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4 muestra su pujanza en la feria española de referencia en arte contemporáneo N° 14 Suplemento de 6 NARRACION ORAL 7 LIBROS Entrevista a José Manuel de Prada Samper, un buscador de las histo- rias que se esconden tras los cuen- tos de varias culturas. Reseñas de las últimas novelas de del mexicano Juan Villoro y de John Connolly, que mezcla hábilmente li- teratura negra y terror. TRIBUNA DE SALAMANCA, Domingo, 6 de febrero de 2005

Transcript of numero14

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7 LIBROS

Reseñas de las últimas novelas dedel mexicano Juan Villoro y de JohnConnolly, que mezcla hábilmente li-teratura negra y terror.

6 NARRACION ORAL

Entrevista a José Manuel de PradaSamper, un buscador de las histo-rias que se esconden tras los cuen-tos de varias culturas.

culturasTRIBUNA DE SALAMANCA, Domingo, 6 de febrero de 2005

México pega fuerte El país centroamericanomuestra su pujanza en laferia española de referenciaen arte contemporáneo

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N° 14Suplemento de

artes y letras

ARCO 2005

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México es un país de turbulencias. Conuna extensión territorial enorme, una

capital superpoblada asentada sobre un lagodesecado, una cultura autóctona que dejó im-presionantes huellas... su arte es un reflejode una sociedad impetuosa y mestiza. Estasemana puede verse en Arco una completamuestra de ello. La feria más importante dearte contemporáneo en España invita todoslos años a descubrir la creación de un país yMéxico parece ser una apuesta segura. En

este número le echamos un vistazo a la feriaporque siempre conviene saber de primeramano qué se está cociendo en el arte más ac-tual. Arco es una experiencia agotadora, tan-to por su densidad de ofertas como por la sa-turación visual a la que se llega después de ha-ber recorrido todos sus pasillos. Aquí les ofre-cemos algunas pistas para no perderse porsus vericuetos y también analizamos la posi-ción de este evento en el lo que podríamos lla-mar ‘planeta-arte’: a medida que la feria cre-

ce es más difícil su acceso para las galeríasnacionales, pero las internacionales grandesno acaban de llegar. También en estas pági-nas, una amplia entrevista con José Manuelde Prada Samper, un investigador de la tradi-ción oral que ha recogido en varias recopila-ciones los cuentos de diversas culturas. Aho-ra acaba de publicar en Lengua de Trapo loscuentos de Azaria Prieto, una excelente na-rradora que alcanzó lo universal sin moverseapenas de la provincia de Palencia.

N°1

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1 EL ‘SHOW’ DE BUENAFUENTEJuan Luis Cano y Guillermo Fésser,Gomaespuma para entendernos,estuvieron el otro día en el programa deAndreu Buenafuente. Fésser, con esacapacidad de análisis que le caracteriza,y ante los buenos resultados deaudiencia que está cosechandoBuenafuente, dio la enhorabuena alpúblico por elegir este espacio deentretenimiento para la noche, diciendoalgo así como que «decían que la genteveía mierda porque les gustaba, yparece que era porque no había otracosa». Y no era un cumplido. En escasassemanas en antena, Buenafuente se haconsolidado como la opción mássugerente de la noche. Y aunque ahorase habla mucho de que ha superado a‘Crónicas Marcianas’, dentro de untiempo esto no será noticia. Si trabajasen televisión, tienes que seguir mirandola tabla de audiencias cada día, noqueda más remedio. A mayor audiencia,más respaldo de la cadena, más medios,mejor resultado para el telespectador.Sin embargo, como espectador no tengola sensación de que Buenafuente vaya asalirse de su línea para subir unoscuantos puntos. Simplemente, él y suequipo saben crear un ‘show’ divertido,ocurrente y donde cada elemento suma.El presentador sabe escuchar a susinvitados, gente que tiene algo que decir,los actores están magníficos en suspapeles y los guionistas escriben chistesgraciosos y le dan una vuelta de tuercaa la realidad: era tan sencillo como eso.Claro, que lo sencillo es siempre lo másdifícil de hacer y estos lo hacen muybien. El talento, algo difícil de definirpero fácil de reconocer, siempre atrapay aquí se ve sobradamente. Y, paracolmo, saben reírse de ellos mismos, conlo que ya no les queda tiempo parareírse de nosotros. Andreu Buenafuente,sí tiene tiempo para otras cosas, comodibujar, hacer fotos y escribir un diario.En andreubuenafuente.com.

2 AMASTÉ, ESETÉ Y ETECÉOtros que derrochan buen humor sonlos creadores de Amasté (Agencia decomunicación creativa y combativaEseté y otros artefactos de guerrilla),Ricardo Antón y Txelu Balboa. Elloseditan Eseté, una revista trimestraldedicada a un tema, tratado desde

distintas perspectivas, tantas comoaportan sus colaboradores, entre los quepuede encontrarse usted mismo, ya quesi ideario contempla la creación con unaconcepción abierta y en constantemovimiento. Su último número se titulaProhibido y profundiza sobre todoaquello que se nos niega, con la preciosacolaboración del Proyecto Cartele, delque les hablaremos otro día con másdetenimiento. Amasté también editaEtecé, una revista de difusión culturalpara el País Vasco con unplanteamiento, por sus contenidos, quele aleja un tanto de las odiosas revistasde tendencias. Todo lo que hacen puedeverse en su web (amaste.com) conjugosos extras.

3 POMPAS DE PAPELSiguiendo en Euskadi, nos encontramoscon un muy interesante programa deradio, Pompas de Papel, dedicado adifundir la literatura y a disfrutar conella. Su página en la radio pública vasca(eitb.com/pompas) permite no sóloescuchar lo más interesante de suemisión, como las opiniones de loscolaboradores o entrevistas con autores,sino que también podemos leer lasreseñas y las obras que recomiendancada semana.

4 EL PERSUASOR OCULTOA quien además de la literatura le gustela publicidad y la mire con esa mezclade fascinación y pavor, no puedeperderse ‘The Hidden Persuader’, un'blog' en portugués –es eminentementevisual– que recoge imágenes ypensamientos de las principalescampañas que nos venden el mundo. Suselección de enlaces sobre el tema esexhaustiva.

