PRESENTACIÓN020ecf92-d89a-4e... · 2020. 6. 22. · e PRESENTACIÓN BUENAVENTURA DELGADO (*) Son...

5
e PRESENTACIÓN BUENAVENTURA DELGADO (*) Son numerosos los trabajos publicados en los últimos veinte años sobre la mítica Generación del 98, debidos a las plumas de C. Blanco Aguinaga, R. Pérez de la De- hesa, H. Ramsden, M. Tuñón de Lara, In- mann Fox y otros. Más recientes son el cle J. L. Abellán Historia del pensamiento espa- floP, el de Juan Mancha!, El secreto de Es- paña. Ensayos de historia intelectual y política2 , dedicado especialmente al estudio del liberalismo español, en el que se vuelve a estudiar a Larra, a Giner de los Ríos, a Una- muno, a Ortega y a Manuel Azaña. Especial atención merece la reedi- ción de la Revista Nueva 1899, editada en Barcelona y dirigida por Luis Ruiz Contreras (Castelló de Ampurias, Girona, 1863-Madrid, 1953), hermanastro del je- suita Ramón Ruiz Amado. La Revista Nueva posee gran interés, porque en ella escribieron muchos de los más brillantes escritores del 98, en su etapa juvenil ácrata e iconoclasta, como Pío Baroja, Unamuno, Rubén Darío, Ra- miro de Maeztu, Jacinto Benavente, Ama- do Nervo, etc. Sus páginas son una buena radiografía digna de estudio de las preocupaciones, sensibilidades, gustos e intereses de la época. La Universidad Complutense organizó un congreso en 1995 dedicado a estudiar los efectos producidos por la crisis che! 98 en la historia española, encargando un conjunto de ponencias a historiadores de reconocido prestigio, como José M. Jover, Álvarez Junco, Gómez Mendoza, Espadas Burgos, Cacho Viu, Mainer y Malefakis, en- tre otros. Los trabajos presentados fueron publicados por J. P. Fusi y A. Niño con el título de Vísperas del 98. Orígenes y antece- dentes de la crisis del 98. En esta publica- ción se analiza la estructura del Estado español, la sociedad, el ejército, la marina, la política colonial, el nacimiento y desarrollo cle los nacionalismos europeos y america- nos, la situación internacional, la diplomacia española, etc.; aspectos que, en líneas gene- rales, nos ayudan a comprender mejor la si- tuación real y las posibilidades de la España finisecular enfrentada al gigante americano. En diferentes trabajos se analiza tam- bién la actitud y dimensión política de Prat de la Riba (1870-1917) y de Sabino Arana (1865-1903), así como el significado che la explosión del anarquismo en Cataluña. La novedad de estos trabajos radica en cen- trarse en la crisis del 98 desde una óptica positiva, en consonancia con los datos e (*) Universidad de Barcelona. (1) Vols. I y II del tomo V de Espasa-Calpe, Madrid, 1989. (2) Taurus, Madrid, 1995. Premio Nacional de Historia 1996. (3) Puvill-Editor, Barcelona, Zaragoza, 1979. (4) Biblioteca Nueva, Madrid, 1997. Revista de Educación, núm. Extra (1997), pp. 5-9 5

Transcript of PRESENTACIÓN020ecf92-d89a-4e... · 2020. 6. 22. · e PRESENTACIÓN BUENAVENTURA DELGADO (*) Son...

Page 1: PRESENTACIÓN020ecf92-d89a-4e... · 2020. 6. 22. · e PRESENTACIÓN BUENAVENTURA DELGADO (*) Son numerosos los trabajos publicados en los últimos veinte años sobre la mítica Generación

ePRESENTACIÓN

BUENAVENTURA DELGADO (*)

Son numerosos los trabajos publicadosen los últimos veinte años sobre la míticaGeneración del 98, debidos a las plumasde C. Blanco Aguinaga, R. Pérez de la De-hesa, H. Ramsden, M. Tuñón de Lara, In-mann Fox y otros. Más recientes son el cleJ. L. Abellán Historia del pensamiento espa-floP, el de Juan Mancha!, El secreto de Es-paña. Ensayos de historia intelectual ypolítica2, dedicado especialmente al estudiodel liberalismo español, en el que se vuelvea estudiar a Larra, a Giner de los Ríos, a Una-muno, a Ortega y a Manuel Azaña.

