Partidos Políticos y Sistemas Electorales

22
4 TIDOS POLíTICOS y SISTEMAS ELECTORALES Eduardo Saffirio y Cecilia 050rio El objetivo de este capítulo es definir de manera a los par- políticos, su rol en las democracias actuales y los desafíos que En ese sentido, se tendrá en cuenta el contexto actual en el se desenvuelven, para que los planteamientos sean actualizados y cr¡>rpnl-p¡::. En primer lugar, se define partidos políticos y establecen las con otros actores políticos colectivos como los grupos de !: ore:SlOtll y de influencia. En segundo lugar, se plantean los principales ;ele:me:nt()s del contexto histórico que explican su origen, los tipos de partidos y el rol que estos cumplen en las democracias. Los sistemas de partidos es un tercer punto a tratar, explicando la tradicional tipología de Giovanni Sartori, pero también realizando una mirada crítica a esta y considerando recientes aportes en esa línea. En una cuárta parte se desarrollará un análisis de los partidos políticos en América Latina, contrastando la teoría con' el contexto político y social de la región. Finalmente, se presentan los principales elementos para comprender y analizar los sistemas electorales. I. ACTORES POLíTICOS COLECTIVOS: PARTIDOS POLíTICOS, GRUPOS DE INTERÉS, GRUPOS DE PRESIÓN Y MqVIMIENTOS SOCIALES Los principales actores políticos colectivos definidos por la discipli- na son los grupos de presión, los partidos políticos y los movimientos sociales. Estos tres grupos se diferencian en cuanto a la estabilidad de sus estructura (sólida y permanente o sujeta a variaciones y oscilacio-

description

Texto de Eduardo Saffirio y Cecilia Osorio.

Transcript of Partidos Políticos y Sistemas Electorales

  • 4 TIDOS POLTICOS y SISTEMAS ELECTORALES

    Eduardo Saffirio y Cecilia 050rio

    El objetivo de este captulo es definir de manera pre~isa a los parpolticos, su rol en las democracias actuales y los desafos que

    En ese sentido, se tendr en cuenta el contexto actual en el se desenvuelven, para que los planteamientos sean actualizados y

    cr>rpnl-p::. En primer lugar, se define partidos polticos y establecen las con otros actores polticos colectivos como los grupos de ! :

    ore:SlOtll y de influencia. En segundo lugar, se plantean los principales ;ele:me:nt()s del contexto histrico que explican su origen, los tipos de partidos y el rol que estos cumplen en las democracias. Los sistemas de partidos es un tercer punto a tratar, explicando la tradicional tipologa de Giovanni Sartori, pero tambin realizando una mirada crtica a esta y considerando recientes aportes en esa lnea. En una curta parte se desarrollar un anlisis de los partidos polticos en Amrica Latina, contrastando la teora con' el contexto poltico y social de la regin. Finalmente, se presentan los principales elementos para comprender y analizar los sistemas electorales.

    I. ACTORES POLTICOS COLECTIVOS: PARTIDOS POLTICOS, GRUPOS DE INTERS, GRUPOS DE PRESIN Y MqVIMIENTOS SOCIALES

    Los principales actores polticos colectivos definidos por la disciplina son los grupos de presin, los partidos polticos y los movimientos sociales. Estos tres grupos se diferencian en cuanto a la estabilidad de sus estructura (slida y permanente o sujeta a variaciones y oscilacio

  • EDUARDO SAFFIRIO y Cl!ClLlA OSORIO

    versal) y en el escenario preferido para la intervencin (institucional o extrainstitucional) (Valles, 2007). Asimismo, los objetivos que guan su accin son diversos, ya que en algunos de ellos se trata de obtener el poder poltico, como en el caso de los partidos, o de influir en este, como es el caso de grupos de inters o de los movimientos sociales. Tomando en cuenta estos y otros criterios, es posible sealar las siguientes definiciones para cada uno de estos actores.

    A) GRUPO DE INTERts

    Se caracterizan por ser grupos de personas que poseen una organizacin y con ello aspiran a tener un cierto grado de permanencia. El factor que rene a sus miembros es la defensa de un inters comn, aunque particular con respecto al resto de los miembros de la sociedad. En ese sentido, si bien sus intereses no son transversales, constituyen un actor que canaliza demandas al sistema poltico. Ahora bien, no aspiran a dirigir la asociacin poltica ni a ejercer la toma de decisiones, sino que a influir en quienes lo hacen. Por tanto, no buscan asumir

    responsabilidades institucionales. Grupos de inters existen en variadas esferas. En el mbito eco

    nmico, por ejemplo, se encuentran los sindicatos, organizaciones patronales, asociaciones

  • EDUARDO SAFFIRIO y CECILIA OSORlO

    occidentales, los cuerpos intermediarios, como los grupos de inters, no son el nico cauce de participacin ciudadana (como lo pretende la teora poltica de grupo), pero s un modo de participacin para el ciudadano miembro de un grupo en el proceso decisorio. Por otro lado, los regmenes democrticos pluralistas aceptan estos grupos, y buscan integrarlos oficialmente a travs de diversas acciones. Por ejemplo:

    Estableciendo transparencia del accionar de los dirigentes polticos ante los grupos de presin. Se busca transparentar quin es quin, cules son sus objetivos e intereses y cules son sus medios de accin.

    Invitando a los grupos para ser informados, consultados y escuchados.

    Institucionalizando los medios de presin, por ejemplo, a travs de los consejos econmicos sociales.

    A travs de la regulacin, transparencia e institucionalizacin del lobby.

    B) MOVIMIENTOS SOCIALES

    Las movilizaciones sociales que tuvieron lugar en Europa occidental yen Norteamrica a mediados de los sesenta y principio de los setenta revitalizaron el inters de socilogos y politlogos por este fenmeno.

    Su origen tendra que ver con el posmodernismo, o con la crisis de legitimidad del capitalismo avanzado; por su parte, los actores tradicionales habran descuidado las nuevas demandas planteadas desde la sociedad. En los aos sesenta y setenta del siglo XX los nuevos movimientos sociales defendan temas de corte contestatario y progresista. No obstante, a partir de los setenta tambin pueden identificarse movimientos sociales que defienden temas ms tradicionales. En los pases en desarrollo, los movimientos sociales se despliegan en los procesos de transicin democrtica, y tambin como nuevos actores en el mbito urbano (Valles, 2007).

    Por tanto, se pueden identificar muchos tipos de movimientos sociales: ecolgicos, de defensa de minoras sexuales, antinucleares, okupas, defensa provida, entre otros. A diferencia de los partidos polticos, no buscan ejercer el poder, sino que influir en la opinin pblica. No obstante, sus intereses son ms transversales que los de los grupos

    r,1

    PARTIDOS pOLlncos y SISTEMAS IlLECTORALIIS

    de inters y no cuentan con una estructura rgida e institucionalizada. Por lo tanto, no demandan una militancia o participacin formal, sino que una pertenencia ms voltil.

    Los nuevos movimientos soc;iales se han convertido en instrumentos alternativos de agregacin e integracin de intereses y demandas. Recurren a mtodos no convencionales de accin y de influencia que buscan movilizar a la opinin pblica y atraer su atencin. En ltima instancia, esperan influir en las decisiones polticas sin comprometerse con la actividad poltica convencional.

    El xito del movimiento puede depender de la coyuntura poltica y social, de cmo ellos manejen sus acciones en ese contexto y de las alianzas que puedan concretar con actores institucionales. En ese mismo sentido, segn las consecuencias de su accin y la naturaleza de sus intereses, luego pueden transformarse en un partido poltico o en un actor suficientemente legitimado como para interlocutar con otros

    , \actores colectivos o con el gobierno.

    c) PARTIDOS POTICOS

    A diferencia de los actores definidos antes, hay que sealar que existe p.ayor debate respecto a la definicin de partidos polticos y su capacidad de ser aplicable a. todo tiempo y lugar. En este apartado se plantear su definicin, para, en la seccin siguiente, abordar cuestiones

    !~ relativas a su origen, tipos y funciones.

    Algunos elementos centrales de los partidos que generan consenso en la literatura son: su condicin grupal organizada; su participacin en la lucha por el poder y en la formacin de la voluntad poltica, es decir, su participacin en los procesos decisorios de la poltica; y su funcin de intermediacin entre la ciudadana y el Estado. Otro aspecto a considerar es su permanencia en el tiempo. Se trata de instituciones ms estables que otros actores colectivos.

    Una de las definiciones ms amplias es la planteada por Maurice Duverger, quien seala que los partidos actuales se definen mucho menos por su programa o por la clase de sus miembros que por la naturaleza de su organizacin: un partido es una comunidad con una estructura particular (Duverger, 1988: 11). Para algunos este es un buen punto de partida, ya que permite aplicar el concepto a variados tiempos y lugares.

    1'7

  • EDUARDO SAFFIRlO y CaCILlA OSORlO PARTIDOS poLITlcos y SISTI!MAS aLl!CTOIlALl!S

    No obstante, una de las definiciones que genera mayor consenso y que permite clarificar de manera adecuada la naturaleza de este actor es la planteada por Giovanni Sartorio El autor seala que un partido polftico es cualquier grupo poltico identificado por una etiqueta oficial que presenta a las elecciones, y puede sacar en elecciones (libres o no) candidatos a cargos pblicos (Sartori, 1999: 89). Algunos autores (Pastor, 1994) critican, de esta definicin, el hecho de que permita calificar como partido a los partidos nicos o partidos que operan en un rgimen autoritario. Sin embargo, teniendo estas objeciones en cuenta, constituye una definicin suficientemente esclarecedora para abordar el tema: el partido poltico busca como objetivo la direccin del sistema poltico, y su mtodo para lograrlo son los votos expresados en elecciones.

    Cuadro N" 1: Una tipolosa ideal de actores colectivos

    ~._-

    TIpos d. actore. colectivos-_",.. " ..... ..... . .... . ... Movimientos Grupos de Partido. poUrico.

    sociales interf.

