Madrid, 15 c u

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í Periódico da las mujeres que por la P az , la Libertad y Dire ctora: Dolores lbarruri Año 1• Núm. 1 + Madrid, 15 cu momen- que ellos qtle ha- habrá paz, orden, la fa.

Transcript of Madrid, 15 c u

í Periódico da las mujeres que por la Paz, la Libertad y

Directora: Dolores lbarruri

Año 1 • Núm. 1 + Madrid, 15

c u

momen­que ellos

ca~:1, qtle ha­habrá paz,

orden, la fa.

PAGINA 2 !\lUJERES

Contra la guerra y el fascismo J)(as cnucos . .!\tomemos de agitado tor- gante, ya que si las rnuj~res toman la de- ¡ •••••••••••••••••

belhno. ,Minutos de pasión. Difícilmente cisión de abolir el tributo de ~ngre y de se di6 en E.'-paña una si tuación d~ análoga negar la servidumbre al señor. una nueva pujanza en la labor político-popular. era comenzará para la vida de los prole­

y subre c5tc frngor de lucha surge pre- tarios españoles. potente-la mano que dirige desde aba;o. El entusiasmo es grande. La decisión que e" la mano de la pasión Í('m"n na de las mujeres, de tal naturaleza que difí-

Habla una muchacha de servir

"Jo e!taba ron loJ oio! ven~a~o1 y !in eJperaala ~e mejorar"

puesta al servi::io de la libertad. cilmente se volverá atrás. Pero falta oriE>n- Compañeras: Os quiero llamar la aten-Yo recuerdo en los anales históri"OS el tación en la labor, y comprendiendo que ción sobre una cosa. Yo soy una mucha­

e;p•no]o nnt'l .1o de nou .. ll <>~ mu·e,.e~ ,¡.,¡ a darla se han cometido el grupo de mu- cha de servir; no sabía nada de mis dere-, o •, r~n .. J ' pa-a · jeres que confecciona y publica este pe- chos. ¿Cuál era mi porvenir en esta situa-

~ a ·~ • ~a d~l <<>fl . riódico, yo presté mi colaboración entu- ción'! T1·abajar como los mulos en las no-• n T, 1t n ~«·b n siasta como mujer y como trabajadora. rias: con los ojos vendados y sin esperan­

P o)'"~ m"rl ·~ h · - ' Falta orientación definida. Porque hav zas de mejorar. n 'J.ll momr' o ot:nrtuno t¡ue encauzar las actividades y coordinar Me hablaron los compañeros de la Bi­;, • p••rr"-1"1. Y :a c"o;-;- los esfuerzos. Y hacer que la labor conh a blioteca Cultural de Chamberí, y ahora

ta PiP '11 ~ lo r • l •, t' ' 'In ' r¡ «u< hiios el fascio y la guerra llene todas las esferas. estoy aprendiendo a leer y escribir. Estoy rend so el nbl o ue ~aiHil't>. Y el dolor de Y conseguir que todas las mujeres apren- contenta, pues ya sé que mi porvenir es aqul'llns mi~ma~ madres que a l11 hora de jdan que se lucha contra el fascio y la gue- otro muy distinto del que ahora tengo. la pl·c'ida del hijo que entrer:al'on sentí~n rra con actividades 1·evolucionarias en el Yo me dirijo a todas las que estén en la amar ;ura \ no analil".abnn el tanto de hogar. mi caso para que vengan y se inscriban culpa de la entrega que por propia mano 1 La guerra no muere ni termina por que aquí, y así aprenderán y podrán ser algo hicic on. haya un grupo de desertores. La guerra no y estarán contentas como estoy yo.

Yo '1 r:> Vl en 1ot: ana1e« hlctó· terr~tina ~r que no vaya el .hijo de ':l.na ANIMO y VENID TODAS. n'<> \'' , (!UC al ú' :_ mUJer m1entras van a e)la miles de hlJOS

y "'l s 'a en •t! •,An de otras mujeres. La guerra no termina PACA PEREZ n e 'll)r !c.cS mu e1·eq del por que el día de la partida de los hijos (Del •Boletín Femenino de la Biblio-

pu i:' o. R : n ~ordamente. En el m('lmen- las madres protesten airadamente hacien- teca Cultural Popular de Chamberio.) to de la E'nlregn :;obre todo, las mujeres do llegar sus gritos a las altas esferas. 'l!lllm"mmm:=:;.;-¡¡¡¡;;::¡!!J E'Span 1as sentfun responsabilidad ante la La guerra y el fascio terminarán cuan-entrega de Jos hijo:;, y no hallando medio do todas o la mayoría de las mujeres re- Escucha, mujer adecuado de justifi<:arse, acudían a cual- volucionen el hogar, sembrando en las lA ~ 1 quier rincón de la iglesia pueblerina para , mentes de sus hijos semiJia de rebeldía !* (Viene de la pág. 1) ~.1; ~dir oue no fues~ su hijo a la gu~rra, con~ra. el feudali.snio. contra el régime~ l mientras preparan sus fuerzas para abrir

-'-'l'il'llllloili.I."Se el lupo de su hermano. ~- ~p1~ta. contra las ~!ases, contra el prr- nuevos ríos de sangre. "-H--...ri veces .se al;r.6 la protesta 81· V1leg1o y contr_a: la d,es1gualdad.. Porque la Ellos se acercan a ti porque quieren tu

l'nnh·~ la pollhca de guerra y opre- nu~va generacton de ;ebeldes formará una voto para continuar siendo los dueños de sión. soct~dad que hablara de la guerra Y ~el todo, para poder disponer a su capricho

Y cuando recuerdo todo esto y al reco- fasc1o .como del recuc1:do ~e una págma de los intcre<;CS de las masas populares. rrcr los pueblos españoles encuentro mu- sombr1a de nu~tra HlStOn~. ESCUCRA, MUJER: jercs, muchas mujeres, que protestan ai- . Juha. A.LVAREZ RES:A~O Piensa en quienes son los que quieren radas contra el fascio y contt·a la guerra, (C~dtdato socmhsta por la provmc1a de tu voto. Recuerda todos sus crímenes, re-pienso que la civilización dió su paso gi- Madrtd). cha:r.a toda~ sus ofertas, porque lo que hoy lllllllltDDUllllll.!ill·llllilllllllllllltiiUllllilllltiiiiUIIIIIHillllllllllllliiiiiiiiiiii!IIUUIIIllllillllllltlllllllllbUIIIIIIIIIIIIIIJnlntliQDUIIIIIIIIIIUII•Ill!lalli1111'11NIIIIIllilll1111/llllllllllillllllllllllllll:lllllllllll11! 11 fe dan te lo arrancarán mañana, llevándo­

Cifras de la ·gran guerra f.'RA~CIA: Muertos, 1.150.000: heridos, 3.100.000: inválidos, 8oo.ooo. Th'GLATJo:RRA: Mu~rtos, 725.000; heridos, 2.050.000: inválidos, 35o.ooo. ALEMANIA: Mul.',.tos, 1.8;lfi.OOO; hP.ridos, 4.215.000; inválidos, 665.000.

