MISIONEROS DE DIOS · DE DIOS “No tengan miedo de recibir la Santa Comunión de rodillas, ni...

36
INFORMATIVO DE LAS APARICIONES DE LA SANTISIMA VIRGEN EN EL MONTE CARMELO, PEÑABLANCA - CHILE MISIONEROS DE DIOS “No tengan miedo de recibir la Santa Comunión de rodillas, ni tampoco tengan miedo de hacer el ridículo con el velo sobre la cabeza, y poned todos el pez en las puertas de sus casas sin tener miedo, porque ha llegado la lucha decisiva, los que están con Dios o los que están en contra de Él”. Peñablanca, Chile – 6 de octubre de 1984. Número 332 Enero 2014

Transcript of MISIONEROS DE DIOS · DE DIOS “No tengan miedo de recibir la Santa Comunión de rodillas, ni...

1

INFORMATIVO DE LAS APARICIONES DE LASANTISIMA VIRGEN EN EL MONTE CARMELO,PEÑABLANCA - CHILE

MISIONEROSDE DIOS

“No tengan miedo de recibir la Santa Comunión de rodillas, ni tampoco tengan miedo dehacer el ridículo con el velo sobre la cabeza, y poned todos el pez en las puertas de suscasas sin tener miedo, porque ha llegado la lucha decisiva, los que están con Dios o los

que están en contra de Él”.Peñablanca, Chile – 6 de octubre de 1984.

Número 332Enero 2014

2

ORACION DE LA REVISTA MISIONEROS DE DIOSSantísima Virgen María, Madre de Dios y Madre nuestra, Dama Blanca de la Paz,

mira benignamente a nosotros tus hijos que humildemente suplicamos tu mediaciónante Jesucristo Nuestro Señor para que nos permita dar a conocer la Gloria de Dios,Uno y Trino y aumenta nuestra fe y la de nuestros hermanos, a través de la revistaMisioneros de Dios, para la que pedimos Tu especial Bendición.

Acompáñanos Madre querida para que como grupos Marianos demos a conocertus mensajes de salvación expresados en tus Apariciones, como son: salvar almas quevan por el camino de la perdición, aumentar cada vez el número de los que recurrenal rezo del Santo Rosario y nuestra propia santificación.

Que nuestro Padre que está en los Cielos escuche por medio tuyo, Madre, laspeticiones de gracias espirituales y materiales de los lectores de tu revista.

Haz que se cumpla siempre en todos nosotros la Santa Voluntad de Dios y aceptenuestra diaria consagración a los Inmaculados Corazones de Jesús y María.

Amén

La revista Misioneros de Dios es una publicación Católica y Mariana, cuyo objetoes dar a conocer las Apariciones de la Santísima Virgen que a lo largo de la historia hanocurrido en numerosos lugares.

Particularmente es el órgano oficial de las Apariciones de la Dama Blanca de laPaz en el Monte Carmelo, Peñablanca, Chile.

La Santa Misa se celebra en el Santuario de la cumbre del cerro, todos los primerossábados de mes, con autorización y sacerdotes exclusivamente nombrados por el señorObispo de Valparaíso.

Los otros días hay rezo diario del Santo Rosario y celebración de las fiestasMarianas, así como confesiones por los sacerdotes visitantes, incluso de otros países.

3

Propietario:Fundación Monte Carmelo

Dirección y Redacción:Cecilia Hurtado Goycoolea

Representante Legal:Jorge Aravena Toledo

Colaboradores:Padre Miguel Contardo EgañaFanny Mc Intosh DávilaCarmen Acuña Santa MaríaAdela Frías LarraínNéstor Morales López (fotografías)

Donaciones:Banco Crédito e InversionesCuenta 10194002 - Oficina Central

Diagramación e Impresión:Arancibia Hnos. y Cía. Ltda.

Reparto informativo:– Santuario Monte Carmelo-Peñablanca– Magdalena Ortiz - Domingo Santa

María 1757 - Independencia - SantiagoFono: 7770744; o

– Cecilia Hurtado G. - Casilla 119, SanFelipe - V Región — Correo electrónico:[email protected]

S U M A R I OEditorial 3Oración dictada por Nuestro Señor a Vassula Ryden 4Aparición de María Santísima del 14 de abril de 1984 en Peñablanca 5Nuestra Señora del Divino Llanto (Italia) 82 de febrero: Virgen de la Candelaria (Chile) 11La resurrección de Lázaro 13El Tiempo de Jesús 19Mi vida en Nazaret 20La Eucaristía: La Eucaristía y los convertidos 21Las Promesas de la Adoración Eucarística 24Corred hacia vuestra Madre Bendita 25Noticias de Medjugorje 28Familia… ¡no te dejes destruir! 29Recomendación del Prefecto, Cardenal Cañizares 30Directo y profético el Papa en Santa Marta: “La apos- tasía general es la prohibición de adoración” 30Nos ha dejado el querido Padre Ruperto Horn Klen- ner 31Misa primer sábado de diciembre de 2013 33Noticias del mundo 34Testimonios 34Recordando testimonios 35Mensajes 36

NUESTRA PORTADA

MISIONEROSDE DIOS

Editorial

“Abrid los corazones a la esperanza”

“Hijos predilectos, comenzad este nuevo año en la solemnidad litúrgica de mi divinaMaternidad”.

“Soy verdadera Madre de Dios”, nos dice la Virgen en el Movimiento SacerdotalMariano.

Desde la eternidad el Padre Celestial la ha escogido para esta inefable misión. “No teagradaron ni sacrificios ni holocaustos ¡Oh Dios¡, por eso me has preparado un cuerpo”.

Para formar un cuerpo al Hijo, el Padre, en su eterno designio de Sabiduría, hapreparado un cuerpo a la Madre: así desde la eternidad ha salido de su divino Pensamiento.

“El Verbo la ha contemplado desde siempre en el momento en el que por su consen-timiento materno, habría de descender a su seno virginal, haciéndose también hombre”.

“Y así mi Dios se habría hecho mi Hijo”.

Y el Espíritu Santo ha contemplado el divino prodigio de su Amor, que habría vueltomilagrosamente fecundo su seno virginal, haciéndose Madre sin ninguna intervención humana.Así el Espíritu Santo se habría hecho su Esposo divino.

Contemplemos hoy a la luz de su divina Maternidad y abramos nuestros corazones ala esperanza.

Su divina Maternidad se ejercita hoy en el preparar el camino a su glorioso retorno.

Como ha sido la Madre pobre y humilde de su primera venida, así será la Madregloriosa y potente de Su segunda venida entre nosotros.

Suya es la misión de abrirnos la puerta de la nueva era que nos espera. Suya es la misiónde conducirnos hacia los nuevos cielos y la nueva tierra.

Sobre todo es la misión confiada a la Madre de Dios la de vencer a Satanás y a todafuerza del mal, para que Dios pueda obtener en el mundo su mayor triunfo.

4

Editorial

Abrid vuestros corazones a la esperanza, porque ha llegado el momento en que nuestraMadre Celestial se manifestará en toda su potencia.

Maria es la aurora que precede al gran día del Señor.

”Soy la voz que se hace fuerte en estos tiempos, para difundir en todas partes de la tierrami anuncio profético: preparaos todos a recibir a mi divino Hijo Jesús, que ya está retornandoentre vosotros sobre las nubes del cielo, en el esplendor de su gloria divina”.

P. MIGUEL CONTARDO E.

Dios, Tú que estás Lleno de Compasión,deja que Tu Rostro sonría sobre nosotros para unirnos.

Mira hacia abajo desde el Cielo,mira nuestra división

que reina ahora en Tu Iglesia.

Tus ovejas, mi Pastor,están pereciendo en gran número

mientras buscan pastarpara conservar la vida en ellos.

Escucha los gemidos de la Iglesia.Esta gran Apostasía predichaestá robándote a Tus hijos.

Trae a Tu Iglesia esteDía de Gloria que Tú, una vez, has predicho

para que todos podamos ser uno.

Oración dictada por Nuestro Señor a Vassula Ryden(22 de julio de 1992)

5

Nuestras cosas (Crónica de las Apariciones de Peñablanca)

Aparición de María Santísima del 14 de abril de1984 en Peñablanca

Alrededor de 8.000 son losperegrinos que se han congre-gado en el cerro, en espera dela llegada del vidente y deNuestra Señora. Como siem-pre, la gente reza y canta congran devoción.

Miguel Ángel llega al San-tuario a la hora señalada y caeen éxtasis. Luego comienza arecorrer los alrededores con suvista clavada en el cielo. Des-pués de un rato regresa al Jar-dín y dice:

“Mensaje para la humani-dad” (el tono de su voz cam-bia).

MAS, UNA GRAN BOM-BA EXPLOTARÁ Y LA HU-MANIDAD SE HORRORIZA-RÁ. DE CIERTO TE DIGO,QUE EL MUNDO ESTÁPRÓXIMO A SU DESTRUC-CIÓN. SATANÁS ES ELCAUSANTE DE TODAS ES-TAS COSAS Y HAGO TAM-BIÉN UN GRAN LLAMADOA LOS VERDADEROS DIS-CÍPULOS DE MI HIJO,VUESTRO SEÑOR. OS PIDOTAMBIÉN UN GRAN CO-MUNICADO A TODOS VO-SOTROS, LOS SACERDO-TES.

MUCHOS SACERDOTESCARECEN DE PUREZA, SEHAN CONVERTIDO ENCLOACAS DE IMPUREZAS.SI CLAMAN VENGANZA,LA VENGANZA ESTÁ SU-JETA SOBRE SUS CABE-ZAS.

¡MALDICIÓN A LOS SA-CERDOTES Y A LAS PER-

SONAS CONSAGRADAS ADIOS, QUE CON SUS INFI-DELIDADES VUELVEN ACRUCIFICAR A VUESTROSEÑOR JESUCRISTO!

DESVENTURADOS LOSHABITANTES DE LA TIE-RRA; DIOS VA A AGOTARSU CÓLERA Y NADIE PO-DRÁ SUSTRAERSE DETANTOS MALES REUNI-DOS. OS PIDO QUE HA-GÁIS ORACIÓN.

HOY YA NO EXISTEAMOR. HAY MUCHAS RE-VISTAS MALAS, EL CINE,LA TELEVISIÓN Y LA RA-DIO SON LOS QUE LLEVANMÁS ALMAS AL INFIERNO,POR TODA SU INMORALI-DAD.

OS PIDO QUE RECÉISMUCHOS ROSARIOS Y QUEAYUDÉIS A EXPIAR PORLOS PECADORES.

YA NO HAY PERSONADIGNA DE OFRECER LAVÍCTIMA INMACULADA,EN FAVOR DEL MUNDO ALETERNO.

LA NATURALEZA SE HO-RRORIZARÁ POR CAUSADE LOS HOMBRES.

LUEGO EL MAR VA HAHERVIR Y TODO, TODO ELVAPOR SUBIRÁ A LOS CIE-LOS Y LUEGO CAERÁ CO—MO LLUVIA ARDIENTE.

OS PIDO QUE OS REFU-GIÉIS EN NUESTROS CO-RAZONES Y QUE ESA PAZY ESE AMOR, LO TRANS-MITAN POR TODO EL MUN-DO PARA OBEDECER LO

QUE DICE VUESTRO SE-ÑOR JESUCRISTO.

El vidente dice:No seamos hipócritas, por-

que todo aquel que hace cosasmalas y las esconde, cree queDios no lo verá. Dios sabe loque hacemos, nuestros actos, eincluso juzga.

NO JUZGUÉIS A LOS DE-MÁS, PORQUE COMO JUZ-GUÉIS A LOS DEMÁS, SE-RÉIS JUZGADOS.

Mas también les digo, que laSeñora ha dicho esto:

Para el 29 de septiembrequiere la capilla terminada. Elsexto mes se irá en la segundasemana, pero tiene prometidopara el 12, jueves, el gran mi-lagro. No se puede decir aún eldía ni el año. Pero está muycerca. Luego volverá el octavomes; el séptimo no vendrá. Eloctavo mes vendrá el primerdía de la semana y el novenotambién; en luna llena vendrátambién el primer día de lasemana e incluso el segundodía de la semana.

UNA GRAN LUZ, CON UNCABELLO LARGO, VEN-DRÁ Y PASARÁ SOBRE LATIERRA..

Luego dijo: TAMBIÉN,QUE ESA LUZ CON SU CA-BELLERA LARGA, HARÁUN GRAN TERREMOTOAQUÍ EN LA TIERRA. UNAGRAN REVOLUCIÓN SO-BRE TODOS. LA GRAN LUZCON EL CABELLO LARGO,PASARÁ DE ORIENTE AOCCIDENTE, ALTERANDO

6

Nuestras cosas (Crónica de las Apariciones de Peñablanca)

EL CÍRCULO DE LA TIE-RRA, EL EJE.

LA LUZ CON CABELLE-RA, TODOS LA PODRÁNVER Y MUCHOS TEMBLA-RÁN. Luego también dice:

LOS ÁNGELES BAJANDEL CIELO, PREPARANDOEL CAMINO DEL SEÑOR.SE LES PUEDE VER ILUMI-NADOS Y SE LES PUEDEFOTOGRAFIAR Y A VECES,AQUELLOS ÁNGELES VIE-NEN TRANSPORTADOS.

BAJAN PREPARANDO ELCAMINO DE DIOS, DENUESTRO SEÑOR, PARA SUSEGUNDA VENIDA.

El Arcángel también pideque cuando se le vea no pen-séis mal, porque está dicho entodas partes, que vendrán losángeles a preparar el caminode Dios.

SE VERÁ TAMBIÉN UNAGRAN CONFUSIÓN EN LAIGLESIA.

Hoy se dejará ver uno. Unmensajero, pero no hay quetemerle.

Hoy la Señora pide que a las9 de la noche vengan todos alcerro, porque se verá un granmensajero. Todos lo verán enforma de disco y se verá congran luz. Vendrá con gran ma-

jestad a preparar el camino deDios Salvador. Pide que nadiese asuste.

En el momento que haya mu-cha oración, cuando sientan unzumbido de abejas, quiere de-cir que vendrá.

En este momento, MiguelÁngel solloza y dice: Parecenhombres triturados, Madre.¿Era una guerra? Es peor quela bomba que tiraron en el Ja-pón. No quiero ver más. Gra-cias.

Sé que Tú eres el senderoque nos llevará a Dios. El ca-mino de la verdad es tu Hijo.¡Lo sé!, pero esa cosa que vi,no sé lo que es. Más bien pare-ce una guerra, porque habíamilicos, aviones, barcos y unabomba enorme, un fuego y unaoscuridad.

Sí, es feo, ¿cierto?Sí, parecen demonios.¡Oiga!, ¿y esa gente quema-

da? … sí … sí.Nuevamente dice la Señora:LOS QUE QUEDEN VI-

VOS ENVIDIARÁN A LOSQUE ESTÉN MUERTOS,PORQUE DONDE SE TOR-NE LA MIRADA HABRÁDESTRUCCIÓN, MISERIA YHUMILDEMENTE SE DEBEPEDIR A DIOS.

Por eso nuevamente dice:DESVENTURADOS LOS

HABITANTES DE LA TIE-RRA.

