MAQUIAVELO...el "mito" de! príncipe de Maquiavelo, extraordinariamente ilustrativo de lo que...
Transcript of MAQUIAVELO...el "mito" de! príncipe de Maquiavelo, extraordinariamente ilustrativo de lo que...
UNIVERSIDAD DE MEXICO 19
Maqu.iavel0."se prOpl!SO educar (d pueblo"
sista; en otros términos resuelve los pro-b' . ',emas esenCIales de la época y estableceun orden dentro del que es posible mover e, ~ctuar, tr~bajar tranquilamente.En.las mterpretaclOnes ele Maquiavelo seo.lvlda que la monarquía era en aquellosttempos una forma ele gobierno populary que se apoyaba en los burgueses contralos nobles ...
... ciertamente Maquiavelo no eleseabaenseñar a los principes las "máximas"que ellos conocían y utilizaban. Quería,sobre todo, enseñar la "coherencia" delarte de gobernar y la coherencia exigidapor una cierta finalidad: ]a creación deun Estado i.taliano unitario. El Príncipeno es un lIbro de "ciencia" entendido~cad~mical:nente, sino de "I;asión polit~ca InmedIata", un "manifiesto" de par~~d.o c?~ f,~ndamento en una concepciónClenttflca d~l arte de la política. En
v~rdad, MaqUlavelo enseña la "coherenCIa" de los medios "bestiales" . .. . peroesta "coh~rencia" no es algo mer~menteformal, S1l10 la forma necesaria de unadeter~inada línea ele. 1??lítica actual. Quedespues, de la expOSlCIOn ele Maquiavelos,e. puedan ,?btener elementos de una "po~¡!tlca pura , es otro problema; ello tieneque ver con el lugar que ocupa Maquiavelo ~n. el proceso de formación de la cienciapolIttca moderna, que no es nada despreciable.
Las. ,razones, por las que MaquiaveloescnbIO El Pnncipe y las otras obras noes un simple problema de cultura o depsic~logía del. autor: en parte, tal cosaexplIca la fasc1l1ación que ejercen sus escntos, ~u vivacidad y originalidad. No setrat~, CIertamente, de "tratados" de tipomedIeval; tampoco de obras de un abogado .forense que quiere justificar las operaCIOnes y la manera de actuar de sus"protectores", o incluso de su príncipe.Las obras de Maquiavelo son de carácter"in?ividual", expresiones de una persoI~ahdad que desea intervenir en la polítlca.y en. la historia de su país y en talsentIdo tienen un ongt'lJ "democrático".
Por Antonio GRAMSCI
MAQUIAVELOy EL NUEVO
PRINCIPE
L A. CARACTERÍSTICA fundamental deEl Príncipe consiste en no ser untratado sistemático sino un libro
"viviente", en el que la ideología políticay la ciencia política se confunden en laforma dramática del "mito" . " un condoitiero que representa plástica y "antropomórficamente" el símbolo de la "voluntad colectiva". El proceso de formaciónde una determinada voluntad colectivapara un determinado objetivo político, está representado ... como cualidades, características, deberes, necesidad de unapersona concreta.
. Tal parece que las intenci'ones de Maqitiavelo al escribir El Príncipe, hayansido más complejas y más "democráticas" de cuanto parece a la interpretación"democrática". Maquiave!o considera quees tan grande la necesidad de! Estadounitario-nacional que se aceptará que,para alcanzar ese fin primordial, se utilicen los medios idóneos. Por consiguiente, puede afirmarse que Maquiavelo sepropuso educar al pueblo, pero no en elsentido que comúnmente se da a esta expresión, o cuando menos, no en el sentido que le han dado ciertas corrientesdemocráticas. Pal-a Maquiavelo, educaral pueblo no significa otra cosa que darlela conciencia, convencerlo de que soloexiste una política: la realista, para alcanzar el fin deseado y que, por tanto,es preciso ceñirse a los mandatos delPríncipe que ha elegido un cierto caminopara lograr sus propósitos; puesto quesolamente quien quiere los fines quierelos medios necesarios para alcanzarlos.La posición de Maquiave1o, en este sentido, se aproxima a la de los teóricos ypolíticos de la filosofía de la praxis, quetambién se han esforzado por construiry defender un "realismo" popular, demasa, y han luchado contra una formade "jesuitismo" correspondiente a otrascircunstancias. La "democracia" de MaCJuiavelo rstá adaptada a su tiempo: elconsentimiento activo de las masas populares a favor de la monarquía absoluta.en cuanto significa la limitación v destrucción de la anarquía feudal, de la servidumbre. del poder de los papas y encuanto significa la fundación de IP-andesEstados territoriales nacionales, funciónque la monarquía absoluta no podía cumplir sin el apoyo de la burgllesía y de unejército permanente, nacional, centra!izado, etc.