TOTAL: Muertos, 4.UI'JO; -----.~•··•~~

se.> en sus manos carne de los seres má' queridos.

Picos¡' en quienes son los que hoy reco•

1

rren las barriadas proletarias aprovechan· do la mist'rin para obtener votos que per­mitan continuar en el Poder a los que en octubrc ~e lan1.aron como bestias contra ti y los tuyos.

Y VOTA AL BLOQUE POPULAR A~TIFASCISTA. que lucl1a por la libe­r:wión de esos 30.000 hémtanos nuestros a los que millares de ho~ares reclaman; que lucha por ouc todc« los represaliados vuel­van a lo:-. lu~ares de donde fueron echa­dos en octubre; oue lucha por Que todos los crímenes que fueron cometidos no que­den impunes: que quiere salar ios más al­tos que terntine11 con el hambre y la mise· ría: que en \'ez de presunuestos de gue· rrn votariÍ créditcs para obras que termi­nen con el azote del naro. QUE LUCHAÑ POR T,A LffiERTAD, EL PROGRESO. EL PAN Y LA PAZ.

QUE QUIEREN PARA LAS MASAS LABORIOSAS DEL PAIS UNA EXIS­TENCIA FELIZ Y DIGNA.

NO LO OLVIDES. MUJER, Y VOTA AJ, BLOQUE POPULAR ANTIFASCI~­TA ET, 16 DE FEBRERO PARA QUE TERM1~ ESTA EPOCA SANGRlE"'''­TA Y SE ALE.lE PARA SIEMPRE DE ESPA:IitA EL P ELIGRO DEL FASCIS­MO Y LA üUJ:;.K§.

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MUJERE S

La calle, la escuela y el niño sovietice

Una muchacha española con las ma­dres y los niños más felices del

mundo Por MARIA AVILA (Moscú)

¡l. PAGL~A3

¡con aplomo y con un acierto que impre-• siona de las causas de la derrota del pro­letariado español en octubre.

* Marchak, el gran escritor que dedica

sus mejores páginas a los niños, preguntó a un grupo de ellos en Leningrado:

-¿Qué vais a ser? -Aviadoi'-Contesta uno. -Ingeniero-responde rápido otro.

Aquella mañana del mes de octubre han subido, y las subsistencias han ba- -Agrónomo, como Miehurin-dice uno me llamó la atención en las calles deMos- jado. Ya no hay en todo el país soviético rubio. cú la gran cantidad de niños agolpados a más que una •cola•: la de los comprado- -Yo también-grita otro-quiero ba­las puertas de las librerías y el gran nú- res de periódicos. cer por medio de injertos que los cho¡x>s mero de mujeres en las íilas de los com- ¿Cuándo podremos decir lo mismo las den peras. pradores de periódicos. madres, las mujeres españolas? -¿Y ninguno queréis ser fabricante o

Para mí, mujer española, era un día terratcniente?-preguntó Marchak, (irán-cargado de recuerdos. Se cumplía un año * deles de la lengua. de la insunección de mi país. Los emigra- Los niños se miral·on asombrados. dos nos disponíamos a conmemorar el ani- La Unión Soviética es el único país -Eso no es interesante-dijo el pri­versario de nuestra lucha. Socialistas, co- donde la instrucción general es gratuita mero. munistas y anarquistas, unidos por la lu- y obligatoria. Ha levantado en deiciocho -¡Vaya una profesión! ¡Explotar hom­cha común y por el ejemplo del pueblo años más escuelas que ningún país capit~t- bres!-agregó un segundo. soviético, nos buscábamos. lista. Tres siglos de dinastía de zares Y -Y que después los obreros se rebelen

Mi curiosidad me empuja a preguntar. zarinas han quedado bajo los cimientos contra uno-añadió un tercero. Ya comprendo algo el idioma ruso. Con de los millares de edificios escolares. Ningu.no tomó en serio la última pre-. los niños, en todos los grupos, .un joven Veintisiete millones de niños soviéticos gunta. Todos tenían claro el porvenir; te­comunista. Uno de ellos responde a mis se sientan este año en las clases llenas de dos saben lo que quieren. preguntas. luz y de alegria. Ni castigos, ni discipli- Esta es la conciencia nue\·a del niño so-

-se acaba de abrir el año escolar. Te- na de cuartel. Sólo atención. Y solicitud viético, que al salir de la escueia ve abier­nemos cerca de 400 escuelas nuevas, cons- para formar hombres que dommen la c1en- to el camino de la vida. que puede e!egir truídas en ciento cuarenta y cinco días cía Y la técnica. rlibremenle una profesión, la misma que en por iniciativa de nuestro Stalin y bajo la Los niños que aquel día de octubre en-,España está reservada a los hijos de los dirección de nuestro Partido Bolchevi- traban en las librerías buscaban el com- señoritos. que. ¡plemento a sus manuales escolares: libros ¡Es la seguridad de las ma:lre~~

-¿Y por qué hay hoy tantas mujeres de música, de arte, de lite:ratura. ;Un país que educa a los niños de esta esperando el periódico? 1 Lo demás, la enseñanza general, la pu- forma es un país invencible!

-Es que se publica hoy un decreto del blicación d~. textos. el o1·de~ en la cscue- Por eso un día. recor~~~ Gobiemo soviético. la, la atenc:on por la!i neccs1d 1dcs di' cada ante Stalin, un pionero, eoJl la voz f¡-e,;ca

-¿Tanto interés tiene? niño (lápices. plumas. tinta, cuadernos), y limpia, pudo decir, frente a la muela -51. Es un decreto rebajando todos los es una preocupación de cada hora para emoción de docenas de trabajad o res de

todos los países: •Soy feliz porque lepgo una escuela

nueva. Y libl·os nuevos. Y ma2Strc•s nue­vos. Porque en mi casa hay una alegria 1

nueva. Mi padt·e de porque tiene un tt·a­bajo nuevo. Soy feliz, porque es t• > se lo debo a un hombre nuevo, al mejc·x amigo y maestro de los niños, a ti, e :U narada Stalin.•

Moscú .

• RYIIII'I IIIIIIDUIII 'lllliiOUU:UII&I:Jlllalllljllll!ll:J;

Palabras de Lenín a Clara Zetkín

-En Petrogrado: aquí, en l'•Icscú; en las ciudades, en los centros ind'usirial~..__ ..