    Gradolt Variable Fuerte, establ. Fuerte, establ..s_iD" Dilcurso Ttansv.rs.1 Sectorial Global .. _----~..._- _.. -.._'......_."."~""- ~

    Social, Institucional, Institucional&_10 p..r..."" d. ItChulcidn no c:onvencionaJ locial

    Criterio. Ori.,./Mit$n bltcla Cambio, Presin Ejercicio.1 pod.. institUl:i"",, enfrentamiento

    Conflicto Acceso a Competenciaautoridades

    &""",ia

    Xa losmedios ... l...."-.", ...l ROlamos Movilizaci6n Conocimiento Apoyo elector.!,

    experto, carsos en 1..~'Wul.r, recurs.,.G's, aCc10oes: eleciones medirie econ6micos

    Fuente: Valls (2007: 346).

    2. PARTIDOS POLTICOS: ORIGEN,FUNCIONES y ROL ACTUAL

    A) ORIGEN DE LOS PARTIDOS POLTICOS

    Se les ha llamado a muchas cosas partido poltico, pero, como hoy se conocen, no existan sino hasta alrededor de 1850. Duverger (1988)

    1}8

    afirma que de hecho en esa fecha, con excepcin de los Estados Unidos, ningn Estado tena partidos polticos en el sentido actual de la palabra.

    El vocablo partido proviene del latn, del verbo partre, que significa dividir (Sartori, 1999). Segn Sartod, comienza a utilizarse en el vocabulario poltico a partir del siglo XVII. No obstante, en un comienzo tuvo una connotacin ms bien negatva, cercana a faccin, que evolucionara hacia una concepcin ms neutral. Ello, en la medida que fueron configurndose como actores y fueron reconocidos como tales.

    Los partidos llegaron a verse aceptados -de forma subconsciente e incluso as con enorme renuencia-- al comprenderse que la diversidad y el disentimiento no son innecesariamente incompatibles con, ni perturbadores de,.e! orden poltico. En este sentido ideal, los partidos son correlativos con, y dependen de, la Westanschauung del liberalismo (Sartori, 1999: 33).

    Respecto al origen de los partidos, Duverger (1988) plantea dos explicaciones no completamente excluyentes, una interna y otra externa en relacin al ciclo electoral y parlamentario. Lo que el autor llama el origen electoral y parlamentario de los partidos (interno), implica que estos estn ligados a la democracia, es decir a la extensin del sufragio popular y de las prerrogativas parlamentarias, y, por lo tanto, a los grupos parlamentarios y los comits electorales. Los primeros se reunieron por coincidencia ideolgica, vecindad geogrfica o voluntad de defensa profesional, entre otros. Los comits electorales, en trminos generales, se relacionan con la extensin del sufragio popular que hace necesario la organizacin de los nuevos electores, dar apoyo a los candidatos y darlos a conocer por sobre las elites sociales tradicionales.

    Una vez nacidas estas dos clulas madres, grupos parlamentarios y comits electorales, basta con que una coordinacin permanente se establezca entre estos y que lazos regulares los unan a aquellos para que nos encontremos frente a un verdadero partido (Duverger, 1988: 21).

    Acerca del origen externo de los partidos, el autor seala que es cuando Un partido .es establecido por una institucin ya existente, cuya actividad se sita fuera de las elecciones y del Parlamento. Se relaciona con la ampliacin del sufragio universal, el derecho de asociacin y la

    t39

  • EDUARDO SAFFIRlO y CBCIUA OSORlO

    primera revolucin industrial. Todo ello hace posible, en la Europa del ltimo tercio del siglo XIX, el nacimiento .de partidos que surgen al margen de los Parlamentos. Algunas de estas instituciones fueron, por ejemplo, los sindicatos, cooperativas agrcolas y grupos profesionales, agrupaciones de intelectuales, agrupaciones de excombatientes, sociedades secretas, agrupaciones clandestinas, grupos industriales y comerciales. Los partidos de creacin exterior seran ms centralizados, coherentes, disciplinados y menos influenciables. Presentaran adems mayor desapego a la competencia electoral y a las elecciones (Duverger, 1988). Un clsico ejemplo de este origen lo constituyen los partidos socialistas, ya que estos nacen en el exterior de los Parlamentos, aunque con la intencin de penetrar en su interior a travs de procesos electorales.

    La aparici6n de los partidos polfticos y su extendida implantacin hemos de vincularla a un fen6meno social ypoltico que incide en el Estado representativo: el movimiento obrero, el cual genera como reacci6n otros autnticos partidos, esta vez burgueses (Hernndez, 2003: 18).

    Una tercera explicacin del origen de los partidos se refiere a los procesos de modernizacin, la que tambin se vincula al origen externo. Esto ya que confluyen procesos similares como la influenciada del sufragio universal, el liberalismo y la revolucin industrial (Hernndez, 2003).

    En ese sentido, Lipset y Rokkan (1992) explican cmo los conflictos sociales ms significativos inciden en los orgenes de los partidos polticos. Su teora constituye una de las ms consistentes explicaciones sobre los orgenes de los partidos polticos en las democracias europeas. Desde su perspectiva, el partido poltico fue simultneamente agente de conflicto e instrumento de integracin, movilizando para ello a personas y grupos sociales (Lipset y Rokkan, 1992).

    Asociado a dos grandes procesos histricos, la revolucin nacional y la revolucin industrial, surgieron cuatro lneas de divisin fundamentales -cleavages-, cuya politizacin dio origen a diversos tipos de partido y de sistemas de partidos, que variaron segn cual fuere el

    objeto del conflicto:

    14

    PARTIDOS poLlTIcos y SISTI!MAS ELECTORALES

    Cuadro N" 2

    --~~ Revolucin nacional

    -- Clivaje -Centro-periferia

    -Estado-Igleaia

    o,. 'npo de partid~_. -Regonalitllls

    -Religioso-laico

    ~tode conJlic~___

    -Hmio-Iengua

    -Educaci6n

    Revoluci6n industrial

    -Campo-ciudad

    -Capital-trabajo

    -Campeainos

    -SocialislllS-COl\W'VldotllS

    -Aranceles-I!"ecios alimentos -Estado SOCIal o de Bienestar. ImpuestO!

    Fuente: Elaboracin propia en base a Ilpset y Rokkan (1992).

    Las fractura centro versus periferia, y Estado versus Iglesia, se desarrollaron durante el proceso de creacin de los Estados nacionales. El conflicto centro-periferia expres las divergencias entre la cultura central, que buscaba construir una nacin, y las poblaciones, de las provincias y las periferias, que resistan tal impulso unificador. Dichas poblaciones se diferenciaban tnica, lingstica o religiosamente, segn las diversas realidades europeas. Polticamente ese conflicto enfrent a las fuerzas regionales subordinadas con 108 partidos que buscaban la con~truccin del Estado central. La fisura tuvo facetas polticas, econmicas y sobre todo simblico-culturales.

    La lnea de conflicto Estado versus Iglesia confront, durante el proceso de construccin de la nacin, a las elites laicas -quepromovan la integracin ';:O 'solo territorial, sino tambin ideolgicocultural-, con la Iglesia Catlica. La promocin de diversas iniciativas poIrticas y leyes laicas ..; vinculadas sobre todo a la regulacin del matrimonio y de la educacin, opusieron en diversos pases a partidos conservadoresconfesionales, brazos polticos de la Iglesia Catlica, con partidos laicos de ideologa geo~rlmente liberal, expresin poltica de las oligarquas centrales que buscaban la unificacin nacional.

    Las otras dos lneas de conflicto se vinculan con el proceso de desarrollo del capitalismo industrial. El conflicto campo versus ciudad opuso a los defensores de un tratamiento protector de los intereses agrarios -partidarios de aranceles a las importaciones que en la prctica encarecan los precios de los alimentos para la poblacin-, con comerciantes e industriales interesados en defender la apertura externa y el liberalismo ecnmico, y tambin de expresar las preferencias de los grupos urbanos. En trminos polticos, esta fractura opuso a

    1,P

  • EDUARDO SAFFllUO y CECILIA OSORIO PARTiDOS POLITICOS y SSTIlMAS llLl!C!ORALllS

    partidos agrarios y/o campesinos con partidos liberales y radicales de base fundamentalmente urbana.

    La lnea de divisin capital versus trabajo expres el conflicto entre empresarios y asalariados. Los primeros se organizaron en torno a partidos polticos de derecha -conservadores y/o liberales- y los segundos, en un comienzo sobre todo, urbanos, en las fuerzas de centroizquierda o izquierda, bsicamente partidos socialistas y comunistas. La legislacin laboral y el papel del Estado y el mercado en la economa fueron y an continan siendo los principales temas en disputa en eje izquierda y derecha.

    La permanencia de las lneas de divisin se conoce como el fenmeno de congelamiento de los cleavages. Segn l, las fisuras originarias de los aos veinte habran sobrevivido y ordenado la disputa partidaria por lo menos hasta fines de los aos ochenta. Se-ha sostenido que, durante los noventa, las lneas de divisin experimentaron un proceso de ..descongelamiento. alterando la estabilidad en los apoyos electorales. Detrs de este fenmeno estara la presencia de nuevas lneas de conflicto que, segn Lijphart, complementaran a las cuatro fracturas originarias. Estas son: la dimensin de apoyo al rgimen democrtico, la dimensin de la poltica exterior (conflicto en torno a fenmenos de integracin poltica supranacional o de la posicin frente a la globalizacin econmica y cultural) y la dimensin posmaterialista, que se opondra a los valores del industrialismo incluso ms all del eje izquierda y derecha (Lijphart, 2000). La expresin ms potente de los valores posmateriales en el mbito partidario sera la aparicin de los partidos ecologistas o verdes.

