Planeta Racing Ed34

Edición 34Enero 2012

Tras la partida de Diego Simeone, Alfio Basile asumió como técnico por quinta

vez en la institución. El ex defensor..." campeón del mundo en 1967 fue

ovacionado en la presentación, entrenamiento y amistoso...

EL COCO NO TE

DEJA CHOLO

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2 planetaracingrc.com .ar34ª edición

EDITORIAL

36Armando Fertitta@a_fertitta

Texto

Racing está a punto de comenzar un nuevo ciclo y las circunstancias están dadas para que el próximo período sea una bisagra. Un antes y un después

académico.El comienzo de cada año trae aparejado la

ilusión por parte de todos hinchas y quienes vi-ven el día a día en la institución. El racinguista fiel imagina doce meses de éxitos, gargantas ardien-do por gritar goles, abrazarse con sus amigos y familiares en la cancha tras cada celebración. Además de soñar lo máximo: una vuelta olímpi-ca, con el agua de las mangueras cayendo sobre las tribunas para intentar sofocar apenas el fue-go del triunfo total.

Desde la obtención del último título, hubo pocos momentos que invitaron a la ilusión, y sin embargo hasta los más duros y escépticos con-servaron un pedacito de ella. El hincha de Racing vence a la muerte, porque una vida sin ilusión en cualquier ámbito significa morir. Año tras año, torneo tras torneo la esperanza se renueva. Pa-san los torneos y aunque el panorama no traiga refuerzos o el presente haya sido gris, la imagen se repite.

Racing ha perdido tiempo y les ha cedido espacio a sus competidores desde lo futbolís-tico, sin embargo lo más grave fue la pérdida de identidad. Ésta pérdida, sumada a otros factores como la falta de títulos, la quiebra y el gerencia-miento, han ayudado a acuñar la frase “lo mejor de Racing es su gente”. Dicha frase es un cuchillo de doble filo, un lugar común que hay que deste-rrar definitivamente.

Desde aquí no se señala que la hinchada aca-démica no sea digna de llamarse la mejor, sobran las anécdotas para afirmarlo. Sin embargo la fra-se “lo mejor de Racing es su gente” fue un refu-gio para los nulos logros deportivos, un lugar en el cual nos sentimos como ganadores imbatibles. Pero ¿Dónde están las copas a la mejor hincha-da? ¿En qué lugar de la AFA o la FIFA se registran los récords de las banderas más grandes?

Nos hemos ganado un lugar en el imagina-rio del fútbol argentino y hasta cierta simpatía de hinchas de los demás equipos. De todos mo-dos en el fútbol, los logros y la historia se hacen

dentro de la cancha, como la hicieron Corbatta, Pizzuti, Belén, Ohaco y Basile, por sólo nombrar algunos.

Hoy ha vuelto a la institución de uno de los grandes exponentes del club: Alfio el “coco” Ba-sile. Criado en la institución, ganador como juga-dor y técnico, conocedor de la “identidad racin-guista” puede cimentar las bases de una “nueva vieja” impronta.

Todo está dado para que ello ocurra: Racing cuenta con un plantel técnicamente dotado, que ha demostrado que cuando se lo ha propuesto, ha sabido jugar un fútbol de alto vuelo. Contará con Giovanni Moreno y Teófilo Gutiérrez, que no han brillado al unísono en el anterior torneo, pero cuentan con un potencial aún no explotado. El técnico estará apoyado por una base institu-cional mucho más sólida que antaño, un club que intenta ser serio y ordenado.

Los puntos grises como las peleas en el ves-tuario y los intereses mezquinos unipersonales pueden corregirse con un objetivo común. Un convencimiento general que será responsabili-dad del técnico. Si hay alguien que tiene la capa-cidad para hacerlo es Basile. Los demás deberán entender que por encima de todos está Racing y eso no debe ser olvidado.

Los trenes para Racing parecen pasar con re-gularidad y los dejamos pasar una y otra vez. Es el momento de subirnos a él pero no apuntando sólo a la próxima estación. El título del 2001 nos enseñó que una golondrina no hace verano. Es hora que Racing vuelva a justificar su apodo: “La academia”.

MARCAR UN CAMINO

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SUMARIO

14Entrevista:Gonzalo Espinoza.

3432

FilialesMar del Plata.

Entrevista: Nicolás Oróz, jugador de la Reserva.

16

PemiosApertura 2011.

6 Análisis"El Coco" Basile.

10 Balance Apertura 2011.

40 Entrevista:Francisco Maciel.

La fiesta delPaso a Paso36 Nota con los exju-gadores del Racing campeón del 2001.

El cuentitopor Agustín Melsa.4418 Análisis

Racing Sigue.

22 Especial de fotosPor NACHOAKD.

planetaracingrc.com .ar4 34ª edición

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SECCION: RACING VS OLIMPO

34ª edición

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ANÁLISIS: ALFIO "COCO" BASILE

TÁCTICA Y ESTRATEGIA DE GUERRA El cambio de entrenador

también hará que la

forma de plantear los

encuentros se modifique.

El nuevo equipo del Coco.

Juan Bronzini@jibronzini

Jorge Baravalle, Juan Carlos Baldovino, diario.latercera.com

Texto

Fotos

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Ficha técnica

Nombre : Alfredo BasileApodo : El CocoNacimiento : 1 de noviembre de 1943 en Bahía Blanca, ArgentinaNacionalidad: argentinoClub actual: Racing Club (entrenador)Año del debut: 1965 (Como jugador) 1975 (Como entrenador)Club del debut: Bella Vista (Como jugador) Chacarita Juniors (Como entrenador)Año del retiro: 1975 (Como jugador)Club del retiro: Huracán (Como jugador)

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No es sólo un reemplazo de nombre en el banco de Racing, se sabe que las cosas van a cambiar mucho, tal vez demasiado, de un proceso al

otro. De Simeone a Basile hay un abismo, ni mejores ni peores, todo es marcado por los gustos.

Sacando al arquero, que seguirá siendo una garantía enorme en Sebastián Saja, hay que analizar línea por línea al “Coco Team”.

En la defensa, Basile suele pararlas ade-lantadas. Si bien, el estilo pide jugar por aba-jo, el gusto del nuevo entrenador es tener dos centrales aguerridos, que no tengan miedo de ir fuerte. Los laterales tienen que tener mucha salida para sumarse al ataque con regularidad, esto puede ser fundamental para mejorar el presente de Pillud y Licht.

En la mitad de la cancha, recordamos el medio del Boca ganador de todo, Ledesma, Gago, Bilos e Insúa, o con el Colón previo a ese Xeneize, que tenía a Capurro, Romagnoli, Mo-reno y Fabianesi y como enganche a Giovanni Hernández, podemos trazar un paralelismo con Toranzo, Yacob, Castro y Gio más adelanta-do. ¿Conclusión? Un cinco definido, de los dos por afuera, uno se queda un poco más y se cie-rra para el paso del lateral y otro suele llegar al fondo. Además, un enganche definido que es el que da el último pase.

Cuando estaba cerrando el análisis de los equipos de Basile, me acordé de la Súper Copa,

miré el medio y vi un cinco definido, Ludueña. Un 8 definido que aprovechaba la banda, Ca-mote Acuña. Vi también, que el del otro costa-do en realidad era un enganche con tendencia a cerrase, Colombatti. Y un poco más adelante, la magia del último pase o el gol mismo, Rubén Walter Paz. Ya nada es casualidad.

En ataque, podemos seguir contando a Gio aunque lo hayamos analizado antes. El engan-che en el equipo es fundamental, es nexo, es distribución y es gol, el colombiano lo puede hacer todo.

Ahora sí, los puntas, “Me gusta uno por afuera y un nueve definido” siempre dice “Coco”, entonces, Hauche y Teo sacaron bole-to para jugar. Hauche, se sabe que no es de su gusto ir por afuera, pero el entrenador le gusta que el delantero externo llegue por sorpresa, eso al “Demonio” lo puede beneficiar. Por úl-timo, Teo es Teo, no debe haber otra posición donde las cosas sean tan claras, si el de Ba-rranquilla juega como sabe, cualquier sistema le sirve, siempre se beneficia al nueve porque es el que más definición tiene, en este caso, es su hábitat.

En el línea por línea no parece cambiar nada, la pregunta que se genera es: ¿Los ju-gadores estarán preparados para presionar en todo el campo, hacerse con la pelota y domi-nar todo el partido, como se caracterizaron los equipos de Basile?. Si eso se logra, el funciona-miento será óptimo.

En las tres etapas anteriores que se sentó en el banco de la Academia: 1977, 1985 a 1989 y 1996/97, el Coco consumó 208 juegos. Dentro de todos sus ciclos cosechó 80 triunfos, 74 empates y 54 traspiés.

