Paisajes funcionales

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DOCUMENTOS DE TRABAJO PARA LA CIENCIA DE LA CONSERVACION PAISAJES FUNCIONALES y la conservación de la bioversidad # 1 Karen Poiani Programa de ecologia de paisajes Brian Richter Inciativa agua dulce División de ciencias de la conservación Traducido al español por: Martha Martínez

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1Paisajes Funcionales y la Conservación de la BiodiversidadDOCUMENTOS DE TRABAJO PARA LA CIENCIA DE LA CONSERVACION

PAISAJESFUNCIONALESy la conservación de la bioversidad

# 1

Karen PoianiPrograma de ecologia de paisajes

Brian RichterInciativa agua dulce

División de ciencias de la conservación

Traducido al español por: Martha Martínez

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2 Paisajes Funcionales y la Conservación de la Biodiversidad

1Las comunidades ecológicas incluyen asociaciones terrestres y alianzas acuáticas.

2Los sistemas ecológicos son agrupaciones o complejos dinámicos de comunidades vegetales

y/o animales que (1) coexisten en el paisaje; (2) están ligados mediante procesos ecológicos similares(p.ej., fuego, hidrología), rasgos ambientales subyacentes (p. ej., suelos, geología) o gradientesambientales (p.ej., altitud); y (3) forman una unidad robusta, cohesiva y distinta. Los sistemas puedenser terrestres o acuáticos.

3Las hectáreas, órdenes de río y kilómetros de río son estimaciones preliminares y deben utilizarse como

guía general.

Los métodos para la conservación de la biodiversidad han cambiado

dramáticamente durante las últimas cinco décadas. Estos cambios proceden

en parte de los significativos avances en la ciencia de la ecología. En el pasado,

los sistemas ecológicos se consideraban estáticos y predecibles y la biodiversidad se

concebía en términos de la riqueza y rareza de especies. El enfoque conservacionista

inicial de The Nature Conservancy reflejaba estos conceptos, evolucionando desde el

oportunismo durante sus años formativos en la década 1950-60, hasta la adquisición

estratégica de reservas naturales para especies y comunidades raras durante 1970-80.

No obstante, debido a la naturaleza compleja y dinámica de los sistemas naturales, el

pensamiento científico actual resalta la necesidad de conservar la biodiversidad en

escalas múltiples dentro de un ecosistema o contexto paisajístico junto con los procesos

ecológicos que la sustentan.

Con tales cambios en las bases científicas de la conservación no es sorprendente

que Conservación por Diseño extienda dramáticamente la visión y alcance del trabajo de

The Nature Conservancy. En este documento hacemos un resumen del marco concep-

tual que está surgiendo como resultado de esta nueva visión. Aunque es un borrador,

este marco guiará nuestra evolución desde una conservación basada en rareza hasta la

conservación basada en conceptos a nivel de ecosistemas y paisajes.

Conservación de la biodiversidad: Selección de la escala correctaDesde hace tiempo los científicos y profesionales de la conservación han reconocido

que la biodiversidad existe en muchos niveles de organización biológica (genes, especies,

comunidades, ecosistemas y paisajes). Además, la biodiversidad se distribuye en una

variedad de escalas geográficas (p.ej., de metros cuadrados a miles de hectáreas). Los

niveles de organización biológica en los cuales The Nature Conservancy actualmente

enfoca sus esfuerzos de conservación—especies, comunidades ecológicas1 y sistemas

ecológicos2—pueden clasificarse con base en su escala y patrón de distribución espacial.

Entender estas relaciones es clave para la conservación y estrategias de manejo efectivas.

La figura 1 ilustra cuatro escalas geográficas—local, intermedia, gruesa y regional—

en las cuales se localizan las poblaciones de especies, las comunidades y los sistemas

ecológicos. Cada escala corresponde a un rango característico de área, orden de río o

kilómetros de longitud de un río3.

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3Paisajes Funcionales y la Conservación de la Biodiversidad

4El esquema de matriz de parches para comunidades terrestres fue desarrollado por un equipo deecólogos de TNC y de los programas del Patrimonio Natural encabezado por Mark Anderson durantela planificación para la conservación de la ecorregión del norte de los Apalaches.