Especial atención merece la reedi-ción de la Revista Nueva 1899, editadaen Barcelona y dirigida por Luis RuizContreras (Castelló de Ampurias, Girona,1863-Madrid, 1953), hermanastro del je-suita Ramón Ruiz Amado. La RevistaNueva posee gran interés, porque en ellaescribieron muchos de los más brillantesescritores del 98, en su etapa juvenilácrata e iconoclasta, como Pío Baroja,Unamuno, Rubén Darío, Ra-miro de Maeztu, Jacinto Benavente, Ama-do Nervo, etc. Sus páginas son unabuena radiografía digna de estudio de laspreocupaciones, sensibilidades, gustos eintereses de la época.

La Universidad Complutense organizóun congreso en 1995 dedicado a estudiarlos efectos producidos por la crisis che! 98en la historia española, encargando unconjunto de ponencias a historiadores dereconocido prestigio, como José M. Jover,Álvarez Junco, Gómez Mendoza, EspadasBurgos, Cacho Viu, Mainer y Malefakis, en-tre otros. Los trabajos presentados fueronpublicados por J. P. Fusi y A. Niño con eltítulo de Vísperas del 98. Orígenes y antece-dentes de la crisis del 98. En esta publica-ción se analiza la estructura del Estadoespañol, la sociedad, el ejército, la marina, lapolítica colonial, el nacimiento y desarrollocle los nacionalismos europeos y america-nos, la situación internacional, la diplomaciaespañola, etc.; aspectos que, en líneas gene-rales, nos ayudan a comprender mejor la si-tuación real y las posibilidades de la Españafinisecular enfrentada al gigante americano.

En diferentes trabajos se analiza tam-bién la actitud y dimensión política de Pratde la Riba (1870-1917) y de Sabino Arana(1865-1903), así como el significado che laexplosión del anarquismo en Cataluña. Lanovedad de estos trabajos radica en cen-trarse en la crisis del 98 desde una ópticapositiva, en consonancia con los datos e

(*) Universidad de Barcelona.(1) Vols. I y II del tomo V de Espasa-Calpe, Madrid, 1989.(2) Taurus, Madrid, 1995. Premio Nacional de Historia 1996.(3) Puvill-Editor, Barcelona, Zaragoza, 1979.(4) Biblioteca Nueva, Madrid, 1997.

Revista de Educación, núm. Extra (1997), pp. 5-9

5

Page 2: PRESENTACIÓN020ecf92-d89a-4e... · 2020. 6. 22. · e PRESENTACIÓN BUENAVENTURA DELGADO (*) Son numerosos los trabajos publicados en los últimos veinte años sobre la mítica Generación

investigaciones más recientes. Se subrayael hecho de que eran momentos decisivosde fin de siglo, que no afectaron única-mente a España sino también a Francia, aPortugal y a Italia, es decir, a los puebloslatinos, los primeros en sufrir una profun-da crisis que, arios después, afectó tambiéna toda Europa con las dos guerras mundia-les. Esta decadencia la barruntó Spengleren su conocida Decadencia de Occidente.La literatura regeneracionista, señalan loseditores de Vísperas del 98, no supuso unapeculiaridad española. Muchos de sus mol-des provenían de aquella literatura france-sa que se había enfrentado a la crisis deidentidad provocada por la derrota de1870. Está claro, por otra parte, que el mar-co general en el que prosperó el regenera-cionismo estuvo determinado por la crisisintelectual común a toda la cultura europea:el descrédito de la escolástica positivista y lanueva fe en el vitalismo'.

Parece evidente que la España de en-tresiglos no fue una anomalía, sino unapieza más del mosaico europeo, razón porla que es preciso superar el supuesto com-plejo de inferioridad y singularidad denuestro fracaso. España no fue una excep-ción respecto a los pueblos más avanzadosde la Europa de entonces. Habría que aña-dir a este análisis que para el Reino Unidolos efectos de la decadencia europea occi-dental fueron amortiguados gracias a la in-tervención armada de los Estados Unidosde Norteamérica.

En estos trabajos publicados por laUniversidad Complutense apenas se prestaatención a la situación de la enseñanza na-cional, supuesta causa de la derrota nacio-nal en Francia y en España. Esta fue la tesisdefendida por Costa, antes y después de lafatídica fecha del 98, y de los que se redu-

jeron a repetir miméticamente sus ideas. Laexcepción es Cacho Viu, que se detienecon brevedad en el fracaso de la Institu-ción Libre de Enseñanza, al haber sido in-capaz de crear una Universidad Libre ylaica semejante a la de Bruselas, instituciónque podía haber roto la inercia y encorse-tamiento en el que vivían las universidadesespañolas. La generación que realizó el cam-bio radical será la de 1914, la generación deOrtega, en la que la Junta de ampliación deestudios tomó el relevo de Giner.

