Los niveles icónicos de la ficción
-
Upload
miriam-martinez -
Category
Documents
-
view
214 -
download
0
description
Transcript of Los niveles icónicos de la ficción
Martínez Elizalde Miriam Abigail
24 de noviembre de 2009
Las variables de la Ficción
Lo falso en lo verdadero
“Todo lo que dice la imagen o lo que está en ella, y no es exactamente así en la
percepción de la realidad espontánea, es ficción.”
Jean Costa.
Se considera a la ficción en su vertiente exclusivamente icónica con siete niveles:
1. La reproducción “exacta y literal” del modelo.
2. La mimesis.
3. La subjetivación estética como potencial creativo.
4. La semantización de lo real.
5. La manipulación física del modelo.
6. La manipulación de lo real en la imagen.
7. La manipulación material de la imagen.
Hay que considerar que en todos existe una relación directa entre simulacro y realidad
que son recíprocos de referencia. Esta clasificación es una convención metodológica ya
que en una imagen pueden coexistir varios de ellos combinados, se trata de caracterizar
las variables de la ficción en fotografía.
Para detectar en las imágenes estas variables se necesita, conforme al principio de la
semejanza, percibir empíricamente el grado de extrañeza; bastara apreciar el contraste
entre ambos de acuerdo con el modo binario: semejante a lo real o diferente. Se puede
enmarcar por exclusión todas aquellas representaciones que compartan algún grado de
ficción:
Todas aquellas imágenes que aun siendo análogas a la realidad percibida
directamente por la visión humana, no se ajustan a la percepción retiniana.
Aquellas imágenes que son opuestas a la manera en que percibimos la realidad.
aquellas que son esencialmente diferentes como captamos directamente la
realidad.
Aunque las ficciones fotográficas no siempre son tan evidentes. Las combinaciones de
estas variables entre sí multiplican la creatividad y la producción de los simulacros
fotográficos. No es difícil imaginar que el futuro de la fotografía es inseparable de la
ficción.
La reproducción “exacta y literal” del modelo.
La imagen fotográfica es la mediadora que garantiza una objetividad de tal que la
representación exacta del mundo sería imposible sin ella. En el registro fotográfico “el
objetivo” no es tan neutral, la visión natural está determinada por una visión artificial.
Se habla en este nivel de una ficción inevitable. La obsesión hiperrealista de querer ser
más real que lo real mismo: el objetivo ya ve mucho más que lo que hace el ojo
humano.
La actualidad visual, capacidad acelerada de agudeza de la fotografía para ver mejor,
más cerca, más de lejos: verlo todo, en una ideología de la intensidad visual que se
convierten una cosificación de la naturaleza por la imagen y que anda tiene en común
con la experiencia visual directa de la realidad, pero tampoco con lo imaginario, ya que
está obsesionada por lo real externo.
En este sentido se puede hablar del fotoperiodismo el cual en primera instancia tiende a
retratar los sucesos para ser así “la imagen de la realidad”, aun que no hay que olvidar
se tarta de una realidad fragmentada que sin un contexto significa tantas cosas como la
audiencia se puede imaginar.
La mimesis.
O superposición estilística de otras imágenes precedentes de la imagen fotográfica. Hay
fotógrafos que hablan de otras imágenes y de demás fotografías; se transfieren modelos
conceptuales y sobre todo estéticos de unas fotografías a otras.
Lo que se sitúa delante de la cámara es lo que está detrás del objetivo; es ver como
vieron otros.
El estilo ajeno como ficción superpuesta a lo representado o como un modo de
modificación de la realidad por medio de un mimetismo de los modos culturales. Lo que
se imita en las imágenes de imágenes es su doble artificio; constituyen un doble juego
de ficción: por fingirse objetivas y por imitar subjetividades.
Algunas publicidades hacen uso de este nivel, así retoman imágenes conocidas por otros
para hacer referencia a las suyas.
La subjetivación estética
como potencial creativo
El fotógrafo expresa o transmite sus vivencias.
Desviaciones entre lo real visto directamente y
lo mimo visto en la imagen, son considerados a
qui como indicios ficticios. El cómo se dice
deviene tan importante como el qué se dice y
este cómo ya no es el cómo la escena real es
percibida por la visión directa. Supone un
sentido, un orden que por sí mismo no tiene.