En realidad, a pesar de que El Príncij)ctuvo un destino preciso. posiblemente sepueda decir que no fue escrito para nadie y que lo fue para todos; está escritopara UIT hipotético "hombre providencial"que podria manifestarse, como se manifestaron Valentino v otros condottic?'i,de la nada, sin tradición dinástica, sólopor sus cualidades militares excepcionales. La conclusión de El Príncipe justifica el libro entero, aun ante las masaspopularrs, que realmente olvidan los merlios utilizados para alcanzar un objetivosi este objetivo es históricamente progre-
íntimamente ligadas a las característicasdel desarrollo histórico de Italia. Y estrechamente relacionado con ese problema:el papel de los intelectuales en la creacióndel "nuevo" Estado, su función en el mo\ imiento revolucionario que comenzaba aponerse en marcha. Aun los temas másajenos, en apariencia, de las ideas centrales que estructuran la monumentalobra, tienen su razón de ser su "lugar"su sentido en el análisis dial¿ctico es de~cir, integral, rico y complejo, de ¡'a realidad italiana. Para Gramsci no se trata de"disecar" la realidad, sino justo lo contrario, de estudiarla como una totalidadviva y dinámica compuesta de un sinúmero de factores, de "momentos" que lainforman. La "filosofía de la praxis·", para él, es humanismo integral porque estudia Jo mismo las fuerzas económicasque las espirituales, en sus interferenciasrecíprocas, dialécticas. Las investigacionesde Gramsci son un modelo, que debieraI'studiarse siempre, de análisis marxista.:.¡ ada más alejado de su formación intelectual que el dogmatismo, que los análisis fáciles y esquemáticos, que el espíritusectario. De ahí que sus páginas nos parezcan siempre una fuente de pensamiento fresco, inteligente y diligente en laelaboración científica.
Hemos elegido un poco al azar -deaquí y de allá- los textos de Gramscique presentamos a continuación. Hemos¡>rocurado, no obstante, "trabarlos" de talIllanera que tengan un sentido unitario,que revelen el pensamiento de Gramscisobre un cierto orden de problemas; enparticular, la idea del partido político como constructor del "nuevo" Estado, comosemilla de lo que más tarde llegará a constituir una reno\·ación social, política, eincluso la renovación de una concepcióndel mundo. El partido político como agente constructor de una "voluntad unitariacolectiva" que tiende a convertirse en universal y soberana en un territorio determinado, es decir, que tiende a constituirseen Estado, que quiere ser e! Estado; ytodo ello visto con un criterio realista,científico, de la política, tomando en cuenta todos los factores que permiten, o impiden, la realización de aquella tarea infinita, si se nos permite la expresión.
Por tales motivos Gramsci nos recuerdael "mito" de! príncipe de Maquiavelo,extraordinariamente ilustrativo de lo quesignifica una política coherente, realista,profundamente ligada al proceso históricode un pueblo. En Maquiavelo, quién estádestinado a crear el nuevo Estado italiano,unitario y nacional, adecuado a las necesidades de su tiempo, es El Príncipe, elsoberano absoluto. Para Gramsci, la creación de un Estado que responda a lasexigencias de nuestra época le corresponde al partido político, y más particularmente, al partido de la clase obrera: éles el príncipe de nuestros días, El Moderno Príncipe.
Uno de los problemas más íntimamente,"inclllados con esta cuestión es el de launidad entre teoría y práctica, entre pensamiento y acción; tal pro b 1e m a, enGramsci, se presenta históricamente comoel problema de la unificación, en el partido político, de "masa" e "intelectuales",es decir. de la acción y de la razón de laacción. Pero ello entendido dialécticamente: como dos momentos cuyo contacto nosólo significa cambio cuantitativo sinotambién, y sobre todo, cualitativo.