Posteriormente a esta publicación, elfilósofo Pedro Cerezo Galán publicó dostrabajos alabados unánimemente por la crí-tica especializada El pensamiento filosófico.De la generación trágica a la generaciónclásica. Las generaciones del 98 y el 14' yLas máscaras de lo trágico. Filosofía y tra-gedia en Miguel de Unainund , obra con laque Cerezo se erige en el más profundoconocedor actual del filósofo vasco de Sa-lamanca.

En la primavera del 97 tuvo lugar el VICongreso Internacional dedicado a Gal-dós, escritor trascendental en la Genera-ción del 98; Carlos Seco Serrano, en sudiscurso de clausura, afirmó certeramenteque en sus novelas hay más historia queen sus Episodios Nacionales. El último libroaparecido al terminar esta introducción hasido Repensar el 98 de Vicente Cacho Viu,pionero en España de los estudios dedica-dos a la Institución Libre de Enseñanza,trabajo por el que obtuvo el Premio Nacio-nal de Literatura de 1962.

Ya a las puertas del 98 se han multipli-cado los artículos periodísticos y los númerosmonográficos cle las revistas, comentadoéste y aquél aspecto en su dimensión glo-bal o parcial. Se ha vuelto a hablar de Mar-tí, de la intervención armada de los

(5) J. P. FUSI y A. NIÑO (Eds.): Vísperas del 98. Orígenes y antecedentes de la crisis del 98, ob. cit., p. 13.

(6) Publicado en La Edad de Plata de la cultura española (1898-1936). Vol. I, Torno XXXIX de la Historia

Menéndez Pida!, Espasa Calpe, Madrid, 1993.(7) Trotta, Madrid, 1996.

6

Page 3: PRESENTACIÓN020ecf92-d89a-4e... · 2020. 6. 22. · e PRESENTACIÓN BUENAVENTURA DELGADO (*) Son numerosos los trabajos publicados en los últimos veinte años sobre la mítica Generación

Estados Unidos, se han publicado nuevosestudios sobre Ganivet, todo lo cual contri-buye a repensar y comprender mejor el sig-nificado de este acontecimiento histórico.

La Revista de Educación no debía de-jar pasar desapercibida la fecha del 98, sindedicar la atención que merece a la situa-ción de la enseñanza, en sus distintos nive-les, hace cien años. A nadie se le ocurrehoy repetir, como se dijo entonces tras laderrota de Sedán, que fue el maestro deescuela prusiano quien derrotó a los ejérci-tos franceses, descargando toda la respon-sabilidad de la derrota en el sistema deenseñanza. El primer filósofo en asociar lasdiferencias nacionalistas de los pueblos,identificando glorias y derrotas como cau-sas y efectos de la educación nacional fueFichte en sus Discursos a la nación alema-na. La Institución Libre de Enseñanza com-prendió que la educación era el mediomás eficaz de comenzar la regeneración deEspaña y escogió el camino largo forman-do elites capaces de realizar las reformas,sin luchar por erradicar las causas que pro-ducían la pobreza y las tremendas diferen-cias sociales. Ortega y Gasset, en su Misiónde la Universidad, dejó claro que el nivelde la enseñanza de un país era similar alnivel de su justicia, de su economía, de suindustria, de su higiene y de su moral. Si elconjunto de la sociedad era satisfactorio,también lo sería su educación. Si no eraasí, sólo era posible formar minorías. Creerque sólo la enseñanza podía regenerar unpaís, decía, era una tranochada herenciade la beatería idealista decimonónica.

Arios antes de la creación de la Institu-ción Libre de Enseñanza, a la que tantodebe España, Costa defendió la necesidad deelevar el nivel cultural del pueblo campesino,de sus hombres y mujeres, ideas que defen-dieron como propias los institucionistas. Tam-bién Unamuno, Baroja, Galdós y otrosmuchos se sumaron a la crítica y hablaron dela necesidad de reformar las enseñanza.

Preciso es conocer las opiniones y rei-vindicaciones que los maestros de escuela

hicieron desde su humildad y desprestigiosocial, analizando las actas de sus congre-sos pedagógicos, sobre todo el de 1888,celebrado en Barcelona con motivo de laExposición Universal, en el que se plantea-ron con toda dureza los problemas de laescuela en España, en Cuba y en PuertoRico. Nos fijamos especialmente en estecongreso pedagógico, porque fue organi-zado por los maestros públicos de Barcelo-na y no por la Institución de Giner, queorganizó los de 1882 y 1892. En estos dos,los problemas planteados tuvieron un mar-cado color institucionista y centralista. Enel congreso del 88 por primera vez losmaestros públicos catalanes levantaron suvoz rompiendo una lanza a favor de la en-señanza elemental en la lengua materna delos niños, —el catalán, el vasco o el gallego,según las regiones—, apoyándose exclusi-vamente en razones psicopedagógicas ydejando de lado las políticas.

