Lunes, 11 de enero

Buenos días,

Empezamos una nueva semana, nuestra primera semana lectiva del año 2021. Lo hacemos

habiendo disfrutado del descanso con los poquitos seres queridos y amigos con los que nos

hayamos podido reunir, y con la esperanza, entusiasmo e ilusión de que este nuevo año

venga cargado de Paz, amor y mucha mucha salud.

¿Os parece que retomemos el evangelio que se leyó en la eucaristía ayer?

Tú eres mi Hijo amado, en ti me complazco.

Lectura del santo Evangelio según san Marcos 1, 7-11

En aquel tiempo, proclamaba Juan: «Detrás de mí viene el que es más fuerte que yo y no

merezco agacharme para desatarle la correa de sus sandalias. Yo os he bautizado con agua,

pero él os bautizará con Espíritu Santo». Y sucedió que por aquellos días llegó Jesús desde

Nazaret de Galilea y fue bautizado por Juan en el

Jordán. Apenas salió del agua, vio rasgarse los cielos

y al Espíritu que bajaba hacia él como una paloma. Se

oyó una voz desde los cielos: «Tú eres mi Hijo, el

amado; en ti me complazco».

Explicación:

Hoy la Iglesia Católica conmemora la Solemnidad del Bautismo de Nuestro Señor Jesucristo.

Con la celebración de esta Fiesta, se cierra el tiempo litúrgico de Navidad y comienza el

tiempo ordinario antes de la Cuaresma.

Se trata, ante todo, de un día de gozo y alegría, el acontecimiento histórico del bautizo de

Jesús en el río Jordán, que marcó el inicio de la vida pública de Jesús. En el momento de

recibir el bautismo, Jesús, recibe de su Padre celestial la plenitud del don del Espíritu Santo.

Pero… ¿qué importancia puede tener esta celebración litúrgica para nosotros, creyentes, y,

sobre todo, ¿qué relación puede tener con nuestra propia vida? Pues… ¡mucho!

Es cierto que, en un primer momento, al leer el evangelio de la celebración del Bautismo de

Jesús pueden aparecer sentimientos de nostalgia en nosotros, que nos recuerden a nuestro

propio bautismo tras haber visto fotografías o vídeos, por ejemplo, con un recuerdo real o

imaginario. ¿Es el caso?

Pero… ¡cuidado! Una cosa fue nuestro bautizo, una ceremonia, de apenas unos minutos,

limitada a un momento temporal muy concreto, y la otra, el Sacramento del Bautismo, con el

que recibimos mucho más: la condición de Hijos de Dios por adopción y el don del Espíritu

Santo.

Reflexión:

¿Doy gracias a Dios porque un día fui bautizado? ¿Vivo como hijo de Dios y miembro de la

Iglesia? ¿Acudo con confianza a mi Padre? ¿Me esfuerzo por vivir la vida de Jesús? ¿Adopto

su manera de pensar y obrar?

Fuente: www.eccastillayleon.org

Martes, 12 de enero

Buenos días,

¿Cómo fue el día de ayer? ¿Nos costó mucho retomar la rutina?

Comenzamos el día recordando el objetivo general del presente curso académico: “Hacer el

bien para conseguir un mundo mejor y más cuidado”. No os olvidéis tampoco del lema que marca

el mismo: “Siembra, cuida, recoge”.

Durante el primer trimestre hemos trabajado mucho reflexionando, en un primer momento,

acerca del tipo de tierra que queremos ser, preparando la tierra, escogiendo las semillas y,

por último, sembrando esas semillas que darán fruto en un futuro más o menos cercano.

Recordad que, ahora más que nunca, de todos nosotros depende lograr un mundo mejor,

más habitable, más humano, más fraterno y más solidario.

Es tiempo pues de cuidar la tierra que ya hemos sembrado y, para ello, vamos a leer una

receta que ayudará a que nuestros corazones florezcan y que encontráis en la página 52 de

nuestra agenda escolar. A lo largo de esta semana iremos reflexionando sobre algunos de

estos ingredientes que tan importantes nos resultan para nutrir nuestra tierra, nuestras vidas

y las de aquellos que forman parte de ellas.

RECETA PARA FLORECER EL CORAZÓN (“Jardín Afectivo”)

Ingredientes:

- Una porción de tierra

- 1 saco de nutrientes

- Gran cantidad de semillas de AMOR.

- G/c de semillas de GRATITUD.

- G/c de semillas de FRATERNIDAD.

- G/c de semillas de BUENAS INTENCIONES.

- G/c de semillas de DIGNIDAD.

- G/c de semillas de PAZ Y UNIÓN.

- G/c de semillas de AUTONOMÍA Y RESPONSABILIDAD

- G/c de semillas de VERDAD

- G/c de semillas de ALEGRÍA.

- Oración sin medida.

- Tiempo y buena voluntad sin medida.

- Libertad

- Mucha creatividad para crear nuestro jardín interior.

- Dulzura sin medida.

- Sal al gusto, sol y agua.

Reflexión:

Como se nos indica en la página 52 de nuestra agenda

escolar, para la preparación de esta receta, los utensilios

fundamentales son: la cabeza, el corazón, nuestras

manos y la mano de Dios, ¿estás de acuerdo? ¿Añadirías algún otro? ¿Olvidamos algunos

de estos ingredientes en nuestro día a día?

Fuente: Agenda escolar Amor de Dios – curso 2020/2021

Miércoles, 13 de enero

Buenos días,

Llegamos al ecuador de la semana y, como dijimos ayer, lo hacemos retomando uno de los

ingredientes necesarios para florecer el corazón, la GRATUIDAD, característica de lo que es

gratuito, de lo que no cuesta dinero.