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34ª edición

LA PREVIA: BOCA VS RACING

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BALANCE: APERTURA 2011

ENTRE EL DESENCANTO Y LA ILUSIÓNUn resumen con los aspectos positivos y negativos

que dejó la campaña de la Academia, que

terminó segunda en el Apertura y clasificada a la

Sudamericana, pero se quedó sin Libertadores.

Brian Aizenberg@BriAiz

Juan Carlos BaldovinoNacho Akd

Texto: Goal Lationamérica.

Fotos

Por un lado, decepción, bronca, frustración. Por otro, satisfacción, agra-do, esperanza. Este Racing ambiguo, confuso, despertó varios senti-mientos por alternar buenas y malas actuaciones a lo largo del campeo-nato.

Al analizar la mitad del vaso lleno se encuentra, en primera instancia, el re-greso a un torneo internacional después de nueve años. En aquella oportunidad, la Academia quedó eliminada por penales en octavos de final de la Copa Liber-tadores ante América de Cali, en el Cilindro. Un lugar que Racing, por historia, nunca debería haber abandonado.

Además, el equipo de Diego Simeone cosechó algunas estadísticas intere-santes, como lograr la menor cantidad de goles recibidos en su historia desde la creación de los torneos cortos: a Sebastián Saja le convirtieron sola-mente en ocho oportunidades. En tanto, los 31 puntos obtenidos llevó al

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La espina que quedó clavada volvió a ser la clasificación a la Copa Libertadores, el cer-tamen más importante del continente a nivel internacional. En la última fecha, Racing debía ganar y esperar un guiño de Godoy Cruz que nunca sucedió, aunque, de todas maneras, la Academia fue superada por Vélez y tuvo que conformarse con ingresar a la Sudamericana, a disputarse recién en la segunda mitad del 2012, y compartir el subcampeonato. Como siempre, la gente de Racing se hizo presente en el José Amalfitani y se destacó en las tribu-nas poniéndole color al encuentro, con benga-las y humo en celeste y blanco.

El objetivo de mínima se cumplió: volver al plano internacional y culminar entre los prime-ros puestos del Apertura. Las otras metas no se lograron, como pelearle el título a Boca has-ta las últimas fechas y jugar la próxima edición de la Libertadores.

conjunto de Avellaneda a ubicarse en la segunda posición, junto a Vélez, Colón y Belgrano y, de esta manera, superó la

barrera de las tres decenas, lo cual no sucedía desde el 2005 (32 puntos, con Guillermo Riva-rola como entrenador).

La mitad vacía del vaso es la que resalta lo negativo de este semestre: un equipo que con-tagió poco desde adentro del campo de juego a sus simpatizantes y generó más críticas que halagos, producto del escaso protagonismo que presentó en la mayoría de los partidos. De acuerdo a la calidad del plantel, el estilo de juego que propuso el Cholo nunca terminó de atrapar y convencer al racinguista, que vio em-patar a su equipo diez veces, pero cayó en dos ocasiones nada más. A su vez, si mencionamos que el arquero fue uno de los jugadores des-tacados del plantel significa que tuvo mucha participación y que, afortunadamente, cum-plió con creces y fue fundamental para lograr esta campaña.

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BALANCE: RACING 2011

Este año fue muy importante para Ra-cing Club en muchos ámbitos, pero en esta oportunidad vamos a hablar de todo lo que tiene que ver con el Fútbol,

exceptuando el de Primera División. Arrancare-mos desde el semillero, hasta la Reserva y con-cluiremos con el campañón que realizó el Futbol Senior.

En el 2011 las cosas no fueron del todo fáci-les para los más jóvenes de la institución, ya que la clasificación a la Copa Campeonato fue ajus-tada, tras pasar en la tabla general en la última fecha a Arsenal, que fue su rival de turno, y que-darse con el último cupo de la Etapa Clasificato-ria. Luego de que en junio los juveniles lograron pasar esa barrera, que no pudieron derribar du-rante el 2010 cuando formaron parte en el últi-mo semestre del año de la Copa Competencia, las cosas siguieron progresando.

Durante el certamen se pudieron vislumbrar algunos jugadores que luego ascendieron de ca-tegoría como en el caso de Luciano Vietto, joven que forma parte de la Quinta División y que fue goleador de esa categoría, debutó en Primera de la mano de Diego Simeone; Matías Cristaldi, Nicolás Oroz, Walter Poblete, Leonardo Rolhei-ser, José Ignacio Acosta, José Luís Gómez, entre otros, que si bien no estuvieron en la máxima categoría, supieron hacer lo suyo junto a Juan Barbas en la Tercera División.

Volviendo a lo que fue la Copa Campeona-to, donde participaron los 18 mejores equipos de la etapa clasificatoria, los resultados finales no fueron festejos absolutos albicelestes, pero sí se pudo ver un avance con respecto al último certamen. Los más grandes que conforman la Cuarta División, fueron los que se quedaron más cerca de la punta y se consagraron subcampeo-nes con 27 puntos; la categoría que los sigue, la Quinta División, terminó en el puesto número cinco también con 27 unidades; y los chicos de la Sexta División terminaron en el décimo cuar-to lugar con 19 tantos. Con lo que respecta a las tres categorías menores, la Séptima División ocupo el puesto 14 con 16 puntos; la Octava Divi-sión finalizó séptima con 24 unidades; y por últi-mo, la Novena División se adueñó del duodécimo lugar con 18 tantos.

Subiendo un poco más de nivel y pisando el profesionalismo, los jóvenes de la Tercera Divi-sión comenzaron el torneo con todas las luces y mantuvieron un invicto de 10 fechas, hasta que se toparon con su clásico rival y conocieron por primera vez la derrota. A partir de ese encuen-tro, el nivel de los conducidos por Juan Barbas comenzó a ser irregular y, por este motivo, len-tamente se fue alejando de la punta de la tabla. Luego de varias goleadas y caídas consecutivas, de vez en cuando pudueron levantar cabeza, pero finalmente no le alcanzó para quedarse entre los cinco mejores del certamen y terminó en el noveno lugar con 22 puntos, producto de 5 victorias, 7 empates y 6 derrotas. De todas ma-

neras, el torneo de Reserva es como el del Nacio-nal B, es decir, lo que sería en Primera el Apertura y el Clausura en esta categoría es un solo certa-men, por lo que aún tiene mucho camino por re-correr, ya que esto recién comienza.

Algunas de las cosas que hay que destacar son que en los encuentros donde este equipo se hizo presente pudimos ver a muchos jugadores recién llegados a la institución como en el caso de Brian Sarmiento, Luciano Aued, Gastón Celle-rino y Gonzalo Espinoza; pero también, pudimos saber cómo va el progreso de jugadores conoci-dos como en el caso de Luís Fariña y Bruno Zucu-lini; y conocer a Matías González y Ángel Pruden-cio, que llegaron al club en medio del certamen.

En las últimas fechas, prácticamente todo el plantel que montó Barbas estuvo compuesto por juveniles, sin ningún atleta de Primera División. Esto es algo positivo, porque durante todo el año el entrenador fue buscando variantes y les dio la posibilidad a varios chicos del semillero.

Para terminar con este resumen del año, hablamos de los grandes campeones, del Futbol Senior, compuesto por ex jugadores que vistie-ron la camiseta de Racing Club. Los veteranos obtuvieron el titulo tras vencer a su igual invicto, Argentinos Juniors, por 1 a 0 en Avellaneda.

El encuentro ante el Bicho fue apasionante e inolvidable para estos hombres, que defen-dieron en determinadas épocas de su vida al club con su alma y corazón, no solo por haberlo jugado en el Cilindro sino también por la gran campaña que hicieron. La Academia se consagró campeona gracias a 14 victorias y 2 empates. Un orgullo albiceleste y un honor privilegiado el de ver a grandes figuras del fútbol y de la institución vestir nuevamente los colores Celeste y Blanco.

Formaron parte de este equipo que se consagró: Damián Rodríguez, Walter Viqueira, Sergio Vázquez, Claudio Ubeda, Carlos Kohary, Martín Vitali, Carlos Netto, Claudio Marini, Angel Morales, Leonel Liberman, Juan Ramón Fleita, Diego Loscri, Maximiliano Zanello, Claudio Loza, Walter Berón, Gabriel Locatti, Gabriel De Andra-de y Carlos Olarán. Y fueron conducidos por dos grandes: Italo Ortiz y Horacio Larrachado.

De esta forma cerramos un año donde mu-chos académicos festejaron, otros progresaron y otros se siguen esforzando para dejar a Racing Club en lo más alto. Porque ellos también hacen que La Academia, sea el más grande entre los grandes.

