Obras Completas Ilustradas - angelesgoyanes.com · LIMONAR Noche RASGOS PRELUDIO. RINCÓN DEL CIELO...

1455
Obras Completas Ilustradas Federico García Lorca

Transcript of Obras Completas Ilustradas - angelesgoyanes.com · LIMONAR Noche RASGOS PRELUDIO. RINCÓN DEL CIELO...

  • Obras Completas Ilustradas

    Federico Garca Lorca

  • Edicin por ngeles Goyanes

    Encuentra ms ebooks gratuitos en:

    http://www.angelesgoyanes.com

    http://www.angelesgoyanes.com/
  • INDICE

    PRLOGO

    POESA

    SUITES

    Suite de los espejos

    SMBOLO

    EL GRAN ESPEJO

    REFLEJO

    RAYOS

    RPLICA

    TIERRA

    CAPRICHO

    SINTO

    LOS OJOS

    INITIUM

    BERCEUSE AL ESPEJO DORMIDO

    AIRE

    CONFUSIN

    REMANSO

    El jardn de las morenas

    PRTICO

    ACACIA

    ENCUENTRO

    LIMONAR

    Noche

    RASGOS

    PRELUDIO

  • RINCN DEL CIELO

    TOTAL

    UN LUCERO

    FRANJA

    UNA

    MADRE

    RECUERDO

    HOSPICIO

    COMETA

    VENUS

    ABAJO

    LA GRAN TRISTEZA

    Remansos

    REMANSILLO

    VARIACIN

    REMANSO, CANCIN FINAL

    MEDIA LUNA

    Momentos de cancin

    CANCIN CON REFLEJO

    CANCIN SIN ABRIR

    SSAMO

    CANCIN BAJO LGRIMAS

    PUESTA DE CANCIN

    PAISAJE SIN CANCIN

    Cuatro baladas amarillas

    Tres estampas del cielo

    Estampas del mar

    Historietas del viento

    Sombra

    PUEBLO

    MEMENTO

    CUMBRE

  • El regreso

    RFAGA

    Horas de verano

    La selva de los relojes

    lbum blanco

    PRIMERA PGINA

    SEGUNDA PGINA

    TERCERA PGINA

    CUARTA PGINA

    QUINTA PGINA

    LTIMA PGINA

    Secretos

    FUENTE

    PAN

    LEADOR

    ESPEJO

    PUERTA ABIERTA

    BOTICA

    DONCELLITA

    Seis canciones de anochecer

    HORIZONTE

    PESCADORES

    SOLITARIO

    DELIRIO

    MEMENTO

    LTIMA LUZ

    Suite del agua

    PAS

    TEMBLOR

    ACACIA

    CURVA

    COLMENA

  • Cruz

    NORTE

    SUR

    ESTE

    OESTE

    Tres crepsculos

    Palimpsestos

    CIUDAD

    CORREDOR

    PRIMERA PGINA

    La palmera

    LMITES

    LA PALMERA

    MEDITERRNEO

    LA PALMA

    Newton

    EN EL BOSQUE

    ARMONA

    RPLICA

    PREGUNTA

    Cco. Cuco. Cuc

    LA CANCIN DEL CUCO VIEJO

    PRIMER NOCTURNO DEL CUCO

    SEGUNDO NOCTURNO DEL CUCO

    LTIMO NOCTURNO

    Madrigales

    Castillo de fuegos artificiales quemado con motivo del cumpleaos del poeta

    RUEDA CATALINA

    COHETES

    JARDN CHINO

    GIRASOL

    DISCO DE RUBES

  • CAPRICHO

    JUEGO DE LUNAS

    Caracol

    Surtidores

    Herbarios

    En el jardn de las toronjas de luna

    OTROS POEMAS DEL LIBRO DE Suites

    Ferias

    Momentos de la tarde

    Momentos del jardn

    Pases

    Ensueos del ro

    Meditaciones y alegoras del agua

    Ruedas de fortuna

    [Epitafio a un pjaro]

    Espera

    El campo segado

    LIBRO DE POEMAS

    Potica. De viva voz a Gerardo Diego

    Palabras de justificacin

    Veleta

    Los encuentros de un caracol aventurero

    Cancin otoal

    Cancin primaveral

    Cancin menor

    Elega a Doa Juana la Loca

    Cigarra!

    Balada triste

    Maana

    La sombra de mi alma

  • Lluvia

    Si mis manos pudieran deshojar

    El canto de la miel

    Elega

    Santiago

    El diamante

    Madrigal de verano

    Cantos nuevos

    Alba

    El presentimiento

    Cancin para la luna

    Elega del silencio

    Balada de un da de Julio

    "In memoriam"

    Sueo

    Paisaje

    Noviembre

    Preguntas

    Corazn nuevo

    Se ha puesto el sol

    Pajarita de papel

    Madrigal

    Una campana

    Consulta

    Tarde

    Hay almas que tienen...

    Prlogo

    Balada interior

    El lagarto viejo

    Patio hmedo

  • Balada de la placeta

    Encrucijada

    Hora de estrellas

    El camino

    El concierto interrumpido

    Cancin oriental

    Chopo muerto

    Campo

    La balada del agua del mar

    rboles

    La luna y la muerte

    Madrigal

    Deseo

    Los lamos de plata

    Espigas

    Meditacin bajo la lluvia

    Manantial

    Mar

    Sueo

    Otro sueo

    Encina

    Invocacin al laurel

    Ritmo de otoo

    Aire nocturno

    Nido

    Otra cancin

    El macho cabro

    POEMA DEL CANTE JONDO

    Baladilla de los tres ros

    Poema de la seguiriya gitana.

  • Poema de la sole

    Poema de la saeta

    Grfico de la Petenera

    Dos muchachas

    Vietas flamencas

    Tres ciudades

    Seis caprichos

    Escena del teniente coronel de la Guardia Civil

    Dilogo del Amargo

    PRIMERAS CANCIONES

    Remansos

    Cuatro baladas amarillas

    Palimpsestos

    Adan

    Claro del reloj

    Cautiva

    Cancin (Casida de las palomas oscuras)

    Canciones

    Teoras

    Cancin de las siete doncellas.

    Nocturno esquemtico.

    Cancin del colegial.

    Tovivo.

    Balanza

    Cancin con movimiento.

    Refrn

    Friso

    Cazador

    Fbula

    (Agosto)

  • Arlequn

    Cortaron tres rboles

    Nocturnos de la ventana

    Canciones para nios

    Cancin china en Europa

    Cancioncilla sevillana

    Caracola

    (El lagarto est llorando)

    Cancin cantada

    Paisaje

    Cancin tonta

    Andaluzas

    Cancin del jinete (1860)

    Adelina de paseo

    Tarde

    Cancin del jinete

    Es verdad

    Tres retratos con sombras

    Verlaine

    Juan Ramn Jimnez

    Debussy

    Juegos

    Ribereas

    A Irene Garca (criada

    Al odo de una muchacha

    (Las gentes iban)

    Cancin del mariquita

    rbol de cancin

    (Naranja y limn)

    La calle de los mudos

    Canciones de luna

  • La luna asoma

    Dos lunas de tarde

    Lunes, mircoles y viernes

    Muri al amanecer

    Primer aniversario

    Segundo aniversario

    Flor

    Eros con bastn (1925)

    Susto en el comedor

    Luca Martnez

    La soltera en misa

    Interior

    Nu

    Serenata.

    Homenaje a Lope de Vega

    En Mlaga

    Trasmundo

    Escena

    Malestar y noche

    El nio mudo

    El nio loco

    Desposorio

    Despedida

    Suicidio

    Amor

    Cancioncilla del primer deseo

    En el Instituto y en la Universidad

    Madrigalillo

    Eco

    Idilio

    (Narciso)

  • Granada y 1850

    Preludio

    Soneto

    Canciones para terminar

    A Rafael Alberti

    De otro modo

    Cancin de Noviembre y Abril

    (Agua, dnde vas?)

    El espejo engaoso

    Cancin intil

    Huerto de marzo

    Dos marinos en la orilla

    Ansia de estatua

    Cancin del naranjo seco

    Cancin del da que se va

    ROMANCERO GITANO

    Romance de la luna, luna

    Preciosa y el aire.

    Reyerta.

    Romance sonmbulo.

    La monja gitana.

    La casada infiel

    Romance de la pena negra

    San Miguel (Granada)

    San Rafael (Crdoba)

    San Gabriel (Sevilla)

    Prendimiento de Antoito el Camborio en el camino de Sevilla

    Muerte de Antoito el Camborio

    Muerto de amor

    Romance de la Guardia Civil espaola

    Martirio de Santa Olalla

  • Burla de Don Pedro a caballo

    Thamar y Amnn

    POETA EN NUEVA YORK

    Poemas de la soledad en Columbia University.

    Vuelta de paseo

    1910 Intermedio

    Fbula y rueda de los tres amigos

    Tu infancia en Mentn

    Los negros.

    Norma y paraso de los negros

    Oda al rey de Harlem

    Iglesia abandonada

    Calles y sueos

    Danza de la muerte

    Paisaje de la multitud que vomita

    Paisaje de la multitud que orina

    Asesinato

    Navidad en el Hudson

    Ciudad sin sueo

    Panorama ciego de Nueva York

    Nacimiento de Cristo

    La aurora

    Poemas del lago Edem Mills.

    Poema doble del lago Edem

    Cielo vivo

    En la cabaa del Farmer

    El nio Stanton

    Vaca

    Nia ahogada en el pozo

    Introduccin a la muerte.

    Muerte

    Nocturno del hueco

  • Paisaje con dos tumbas y un perro asirio

    Ruina

    Luna y panorama de los insectos

    Vuelta a la ciudad.

    New York

    Cementerio judo

    Crucifixin

    Dos odas.

    Grito hacia Roma

    Oda a Walt Whitman

    Huda de Nueva York.

    Pequeo vals vienes

    Vals en las ramas

    El poeta llega a la Habana.

    Son de negros en Cuba

    LLANTO POR IGNACIO SNCHEZ MEJAS

    La cogida y la muerte

    La sangre derramada.

    Cuerpo presente.

    Alma ausente

    SEIS POEMAS GALLEGOS

    Madrigal cibd de Santiago

    Romaxe de Nosa Seora da Barca

    Cantiga do neno da tenda

    Noiturnio do adoescente morto

    Canzn de cuna pra Rosala Castro, morta

    Danza da la en Santiago

    DIVN DEL TAMARIT

    Gacelas

    I. Gacela del amor imprevisto

    II. Gacela de la terrible presencia.

  • III. Gacela del amor desesperado

    IV. Gacela del amor que no se deja ver.

    V. Gacela del nio muerto

    VI. Gacela de la raz amarga

    VII. Gacela del recuerdo del amor.

    VIII. Gacela de la muerte oscura

    IX. Gacela del amor maravilloso.

    X. Gacela de la huida

    XI. Gacela del amor con cien aos

    XII. Gacela del mercado matutino

    I. Casida del herido por el agua

    II. Casida del llanto

    III. Casida de los ramos

    IV. Casida de la mujer tendida

    V. Casida del sueo al aire libre

    VI. Casida de la mano imposible

    VII. Casida de la rosa

    VIII. Casida de la muchacha dorada

    IX. Casida de las palomas oscuras

    Soneto gongorino en que el poeta manda a su amor una paloma

    Llagas de amor

    Soneto de la guirnalda de rosas

    El poeta dice la verdad

    El poeta pide a su amor que le escriba

    Ay voz secreta del amor oscuro!

