Librarse de las enfermedades - tripas -...

PRECIADA AZANCOT

Lib d l f d dLibrarse de las enfermedades

Y d t i l tY de paso, aterrizar en la sensatez

www.tulga3000.com

Preciada Azancot

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Preciada Azancot

LIBRARSE DE LAS ENFERMEDADES

Y DE PASO,

ATERRIZAR EN LA SENSATEZ

Librarse de las enfermedades y de paso, aterrizar en la sensatez

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Título Original:

LIBRARSE DE LAS ENFERMEDADES Y DE PASO, ATERRIZAR EN LA SENSATEZ

Portada: Fotografía de cuadro al óleo 116 cm x 89 cm “Te sacaré de tu miseria”, de Preciada Azancot, 1985.

Editado por: Tulga3000 EDITORES, S.L. – www.tulga3000.com

© 2011 Preciada Azancot

© 2011 de la presente edición Tulga3000 EDITORES, S.L.

Advertencia: El M.A.T., tanto en su diseño como en el contenido de esta obra, están protegidos por la normativa vigente sobre patentes, marcas y propiedad intelectual. Queda rigurosamente prohibida la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, incluidos la reprografía y el tratamiento informático, así como la distribución de ejemplares mediante al-quiler o préstamo público. Queda también rigorosamente prohibida la utiliza-ción del diseño o de la marca M.A.T. sin el expreso consentimiento contractual de su creadora y propietaria, Preciada Azancot.

La información contenida en este libro es de carácter educativo, no para diag-nosticar, prescribir o tratar ningún problema de salud. Una vez se validen ofi-cialmente los descubrimientos de Doña Preciada Azancot, solo podrán aplicarla aquellos profesionales de la salud debidamente formados al MAT, como terapia coadyuvante a los tratamientos médicos prescritos por profesionales de la me-dicina.

Printed in Spain – Impreso en España

ISBN (13): 978-84-938878-0-3

Depósito legal:

Preciada Azancot

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Para los profesionales que más admiro,

los médicos de siempre y los del tercer milenio.


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Preciada Azancot

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Otras obras de Preciada Azancot, muy pronto disponibles en TULGA3000:

COLECCIÓN LA CIENCIA:

“El Esplendor de lo Humano”

“El MAT: Ciencia del Dirigente del Siglo XXI”

“El Dirigente Civilizador”

“El Estratega Pacificador”

“Metametodología MAT de la Innovación y de la Creación”

COLECCIÓN EMOCIONAL:

“El libro de tu Seguridad o cómo hacer retroceder el Miedo”

“El libro de tu Desarrollo o cómo eliminar la Tristeza”

“El libro de tu Justicia o cómo erradicar la Rabia”

“El libro de tu Estatus o cómo conquistar el Orgullo”

“El libro de tu Pertenencia o cómo obtener el Amor”

“El libro de tu Plenitud o cómo instalarse en la Alegría”

“Sociópatas de cercanías”

CUENTOS:

“La niña que hacía reír a Dios”

“Cuentos de la abuela”

Los trece de Preciada Azancot.


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“La vida que naciste para vivir”, de Juan Manuel Soto

Obras de Preciada Azancot en francés:

“La petite fille qui faisait rire Dieu”

“Le point zéro: MAT, Métamodèlle d’Analyse Transformationnelle”

Obras de Preciada Azancot en ingles:

“The Little girl who made God laugh”

“The book of your safety or how to make fear retreat”

“The Human Being Splendor”

Todos estos títulos puede adquirirlos en las mejores librerías, en

Amazon y directamente en nuestra Web – www.tulga3000.com –

tanto en formato papel como en formato e-book.