PROGRESAN Y FESTEJANLuciana Ursino @Lupina13

Opinión

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PREMIOS: APERTURA 2011

Premio Rubén Paz al mejor jugador deRacing del apertura 2011:

Agustín PelletieriEl volante fue uno de los refuerzos para esta temporada y cumplió con creces. El Pulpo se adjudicó seis Premios Rubén Paz a lo largo del torneo y, de esta manera, desplaza del trono a Teófilo Gutiérrez, quien obtuvo la mayor cantidad en el Clausura (fueron siete). A priori, Pelle y Sebastián Saja, otra incorporación para el Apertura, son dos jugadores que el Planeta Racing nombra como los más destacados del semestre y se dio la lógica: el Chino quedó detrás con cuatro galardones.Pelletieri logró adaptarse rápidamente al equipo y se convirtió en uno de los referentes en el campo de juego y fuera del mismo. Con más actitud y despliegue físico que técnica, el ex Granate entró en el corazón de todos los racinguistas.La tercera posición la comparten Giovanni Moreno y Matías Cahais. También tiene lógica.

Premio Abelardo "El Karateca" Vallejos al jugador rústico del apertura2011:Lucas Licht Ay, Luquitas...¡qué semestre tuviste! No sólo se conformó con haber sido el peor del torneo, sino que también se coronó como el jugador más rústico con cuatro premios. De esta manera, termina con la hegemonía de Matías Cahais, quien había ganado las dos ediciones anteriores del Premio Abelardo Vallejos. La sorpresa fue el segundo lugar: Valentín Viola acumuló tres, en una clara muestra que el delantero de las inferiores juega siempre al límite y a veces se pasa de revoluciones. El tercer lugar se lo reparten Giovanni Moreno y Matías Martínez, ambos con dos. Cabe mencionar que también en dos oportunidades quedó vacante.

DE LO NUESTRO, LO MEJOR Y PEOR (APERTURA 2011)El balance final de los Premios que

Planeta Racing entrega fecha tras fecha.


Texto

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PREMIOS: APERTURA 2011

Premio Erwin Avalos al peor jugador de Racing del apertura 2011:

Lucas LichtAnteriormente, este lugar fue comparti-do por tres integrantes de la defensa: los dos arqueros, Roberto Fernández y Jorge De Olivera, y Marcos Cáceres. En esta ocasión también quedó en la última línea. Con cinco Premios Erwin Ávalos, el lateral por izquierda se convirtió en el más flojo del torneo. Encima, quizás ese puesto sea el que menos recambio tenga dentro del plantel. No será la última vez que lean del ex Gimnasia en esta nota...Muy cerca de Licht, con cuatro, se en-cuentra Patricio Toranzo, quien alternó buenas y malas en este campeonato en el que le tocó dejar su puesto e ingresar en el complemento. El podio lo completa el otro lateral del equipo, Iván Pillud, con tres. Probablemente sorprenda lo del Pato, pero el nivel de los defensores no fue el mejor y deberán buscar su mejor versión de cara al Clausura.

Premio Rubén "El Mago" Capria al jugador lírico de Racing del apertura 2011:

Giovanni Moreno¡Arrasó! El colombiano sumó más de la mitad de los Premios Rubén Capria entregados. Si bien volvió en la sexta jornada, Gio demostró su calidad en cada partido que le tocó estar y lo avalan los diez galardones. Segundo, muy lejos, quedó su compatriota Teófilo Gutiérrez, quien se había quedado con este lugar en el Clausura, con siete. El bronce lo comparten cinco futbolistas: Gonzalo Espinoza, Matías Martínez, Cáceres, Licht y Toranzo.Moreno regresó de una operación en la rodilla izquierda y levantó su nivel con el correr de los partidos, de manera tal que la pretemporada lo hará volver a su mejor versión. Si sigue así, en el Clausura vuelve a marcar un récord en los premios de Planeta Racing. Y ojalá éso ocurra...

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ENTREVISTA: GONZALO ESPINOZA

El mediocampista central surgió como una sorpresa en el último mercado de pases a raíz de la recomen-dación de Marcelo Bielsa y así llegó a la Academia como un desconocido, sin demasiadas referencias

de él. Le tocó debutar recién en las últimas fechas, pero an-tes de mostrarse en la Primera de Argentina pasó por un plan de trabajo exigente y algunos partidos en Reserva. El ex vo-lante de Unión San Felipe, de 21 años, repasa sus primeros pasos en el conjunto de Avellaneda, en los que, claramente, fue de menor a mayor.¿Qué balance hacés de tu primer semestre en Racing?

- Creo que hemos hecho un buen campeonato. A lo mejor no ganamos todos los partidos que deberíamos

El chileno Gonzalo Espinoza consideró que el

campeonato de Racing fue "bueno", aunque podría

haber sumado más cantidad de puntos. Además,

reconoció que no llegó en óptimo estado físico y desea

conseguir regularidad en el once titular del 2012.

"NO GANAMOS LOS PARTIDOS QUE DEBERÍAMOS HABERLO HECHO"


Texto

Ficha técnica

Nombre : Gonzalo Alejandro Espinoza ToledoNacimiento: 9 de abril de 1990 Constitución, ChileNacionalidad: ChilenaClub actual Racing ClubAño del debut 2010Club del debut Barnechea

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ENTREVISTA: GONZALO ESPINOZA

haberlo hecho. Hubo algunos que es-taban dadas las condiciones para que-

darnos con los tres puntos y no pudimos. En lo personal, trabajé bien en estos seis meses y ojalá de acá en adelante se dé todo de la mejor manera posible.

Tuviste que jugar en Reserva y po-nerte a punto físicamente. ¿Qué sentías cuando no eras tenido en cuenta en Pri-mera? - Cuando llegué fue muy dificil porque esta-ba mal en ese tema. Pude ganarme un lugar gracias al trabajo que han hecho conmigo los profes (nombra al preparador físico Oscar Or-tega y a Diego Simeone) más la dedicación que le puse a cada entrenamiento.¿El Cholo te dijo algo por haber usado la 14?

- Sabía que él usó ese número, pensé que me tiró presión (risas). No lo elegí yo, me lo dieron cuando llegué. Es lindo tener el nú-mero que usó mi entrenador.

Contra Atlético Rafaela fuiste elegi-do como el mejor del encuentro. ¿Coin-

cidís que en esa fecha estuviste en un buen nivel?

- Fue mi mejor partido en Racing. No so-lamente mio, sino del equipo que se esforzó mucho. Los compañeros jugaron a un gran nivel. Aprendí mucho de ellos. Cada día incor-porás cosas de todos y más de los jugadores buenos.

¿Estás contento en Argentina? Tan-to vos como tu familia.

- Estamos super contentos. ¿Cuál es el objetivo grupal y perso-

nal para el próximo semestre?- Salir campeón, es lo que hemos pensa-

do en todo este tiempo. En lo personal, ga-narme un puesto y hacer las cosas bien.

Y la selección, ¿no?- Obviamente, siempre.

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ELECCIONES: RACING SIGUE

RACINGSIGUECon un claro y aplastante triunfo, la agrupación

liderada por Gastón Cogorno, Rodolfo Molina

y Víctor Blanco se impuso con total autoridad

frente a las demás agrupaciones. El club volvió

a elegir presidente y Pablo Podestá fue el gran

perdedor de la contienda electoral.

Armando Fertitta@a_fertitta

Nacho Akd

Texto

Fotos

La Academia” celebró una nueva jornada democrática. Más de 6 mil socios se acercaron a la sede de la avenida Mitre para decidir sobre los destinos del club por los próximos tres años. Tuvieron que pasar trece para que se pudieran celebrar dos comicios consecutivos, luego del “parate” demo-

crático a raíz del gerenciamiento.Las elecciones políticas no sólo sirven para repartir cargos, sino para dirimir

poder y legitimar candidatos. El gran ganador, Rodolfo Molina, con su candidato Gastón Cogorno, no sólo aplastó a su rival político directo, sino también a todo el arco opositor. Es que con los 4307 votos conseguidos, sobrepasó sin ningún tipo de discusión a la agrupación Este Racing encabezada por Pablo Podestá, que obtuvo 1039 votos. Más atrás lo siguieron Miguel D’Aquila, representante del Frente de Unidad Racinguista, con 784 votos y Daniel García, de la agrupación Racing Club, con 187.

