Plan de Estudios 1926 a 1974

SEP

DIRECCIÓN GENERAL DE EDUCACIÓN SECUNDARIA TÉCNICA SUBDIRECCIÓN DE DESARROLLO EDUCATIVO

DEPARTAMENTO DE ESTUDIOS NORMATIVOS PEDAGÓGICOS

RESEÑA DE LA EDUCACIÓN SECUNDARIA EN MÉXICO

NOVIEMBRE 1986

LAS INSTITUCIONES SE TORNAN INÚTILES CUANDO PERMANECEN INVARIABLES EN UN

MEDIO SOCIAL QUE SE RENUEVA.

MOISÉS SÁENZ

CONTENIDO

1. INTRODUCCIÓN

2. LA DOCTRINA POSITIVISTA Y EL ESTABLECIMIENTO DE LA ESCUELA NACIONAL PREPARATORIA EN 1868.

3. LAS CORRIENTES PEDAGÓGICAS QUE ANTECEDEN A LA CREACIÓN DE LA ESCUELA SECUNDARIA EN MÉXICO.

4. EL ESTABLECIMIENTO DE LA EDUCACIÓN SECUNDARIA.

5. DESARROLLO DE LA EDUCACIÓN SECUNDARIA. PRINCIPALES ACCIONES Y REFORMAS

6. LAS ESCUELAS SECUNDARIAS DIURNAS, TÉCNICAS, TELESECUNDARIAS Y PARA TRABAJADORES.

7. DOCUMENTOS a). DECRETOS b). PLANES DE ESTUDIO DE 1926 A 1975 c). EVOLUCIÒN HISTÓRICA DE LA MATRÍCULA EN EDUCACIÓN SECUNDARIA DE 1924 A 1986.

8. BIBLIOGRAFÍA

1. INTRODUCCIÓN

Tener presente el origen de la educación secundaria en nuestro país, sus antecedentes y causas, así como el conocimiento de las circunstancias en que se ha desenvuelto, permiten sin duda, orientar los esfuerzos que hoy en día se realizan para vigorizarla, en consonancia con las nuevas necesidades sociales, con el ritmo de los acontecimientos que en esta época de cambios vertiginosos, por los adelantos de la ciencia y la tecnología, reclama nuevos planteamientos. No es posible soslayar, por otra parte, que desde 1925 en que se estableció este servicio educativo, ha tenido importantes avances, no sólo por lo que se refiere a su expansión, que ha sido constante, sino también por las diversificaciones de opciones, las cuales responden a requerimientos específicos de la sociedad, como es el caso de las escuelas secundarias técnicas, telesecundarias y para trabajadores. En esta breve reseña de la educación secundaria, se apuntan algunos hechos, por demás conocidos, y se incluyen documentos no menos divulgados. No tiene otro propósito que el de resaltar, por parte nuestra lo fructífero de un ideal, de una concepción educativa que merece ser fortalecida; que cuando se profundiza en su génesis y desarrollo, renueva nuestro espíritu y nos presta arrestos para continuar una labor trascendente y humanista. Precisar, por lo mismo, los fines de la educación secundaria es reafirmar su sentido y esencia. A este respecto, y desde un punto de vista sociológico, se considera que este tipo de educación tiene por objetivo central la formación del espíritu del hombre – formación, no mera información, mediante la adquisición de una cultura integral y de fundamentos. “Esta formación es el tronco de la cultura d la persona. La primera enseñanza es de rudimentos y elementos; la segunda enseñanza es de fundamentos”. En el ámbito educativo, el concepto adquiere su cabal dimensión: “las escuelas de educación secundaria son instituciones destinadas a continuar el desenvolvimiento armónico e integral del individuo, iniciando en la educación primaria, con fundamento en la comprensión de las diversas actitudes del hombre, compatibles con la dignidad humana y orientadas hacia la convivencia social dentro de la libertad, la democracia y la paz”. En los momentos actuales en que la calidad de la enseñanza se ha rezagado con respecto a la expansión del sistema, resulta útil y estimulante escudriñar en los antecedentes, en las aportaciones de los grandes maestros mexicanos, de manera que nos sirvan de guía en el propósito fundamental de mejorar la prestación de los servicios educativos. Si a ello contribuye esta modesta reseña de la educación secundaria, se habrá cumplido el objetivo propuesto.

2. LA DOCTRINA POSITIVISTA Y EL ESTABLECIMIENTO DE LA ESCUELA NACIONAL PREPARATORIA EN 1868. La creación de la Escuela Secundaria en 1925 a iniciativa del maestro Moisés Sáenz Garza y de otros ameritados profesores, fue producto de largos estudios y profundas investigaciones, no siempre comprendidos. Implicó necesariamente, el análisis de diversos factores, entre ellos los de carácter histórico, filosófico, político y social que le dieron fundamento y justificación a su visionaria propuesta pedagógica. Destaca en particular la revisión que se hizo de la doctrina filosófica del positivismo, dada la influencia que ejerció en la educación pública. Al triunfo de la República, en 1867, el presidente Juárez enfoca sus esfuerzos a la reconstrucción nacional. Advierte la necesidad de fortalecer la educación de acuerdo con los principios de liberalismo. El progreso del país requiere de nuevas estrategias, de una filosofía de la cual se desprendan acciones concretas que se traduzcan en bienestar material. Para tal efecto, integra una comisión encargada de redactar un plan de reorganización educativa, incorporando a ella al doctor Gabino Barreda, discípulo de Augusto Comte y figura de alto relieve en la política liberal en las ciencias y en la filosofía. Como resultado de sus trabajos, Juárez expide el 2 de diciembre de 1867 la Ley Orgánica de Instrucción Pública, que contiene las principales orientaciones de la educación: obligatoria, gratuita y laica. Por otra parte se encomienda al propio doctor Barreda la organización de la Escuela Nacional Preparatoria, misma que lleva a cabo el 1º de febrero de 1868m conforme a las doctrinas de la filosofía positivista. Los postulados del positivismo se enuncian con la característica comtina AMOR, ORDEN y PROGRESO, a la que Barreda le hizo un pequeño pero importante cambio, por la de LIBERTAD, ORDEN y PROGRESO que parece garantizar el ideal de libertad de los liberales mexicanos, así como su afán por el progreso material. La palabra orden va tiene un significado especial por que se esgrimirá en lo sucesivo, como una condición indispensable para alcanzar el progreso, entendido éste en un sentido material. Por lo que toca al concepto de laicismo, desde el punto de vista educativo se adopta un criterio neutral, en el sentido de no poner a discusión ningún principio ideológico, ya fuera éste religioso o político. La nueva educación se orientó a la formación de hombres prácticos, para lo cual se les dotaría del conocimiento de todas las ciencias positivas que permiten al hombre dominar a la naturaleza. Barreda expone sus ideas en los siguientes términos: “Para que la conducta práctica sea, en cuanto cabe, suficientemente armónica con las necesidades reales de la sociedad, es preciso que haya un fondo común de verdades que todos portamos, más o menos deliberadamente, pero de una manera constante. Este fondo de verdades que nos han de servir de punto de partida debe presentar un carácter general y enciclopédico, para que ni un solo hecho de importancia se haya inculcado en nuestro espíritu sin hacer sido antes sometido a una discusión, aunque somera, suficiente para darnos a conocer sus verdaderos fundamentos”. Los aspectos sobresalientes de la reforma, que introdujo el doctor Barreda al crear la Escuela Nacional Preparatoria, de orientación laica y positivista, fueron los siguientes: Eliminar todo tipo de ideas basadas en la fantasía o en el escepticismo, fundamentar la creencia en la demostración científica; suprimir los conocimientos teológicos y metafísicos, y rechazar con ello lo que no puede imponerse a todos y en consecuencia desune. No basar el conocimiento en la teoría pura ni en la práctica pura; quienes se colocan en el primer caso sostienen un orden caduco y quienes se sitúen en el segundo sustentan el desorden; los teóricos son el fruto de la educación viciosa del pasado, y los prácticos la excepción; los estudios equilibrados concilian la teoría y la práctica, lo abstracto y lo concreto. Las matemáticas serán la base de los conocimientos para formar en los estudiantes el hábito de aceptar sólo los hechos comprobados.

Combinar los métodos de inducción y deducción mediante el estudio de las ciencias experimentales, lo cual permitirá reducir el abuso de la generalización inductiva, a la vez que evitar el exagerado racionalismo deductivo. Se pretendió mediante estos criterios establecer la uniformidad mental para alcanzar el orden social. Barreda lo expresó en las siguientes palabras: “El orden intelectual que esta educación tiende a establecer es la llave del orden social que tanto hemos menester”. Esta doctrina, expuesta de manera muy general, fue la que dominó por largo tiempo en el campo de la educación, además, de que dio pauta para el surgimiento de otras ideas renovadoras que abrirán causes promisorios en etapas subsecuentes. 3. LAS CORRIENTES PEDAGÓGICAS QUE ANTECEDEN A LA CREACIÓN DE LA ESCUELA SECUNDARIA EN MÉXICO. En el último tercio del siglo XIX ocurre un movimiento pedagógico que más tarde habrá de influir en el surgimiento de nuevas instituciones educativas. A partir de entonces el pensamiento positivista es severamente cuestionado por considerar que constituye un retroceso respecto a las reformas liberales planteadas en 1833 y en 1857 por los exponentes destacados del liberalismo mexicano. De acuerdo con el positivismo, lo esencial viene a ser la implantación del orden como condición que permita consolidar la libertad. El orden por lo tanto, ocupa un lugar de preeminencia. Al amparo de estas ideas se entroniza una dictadura, la de Porfirio Díaz, que supedita la libertad al orden. En torno a él se erige un grupo que el pueblo certeramente califica de “científico” por su filiación positivista. Así, los derechos de políticos y sociales del pueblo quedan cancelados por un régimen despótico que se ostenta como abanderado del progreso. El supuesto bienestar material únicamente, beneficia a la minoría privilegiada, acentuándose las desigualdades entre las clases más desposeídas: los campesinos y los obreros. La agudeza y extraordinaria visión que caracterizó a Justo Sierra, lo lleva a decir: “La nación ha compuesto el poder de Porfirio Díaz, con ana serie de delegaciones, de abdicaciones, si se quiere extralegales, pues pertenecen al orden social, sin que él lo solicitase, pero sin que tampoco esquivase esta formidable responsabilidad ni un momento, y eso es terriblemente peligroso para el porvenir, porque imprime hábitos contrarios al gobierno de sí mismos, sin los cuales puede haber grandes hombres, pero no grandes pueblos”. Convenía, por otra parte, a la oligarquía, mantener la orientación positivista en la educación, pues constituía un eficaz instrumento para justificar los ataques y restricciones a las libertades individuales que en nombre del orden perpetraba. Ante tal panorama se comenzó a manifestar una corriente de pensamiento que abogaba por una verdadera transformación de la sociedad a partir de nuevas doctrinas y métodos pedagógicos, pero, sobre todo, con una ideología que, teniendo a la libertad por eje, pugna por u progreso real. Estas ideas preparan los cambios radicales que constituyen el fenómeno de una revolución. “Dentro de sus limitaciones, ministros de educación como Baranda y Sierra harán lo máximo por extender esta educación que al no lograrse plenamente mostraban la necesidad de hacerlo. Sierra Rébsamen, carrillo, Torres, Quintero y otros más, fueron formando a la generación que serviría de líder en las nuevas reformas, tanto políticas y económicas como educativas”.