Preciada Azancot

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INDICE

PRESENTACIÓN .................................................................................................... 11

INTRODUCCIÓN ................................................................................................... 15

1. LA TORRE DE BABEL VA A LOURDES .............................................. 17

2. LA GENTE SERÍA CUERDA SI NO SE DIERA CUERDA ........... 23

3. PAVOS DE NAVIDAD .................................................................................... 77

4. LAS CELDAS DEL CONDE DE MONTECRISTO .......................... 131

5. Y TU, ¿EN QUE CELDA ESTÁS? .......................................................... 203

6. EL REY ESTA DESNUDO ......................................................................... 223

7. Y SERÉIS COMO DIOSES ........................................................................ 241

8. EL CORAZÓN ACORAZADO ................................................................... 247

9. "¡NO RESPIRE! ... !RESPIRE," ................................................................ 289

10. ¡MAS MADERA! ¡ES LA GUERRA! .................................................... 331

11. LA RISA DE DIOS: ..................................................................................... 365


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Preciada Azancot

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PRESENTACIÓN


es la primera obra que sale a la luz desde Tulga3000 Editores, empresa

editorial creada para grandes talentos, quiere esto decir, vocacional-

mente al servicio de los grandes talentos. Nuestro lema “What is, will

always be more” (“Lo que es, siempre será más”) nos anima a descu-

brir tempranamente lo que ES - el talento creador, la genialidad, la

creación -, pues lo que ES siempre será más por mucho que la mayoría

no quiera reconocerlo e incluso lo denoste. Basta ya de reconocer a los

genios y a las grandes figuras una vez muertos, cuando “ya no moles-

tan”. Démosles su sitio aquí y ahora. Pues a quien nos trae un algo de

Eternidad, debemos admirarlo y protegerlo en vida.

Nuestra andadura comienza publicando a la propia creadora del MAT,

Doña Preciada Azancot, genio literario además de genio de la pintura y,

mucho más que genio en su creación del MAT – Metamodelo de Análi-

sis Transformacional - y sobre todo en su mayor obra de arte, su pro-

pia vida. Nacemos en Jávea, pequeña y bella ciudad multicultural de la

Costa Blanca española, y nacemos con vocación universalista.

Con objeto de localizar, reconocer y promocionar a grandes talentos

literarios por descubrir, lanzaremos en breve los Tulga3000 Awards,


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que premiarán a los autores con mayor nivel de creación y talento.

Entrando ya en la obra que les aquí les brindamos, cabe señalar que

durante más de dos años, Doña Preciada Azancot, tras verificar la vali-

dez del MAT - Metamodelo de Análisis Transformacional - sobre más de

120.000 casos, estuvo investigando en el Hospital Universitario de La

Princesa de Madrid, bajo la supervisión y tutela del Doctor Graciano

Martín Pérez, entonces Jefe del Servicio de Cardiología, sobre la exis-

tencia de patrones emocionales de conducta que favorecen ciertas en-

fermedades de alto riesgo tales como las cardiopatías, el cáncer, las

neumopatías, las neuropatías y las enfermedades nutricionales.

Las investigaciones de Preciada Azancot sobre enfermedades de alto

riesgo han localizado, descubierto y verificado disfunciones emociona-

les típicas de las víctimas de las enfermedades de alto riesgo investiga-

das. Estas disfunciones características conforman patrones de conduc-

ta - correlatos absolutos de las desviaciones precisas del patrón de in-

geniería correspondiente - perfectamente identificables y corregibles

con el MAT.

Dichos resultados fueron expuestos en mayo de 2010 en un acto so-

lemne presentado por el Decano de la Facultad de Medicina de Zarago-

za y el Presidente del Ilustre Colegio de Médicos de Zaragoza a más de

180 médicos que estimaron dichos resultados como siendo un nuevo paradigma en las ciencias de la salud.

En la primera parte de esta obra, Preciada Azancot nos explica, con

Preciada Azancot

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humor travieso y preclaro, por qué estamos la mayoría de los seres

humanos de espaldas a nuestro ser y cuál es el proceso que nos permi-

tiría recuperar todas nuestras capacidades.

En la segunda parte de la obra, Preciada nos desvela los sorprendentes

resultados de sus investigaciones hospitalarias y apunta los tratamien-

tos MAT coadyuvantes de los tratamientos clínicos existentes para la

prevención y tratamiento de las enfermedades de alto riesgo.

Es deseo de la autora que sus tan admirados médicos, a través de pro-

gramas de investigación clínica promovidos por universidades y funda-

ciones, validen los resultados y extiendan su aplicación para la mejora

de la salud general de todos los seres humanos.

En Tulga3000 creemos que esta obra de nuestra genial autora podría

suponer un salto inmenso en la prevención y tratamiento de las enfer-

medades, ahorrándonos a todos sufrimientos y gastos, erradicando

gran parte de las causas de tristeza real de la humanidad. Todo depen-

derá de que las instituciones y organismos competentes se tomen la

molestia de tan sólo comprobarlo. ¡Confiemos en que sí!