DIOS VA A AGOTAR SUCÓLERA Y NADIE PODRÁSUSTRAERSE DE TANTOSMALES REUNIDOS.

A continuación, el videntecomenta: Es muy fea la bom-ba.

Se ha cumplido ya, una granprofecía que dijo la Virgen el

Peregrinos mirando el sol durante una de las apariciones de 1984.

7

Nuestras cosas (Crónica de las Apariciones de Peñablanca)

año pasado. El satélite de losEstados Unidos nuevamente sepondrá en órbita; es lo que hadicho Ella y se cumplió en abril.Lo había dicho Ella y se hacumplido …mmm… está es-crito.

El padre Contardo tambiénlo sabía eso.

Sí, hay otro que se está cum-pliendo.

SI NO REZAMOS, ELDRAGÓN ROJO ENTRARÁA CHILE.

Ella nos está protegiendo consu manto protector, pero si si-guen las ofensas a Dios y si-guen así, Ella tendrá que soltarel brazo de su Hijo y la granbestia comenzará a derrumbarlas 3/4 partes de las estrellas.

Como Hitler fue un malva-do, habrá otro. Habrá que com-batir contra el anticristo.

Se pide mucha oración porel Santo Padre; tiene que sufrirmucho, mucho. Será nueva-mente atentado, pero NuestraSeñora va a tomar su espíritu yno temerá.

La Señora dice:EL SANTO PADRE VA A

TENER QUE MORIR PARAQUE LLEGUE EL SUCESOR,LUEGO VENDRÁ OTRO. ALFIN, TERMINADOS LOSREINADOS PAPALES, LAIGLESIA CAERÁ.

UNA GRAN DESTRUC-CIÓN AFECTARÁ A LAIGLESIA DE MONTE AMONTE, PORQUE EL TRI-GO SECO Y EL TRIGO PO-DRIDO NO DAN. AL IGUALQUE LAS PIEDRAS NOCRECEN, UN OLIVO Y UNCEREZO, UNO EN EL DE-SIERTO Y OTRO EN ELCAMPO, ASÍ SERÁ. MU-

CHAS ALMAS QUE ESTÁNEN EL DESIERTO, NO CO-NOCEN A DIOS. DEPENDEDE VOSOTROS QUE LOCONOZCAN.

Sí. Oiga, ¿sabe? … Ahí sí,¿lo digo, entonces?

Cuando Ella dijo que el ce-rro de las Siete Estrellas de suCorona se debería llamar…estaba hablando en profecía.Textualmente dijo así:

ESTE CERRO DEBERÁLLAMARSE “LA COLINADE LAS SIETE ESTRE-LLAS”, PERO ESE NO ESEL NOMBRE VERDADERO,SINO ES EL “MONTE CAR-MELO”, DONDE LA SEÑO-RA SE LE APARECIÓ ALPROFETA ELÍAS.

Y aquí vuelve a decir:CHILE UNIDO A ISRAEL,

EL MONTE CARMELO DECHILE. AQUÍ SERÁ CORO-NADA LA MADRE DELCARMELO, LA VIRGENDEL CARMEN; POR ESODICE: “EL MONTE DE LASSIETE ESTRELLAS”.

Refiriéndose a la visión quemomentos antes había tenido,comenta Miguel Ángel a Nues-tra Señora:

Sí, pero me asustó mucho.Menos mal que no soy enfer-mo del corazón, si no, me hu-biera ido altiro para el otrolado.

La Señora pide que vengantodos, porque se verá algo ma-ravilloso.

Miguel Ángel ha salido delJardín Santo. En su recorridosube a algunas personas paraque puedan besar a NuestraSanta Madre y en su caminarse le escucha decir:

¡Sube!, yo te sujeto. No se

afirme, no hay que tener mie-do1.

Luego de esto, le comentasobre los diarios.

Hay un mensaje que diceNuestra Señora que les recuer-de. Yo le he pedido grandesseñales que haga y Ella dice:

¿ACASO NO ESTÁNCONFORMES CON LA SE-ÑAL QUE HE DADO DE LAHOSTIA?

SE HA DADO CUATROVECES Y ¿AÚN SIGUENDUDANDO?

Muchos dicen que la hantirado aviones. Pero llegará lagran señal; será un día 12, jue-ves, en el año 19… hasta ahíno más puedo llegar y tampocoel mes. De este año, no.

El 12 de julio, el séptimomes, se va a aparecer una solavez y después el octavo mes,se aparecerá… Sí, ahí es queme enredo. El 12 de julio yjueves 12 de … Bueno Usteddijo, yo no.

Oiga, el señor Álvaro Ba-rros ya hizo la esta de la capilla(se refiere a la maqueta de lacapilla). ¿Pero sabe lo quehizo? Hizo la capilla achatada;pero yo no le dije así. Se equi-vocó un poquito, pero está bo-nito.

¿Por qué no lo deja así? Esque se le va a caer el pelo detanto pensar (se refiere al ar-quitecto Sr. Barros).

Oiga, me dicen que soy vul-gar, ¿qué significa eso? Sí, que

1 La Santísima Virgen besa en lafrente a las personas que MiguelÁngel eleva a pedido de Ella. Ycuando esta persona es elevada porsegunda vez, le tira un rayo. Ellaescoge a estas almas ( Así lo dijoNuestra Madre ).

8

Nuestras cosas (Crónica de las Apariciones de Peñablanca)

hablo vulgar. No importa, nome interesa. No voy a estarhablando como los pitucos, sino sé hablar como esos. Con elÓscar jugamos a como eran lospaltones, ¿cierto, Óscar?

¿Se acuerda cuando le dijeque acaso podía ganar el Co-breloa?

Usted no se mete en el fút-bol, ¿pero le echa una manito?

Ahora capaz que digan: Elniño no puede decirle eso a laVirgen2.

¡Oiga!, la gente se anda fi-jando en todo y en mí. Todosdicen que me voy chacoteandocuando voy a recibir la Hostia… mmm.

El padre Luis parece que seestá dando vuelta, pero no leconviene, porque lo van a mo-lestar mucho. Después le van adecir: Lucho, yo tenía razón.

Claro, es envidia. Sí, hayque rezar por ellos, porque sa-tanás se mete, como dices Tú.A veces le digo Usted. No secómo decirle, porque a vecestiene cara de niñita que no se ladespinta ni el Papa3.

Oiga, dígame la edad verda-

dera. El otro día me dijo quetenía “la edad de la creación”.Después parecía que tenía ca-torce, después quince, despuéscuatro, pero la cara la tiene…

A ver, ¿te describo? Caraalargada, ojos café claro, pelolargo castaño, los labios chi-quititos, la nariz, ¡qué rica lanariz!, la voz…, no te puedover los dientes, porque Tú nohablas, pero la voz no es terre-nal, es algo hermoso.

Sí, claro. ¡Oh!, y eso eratodo. ¡Ah!, para que la genteno se asuste. Sí, porque capazque empiecen a creer que losinvadirán aquí los del otro mun-do y empiecen a decir que un

ovni en Villa Alemana. Capazque digan eso también.

Sí, sí me di cuenta, cuandolas nubes bajaban y pasabanpor la luna y la luna no setapaba. Estaba encima4.

Sí. Oiga, ¿cuándo se va adejar ver bien? Pero es que lagente no la ve.

Una vez me dijeron que te-nían que llevarme al manico-mio, entonces toda la gentedijo: a nosotros también.

Miguel Ángel exclama: ¡Mi-rad el sol y fotografiadlo!

El sol ejecuta una vez másese hermoso prodigio de ladanza ante todos.

Luego el vidente canta elAve María y se despide, ¡A-diós!

Sale del éxtasis.La Santísima Virgen nos cita

para mañana a las 8 AM enOcoa. Pero hoy, hay una nuevacita a las 9 PM en Peñablanca.

Extractado del libro“SI HACÉIS LO QUE OS DIGO

HABRÁ PAZ, DE LO CONTRARIO…”de MARÍA LUISA PAREDES

2 Curiosamente Jacob, uno de losvidentes de Medjugorje, Yugos-lavia, le pidió a La Santísima Vir-gen, que Dínamo, su equipo defútbol preferido, ganara el cam-peonato de ese país.

3 Los diálogos algunas veces sonmatizados por los comentarios pro-pios del vidente, provocando lareacción de los críticos.

4 Se refiere a que habiendo luna lle-na, las nubes no lograron ocultarlaa pesar de pasar por delante deella.

Nuestras cosas (Apariciones de la Santísima Virgen a través del mundo)

Nuestra Señora del Divino Llanto, Italia(6 de enero y 23 de febrero

SOR ELISABETTA RADAELLI

Allí, una joven Hermana, Sor Eli-sabetta (1897-1984), enferma desdehace dos años, se precipita ya haciael término de su vida: paralizada,ciega desde un año atrás, minada porun mal que no perdona.

Nacida en Arcore, en la baja Brian-

za, dentro de una familia humilde ymuy religiosa, Elisabetta entró muyjoven en la Congregación. Diestrabordadora, pero igualmente dispuestapara todo servicio, luego del novi-ciado fue asignada a la casa de RivaSan Vitale, como asistente de losniños del asilo.

Mas cayendo pronto gravementeSor Elisabetta Radaelli

9

Nuestras cosas (Apariciones de la Santísima Virgen a través del mundo)

enferma, fue transferida a Cernusco sul Navi-glio, la primera casa de la Congregación, con-vertida desde 1902 en casa de cuidados yreposo para las hermanas ancianas. A pesar dela esmerada atención que se le impartiera, SorElisabetta empeoró tanto, que a principios de1924 se había perdido toda esperanza de cura-ción.

Estoicamente paciente en sus múltiples su-frimientos, había sido también afectada porhumillantes disfunciones orgánicas.

LA PRIMERA APARICIÓN

El 6 de enero de 1924, muy entrada lanoche, las otras religiosas de la congregaciónoyen a la Hermana Elisabetta hablando en vozalta. Piensan que está soñando. Pero ella noduerme; sino que conversa —como dirá a lamañana siguiente— con una “bella Señora”que ha ido a visitarla. La “Señora” anima a lahermana a aceptar de buen grado su sufrimien-to por amor a Dios. ¡Le infunde tanta confian-za!. Sor Elisabetta se encomienda a sus ora-ciones y le dice:

—¡Señora, qué buena es Usted!. RéceleUsted que es tan buena. Estoy segura que siUsted le ruega, el Señor escuchará mis plega-rias, porque Él tiene compasión de los enfer-mos!…

La Señora la alienta:—“Reza, confía y mantén la esperanza:

regresaré entre el 22 al 23” (Sor Elisabettaentiende entre el 2 y el 3 del mes siguiente).

La Hermana entonces, olvidándose de sí,ruega a la Señora que vaya a confortar a lasotras enfermas. La Señora sonríe y –como diráluego Sor Elisabetta– “se marcha discretamen-te”.

La mañana siguiente, la Hermana enfer-mera, en su informe sobre esa noche refiere:–“Sor Elisabetta anoche hablaba en sueños,en voz alta”.

La paciente asombrada interviene:—¡Pero no! No soñé. Estaba hablando con

la Señora que vino a visitarnos a las enfermas.La he visto; me habló y vendrá entre el 2 y el3…

Sor Elisabetta estaba ciega desde hacía más

de un año: ¿cómo podía “haberla visto”? Secreyó que todo había sido un sueño. Pasó lanoche del 2 al 3 de febrero; Sor Elisabettaesperó en vano la visita de la buena Señora.Esto convenció aún más a las Hermanas de laCasa que la pobre enferma lo había soñado yno se habló más del asunto. En cambio, SorElisabetta se dijo:

—No ha venido porque no he sido suficien-temente buena…

Las hermanas atribuyeron el relato a unaalucinación producida por el mismo mal que laatormentaba desde hacía tanto, y que inclusoya la había dejado ciega. Sor Elisabetta calló yaguardó en silencio.

LA SEGUNDA APARICIÓN Y CURACIÓN

Entretanto, la enfermedad avanza rápida-mente. Llegamos a la noche del 22 al 23 defebrero. Desde hace quince días, la parálisisprogresiva ha privado a la Hermana inclusodel uso de la palabra, de la deglución y decualquier movimiento de los miembros, impo-sibilitándola por completo. El Médico que laatiende, en vista del agravamiento de los sínto-mas había declarado: —“Es cuestión de horas,sigamos vigilándola”.

Nuestra Señora del Divino Llanto

10

Nuestras cosas (Apariciones de la Santísima Virgen a través del mundo)

De hecho, dos religiosas velan junto a sulecho: la hermana enfermera y otra más que seconvertirán así en testigos del prodigioso even-to.

Son apenas pasadas las 23:45 hs. La enfer-ma sufre un estremecimiento, las hermanas sealarman temiendo le inminencia del fin.

Sor Elisabetta emite un grito:—¡Oh, la Señora, la Señora!—. Y se produ-

ce textualmente el diálogo que sigue:—“¡Te había dicho que vendría entre 22 al

23!”—Oh, ¿del 22 al 23? Yo había entendido

que era entre 2 y 3.Breve silencio.Sor Elisabetta, súbitamente:—Pero Usted… Pero Usted… ¡pero Usted

es la Virgen!… es la Virgen…— La SantaVirgen sonríe melancólica. Otro silencio.

—Oh, la Virgen, la Virgen con el Niño…pero el niño (Sor Elisabetta se entristece, casillorando).

—“No, el Niño llora porque no es suficien-temente amado, buscado, deseado, incluso porlas personas que les están consagradas… ¡túdebes decir esto!”

Sor Elisabetta no capta la misión que laVirgen quiere encomendarle y exclama:

—¡Señora, Señora, lléveme al Paraíso!…—“Allí irás, pero debes permanecer aquí

para decir esto”.La hermana ahora comprende, pero consi-

dera su miseria, su incapacidad y siente unpánico inmenso.

—¡Oh, Señora —insiste—, yo soy la últimade todas, no soy nada, soy una carga para miComunidad: lléveme al Paraíso!

— “¡Debes quedarte para decir esto!”—Pero Señora, ¿quién va a creerme?… soy

una ignorante… no soy nada… ya ni siquierasoy capaz de hablar; ¿quién va a creerme?

Silencio de parte de la Virgen que la miraenternecida y triste. A esta altura, Sor Elisa-betta confiesa que, desesperada en el alma porno saber cómo conciliar el deseo de la Virgencon su incapacidad intelectual y física —du-rante el coloquio ella se creía muda y agoni-zante—, ya en el colmo del dolor, de pronto seesclareció y se atrevió a decir:

—¡Oh, Señora, déme una señal—. La Vir-gen sonríe benévola, pero siempre triste. Seinclina ligeramente hacia la Hermana y ledice:

— “¡Te devuelvo la salud!”— y se desva-nece con el Hijo Divino.

La Vidente confesó que sintió entonces undolor terrible en todo el cuerpo, al que si-guió una sensación de bienestar y de vidaque la inundó por completo. Se levantó de lacama y se dirigió a las Hermanas que laacompañaban, quienes estaban profundamen-te conmocionadas al haber oído su parte enel diálogo:

—¡Estoy curada, estoy curada: la Virgenme ha curado!— Eran aproximadamente las0:15 hs.