20 UNIVERSIDAD DE MEXICO
En Maquiavelo hay la "pasión" del "jacobino", por ello debió gustar tanto ajacobinos e iluministas ...
Maquiavelo, por entero, es hombre desu época; y su ciencia política representala filosofía de su tiempo, que tiende a laorganización de las monarquías nacionales absolutas, la forma política que permite y facilita un desarrollo posterior delas fuerzas productivas burguesas.
El moderno príncipe -el mito príncipe- no puede ser una persona real, unindividuo concreto; solamente puede serlomi. organismo, un elemento comp.lej? dela sociedad en el cual, con antenondad,haya tenido inicio el conc.retarse ~e unavoluntad colectiva reconocida y afirmadaparcialmente en la acción. Este organismo existe ya como resultado del procesohistórico: es el partido político, la primera célula en la que se resume~ gérme- .nes de voluntad colectiva que tienden aconvertirse en universales y totales.
Se ha dicho que, en la época moderna,el protagonista del nuevo Prín~ipe no podría ser un héroe personal, smo el p~,rtido político, es decir,. en c<l:da ocaslOny en las divers~s relaCIones l11tern~s delas distintas naCIOnes, aquel determmadopartido que se propone (y está racion~le históricamente fundado para lograr dicho objetivo) fundar un nuevo tipo deEstado. l
.... formación de una voluntad colectiva nacional-popular, de la que el moderno' Príncipe es al mismo tiempo elorganizador y la expresión activa y actuante la reforma moral e intelectual ...Una parte importante del moderno Príncipe deberá estar dedicada al problemade una reforma intelectual y moral, esdecir, al problema religioso o de una con-cepción del mundo. . '
Evidentemente será necesano considerar el grupo social del que el partido político es expresión y exponente más av~nzado: es decir, la historia de un partidono podrá no ser la historia. de un dete~'minado grupo social ... partido no e~ masque una nomenclatura d.e clase, Siendoevidente que para el partido que se propone cancelar las. division.es de clase, .superfección y plemtud c<;mslste en no ~XIS
tir más, porque no eXls~en clases 111, enconsecuencia, sus expresIOnes.
Cuando el partido es progresista f~1l1ciona "democráticamente" (en el sentidode un centralismo democrático), cuandoel partido es reaccionario .funciona "burocráticamente" (en el sentIdo de un centralismo burocrático). En este segundocaso, el partido es puramente ejecutor,no delibera: técnicamente es un órganode policía y su nom,bre de part~do po~~tico es una pura metafora de caracter 1111
tológico.Dado el prinCIpIO de que existen diri
gidos y dirigentes, gobernantes y gobernados, es indudable que los "partidos"son hasta hoy el medio más adecuadopara fornlar a los dirigentes y su 'capacidad de dirección.
La conciencia de formar parte de unadeterminacla fuerza hegemónica (la COIl
ciencia política) es la primera fase de umulterior y progresiva autoconciencia enque teoría y práctica finalmente se unifican. En fin, la unidad entre teoría ypráctica no es un hecho mecánico, sinoun devenir histórico, que tiene su faseelemental y primitiva en el sentido de"distinción", de "diferencia", de inde-
* * *
pendencia, todavía instintivos, y progresahasta la posesión real y completa de unaconcepción del mundo coherente y unitaria. He aquí por que es necesario poner'de relíeve que el desarrollo político delconcepto de .hegemonía representa ungran progreso filosófico v no solo político·práctico, porque necesariamente contiene y supone una unidad intelectual yuna ética conforme a una concepción dela realidad que ha superado el sentidocomún y que se ha convertido, dentro deestrechos límites, en crítica. Y más aún,en los recientes desarrollos de la filosofíade la praxis, la investigación a fondo delconcepto de unidad entre teoría y práctica no está sino en su momento inicial:quedan todavía residuos de mecanicismo,puesto que se habla de teoría como "complemento", "accesorio" de la práctica, deteoría como servidora de la práctica. Esjusto que también esta cuestión sea planteada históricamente, es decir, como unas~;ecto del problema político de los in-
"expresiones de 1l1W personalidad"
telectuales. Autoconciencia critica significa histórica y políticamente creación deuna élite de intelectuales: una masa humana no se "distingue" y no llega a serindependiente "por sí misma" sin organizadores (en sentido amplio) y no hayorganización sin intelectuales, es decir,sin organizaciones y dirigentes, sin queel aspecto teórico del nexo teoría-práctica se distinga concretamente en un "es"trato" de personas "especializadas" .en laelaboración conceptual y filosófica ...