5 LA BIBLIA DEL AUDIOVISUALEs ni más ni menos que InternetArchive (archive.org), una especie demediateca gigante que contiene joyascomo los Archivos Prelinger, lacolección de películas que rodó elgobierno americano para educar a susciudadanos sobre los más variadostemas: desde llamar por teléfono aprotegerse de un ataque nuclear.

Recortes Antonio Marcos

culturas2 TRIBUNA DE SALAMANCA, Domingo, 6 de febrero de 2005

Arriba, campaña de Umbro: los publicistas siempre

tan certeros. Sobre estas líneas, imágenes de Duck

and Cover, el vídeo para salir con éxito de un

ataque nuclear. A la izquierda, portada del último

número de ‘Eseté’. Debajo, dibujos de Andreu

Buenafuente, que demuestra para esto tan buen

gusto como para la televisión

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El regreso de Rodrigo Leao

Colaboran con el: Ryuichi Sakamoto al piano y lavoz de la brasileña Rosa Passos en el tema ‘Rosa’; en‘Antonio’ de nuevo Ryuichi al piano sobre la voz delhijo Rodrigo, nos muestran un complicidad muy es-pecial. Aires de chanson francesa brotan con HelenaNogueira en ‘Jeux D’Amour’ y ‘La Fête’. Sónia Tava-res, del grupo The Gift, versátil y sugerente, ponevoz a ‘Deep Blue’, ‘L’Inspecteur’ y ‘Happiness’. YBeth Gibbons, de Portishead, preparando su tercerdisco de estudio que imagino tan atractivo como susolitario Out of season (Sanctuary Records 2003),canta en ‘Lonely Carousel’.

En Cinema nos propone bajo la diversidad de for-matos un collage agradecido de buenas composicio-nes, entre guiños de acordes personales y a la vezreconocibles.

José Helguera

rodrigo Leao formó parte de Septima Legiao,uno de los primeros grupos portugueses coninfluencias muy variadas de los años ochen-

ta que tuvo algún eco en España. A finales de esadécada funda, con Pedro Ayres, Madredeus, unode los proyectos lusos más internacionales. Lacombinación de elementos folklóricos portugue-ses y nuevas tendencias tuvo como resultado te-mas de bella factura y realmente atractivos. Des-de su primer disco Os días de Madredeus (1987) ysobre todo Existir (1990), la progresión del pro-yecto fue espectacular. De aire intimista, litúrgi-co y emotivo sigue mereciendo la pena escucharsus primeros discos. Desde el abandono de Ro-drigo Leao, la fórmula se fue agotando y sus últi-mas propuestas reflejaban más artificio y mono-tonía mística, que la naturalidad y el entusiasmode sus comienzos.

Gracias al fenómeno de Madredeus la músicaportuguesa se hizo un hueco en el panorama es-pañol. Dulce Pontes o Marizia entre otros mos-traban sus trabajos con cierta asiduidad en nues-tros escenarios. Aunque la mayoría de las pro-puestas que nos llegaban con aires lusos teníanuna mayor base étnica que de nuevas tendencias.

Rodrigo Leao, desligado de Madredeus, asu-mió proyecto propio en 1993 con Ave mundi lumi-nar, un disco con matices y referencias atractivasen el que descubríamos sus aportaciones a las or-questaciones de Madredeus, a los arreglos y com-posiciones de Septima Legiao y también sus in-fluencias del minimalismo de Michael Nyman a lacontemporaneidad de Astor Piazzola. De aire me-lancólico y con un suave clasicismo sigue siendouna de sus propuestas más sugerentes.

Ahora nos presenta Cinema, con el que supe-ra el letargo creativo de sus últimos trabajos. Seabre paso con una banda sonora personal, libe-rado de gran parte de sus reiteraciones tupidas.Se mueve entre diferentes códigos y relatos mu-sicales más accesibles.

the Mess We Made es elprimer disco en el queMatt Elliott firma con

su propio nombre. Sus an-teriores proyectos se des-arrollaron bajo la firma TheThird Eye Foundation, pro-yecto que desarrolló enBristol, en los tiempos en losque nos movíamos al com-pás de grupos más conoci-dos como Tricky, MassiveAttack y Portishead. En los

años del suave y desconsolado trip hop, Matt Elliotcomponía a base de ritmos, sin voces dulces, se-cuencias muchas veces descarnadas y trepidan-tes. Percusiones, sonidos metálicos, roturas decristal con bases instrumentales se empotraban yseccionaban para crear una atmósfera densa, vitaly abstracta (Ghost, Domino, 1997). En un caminodiferente y muy especial al de sus compañeros deBristol, ojalá que mañana pudierais comprar YouGuys Kill Me (Domino, 1998). Matt Elliott en TheMess We Made ha redefinido su trabajo experi-mental relajando las atmósferas de tensiones rít-micas y acerados sonidos. Matt Elliott mezcla se-cuencias de breves armonías instrumentales, don-de voces y percusión se deslizan, se cortan y vuel-ven otra vez, generando una superposición decapas de aire melancólico y bello. Un trabajo in-trospectivo, reflexivo y a veces incluso alegre, don-de la guitarra en el tema ‘Forty days’ tiene aires de‘saudade’ portuguesa. En el tema the ‘Sinking shipsong’ voces a coro de ultramar como un recuerdoentrañable. En todos los cortes se cruzan frágilesestructuras melódicas con susurros entre pianos yguitarras de la habitación de al lado, todos apor-tan imágenes orquestadas de perversión y delica-deza. Bello. Y ahora redistribuido de nuevo trasdos años desaparecido. José Helguera

asegura Wong Kar Waique cuando comienzael rodaje de sus pelícu-

las no tiene un guión defini-do, sólo una historia queavanza al ritmo de los perso-najes; seguro que lo que tie-ne en la cabeza es la músicaque completa los encuadresmilimétricos y su apasionan-te forma de concebir el mon-taje. Las canciones fluyen almismo ritmo que las imáge-nes y el director ensamblacon habilidad todos los ele-mentos que constituyen ellenguaje cinematográfico. Sunarrativa remite, en parte, laforma de hacer los pionerosdel cine. Con la banda sono-ra de 2046 continúa la mismalínea de In the mood for love,correlación que también seestablece en la historia; elcompositor Umebayashi Shi-geru vuelve a encargarse delbello tema principal, sin elacompañamiento de MichaelGalasso, que se repite comoun leitmotiv en sus diferentesversiones, constatando el to-no circular de la historia.