LAS REACCIONES POSTERIORES

La Superiora, llamada por un simple –“Ven-ga, venga”– de la enfermera, se precipita en lahabitación de Sor Elisabetta, creyéndola inextremis, y la encuentra de pie, frente a ella,resplandeciente y con los ojos iluminados porun brillo inusual.

Le abraza impetuosamente al tiempo que ledice:

—Superiora, Superiora, la Virgen me hacurado y me ha dicho que diga… que diga queJesús llora porque no es suficientemente ama-do, buscado, deseado, incluso por las personasque les están consagradas—. Y al cabo de unbreve silencio añade —¡Qué lagrimones, quélagrimones, pobre Jesús!—, mientras describecon los dedos en arco el grosor y el trayecto delas lágrimas.

Luego de esta declaración, que tomó porescrito la Superiora, a Sor Elisabetta se lallamó al más absoluto silencio sobre el suceso.Transferida enseguida al colegio de Via Qua-dronno en Milán, Sor Elisabetta, fidelísima alcompromiso asumido, recomenzó una vida deintensa labor en la asistencia a las alumnas yla oración.

La Virgen “se abrió camino por si misma”,como dijo el beato Cardenal Schuster, infor-mado del caso. La habitación donde se habíaproducido la aparición se convirtió en meta de

11

Nuestras cosas (Apariciones de la Santísima Virgen a través del mundo)

peregrinación de todos los devotos habitantesde Cernusco.

Transformada en Capilla, se colocó allí unaestatua policroma de la Virgen con el Niñollorando (de aquí el título de Virgen del DivinoLlanto) según la descripción brindada por SorElisabetta. Junto a esta Capilla, a fin de brin-darle consuelo, ella misma fue transferida enel último período de su enfermedad, que lacondujo a la visión de Nuestra Señora y MadreMaría que tanto la había amado.

De este modo la Virgen, que fue la inspira-dora de Monseñor Biraghi, para la fundaciónde las Marcelinas, hoy les pide a ellas querepitan al mundo su maternal invitación parabuscar, desear y amar a su Jesús, único Salva-dor para la humanidad extraviada.

La Congregación de las Marcelinas ha reco-gido el mensaje divino con amor y compromi-so. Innumerables ex votos atestiguan cuántoaprecia la Virgen ser honrada bajo el título deMadre del Llanto Divino.

Virgen de La Candelaria, Copiapó-Chile

Nuestras cosas (Fiestas del mes)

2 de febreroVirgen de La Candelaria (Chile)

La advocación mariana deVirgen de la Candelaria enChile se manifiesta princi-palmente en el norte del país,pero su festividad es cele-brada en diversas zonas delterritorio chileno.

Historia

El arriero Mariano CaroInca descubrió una figuratallada en la piedra que te-nía 14 centímetros de alturaque estaba en la cercaníasdel Salar de Maricunga. Pos-teriormente fue llevada a el“pueblo de los indios” (loque actualmente es un sec-tor de Copiapó que se cono-ce como Pueblo San Fer-nando). El 2 de febrero de1870 fue hallada en la exca-vación en las cercanías de la cueva de SanFernando, donde varias generaciones de fieleshan venerado su imagen.

La capilla de La Candelaria, en la ciudad deCopiapó, donde residía la imagen, fue devas-tada por el terremoto de 1922, quedando sola-

mente en pie la cúpula cen-tral y sus bases que eranprincipalmente de adobe,paja y brea. Sin embargo,se inicia la construcción delnuevo templo que albergala imagen.

El Santuario de la Vir-gen de la Candelaria seubica en la ciudad de Co-piapó, donde los fieles secongregan a celebrar la fes-tividad de la Candelaria el2 de febrero o el primerdomingo del mes de febre-ro.

Patrona de San Pedro dela Paz

En un decreto munici-pal de la comuna de SanPedro de la Paz en la región

del Biobío, se encomendó a la comunidad a laVirgen de la Candelaria como patrona de laciudad. En la ceremonia se entregó una copiadel decreto al arzobispo de la Arquidiócesis deConcepción, Monseñor Ricardo Ezzati, quienvaloró este gesto por parte del municipio.

12

En la Parroquia de La Candelaria de lacomuna se conserva una de las primeras imá-genes traídas por los españoles hasta las aus-trales tierras de Chile hace 400 años.

Festividades

Copiapó

La Fiesta de la Candelaria es la principalfestividad religiosa de la región de Atacama,donde se congregan cerca de 80 mil fieles poraño, donde se realizan variados bailes en co-fradías, similares a los que posee la Fiesta dela Tirana, donde los grupos de bailes sonconocidos como “Chinos de la Candelaria”.

En las vísperas de la fiesta,se realiza una procesión deno-minada como “Procesión de lasCandelas” que coincide con eldía de la Presentación del NiñoJesús en el Templo, quedandoa la espera del día 2 de febrero,que se considera como el díade celebración por el hallazgode Caro en las cercanías deCopiapó.

Dentro de las varias costum-bres locales, los vecinos deCopiapó cantan el Feliz cum-pleaños a la Virgen de la Can-

delaria, le ofrecen obsequios y le de-dican un esquinazo en su honor.

El día 2 de febrero se bendicen alos niños, por lo cual se dedica estaMisa para los más pequeños de cadafamilia, donde el Obispo de Copiapóentrega la bendición y la celebraciónestá dedicada a ellos.

En los días siguientes, en la ciu-dad de Copiapó, se dedican a la visitaa los más enfermos de cada comuni-dad y misas de sanación por las per-sonas que no pueden acudir a losservicios religiosos. Además, se rea-lizan eucaristías especiales a cadarealidad laboral: mineros, obreros,temporeros y otros trabajadores sereúnen en una celebración especial

para encomendarse a la Virgen de la Candela-ria una especial bendición a sus empresas,lugares de trabajo, etc.

En el último día, en las afueras del santuariose congregan los diversos grupos de baile,quienes participan en una colorida marcha portoda la ciudad. Esta parte de la celebración esla más esperada por los fieles, ya que muestranla alegría por la protección de la Virgen.

Costas de la región del Biobío

En las costas de la región del Biobío secelebra en varias comunidades ubicadas en laregión. En la comuna de Cobquecura se con-memora en la Iglesia de la Piedra, donde se

Nuestras cosas (Fiestas del mes)

Santuario de La Candelaria en Copiapó.

Baile Tinku en las festividades de La Candelaria en Copiapó.

13

Nuestras cosas (Fiestas del mes)

desarrollan a la par varias actividades propiasdel campo chileno: correduras de rodeo, do-maduras y fiestas huasas.

En Lota y San Pedro se reza la Novena depreparación y varios fieles pagan sus mandas.En esta zona es característica esta festividadpor la antigua mina de carbón de Lota yCoronel que se ubicaban en ambas localida-des, y se unía principalmente al hecho que seala protectora de los mineros del norte.

En la comunidad de Lota se celebra tambiénla “chaya” que es una ocasión donde todosquedan bendecidos mediante un baño en agua

bendita, que narrado según uncronista de El Mercurio descri-be cómo ésta actividad se uneal festejo del carnaval. Ni lostrenes, ni los pasajeros, ni lapolicía se libran de ser baldea-dos de agua carnavaleña, queal final es también la purifica-ción impuesta por la Candela-ria

Región de Los Lagos y Regiónde los Ríos

En varias otras zonas delsur del país, la procesión serealiza con trajes especiales

para la ocasión: un traje rojo con un cintoceleste, tal como el hábito de la Virgen de LaCandelaria, y las procesiones comienzan enlas parroquias donde se celebre la festividad eincluye un trayecto en bote para abarcar todala zona costera de las ciudades.

En la comunidad de Rahue, los mapuchesasisten con su ropa tradicional y dedican partede sus actividades en conmemoración de laVirgen.

Fuente: Wikipedia, la enciclopedia libre: wikipedia.org/wiki/virgen_de_la_candelat

Procesión de La Candelaria por las calles Copiapó.

Nuestras cosas (Revelaciones)

La resurrección de Lázaro(Escrito por María Valtorta 26 de diciembre de 1946)

(Continuación)

(Jesús llega a Betania a casa de María Mag-dalena y Marta cuando Lázaro ya ha muertoy está enterrado. Ante el espanto de todosJesús pide que abran la sepultura y levantan-do fuertemente la voz exclama “Lázaro salafuera”)

Un fuerte estremecimiento se apodera detodos. Si la curiosidad enclava a todos en suslugares, las caras palidecen, los ojos se agran-dan, las bocas se entreabren involuntariamente

al ir a emitir el grito del estupor que está ya enlas gargantas.

Marta está un poco detrás y al lado, comofascinada en mirar a Jesús. María, que no sehabía separado del lado de Jesús, cae de rodi-llas al umbral del sepulcro. Tiene una manosobre el pecho como para frenar las palpitacio-nes de su corazón, con la otra inconsciente-mente agarra la extremidad del manto de Jesúsy se ve que tiembla, porque el manto se mue-ve.

14

Una cosa blanca parece brotar de lo profun-do de la caverna subterránea. Primero es unabreve línea convexa, luego se cambia en ova-lada, a la que se agregan líneas más claras,más grandes, cada vez mayores. Y el queestuvo muerto, en medio de sus vendas, avan-za lentamente, cada vez más visible, cual fan-tasma, cada vez más impresionante.

Jesús retrocede, retrocede, cuanto más laforma blanca avanza. La distancia entre am-bos siempre es la misma.

María suelta la extremidad del manto, perono se mueve de donde está. La alegría, laemoción, todo la enclavan donde está.

Un «¡oh!» cada vez más claro brota de lasgargantas cerradas antes por la emoción de laespectativa, un «¡oh!» que se convierte desusurro en fuerte grito.

Lázaro ha llegado al umbral, y yerto sedetiene, mudo, semejante a una estatua deyeso en que apenas el cincel ha trabajado. Esuna figura larga, delgada arriba, delgada en laspiernas, ancha en el tronco, macabra como lamuerte misma, un espectro blanco de vendasque tiene por fondo la concavidad oscura delsepulcro. Y bajo la luz del sol que da sobre lasvendas se ve que destila podredumbre.

Jesús grita:—Quitadle las vendas, y dejad que camine.

Dadle vestidos y comida.—¡Maestro!— dice Marta y quisiera decir

algo más, pero Jesús la mira fijamente, subyu-gándola con su brillante mirada. Ordena:

—¡Aquí! ¡Pronto! Traed un vestido. Vesti-dlo en la presencia de todos y dadle de comer.

No se vuelve a mirar a nadie. Sus ojosmiran sólo a Lázaro, a María que está cercadel resucitado, sin preocuparse de la repug-nancia que todos experimentan al ver las ven-das, a Marta que jadea como si se le fuese asaltar el corazón y que no sabe si gritar dealegría o llorar…

Los siervos se apresuran a cumplir las órde-nes. Noemí es la primera en correr y la prime-ra en regresar con vestidos doblados sobre elbrazo. Algunos sueltan las vendas, después dehaberse arremangado las mangas y haberseestrechado el vestido para que no toquen lapodredumbre que de las vendas cae. Marcela y

Sara regresan con jarras de perfumes. Lassiguen otros criados con lavamanos y jarras deagua caliente, con palanganas, con tazonesllenos de leche, de vino, de fruta, de hogazascubiertas con miel.

Las vendas estrechas y larguísimas, de lino,como me parece, hechas para el caso, se des-enredan como rollos de cinta de una granbobina y se juntan en el suelo, cargadas dearomas y de podredumbre. Los criados lasretiran por medio de palos. Han empezado porla cabeza, y también allí hay podredumbre quedebe caer de la nariz, de las orejas, de la boca.El sudario que fue puesto sobre la cara estáempapado de lo mismo. Aparece la cara deLázaro palidísima, flaquísima con los ojoscerrados por lo que le pusieron en las órbitas,con los cabellos pegados, lo mismo que subarba corta. La manta cae lentamente. Caetambién la que envuelve el cuerpo, conformevan cayendo las vendas, conforme van cayen-do, van cayendo, y dejan el tronco libre, quetoma su figura humana, semejante a una grancrisálida. Lentamente se ven la espalda huesu-da, los brazos flaquísimos, las costillas queapenas proteje la piel, el vientre sumido. Yconforme las vendas van cayendo, las herma-nas, Maximino, los siervos se dan prisa enquitar la primera capa de porquería y de bálsa-mo y persisten con agua que cambian a cadapaso, hasta que no se ve clara la piel.

Cuando limpian la cara de Lázaro y puedever, dirige sus ojos a Jesús antes que a sushermanas. Se olvida de todo lo que tiene a sualrededor, con una sonrisa amorosa en suspálidos labios, y un brillar de llanto en susprofundos ojos mira a Jesús. También Él lesonríe y una breve lágrima se asoma en elángulo de sus ojos. Sin decir nada hace que losojos de Lázaro se levanten a lo alto. Este locomprende. Mueve sus labios en silenciosaplegaria.

Marta piensa que quiere decir algo, peroque todavía no puede hablar Le pregunta:

—¿Qué quieres decirme. Lázaro mío?—Nada, Marta. Daba gracias al Altísimo.Su pronunciación es segura, su voz es fuer-

te.La gente lanza un «¡oh!» de estupor.

Nuestras cosas (Revelaciones)

15

Nuestras cosas (Revelaciones)

Le han ido quitando hasta lacadera y lo han limpiado. Leponen una túnica corta, algoasí como un camisón, que lellega hasta los muslos.

Hacen que se siente paraacabarle de quitar las vendasde las piernas y lavárselas, alverlas Marta y María gritan,señalándolas, lo mismo que lasvendas. Si sobre las vendasamarradas a las piernas y sobrela manta puesta sobre ellas, lapodredumbre es mucha, laspiernas se ven cicatrizadas.Donde un tiempo hubo gan-grena, no se ve más que cica-trices de color rojizo.

La gente grita de estupor.Jesús sonríe y sonríe a Lázaro que por uninstante se mira las piernas curadas, y luegosigue mirando fijamente a Jesús. Parece comosi no se cansara de mirarlo. Los judíos, fari-seos, saduceos, escribas, rabinos, se adelantan,cautelosos de no mancharse sus vestiduras.Miran de cerca a Lázaro. Miran de cerca aJesús. Pero ni Lázaro, ni Jesús se preocupande ellos. Se miran mutuamente. Todo lo demásno vale nada.

Ponen las sandalias a Lázaro. Se pone depie, ágil, seguro. Toma la vestidura que Maríale alarga, se la pone, se ciñe la cintura, seajusta los pliegues. Vedlo ahí, flaco y pálido,igual a todos. Se lava las manos y los brazoshasta el codo, remangándose las mangas, yluego con agua limpia se limpia la cara y lacabeza, hasta que siente que no tiene nada. Seseca los cabellos y la cara. Da la toalla alsiervo y se dirige a Jesús. Se postra. Le besalos pies.

Jesús se inclina, lo levanta, lo estrecha con-tra el pecho diciéndole:

—Bienvenido, amigo mío. La paz y la ale-gría sean contigo. Vive para realizar tu felizsuerte. Levanta tu cara para que te de el besode saludo—. Lo besa en las mejillas, lo quetambién Lázaro hace.