5Para mayor información sobre la clasificación de comunidades acuáticas consulte "Diseño de una

Geografía de la Esperanza", Actualización # 6—Incluyendo ecosistemas y especies focales acuáticos en losportafolios ecorregionales: guía para los equipos de planificación ecorregional.

1. Escala local

Las comunidades y sistemas ecológicos de parche pequeño4 son de tamaño reducido y están

bien definidos (p.ej., pantanos, ciénagas, riscos, claros de bosque) y ocurren como

resultado de factores físicos y regímenes ambientales específicos (como filtraciones de

agua y salientes rocosas). Las especies de escala local terrestres son aquéllas de movimiento

y dispersión limitados cuya distribución está restringida a una sóla comunidad o sistema

ecológico. Muchas especies raras pertenecen a esta categoría, particularmente de

invertebrados y plantas. Las localizaciones de comunidades y sistemas ecológicos de

parche pequeño y las poblaciones de especies de escala local generalmente se encuentran

en áreas menores de apróximadamente 810 hectáreas. Los macrohábitats acuáticos son

segmentos de riachuelos o ríos, lagos pequeños individuales o partes de lagos más

grandes. Los macrohábitats son relativamente homogéneos en lo que respecta al régimen

hidrológico, morfología, química y temperatura y potencialmente contienen

comunidades biológicas únicas5 . Los macrohábitats fluviales por lo general consisten

de menos de 16 kilómetros de río y los macrohábitats lacustres usualmente miden

menos de aproximadamente 100 hectáreas. Las especies de escala local acuáticas son

también aquéllas con habilidad de dispersión limitada o necesidades de hábitat

específicas que restringen sus poblaciones a macrohábitats específicos. Algunos ejemplos

incluyen el pez Cyprinodon macularius, insectos acuáticos del orden Ephemeroptera e

insectos de la familia Gerridae (mulitas de agua).

2. Escala intermedia

Las comunidades y sistemas ecológicos de parche grande terrestres están definidos por factores

físicos y regímenes ambientales únicos y son mayores que los de parche pequeño.

Algunas comunidades y sistemas ecológicos de parche grande, tales como las marismas

costeras, son relativamente uniformes en estructura y composición y están definidos

por factores físicos estables (p.ej., posición topográfica baja y mareas predecibles). Otros,

tales como los mosaicos ribereños, se definen por regímenes dinámicos de disturbio

(p.ej., inundación por ríos y transporte de arena o grava). Estos últimos son tipos más

variables en su estructura y composición interna y con frecuencia están constituidos

por diferentes clases de parches que se desplazan y reacomodan a través del tiempo y el

espacio. Las especies de escala intermedia terrestres son aquéllas que dependen de un

sólo parche de varios tipos de hábitats distintos. Los anfibios que utilizan hábitats de

humedales y tierras altas son ejemplos de tales especies. La biodiversidad terrestre de

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4 Paisajes Funcionales y la Conservación de la Biodiversidad

FIGURA 1. Biodiversidad y la Escala Geográfica

Esca

la g

eográ

fica

Comunidades y sistemas de matriz

Comunidades y sistemas de parcela grande

Comunidades y sistemas de

parcela pequeña

Gruesa8.010–405.000 hectáreas

Intermedia405–20.200 hectáreas

Local< 810 hectáreas

Esca

la g

eográ

fica

Sistemas de ríos medianos agrandes y sistemas lacustres

grandes

Sistemas de riachuelos y sistemas lacustres

medianos

Macrohábitatsacuáticos

Gruesasistemas de ríos del 4°orden o mayoreslagos > 1.000 hectáreas

Intermediariachuelos del orden 1° a 3° lagos de 100–1.000 hectáreas

Local< 16 kilómetros de río, lagos <100 hectáreas

OBJETOS DE CONSERVACION TERRESTRES DE FILTRO GRUESO OBJETOS DE CONSERVACION ACUATICOS DE FILTRO GRUESO

Regional> 405.000 hectáreas,migran largas distancias

Gruesa8.010–405.000 hectáreas,sistemas de rios del 4° orden y mayores, sistemas lacrustes grandes

Especies de escala regional

Especies de escala gruesa

Especies de escala Intermedia

Especies de escala

local

405–20.200 hectáreas,sistemas de riachuelos del orden 1° a 3°, sistemas lacustres medianos

