POR QU BELN?

Por qu Dios envi a Jess a nacer en Beln? Qu haba en ese pequeo pueblo insignificante que lo hizo tan favorecido por Dios?La respuesta ms fcil es que se trataba del cumplimiento directo de la profeca del Antiguo Testamento. Unos setecientos aos antes del nacimiento de Cristo en la carne, el profeta Miqueas haba hecho una declaracin sorprendentemente precisa: "Pero t, Beln Efrata, pequea para estar entre las familias de Jud, de ti me saldr el que ser Seor en Israel; y sus salidas son desde el principio, desde los das de la eternidad." (Miqueas 5:2). Ah lo tienes! Beln iba a ser el lugar de nacimiento del Mesas.Pero por qu all? Qu tena Beln que no tuviera ningn otro lugar? Bueno, para responder debemos apelar a la voluntad soberana del Dios uno y trino. Eso es exactamente lo que l quera, as que, fue exactamente lo que pas. Dios trae Sus decretos eternos para que pasen en el tiempo.Otra de las razones, sin embargo, es la falta de importancia de la ciudad. Dios llama a Beln "pequea entre las familias de Jud." El lugar no tiene mucho a su favor. Beln no era la capital de la religin juda como lo era Jerusaln. Tampoco era la capital de la cultura mundial como Atenas, ni la capital del Imperio, como Roma. Era un lugar extrao y lejano de manera que slo se menciona un puado de veces en el Antiguo Testamento.La gloria de Beln, entonces, residi, totalmente, en su debilidad. Esta misma observacin espiritual es cierta en todos los tratos de Dios con los hombres. Beln era como una imagen de espejo de Mara. Qu tena ella que ofrecer al Seor? Nada ms que un tero vaco! Mara, como Beln, era pobre, insignificante y escondida de la grandeza mundana. As ha sido a lo largo de la historia de la iglesia. En cada generacin avivada, el Espritu Santo ha descendido sobre congregaciones quebrantadas y desfavorecidas para sacudir al mundo con la fuerza del Evangelio. Dios siempre ha trabajado con vidas humildes.As que, Beln es un smbolo de la humildad que todos debemos manifestar como buscadores del Seor. Dios no trabaja con la gloria de los hombres orgullosos sino en los lugares secretos y sin esperanza con el fin de levantar bandera para su nombre en la tierra de los vivientes. Esta Navidad, pdele a Dios que tu corazn sea como Beln: pequea, insignificante y despreciada Beln. Este es el terreno que atrae la atencin de Dios. Esa es la tierra a travs de la cual la gloria del Seor ha dado a luz al mundo.

WILL GRAHAm