Para ello, os invito a leer el siguiente artículo y a reflexionar sobre el mensaje que nos quiere

hacer llegar:

¿Todo tiene un precio?

«Todo tiene un precio» es de esas expresiones que todos hemos usado en alguna ocasión, pero

que en el fondo no sabemos muy bien qué significa. O mejor dicho, lo que queremos decir es

otra cosa, pero que dicho en directo suena mal: «casi todo tiene un precio». Porque lo de

'todo' resulta muy fuerte. Quien más, quien menos, siente que hay cosas a las que no podría

poner precio. O le provoca repelús pensar en un precio para la sonrisa de un amigo, el abrazo

después de la espera impaciente o ese café tranquilo, contándonos despacio la vida que se

nos pasa. Resulta duro poner precio a muchas circunstancias de nuestra vida, especialmente

a las relaciones personales.

Esto del mundo del precio tiene su complejidad. Casi todos estamos acostumbrados al

descuento, sería algo así como que en determinadas circunstancias estaría permitido rebajar

nuestro nivel de compromiso, de responsabilidad en la vida. Son las pequeñas infidelidades,

los fallos leves, que nos recuerdan que las cosas valiosas lo siguen siendo pero que a veces

podemos relajarnos un poco.

Lo que supone una auténtica revolución del precio es lo del todo a 100. Es la tarifa plana y

tirada de precio, es dar por bueno que las personas, nuestras relaciones, no merecen mucho

de nuestra parte. Vivir como si el mundo fuera un todo a 100 no es sólo lo que hacen los

países del norte en este globo terrestre, lo hacemos también en nuestra vida. Aprovecharme

al máximo, y comprometerme lo mínimo.

El 2x1 es otra posibilidad. Siempre poniendo la mitad, y recibiendo el doble. Están en

nuestras comunidades, en nuestros grupos, en nuestras familias, son los que siempre piden

mucho más de lo que reciben. De los que arriesgan lo justito para no poder ponerlos en

evidencia, porque ellos ya cumplen, pero que reciben siempre mucho, muchísimo más, de lo

que ponen. Una modalidad más ajustada es el 3x2, aquí hay más concesiones para los otros

pero se sigue ganando bastante. En el fondo es no darlo todo, ni siquiera dar como los otros

(sembrando la discordia de que los demás tampoco lo dan todo); de lo que se trata aquí es de

ganar siempre.

En esto del precio en la vida una de las fórmulas más curiosas es lo del gratis total. No debe

ser tan gratis, es decir, que normalmente se espera que compres otra cosa, o hagas algo, pero

la expresión es muy llamativa. Algo tendrá lo del gratis total que uno no termina de creérselo,

cuesta aceptar que alguien pueda hacer algo sin esperar nada a cambio. Tanta generosidad

nos molesta, nos hace sentirnos mal. Preferimos las cosas claras, saber quién nos da, cuánto

vale y si podemos, devolver (pagar) lo mismo. Algo así como el precio justo. Ni deber, ni que

nos deban. Todo medido, equilibrado.

Y sin embargo la frasecita sigue ahí, lo de que todo tiene un precio. Como esos topicazos

insistentes que nos recuerdan que mantener relaciones no-dependientes o no-dominantes es

muy complicado. Que es muy difícil vivirnos desprendidos, no tan pendientes de lo que nos

deben, vivir sin reproches, sin desconfiar de los demás. En el fondo hablar del precio es

hablar del valor. Y mientras el precio se expresa en euros el valor utiliza otras escalas: el

tiempo, el cariño, la ternura, la justicia, el sacrificio o la paciencia. Así todo es valioso, cueste

lo que cueste.

Reflexión:

¿Hacemos que en este mundo haya espacio para la gratuidad? ¿Amamos sin esperar algo a

cambio? ¿Ayudamos sin buscar aplauso, reconocimiento o admiración? ¿Pensamos antes en

otros que en nosotros mismos?

Fuente: www.pastoralsj.org

Jueves, 14 de enero

Buenos días,

Retomamos hoy otro de los ingredientes necesarios para florecer el corazón, las BUENAS

INTENCIONES.

Para ello, os invito a reflexionar sobre la siguiente cita de James Hunter: “Las mejores

intenciones del mundo reunidas no valen nada si no van seguidas de acciones.” ¡Echad un vistazo

también a esta imagen!

Reflexión:

¿Qué te sugiere la cita que

acabamos de leer y la

imagen que la acompaña?

¿Qué mensaje nos

transmiten? ¿Qué piensas

al respecto?

Viernes, 15 de enero

Buenos días,

Acabamos hoy la semana, ¿dura tras las vacaciones?

Retomamos así el último de los ingredientes necesarios para florecer el corazón, la

RESPONSABILIDAD. Resulta inevitable no unir esta cualidad del ser humano a la pandemia

actual provocada por el Covid-19.

Os propongo visualizar el siguiente vídeo:

VÍDEO: PROTEGERTE DEL COVID-19 ESTÁ EN TUS MANOS (Duración: 2’04’’)

https://www.youtube.com/watch?v=m_Ehv1Yp5LM&feature=youtu.be

Nunca está de más recordar que protegernos y proteger a los demás está en nuestras manos

y para ello, debemos ser RESPONSABLES.

https://youtu.be/m_Ehv1Yp5LM Fuente: www.educa.jcyl.es/es

https://www.educa.jcyl.es/es