PRESENTACIÓN

Hoy en día resulta difícil entender el

tratamiento educativo de la sordera desde una

posición estrictamente oralista sin tomar en

consideración estos nuevos planteamientos

que nos conducen a una concepción de

corte sociolingüístico. En este sentido Sordo

es aquel que con relativa independencia de su

pérdida se siente parte de la comunidad sorda,

conoce su lenguaje y comparte sus

peculiaridades culturales, peculiaridades que

están relacionadas con el papel predominante

de la experiencia visual. (Alonso y otros,

1991).

Los argumentos derivados de los

estudios anteriores constituyen en buena

medida el soporte teórico de las necesidades

educativas especiales del alumno con

deficiencia auditiva que vamos a enumerar y

explicar brevemente a continuación antes de

mencionar el modelo educativo que a nuestro

juicio mejor puede responder a la problemática

de la sordera.

Las alumnas

DISCAPACIDAD AUDITIVA

Ríos Hernández, M. (2003) Considera la discapacidad auditiva como “aquel trastorno sensorial caracterizado por la pérdida de la capacidad de percepción de las formas acústicas, producida ya sea por una alteración del órgano de la audición o bien de la vía auditiva” Dentro del concepto de discapacidad auditiva se incluyen la Hipoacusia y Sordera. Hipoacusia Pérdida auditiva de superficial a moderada, no obstante, resulta funcional para la vida diaria; aunque se necesita el uso de auxiliares auditivos. Las personas que presentan hipoacusia pueden adquirir el lenguaje oral a través de la retroalimentación de información que reciben por la vía auditiva. Sordera Pérdida auditiva de moderada a profunda cuya audición no es funcional para la vida diaria y la adquisición de lenguaje oral no se da de manera natural. Los alumnos sordos utilizan el canal visual como vía de entrada de la información, para aprender y para comunicarse, por lo que es necesario enseñarles un sistema de comunicación efectivo como la Lengua de Señas. No todos los niños que presentan pérdida auditiva son considerados sordos, sino únicamente aquellos con pérdida de severa a

profunda: (Moores, 1987).

ADAPTACIONES: CÓMO ENSEÑAR Y EVALUAR

Estas adaptaciones pueden ser:

1. Situar al alumno deficiente auditivo en una ubicación apropiada en el aula.

2. Introducir métodos, técnicas y ayudas en las actividades de enseñanza aprendizaje para el trabajo de determinados contenidos, sean éstos específicos de los alumnos deficientes auditivos o compartidos con su grupo de referencia.

3. Utilizar técnicas, procedimientos e instrumentos de evaluación distintos de los del grupo de referencia

4. Introducir actividades individuales para conseguir objetivos comunes al grupo de referencia

5. Introducir actividades individuales para el desarrollo de contenidos y objetivos específicos del alumno.

6. Eliminar actividades en las que el alumno no se beneficie o no pueda tener una participación activa y real

7. Adecuar los objetivos, contenidos y criterios de evaluación.

8. Dar prioridad a determinados objetivos, contenidos y criterios de evaluación.

9. Introducir contenidos, objetivos y criterios de evaluación

UNIVERSIDAD MARCELINO CHAMPAGNAT

ESCUELA DE POSTGRADO

PROGRAMA DE MAESTRÍA

MENCIÓN: PROBLEMAS DE APRENDIZAJE

ENSEÑANZA DE LA ESCRITURA A PERSONAS CON NECESIDADES EDUCATIVAS ESPECIALES EN

AUDICIÓN SEVERA

ALUMNAS

BEATRIZ CHUMPITAZ MORAN

CARMEN MENDOZA AVILA

I CICLO

LIMA- PERÚ

2012

INCLUSIÓN EN EL PROYECTO CURRICULAR

Además de una filosofía de centro favorecedora

de la integración, algunas de las decisiones que

pueden incluirse en el proyecto educativo son las

siguientes:

Proporcionar los cauces y las medidas adecuadas para que los profesores aprendan a comunicarse de forma efectiva con todos los alumnos. Favorecer la participación de los padres de los alumnos con déficits auditivos en la asociación de padres, en comisiones, grupos de trabajo, etc.

Contemplar la posibilidad de que personas adultas sordas participen en algunas actividades que se organicen en el centro.

Establecer coordinaciones con otras instituciones educativas, laborales, sanitarias, para responder a las necesidades detectadas en el centro.

CONCLUSIONES

1. Formar a los estudiantes para que convivan

en una sociedad solidaria orientada a

proteger a las personas más vulnerables

como aquellos con alguna discapacidad

motora, visual o auditiva.

2. Promover el rol de la familia dentro de la

sociedad para que le permita al estudiante

con necesidades educativa especiales su

desarrollo personal y de integración a la

sociedad.

3. Educar es el principal y primer instrumento

de integración social, debiéndose hacer

efectivo este derecho a todos y todas las

personas con necesidades educativas

especiales, a una formación académica,

personal, espiritual.

4. Involucrar a los profesores, formarlos

adecuadamente.

5. Adaptar la educación de las personas con

discapacidad a las distintas capacidades

(educación personalizada)

6. Los educadores deberán adaptarse a la

personalidad del estudiante con

discapacidad, de acuerdo con sus distintas

capacidades, a través de las

ADAPTACIONES CURRICULARES