Se impone la visualización, el modo específico
de hacer visible lo representado y en ello la
representación sumisa cede a la imposición de
un modo de presentar. La subjetivización de la
realidad en imagen supone una des-
objetivación, pues toda subjetivación desrealiza.
Cuando la imagen representa a la realidad de algún modo diferente, con una
interpretación del fotógrafo, se trata de subjetivación estética que es un proceso de
sensibilidad.
Modifica el aspecto de las cosas reales poniendo de manifiesto que “la realidad no es
así; así es como yo la veo”.
Por lo que la fotografía se centra en algo que el fotógrafo quiere mostrar, adentrando en
esta el pensamiento del mismo.
La semantización de lo real.
A la condición reproductiva de la fotografía el fotógrafo añade dos cualidades: la
estética y la expresiva. Estetización y semantización son dos formas del subjetivismo
creativo que deviene de la intervención del fotógrafo sobre la realidad para presentar el
mundo tal como él lo siente; son valores añadidos que se superponen a la mera
representación.
Cuando se representa “tal cual es” pero acentuando o añadiéndole un sentido o un
contenido se trata de subjetivación semántica, un proceso de ideación y un esfuerzo de
explicitación. Semantizar es dotar a las cosas representadas de un significado, no hay
manipulación del modelo ni de la imagen. El sujeto fotográfico pierde su condición
objetiva y emerge una irrealidad.
La manipulación física del modelo
Hay en ciertas fotografías la evidencia de
una preparación, se pueden detectar seis
recursos del procedimiento de ficción en la
manipulación directa del modelo:
1) La mise en scène, que supone una
composición bien relacionada. 2) La pose:
Retórica del gesto expresivo, el
ademán o la postura que representa
la acción.
Elemento estructurante de la
composición.
3) La expresión de los modelos la retórica
facial de las muecas y los estados
psicológicos. 4) La ambientación: decorado,
mobiliario, indumentario, etc. 5) La
iluminación, notable en los efectos de
simulación. 6) El ángulo de toma que
infunde a la imagen un carácter evidente de
ficción. La elección del ángulo es un elemento de manipulación de la representación
de lo real.
Otra forma de manipulación del modelo fotográfico es la creación del modelo,
cuando se trata de la construcción de un escenario, de un objeto ficticio o de una
maqueta.
La manipulación de lo real en la imagen.
Se manipula directamente la realidad por
medio de sus imágenes. La modificación de
las apariencias de lo real visibles sin haber
manipulado la realidad ni la copia
fotográfica. Se tarta de la modificación de la
representación por medio de los recursos de
la técnica.
La descomposición del movimiento es el
primer recurso a considerar en cuanto al
componente óptico; estas imágenes
representan la realidad, pero por tratarse de
la “realidad que no vemos” se nos antojan
artificiales. Otras formas de manipulación de
la imagen de la realidad son 1) las
sobreimpresiones que a veces logran una
gran fuerza poética; 2) Las imágenes
encajadas una dentro de la otra de manera
sucesiva o las imágenes repetidas; 3) las que
se consiguen por medio de los filtros de
efectos; 4) la exclusión de tonos intermedios,
es decir, la ruptura del tono continuo; 5) y las
variaciones que permiten modificar el color.
La manipulación material
de la imagen.
La imagen como objeto es ella misma
objeto de manipulación y reoperaciones
física que pretenden modificar su
apariencia, incorporarle un sentido estético,
infundirle una significación intencionada o
adaptarla a los imperativos de la
funcionalidad publicitaria, del grafismo o de
la ilustración editorial.
Es la forma más evidente de modificación
de la imagen analógica. Las fotografías son
recortadas, rasgadas, raspadas, agredidas
con sustancias químicas, teñidas,
coloreadas, recompuestas, recombinadas en
forma de un fotomontaje, un collage o un
rompecabezas. También son representadas
en arte polaroid y fotografismo.
Los iniciadores de estos procedimientos
fueron lo fotomontadores de la Bauhaus, practicantes de la sátira política inspirados en
el movimiento dadaísta.
Fuentes:
Jean Costa, La fotografía. Entre sumisión y subversión, México, Trillas, 1991.