Wong Kar Wai incluye, entrelos veinte temas de la bandasonora, ‘Dark Chariot’, de Pe-er Raben, habitual en la fil-mografía de R. W. Fassbin-der, y ‘Decision’, original deZbiniew Preisner para labanda sonora de No matarás,de Krysztof Kieslowski, comohomenaje a dos maestros,que sin duda, tiene presentesa la hora de orquestar sus pe-lículas. El resto de momentosmusicales que ilustran la his-toria de amor del Sr. Chow ysus tres mujeres remiten a lamúsica de la década de los se-senta –Xavier Cugat, DeanMartín y Nat King Cole- conespecial protagonismo, comoen sus anterior film, para untema en castellano ‘Siboney’,interpretada por ConnieFrancis, que intercala conmomentos operísticos como‘Casta Diva’. Una banda so-nora de canciones que en-cuentran uniformidad –algoraro en este tipo de produc-tos– gracias al genio de un di-rector que ahora mismo mar-ca la pauta. Fernando Bernal

con un single como ‘Todonos parece una mierda’; laportada con Manolo y Ge-

nís emulando a los personajesque esperan a Godot, según Sa-muel Beckett... un aspecto inte-lectualmente moderno, fomen-tado con su estudiada pose enlas declaraciones... nadie sabea qué atenerse cuando se en-frenta a Astrud. Desde la publi-cación de Mi fracaso personal(1999, Austrohúngaro), el dúoha sufrido un proceso de madu-ración en sus planteamientos,que ha afilado sus letras, hastael punto de dejarlas en lo mássustancial, y les ha propiciadoun empujón a nivel musical,donde han ganado en registrosy en capacidad de riesgo. El‘technopop’ ha dado paso a nue-vas texturas que sirven paraque la voz de Manolo suene másvariada –ocupando terrenospropios de su adorado Morri-sey– y los arreglos musicalespasen de los teclados habitua-les a instalarse en desarrollossorprendentes como ‘Masaje’,con la voz de Claudia Gonsom

(The Magnetic Fields). El restodel repertorio dividirá a la au-diencia, como pasa siempre conel dúo catalán, que no olvidansus habituales historias míni-mas como la genial ‘Quiero serfutbolista’ –heredada de su ví-deo con Carles Congost–, ni desus invitaciones al ritmo como‘Quedamos así’ o ‘Vamos a unbar’.

El single de presentacióndel disco contiene dos cancio-nes geniales como son ‘Nues-tro poetas’, con una letra deci-didamente trasgresora, y su‘Suspiros de España’, reinter-pretada en ‘Hay un hombre’Astrud son capaces de conver-tirse en iconos de vanguardiacon sus web y promoviendogrupos a través de su sello Aus-trohúngaro (Chico y Chica), pe-ro también pueden mutarse enartistas callejeros o declararsedevotos del Festival de Eurovi-sión. Y lo siguiente de Astrudserá, sin duda, una nueva Per-formance.

Fernando Bernal

RODRIGO LEAO

Cinema

Sony / BMG, 2004

MATT ELLIOTT

The Mess We Made

Domino Rocording Co.,2003

ASTRUD

Performance

Sinnamon/Austrohúngaro, 2004

THE SUNDAYDRIVERS

Little heart attacks

Mushroom pillow, 2004

Esperando algo... Filmar la música

Matt Elliott, otravez en circulación

3MÚSICA culturasTRIBUNA DE SALAMANCA, Domingo, 6 de febrero de 2005

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culturas4 TRIBUNA DE SALAMANCA, Domingo, 6 de febrero de 2005

Arco 2005: 23 vueltas de tuv

icente Fox, presidente deMéxico inaugurará la vigé-simo cuarta edición de Ar-

co, dedicada en esta ocasión alpaís más al sur de Norteamérica.Está claro que si el Barça es másque un club, Arco tiene que sermás que una feria. Arco se ha im-puesto en nuestra sociedad comola cara feliz del arte contemporá-neo y parece que quien no está enella, no existe, o vive como un des-heredado en las mazmorras a lasque no llega la luz catódica de lapantalla mediática; y sin embargoesto no sólo no es así, sino quebasta echar un vistazo a las gale-rías internacionales de más re-nombre para ver espacios enblanco en la lista de solicitudes.

Hoy por hoy, el gran coleccio-nismo, que acude a Basilea o Chi-cago, tal vez París, tal vez Miami,se resiste a venir a Madrid, y si novienen ellos, tampoco lo hacen lasgalerías que les nutren. Quien ha

mantenido Arco estos veinteaños ha sido el conjunto de admi-nistraciones del Estado. En Arcohan comparado museos estata-les, regionales y municipales, sime apuran. Fundaciones, socie-dades desgravantes y, poco a po-co, (no puede ser de otra forma)particulares curiosones más omenos atrevidos, poco o muchoaventureros, un tanto exquisitosy otro tanto calculadores del jus-tiprecio.

Arco no es la gran feria quenos quieren vender (¿de verdadtienen que intentarlo?) pero sí esuna feria importante, y además,aunque cada vez menos, una fies-ta del ramo, donde con suerte (nodigo si buena o mala) se encuen-tra uno a quien no ha visto en supueblo en los últimos dos años.

Pero Arco está creciendo, seestá haciendo mayor, y por tan-to, responsable, y por tanto,cruel. Va soltando lastre paraelevarse, y el pobrecito lastre,claro se da contra el suelo. Lasgalerías españolas que pasan la

selección (cada vez con más so-licitudes más internacionales)son menos que antes y lo han su-frido especialmente en Valenciapor lo que a punto estuvieron deenzarzarse hace muy poquito laconsejera de cultura de la comu-nidad Valenciana, Concha Gó-mez, y la Directora de la Feria,Rosina Gómez-Baeza, por unquítame allá tres galerías, queson las que se han quedado fueraesta jornada, de diez a siete hanpasado, y si es cierto que los va-lencianos no han cambiado de lí-nea... ¿por qué antes sí y ahorano? El argumento A es la proyec-ción internacional o mejor, su ca-rencia; el argumento B, ‘ayudara las galería más fuertes, aque-llas que se saben ayudar a sí mis-mas’. Siempre es importante te-ner las ideas bien claras.