Los resultados se tornan aún más llamativos cuando se realizan ciertos cálculos simples. Ni la suma de todos los votos a los otros candidatos -2010 en total- pueden siquiera acercarse a los más de 4 mil obtenidos por Cogorno. Ade-más, si se tiene en cuenta que tanto Racing Sigue como Este Racing provinieron de la fractura de Racing Vuelve, uno podría estar en condiciones de afir-mar que el “ex oficialismo” en su totalidad obtuvo 5346 sufragios sobre

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pueden dan a lugar posturas no tan favora-bles. Además de tener mayoría automática en asambleas, el oficialismo ahora podría argu-mentar que con el amplio apoyo recibido por los votantes, no deberían dar demasiadas ex-plicaciones sobre el modelo que se eligió. Algo cierto en parte, pero su abuso podría llegar a ser perjudicial. Los ganadores absolutos no tienen la razón absoluta. En todas las demo-cracias los disensos también sirven para reali-zar controles, aportar ideas y no ser sólo una minoría que se limite a ser testigo de lo que sucede.

La oposición, por otro lado, debería replan-tearse las estrategias en el corto y el mediano plazo. Más allá de realizar una campaña basada en el “honestismo”, es decir “nosotros somos honestos y ellos no”, debería realizar propues-tas que se apliquen a la cotidianeidad del socio y lo convenzan. La oposición debería ser pro-positiva, hacerle llegar un modelo de club y conducción al socio, para no quedarse simple-mente en realizar denuncias.

Este nuevo período recién empieza. En tiempos políticos y deportivos tres años re-sultan una eternidad. En la próxima elección el padrón habrá aumentado, lo que permitirá que más socios se acerquen a votar. Depen-de de ellos que acercarse cuando les toque y que los redoblantes, los encadenamientos a la sede, las marchas frente a la AFA y el cilindro lleno pero sin partido sean hechos que queden guardados en la memoria, y no fantasmas que sobrevuelen con una mueca que asuste.

6328. Aplastante.En los últimos meses del año la ba-

talla electoral se planteó principalmente en dos frentes. Racing Sigue y Este Racing se atri-buían el título de “oficialismo” y se autodeno-minaron “la continuidad”. Denuncias sesgadas de por medio y atribuciones de méritos domi-naron la campaña. Desgraciadamente, más allá de la división política de Racing Vuelve, no hubo mayores explicaciones de lo que real-mente sucedió.

Racing Sigue tiene la responsabilidad de explicarle al socio con claridad cuáles fueron los motivos por los cuales se produjo la frac-tura con Pablo Podestá. El juego electoral de mirar para otro lado y contar medias verdades sólo sembró dudas. Si Podestá realizó manejos espurios en el club ¿No debió ser denunciado? ¿Desde hacía cuánto que el ahora ex vicepresi-dente estaba involucrado en esas cuestiones? Lo mismo cabe preguntarle al famoso 80% de la comisión directiva que abandonó Racing Vuelve.

El ahora oficialismo también debería dar explicaciones sobre los aspectos políticos y económicos del club ¿Por qué el pasivo ha aumentado fuertemente durante toda la gestión? El club actualmente tiene un pasivo aproximado de 107 millones de pesos que co-mienza a inquietar. También es necesario re-pensar el estatuto del club, lo que significaría democratizarlo aún más. Esto debería realizar-se en conjunto con las diferentes agrupacio-nes que conforman el mundo Racing, que son la garantía del futuro democrático.

Los resultados tan abultados además

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CRÓNICA: BALANCE APERTURA 2011

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ESPECIAL FOTOS: RECESO POR NACHOAKD

RECESONacho AkdFotos

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ESPECIAL FOTOS: RECESO POR NACHOAKDPLANETA RACING

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ENTREVISTA: NICOLÁS ORÓZ

El joven de 17 años nos contó como es su vida, desde sus comienzos cuando conoció la pelota hasta cómo llegó a Racing y todo lo que le produjo ser convocado por una categoría mayor a la cuál pertenece. Además, se mues-

tra emocionado por arrancar con los entrenamientos el próximo lunes y nos afirmó "el año pasado termine el colegio y este año empiezo la facultad". ¿Como fue que comenzaste a jugar al fútbol?

- Según me cuentan, cuando tenia cuatro años jugaba con mi viejo y unos años despues empecé en un equipo que se llamaba Las Palmas. ¿Cuando llegaste a Racing?

- LLegúe en el 2009 con edad de octava. Un amigo de la familia habló con un coordinador para que me venga a probar. Estuve una semana y quedé.¿Por qué La Academia y no otro club?

- Cuando estaba a prueba noté como era la gente del club, como nos trataban y me quedé muy conforme con eso. Tam-bién tomé en cuenta que Racing es un club grande y muchos quisieran jugar aca. ¿Cuál fue el entrenador que más cosas te enseñó?

- Todos los que tuve me enseñaron mucho y diferentes cosas. Chango Godoy, Raúl Tojo y Juan Solari son los que tuve desde que llegué y mucho les debo a ellos .¿Cómo viviste la Copa Campeonato?

- El campeonato fue duro, habíamos arrancado bien pero no encontrabamos el nivel que queriamos. Esto, sumado a muchas lesiones en el grupo, hizo que se nos complique.Describime a tu equipo de inferiores

- Somos un buen equipo, aunque estamos trabajando en poder mantener un nivel de fútbol estable. Somos agre-

El 2012 comenzó con todo en el mundo fútbolistico de

Racing Club, pero Planeta Racing no se olvida de los

juveniles y en esta oportunidad tuvimos la posibilidad

de hablar con Nicolás Oróz, enganche que además de

formar parte de la Sexta División, integró la Tercera

División al mando de Juan Barbas.

"MI SUEÑO ES LLEGAR A PRIMERA"

Luciana Ursino @Lupina13

Texto

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ENTREVISTA: NICOLÁS ORÓZ

sivos cuando queremos presionar y ata-car, pero tenemos que trabajar más en la

tenencia de pelota.¿Te sorprendió que te llame Barbas?

- Si me sorprendió. Nuestro campeonato había terminado y no me imagine que me iba a llamar e iba a tener que jugar unos partidos más.¿Cómo fue tu experiencia en Reserva?

- Muy linda, lo disfruté mucho. Me agarró de sorpresa y al principio no caía, pero fue muy lindo jugar esos partidos.¿Cómo fue tu 2011 y cómo crees que será este año?

- Mi 2011 fue lindo, tranquilo por momen-tos, en otros no tanto por malos momentos futbolisticos con el equipo. Pero en general viví un fin de año muy lindo.

- Este 2012 va a ser duro como todos. Voy a entrenar y tratar de estar cada vez más cerca del objetivo.

¿Cómo es un dia en tu vida?Nos levantamos a las 8 de la mañana, de-

sayunamos, nos llevan a entrenar, nos van a buscar cuando terminamos. Luego almuerzo, duermo una siesta, a la tarde voy al colegio, vuelvo a cenar y me acuesto.¿Cuál es tu sueño?

- Mi sueño es llegar a primera. Por ahora no hay otro.¿Quíén es tu idolo?

- Mi idolo es Diego, siempre admiré su fút-bol, su corazón para jugar y sus ganas de dar todo en cada partido.

- Oróz demostró durante la Copa Cam-peonato, donde su equipo terminó en la déci-mocuarta posición con 19 puntos, y el torneo de Reserva tener la capacidad necesaria para llegar lejos. Si bien, el camino es largo, el juve-nil no muestra desesperación y sabe que con tranquilidad podrá lograr su objetivo principal que es llegar a la Primera División.

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FILIALES: MAR DEL PLATA

FIESTA FILIAL MAR DEL PLATA Los racinguistas de la ciudad balnearia celebrarán su clásica

reunión académica con la presencia de glorias y autoridades.


Texto

La casa de Racing de la ciudad de Mar del Plata realizará su clásica cena y fiesta el 18 de enero en el Centro Vas-co local. Allí participarán dirigentes y

ex jugadores del club. Seis jugadores y el direc-tor técnico, Alfio Basile, también estarían pre-sentes dependiendo del cronograma de viaje. Una buena excusa para pasar una noche con racinguistas, comer y alentar a la academia.

Como todos los años, la filial marplatense celebra su fiesta, ésta vez en el Centro Vasco Denak Bat, ubicado en la calle Moreno 3440, entre Jujuy y España. Allí se darán cita el fla-mante presidente Gastón Cogorno, el vicepre-sidente Rodolfo Molina y el actual coordinador Roberto Ayala. También estará presentes los ex campeones Rubén Paz y Martín Vitali.

Queda a confirmación la presencia de seis jugadores del actual plantel, Alfio Basile y par-te del cuerpo técnico. Esto teniendo en cuenta

que para que estén presentes, el equipo debe-rá estar en la ciudad el miércoles 18, y no viajar el mismo día del encuentro contra River, pro-gramado para el día siguiente.