    Por sobre las explicaciones acerca de su origen, es evidente la relacin existente entre democracia y partidos polticos. Estos ltimos comenzaron a organizarse y a funcionar en democracia, y podra decirse que son uno de los pocos actores realmente interesados en su mantenimiento, a~que, paradojalmente, no fueron previstos por las teoras de gobierno republicano o democrtico.

    Concluyendo, los procesos polticos, sociales y culturales relacionados con el origen y el apoyo a los partidos son: la aparicin de los Parlamentos, la tolerancia y valoracin del pluralismo, el desarrollo del sufragio y el aumento y consolidacin de los grupos sociales urbanos

    141

    (medios y proletarios). Por tanto, el partidismo poltico no aparece como tal hasta la progresiva consolidacin del liberalismo en cuanto idea y praxis polticas, es decir, hasta la mitad del siglo pasado (Hernndez Bravo, 2003: 15).

    B) TIPOS DE PARTIDOS

    Las tipologas suelen hacerse en base a criterios de tipo numrico, ideolgico, estructural y funcional. Una de las ms clsicas es la de Max Weber (1984), quien utiliza como indicadores la presencia o no de militantes y adherentes, y segn ellos clasifica a los partidos como "patrido de notables "o" partido de masas ; Segn objetivos, diferencia entre partido de patronazgo .. , entendindolo como organizador de cargos estatales, y partido ideolgico, aquel que aspira a la concrecin de sus ideales de sociedad.

    Otra clasificacin importante es la realizada por Robert Michels (2008). Este autor seala que existen los patridos clientelares .. , que siguen una personalidad carismtica; los ';partidos de inters social y econmico, motivados por intereses de clase; y por ltimo, los "partidos doctrinarios, inspirados en los ideales polticos que entregan una cosmovisin determinada.

    Maurice Duverger (1988) diferencia, segn la estructura, entre partido de cuadro y partido de masas. Los partidos de cuadro prefieren cantidad a calidad. Tienen estructuras flexibles y poco organizadas que fu'ncionan en base a la coaccin interna. Al interior del partido se observa gran autonoma, que entrega espacio a la accin de personas influyente~. Colomer (2009) agrega que son partidos dominados por lderes internos o polticos profesionales. Los partidos de masas,., en cambio, presentan una estructura fuerte, organizada y estable. Son mayormente financiados por sus adherentes, que buscadan apoyar ideales y no a personas. Se caracteri::an por contar con numeroso~ activistas con recursos organizativos y de campaa, y con instancias de participacin para los militantes (Duverger, 1988).

    143

  • ____

    EDUAI!DO SAFFIR10 y CBCILlA OSORlO-'--'

    .. Cuadro N" 31 Principales diferencias entre partidos de notables y partidos de masas

    1.. Personal

    2 1I..cuno-o.'.!!~~~ de:!?!.a.l_ I-__.!,:!,~.a!,~n!'.1- -------...------- .-_..-4.- Org."iucin Comite electoral

    5.-Funcin Elegir un candidato Inrcgracin al Estado

    Trabajadores, !ariados

    Ampliado: sufragio , universal

    . Partido de m....Partido de Ilotables

    Not.bln, dOlido de Polticos profesionalesrecursos propios

    Delegaci6n

    Aparato, .fiacin muiva

    6.- Ha.lOcial Burguesa

    lI.eatrmllido: .ufrasio censitaro 7.- Contexto electoral

    Fuente: Delia Porta (2009: 31). Traduccin de los autores.

    Otto Kirchheimer (1980), teniendo a la vista la realidad de algunas democracias europeas, formula el concepto de "partido escoba o partidos atrapa-todo (Ctltch all parties), que habra desplazado al partido de masas. Es ms abierto a distintos grupos sociales, a las influencias de los nuevos grupos de inters y ms pluralista, pues no est basado en la divisin de clase. Por estas razones, pierden relevancia los militantes. Es un partido desideologizado, donde se han pospuesto los componentes ideolgicos y se trabaja con temas ms generales.

    Angelo Panebianco (1990) se basa en Kirchheimer y aade al concepto de partido escoba,. un modelo de partido burocrtico de masas.. Yotro partido profesional electoral. En el burocrtico, la burocracia constituye el lazo entre. los afiliados, y los lderes que viven de y para el partido. En el profesional -tambin llamado partido de electores (Valls, 2007)-, predominan los expertos, los politicos profesionales, que buscan acercarse al electorado de opinin. Es un partido ms dbil que el burocrtico, ya que la transformacin implica desinstitucionalizacin, aumenta la independencia del elector en relacin al partido y crece el peso poltico de los grupos de inters. Constituida la evolucin de los partidos de masas, predominando en las democracias liberales actuales. Ya que el objetivo es la movilizacin de los votantes ante cada eleccin, se difumina el programa y se

    maneja estratgicamente.

    144

    PARTIDOS POLITICOS y SISTl!MAS I!LI!CTOMLI!S

    Putldo buroc ..tieo de m....

    ~I central d. l. burocracia (competencialtico--adminiotrativa).

    Partido de .fiacl6n con fuertes luc. o~.JZativosde tipo vertical, dirigido. un ce-torada fiel.

    Partido profesioal1-eleetoral(o d. electoral

    P.pel central d.lo. profesionaln (compet... da especi.lizada).

    Partido electo.... lHta, con d~bila lazos arganizativos d. ~o vertical, dirigido.nte todo al electo....do e opinin.

    Preeminencia de una direccin colegiada del Preeminencia de los representanrcs electos en partido: la. institucion .. y direccin personalizada.

    Finsnciacln por cunta. de afiliado,' y .me- Fibanciacin mediante grupOl d. mted. ydi.nt. activid.d colaterales: fondo. pblicoa.

    Acentuaci6n d. Ja ideol0Po.' Papel cenlral de 105 'creyentes' dentro de a organizacin.

    Acentuacin de los probJemas concretol y de liderazgo. Papel central d. los profesionalesd. 1. politica y d. los ro;&resentantcs de lo. grupos d. mted. dentro la organiucl6n.

    I 1Cuadro N" 4:

    Principales diferencias enttt. partidos de masas y partidos de electores

    . I

    i 1

    Fucnte: Vall~. (2007: 364).

    Algunos autores tambin proponen que los modelos de partidos de masas y de partido atrpalo todo, vinculados al tipo de estructura social y de democracia propio de la sociedad industrial, estaran dando paso a un nuevo modelo de partido, el partido cartel" (Mella Mrquez, 2003). Katz y Maier sealan que este partido se caracterizara por la interpenetracin entre el partido y el Estado, y por un patrn de colusin interpartidista" (2004: 27). Los partidos cartel" expresaran, ms all incluso del papel de gobierno u oposicin que desarrollen, una colusin que pretende conseguir para s beneficios, privilegios y financiamiento estatal permanente, y la imposicin de barreras de entrada a nuevos partidos, autoprotegindose de la competencia. A travs de lo anterior, los partidos del sistema minimizaran los costos de la alternancia democrtica en el poder, pues aun en la oposicin se beneficiaran del Estado. En este nuevo tipo de partido ya no tendran mayor importancia los militantes, ni las diferencias ideolgicas o programticas. El objetivo prevalente sera la supervivencia de la propia organizacin y el desarrollo de la carrera poltica de sus dirigentes.

    El surgimiento de estos partidos, sostiene Katz, an es incipiente. Adems, se tratara de un proceso irregular, sier:do ms evidente en aquellos pases en los que la ayuda estatal y el apoyo a los partidos estn ms extendidos" (Katz y Maier, 2004: 27). Algunas crticas a este tipo ideal es que los autores no entregan una definicin propiamente

    145

  • EDUARDO SAFF1RlO y Cl!C1LlA OSORlO

    " tal, sino que solo lo caracterizan con aspectos que son atribuidos tanto a la unidad, como al conjunto (Koole, 2004). Adems, se ha sostenido que el anlisis emprico de los sistemas europeos occidentales no demostrara un proceso de cartelizacin. Al contrario, incluso en sistemas tradicionalmente cooperativos, la competencia y el dinamismo en el desarrollo del sistema de partidos sera mayor que en el pasado.

    Por ltimo, Vall~s identifica los partidos empresas", que se refieren a organizaciones creadas especficamente para promover el apoyo a un candidato. Constituyen la marca de equipos de emprendedores polticos, en su mayora titulares de cargos pblicos y candidatos, que presentan propuestas pblicas para competir en elecciones.

    Podran mencionarse otras definiciones de partidos, pero se ha privilegiado presentar las anteriores, debido a su relevancia. Asimismo, es importante mencionar que existe debate respecto a si estos tipos de partidos se van sucediendo unos a otros, o si, sobre todo para las definiciones contemporneas, esta pueden coexistir. Para algunos,

    la evolucin de los partidos en las democracias occidentales refleja un proceso dialctico en el que cada nuevo tipo de partido genera una reaccin que estimula un nuevo desarrollo, y que por tanto lleva a su vez a un nuevo tipo de partido, y a un nuevo conjunto de reacciones, y as sucesivamente (Katz y Mair, 2004: 10).

    No obstante, otros autores plantean que

    si aceptamos la existencia simultnea de tipos de partidos distintos y rechazamos un formato que postule un nico tipo de partido para una poca, nos ser ms fcil entender por qu un mismo partido puede titubear entre dos modos organizativos (Koole, 2004: 63l.

    En ese sentido, es importante sealar que los tipos de partidos antes mencionados constituyen tipos ideales, los cuales deben ser matizados para su anlisis en las democracias actuales. Junto con ello, se debe considerar las particulares caractersticas de los sistemas democrticos de Amrica Latina frente a las democracias occidentales europeas.

    146

    PAllTIDOS poLl'ncos y SISTI!MAS ELl!CTORALl!.S

    c) ROL DE l.OS PARTIDOS POLITICOS

    Los partidos polticos se consideran los vehculos del pluralismo poltico, por tanto su existencia en un contexto democrtico debiera contribuir a explicitar el conflicto soci~l, racionalizarlo, y a buscarlas soluciones acordes a tal conflicto (Hernndez, 2003).

