Menores de edad eran esclavizados en negocios de Lima

1

Click here to load reader

description

Dos adolescentes tuvieron que trepar por un cable de luz para escapar de una familia que los tenía cautivos e incomunicados para que hicieran de sirvientes en sus empresas. La trata de personas con fines de explotación laboral es otro delito aberrante y oculto.

Transcript of Menores de edad eran esclavizados en negocios de Lima

Page 1: Menores de edad eran esclavizados en negocios de Lima

a12 l País ___ El Comercio ___ domingo 24 de junio del 2012

Esclavizaban a menores en negocios de Lima y Abancay

La madrugada del 14 de junio, un adolescente de 17 años y otro, de 16, a los que llamare-mos ‘Santiago’ y ‘Arturo’, deci-dieron poner fin a la vida que habían conocido en los últimos meses. Dudaron, pero no tenían opción. Cogieron un cable de luz, lo amarraron al marco de una ventana del cuarto piso donde dormían y se deslizaron uno a uno, torpemente, hasta golpear el suelo. El ruido de sus cuerpos debió haber despertado a César Pretell Janampa, de 38 años, el dueño de la casa. Solo recuerdan que nada más lo vieron echaron a correr, correr y esconderse. No querían seguir siendo esclavos.

‘Santiago’ es quechuahablan-te, pero con ayuda de un paisa-no ha podido traducir su drama a la policía. Fue en abril cuando César Pretell se contactó con sus padres en su natal Pampamar-ca, en Ayacucho, y los convenció para que lo dejaran ir a Lima, a administrar una casa de cambio. Pretell también era ayacuchano, recorrió la misma pobreza y hoy tenía empresas en la capital. ¿Por qué no confiar?, se dijeron.

Cuando ‘Santiago’ llegó no le esperaba un puesto tras un mos-trador. Le quitaron su celular y su DNI amarillo, le dieron sábanas y frazadas sucias para fregar, lo metieron en la lavandería de un hostal en San Martín de Porres y cerraron con llave. ‘Arturo’, su primo, fue captado del mismo modo por el hermano de César, Miguel Pretell, quien incluso le envió dinero para el pasaje.

Trabajaban de 4 de la madru-gada a 11 de la noche, alternan-do el lavado con la limpieza de los cuartos, sin días libres, sin pago; tenían prohibido salir y llamar por teléfono. Les dijeron

que cuando cumplieran su pri-mer año les darían 1.200 soles como sueldo total y, con suerte, podrían irse. Lo único que reci-bieron fueron golpes y humilla-ciones que reforzaron su sumi-sión y los alimentaron de miedo.

Trinitario Ccance, padre de ‘Santiago’, algo sospechaba. Llamó al celular de su hijo varias veces y en todas contestó César Pretell, quien le aseguró que su hijo estaba más que feliz. “Pen-samos en suicidarnos. Herirnos también, con tal de que nos de-jaran volver al pueblo”, dijeron los menores.

Luego de la fuga, un albañil se apiadó de ellos y los cobijó has-ta que llegaron sus padres. Los agentes de la División contra la Trata de Personas irrumpieron en el local y encontraron a una menor de 15 años. “Apenas vio a la policía femenina la abrazó de la cintura y no la soltó, pedía que la sacaran de ahí”, explicó el coronel Eduardo Vergaray.

Los menores han contado que había más niños, uno de ellos de nombre Naón, pero cuando la

años que fue captado en su ba-rrio de San Juan de Miraflores y rescatado el 9 de junio, luego de tres semanas de trabajar en-cerrado en una fábrica de zapa-tos en Abancay, Apurímac, con la promesa de 150 soles al mes. El menor, que proviene de un hogar disfuncional y abandonó el cole-gio en 2° grado de primaria, fue convencido por Claudio Atoccsa Navarro, empresario que hace contrataciones con el Estado y que abarata los costos usando a menores como mano de obra.

“Conmigo había otro chico de 14 años, de provincia. Los dos dormíamos en el suelo, en el mismo cuarto, junto a otros tres hombres”, nos dijo ‘Pedro’, ya en compañía de su madre.

Del 2008 hasta abril de este año el Sistema de Registro de Trata (RETA) ha contabilizado 185 casos con fines de explota-ción laboral. Esta es la modalidad más imperceptible del tráfico de seres humanos pues las mismas víctimas desconocen que la vul-neración que sufren va más allá de una infracción laboral.

Son 4 los hoteles y 7 las casas de cambio donde este clan familiar explotaba laboralmente a menores de edad.

TRATA DE PERSONAS

Clan familiar los traía de Ayacucho para limpiar hoteles y casas de cambio.

Los adolescentes dormían cinco horas, sin pago, y no podían salir ni llamar a casa.

ELIZABETH SALAZAR VEGA

Fugaron colgándose de un cable de luz

Condenable explotación laboral

MENORES RESCATADOS TIENEN 15, 16 Y 17 AÑOS. La menor de 15 años fue derivada al Inabif porque aún no se encuentra a sus padres. Los progenitores de los

otros dos adolescentes, Trinitario Ccance y Lidia Borda, llegaron el lunes a la capital y asentaron la denuncia en

compañía de sus hijos. Sus vecinos de Pampamarca hicieron una colecta para costearles los pasajes.

¿NEGOCIOS FORMALES? Este es el inmueble

donde tenían

cautivos a tres

menores. Los

Pretell Janampa

tienen 11 negocios

en San Martín de

Porres, Comas,

Carabayllo y Los

Olivos, donde

también habrían

explotado a

adolescentes,

pero no hay rastro

de ellos.

ARRIESGARON SUS VIDASLos dos adolescentes que escaparon de un hostal de San Martín de Po-

rres usaron un cable de luz como cuerda para descender y huir. Cuando

la policía allanó el inmueble las pruebas permanecían ahí.