Después Lázaro se dirige a sus hermanas aquienes besa, lo mismo hace con Maximino y

Noemí que lloran de alegría y con algunos queme imagino son parientes o amigos muy ínti-mos. Luego besa a José, a Nicodemo, a SimónZelote y a algún otro.

Jesús personalmente va a donde está uncriado que tiene una palangana con alimentos,toma una hogaza con miel, una manzana, unvaso de vino, los da a Lázaro, después dehaberlos ofrecido y bendecido, para que comalo que hace con el apetito de quien está sano.Todos lanzan un final «¡oh!» de estupor,

Jesús que parece no estar viendo más que aLázaro, en realidad ve todo y a todos, y alnotar la ira en Sadoc que con Elquías, Cana-nías, Félix, Doras, Cornelio y otros está porirse, dice en voz alta:

—Espera un momento, Sadoc. Tengo quedecirte una palabra. A ti y a los tuyos—. Separan con aire de delincuentes.

José de Arimatea se sobresalta de miedo yhace señal a Zelote que detenga a Jesús, peroinútil, porque se dirige al grupo y los apostro-fa:

—¿Te basta, Sadoc, lo que has visto? Undía me dijiste que para creer teníais necesidad,tú y tus iguales, de ver rehacerse un cadávercorrompido. ¿Estás satisfecho de la podre-dumbre que viste? ¿Eres capaz de afirmar queLázaro estuvo muerto, que ahora vive, queestá sano, como años antes no lo había estado?

“Quitadle las vendas, y dejad que camine. Dadle vestidos y comida”.

16

Lo sé. Vinisteis a probar a estos, a causarlesmás dolor y a sembrar en ellos la duda. Vinis-teis a buscarme, esperando encontrarme es-condido en la habitación del agonizante. Vi-nisteis no porque os hubieran movido el amory el deseo de honrar al difunto, sino paraaseguraros de que Lázaro estaba realmentemuerto, y habéis seguido viniendo para rego-cijaros, cuanto más el tiempo pasaba. Si lascosas hubieran salido como esperabais, lo quecreíais de seguro, hubierais tenido razón dealegraros. El Amigo que cura a todos, pero nocura al suyo. El Maestro que premia la fe detodos, pero no la de sus amigos de Betania. ElMesías impotente ante la realidad de una muer-te. Esto era el incentivo de vuestra alegría.Pero ved que Dios os ha dado la respuesta.Ningún profeta jamás ha podido juntar lo queestaba deshecho, además de muerto. Dios loha hecho. He ahí el testimonio viviente de loque soy. Un día Dios tomó un poco de lodo, ledio forma, sopló en él y se convirtió en hom-bre. Fui Yo quien dije: “Hágase el hombresegún nuestra imagen y semejanza”. PorqueYo soy el Verbo del Padre. Hoy, Yo, el Verbo,dije a lo que era menos que el lodo, a lacorrupción: “Vive” y la corrupción volvió aconvertirse en carne, en carne perfecta, viva,palpitante. Os está viendo. Allí está. Y a lacarne junté el alma que hacía unos días estabaen el seno de Abraham. Lo volví a llamarporque quise, porque todo lo puedo, Yo, elViviente, Yo el Rey de reyes a quien estánsujetas todas las criaturas y cosas. ¿Qué res-pondéis?

Cual un Juez, como Dios que es, está delan-te de ellos derecho, alto, majestuoso. Insiste:

—¿No os basta esto para creer, para aceptarlo que no puede desmentirse?

—Has cumplido tan sólo una parte de lapromesa. Esto no es la señal de Jonás…—dice agriamente Sadoc.

—También esa se os dará. Lo he prometidoy lo mantengo. Hay otro aquí presente, queespera otra señal, y la tendrá. Y como es recto,la aceptará. Vosotros no. Vosotros permanece-réis en lo que sois.

Da media vuelta y ve a Simón, el sanedrista,hijo de Eliana. Lo mira. Lo mira. Deja a los

que estaba hablando y llegado a él, le dice envoz baja, pero firme:

—¡Es bueno para ti que Lázaro no recuerdesu estadía entre los muertos. ¿Qué hiciste de tupadre. Caín?

Simón huye con un grito de miedo, queluego se transforma en aullido de maldición:

—¡Seas maldito. Nazareno— a lo que Jesúsresponde:

—Tu maldición ha llegado al Cielo y de alláel Altísimo te la lanza. Estás marcado con laseñal, ¡desgraciado!

Vuelve al grupo que está sin saber quédecir, casi aterrorizado. Encuentra a Gamalielque se dirige a la salida. Lo mira, y Gamalieltambién. Sin detenerse. Jesús le dice:

—Prepárate, ¡oh rabí! Pronto vendrá la se-ñal. Nunca miento.

Poco a poco el jardín queda vacío. Losjudíos están atolondrados, pero los más deellos respiran ira por todos sus poros. Si lasmiradas pudieran reducir en ceniza a alguien,a Jesús lo hubieran ya convertido en polvo.Hablan, discuten entre sí al irse alejando, sa-boreando la dura derrota, de modo que no soncapaces ya de ocultar bajo una aparienciahipócrita de amistad el objeto de su presencia.Se van sin despedirse ni de Lázaro, ni de sushermanas.

Se quedan algunos que el milagro ha con-quistado para el Señor. Entré ellos José Berna-bé, que se echa de rodillas ante Jesús y loadora; lo mismo hace Yoel de Abías. Otros,cuyos nombres no sé, pero que deben serpersonas importantes, los imitan

Lázaro, rodeado de sus más íntimos, se haretirado dentro. José, Nicodemo y los otrosbuenos de corazón se despiden de Jesús. Congrandes inclinaciones de cuerpo se despidenlos judíos que estaban con Marta y María. Lossiervos cierran el cancel. La paz vuelve a lacasa.

Jesús mira a su alrededor. Ve que sale humo,que salen llamas en el fondo del jardín, endirección del sepulcro. Solo, derecho en me-dio de un caminillo, dice:

—La podredumbre que el fuego destruye…La podredumbre de la muerte… pero la de loscorazones… de esos corazones ningún fuego

Nuestras cosas (Revelaciones)

17

la destruirá… Ni siquiera el fuego del infier-no. Será eterna… ¡Qué horror!… Más que lamuerte… Más que la corrupción… Y… ¿Quiénte salvará, ¡oh linaje humano! si tanto te gustala corrupción? La amas. Y Yo… Yo he arran-cado del sepulcro a un hombre con una pala-bra… Y con un mar deellas… con uno de doloresno podré arrancar al hombredel pecado, a los hombres, amillones de hombres—. Sesienta y se cubre el rostrocon las manos, abatido…Un siervo que pasa, lo ve.Corre adentro. Poco despuéssale María. Corre donde Je-sús, ligera como si no tocaseel suelo. Se le acerca, le dicequedito:

—Raboni, estás cansa-do… Ven, Señor mío. Tusapóstoles cansados estánadentro, todos menos SimónZelote… ¿Lloras, Maestro?¿Por qué?

Se arrodilla a los pies deJesús… lo observa… Jesúsla mira. No responde. Se le-vanta y va.

Entran en una sala. Lázaro no está, tampocoZelote. Pero está Marta, llena de alegría. Sevuelve a Jesús:

—Lázaro fue a bañarse, para limpiarse bien.¡Oh, Maestro, Maestro, qué decir!— Lo adoracon todo su ser. Nota su tristeza y le pregunta:—¿Estás triste, Señor? ¿No estás feliz de queLázaro…?— Le llega una sospecha: —¡Oh,estás irritado contra mí! Pequé. Es verdad.

—Pecamos, hermana—, dice María.—No. Tú no. Maestro, María no pecó. María

supo obedecer, yo fui la que desobedecí. Temandé llamar porque… porque no podía so-portar más que aquéllos insinuasen que noeres el Mesías, el Señor… y no podía verlomás sufrir… Lázaro te necesitaba con ansias,Te llamaba… Perdóname, Jesús.

—¿Y tú no hablas, María?— pregunta Je-sús.

—Maestro… yo… no sufrí otra cosa que

Nuestras cosas (Revelaciones)

como mujer. Sufrí porque… Marta jura, juraaquí ante el Maestro que jamás, jamás dirás aLázaro lo que dijo en su delirio… Maestromío… te conocí, ¡oh divina Misericordia!, enlas últimas horas de Lázaro. ¡Oh, Dios mío!Cuánto me has amado, Tú que me perdonaste,

Tú, Dios, Tú, Puro, Tú… mihermano, que mucho meama, pero es hombre, solohombre, en el fondo de sucorazón, ¡no ha perdonado!No. Digo mal. No ha olvi-dado mi pasado y, cuando laagonía debilitaba sus fuer-zas y entorpecía su bondad,que pensaba yo era olvidodel pasado, gritó su dolor,su desdén contra mí…iOh!…— María llora…—No llores, María. Dios te

ha perdonado y olvidado. Elalma de Lázaro también haperdonado y olvidado, haquerido olvidar. El hombreno ha podido olvidar. Ycuando el cuerpo, en mediode sus estremecimientos,debilitó la voluntad ya frá-

gil, el hombre habló.—No estoy enojada, Señor. Esto me sirvió

para amarte más y amar mucho más a Lázaro,A partir de ese momento fue cuando yo deseétu presencia… porque sentía angustia de queLázaro fuera a morir sin paz por mi causa… yluego, luego, cuando vi que los judíos seburlaban de Ti… cuando vi que no venías, niaun después de muerto, ni siquiera despuésque había obedecido hasta más allá de loposible, esperando hasta cuando el sepulcro seabrió para recibirlo, entonces sí que mi cora-zón sufrió. Señor, si tenía que expiar, y, cier-tamente, lo debía, he expiado…

—¡Pobre María! Conozco tu corazón. Hasmerecido el milagro y que te confirme ensaber esperar y creer.

—Maestro mío, esperaré y creeré siemprede hoy en adelante. No dudaré más, jamás,Señor. Viviré de fe. Me has dado la capacidadde creer en lo increíble.

Dice Jesús: “Bienvenido, amigo mío. Lapaz y la alegría sean contigo…”

18

—¿Y tú. Marta, has aprendido? No. Toda-vía no. Eres mi Marta, pero no me adorascompletamente. ¿Por qué te entregas a la acti-vidad y no a la contemplación? Es cosa mássanta. ¿Ves? Tus fuerzas, muchas veces entre-gadas a cosas terrenas, cedieron ante la com-probación de hechos terrenales que parecen notener remedio. En verdad que no lo tienen, sino interviene Dios. Por esto la criatura tienenecesidad de saber creer y contemplar, deamar hasta lo último de sus fuerzas, con supensamiento, con su alma, con su cuerpo, consu voluntad; con todas sus fuerzas humanas,repito. Quiero que seas fuerte, Marta. Quieroque seas perfecta. No supiste obedecer, porqueno supiste creer y esperar, porque no hassabido amar totalmente. Yo te perdono, teabsuelvo, Marta. He resucitado hoy a Lázaro,ahora te doy un corazón más fuerte. A él le hedevuelto la vida, en ti infundo la fuerza deamar, creer y esperar perfectamente. Sed feli-ces y gozad de la paz. Perdonad a quienes enaquellos días os ofendieron…

—Señor, en esto pequé. Hace poco dije alviejo Cananías, que hace unos cuantos días sehabía burlado de Ti: “¿Quién ha ganado? ¿Túo Dios? ¿Tu befa o mi fe? Jesús es el Vivientey es la Verdad. Sabía yo que su gloria brillaríamucho más. Y tú, viejo, rehaces tu alma, si noquieres gustar la muerte”.

—Dijiste bien. Pero no disputes con malva-dos, María. Perdona. Perdona si me quieresimitar… Ya viene Lázaro. Oigo su voz.

Lázaro entra, trae la barba rasurada, loscabellos peinados y oloroso a aromas. Con élMaximino y Zelote.

—¡Maestro!— Lázaro se arrodilla una vezmás adorándolo.

Jesús le pone la mano sobre la cabeza ysonriente le dice:

—La prueba ha sido superada, amigo mío.

Nuestras cosas (Revelaciones)

La superasteis tú y tus hermanas. Sed ahorafelices y fuertes para servir al Señor. ¿Terecuerdas del pasado? Esto es ¿de tus últimashoras?

—Un gran deseo de verte y una gran pazcon el amor de mis hermanas.

—¿Qué te dolía dejar más al morir?—A Ti, Señor, a mis hermanas. A Ti, porque

no podría servirte; a ellas porque me hanbrindado toda clase de alegrías…

—¡Oh, hermano!—, suspira María.—Tú más que Marta, Tú me has dado a

Jesús y la medida de lo que es Él. Jesús te hadado a mí. Tú eres el don de Dios. María.

—Lo dijiste cuando agonizabas…— diceMaría y ve detenidamente el rostro de suhermano.

—Porque era y es mi constante pensamien-to.

—Pero yo te causé muchos dolores…—También la enfermedad. Por esta espero

haber expiado las culpas del viejo Lázaro yhaber resucitado, purificado para ser digno deDios. Tú y yo: los dos resucitados para serviral Señor, y entre ambos Marta, que siempre hasido la paz de nuestro hogar.

—¿Lo oyes, María? Lázaro habla sabia yverazmente. Ahora me retiro y os dejo envuestra alegría…

—No, Señor. Quédate. Con nosotros. Aquí.Quédate en Betania y en mi casa. Será bello…

—Me quedaré. Quiero premiarte todo loque padeciste. Marta, no estés triste. Maríapiensa que no me causaste algún dolor. Noestoy triste por causa vuestra, sino por quienesno quieren redimirse. Cada vez odian más.Tienen el veneno en el corazón. Pues bien…perdonemos.

—Perdonemos, Señor— dice Lázaro con susonrisa delicada… y con estas palabras termi-na la visión.

Visite nuestro sitio oficial en:http://www.peñablancadamablanca.cl

19

Nuestras cosas (Cultura religiosa)

El tiempo de Jesús

Muerte y sepultura

Pero Jesús murió alrede-dor de las tres de la tarde; suagonía en la cruz fue mu-cho más breve que lo co-mún. “Todo ha terminado”,dijo, y, según San Mateo,dio un fuerte grito y exhalóel espíritu. Desde la horasexta (mediodía) la oscuri-dad se había apoderado de“toda la tierra”, y a la horanona, al morir Jesús, huboun terremoto y el velo delTemplo “se rasgó en dos,de arriba abajo”. Para losconsternados seguidoresreunidos en el Gólgota, lagran promesa encarnada ensu maestro había concluidoen infamia y horror. Nadiepodía aún darse cuenta delverdadero significado deaquel día que ahora los cris-tianos veneran como Viernes Santo, aunquemuchos de los presentes supieron que al morirJesús había ocurrido algo trascendental. SegúnSan Marcos, el centurión que estaba frente a élen ese instante no pudo menos que exclamar:“Verdaderamente este hombre era Hijo de Dios”.