    Existe un conjunto de funciones tradicionales de los partidos que hasta la dcada de los ochenta reciben cierto consenso y articulacin. Son funciones interrelacionadas y no excluyentes, que recogen lo sealado por la literatura (Alcntara, 2003):

    Socializacin: proceso mediante el cual la ciudadana adquiere ciertos patrones y valores de comportamiento poltico. Los partidos deberan reforzar la cultura poltica existente y tambin iniciar cambios significativos en ella. Tal cosa tambin contribuye a la continuidad de un ncleo duro de militantes, que favorece las actividades de proselitismo y campafias.

    ,

    Movilizacin: una de las funciones de los partidos aunque est ms relacionada con sus momentos iniciales y de los regmenes democrticos, ya que, ms tarde, los ciudadanos se incorporaran al proceso polftico.

    Participacin: las formas de actividad participativa se refieren al quehacer partidista ordinario, que incluye las campaas como las actividades normales de los partidos y los contactos de militantes buscando ejercer presin sobre apartados del rgimen poltico. Evidentemente tambin incluye la participacin en los procesos electorales ejerciendo el voto.

    Legitimacin: articulacin del apoyo y de la confianza de la gente en las reglas de juego del sistema poltico. Incluso se sostiene que las tres anteriores son funciones de la legitimacin. En los casos de transicin poltica, el papel de los partidos es esencial para la consolidacin democrtica.

    Representacin: es bsica en relacin a la democracia y se va desarrollando a lo largo del siglo XIX. Est tamizada por las leyes electorales, por lo que la relacin con el sistema electoral debe ser considerada, ya que influye en cmo son elegidos los representantes y cunto reflejan las tendencias del electorado.

    147

  • EDUARDO SAPPIIUO y CI!CIUA OSaRIo

    Funciones de operatividad del rgimen poltico: se refiere al proceso de formulacin de polticas y formacin de militantes para ocupar cargos. La desempean en el Parlamento, municipios, ministerios, entre otros.

    El Estado de partidos configura na situacin en la que ni los organismos representativos ni el gobierno pueden existir sin la presencia de los partidos polfticos, ( ... ) los partidos suministran altos cargos a las instituciones polticas, tras la seleccin o promocin entre sus militantes o incluso entre su simpatizantes (Alcntara, 2003: 48).

    Actualmente, las funciones de socializacin, movilizacin, participacin y legitimacin se encuentran muy disminuidas, inservibles como instrumentos de formacin de una determinada conciencia colectiva (Alcntara, 2003: 49). Ello, ya que los espacios de participacin directa, el papel central de los medios de comunicacin, y la accin de los movimientos sociales, ONG y otros actores, suplen algunas de estas funciones.

    Se encontraran ms vigentes las funciones de representacin y operatividad del rgimen. En cuanto a la primera, debe ser considerado el sistema electoral y el rgimen de gobierno. Implica adems la articulacin de demandas e intereses (hoy compartida con otros actores) y la transmisin de las diferentes aspiraciones que emanan de los grupos sociales hacia las instituciones estatales con capacidad para convertirlas en decisiones vinculantes. Asimismo, el intento de legitimar ante aquellos grupos las decisiones adoptadas por las instituciones pblicas (Valls, 2007).

    En tanto la operatividad del rgimen, o 10 que otros llaman el ejercicio del poder, se refiere a la creacin de los programas polticos, de polticas pblicas, formacin de gobierno y seleccin de personal dirigente, entre otros aspectos. En este ltimo sentido, algunos autores ponen nfasis en que los partidos deben proponer polticas pblicas innovadoras sobre algunos temas colectivos escogidos, relevando la importancia de las ideas y de la innovacin (Colomer, 2009).

    El debate acerca del rol actual de los partidos ser profundizado en el apartado sobre los partidos en Amrica Latina. Cabe sealar que hoy enfrentan un complejo escenario al observarse en la opinin

    148

    PAltTlDOS POLmCOS y SISTI!MAS I!LllCTOIlALI!S

    pblica bajos niveles de confianza y valoracin, junto con un amplo desconocimiento hacia estos actores colectivos. Pese a 10 anterior, su existencia e importancia en los sistemas democrticos no est en duda. Las democracias siguen requiriendo la presencia de mediadores entre sociedad e instituciones, que articulen grandes propuestas de carcter integrador. La experiencia histrica demuestra que eliminar los sistemas de partidos conduce a partidos nicos u otros actores con, incluso, peores defectos. El discurso antipartido refuerza tambin el partido empresa o empresa electoral, que tambin es riesgosa por la influencia de los intereses_de grupos econmicos (Valles, 2007).

    3. Los SISTEMAS DE PARTIDOS

    Un sistema de partidos es el resultado de las interacciones entre las distintas unidades partidistas que lo componen. Ms concretamente, es el resultado de las interacciones que surgen de la competencia y de la cooperacin poltico-electoral.

    Como ha sealado Pasquino, un sistema de partidos presupone interaccin horizontal competitiva entre al menos dos partidos, a la par de interdependencia vertical entre varios elementos: electores, partidos, Parlamento, gobierno, o ms generalmente el Estado. Estas interacciones verticales surgen de la central tarea mediadora que los partidos realizan entre la sociedad y el sistema poltico.

    Tambin en estas materias, Maurice Duverger (1988) realiz una contribucin capital. Este aporte fue ms all de la importancia del nmero de partidos y/o de la relacin entre estos y los sistemas electorales. Para -Duverger (1988), los sistemas de partidos se definen por las formas y modalidades de la coexistencia entre los partidos de cada pas. Los elementos centrales que lo caracterizan son la similitud o disparidades de las estructuras de cada partido, el nmero, las dimensiones respectivas, las alianzas, la localizacin geogrfica y la reparticin de los apoyos polticos.

    Destac, adems, el carcter complejo de los sistemas de partidos, que sera el resultado de numerosos factores, tanto propios de cada pas como generales. Dentro de los ltimos seal el sistema electoral, afirmando que afectaba en forma preponderante el nmero, la

    149

  • EDUARDO SAPPIIUO y Cl!CILlA OSORIO

    dimensin, las alianzas y la representacin del sistema partidista. Pese a lo variado de su posicin inicial, el grueso de la clasificacin que construy Duverger se bas en la variable numrica. As distingui entre unipartidismo, bipartidismo y multipartidismo.

    lean Blondel (1972) aporta una definicin de los sistemas de partidos en base a sus partes componentes. En ella no solo considera el nmero, sino que destaca cinco variables:

    1. el nmero de los partidos, que es la variable ms evidente; 2. la fuerza relativa de los partidos; 3. la ideologa de los partidos; 4. la naturaleza de los apoyos; y 5. la estructura interna.

    Como el nmero de los partidos era la variable que ms se tena en cuenta en los anlisis y la ms fcil de medir con exactitud (adems de aparecer estrechamente asociada con la distincin de los regmenes polticos), fue elevada por Blondel (1972) a la categora de variable primaria. Al combinar el nmero con los apoyos electorales en el anlisis de diecinueve sistemas de partidos de lo que llam Zona Atlntica, distingui:

    1. los sistemas de dos partidos; 2. los sistemas de dos partidos y medio; 3. los sistemas de partidos mltiples, con un partido dominante; y 4. los sistemas de partidos mltiples, sin un partido dominante.

    Al considerar la ideologa de los partidos, elabor un espectro que comprenda cinco tipos: partido tradicional, partido conservador, partido autoritario-conservador, partido liberal-demcrata, partido populista y partido autoritario-radical.

    La Palombara y Weiner (1966) clasificaron los sistemas de partidos en competitivos y no competitivos, y al combinar, dentro de la primera categora, la alternancia en el poder con la ideologa de los partidos, clasificaron a los sistemas de partidos competitivos en:

    ISO

    PARTIDOS poLfncos y SISTJ!MAS l!LlI:CTOIlALl!S

    1. partido ideolgico-hegemnico, 2. partido pragmtico-hegemnico, 3. partido ideolgico-turnante, y 4. partido pragmtico-turnante.

    Por ltimo, segn Della Porta (2009), el sistema de partido contiene los siguientes elementos:

    1. nmero de partidos, 2. dimensin electoral (apoyo electoral a cada partido), 3. distancia ideolgica entre los partidos que componen el sistema,

    "4. vnculos recprocos de cooperacin o alianza y vnculos de competicin (dinmicas de cooperacin y competencia),

    5. grado o porcentaje de volatilidad electoral del sistema, y 6. grado o porcentaje de la participacin electoral en el sistema.

    El aporte de Giovanni Sarton Del estudio crtico de los trabajos anteriores, Sartori (1999) ha

    realizado la tipologa de sistemas de partidos ms completa hasta ahora conocida. Su primer aporte fue un anlisis mucho ms refinado de la variable numrica. Con la finalidad de evitar numerosos problemas derivados de la falta de criterios precisos y concordantes para determinar cuntos partidos polticos efectivamente posee un sistema, Sartori propone normas para contar los partidos segn criterios de relevancia, que van incluso' ms all del apoyo poltico-electoral que reciben.

    La primera norma para contar un partido poltico es su capacidad de coalicin. Segn ella, un partido debe ser considerado relevante siempre que es"te se halle en posicin de determinar, a lo largo de un periodo de tiempo, una de las posibles mayoras gubernamentales.

    La segunda norma para contar un partido como relevante es su capacidad de chantaje. As, un partido es relevante cuando posee capacidad de alterar la direccin de la competencia de los partidos orientados hacia el gobierno. A la inversa, partidos que no posean capacidad de coalicin o de chantaje no deben ser contados al momento de analizar un sistema partidista.

    ISI

  • EDUAlIDO SAI'l'lRIO y CECILIA OSORlO PARTIDOS POLtrlCOS y SISTIlMAS ELECTORALES

    De esta forma, el unipartidismo de Duverger se transforma en: sistema de partido nico, hegemnico y predominante. El bipartidismo permanece igual y el multipartidismo se desglosa en limitado, extremo y atomizado.