A continuación se bosquejan las principales aportaciones de estos pensadores que abrieron camino y sentaron las bases de un nuevo sistema educativo. En la “Escuela Modelo” de Orizaba, Veracruz, fundada en 1883, se inicia una experiencia pedagógica, bajo la dirección de los pedagogos Enrique Lubscher y Enrique Rébsamen, que fue el punto de partida para la reforma de la enseñanza de la escuela primaria. La orientación pedagógica que sustenta Rébsamen la expone, en lo esencial, diciendo: “… Basta que cada educador trate de desarrollar armónicamente todas las facultades físicas, intelectuales, éticas y estéticas de sus educandos, procurando que este desarrollo llegue al mayor grado posible de perfección. Lo importante es una formación armónica, total, que estimule todas las posibles cualidades del educando”. Rébsamen -lejos de estar de acuerdo con la tesis pedagógica positivista que habla de una educación a bases de libertades y represiones de los instintos y facultades, para anquilosar las que pueden ser fuentes de lo malo y desarrollar las que pueden ser fuente de lo bueno-, dice: “Pero no hay más que un modo de desarrollar las facultades del niño: ajustándonos del todo a las leyes fisiológicas y psicológicas que presiden su desenvolvimiento”. Carlos A. Carrillo, pedagogo mexicano sigue las orientaciones de Rébsamen, pero desarrolla sus propias teorías basado en sus experiencias de maestro de primaria. Su pedagogía se apoyó también en la libertad, estimulando esta libertad, al propiciar la libre expresión de sus discípulos. Carrillo se opone a una instrucción ajena a la realidad del hombre de México, a una instrucción que no hace sino repetir determinados cartabones, sistemas o métodos, sin ver antes si son válidos para los hombres que se les quiere imponer. Es la apatía, la “pésima organización de las escuelas públicas” la que ahuyenta a los niños. La apatía, el abandono que también se traducen, dice Carrillo, “por pésimos métodos empleados en las escuelas públicas”. Contundentes resultan sus afirmaciones cuando señala que el educando “… va a entrar en la vida política, va a ser miembro de un pueblo libre en el que tiene que ejercer derechos y que cumplir obligaciones e ignora esas obligaciones y no tiene noción de esos derechos”. Nada se hace por educar al hombre de México en estos aspectos que tan de cerca le tocan. “No se le forma para ser un buen ciudadano ni un buen patriota”. Esta preocupación la comparte otro gran pedagogo de ésa época, Gregorio Torres Quintero, que junto con otros distinguidos educadores, pugnó por la formación de individuos responsables y amantes de la libertad. La enseñanza obligatoria y gratuita es para Torres Quintero algo más: “la fuente de la conciencia cívica y política del pueblo, el presupuesto imprescindible de un Estado Democrático”. Critica, por otra parte, el abandono en que se tiene a las escuelas rurales, con lo cual se anticipa a una preocupación que habrá de caracterizar a la revolución en el campo educativo. “En un pueblo republicano y democrático como el nuestro -dice- no debe haber escala diferencias de derechos y sin embargo ante la instrucción unos son privilegiados, parias los otros. Siquiera los habitantes de los campos fueran en menor número; pero entre nosotros, donde son pocas las poblaciones de importancia, el mal es profundo”. Como ministro de Justicia e Instrucción Pública, el licenciado Joaquín Baranda, trató de hacer realidad las tesis pedagógicas que se han apuntado anteriormente, revelando amplio criterio y habilidad política en circunstancias poco propicias. “La instrucción pública -dice Baranda- está llamada a asegurar las instituciones democráticas, a desarrollar los sentimientos patrióticos y a realizar el progreso moral y material de nuestra patria”. Es evidente, según lo asentado por Baranda, que las nuevas corrientes pedagógicas aglutinan un propósito bien definido que dista mucho de parecerse al sostenido por los positivistas: la educación tiene como uno de sus fines principales formar ciudadanos capaces de hacer valer sus derechos y sus libertades.

Durante la gestión del Ministro Baranda se funda la Escuela Normal para Profesores y se transforma la antigua Secundaria para Señoritas en Escuela Normal para Profesores que se inaugura como tal en 1890. Otro hecho importante lo constituye la expedición de la ley que establece la obligatoriedad de la educación elemental, el 23 de mayo de 1888. Se convoca, además, al Primer Congreso de Instrucción, que tenía como objetivo primordial, unificar la legislación y reglamento escolar, “base para el mejor éxito de la obligatoriedad de la enseñanza”. Su inauguración tuvo lugar el 1º de diciembre de 1889 y la mesa directiva quedó formada así: Joaquín Baranda, presidente honorario; Justo Sierra, presidente de trabajos; Enrique C. Rébsamen, vicepresidente; Luis E. Ruiz, secretario, y Manuel Cervantes Imaz, protosecretario. En el discurso pronunciado por Baranda en la inauguración del Congreso se expresan conceptos que son fiel trasunto de lo que había sostenido José María Luis Mora en la Reforma de 1833 y Ponciano Arriaga en la de 1857. Está presente, por lo tanto, el espíritu de la educación liberal. Reproducir sus palabras es reconocer su temple y gran valía: “La República para existir necesita ciudadanos que tengan la conciencia de sus derechos y de sus deberes, y esos ciudadanos han de salir de la escuela pública, de la escuela oficia, a abre sus puestas a todos para difundir la instrucción e inculcar, con el amor a la paz y al trabajo, sentimientos compatibles que hacen grandes y felices las naciones. Las importantes conclusiones a que llegó este Congreso se aprecian claramente en los dictámenes que formularon las diferentes comisiones. Así sea de manera general, únicamente nos referimos a las cuatro que guardan estrecha relación con este trabajo: La Comisión de Enseñanza Obligatoria dictaminó: La educación comprende la cultura de las facultades todas del individuo. Por ello el objeto d la educación primaria es desarrollar armoniosamente la naturaleza del niño, en su triple modo de ser: físico, moral e intelectual, único modo de formar de él un hombre perfecto. Es posible y conveniente establecer en todo el país un sistema nacional de educación popular, bajo los principios ya conquistados para la instrucción primaria, de laica, obligatoria y gratuita. La comisión sólo propone como obligatoria la enseñanza primaria elemental, que es indispensable para todos, y que a su juicio puede darse en cuatro años, así se demostrará al hacerse la distribución detallada de las materias que forman su programa. El programa general de enseñanza primaria elemental obligatoria, y que se dará en un periodo de cuatro años, es el siguiente: Moral Práctica, Instrucción Cívica, Lengua Nacional, incluyendo la enseñanza de escritura y lectura; Lecciones de cosas, Aritmética, incluyendo la enseñanza de los pesos y medidas antiguos y métricos; Geografía Empírica, Nociones de Historia Patria, Dibujo, Caligrafía, Canto, Gimnasia, Labores Manuales para Niñas. De las conclusiones a que llegó la Comisión encargada de analizar el problema de las escuelas rurales, se destacan las siguientes: Se recomendará la creación de una escuela mixta cunado menos en los pueblos pequeños, haciendas y rancherías que, teniendo una población menor de quinientos habitantes, disten dos o más kilómetros de algún pueblo o ciudad en donde existen planteles de educación primaria. El periodo escolar obligatorio en las escuelas rurales, será de seis años, consagrándose principalmente los dos primeros a ejercicios educativos preparatorios, y a la enseñanza del idioma español. La enseñanza de nociones científicas se encaminará de preferencia en el sentido de sus aplicaciones a la agricultura y a las industrias rurales; dar a conocer los instrumentos y las máquinas compuestas que se usan en las labores, y a demostrar la utilidad y conveniencia de adaptarlos como medios de simplificación y perfeccionamiento de trabajo. La comisión encargada de dictaminar sobre Escuelas de Adultos, después de una serie de consideraciones, propuso el establecimiento de las escuelas nocturnas y bibliotecas, porque, asienta la Comisión, “sería torpe e irracional pretender exigir la instrucción de las masas sin proporcionarles perennes elementos donde la adquieran, conserven y ensanchen”.