    Soneto de la dulce queja

    Noche del amor insomne

    El poeta pregunta a su amor por la ciudad encantada de Cuenca

    El poeta habla por telfono con el amor

    El amor duerme en el pecho del poeta

    OTROS SONETOS Y ODAS

    En la muerte de Jos Ciria y Escalante

  • Soneto

    Soneto de homenaje a Manuel de Falla, ofrecindole unas flores

    A Carmela Condn, agradecindole unas muecas

    Adam

    Epitafio a Isaac Albniz

    En la tumba sin nombre de Herrera y Reissig en el cementerio de Montevideo

    A Mercedes en su vuelo

    Oda a Salvador Dal

    Soledad

    Oda al Santsimo Sacramento del altar

    POEMAS SUELTOS

    En el cumpleaos de R.G.A. Corona potica o pulsera de flor

    Estampilla y juguete

    Abandono

    Esto

    Cancin de la desesperanza

    Canto nocturno de los marineros andaluces

    La sirena y el carabinero

    Cancin

    Soledad insegura

    Tierra y Luna

    Pequeo poema infinito

    Cancin de la muerte pequea

    Omega

    Dos normas

    El poeta pide ayuda a la Virgen

    Infancia y muerte

    Cancin

    Versos en el nacimiento de Malva Marina Neruda

    Cancin de cuna para Mercedes, muerta

  • Este es el prlogo.

    La oracin de las rosas.

    Estampa del cielo

    Cada cancin

    Soneto

    Cancin

    CANTARES POPULARES

    Anda jaleo

    Los cuatro muleros

    Las tres hojas

    Los mozos de Monlen

    Las morillas de Jan

    Sevillanas del siglo XVIII

    Nana de Sevilla

    Los pelegrinitos

    Zorongo gitano

    Romance de don Boyso

    Los reyes de la baraja

    La Tarara

    OTRA POESA

    Cancin vieja

    El poema de mi cuarto

    Cancin novsima de los gatos

    Carteln

    Voces

    [La voz de la campana]

    [Por encontrar un beso tuyo]

    Eva

    Poemas heroicos

    Las serpientes

  • Poemas tardos

    Paseo

    Barcarola

    Telgrafo

    rbol de sorpresas

    Nocturno de Marzo

    La encrucijada de las sonrisas

    Mitad

    Recreo del nio loco y el pjaro ciego

    Recreo del nio loco y el pjaro sin nido

    Madrigal para la vieja Amarilis

    Puerta

    Polifemo

    Interior

    El holands Cristian Hartman

    Teorema de amor

    POEMAS DESCARTADOS DE PRIMERAS CANCIONES

    Aire

    Madrigal

    Camino

    El pecho

    POEMAS DESCARTADOS DE Suites (I)

    Viaje

    [Yo]

    [Un nio acaba de nacer]

    Noche

    Caprichos

    [Suite]

    [Qu pasar?]

    [Ro azul]

  • Tarde

    Desde aqu

    Despus

    Diurno

    Tortugas

    Leda

    POEMAS DESCARTADOS DE Suites (II)

    Cancin en desierto

    Cancin muerta

    Estampa roja

    Caritide

    Visin

    Caracol

    Rosa

    Fondo

    Parque

    Pan

    Hamlet

    Madrigal

    El camino conocido

    Sirena

    Realidad

    Si T...

    Flecha

    Casi-elega

    Marimantas

    [La campanada]

    [Las vidrieras de oro...]

    Intermedio

    Torre

  • POEMAS DESCARTADOS DE Poema del cante jondo

    Reflejo final

    Voto

    Miserere

    El huerto de la Petenera

    Manzanilla

    Campo

    Copla

    Quejo

    Sibila

    Luna negra

    Bordn

    Noche

    Noche media

    Ella

    Fuera

    Cueva

    Bulera

    POEMAS DESCARTADOS DE Canciones

    Cancin definitoria

    Cancin

    Pregn

    Voto

    La cancin de la torre negra

    Soneto

    [Bandolero y todo]

    Cancioncilla serrana

    Mosca

    [Rosa de llanuras]

    Berceuse a Rafael cuando se vuelva otra vez un nio

  • [La fra espada del viento]

    Burla de los cuatro reyes

    [Ay qu montaa de luz...!]

    Canciones tontas del nio y su mam

    El mal corazn

    Mach Yong

    Segundo aniversario

    Los cuatro viejos marineros

    [Mara]

    [Virgen de arena y espuma]

    POEMAS DESCARTADOS DE Odas

    Apunte para una oda

    Oda y burla de Sesostris y Sardanpalo

    Oda al toro de lidia

    Teorema en el paisaje

    POEMAS DESCARTADOS DE poemas en prosa

    La muerte de la madre de Charlot

    Coeur azul-corazn bleu

    VERSOS DE CIRCUNSTANCIAS

    [A Francisca Alarcn y Manuel ngeles Ortiz]

    Florilegio de baladas mnimas

    Hai-kais de felicitacin a mam

    Cancin popular

    Adis!

    Copla cubana

    [A Catalina Barcena]

    [A Concha Garca Lorca]

    Tardecilla del Jueves Santo

    [A Luis Buuel]

    [Poema de saludo a Nstor]

  • [A Claudio de la Torre]

    Oracin

    [A Vicente Huidobro]

    [Al dorso de una fotografa]

    A mi amiga Mara Teresa

    [A Margarita Xirgu, con unas rosas]

    A Margarita

    [A Joaqun Romero Murube]

    POEMAS FESTIVOS

    Jaculatoria

    Romance no gallista

    Poesa de vanguardia

    El cruzado

    LOS POEMAS DE ISIDORO CAPDEPN FERNNDEZ

    La extraordinaria vida de Isidoro Capdepn Fernndez

    Granada como sultana

    San Nicols

    Segunda visita de Capdepn a la bella ciudad de Granada

    Soneto al eximio arquitecto Palacios.

    Soneto

    [Lamento por la decadencia de las artes]

    ANTOLOGA MODELNA

    Presentacin

    Juan Ramn Ximnez

    Antonio Machado

    Pedro Salinas

    Jorge Guillen

    Jos Bergamn

    Jos Mara Hinojosa

    Federico Garca Lorca

  • Salvador Dal

    Rafael Alberti

    Gerardo Diego

    Emilio Prados

    Manolito Altolaguige

    Antonio Espina

    Addendum

    Otras

    Aleluyas tiernas del Federico (Pirulino) a los amigos disgustados

    [Con motivo del estreno de Doa Rosita la soltera]

    VERSOS PERTENECIENTES A LA SUITE LLAMADA EN EL BOSQUE DE

    LAS TORONJAS DE LUNA

    POEMAS INDITOS

    Oh cama del hotel! Oh dulce cama!

    Por encontrar un beso tuyo

    Reunin de damas a la orilla del mar

    Todo: desde la sombra de la radiografa

    Y he visto por el valle de la inmvil gacela

    Teorema en el paisaje (I)

    Teorema en el paisaje (II)

    Cisso

    Gloria: Oro, incienso y mirra

    Cancin novsima de los gatos

    Poema de Federico Garca Lorca a su amante Juan Ramrez de Lucas

    TEATRO

    EL MALEFICIO DE LA MARIPOSA

    MARIANA PINEDA

    LA NIA QUE RIEGA LA ALBAHACA Y EL PRNCIPE PREGUNTN

    TEATRO BREVE (Dilogos)

    La doncella, el marinero y el estudiante

  • El paseo de Buster Keaton

    Quimera

    Dilogo mudo de los cartujos

    Dilogo de los dos caracoles

    [Dilogo con Luis Buuel]

    El loco y la loca

    Dilogo de don Fabricio y la seora

    Dilogo del dios Pan

    Dilogo de la Residencia

    VIAJE A LA LUNA

    LA ZAPATERA PRODIGIOSA

    LOS TTERES DE CACHIPORRA. Tragicomedia de don Cristbal y la se

    Rosita

    AMOR DE DON PERLIMPLN CON BELISA EN SU JARDN

    RETABLILLO DE DON CRISTOBAL

    AS QUE PASEN CINCO AOS

    EL PBLICO

    BODAS DE SANGRE

    YERMA

    DOA ROSITA LA SOLTERA O EL LENGUAJE DE LAS FLORES

    LA CASA DE BERNARDA ALBA

    LOLA LA COMEDIANTA

    TEATRO INCONCLUSO

    Diego Corrientes

    Ampliacin fotogrfica

    Drama fotogrfico

    Rosa mudable

    Posada

    Dragn

    La destruccin de Sodoma

  • La bola negra

    Casa de maternidad

    Los sueos de mi prima Aurelia

    PROSA

    IMPRESIONES

    Granada. Paraso cerrado para muchos

    Semana Santa en Granada

    NARRACIONES

    Historia de este gallo.

    Degollacin del Bautista.

    Degollacin de los inocentes.

    Suicidio en Alejandra.

    Santa Lucia y San Lzaro.

    Nadadora sumergida. Pequeo homenaje a un cronista de salones.

    Amantes asesinados por una perdiz.

    La gallina

    CONFERENCIAS

    Charla sobre teatro.

    Teora y juego del duende.

    Las nanas infantiles

    La imagen potica de Luis de Gngora.

    HOMENAJES

    El homenaje a Luis Cernuda.

    De mar a mar.

    IMPRESIONES Y PAISAJES

    Dedicatoria

    Prlogo

    Meditacin

    vila

  • Mesn de Castilla

    La Cartuja

    San Pedro de Cardea

    Monasterio de Silos

    Sepulcros de Burgos

    Ciudad perdida

    Los Cristos

    Granada

    Jardines

    Temas

    Ruinas

    Fresdelval

    Un pueblo

    Una ciudad que pasa

    Un palacio del Renacimiento...

    Procesin

    Amanecer castellano

    Monasterio

    Campos

    Medidoda de agosto

    Una visita romntica

    Otro convento

    Tarde dominguera en un pueblo grande

    Iglesia abandonada

    Pausa

    Un hospicio de Galicia

    Romanza de Mendelssohn

    Calles de ciudad antigua

    El Duero

    LA BALADA DE CAPERUCITA

  • LIBROS, LIBROS! (Medio pan y un libro)

  • PRLOGO

    Si nos preguntaran quin era Federico Garca Lorca probablemente

    contestaramos que era poeta, uno de los componentes ms destacados de la

    denominada generacin del 27, que naci en Granada en 1898 y muri fusilado en

    1936 al comienzo de la guerra civil, entre Vznar y Alfacar, (Granada). Pero a pesar

    de su corta vida sta fue muy intensa tanto a nivel personal como profesional, y las

    Letras no fueron su nica pasin artstica. "Soy mucho mejor pintor que poeta; slo que

    me ha dado por hacer versos", comentaba el poeta cubano Juan Marinello (1898-1977)

    que Lorca le haba mencionado en una ocasin. Por ello, para entender mejor a Federico Garca Lorca tambin es necesario

    conocer su obra plstica.