    Cuadro N" 5, Criterio numirleo (Indico d. frasm.ntlc16n)

    DuverSCr Sartorl

    Uniportidismo - nico Hescmnico . - Preoom;oante

    Bportidismo Bipartidismo ~.,.-

    Multlpartidismo - PluralIll10 limilldo - Plurali.mo extremo Atomi""cln

    Fuente: Elaboraci6n propia en base a Duverger (1972) y Sartori (2009).

    Un segundo aporte en la construccin de Sartod es la identificacin de la variable ideolgica como elemento clave de un sistema de partidos. Es dicha variable, tambin denominada ndice de polarizacin, la que permite conocer no solo la mecnica de un sistema de partidos, sino tambin su dinmica. El ndice de polarizacin denota la magnitud de la distancia ideolgica entre los partidos extremos del sistema.

    El siguiente cuadro muestra la tipologa resultante y la dinmica de funcionamiento:

    Cuadro N" 6,

    npologlA d .tema. d. plrtido. ----~d_;:.;d~------ I~di;de'- "-'--"Di;;-i;;'ic~de

    , ~~.~en~m==ci=n~__~____~po~I=.r=i=",,=c~i~n~__-+~fu=nc~i=on=.=m~i~en~to~~ S.._~ !lO Hegem6no compennvo Unip.rtld~mo

    Hesem6ruco Sin importancia pr.gm'~o:

    HeJ!C!tl601co ideolgico

    Partido pred"";inante Sin imporlllncia ~=:.,~ Bipartidismo Bajo Alternancia

    Sistema competitivo

    Multipartidismo limi mdo

    B '0 al

    Pluralismo mode rada

    Mulripartldismo extremo

    Alto PIUrl!ismo polanzado

    ":.' :"

    Atomi""cin Sin impormncia Dispersi6n

    Fuente: Elaboracin propia en base a Sartori (2009).

    152

    Respecto a esta sistematizacin, Sarton va a proponer una nueva forma de anlisis de los sistemas de partidos:

    1. Sistema de partido nico: es un sistema de partidos no competitivo, propio de un rgimen totalitario o autoritario y donde, de hecho y de derecho, solo existe y solo se permite que exista un partido.

    2. Sistema de partido hegemnico: tambin es un sistema de partido no competitivo, propio de un rgimen totalitario o autoritario, pero donde junto a un partido de "primera cIase existe una periferia de pequeos partidos secundarlos que normalmente estn subordinados completamente a la lgica hegemnica de funcionamiento del sistema. No existe competencia formal ni de facto por el poder poltico. Los partidos satlites son oficialmente tolerados. A est sistema de partidos Sartori lo subdasifica en: partidos hegemnicos-ideolgicos y partidos hegemnicos-pragmticos.

    3. Sistema de partido predominante: es un sistema de partidos competitivo donde las reglas del juego son claras e imparciales. Pese a que la competencia es posible, el sistema carece de competitividad. Ello porque, durante cuatro o cinco elecciones consecutivas, un solo partido consigue un apoyo electoral mayoritario que le permite ejercer el poder en solitario.

    4. Bipartidismo: es un sistema de partidos competitivo en el que existen solo dos partidos relevantes. En el bipartidismo, los dos partidos estn en condiciones por la mayora absoluta del electorado, y uno de los dos partidos obtiene efectivamente la mayora. La alternancia en el poder es una posibilidad creble. El discurso de los partidos polticos se caracteriza por dirigirse en su mensaje hacia el centro del electorado, que es el que finalmente decidir la eleccin. Lo anterior deriva en una competencia centrpeta.

    S. Sistema de pluralismo moderado: es un sistema de partidos competitivo donde el ndice de fragmentacin o nmero de partidos relevantes posee un mnimo de tres partidos, y no supera los cinco. Se gobierna mediante coaliciones y con una

    In

  • EoUAJIDO SAFFlIlIO y CECILIA OsORlO

    dinmica de competencia tambin bipolar, donde las dos coaliciones en liza se disputan un electorado fluctuante que se ubica en el centro. Todos los partidos del sistema estn orientados hacia el gobierno. La dinmica de funcionamiento es centrpeta.

    6. Pluralismo polarizado: tambin es un sistema de partidos competitivo donde existen alrededor de seis o siete partidos poIrticos relevantes y cuyas caractersticas son las siguientes:

    presencia de partidos antisistema, el centro est ocupado, hay oposiciones bilaterales mutuamente excluyentes, los partidos poseen, todos ellos, una mentalidad

    fuertemente ideolgica, el estilo de hacer oposicin desde los extremos es

    irresponsable, la distancia ideolgica es altsima, la poltica se caracteriza por una sobreorerta demaggica, existen fuerzas que no estn orientadas hacia el

    gobierno, y, a consecuencia de lo anterior, la dinmica de futlcio

    na miento del sistema es centrfuga. 7. Sistema de partidos de atomizacin: es un sistema de partidos

    no competitivo propio de comunidades polticas donde este no se encuentra estructurado, por lo cual, el grado de dispersin del poder poltico flucta entre ocho o n" partidos polticos. Es decir, se ha traspasado un umbral dado 10 cual el nmero de partidos polticos no tiene relevancia alguna para reducir

    la fragmentacin.

    154

    PARTIDOS poLlTIcos y SISTEMAS ELl!CTORALES

    El grfico siguiente muestra el modelo simplificado de Sartod:

    Bajo

    Indice de Fragmentacin

    Pequeo

    Multipartidismo moderado

    Multipartidiomo Gtande aegrnentado

    Fuente, Sartori (2009, 347).

    Gr.6co N" 1

    ndice de polarizacin

    Compel:l:llci. =trpeta

    Multipartidismo polarizado

    Alto

    Conviene sealar que el sistema de partidos de pluralismo polarizado ha sido diferenciado por Hans Daalder y Klaus Van Beyme (Bogdanor y Vernon, 1991) en dos subtipos: con partidos de centro capaces de gobernar o sin ellos.

    Es necesario destacar que en un artculo escrito con Giacomo Sani, posterior a la edicin de su libro clsico, Partidos" sistemas de partidos, incluido como apndice en la edicin de 20091, Giovanni Sartori resalt que e.1 ndice de fragmentacin y el ndice de polarizacin no necesariamente evolucionan en la misma direccin; es decir, que la fragmentacin partidaria no provoca per sff un aumento en la distancia ideolgica. Ello ha sido corroborado por las experiencias democrticas de los ltimos veinte aos en muchos pases, donde la disminucin de la distancia ideolgica entre los partidos extremos del sistema ha ido acompaada de un aumento, a veces significativo, en el ndice de fragmentacin, generndose un multipartidismo despolarizado.

    La primera edicin en espaol es de 1980.

    ISS

  • -PARTIDOS POTtcoS y SlSTI!.MA.S I!LI!CTOJIJU.l!SEDUIUlDO SAFI'IRIO y CECILIA OSORlO

    Otro aporte relevante en el anlisis de los sistemas de partidos lo ha realizado Stefano Bartolini (1998) al distinguir, segn la capacidad de los sistemas de partidos de agregar mayoras y coaliciones gubernamentales, en:

    1. alternancia entre dos partidos o coaliciones, 2. semialternancia, 3. recambio perifrico, 4. gran coalicin, y 5. partido mayoritario.

    Por ltimo, Alan Ware (2004) ha analizado los sistemas de partidos segn la fuerza de su implantacin social, criterio que es particularmente significativo en el estudio de los sistemas de partidos latinoamericanos. Esto, a pesar de que Ware ha destacado en especial esta variable en el caso de los sistemas de partido que emergieron en Europa Central y Oriental tras la cada del comunismo.

    4. PARTIDOS POLTICOS EN AM!RlCA LATINA

    Las diferencias en la construccin del Estado y de las institucines entre Amrica Latina y Europa son obvias. Basta pensar en las caractersticas de los partidos de notables originarios: squito de un poltico burgus que quera competir por los votos en el caso europeo, grupo armado seguidor de un caudillo de lanza y a caballo en muchos pases de Amrica Latina.

    Los partidos polticos surgen y se fortalecen cuando la poltica y el acceso a los cargos dependen del voto. Esa es la razn fundamental por la cual los trabajos tericos sobre partidos y sistemas de partidos han tenido como casos de estudio inspiradores a los sistemas polticos europeos y norteamericanos.

    Ello fue sealado expresamente por Sartori cuando, en Partidos y sistemas de partidos (2009), escribi que en Amrica Latina el sistema de partidos no estaba consolidado estructuralmente. Ello explica por qu no se ocupaba de Amrica Latina como regin, citando solo casos aislados, con excepcin de Mxico y Chile.

    I56

    Un sistema de partidos pasa a estar estructurado cuando contiene partidos de masas slidamente arraigados, lo que supone viscosidad (congelacin), en trminos de Lipset y Rokkan. Se aproximaba as al concepto de institucionalizacin, pero de manera ms estricta, y haca referencia al impacto inmovilizador de las estructuras (Sartori, 2009: 290-291 y 297-298). Posteriormente, Sartori hace la distincin entre sistemas electorales fuertes y dbiles y entre sistemas de partidos fuertes y dbiles, segn si este ltimo sistema est estructurado o no estructurado (Sartori, 2004). Un sistema est estructurado cuando el elector no sigue a notables sino que se orienta en funcin de imgenes abstractas del partido o de ideologas, y cuando el sistema de partidos cumple la funcin de canalizacin del electorado.

    De la propia definici6n de partido como mediador entre Estado y sociedad, y de sistema de partidos como resultado de interacciones que surgen de la competencia poltico-electoral, se desprende la crucial importancia que la continuidad del voto tiene en la posibilidad de fortalecimiento del vnculo entre los partidos y la sociedad. Esa continuidad electoral es la que preisamente ha faltado durante la mayor parte del tiempo en casi todos los sistemas polticos de Amrica Latina.