Particular importancia reviste para los fines de esta reseña conocer el dictamen emitido por la Comisión encargada de analizar las escuelas de Instrucción Primaria Superior, motivo por el cual se le otorga mayor extensión. Esta instrucción es considerada como un complemento necesario para llenar las deficiencias culturales que pudiera dejar la educación primaria Elemental. Esta ha sido la finalidad pedagógica; pero, agrega la Comisión, la Educación Primaria Superior lleva otra finalidad. Esta “tuvo también la misión de corresponder a una necesidad pública, al satisfacer debidamente las legítimas aspiraciones de diversas clases sociales”. Entre ellas las clases sociales más desamparadas. “Los hijos de los obreros, de los artesanos y en general, de los desheredados de la fortuna, oficialmente se encuentran en la posibilidad de ensanchar la órbita de sus conocimientos porque las escuelas preparatorias no están a su alcance por los muchos años que tendrán que invertir para segur sus cursos”. Esta es la finalidad social de la Escuela Primaria Superior, dice la Comisión, dar a estos grupos mayores medios en el campo cultural dentro de sus naturales dificultades. “La escuela de instrucción primaria superior, complemento de la elemental, viene a ser por tanto del “Súmmum” de los estudios para los niños que pertenecen a las clases pobres, como la enseñanza profesional es el “Súmmum” para los niños de las otras clases”. Es por eso que algunos pedagogos como Alcántara García, llaman a la escuela, preferentemente, escuela popular complementaria. Partiendo de este punto de vista la Comisión considera la necesidad de dar a esta etapa de la educación un carácter especial que no llena la llamada Educación primaria elemental obligatoria, puesto que ésta “no está formada sino por aquellas materias que nadie debe ignorar”. Esta educación además de sus fines de ensanchamiento de la instrucción popular, debe también ser un nexo, un puente, con la llamada educación secundaria o preparatoria. “La escuela superior considerada desde este nuevo aspecto, debe servir de intermediaria entre la elemental y la preparatoria” Este grado será así voluntario para las personas que deseen ampliar su instrucción elemental; pero obligatorio para los que deseen pasar a sus estudios de preparación y formación superior. La Comisión encargada de dictaminar sobre Medios de Sanción de la Enseñanza Primaria Laica arribó a las siguientes conclusiones: La mayoría de la Comisión sostuvo el criterio liberal clásico de hacer del Estado un simple guardián, vigilante de la sociedad. La definición de lo que debe entenderse por enseñanza laica; la mayoría de la Comisión lo expresó como sigue: “La enseñanza laica es aquella en que la instrucción es absolutamente independiente de las confesiones religiosas; es decir: aquella en que en la organización de la escuela, en el programa, en el maestro, en el ayudante, en el inspector, en el celador, no intervienen ni se mezclan para nada los miembros de cultos ni sus representantes, y que en las asignaturas que en la escuela se enseñen queda excluida toda idea de religión”. Se sostiene así la neutralidad en el campo religioso y por ende ideológico. Neutralidad que sólo viene a ser válida en las escuelas establecidas por el gobierno. A ello se opone uno de los integrantes de la Comisión, Adolfo Cisneros, quien defiende la tesis de que la educación debe ser laica, para todos; para las escuelas oficiales y particulares. En conjunto, las conclusiones obtenidas en el Primer Concurso de Instrucción, vendrán a representar el cuerpo de una doctrina pedagógica que influirá decisivamente en los debates del Constituyente de 1917, al formularse el Artículo Tercero. La trascendental obra emprendida por el Ministro Baranda es continuada brillantemente por su digno sucesor, el maestro Justo Sierra, quien con ejemplar visión advierte la urgencia de dar a la educación un sentido nacionalista. Con espíritu acucioso analiza la realidad del país y con el conocimiento de ella expone ideas de avance que, con el tiempo, habrán de confirmarse. El gran problema que yace en el fondo de nuestra sociedad –afirma- es el “de la transformación de la clase indígena en una clase progresiva”. “Para mí –agrega- esta es una condición “sin

equa non” de la conservación de nuestra personalidad social en América; si ella no se realiza, los rasgos de nuestra fisonomía nacional, vagos aún e indecisos, se refundirán en los de otras razas más fuertes, y desaparecerán en el periodo de la lucha económica que de par en par se ha abierto para nosotros desde el momento que una locomotora americana pasó el Bravo”. Para entonces, Justo Sierra ya no duda del carácter obligatorio de debe tener la educación. Sin esta obligatoriedad, reconoce, sería utópico formar una nación libre y democrática “El fin de la educación deberá ser la aglutinación de la Patria, la formación de los lazos que hagan posible a la nación”. La nación como fin educativo, viene a ser una de sus tesis. Su vocación de maestro de maestro lo lleva a reiterar esta postura con la claridad y elocuencia que le fueron características: “En el orden de los deberes del hombre para con sus semejantes existen los deberes del hombre para con la patria, y este es el capítulo principal de la instrucción cívica. Los maestros deben tener particular cuidado en aprovechar toda oportunidad en la escuela y en la enseñanza de las materias que proporcionan a los niños todos una serie de nociones claras acerca de los vínculos sagrados que nos unen con la patria, acerca de nuestra constitución republicana y de nuestra organización social”. Quien duda de que el maestro Justo Sierra estaba orientando desde entonces el contenido del actual Artículo Tercero: En el Congreso Constituyente convocado por el Primer Jefe Venustiano Carranza, en 1916, resurge la discusión en torno a la obligatoriedad de la enseñanza y al sentido que debe tener el laicismo. Dos tendencias se manifiestan, la liberal, o de liberales moderados, y la neoliberal o revolucionaria representada por Francisco J. Múgica, Heriberto Jara, Juan de Dios Bojórquez, Esteban N. Calderón, Enrique Colunga, Jesús Romero Flores, Luis G. Monzón, Enrique Recio, Jesús López Lira y otros. El proyecto de Artículo Tercero presentado por Carranza, decía así: “Habrá plena libertad de enseñanza; pero será laica la que se dé en los establecimientos oficiales de educación y gratuita la enseñanza primaria, superior y elemental que se imparta en los mismos establecimientos”. La Comisión encargada de dictaminar sobre el proyecto lo rechaza. Se opone abiertamente a la significación que se pretende dar a la educación laica, por seguirse considerando como educación neutral. En uno de los puntos del dictamen precisa: “Dando a este vocablo la significación de neutral, se ha entendido que el laicismo cierra los labios del maestro ante todo error revestido de alguna apariencia religiosa”. Por ello, “la Comisión entiende por enseñanza laica, la enseñanza ajena a toda creencia religiosa, la enseñanza que trasmite la verdad y desengaña del error inspirándose en un criterio rigurosamente científico”. De acuerdo con estas ideas, la Comisión presenta la siguiente propuesta de Artículo Tercero: “Habrá libertad de enseñanza, pero será laica la que se dé en los establecimientos oficiales de educación, lo mismo que la enseñanza primaria elemental y superior que se imparten en los establecimientos particulares. Ninguna corporación religiosa, ministro de culto o persona perteneciente a alguna asociación semejante podría establecer o dirigir escuelas de instrucción primaria ni impartir enseñanza personal en ningún colegio. Las escuelas primarias particulares, sólo podrán establecerse sujetándose a la vigilancia del Gobierno. La enseñanza primaria será obligatoria para todos los mexicanos, y en los establecimientos oficiales será impartida gratuitamente”. El nuevo proyecto, tildado de jacobino, es defendido y cuestionado por las tendencias opuestas que trata de imponer sus respectivos puntos de vista. Prevalece, sin embargo, la fuerza de los argumentos del grupo neoliberal que únicamente cede en cuestiones de redacción que encierra el precepto. José Natividad Macías se escandaliza ante el proyecto jacobino y pregunta: “¿Qué va a decir el Gobierno de los Estados Unidos?” Carranza ha prometido respetar todas las libertades,

prometió que se respetaría la Constitución de 57, todas estas promesas las ha hecho a través de manifiestos y reformas, y en una enérgica comunicación enviada a la Cancillería de Estados Unidos, que creía lo contrario. Pero “ahora resulta que Carranza no puede cumplir, porque el Congreso se le ha insubordinado”. El nuevo proyecto que presentó la Comisión estaba formulado así: “Artículo 3° La enseñanza es libre, pero será laica la que se dé en los establecimientos oficiales, de educación, lo mismo que la enseñanza primaria, elemental y superior que se imparte en los establecimientos particulares. Ninguna corporación religiosa ni ministro de ningún culto podrán establecer o dirigir escuelas de instrucción primaria. Las escuelas primarias particulares sólo podrán establecerse sujetándose a la vigencia oficial. En los establecimientos oficiales se impartirá gratuitamente la enseñanza primaria”. Terminada la discusión, el proyecto de la Comisión fue puesto a votación, alcanzando una mayoría de 99 votos en contra de 58. 4. EL ESTABLECIMIENTO DE LA EDUCACIÓN SECUNDARIA Al crearse la Secretaría de Educación Pública en 1921, el presidente Álvaro Obregón designó como su titular al licenciado José Vasconcelos, quien venía desempeñando el cargo de Rector de la Universidad Nacional. Poseedor de una vasta cultura, gran talento y extraordinaria sensibilidad, Vasconcelos era el hombre ideal para impulsar a la educación en los momentos cruciales que vivía el país. Con espíritu democrático emprendió acciones prioritarias, tales como una vigorosa campaña de alfabetización, la edición de la colección de clásicos para su distribuci´pn a bajo precio, la creación de bibliotecas, el fomento de las bellas artes, con sentido popular, y un amplio respaldo de sus más destacados exponentes. Su obra, de gran proyección, representó un avance indiscutible que todavía perdura. Desde tiempo atrás, el maestro Moisés Sáenz con la participación de otros distinguidos profesores, venía realizando estudios a fondo con el fin de impulsar otras transformaciones en la educación. Concretamente se trataba de modificar el esquema rígido heredado desde 1868 en que la preparatoria, con las características que se le han señalado, impedía que los alumnos que terminaban la primaria tuvieran la oportunidad de completar su ciclo formativo y desarrollar integralmente su personalidad, conforme la había propuesto Rébsamen. El sistema de la escuela Nacional Preparatoria, por su contenido y métodos tenía como propósito esencial servir de antecedente para cursar las llamadas carreras universales liberales y se componía de un ciclo de cinco años. Reducía, por lo mismo, las oportunidades educativas y propiciaba tendencias elitistas que contradecían la orientación democrática y nacionalista que el Constituyente le había asignado a la educación. En los años de 1909, 1911 y 1913 –decía Moisés Sáenz- sólo 26, 16 y 36 alumnos, respectivamente, terminaron su bachillerato en la Escuela Preparatoria; esto es, el 14.5, 5.7 y 8.8 por ciento de los que se inscribieron en el primer año. Se ha señalado que en “cincuenta y cinco años” contados a partir de 1868 fecha de fundación de la Escuela Nacional Preparatoria, apenas si ésta logró elevar un 40.8% su inscripción inicial de 568 alumnos. En 1923 atiende a 800 que significan el 27% de los egresados de sexto año de primaria en el Distrito Federal”. La corriente encabezada por el maestro Moisés Sáenz se apoya en nuestra realidad social, en las aspiraciones populares, pero, principalmente, contaba con una sólida base pedagógica, producto de sus investigaciones y conocimientos sobre las necesidades educativas de los