José de Arimatea, hombre rico que en secre-to había sido seguidor de Jesús, obtuvo de Pi-lato el permiso para sepultar el cuerpo. José,miembro del Sanedrín y que, según San Lucas(23, 51), “no había aprobado ni la resolución nilos actos de los demás”, tenía un sepulcro depiedra sin utilizar en un huerto cercano al Gól-gota. Según San Juan, Nicodemo, fariseo sen-sato que también en secreto había conversadocon Jesús, acompañó a José. Algunas seguido-ras y parientas que habían permanecido al piede la cruz pudieron haberse unido a ellos paraayudar a envolver el cuerpo en lino y hierbas

aromáticas. Lo depositaronen el sepulcro y cerraron laentrada con una piedragrande. Comenzaba el sa-bat; descorazonados, los se-guidores de Jesús regresa-ron a la ciudad al caer lanoche.

Resurrección y ascen-ción

Nadie estaba preparadopara las asombrosas reve-laciones que comenzarona divulgarse entre los cre-yentes a las 48 horas oquizá antes. San Marcosrelata que el domingo, muyde madrugada, María Mag-dalena, María madre deSantiago y Salomé (tresdiscípulas de Jesús) fue-ron al sepulcro. Había con-cluido el sabat y querían

ungir el cuerpo de Jesús, pero se preguntabancómo iban a retirar la piedra de la entrada; depronto se dieron cuenta de que ya estabaquitada. Entraron al sepulcro y vieron a unjoven, vestido con una túnica blanca y sentadoa un lado.

—No os asustéis—, les dijo. —Buscáis aJesús de Nazaret, el crucificado. Ha resucita-do; no está aquí.

Al principio las mujeres no dijeron nada anadie, pero luego la noticia se fue extendiendopaulatinamente. La aparición de Jesús a MaríaMagdalena pudo haber ocurrido casi inmedia-tamente después de aquella visita al sepulcro.Ella estaba llorando afuera, junto a la tumba;al ver a Jesús que se le acercaba, relata SanJuan, María Magdalena creyó que era el hor-telano. Reconoció a su maestro cuando él lallamó dulcemente por su nombre.

Algunos cristianos creen que el sepulcro deJesús pudo haber sido esta cueva situada alnorte de la antigua muralla de Jerusalén. Fuedescubierta en 1867

20

Mi vida en Nazareth*

por Guiliana Crescio(Continuación)

* En este hermoso libro escrito por Giuliana Crescio inButtini, bajo el dictado de la Santísima Virgen, se nosnarra detalles de la vida familiar de Jesús y sus Padresen Nazareth. El sacerdote Antonio María de Arriaga,nos dice que si se lee con sencillez de alma, recibiremosuna luz, un gozo indescriptible.

San Lucas narra que cuando las mujeresanunciaron esta buena nueva a los apóstoles,ellos pensaron que decían desatinos y no lescreyeron. Sin embargo, durante aquel día y lossiguientes, las apariciones y las visiones pro-piciaron que todo el grupo que había seguido

Nuestras cosas (Cultura religiosa)

a Jesús llegara a la inquebrantable convicciónde que él vivía realmente. Sintieron su presen-cia, oyeron sus palabras e inclusive comieroncon él. San Juan relata que cuando el discípuloTomás expresó sus dudas acerca de la resu-rrección, Jesús lo invitó a tocar las heridas quele había causado la crucifixión.

—Has creído porque me has visto—, le dijoJesús. —Dichosos los que, aun no viendo,creen.

Había que consolidar la fe y asegurar quelas palabras de Jesús dieran lugar a un movi-miento en nombre suyo. Un día, dice SanLucas, Jesús llevó a sus discípulos al monte delos Olivos, les dio su bendición y “fue llevadoal cielo”. Los discípulos aún tenían que hallarrespuesta a muchas preguntas. ¿Qué podíasignificar el que muchos meses antes hubieransido escogidos en las riberas del Mar de Gali-lea? Pero los invadía el gozo y la esperanza,mientras aguardaban a que el futuro se lesmanifestara.

Dice Jesús a Tomás: “Has creído porque me hasvisto… Dichosos los que, aun no viendo, creen”.

Nuestras cosas (Para meditar)

La casa de Nazaret ha sido laprimera Iglesia.

La casa tiene la puerta abierta. Está abiertaporque se os espera… Yo estaré allá con Je-sús en brazos: una mujer, un niño. No tendréni collares ni brillantes, no tendré la corona,ni tampoco Jesús. Tengo un viejo manto queusaba cuando hacía frío: lana tejida a mano,de color crudo, entre el blanco y el gris, conuna pizca de amarillo… Tengo una túnicamarrón y, como veis, soy una Virgen a la que

nunca se la muestra así soy una mujer deaquel tiempo, y mi Hijo aún siendo Dios, estáenvuelto en la misma lana de mi manto, unsobrante que quedó, sirvió para hacer unamanta abrigada.

—Takiní, ¡así estás abrigado!—Y estoy vestido como mi Immi…Pensamientos, palabras, sentimientos e imá-

genes. Entre quienes se aman basta una mira-da para hacer comprender tantas palabras nodichas… ¡Cuánto trabajo me daba tener lim-pio aquel piso! La casa es muy bella, aunquepobre, se respira vida, se obtienen gracias, seadvierte el milagro. Entrad: os encontraréisen la primera Iglesia... Ahora está transforma-da, pero es siempre la misma: la Anunciación,los primeros pasos de Jesús. En aquella casael Evangelio se hizo viviente, y aquellos pa-

21

Nuestras cosas (Para meditar)

nes con miel, ¡fueron elsímbolo de la dulzura, queos puede dar, si estáis engracia, la Eucaristía!

—¿Ya están listos lospanecillos? Immi, ¿cuán-tos me das?

—Todo mi corazón Tedoy, mi pequeño y grandí-simo amor; pero eres unniño y debo cuidarte: tomatres, demasiados te haríanmal…

Jesús fue un niño per-fecto en lo físico, y fue unhombre perfecto: no pecónunca: ¡era Dios! No obs-tante, Yo, como Madre, te-nía los temores de todaslas madres:

—Hace viento, cúbretehijo.

Los temores. No obstante, sabía. Se alter-naban en Mí alegría y dolor, y hasta el sufri-miento de aquel día. En nuestra casa no hayseñales de la Pasión, no se ve el dolor, pero seadvierte la esperanza. Ahora hay un altar y Yo

tengo un vestido de per-las… Jesús entre mis bra-zos, niño con la carita demadera oscura… La histo-ria cambia los rostros, peroel espíritu queda. ¡Y noso-tros estamos allá, esperán-doos! Por vosotros pido aJesús y a Nuestro Padre,que son la misma persona,y en tres Personas con elEspíritu, que es tambiénuna Persona, mucho sol.

Ahora empiezo a limpiarel piso:

—No te fatigues dema-siado Myriam…

—José, tengo huéspedesimportantes… criaturasque aman a Jesús, lo que-rrán tener en brazos, loquerrán besar sobre los ri-

zos, debe estar todo en orden, ¡todo hermoso!Todo hermoso para vosotros, que durante

siglos, habríais de venir a hacernos visitas.

4 de Noviembre de 1983

“Takiní, ¡así estás abrigado!” “Y estoy vesti-do como mi Immi…”

Nuestras cosas (La Eucaristía)

La Eucaristía y los convertidos(Extracto del libro “La Eucaristía. El tesoro más grande del mundo” del

sacerdote Angel Peña)

Todos los convertidos a la fe católica handescubierto en la presencia real de Jesús en laEucaristía el mayor tesoro de nuestra fe. Y, poreso, no podían dejar de ir a misa todos los díasque podían. La Eucaristía era para ellos elmejor alimento espiritual y el mayor tesoroque habían encontrado, del cual no podíanprescindir. Veamos algunos casos:

En el año santo de 1650, JEAN FREDERIC

BRUNSWICK, hijo del duque Jorge de Brunswicky uno de los jóvenes más notables de la noble-za alemana, se acercó a la ciudad de Asís,buscando la verdad, pues se había pasado al

lado protestante al terminar la guerra de los 30años entre católicos y protestantes. El cardenalTapaccioli le escribió al santo José de Cuper-tino: Un príncipe protestante quiere retornara la fe. Le ruego de persuadirlo y recibirlo concaridad. Jean Frederic había oído hablar de lasantidad del fraile José de Cupertino y queríaconvencerse de que la Iglesia católica era laverdadera. Entonces, al llegar a Asís, asistió auna misa celebrada por el santo. Después delrezo del Padrenuestro, el santo se quedó enéxtasis y se alzó en el aire. Después de la misa,el santo religioso pudo conversar durante dos

22

horas con el duque y éste regresó a la Iglesia.El haber visto celebrar la misa con tanta devo-ción y con éxtasis, le convenció de la verdadde nuestra fe y de la presencia real de Jesús enla Eucaristía, a quien tanto amó toda su vida.

BEATO CHARLES DE FOUCAULD (1858-1916),cuando se convirtió, se hizo sacerdote y decía:¡Qué delicia tan grande, Señor, poder pasarquince horas sin nada más que hacer quemirarte y decirte: Te amo! Cuando lo mataron,estaba adorando a JesúsEucaristía en su pequeñacapilla de Tamanrasset.

MANUEL GARCÍA MO-RENTE (1886-1942), el granfilósofo español, cuando seconvirtió, se hizo sacerdo-te y, siendo profesor de laUniversidad Autónoma deMadrid, los fines de sema-na se iba al Monasterio deEl Poyo para poder pasaralgunas horas en sosiegodelante del Santísimo Sa-cramento, el amor de suvida.

Es muy conocido el ca-so de ANDRÉ FROSSARD

(1915-1995), que se con-virtió al entrar a una capi-lla del barrio latino de Pa-rís, donde estaba expuestoel Santísimo Sacramento.Él recibió sin esperarlo, pues era completa-mente ateo, una oleada de amor y de luz quevenía desde la custodia, donde estaba Jesússacramentado, lo que le hizo convertirse ins-tantáneamente. Y dice: Dios estaba allí, reve-lado y oculto por esa embajada de luz que, sindiscursos ni figuras, hacía comprenderlo todo,amarlo todo… El milagro duró un mes. Cadamañana volvía a encontrar con éxtasis esa luzque hacía palidecer al día, esa dulzura quenunca habría de olvidar y que es toda miciencia teológica.

Y, a partir de ese instante de su conversión,iba a misa todos los días, a pesar de estarenrolado en la Marina de guerra francesa. Sesentía atraído como una imán hacia el sagrario

de las iglesias católicas, donde siempre lo es-peraba Jesús. Por eso dice: ¡Dios mío! Entro entus iglesias desiertas, veo a lo lejos vacilar enla penumbra la lamparilla roja de tus sagra-rios y recuerdo mi alegría. ¡Cómo podría ha-berla olvidado! ¿Cómo echar en olvido el díaen que se ha descubierto el amor desconocidopor el que se ama y se respira?… Hay otromundo. Y no hablo de él por hipótesis, porrazonamiento o de ideas. Hablo por experien-

cia.HERMANN COHEN

(1820-1871) fue un ju-dío, convertido por la Eu-caristía. Estaba en la ciu-dad alemana de Ems paradar un concierto, pues eraun ilustre pianista, cuan-do el domingo 8 de agos-to de 1847, fue a misa.Allí, poco a poco, los cán-ticos, las oraciones, lapresencia invisible, perosentida por mí, de un po-der sobrehumano empe-zaron a agitarme, a tur-barme, a hacerme tem-blar. En una palabra, lagracia divina se compla-cía en derramarse sobremí con toda su fuerza. Enel acto de la elevación, através de mis párpados,

sentí de pronto brotar un diluvio de lágrimasque no cesaban de correr… ¡Oh momento porsiempre jamás memorable para la salud de mialma! Te tengo presente en mi mente con todaslas sensaciones celestiales que me trajiste delo alto… Invoco con ardor al Dios todopode-roso y misericordiosísimo a fin de que el dulcerecuerdo de tu belleza quede eternamente gra-bado en mi corazón con los estigmas imborra-bles de una fe a toda prueba y de un agrade-cimiento a la medida del inmenso favor de quese ha dignado colmarme… Al salir de laiglesia de Ems, era ya cristiano. Sí, tan cris-tiano como es posible serlo, cuando no se harecibido aún el santo bautismo.

Se bautizó el 28 de agosto de ese mismo

Nuestras cosas (La Eucaristía)

23

Nuestras cosas (La Eucaristía)

año y se dedicó a convertir a otros judíos a lafe católica, consiguiendo varias conversiones.Al poco tiempo, quiso entregar su vida enteraal servicio de Dios y entró al Seminario de losPadres carmelitas descalzos, donde recibió elnombre de Agustín María del Santísimo Sa-cramento. Fundó la adoración nocturna en1848. Era tanto su amor a Jesús-hostia, comoÉl le llamaba a Jesús, que hizo voto de hablaren todos sus sermones de la Eucaristía.

El día de su primera misa, dice: ¡Me sentítan feliz de tocar a Jesús y tenerlo entre mismanos! Ese día recibí una impresión tan fuer-te que, desde entonces, siempre he estadoenfermo (de amor). ¡Amo a Jesús, amo a laEucaristía! ¡Oídlo ecos; repetidlo a coro,montañas y valles! Decidlo otra vez conmigo:¡Amo a la Eucaristía! Jesús hoy es Jesúsconmigo, Jesús Eucaristía. Al misterio de laEucaristía debo la felicidad de haber sidoconvertido a la verdadera fe y de haber podi-do conducir a otros. Oh Jesús, oh Eucaristía,que en el desierto de esta vida me revelaste laluz, la belleza y grandeza que posees. Cam-biaste eternamente mi ser, supiste vencer enun instante a todos mis enemigos… Luego,atrayéndome con irresistible encanto, has des-pertado, en mi alma un hambre devoradorapor el pan de vida y en mi corazón hasencendido una sed abrasadora por tu sangredivina.

Él mismo nos habla del efecto maravillosode la Eucaristía sobre los condenados a muer-te. Estando en Londres en 1864, asistió acuatro marineros católicos, condenados a muer-te por asesinato y actos de piratería. Dice:Durante los quince días, que iban de la sen-tencia a la ejecución, la fe convirtió a aquelloslobos en corderos; que se resignaban a ofrecera Dios el sacrificio de su vida.

El mismo día de la ejecución, antes delalba, tres sacerdotes, atravesaban la inconta-ble muchedumbre, que durante toda la nochehabía estado esperando en las calles vecinasa la cárcel para disfrutar del más atroz de losespectáculos… Se estimaba en 30.000 el nú-mero de los curiosos.

Hallamos a los desgraciados reos, hinca-dos de rodillas ante el crucifijo. Habían pasa-

do la noche en oración. Cuando recibieron elsanto viático, los terrores de la muerte y lashorribles angustias del suplicio ignominioso,que les esperaba, desaparecieron ante el es-plendor de la vida divina, que Jesús acababade darles en el abrazo de la Eucaristía. Ja-más, en los trece años que llevo de sacerdote,he experimentado de modo tan sorprendentela eficacia del poder de la Eucaristía y delsacerdocio.

Durante estas dos largas horas de agonía,sus almas se alzaban constantemente por lasregiones en las que ya no hay ni luto nilágrimas y, mientras los gritos siniestros de lamuchedumbre, impaciente de cebarse en elespectáculo del suplicio de los jóvenes reos, sedejaban oír por entre los muros de la prisióny me causaban terror, ellos no nos hablabanmás que de la paz que experimentaban, de lafelicidad que habían tenido de ser perdonadospor Dios, de la brevedad de la expiación, y dela esperanza de ver pronto a Dios para siem-pre.