Y mientras unos bajan, o caendespeñados, otros suben, y llamala atención la consolidación delsector gallego que a la ya clásicaAd Hoc, suscrita al itinerario fe-rial más de vanguardia, se suman

El martes se inauguraen Madrid la feria dearte contemporáneode referencia enEspaña, a la quesiempre convienemirar para saber pordónde camina la másreciente creación.Ofrecemos aquíalgunas pistas sobresu posición en el‘planeta-arte’ y susdiversos programas

Juan R. Benito

Arcoarteestádesh

PABLO GENOVÉSJUAN UGALDE

JOSÉ LUIS GIMÉNEZ JAN FAB

ANTHONY GOICOLEA

El especial México es una oportunidad para reafirmar gustos,desestabilizar tópicos y sondear lo desconocido

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Dentro de la diversidad de estéticas y la sucesiva acumulación de ge-neraciones de artistas que se da en cualquier país, en la visión que te-nemos del arte mexicano siempre figura la intensidad y una fisicidadextrema de sus imágenes, quizás herederas del barroco más natura-lista y exaltado. En un recorrido urgente animamos a marcar las si-guientes casillas:

En primer lugar, los clásicos, la Galería de Arte Mexicano es la queaporta a al feria la historia del arte requeteconocida (Rivera, Orozco, Si-queiros, Tamayo o Kahlo) es la decana de las galerías mexicanas y se

merece su parada contiempo. Otra galería ve-terana que surgió dan-do lugar a expresionesen reacción a la EscuelaMexicana representadapor los anteriores nom-bres es la de Juan Mar-tín que además de lapintura que supuso es-ta ‘Ruptura’ (Vicente Ro-jo, Manuel Felguérez,Fernando García Poncey Roger Von Gunten )acerca también la foto-grafía del matrimonioÁlvarez Bravo. De másreciente creación, aun-que también con clási-cos (Gerzso, Rojo, Nie-to) es López Quiroga,que trae pintura, foto-grafía y cerámica.

Casi como en otrasocasiones se presentan O.M.R. y Enrique Guerrero, las dos galeríasmexicanas con un mayor número de participaciones en la feria madri-leña y que no deben pasarse por alto. Sin embargo de entre las pro-puestas más jóvenes, promete la decisión de Alternativa Once, que habasado su elección de obra y artistas en distintos aspectos de la cul-tura fronteriza que ha surgido a ambos lados de la frontera EE.UU./Mé-xico. Si quedan fuerzas y suelas, visiten lo demás.

O casi, porque aunque la inten-ción primera era la de ocupar lascajas negras con ‘new media art’el caso es que la mayor parte delas miradas comisariales se hadirigido rauda y veloz al ‘play’ yal ‘loop’, lo cual en sí mismo, ycomo tantas otras cosas, no esni bueno ni malo, sino todo locontrario. Que lo damos por bienempleado, vaya, si la selecciónes buena, como parece que lo es.

Quienes han cumplido consu cometido fielmente han sido

Gerfried Stocker, director artísti-co de Ars Electrónica, y Mark Tri-be, artista y comisario neoyorki-no, director de Arte y Tecnologíaen la Universidad de Columbia.Las propuestas de este últimoson la reinterpretación que haceMary Flanagan de un juego de or-denador en el que la exploracióndel entorno virtual lejos de apro-visionar la metralleta proporcio-na al jugador objetos-recuerdosde infancia y textos más o menoslíricos; también la instalación deRafael Lozano-Hemmer, un ‘es-pectáculo de marionetas inverti-do’, con base en los sistemas devigilancia que monitorizan y si-guen a una persona dentro de unrecinto dado, requiere la partici-pación activa del no ya especta-dor sino del participante o inter-accionista o jugador...

G. Sotcker por su parte le hadado la palabra a algunas galerí-as que vienen dando su apoyoincondicional a este tipo de prác-ticas, como son la Gallerie AnitaBeckers y Roebling Hall Galleryque han elegido a Bjørn Melhus,quien también ha sido seleccio-nado por el equipo comisarialformado por Anne Ellegood,Omar López-Chahoud y ShamimM. Momim, quienes se han cen-trado en el vídeo como prácticaextendida (y con tradición con-solidada a la que hacer referen-cias cruzadas) para elegir unaserie de artistas que probable-mente engancharán al especta-dor con unas obras más fácilesde ver, ya que buena parte deellas se basa en la narración ylos géneros clásicos, aunque nopor ello menos interesantes ybuenas.

Por último, la propuesta deAgustín Pérez Rubio (conserva-dor jefe del Musac) no parece lamás atractiva, pero ha tenido lavista aguda de descubrir un jo-ven videoartista en la Galería So-ledad Lorenzo, que todo el mun-do sabe que tiene una programa-ción de lo más afín al arte elec-trónico y los ‘new media’. Detoda la vida.

5ARTE culturasTRIBUNA DE SALAMANCA, Domingo, 6 febrero de 2005

uerca despuésla también viguesa Bacelos, laorensana Marisa Marimón, lacompostelana Trinta y SCQ/GV,además sin ayuda (por el mo-mento, y dicen que serían las úni-cas) de la Xunta. Tiene su méri-to, al que seguramente no resul-tarán ajenas las políticas de loscentros de arte gallegos.

Como ya es tradición al pro-grama general, para que no se di-ga, se le siguen añadiendo suple-mentos (como éste del periódico)para que no se diga que la feria escomercial (¡pero si es lo que tie-ne que ser!) con forma de cajasnegras, como los de Nestlé (ya séque las famosas son las cajas ro-jas pero las negras son más ri-cas), en fin, que habrá que pro-bar los bombones, aun a riesgode volver con el gusto estragado.

Y en cuanto al especial Méxi-co, pues lo de siempre en estoscasos, una oportunidad para rea-firmar gustos, desestabilizar tó-picos y sondear lo desconocido.

Que la fuerza les acompañe (yescojan un calzado cómodo).