Intermedia

OBJETOS DE CONSERVACION A NIVEL DE ESPECIE

Esca

la g

eográ

fica

< 810 hectáreas16 kilómetros de río,<

Local

lagos < 100 hectáreas

escala intermedia se localiza típicamente en áreas de 405 a 20.200 hectáreas6. Los objetos

de conservación (es decir, aquellas especies, comunidades o sistemas que deseamos

conservar) acuáticos de escala intermedia, tales como los sistemas de riachuelos y sistemas

lacustres medianos están compuestos de múltiples macrohábitats. Por ejemplo, un sistema

de drenaje de cabecera de río abarca arroyos del primer al tercer orden, riachuelos,

humedales y lagos pequeños de cabecera. Otro ejemplo de un sistema acuático de

escala intermedia comprende secciones de ríos mayores que consisten de varios tipos

de macrohábitats. Los sistemas lacustres medianos consisten de lagos individuales de

talla mediana o conjuntos de lagos más pequeños cuyo tamaño varía de 100 a 1.012

hectáreas. Las especies acuáticas de escala intermedia dependen de varios tipos de

macrohábitats. Por ejemplo, los peces en temporada de desove en las planicies inundables

utilizan el principal canal de un río, las áreas inundadas y los humedales (p.ej., Ictiobus

cyprinellus).

6Las áreas de las cuatro escalas geográficas se definen en términos generales y con valores que se traslapan,

tomando en cuenta la variabilidad de algunas regiones (p.ej., las praderas del oeste-centro versus lasmontañas del oeste de los EEUU).

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5Paisajes Funcionales y la Conservación de la Biodiversidad

3. Escala gruesa

Las comunidades y sistemas ecológicos de matriz terrestres constituyen el hábitat dominante

o históricamente dominante entre los parches. Están definidas por gradientes físicos

dispersos a lo largo de áreas extensas, tales como altitud, precipitación y temperatura.

Por lo general es difícil representar en mapas ejemplos individuales de estas matrices,

ya que con frecuencia se mezclan con las adyacentes. Algunos ejemplos en los Estados

Unidos son los bosques de abeto (Picea, Abies) del noreste, los bosques de pino de hoja

larga (Pinus palustris) del sudeste y las praderas de pasto alto del oeste central. Las

especies de escala gruesa terrestres son aquéllas que requieren de áreas extensas para

poder tener acceso a los tipos y cantidad de hábitat que necesitan. Por ejemplo, las

gallinas de las praderas en las Grandes Planicies utilizan áreas extensas de la histórica

matriz de pastizales, parches pequeños de humedales y matorrales e incluso varias

tierras agrícolas. Ejemplos de mamíferos de escala gruesa son el zorro, el tejón y la

marta. El área requerida por las poblaciones de especies terrestres de escala gruesa y

comunidades o sistemas ecológicos de matriz generalmente varía entre 8.010 y 405.000

hectáreas. Los objetos de conservación acuáticos de escala gruesa incluyen sistemas de

ríos medianos a grandes formados por ríos del cuarto orden o mayores, sus tributarios y

los humedales y lagos asociados y sistemas lacustres grandes o conjuntos de lagos medianos

típicamente mayores de 1.012 hectáreas (p.ej., Great Salt Lake, Finger Lakes y Great

Lakes). Las especies acuáticas de escala gruesa cubren grandes distancias y utilizan

ambientes múltiples para satisfacer sus requerimientos de hábitat. Algunos ejemplos

son Acipenser fluvescens, Polyodon spathula y Fundulus heteroclitus.

4. Escala regional

Tanto las especies acuáticas como las terrestres en la categoría de especies de escala

regional dependen de vastas regiones e incluyen animales migratorios y predadores de

nivel superior (p.ej., caribú, lobo, oso pardo), aves migratorias, murciélagos, insectos y

peces que migran a través de largas distancias (p.ej., anguila americana, salmón). El

mantenimiento de una sóla población por lo general requiere de áreas mayores de

405.000 hectáreas o cientos de kilómetros de río, incluyendo la matriz terrestre natural

o semi-natural, los parches asociados, los corredores de conexión y sistemas enteros

fluviales y lacustres intactos.

