los adolescentes, si la ley prohíbe a los

jóvenes beber hasta los 21 años de edad (Yu 1998). Sin embargo, la implementación de estas

políticas puede ser impopular.

Una serie de políticas en los estados australianos intentan influir en los comportamientos de los

padres. En Nueva Gales del Sur es ilegal suministrar alcohol a menores de edad siendo la

excepción cuando los padres ofrecen alcohol a sus hijos en casa. La campaña “Supply Means

Supply” ( "ofrecer es ofrecer”) lanzada en Nueva Gales del Sur con el objetivo de reducir el




consumo y el acceso de los jóvenes menores al alcohol creando conciencia sobre los delitos y las

sanciones relacionadas con el suministro de alcohol a menores de edad. Nueva legislación ha sido

promulgada recientemente en Queensland y Tasmania para regular el suministro de alcohol a

menores de manera más estricta. Otros estados tienen menos prohibiciones para el suministro a

menores de edad. Actualmente no existe evidencia sobre la eficacia de dicha legislación.

Las leyes que establecen límites legales sobre los niveles de alcohol en la sangre del conductor,

junto con estrategias de vigilancia, tales como las pruebas de drogas y alcohol en carretera han

sido eficaces en lo que respecta a la reducción de muertes y lesiones. En Nueva Gales del Sur y

otros estados, los padres de los jóvenes conductores cuentan con materiales educativos que los

instan a apoyar y reforzar las prácticas de seguridad vial y las políticas de reducción de daños.




La evidencia de las estrategias específicas de prevención a edades tempranas. La

Prevención durante la edad temprana se puede proporcionar a través de versiones específicas del

Programa “Positive Parenting Program” (Triple P) (“Paternidad Positiva”)( y el SFP15.

Desarrollado en Australia y ahora implementado internacionalmente, el programa Triple P es el

programa de educación para los padres mejor evaluado. El programa no es específico para la

prevención del uso de drogas y alcohol, pero se centra en la reducción de problemas de conducta

en niños, un factor de riesgo importante en el uso de drogas y alcohol entre los adolescentes.

Están disponibles un conjunto de estrategias en varios niveles de para atender las diferentes

necesidades de información de los padres que buscan ayuda (Sanders 2008):

◗Nivel 1, es un programa universal y ofrece información psico-educativa (por ejemplo,

información sobre las motivaciones de la conducta del niño, las técnicas de manejo del

estrés para padres) en un formato grupal.

Niveles 2 a 4, apuntan progresivamente hacia niveles de riesgo más altos, y se ofrecen

formatos individuales, de grupo o de autoayuda.

El nivel 5 es un programa familiar de intervención conductual que se ocupa de los

problemas complejos, como el conflicto matrimonial y la depresión de los padres.

El programa hace hincapié en el manejo de la conducta de los niños, incluyendo el uso de

estrategias disciplinarias apropiadas y consistentes y el uso de intercambios familiares

gratificantes. Existe evidencia de que el programa fue efectivo en la reducción de lesiones en los

niños y el abuso en las poblaciones de Carolina del Norte en los EE.UU donde se llevó a cabo. En

Nueva Gales del Sur, se ejecutan actualmente dos programas en poblaciones específicas, estos

son:

Safe Start “(“Comienzo seguro”): identifica y apoya a las mujeres con problemas sociales y

emocionales antes y después del nacimiento de un bebé, y

School-Link (“Vinculo escolar”): que promueve la salud mental y mejora la prevención, el

tratamiento y el apoyo de adolescentes con problemas de salud mental. (ver

www.health.nsw.gov.au/mhdao/programs_initiatives.asp).

15

Strengthening Families Program (SFP)




La evidencia de las estrategias de prevención dirigidas a adultos.