    Lorca estudi filosofa y letras, y se licenci en Derecho. El hecho que marc

    su destino por completo fue su estancia en Madrid, en la Residencia de

    Estudiantes, donde conoci, entre otros, a Juan Ramn Jimnez, Machado, Dal y

    Buuel.

    En este escenario, Federico se entreg al arte, y su actividad creativa era

    inmensa; abarcaba la poesa, la msica, el dibujo y el teatro.

    La obra pictrica de Lorca engloba una multitud de temas y formas a travs

    de los cuales expresa lo real y lo irreal, y se convierte en la forma ms ntima de

    expresin que tiene el artista.

    Sus dibujos le acompaan a lo largo de su vida y aparecen en la confeccin

    de decorados de sus montajes teatrales, en las cartas, tarjetas postales que escriba a

    familiares y amigos, en las dedicatorias de sus libros as como tambin como

    ilustracin de sus poemas. Sin embargo, Lorca tom conciencia profesional como

    artista pictrico en las exposiciones que realiz con carcter individual, la primera

    de ellas en las galeras Dalmau de Barcelona, con motivo del estreno de Mariana

    Pineda , entre el 25 de junio y el 2 de julio de 1927, a la que acudieron intelectuales

    y miembros de la vanguardia catalana y posteriormente en 1932, con carcter

    colectivo en la exposicin celebrada en Huelva.

    A finales de julio de 1927, posiblemente desde Cadaqus, escriba Garca

    Lorca a Manuel de Falla dicindole: Hice una exposicin de dibujos, obligado por

  • todos. Y he vendido cuatro! Le envo catlogos de recuerdo. Mil gracias por

    todo....

    Josep Dalmau organiz exposiciones importantes de arte vanguardista de

    entre las que destacan la de Francis Picabia (que refleja en su obra varias fases:

    cubista, abstraccionista, dadasta y surrealista), que expuso justo despus de Lorca

    y que es perfecto reflejo de las influencias pictricas que tuvo nuestro autor.

    En la creacin plstica de Lorca se distinguen dos etapas:

    1. La primera etapa se iniciara hacia 1923 con una serie de caricaturas,

    posteriormente realizar dibujos acordes a la obra potica del Romancero gitano,

    (Interpretacin lrica de inspiracin tradicional y audacia metafrica, que llega al

    fondo misterioso y trgico del mundo andaluz) y al Poema del Cante Jondo, (recoge

    el dramatismo de la cancin andaluza), y una gran variedad temtica entre los que

    encontramos los dibujos de payasos y dibujos con imgenes duplicadas.

    2. La segunda etapa corresponde a los dibujos afines a El pblico, As que

    pasen cinco aos, Drama sin ttulo o Poeta en Nueva York (el autor adopta la forma

    surrealista para expresar su desprecio por la civilizacin moderna).

    Rafael Alberti, poeta de la generacin del 27, relataba con fascinacin:

    Lorca, cuando coga unos lapicillos de colores o la misma pluma con la que

    escriba sus poemas, segua teniendo una frescura de fontana, una gracia como de

    juego en la calle, de sonrisa de patio, de gallo de veleta, de todo aquello que haba

    visto u odo, no saba cundo con los ojos de su niez granadina: jarrones con

    peces y flores, vrgenes atravesadas por puales, nias en las ventanas y azoteas,

    ngeles de las torres, manolas, arlequines, bandoleros y marinerillos ebrios y

    enamorados, todos los temas y figuras de su poesa lrica y dramtica, hasta el

    momento del romancero gitano, un ao antes de marchar a Nueva York, poca en

    que cambia su estilo, contagiado sin duda por la atmsfera surrealista que ya se

    extenda por casi toda Europa.

    Al igual que en la poesa, en sus dibujos destaca el uso de las metforas, su

    visin dramtica, los mitos de la colectividad, el amor, el sexo, la muerte, el

    destino.

    La utilizacin de smbolos es abundante en Lorca, sobre todo los que

    relaciona con la muerte como pueden ser la luna, el agua estancada, la sangre

    derramada, las hierbas, los metales. En ocasiones, determinados smbolos tienen

    diferente significado dependiendo del contexto: La luna adems de simbolizar la

    muerte puede simbolizar el erotismo, la fecundidad, la esterilidad o la belleza. El

    caballo con el jinete adems de la muerte puede representar el erotismo masculino.

    El agua si fluye representa la vida y la sangre puede representar lo sexual.

  • Los dibujos sirven como medio de expresin mediante el cual el poeta

    exterioriza sus sentimientos ms reprimidos en el inconsciente, sus estados

    anmicos, adems de su necesidad de comunicacin. Pone de manifiesto la

    emotividad y el estado de nimo, son una manera de contactar con el exterior y

    una manifestacin del interior.

    En este libro los dibujos se han tratado de situar en el contexto ms

    adecuado, siempre que ello era posible. Por ejemplo, los figurines con los vestidos

    de los personajes de Mariana Pineda se diseminan en el texto de esa obra; el retrato

    de Dal acompaan al poema a l dedicado; dibujos de arlequines ilustran poemas

    sobre arlequines, aunque Lorca no los pintase ex profeso para ellos. Pero tambin

    hay algunos dibujos no relacionados con las obras literarias (autorretratos, por

    ejemplo), as como manuscritos. Sin duda, estas ms de noventa ilustraciones

    ofrecern al lector una mejor y ms completa visin de Garca Lorca.

    En esta recopilacin se incluyen todas las obras conocidas y editadas en vida del autor, as como otras publicadas despus de su muerte, algunos ttulos de

    teatro inconclusos y los poemas inditos publicados en 1995 por la editorial ltera

    en Sonetos del amor oscuro. Poemas de amor y erotismo. Inditos de madurez.

    Los textos correspondientes han sido cotejados literalmente con las

    magnficas publicaciones en papel de la obra de Lorca: Federico Garca Lorca, Poesa

    completa y Federico Garca Lorca, Teatro completo (Galaxia Gutenberg-Crculo de Lectores,

    Barcelona, 2011).

  • POESA

  • SUITES

    Suite de los espejos

    SMBOLO

    Cristo

    tena un espejo

    en cada mano.

    Multiplicaba

    su propio espectro.

    Proyectaba su corazn

    en las miradas

    negras.

    Creo!

    EL GRAN ESPEJO

    Vivimos

    bajo el gran espejo.

    El hombre es azul!

    Hosanna!

    REFLEJO

    Doa Luna.

    (Se ha roto el azogue?)

    No.

    Qu muchacho ha encendido

    su linterna?

    Slo una mariposa

    basta para apagarte.

    Calla... pero es posible!

    Aquella lucirnaga

    es la luna!

    RAYOS

    Todo es abanico.

  • Hermano, abre los brazos.

    Dios es el punto.

    RPLICA

    Un pjaro tan slo

    canta.

    El aire multiplica.

    Omos por espejos.

    TIERRA

    Andamos

    sobre un espejo

    sin azogue,

    sobre un cristal

    sin nubes.

    Si los lirios nacieran

    al revs,

    si las rosas nacieran

    al revs,

    si todas las races

    miraran las estrellas,

    y el muerto no cerrara

    sus ojos,

    seramos como cisnes.

    CAPRICHO

    Detrs de cada espejo

    hay una estrella muerta

    y un arco iris nio

    que duerme.

    Detrs de cada espejo

    hay una calma eterna

    y un nido de silencios

    que no han volado.

    El espejo es la momia

    del manantial, se cierra,

    como concha de luz,

    por la noche.

    El espejo

    es la madre-roco,

    el libro que diseca

  • los crepsculos, el eco hecho carne

    SINTO

    Campanillas de oro.

    Pagoda dragn.

    Tiln, tiln,

    sobre los arrozales.

    Fuente primitiva.

    Fuente de la verdad.

    A lo lejos,

    garzas de color rosa

    y el volcn marchito.

    El ojo

    LOS OJOS

    En los ojos se abren

    infinitos senderos.

    Son dos encrucijadas

    de la sombra.

    La muerte llega siempre

    de esos campos ocultos.

  • (Jardinera que troncha

    las flores de las lgrimas.)

    Las pupilas no tienen

    horizontes.

    Nos perdemos en ellas

    como en la selva virgen.

    Al castillo de irs

    y no volvers

    se vapor el camino

    que comienza en el iris.

    Muchacho sin amor,

    Dios te libre de la yedra roja!

    Gurdate del viajero,

    Elenita que bordas

    corbatas!

    INITIUM

    Adn y Eva.

    La serpiente

    parti el espejo

    en mil pedazos,

    y la manzana

    fue la piedra.

  • BERCEUSE AL ESPEJO DORMIDO

  • Duerme.

    No temas la mirada

    errante.

    Duerme.

    Ni la mariposa,

    ni la palabra,

    ni el rayo furtivo

    de la cerradura

    te herirn.

    Duerme.

    Como mi corazn,

    as t,

    espejo mo.

    Jardn donde el amor

    me espera.

    Durmete sin cuidado,

    pero despierta,

    cuando se muera el ltimo

    beso de mis labios.

    AIRE

    El aire,

    preado de arcos iris,

    rompe sus espejos

    sobre la fronda.

    CONFUSIN

    Mi corazn

    es tu corazn?

    Quin me refleja pensamientos?

    Quin me presta

    esta pasin

    sin races?

    Por qu cambia mi traje

    de colores?

    Todo es encrucijada!

    Por qu ves en el cielo

    tanta estrella?

    Hermano, eres t

    o soy yo?

    Y estas manos tan fras

    sonde aqul?

  • Me veo por los ocasos,

    y un hormiguero de gente

    anda por mi corazn.

    REMANSO

    El bho

    deja su meditacin,

    limpia sus gafas

    y suspira.

    Una lucirnaga

    rueda monte abajo,

    y una estrella

    se corre.

    El bho bate sus alas

    y sigue meditando.

    El jardn de las morenas

    Fragmentos

    PRTICO

    El agua

    toca su tambor

    de plata.

    Los rboles

    tejen el viento

    y las rosas lo tien

    de perfume.

    Una araa

    inmensa

    hace a la luna

    estrella.

    ACACIA

    Quin seg el tallo

  • de la luna?

    (Nos dej races

    de agua.)

    Qu fcil nos sera cortar las flores

    de la eterna acacia!

    ENCUENTRO

    Mara del Reposo,

    te vuelvo a encontrar

    junto a la fuentefra

    del limonar.

    Viva la rosa en su rosal!

    Mara del Reposo,

    te vuelvo a encontrar,

    los cabellos de niebla

    y ojos de cristal.

    Viva la rosa en su rosal!

    Mara del Reposo,

    te vuelvo a encontrar.

    Aquel guante de luna que olvid,

    dnde est?

    Viva la rosa en su rosal!

    LIMONAR

    Limonar.

    Momento

    de mi sueo.

    Limonar.

    Nido

    de senos

    amarillos.

    Limonar.

    Senos donde maman

    las brisas del mar.

  • Limonar.

    Naranjal desfallecido,

    naranjal moribundo,

    naranjal sin sangre.

    Limonar.