    La tipologa de Sartori orden la casa,., al diferenciar claramente entre sistemas competitivos y no competitivos, agregando, a la variable nmero de partidos o ndice de fragmentacin, la variable ideolgica o ndice de polarizacin. Su trabajo destac tambin la importancia de la fortaleza o debilidad del vnculo entre partidos y sociedad (votantes).

    Durante los aos noventa, estudiando los sistemas de partidos de Amrica Latina, Maiwaring y Scully (1995) sealaron la importancia de la regularidad en la competencia partidista. Cuando dicha regularidad es significativa o slida, los sistemas de partidos tienen un nivel de institucionalizaci6n alto.

    La institucionalizacin supone cumplir cuatro condiciones:

    1. estabilidad en las reglas y en la naturaleza de la competencia, 2. rafces ms o menos estables con la sociedad, 3. legitimidad del proceso electoral y los partidos, y 4. que las organizaciones partidarias tengan importancia.

    X57

    'Y,",i'!fiP;Sffll'i>:'!'~,,~,)(>:3 ?,,,.' !;, __5.jlI,'t.li&id' z.3L. 12# ~""'"- JC \:AMb%fMt.JI'i@ ]jIj!."lJ_1 ~ J,. ,- 7 .,';:,i)'u' A@;GPfkt,;" ',,;' "blK", A;iR 4Ji!lPtH. ,,!fu' ,.",-" ,dN%.....) JtM%M .,.;,:J A 2" ' .' e)$Z$b .{. 111. ,Mi M .z

  • EDUI

  • EDUARDO SAFFIRIO y CI!CILlA OSOIUO

    Cabe sealar que la institucionalizacin de los partidos en Amrica Latina, como en muchas otras regiones, es severamente dificultada por fenmenos provocados por la globalizacin econmica que impiden la competencia electoral en torno a programas econmico-sociales alternativos. Ello colabora en difuminar todava ms a las identidades polticas, con lo cual la capacidad de encuadrar establemente el voto

    se debilita. Pese a todo lo dicho, el balance de la tercera ola democrtica en

    Amrica Latina es positivo. El ao 2007 se aceptaban como pases con democracias plenas a Mxico, Costa Rica, Panam, Per, Chile, Brasil, Argentina y Uruguay. Otros nueve pases caan en la categora de democracias defectuosas, segn Leonardo Morlino (2009). Por otro lado, el solo hecho de que se discuta fuertemente en torno a la calidad de las democracias en la regin supone que ese rgimen politico ya existe.

    Hoy observamos que los sistemas de partidos institucionalizados en Amrica Latina han aumentado en relacin al ao 1995, cuando Maiwaring y Scully redactaron su trabajo. Es cierto que el sistema bipartidista venezolano implosion, pero Mxico evolucion desde un sistema de partido hegemnico hacia la competencia electoral y el pluralismo; Brasil, Argentina y Per consolidaron sus sistemas de partidos; mientras que Uruguay, Chile, Costa Rica y Colombia los mantuvieron. En el resto de Centro Amrica y en Paraguay, Ecuador y Bolivia las posibilidades de institucionalizar los siste'inas de partidos

    permanecen abiertas. Ms all de las tentaciones neopopulistas, la poltica ejercida

    travs de los partidos no tendr alternativa en Amrica Latina se mantengan instituciones polticas basadas en la legitimidad crtica. Como ha demostrado recientemente Gianfranco Pasnninrl (2009), los partidos sobreviven y no son fungibles, pues realizan socialmente tiles que ningn otro actor poltico puede llevar a

    Algunas de ellas son:

    la presentacin de candidatos a cargos pblicos, constituyen un lugar de y son insustituibles para la

    ci6n poltica, formulan programas que son la base de la poltica pblica,

    l60

    PAR.TlDOS POTlGOS y SlSTllMAS ELl!CTORALl!S

    obtienen y detentan cargos de gobierno y gobiernan con el objetivo de ser reelectos, con lo cual viabilizan el gobierno responsable y que responde.

    Tontando en cuenta la responsabilidad que tienen ante las funciones antes descritas, el desafo que enftentan los partidos es enorme. Siguen siendo actores centrales pero hoy cuentan con baja confianza y legitimidad por parte de la ciudadana. Asimismo, existe m ucho desconocimiento acerca de su rol, cosa que ellos deben contribuir a revertir. En parte porque tambin ha sido su responsabilidad. Un discurso redoccionista acerca de la poltica, que ha influido en la sensacin de que estos actores son prescindibles para la democracia, ha sido propiciado por algunos partidos de la regin.

    Diversas acciones han sido implementadas por algunos pases en Amrica Latina en busca de establecer mayor transparencia, institucio

    procesos y establecer mayor control interno (FLACSO, 2007). reformas se han centrado en mejorar cuatro aspectos: a) emplear

    i mecanismos especficos de seleccin de candidatos de naturaleza comb) regular las ca(actersticas que deben cumplir los candidatos

    el proceso mismo; c) establecer el papel del rgano electoral respecto la organizacin, financiamiento y la administracin de los mecanismo

    estipulados; y d) fijar cul ser la instancia de resolucin de conflictos (FLACSO, 2007).

    Junto con lo anterior, es necesario propiciar la renovacin generay una mayor equidad de gnero, a travs de medidas efectivas

    aseguren mayor presencia femenina en cargos directivos y como a cargos de representaci6n popular. En algunos pases de la

    se han plicado medidas de este tipo y se observan resultados ncrC5antes (Argentina, Mxico y Per) (Ros, 2007).

    Existen variados mtodos o instrumentos a travs de los cuales, a lo de la historia, los sistemas polticos proceden a determinar quines

    los cargos foentales de poder, los cargos pblicos. Entre ellos se

    l6l

  • Eo\JAl!.OO SAl'PlIl.lO y CECILIA 0501\10

    puede mencionar: la herencia, la conquista violenta, la compra del cargo, la seleccin meritocrtica, la designaci6n, la cooptacin, el sorteO y la eleccin.

    En los sistemas politicos contemporneos, la elecclnde los cargos es el mecanismo que ha ganado ms terreno. La elecci6n del cargo institucionaliza la va pacfica de acceso al poder a travs de modalidades

    formales, preestablecidas Y recurrentes. Las elecciones son hoy el instrumento para seleccionar a los ocu

    pantes de cargos pblicos, tanto en las asambleas u 6rganos colegiados, como aquellos compuestos por una sola autoridad personal. Sobre todo en las democracias contemporneas, las elecciones son el ms importante instrumento para la representacin y el control popular

    del poder poltico. Lo anterior no significa que actualmente solo se realicen elecciones

    polticas en las democracias, tambin recurren a eUas la mayora de las autocracias. Sin embargo, las diferencias, segn sea el tipo de rgimen que las convoca, son sustantivas. Asr, las elecciones democrticas

    poseen:

    1. Competencia: supone ofertas pluralistas. 2. Libertad: tanto del votante como del candidato. 3. Relevancia: alto grado de incidencia en las decisiones que se

    adoptan en el sistema politico.

    Por el contrario, en las autocracias las elecciones no recaen sobre opciones, no son ms que elecciones de fachada. Otra diferencia est dada por las caractersticas del contexto o del marco en el cual tienen lugar las elecciones, pues el proceso electoral est conformado por

    varios elementos:

    1. tiempo y caractersticas de la convocatoria; 2. determinacin del electorado; 3. determinacin de las candidaturas Y sus tipos; y 4. campaa electoral, en especial su financiamient.o y las posi

    bilidades de acceso al votante a travs de organizaciones Y medios de comunicacin social. Este ltimo elemento posee

    162.

    PA1\TIDOS POTICOS y SISTEMAS ELECTOltALI!S

    ~reciente importancia en la poltica contempornea, dado los altos costos de las campaas y la mediatizaci6n de la politiea.

    A) DEFINICIN y Bu!MENTOS DEL SISTEMA ELBCTORAL

    El sistema electoral es la institucin o el conjunto de mecanismos a travs de los cuales el voto de las personas se transforma en cargos pblicos y de gobierno. Segn David Butler (1984: 641), es el medio de transformar la voluntad popular en una asamblea elegida". En trminos ms generales es el medio de asignar cargos pblicos, sean unipersonales o de rganos colegiados, a candidatos y partidos polticos.

    En sntesis, el sistema electoral es un procedimiento que posibilita transformar votos en cargos y/o escaos.

    Los sistemas electorales se rigen por principios diferentes, los cuales corresponden tanto a f6rmulas de decisi6n como de representacin. Dentro de las f6rmulas de representacin se distinguen dos subtipos: el principio de reprI!Sentacin mayoritario y el principio de representacin proporcional, los cuales obedecen a objetivos distintos. En el principio de representacin mayoritario, el objetivo buscado es concentrar votos y escaos en un partido o coalicin de partidos, a fin de facilitar la eficacia decisional. En el principio de reprI!Sentaci6n proporcional, en cambio, el objetivo prioritario es reproducu; lo ms congruentemente posible en el cuerpo colegiado que se elige, el porcentaje de votos conseguido por cada partido en el electorado.

    Conviene destacar que dichos principios no son los nicos facto~es que inciden en los efectos polticos que pueden generar los sistemas electorales. Ello se debe a que los sistemas electorales deben ser entendidos como estructuras complejas compuestas de diferentes elementos, que a su vez pueden ser combinados e incluso manipulados de diversas maneras. Lo anterior repercute naturalmente en los efectos. Ello significa que el impacto en los sistemas electorales no puede ser comprendido bajo una lgica monocausal, exclusiva del principio de decisin.