adolescentes, Había fungido, además, como director de la Escuela Preparatoria, lo cual le permitió conocer sus desviaciones y deficiencias, mismas que trató de corregir. Justo es resaltar la amplia preparación académica que poseía, la cual revela su calidad profesional: “era un maestro, graduado en la Escuela Normal de Jalapa, había alcanzado ya la especialización de Ciencias Químicas y Naturales en las Universidades de Jefferson y de Washington; el grado de doctor de ciencias en la Universidad de Columbia; había tomado el curso de posgraduados en la Sorbona de París y obtenido el doctorado de Filosofía en Norteamérica con una brillante tesis acerca de la Educación Secundaria Comparada (Estados Unidos y Europa), la cual incluía un proyecto de adaptación para las escuela de Enseñanza en México”. Con esta brillante trayectoria y amplia existencia docente, en 1924 el profesor Sáenz fue designado oficial mayor de la Secretaría de Educación Pública y, en 1925, subsecretario del mismo ramo. Desde estos puestos siguió adelante con su propósito pedagógico y de reivindicación social: crear el ciclo de educación secundaria, con independencia de los estudios preparatorios. El objetivo se alcanza en 1925 con la expedición de dos decretos por el presidente Plutarco Elías Calles, que propician el movimiento de la escuelas secundaria mexicana; el del 29 de agosto y el del 22 de diciembre de dicho año. El primero de ellos autoriza a la Secretaría de Educación Pública para crear escuelas secundarias y el segundo para no admitir alumnos de primer curso en la Escuela Nacional Preparatoria durante el año de 1926 y segregar del Plan de Estudios de dicha Preparatoria los cursos secundarios, poniendo dichos cursos secundarios bajo la jurisdicción técnica y administrativa de la Dirección de Educación Secundaria, que se crea en la Secretaría de Educación Pública, a partir del 1° de enero de 1926. En los considerandos que incluyen ambos decretos estaba presente la doctrina del maestro Moisés Sáenz y de quienes lo respaldaron en el movimiento renovador que marco nuevos derroteros a la educación. Algunas de las consideraciones que se hicieron para crear la Dirección General de Educación Secundaria, fueron las siguientes: “Que las escuelas secundarias deberían construir un puente entre las escuelas primarias y las propiamente universitarias, incluyendo en esta última categoría las preparatorias especiales para las carreras universitarias; Que una escuela secundaria implicaba para todos una escuela diferenciada, es decir, variada en sus posibilidades educativas, flexible en sus sistemas y con diversas salidas hacia diferentes campos de actividad futura…” Estas consideraciones fortalecían el perfil de las escuelas secundarias. Además, los objetivos y finalidades se fijaron a través de juntas y asambleas de profesores de enseñanza media, tanto a nivel regional como nacional. De los más relevantes consignamos los siguientes: OBJETIVOS “Difundir la cultura y elevar el nivel medio de todas las clases sociales, para hacer posible un régimen constitucional positivamente democrático. Integrar y desarrollar nuestra nacionalidad. Atender los principios de la psicología y de la ciencia de la educación universalmente aceptados, sin perder de vista ni la idiosincrasia ni las peculiaridades del pueblo mexicano. Organizar la escuela como una institución educativa especial en organización y métodos, en virtud de referirse normalmente a jóvenes de 13 a 16 años. Establecer escuelas diferenciadas, variadas en posibilidades educativas, flexibles en sus sistemas y con diversas salidas hacia diferentes campos de actividades futuras”.

FINALIDADES 1ª. “Facilitar el desarrollo y crecimiento del individuo (crecimiento y desarrollo físico, y la salud y el desarrollo de la personalidad). 2ª. La exploración de capacidades y de inclinaciones: el ejercicio de las mismas, el uso sano del tiempo libre. 3ª. La formación del ciudadano (conocimientos, habituaciones e idealizaciones relativas a la vida cívica; el fortalecimiento del sentido de la nacionalidad y del nacionalismo; la democratización de la escuela y la organización democrática de la misma). 4ª. La capacitación para la vida doméstica y familiar como finalidad social de primer rango que apenas ha sido vislumbrada por los educadores en este nivel escolar. 5ª. La preparación vocacional”. A partir de 1926 con la puesta en marcha de cuatro escuelas secundarias y un total de 3860 alumnos, se inicia la etapa fecunda de la educación secundaria que junto con la Escuela Rural y las Misiones culturales son timbre4 de orgullo para la educación mexicana. 5. DESARROLLO DE LA EDUCACIÓN SECUNDARIA PRINCIPALES ACCIONES Y REFORMAS La educación secundaria desde su creación ha tenido un desarrollo constante en cuanto a número de escuelas que la imparten, matrícula de alumnos, establecimiento de otras opciones y una búsqueda permanente para adaptarse a los cambios que genera la sociedad. De ahí que el conocimiento de las circunstancias por las que ha atravesado, así como las acciones emprendidas para revitalizarla, resulta indispensable para precisar en qué medida se han cumplido los objetivos que le son inherentes. No obstante, sólo se desatracan aquellos ellos que han tenido mayor significación en este nivel educativo. Conviene apuntar desde ahora que los planes y programas de las escuelas se han reformado en 1932, 1936, 1941, 1945, 1947, 1953, 1956, 1960 y1975 con el objeto de apoyar su eficacia pedagógica y adecuarnos a nuestra heterogénea y cambiante realidad. Asimismo, cabe señalar que el primer Reglamento para las escuelas secundarias se expidió el 1º de enero de 1933, mismo que fue derogado por el que entró en vigor el 14 de septiembre de 1946. Este último Reglamento tuvo una aplicación limitada, debido a las disposiciones y acuerdos dictados con posteridad, que lo modificaron sustancialmente. Particular interés reviste el estudio que realizó en 1942 la Comisión Rivisora de Planes y Programas de Segunda Enseñanza, con el fin de dar unidad y coherencia al sistema, ya que para ese entonces existían las siguientes escuelas que impartían el servicio: Las secundarias, las prevocacionales, las prácticas de agricultura, las de enseñanzas especiales y las secundarias para trabajadores. Al reconocer que en las escuelas aún se mantenía la tradición verbalista, pugnaba porque en lo sucesivo se proporcionaran a los alumnos habilidades prácticas de carácter técnico y moderno; esto es, era urgente prepararlos para la vida “… Que ponga al joven en condiciones de que descubra sus propias aptitudes especiales… y conectado con las demandas económicas del sistema económico de su medio, de modo que el evento infortunado que lo haga suspender sus estudios, no lo relegue a la categoría de los incapaces para nada concreto”. Se pronunciaba a demás “por establecer conexiones entre los diferentes grados de la segunda enseñanza y las diversas escuelas: profesionales, comerciales, industriales, artísticas, etc., dando con ello margen suficiente a las capacidades, aficiones, intereses, posibilidades económicas, etc., de los alumnos para que puedan encauzarse libremente en el sendero que más se ajuste a su personalidad. En lo referente a las bases de organización, el proyecto de la comisión establecía: “Todas las escuelas de segunda enseñanza tendrán un conjunto de materias obligatorias comunes…

habrá un contenido diferencial de materias optativas y electivas…” “En todos los grados de la segunda enseñanza se establecerán la mayor variedad posible de actividades de carácter optativo, de tipo artístico, industrial, comercial que permitan al alumno descubrir sus aficiones o aptitudes…” Culminaba su trabajo la Comisión con un proyecto de plan de estudios, estructurado de acuerdo con las orientaciones señaladas. Otro acontecimiento relevante lo fue la Comisión Nacional de Segunda Enseñanza, que inicio sus trabajos en mayo de 1950, dividida en tres procesos: Trabajos de investigación, planeamiento y experimentación. Con la participación de maestros, y de acuerdo con lo previsto, se realizaron seminarios, mesas redondas y como culminación una asamblea nacional en octubre de 1951. De las conclusiones y recomendaciones que se formularon, con base en las ponencias presentadas, se resaltan las siguientes: “Los programas de segunda enseñanza deben articularse con los de primaria y los de las escuelas superiores. Que se formule la técnica general de la segunda enseñanza en México y la referida a cada una de las asignaturas. Las tareas extra-clase deben reducirse al mínimo. Que se redacten los libros de técnica general y de las distintas materias de la segunda enseñanza. Formúlense test y elabórense escalas sobre cada una de las asignaturas y actividades, previa experimentación, con el fin de orientar a las autoridades acerca de la bondad o deficiencia de los planes y programas de estudio, de la eficacia de los métodos de enseñanza y de los libros de texto. Se recomienda para calificar a los alumnos el rendimiento medio del grupo. Otras recomendaciones fueron: “Que cada escuela cuente con un maestro orientador. Refórmense los artículos 30 y 31 constitucionales instituyendo obligatoria la educación secundaria. Tiéndase a formar grupos con menos de 50 alumnos. Inclúyase como personal técnico de cada escuela un orientador vocacional, un médico escolar, un psicómetra y una trabajadora social”. El reglamento de la Conferencia Nacional de Segunda Enseñanza había establecido: “La aplicación de las resoluciones con propósitos de observación controlada, por la conformación, en la práctica, de los planes proyectados, constituirá el trabajo experimental”. La reforma del sistema educativo referente a la educación secundaria en 1960, fue resultado de apremiantes requerimientos nacionales. La Conferencia Nacional de Segunda Enseñanza celebrada en 1951 constituyó el antecedente de mayor relevancia para la reforma efectuada en ese nivel educativo, cuyo propósito fundamental consistió en elevar las condiciones de la educación y actualizarlas en concordancia con el momento histórico de México. Es preciso subrayar que las reformas y orientaciones que se han dado desde la creación de la educación secundaria, tienen en común que no han perdido de vista los fines y objetivos de ésta; que han reconocido como válidos los principios en que se funda la doctrina que le dio origen, pues lejos de volverse caducos encuentran cada vez mayor justificación. El nuevo plan de estudios se elaboró de acuerdo con los siguientes puntos de vista: La unificación de la segunda enseñanza; el principio de la adaptación; la tendencia unidireccional en las actividades tecnológicas; el principio de coordinación; la base orientadora; el fundamento económico y el principio de la formación cívico democrática, Estos principios constituyen la fundamentación doctrinal de la reforma efectuada. Por ahora se harán mención de algunos de ellos: “El principio unidireccional de las actividades tecnológicas se explica así: una vez orientado el alumno sobre las diversas enseñanzas tecnológicas que imparte el plantel, se decide por una de ellas y permanece el educando todo el tiempo de su vida escolar secundaria en esa misma actividad tecnológica con el fin de que logre un aprendizaje o una capacitación realmente productiva en el mercado ocupacional”.