Intenso México

The Black Boxmás vídeo, por favor

o se ha impuesto como la cara feliz dele contemporáneo y parece que quien noá en ella, no existe, o vive como unheredado en las mazmorras

FRIDA KALHO

BRE

MARI FLANAGAN

BJøRN MELHUS

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El hombrede loscuentosAzcaria Prieto vivió casi toda su vida enSaldaña, en la provincia de Palencia, y fue unanarradora excepcional. Ahora este investigadorde la narración oral de diversas culturas harecopilado sus cuentos en un muy interesantelibro publicado por la editorial Lengua de Trapo

JOSÉ MANUEL DE PRADA SAMPER

nació en Salamanca por unafeliz coincidencia del des-tino. Su padre, notario y

salmantino, fundador de aquellosprimeros cineclubs universita-rios con Patino y otros, marchóluego a otras tierras hasta aca-bar recalando en Barcelona don-de nuestro escritor se crió y es-tudió. Hubo un intento de regre-sar a Salamanca a acabar su ca-rrera, pero la burocracia lo pusotodo demasiado difícil; lo que na-die ha impedido es que este hom-bre aficionado, entusiasta de loscuentos, seguidor incondicionalde la tradición oral, se esté for-jando una carrera a base de es-fuerzo y dedicación, desde aque-llos primeros Cuentos popularesirlandeses, Cuentos de las Tie-rras altas escocesas hasta losmás recientes La niña que creolas estrellas: cuentos orales delos bosquimanos y reciente, re-ciente El pájaro que canta el bieny el mal. La vida y los cuentostradicionales de Azcaria Prieto.Los dos últimos, publicados porLengua de Trapo en su espléndi-da colección Rescatados.

No sé si a usted le gusta que lellamen folclorista...

A mí en realidad lo que mejorme define es eso, folclorista, loque pasa es que en España dicesfolklore y la gente piensa en LolaFlores y en los toros, entonces aveces digo que soy investigadorde la tradición oral, que es largo,pero que define lo que soy.

A usted le contaron muchoscuentos de pequeño...

No, realmente no, no me con-taban cuentos, crecí más bienescuchando historias familiares.

A veces las historias familiaresson mejores que los cuentos...

Sí, en el fondo están hechas dela misma materia y al igual quelos cuentos contribuyen a nues-tra formación como personas,pero no, en mi casa no había na-die especialmente dotado paralos cuentos, el camino mío parallegar a los cuentos está descritoen los libros.

Y cómo se inició en esto de re-coger cuentos...

Yo soy un gran seguidor deElias Canetti, sus libros son unpoco mi brújula, mi biblia; en unensayo suyo que se llama La pro-fesión de escritor, Canetti reco-mienda a los aspirantes a escri-tores que se empapen de litera-tura de tradición oral, de cuen-tos, de mitos, sobre todo de losllamados pueblos primitivos yentonces yo seguí ese consejo yes como finalmente acabé espe-cializándome y empecé a com-prar libros. Uno de ellos el que esuna de las fuentes principales delos cuentos bosquimanos; mástarde o por las mismas fechasLos cuentos populares de Casti-lla y León, de Aurelio MacedonioEspinosa, que es donde surge el

Charo Ruano libro de Azcaria. Y en un mo-mento dado, yo era traductor li-terario y como tal, más que comoprofesional del estudio del fol-klore, propuse a la editorial Si-ruela un libro, Los cuentos popu-lares irlandeses, fue el primero yfuncionó muy bien; yo me sentímuy a gusto trabajando en eso ydesde entonces he empalmadoun libro con otro.

Realizar una labor de este tiporequiere mucho tiempo, mu-cha paciencia, muchos viajes,muchos gastos, aunque quedemal hablar de dinero, compen-sa al ver el libro o la cosa que-da…

¡Hombre! Compensa al ver ellibro, pero claro yo soy investiga-dor independiente, yo no trabajodentro de la Universidad, en es-tos momentos. Claro que de estono puedo vivir, vivo porque soytraductor de un organismo in-ternacional y también doy confe-rencias y más o menos eso me fi-nancia las investigaciones. Estolo haces en el fondo por vocación,casi un poco por ética, porque yoveo la ética y la estética como en-sambladas y de alguna forma in-separables, pero económica-mente el trabajo es ruinoso.

Desde aquellos primeros li-bros, cuentos irlandeses y es-coceses, hasta el libro de Azca-ria, ¿ha cambiado su forma deenfrentarse a la investigación,ha aprendido mucho o la formabásicamente sigue siendo lamisma?

Sí ha habido un cambio sus-tancial con este último libro; loslibros anteriores son fruto de untrabajo muy intenso de archivo,de investigación de gabinete. Es-te libro de Azcaria es el primeroque se basa fundamentalmenteen trabajo de campo, he ido a lasfuentes orales y he estado gra-bando tradiciones familiares conestas mujeres, hablando de lasvariaciones de sus cuentos... Elcambio es de trabajo de gabine-te a trabajo de campo, que es enel fondo el que siempre he queri-do, he soñado con hacer.

Vamos a centrarnos en sus dosúltimos libros: La niña quecreo las estrellas: cuentos ora-les de los bosquimanos, prime-ro del que dijo Canetti que erauna de las joyas de la literaturauniversal...

Este libro es el penúltimo, pe-ro fue mi primer libro; yo trabajéen él cuando estaba a punto deirme a estudiar a EE.UU. y mien-tras estudiaba en Columbia años80-90. Fueron doce o trece añosde trabajo, no continuado, inter-mitente, con interrupciones,muy intenso, a mí lo que me me-tió, lo que me inició en el estudiodel folklore de las tradicionesorales fueron estos cuentos bos-quimanos, sobre todo uno de lostestimonios de una de las fuen-tes de este libro en que un viejonarrador dice: «Un cuento es co-mo el viento, viene de un lugar le-

jano y lo sentimos». Esa frase mellegó al alma, me entusiasmó ydesde entonces me dedico a in-tentar saber qué significa. Fue-ron doce años y, claro, el enfoqueinicial del trabajo se fue am-pliando, se fue haciendo comple-jo, fueron apareciendo más pu-blicaciones sobre el tema. Yo alfinal me puse en contacto con losarchivos de la Biblioteca de laCiudad del Cabo, donde están de-positados los manuscritos origi-nales, parte del libro recoge tra-ducciones y trascripciones detextos inéditos… es un trabajoque recoge todo un período de mivida.