El coste de la tarjeta será de $100 y el menú constará de dos platos, un vino, cerveza o gaseosa por persona. La misma podrá adqui-rirse a partir del lunes 9 en Santiago del Estero 1844. Para más información pueden comuni-carse con el presidente de la filial, Fernando Gianfrini al (0223) 495-5487.

Ésta es una cita obligada para los acadé-micos de la ciudad, quienes estén vacacio-nando o vengan para el partido contra River. La fiesta será el primer evento del año en la cual estarán presentes las nuevas autorida-des y muy posiblemente jugadores y el “coco” Basile. Además de cantar y pasar una gran noche, será el momento ideal para darles una cálida bienvenida.

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FILIALES: MAR DEL PLATA

EL VERANO Y RACING: MAR DEL PLATA

No vayas solo a

la cancha, la filial

de Racing en

Mar del Plata te

acompaña con varias

actividades a lo largo

de la temporada.


Texto

El calor, las vacaciones, la academia y la costa marplatense se combinan de manera irresistible. Si no tenés con quién viajar, o no conocés la ciudad no

te preocupes, te presentamos el cronograma que tienen preparado los académicos marpla-tenses para los partidos de Racing.

* Con motivo del partido que Racing se en-frentará a Estudiantes de La Plata, el martes 10 de enero, habrá una reunión previa en la playa Varese con todos los racinguistas. Luego se partirá hacia la cancha. Si no conocés la pla-ya ubicada en Boulevard Marítimo y la Avenida Colón.

* Si tenés ganas de pasar un buen rato y comer bien, el sábado 14 la gente de la filial or-ganizará un asado en la filial.

* El miércoles 18 realizarán la fiesta anual, que contará con la presencia de dirigentes, glorias y más sorpresas.

* El jueves 19 habrá cita una vez más en la playa Varese. Previa a todo trapo para luego ir a ver Racing-River.

* Si te perdiste el asado y la fiesta, el sá-bado 21 tenés revancha. Organizan otro asado racinguista en la filial

* El sábado 28 no es una fecha más. El primer clásico del año se viene con todo y los racinguistas se reúnen nuevamente en la pla-ya Varese. Luego de la previa, la filial pondrá a disposición un micro para que la gente vaya junto a la caravana hacia el estadio y disfrutar de Racing-Independiente.

Para mayor información sobre los even-tos podés comunicarte con el presidente de la filial Mar del Plata, Fernando Gianfrini, en los teléfonos (0223) 495-5487 ó (0223) 155-03453.

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ESPECIAL: FIESTA PASO A PASO

Juan Carlos Baldovino

Fotos

"ESTÁN TODOSLOCOS…"Así resumió Maximilano Estévez a los hinchas

de Racing, que deliraron en Groove por los diez

años de la vuelta olímpica. Junto a la Chanchi,

José Chatruc y Claudio Úbeda también hablan

de aquel torneo y de la actualidad de cada uno

relacionado con la Academia.


Texto

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La Chanchi, Pepe y Sifón. Tres relevantes jugadores que dejaron su huella en Racing y recibieron, una vez más, un merecido homenaje en la Fiesta del Paso a Paso, que tuvo lugar en el boliche porteño Groove. Antes de subir

al escenario junto a Francisco Maciel y escuchar la ovación de los presentes, dialogaron con Planeta Racing sobre el Apertura 2001 y, particularmente, su presente vinculado a la institución donde tocaron el cielo con las manos.Hace diez años o más, ¿alguna vez se imaginaron ésto?

- Chatruc: Es difícil, pero es una alegría haber sido parte. Hay que disfrutarlo, vine con amigos para que vean la locura ésta y que la pasen bien conmigo.

- Úbeda: Recordarlo hoy después de 10 años es hermoso, parece que no ha pasado tanto tiempo, pero pasó. Se me vienen muchos flashes, el partido con River, con Estudiantes, la vuelta olímpica en Vélez, las dos canchas llenas, la situación del país...creo que se tenía que dar un marco tan dramático como el que hubo para que Racing salga campeón.

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Desde el 2002 se festeja ininte-rrumpidamente el aniversario del

título cada 27 de diciembre, ¿por qué piensan que Racing es especial?

- Chatruc: Primero que es un club grande. Después, es muy sufrido el hincha de Racing, muy pasional y lo demuestra en estas fiestas. Haber salido campeón y cortar esa racha es un orgullo personal y una alegría.

- Úbeda: Porque lo demuestra ante la ad-versidad. A medida que va pasando el tiempo, la gente potencia más su cariño por el club. Es como que esa necesidad de lograr cosas hi-ciera que el amor por la camiseta sea cada vez más fuerte.

- Estévez: Están todos locos…¿Cómo los trataron los hinchas en estos 10 años?

- Chatruc: La gente tiene muy buena onda y es lo que te queda después de retirarte: el cariño y los saludos.

- Úbeda: El cariño de la gente es impre-sionante y permanente. Es recíproco, como el agradecimiento. Racing me formó como jugador, me dio gloria. Yo siempre voy a estar agradecido y ojalá pueda ayudarlo desde otro lugar. La gente retribuye la entrega, la manera en que ganó el torneo. El hincha de Racing es especial y cada vez que nos topamos con ellos, nos hacen esta muestra de agradecimiento. Es algo que no se puede comprar con nada y lo voy a llevar siempre conmigo.

- Estévez: Lo mismo, la gente me trata siempre con mucho cariño y respeto. Yo quie-ro mucho al club. Pasé muchos años de mi vida ahí, así que en parte siento que es recíproco por haber contribuido en el campeonato. Per-sonalmente, es gratificante. Desde los 10 años

que jugué en Racing. Prácticamente me hice hincha. En lo deportivo fue lo mejor que me pasó en la vida. José, hoy estás abocado a la televisión, pero ¿te gustaría estar en el banco de su-plentes como entrenador o colaborador en algún momento?

- Por ahora estoy tranquilo, es mucha presión, aunque más adelante puede ser. Soy joven, tengo 35 años, así que tengo tiempo. Postulé a Ubeda y (Facundo) Sava. Yo tendría que dejar mi trabajo. Igual, nunca me llamaron, pero hubiera sido tentador. La verdad que lo tendría que pensar porque es difícil. Todavía no estoy recibido de técnico, por eso es compli-cado que me tengan en cuenta. Y es muy difícil decirle que no a Racing. Claudio, mencionaste que te gustaría aportar tu granito de arena al club y lo re-laciono con el presente. ¿Qué posibilida-des hay que seas el colaborador del Alfio Basile en el próximo torneo?

- Ojalá que pueda ser así. Ya estuve reu-nido con (Alfio) Basile y con los directivos. Las cosas están bastante avanzadas y espero que salga todo bien.El plantel y cuerpo técnico destacan siempre anécdotas de Chatruc y Estévez, ¿se puede contar alguna broma?

- Estévez: Son cosas que quedan adentro del vestuario, sino después las copian (risas). Tratamos de pasarlo lo mejor posible. Es un


Foto: Leandro Adonio BelliFoto

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grato recuerdo. Se armó un lindo plantel. Con Pepe nos seguimos viendo, así que seguimos haciendo las mismas idioteces que hacíamos antes. Maxi, de los tres sos el único que sigue en actividad. ¿Te gustaría retirarte en el club?

- Vamos a ver, depende de lo que pueda ha-cer en Deportivo Merlo, donde tengo 6 meses más de contrato. Tengo 34 años, me gustaría jugar dos o tres años más. Si el día de mañana se me abren las puertas de Racing para retirar-me ahí, mejor, sino trataré de seguir jugando hasta los últimos días.Si llega a asumir Úbeda lo podrías llamar para que te lleve de nuevo, ¿no?

- Si los dirigentes y cuerpo técnico cree que puedo seguir jugando en un buen nivel, quizás tenga una posibilidad, pero todo depende de lo que pueda hacer este tiempo. Ahora empieza una apuesta nueva con el Coco y hace jugar muy bien a sus equipos. Espero que se corte esta racha de 10 años sin salir campeones, por la gente y la gran institución que es.apuesta nueva con el Coco y hace jugar muy bien a sus equipos. Espero que se corte esta racha de 10 años sin salir campeones, por la gente y la gran institución que es.Después vamos a tener que buscar un boli-che más grande para hacer las dos fiestas…

- No, un cirujano para que nos haga un lif-ting, sino vamos a estar muy viejos después.

El equipo se armó con el objetivo de escaparle a los últi-mos puestos y terminó dando la sorpresa. Se creó una mística, una onda positiva que se reflejó partido tras partido. Reinaldo Merlo contó con todos los refuerzos

que pretendía y fue el encargado de generar esa sintonía, que finalmente los dejaría en la historia de la institución.

