Monografia Tortugas terrestres

Autor: Renzo Rodríguez

ÍNDICE

INTRODUCCIÓN

CAPÍTULO I

GENERALIDADES DE LAS TORTUGAS

1.1 EVOLUCIÓN

1.2 CARACTERÍSTICAS

1.3 CLASIFICACIÓN

CAPÍTULO II

LAS TORTUGAS TERRESTRES

2.1 CARACTERÍSTICAS GENERALES

2.2 EL HABITAT

2.3 ALIMENTACIÓN

2.4 REPRODUCCIÓN

CAPÍTULO III

LAS TORTUGAS TERRESTRES COMO MASCOTAS

3.1 CUIDADOS DE TERRENO

3.2 RECOMENDACIONES PARA SU MADRIGUERA

3.3 RECOMENDACIONES PARA SU ALIMENTACIÓN


CAPÍTULO I

GENERALIDADES DE LAS TORTUGAS

1.1. EVOLUCIÓN

Las tortugas pertenecen al orden de las Chelonia, uno de los órdenes más

antiguos de reptiles. Las primeras tortugas evolucionaron hace más de 200

millones de años atrás, en la época de los dinosaurios.

Los restos fósiles encontrados en Nuevo México de un hueso de 210 millones de

años muestran que en la antigüedad las tortugas no poseían caparazón y tenían

un aspecto similar al armadillo. Posteriormente con los años unas placas de

protección se unieron a las vértebras del reptil y con el tiempo se convirtió en el

hoy conocido como caparazón.

1.2. CARACTERÍSTICAS

Las tortugas se distinguen de todos los demás vertebrados por tener un

caparazón exterior que cumple la función de proteger su cuerpo. Esta envoltura

tiene cavidades por los que la tortuga puede sacar su cabeza, su cola y sus patas.


Las tortugas son animales que se distinguen por sus mandíbulas sin dientes y sus

caparazones duros.

Las especies de tortugas terrestres tienen pies pesados y caparazones en forma de

cúpula, mientras que las acuáticas o marinas tienen los pies unidos por

membranas y sus caparazones son más chatos para facilitarles el nado.

Independientemente de donde pasen sus vidas, todas las tortugas necesitan

respirar aire y todas ponen huevos en tierra. La tortuga es conocida

popularmente como un animal inofensivo y pacífico, a pesar de que muchas de

ellas son cazadoras carnívoras. Son amables con las personas, pero suelen

mostrarse tímidas y se esconden dentro de su caparazón a la menor ocasión.

1.3. CLASIFICACIÓN

Según la forma que tienen de esconder la cabeza dentro del caparazón se

clasifican en:

- Tortugas Pleurodiras, que doblan el cuello lateralmente.

- Tortugas Criptodiras, que esconden la cabeza metiendo el cuello hacia el

interior.

Según su hábitat se clasifican en:

- Tortugas terrestres: estas Tortugas se caracterizan por ser lentas, poseen

caparazones abombados y su alimentación está basada principalmente en

verduras y vegetales. Existe una gran variedad de Tortugas terrestres, desde

muy pequeñas que sólo llegan a medir 10 centímetros y otras muy grandes

como las Tortugas Galápagos. Se pueden encontrar Tortugas terrestres en

Europa, África, Asia y América.

- Tortugas semi-acuáticas: este tipo de Tortugas prefiere vivir en lugares con

alto nivel de humedad y pueden estar presentes en la tierra y también en el


agua. Este grupo también está integrado por muchas especies que se

distribuyen a lo largo de América y Asia.

- Tortugas acuáticas: reciben este nombre las Tortugas que viven en ríos,

estanques, lagos, pantanos, es decir espacios donde esté presente el agua

dulce. Algunas de las Tortugas que integran este grupo suelen tener

caparazón blando (tal el caso de la Tortuga mata-mata, la Tortuga mordedora

o las Tortugas de cuello lateral). Las Tortugas acuáticas están presentes en

los 5 continentes pero, las más reconocidas, son las Tortugas americanas.