A este congreso de Barcelona acudióun centenar de catedráticos, profesores,médicos y políticos cubanos, procedentesen su mayoría de La Habana. Claudio Du-mas, delegado de la provincia de Matan-zas, lamentó que en todas las Antillas nohubiese más que una escuela de Artes yOficios y que la Escuela Normal de los es-colapios hubiese desaparecido en 1868.Los maestros cubanos aspiraban a tener lasmismas ventajas de los maestros españoles,como el derecho a la jubilación, contar conmontepíos y tener inspectores provincialesde enseñanza, en vez de contar únicamentecon las Juntas locales o provinciales deInstrucción Pública.

El impacto del 98 espoleó nuevamentela discusión sobre el europeismo, el rege-neracionismo, la educación nacional, elpatriotismo, etc., tópicos debatidos variasdécadas atrás. Se acuñaron frases grandilo-cuentes de impacto como escuela y des-pensa, la africanización de España, el ¡queinventen ellos!, etc. Poco a poco sus inven-tores matizaron con creces el sentido deestas frases, no siempre bien entendidas.

7

Page 4: PRESENTACIÓN020ecf92-d89a-4e... · 2020. 6. 22. · e PRESENTACIÓN BUENAVENTURA DELGADO (*) Son numerosos los trabajos publicados en los últimos veinte años sobre la mítica Generación

Maestros de escuela, profesores de Institu-to y de Universidad coincidieron en haceruna crítica de la situación en que se encon-traban y multiplicaron sus reuniones, susconvenas, sus asambleas, mediante lascuales llegaron a concienciarse de la nece-sidad de cambio y de mejora de sus méto-dos de investigación y cle enseñanza, parasituar el nivel de la enseñanza a la alturade las exigencias de los nuevos tiempos.La creación de la Junta para ampliación deestudios e investigaciones científicas hizoposible las salidas de profesores de todosniveles al extranjero y la creación de labo-ratorios, residencias, revistas y publicacio-nes científicas, que hicieron posible enpoco tiempo un cambio sustancial.

La Revista de Educación ofrece en estenúmero monográfico diferentes trabajos deespecialistas en torno a la educación de fi-nales de siglo. Ana Jesús García Sanz, buenaconocedora de la extensa obra de Galdós,explica el pensamiento pedagógico del es-critor canario, afín y crítico al mismo tiempode los objetivos de la Institución Libre de Gi-ner. Fue el inspirador cle gran parte de lasideas de los principales hombres de su ge-neración. La dimensión pedagógica deGaldós es una auténtica novedad.

Conrad Vilanou presenta el análisis cíela crisis finisecular desde el punto de vistaregeneracionista, comparando a Ortega yGasset y a Eugenio d'Ors como dos mode-los culturalistas. Recuerda que Maragall fueel primer traductor de Goethe y recoge lafrase de Jaume Brossa que, en 1892, afirma-ba que la lumière nous vient du nord. Neo-kantismo y goethianismo eran clos modelosde pedagogía culturalista, a los que apunta-ban tanto d'Ors como Ortega. Este filósofo,introductor en España de la pedagogía so-cial de Natorp, fiel seguidor de Kant, com-prendió que la filosofía neokantianaposeía la virtualidad de poder europeizarEspaña, según el modelo germánico.

Maragall, antes que Ortega, preferíasacudirse la tradicional francofilia de Espa-ña y Cataluña y apostó por la dimensión

pedagógica de Goethe, arrastrando consi-go a la burguesía catalana, que vio en él elvalladar capaz de atajar la anarquía y caosal que inevitablemente se encaminaban lasmasas obreras.

Las propuestas orsianas no contrade-cían las de Maragall, puesto que cl'Ors de-fendía una regeneración de corte clásico,simbolizada en el arquetipo de La bienplantada, modelo femenino, quintaesen-cia de la belleza estética, sin estridencias nidisonancias. Teresa, la heroína de la nove-la, era un eon, el eterno femenino de Goet-he. La obra bien /,echa, ideal permanentede la burguesía catalana, nos dice Vilanou,es también el ideal equivalente al imperati-vo categórico kantiano y a la manifesta-ción de la unidad metafísica del « bonum»

y del pl 171M»Félix Santolaria se centra en la huella

del 98 en los años jóvenes de Ortega, en suprimera etapa pública como escritor y pro-fesor. Analiza sus ideas, sus sentimientos,sus proyectos, sus formas estéticas y suideología claramente liberal, muy próximaal espíritu institucionista que respiró. Orte-ga fue el importador de Alemania cíe la pe-dagogía social como programa político yensayo en 1910.