El segundo semestre del 2001, y como no podía ser de otra manera, tuvo varios matices que lo convirtieron en especial. Uno fue la situación del país, desbordado política, social y eco-nómicamente. Sin embargo, en lo personal, con mis 13 años, solamente soñaba con Racing campeón. Y ese deseo, fecha tras fecha, “paso a paso”, se cumplió.

Recuerdo cada partido y la historia detrás de cada uno. La cábala –no solamente Mostaza las tenía- era ver a la Academia en una pizzería cercana a mi casa. Allí ganó ante Argentinos Ju-niors por la primera fecha, un viernes a la noche, y luego adopta-mos el lugar. Excepto contra Nueva Chicago, que nos decidimos ir a la cancha sin importar las consecuencias. El infartante 4-4 fue una señal para que en los siguientes encuentros volvamos a la pizzería y no nos movamos de ahí, aunque nos quedemos con las inmensas ganas de ver al equipo en la cancha.

En ese lugar, en la misma mesa cada domingo, pudimos callar a los simpatizantes de River gracias al gol de Gerardo Be-doya. “Me parece que Racing no sale campeón…”, me acuerdo claramente que gritaban. Los mismos vecinos que meses más tarde me revelarían que, en algún lugar de su corazón, estaban contentos con el título del equipo de Merlo.

El 2001 coincidió con mi egreso de la escuela primaria y, por lo tanto, el típico viaje de egresados a Córdoba. Ante Lanús, por la anteúltima jornada, llegué justo de la excursión por el inter-minable Cerro Catedral y resigné la merienda a cambio de gritar los goles de Rafael Maceratesi y José Chatruc.

Antes de volver ya me había enterado que la última fecha fue reprogramada por los conflictos que atravesaba el país. Una vez designado el día, nuevamente decidimos abandonar la cábala –la situación lo ameritaba- y presenciar el encuentro en el estadio de Vélez. Tras no conseguir entradas en la sede de Villa del Parque, nos contaron la posibilidad de verlo ahí en una pantalla gigante, especialmente colocada para semejante acontecimiento, y no lo dudamos, sobre todo por el tiempo y la gran cantidad de gente que no quería perdérselo.

Así fue como el jueves 27 de diciembre llegamos para ver –y sufrir- los últimos minutos de la goleada de River a Rosario Central, resultado que obligaba a los de Avellaneda a empatar o ganar para quedarse con el Apertura. El desenlace de la historia ya es conocido. Racing culminaba con la sequía de vueltas olím-picas a nivel local después de 35 años.

A diez años de la mayor alegría deportiva de la década (y hasta el momento del siglo) se recuerda con felicidad y, a su vez, con melancolía y sueños por volver a sentirse campeón.


Opinión: Goal Lationamérica.

Mi Paso a Paso del Racing campeón 2001Recuerdos y sensaciones a una década del título que rompió con 35 años de sequía en el ámbito local.


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ENTREVISTA: FRENCISCO "PANCHO" MACIEL

Pancho o Panchito -para los más confianzudos-. En de-finitiva, Francisco Maciel. Uno de los tantos refuerzos que llegaron a la Academia para escaparle a los últimos puestos de la tabla general y terminaron dando la vuel-

ta olímpica. Tanto para el ex Almagro como para el resto de sus compañeros, el Apertura fue el torneo que jamás se olvidarán. Y los simpatizantes racinguistas, mucho menos. A exactamente diez años del empate ante Vélez que significó culminar con 35 años sin títulos a nivel local, el ex defensor lo compara con "10 campeonatos en River o 15 en Boca", algo único...como Racing. ¿Qué sensaciones tenés a diez años del título?

- Fue un año único. Para la mayoria, lo mejor de nuestras carreras por todo lo que significó. Y para los hinchas también, obvio. ¿En qué partido consideraste seriamente la chance que podían adueñarse del Apertura?

- Yo creo que hubo varios. El equipo demostraba todo el tiempo que cuando tenía que ganar, ganaba.

A diez años del último título, Francisco Maciel recordó el

torneo del equipo de Mostaza Merlo. Panchito destacó la

mentalidad ganadora del grupo y reveló la anécdota de

un compañero que marcó al resto. Y contó a qué técnico le

hubiera gustado romper con la sequía de éxitos locales.

"LO MÁS GRANDE QUE ME PASÓ EN LA CARRERA"


Texto

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ENTREVISTA: FRENCISCO "PANCHO" MACIEL

Ficha técnica

Nombre : Francisco Diego MacielNacimiento: 17 de septiembre de 1977 Buenos Aires, ArgentinaNacionalidad: ArgentinaAño del debut 1995Club del debut Yupanqui

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42 planetaracingrc.com .ar


34ª edición

Nunca fallaba. No se caia nunca, tenía una mentalidad ganadora terrible. Sa-

bía que no perdía. El de Estudiantes fue te-rrible (perdía 0-2 en el primer tiempo y lo dio vuelta en el segundo), el de Chicago también, impresionante (3-1 abajo, empató 4-4). Yo me di cuenta contra Chacarita, que ganamos 1-0, cuando Ramos pateó un tiro libre, la pelota pegó en el palo y pasó por toda la línea. Des-pués de éso dije "ya está, somos campeones". Yo sentía no que se nos escapaba. De entrada pensábamos que lo ganábamos. El equipo era muy fuerte mentalmente y anímicamente. No se si no jugaba bien, ese equipo te metía en un arco, no aflojaba nunca. El plantel se armó casi de urgencia, con el objetivo de zafar de la Promoción y termi-nó obteniendo el título, mientras que los campeones, generalmente, son equipos ya consolidados. ¿Qué tenía de especial ese grupo?

- Los campeones son equipos que se ar-man y pelean arriba varios años seguidos. Yo

creo que si ese equipo seguía todos juntos estaba para conseguir más cosas, porque al siguiente torneo de casualidad no le ganamos a River y casi salíamos campeones de vuelta. Se reunió un grupo que no se arma todos los días, se dá cada mucho. Tiraba siempre para el mismo lado, era una mezcla de jugadores gran-des con gente joven. Nos llevábamos bárbaro, ésa era la clave, y por ahi con compañeros de otros equipos no pasa. Ahora, te encontrás con un ex compañero y el sentimiento es el mismo que hace diez años. Cuando tienen la oportunidad de encon-trarse, ¿qué anécdotas nunca faltan?

- Hay muchas...las del último partido, cuan-do Sessa vino a cabecear, por ejemplo. ¿La de Estévez contra River?

- (Risas) Ésa no lo hablamos, fue terrible. Repasamos de (Reinaldo) Merlo, cuando entró una vez al vestuario, pateó una botella de vi-drio y casi le pega a (José) Chatruc. La verdad es que hubo muchas cosas, pero todos momentos lindos. Ninguno malo, y si había alguno, como el hecho que dos compañeros se pelearan an-tes del partido con Vélez, ni se notaba, todos

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34ª edición

tirabamos para el mismo lado, porque sabía-mos que era nuestra posibilidad. Hacés mucho énfasis en la unión del gru-po. ¿En qué circunstancias lo demostra-ban?

- Nos juntábamos en la concentración an-tes de cada partido. (Claudio) Úbeda cuenta siempre que a él lo marcó una situación que nos decía Gustavo Barros Schelotto: él había perdido una final con Gimnasia de la Plata y nunca se la iba a olvidar. Era la posibilidad de su vida porque quedaba para siempre en la his-toria de la institución y no quería quedarse con las manos vacías otra vez. Entonces, nos metió en la cabeza que esta chance era única, que no la desaprovechemos, era muy feo perderla. Te-nía razón. Hoy a diez años se lo agradecemos y es impresionante lo que se logró.¿Cómo quedó la relación con Merlo des-pués que te apartara del equipo en 2007?

- Con Mostaza está todo bien. Hubo cosas, pero ya pasó. El tiempo cura. Nos vimos hace poco y está todo bien. ¿Qué hubiera sido de tu vida sin Racing?

- No me lo imagino. Sinceramente, es muy

lindo lo que me pasó. Creo que cualquier juga-dor hubiera querido salir campeón en Racing y romper esos 35 años de sequía. Había como un mito. Yo siempre cuento que cuando llegué a España, Héctor Cúper, que había dirigido a Valencia e Inter, me preguntó cómo fue ese año en la Academia. ¡Yo le estaba contando a Cúper! Un técnico reconocido en Europa. Él me decía que siempre soñó con dirigir Racing y sa-carlo campeón. Por suerte, nos tocó a nosotros y estoy eternamente agradecido porque es lo más grande que me pasó en la carrera. Es como ganar 10 campeonatos en River o 15 en Boca, es comparable con éso.