- Tortugas marinas: se denomina de esta forma a aquellas Tortugas que

habitan los distintos mares y océanos. El grupo está integrado por tan sólo 7

especies, la mayoría de las cuales se encuentra en peligro de extinción.


CAPÍTULO II

LAS TORTUGAS TERRESTRES

2.1. CARACTERÍSTICAS GENERALES

Las tortugas terrestres necesitan bastante espacio. Necesitan poder exponerse al

sol al menos 1 o 2 horas al día, siempre cuando ellas lo elijan. De norma general,

las tortugas de tierra viven unos 50-60 años, aunque es frecuente que duren 80 o

más.

Las tortugas se reproducen por huevos. Las hembras ponen huevos a partir de

los 12-15 años de edad, en la época de primavera-verano. Se puede dar el caso

en el que la hembra ponga huevos sola, sin ayuda del macho. Esos huevos no

serán fértiles.

Cuando la temperatura disminuye y las horas de luz se ven reducidas, las

tortugas terrestres disminuyen su actividad, quedándose paradas hasta que las

condiciones mejoran. Aún así, existen casos en los que si las tortugas tienen un

ambiente cerrado y cálido pueden reducir esta hibernación, incluso eliminarla.

Esto suele ocurrir con tortugas en cautividad.


Una de las tortugas terrestres más famosas es posiblemente la tortuga de caja, de

la cual existen varias subespecies. Estas tortugas pueden superar fácilmente los

cien años de edad. Además tienen la característica peculiar que pueden ocultarse

por completo dentro de su caparazón, cuando otras especies solo pueden hacerlo

en parte.

2.2. EL HÁBITAT

La tortuga de tierra excavan madrigueras en suelo arenoso. Estas madrigueras

proporcionan un hogar y un refugio para la tortuga y más de 350 especies de

animales salvajes y de insectos que comparten el mismo hábitat.

Las tortugas de tierra prefieren lugares altos, secos, arenosos tales como sitios

con pinos de hojas largas y colinas de arena de robles. También viven en maleza,

matorrales secos, bosques planos de pino, praderas secas, prados y dunas

costeras, comunidades mezcladas de madera noble con pinos y una variedad de

hábitats disturbados, tales como terrenos de pasto.

Los expertos de la fauna llaman a la tortuga de tierra una “especie fundamental”

porque es la columna vertebral de la comunidad de flora y fauna en la que vive.

Sin la tortuga, las poblaciones de más de 350 especies de fauna que buscan

refugio o viven en madrigueras serían reducidas grandemente, si no eliminadas

del todo. Las especies que dependen de las madrigueras de tortuga se llaman

comensales e incluyen serpientes, ranas, búhos, ratones, grillos, escarabajos.


2.3. ALIMENTACIÓN

Las tortugas de tierra pastan naturalmente en una amplia variedad de tipos de

plantas, incluyendo hierbas hojosas, grama, cacto de pera espinoso, uva salvaje,

zarzamora, arándano, moras y muchas más. Se alimentan generalmente en hasta

aproximadamente 160 pies de su madriguera, pero se las ha observado recorrer

más de dos veces esa distancia para satisfacer sus necesidades de pastoreo y

nutrición.

La mayoría de las tortugas se mantienen fácilmente en cautiverio y aceptan una

amplia variedad de alimentos preparados especialmente para ellas. Un ejemplo

son los pequeños camaroncitos, las larvas de mosquitos, o los pequeños churritos

“pellets”, todos ellos generalmente son aceptados con agrado. Es conveniente

variarles con estas opciones su alimentación para evitar su aburrimiento, también

con gusto aceptan el alimento vivo como la artemia y los charales, por lo que

una o dos veces por semana que los consuman será beneficioso para su dieta. No

alimentar en exceso ya que el agua se ensucia demasiado, debemos dar lo que

consumen en dos minutos. Si espolvoreamos de vez en cuando vitaminas en su

comida tendrán una dieta balanceada, sobre todo si son tortugas en crecimiento.