Las Intervenciones dirigidas a los adultos incorporaran el tratamiento para los padres e incluyen

los programas “Parents Under Pressure” (“padres bajo presión”) y Behavioural Exchange Systems

Training (“sistemas de capacitación para el cambio de comportamiento”) El sistema de padres bajo

presión se ha desarrollado como un programa terapéutico estructurado para orientar a los

profesionales acreditados a ayudar a los padres en el tratamiento de drogas. El programa de

sistemas de capacitación para el cambio de comportamiento (Toumbourou y Bamberg 2008)

proporciona un formato estructurado para ayudar a los padres preocupados por el uso de drogas

en adolescentes (véase el estudio de caso 2).

Dawe et al. (2006) ofrecen una revisión de la literatura y emite recomendaciones para ayudar a los

padres que tienen problemas con el consumo de drogas. Frye et al. (2008) revisa las




intervenciones para ayudar a los familiares sobrios de una familia que buscan ayuda por el

consumo de drogas de otro miembro de la familia.

Una serie de programas y servicios innovadores enfocados en los padres por consumo de drogas y

alcohol están disponibles en Nueva Gales del Sur (por ejemplo, PAUSE, véase el estudio de caso 3).

Los programas de prevención orientados a la familia tienen un gran potencial para ser adaptados a

los retos y necesidades culturales de los pueblos aborígenes. Versiones culturalmente específicas

del Programa de Fortalecimiento a las Familias han demostrado ser eficaces con los pueblos

indígenas de los E.U.A, Alaska y Canadá.

Los Servicios comunitarios “Intensive Family Based Service” (IFBS) (“Servicios Intensivos Basados

en la Familia (IFBS16)”) es un programa de intervención en la protección del niño principalmente

para las familias aborígenes en Nueva Gales del Sur. Los IFBS tienen como objetivo proteger a los

niños, evitar el cuidado “fuera del hogar” y la construcción de habilidades familiares, trabajando

en colaboración con la familia y la comunidad. Una evaluación del programa en 2008 demostró un

impacto significativo en problemas de los cuidadores con respecto al uso drogas y alcohol, además

de problemas de salud mental y abandono, -. Las familias que son apoyas por el IFBS tuvieron

significativamente menos informes (llamadas de atención) en promedio durante los períodos

posteriores a la intervención (3, 6 y 12 meses), que durante los mismos períodos previos a la

intervención- (Departamento de Justicia de Nueva Gales del Sur y Oficina del Fiscal General,2008).

“LOS PROBLEMAS DE DROGAS Y ALCOHOL TIENEN ATRÁS UNA LARGA HISTORIA DE

PROBLEMAS DIVERSOS DE SALUD MENTAL, ABUSO SEXUAL, ENFERMEDAD CRÓNICA,

VIOLENCIA DOMÉSTICA, DESPOJO Y VIOLENCIA INTER-GENERACIONAL, DE HECHO, TODA

UNA COLECCIÓN”

Un informante clave habló sobre cuestiones específicas de los aborígenes e indicó que

proporcionar a los padres información y consejos de crianza podría ser útil ya que las razones

detrás de los problemas de drogas y alcohol en los jóvenes aborígenes eran profundas y

complejas. Los problemas de drogas y alcohol tienen una larga historia, son una mezcla de

problemas de salud mental, abuso sexual, enfermedades crónicas, violencia doméstica, despojo y

violencia inter-generacional, de hecho toda una colección. Él sugirió que los cambios sociales y la

16

Servicios Comunitarios Intensivos Basados en la Familia.




asistencia coordinada de múltiples estrategias podrían ser necesarios para lograr un cambio.

Un informante clave con una gran experiencia de trabajo en las comunidades con diversidad

cultural y lingüística (CALD) destacó la importancia de programas adaptados y de la información.

Señaló que es importante reconocer que el conocimiento sobre las drogas y el alcohol puede ser

muy bajo en las CALD y que la vergüenza y el estigma asociado a los problemas de consumo de

sustancias pueden ser muy profundos. El informante señaló que la radio en la comunidad puede

ser un medio muy eficaz para comunicar información a los adultos sobre drogas y alcohol en las

comunidades (CALD), incluyendo a los que son padres. En el pasado, su organización había hecho

que los médicos generales bilingües participaran en sesiones de radio sobre los problemas de las

drogas y alcohol. Este tipo de sesiones permite a los miembros de las comunidades con diversidad

cultural y lingüística (CALD) hacer preguntas acerca de las drogas y el alcohol que pueden ser

contestadas sin la necesidad de identificarse, evitando así la vergüenza y el estigma.