El 27 de diciembre de 2001 ese mito se rompió, dejó de existir. Un día que, una década después, continúa festejándose y así será en los años siguientes. Y un tal Francisco Maciel fue parte de ello. Ocupó un lugar envidiable por el resto de sus colegas, tal como lo descri-bió. Un sueño que demoró en llegar, pero una vez consumado quedó grabado a flor de piel en cada uno de los involucrados.

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Agustìn MelsaCuento

En la vida de un hincha de fútbol es co-mún usar frases del estilo de “hago de todo por vos”, “no hay límites para este amor”, “haría cualquier cosa con tal de

verte”; etc. Uno lo dice casi banalmente, sin pen-sarlo, porque considera que es capaz de bancar-se cualquier cosa por el amor que siente por sus colores, por esa camiseta, ese modo de vivir y entender la pasión por el que considera el depor-te más maravilloso del mundo. Pero, ¿y si lo lleva-mos a los hechos?, ¿hasta donde uno sería capaz de hacer locuras por su club? En esa encrucijada se encontraba Mario. Un joven de unos 30 años, fanático de Racing que había asistido a todos los partidos de la épica campaña del 2001. Fue uno de los primeros en llegar en el debut frente a Ar-gentinos Juniors, quedó afónico por un cabezazo de Loeschbor en la casa del vecino sobre la hora y gozó aquel heroico partido ante Estudiantes en La Plata. Ni que hablar de cómo vivió el zapatazo de Bedoya frente a River, habían pasado un par de semanas y todavía lo estaba gritando. Pero parecía que se iba a quedar sin la frutilla del pos-tre porque el caos social no solo incluía al pueblo argentino sino también a los hinchas de Racing. Para la gran final contra Vélez la venta de entra-das fue un verdadero desborde producto de una pésima organización y una demanda desespera-da para tratar de asegurarse un lugar. Y en medio de todo ese lío, a pesar de haber pasado noches enteras acampando en el Cilindro, Mario se que-daba sin entrada. Cuando se fue extendiendo la noticia de que se habían agotado el corazón del joven cayó al decimoquinto subsuelo. No podía creerlo. Como muchos, él, por una cuestión de edad, todavía no había visto a Racing Campeón a nivel local y luego de seguirlo todo el torneo se quedaría afuera en la última estación y se perde-ría la eventual consagración. Lo primero que se le vino a la mente fue: “No importa… yo el jueves me mando igual”. Pero después recapacitó: “Va a ha-ber mucha policía, ya veo que me llevan en cana y no puedo verlo ni por tele”. Movió cielo y tierra para tratar de conseguir una entrada para él pre-guntando en las afueras del Cilindro pero poco a poco su esperanza se iba extinguiendo. Descon-solado como muchos otros, Mario caminaba por calle Italia rumbo a Avenida Mitre con lágrimas en los ojos. Su cabeza estaba completamente en blanco y por más esfuerzo que hiciera no podía disimular la tristeza que lo invadía. Cuando subió al 247 que lo llevaría hasta su casa, se sentó y su mirada se fue directamente al piso. Ni siquiera se dio cuenta del viaje porque se le hizo mucho más rápido de lo normal. Bajó del colectivo y cuando se disponía a abrir la puerta de su casa, un pen-

samiento repentino y esclarecedor lo detuvo: “Luciano”. Dijo en voz alta. “Luciano, tengo que llamar a Luciano, es una locura pero él me puede salvar”. Y si… era un disparate porque Luciano no era amigo hincha de Racing cuyo contacto con algún dirigente lo pudiera ayudar a conseguir una entrada visitante. Luciano era hincha… de VELEZ!!! La cabeza de Mario iba a mil: ¿aguantaré a verlo del otro lado? Pero no había tiempo para más, se comunicó con su amigo fortinero quién le aclaró los pro y las contras de lo que iban a hacer y tras la aceptación del académico se compro-metió a conseguirle una entrada para el Vélez vs. Racing del Apertura 2001 pero del lado local. Horas después Luciano confirmaría la obtención del ticket para el partido más importante en la vida de Mario que, no iba a tener otra que vivirlo desde la tribuna equivocada.

A partir de ese momento la cabeza de Mario, como buen racinguista, se ocupaba de imaginar lo que sería aquel encuentro. Pero claro, mien-tras la mayoría de nosotros nos preguntábamos sobre si Chatruc sería el encargado de darnos el gol del campeonato o si Campagnuolo terminaría sacando pelotas de gol hasta el último instante; los interrogantes de Mario se posaban sobre si sería o no descubierto por los hinchas locales ya que no le iba a quedar otra que ocultar sus senti-mientos por más fuertes que estos fueran. Llegó el día. Su amigo Luciano le había aconsejado ir temprano y le aseguró que se quedaría a su lado todo el partido. Al ir acompañado por un hincha vestido con indumentaria de Vélez no iba a le-vantar muchas sospechas. Ya en las adyacencias del estadio se podían ver los primeros fortineros, eran pocos pero igual incomodaban a Mario que, para disimular un poco más había ido con una re-mera azul y un short blanco. ¡SI! Había ido con los colores de Velez. ¡Increíble! Eso si… la remera le tapaba los tatuajes de Racing que se había hecho en la época de la quiebra. Una vez dentro del José Amalfitani la sorpresa de Mario fue tremenda. Aún faltaban más de dos horas para el comienzo del encuentro y la popular de Racing estaba aba-rrotada de gente. Las plateas también tenían pú-blico aunque lejos estaban de llenarse. El equipo local había cedido tres de los cuatros sectores de plateas para el visitante, algo inédito. Los ojos de Mario no lo podían creer… su pueblo ya había comenzado la procesión y muchos ya estaban en sus lugares, como si el partido fuera a empezar en 5 minutos y faltaba una eternidad. A todo esto Luciano, que no se había percatado que su ami-go se había quedado petrificado observando a la gente de Racing, ya le había sacado unos metros de distancia. Ambos habían acordado no ir al cen-

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“EN LA TRIBUNA EQUIVOCADA”27/12/01tro de la popular de Vélez, sino a un costado de la misma. Bastante pegados a las dos plateas de Racing. El calor era insoportable y la lluvia acom-pañada de unas pequeñas piedras sorprendió a más de uno. Fue un alivio mientras duró el agua-cero pero minutos después que paró se levantó una humedad espantosa. A todo esto, Luciano se había acercado a uno de los policías que estaban cerca suyo para comentarle la situación y ver si cabía la posibilidad de hacer pasar a su amigo a la platea visitante. Recibió un NO como respues-ta por disposición del Jefe del operativo para no levantar la perdiz, pero le dijo que si Racing salía Campeón podría hacerlo pasar una vez termi-nado el partido. Ahí viajaba la última esperanza de Mario por ver el partido con su gente. Las ho-ras pasaron muy lentamente pero el momento había llegado. Brazenas asomó primero, Vélez salió después y unos segundos luego apareció Racing y el cemento tembló…. El espectáculo era conmovedor por donde se lo mire y a Mario no le alcanzaban los ojos para mirar la mejor salida que haya visto en su vida. Esta vez no era partíci-pe sino espectador del show que le brindaban las miles y miles de almas que querían que todo se terminara ya con el final soñado. Papelitos, glo-bos, humo, banderas al viento y un grito que le puso la piel de académico: “En el este y el oeste, en el norte y en el sur, brillará blanca y celeste, La Academia Racing Club”. Era su gente la que ento-naba las estrofas de un canto ya convertido en himno: “Tenés que salir campeón, este es el año, ustedes poniendo huevos y yo alentando”. A Ma-rio se le movía literalmente el piso. No lo podía creer y tuvo que limpiarse los ojos sin que nadie se diera cuenta con un pañuelo que había llevado consigo. Claro, sabía que esta iba a ser una tarde de emociones fuertes…