El calcio y el fósforo son elementos importantes para las tortugas ya que éstas

están constituidas principalmente por un caparazón, o sea por un hueso

compuesto básicamente de calcio y fósforo, por lo que sobre todo a los

ejemplares jóvenes que se encuentran en desarrollo, se les debe proporcionar

calcio. El calcio existe comercialmente y se vende en bloquecitos que se ponen

en el agua de la tortuga ayudando a que su caparazón no se ablande.


2.4. REPRODUCCIÓN

Los machos se distinguen de las hembras por su plastrón (parte ventral del

caparazón) cóncavo en lugar de plano, y por la cola más larga y gruesa.

Para poner los huevos, la hembra excava un agujero. La falta de un suelo blando

para excavar el nido puede ocasionar la retención de los huevos, y constituir un

riesgo serio para la tortuga.

La incubación artificial de los huevos suele aumentar el número de crías

obtenidas. Se puede fabricar una incubadora casera.

Los primeros días de vida, las tortuguitas deben alojarse sobre una superficie

limpia. El primer año conviene mantenerlas en un terrario y evitar que hibernen.

Distinción entre el macho y la hembra

Para distinguir a los machos de las hembras observaremos el plastrón (parte

ventral del caparazón). En los machos suele ser ligeramente cóncavo, mientras

que en las hembras es plano. La cola del macho también es más gruesa y larga

que la de la hembra, y tiene el orificio de la cloaca más alejado de la base.


Persecución del macho a la hembra

La madurez sexual no depende tanto de la edad como del tamaño, y pueden

alcanzarla entre los 7 y 10 años de edad. Las cópulas tienen lugar principalmente

entre abril y junio. Durante este periodo, los machos persiguen insistentemente a

las hembras, golpean con su caparazón el de ellas, y les muerden las patas.

Pueden dedicarse obstinadamente a esta tarea gran parte del día, y a veces

persiguen y tratan de montar a otros machos.

Si ponemos una hembra junto a diversos machos, sin espacio suficiente para que

huya o se oculte, estos pueden llegar a dañarla seriamente con sus mordiscos.

Durante la monta, el macho se sitúa encima de la hembra, apoyándose en el

suelo con las patas de atrás, y emite unos gemidos agudos y fuertes que

sorprenden a los que no está familiarizado con sus costumbres.

Esperma para tres años

La hembra puede almacenar el esperma del macho en su interior, y usarlo para

fertilizar los huevos que va poniendo, hasta tres años después. Este curioso

fenómeno se conoce con el nombre de Amphigonia retardata.

Para poner los huevos, la hembra excava con las patas de atrás un agujero de 10

o 12 cm de hondo en el que luego los entierra. Con frecuencia excava varios

nidos antes de decidirse a usar uno de ellos.

La puesta de huevos de la tortuga

La falta de un suelo lo bastante blando para excavar el nido puede ocasionar la

retención de los huevos, y constituir un riesgo serio para la vida de la tortuga. La

mayoría de puestas tienen lugar antes de junio, y contienen de 2 a 12 huevos. La

tortuga de Asia Central (Testudo horsfieldi) puede efectuar 3 o 4 puestas anuales

de 3 a 5 huevos.


Algunas hembras pueden hibernar con parte de la puesta todavía en su interior, y

completarla al despertar de la hibernación, aunque esto no es lo normal.

Los huevos de las tortugas

Los huevos son más calcificados y duros que los de otros reptiles; casi como los

de un ave. Tienen forma ovalada, con un diámetro de 2.1 a 3.5 cm en su eje

corto y de 2.8 a 4.2 en el largo, dependiendo del tamaño de la tortuga y de la

especie.

La incubación natural, allí donde la tortuga ha decidido enterrar los huevos,

fracasa en muchas ocasiones. Probablemente la tortuga no ha podido escoger el

lugar idóneo como habría hecho en la naturaleza. La eclosión natural de los

huevos se produce en general entre agosto y octubre.

Incubación artificial para las tortugas

Se suele conseguir un mayor número de crías si las puestas se incuban

artificialmente

Se puede fabricar una incubadora casera con un contenedor de plástico, en el

suelo del cual se pone vermiculita y agua, sin llegar a cubrirla completamente.

La temperatura debe mantenerse a 28-32 ºC con un termostato. La humedad

conviene que sea elevada, cercana al 60%.