1 en el campo. las proletarias se han port.i­do maravillosan1ente en la revolución. Sin

. ellas no habríamos triunfado. O habría-artículos de primera necesidad: las pata- el Partido, y personalmente para Stahn,¡ tr' f d d y

1 1 • tá lt mos tun a o a uras penas. o 0 creo tas, el pan, la carne, la mantl!ca, e azu- que ya es resue a. . , . . . car ... Los niños soviéticos son los clueños de asa. No puede usted IID3giD3.l:'Sf : lo valten­

No pregunto más, y cruzo la calle. Un su país. Palacios donde ~tes. se divertían tes que fueron y lo valientes que están gran almacén, con más de doscientos em- los zares son hoy las esplend~~as cllsas de siendo todavía. Represéntese l lSted todas pleados, está lleno de comprador:s. Obre- jue~o por donde corren los. mnos. Teatros las peuaJ idades y privaciones que sopor­ros y obrel·as adquieren comesllbl~s. En y ~es infantiles en cada ctudad, en cada tan estas mujeres. y las sopo ~.-tan porque el mostrador sobre cada mercanc1a, un barno. Escuelas de Bellas Artes, parques . . cartel. ' de cultura, clubs, centros técnicos y agrl- quteren que los S~v1ets salg ~ n adelante,

Uno dice: •Aye¡·, 50. 1-Ioy, 25•. y otro, colas, C:licen al más cieg~ c.uál es la p1·~- porque quieren la h~ertad, el comunism~. clavado sobre rollos inmensos de mante- ocupaClón del Poder soviético por los n.l· Sí; nuestras proletar1as son Ult as magnnt­ca, indica que el génc1·o ha bajado de pre- ños. q~e amen profundamente 8 su patna cas luchadoras de clase. Mct:o cen <IUC se cio en un 45 por 100. soctallSta. . . las ndtni1·c y se las quiera.

Ahora compt-endo la alegría de esta Los niños del pais de Stahn p1ensan d.e mañana llena de sol. Los niños con escue- un modo nuevo. Cada día crean algo di- l:'J"II"IDOlbftiUIIUIII&IIIIUIII.!IIill 1mnnmt IIIUillWIIInrlfl!ll ·r.Jl$ll!llllf.l!ii lllliJ las nuevas, limpias, claras. Los salarios ferente. E l más pequeño os puede hablar GR.\FICAS Ull.O.\.-Cardcnal

PAGJNA4 MUJERES

MUJERES, en las fábricas ----------------------------·-----------

En la fabrica de tabacoa 1

-Trabajamos a destajo, y en lás ocho horas verumos a sacar por término me-

A P ~ 1 Q t · d d d 1 S dio un salario de 6,50 a 7 pesetas, que nos roveCraar a op r Unl a e a sería suficiente s1 trabajáramos toda 1a

1 . • b .

1 t . f semana; pero desde el año 27 estamos a e eCCIOneS para COntn Ulr a nun O jornada reducida, trabajando cuatro días,

con lo cual no llegamos a cubrir nuestras MUJERES, que aspira a ser el portavoz ¡ -¿Qué papel consideráis que debe des- necesidades.

de la mujer madrileña. no podía prescin- empeñar la mujer el día 16? -¿ ... ? dir de e!\le numet·oso y clásico núcleo de -En nombre de mis compañeras-nos -El exceso de producción tiene varias trab:ti4doras que siempre se h:~n dislin- dice Eulalia Prieto, con el asentimiento causas: una, la introducción de máquinas, guido por ' 1 hondo espíritu re,vJIIIl'ionario de las que la 'acompañan-, he de manifes- que en ve7. de servir para mejorar nues­y de ;o.spiración a una mejor thgmdad en taros que creemos que la educación de la tras condiciones de trabajo es utilizada el trab ~~" · mujer española necesita una orientación para desplazarnos y lanzarnos a ~a mi-

Una J<, nuestras redactoras ha visitado política y social. Y en cuanto a nuestra la- seria, y otra es que desde que Calvo Sote­a las igarreras madrileñas en la hora de bor en las elecciones del próximo dom.in- Jo fué ministro de Hacienda e introdujo su sa ' d~ de la fábrica y ha conversado go, hemos de intervenir todas con gran la rebaja de diez cerillas en las cajas de con Eulata Ptieto y con un nutrido gru- entusiasmo y optimismo, y debemos apro- cinco céntimos, muchos obreros adopta­po de tr.,bajadoras de la Fábl'ica de Taba- vechar esta ocasión para significarnos en ron mecheros, reduciendo el consumo. cos. la lucha y contribuir al triunfo de las iz- . ?

N u 1tra visita despertó un gt-an entu- quierdas, que consideramos de la mayor ~~~stras reivindicaciones son muchas, siasm.; entre las cigarreras, qu:enes con trascendencia. pero la más inmediata es el trabajar los

seis días y que en vez de que sea a des­tajo se haga a jornal, y una cosa que es muy difícil que olvidemos, y es que se ad-

Un grupo de m.itan a las represaliadas de octubre. -¿ ... ? "i

obreras ciga-

rreras, habla

-Eso no hace falta preguntar. Vetare-mos a las izquierdas, porque estamOs se­guras de que si triunfan las derechas va a haber gran número de despidos. Hoy ya podemos decir que de 350 mujeres que con nuestra

camarada

• trabajamos en la fábrica, 300 votaremos al Frente Popular.

Remedios

Sánchez

Cuando estoy hablando con esta com­pañera se acerca una obrera de la fábri­ca que nos cuenta que tiene un juicio con el cacique, Antorán, por insultarle cuan­do pegaba a un niño de nueve años por arrancar earteles de la •caverna•.

Pero no nos importa-nos dice-; por­que como triunfen, que triunfarán, las iz-

el mayor fervor se prestaron a contestar -¿Qué aspiraciones inmediatas tenéis quierdas, nos vamos a desquitru.· de todas a nuestras preguntas. dentro de la fábrica que deban ser apo- estas cosas.

-¿Qué os pa1·ece la inmedinta salida yadas por las izquierdas en el futuro Par- Una despedida llena de entusiasmo a de nuestro periódico? lamento? estas obreras, que el día 16 estarán a nues--¡Admirable! Po1·que las "l\tt)<'res tra- -Según el criterio de la Federación Na- tro lado en la calle para terminar con

bajadoras nece~itamos un ÓrJlliO de rx- cional, integrada por distintos sectores de esta época de hambre, paro Y terror. presión que lleve a la publicidad nuestros la industria tabaquera, y manifestado en problemas y nuestras legítimas aspiracJ')- diversas ocasiones, pretendemos defender-,lll u • 1l nes.