En resumen, los programas de prevención para las familias y los padres se muestran prometedores

y representan enfoques nuevos y emocionantes que pueden ser rentables y complementarias a los

programas de prevención existentes, tales como los de “drogas en el aula” y los programas de

prevención del alcoholismo.




Consejos prácticos para que los profesionistas transmitan a los padres.

Como se ha expuesto anteriormente, las evidencia para asesorar a los padres sobre el consumo de alcohol en los jóvenes es limitada y está atrasada en áreas como el manejo de la conducta infantil. Sin embargo, los padres juegan un papel importante en el desarrollo de sus hijos, sobre todo en lo que respecta a la prevención / retraso / reducción del uso de drogas y alcohol. Los siguientes consejos son resultado de prácticas evaluadas y que parecen prometedoras sobre la base de la investigación longitudinal.

Para prevenir o retrasar el uso de drogas y el alcohol en sus hijos, los padres pueden:

Fijarse en sus propios patrones de consumo de alcohol y los valores que comunica a sus adolescentes con respecto a estas pautas (Hayes et al 2004;.. Short et al 2007).

Escuchar y apoyar activamente a sus hijos a través de la participación en la comunidad escolar. Programar actividades familiares sanas y fomentar alternativas al consumo de alcohol (Shortt et al. 2007). Un informante indicó que él piensa que es importante que las familias alienten a sus hijos a estar vinculados con sus comunidades a través del deporte y otras actividades recreativas desde una edad temprana.

Discutir y comunicar claramente las expectativas sobre el uso y las situaciones de riesgo relacionadas con el alcohol (Kosterman et al. 2000) . La evidencia indica que la demora en el inicio del consumo de alcohol hasta los 18 años o por el tiempo que sea posible, reduce el riesgo de daños relacionados por esa sustancia.

Estar de acuerdo sobre las consecuencias que traerá romper las reglas y/o expectativas familiares (Toumbourou y Bamberg 2008). Algunos de los informantes comentaron que era importante dar información general sobre límites a los padres y cómo el ser flexible puede ser eficaz y útil.

Ensaye cómo van a comunicar estas expectativas y consecuencias. Planifique la reunión y hable en el momento en que hay un mínimo de presión / estrés. Explique con claridad y de modo directo las razones de estas reglas (Toumbourou y Gregg 2002).

Evite tratar de comunicarse en momentos en que emociones como la ira y la frustración son muy altas. Los informantes clave hablaron de la importancia de alentar a las familias a no tratar de convencer durante una acalorada discusión.

Mantenerse en contacto con los maestros, aprender acerca de las fortalezas y debilidades de sus hijos, fomentar y desarrollar habilidades, que hagan mayores las gratificaciones y la conexión con la escuela. Estas gratificaciones no tienen que ser específicamente académicas, pero podrían ser deportivas o logros relacionados con las artes. (Shortt et al. 2007).

Mantenga contacto habitual con los anfitriones de las fiestas para comprobar el nivel de supervisión, la disponibilidad de alcohol, contactos de emergencia, toque de queda y los medios para volver a casa. Si los términos no son adecuados los padres deben considerar no permitir la asistencia y explicar la razón de ello. Algunos de los informantes clave, comentó que el establecimiento de una buena relación (si es posible) con los padres de los amigos de los compañeros es aconsejable y deseable.




A PESAR DE LOS MEJORES ESFUERZOS, LOS JÓVENES PUEDEN EMPEZAR A USAR ALCOHOL. UNA VEZ QUE LOS ADOLESCENTES HAN EMPEZADO A UTILIZAR ALCOHOL LOS PADRES DEBEN HABLAR CON ELLOS ACERCA DE LAS PRÁCTICAS QUE PUEDEN REDUCIR EL DAÑO.