Para los no iniciados, ¿quiéneseran o quiénes son los bosqui-manos?

Eran, son, porque hay una ra-ma de ellos que vive todavía en elKalahari, un pueblo de cazadoresy recolectores, afines a nuestrosantepasados del paleolítico; an-tes de encontrarse con los euro-peos vivían en pequeños grupos,muy solidarios, no tenían una je-rarquía política que se pueda con-siderar como tal, todas las deci-siones se tomaban por consen-so… recolectaban vegetales, raí-ces, bulbos y cazaban antílopespara subsistir, lo cual puede con-siderarse una vida muy dura, enla que la supervivencia está al lí-mite. Sin embargo no es así: es unmodo de vida que al menos a estepueblo en concreto le dejaba mu-cho tiempo, por eso aunque sucultura material es muy sencilla,su cultura tradicional, su litera-tura espiritual es muy rica, sussaberes intangibles de todo tiposon de un nivel excepcional.

¿Por qué debemos leer estos re-latos, teniendo en cuenta queel lector de cuentos es un lec-tor muy especial?

Porque todos son realmenteuna joya de la literatura. Aunquereflejan un modo de pensar, deestar en el mundo muy distintodel nuestro, las preocupacionesque recogen son las mismasesencialmente y son cuentos deuna belleza indescriptible, a míme han marcado mi vocación.

Nos acercamos ahora al librosobre Azcaria Prieto, algo asícomo el Santo Grial en esto delos cuentos para usted, encon-trar una mujer asi...

Pues sí, de hecho no llegué aconocerla, lo singular de este li-bro es haber buscado la memo-

Le imprimía su sellopersonal a loscuentos, lostransformaba conmucha fuerza en lanarración... susversiones son únicas

José Manuel de Prada

culturas6 TRIBUNA DE SALAMANCA, Domingo, 6 de febrero de 2005

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La literatura espiritualde los bosquimanoses muy rica, sussaberes intangiblesde todo tipo resultande un nivelexcepcional

ria de la persona que murió hacetreinta y tantos años, pero yo leísus cuentos en una colección decuentos populares de Castilla yLeón, de Aurelio Macedonio Es-pinosa hijo, y ya leídos sobre lapágina eran espectaculares; enun momento dado me planteé,‘se que esa persona ha muertopero quiero saber más sobreella, porque seguro que una per-sona que contaba estos cuentos,tenía que ser una persona real-mente especial’. Fue cuando via-jé primero a un pueblín de León,Morgovejo, de la montaña leone-sa, de allí me mandaron inme-diatamente a Saldaña, que es elpueblo en la vega de la vecinaPalencia, donde Azcaria viviócasi toda su vida; allí fui en bus-ca de sus descendientes y cuan-do entablé con-tacto con ellos,las cosas que mecontaron sobresu madre, suabuela, confir-maron mis intui-ciones. No comoel santo Grial, enrealidad no lo hevisto, pero he es-tado muy cerca.

¿Cómo era Az-caria Prieto?

Era una per-sona que en algu-nas cosas eramuy de su época,una persona muyreligiosa, muyconservadora enpolítica, pero enotras era una mu-jer, para la épocay el lugar en que vivió y para suclase social, completamenteavanzada; era una mujer en unmundo en el que el analfabetis-mo rural, sobre todo en las mu-jeres era del 70%. Sabía leer y es-cribir y era una gran lectora, unalectora omnívora, una mujer queno era nada conformista, muycombativa, creía en las virtudesde la educación para hacer avan-zar a las personas, para mejorarcomo individuos y ella misma en-señó a leer y escribir a sus hijos;era el centro de su vecindarioporque como narradora hacíaque sus vecinos la apreciaran deuna forma especial, era una per-sona de las que hacen que elmundo avance.

¿Que destacaría de los relatosde Azcaria Prieto?

El hecho de que están conta-dos con mucha fuerza, detrás deellos hay una narradora magis-tral. Azcaria tenía un gran domi-nio del diálogo, era transmisora,pero no una transmisora servil,si no que a los relatos, de los quese han recogido muchas varian-tes y no sólo en España, ella leimprimía su sello personal, lostransformaba, muchos cuentosque todos conocemos… las ver-siones de Azcaria Prieto son úni-cas. Aurelio Macedonio Espino-sa cuando los recogió ya se diocuenta de que había dado conuna informante de primera, hoydía no se pueden encontrar per-sonas así.

A lo largo de todos estos añosinvestigando, ¿ha encontrado

diferencia entrela forma de con-tar de los hom-bres y las muje-res, cuentan ellasmás cuentos,cuentan cuentosdistintos?

Es una opiniónmuy compleja, enla que yo quisieraahondar en algúnmomento. Espino-sa decía que susmejores informan-tes eran mujeresde 50 a 65 años yopinaba que en al-gunos géneros yen general conta-ban mejor las mu-jeres; yo creo queen muchas socie-dades las mujeres

son mejores narradoras, al me-nos son portadoras de determi-nados géneros y desempeñan unpapel fundamental en la creacióny recreación de cuentos y en laeducación de los niños

¿En qué proyectos está traba-jando ahora?

Primero, un período de des-canso porque el trabajo ha sidoduro, pero quiero sobre todo tra-bajar el tema de la memoria ge-neracional, de las historias fami-liares, lo que hablaba al princi-pio, porque creo que ahí hay uncampo de investigación muy in-teresante. Una de las cosas quequiero hacer es recopilar las his-torias de mi familia, aunque sólosea para tenerlas recogidas y quelas siguientes generaciones pue-dan disponer de ellas.

7LIBROS culturasTRIBUNA DE SALAMANCA, Domingo, 6 de febrero de 2005

Una novela desmesurada,pero apasionante

nunca la Editorial Anagra-ma se ha plegado a gustoscoyunturales o gratuitos a

la hora de conceder su PremioHerralde de Novela. El rigor y laexigencia del valiente editor sonfactores determinantes a la horade reconocer sus descubrimien-tos literarios. La concesión del úl-timo galardón mantiene esta co-herencia crítica. La amplia y re-conocida trayectoria literaria deJuan Villoro y la complejidad deEl testigo avalan el espíritu deexigencia de la editorial Anagra-ma. Con todo, hay que advertirque la novela ganadora no es unlibro cómodo. Muchos lectorespueden sentir un cierto desfalle-cimiento en su lectura.