1nos contra las anomalías existentes y, so-

En efecto, confirmando esta opinión, las bre todo, tener intervención directa en el Largo Caballero compañeras que están con Eulalia aprue- Estado. • ban con frase~ y muestras de entusiasmo Con estas frases y con la satisfacción 1 habla a laS IDUJereS la próxima ~!ida de nuestra revista. en por el entusiasmo revolucionario de las la que ~aben han de encontrar la voz cigarreras madrileñas nos despedimos de "Pues bien: los hombres, a la lucha. Y orie~tadora de las mujeres trabajadoras ellas con un expresivo o¡Salud!• vosotras, mujeres, acordaos de que en ese espanolas. ..,_ d · dir 1 rt d tr ·

Preguntamos: • Remedios SANCHEZ um se va a eCl a sue e e em-

~ l C " DI D oDIU!"'lllll'll101'' liD lllJ 110 ·m mr 0111 ¡.¡¡¡¡ 11 ta mil y pico de familias obreras. No me

Las obreras ceriileras de Carabanchel

El exceso de producción, fa jornada reducida y el trabajo a destajo

cansaré de deciros a todos que el día 16,

cuando vayamos a descansar, debemos te­

ner la conciencia tranquila de no haber

realizado el menor acto que pueda signi­ficar la imposibilidad de sacar a esos boro-

. h d bres de los presidios; que no nos remue.r-Del grupo de obreras, una, en nombre or1entarnos y accr compren er a aque- . . .

de todas, responde a nuestras preguntas: Has que sólo piensan trabajar como bru- da la conc1enc•a. Esos 30.000 hombres s•g­-¿ Qué os parece la idea de publicar tas sin preocuparse de cuáles son sus de- nifican 30.000 familias. De los obreros se­

un periódico editado por las mujeres anti- rechos y c6mo luchar para conseguir una fascistas? vida mejor.

-Muy interesante, sobre todo para -¿ ... ?

leccionados, lo mismo digo: hay que acor­

darse de ellos. •

MUJERES PAGINA 5

• Habla n las UJeres Cómo viven las mecanógrafas '

[on el tiemoo io!to ~e llegar a [Ua tenar y e!uerar la ioma~a lianiente

En la fábrica de ~xplosivos

«Tenemos unos jornales muy pequeños» ¡Pero ya conseguiremos unas bases mejores!

-¿Qué os parece la idea de hacer un 1 -SL Pertenecemos todas al Sindicato periódico de mujeres? 1 de la U. G. T., a pesar del famoso decre-

-Nos parece muy bien, ya que en él po- :o de Gil Robles, que nos prohibe el! :ar dremos las obreras exponer nuestros pro- a, iliadas a organizaciones de este tipo. blemas, y en él encontrru:emos al m1smo -¿ ... ? tiempo el mejor orientador en la 1ucha -Aquí votaremos todas por las izquier-por nuestras reivindicaciones. das, porque sabemos que sólo con el triun-

-¿ ... ? fo de éstas mejorarán nuestras condiciones -Tenemos unas bases de trabajo vigen- de vida, y para que triunfen, nosotras es-

tes, pero que no se cumplen, ya que des- taremos dispuestas a hacer cuanto sea po­pués del movimiento de octubre pisotea- sible por que, al igual que nosotras, el

• .. ron todos los derechos de antigüedad que 1 resto de las mujeres voten al Bloque Po-¿Cuál es la vida de la mecanógrafa? La teníamos. Yo tenía que ganar 5,85, con pular.

mecanógrafa cumple ampliamente esa ley arreglo al contrato de trabajo, y, sin em- A pesar de nuestros deseos, es preci-de oficina de •a menos sueldo, más tra- bargo, sólo me dan 4,65. so terminar, porque estas obrerz.s, para bajo•. Pasará la mañana y la tarde-eon -¿ ... ? Jescansar de la jornada de por la maña-el espacio justo para comer-inclinada so- . -:Sí; también nosotras, ~espués del ~o- na y comer, sólo tienen una hora; pero bre la máquina, enrollando y desenrollan- vliDlento de octubre, tuv~mos represaba- lo poco que. hemos hablado con ellas nos do pliegos de papel con la mayor rapidez. das. Se alegó para despedirlas que no ha- da la segur1dad de que estas obreras no Se verá siempre requerida por el jefe a bía trabajo; pero tenemos la seguridad que an olvidado lo que la reacción las arran­empezar un trabajo •urgente• en la hora no sólo hay trabajo para las que están .;.O después de octubre y que el día 16 se prech;a de marcharse, y por fin, saldrá a repr:~adas, sino para más.

1 ... :sponen, al l~do de todos los antifasci_s.

la calle ya bien entrada la noche, con el -4··· · tas, a reconquistar. tiempo justo de llegar a su casa, cenar y l21 .. - r 11 r 'lflijlllllm:::m¡ml!!!!:mtmt•DIIUilll<: !llL' UIUI!!:MM!!tri re fij11!LI!!Imr: esperar la jornada siguiente. Así un día

1 se puede multiplicar por mil o por diez del hogar mil. A la mecanógrafa su labor la ab- • p , . sorbe por completo. No tiene espacio que¡ ¿ Üf que ll0 lTigfeSa~ en lOS SindiCa~ emplear en distracciones, cultura o repo-so. A la mecanógrafa le está vedado es- ¿Por qué te dicen que son malos, que que te despiden sin darte la indenwiza. cuchar música o conferencias, hacer de- ~o te se_rvirán para nada, que seguirás ción que te corresponde; los que, en caso porte- o leer. Una sociedad capitalista que Siempre •gual, que los que los dirigen vi- de accidente o enfermedad, te envían al se at.ribuye el principio de ula mujer para ven de tus cuot?.s? hospital o te .abandonan; los que te nie­el hogar• se ha frotado las manos ante la Pero te has f•Jado que los que esto te gnn el descanso semanal y vacaciones oferta de u-abajo de una legión intermi- dicen son los que quieren impedir (¡ue :muales. nable de muje1·es y ha fabricado para su tít adq~Jieras una. conciencia de clase. los 1 Son los que te dicen que ingreses en lucro, de la mecanógrafa, una maquinaria que qu•eren que 1gnores tus derechos pa- los Sindicatos católicos que ellos mismos femenina de 1·endimiento máximo que no 1·a poder exigh· lo que te pertenece, pa ra dirigen para poder continuar teniéndote encuentra en lo económico la compensa- poder continuar explotándole. Son los que sujeta, ya que cuando protestes te dirán ción debida. quieren poder continuar como hasta aho- que estás bien pagada, que demasiado ha-

¿Llena este género de existencia las ra, que te pagan salarios miserables; los * (Continúa en la pág. 6) exigencias naturales de un ser joven? ¿Qué vida espiritual, mental, cultural, puede l('Tlcr una muchacha cuyas faculta­des son tragadas enteras por un trabajo agotador y continuo? ¿Qué compens;·~io­nzs ni libertad puede tener sin una base 1

económica equilibrada? La muchacha d~ hoy, por un mwnento

entusiasmada con la e;peranza de una li­bertad basada en su trabajo, se encuen-~ tra con que esa libertad y esa reivindica­ción han resultado para ella un mito.