    T viste mi amor roto

    por el hacha de un gesto.

    Limonar,

    mi amor nio, mi amor

    sin bculo y sin rosa.

    Limonar

    Noche

    Suite para piano y voz emocionada

    RASGOS

    Aquel camino

    sin gente.

    Aquel camino.

    Aquel grillo

    sin hogar.

    Aquel grillo.

    Y esta esquila

    que se duerme.

    Esta esquila...

    PRELUDIO

    El buey

    cierra sus ojos

  • lentamente...

    (Calor de establo.)

    ste es el preludio

    de la noche.

    RINCN DEL CIELO

    La estrella

    vieja

    cierra sus ojos turbios.

    La estrella

    nueva

    quiere azular

    la sombra.

    (En los pinos del monte

    hay lucirnagas.)

    TOTAL

    La mano de la brisa

    acaricia la cara del espacio

    una vez

    y otra vez.

    Las estrellas entornan

    sus prpados azules

    una vez

    y otra vez.

    UN LUCERO

    Hay un lucero quieto,

    un lucero sin prpados.

    -Dnde?

    -Un lucero...

    En el agua dormida

    del estanque.

    FRANJA

  • El camino de Santiago.

    (Oh noche de mi amor,

    cuando estaba la pjara pinta

    pinta

    pinta

    en la flor del limn.)

    UNA

    Aquella estrella romntica

    (para las magnolias,

    para las rosas).

    Aquella estrella romntica

    se ha vuelto loca.

    Balaln,

    balaln.

    (Canta, ranita,

    en tu choza

    de sombra.)

    MADRE

    La osa mayor

    da teta a sus estrellas

    panza arriba.

    Grue

    y grue.

    Estrellas nias, huid;

    estrellitas tiernas!

    RECUERDO

    Doa Luna no ha salido.

    Est jugando a la rueda

    y ella misma se hace burla.

    Luna lunera.

  • HOSPICIO

    Y las estrellas pobres,

    las que no tienen luz,

    qu dolor,

    qu dolor,

    qu pena!,

    estn abandonadas

    sobre un azul borroso.

    Qu dolor,

    qu dolor,

    qu pena!

    COMETA

    En Sirio

    hay nios.

    VENUS

    brete, ssamo

    del da.

    Cirrate, ssamo

    de la noche.

    ABAJO

    El espacio estrellado

    se refleja en sonidos.

    Lianas espectrales.

    Arpa laberntica.

    LA GRAN TRISTEZA

    No puedes contemplarte

    en el mar.

  • Tus miradas se tronchan

    como tallos de luz.

    Noche de la tierra.

    Remansos

    Ciprs.

    (Agua estancada)

    Chopo.

    (Agua cristalina)

    Mimbre.

    (Agua profunda)

    Corazn.

    (Agua de pupila)

    REMANSILLO

    Me mir en tus ojos

    pensando en tu alma.

    Adelfa blanca.

    Me mir en tus ojos

    pensando en tu boca.

    Adelfa roja.

    Me mir en tus ojos.

    Pero estabas muerta!

    Adelfa negra.

    VARIACIN

    El remanso del aire

  • bajo la rama del eco.

    El remanso del agua

    bajo fronda de luceros.

    El remanso de tu boca

    bajo espesura de besos.

    REMANSO, CANCIN FINAL

    Ya viene la noche.

    Golpean rayos de luna

    sobre el yunque de la tarde.

    Ya viene la noche.

    Un rbol grande se abriga

    con palabras de cantares.

    Ya viene la noche.

    Si t vinieras a verme

    por los senderos del aire.

    Ya viene la noche.

    Me encontraras llorando

    bajo los lamos grandes.

    Ay morena!

    Bajo los lamos grandes.

    MEDIA LUNA

    La luna va por el agua.

    Cmo est el cielo tranquilo!

    Va segando lentamente

    el temblor viejo del ro

    mientras que una rama joven

    la toma por espejito.

  • Momentos de cancin

    CANCIN CON REFLEJO

    En la pradera bailaba

    mi corazn.

    (Era la sombra

    de un ciprs

    sobre el viento.)

    Y un rbol destrenzaba

    la brisa del roco,

    la brisa!

    Plata del tacto.

    Yo deca, recuerdas?

    (No me importa

    la estrella

    ni la rosa.)

    Recuerdas?

    Oh palabra perdida!

    Palabra

    sin horizonte!

    Recuerdas?...

    En la pradera bailaba

    mi corazn.

    (Era la sombra

    de un ciprs

    en el viento.)

  • CANCIN SIN ABRIR

    Sobre el ro

    los cnifes.

    Sobre el viento

    los pjaros.

    (Tarde descarriada.)

    Oh temblor

    de mi corazn!

    No temas,

    me ir lejos

    como un eco.

    Me ir lejos

    en un barco

    sin vela

    y sin remos.

    Oh temblor

    de mi corazn!

    SSAMO

    El reflejo

    es lo real.

    El ro

    y el cielo

    son puertas que nos llevan

    a lo Eterno.

    Por el cauce de las ranas

    o el cauce de los luceros

    se ir nuestro amor cantando

    la maana del gran vuelo.

    Lo real

    es el reflejo.

  • No hay ms que un corazn

    y un solo viento.

    No llorar! Da lo mismo

    estar cerca

    que lejos.

    Naturaleza es

    el Narciso eterno.

    CANCIN BAJO LGRIMAS

    En aquel sitio,

    muchachita de la fuente,

    que hay junto al ro,

    te quitar la rosa

    que te dio mi amigo,

    y en aquel sitio,

    muchachita de la fuente,

    yo te dar mi lirio.

    Por qu he llorado tanto?

    Es todo tan sencillo!...

    Esto lo har, no sabes?,

    cuando vuelva a ser nio.

    Ay! ay!

    Cuando vuelva a ser nio.

    PUESTA DE CANCIN

    Adolfo en 1921

    Despus de todo

    (la luna

    abre su cola

    de oro)

    ... Nada ...

    (la luna

    cierra su cola

    de plata.)

  • Lejos

    una estrella

    hiere al pavo real

    del cielo.

    PAISAJE SIN CANCIN

    Cielo azul.

    Campo amarillo.

    Monte azul.

    Campo amarillo.

    Por la llanura tostada

    va caminando un olivo.

    Un solo

    olivo.

    Cuatro baladas amarillas

    A Claudio Guilln

    I

    En lo alto de aquel monte

    hay un arbolito verde.

    Pastor que vas,

    pastor que vienes.

    Olivares soolientos

    bajan al llano caliente.

    Pastor que vas,

    pastor que vienes.

  • Ni ovejas blancas ni perro

    ni cayado ni amor tienes.

    Pastor que vas.

    Como una sombra de oro

    en el trigal te disuelves.

    Pastor que vienes.

    II

    La tierra estaba

    amarilla.

    Orillo, orillo,

    pastorcillo.

    Ni luna blanca

    ni estrellas lucan.

    Orillo, orillo,

    pastorcillo.

    Vendimiadora morena

    corta el llanto de la via.

    Orillo, orillo,

    pastorcillo.

    III

    Dos bueyes rojos

    en el campo de oro.

    Los bueyes tienen ritmo

    de campanas antiguas

    y ojos de pjaro.

    Son para las maanas

    de niebla, y sin embargo

  • horadan la naranja

    del aire, en el verano.

    Viejos desde que nacen

    no tienen amo

    y recuerdan las alas

    de sus costados.

    Los bueyes

    siempre van suspirando

    por los campos de Ruth

    en busca del vado,

    del eterno vado,

    borrachos de luceros

    a rumiarse sus llantos.

    Dos bueyes rojos

    en el campo de oro.

    IV

    Sobre el cielo

    de las margaritas ando.

    Yo imagino esta tarde

    que soy santo.

    Me pusieron la luna

    en las manos.

    Yo la puse otra vez

    en los espacios

    y el Seor me premi

    con la rosa y el halo.

    Sobre el cielo

    de las margaritas ando.

    Y ahora voy

    por este campo

    a librar a las nias

    de galanes malos

    y dar monedas de oro

    a todos los muchachos.

  • Sobre el cielo

    de las margaritas ando.

    Tres estampas del cielo

    Dedicadas a la seorita

    Argimira Lpez,

    que no me quiso

    I

    Las estrellas

    no tienen novio.

    Tan bonitas

    como son las estrellas!

    Aguardan un galn

    que las remonte

    a su ideal Venecia.

    Todas las noches salen a las rejas

    - oh cielo de mil pisos!

    y hacen lricas seas

    a los mares de sombra

    que las rodean.

    Pero aguardar, muchachas,

    que cuando yo me muera

    os raptar una a una

    en mi jaca de niebla.

    II

    GALN

    En todo el cielo

  • hay un estrello.

    Romntico y loco.

    Con frac

    de polvo

    de oro.

    Pero busca un espejo

    para mirar su cuerpo!

    Oh Narciso de plata

    en lo alto del agua!

    En todo el cielo

    hay un estrello.

    III

    VENUS

    Efectivamente

    tienes dos grandes senos

    y un collar de perlas

    en el cuello.

    Un infante de bruma

    te sostiene el espejo.

    Aunque ests muy lejana,

    yo te veo

    llevar la mano de iris

    a tu sexo,

    y arreglar indolente

    el almohadn del cielo.

    Te miramos con lupa,

    yo y el Renacimiento!

  • Estampas del mar

    A Emilio y Manolo

    El mar

    quiere levantar

    su tapa.

    Gigantes de coral

    empujan

    con sus espaldas.

    Y en las cuevas de oro

    las sirenas ensayan

    una cancin que duerma

    al agua.

    Veis las fauces

    y las escamas?

    Ante el mar

    tomad vuestras lanzas.

    CONTEMPLACIN

    Yo evoco

    el capitel corintio,

    la columna cada

    y los pinos.

    El mar clsico

    canta siempre en Esto

    y tiembla como el

    capitel corintio.

    NOCTURNO

    Miro las estrellas

    sobre el mar.

    Las estrellas son de agua,

  • gotas de agua!

    Miro las estrellas

    sobre mi corazn.

    Las estrellas son de aroma,

    ncleos de aroma!

    Miro la tierra

    llena de sombra.

    GUARDIAS

    En el reino del mar

    hay dos guardas,

    San Cristbal

    y Polifemo.

    Tres ojos

    sobre el viajero errante!

    DOS ESTRELLAS DEL MAR

    En la torre

    de la madrugada

    Mara ensea a Venus

    a tejer lana.

    Venus le muestra todas

    sus miradas

    y Mara se asombra.

    En la torre

    de la madrugada.

  • Historietas del viento

    I

    El viento vena rojo

    por el collado encendido

    y se ha puesto verde, verde

    por el ro.

    Luego se pondr violeta,

    amarillo y...

    ser sobre los sembrados

    un arco iris tendido.

    II

    Viento estancado.

    Arriba el sol.

    Abajo

    las algas temblorosas

    de los lamos.

    Y mi corazn

    temblando.

    Viento estancado

    A las cinco de la tarde

    sin pjaros.

    III

    La brisa

    es ondulada

    como los cabellos

    de algunas muchachas.

    Como los marecitos

    de algunas viejas tablas.