Una vista amplificada de los lugares que deseamos conservar

La supervivencia a largo plazo de nuestros objetos de conservación requiere de una

área de conservación funcional con patrones y procesos intactos. Una área de conservación

funcional mantiene a las especies, comunidades y/o sistemas de interés focal y a los

procesos ecológicos que los sustentan dentro de sus rangos naturales de variabilidad

(es decir, la cantidad de fluctuación esperada en los patrones de diversidad y procesos

ecológicos bajo influencia mínima o nula de actividad humana).

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6 Paisajes Funcionales y la Conservación de la Biodiversidad

Son importantes varios aspectos clave de las áreas de conservación funcionales:

• El tamaño y configuración de las áreas de conservación funcionales estarán

determinados por los objetos de conservación y los procesos ecológicos que los

sustentan.

• “Funcional” se refiere a la habilidad de un área de conservación para mantener

objetos de conservación saludables y viables a largo plazo (más de 100 años),

incluyendo la habilidad de responder al cambio ambiental natural o de origen

humano.

• Las áreas de conservación funcionales no excluyen necesariamente la actividad

humana, pero ésta puede influenciar en gran medida la habilidad de dichas

áreas para funcionar naturalmente.

• Las áreas de conservación funcionales en cualquier escala pueden requerir de

manejo o restauración ecológicos para mantener su funcionalidad.

Nosotros reconocemos tres tipos de áreas de conservación funcionales: sitios, paisajes

y redes7. Las diferencias entre sitios funcionales, paisajes funcionales y redes

funcionales son definidos por los elementos de la biodiversidad que se desea conservar.

Un sitio funcional pretende conservar un número pequeño de sistemas ecológicos,

comunidades o especies en una o dos escalas por debajo de la escala regional. Aunque

preservarlos no es necesariamente fácil, los objetos de conservación (es decir, aquellas

especies, comunidades o sistemas que deseamos conservar en cierto lugar) son

relativamente pocos y por lo general comparten procesos ecológicos similares (p.ej.,

plantas y mariposas que dependen de los incendios en las praderas; un humedal y sus

especies raras; un conjunto de peces raros). Por ejemplo, en los Estados Unidos la

mayoría de las reservas fueron establecidas para conservar especies de escala local o

comunidades de parches pequeños en peligro de extinción. Tales áreas se consideran

sitios funcionales siempre y cuando conserven (o restauren mediante manejo) a los

objetos de conservación y procesos que los sustentan dentro de sus rangos naturales de

variabilidad. Los sitios funcionales pueden ser grandes o pequeños dependiendo de la

escala de los objetos de conservación y sus procesos ecológicos. Por ejemplo, un sitio

funcional para mariposas de pradera puede abarcar cientos de hectáreas, mientras que

para una especie de pez rara puede ser necesario considerar una cuenca hidrológica

completa.

7Este marco conceptual utiliza el término general "área de conservación funcional" para describir un

lugar que para The Nature Conservancy y sus socios es importante conservar y que usualmente seidentifica mediante la planificación ecorregional. En la planificación para la conservación de sitios(PCS) el término equivalente es "sitio de conservación funcional". Empleamos el término "sitiofuncional" de manera más restrictiva para indicar un subconjunto específico de áreas de conservaciónfuncionales que no se describe en la PCS. Aunque en este léxico "sitio" es un tanto diferente, losconceptos básicos son consistentes con los estándares de la PCS. Ambos marcos emplean los términos"paisaje funcional" y "red funcional" de manera similar.

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7Paisajes Funcionales y la Conservación de la Biodiversidad

Un paisaje funcional, en contraste, pretende conservar un gran número de sistemas

ecológicos, comunidades y especies en todas las escalas por debajo de la escala re-

gional (es decir, gruesa, intermedia y local). Además, los objetos de conservación

identificados, por lo general representan a muchos otros sistemas ecológicos,

comunidades y especies conocidas y desconocidas (es decir, "toda" la biodiversidad).

Los paisajes funcionales son de naturaleza altamente intacta y retienen (o es posible

restaurar en ellos) la mayoría o todos sus componentes, patrones y procesos clave. Sin

embargo, en la práctica, la diferencia entre paisajes funcionales y sitios funcionales no

es siempre clara porque aún las comunidades y sistemas ecológicos de los sitios

funcionales representan otros elementos de la biodiversidad (su función de filtro grueso).