Algunos consejos para los padres incluyen:

Subrayar que si bien no se está de acuerdo en que sus hijos tomen alcohol, si ellos eligen beber, la alternativa es reducir el consumo de alcohol, ya que es la opción más segura.

Muchos padres eligen comprar alcohol en un esfuerzo por alentar a los adolescentes hacia el consumo moderado, sin embargo, no está claro si tales prácticas reducen el consumo o los daños. Una estrategia alternativa que tiene una base razonable en la investigación longitudinal es el negociar para que los adolescentes consuman alcohol con menor frecuencia. Si los adolescentes de 17 años consumen alcohol menos de una vez a la semana tendrán menos riesgos de problemas por alcohol más adelante en su vidas. (Toumbourou et al. 2004).

Se debe buscar atención médica apropiada en los casos de intoxicación por alcohol (ebriedad, congestión), especialmente cuando una persona joven está inconsciente debido a ello. Una joven pueda que tenga que ser monitoreado para reducir el riesgo de asfixia por el vómito. Los padres deben ser alentados a mantener la calma y tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los jóvenes.

Retos

Uno de los retos clave de los programas dirigidos a los padres, en lo que respecta al uso de drogas

en adolescentes, ha sido su reclutamiento y permanencia. Spoth et al. (2005) encontró que de 900

familias elegibles menos del 30 por ciento aceptó las invitaciones a participar en las intervenciones

SFP17 / PDFY18.

“...LOS MEDIOS ÉTNICOS Y LA RADIO PARECEN SER BASTANTE EFICACES PARA HACER

LLEGAR INFORMACIÓN A LAS COMUNIDADES [ABORÍGENES], PARTICULARMENTE AL

PÚBLICO MAYOR, COMO SON LOS ADULTOS Y LOS PADRES.”

Parece probable que asistir a las sesiones de grupo es difícil para las familias (debido al transporte,

al cuidado infantil) y que esto tuvo un efecto negativo sobre el reclutamiento y la participación.

Los retos para el reclutamiento de los padres no son exclusivos de los E.U.A. El programa PACE19,

17

Programa de fortalecimiento de las familias. 18

La preparación para los años libre de las drogas. 19

Criando adolecentes, una experiencia creativa.




que es de intensidad similar a la SFP / PDFY, logró reclutar únicamente el 10 por ciento de los

padres elegibles. Cuando los resultados de PACE se combinan con estudios de investigación

internacional más rigurosos, es evidente que las estrategias de prevención familiar son eficaces,

pero hay espacio para la mejora de la disponibilidad de este tipo de programas.

Los Programas para padres que incluyen información atractiva, breve y aguda, es probable que

puedan alcanzar a los padres con mayores riesgos, que las intervenciones que requieren

desplazamientos y tiempo. En Australia, se ha invertido en programas breves de prevención en el

hogar para padres, por ejemplo, el proyecto “SHIELD” (“Escudo”), desarrollado por el Profesor

Adrian Kelly y actualmente en proceso de evaluación en la Universidad de Queensland,

proporciona a los padres apoyo práctico y capacitación en habilidades en una sola sesión, con

seguimiento continuo y apoyo telefónico, (Kelly 2009: para más información email

[email protected]).

“LOS PROGRAMAS PARA PADRES QUE INCLUYEN INFORMACIÓN ATRACTIVA, BREVE Y

AGUDA, ES PROBABLE QUE PUEDAN ALCANZAR A LOS PADRES CON MAYORES RIESGOS,

QUE LAS INTERVENCIONES QUE REQUIEREN MAYORES DESPLAZAMIENTOS Y TIEMPO.”

Conclusión

Hay pruebas de que las intervenciones familiares y la educación de los padres son estrategias

efectivas en la prevención de los daños relacionados con el alcohol entre los jóvenes. Este artículo

subraya estrategias específicas que involucran a las familias e incluyen la movilización comunitaria,

la intervención familiar, la educación de los padres y la colaboración con la policía, escuelas y

organizaciones comunitarias. También ofrece una serie de ejemplos prácticos que los trabajadores

pueden utilizar para ayudar a las familias y a los padres para evitar los problemas de alcohol entre

los jóvenes.