    La brisa

    brota como el agua,

    y se derrama

    -tenue blsamo blanco-

    por las caadas,

  • y se desmaya

    al chocar con lo duro

    de la montaa.

    IV

    ESCUELA

    Maestro

    Qu doncella se casa

    con el viento?

    Nio

    La doncella de todos

    los deseos.

    Maestro

    Qu le regala

    el viento?

    Nio

    Remolinos de oro

    y mapas superpuestos.

    Maestro

    Ella le ofrece algo?

    Nio

    Su corazn abierto.

    Maestro

    Decid cmo se llama.

    Nio

    Su nombre es un secreto.

    (La ventana

    del colegio

    tiene una cortina

    de luceros.)

  • Canciones bajo la luna

    LUNA LLENA

    Al salir

    Cuando sale la luna

    se pierden las campanas

    y aparecen las sendas

    de lo impenetrable.

    Cuando sale la luna

    el mar cubre la tierra,

    y el corazn se siente

    isla del infinito.

    La luna est ms lejos

    que el sol y las estrellas.

    Es perfume y recuerdo,

    pompa de azul marchito.

  • COLORES

    Sobre Pars la luna

    tiene color violeta

    y se pone amarilla

    en las ciudades muertas.

    Hay una luna verde

    en todas las leyendas,

    luna de telaraa

    y de rota vidriera.

    Y sobre los desiertos

    es profunda y sangrienta.

    Pero la luna blanca,

    la luna verdadera,

    slo luce en los quietos

    cementerios de aldea.

    CAPRICHO

    En la red de la luna,

    araa del cielo,

    se enredan las estrellas

    revoladoras.

    SALOM Y LA LUNA

    La luna es una hermana

    de Salom. (Seora

    que en una historia antigua

    muerde una muerta boca.)

    Salom era el ocaso.

    Un ocaso

    de ojos

    y de labios.

    La luna es el perpetuo

  • ocaso.

    Tarde

    continuada

    y delirante.

    El amor sin orillas

    de Salom al oso

    no fue por su palabra;

    fue porque su cabeza,

    medusa del desierto,

    era una luna negra,

    una luna imposible,

    ahumada y soolienta.

    Salom es la crislida

    y la luna el capullo,

    crislida de sombra

    bajo un palacio oscuro.

    La luna tiembla sobre el agua,

    Salom tiembla sobre el alma.

    Oh sublime belleza,

    querer hacer de un beso

    una estrella!

    En el medioda

    o en la noche oscura,

    si hablis de Salom,

    saldr la luna.

    Sombra

    PUEBLO

    Entre tejado y tejado

    va el alto ro del cielo.

    Sobre las acacias viejas

  • duermen pjaros errantes.

    Y la torre sin campanas

    (Santa Luca de piedra)

    se afirma en la tierra dura.

    MEMENTO

    Cuando muramos

    nos llevaremos

    una serie de vistas

    del cielo.

    (Cielos de amanecer

    y cielos nocturnos.)

    Aunque me han dicho

    que muertos

    no se tiene

    ms recuerdo

    que el de un cielo de Esto,

    un cielo negro

    estremecido

    por el viento.

    MURCILAGO

    El murcilago,

    elixir de la sombra,

    verdadero amante de la estrella,

    muerde el taln del da.

    FIN

    Ya pas

    el fin del mundo

    y ha sido

    el juicio tremendo.

    Ya ocurri catstrofe

  • de los luceros.

    El cielo de la noche

    es un desierto,

    un desierto de lmparas

    sin dueo.

    Muchedumbres de plata

    se fueron

    a la densa levadura

    del misterio.

    Y en el barco de la Muerte

    vamos los hombres, sintiendo

    que jugamos a la vida,

    que somos espectros!

    Mirando a los cuatro puntos

    todo est muerto.

    El cielo de la noche

    es una ruina,

    un eco.

    OSA MAYOR Juguete

    ramos siete.

    Dnde estamos?

    Da tristeza

    ver el carro

    sin auriga

    ni caballos.

    Sobre el cielo

    da una pena

    suave verte soando

    con un camino de oro

    y boreales caballos.

  • Sobre el negro cristalino

    qu hars cuando tengas, carro,

    con la lluvia de los tiempos

    tus luceros oxidados!

    No piensas nunca meterte

    bajo techado?

    Yo te uncira una noche

    a dos grandes bueyes blancos.

    PONIENTE

    Sobre el cielo exquisito,

    ms all del violado,

    hay nubes desgarradas

    como camelias grises,

    y un deseo de alas

    sobre las crestas fras.

    Un ocaso teido

    de sombra como ste

    dar una noche inmensa

    sin brisa ni caminos.

    CUMBRE

  • Cuando llegue a la cumbre...

    (Oh corazn desolado,

    San Sebastin de Cupido.)

    Cuando llegue a la cumbre...

    Dejadme cantar!

    Porque cantando

    no ver los oteros sombros

    ni los rebaos

    que en lo profundo van

    sin pastores.

    Cantando,

    ver la nica estrella

    que no existe.

    Cuando llegue a la cumbre...

    cantando.

    SAUCE

    Jeremas

    exquisito!

    Las lgrimas asoman

    por tus ojos fros,

    mas tu llanto no rueda

    sobre el camino.

    Abres bajo tus ramas

    un abismo

    y matizas con gestos

    el color vespertino.

    Oh Jeremas

    exquisito!

  • El regreso

    Yo vuelvo

    por mis alas.

    Dejadme volver!

    Quiero morirme siendo

    amanecer!

    Quiero morirme siendo

    ayer!

    Yo vuelvo

    por mis alas.

    Dejadme retornar!

    Quiero morirme siendo

    manantial.

    Quiero morirme fuera

    de la mar.

    CORRIENTE

    El que camina

    se enturbia.

    El agua corriente

    no ve las estrellas.

    El que camina

    se olvida.

    Y el que se para

    suea.

    HACIA...

  • Vuelve,

    corazn!,

    vuelve.

    Por las selvas del amor

    no vers gentes.

    Tendrs claros manantiales.

    En lo verde,

    hallars la rosa inmensa

    del siempre.

    Y dirs: Amor!, amor!,

    sin que tu herida

    se cierre.

    Vuelve,

    corazn mo!,

    vuelve.

    RECODO

    Quiero volver a la infancia

    y de la infancia a la sombra.

    Te vas, ruiseor?

    Vete.

    Quiero volver a la sombra

    y de la sombra a la flor.

    Te vas, aroma?

    Vete!

    Quiero volver a la flor

    y de la flor

    a mi corazn.

    Te vas, amor?

    Adis!

  • (A mi desierto corazn!)

    DESPEDIDA

    Me despedir

    en la encrucijada

    para entrar en el camino

    de mi alma.

    Despertando recuerdos

    y horas malas

    llegar al huertecillo

    de mi cancin blanca

    y me echar a temblar como

    la estrella de la maana.

  • RFAGA

    Pasaba mi nia,

    qu bonita iba!,

    con su vestidito

    de muselina

    y una mariposa

    prendida.

    Sguela, muchacho,

    la vereda arriba!

    Y si ves que llora

    o medita,

    pntale el corazn

    con purpurina

    y dile que no llore

    si queda solita.

    Horas de verano

    Afilador.

    (Las tres.)

    El alma de Pan

    en los labios

    del afilador.

    Qu tristeza

    tan polvorienta!

    Evoca

    un verde remanso

    y una cadera

    entre las ramas.

    El hombre lleva

    la rueda

  • de Santa Catalina.

    Qu tristeza!

    LAS CINCO Potro

    Por la calle sin gente

    pasa un caballo negro,

    el caballo errabundo

    de los malos sueos.

    El aire del poniente

    viene a lo lejos,

    una ventana gime

    con el viento.

    LAS SEIS

    Los pjaros empujan

    a la tarde

    y llevan con sus picos

    la cola azul del da.

    El ocaso tatuado

    de veletas

    sostiene la barca

    de la media luna.

    Y en la fuente fra

    canta la culebra.

    LAS SIETE

    La primera estrella.

    Todo mira hacia Venus

    y ella como una nia

    que se cae en el aljibe

    tiembla y tiembla

    como diciendo:

  • Volver maana?

    LAS OCHO

    El cielo se arranc

    la venda

    y el dragn de los mil ojos

    nos lame con sus lenguas

    de viento.

    Venus se extrava

    por las muchedumbres

    y yo me acuerdo de una novia

    que no he tenido nunca.

    LAS NUEVE

    Azul sin sangre.

    Aire de terciopelo.

    Oh amiga ma!

    Podemos

    bajar a la cisterna del corazn,

    podemos

    por el ro de las palabras

    llegar a la isla

    del beso.

    Podemos

    hundirnos en el olivar

    sediento.

    VILANO DE NOCHE

    Sobre el agua

    que late entre las zarzas

    las estrellas

    se alargan.

  • La selva de los relojes

    Entr en la selva

    de los relojes.

    Frondas de tic-tac,

    racimos de campanas

    y bajo la hora mltiple,

    constelaciones de pndulos.

    Los lirios negros

    de las horas muertas,

    los lirios negros

    de las horas nias.

    Todo igual!

    Y el oro del amor?

    Hay una hora tan slo.

    Una hora tan slo!

    La hora fra!

    MALEZA

    Me intern

    por la hora mortal.

    Hora de agonizante

    y de ltimos besos.

    Grave hora en que suean

    las campanas cautivas.

    Relojes de cuco,

    sin cuco.

    Estrella mohosa

    y enormes mariposas

    plidas.

    Entre el boscaje

    de suspiros

    el aristn

  • sonaba

    que tena cuando nio.

    Por aqu has de pasar,

    corazn!

    Por aqu,

    corazn!

    VISTA GENERAL

    Toda la selva turbia

    es una inmensa araa

    que teje una red sonora

    a la esperanza.

    A la pobre virgen blanca

    que se cra con suspiros y miradas!

    L

    La verdadera esfinge

    es el reloj.

    Edipo nacer de una pupila.

    Limita al Norte

    con el espejo

    y al Sur

    con el gato.

    Doa Luna es una Venus.

    (Esfera sin sabor.)

    Los relojes nos traen

    los inviernos.

    (Golondrinas hierticas

    emigran el verano.)

    La madrugada tiene

    un pleamar de relojes

    donde se ahoga el sueo.

    Los murcilagos nacen

    de las esferas

    y el becerro los estudia

    preocupado.

    Cundo ser el crepsculo

  • de todos los relojes?

    Cundo esas lunas blancas

    se hundirn por los montes?

    ECO DEL RELOJ

    Me sent

    en un claro del tiempo.

    Era un remanso de silencio,

    de un blanco

    silencio.

    Anillo formidable

    donde los luceros

    chocaban con los doce flotantes

    nmeros negros.

    MEDITACIN PRIMERA Y LTIMA

    El Tiempo

    tiene color de noche.

    De una noche quieta.

    Sobre lunas enormes,

    la Eternidad

    est fija en las doce.

    Y el Tiempo se ha dormido

    para siempre en su torre.

    Nos engaan

    todos los relojes.

    El Tiempo tiene ya

    horizontes.

    LA HORA ESFINGE

    En tu jardn se abren

    las estrellas malditas.