El planteamiento narrativo seajusta en teoría a un pretexto li-terario convencional: Julio Val-divieso, vuelve a México despuésde pasar veinticuatro cuatroaños como profesor en Europa.Lo hace animado por un viejoamigo, Juan Ruiz, el Vikingo, per-sonaje de importancia decisivaen la novela. Casado con Paula, ypadre de dos hijas, el retorno deJulio Valdivieso al país en el quenació es también el retorno al pa-sado de su juventud y al presentede México actual. Pasado, pre-sente y futuro toman cuerpo enpersonajes, paisajes y aconteci-mientos muy delicados y preci-sos. Los personajes del pasadoafloran como recuerdo y comorealidad. El sustrato sentimentaldel pasado es Nieves, su prima,una bella adolescente con la queJulio Valdivieso mantuvo unaapasionada relación. Su recuer-do sirve de sustrato psicológicoen la mayoría de la trama argu-mental. Junto a ella afloran otras

relaciones familiares: el padre, eltío Donasiano, el sacerdote Mon-terverde y la sirvienta Fulgencia,presentes algunos de ellos en lafinca de Los Cominos, un espa-cio familiar de condición mítica.Junto a los recuerdos de la gue-rra cristera, surge con fuerzamisteriosa la semblanza del po-eta Ramón López Velarde, reco-nocido poeta mexicano. Junto ala vivencia sentimental de Nie-ves, el poeta sirve de articulaciónesencial en la primera parte dela novela. Triste e inexplicable-mente, su semblanza va per-diendo entidad a medida queavanzan las páginas.

El retorno de Julio Valdiviesolo pone en contacto con un pre-sente turbulento, peligroso, dis-tante del pasado que él recuer-da. El México actual es un paísen el que ha cambiado el poderpolítico con la caída del PRI y enel que el dominio del narcotráficoy la televisión resulta incontrola-ble. Los nuevos tiempos hancambiado el tiempo del ayer deforma angustiosa o ridícula. Elpoder de los narcotraficantes lle-va emparentada una grotescaversión de los mitos y no es ex-traño que en este contexto se

proponga un doble objetivo, em-parentado entre sí: la canoniza-ción del poeta López Velarde y lafilmación de una telenovela, de laque es el cerebro principal es elnovelista Constantino Portella.Él es el autor de una obra de laque es traductora al italiano Pao-la, esposa de Julio Valdivieso, elprotagonista. En toda esta com-pleja trama surge el perfil de di-versos personajes: Félix Rovira,Ramón Centollo, Edgar Noriega,el policía Ogarrio, Amílcar Ra-yas, Olga Rojas... Todos ellosaportan perspectivas de mundosdiversos, sin que falte la delicadacoyuntura argumental del plagiode una tesis doctoral, engañoerudito que supuso consecuen-cias trascendentes en su juven-tud a Julio Valdivieso.

Disipado el motivo temáticodel poeta López Velarde no pare-ce aprovechado con la rentabili-dad que ofrecía. El fracaso senti-mental entre Julio Valdivieso yPaola permitirá a Julio el hallaz-go de un nuevo destino personal.Es el futuro descubierto, un fu-turo demasiado concreto y pro-vinciano. Ignacia será el símbolodel reencuentro con la tierra delpasado, una tierra demasiado le-jana si se compara con el am-biente misterioso de otro tiem-po. Con todo, la posible decep-ción que el lector puede sentir enel desenlace de El testigo quedacompensada con la apasionanteexperiencia que supone su lectu-ra. Páginas en las que brilla unadesbordante imaginación crea-dora y un estilo que mantienesiempre muy vivo el interés de lonarrado.

Nicolás Miñambres

JUAN VILLORO

El testigo

Anagrama, 2004

472 pp. / 19 euros

JOSÉ MANUEL DE PRADA

El pájaro que cantael bien y el mal

Lengua de Trapo, 2004

352 pp. / 26,90 euros

Juan Villoro

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Aventuras de laGitanilla

Carmen Boullosa nos devuelve en unanovela-río la figura de la Gitanilla, de lasNovelas ejemplares de Cervantes, trans-formada en un personaje de gran potencialiteraria y fuerza poética: María la bailao-ra, también reencarnación de la guerreralegendaria que, a bordo de la galera real,combatió en la batalla de Lepanto.Tras separarse de su padre, expulsado co-mo muchos gitanos por Felipe II, la niñaMaría es llevada a servir a un convento delque huye para ser acogida por unos mo-riscos amigos de su padre, quienes la edu-can y le enseñan el arte de la espada. Cuan-do María termina su entrenamiento, leconfían una misión en Chipre. María ha de hacer frente a muchas aven-turas; recorre la Granada cristiana y lamorisca, es cautiva en Argel y viaja a Ná-poles, cuando en la ciudad se da cita elejército de la Santa Liga. Enamorada delcapitán español don Jerónimo de Aguilar,su amor será un gran desencuentro. Lle-gado el momento en que él debe embarcar,María, disfrazada de hombre, sube a la Re-al tras él. Cuando su enamorado muere encombate, María la bailaora es llevada a laMarquesa, donde hace amistad con un jo-ven soldado y poeta enfermo: Miguel deCervantes.

Nueva miradasobre el 68

Una mirada periodística al año que con-mocionó al mundo. Para algunos éste fue elaño del sexo, las drogas y el rock and roll,pero 1968 fue mucho más, fue considera-do el año de el mayo francés, la primaverade Praga, los disturbios en Estados Uni-dos, la lucha por los derechos civiles de losnegros, la revuelta de los universitarios dela costa oeste, la liberación de la mujer, elprincipio del fin de la Unión Soviética, losasesinatos de Bobby Kennedy y LutherKing, la guerra del Vietnam, las huelgasobreras en Varsovia, los movimientos es-tudiantiles en la España franquista...Un recorrido a través de la política, la mú-sica, los jóvenes, la guerra, la economía olos medios de comunicación de este añoconvulso, cuyos acontecimientos han mar-cado el curso del mundo moderno. Todoello contado con su peculiar estilo pedagó-gico, por medio de anécdotas o análisisprofundos.