Sin embargo, en el proceso se repitencontinuamente momentos en que, entremasa e intelectuales (o ciertos intelectuales o un grupo de ellos) sr presentaun "alejamiento", una pérdida cíe contacto y por tanto la impresión de lo ";!ccesorio", de complemento, de subordinación.Insistir en el elemento "práctica" delnexo teoría-práctica, después de haberdividido, separado. y no solo después dehaber distinguido los dos elementos (operación meramente mecánica y convencional) signi fica que se atraviesa una fasehistórica relativamente primitiva, una fase todavía económico-corporativa, en laque' se transforma cualítativamente elcuadro general de la "estructura" y la cua-
lidad-superestructurá adecuada está envía de surgimiento, pero todavía no estáorgánicamente formada. Es de subrayarsela importancia y el significado que tienen,en el mundo moderno, los partidos políticos, en la elaboración y difusión de lasconcepciones del mundo, en cuanto esencialmente elaboran conforme a eilas laética y la política, es decir, funcionancasi como "experimentadores" históricosde dichas concepciones. Los partidos seleccionan individualmente a la masa queactúa, y la selección tiene lugar 10 mismoen el plano práctico que en el teórico,con una relación más estrecha entre teoríay práctica cuando la concepción, vital yradicalmente, es innovadora y antagónicade los viejos modos de pensar. Por esarazón se puede decir que los partidos sonlos constructores de las nuevas "inteligencias" integrales y totales, es decir, el crisol ele la unificación entre teoría y práctica entendida como proceso históricoreal; se entiende que es necesaria la participación por adhesión individual y noa la manera "laborista" porque, si se trata' de dirigir orgánicamente a "toda lamasa económicamente activa", se trata dedirigirla no según los viejos esquemas,sino innovando, y la innovación no puedellevarse a cabo a partir de la "masa", ensus primeros estadios, sino por el intermedio de una élite en la cual, la concepción implícita en la actividad humana,haya llegado a ser en una cierta medidaconciencia actual, coherente y sistemática,voluntad precisa y decidida.
Sí se plantea el problema de identificarteoría y práctica, es en este sentido: decor.struir sobre una práctica determinadauna teoría que, coincidiendo e identificandase con los elementos decisivos de lapriÍctica misma, acelere el proceso históriCl. en devenir, produciendo una práctica1''':'[5 homogénea, coherente, eficiente entodos sus elementos. es decir, vigorizándoh al n1áximo o bien, .dada una cierta[Jl'sición teórica, de organizar el elementoprá.:tica que es necesario para su realiz:wión. La identificación de la teoría y(ie la práctica es un acto crítico, por elque la práctica se demuestra racionaly necesaria, y la teoría reaJista y raCional.De ahí que el problema de la identidade~1tre teoría y práctica se plaritee espeCIalmente en ciertos momentos históricosllamados de transición, es decir, de movimiento transformador más aceleradocuando realmente las fuerzas práctica~desencadenadas piden justificación paraser más eficaces y expansivas, o bien semultiplican los programas teóricos quepiden también ser justificados realistamente, en tanto deniuestran ser asimilables a los movimientos prácticos, que solo'así llegan a ser más prácticos y reales.
Cuando la vida económica inmediatade una nación está subordinada a las relaciones internacionales, tanto más 'ttn determinado partido representa esta' situación y la disfruta, para impedir el éxitode los partidos adversarios... De estaserie de hechos se puede llegar a la con~Iusión ele que, frecuentemente, el llamad.o "partido del extranjero" no es preClsamente el que' de común está identi fica?ü con:o taJo sino más bien el partidomas naclOnaltsta. que en realidad, másque representar las fuerzas' vitales del¡:'í'opio país, representa la subordinacióny' la servidumbre económica respecto a lanación o grupo de naciones que tienen lahegemonía.
(Traducción de Víctor Flores Olea.)