El principio que norma la planeación en lo tocante a la formación cívica y democrática mira a la formación ciudadana de los escolares, como una tarea que deben realizar todos los maestros en un plantel secundario. En el libro “Historia de la Educación Pública en México”, en la parte relativa a “El segundo periodo de Torres Bidet: 1950 - 1964”, se hace referencia a esta reforma del plan de estudios, en los siguientes términos: “Se redujo la carga académica al disminuir el número de materias de carácter netamente intelectual que se calificaban según el procedimiento tradicional, y se limita el tiempo que se les asignaba a no más de 22 horas por semana. Las actividades, que ocuparían el 36 por ciento del tiempo total, serían obligatorias, pero no serían evaluadas de acuerdo con la escala numérica y por medio de exámenes. En total, asignaturas y actividades sumaban 33 horas por semana. Se daba suficiente flexibilidad a las actividades de educación artística, de educación física, de educación tecnológica y de educación cívica, para que pudieran adaptarse a las necesidades y recursos de cada región… “En cuanto a las materias académicas, se incluyó en el tercer grado un seminario de historia contemporánea, en el que se estudiarían en México y el mundo en el siglo XX, pues usualmente, en la práctica, los cursos de historia sólo llegaban al siglo XIX. La educación cívica perdía su carácter de asignatura en los dos primeros grados, considerando que es más importante que el adolescente muestre en la practica una conducta de servicio social, a que domine los conocimientos teóricos y jamás los aplique”. Respecto al vigente plan de estudios para la educación secundaria, es necesario referirse a la Resolución de Chetumal, publicada por al Secretaría de Educación Pública en agosto de 1974. Dicho documento concentra el sentido con que se pretende orientar la reforma de la educación media básica, y contiene los objetivos que deberán cumplirse en este nivel educativo. Entre sus señalamientos, figuran: “La educación es uno de los mecanismos de movilidad y transformación hacia modos de convivencia más dignos y justos entre personas y naciones. No sólo debe actualizarse para ir al parejo de los avances científicos, sino que debe modificar su organización para ofrecer una justa distribución de oportunidades educativas”. Lo anterior manifiesta, además, la necesidad de modificar los antiguos planes y programas de estudio, adecuándolos al nuevo momento histórico y a las nuevas condiciones sociales y económicas del país, precisamente con el fin de lograr una sociedad más justa. Asimismo, se ve la necesidad de actualizar los conocimientos y habilidades que se enseñan, a fin de adecuarlos a los descubrimientos y avances de la ciencia y la tecnología. Los objetivos de la educación media básica se insertan en esa perspectiva, y en su formulación, se incluyen elementos tales como la formación integral del educando, el conocimiento y valoración de su realidad para transformarla y su sensibilización respecto a los problemas demográficos, entre otros. La educación tecnológica del educando se incluye como un objetivo, tanto en términos de pre-ingreso al trabajo, como para el acceso a los niveles educativos inmediatos superiores. La reforma de educación secundaria, por tanto responde a una necesidad social e histórica de adecuar los planes y programas de estudio, así como los métodos y contenidos de este nivel a las necesidades actuales del país. En este contexto, se señala también la necesidad de evaluar sistemáticamente los resultados progresivos de la secundaria, a fin de que pueda ser formulada y ajustada con apego a nuevas necesidades. Se plantea un modelo flexible, acorde al mosaico de las diferentes realidades regionales, así como las cambiantes necesidades nacionales.

Es así como los programas reestudio para los tres grados de secundaria, estructurados por la Secretaría de Educación Pública, se encuentran formulados con apego a los linimientos inscritos en las propias Resoluciones de Chetumal. Conviene mencionar, que la reforma planteada en dichas resoluciones vislumbra ya la necesidad de secuenciar lógica y armónicamente la educación primaria con la secundaria, elevar el nivel educativo del mexicano con el incremento de su escolaridad mínima obligatoria, para lo cual se apoya también en un proceso permanente de revisión de todo aquello que influya directa o indirectamente en el proceso educativo d la educación media básica. Acorde con las características de esta reforma, surge como definición el siguiente enunciado: “La educación media básica es parte del sistema educativo que, conjuntamente con la primaria, proporciona una educación general y común dirigida a formar integralmente al educando y a prepararlo para que participe positivamente en la transformación de la sociedad”. En esta reseña no ha sido posible abarcar todos los hechos. Ello obedece a la propia naturaleza de este trabajo. Baste señalar que se hicieron contribuciones muy valiosas en la Asamblea Nacional de Maestros de Secundaria y Preparatoria que se celebró del 12 al 19 de noviembre de 1928. De igual manera en la Conferencia Nacional de Educación organizada por la Central Magisterial de 1939, en la que se hizo labor de autocrítica del sistema se segunda enseñanza. Así, pues, existen aportaciones de las cuales, dada la importancia, podemos todavía extraer orientaciones y experiencias dignas de tomarse en cuenta. 6. LAS ESCUELAS SECUNDARIAS DIURNAS, TÉCNICAS, TELESECUNDARIAS Y PARA TRABAJADORES. ESCUELAS SECUNDARIAS DIURNAS Las transformaciones de las escuelas secundarias diurnas, desde 1925, han seguido la evolución a que nos hemos referido anteriormente. Por lo tanto, han respondido a los fines y objetivos que les fueron señalados desde su creación, independientemente de su consolidación a través de las diferentes etapas y reformas ya descritas. La expansión de este servicio ha sido constante, desde que en 1926 iniciaron las primeras 4 escuelas con una población de 3,860 alumnos. Para el ciclo escolar 1985-1986, la Dirección General de Educación Secundaria proporciona los siguientes datos: Existen en el país 2,799 escuelas secundarias diurnas con una población escolar en los tres grados de 1’740,843 alumnos. Además las escuelas secundarias particulares diurnas constituyen un total de 2240 planteles en donde asistieron 334,904 alumnos. ESCUELAS SECUNDARIAS TÉCNICAS. Las escuelas secundarias técnicas son instituciones educativas de carácter eminentemente formativo que tienen el objetivo de fortalecer en los educandos el desarrollo armónico integral de su personalidad, tanto en lo individual como en lo social, de brindar con forme al plan y programas de estudio aprobados, una formación tecnológica que facilite su incorporación al trabajo productivo y proporcionar las bases para la continuación de estudios superiores. Al crearse en 1959 la Subsecretaría de Enseñanza Técnica y Superior, se dictan medidas para impulsar la educación tecnológica. Asimismo, lo que era la Dirección General de Enseñanzas Especiales se transforma en la Dirección General de Enseñanzas Tecnológicas, Industriales y Comerciales, para promover y encauzar la enseñanza técnica en el país.

De esta forma se introdujo hace 27 años el concepto de educación secundaria técnica, para diferenciarla de la secundaria tradicional, teniendo como características en aquél tiempo; la formación de educación en las áreas científicas y humanísticas, además de proporcionar la educación tecnológica, se crea la Dirección General de Educación Secundaria Técnica, quedando a su cargo las escuelas secundarias técnicas con actividades Tecnológicas Industriales, Comerciales, de Servicios, Agropecuarias y Pesqueras, dependientes anteriormente de las Direcciones Generales de Educación Tecnológica Industrial, de Educación Tecnológica Agropecuaria y de Ciencia y Tecnología del Mar, respectivamente. Además, debido a la demanda de la población, en 1982 se crean las escuelas secundarias técnicas con actividades tecnológicas forestales, siendo así 4 áreas las que se imparten actualmente con 49 actividades tecnológicas, en 1741 planteles, ubicados en las 32 entidades federativas, distribuidas de la siguiente forma:

ÁREA

NÚMERO DE ACTIVIDADES

TECNOLÓGICAS CON QUE CUENTA

NÚMERO DE

ESCUELAS QUE LA IMPARTE

NÚMERO DE ENTIDADES

FEDERATIVAS EN QUE SE ENCUENTRAN

INDUSTRIAL, COMERCIAL Y DE SERVICIOS.

33

669

32

AGROPECUARIA. 6 1023 32 PESQUERA. 5 37 17 FORESTAL. 5 12 5

Cabe mencionar que con fecha 7 de octubre del presente año (1986) se publicó en el Diario Oficial de la Federación, el Acuerdo Número 124, expedido por el C. Secretario de Educación Pública, por el que se dispone la operación, con carácter experimental, de escuelas secundarias técnicas bilingües biculturales en zonas indígenas. Se transfiere así, por medio de este Acuerdo, el servicio de educación secundaria que venían prestando los Centros de Integración Social dependientes de la Dirección General de Educación Indígena. En el mismo Acuerdo se menciona que “a través del desarrollo experimental de la educación secundaria técnica bilingüe bicultural en las comunidades indígenas, se pretende atender la creciente demanda de educación en las áreas rurales e indígenas marginadas, dándose además cumplimiento a uno de los propósitos fundamentales del Plan Nacional de Desarrollo 1983-1988, consistente en ampliar el acceso a todos los mexicanos a las oportunidades educativas, culturales, deportivas y recreativas”. TELESECUNDARIAS Con la finalidad de brindar el servicio de educación secundaria a los egresados de escuelas primarias ubicadas en comunidades rurales, surge el 2 de enero de 1968 el servicio nacional de enseñanza por televisión, mejor conocido como telesecundaria. La Dirección General de Educación Audiovisual y Divulgación, dependiente de la Secretaría de Educación Pública, inició esta opción de educación media básica en forma experimental, el 5 de septiembre de 1966, mediante un sistema de circuito cerrado, impartiéndose las lecciones para tal efecto preparadas a 83 alumnos distribuidos en 4 grupos, tres de ellos atendidos con profesores coordinadores y el cuarto grupo, guiado únicamente por indicaciones a través del televisor.