CARMEN BOULLOSA

La otra mano de Lepanto

Siruela, 200

19,90 euros

MARK KURLANSKY

1968

Destino, 2005

560 pp. / 22 euros

N O V E D A D E S

charlie Parker, el músico, arras-traba dentro algún tipo de dolor.Charlie Parker, el detective, tam-

bién. Cuando el músico se enteró dela muerte de su hija, Pree, en enero de1954, estaba borracho en una habita-ción de hotel. El detective tambiénhabía bebido mucho cuando apare-cieron asesinadas su mujer y su hija.Ahí terminan sus puntos en común.Al enterarse de la noticia, el músico–según lo cuenta Clint Eastwood enmagnífico su bio-pic– estuvo toda lanoche poniendo telegramas a su mu-jer. Murió un año después. El detecti-ve no pudo quedarse tan quieto: in-tentó encontrar al asesino, puso en pe-ligro su vida y la de sus amigos y tuvoque abandonar la Policía de NuevaYork con muchas sospechas de asesi-nato sobre sus espaldas. Y, claro, el‘Bird’ músico fue una persona real yel ‘Bird’ detective un personaje de fic-ción creado por John Connolly en lanovela Todo lo que muere (Tusquets)y, para colmo, no le gusta el jazz.

Tusquets acaba de publicar aho-ra la segunda novela de la serie, El po-der de las tinieblas, donde CharlieParker decide retirarse a Maine, arre-glar la casa de su abuelo, expiar susculpas y reencontrarse con la vida allento ritmo de los cambios de esta-ción. Acaba de obtener una licenciade detective privado y pronto tendráque usarla porque las desgracias pa-recen perseguirle. El extraño suicidiode una anciana en el bosque, un tiro-teo entre dos bandas mafiosas y elbrutal asesinato de una mujer a la quele había ayudado a conseguir que sumarido, un macarra que vive en unacaravana, le pagara la pensión, con-vertirán la aparentemente tranquilaárea rural de Maine en un territoriode una violencia brutal y oscura quehace brotar los fantasmas que Parkervenía a enterrar. Y como clave unnombre que suena como una maldi-ción en la boca de todos los que lo pro-nuncian: Caleb Kyle.

Connolly ha creado un personajecomplejo. Parker arrastra un enormecomplejo de culpa por no haber sabi-do proteger a su familia, brutalmenteasesinada. Nieto de policía, hijo de po-

Muerte entre la nievea punto de llegar a la zona, un inviernocrudo que cubre de nieve una regiónagreste, boscosa, con centenares dehectáreas donde el hombre apenas hapisado salvo para explotar la madera.Un territorio para lo oculto, lo desco-nocido, con una historia sangrienta.Connolly se mueve con naturalidadentre distintos entornos y es capaz detrasladarnos con igual credibilidad alas suites de lujosos hoteles donde loscapos de la mafia hacen ofertas irre-chazables, a las casuchas en medio dela nada que remiten a la esa tradicióntan americana de los asesinos en se-rie. Y ahí se nota que la mirada del au-tor es la de una extranjero –nació y vi-ve en Dublín la mayor parte del año,donde colabora con el periódico ‘IrishTimes’– que aúna la fuerza de los mi-tos americanos con la frescura de unpunto de vista ‘externo’.

Y un último hallazgo: los persona-jes que acompañan a Parker son deli-ciosos y ponen el contrapunto a tantaoscuridad. Angel y Louis son una pa-reja interrracial de homosexuales ne-oyorkinos que han entablado amistadcon el detective porque, de alguna ma-nera, se dedicaban al mismo negocio:Ángel es un desaliñado atracador debancos retirado y Louis un asesino asueldo de los más solicitados y que vasiempre como un pincel. Su ironía, esaesgrima verbal tan propia de la ‘city’–podrían haber alternado sin temoral ridículo con otra Parker ilustre, Do-rothy– brinda páginas impagables.

La novela está magníficamenteconstruida y resulta compleja y adic-tiva a la vez, algo imprescindible parallegar al final de sus cuatrocientas pá-ginas. Connolly sabe cómo haceravanzar la acción, mezclar las tramas,ahondar en el interior del protagonis-ta, convertir el entorno en un perso-naje más y crear un ambiente en elque nada chirría, que de alguna ma-nera explica por sí sólo por qué ocu-rren las cosas. Prácticamente todo loque debe tener una novela negra pa-ra convertirse en un éxito o, al menos,convencer al siempre exigente lectordel género.

licía, el callo que desarrollan los fun-cionarios del orden ante la muerte yla desgracia ajena se quiebra y pier-de de vista la línea que separa el biendel mal. Sabemos que Parker, ciegode odio, ha causado daño, ha matadopor un primitivo instinto de vengan-za, hasta el punto de alejarle de aque-llos que le quieren, como Rachel, unacriminóloga con la que intentaba re-hacer su vida. Ahora busca reden-ción, recuperar el sentido de su vida yespera no volver a despertar en me-dio de la noche y encontrar fantasmaspor todas partes. Porque, como el ni-ño aquel, Charlie Parker, a veces, vemuertos.

Y es que Connolly aporta al géneronegro su afición por la literatura de te-rror. Los personajes más terribles dela novela son la viva imagen del mal:el asesino a sueldo cuya presencia sehuele en el ambiente, transpira mal-dad en sus rasgos faciales, en su ma-nera de moverse, de hablar; CalebKyle es una especie de ‘hombre del sa-co’ cuyo nombre se dice para aterro-rizar a los niños que se portan mal.Permanecen ocultos pero acechantes,dispuestos a dejar su sello, a mutilary torturar, de una manera aparente-mente arbitraria. Parker intenta po-nerse en su lugar, entrar en sus men-tes, atisbar en un pozo oscuro que leacaba devolviendo su reflejo. Además,el miedo también encuentra una po-derosa imagen en la naturaleza, encómo está descrito el paisaje. La ac-ción comienza cuando el invierno está

JOHN CONNOLLY

El poder delas tinieblas

Traducción:Carlos Milla Soler

Tusquets, 2004

402 pp. / 19 euros

Antonio Marcos

La novela estámagníficamenteconstruida, resultacompleja y adictiva ala vez y sorprende porsu potentecombinación deelementos de terror yde género negro

culturas8 TRIBUNA DE SALAMANCA, Domingo, 6 de febrero de 2005