Poema a la mujer de un policia

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POEMA A LA MUJER DE UN POLICIA ESTE OFICIO DE SER MUJER: Vos no hiciste curso alguno y te formaste en esta fila En esta ingrata tarea de ser mujer de un policía Fuiste integrada de pronto, sin haberte percatado Aprendiste hacer la guardia, entre el hogar y el mercado Y no pretendes siquiera un ascenso en esa vida Solo deseas que él retorne sano y salvo cada día Que vuelva a casa con sueño, no es ninguna novedad ¡vieja!, me tiro un ratito, no te vayas a olvidar Ahí comienzas tu guardia y entonces debes velar Que descanse algunas horas por que debe continuar A lo mejor a un recargo, o algún adicional más Que sumará el magro ingreso, porque cuentas hay que pagar Cuantas veces se olvidó que hoy es tu cumpleaños Es solo una vez al año, pero no lo recordó Cuantas veces se enfrió en los platos la comida Esperando que llegara, era importante ese día ¿cuándo tendrás un tiempito, le quisieras reclamar Pero lo sabes de sobra cuantas razones que hay Cuantas lágrimas rodaron silenciosas por tu rostro Un treinta y uno a la noche cuando terminaba un año Cuando se escuchan las bombas, los goces y los festejos Mientras tu hombre estaba lejos, quien sabe por qué lugar Asistiendo un accidente, o en un desorden tal vez Sabiendo que otros disfrutan y él los debe proteger Para compartir los hijos estuvo ausente mil veces El primer día de clase, cuando dan el primer paso Cuando aferrados a tus brazos dicen el primer ¡papá En esas pequeñas cosas que para otro es rutina No lo es para tu esposo, porque él es policía Primero está el deber y después sigue la familia Siempre se hace el homenaje aquel que cayó cumpliendo Pero se olvidan a veces de la que sigue sufriendo La que sufrió tantas veces esperando angustiada Que despertó sobresaltada escuchando una sirena La que se ha pasado en vela por un mal presentimiento Rogando de que la noche, termine en paz y sin pena

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POEMA A LA MUJER DE UN POLICIA

ESTE OFICIO DE SER MUJER:

Vos no hiciste curso alguno y te formaste en esta fila

En esta ingrata tarea de ser mujer de un policía

Fuiste integrada de pronto, sin haberte percatado

Aprendiste hacer la guardia, entre el hogar y el mercado

Y no pretendes siquiera un ascenso en esa vida

Solo deseas que él retorne sano y salvo cada día

Que vuelva a casa con sueño, no es ninguna novedad

¡vieja!, me tiro un ratito, no te vayas a olvidar

Ahí comienzas tu guardia y entonces debes velar

Que descanse algunas horas por que debe continuar

A lo mejor a un recargo, o algún adicional más

Que sumará el magro ingreso, porque cuentas hay que pagar

Cuantas veces se olvidó que hoy es tu cumpleaños

Es solo una vez al año, pero no lo recordó

Cuantas veces se enfrió en los platos la comida

Esperando que llegara, era importante ese día

¿cuándo tendrás un tiempito, le quisieras reclamar

Pero lo sabes de sobra cuantas razones que hay

Cuantas lágrimas rodaron silenciosas por tu rostro

Un treinta y uno a la noche cuando terminaba un año

Cuando se escuchan las bombas, los goces y los festejos

Mientras tu hombre estaba lejos, quien sabe por qué lugar

Asistiendo un accidente, o en un desorden tal vez

Sabiendo que otros disfrutan y él los debe proteger

Para compartir los hijos estuvo ausente mil veces

El primer día de clase, cuando dan el primer paso

Cuando aferrados a tus brazos dicen el primer ¡papá

En esas pequeñas cosas que para otro es rutina

No lo es para tu esposo, porque él es policía

Primero está el deber y después sigue la familia

Siempre se hace el homenaje aquel que cayó cumpliendo

Pero se olvidan a veces de la que sigue sufriendo

La que sufrió tantas veces esperando angustiada

Que despertó sobresaltada escuchando una sirena

La que se ha pasado en vela por un mal presentimiento

Rogando de que la noche, termine en paz y sin pena

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Con estas simples palabras, las quiero agasajar

En mi nombre y las de otros que no saben como actuar

Por orgullo o cobardía no lo quieren confesar

Que ¡si, las necesitamos, son importantes, es verdad

Decirles ¡gracias mujeres, por su amor y valentía

Y por cumplir con honor este oficio cada día

Suboficial Principal. Ubaldo CANDIA