M U S EO S O RO L L A

e x p o s i c i ó n t e m p o r a l 6 j u l i o 2 0 1 8 - 2 0 e n e ro 2 0 1 9

Uno de los grandes sUeños de la vida del pintor

Joaquín Sorolla (valencia, 1863 - Madrid, 1923) fUe

Unir en Un solo espacio sU estUdio y sU casa, sU

pintUra y sU faMilia, todo ello aMparado por Un

bello jardín. el actUal MUseo sorolla de Madrid

es la cUlMinación de ese sUeño, y sU jardín cons-

titUye Una de las obras Maestras Más iMportan-

tes del artista.

Sorolla. Un jardín para pintar relata a través

de Una selección de óleos, dibUjos, escUltUras,

azUlejos y fotografías, cóMo el pintor concibió sU

jardín de artista coMo Un espacio para la belleza,

el deleite sensorial y la creación pictórica.

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esta exposición fue inicialmente un encargo de la obra social “la caixa” y se inauguró en el caixaforum de sevilla; a continuación se mostró en la funda-ción bancaja de valencia y en el Museo patio Herreriano de valladolid. ahora se presenta en el Museo sorolla, con el patrocinio de la fundación Museo sorolla y la fundación Mutua Madrileña.

Sorolla. Un jardín para pintar presenta a un Sorolla maduro, que a lo largo de sus últimos años, en medio de los esfuerzos que le exige la realización del gran encargo de los murales de Visión de España para la Hispanic Society de Nueva York, encuentra el tiempo para pensar un jardín, trazarlo, plantarlo y cultivar-lo, y sentarse por fin a disfrutarlo pintándolo —pues para Sorolla descansar y gozar eran lo mismo que pintar—: un Sorolla a la vez pintor y jardinero, como lo fueron otros pintores de su tiempo. Y finalmente llama la atención sobre los aspectos específicamente botánicos del jardín, que son los que le prestan todo aquello que Sorolla más estimaba: color, variedad, movimiento, vida.

El rosal amarillo de la Casa Sorolla, 1918-1919. Museo Sorolla, inv. 1240, (detalle)

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COntEnidOS

La exposición se compone de:

• CuadrosydibujosdeJoaquínSorolla

• FotografíasdeljardínenépocadeSorolla

• Esculturasyazulejosprocedentesdeladecoracióndeljardín

(ColeccionesdelMuseoSorollaylaFundaciónMuseoSorolla)

Y se articula en las secciones:

1. Un jardín para vivir. Un jardín para pintar

2. Primer jardín. Sevilla

3. ElPatioAndaluz

4. Segundo jardín. Roma y Granada

5. Eltercerjardín.Estanqueypérgola

6. Epílogo

Jardín de la Casa Sorolla, h.1918-1919. Museo Sorolla, inv. 1237, (detalle)

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Un jardín para vivir. Un jardín para pintar

Paraeldiseñodesujardín,SorollaseinspiróenlaAlhambradeGranadayelAlcázardeSevilla,quehabíapintadorepetidasvecesapartirde1908.Jardinesamplios pero organizados en espacios íntimos, recogidos por la arquitectura y donde la presencia del agua es discreta pero constante.

Pensados para ser pintados y para disfrutarlos en familia, los jardines fueron tambiénunespaciosocialdondeSorollarecibíaasueleganteclientelayacogíaalosamigosparaagradablestertuliasytés.

EnvidadeSorollaeljardín,todavíanocercadoporlosaltosbloquesdepisosactuales, recibía abundante sol y florecía generosamente, regalando su perfu-me pero sobre todo los colores que Sorolla había escogido con ojos de pintor. Enunprocesodeidayvuelta,eljardínpasarádesuimaginaciónalarealidadfísica y de ahí a sus lienzos, generando infinitas posibilidades pictóricas.

Jardín de la Casa Sorolla (el primer jardín), h. 1919. Museo Sorolla, inv. 1232, (detalle)

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Primer jardín. Sevilla

ElimpactoquelosjardinesdelAlcázardeSevillahicieronenSorollaesevi-dente por la fuerza con que algunos de sus motivos se manifestaron luego en eldelpintor.LoscuadrosquerepresentanelJardíndeTroya—oRincóndelGrutesco—, con su pórtico clásico, la escalera decorada con azulejo que le da acceso y la fuente de mármol se confunden fácilmente con los del propio jardíndelantero,oPrimerJardín,delacasadeSorolla.Aunquetrazadoporelarquitecto, delata el gusto del pintor en el propio diseño del pórtico, en la con-tundencia de los setos, en la brillante policromía de los azulejos y en la forma de enmarcar el paso al segundo jardín entre dos altas columnas rematadas con figuras escultóricas.

Fuente y rosal de la Casa Sorolla, 1918 . Museo Sorolla, inv. 1241, (detalle)

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El Patio Andaluz

La composición del patio es la tradicional en cruz, con cuatro parterres y una fuente en el centro cuyo diseño parece directamente inspirado en una de las fuentesqueSorollapintóenelAlcázar.Lasespeciesescogidasfueroncipresesy adelfas. Los azulejos garantizaron la permanencia del color en todo tiempo: azules de la fábrica trianera de Mensaque los de la fuente; verdes y amarillos, de la fábrica talaverana de Ruiz de Luna, los de las galerías. Y la cerámica ale-gró siempre sus paredes, en estantes con cacharros y en numerosos cuadritos formados por azulejos antiguos enmarcados.