Los exhorté a tener confianza en la Santísi-ma Virgen María… Cada uno tenía el rosario,la cruz y el escapulario colgado al cuello…Los otros dos sacerdotes se hallaban a mi ladosobre el cadalso y los exhortábamos a quehicieran actos de fe, esperanza y caridad. Lesdábamos a besar el crucifijo y los exhortába-mos a que invocasen en alta voz el nombre deJesús y de María… El diario “The Times”, aldar cuenta de la ejecución, observó que, cuan-do fueron inspeccionados por la tarde loscadáveres de los ahorcados, sorprendió verque las facciones, contra el efecto ordinariodel suplicio, no se habían alterado nada. Seencontró que su fisonomía se había conserva-do tranquila, como si reposaran en apaciblesueño (as in a gentle sleep)… La Eucaristíalos había como embalsamado. El divino sa-cramento, al mismo tiempo que les conserva-ba las almas para la vida eterna, les habíapreservado la cara, espejo del alma, de ladesfiguración.

24

Yo prometo al alma que Me visite confrecuencia en este Sacramento del Amor, quela recibiré cariñosamente junto a todos losBienaventurados y Ánge-les del Cielo; que cadavisita suya será escrita enel Libro de su Vida y leconcederé:1) Todas las peticiones

que sean presentadasante el Altar de Diosen favor de la Iglesia,el Papa y las almasconsagradas.

2 La anulación del po-der de Satanás sobresu persona y sus seres queridos.

3) La protección especial en casos de terre-motos, huracanes y otros desastres natura-les, que de otro modo le afectarían.

4) Será apartada amorosamente del mundo yde sus atractivos, que son causa de perdi-ción.

5) La elevación del alma, deseando alcanzarla santificación, en vistas a la contempla-ción eterna de Mi Rostro.

6) El alivio de las penas del Purgatorio de susseres queridos.

7) Mi bendición para todos los proyectosmateriales y espirituales que emprenda, sison para el bien de la propia alma.

8) Recibir Mi visita, en compañía de MiMadre, en el momento de su muerte.

9) Escuchar y atender las necesidades de laspersonas por las cuales pida.

10) La intercesión de los Santos y de los Án-geles a la hora de la muerte, para disminuirla pena temporal.

11) Que Mi Amor suscitesantas vocacionesconsagradas a Diosentre sus seres queri-dos y amigos.

12) El alma que conserveuna verdadera devo-ción a Mi Presenciaen la Eucaristía no secondenará, no morirásin los Sacramentosde la Iglesia

A los sacerdotes y reli-giosas que propaguen la devoción a la Adora-ción, les otorgaré muchas gracias especiales,el reconocimiento total de sus pecados y laGracia para enmendarse. Les ayudaré a formarcomunidades de fieles devotos y santos, yalcanzarán muchos privilegios.

Prometo estas cosas a todas las personas,con sólo dos condiciones que son el fruto delgenuino amor hacia Mi Presencia Real en laEucaristía, y que son absolutamente impres-cindibles para hacer realidad en sus vidas Mispromesas:a) Que luchen por conservar la dignidad en

Mis Altares.b) Que sean misericordiosas con su prójimo.

En Adoración que ha obtenido un Imprima-tur del Monseñor Cristóbal Biaiasik, obispo delas diócesis de Oruro, Bolivia.

Fuente de las Promesas: del libro deCATALINA RIVAS,

Nuestras cosas (Acrecentando nuesta Fe)

Las Promesas de la AdoraciónEucarística

dictadas por Jesús a Catalina Rivas

25

—Mi Vassula, Mi pequeña discípula de estefin de los tiempos, Yo voy a dictarte ahora undiscurso celestial sobre el Corazón de MiMadre… Como ya te he dicho previamente, elCorazón de Mi Madre y el Mío están tanunidos que se convierten en Uno. La Virgen delas vírgenes, la Santísima,ahora en el Cielo para siem-pre, Mi Madre, continúasiendo proclamada en elCielo como: Mi Madre .

Cuando Yo, Dios, des-cendí para ser concebidopor el Espíritu Santo y na-cer de la Virgen María, ¡Yovine a Mi cielo! Yo descen-dí de un cielo a otro, Yodejé un trono para sentar-me en el otro. Como la lám-para brillando en el Sagra-rio, Yo encontré Su Cora-zón brillando por dentro ypor fuera. Yo he sido aco-gido en este Paraíso paraser glorificado. Lo que sehabía perdido 1 y profana-do por Eva fue ganado 2 y santificado por laVirgen María a través de Su obediencia yhumildad perfectas. Y por medio de esta Mu-jer, Mi Reino en la tierra vendrá una vez más.Mi Reino en la tierra será fundado en cadacorazón. Otra vez será derramado sobre voso-tros Mi Espíritu, tan pródigamente, que estaaridez de ahora quedará transformada en unatierra fértil.

Se había dicho que al final de los tiempos,Nuestros Dos Corazones harían surgir apósto-les, y serían llamados: apóstoles del fin de lostiempos. Éstos serían instruidos por la Reina

del Cielo y por Mí Mismo, para ir a cadanación a proclamar sin miedo la Palabra deDios. Incluso cuando fueran empapados ensangre, por los sañudos ataques del Enemigo,no se derrumbarán, su lengua traspasará losenemigos de Mi Iglesia, como una espada de

doble filo, al exponer susherejías. Nunca vacilarán,ni conocerán el miedo, por-que Yo los proveeré con unespíritu de valentía. El azo-te destructor no los alcan-zará. No dejarán una pie-dra sin remover. Persegui-rán a los pecadores, a lospredicadores altivos, a losgrandes y a los orgullosos,a los hipócritas, a los trai-dores de Mi Iglesia. Losperseguirán con Mi Cruzen una mano y el rosario enla otra. Y Nosotros estare-mos a su lado. Destrozaránlas herejías y construiránen su lugar fidelidad y ver-dad. Ellos serán el antídoto

contra el veneno, porque brotarán, como capu-llos, del Corazón Real de María. Estos apósto-les del fin de los tiempos, pedirán ayuda aDios, su Padre, y Dios, Su Padre, acudirá a susespíritus. Invocarán a María, su Madre Benditay Mi Madre Bendita los visitará para que seconviertan en testigos del Altísimo. Y el Espí-ritu Santo les dará un espíritu de celo para estarpreparados para Dios, para estar preparadospara esta Batalla. Ese día la soberbia, coronade los poderes del mal será pisoteada bajo lospies de la Mujer vestida de sol, y por todos Sushijos. La segunda Eva a la que Yo he dadosuficiente poder para derribar a Satanás y suimperio, aplastará su cabeza con Su talón. Estaenemistad no se da solamente entre la Reinadel cielo y Satanás, sino que también se da

Corred hacia vuestra Madre Bendita(Dictado por Nuestro Señor a Vassula Ryden el 3 de abril de 1996)

Nuestras cosas (La Verdadera Vida en Dios)

1 Eva perdió la entrada en el Paraíso para ella misma ypara todos sus hijos

2 María ganó su entrada al Paraíso y para todos Sushijos por la Redención y el Sacrificio de Jesús

26

entre Sus hijos, cuyo imperio está en Su Cora-zón, y los hijos del Diablo, que han construidosus reinos en él y por medio de él, y que son envuestros días vuestros mayores perseguidores.Muchos de éstos son adoradores de la Bestia,los eruditos y filósofos de vuestros tiempos…Yo, en Mi Santidad Trinitaria, escogí a estahumilde Virgen para convertirse, en Sus virtu-des y gracias perfectas, en la Mujer que retaría,por Sus virtudes y gracias, al reino entero deLucifer, que constantemente monta en cólera yque tiembla de miedo al oír Su Nombre. Yo osdigo, la grandeza, el poder y el resplandor deSu Nombre no es menor que la altura del cielosobre la tierra.

Que todos los que viven en la tierra haganreverencia ante el Corazón de la Reina. Ellanunca ha cesado de proteger a Sus hijos de lasemboscadas del Maligno, quien, en vuestrostiempos, se ha lanzado abiertamente a dar ba-talla a Mi Sagrado Corazón, y contra todo elejército de Mis Santos. Pero pronto, el imperiodel Diablo será derribado y su soberanía seráextirpada por la poderosa Mano de María.

En verdad Yo os digo: no hay nadie en latierra ni en el Cielo, ni en los poderes angéli-cos, a quien haya sido dada una autoridad tangrande y poder sobre todos, como a vuestraMadre Bendita, después de Mi Poder y de MiAutoridad, pues Yo soy el Alfa y el Omega, elPrimero y el Último, y el Único que es, quefue, y que ha de venir. Yo Me basto a MíMismo como ya sabéis pero es a través delCorazón Virginal de María que comenzó Miplan Redentor, y será de nuevo a través de esteCorazón Santo que Yo completaré Mi plan deSalvación. Así que honra Su Corazón, tú quemontas en cólera al sonido de Su Nombre, ycomprende que Ella es la Alegría de Mi Sagra-do Corazón, la Alegría de Mi corte celestial.Sus pensamientos, desde el día de su Concep-ción, estaban siempre en unión con Mis pensa-mientos. Su Corazón, en sumisión total a laVoluntad de Mi Padre, era una oración ince-sante, un incesante himno de amor. Una adora-ción a Mí, vuestro Dios trino, pero Uno en launidad de esencia.

Hoy, en este fin de los tiempos, en que labatalla se está enfureciendo contra Nuestros

Dos Corazones, y contra Nuestros hijos quedan testimonio de la Verdad, Yo os digo: co-rred hacia vuestra Madre Bendita que, comouna gallina que esconde sus polluelos bajo susalas, os esconderá también bajo Su Manto.¡Ah… pero cuántos de vosotros habéis pereci-do incluso antes de que nacierais, con todas lasprohibiciones de las devociones a su corazónvirginal que una vez tuvisteis! Todo a causa devuestras doctrinas humanas y vuestros regla-mentos racionalistas; habéis regulado vuestrocorazón y vuestra vida de acuerdo con estavida mundana. ¡Oh esclavos del Pecado! ¡Es-clavos del dinero! ¡Esclavos de Satanás! ¡Con-sideraos a vosotros mismos muertos y putre-factos! Bien entonces, vuestro tiempo de luju-ria ya casi está acabado ahora. ¿No habéis oídoque el Esplendor de la Aurora va a reinar ybrillar en cada corazón que ha sido consagradoa Nuestros Dos Divinos Corazones, de loscuales obtendrán divinización? Esa diviniza-ción que la raza humana perdió en su caída…desde que el pecado entró en el mundo pormedio de un hombre, y, a través del pecado, lamuerte. Sin embargo, Mi plan de Redencióntenía que ser trazado por el Corazón Correden-tor de María, la segunda Eva, perfeccionada aImagen de Dios, para que Yo, el Nuevo Adán,encontrase Mi Paraíso en Su Inmaculado Co-razón. ¿Escucharé de ti, generación: «Mi cora-zón está preparado, Señor, para aprender aamar y honrar el tabernáculo que llevó a TuSagrado Corazón? Es verdad que desde el senohe andado descarriado, he estado en el errordesde mi nacimiento. Como Esaú he estadoalejándome de mi Madre para mirar por misintereses y obtenerlos saqueando a otros. Heestado dependiendo de mi propia fuerza, odiéa mi hermano que, contrario a mi corazón,meditaba en cómo contentar el Corazón denuestra Madre y permanecía cerca de Ella,recibiendo sus Gracias en abundancia. Yo nohe sido como Jacob y sus descendientes. Se-ñor, mi corazón está preparado para aprender yamar con honor al Santuario del SantuarioSantísimo, para que ningún engaño entre másen mi espíritu siempre tan rencoroso, que,como Caín, acosó a su hermano y finalmentelo mató.

Nuestras cosas (La Verdadera Vida en Dios)

27

Yo dejaré de perseguir a aquellos que perte-necen a Su Corazón Inmaculado, y en cambiome volveré hacia la Virgen de las vírgenes yme convertiré en otro pequeño Jacob, para queen Su Gracia Ella derramede Su Virginal e Inmacula-do Corazón sobre mí abun-dantes gracias, para que mialma, una vez Suya, festejeSus riquezas, haciendo demi corazón un ornamentode belleza en el Ornamentode Belleza. Permite que micorazón, Señor, desee y an-hele contemplar por dentroTu Santuario para ver Tu Po-der y Autoridad, contemplarel Tesoro del Santuario yfestejar más ricamente. Nopermitas que mi alma, nun-ca más, Señor, baje, debajode la tierra, como Caín oEsaú, sino eleva mi alma aSu Santísimo Corazón, paraconvertirme en un herederotambién, al recibir como Ja-cob bendiciones celestia-les3.

Ven, deja que tus pensa-mientos estén en cosas ce-lestiales ahora, para que seascapaz de comprender lo que la Sabiduría te estáescondiendo. Para esto necesitas humillaciónde sí mismo y arrepentimiento. El misterio queha sido escondido durante generaciones estásiendo ahora revelado a vosotros. Vuestra espe-ranza de salvación está al alcance de vuestramano.

¿No habéis notado cómo en este fin de lostiempos, la Reina de la Paz está pasando sobrela tierra, escoltada por Mis Ángeles? ¿No ha-béis notado cómo Su Inmaculado Corazón estáproclamando Mi Palabra a todos vosotros ypreparando Mi Reino? ¿No habéis notado cómoel Corazón de vuestra Madre Bendita está ins-truyendo a Sus hijos y formándolos Corazón-a-

corazón para que todo el mundo esté preparadopara Mi Reino? ¿No habéis notado cómo, desdeSu Tesoro, Ella está perfeccionándoos en SuCorazón para Mí? Yo he dado a la Reina del

Cielo y de la tierra, todas lasjoyas de la Sabiduría en SuCorazón, y desde este tesoroElla da abundantemente Susgracias para sacaros fuera delpoder de la oscuridad y ha-cer de vosotros grandes san-tos y apóstoles, y grandesguerreros para alistaros conElla en esta gran batalla devuestros tiempos. Con Suamor Maternal, la Reina delCielo busca todas las víaspara obtener vuestra libertadpara que ganéis el Cielo. Ellaos instruye y os recuerda quetambién vosotros sois Su hi-jo, perteneciendo por graciaa la casa imperial de los San-tos en el Cielo y que Ella hareservado también para vo-sotros un trono entre los San-tos. No hay nada que Yo nopueda hacer por la Delicia-de-Mi-Corazón4 , porquedesde el principio no habíanada en Ella que viese las

cosas de manera diferente a como Mi Padre,Yo, y el Espíritu Santo las veríamos. Nues-tra Voluntad estaba en perfecta unión con Suvoluntad. Sus deseos eran Nuestros deseos, puesYo Soy el Corazón de Su Corazón, el Alma deSu Alma, el Espíritu de Su Espíritu. ¿No hasoído de Nuestra Unidad en Corazón, Alma yEspíritu? Mi estado en la tierra, como Hombre-Dios, fue divino, aunque fui obediente, vivien-do bajo la autoridad de Mi Madre y Mi PadreAdoptivo. Me vacié a Mí Mismo para asumir lacondición de un esclavo, aceptando la muerte.