    Nacemos bajo tus cuernos

    y morimos.

    Hora fra!

    Pones un techo de piedra

  • a las mariposas lricas

    y, sentada en el azul,

    cortas alas

    y lmites.

    [UNA... DOS... Y TRES]

    Una... dos... y tres.

    Son la hora en la selva.

    El silencio

    se llen de burbujas

    y un pndulo de oro

    llevaba y traa

    mi cara por el aire.

    Son la hora en la selva!

    Los relojes de bolsillo,

    como bandadas de moscas,

    iban y venan.

    En mi corazn sonaba

    el reloj sobredorado

    de mi abuelita.

    lbum blanco

    A Claudio de la Torre

    Eloisa Lpez tena un lbum sin escribir. Y se ha muerto. Pobrecita! Pero yo se lo

    escribo con tinta blanca. Ruego a los lectores una oracin por su alma. El arzobispo de

    Constantinopla se ha dignado conceder 100 das de indulgencia. Ah! Si ustedes la hubiesen

    conocido... PRIMERA PGINA

    Cerezo en flor

    En Marzo

    te marchas a la luna.

    Dejas aqu tu sombra.

    Las praderas se tornan

    irreales.

  • Llueven pjaros blancos.

    Y yo me pierdo en tu bosque

    gritando:

    brete, ssamo!

    Ser nio?

    Gritando:

    brete, ssamo!

    SEGUNDA PGINA

    Cisne

    Ni Pan

    ni Leda.

    (Sobre tus alas

    se duerme la luna llena.)

    Ni bosque

    ni siringa.

    (Por tu plumaje

    resbala la noche fra.)

    Ni carne rubia

    ni besos.

    (De escarcha y sueo remolcas

    a la barca de los muertos.)

    TERCERA PGINA

    Inventos

    (Estrellas de la nieve)

    Hay montaas

    que quieren ser

    de agua,

    y se inventan estrellas

    sobre la espalda.

  • (Nubes)

    Y hay montaas

    que quieren tener

    alas,

    y se inventan las nubes

    blancas.

    CUARTA PGINA

    Nieve

    Las estrellas

    se estn desnudando.

    Camisas de estrellas

    caen sobre el campo.

    QUINTA PGINA

    Amanece

    La cresta del da

    asoma.

    Cresta blanca

    de un gallo de oro.

    La cresta de mi risa

    asoma.

    Cresta de oro

    de un gallo de sombra.

    LTIMA PGINA

    Baladilla de Eloisa muerta

    (Palabras de un estudiante)

    Estabas muerta,

    como al final

    de todas las novelas.

    Yo no te amaba, Elosa.

    Y eras tan tierna!

    Con msica de Bcquer

  • o de Espronceda,

    t me soabas guapo

    con melena,

    y yo te daba besos

    sin darme cuenta

    de que no te deca:

    oh labios de cereza!

    Qu gran romntica

    eras.

    Bebas vinagre a escondidas

    de tu abuela.

    Te pusiste como una

    celinda de primavera.

    Y yo estaba enamorado

    de otra. No ves qu pena?

    De otra que estaba escribiendo

    un nombre sobre la arena.

    Cuando yo llegu a tu casa

    estabas muerta

    entre cirios y entre albahacas,

    igual que en las novelas.

    Rodeaban tu barquita

    las nias de tu escuela.

    Habas bebido el vinagre

    de la botella eterna.

    Tiln taln

    te lloraban

    las campanas tiernas.

    Taln tiln

    en la tarde

    con dolor de cabeza.

    Quiz soabas durmiendo

    que eras Ofelia

    sobre un lago azul de agua

    calenturienta.

  • Tiln taln

    que te lloren

    las campanas tiernas!

    Taln tiln

    en la tarde

    con dolor de cabeza!

    Secretos

    FUENTE

    Ante la fuente fra

    Cristo medita

    con una semilla

    entre las manos.

    (Est sediento el cauce

    de la brisa.)

    Ante la fuente clara

    Cristo y su alma

    luchan por la palabra

    que duerme todava.

    Pero la fuente mana!

    PAN

    Ved qu locura!

    Los cuernos de Pan

    se han vuelto alas

    y como una mariposa

    enorme

    vuela por su selva de fuego.

    Ved qu locura!

    LEADOR

  • En el crepsculo

    yo caminaba.

    Dnde vas?, me decan.

    A cazar estrellas claras.

    Y cuando las colinas

    dorman, regresaba

    con todas las estrellas

    en la espalda.

    Todo el haz

    de la noche blanca!

    ESPEJO

    Mi cintillo de oro

    se perdi en el espejo.

    (Quiero decir

    que nunca existi.)

    En los espejos se pierden

    las cosas que no existen.

    Mi cintillo era de oro:

    de sol o de margaritas?

    Qu mujer me lo dio?

    Preguntrselo a mi espejo.

    Por... ms... que...

    yo no tengo espejo!

    PUERTA ABIERTA

    Las puertas abiertas

    dan siempre a una sima

    mucho ms profunda

    si la casa es vieja.

  • La puerta

    no es puerta

    hasta que un muerto

    sale por ella

    y mira doliente, crucificada,

    a la madrugada sanguinolenta.

    Qu trabajo nos cuesta

    traspasar los umbrales

    de todas las puertas!

    Vemos dentro una lmpara

    ciega

    o una nia que teme

    las tormentas.

    La puerta es siempre la clave

    de la leyenda.

    Rosa de dos ptalos

    que el viento abre

    y cierra.

    He visto las colas del viento,

    las flores de la brisa.

    He visto el pjaro Grifn

    y la torre de Delgadina.

    De dnde vienes,

    de dnde?

    He visto un camino azul

    y unas nias

    que iban cantando el romance

    de la verde oliva.

    No sabes de dnde vengo,

    nia ma?

    Pues... de tu ltima

    sonrisa.

  • BOTICA

    Esos venenos

    son de la India?

    Y esos perfumes

    son de la Arabia?

    (El boticario solloza

    junto a su nio muerto.)

    Aquel blsamo cura

    heridas de amor?

    Y el agua sonrosada

    de la juventud?

    (El boticario se inclina

    sobre su nio muerto.)

    Dgame: Alguna rosa

    da un veneno violento?

    Qu tiene esa redoma?

    No ve usted cmo tiembla?

    ......

    (Entre los sollozos

    se oye un batir de alas

    dentro de todos los frascos.)

    DONCELLITA

    Por qu te recuerdo

    bajo una lluvia de Marzo

    al salir del colegio?

    Pajarita de las nieves

    te llamaban. Un interno

  • te dio su rosa. Luego

    se te cay la pluma

    con que escribo los versos.

    Tan pequeita, y t

    sin saberlo!

    Seis canciones de anochecer

    HORIZONTE

    Sobre la verde bruma

    se cae un sol sin rayos.

    La ribera sombra

    suea al par que la barca

    y la esquila inevitable

    traba la melancola.

    En mi alma de ayer

    suena un tamborcillo

    de plata.

  • PESCADORES

    El rbol gigantesco

    pesca con sus lianas

    topos raros

    de la tierra.

    El sauce sobre el remanso

    se pesca sus ruiseores

    ... pero en el anzuelo verde

    del ciprs la blanca luna

    no morder... ni

    tu corazn al mo,

    morenita de Granada.

    SOLITARIO

    Zujaira

    Sobre el piansimo

    del oro...

    mi chopo

    solo.

  • Sin un pjaro

    armnico.

    .........

    Sobre el piansimo

    del oro...

    El ro a sus pies

    corre grave y hondo

    bajo el piansimo

    del oro...

    Y yo con la tarde

    sobre mis hombros

    como un corderito

    muerto por el lobo

    bajo el piansimo

    del oro.

    DELIRIO

    Disuelta la tarde

    y en silencio el campo.

    Los abejarucos

    vuelan suspirando.

    Los fondos deliran

    azules y blancos.

    El paisaje tiene

    abiertos sus brazos.

    Ay, Seor, Seor,

    esto es demasiado!

    MEMENTO

    Aire de llano

  • La luna ya se ha muerto

    do-re-mi

    la vamos a enterrar

    do-re-fa

    en una rosa blanca

    do-re-mi

    con tallo de cristal

    do-re-fa.

    Baj hasta la chopera

    do-re-mi

    se enred en el zarzal

    do-re-fa.

    Me alegro porque era

    do-re-mi

    presumida de ms!

    do-re-fa.

    No hubo para ella nunca

    do-re-mi

    marido ni galn

    do-re-fa.

    Cmo se pondr el cielo!

    do-re-mi.

    Ay cmo se pondr!

    do-re-fa

    cuando llegue la noche

    do-re-mi

    y no la vea en el mar

    do-re-fa.

    Acudid al entierro!

    do-re-mi

    cantando el po pa

    do-re-fa.

    Se ha muerto la Mambruna

    do-re-mi

    de la cara estelar

    do-re-fa.

    Campanas de las torres

    do-re-mi

    doblar que te doblar!

  • do-re-fa.

    Culebras de las fuentes

    do-re-mi

    cantar que te cantar!

    do-re-fa.

    LTIMA LUZ

    En la confusin

    azul

    una hoguera lejana

    (lanzada en el corazn

    del monte).

    Los pjaros juegan

    al viento entre los chopos

    y se ahondan

    los cauces.

    Suite del agua

    PAS

    En el agua negra,

    rboles yacentes,

    margaritas

    y amapolas.

    Por el camino muerto

    van tres bueyes.

    Por el aire,

    el ruiseor,

    corazn del rbol.

    TEMBLOR

    En mi memoria turbia

  • con un recuerdo de plata,

    piedra de roco.

    En el campo sin monte,

    una laguna clara,

    manantial apagado.

    ACACIA

    Quin seg el tallo

    de la luna?

    (Nos dej races

    de agua.)

    Qu fcil nos sera cortar las flores

    de la eterna acacia!

    CURVA

    Con un lirio en la mano

    te dejo.

    Amor de mi noche!

    Y viudita de mi astro

    te encuentro.

    Domador de sombras

    mariposas,

    sigo por mi camino.

    Al cabo de mil aos

    me vers.

    Amor de mi noche!

    Por la vereda azul,

    domador de sombras

    estrellas,

    seguir mi camino.

    Hasta que el Universo

    quepa en mi corazn.

  • COLMENA

    Vivimos en celdas

    de cristal,

    en colmena de aire!

    Nos besamos a travs

    de cristal.

    Maravillosa crcel,

    cuya puerta

    es la luna!

    Cruz

    NORTE

    Las estrellas fras

    sobre los caminos.

    Hay quien va y quien viene

    por selvas de humo.

    Las cabaas suspiran

    bajo la aurora perpetua.

    En el golpe

    del hacha

    valles y bosques tienen

    un temblor de cisterna!

    En el golpe

    del hacha!

    SUR

    Sur,

    espejismo,

    reflejo.

    Da lo mismo decir

    estrella que naranja,

    cauce que cielo.

    Oh la flecha,

    la flecha!

  • El Sur

    es eso:

    una flecha de oro,

    sin blanco! sobre el viento.

    ESTE

    Escala de aroma

    que baja

    al Sur

    (por grados conjuntos).