Al contar este proyecto con la respectiva evaluación y aprobación, se instrumentó el curso en circuito abierto el 31 de enero de 1968, llegando a una población escolar de 6569 alumnos, con la participación de 301 profesores. En el esquema didáctico inicial, la lección se recibía, a través del televisor, generalmente vivo, mientras que el maestro coordinador dirigía y supervisaba las actividades de aprendizaje sugeridas en la lección. Posteriormente, siendo Secretario de educación el Ing. Víctor Bravo Ahúja, se establece que la Telesecundaria “Deberá sujetarse a las normas académicas que previamente autorice el Consejo Nacional Técnico de la Educación y, por otra parte, coordinarse con la Dirección General de Planeación Educativa, por cuanto a que dentro de sus funciones está la de realizar estudios permanentes para lograr que se establezcan criterios objetivos de evaluación educativa. Los estudios de educación secundaria por televisión, tendrán plena validez en toda la república y los certificados que acrediten dichos estudios serán expedidos por la Dirección General de Educación Audiovisual”. En el Reglamento Interior de la secretaría de Educación Pública que se publico en el Diario Oficial del 11 de Septiembre de 1978, la Subdirección de Telesecundaria pasó a depender de la Dirección General de Educación para adultos y, el 20 de enero de 1981, en las modificaciones realizadas al citado Reglamento, si instituye la Unidad de Telesecundaria con dependencia directa de la Subsecretaria de Educación Media. A partir del 9 de agosto de 1985, el servicio de Telesecundaria es impartido por la Dirección General de Telesecundaria, dependiente de la Subsecretaría de Educación Media, con las siguientes características: formativa, de pre ingreso al trabajo y propedéutica, opera a través de tres elementos básicos de apoyo a los educandos: el maestro, la lección impresa y la lección televisada. El número de escuelas registradas para el periodo lectivo 1985-1986, a nivel nacional, fue de 6,189 con un total de 369,001 alumnos. ESCUELAS SECUNDARIAS PARA TRABAJADORES. El propósito de impartir la educación con sentido democrático, popular y nacionalista, de acuerdo con las orientaciones del movimiento reivindicador de 1910, propicia el surgimiento de las Escuelas Secundarias Nocturnas destinadas a los adultos y a los trabajadores. Tales escuelas tienen como antecedente el ciclo nocturno de la Escuela Nacional Preparatoria que se organizó en marzo de 1923 por un grupo de jóvenes y profesores de dicha escuela. La primera Escuela Nocturna para Trabajadores nace a principios de 1926 con 100 alumnos, sin reconocimiento oficial, pero con un espíritu altruista de un grupo de maestros normalistas. En junio del mismo año se le reconoció oficialmente como Escuela Secundaria Nocturna No 5. Durante el gobierno del General Lázaro Cárdenas, recibió notable impulso este servicio educativo y se creó el 1º. de enero de 1937 el Departamento de Educación Obrera, dependiente de la Secretaría de Educación Pública, el cual se vio fortalecido con 53 escuelas primarias nocturnas, tres escuelas nocturnas de arte y dos secundarias nocturnas, todas para trabajadores. El Departamento de Educación Obrera se reestructuró el 1º. de diciembre de 1940, quedando como Departamento de Secundarias para Adultos y Trabajadores, impartiendo exclusivamente el servicio de educación secundaria. En marzo de 1943 se suprimieron las escuelas secundarias para adultos y trabajadores, transformándose en turnos nocturnos de las secundarias diurnas. Posteriormente, en abril de 1944, se determinó la creación de las escuelas secundarias nocturnas para trabajadores y se reinició el funcionamiento de 12 planteles de este tipo.

Para el período escolar 1985-1986 el número de escuelas secundarias para trabajadores fue de 409, con una población escolar de 148,936 alumnos. En lo que respecta a escuelas secundarias particulares para trabajadores el número fue de 145 y de 10,306 alumnos. Actualmente (1986), estas escuelas dependen del Departamento de Escuelas Secundarias para Trabajadores de la Dirección General de Educación Secundaria. A los 61 años de haberse creado el sistema de educación secundaria, es manifiesto el arraigo que han tenido las escuelas que conforman este nivel educativo. Su expansión revela el sentido popular y democrático que le dio origen. La educación secundaria lleva en sí el germen de su renovación, porque los valores y principios en que se fundamenta son consustanciales al hombre. En este día, en que se cumple el LXXVI aniversario de la revolución mexicana, se reafirma el compromiso de conducir a la educación secundaria técnica hacia metas superiores. 7. DOCUMENTOS a) DECRETOS CRAECIÓN DE LAS ESCUELA SECUNDARIAS DECRETO PRESIDENCIAL. Por el cual se autorizó la Secretaría de Educación Pública, para crear escuelas secundarias y darle la organización que juzgue conveniente. Al margen un sello que dice: Estados Unidos Mexicanos. Presidencia de la República.- Número 1848. Al centro: PLUTARCO ELIAS CALLES, Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, a sus habitantes, sabed: Que en uso de las facultades de que goza el Ejecutivo de la Unión, conforme a la fracción I del artículo 89 de la Constitución General de la República, y CONSIDERANDO: que la doctrina democrática implica la mayor amplitud de oportunidad educativa para los niños y los jóvenes del país, para lo cual debe extender el sistema escolar tan pronto como las necesidades sociales lo requieran y las condiciones pecuniarias lo permitan, a fin de llegar no solamente a los niveles mínimos de educación, representados por la Escuela Primaria, sino a aquellos que se alcanzan mediante escuelas secundarias: CONSIDERANDO: además, que la tendencia actual es ofrecer una escuela secundaria para todos los jóvenes, e instituir un sistema que haga posible y deseable que la mayor parte, sino todos los niños que terminan el sexto año de la escuela primaria, puedan y quieran concurrir con provecho a una escuela secundaria; CONSIDERANDO: que en el Distrito Federal se justifica ya la organización de un amplio sistema de escuelas secundarias; CONSIDERANDO: por otra parte, que el Gobierno no ha establecido hasta la fecha más de dos escuelas secundarias que forman parte, respectivamente, de la Escuela Nacional Preparatoria y de la Escuela Nacional de Maestros, y

CONSIDERANDO: por último, que los actuales edificios de la Escuela Nacional Preparatoria son insuficientes para contener el creciente número de alumnos que desean inscribirse año tras año a los cursos secundarios. Por todas estas consideraciones y en uso de las facultades extraordinarias de que estoy investido en el Ramo de Hacienda, he tenido a bien expedir el siguiente:

DECRETO:

ARTÍCULO UNO: Se autoriza a la Secretaría de Educación Pública para crear escuelas secundarias, dándoles la organización que, dentro de las leyes establecidas y los postulados democráticos educativos, estime conveniente. Las escuelas secundarias cuya creación se autoriza, serán equivalentes en programa y sanciones al llamado “ciclo secundario”, de la Escuela Nacional Preparatoria. Por tanto, mando se imprima, publique, circule y se le dé el debido cumplimiento. Dado en el Palacio del Poder Ejecutivo Federal, en México, a los veintinueve días del mes de agosto de mil novecientos veinticinco. El Presidente de la República, firmado PLUTARCO ELIAS CALLES.- El Secretario de Educación Pública, firmado, J. Manuel Puig Casauranc. DECRETO PRESIDENCIAL. Por el cual se autorizó a la Secretaría de Educación Pública para no admitir alumnos de primer curso en la Escuela Nacional Preparatoria durante el año 1926 y segregar del Plan de Estudios de ducha Preparatoria los cursos secundarios. Al margen un sello que dice: Estados Unidos Mexicanos –Presidente de la República.- Número 1850 Al centro: PLUTARCO ELIAS CALLES, Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, a sus habitantes, sabed: Que en uso de las facultades de que goza el Ejecutivo de la Unión, conforme a la fracción I del artículo 89 de la Constitución General de la República, y CONSIDERANDO: que la densidad de población escolar en los edificios actualmente destinados a la Escuela Nacional Preparatoria ocasiona dificultades para el manejo y control de los alumnos y falta de eficiencia en los servicios educativos; CONSIDERANDO: que es necesario que la Universidad disponga de campo suficiente para dar a los cursos secundarios de preparatoria especial, que forman en el presente plan de estudios el 4º y el 5º años de la Escuela Nacional Preparatoria, toda la amplitud e importancia que ameritan; CONSIDERANDO: por otra parte, la necesidad de separar a los alumnos que ingresan a los cursos secundarios de los que siguen los cursos de preparatoria especial, ya que las diferencias de edad, de preparación previa y de finalidades, hacen inconveniente el tenerlos alojados en una misma escuela y sujetos a una misma dirección. CONSIDERANDO: además, la necesidad de poner la escuela secundaria en un edificio más educativo, es decir, más adecuado, por lo que toca a salones, biblioteca, laboratorios y campos de juego, con objeto de dar a los jóvenes de corta edad que forman la población de los cursos secundarios una oportunidad más intensa.