    Elementos del sistema electoral La zona electoral. Es decir, la configuracin del distrito o la cir

    cunscripcin. Dentro de la zona electoral existen tres subtipos: distrito nico o nacional, distrito nacional adicional y distritos varios. Estos

    16)

    http:SAl'PlIl.lOhttp:Eo\JAl!.OO
  • EDUARDO SAPPllUO y CECILIA OSOluO --- PARTlDOS POLITICOS y SISTI!MAS llU!CTORAU!S

    l' ltimos pueden ser, a su vez, de dos tipos: fijados artificialmente o fijados segn la divisin poltico-administrativa del pas.

    En algunos sistemas polticos se exige una relacin entre la poblacin y el escao, limitando las posibilidades en su fijacin. La relacin entre el nmero de electores y el nmero de escaos a elegir no debe ser confundida con el tamao del distrito. Este ltimo consiste en el nmero de cargos a elegir en cada zona electoral. Dentro de l se distinguen los distritos uninominales, binominales y plurinominales. El nmero de cargos a elegir tiene impacto significativo en la proporcionalidad o desproporcionalidad del sistema electoral de que se trate.

    Formas de candidaturas. Las formas de presentacin de las candidaturas tienen fuerte incidencia en el mayor o menor grado de libertad del votante al momento de seleccionar la candidatura. La presentacin de las candidaturas admite una primera divisin entre las candidaturas unipersonales y la candidatura de lista. En el caso de estas ltimas se distingue entre:

    1. Cerradas y bloqueadas, donde el elector solo se pronuncia por la lista, sin opcin de elegir al candidato al interior de esta. Por ello el orden interno de la lista lo determina el partido poltico respectivo.

    2. Cerradas y no bloqueadas, aqu la libertad del votante aumenta pues opta por un candidato dentro de la lista:

    Reglas de adjudicacin de escaos. Las reglas o mtodos de adjudicacin de escaos determinan las pautas para transformar los votos en cargos pblicos. En los sistemas electorales cuyo objetivo es concentrar los votos en los escaos, la regla puede ser la mayora absoluta o solo la relativa (pluralty).

    En los sistemas electorales cuyo objetivo es el logro de la ma congruencia entre votos y escaos, la proporcionalidad ser conseguida a travs de diversos mtodos de cmputos. Los fundamentales son el procedimiento del divisor y el procedimiento cociente electoral. El primero de ellos consigue, en un solo recuento, reparto completo de todos los cargos a distribuir. Si se ocupa el mtodo hay que recurrir a ms de un reparto para adjudicar los

    164

    Barreras legales. La barrera legal implica que la posibilidad de obtencin del escalio depende del logro u obtencin de un mnimo de votos de cada partido en competencia. Las barreras legales estn determinadas en sus porcentajes, que empricamente varan de un sistema poltico a otro por medio de notrnas jurdicas de rango legal o constitucional. Si ese mInimo porcentual no es conseguido, el partido no ingresa al Parlamento, pierde el o los escaos. Las barreras legales buscan reducir el nmero de partidos con representacin parlamentaria. El porcentaje mnimo requerido puede ser exigido en el nivel nacional o en el nivel distrita!.

    Los elementos, su combinacin y eventual manipulacin Distribucin de las circunscripciones. Este elemento constituye

    uno de los aspectos polticos ms difciles de establecer al momento de elaborar y evaluar un sistema electoral. Normalmente la crtica al sistema electoral parte de'!a distribucin de las circunscripciones electorales. Por ejemplo, la determin~cin de las circunscripciones sin considerar los cambios demogrficos y/o el peso relativo de la poblacin en los distritos urbanos o rurales. De ello puede depender la cantidad

    votos requeridos para obtener un escao. As, la variacin de la relacin poblacin I escalios permite manipular la representaci6n poltica a favor de ciertos partidos. Un mtodo para contrarrestar dicha desigualdad en la representacin corresponde a la aplicacin de la cifra repartidora, lo cual permite administrar una misma frmula de clculo para distribuir circunscripciones.

    Salamandras electorales (gerrymandering). Otra forma de malos efectos polticos de los sistemas electorales corresponde

    establecer circunscripciones polticas en funcin de arreglos pol-I partidarios, que buscan ya sea asegurar una victoria poltica"

    un escao seguro, o menguar la representacin poltica de aetermInadas fuerzas polticas en el Parlamento. En trminos de lo

    por Dieter Nohlen (1982), se hace un uso deliberado de la trihnci6n geogrfica de los simpatizantes de los partidos polticos.

    dos estrategias de salamandra electoral, que consisten en: a) electorados polticamente heterogneos en una misma zona y b) crear baluartes o bastiones electorales con electorados

    polticamente homogneos.

    165

  • PAII.TIOOS POLITICOS y SiSTBMAS BLBCTOIlALBSEOUAllIlO SAPPllI.lO y ClIClUA OSOIl.lO

    Tamao de las circunscripciones electorales y grado de proporcionalidad. Por tamao de las circunscripciones se debe entender la cantidad de escaos que se van a elegir. As, el nmero de escaos a elegir en la zona electoral se puede constituir en un factor clave de los

    efectos de los sistemas electorales. Existen dos grandes subtipos:

    1. Uninominales: la atribucin del nico escao en disputa en la respectiva zona electoral se decide sobre la frmula mayoritaria

    de pluralidad o mayora relativa. 2. Plurinominales: se aplican frmulas de decisin proporcionales

    en distritos de tamao pequeo, mediano o grande.

    Una circunscripcin de tamao pequeo elige entre dos y cinco escaos; una mediana, entre seis y diez escaos; y una grande, ms de

    diez escaos. En relacin al tamao de las circunscripciones, es fundamental

    considerar la regla planteada por Rae y Nohlen (1982: 641): ~Amenor tamao de la circunscripcin electoral, menor el grado de proporcionalidad y por lo tanto menor la posibilidad de obtener escaos para los partidos pequeos. De manera inversa, ~el grado de proporcionalidad de un sistema electoral aumenta si se incrementa el tamao de las circunscripciones (Nohlen, 1982: 641).

    De esta forma,los efectos de un sistema electoral pueden ser modificados dentro de la misma frmula de representacin proporcional, inclusive es posible que la simple variacin del tamao de las circunscripciones cambie el tipo de sistema electoral y el objetivo proclamado

    por el principio de representacin. Barreras legales de representacin. Ellas existen cuando los paro:

    tidos tienen que obtener un nmero mnimo, legalmente determina. do, de votos para participar en la adjudicacin de escaos. Existen barreras de tipo nacional, regional y a nivel de circunscripcin. El rango de votacin mnima exigida flucta entre el 1% y el 12.5%.

    de los sufragios. Las barreras legales tienen por objeto excluir a los partidos

    ticos pequeos y promover la concentracin del sistema de

    166

    Dependiendo del contexto, los efectos pueden ser diferentes. Un ejemplo es la Repblica Federal de Alemania, donde la barrera legal corresponde a un 5%. Ella promueve no solo la concentracin a favor de partidos mayores, sino que la reduccin de la posibilidad de los partidos menores de lograr escaos y de afianzarse polticamente. Por otro lado, en Israel la barrera legal es muy baja, por lo que su efecto en la estructura muItipartidista es mnimo.

    Es preciso destacar que el tamao de la circunscripcin y la existencia de barreras electorales son los elementos de mayor impacto en el grado de desproporcionalidad del sistema electoral.

    Bl CRITERIOS DE EVALUACIN DE LOS SISTEMAS ELECTORALES

    Dieter Nohlen (1982) establece una forma para evaluar los sistemas electorales en base a tres criterios especficos:

    1. Representacin: es decir, el grado en que representan los diferentes grupos sociales en el Parlamento y el logro de una representaci6n justa. Esto ltimo implica una relaci6n equilibrada entre votos y escaos.

    2. Concentraci6n: este criterio trata de la agregacin de los intereses sociales y opiniones polticas, de manera tal que de eIJas resulten decisiones polticas y que la comunidad posea capacidad de accin. El objetivo buscado es facilitar la formacin de la voluntad poltica. La concentracin debe ser entendida como la reduccin del nmero de partidos y tambin como la formacin de una mayora partidaria o de coalicin de carcter establ en el Parlamento.

    3. Participaci6n: consiste en la posibilidad de expresar la voluntad poUtica por parte del elector, optimizando la identificacin entre este y el elegido.

    En base a los criterios anteriores es posible establecer relaciones evaluacin de los sistemas electorales:

    167

    http:OSOIl.lOhttp:SAPPllI.lO
  • EDUARDO SuPllUO y CI!.ClLlA OSORlO

    , , Cuadro N" 7

    8".._ c1e.:lOmI Participaci6n

    Positiva

    COII

  • EDUARDO SAI'PIRIO y CECILIA OSaRIo

    .:; . , mtodos de adjudicacin de escaos mayoritarios potencian tambin

    dicha desproporcionalidad. Debido a todo lo anterior, Rae (2005) postula la tendencia de Iqs

    sistemas electorales a producir mayoeras manufacturadas como consecuencia de los efectos desproporcionales que van -en beneficio de la representacin parlamentaria de los partidos ms votados.

    En 1982, Williams Riker realiz un estudio para revisar la vigencia de los planteamientos formulados por Duverger en 1957. De las tres leyes planteadas por el profesor francs, Riker sostuvo la plena vigencia de aquella que seala que el sistema electoral de plurality o mayora relativa genera sistemas de partidos bipartidistas. El planteamiento de Riker es ms radical que lo propuesto por Duverger. A saber: Los sistemas electorales de pluralidad de mayora relativa (sin ballotage) hacen emerger la competencia bipartidista y la mantienen~ (Riker, 1983: 150). Sin embargo, el autor consider dos excepciones a lo anterior: la primera es si terceros partidos a nivel nacional son sostenidamente uno de los dos partidos locales, debido a la presencia de los llamados baluartes electorales a nivel distrital; la segunda excepcin es que

    produjera en la eleccin un ganador Condorcet. Desde el ao 1986 en adelante, Giovanni Sartori ha participado

    en este debate. Dicho autor plantea una reformulacin de las leyes Duverger otorgndoles solo un carcter tendencial y no determinista,: Sus conclusiones se pueden resumir en dos leyes de tendncia:

    1. Ley de tendencia 1: el sistema electoral mayoritario un formato bipartidista y, al contrario, obstaculiza el

    partidismo. 2. Ley de tendencia 2: los sistemas proporcionales facilitan

    multipartidismo.