Y tú, generación, ¿no has entendido todavíaque la verdadera Vid echa Sus raíces en laViña de Mi Padre? ¿Y que la Esposa del Espí-ritu Santo, la Ciudad de Dios, la Tierra Prome-

Nuestras cosas (La Verdadera Vida en Dios)

3 Todo esto fue como una confesión dada a nosotros porJesús para que la digamos 4 María, nuestra Madre Bendita

28

tida, es también tu Madre a la que debeshonor?

Ah, generación, ¿cómo ha podido tomar tucorazón una senda engañosa para abstenersede Su intercesión? ¿No has leído «el SeñorDios le dará el trono de su antepasado David?La Reina del cielo y tierra también es Mi Tro-no. Ella es el Trono de tu Rey, que se hizocarne de la estirpe de David…

El Señor tu Dios «gobernará sobre la Casade Jacob por siempre jamás y Su Reino notendrá fin». Los Jacob de hoy son Sus hijos,los apóstoles de los últimos tiempos, y losgrandes Santos que son suscitados y formadospor medio del Corazón de Mi Madre, para quesean un solo corazón con Nosotros por siem-pre jamás, pues Mi Reino no tendrá fin en suscorazones. Sed uno.

Nuestras cosas (La Verdadera Vida en Dios)

Mensajes de Nuestra Señora MaríaReina de la Paz

Mensaje del 2 de diciembre de 2013(Aparición a Mirjana)

“Queridos hijos, conamor materno y mater-na paciencia miro sucontinuo deambular y suextravío. Por eso estoycon ustedes. Deseo so-bre todo, ayudarlos pri-meramente a encontrar-se y a conocerse a uste-des mismos, para queluego puedan conocer yadmitir todo aquello que no les permite cono-cer sinceramente, y con todo el corazón, elamor del Padre Celestial. Hijos míos, el Padrese conoce por medio de la cruz. Por eso norechacen la cruz: con mi ayuda busquen com-prenderla y aceptarla. Cuando sean capacesde aceptar la cruz, comprenderán también elamor del Padre Celestial; caminarán con MiHijo y conmigo; se distinguirán de quienes nohan conocido el amor del Padre Celestial, dequienes lo escuchan pero no lo comprenden,no caminan con Él, ni lo han conocido. Yodeseo que ustedes conozcan la verdad de Mi

Hijo y sean mis apóstoles; que como hijos deDios, se coloquen por encima del pensamientohumano, y siempre en todo, busquen de nuevoel pensamiento de Dios. Hijos míos, oren yayunen para que puedan comprender todo loque les pido. Oren por sus pastores y anhelenconocer en comunión con ellos, el amor delPadre Celestial. ¡Les agradezco!

Mensaje del 25 de noviembre de 2013

“¡Queridos hijos!Hoy los invito a todosa la oración. Abranprofundamente lapuerta del corazón,hijitos, a la oración, ala oración con el co-razón, y entonces elTodopoderoso podráobrar en vuestra li-bertad y comenzará la

conversión. La fe llegará a ser tan firme quepodrán decir con todo el corazón: «mi Dios,mi todo». Comprenderán, hijitos, que aquí enla Tierra todo es pasajero. Gracias por haberrespondido a mi llamado”.

Mirjana Dragisevic

Marija Pavlovic

Nuestras cosas (Noticias desde Medjugorje)

29

Nuestras cosas (Noticias desde Medjugorje)

* Continuamos reproduciendo la Charla dictada porSor Emmanuelle de Medjugorje en Lisieux, Francia,a todos los Padres de Familia

Familia… ¡No te dejes destruir!*

Dar a Dios el primerlugar

Por lo tanto, para la unidadde su familia, es importanteque lleven a sus niños a lamisa dominical.

La Santísima Virgen noslo pide y pide también que laEucaristía sea verdaderamen-te una fiesta familiar. Vayana recibir juntos el Cuerpo yla Sangre de Cristo.

Quisiera insistir ahora so-bre algo muy importante queva a ayudar a la supervivencia de sus familiasy servirá también de alimento para sus hijos.En sus familias pongan a Dios en el primerlugar; que Dios viva en medio de ustedes, queesté plenamente presente en todos los momen-tos de su vida familiar, en sus intercambios,sus conversaciones, su compartir, sus decisio-nes, en todo lo que puedan decir y vivir enpresencia de sus niños.

Por ejemplo: ya no tenemos dinero paraterminar el mes: ¡problema familiar clásico!…Pues bien, ¿qué debemos hacer?

Pedir a Dios que nos ayude. ¿No nos dijo elSeñor?: «Busquen primero el Reino de Dios ysu justicia, y lo demás les será dado porañadidura».

Pues bien, primero, para mostrar nuestraconfianza en Dios, vamos a dar a un pobre, oayudar a alguien que necesita, vamos a rezar,vamos a hacer algo por el Señor y el Señor vaa proveer a nuestras necesidades.

¿Ustedes creen que San José y la VirgenMaría tenían una cuenta en el banco? Puesbien, Dios siempre proveyó a sus necesidades.Pero la Sagrada Familia tenía confianza en laProvidencia.

Por lo tanto, el niño recordará siempre quecuando hay un problema, o cualquier dificul-tad en la familia, lo primero que hay que hacer

es volcarse hacia Dios, comolo vio hacer a sus padres, di-ciendo: “Señor, ven a nuestrosocorro”. Así, el niño experi-mentará que Dios siempre nossocorre si recurrimos a Él contotal confianza.

Cuando hay una decisiónque tomar, jamás hay que ir aver a la señora que ve la suer-te para saber con su péndulo,lo que hay que hacer, o eltarot, o al adivino, o al astró-logo…

Hay muchas familias quehacen eso, lo cual no sirve para nada, sino queademás ¡es satánico!… Con eso, ustedes seponen entre las manos de Satanás. De eso, tansólo ayer tuve un testimonio:

Un chiquillo, que quería saber su porvenir,fue a ver a un adivino… yo no les contaré losdaños que sufrió después de esta visita… peroahora, el pobre tiene muchas dificultades pararecuperarse… ¡Allí uno se pone directamenteen las manos de Satanás!

Cuando tengan que tomar una decisión,recen a su Padre Creador y pídanle que inclinesu corazón e inteligencia hacia una buenadecisión. Que el niño sepa que cuando hay quehacer una elección, una profesión que elegir,una orientación de vida, sea casarse o entre-garse a Dios… es a Él, a quien hay que acudirprimero, y a nadie más.

Cuando uno tiene un sufrimiento, una en-fermedad, que el niño sepa que es una cruzque hay que llevar. Y esta cruz vamos a ofre-cerla en unión con los sufrimientos de Jesús yasí el niño no se rebelará, no se desesperará,porque encontrará un sentido a su sufrimiento.Sabemos que el sufrimiento ofrecido a Diospuede hacer milagros en el mundo y así, uste-des, padres, abrirán horizontes a sus hijos, loque impedirá que se dejen enfrascar en unmundo materializado.

30

Directo y profético el Papa en Santa Marta: “Apos-tasía general es la prohibición de adoración”

Nuestras cosas (Noticias de El Vaticano)

Hay “poderes mundanos”que querrían que la religiónfuera “una cosa privada”.Pero a Dios, que ha vencidoal mundo, se lo adora hastael final “con confianza y fi-delidad”. Es el pensamientoque el Papa Francisco ofre-ció el jueves 28 de noviem-bre durante la homilía de laMisa celebrada en la capilla de la Casa deSanta Marta. “Los cristianos que hoy son per-seguidos —dijo— son el signo de la pruebaque anuncia la victoria final de Jesús”.

En la lucha final entre Dios y el mal, que laliturgia propone en estos días, hay un granpeligro, que el papa Francisco llama “la tenta-ción universal”. La tentación de ceder a lasadulaciones de quien quisiera vencer sobreDios, creyéndose mejor que quién cree en Él.Pero precisamente quien cree tiene una refe-rencia clara donde mirar ha dicho el Papa.Para explicitarlo recordó la historia de Jesús,con las pruebas sufridas en el desierto y des-pués las tantas soportadas en su vida pública,

con insultos y calumnias,hasta el extremo de la Cruz,donde el príncipe del mun-do pierde su batalla delantede la Resurrección del Prín-cipe de la Paz.El Papa Francisco indicóestos pasajes de la vida deCristo porque en el trastor-no final del mundo, descri-

to en el Evangelio, la puesta en juego es másalta que el drama representado por las calami-dades naturales:

“Cuando Jesús habla de estas calamidadesen otro pasaje nos dice que se producirá unaprofanación del templo, una profanación de lafe, del pueblo: que se producirá la abomina-ción, se producirá la desolación de la abomi-nación. ¿Qué significa eso? Será como el triun-fo del príncipe de este mundo: la derrota deDios. Parece que él, en aquel momento finalde calamidades, parece que se adueñará deeste mundo, será el amo del mundo”.

He aquí el corazón de la “prueba final”: laprofanación de la fe. Que, entre otras cosas, es

La recomendación del Prefecto, Cardenal Cañizares

En entrevista efectuada en el Vaticano alPrefecto de la Congregación para el CultoDivino y la Disciplina de los Sacramentos,Cardenal Antonio Cañizares Llovera, señalóen forma sencilla y directa sobre esta materia:“Es recomendable que los fieles comulguenen la boca y de rodillas”.

Para argumentar su indicación el Prefecto yCardenal precisó que al comulgar de tal formase explicita el sentido “de adoración, de reco-nocimiento de Dios” que debe tener la comu-nión.

El Purpurado dijo también que comulgar deesta forma “es la señal de adoración que es

necesario recuperar. De hecho —añadió— sise comulga de pie, hay que hacer genuflexión,o hacer una inclinación profunda, cosa que nose hace”.

Comentó luego el Cardenal que en estatarea de formación para celebrar bien la litur-gia y corregir los abusos, “los obispos tene-mos una responsabilidad muy particular, y nopodemos dejarla de cumplir, porque todo loque hagamos en que la Eucaristía se celebrebien será para hacer que en la Eucaristía separticipe bien”.Fuente: portaluz.org/comulguemos-en-la-boca –ACI Prensa,

31

Nuestras cosas (Noticias de El Vaticano)

muy evidente —observó Francisco— dado loque padece el profeta Daniel, en el relato de laprimera lectura: echado en la fosa de los leo-nes por haber adorado a Dios en lugar de alrey. Por tanto, “la desolación de la abomina-ción” —reafirmó el Papa— tiene un nombrepreciso, “la prohibición de adoración”:

“No se puede hablar de religión, es una cosaprivada, ¿no? De esto públicamente no sehabla. Se quitan los signos religiosos. Se debeobedecer a las órdenes que vienen de lospoderes mundanos. Se pueden hacer tantascosas, cosas bellas, pero no adorar a Dios.Prohibición de adoración. Éste es el centro deeste fin. Y cuando llegue a la plenitud —al‘kairós’ de esta actitud pagana, cuando secumpla este tiempo— entonces sí, vendrá Él:‘Y verán al Hijo del hombre venir sobre unanube con gran poder y gloria’. Los cristianosque sufren tiempos de persecución, tiempos de

prohibición de adoración son una profecía delo que nos sucederá a todos”.

Y sin embargo, concluyó el Papa Francisco,en el momento en el que los “tiempos de lospaganos se habrán cumplido” será el momentode levantar la cabeza, porque estará “cerca” la“victoria de Jesucristo”:

“No tengamos miedo, sólo Él nos pide fide-lidad y paciencia. Fidelidad como Daniel, queha sido fiel a su Dios y ha adorado a Dioshasta el final. Y paciencia, porque los cabellosde nuestra cabeza no caerán. Así lo ha prome-tido el Señor. Esta semana nos hará bien pen-sar en esta apostasía general, que se llamaprohibición de adoración y preguntarnos: ‘¿Yoadoro al Señor? ¿Yo adoro a Jesucristo, elSeñor? ¿O un poco a medias, hago el juego delpríncipe de este mundo?’. Adorar hasta elfinal, con confianza y fidelidad: ésta es lagracia que debemos pedir esta semana”.

Nuestras cosas (Noticias de Peñablanca)

Nos ha dejado el querido P. Ruperto Horn Klenner

La partida del padre, se produjo el díasábado 23 de noviembre del presente año. Lodespidieron con una hermosa misa el día do-mingo, en la Capilla del Liceo del VerboDivino en calle Presidente Errázuriz, en com-pañía de los Sacerdotes de su Congregación,Monjitas del Convento al cual pertenece laúnica hermana del Padre Ruperto, que le so-brevive, familiares venidos del sur de Chile,amigos y Peñablanquinos.

Mi primer contacto con el Padre Ruperto,fue en una misa concelebrada en el Santuariode Shöenstat, en Santiago, con motivo de lavisita de la imágen peregrina de Teresita deLos Andes que bendijo el Santo Padre JuanPablo II. Me llamó la atención un padre queinspiraba una ternura muy especial y recuerdohaberle dicho a Nuestro Señor:

“Señor, cómo tener un guía espiritual, paranuestro grupo de oración, como aquel Pa-drecito“.

Pasó el tiempo y vino el querido Padre

Estefano Gobbi a dar una charla a la Iglesia deLos Sacramentinos. Asistimos con una herma-na mariana, llamada Gladys Cárdenas. Cuan-do comenzó la Santa Misa, que coronó lajornada, mi amiga Gladys me dice que estáconcelebrando la santa misa, un Sacerdotemuy querido de ella a quien le regalaba loslibros y revistas de la Dama Blanca.

Cuando terminó la Santa Misa, nos acerca-mos a saludar al Padre conocido de Gladys yresultó ser el mismo Padre que yo había vistoen el Santuario de Shöenstat. Gladys me lopresentó; era el Padre Ruperto Horn. Le con-tamos que el próximo 4 de julio (de 1994), sellevaría a cabo la primera Misa que MonseñorMedina había autorizado en el Monte Carmelo.Lo invitamos a asistir y le ofrecimos llevarloen el vehículo que llevábamos habitualmentecon un grupo de peregrinos. Él aceptó inme-diatamente.

En esa primera visita y primera misa, cele-brada por Monseñor Gonzálo Duarte, en el

32

Nuestras cosas (Noticias de Peñablanca)

Monte Carmelo, el Padre Ruperto, ingresó alJardín Santo y besó el suelo bajo el olivo. Sele observó contento y manifestó deseos devolver al mes siguiente. Le dijimos que con elmayor gusto lo llevábamos todos los meses, siél quería.

A la segunda Misa, que se llevó a cabo elsábado 6 de agosto de 1994, fue acompañadopor el Padre Alfredo Rosembach, también dela Congregación del Verbo Divino de Santia-go.

Desde esa fecha, nunca dejaron de ir ycumplir con el compromiso de confesar yayudar espiritualmente a los fieles, salvo fuer-za mayor como enfermedad. Escuchaban conatención los testimonios y compartían connuestro grupo. Estaban mes a mes impacientesa la espera de la Misa del primer sábado.Pasamos a ser como parte de su familia adop-tiva, nos preocupábamos de atenderlos, regalo-nearlos, hacerlos sentir muy estimados, apre-ciados y agradecidos de su apoyo. Se dieron aquerer de todos los fieles, que asisten al MonteCarmelo. La partida del Padre Ruperto, alencuentro con el Padre Eterno, nos deja muytristes por su ausencia, pero seguros de queestá disfrutando de la presencia de NuestroSeñor y la Madre Inmaculada.