Antonio Gálvez Editor Tulga3000 Editores, S.L. Jávea, mayo de 2011


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Preciada Azancot

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INTRODUCCIÓN

Soy la niña del cuento "El rey está desnudo". Hoy deambulo en

bata blanca por un hospital. Ayer noche vestí traje sastre para

mis reuniones de dirección. Antes, guisé y lavé pañales, y antes

que antes, fui la hija mayor de una familia feliz. Tan feliz como la

tuya o la del vecino de la casa de enfrente. Tan loca como ellas,

también. Tan cruel y necia, igualmente. Y muy cómica, eso sí.

Tan cómica como la tuya.

Desde que dije "El rey está desnudo" no he vuelto a abrir la boca

en público. Hubiera sido inútil, pues los demás hubieran segui-

do haciendo sus reverencias y rindiendo pleitesía a otro mono

desnudo y peludo como aquél. Alguien escribió mi cuento. Al-

guien bien intencionado, cierto, pero muy mentiroso. Inventó un

final sensato. Debía ser un Constructor desconectado, como ve-

remos más adelante. Lo cierto es que me contestaron "¡Calla ni-

ña!" y siguieron pasmándose ante las inexistentes vestiduras

reales de quien, por lo demás, no era rey; era dueño de unas

tiendas de ultramarinos. Lo dije. Me repitieron "¡Calla niña!".

Desde entonces, no hablo ante las masas, pues sólo se me ocu-

rre decir evidencias como aquellas.

Hoy os escribo porque he hecho otro descubrimiento sensacio-


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nal: Dios no acaba con este loco mundo, loco y cruel, triste, in-

seguro y muy necio, porque somos todos tan surrealistas, incon-

gruentes y divertidos, que se ríe con nosotros, no de nosotros,

todo el tiempo. Somos su película de los hermanos Marx y lo

hacemos gratis, en función continua. Desde que descubrí esto,

también me río y pensé que, tal vez, sería generoso contaros lo

que Vemos para que os riáis con Nosotros (obviamente, las

mayúsculas no son para mí). Cuando me dijeron "¡Calla niña!",

aún no sabía escribir, afortunadamente. Si no, hubiera hecho

una pintada en la pared pues mi voz es endeble. Me hubieran

dicho "¡No escribas, niña!". Y no hubiera podido contaros este

cuento.

Preciada Azancot

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1. LA TORRE DE BABEL VA A LOURDES

Durante todo el tiempo que trabajé para importantes empresas,

en tres continentes y en cuatro idiomas, no reí tampoco. En esos

lugares, nadie debe reír. Lo pondrían de patitas en la calle. Allí

éramos, todos, gente importante y por ende, seria. Y yo debía ser

la más seria, pues se suponía que me pagaban para que les en-

señara a producir más cosas, a venderlas más caras y en mayor

cantidad. Hacía mi trabajo seriamente. La ventaja de ello es que

no tengo patas de gallo alrededor de los ojos. Ningún consultor

importante tiene esas vergonzosas marcas de relajo y de falta de

seriedad. No le harían caso alguno. ¿Quién contrataría como

director de procesos de cambio estratégico al consultor que lan-

zaría una gloriosa carcajada como diagnóstico de un consejo de

administración? Así que cabeceaba gravemente, frunciendo un

ceño empollón y decía, con tono trascendente, las cuatro cho-

rradas de rigor. Pero luego me las arreglaba para que, por turno,

cada directivo me invitara a tomar café. Y entonces, como anta-

ño, hacía, informalmente, mis desnudos comentarios. Los hacía

sólo porque quería saber si ellos también me dirían “¡calla, ni-

ña!”, pues había observado que, a veces, la gente sólo me lo de-

cía cuando había público oyéndonos.


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Al fin y al cabo, tomando café se pueden decir muchas cosas que

una niña de tres años se puede permitir. Mi interlocutor, antes

admirativo ante mi brillante currículum, mi elegante porte y mi

fluida fraseología directiva, arqueaba las cejas, se atragantaba,

me decía luego "¡Calla niña!", creía haber tenido una alucinación

auditiva y se disculpaba. Luego nos despedíamos muy formal-

mente. Pero algo había cambiado en el otro: tenía la mirada bri-

llante y sensata de un niño de 3 años. Al día siguiente, se arre-

glaba para acortar las reuniones y me volvía a invitar a tomar

café. Yo adquirí así el vicio de la cafeína. Y ellos, multiplicaron

sus cifras por multiplicadores tan (irrazonablemente) increíbles,

que mi reputación creció y me apodaron "la U.C.I.". Cuando una

empresa iba mal, me invitaban a tomar cafés y la empresa se

curaba. Yo no entendía por qué, pero lo cierto es que me gusta el

café y que no me molesta que me digan "¡Calla niña!". Es hala-

gador cuando se tiene más de sesenta años y se es abuela.