Entre los dos amigos se había entablado un pacto: no se hablarían durante el partido, cada uno lo viviría a su manera aunque claro, Mario es-taba atado. Se sentía atrapado en un lugar que no le correspondía. Vélez intentaba golpear de entrada con un Leandro Gracián que comandaba todos los ataques. Pero en la solvencia de Cam-pagnuolo y la solidez defensiva de Racing morían

todos los intentos. El partido era chato, peleado, rozaba lo aburrido. El negocio de los de Merlo era dejar que el reloj pase y conseguir el punto que se había venido a buscar. De repente, de la tribu-na visitante comenzó a surgir un grito de “Goooooooool”. Claro, es que Rosario Central le empataba a River por intermedio de Luciano De Bruno y le allanaba el camino a La Academia para la consagración. “La Acadé que vinimos a ver, te llevamos en el corazón, te queremos ver CAM-PEON” rezaba en forma de canción una tribuna repleta de gente. Era impactante ver a la gente de Racing que colmó cada lugar que se le asignó. Mario era feliz, pero quería un gol que lo tranqui-lizara. Luciano se le acerca y le dice: “Que lindo sería que River no gane y que ustedes sean cam-peones pero nosotros les ganemos” y le da una palmada a su amigo. Minutos después River vol-vería a ponerse en ventaja y todo quedaría en la nada. Racing tenía que llevarse algo si o si del Amalfitani. Nervios, tensión, lucha, fricción por todos lados y pocas llegadas a los arcos en un pri-mer tiempo de bajo nivel técnico pero de mucho valor para La Academia: ya faltaba la mitad del tiempo. Mario había vivido contracturado esa parte inicial. Le dolía la espalda, la cabeza, todo. Poco había podido dormir la noche anterior y el trajín de los días previos estaba haciendo mella en su cuerpo. Se sentía sapo de otro pozo y el en-tretiempo se le hizo eterno. Escuchaba por lo bajo como algunos hinchas de Vélez que peina-ban canas elogiaban la congregación de hinchas académicos en el Amalfitani: “Nunca vi semejan-te movilización de un equipo visitante”. Y Mario pensaba para adentro: “Es que hoy somos loca-les, bah ellos, yo en realidad no…o si…”. Tenía una mezcla de sensaciones realmente inexplica-ble. Quería que todo terminara ya, salir de ahí e ir a festejar con los suyos. Salían nuevamente los equipos a la cancha. Cronómetro en cero y a ju-gar. Eran los 45 minutos más importantes de su vida. Y pensar que a veces las horas se nos pasan tan rápido cuando trabajamos o hacemos las co-sas cotidianas… acá serían eternos. Pero antes de que el reloj marque los 10` Racing tiene una pelota parada. Bedoya y Estévez la acomodan y

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es el colombiano el que finalmente termina en-viando un centro que supera a todos. A todos menos a uno, solo y sin marca llega Gabriel Loeschbor. El mismo que hace unos meses había dejado afónicos a unos cuantos con aquel cabe-zazo frente a los vecinos. El frentazo del defen-sor se le mete a Sessa por entre las piernas y Mario sintió que un fuego atravesaba su pecho. Miró al juez de línea y vió como corría hacia la mi-tad del campo y escuchó un alarido ensordece-dor. Era su gente la que gritaba. Era la popular y las plateas las que bramaban. Era su viejo, el que también gritaba. Justamente él, que le había en-señado a amar a los colores de chico; él, que le contaba del Equipo de José; él, que lo acompañó en marzo del `99 a una cancha donde no había partido pero si el amor y la pasión necesarias para que, unos días después, Racing siguiera respirando. Podía hasta imaginar la imagen de su padre despertando a todos sus vecinos con su grito de gol. Eran miles y miles de académicos diseminados por el país y por el mundo los que se llenaban la boca y callaban a los de enfrente con un alarido eterno. Para muchos, el gol que más gritaron en su vida. Para Mario el gol de su vida, aunque no pudiera gritarlo. Quedó inmóvil. Casi petrificado. Con una sensación tan entremezcla-da que no sabía si reír o llorar de la emoción. Ra-cing le ganaba a Vélez y en un poco de más de media hora rompería con la nefasta racha de 35 años sin gritar Campeón. Y cuando los académi-

cos se preparaban para dar rienda suelta a un festejo anticipado y se escucharon los primeros “Dale Campeón, Dale Campeón…” fue Campag-nuolo el responsable de taparle un tiro a Roberto Nanni que quemaba y, a su vez, valía oro en pol-vo. Fue un momento clave de un partido que pa-recía cerrado y se abrió de golpe. Sin embargo, minutos después la calma volvió al juego. Lo me-jor se veía afuera. Mario miraba seguido a la pla-tea de Racing que le hacía gestos de “equipo chi-co” y “no existís” a Vélez. Por dentro se reía… “si supieran que yo soy como ellos, que amo a estos colores como a nada en el mundo y en el día más feliz de mi vida estoy sufriendo del lado equivo-cado”. A esa altura River goleaba a Central pero la gente de Racing ya había tirado la radio al demo-nio; si con el empate alcanzaba imagínense con un triunfo. Vélez intentaba pero chocaba contra un frontón y Racing miraba de reojo al reloj. Ya faltaban 15 y parecía que el destino no quería que Racing sufriera, casi como dándole un guiño a toda esa gente que bastante calvario tuvo que soportar en tres décadas y media sin campeona-tos. Pero… parece que si La Academia no sufre no vale. Un centro cayó al área de Campagnuolo, al parecer sin el menor riesgo posible; pero Vitali, de fenomenal torneo, la bajó de pecho con tanta mala fortuna que la pelota fue a caerle a Mariano Chirumbolo. Gol de Vélez. Y si el tanto de Loesch-bor había significado un fuego al pecho de Mario esta vez lo que sintió fue frío. Una sensación nuevamente horrible. Para colmo lo gritó toda su tribuna que se levantó al grito de “Vamos Vélez Vamos, ponga huevo, que ganamos”. Mario no quería ni mirar a Luciano. Fue el momento más tenso del partido hasta allí. Sin embargo, unos minutos después, una corajeada de un Chatruc extenuado iba a dejar al Fortín con un hombre

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menos. Roja para Jonás Gutiérrez y alivio para Ra-cing. Faltaban diez minutos y aunque Vélez iba lo hacía sin la más mínima claridad. Mario miraba la hora. Se puso de pie. Brazos cruzados. Había ten-sión de los dos lados. Los de Racing quería que todo terminara y los de Vélez ahogar la fiesta. Será por eso que Sessa fue a intentar arruinar todo dos veces al área contraria. ¿Era necesario? El partido había tenido innumerables parates, incluso uno bastante extenso porque algunos hinchas de Racing se habían subido al alambra-do. El reloj marcaba 45` y se suponía que se iban a adicionar al menos 5 minutos más. Sin embar-go, el cuarto hombre no levantaba el cartel. Mario no daba más. Y sus ojos veían como Campagnuo-lo hablaba con Brazenas. A todo esto Arano en-traba a la cancha para aguantar. El aire se cortaba con un cuchillo. Sacó Campa finalmente del arco y Mario se asustó. Sintió un grito que lo hizo so-bresaltar, el más fuerte que haya escuchado en su vida y sintió que el corazón se le salía. No había advertido que Brazenas había terminado todo. Si… Racing era el Campeón. Y él estaba del otro lado. Veía como se festejaba y como se multipli-caban los abrazos, el llanto y la emoción por cada sector donde hubiera un racinguista. Su amigo lo abrazó y lo felicitó por lo bajo. Él no escuchaba nada… solo se le caían las lágrimas. Tanto sufri-miento, tanta espera y por fin se había logrado el ansiado objetivo. Se sentó a mirar la tribuna, por-que en el apuro los jugadores ya se habían ido del campo. Y ahí recordó la promesa del policía. Lo buscaron con Luciano y el uniformado ya estaba con más de 5 personas a su alrededor que ca-sualmente no tenían nada de Vélez en su vesti-menta: estaba claro, eran de Racing. El policía los hizo pasar de a uno para que no se dieran cuenta los locales por un pasillo interno que comunicaba

la popular local con la platea contigüa. Mario sa-ludó a Luciano y mientras se iba corriendo le gritó: “Mañana te llevo el cajón de cerveza que te ganaste”. Claro, un cajón de cerveza era un regalo al lado de la chance que le había dado su amigo. Pero ahora solo importaba llegar al otro lado. Mientras atravesaba los pasillos Mario es-cuchaba a La Guardia Imperial con el “Dale Cam-peón” como estandarte. Seguro ya habrían sali-do los jugadores. Y por fin vió la puerta que lo conducía a la platea. Nunca se sintió tan feliz como en ese momento. La atravesó y vió sus colores, vió su gente, su familia de sangre, y no pudo más que largarse a llorar como un nene. Eran muchas emociones juntas las de aquella tarde en la que permaneció muchas horas en silencio sin poder expresar su sentimiento. Los jugadores ya habían salido al campo de juego y mientras Viveros corría envuelto en una ban-dera colombiana, Merlo era llevado en andas por sus colaboradores para recibir la ovación correspondiente. A Mario no le daban los ojos para presenciar aquello, ni las manos para aplaudir, ni la voz para cantar, y eso que había estado callado todo este tiempo. Era, es y será el día más extraño de su vida y, a la vez, la jorna-da más feliz de su existencia. Racing le había dado una alegría inigualable y él sin dudas ha-bía brindado una demostración de amor real-mente admirable. Fiel reflejo de lo que un hin-cha de Racing es capaz de hacer por amor…

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