A él le gustaba mucho rezar con nosotros,también cantar, respirar el aire puro de PeñaBlanca y se adaptaba con facilidad a las acti-vidades de nuestro grupo. Decidió usar nueva-mente su sotana como una forma de agradar a

Dios y su Madre Santísima, cuando se enteróde la petición que hizo la Madre en el MonteCarmelo.

Después de llevarlo 19 años consecutivos,en el mes de Abril de éste año, no se pudollevar más el kleinbus, por falta de finan-ciamiento y peregrinos, por ser todos de terce-ra edad.

Otra misionera de buena voluntad, llamadaRosita Artiga lo llevó con mucho cariño hastael mes de Octubre pasado y luego retornó alPadre Eterno, a quien amó profundamente, lomismo que a la Madre Santísima. Dedicó suvida entera a servir a Dios. Tuvo una familiaprivilegiada, en donde sus padres le dieron aconocer la fe católica y el amor a Dios, alpunto de dar dos hijos al Sacerdocio y una hijamonjita.

Por último, me resulta difícil callar un gestode máxima dulzura, que tuvo Nuestro Señor,para conmigo.

El miércoles 13 de noviembre de 2013, enla madrugada, soñé que veía un lugar en dondeaparecía una hermana mariana de Peñablanca,llamada Cecilia. Luego cambiaba el lugar yveía una Iglesia de tipo colonial y en el frontishacia la izquierda había lo que me parecía unvolantín de color azúl y rojo. Después, hacia laderecha como en un cuadro, una cara de varóncon cabello largo y barba. Ese varón me decía:“El próximo domingo voy a estar”.

Pasé muchos días pensando en el sueño ytuve claro que el “próximo domingo”, no serefería al domingo 17 de voviembre, día de laselecciones. Me preguntaba, por qué aparecíala hermana Cecilia. Sabía que me había dichoel primer sábado, en Peñablanca, que me lla-maría para saber de la salud del Padre Ruperto,pero no lo había hecho ¿ qué relación tendríacon el sueño?.

El domingo 24, día de la misa fúnebre delPadre Ruperto, no sentía tristeza por su parti-da, me lo imaginaba gozando de la presenciade Dios, de la Santísima Virgen María, de suspadres y de quienes le antecedieron. De pron-to, veo que a los dos costados del altar habíanunos vitreaux con motivos religiosos y habíansido diseñados en cuadros grandes que forma-ban un conjunto religioso y en el primero que

P. Ruperto Horn K. y un grupo de peregrinos en el bus,durante el viaje a Peñablanca con motivo de la celebra-

ción de la primera Misa

33

fijo la mirada, veo como un volantín azul yrojo, como el del sueño. Luego, veo en el ladoderecho dentro de otro cuadro, que estaba lacara del varón de mi sueño, que me dijo “Elpróximo domingo voy a estar“. Entonces, meembargó un llanto casi convulsivo, que nopodía contener y sentí que en el momento dela Consagración el Señor vino personalmentea llevar al Padre Ruperto. Llorando, estuvelargo rato, costándome una enormidad sere-narme, sintiéndome indigna de tantas delica-dezas y deferencias por parte de Nuestro Se-ñor.

Cuando el Sr. Obispo que presidía la SantaMisa rezó el Responso final:

“Venid en su ayuda, santos de Dios;

Salid a su encuentro, ángeles del Señor:Recibid su alma y presentadla ante el Altí-

simo.Cristo, que te llamó, te reciba, y los ángeles

te conduzcan al regazo del Padre.Recibid su alma y presentadla ante el Altí-

simo.Concédele, Señor, el descanso eterno, y

brille para él la luz perpetua.Recibid su alma y presentadla ante el Altí-

simo”.

¡Nuestro tan querido Padre Ruperto, ya ha-bía ascendido con el Señor!.

Bendito seas Señor, por tanto amor por tuscriaturas.

IVONNE SAMSON de KÜHN

Nuestras cosas (Noticias de Peñablanca)

Misa del primer sábado de diciembre de 2013

El sábado 7 de diciembre, vísperade la fiesta de la Inmaculada Concep-ción de la Virgen María,se celebró latradicional Misa de primer sábado demes en el Monte Carmelo de Peña-blanca. Especial participación tuvoun pequeño coro de niños en la cele-bración litúrgica. Publicamos algu-nas fotografías captadas con motivode este acontecimiento.

34

Nuestras cosas (Testimonios)

“Tuve un embarazo de alto riesgo…El padre demi hijo quería que abortara”

En el marco de la Campaña Na-cional “Siempre por la Vida” quecongregó a miles de jóvenes en lascalles de las principales ciudadesde Chile, una joven madre, Mónica,compartió su testimonio frente alaborto y cómo pudo salvar la vidade su hijo. Durante la jornada, unode los voluntarios registró el emo-cionante testimonio de Mónica, unamadre quien decidió tener a su hijo a pesar dehaber sufrido complicaciones médicas durante

el embarazo, y haber sido presio-nada para que se sometiera a unaborto.

“Tuve un embarazo de alto ries-go y el padre de mi hijo a los tresmeses quería que yo lo abortara”.Mónica dice que estuvo seis meseshospitalizada y le decían que su hijono iba a nacer, o si él nacía, ella seiba a morir. “Luché por la vida de

mi hijo y hoy es la mejor compañía que tengo.Él es mi razón de vida, si él no estuviera yo no

Nuestras cosas (Noticias del mundo)

Filipinas: imágenes de la Virgenadmirablemente indemnes

Con menos de un mes de intervalo, dos enor-mes calamidades se abatieron sobre las Filipinas,país muy poblado de mayoría católica. El país esun gran archipiélago expuesto a fenómenos sísmi-cos y huracanes de rara intensidad. El día 16 deoctubre, un terremoto de magnitud 7.2 alcanzóespecialmente a la isla de Bohol, dañando severa-mente grandes y sólidas iglesias coloniales conhasta 400 años de antigüedad. La segunda grancalamidad fue provocada por el tifón Haiyan (de-nominado allí Yolanda) el 8 de noviembre, y quecausó cerca de 2500 muertes. En las dos inmensastragedias se registró el mismo fenómeno: imáge-nes de Nuestra Señora y del Sagrado Corazón deJesús resultaron inexplicablemente indemnes. Porejemplo, la imagen pintada en una iglesia de Bo-hol: todo el muro de la iglesia se desplomó, peroel lugar donde se encontraba la imagen quedó enpie. En el mismo terremoto, informa la televisiónfilipina, diversas imágenes, sobre todo de nuestraSeñora de Lourdes, fueron salvadas de modo inex-plicable. “Es un milagro”, decía Carol Ann Balan-sag, del periódico Inquirer News, señalando laimagen patronal de la iglesia de Santa Cruz, delsiglo XVIII, en Barangay, provincia de Bohol. Entrelas ruinas de la iglesia de Nuestra Señora de la Luz,en la ciudad de Loon, en la misma provincia, los

fieles podían invocar la misericordia divina, elauxilio y el perdón ante la imagen de la patrona quefue también salvada de modo asombroso.

Los fieles miraban con lágrimas en los ojos lagruta destruida de Nuestra Señora de la Luz perocuya imagen quedó indemne. “El terremoto des-truyó la iglesia, pero no alcanzó a nuestra patro-na”, decía el Padre Tom Balatayo.

Amelia Sevilla agradecía a Nuestra Señora porhaberla salvado, así como a su marido y a suscuatro hijos. Durante el terremoto, ella corrió conellos hacia la iglesia temiendo el tsunami que sueleseguir a un terremoto. Durante el tifón Haiyan laimagen del Sagrado Corazón de Jesús quedó enpie, venciendo la furia de los elementos. ¿No ha-brá en todas estas protecciones una enseñanza, yquizá un aviso, para todos nosotros también?

Fuente: LUIS DUFAUR - accionfamilia.org

Mónica, joven madre chilena

Imagen indemne en la iglesia de Bohol

35

Nuestras cosas (Testimonios)

Nuestras cosas (Recordando testimonios)

Continuamos recordando testimonios de sacerdotes y religiosas creyentes de las Apariciones dePeñablanca. Los hemos extraído de los libros de Alvaro Barros “Por qué creo en Peñablanca” y deMaría Luisa Paredes “Si hacéis lo que os digo habrá Paz, de lo contrario…” Agregamos el que acontinuación se inserta a los ya publicados desde juniode 2013 hasta ahora en“MISIONEROS DE DIOS”.

(…a pesar de todo me he animado a rendir eldebido homenaje a Nuestra Madre del Cielo)

Aquí va mi testimonio:Dios nos ama. Nunca nos abandona. Por eso

ha enviado a Su Hijo haciéndose Hombre parasalvarnos y reconciliarnos con el Padre: “Diostanto amó al mundo que envió a su Hijo”.

Dios ha ido acompañando a la humanidadcon sus intervenciones misericordiosas paracorregir el camino equivocado que la llevaría ala perdición.

Particularmente en estos últimos tiempos hansido frecuentes y fuertes las advertencias lla-mando a la conversión y a la penitencia a estahumanidad que se ha ido alejando cada vez másde Dios, hacia el abismo.

He aquí, entonces, que envía a la VirgenSantísima, Madre de Jesús y Madre nuestra,para llamar a los hombres, sus hijos, a volver aDios advirtiéndolos de los peligros a los cualesvan al encuentro. De ahí las numerosísimasapariciones de Nuestra Madre, dándonos men-sajes de amor y de paz y de misericordia.

Aquí se plantea el tema de las aparicionesprivadas. Es un tema trascendental, especial-mente en nuestro tiempo. Esta tarea es propia dela Iglesia. Pero hay discernimiento privado ypersonales que a uno lo pueden llevar a aceptar

Sacerdote extranjero expulsado de Chile por creer en Peñablancaalgunas de ellas, siempre estando dispuestos asometernos al juicio oficial de la Iglesia.

Entre tantas apariciones se registra la de Pe-ñablanca, Villa Alemana, Chile, donde la Vir-gen Santísima se apareció durante 5 años (1983-1988), a un joven llamado Miguel Ángel Poble-te.

Yo tuve la feliz oportunidad de estar presenteen varias apariciones que, por los signos que sedaban, las consideraba y sigo considerándolasverdaderas. —Puedo dar testimonio de cambioen mi vida religiosa-sacerdotal—.

Agradezco a Nuestro Señor y a su SantísimaMadre y Madre Nuestra, por las tantas graciasrecibidas.

Me causó mucha alegría cuando el Arzobis-po de Valparaíso dispuso la celebración de laMisa en el Monte Carmelo todos los primerossábados de cada mes, con gran concurrencia defieles devotos.

Confiando en el pronto reconocimiento de laAparición de Peñablanca, me postro en profun-da veneración y agradecimiento a los pies de LaDama Blanca de la Paz,

Todo lo tengo encerrado en mi corazón.REVERENDO PADRE

(se omite el nombre y el país desde donde escribe…)(fue expulsado por su propia congregación)

sé qué haría. Jamás pensé en abortarlo”, comen-ta Mónica.

Durante su tiempo en el hospital, Mónica re-cuerda que le propusieron “la medicina que lepodía abortar, el aborto terapéutico que lo lla-man”, pero la rechazó. “No saben el daño quese pueden hacer ustedes mismas al perder a laúnica persona que las va a acompañar hasta elfinal de la vida”, afirmó.

Hablando de lo que significa su hijo en suvida, aseguró que “es lo más lindo que me hapasado. Ya tiene siete años… es mi razón de

respirar… es lo más lindo que me ha pasado…Tengan a sus hijos, es mentira que te truncan lavida, yo estudio, trabajo, voy a tener mi profe-sión. Y es todo por él porque me motiva hacermuchas cosas. Él llenó mi vida”, afirmó.

La campaña “Siempre por la Vida” consiguiómás de 80,000 firmas pidiendo a los candidatospresidenciales y parlamentarios que “rechacentodo tipo de aborto y propongan medidas con-cretas para apoyar a las mujeres embarazadas”.Fuente: http://www.aciprensa.com” - siempre porla vida camino catolico

36

M E N S A J E SNo arrojen blasfemias a Dios porque el juicio ha de venir muy pronto y seréis

juzgados como vosotros habéis actuado aquí en la tierra Si, no, si el mundo no atiendea las súplicas, ese castigo ha de venir. Sí. Quizás no podremos hacer nada, pues, no sé,si el mundo no atiende y sigue ofendiendo a Dios, vendrá un gran castigo en los EstadosUnidos.

¡1985, que pena me das! Al igual que en Chile!Si el mundo ya no implora misericordia ni perdón. Si ya no hay personas

dignas de ofrecer la Víctima Inmaculada al Eterno, se aproxima un gran castigo ala humanidad.

Os digo, hijos míos: arrepentíos de las blasfemias que arrojáis contra Dios. Yason muchas y claman venganza al cielo.

El brazo de mi Hijo ya no puede sostener todo eso. Los pesos de los pecados(se) acumulan en el Cielo.

Para Dios no hay nada imposible. Pidan con oración y esfuerzo. La paz deVuestro Señor estará con vosotros. Alza tu voz y proclama por todo el mundo lasmaravillas de Peñablanca. De todo el mundo.

Australia no es.No he estado nunca en Australia.No os preocupéis de nada. La gracia del Señor está con vosotros y Él ha de

proteger vuestros corazones y no os confundáis.Hijos míos, hagan saber a todos los de aquí de este lugar que estoy aquí, la

Madre de Dios. Pronto, corred y decidlo.¿No sabéis nunca que las cosas de Dios, nunca las vais a hacer perecer?Rezad mucho para no caer en la tentación.… Yugoslavia, Garabandal, Peñablanca, Fátima, Lourdes, La Salette, Monte

Chiari, Tre Fontana, El Escorial, La Rue de Bac, La Medalla Milagrosa, Guadalupe,Tepeyacac, Pilar, Japón, Méjico… Siracusa…

… El Escorial, La Salette, Fátima, Lourdes, Monte Chiari, Garabandal,L’Escorial, San Damian, La Medalla Milagrosa (en francés)… Guadalupe, Peña-blanca, Austria, Banneux, Nippon, Franlein (así suena)…

La Grotte Lourdes, Fátima, La Salette, San Damiano, Garabandal, Peña-blanca, L’Escorial, Zaragoza, Monti Chiari, Tre Fontana, La Rue de Bac (LaMedalla Milagrosa),

Las no: Bay Side, Australia, Argentina, Perú.Fátima, Lourdes, La Salette, La Rué de Bac (Medalla Milagrosa)…Nuestra Señora se ha aparecido en estos lugares: Garabandal, Escorial, Peñablanca,

Lourdes, La Salette, La Rue de Bac (Medalla Milagrosa), Guadalupe, Zaragoza, ElPilar, L’Escorial, Medjugorje, Japón, México, Monte Chiari, Las Tres Fontanas, LaMadre de los Dolores.

Peñablanca, Chile – 7 de septiembre de 1984