    El anlisis de Sartori cruza dos variables: el sistema de y el sistema electoral, tal cual como se expresa en el siguiente

    170

    PARTIDOS POL/TICOS y SISTEMAS ELECTORALES

    Cuadro N" 9

    I-"r Sistema de partido

    !!~ _

    Siall:ma electoral

    Fuerte Dbil

    F~_ n. Electo bloqueo1. Efecto mluctor r..,qui1ibrallte __"__~"tru~a~?L ___ _______,_"'. __o,-_._"~-~-.. Dbil

    nI. Efecto reductor Slnde

  • EDUARDO !lAPPlRIO y CECiLIA OSaRIO , . I

    1. Las condiciones constitutivas de los sistemas electorales determinarn los efectos de estos. Debe quedar daro que los sistemas electorales tienen diferentes componentes, los cuales pueden ser modificados y manipulados para alcanzar un determinado objetivo poltico. As, la decisin sobre los sistemas electorales es poltica.

    2. La relacin entre sistemas electorales y sistemas de partidos debe entenderse como una relacin interdependiente, vale decir, no es lineal sino que circular. No es unidireccional sino que multidireccional.

    3. Dicha relacin debe ser comprendida considerando factores institucionales y no institucionales. Es decir, se requiere de un enfoque contextual de la relacin. As, variables como las geogrficas, regionales, de relaciones sociopolticas y econmicas permitirn comprender la relacin en su conjunto.

    4. Los sistemas electorales mayoritarios no producen bipartidismos, as como los sistemas electorales proporcionales no producen multipartidismos sino que estos sistemas electorales se erigen como faci1itadores de distintos sistemas de partidos en grados variables. Los sistemas electorales son solo un factor ms dentro de un fenmeno multicausal.

    S. Entender a los sistemas electorales como parte de una relacin lineal configuradora de los sistemas de partidos es errado.Tambin los distintos tipos de sistemas de partidos influyen en el sistema electoral que se adopta. Difcilmente en sistemas de partidos multipartidistas se adoptarn sistemas electorales mayoritarios.

    6. Pata efectos explicativos de la multiplicidad de casos desviados se puede observar el siguiente cuadro, donde se realiza un cruce en funcin de dos ejes: sistemas de partidos (con el continuo nicolt-atomizado) Y sistemas electorales (representacin proporcional y mayoritaria).

    7. Como se ha dicho, el cuadro evidencia mltiples casos desviados. Ello permite refutar empricamente el carcter de ley de muchos de los argumentos esgrimidos a lo largo del debate de medio siglo.

    I7':L

    PARTIDOS poLlTICOS y SISTI!M.IIlI I!.Ll!CTORALES

    Grifico N" 2

    Partido nico

    lo DD

    ---. JM AUSTIUA J (

    RFA LUX R A STRALIA

    5

    "P. Prop. Rep. May. (

    j::ANP <

    ---~

    S

    FD , '!AL S AljEM (

    N IS :HILR'73 E(2 'pblica) ALEM (Weimor) Atomizado

    Fuente: NohJen (1994:3561.

    En sus ltimas obras, Dieter Nohlen ha acentuado la importancia de analizar los presuntos efectos del sistema electoral en el sistema de partidos comparando sistemas electorales empricos, a fin de ir ms all de la confrontacin abstracta de los objetivos que tericamente buscan los principios de representacin mayoritaria y proporcional. A juicio del profesor alemn esta es la nica manera posible de hacer generalizaciones cientficas sostenibles (Nohlen, 2006: 122).

    En ese sentido, ha tomado fuerza un planteamiento que invierte la direccin de la relacin entre sistemas de partidos y sistemas electorales: la influencia ya no ira desde el primero hacia el segundo, sino que sera

    Por ejemplo, los sistemas de partidos multipartidistas llevaran la adopcin de sistemas electorales proporcionales. Por eso, se ha

    de las leyes de Duverger cabeza abajo (Colomer,2004). El debate anterior da cuenta de los llamados efectos directos de los

    electorales en los sistemas de partidos. Sin embargo, y cerrando captulo, tambin es importante sealar que un sistema electoral

    In

  • EDUAIlDO SAFfllUO y ClICILIA OSORIO

    r l r... puede tener un efecto indirecto, va su capacidad para condicionar el voto del elector, fomentando un voto estratgico o, lo que es lo mismo, impidiendo un voto sincero. La literatura parece estar de acuerdo en que las frmulas de asignacin mayoritarias, los distritos pequeos y la ausencia de baluartes electorales, facilitan el voto estratgico o til, dificultando la emisin del voto sincero u expresivo.

    BIBUOGRAFfA

    Alcntara Sez, M. (2003). Las tipologas y funciones de los partidos polticos. En M. Mella (Ed.), Curso de partidos pollticos (pp. 37-S8). Madrid:

    AKAL. Bartolini, S. (1998). Partidos y sistemas de partidos. En G. Pasquino et al,

    Manual de ciencia polltica (pp. 217-264). Madrid: Alianza Universidad. Blondel, J. (1972). Introducci6n al estudio comparativo de los ""l1i""""""

    Madrid: Ediciones Revista de Occidente. Bogdanol, V. (1991). Enciclopedia de las instituciones pollticas. Madrid:

    Alianza Editorial. Butler, D. (1984). Sistemas electorales. Estudios Pblicos, 13. Colomer,J. M. (2004). C6mo votamos. Los sistemas elsctorales del

    Barcelona: Gedisa. Colomel,]. M. (2009). Ciencia de la po/{tica. Barcelona: Miel. Della Porta, D. (2009). 1Partiti Politici. Bolonia: II Mulino. Duvergel, M. (1972). Los partidos po/{ticos. Mxico D.F.: Fondo de

    Econ6mica. Duverger, M. (1988). Los partidos pollticos. Mxico D.F.: Fondo de

    Econ6mica. FLACSO (2007). Funcionamiento interno de los partidos polltico en Chile.

    diagn6stico. Programa de gobernabilidad. Santiago de Chile: Friedrich Ebert Stiftung.

    Hernndez Bravo,]. (2003). La delimitacin del concepto de partido Las teoras sobre el origen y evoluci6n de los partidos. En Mrquez (Ed.), Curso de partidos po/(ticos (pp. 13-3S). Madrid:

    Katz, R. & Crotty, W. (2006). Handbook of Party Politics. London: Publications.

    Katz, R. y Mair, P. (2004). Fl partido cartel. La transfortnaci6n de los de partidos y de la democracia de partidos. Zona Abierta,

    9-42. Kirchheimer, O. (1980). Fl camino hacia el partido de todo el mundo. En

    174

    PAllTIDOS pOLlncos y SISTllMAS l!LECTORALES

    Lenk YS. Neumann, Teor(a y sociologfa crftica de los partidos po/(ticos. Barcelona: Anagrama.

    Koole, R. (2004). Partidos de cuadros, catch-allo cartel? El concepto de partido cartel. Zona Abierta, 108-109, 43-6S.

    La Palombara,J. y Myron, W. (1966). Poltical Parties and Poltical Developmento en Studies in Poltical Development. Princeton University Press.

    Lijphart, A. (199S). Sistemas electorales y sistemas de partidos: un estudio de veintisiete democracias, 1945-1990. Madrid: Centro de Estudios Constitucionales.

    Lijphart, A. (2000). Modelos de democracia. Barcelona: Ariel. Lipset, S. M. y Stein, R. (1992). Divisin, sistemu de partidos y alineamientos

    electorales. En A. Batlle (Comp.), Diez textos bsicos de ciencia pol(tica (pp. 231-273). Barcelona: Ariel.

    ;Mamwaring, S. y Scully, T. (199S). La construccin de instituciones democrticas. Santiago de Chile: CIEPLAN. Mrquez,M. (Ed.) (2003). Curso departidos po/{ticos. Madrid:AKAL.

    R. (2008). Los partidos po/(ticos. Buenos Aires: Amorrortu. 1. (2009). Democracia y democratizaciones. Madrid: ClS. D. (1994). Sistemas electorales y partidos po/{ticos. Mxico D.F.:

    Fondo de Cultura Econmica. D. (1995). Elecciones y sistemas electoralss. Caracas: Nueva Sociedad. D. (1981). SistemllS electorales del mundo. Madrid: Centro de Estu

    dios Constitucionales. D. (1992). Sistemas electorales y gobernabilidad. Barcelona: Institut

    de Citllncies PoUtiques i Socials. (2006). El institucionalismo contextualizado. Mxico D.F.: Porra.

    A. (1990). Modelos de partido: organizaci6n y poder en los po/{ticos. Madrid: Alianza Editorial.

    G. (2009). Nuovo Corso di scienza politica. Bologna: II Mulino. M. (Coord.) (1994). Fundamentos de ciencia po/(tica. Madrid: Mac

    Graw-HiIl. D. W. (200S). La: ley electoral como un instrumento politico. Zona Abierta,l10-111. Wi. (1983). El sistema bipartidista y la ley de Duverger. Un ensayo sobre la historia de la cienda poltica. Revista de Ciencia Po/{tica, Vol. S, 1.

    M. y Villar, A. (2005). Cuotas de gnero: "democracia y representacin. Santiago de Chile: FLACSO.

    G. (1999). Elementos de teorfa poltica. Madrid: Alianza Editorial. G. (2004). Elementos de teorla poltica. Madrid: Alianza Editorial. G. (2009). Partidos y sistemas de partidos. Madrid: Alianza Editorial.

    ]. M. (1997). Sistemas electoralss y gobierno representativo. Barcelona: Ariel.

    M. (2007). Ciencia po/{tica. Una introducci6n. Barcelona: Arie!.

    175