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Tras dos meses y algunos días empiezan a emerger las tortuguitas. La duración

de la incubación es variable, siendo en general más corta a mayor temperatura.

Para romper la cáscara del huevo las crías disponen de una protuberancia dura y

afilada sobre la nariz, llamada diamante, que les cae a las pocas horas de nacer.

El proceso de salir del huevo puede durar entre 24 y 48 horas. Si no se alarga

más, es preferible no intervenir.

La mayoría de los huevos eclosionan a lo largo de 2 o 3 días, aunque a veces

parte de la puesta puede retrasarse más de una semana respecto al resto.

Durante los primeros días de vida las tortuguitas pueden no comer nada, porque

todavía están reabsorbiendo el vitelo del huevo que tienen en su interior.

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CAPÍTULO III

LAS TORTUGAS TERRESTRES COMO MASCOTAS

3.1. CUIDADOS DE TERRENO

Se les debe acondicionar un terrario de preferencia en el jardín, donde las

tortugas comerán hierbas y tomaran el sol, sin embargo es recomendable que

también haya otro espacio con sombra, pues les gusta resguardarse del sol de vez

en cuando.

Para construir su terrario se pueden utilizar cajas de madera y refugios con

piedras lisas, asegurándose que estén colocadas firmemente y que no sean muy

altas para que las tortugas no se caigan.

El material del suelo del terrario no debe ser arena o tierra muy fina ya que el

animal lo esparcirá en sus patas, cabeza y ojos.

Los mejores materiales para este fin son las virutas de madera y la gravilla,

donde la tortuga puede excavar e introducirse sin hacerse daño.

Se recomienda mantener algunas plantas alejadas de ellas, como los cactus lisos,

plantas suculentas y aloes. Tenga siempre recipientes de agua potable que no

sean hondos ni estrechos y que sean pesados para que no puedan volcarlo.

3.2. RECOMENDACIONES PARA SU MADRIGUERA

Deje la tortuga tranquila y mantenga a los perros y a los niños pequeños lejos

de ella y de su madriguera.


Utilice plantas beneficiosas para las tortugas para sembrar en su jardín.

Además de proporcionar alimento excelente para la tortuga, las plantas

requerirán ser regadas muy poco una vez que se hayan establecido.

Permita que la tortuga entre y salga libremente de su patio.

Es aceptable cortar la hierba alta alrededor de la madriguera en caso de

necesidad pero no disturbe la madriguera y el montículo.

Si es posible, evite segar, cavar, conducir ningún vehículo o de otra manera

disturbar el área alrededor de la madriguera.

Nunca bloqueé la entrada a la madriguera, esto podría ser dañino para la

tortuga o impedir su salida.

3.3. RECOMENDACIONES PARA SU ALIMENTACIÓN

Una tortuga en cautiverio necesita recibir sobre todo verduras, como lechuga,

tomates y zanahorias, y también aceptará flores, plantas, hojas, maíz y arroz.

Otra opción son las frutas, en especial maduras y dulces. Por ejemplo: uvas,

frutillas, bananas, cerezas, manzanas y peras.

Hay quienes recomiendan que dentro de la dieta se incluya también salvado,

para favorecer la digestión, y que se limiten los alimentos grasos para no

provocar obesidad. Se suele sugerir enriquecer la dieta con proteínas: lombrices,

caracoles, carne picada, corazón e hígado.


El plato debe ser bajo, para que no tenga que esforzar su frágil cuello, y es

importante darle el alimento en pedazos pequeños trozos, lo que le ayudará a

tragar sin problemas. Es esencial que la comida sea fresca, y por lo tanto hay que

eliminar los restos para no confundirse.

Durante la temporada de la hibernación las tortugas comen mucho menos. Puede

ocurrir que no coman nada durante tres o cuatro semanas, y eso no es signo de

enfermedad sino que se encuentran listas para el reposo invernal.

Aunque las frutas y verduras proporcionan mucho líquido, igualmente necesitan

tener siempre cerca un bebedero con agua fresca, limpia y no muy fría.

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