La mujer trabajadora, a cambio de todo su esfuerzo, se ve imposibüitada de li­bertarse JXl'l' sus propios medios, pues es bien notorio que con cinco a 6,60 pesetas diarias (tipo nonnal de sueldo) no puede en modo alguno costearse su vida ni por lo tanto aspirar a una mayor libertad ni 1

a una elevación cultural e inrelcctual a que todo sct· activo tiene derecho. Esta imposibilidad de independizarse por sus propios medios explica, finalmente, el ca­so de galanteo de los jefes, demasiado vul­gari7-ado por el humor inglés.

¿Qué solución hay para todo esto?

1\f. LOPEZ CHEL VA

Como uta madre qut lirur qul' pedir rm ratlro ~~~ f>au para Sil ltijilo. Ira)• mue/ros r11 Espa>io Y como .-1/u, rou /crs /rrtr'llas dr ltr trrbt·rr11losr; y rl hambrr. A rila lambibr, romo " otras 11111rlws. J>rolllo'tió lrr C. B. D. A. solrtcio11u a s11 situación oll·

!JIIslioso. Prro uodo lltg6 para rsta pobrr m11<lr.• y Sil hijito. Porq11r la C. E. D. A., d Pflrlido do· los. '!'il/~11arios Y ltrralcrrimlts, s61o s~ prtomf!o dt t!or

millones pQra dtfmdtr s11s proprcdodcs y prrt•lltgros Q /QS /r11r::as armadas. Pr•sarrdo tll tslo, d1l•lis t•nlor. mujrrts f.f{mrinlos. al Bl.OQCR POPC'! AR.

PAGINAG 1\IU J E R ES . ., Yo quería aprender ., 1 1 e S p a n o e S Pero me acordaba de. mi cas~. P E

• • F 1

donde no había pan m traba¡ o 1nos

or nc•rnac:.on uyo • Niños españoles, a centenares, a milla- un regalo a un mecenas de la fundación; Yo que~ía aprender. Iba a la escuela

res, en las ciudades, en el campo, crecien- ~ encontrar unas monedas en casa de un con entus~.asmo: pero una vez que !.lega­do ~los, sin el cuidado, sin la atención de jornalero extremeño es algo más que mi- ba a la clase ~o podía ~~tar atenc1ón a nadie. lagroso· muchos niños no contribuyen a lo que la maestra nos explicaba. Me acor-

La tristeza, la miseria de los niños que la susc;ipción; el maestro los forma en dos daba de una casa donde todas estaban crecen bajo el signo de la opresión capi- filas: los que han dado, a un lado; enfrente, Siempre de. mal. humor por causa de no talista, más acentuada todav[a en España, los que nada han podido traer; regala ca- t~ner trabaJO uu padre. Por las co~versa­el P~!s de los niños abandonados. ramelos a los primeros; les obliga a que lc1ones que escuchaba, en las que s1empre

Nmos de las barriadas obreras que co- los coman allí mismo. Los niños de la otra hablaban de 9ue •el casero nos va ~ rren en bandas enormes descalws casi fila están serios tienen las manitas apre- ceban, no tema un momento de tranqw-

' ' ' l"d d desnudos. El hogar se cierra porque el tadas; odian ya y miran a lo lejos, por las 1 1 a · padre va un día más en busca del traba- ventanas estrechas, la tierra verde y ju- Tuv_e que abandonar la escuela; ~z:¡é jo que no llega y la madre va a ganar unos gosa, donde el trigo crece por el trabajo al ~ahr que podría apren~er un of1C1o, pocos céntimos trabajando todo el día. La de sus pa. dres, de ellos mismos, y de don- ~ pe ro tuve que ayudar a nu pa~re a ven­casa queda sola, y los niños también. No de sale el pan que no prueban. der para poder llevar algo a m1 casa. No hay escuelas para tantos; sólo hay escuelas Niños españoles de la ciudad Y del cam- pude aprender en la ~s~uela, no pude para muy pocos. No hay atención, cuida- po, que no tienen pan, ni juguetes, ni ri- aprender tam~o ~ ofic1o, y cuando al­do para ninguno. sas. Niños a los que se ha robado todo, gunas noches mt~nte repasar_ lo poco. que

Los niños corren, rebuscan pan en los hasta la alegría de ser niño. sabia, el cansanCIO era supenor a rm va-montones de basura. No valen palabras, ni \'alcn envaños¡ Juntad. . . _ .

Caen a diario muchos en accidentes y todo lo podn eio todo lo po:O• que 1a ex- Hoy tengo dieciocho anos; no tengo ofi-' cio; no sé tampoco gran cosa de nada.

Pienso quién tiene la culpa; primero me acuerdo de mi padre, que no tenía traba­jo; pero no le culpo. porque él quería trabajar. ' Y culpo y estoy segura de que son los responsables de que sepa poco, de que no tenga oficio. a los que dejaron sin traba­jo a mi padre, que al tener que dedicarse a vender necesitó mi ayuda. teniéndome que 81Tancar primero del colegio e impi­j diéndome después entr<~.r en un taller. 1 Ellos ~on lo:> culpables de m.i situación y de la de muchas jóvenes como yo. No sé muy bien cómo luchar contra ellos; pe­ro estoy dispuesta a ir contra los que quieran terminar con esta gent~ que des­pide a quien quiere sin acordarse de que tienen hijos.

Antonia GARCIA

atropellos; mueren unos cuantos en ex- plotación y la dominación de los dueños plosiones de bidones abandonados, y las del dinero y de la tierra da a la clase lt·a­otras madres, que leen cómodamente la bajadora, es algo acusador, sin engaño Prensa en el hogar confortable, comentan posible, en las caras pálidas, en las roa-indignadas: • ¡Qué madres esas que así nos transparentes de estos niños. IIIUIIIIIlnn:umu:unuu:nmnnnmunmnmnnumiiiiiUWUUnnnnuummunlllllllllUUUIIIIIIU descuidan a sus hijos!n Su costra de indi- Sabemos, sí, que solamente cuando la "El día 16, mujeres, cuando salgan vues-fN-encia y egoísmo no se puede romper clase trabajadora sea quien administre los tros maridos a la calle, no advertirles de

• destinos del pueblo serán estos niños cuí- que puede haber peligros; al contrario, Alb ·. ,\.:ces salta sangrante la noticia dados y atendid~ animadlcs, porque de JlOCO serviría que

horrib ~e un suicidio de niño. Pero la Pero mientras tanto, compañeros, mu- por timidez se pudieran librar de algún impr~~· ••l pasa !>ronto. ;Bah! ~y muc~os jeres obreras, mujeres que trabajan en su disgusto o de algm~ molestia, s.i por 1!­que SI .1en crec:wndo con ~os v1entres hin- hogar, mujeres de profesiones intelectua- brarse de ello contribuyeran a que C?~h­chado« v las p1ernas torc1~as. que Jle~an les que miran la vida con visión amplia, nuasen en las cárceles y los pres1d1os el germen de la tuberculOSIS y que no 1m- trabajemos, luchemos para que la ver- nuestros ~aradas. No. _no; todos ~os­porta que mucr~n. po:_que al llegar ~ los güenza de esos niños no nos suba a la ctros a trabaJar y, como d1go. a depOSitar catorce! .a los qumce anos, sólo tendran la cara. ¡ la papeleta en las urnas.n I)CupaclOn de formar entre los parados. 1 1m .dam 1 d _ ·u . (Lar..-0 Cahallero)