    OESTE

    Escala de luna

    que asciende

    al Norte

    (cromtica).

    Tres crepsculos

    A Conchita, mi hermana

    I

    La tarde est

    arrepentida

    porque suea

    con el medioda.

    (rboles rojos y nubes

    sobre las colinas.)

    La tarde solt su verde

    cabellera lrica

    y tiembla dulcemente

    ... le fastidia

    ser tarde habiendo sido

    medioda.

  • II

    Ahora empieza la tarde!

    Por qu? Por qu?

    ... Ahora mismo

    he visto al da inclinarse

    como un lirio.

    La flor de la maana

    dobla el tallo

    ... ahora mismo...

    La raz de la tarde

    surge de lo sombro.

    III

    Adis, sol!

    Bien s que eres la luna,

    pero yo

    no lo dir a nadie,

    sol.

    Te ocultas

    detrs del teln

    y disfrazas tu rostro

    con polvos de arroz.

    De da, la guitarra

    del labrador;

    de noche, la mandolina

    de Pierrot.

    Qu ms da!

    Tu ilusin

    es crear el jardn

    multicolor.

    Adis, sol!

    No olvides lo que te ama

    el caracol,

    la viejecilla

    del balcn,

    y yo...

    que juego al trompo con mi...

    corazn.

  • Bosque sexual

  • Palimpsestos

    A Jos Moreno Villa

    I CIUDAD

    El bosque centenario

    penetra en la ciudad

    pero el bosque est dentro

    del mar.

    Hay flechas en el aire

    y guerreros que van

    perdidos entre ramas

    de coral.

    Sobre las casas nuevas

    se mueve un encinar

    y tiene el cielo enormes

    curvas de cristal.

    II

    CORREDOR

    Por los altos corredores

    se pasean dos seores

    (Cielo

    nuevo.

    Cielo

    azul!)

    ... se pasean dos seores

    que antes fueron blancos monjes,

    (Cielo

    medio.

    Cielo

  • morado!)

    ... se pasean dos seores

    que antes fueron cazadores.

    (Cielo

    viejo.

    Cielo

    de oro!)

    ... se pasean dos seores

    que antes fueron...

    (Noche.)

    III

    PRIMERA PGINA

    A Isabel Clara, mi ahijada

    Fuente clara.

    Cielo claro.

    Oh, cmo se agrandan

    los pjaros!

    Cielo claro.

    Fuente clara.

    Oh, cmo relumbran

    las naranjas!

    Fuente.

    Cielo.

    Oh, cmo el trigo

    es tierno!

    Cielo.

  • Fuente.

    Oh, cmo el trigo

    es verde!

    La palmera

    Poema tropical

    LMITES

    En el cielo la estrella

    y el pulpo abajo.

    (La palmera de Satn

    y la palmera de Zoroastro.)

    La estrella flota

    en el espacio.

    El pulpo flota

    en el Mediterrneo.

    La palmera de Satn

    y la palmera de Zoroastro

    se mueven cuando agitan

    los brazos.

    LA PALMERA

    Entre el cielo y el agua

    abres tu inmensa flor.

    Rosa viva del viento

    mediterrneo.

    Te dan aire de negra

    tus adornos de dtiles

    y evocas la Gorgona

    pensativa.

    Eres junto a las olas

  • una araa-cigea

    que teje sal y yodo

    de los ritmos

    y que suea en la arena

    bajo su pie escamado

    un pas de remansos

    azules.

    MEDITERRNEO

    Mar latino!

    Palmeras

    y olivos!

    El grito de la palma

    o el silencio del pino.

    Siento como una inmensa

    columna subir tu ruido

    por encima de todos

    los mares.

    Mar latino!

    Entre las torres blancas

    y el capitel corintio

    te cruz patinando

    la voz de Jesucristo.

    Mar latino!

    El gran falo del cielo

    te dio su calor. Tu ritmo

    fluye en ondas concntricas

    de Venus, que es tu ombligo.

    Mar latino!

    Guardas gestos inmortales

    y eres humilde. Yo he visto

    salir marineros ciegos

    y volver a su destino.

    Oh Pedro de los mares!

    Oh magnfico

    desierto coronado

    de palmeras y olivos!

  • LA PALMA

    La palma es el aire.

    Ni el ro ni Eva

    logran plasmar curvas

    tan perfectas.

    La palma es el oro.

    Ni el limn ni el trigo

    logran ir ms all

    del amarillo.

    La palma es la Gracia.

    En nuestras manos

    llega a la cumbre azul

    del desmayo.

    Newton

    En la nariz de Newton

    cae la gran manzana,

    blido de verdades.

    La ltima que colgaba

    del rbol de la Ciencia.

    El gran Newton se rasca

    sus narices sajonas.

    Haba una luna blanca

    sobre el encaje brbaro

    de las hayas.

    EN EL BOSQUE

    Los gnomos

    de los secretos

    se mesan

  • los cabellos.

    Amarran a la Muerte

    y ordenan a los ecos

    que despisten al hombre

    con sus espejos.

    En un rincn

    est el secreto

    revelado,

    muerto.

    Lo lloran

    sus compaeros.

    Es un joven azul

    con los pies de hierro

    que tiene entre las cejas

    un lucero.

    Lo lloran

    sus compaeros.

    El lago verde tiembla.

    Hace viento.

    ARMONA

    Las olas

    riman con el suspiro

    y la estrella

    con el grillo.

    Se estremece en la crnea

    todo el cielo fro,

    y el punto es una sntesis

    del infinito.

    Pero quin une olas

    con suspiros

    y estrellas

    con grillos?

    Esperar que los Genios

    tengan un descuido.

    Las claves van flotando

    entre nosotros mismos.

    EL LTIMO PASEO DEL FILSOFO

  • Newton

    paseaba.

    La muerte lo iba siguiendo

    rasgueando su guitarra.

    Newton

    paseaba.

    Los gusanos roan

    su manzana.

    Sonaba el viento en los rboles

    y el ro bajo las ramas.

    Wordsworth hubiera llorado.

    El filsofo tomaba

    posturas inverosmiles

    esperando otra manzana.

    Corra por el camino

    y tendase junto al agua

    para hundir su rostro en

    la gran luna reflejada.

    Newton

    lloraba.

    En un alto cedro dos

    viejos bhos platicaban

    y en la noche lentamente

    el sabio volva a su casa

    soando inmensas pirmides

    de manzanas.

    RPLICA

    Adn comi la manzana

    de la virgen Eva.

    Newton fue un segundo Adn

    de la Ciencia.

    El primero conoci

    la belleza.

    El segundo un Pegaso

  • cargado de cadenas.

    Y no fueron culpables.

    Las dos manzanas eran

    sonrosadas

    y nuevas

    pero de amarga

    leyenda.

    Los dos senos cortados

    de la nia inocencia!

    PREGUNTA

    Por qu fue la manzana

    y no

    la naranja

    o la polidrica

    granada?

    Por qu fue reveladora

    esta fruta casta,

    esta poma suave

    y plcida?

    Qu smbolo admirable

    duerme en sus entraas?

    Adn, Paris y Newton

    la llevan en el alma

    y la acarician sin

    adivinarla.

    Cco. Cuco. Cuc

    A Enrique Dez-Canedo y a Teresa

    El cuco divide la noche

    con sus bolitas de cobre.

    El cuco no tiene pico,

    tiene dos labios de nio

  • que silban desde los siglos.

    Gato,

    esconde tu rabo!

    El cuco va sobre el Tiempo

    flotando como un velero

    y mltiple como un eco.

    Urraca,

    esconde tu pata!

    Frente al cuco est la esfinge,

    el smbolo de los cisnes

    y la nia que no re.

    Zorra,

    esconde tu cola!

    Un da se ir en el viento

    el ltimo pensamiento

    y el penltimo deseo.

    Grillo,

    vete bajo el pino!

    Slo el cuco quedar

    partiendo la eternidad

    con bolitas de cristal.

    LA CANCIN DEL CUCO VIEJO

    En el arca de No

    cant.

    Y en la fronda

    de Matusaln.

    No era un hombre bueno.

    A Matusaln

    le llegaba la barba

  • a los pies.

    Lanzo mis silbidos

    al cielo. Logr

    que cayeran vacos

    otra vez.

    Sobre la noche canto.

    Cantar

    aunque estis dormidos.

    Cantar

    por todos los siglos

    de los siglos. Amn.

    PRIMER NOCTURNO DEL CUCO

    A pesar de sus ojos

    la noche va perdida.

    (Slo el cuco

    permanece.)

    En la caavera lloran

    vientos indecisos.

    (Slo el cuco

    permanece.)

    Por aqu? Por all? El alma

    ha perdido su olfato.

    (Slo el cuco

    permanece.)

    SEGUNDO NOCTURNO DEL CUCO

    El cuco dice que S.

    Algrate, colorn!

    El ngel abre las puertas

  • de su jardn.

    El cuco dice que No.

    Canta, tierno ruiseor!

    Tendremos en cada ojo

    una flor.

    Oh, qu maravillosa

    resurreccin!

    Que No!

    Que S!

    (La noche

    se iba por su confn.)

    Que S!

    Que No!

    (Apurando sus gotas

    va el reloj.)

    LTIMO NOCTURNO

    Oh, qu estremecimiento!

    El cuco ha llegado,

    huyamos!

    Si t vieras a la amarga

    adelfa sollozar,

    qu haras, amor mo?

    Pensara en el mar.

    Si t vieses que la luna

    te llama cuando se va,

    qu haras, amor mo?

    Suspirar.

    Si yo te dijese un da:

  • Te amo desde mi olivar,

    qu haras, amor mo?

    Clavarme un pual!

    Oh, qu estremecimiento!

    El cuco ha llegado,

    huyamos!

    Madrigales

    [I]

    Como las ondas concntricas

    sobre el agua,

    as en mi corazn

    tus palabras.

    Como un pjaro que choca

    con el viento,

    as sobre mis labios

    tus besos.

    Como fuentes abiertas

    frente a la tarde,

    as mis ojos negros

    sobre tu carne.

    II

    Estoy preso

    en tus crculos

    concntricos.

    Como Saturno

    llevo

    los anillos

    de mi sueo!

  • Y no acabo de hundirme

    ni me elevo.

    Amor mo!

    Mi cuerpo

    flota sobre el remanso

    de los besos.

    Castillo de fuegos artificiales quemado con motivo del

    cumpleaos del poeta

    PRIMERA COHETERA

    T t t t

    yo yo yo yo.

    Quin?...

    ni t

    ni yo!

    RUEDA CATALINA

    Doa Catalina

    tena un pelo de oro

    entre su cabellera

    de sombra.

    (A quin espero,

    Dios mo,

    a quin espero?)

    Doa Catalina

    camina despacio

    poniendo estrellitas

    verdes en la noche.

    (Ni aqu

    ni all

    sino aqu.)

  • Doa Catalina

    se muere y le nace

    una granadeta de luz

    en la frente.

    Chissssssssssssssssss!

    COHETES

    Seis lanzas de fuego

    suben.

    (La noche es una guitarra.)

    Seis sierpes enfurecidas.

    (Por el cielo vendr San Jorge.)

