Etapa 16 (27/08/2016) Pto. De la Cubilla – Refugio del Meicín

Cuando llegamos a Mieres para hacer la parada del autobús ya era de día. Teníamos 45

minutos para desayunar y hacer alguna compra en el mercado. Es el momento de saludar a la

gente ya que en el momento que subimos al autobús por la mañana estamos todos aun

adormilados. Desde Mieres hasta el Puerto de la Cubilla (1.689) todavía nos queda alrededor de

una hora de viaje, más luego el rato que nos lleva prepararnos para salir. Así que sobre las 10:30

partimos desde el puerto dirección a Casa Mieres, a donde llegamos en nada y podemos

comprobar que aún sigue cerrado el establecimiento.

En Casa Mieres comenzamos a subir una pradera para así luego ir por los altos pasando

por La Loma (1.933) en dirección a Peña Ubiña

Pequeña (2.193). En la falda de la peña nos

encontramos con un pequeño grupo de montañeros

de Peña Trevinca que nos estaban esperando.

Después de unos cuantos saludos nos ponemos en la

tarea de subir a la peña, lo cual hacemos siguiendo

unos hitos que nos van llevando hasta la cumbre sin

mayores problemas que superar la fuerte inclinación

T r a n s c a n t á b r i c a La Travesía del Norte

que tiene. Y a las 13:22 ya estábamos en uno de nuestros principales objetivos de día.

Tras un descanso y las fotos de rigor, así como unas explicaciones de cómo va a seguir

siendo el recorrido del día, progresamos por la crestería hasta llegar a un punto donde hay la

posibilidad de continuar por ella haciendo una pequeña trepada lateral o bien dejarnos caer en

dirección Sur para perder altura por una ladera, juntándonos luego todos en el Collado del

Ronzón (1.937). En este collado se encuentran también aquellos que prefirieron continuar

camino sin ascender la “Pequeña”.

Peña ubiña Pequeña (2.193)

En la subida a Peña Ubiña (2.411) el grupo se estira mezclándose también con otros

montañeros que han decidido al igual que nosotros hacer el pico ese día. Lo subimos por la

cresta Sur que es la menos complicada, aunque si hay que echar la mano en alguna ocasión a la

roca. Ya en la cumbre según va llegando la gente se sienta para disfrutar de las vistas y ya

aprovechar para comer.

Después de un descanso toca bajar al Collado Terreros (1.886). Para bajar se decide

hacerlo por la zona en la que hay una pedrera, haciéndolo unos por medio de ella y otros

evitándola por la izquierda. Es un fuerte desnivel a perder en poca distancia y para evitar la caída

de piedras se ha de bajar con bastante cuidado ya que al ser un grupo grande hay que extremar

las precauciones.

En el collado volvemos a reagruparnos para continuar la marcha. En este punto alguno

que ya está cansado o no se encuentra bien decide bajar directamente al refugio del Meicín

(1.560), mientras el resto continua por la Senda de las Merinas, la cual vamos a recorrer metidos

en la niebla y teniendo pocas vistas para el fondo del valle. A las 18:10 nos encontramos junto al

Cuetu Les Cabres, el cual si llegamos a ir mejor de horario hubiera sido uno de esos regalos para

hacer de más.

Como continuaba la niebla, otro grupo decidió que para no poder ver nada preferían bajar

ya para el refugio tranquilamente. El resto se arriesgó a seguir subiendo con la esperanza de

rebasar las nubes, cosa que así ocurrió y al llegar al Prau Capón (2.171) ya teníamos las nubes

por debajo tapando toda la vertiente asturiana mientras que la leonesa estaba despejada. Pudimos

hacer unas fotos desde ese lado a la Peña y luego continuamos hacia la pasada de la Puerta de

Arco.

Después de perder un poco de altura nos encontramos con el sendero que sube por la

pedrera hasta la pasada. En este punto decidimos subir primero al Pico Puerta de Arco (2.151) el

cual nos lleva unos 10 minutos desde el punto en que nos encontramos. Mientras subimos ya

vemos el arco de roca que hay que atravesar para bajar a Torrebarrio. Un par de trepadas y ya

nos encontramos en la reducida cumbre. Sacamos unas fotos y contemplamos las vistas que hay

para el sur ya que por el norte están las nubes y no nos dejan ver nada. Desde este punto sí que

podemos divisar los dos castillines que subiremos a continuación y así aprovechamos para ver

bien por donde subirlos.

Descendemos para pasar por el collado y subir en primer lugar al Segundo Castillín

(2.296) dejando a mano derecha el Primer Castillín (2.252) al cual tenemos decidido subir en

segundo lugar. La subida es en un principio por un sendero con piedra suelta y al final una

pequeña trepada sin exposición pero que hay que hacer con cuidado.

El buzón que hay en la cima es una bonita figura que corresponde a un pozo minero. Nos

hacemos unas fotos y desde ahí podemos divisar el buzón del tercer Castillín al cual no podemos

ir ya que es necesario tener habilidades de escalada, así como el equipo correspondiente para

hacerlo. Destrepamos y luego bajamos un poco por el sendero para desviarnos ahora para

alcanzar el último objetivo del día, que es el Primer Castillín, para lo que tenemos que hacer otra

pequeña trepada antes de la cima. El buzón que hay no es tan bonito como el anterior, pero nos

da la alegría de tener hecha nuestra tarea del día.

Buzón del Segundo Castillín (2.296) Primer Castillín (2.252)

Nos felicitamos todos y comenzamos a bajar para meternos de nuevo en la niebla y que

no nos dejara hasta llegar al refugio. En estos momentos se agradece el llevar un GPS que nos

vaya confirmando que el sendero que

seguimos para bajar es el camino correcto.

Eran las 21:10 cuando los últimos

llegamos al refugio, con ganas de tomar una

cerveza y cenar. Por supuesto damos las

gracias a Tania que es la responsable del

refugio por esperarnos para cenar, ya que la

hora de la cena la teníamos fijada para más

pronto.

Después de una

buena cena y algún cántico

que otro a cuenta de los

"tenores" que llevamos en

el grupo, nos fuimos todos

a descansar. Unos dentro

del refugio y otros fuera de

él.

En el día de hoy hubo otro grupo que en vez de ir a dormir al refugio de Meicín habían

elegido otra opción mas cómoda durmiendo en el pueblo de San Emiliano. Después de hacer

algunos de ellos las cumbres de la ubiña pequeña y la grande se juntaron en el Collado del

Ronzón y retrocedieron de nuevo hasta Casa Mieres para bajar por la pista hasta el pueblo de

Pinos y a continuación seguir caminando hasta San Emiliano a donde llegaron ya pasadas las 8

de la tarde. Una larga caminata por los montes leoneses. Solo les quedo después de eso disfrutar

de una buena ducha y cena en el alojamiento donde se quedaban.