Pastoral Vocacional Franciscana (HFIC): Reflexión El juego a las escondidas

Hermanas Franciscanas de la Inmaculada Concepción

Prov. Nstra. Sra. De la Paz. [email protected]



REFLEXION:

EL JUEGO DE LAS

ESCONDIDAS

PASTORAL VOCACIONAL

FRANCISCANA



Cuentan que una vez se reunieron en un lugar de la tierra, todos los sentimientos y cualidades de los

hombres...



Cuando el ABURRIMIENTO había bostezado por

tercera vez,

la BÚSQUEDA (como siempre tan audaz),

les propuso:

¿Vamos a jugar a las escondidas? .



La INTRIGA levantó la ceja intrigada

y la CURIOSIDAD

sin poder contenerse, preguntó:

“A las escondidas y... ¿Cómo es eso?".



"Es un juego ", explicó la BÚSQUEDA,

"en el que yo me tapo la cara y comienzo a contar

desde 1 hasta 100, mientras ustedes se esconden.

Cuando yo haya terminado de contar, los empiezo

a buscar uno por uno y el primero de ustedes que

encuentre, ocupa mi lugar para continuar el

juego".



El ENTUSIAMO bailó secundado por la EUFORIA.

La ALEGRÌA dio tantos saltos

que terminó por convencer a la DUDA

e incluso a la APATÌA,

a la que nunca le interesaba buscar ni ser buscada.



Pero no todos quisieron participar...

la VERDAD prefirió no esconderse,

"¿para qué?", si al final siempre la hallaban…

La SOBERBIA opinó que era un juego muy

tonto (en el fondo lo que le molestaba era que la idea no

hubiera sido de ella), y la COBARDÌA prefirió no

arriesgarse...



"1, 2, 3...", comenzó a contar la BÚSQUEDA...

La primera en esconderse fue la PEREZA

que como siempre, se dejó caer tras la primera piedra del camino.

La FE subió al cielo,

y la ENVIDIA se escondió tras la sombra del TRIUNFO

que con su propio esfuerzo,

había logrado subir a la copa del árbol más alto.



La GENEROSIDAD no alcanzaba a esconderse

porque cada sitio que hallaba le parecía maravilloso para

alguno de sus amigos: un lago cristalino

ideal para la BELLEZA,

La hendida de un árbol, perfecto para la TIMIDEZ,



Una ráfaga de viento,

magnífica para la LIBERTAD...

Así terminó por ocultarse en un rayito de sol.



El EGOÌSMO en cambio, encontró desde el principio un sitio muy

bueno, ventilado, cómodo pero por supuesto, sólo para él.

la MENTIRA se escondió en el fondo del océano

(mentira... En realidad, se escondió detrás del arco iris),

y la PASIÒN y el DESEO, en el centro de los volcanes.



Cuando la BÚSQUEDA contaba 99,

el AMOR (Que era el apodo usual para Jesús)

aún no había encontrado un sitio para esconderse, pues

todo se encontraba ocupado, hasta que divisó una cruz

y decidido, se subió a ella pensando que allí pasaría

desapercibido...



"100", contó la BÚSQUEDA

y comenzó a buscar...

La primera en aparecer fue la

PEREZA, sólo a tres pasos de una

piedra.



Después se escuchó a la FE hablando con Dios en el cielo,

y a la PASIÒN y el DESEO,

los sintió en el vibrar de los volcanes.

En su descuido encontró a la ENVIDIA y pudo deducir donde estaba el

TRIUNFO.



Al EGOÌSMO no tuvo ni que buscarlo...

Él solito salió disparado de su escondite que

resultó ser un nido de avispas.



De tanto caminar, la BÚSQUEDA sintió sed

y al acercarse al lago,

descubrió a la BELLEZA.

Así fue encontrando a todos.

El TALENTO entre la hierba fresca,



a la ANGUSTIA en una oscura cueva,

a la MENTIRA detrás del arco iris,

(mentira... Si, estaba en el fondo del ),

pero sólo el AMOR (Jesús)

no aparecía por ningún sitio...



La BÚSQUEDA buscó detrás de cada árbol,

bajo cada arroyuelo del planeta,

en la cima de las montañas y cuando estaba por darse por

vencida, divisó una gran cruz,

tomó una escalera y comenzó a moverla,

cuando de pronto un doloroso grito se escuchó...



ENCONTRÓ al AMOR crucificado,

los clavos lo habían herido en las manos y los pies;

la BÚSQUEDA no sabía que hacer para

disculparse,

lloró, rogó, imploró y prometió estar siempre a su lado…



Desde entonces, desde que por primera vez se jugó a las

escondidas en la tierra, la BÚSQUEDA

está siempre tras el AMOR

porque en él encontró su verdadera FELICIDAD.

Pastoral Vocacional Franciscana (HFIC): Reflexión El juego a las escondidas

Spiritual

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