Por lo tanto, la diferencia operacional entre éstos consiste en el grado en el cual los

objetos de conservación se utilizan para representar a otra biodiversidad combinada

con su naturaleza multiescalar. Debido a esta creciente complejidad, usualmente los

objetos de conservación en los paisajes funcionales son tant terrestres como acuáticos

(de agua dulce e incluso marinos en algunos casos) y requirien de una variedad de

procesos ecológicos para su mantenimiento. A la fecha, sólo algunas de las áreas en las

cuales The Nature Conservancy trabaja pueden considerarse paisajes funcionales (la

costa este de Virginia, la zona fronteriza de Malpai, la región baja de los Ozarks, la base

aérea militar Eglin, Laguna Madre y las montañas Bighorn son posibles ejemplos).

Una red funcional es un conjunto integral de sitios y paisajes funcionales diseñado

para conservar especies regionales con o sin biodiversidad a escala más fina. Los sitios

o paisajes que forman las redes funcionales pueden distribuirse en forma contigua a lo

largo de una o más regiones para proteger especies tales como el caribú, berrendo, oso

pardo o jaguar. Por lo contrario, los sitios o paisajes pueden formar una serie de parches

dispersos a lo largo de un área extensa para conservar aves costeras o neotropicales

migratorias. Además de conservar la biodiversidad en escalas local, intermedia y gruesa,

un portafolio ecorregional bien diseñado debe servir como una red funcional para

especies regionales dentro de una ecorregión; en forma colectiva nuestros planes

ecorregionales deben proveer redes funcionales para especies cuyo rango de distribución

abarca múltiples ecorregiones.

Pensamiento abarcador: Un enfoque en los paisajes funcionales

Cuando examinamos un área de conservación debemos pensar de manera inclusiva. La

conservación ecorregional nos ofrece la oportunidad sin precedentes de revisar nuestros

objetos de conservación en todos los lugares en los que trabajamos. Así, durante la

planificación ecorregional y la subsiguiente planificación a nivel de sitio debemos

determinar si existen oportunidades para conservar sistemas ecológicos, comunidades

o especies de alta calidad en escalas adicionales a las que originalmente nos enfocamos.

Por ejemplo, ¿debe un plan que previamente se enfocaba en la conservación de un

bosque ribereño enfocarse también en el bosque adyacente de tierras altas?

Nota: Un sitio funcionalpuede ser tan grandecomo un paisajefuncional. Sin embargo,el tamaño por sí solo noasegura la protección dela biodiversidad enescalas múltiples. Porejemplo, un sitioenfocado a la protecciónde especies de mejillonesde agua dulce, que sonobjetos de conservaciónde escala intermedia,puede requerir de acciónde conservación a escalade la cuenca hidrológica.No obstante, laprotección completa delhábitat fluvial y de losprocesos ecológicos quesustentan a esosmejillones puede no sersuficiente para conservara otros componentescríticos de labiodiversidad (p.ej.,plantas raras de tierrasaltas, riscos, matriz debosque, aves del bosqueinterior). Así, lo quedistingue a un paisajefuncional de un sitiofuncional no es sutamaño, sino el grado enel cual los objetos deconservación se utilizanpara representar a otroselementos de labiodiversidadcombinados con sunaturaleza multiescalar.

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8 Paisajes Funcionales y la Conservación de la Biodiversidad

Como regla general nosotros creemos que un mayor énfasis en la conservación de

paisajes funcionales (y sitios funcionales que se enfocan en la biodiversidad en escalas

múltiples) mejorará drásticamente nuestra eficiencia y efectividad. La conservación

de sistemas ecológicos, comunidades y especies en escalas múltiples dentro de un sólo

paisaje intacto provee una estrategia de conservación más ecológicamente integral. Los

paisajes funcionales por lo general proporcionan más hábitat, mayor diversidad de

hábitats y mayores poblaciones de especies conocidas y desconocidas. Debido a sus

gradientes ambientales complejos e incluyentes, ofrecen también mayor protección

contra cambios globales. Además, los paisajes funcionales pueden conservarse más

eficazmente que muchos sitios dispersos en una área muy amplia. Sin embargo, los

paisajes funcionales son exponencialmente más complejos; su comprensión y medición

requerirá de recursos sustanciales. Aunque todas las áreas de conservación que

constituyen un portafolio deben ser funcionales, no todas serán paisajes funcionales.