El patio andaluz de la Casa Sorolla, 1918-1919. Museo Sorolla, inv. 1242

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Jardín de la Casa Sorolla, h. 1918 . Museo Sorolla, inv. 1235, (detalle)

Segundo jardín. Roma y Granada

Elsegundojardín,bisagraentreelprimeroyeltercero,fueelúltimoencons-truirse. Su eje longitudinal lo definen los parterres y el canal que discurre entre ellos desde una fuente hundida de taza redonda, como las que Sorolla había vistoenlaAlhambra,hastaunpequeñoestanque.Elelementodefinitivoparacerrar la perspectiva llegó con el regalo de una estatua romana que Sorolla recibióen 1916.Todavíaen 1917,ensuúltimoviajeaGranada,SorollabuscaenlaAlhambraalgunasideasparasu“nuevojardincillo”,queesemismoañoquedará terminado.

Siendo el jardín que más preocupó a Sorolla (como demuestran los numerosos dibujos en que anotó sus ideas), fue el que menos pintó: el cuadro que aquí se presenta es el único que conocemos de su conjunto. Pero sí pintó, muchas veces, las vistas cruzadas entre este jardín y los otros dos. Sus ejes en codo los articulan creando vistas oblicuas que permiten un descubrimiento paulatino del jardín; este se va desvelando poco a poco en imágenes ricas de contraluces y tamizadas por pantallas de vegetación, columnas y esculturas.

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Balsa del jardín de la Casa Sorolla, 1918. Museo Sorolla, inv. 1143, (detalle)

El tercer jardín. Estanque y pérgola

Eltercerjardínseconstruyóalavezqueelprimero(1911).Suelementoprinci-palesunestanquepresididoporungrupoescultórico.Enélseplantaronne-núfares, y a su alrededor lirios blancos y morados, rododendros, hortensias y azaleas, y en un parterre lateral alhelíes rosados que Sorolla pintó varias veces.

Los jardines que visita y pinta en sus viajes le descubren muchas de las plantas queluegocultivaráenelsuyo.Traslaintencionalidadestéticaysensorialdelasplantas que Sorolla utiliza y retrata hay tradiciones, siglos de descubrimientos botánicos, avances en las técnicas de jardinería y reminiscencias simbólicasqueélfundeconaciertoenlacreaciónúnicaypersonaldesupinturaysujardín.

Lostresjardinesseengrananatravésdeelementosdetransiciónypuntuación:escalones que salvan desniveles, columnas que subrayan las conexiones entre ellos, fuentes, solados, bancos y tiestos de cerámica de vivos colores. Y las esculturas ejercen de actores principales aportando sensualidad y movimien-to.Es larecuperaciónde laesenciadenuestros jardinesenel llamado jardínneo-español, del que Sorolla será precursor.

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Balsa del jardín de la Casa Sorolla, 1918 Museo Sorolla, inv. 1143, (detalle)

Jardín de la Casa Sorolla, 1920 Museo Sorolla, inv. 1274, (detalle)

Epílogo

Ensusúltimosaños,Sorollaregresóaaquellosjardinesquelehabíaninspirado:laAlhambra,dondepintaenelinviernode1917unoscuadrossobrioseinten-samentepoéticos,yelAlcázarsevillano,dondepintaenlaprimaverade1918algunos cuadritos, en cambio, de alegre exuberancia. Pero pintó sobre todo su propio jardín, donde produjo numerosos cuadros llenos de sabiduría.

EntreSorollaysumujerexistiósiempreunacontinuacomunicaciónenlaquelasflorestuvieronamenudounpapelprotagonista.Enunodesusúltimosre-tratos,ClotildeaparecesobreelfondodeunadelasperspectivasfavoritasdeSorolla:elparterredealhelíesrosados.En1920,precisamentepintandoensujardín, sorprendió a Sorolla la enfermedad que le impediría seguir ejerciendo elúnicooficioqueparaélteníasentidoensuvida.Enunadesusúltimasre-presentaciones del jardín, Sorolla nos deja una imagen que hoy nos parece una despedida: la de su sillón de mimbre, donde lo hemos visto en las fotos disfru-tando de su pequeño paraíso, o pintando esos últimos cuadros.

Horarios de apertura:

Martes a sábado, de 9:30 a 20:00 h.

Domingos y festivos, de 10:00 a 15:00 h.

Lunes: cerrado

tarifas:

Entradageneral:3€; entrada reducida (para grupos con reserva): 1,5€

Venta anticipada de entradas en taquilla y en la web del Museo: www.museosorolla.es

Audioguías:2,5€,disponiblesenespañol,inglésyfrancés.Nuevaaudioguíainfantil.

@museosorolla @MuseoSorolla @Museo_Sorolla

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#SorollaUnJardinParaPintar

COntACtO pREnSA E iMágEnES comunicacion.msorolla@mecd.es

COMiSARiAS

MaríaLópezFernández,ConsueloLucadeTenayAnaLuengoAñón

COORdinACión

Lorena Delgado

diSEñO y diRECCión dEL MOntAjE Fradearquitectos

diSEñO gRáfiCO

Vélera

MOntAjE

SIT

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EdicionesElViso

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