Algún día Lea, mi nieta, me lo dirá. Claro que, al paso en que

voy, es la última frase que oiré antes de morir y me reiré, igual

que me río hoy.

Tanto me llamaron la U.C.I., que fui a ver cómo era una Unidad

de Cuidados Intensivos en un hospital de verdad. Allí me quedé

durante dos años, en el hospital, no en la U.C.I., porque allá, ni

los enfermos ni los médicos te invitan a tomar café. Me quedé

observando, muy seria y calladita, las salas de oncología, neu-

mología, cardiología, S.I.D.A., neurología, nutrición, etc. Tomé

Preciada Azancot

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mucho café y tanto los enfermos como los médicos me dijeron

"¡Calla niña!" no sé cuantas veces pero, de hecho, me pasaba el

tiempo en la cafetería con ellos.

Al comienzo, mi entrenada seriedad me ayudó a llorar mucho,

pues la verdad es que, en un hospital, todo era bastante más

dramático que en los consejos de dirección de las pulcras y lujo-

sas empresas a las cuales estaba acostumbrada.

Allí estaba en juego algo más que números en balances semes-

trales.

Ver gente sufrir y morir no me hacía gracia. Estuve triste y lloro-

sa, luego sentí crecer una sana furia reactiva y alcé mis puños

contra Dios, luego descubrí las causas y los remedios de todas

esas espantosas dolencias y desde entonces me río. Río porque

estoy contenta. Cualquiera lo estaría en mi lugar. Así que decidí

contar este cuento porque se ríe mejor en compañía de la risa de

Dios. Es preciosa la risa de Dios. Suena como una fuente llena

de campanitas y él no dice nunca "¡Calla niña!", pues, cuando se

acierta, Él se ríe. Te da un beso y se ríe. Y está orgulloso de ti. A

Su lado todo es sensato. Y no necesitas tomar café para decir lo

que te viene en gana. Es un buen padre. Te lo recomiendo.


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Lo cierto es que Sus hijos le salieron todos pésimos matemáticos

y aún más malísimos administradores.

A cada uno le dio seis cheques en blanco que podrían convertir-

los en poseedores de una fortuna de varios Billones y que, el me-

jor dotado, convierte en un peculio de 88.

Hice estadísticas sobre la raza humana y éste es el balance de la

fortuna actual de Sus hijos.

El 2% : 88

El 15% : 40

El 10%: 10

El 55% : 20%

El 15% : 3

El 3%: -11 (déficit) o menos.

Como administran el mundo igual que sus cheques en blanco no

hay que pasmarse de que existan el hambre, el frío y las enfer-

medades en el mundo. El milagro aparente es que algunos pue-

dan comer y no morir de calamitación endémica. El secreto de la

bonanza de la cual, no obstante nuestra negligencia, gozamos,

es que la fauna y la flora de nuestro planeta se saben adminis-

Preciada Azancot

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trar mejor que nosotros. Cuando los dejamos decidir, lo que

tampoco hacemos, salvo en las raras ocasiones en que nos dis-

traemos.

Lo cierto también es que, entre la fauna y la flora se encuentran

miles - millones tal vez - de variedades, pero, entre los seres

humanos, tan solo existen siete variedades que se injertan entre

sí para ver si mejora la raza y que sólo producen 41 especíme-

nes, los cuales se dividen las magras ganancias comunitarias

como les acabo de mostrar.

Como, además, cada uno de esos especímenes habla uno de los

siete idiomas que se inventaron, y que todos se empeñan en

hablarse entre sí en el propio, sin aprender ni un solo idioma

extranjero, estamos todos en la torre de Babel. Cada cual habla

su idioma como si fuera el único posible, y cuando no lo entien-

den, grita. Y cuando tampoco lo entienden, pega.

Luego enferma y va al hospital, donde tampoco lo entienden.

Entonces va a Lourdes.


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Librarse de las enfermedades - tripas -...

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