¿Y esos otros niños-hombres del cam- · P1 os e CSP1 arro enorme en los .. · pa? Los que también crecen sin pan y sin, presupe~tos que prep~ran la guerra, en e!'cuelas, los que trabajan cuidando gana- las partidas de rep~eSlón. l'n los grand~s A ~lo o recogen hierba y leña desde los seis s~eldos. en _la gasolina de los co~hes ofl- las obreras del hogar años Fsás mujeres que son criadas desde ciales. Cons~~~ escuelas, c~nhnas, co-Jos ·,e año.- , que al llegar

8 la pubertad roedores para nm~s en las barr1adas obre- * (Viene de la pág. 5)

est ,1 an\.l!adas ya por años de explota- ras; que esos m1llones. que el clero h_a cen, que te dan de comer y un sueldo; te ción. arrancado de nuestra nqueza sean desti- dirán que debes ser buena, hwnilde, et-

No es posible recordar sin espanto esos nados a escuelas alegres. cétcra. niños serios y nenes de los campos de la Consigamos por lo menos que estas vi- No compañera· no les hagas caso e in· Mancha y de Badajoz, que no saben son- das ~e niños no se m~logren antes de ~ue gres; en el Sindicato de Obreras d~l Ro· reír, ni jugar, que miran y sienten la vida e~ triunfo de los ~ba]adores les. dé la v1~a gar, que le dirigen obreras explotadas co­con odio. ~1chosa de los nmos de la Un1ón Sov1é- mo tú y que, unidas todas en el Sindi-

En los meses de invierno los niños del tica. cato, podr óis obtener mejoras económicas, campo acuden a las escuelas, cuando las No habrá una sola mujer de las clases hacer respetar tus derechos, terminar con hay; a las tristes escuelas de pueblo, rui- populares de España que no quiera su- los sueldos irrisor ios y las jornadas in­nasos y hostiles. All! sienten todavía más marse a este trabajo¡ ni una sola mujer terminables de trabajo. En una pnlabra, la difex·encia de castas. Una escuela ca- sensible y justa que no quiera serenar le1·minar con la C"-1llotaci6n que hoy su· t6lica de un pueblo extremeño, un maes- esos ojos de niño que hoy se abren a la frcs. tro católico una ~uscripción para hacer \'ida ante el hambre y el odio 1\taría 1\tARTIN

\ ,¡

M U J E R ES

1 ujeres

PAGINA 7

• !Madre s !

\una madre os llama Aida Laíuente, no hemos

olvidado tu abnegación por

la clase obrera.

Tu sangre vertida en de-

fensa del poder de los obre-

ros y campesinos, es un

ejemplo, una bandera que

siguen millares y millares

de mujeres.

Tu recuerdo va acompa-

ñado de la promesa de lucha

i n e a n s a b lemente por el

triunfo de las masas prole-

tarias.

No, no quiero la guerra. Crié a mis hijos quitando el pan de

mi boca para que ellos comieran. Hice de mi vida una vida de lucha para asegurar­les un porvenir menos duro. para lograr­les una existencia sin las miserias de hoy, que apaga su sonrisa en la época que de­biera ser la más feliz de su vida. Lo hice todo a costa de jornadas interminables de trabajo.

No, no quiero la guerra. No quiero que mis hijos se marchen de

mi lado. No quiero ver destrozado mi ho­gar con su marcha a destrozar otros ho­gares. Conozco el dolor, y no quiero que otras mujeres a las que ni la raza, ni el color, ni el idioma puede impedir que sean madres. le conozcan también.

No, no quiero la guerra. ¡,Quién quiere llevar a mis hijos a otros

paises, a los que para llegar hay que man­char todo un camino de sangre? ¿Quién quiere llevarlos a la guerra para conquis­tar nuevos territorios teniendo los cam­pos de Extremadura ansiosos de que los camoesinos claven la a?..ada?

campesinas!

Me han dicho oue son los ricos, que 11 1 iii" """' 1

nml ""1 l quieren más propiédades. Que son los mi­litares. que quieren ascensos y medallas. Me han dicho que son los dueños de las fábricas. que auieren vender su material

sea un presidios!

ele Y\.lerra. ¡Malditos sean! No. No quiero la guerra que dé mas

nrooiedades a 1os QU(> tantas tienen. No. ~o nuiem 'a werra que d6 cruces vas~ c;oq ~ costa di' la sangre de mis hijos. ..

En el panorama del campo e~;pañol, don- le dan salida por millares de toneladas. Yo r¡uiero la guerra que termine con la de la miseria se enseñorea de los hoga- ~Luchan los hortelanos de Levante, que ven mi~eria de mi ho!'!ar, que termine con el res campesinos, surge como una valora- pudrirse en la huerta el fruto de su es- oaro, nue ahra la« onertao:: a ]o<: rrt'" t)!>l'­

eión futura la mujet·, esa mujer campesi- fuerzo, mientras en las capitales saben mane<'f'n en las cfirce1es v P~"'"'< · >;: "e E,:;­na que ha visto en su propia chO'L.a el re-' que la gente se muere de hambre, sin un 'Pañ11. Esta es la p-uerra nara la (''1e dar~ sultado del Gobierno de la reacción y ha

1 céntimo para comprar algo con que aca-1 mi e; l,lio!<. nara la (1UE' daré mi vidP.. t>OMUP

sentido con sus hermanos, sus padres o liarla. ¡Todo esto ven las campesinas es-len p1Ja nodremos lc>"rar un mundo nUPVO. sus compañeros los golpes que esta t·eae- pañolas! De ahora en adelante saben muy GuE>rl'll. <1\lcrra. sf; nero contra los t'IUe ción sacudía a los que se rebelaban contra bien que no es la sumisión que predica el llenaron las ~Ál'CE'1es. rontra los aue 1an­E~ hamb1·e y la miseria. cura la que sacará a éstas mujeres de su 1.aron de las f~bricl'lc; v t>l camoo a milla-

