Nota milo locket

5
16 - Obra Social de Viajantes Vendedores de la República Argentina Pese a que sus obras recorrieron ya prestigiosas galerías del país y del mundo, Milo Lockett se levanta todas las mañanas en su Resistencia natal y piensa qué puede hacer para colaborar. El chaqueño se encuentra actualmente detrás del armado de una escuela toba y sueña con crear lo que sería la primera Casa Garraham fuera de Buenos Aires. P.16 MILO LOCKET

description

Pese a que sus obras recorrieron yaprestigiosas galerías del país y del mundo,Milo Lockett se levanta todas las mañanas en su Resistencia natal y piensa qué puede hacer para colaborar. El chaqueño se encuentra actualmente detrás del armado de una escuela toba y sueña con crear lo que sería la primera Casa Garraham fuera de Buenos Aires.

Transcript of Nota milo locket

Page 1: Nota milo locket

16 - Obra Social de Viajantes Vendedores de la República Argentina

Pese a que sus obras recorrieron ya

prestigiosas galerías del país y del mundo, Milo Lockett se levanta todas las mañanas en

su Resistencia natal y piensa qué puede hacer para colaborar. El chaqueño se encuentra

actualmente detrás del armado de una escuela toba y sueña con crear lo que sería la primera

Casa Garraham fuera de Buenos Aires.

P.16MILO LOCKET

Page 2: Nota milo locket

a! - 17

Page 3: Nota milo locket

18 - Obra Social de Viajantes Vendedores de la República Argentina

Arte para todos

“Mi obra es muy pregnante por la imagen y por el color. Tiene esa cosa de que la puede hacer cualquiera y eso le da una lectu-ra simple y directa. Hace que la gente muchas veces pueda sen-tirse identificada”, explica.

“Para entender una obra no hace falta sa-ber. El arte hay que sentirlo"

Para Milo la idea elitista del arte desapareció después de los años noventa y hoy el pensamiento globalizado tiene que ver más con la inclusión. “Todos nos pa-ramos de una misma manera frente a un cuadro, pero después cada uno hace su propia lectura. Para entender una obra no hace falta saber de arte, haber ido a una escuela especial o tener una determinada formación. Simplemente hay que tener sen-sibilidad y ganas de involucrarse. El arte hay que sentirlo”, afirma. El compromiso

Milo Lockett dona alrededor de treinta obras por año, pero sus acciones solidarias van más allá de eso. Tienen que ver más con asumir un compromiso y soste-nerlo a través del tiempo.

“Eso no quiere decir que otros tengan que hacer lo mismo que yo ni que ello esté mal o bien. Son decisiones personales”, asevera el chaqueño. “A mí me gusta participar de cosas que

A principios del año 2000 Milo Lockett era un em-presario textil que fabricaba remeras. Pero el emprendi-miento se fundió a la par del país y Milo se hartó de la cons-tante inestabilidad. De un día para el otro largó todo y se puso a pintar.

Los sucesivos éxitos de las muestras fueron envalento-nando al devenido pintor y de a poco la alocada idea fue tomando color. “La pintura siempre me gustó, pero nunca imaginé que iba a hacer una carrera”, confiesa hoy Milo.

La formación

Si bien de chico iba a los talleres de bellas artes, Milo no tuvo más aprendizaje que el de su propia práctica, razón por la cual hoy es considerado un autodidacta.

“El hecho de ser libre y no tener estructura me da la posibilidad de encarar la pintura de una forma diferente”, dice. El artista investiga por su cuenta los pin-tores que le gustan y junta toda la información en una biblioteca propia a la cual recurre de tanto en tanto.

Milo es un artista terrenal que busca acercarse al público constantemente. “Hay otros pintores que son más de culto o de museo… pero yo viajo mucho, me relaciono y además trabajo socialmente. Tengo una perso-nalidad que hace que me ponga a conversar con cualquiera y el público generalmente te recono-ce junto a las pinturas”, sostiene.

MILO LOCKET

Milo Lockett

Page 4: Nota milo locket

a! - 19

tengan que ver con lo social: ayudar y colaborar en todo lo que se pueda. Disfruto levantarme a la mañana y saber que estoy haciendo algo por alguien”, dice.

“La gente es solidaria. Siempre hay alguien con ganas de ayudar”

Si bien su alto compromiso social es una característica que lo dife-rencia y distingue, el reconocido artista deja en claro que no está solo en este tipo de cruzada. “La gente es solidaria. Las noticias de los medios generalmente son malas, pero también hay mode-los como Juan Carr, por ejemplo, que es una persona muy buena de la cual me hice muy amigo. La Red Solidaria que armó es genial y recibe la colaboración de mu-cha gente. Siempre hay alguien con ganas de ayudar”, expresa.

Los proyectos en el Chaco

Milo Lockett está detrás de un sueño que es armar la Casa Garraham en el Chaco, la prime-ra fuera de Buenos Aires. “Hay que juntar mucha plata. Estamos construyendo el proyecto de cero, a pulmón y con mucho es-fuerzo. Pero estas son las cosas que van a quedar en la vida más allá de la pintura”, se ilusiona.

Además, junto a la ayuda de per-sonajes como León Gieco, Javier Calamaro y Gustavo Santaolalla, Milo Lockett está colaborando en la construcción de una escuela toba en el interior de su provin-cia. En este caso la insistencia [+]

Page 5: Nota milo locket

20 - Obra Social de Viajantes Vendedores de la República Argentina

de los artistas hizo que los gobiernos nacional y provincial se acercaran a tomar cartas en el asunto.

“Estas son las cosas que van a quedar en la vida más allá de la pintura”

“Uno va aprendiendo los mecanismos. No siem-pre se trata de hacer una donación, a veces es cuestión de tener un proyecto, llevarlo adelante e insistir. Muchas veces decir acá se necesita es-to termina siendo más importante que el propio dinero”, razona.

Su lugar en el mundo

Milo Lockett es una de las pocas personas que puede decir que es profeta en su tierra. El artista fue declarado ciudadano ilustre de Resistencia, lugar donde vive con todos sus logros a cuestas y su familia bien cerca. “Nunca me corrí del Chaco. Por más que aparecieron un montón de cosas en mi vida sigo siendo el mismo. Soy un tipo normal que trabaja, se come el asadito los domingos y cuando puede en la semana se junta también con algún amigo”, dice.

“La vida ya me regaló mucho. Vivo en una casa grande, tengo un patio, un perro y un trabajo que es como jugar todos los días. Pinto como un chico y almuerzo con mi mujer y mi hija. Sigo para adelante pero no me voy, porque aquí ade-más siento que soy útil. La obra terminada de la Casa Garraham representaría algo muy impor-tante para una región tan olvidada como esta” •

UN ARTISTA COMPLETO

Milo Lockett no solo pinta sobre tela. En los últimos años ha puesto su arte sobre nume-rosos murales, cascos de polo, zapatillas y otros objetos de la más diversa índole. Ha pintado solo, acompañado, en público, en privado, en vivo, bajo techo y también al aire libre. Ha recibido varios premios y ha dicta-do numerosos talleres para acercar al arte, por ejemplo, a aborígenes de su provincia y a chicos portadores de HIV.

MILO LOCKET

Fotos de Natalia Diaz.