CONSIDERANDO: que la aglomeración de los alumnos de la Escuela Nacional Preparatoria y la falta de atención educativa personal, debido a la excesiva inscripción a las condiciones materiales del edificio, han creado en años pasados problemas disciplinarios de seriedad, y CONSIDERANDO: finalmente, que se ha acordado la creación de nuevas escuelas secundarias para el año de 1926, por todas estas circunstancias y en uso de las facultades de que estoy investido en el ramo de Hacienda, he tenido a bien expedir el siguiente:

DECRETO:

ARTÍCULO UNICO: Se autoriza a la Secretaría de Educación Pública para que, a partir del año 1926, no admita en la Escuela Nacional Preparatoria alumnos para el primer año y ordene a la Universidad Nacional la separación de los cursos secundarios que le queden (2º y 3º del actual plan de estudios de la Escuela Nacional Preparatoria) en el edificio llamado “Escuela Anexa”, poniendo dichos cursos secundarios bajo la jurisdicción técnica y administrativa de la Dirección de Educación Secundaria que se crea en la Secretaría de Educación Pública, a partir del 1º de enero de 1926. Por tanto, mando se imprima, publique, circule y se le dé el debido cumplimiento. Dado en el Palacio del Poder Ejecutivo Federal, en México, a los veintidós días del mes de diciembre de mil novecientos veinticinco.

b) PLANES Y PORGRAMAS DE ESTUDIO: DE 1926 A 1975.

PLAN DE ESTUDIOS

(1926-1931) (ABROGADO)

PRIMER GRADO ASIGNATURAS Hs/Sc

1 LENGUA Y LITERATURA ESPAÑOLA 4 2 MATEMÁTICAS 4 3 LENGUA EXTRANJERA 2 4 BIOLOGÍA 3 5 6 7 HISTORIA UNIVERSAL 3 8 GEOGRAFÍA 2 9 EDUCACIÓN CÍVICA 3

10 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN PREMILITAR 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 2 12 TALLER DE ECONOMIA DOMÉSTICA 4 13 DIBUJO 2 14 ESTUDIO DIRIGIDO 9

SEGUNDO GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA CASTELLANA 3 2 MATEMÁTICAS 3 3 LENGUA EXTRANJERA 2 4 BIOLOGÍA 2 5 FÍSICA 3 6

7 HISTORIA UNIVERSAL HISTORIA DE MÉXICO

2 2

8 GEOGRAFÍA 2 9 EDUCACIÓN CÍVICA 3

10 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN PREMILITAR 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 1 12 TALLERES DE ECONOMIA DOMÉSTICA 4 13 DIBUJO 2 14 ESTUDIO DIRIGIDO 9

TERCER GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA CASTELLANA 3 2 MATEMÁTICAS 3 3 LENGUA EXTRANJERA 2 4 BIOLOGÍA 2 5 6 QUÍMICA 3 7 HISTORIA DE MÉXICO 3 8 GEOGRAFÍA 2 9 EDUCACIÓN CÍVICA 3

10 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN PREMILITAR 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 1 12 TALLER DE ECONOMIA DOMÉSTICA 4 13 MODELADO 2 14 ESTUDIO DIRIGIDO 8 15 OPCIÓN 2

PLAN DE ESTUDIOS (1932-1935)

PRIMER GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 ESPAÑOL 4 2 MATEMÁTICAS 5 3 4 CIENCIAS BIOLOGICAS 3 5 6 7 8 GEOGRAFÍA FÍSICA 3 9 CIVISMO 2

10 JUEGOS Y DEPORTES 2 11 ORFEÓN 1 12 DIBUJO E IMITACIÓN 3 13 ARTES MANUALES 2

SEGUNDO GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 ESPAÑOL 3 2 MATEMÁTICAS 4 3 4 CIENCIAS BIOLOGICAS 3 5 FÍSICA 4 6 7 8 GEOGRAFÍA UNIVERSAL 3 9 CIVISMO 2

10 JUEGOS Y DEPORTES 2 11 ORFEÓN 1 12 DIBUJO CONSTRUCTIVO 3 13 ARTES MANUALES 2 14 OPCIÓN 3

TERCER GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LITERATURA ESPAÑOLA 3 2 MATEMÁTICAS 4 3 4 CIENCIAS BIOLOGICAS 3 5 6 QUÍMICA 4

7 HISTORIA DE MÉXICO 3 HISTORIA UNIVERSAL

3 8 GEOGRAFÍA DE MÉXICO 2 9 CIVISMO 2 10 JUEGOS Y DEPORTES 2 11 12 MODELADO 1 13 OPCIÓN


(ABROGADO)

PRIMER GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 ESPAÑOL 4 2 MATEMÁTICAS 4 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 BIOLOGÍA 3 5 6 7 8 GEOGRAFÍA 3 9 CULTURA CÍVICA 3

10 CULTURA FÍSICA 3 11 CULTURA MUSICAL 2 12 TALLERES 4 13 DIBUJO 2 14 TRABAJOS DE GABINETE

SEGUNDO GRADO

1

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 ESPAÑOL 4 2 MATEMÁTICAS 3 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 BIOLOGÍA 3 5 FÍSICA 3 6 7 HISTORIA DE MÉXICO 3 8 GEOGRAFÍA 3 9 CULTURA CÍVICA 2

10 CULTURA FÍSICA 3 11 CULTURA MUSICAL 1 12 TALLERES 4 13 DIBUJO 2 14 TRABAJOS DE GABINETE

TERCER GRADO

2

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 ESPAÑOL 4 2 MATEMÁTICAS 3 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 BIOLOGÍA 3 5 6 QUÍMICA 3 7 HISTORIA UNIVERSAL 3 8 GEOGRAFÍA 3 9 CULTURA CIVISMO 2

10 CULTURA FÍSICA 3 11 CULTURA MUSICAL 1 12 TALLERES 4 13 DIBUJO 2 14 TRABAJOS DE GABINETE 2


(ABROGADO)

PRIMER GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 CASTELLANO 3 2 MATEMÁTICAS 5 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 BOTÁNICA Y LABORATORIO 4 5 6 7 HISTORIA 2 8 GEOGRAFÍA 3 9 CIVISMO 2

10 CULTURA FÍSICA 2 11 ORFEÓN 1 12 DIBUJO 2 13 ACTIVIDADES PRÁCTICAS 6

SEGUNDO GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 CASTELLANO 3 2 MATEMÁTICAS 4 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 ZOOLOGÍA Y LABORATORIO 4 5 FÍSICA Y LABORATORIO 4 6 7 HISTORIA 3 8 GEOGRAFÍA 3 9 CIVISMO 2

10 CULTURA FÍSICA 2 11 ORFEÓN 1 12 DIBUJO 2 13 ACTIVIDADES PRÁCTICAS 4

TERCER GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 CASTELLANO 3 2 MATEMÁTICAS 4 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 ANATOMÍA, FISIOLOGÍA E HIGIENE 3 5 6 QUÍMICA Y LABORATORIO 4 7 HISTORIA 3 8 GEOGRAFÍA 3 9

10 CULTURA FÍSICA 2 11 12 DIBUJO 2 13 ECONOMÍA SOCIAL 2 14 ACTIVIDADES PRÁCTICAS 6


(ABROGADO) PRIMER GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA CASTELLANA 4 2 MATEMÁTICAS 4 3 LENGUA EXTRANJERA 2 4 BIOLOGÍA 3 5 6 7 HISTORIA UNIVERSAL 3 8 GEOGRAFÍA 2 9 EDUCACIÓN CÍVICA 3

10 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN PREMILITAR 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 2 12 TALLER DE ECONOMÍA DOMÉSTICA 4 13 DIBUJO 2 14

SEGUNDO GRADO

ESTUDIO DIRIGIDO 9



2 2


10 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN PREMILITAR 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 1 12 TALLER DE ECONOMÍA DOMÉSTICA 4 13 DIBUJO 2 14

TERCER GRADO

ESTUDIO DIRIGIDO 9

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA CASTELLANA 3 2 MATEMÁTICAS 3 3 LENGUA EXTRANJERA 2 4 BIOLOGÍA 2 5 6 QUÍMICA 3 7 HISTORIA DE MÉXICO 3 8 GEOGRAFÍA 2 9 EDUCACIÓN CÍVICA 3 10 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN PREMILITAR 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 1 12 TALLERES Y ECONOMÍA DOMÉSTICA 4 13 MODELADO 2 14 ESTUDIO DIRIGIDO 8 15 OPCIÓN 2


(ABROGADO)

PRIMER GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA CASTELLANA (ESPAÑOLA) 4 2 MATEMÁTICAS (ARITMÉTICA, ÁLGEBRA Y TRIGONOMETRÍA) 5 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 BIOLOGÍA 3 5 6 7 HISTORIA UNIVERSAL 3 8 GEOGRAFÍA 3 9 EDUCACIÓN CÍVICA 3

10 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN PREMILITAR 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 2 12 TALLER Y ECONOMÍA DOMÉSTICA 4 13 DIBUJO DE IMITACIÓN

SEGUNDO GRADO

2

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA CASTELLANA 3 2 MATEMÁTICAS (ARITMÉTICA, ÁLGEBRA Y TRIGONOMETRÍA) 4 3 LENGUA EXTRANJERA 2 4 BIOLOGÍA 3 5 FÍSICA 4 6


2 2


10 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN PREMILITAR 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 1 12 TALLER Y ECONOMÍA DOMÉSTICA 4 13

TERCER GRADO

DIBUJO COSNTRUCTIVO 3

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA CASTELLANA (ESPAÑOLA) 3 2 MATEMÁTICAS (ARITMÉTICA, ÁLGEBRA Y TRIGONOMETRÍA) 3 3 LENGUA EXTRANJERA 2 4 BIOLOGÍA 3 5 6 QUÍMICA 4 7 HISTORIA DE MÉXICO 3 8 GEOGRAFÍA 2 9 EDUCACIÓN CÍVICA 2

10 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN PREMILITAR 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 1 12 TALLERES Y ECONOMÍA DOMÉSTICA 4 13 MODELADO 2 14 OPCIÓN

3


(ABROGADO)

PRIMER GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA CASTELLANA 5 2 MATEMÁTICAS 4 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 BIOLOGÍA 3 5 6 7 HISTORIA UNIVERSAL 3 8 GEOGRAFÍA 3 9 EDUCACIÓN CÍVICA 3

10 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN MILITAR 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 2 12 TALLERES Y ECONOMÍA DOMÉSTICA 4 13 DIBUJO

SEGUNDO GRADO

2



4 2


10 EDUCACIÓN MUSICAL 1 11 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN MILITAR 2 12 TALLERES Y ECONOMÍA DOMÉSTICA 4 13 DIBUJO