Se las ,rió en primera fila cuando la situación angustiosa. Que tampoco es el rec: r1t> obreros. contra 1os oue rebajaron huelga de los campesinos, y en las luchas cacique ni el señorito que recorren ahora salarios, contra loe; nue enc<>n..lieron la de octubre ellBii animaban con su ejem- los pueblos predicándoles la abundancia I!Uerr~ t>n nuec;tro suelo. <:\í. Conlra P..os, plo a loo suyos para que. sin miedo nin- de trabajo •para después de las eleccio- "llena a muerte· nero no del,o .... , o;ola. v guno, se lanzaran a la conquista del bien- nes•, con ánimo de ganarse sus votos, los llnmo A. Jac; ctU~". como vo. lucl-~ nn oor estar. ¡Mujeres campesinas ven en sus hi- que aliviarán su miseria. Ni los que du- dnr vina a c;uc; 'ltHos a co-:ta tl.- r·· nmoia jos, lo más querido por ellas, el estigma rante dos años no han hecho más que em- vidR A toc1a« llamo naTa. 1o'trar ~'., el 1~ de la inanición y la miseria, y quieren lu- bolsarse los jornales arrebatados por la dr febrero unn vlctoria aue ,,r:~ •' ,.:-:n· • char por verlos hermosos y cultos! ¡Por. anulación de laS bases de trabajo. ¡Las no a nuestrM hijos l'nra Jo~m~r • "'1 ,

eso luchan las mujeres campesinas! mujeres campesinas no se fían para nada suvos unl'l existencia fe!i1. v dicho«-3 ~· n ..- Luchan en los feudos de Galicia. donde de ellos! Saben que el bienestar de sus ho- todas Pido out> oienc:<>'l al vo•;¡r en qu:e-

!'W' el Estado con Jos impuestos y el usurero gares. el bienestar de sus hijos sólo se n<'~ han c;icln loe; qu<> han l'Clta<lo nu.-stro con los intereses hacen una competencia conseguirá en la medida en que sepan or- na:c; cnn la sanl!re de loe; me;ores hijos depo1·tí,·a para ver quién consigue termi- ganizarse con sus hermanos de la ciudad. d~> la cla~ obrera. nar antes con una familia y un hogar. Lu- ¡Y saben también que sólo en la medida l!nllelllllll111!!!0!!ll!DJil!liltl1111111!1llmlmiCl!lt~t:aaliC:IJlJ!Olllllll chan en la Montaña, donde las Compañías que sepan abatir la reacción vaticanista el jesuíticas manufactureras de leche impo- fascismo español. el monarquismo ver¡on­nen un precio inicuo a los habitantes de zante, será asimismo el medio de abrirse los caseríos, condenándoles a la miseria. el camino del bienestar! No hay otro ca­Luchan con las uñas al arañar el suelo mino. Con sus compañeras de la ciudad buscando las bellotas inutilizadac:, pasto en las Alianzas Obreras y Campesinas. de cerdos en el campo extremeño y on los Con todas las mujeres de buena voluntad, olivares de Andalucía. Luchan en los pue- con todas las mujeres progresivas que blos de Castilla al ver que todo su traba- sientan el anhelo do libertad a sus he1·ma­jo no tiene ninf(tm valor, pues no pueden nas del campo, de las cadenas del flc;co, la vender el trigo, mientras los g1·andes pro- usura y el feudalismo en el Bloque Popu­pletarios y los aristócratas lerratenicmtes lar.

Redacción y administración:

San Bernardo, 58 MADRID

llli 11!1 ''""~ 1 UlllilllffihiOII!IIInll « llf "llnU!II'II"IIIl~l l 1n11110U 1111' llllillliiiiiUIUU·IIIDIIIillllllllnniUU!IIilllli llhldlllllll 11111 :¡11!1 llllii'UUIIII!nl"'l'lillllllllllftllililllllll IIIUIIIIQI i!lldll 111 Uilllll 11 IIIIIUI 1 llnlii'IIOJIIII 1 111 Wl'lll'III:C lnM 111n111

no olvides quien enea u estros 30.000 hermanos

1

¡M U) ERES! • 1 ADRES! Del llamamiento de "Pasionaria"' Yo APELO A VUEsTRos sE.'\"rl-

1

:MIE~TOS, !\lUJERES OBRERAS. :\IU-A vosotra~. hermanM de cla~. que sabéis como minadón Wcist;J la frente de lo:< tra':Gjadores y JEBES CA.,IPESINAS. :\lUJERES IN-

yo de los días ntgrm. ~in pan y >in alegr!a: del de torlu< 1~ hombres amantes de la lil~d... TELECTUALES 1\tUJERES Sll\IPLE-do)or <1~ lo• hijos ~l'!bricntos y eníermos por 1~,; A TRA VES DE LA DOLOROSA EX- MENTE C0:--1 CORAZON DE l\IUJER. pma s y la nu>ersa:. de las pe.a~umbres Y ~e PEBIENCIA DE ALE::\lA~'lA E ITALIA, . . ' .. la· • :ras de u11a v1da de t rab3!o mal re·n- LAS >\lUJERES HE:'\l OS APRE:'IIDIDO \o qu1ero ~ccordaro> lo ~ue,_c;l prcdom1mo de }:t< bu 1 paro que llena de angu<Ua• y de de·· • · , • fucn~s re3cc1onana5 ha .sgnsucado p3ra Espana: e•n • a lo• hogares de tos t rab3iadorc;: y a A CO:l\OCER QUE PODE:\lOS ESPE- h~eer que marche <icmprc a la rola del pro¡¡reso. vo . •· t~mhltn comrañeras de lucha antifas i a RAR SI EN :!liUESTRO PAIS TRIU:--IF A- ¡ ).1 ujeres! ; Trab:ijauora>! Ocupad vue-tro puc<· mu¡el(l le la !'<'QUeil:t y media bur!n!CSÍa. que •~ ;s~ LA CEDA y DEJ.\Ji\ S MO:--IARQUI- to de lucha al lado dd Partido Comunista, al lado n:iis cor•t• todas l:u mujeres, par~_ los suyos • .Y fun· COS y FAS"'ISTAS LOS QuE REPRE- de lo.< que luchan por la tierra para qui~ncs la d~mentalmcnte para vuutros h1¡os. una v1da de "' • . trab3¡ar:, para el pan para todos los traba¡adore,, t ranquilidad y de bienestar, va el llamamiento cor- SEl\'TAN LA TRADICION Iii.QUlSITO· para la 1"~• y el bienestar para el pueblo ldl:-.urioso. dial de una mujer, madre también. que anhela co- RIAL DE ARBUES Y TORQUEI\lADA. 1..;~ lucha está entablada entre el mundo caduco y mo vosotras terminar con la i.njusticia y dar a ¡~lUJERES. MADKES' ,\ voMras llc¡¡ariur dccrépit~ dt los terratt.niente:;. de lo> caciques •. de nuestro pais una est ructura soc1:tl más humana Y los mensajeros del jesuitismo orr,'Ciéndoo• una ti- la lglessn. de lo, l>rOÍC510nale> del sable. que quscre equitativa. mosna a cuenta de vuestro voto; c¡ucrr:in comprar ~.s tcnerse cargando sobre las espaldas de los tra·