    Seis sopletes de oro y viento.

    (Se agrandar la ampolla

    de la noche?)

    JARDN CHINO

    En bosquecillos

    de grana y magnesio

    saltan las princesitas.

    Chispas.

    Hay una lluvia de naranjas

    sobre el zig-zag de los cerezos

    y entre comas vuelan azules

    dragoncillos amaestrados.

    Nia ma, este jardincillo

    es para verlo en los espejitos

  • de tus uas.

    Para verlo en el biombo

    de tus dientes.

    Y ser como un ratoncito.

    GIRASOL

    Si yo amara a un cclope

    suspirara

    bajo esta mirada

    sin prpados.

    Oh girasol de fuego!

    El gento lo mira

    sin estremecimiento.

    Ojo de la providencia

    ante una muchedumbre

    de Abeles!

    Girasol girasol!

    Ojo salvaje y puro

    sin la irona del guio!

    Girasol girasol!

    Estigma ardiente sobre

    los gentos de feria!

    DISCO DE RUBES

    Gira y se estremece

    como loco.

    No sabe nada

    y lo sabe todo?

    Todas las flechas

    a este corazn

    redondo!

    Todas las pupilas

  • a este corazn

    redondo.

    Lupa sangrienta entre

    el misterio

    y nosotros!

    CAPRICHO

    Tris!...

    Has cerrado

    los ojos?

    Triis!...

    Ms an? Ser una

    muchacha de brisa.

    Yo soy un hombre.

    Tras!...

    Ya te vas, amor mo,

    y tus ojos?

    Traaas!...

    Si los cierras, yo tengo dos plumas.

    Lo oyes? Dos plumas que miran

    de mi pavo real.

    Tris!...

    Me has odo?

    Traaas!...

    JUEGO DE LUNAS

    La luna est redonda.

    Alrededor, una noria

    de espejos.

    Alrededor, una rueda

    de agua.

    La luna se ha hecho lminas

    como un pan de oro blanco.

    La luna

    se ha deshojado

    lunas.

    Bandadas de fuentes

  • vuelan por el aire.

    En cada fuente yace

    una luna difunta.

    La luna

    se hace un bastn de luz

    en el torrente claro.

    La luna,

    como una gran vidriera

    rota, cae sobre el mar.

    La luna

    se va por un biombo

    infinito.

    Y la Luna? Y la Luna?

    (Arriba,

    no queda ms que un aro

    de cristalillos.)

    Caracol

    Caracol,

    estte quieto.

    Donde t ests

    estar el centro.

    La piedra sobre el agua

    y el grito en el viento

    forman las imgenes

    puras de tu ensueo.

    Las circunferencias

    imposibles en tu cuerpo.

    Caracol, col, col, col

    estte quieto.

    Donde t ests

  • estar el centro.

    ESPIRAL

    Mi tiempo

    avanza en espiral.

    La espiral

    limita mi paisaje,

    deja en tinieblas lo pasado

    y me hace caminar

    lleno de incertidumbre.

    Oh lnea recta! Pura

    lanza sin caballero.

    Cmo suea tu luz

    mi senda salomnica!

    BALADA DEL CARACOL BLANCO

    Caracoles blancos.

    Los nios juegan

    bajo los lamos.

    El ro viejecito

    va muy despacio

    sentndose en las sillas

    verdes de los remansos.

    Mi nio, dnde est?

    Quiere ser un caballo

    tiln! tiln! tiln! Mi nio

    qu loquillo! cantando

    quiere salirse

    de mi corazn cerrado.

    Caracolitos chicos.

    Caracoles blancos.

    BALADA DEL CARACOL NEGRO

  • Caracoles negros.

    Los nios sentados

    escuchan un cuento.

    El ro traa

    coronas de viento

    y una gran serpiente

    desde un tronco viejo

    miraba las nubes

    redondas del cielo.

    Nio mo chico

    dnde ests?

    Te siento

    en el corazn

    y no es verdad. Lejos

    esperas que yo saque

    tu alma del silencio.

    Caracoles grandes.

    Caracoles negros.

    Surtidores

    INTERIOR

    Desde mi cuarto

    oigo el surtidor.

    Un dedo de la parra

    y un rayo de sol

    sealan hacia el sitio

    de mi corazn.

    Por el aire de Agosto

    se van las nubes; yo

    sueo que no sueo

    dentro del surtidor.

    PAS

  • Surtidores de los sueos

    sin aguas

    y sin fuentes!

    Se ven con el rabillo

    del ojo, nunca frente

    a frente.

    Como todas las cosas

    ideales, se mecen

    en las mrgenes puras

    de la Muerte.

    APARTE

    La sangre de la noche

    va por las arterias

    de los surtidores.

    Oh qu maravilla

    de temblor!

    Yo pienso

    en ventanas abiertas,

    sin pianos

    y sin doncellas.

    [HACE UN INSTANTE!]

    [... ]

    Hace un instante!

    Todava la polvareda

    se mece en el azul.

    Hace un momento!

    Dos mil siglos!

    si mal no recuerdo.

    JARDN

    Hay cuatro caballeros

    con espadas de agua

    y est la noche oscura.

  • Las cuatro espadas hieren

    el mundo de las rosas

    y os herirn el corazn.

    No bajis al jardn!

    Herbarios

    LIBRO

    I

    El viajante de jardines

    lleva un herbario.

    Con su tomo de olor, gira.

    Por las noches vienen a sus ramas

    las almas de los viejos pjaros.

    Cantan en ese bosque comprimido

    que requiere las fuentes del llanto.

    Como las naricillas de los nios

    aplastadas en el cristal opaco,

    as las flores de este libro

    sobre el cristal invisible de los aos.

    El viajante de jardines,

    abre el libro llorando

    y los olores errabundos

    se desmayan sobre el herbario.

    II

    El viajante del tiempo

    trae el herbario de los sueos.

    Yo

  • Dnde est el herbario?

    El viajante

    Lo tienes en tus manos.

    Yo

    Tengo libres los diez dedos.

    El viajante

    Los sueos bailan en tus cabellos.

    Yo

    Cuntos siglos han pasado?

    El viajante

    Una sola hoja

    tiene mi herbario.

    Yo

    Voy al alba

    o a la tarde?

    El viajante

    El pasado

    est inhabitable.

    Yo

    Oh jardn dula amarga fruta!

    El viajante

    Peor es el herbario de la luna!

    III

    En mucho secreto, un amigo

    me ensea el herbario de los ruidos.

    (Chisss... silencio!

    La noche cuelga del cielo.)

  • A la luz de un puerto perdido

    vienen los ecos de todos los siglos.

    (Chisss... silencio!

    La noche oscila con el viento!)

    (Chisss... silencio!

    Viejas iras se enroscan en mis dedos.)

    En el jardn de las toronjas de luna

    PRLOGO

    Asy como la sombra nuestra vida se va,

    que nunca ms torna nyn de nos tornar.

    Pero Lpez de Ayala, Consejos morales

    Me he despedido de los amigos que ms quiero para emprender un corto pero

    dramtico viaje. Sobre un espejo de plata encuentro, mucho antes de que

    amanezca, el maletn con la ropa que debo usar en la extraa tierra a que me dirijo.

    El perfume tenso y fro de la madrugada bate misteriosamente el inmenso

    acantilado de la noche.

    En la pgina tersa del cielo temblaba la inicial de una nube, y debajo de mi

    balcn un ruiseor y una rana levantan en el aire un aspa soolienta de sonido.

    Yo, tranquilo pero melanclico, hago los ltimos preparativos, embargado

    por sutilsimas emociones de alas y crculos concntricos. Sobre la blanca pared del

    cuarto, yerta y rgida como una serpiente de museo, cuelga la espada gloriosa que

    llev mi abuelo en la guerra contra el rey don Carlos de Borbn.

    Piadosamente descuelgo esa espada, vestida de herrumbre amarillenta

    como un lamo blanco, y me la cio recordando que tengo que sostener una gran

    lucha invisible antes de entrar en el jardn. Lucha exttica y violentsima con mi

    enemigo secular, el gigantesco dragn del Sentido Comn.

    Una emocin aguda y elegaca por las cosas que no han sido, buenas y

    malas, grandes y pequeas, invade los paisajes de mis ojos casi ocultos por unas

    gafas de luz violeta. Una emocin amarga que me hace caminar hacia este jardn

    que se estremece en las altsimas llanuras del aire.

    Los ojos de todas las criaturas golpean como puntos fosfricos sobre la

    pared del porvenir... lo de atrs se queda lleno de maleza amarilla, huertos sin

    frutos y ros sin agua. Jams ningn hombre cay de espaldas sobre la muerte.

  • Pero yo, por un momento, contemplando ese paisaje abandonado e infinito, he

    visto planos de vida indita, mltiples y superpuestos como los cangilones de una

    noria sin fin.

    Antes de marchar siento un dolor agudo en el corazn. Mi familia duerme y

    toda la casa est en un reposo absoluto. El alba, revelando torres y contando una a

    una las hojas de los rboles, me pone un crujiente vestido de encaje lumnico.

    Algo se me olvida... no me cabe la menor duda... tanto tiempo

    preparndome! y... Seor, qu se me olvida? Ah! Un pedazo de madera... uno

    bueno de cerezo sonrosado y compacto.

    Creo que hay que ir bien presentado... De una jarra con flores puesta sobre

    mi mesilla me prendo en el ojal siniestro una gran rosa plida que tiene un rostro

    enfurecido pero hiertico.

    Ya es la hora.

    (En las bandejas irregulares de las campanadas, vienen los kikirikis de los

    gallos.)

    PRTICO

    NIO: Yo voy por las plumas del pjaro Grifn.

    ENANO: Hijo mo, me es imposible ayudarte en esta empresa.

    Cuento popular

    Tan-tan

    El aire se haba muerto.

    Estaba inmvil y arrugado.

    Los pinos yacan en tierra.

    Sus sombras de pie, temblando!

    Yo-T-l

    (en un solo plano)

    Tan-tan

    [...]

    PERSPECTIVA

    Dentro de mis ojos

    se abre el canto hermtico

    de las simientes que

  • no florecieron.

    Todas suean un fin

    irreal y distinto.

    (El trigo suea enormes

    flores amarillentas.)

    Todas suean extraas

    aventuras de sombra.

    Frutos inaccesibles

    y vientos amaestrados.

    Ninguna se conoce.

    Ciegas y desconocidas,

    les duelen sus perfumes

    enclaustrados por siempre.

    Cada semilla piensa

    un rbol genealgico

    que cubre todo el cielo

    de tallos y racimos.

    Por el aire se extienden

    vegetaciones increbles.

    Ramas negras y grandes,

    rosas color ceniza.

    La luna, casi ahogada

    de flores y ramajes,

    se defiende con sus rayos

    como un pulpo de plata.

    Dentro de mis ojos

    se abre el canto hermtico

    de las simientes que

    no florecieron.

    EL JARDN

    Jams naci, jams!

  • Pero pudo brotar.

    Cada segundo se

    profundiza y renueva.

    Cada segundo abre

    nuevas sendas distintas.

    Por aqu! Por all!

    Va mi cuerpo multiplicado.

    Atravesando pu