TERCER GRADO

3

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA CASTELLANA 3 2 MATEMÁTICAS 3 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 BIOLOGÍA 3 5 6 QUÍMICA 4 7 HISTORIA DE MÉXICO 3 8 GEOGRAFÍA 2 9 EDUCACIÓN CÍVICA 2

10 EDUCACIÓN FÍSICA E INSTRUCCIÓN MILITAR 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 1 12 TALLERES Y ECONOMÍA DOMÉSTICA 4 13 MODELADO

2



ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA ESPAÑOLAS 4 2 MATEMÁTICAS 4 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 BIOLOGÍA 3 5 6 7 HISTORIA DE UNIVERSAL 2 8 GEOGRAFÍA 2 9 EDUCACIÓN CÍVICA 2

10 EDUCACIÓN FÍSICA 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 2 12 DIBUJO DE IMITACIÓN Y CONSTRUCCIÓN 2 13 TALLERES Y ECONOMÍA DOMÉSTICA 4 14

SEGUNDO GRADO

CLUBES 4

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA ESPAÑOLAS 3 2 MATEMÁTICAS 3 3 LENGUA EXTRANJERA 2 4 BIOLOGÍA 3 5 FÍSICA 3 6

7 HISTORIA DE UNIVERSAL HISTORIA DE MÉXICO

2 2


10 EDUCACIÓN FÍSICA 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 1 12 DIBUJO DE IMITACIÓN Y CONSTRUCCIÓN 2 13

TERCER GRADO

TALLERES Y ECONOMÍA DOMÉSTICA 3

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 LENGUA Y LITERATURA ESPAÑOLAS 3 2 MATEMÁTICAS 3 3 LENGUA EXTRANJERA 2 4 BIOLOGÍA 3 5 6 QUÍMICA 3 7 HISTORIA DE MÉXICO 2 8 GEOGRAFÍA 3 9 EDUCACIÓN CÍVICA 2

10 EDUCACIÓN FÍSICA 2 11 EDUCACIÓN MUSICAL 1 12 MODELADO 2 13 TALLERES Y ECONOMÍA DOMÉSTICA 3 14 OPCIÓN 2 15 CLUBES

4



PRIMER GRADO

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 ESPAÑOL 4 2 MATEMÁTICAS 4 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 BIOLOGÍA 4 5 6 7 HISTORIA 3 8 GEOGRAFÍA 3 9 ACTIVIDAD DE EDUCACIÓN CÍVICA 2

10 EDUCACIÓN FÍSICA 2 11 ACTIVIDAD DE EDUCACIÒN ARTISTICA 2 12 * EDUCACIÓN TECNOLÓGICA

SEGUNDO GRADO

2

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 ESPAÑOL 4 2 MATEMÁTICAS 4 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 BIOLOGÍA 4 5 6 7 HISTORIA 3 8 GEOGRAFÍA 3 9 ACTIVIDAD DE EDUCACIÓN CÍVICA 2

10 EDUCACIÓN FÍSICA 11 ACTIVIDAD DE EDUCACIÓN ARTÍSTICA 2

*Las horas de Educación Tecnológica varían de acuerdo al subsistema.

12

TERCER GRADO

*EDUCACIÓN TÉCNOLÓGICA *

ASIGNATURAS Hs/Sc 1 ESPAÑOL 3 2 MATEMÁTICAS 3 3 LENGUA EXTRANJERA 3 4 5 FÍSICA 4 6 QUÍMICA 4 7 ACTIVIDADES DE HISTORIA (SEMINARIO) 2 8 9 EDUCACIÓN CÍVICA 3

10 EDUCACIÓN FÍSICA 11 ACTIVIDAD DE EDUCACIÓN ARTÍSTICA 2

12 *EDUCACIÓN TÉCNOLÓGICA *

*Las horas de Educación Tecnológica varían de acuerdo al subsistema.

PLAN DE ESTUDIOS DE EDUCACIÓN MEDIA BÁSICA DE ACUERDO A LAS RESOLUCIONES DE CHETUMAL

ESTUDIO POR ÁREAS HS/SC. ESTUDIO POR ASIGNATURAS HS/SC.

ESPAÑOL 4 ESPAÑOL 4

MATEMÁTICAS 4 MATEMÁTICAS 4

L. EXTRANJERA 3 L.EXTRANJERA 3

BIOLOGIA 3

FÍSICA 2 CIENCIAS NATURALES -TEORÍA Y PRÁCTICAS 7

QUÍMICA 2

HISTORIA 3

GEOGRAFÍA 2 CIENCIAS SOCIALES -TEORÍA Y PRÁCTICAS 7

CIVISMO 2

PR

IME

R G

RA

DO

EDUCACIÓN FÍSICA, ARTÍSTICA Y TECNOLÓGICA. 5 EDUCACIÓN FÍSICA, ARTÍSTICA

Y TECNOLÓGICA. 5



L. EXTRANJERA 3 L. EXTRANJERA 3

BIOLOGÍA 3

FÍSICA 2 CIENCIAS NATURALES 7

QUÍMICA 2

HISTORIA 3

GEOGRAFÍA 2 CIENCIAS SOCIALES 7

CIVISMO 2

SE

GU

ND

O G

RA

DO

EDUCACIÓN FÍSICA, ARTÍSTICA Y TECNOLÓGICA. 5 EDUCACIÓN FÍSICA, ARTÍSTICA

Y TECNOLÓGICA. 5



L. EXTRANJERA 3 L. EXTRANJERA 3

BIOLOGÍA 3

FÍSICA 2 CIENCIAS NATURALES 7

QUÍMICA 2

HISTORIA 2

GEOGRAFÍA 2 CIENCIAS SOCIALES 7

CIVISMO 3

TER

CE

R G

RA

DO

EDUCACIÓN FÍSICA, ARTÍSTICA Y TÉCNOLÓGICA. 5 EDUCACIÓN FÍSICA, ARTÍSTICA

Y TECNOLÓGICA. 5

c) EVOLUCIÓN HISTÓRICA DE LA MATRÍCULA EN LA EDUCACIÓN SECUNDARIA DE 1924 A 1986.

PROG. PRESIDENTE PERIODO SECRETARIO (S) DE EDUCACIÓN PÚBLICA

AVANCE EDUCATIVO EN EL NIVEL MEDIO BÁSICO

1 Álvaro Obregón 1° de diciembre de 1920 30 de noviembre de 1924

José Vasconcelos C. Bernardo J. Gastelum.

Se trazan las directrices de la Educación Secundaria.

2

Plutarco Elías Calles

1° de diciembre de 1924 30 de noviembre de 1928

José Ma. Puig Casauranc Moisés Sáenz.

No. de Escuelas: No. de alumnos:

4

4301

3 Emilio Portes Gil 1° de diciembre de 1928 4 de febrero de 1930 Ezequiel Padilla


5

5073

4 Pascual Ortiz Rubio 5 de febrero de 1930. 4 de septiembre de 1932

Aarón Sáenz Carlos Trejo Lerdo Alejandro Cerisola Narciso Bassols


7

6332

5 Abelardo L. Rodríguez

5 de septiembre de 1932 30 de noviembre de 1934

Narciso Bassols Eduardo Vasconcelos


7

6361

6 Lázaro Cárdenas del Río


Ignacio García Terrez Gonzalo Vázquez Vela


12

8916

7 Manuel Ávila Camacho


Luis Sánchez Pontón Octavio Vejar Vázquez Jaime Torres Bodet


16

9406

8 Miguel Alemán Valdés

1° de diciembre de 1946 30 de noviembre de 1952 Manuel Gual Vidal


25

11786

9 Adolfo Ruiz Cortines 1° de diciembre de 1952 30 de noviembre de 1958 José A. Ceniceros


33

17870

10 Adolfo López Mateos 1° de diciembre de 1958 30 de noviembre de 1964 Jaime Torres Bodet


52

36840

11 Gustavo Díaz Ordaz 1° de diciembre de 1964 30 de noviembre de 1970 Agustín Yáñez


1491

36534

12 Luis Echeverría Álvarez

1° de diciembre de 1970 30 de noviembre de 1976 Víctor Bravo Ahuja


6797

1898053

13 José López Portillo 1° de diciembre de 1976 30 de noviembre de 1982

Porfirio Muñoz Ledo Fernando Solana


8273

3400000

14 Miguel de la Madrid Hurtado


Jesús Reyes Heroles Miguel González Avelar


15657

4179500

8. BIBLIOGRAFÍA DE ANDA, Ma. Luisa.

“Televisión y Enseñanza Media de México. El caso de la Secundaria” CNTE. S/E Impreso y hecho en México.

DGETI

“La Educación Tecnológica Industrial” Boletín de información No. 1 Dirección General de Educación Tecnológica Industrial. México.

Educación Media Básica.

“Resoluciones de Chetumal”. Secretaría de Educación Pública. México, 1974.

Enciclopedia de México.

México 1978.

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“El Liberalismo Mexicano en Pensamiento y Acción”. Empresas Editoriales, S.A. México 1967.

HELDT, Barbosa Antonio.

“Cien años en la Educación de México”. S/E. Ed. Pax-México, 1972.

LARROYO, Francisco.

“Historia Comparada de la Educación en México” 17ª. Edición. Editorial Porrúa, S.A. México, 1982. pág. 588

MORENO, Uruchurtu G.

“Ensayo Histórico Doctrinal sobre las Escuelas Secundarias”. Boletín No. 7 Dirección General de Segunda Enseñanza. SEP. México, 1984

SEP*

“Programa Nacional de Cultura, Recreación y Deporte” Cuadernos SEP. México, 1984.

SEP.

“50 años de la educación Secundaria en México” Dirección General de educación Media. México, 1975.

SEP

“La Escuela Secundaria en México 1964- 1970. Dirección General de Segunda Enseñanza. SEP. México.

SOLANA, Fernando C. Reyes, BOLAÑOS, Martínez Raúl Colaboradores

“Historia de la educación Pública en México” Edición conmemorativa del LX Aniversario de la creación de la Secretaría de Educación Pública, México, 1982.

ZEA, Leopoldo.

“Del Liberalismo a la Revolución en la Educación Mexicana”. México, 1956.

Plan de Estudios 1926 a 1974

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