Compancras: Una gran batalla se va a librar en \'UCS! ra conciencia, quc.·rim poner precio, 1 mi:;era- ~jadores m~nuales e intdt..:tuales todo el peso de~ nue>tro país; las fuerza~ que representan a un pa- blr precio!, a vuestro der...:ho a! voto, a \'Ue>tro> su incapacidad y de su dccadt'nCia. Y el mundo nue­sado. tenebroso de ~prc~ión y <!e esclavitud. de il(llo- ses~timientos. Los. que ahoro. ?' ofrcc~1! primero un v.o que, d<:;~de la l!nión. So'•iéti~. desde d :\ortc Y rancla y de fanatl\mo, de cnmenes Y de persecu- pw1ado de C31derrlln y dts¡mcs la fclltldad. ~on los l'.M~ de l'.uropa, 1rrad1a sus ro¡os resplandores la dones ~in cuento a todo aquello que significase pro- mismos que llevaron a vuestros hijos a morir t'll los triunfante conslrucción SOI'iali>ta. enM!Iiando a los greso y libertad, quieren apoderarse de la direc- barrancos africanos; son lll> mi,mo> 11uc tnn~a11 3 pueblos atormentado• por el h:unhre, la miseria Y ci6n de lo> clc<tinus de E~par1a, ¡)ara afian~ar su ,·uestros maridos al ¡~:~ro y a la miseria; son los el terror, el camino a se¡¡uir para con<<'guir el pan, dominación. para "'l'&'lrar su. privilegios, para con· que se niegan a sen1brar los cam¡>os ¡)ara someter la t ierra. la paz Y la libertad. tinu.~r la explotación inhumana de millones de tra- a los campesinos por el hambre: ;on los mismo' O escla~itud o li....,rtad: o guerra. con tooos sU> bajador.,, para hact-r aún má• humillante el some- . que os lanzan de ''ucst r<>> ho~arcs cuando no podéh horrores, o p:u. al amparo de la cual crecen las ti miento de las nacionalidades de Cataluiia, Euzkadi pagar las crecidas rentas; ,on lm o¡ue se a11rovc· nacionC1' y se m!(raudccen los pueblos. O íaccismo y Galil'ia. al yugo de un Poder central absorbente chan del hambre y de la mistria de la> j6vcn~ con toda su secuela de terrores. de crímenes, d.­Y dC!:!li!•~dor,_ ~ra sellar con la marca de la do-1 obreras para prostituirl:.s . demucción de la ch·ilización, o amplia~ pc~;pecti-

vas de libertad ~· de progre;o. Tal e~ el panorama que ante no<otras se pn'Scn-

t:tri de tritmfar una u otra {ue"za.

1 ¡:\lADRES. 1\JU.Jf''P.ES TODAS!

LUCHA, SIX NJNG \TNA VAovu..·~"' A APLASTAR A LOS QUE

1 DEN UXOS INTERESES A:\ lA C0:--1 EL SUDOR Y LA MISERIA

1 PUEBLO, VOTAII.'DO POR EL BLOQUE POPULAR!

\ d~>trozar lo< propósitos jlucrn ros de t¡uit1lb prctendt1l ro:novar los saogrk1lt<>s laureles de Cuoo, del Barranco del Lobo. de Anu~l. de Xaut.'1o. ; En piel

Contra los a•csino> de lllt~tr(h hijos, de nue•· tros maridos; contra los que comcrdan con el ham­lm: del pueblo.

Contra lo~ que quieren hat·cr de bs mujeres <'•· clnva• hogareña•. incubadoras de cnme de cai1ón

Contra los enemigos de la libc11ad. contra lo, que niegan d dcrt-cho de los pueblos n ¡¡ol>tnrar· e 110r sí mismos: contra lo~ que int~11tan h~cer tic ¡~,. p.~ña un país impcrinli>ta 'ojuzgador e!" pueblo'.

Contra los que como úni,·a norma de tienen el terror y la esclavitud de los trabajiad''''".;""~

¡ Xl ü)ERES! \ 'otad al Bloque Popular, par lo que él •igniíica de progreso, de lib.-rt;orl. ele ju~­ticia.

)filiares de presos esperan con el cs¡>irítu temo, ron la mirada fija en \'Oso1ra.•. madres y nwierc<

\

de E'paña. ''~~estras deci<ión. de la cual de¡x,¡Je ~u li....,rtad y el ¡>an de los <U)'C5.

~tillare• de mujeres y de niiw<, hamhdento~ Y desolado~. e5pcran la vuelta dd padre, del mar•do o del hermano, que tma amplia arnnisti~ pue<le dcc·

\

'""'"r a sus hogares con ella.' r1 bic:'le!tar )' ~ alrgría.

Fuisteis soldados en la vanguardia dea ejército que luchó por un mundo feliz. Formasteis al lado tle las guerrillas de mmeros que durante quince dias sostuvie· ron Nl alto la bandera del Poder de los obreros y campesinos.

F '-;teis víctimas, al igual que vuestros hermanos, de la harbru·ic; como ellos, suf pri~i6n.

l'ero para ojetl)plo, contáis entre los héroes de la Comunnl\ Asturiana caídos con 11n símbolo de abnegación, de fidelidad a la causa de la clase obrera: Aida La­fuente.

Ya sólo faltan J1oras para la gran batalla del día 16. Y millares y millares de mujeres votarán ni Bloque Popular, cuy'l victoria abrirá . b.s puertas de IO!t presi­dios para c¡ue ocupcíis vuestro puesto en bs primeras los que luchan contra la guerra y el fn.~cismo.

"

¡ :hl,\DRf.S. )IUjf.RF.S: EojugutrtlO' la• lá1tri.'\. ma• de esas hcnuanas mle'itra,, de e;.os niiios des

1 am¡r:uado<: demo' aliento a ~ hmubres lsero cos. que perdieron la libertad def<1ldicndo la roa sa M la justicia.

\

; ¡\Irá! la ea\•ema! ¡ ,\tr.i< el fasci<mo! ¡Por nt·e,tro• hermanos. por nuestros marido<. por nues-tro< hijos, por nosotras mi<ma,, por la catU.~ del pro¡¡TCso. votad al Bloque Popular! .• ~IUJF:RF.SI ¡:-,1,\DRES' :HER~I.\':\"ASI

Por nu~tr:l dicmidad. por el derecho dr• la mll• je~ al t rabajo y a la igualdad y salarios •. ¡x.r la C<nl

1 qu1•tn de leyes protectoras para la mu¡<·r y la ¡u· "entud. por la defm<a de todo< ntle>tro> dcrccl'o• \ toda~ nuestras rd"indicacione>. tO<Ia> "" pi~ al lada del Bloque Popular.

¡POR EL PAN, LA TIERRA, EL TRA­BAJO. LA PAZ Y EL BIENESTAR!

¡QUE EL 16 DE FEBRERO ~EA UNA BATALLA GANADA A LAS FUERZA5l DE LA REACCION Y Et. FA~(•J0:'\1.ü ¡POR EL PROGRESO Y IlA I.IBEP.T'\'D!

DOLORES mARRUJV