Los Profesionales de la salud en Nueva Gales del Sur pueden desempeñar un papel valioso a través

de su trabajo en colaboración con las familias para hacer frente a los problemas del consumo de

alcohol y deben unirse a las redes profesionales como FADNET20 (www.fadnet.org.au) para

organizar y participar en actividades de formación. También los Profesionales de la salud

20

La Red de Familia, Alcohol y Drogas.

mailto:[email protected]




interesados en el diseño o la implementación de intervenciones en la familia deben establecer

relaciones con universidades y otras instituciones para evaluar sus intervenciones.

Algunos de los programas de educación dirigidos a los padres están disponibles en Nueva Gales del

Sur y Australia. La Oficina de Salud mental, Drogas y Alcohol motiva a los profesionales que

trabajan en el tema de drogas y alcohol en Nueva Gales a incorporar algunas de las estrategias

prometedoras descritas en este documento en su práctica.

Referencias

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Recursos

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Recursos aborígenes >>Aboriginal Information and Support Needs Assessment for Families and Carers >>Aboriginal Carers and Training (AFACT)—No Shame, No Blame! Family Comic >>Aboriginal Carers and Training (AFACT)—No Shame, No Blame! Workers Guide www.health.nsw.gov.au/pubs/a-z/a.asp >>Your Guide to Dealing with Teenagers and Grog >>Your Guide to Dealing With Grog [email protected] 02 9424 5946 www.communitybuilders.nsw.gov.au/drugs_action/aboriginalguide.html

Servicios de apoyo Holyoake 02 9904 2700 Al-Anon Family Groups 02 9570 3400 www.al-anon.alateen.org/australia ARAFMI NSW 1800 655 198 www.arafmi.org Carers NSW 1800 242 636 www.carersnsw.asn.au Carers NSW Aboriginal and Torres Strait Islander Carer Program

Support services for children and young people Kids Helpline 1800 551 800 www.kidshelpline.com.au Headspace www.headspace.org.au Young Carers 1800 242 636 www.youngcarersnsw.asn.au Youth Drug Support www.yds.org.au Reach Out! www.reachout.com.au




1800 242 636 Youth Solutions 02 4628 2319

Other information and support services Network of Alcohol and other Drugs Agencies (NADA) 02 9698 8669 www.nada.org.au Mental Health Coordinating Council 02 9555 8388 www.mhcc.org.au FamS (NSW Family Services Inc) 02 9692 9999 www.nswfamilyservices.asn.au Community Services 132 111 www.community.nsw.gov.au NSW Users and AIDS Association Inc (NUAA) 1800 644 413 www.nuaa.org.au Drug and Alcohol Multicultural Education Centre (DAMEC, CALD service) 02 9699 3552 www.damec.org.au Druginfo (NSW Department of Health) www.druginfo.nsw.gov.au Australian Drug Foundationwww.adf.org.au Telephone support lines Family Drug Support 24 hour: 02 9818 6166 or 1300 368 186 Co-Exist NSW (CALD line) 1800 648 911 Lifeline 13 11 14 Parent Line 132 055

Alcohol and Drug Information Services (ADIS) ADIS is a 24 hour, centralised intake line for public drug and alcohol services. ADIS also provides information, counselling, referral and advice to anyone concerned about their own or another’s alcohol or other drug use. 1800 422 599 or 02 9361 8000 Mental Health Information Service (MHIS) The MHIS is an information line provided by the Mental Health Association NSW. The MHIS provides referrals to mental health services, information and telephone support. 1300 794 991 Other relevant numbers HealthDirect Australia

Please cite as: Leung R, Kennedy V, Kelly AB, Toumbourou JW and Hutchinson D 2010 ‘Preventing alcohol harms in young people: Family-based interventions. A resource for workers’, prepared by the Australian Drug Foundation for NSW Health. Published by NSW Health: Sydney. © NSW Health & Australian Drug Foundation 2010. SHPN (MHDAO) 100103 ISBN 978-1-74187-495-2

http://www.nswfamilyservices.asn.au/

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