La decisión de expandir o reducir la escala y alcance de cualquier área debe estar basada

en datos científicos confiables y buen juicio.

¿Qué quiere decir funcional?

"Funcional" se refiere a la capacidad de un área de mantener objetos de conservación

saludables y viables y de sustentar procesos ecológicos clave dentro de sus rangos natu-

rales de variabilidad a largo plazo. La evaluación del estado funcional de un área es

crítica para formular estrategias apropiadas de conservación, manejo y restauración y

para evaluar los usos humanos actuales y potenciales en dicha área.

Dentro de este marco nosotros sugerimos cuatro atributos ecológicos para evaluar el estado

funcional de un área de conservación a cualquier escala. Estos cuatro atributos

funcionales están incluidos dentro de aquéllos que The Nature Conservancy utiliza

para evaluar la viabilidad de los objetos de conservación y para medir la salud de la

biodiversidad, es decir, tamaño, condición y contexto paisajístico. Así, la salud de la

biodiversidad es una medida general de funcionalidad a nivel de paisaje o sitio para las

áreas de conservación donde The Nature Conservancy trabaja.

(1) Composición y estructura de los objetos de conservación. Por ejemplo, ¿están presentes

todas las especies y una cubierta vegetal y dosel saludables en un sistema de

bosque elegido como objeto de conservación? ¿Se están reproduciendo las

poblaciones de especies elegidas como objetos de conservación? ¿Qué tanto se

han extendido las especies invasoras? Estas características se incluyen como

parte de la condición en la medida de salud de la biodiversidad para determinar

el éxito.

(2) Regímenes ambientales y disturbios naturales. ¿Están los regímenes ambientales y

disturbios naturales clave (como incendios e inundaciones) que sustentan a los

objetos de conservación operando aún dentro de sus rangos naturales de

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9Paisajes Funcionales y la Conservación de la Biodiversidad

variabilidad? Estos factores están incluidos dentro del contexto paisajísitico en

la medida de salud de la biodiversidad para determinar el éxito.

(3) Area dinámica mínima. ¿Es el tamaño del área suficiente para permitir a los objetos

de conservación recuperarse de un disturbio, tal como un huracán? Este atributo

corresponde al tamaño en la medida de salud de la biodiversidad para determinar

el éxito.

(4) Conectividad. ¿Tienen los objetos de conservación acceso a todos los hábitats y

recursos necesarios para completar sus ciclos de vida? ¿Pueden los sistemas

ecológicos, comunidades y especies desplazarse en respuesta a cambios

ambientales tales como el calentamiento global? Estos factores están incluidos

dentro del contexto paisajístico en la medida de salud de la biodiversidad para

determinar el éxito.

La evaluación de estos atributos para sitios y redes funcionales es relativamente sencilla

porque el número de objetos de conservación es generalmente pequeño y el enfoque

de la conservación está usualmente claramente definido. Por otro lado, la evaluación

de estos atributos para paisajes funcionales es obviamente más difícil debido a la

complejidad de los objetos de conservación y a la naturaleza inclusiva de las metas de

conservación.

La evaluación de la funcionalidad de un área de conservación debe ser un proceso

iterativo basado en el conocimiento acumulado. La evaluación ocurre primero durante

la planificación ecorregional y el diseño del portafolio de sitios y continúa a través de la

planificación para la conservación, las medidas de éxito y el manejo adaptable durante

la toma de acciones.

Aplicación de este marco conceptual en la conservación

Ofrecemos varias sugerencias para aplicar los conceptos delineados en este documento

a las actividades que The Nature Conservancy está llevando a cabo.

• Todas las áreas de conservación en un portafolio ecorregional deben ser

funcionales o potencialmente restaurables.

• Los equipos de planificación ecorregional deben incorporar al portafolio objetos

de conservación de escala gruesa apropiados, incluyendo sistemas ecológicos,

comunidades y especies. En la medida de lo posible los equipos deben agrupar

objetos de conservación de escalas gruesa, intermedia y local dentro de sitios y

paisajes funcionales inclusivos.