CÉSAR PRETELL JANAMPALa PNP detuvo a este hombre

por el delito de trata agravado y

remitirá el expediente a la Pro-

curaduría de Lavado de Activos,

pues todo el clan familiar estaría

involucrado. El caso lo ha asumi-

do la Fiscalía 8 de Lima Norte.

MIGUEL PRETELL JANAMPAFue acusado por uno de los me-

nores de haberle enviado dinero

a su madre para que se concrete

la explotación. El abogado César

Rivera, que ha asumido la de-

fensa de los hermanos Pretell,

no devolvió nuestras llamadas.

Los adolescentes rescatados y sus padres se quedarán unos días en Lima para apoyar la investigación. En tanto, duermen en la delegación policial y la ONG Movimiento el Pozo los apoya con asesoría legal y comida.

Muchacho de San Juan de Miraflores regresó con su madre

FERNANDO ASTETE MALDONADOTitular de la Tercera Fiscalía

Penal de Abancay, dispuso la li-

bertad de los tres familiares de

Claudio Atoccsa Navarro halla-

dos en la fábrica. Ellos admitie-

ron haber captado a menores.

CLAUDIO ATOCCSA NAVARRONo fue encontrado en la fábrica

cuando intervino la policía. Está

en calidad de no habido. Él con-

venció al menor de 13 años para

que viajara de Lima a Abancay

con el fin de trabajar.

BLANCO FÁCIL DE TRATANTESLa madre del menor, Cledia López, dice que Atoccsa le ofreció trabajo a su hijo, pero declara

que no sabía que era para viajar a provincias ni en esas condiciones. Ella, al igual que su hijo,

no acabó la primaria y viven en pobreza extrema. Son víctimas fáciles de los tratantes.

“La autorización verbal del padre o el menor no valen”

¿Qué normas protegen a los me-

nores de la explotación laboral?

Los mayores de 14 pueden traba-

jar previa autorización del Minis-

terio de Trabajo, pero los trata-

dos internacionales, el Código del

Niño y Adolescente y el Decreto

Supremo 03-2010 prohíben que

sea en actividades de riesgo. La

autorización verbal del padre no

tiene valor, menos la del menor.

Aquí se ha vulnerado todo eso...

Todo, las normas laborales y sus

derechos humanos. Un menor

algrano: RICARDO HERBOZO, MINISTERIO DE TRABAJOpolicía intervino otro hostal de la familia Pretell, en Los Olivos, ya no había nadie. Según la policía, son 4 los hoteles y 7 las casas de cambio donde este clan familiar explotaba a más menores.

Para la policía es la punta del iceberg; para el Ministerio de Trabajo, el inicio de inspecciones laborales con otro enfoque. “Los han captado, trasladado, reteni-do y explotado; es un claro caso de trata de personas que mere-ce un severo castigo”, dice Juan Navarro, de la Dirección de Pro-tección de Derechos Fundamen-tales, del Ministerio de Trabajo.

DE LIMA A ABANCAYSegún la organización CHS Al-ternativo, en nuestro país im-pera la trata interna: el traslado de víctimas a provincias a fin de desarraigarlas y hacerlas más vulnerables. Lima no solo es zo-na de explotación, de aquí tam-bién se llevan a adultos y meno-res para explotarlos en Iquitos, el Cusco y otras zonas del interior.

Uno de los últimos casos es el de ‘Pedro’, un muchacho de 13

“Es un caso de trata agravada”

El jefe de la División contra la Trata

de Personas (Divintrap), Eduar-

do Vergaray Van Meerbeck, indi-

có que por disposición de la Direc-

ción General de la PNP se ha refor-

zado la lucha contra este delito, y

para ello están tendiendo puen-

tes con ministerios, municipios y

las ONG para que las víctimas que

rescatan tengan apoyo de inme-

diato. “Lo que acabamos de des-

cubrir es un caso de trata agrava-

da, que incluye a chicos de 14 a 18

años, y está penado con no menos

de 12 ni más de 20 años de cárcel.

Cuando son menores de 14 la pena

no baja de 25 años. La trata no solo

se refleja en la explotación sexual,

hay casos como estos que debe-

mos enfrentar”, dijo.

JEFE DE LA DIVINTRAP

solo puede trabajar 6 horas bajo

ciertas condiciones y con sueldo

mínimo. En el caso de los ayacu-

chanos, los horarios eran esclavi-

zantes y se afectaba su salud.

¿En qué momento esto pasa de

ser abuso laboral a trata?

Por la forma en que fueron enga-

ñados y retenidos, la explotación

pasa a ser trata. Desde esta se-

mana las inspecciones laborales

apuntarán a detectar más casos.

¿Qué sanción le corresponde al

tratante?

Conversamos con César Pretell

y le dijimos que solo por pagos in-

debidos les debería a los chicos 8

mil soles, y nos dijo que ni loco, que

solo les daría 500 soles a todos.

Él cree que pagando una multa

saldrá librado. La multa será de

S/.100 mil y eso no lo excluye de

sanciones penales.

La policía intervino un inmueble en Abancay donde funcionaba una fábrica de zapatos. Allí encontraron a un muchacho de 13 años, que fue captado en Lima y a otro menor de la misma provincia. La policía intervino a tres personas pero el fiscal los liberó.

“No hay una red de acción inmediata por parte de los ministerios cuando se rescatan a víctimas de trata. No hay albergues, abogados ni comida para ellos.”

ÉRICA REUPOONG Movimiento el Pozo

“En el Perú falta reforzar la capacitación de los operadores de justicia para que no confundan el delito de trata con otros de menor pena.”

MARIANA MENDIOLARepresentante de la Organización Internacional para las Migraciones

JUAN PONCE