María Luisa Gutiérrez, buena buceadoradel archivo de la Escuela Normal de Barcelo-na, alumbra las preocupaciones y el día a díade un grupo de maestros que luchan por sa-cudirse la inercia tradicional y por modernizarsus métodos de enseñanza, dentro cle sus es-trechas limitaciones presupuestarias, perocon un entusiasmo admirable.

Alejandro Tiana estudia el desarrollo delos movimientos obreros y su insistente deseode acceder a la educación e instrucción, apo-yados por los movimientos librepensadores,ácratas, masónicos e institucionistas, canaliza-dos con muchos matices por el movimientode la llamada Extensión Universitaria y lacreación de las Universidades Populares.

Nieves Gómez analiza la situación dela universidad de la época, estudiando losesfuerzos reformistas de Unamuno, de Gi-

8

Page 5: PRESENTACIÓN020ecf92-d89a-4e... · 2020. 6. 22. · e PRESENTACIÓN BUENAVENTURA DELGADO (*) Son numerosos los trabajos publicados en los últimos veinte años sobre la mítica Generación

ner y de los más brillantes e innovadorescatedráticos de la época por elevar su niveldocente y científico.

Dolores Gómez Molleda, experta co-nocedora de los reformadores de la Espa-ña Contemporánea, título de una obraclásica en la que todos hemos estudiado yaprendido, centra su atención en el Una-muno, rector regetzeracionista, principalprotagonista de su generación y el rectorpor antonomasia de la prestigiosa universi-dad de Salamanca.

Ramón Albercli, especialista de la his-toria de las escuelas técnicas y profesiona-les de Cataluña, estudia el interés por crearen Barcelona una Escuela de Artes y Ofi-cios y Escuelas Profesionales. Esta necesi-dad se manifestó en 1868, creció durante laExposición Universal cle 1888 y se convir-tió en necesidad acuciante en 1898. Unabuena formación profesional y una indus-tria avanzada semejante a la norteamerica-na, vencedora en Cuba y Filipinas, eran lasúnicas medidas pragmáticas que podíantransformar la industria catalana y españo-la en una industria competitiva.

Pedro Álvarez analiza el eco de la pérdi-da de las colonias en las tenidas masónicasde la España metropolitana cle fin de siglo.

La repercursión en América de la pér-dida de las colonias españolas se analizaen tres trabajos. En el primero, CarminaLabrador estudia la situación de la ense-ñanza en algunos países latinoamericanoscomo Venezuela, Chile, Ecuador, Argenti-na, Cuba y Puerto Rico, fijándose en la ac-titud de rechazo cle estas jóvenes nacionesfrente a lo español, cayendo sin darse cuen-

ta, en la órbita norteamericana y en la culturaanglosajona.

Cintio Vintier, Presidente del Centro deEstudios Martianos de 1.,1 Habana, nos brindaun elocuente y dolorido análisis del significa-do de la explosión del Maine para españolesy cubanos. El desastre colonial español, nosdice, tuvo tintes pesimistas para Baroja, Una-muno, Azorín, Maeztu y Ganivet. Vieron, sinembargo, el lado positivo Ortega, cl'Ors, Pérezde Ayala y los grandes poetas Antonio Macha-do, Rubén Darío y Juan Ramón Jiménez. Re-cuerda Vitier las advertencias clarividentes deMartí, cle Juan Ramón Jiménez y de otros escri-tores y políticos de la época, sobre el peligroque suponía la intromisión de los EstadosUnidos del Norte en Puerto Rico y en Cuba,esgrimiendo el supuesto derecho de EstadosUnidas a intemenir para garantizar la inde-pendencia, la propiedad, la salud, los derechoshumanos, la denzocracia, etcétera en cual-quier país del inundo, y especialmente delTercer Mundo, derecho no cuestionado yconvertido en ley universalmente aceptada.

Otro cubano, Rolando Rodríguez, nosofrece un informe detallado y bien infor-mado de los hilos que entre bastidores mo-vían en la sombra los intereses económicosdel tabaco y del azúcar, para justificar vela-damente la intervención armada norteame-ricana en Cuba. Los dos historiadoresRolando y Cintio, aportan valiosos datosdesde la óptica cubana. Para los cubanos ypara muchos españoles, la injustificada in-tervención y permanencia en suelo cubanode las fuerzas armadas norteamericanas,después de cien años, sigue siendo unaofensa imposible de olvidar.

9