Nota: Para evaluar loscuatro atributos de lospaisajes funcionalesrecomendamos losiguiente:

1. Seleccionar unsubconjunto de sistemasecológicos y especies enmúltiples escalasespaciales que reflejen lavariedad de patrones yprocesos ecológicosnecesarios paraconservar el paisajefuncional completo.

• Los ecosistemas yespecies focales para elproyecto de lasMontañas Bighorn enWyoming incluyen:matriz de bosque borealde gran altitud, matrizde Artemisia tridentatade altitud media, matrizde pastos perennes dealtitud baja;comunidades ribereñas,murciélagos y bosquemaduro de pinoponderosa de escalaintermedia; y Astragalusde Hyattville,Cymopterus williamsii ybarrancos de arbustoscaducifolios de escalalocal. Actualmente elequipo de planificaciónestá considerando losecosistemas y especiesfocales acuáticos yespecies a escalaregional apropiados.

2. Prestar atenciónparticular a los sistemasecológicos y especiesque tienenrequerimientosespeciales deconservación o demanejo, que sonparticularmentesusceptibles aalteraciones de atributosclave y que se dispersan,viajan o utilizan recursosa través de escalas ysistemas múltiples.

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10 Paisajes Funcionales y la Conservación de la Biodiversidad

• Los equipos de planificación ecorregional deben tomar en cuenta a las especies

de escala regional. En su conjunto, los sitios y paisajes funcionales de un portafolio

deben servir como bloques para construir una estrategia de conservación para

las especies que operan dentro de una ecorregión. Para conservar especies de

escala regional tales como aves migratorias y peces de ríos mayores que utilizan

múltiples ecorregiones, será necesario examinar los portafolios de varias

ecorregiones.

• Un enfoque en escalas múltiples y una funcionalidad general deben formar parte

de los criterios empleados para determinar el valor de la biodiversidad de una

área. Así, asumiendo que otros factores son constantes, deberá darse mayor

prioridad de acción a los paisajes funcionales que a los sitios funcionales, o a los

sitios que se enfocan en la biodiversidad en escalas múltiples en lugar de aquéllas

cuyo enfoque es en una sóla escala. El enfoque en múltiples escalas de

biodiversidad y su protección de una manera integral puede ser nuestra mejor y

más segura estrategia para llevar a cabo una conservación duradera,

particularmente de las miríadas de especies que poco conocemos.

• Debe alentarse a los equipos de planificación para la conservación a que revisen

el potencial que las áreas de conservación acuáticas tienen para preservar la

biodiversidad terrestre, así como el potencial de las áreas terrestres para conservar

especies acuáticas.

• Con el fin de asegurar la conservación de un paisaje intacto complejo debe

seleccionarse un subconjunto de objetos de conservación en escalas múltiples

de paisajes funcionales. Los sistemas ecológicos y especies con requerimientos

especiales o que se dispersan, viajan o utilizan recursos a través del paisaje son

de particular importancia.

• El método de The Nature Conservancy para poner en práctica este marco con-

ceptual en sitios individuales se detalla en Planificación para la Conservación de

Sitios y Medidas de Exito. Muchos de los conceptos que se presentan en este

documento han sido incorporados a tales procedimientos estándar de

planificación y evaluación. Para mayor información sobre planificación a nivel

de sitio o medidas de éxito, incluyendo el manual para planificadores,

comuníquese con el Programa de Conservación de Sitios de la División de

Ciencias de la Conservación ([email protected]).

Nota: El esquemapresentado en estedocumento sedesarrolló encolaboración conmuchos de nuestroscolegas en TNC y se"experimentó" en unavariedad de áreas deconservación.Apreciamosparticularmente lasideas y revisión críticade Mark Anderson, JeffBaumgartner, GregLow, Holly Richter,Deborah Jensen,Jonathan Higgins yMary Lammert. Estaguía de trabajo es elresumen de unmanuscrito más extensoque se publicará en larevista BioScience. Paramayor información ouna descripción másdetallada del marcocomuníquese conKaren Poiani([email protected])o Brian Richter([email protected]).

Page 11: Paisajes funcionales

11Paisajes Funcionales y la Conservación de la Biodiversidad

Referencias clave para otras lecturas relacionadas

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