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    , G e ra rd D e lad alle

    E E R A P E IR C E H O Y" o n u n e n s a y o d e P e i r c e s o b r e H L ar e a / i d a d d e D i o s "C narle Sandor Peirce(1859-1914) es uno delos fundadores m as im -~ ()rtan te s d el p en sam ien to c on -

    ~em po raneo. T nv en to r d e la log i-! , l d e re la cio n es , l a 16g ica deuant i f icadores y la lo gic a triv a-

    G erald D eladalle, uno de losm as distin gu id os esp ecia lis tasen el pensam ien to de Peirce ,ofrece aqu i una presentac ion dela v ida y obra del g ran fil6 so fon orte arn erica no , d efin ien do Slllu gar sig nificativ o en la historia

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    Dios" se apoya, de hecho, en todas las tesis que Peirce defiende:realismo escotista, concepcion pragmatista del pensamientocaracter dinamico de la naturaleza de los Universos, presenciaafectiva, fisica y logica del hombre en el mundo y en continuidadcon 1 3 1 .

    La conclusion explica el modo en que, ami criterio, hay queleer a Peirce para poder comprender la filosofia que nos propo-ne: estructural, pero dialectico, logico, pero experimental, for-mal, pero funcional, riguroso, pero falible, contextual, provisio-nal, abierto.

    Todos estos estudios, excepto dos -la primera parte y laconclusion- han sido publicados en revistas 0 en libros hoyagotados, en el curso de los treinta y cinco ultimos afios. Los heelegido porque todos ellos constituian unidades acabadas yporque, de ese modo, corria menos riesgo de repetirme. No dudeen efectuar cortes cuando me parecio necesario para el equili-brio y la coherencia del conjunto. Las repeticiones son irnputa-bles al punta de vista adoptado, que es el del comparatista. Nohe incluido ninguna exposicion, ya fuera teorica 0 practica.

    Luego de la conclusion, ofrezco una lista cronologica de losarticulos utilizados con el titulo de los capitulos 0 secciones dela presente obra. Rice figurar entre corchetes al final de cadacapitulo 0 seccion de capitulo la fecha de publicacion 0, para losineditos, la fecha de redaccion. Agradezco a los editores que mehan autorizado a reproducir total 0 parcialmente los textos yapublicados.

    Montbazin, 29 de marzo de 1990.Notas

    1. AmsterdamIFiladelfia, John Benjamins, 1987. Vease tambien, parasituar a Peirce, mi obra sobreLaphilosophic americaine, Bruselas, DeBoeck-Wesmael, 1987.

    2. Vease Theorie etpratique du signe, Paris, Payot, 1979.

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    PRIMERA PARTECharles S. Peirce

    EI hombre y sus obras. Un esbozo

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    IIir Charles S. Peirce nacio en Cambridge, Massachusetts, el10deseptiembre de 1839, en elseno deuna familia dematerna-ticos. Su padre, Benjamin Peirce, ensefio en Harvard durantecasimedio siglo, primero matematicas y fisica, luego materna-ticas y astronomia. Su hijo James Mills, el hermano mayor deCharles Sanders, se leunira y ensefiara a su vez matematicasdurante mas de cuarenta afios.

    Benjamin Peirce se ocupo personalmente de la formacionde su hijo Charles. Por supuesto, de su formacion matematicateorica enprimer lugar. Laprimera frase dellibro queBenjaminPeirce publico sobre el Algebra Z6gica asociativa definia larnatematica como"la ciencia de las conclusiones necesarias".Charles S.Peirce extendera esta definicionala logica.BenjaminPeirce queria iniciar a su hijo tambien en las matematicasaplicadas, y secuenta que,muyjoven min, Charles recibiode supadre una tabla delogaritmos cuyomanejo debio descubrir porsi mismo, contentandose con dos ejemplos comotoda explica-cion:uno referido a la manera de encontrar ellogaritmo de unmimero, elotroa lamultiplicacion delosmimeros porlogaritmos.

    Charles Peirce comprendera unos veinte afios mas tardeque el analisis matematico no era mas que un aspecto delanalisis: su aspecto mental, y Ieparecio indispensable desarro-llar su aspecto sensorial. Por 10 cual se pondra en manos de unsommelier frances, gran conocedor del Medoc, quien tenia lamision de formarle el gusto. La experiencia fue determinante.Charles Peirce adquirio un sentido gustativo que notenia nadaque envidiarle a un degustador profesional. Pero Peirce adqui-rio almismo tiempo la reputacion deentregarse ala bebida. Lo

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    que no dej6 de crearle algunos problemas en la sociedad purita_na de Nueva Inglaterra.

    No sorprendera entonces que, apenas a la edad de doceafios, Charles montara por si solo un laboratorio de quimica ."fdonde emprende analisis complejos, ni que luego de haberobtenido su licenciatura de matematicas en Harvard en 1859 yla maestria en 1862, preparara el ario siguiente y rindiera conexito una licenciatura en quimica summa cum laude, otorgadapor primera vez en Harvard, ni que, mas tarde, maestro deconferencia de 16gica, realizara experiencias con el psicologoJoseph J astrow entre 1880 y 1884 sobre "las pequefias diferen-cias de percepci6n sensorial".

    La precocidad de Peirce se manifest6 tambien en sus - tlecturas. A los 13 afios lee la L6gica de Whately. Algunos afios imas tarde, estudia las Cartas sabre la educaci6n estetica del Iihombre de Schiller. Dedica luego dos horas por dia durante tresafios a la lectura de la Critica de la raz6n pura que, como el :mismo dice, terminara por conocer de memoria (1.4). f

    Durante toda su vida, fueron estos los tres grandes temas tde reflexi6n: la 16gica, la naturaleza del sentimiento -10 que Irapidamente denominara primeridad- y el problema de las )!categorias. A estos temas aplicara el metodo analitico de los Imatematicos, es cierto, pero tambien el metodo analitico de los thombres de laboratorio. !IIpenas obtiene su licenciatura en matematicas, Peirce seemplea en el"Servicio Geodesico de los Estados Unidos" (UnitedStates Coast and Geodetic Survey). Pero su trabajo es tan pocoexigente que en 1860 puede dar cursos de logica y de historia delas ciencias en Harvard yen el Instituto Lowell, emprender unaexpedici6n de historia natural con Agassiz y, como 10 hemosvisto, completar su formaci6n cientifica.En el Servicio Geodesico, para el cual Peirce trabaj6durante mas de treinta afios, de 1859 a 1891, se consagr6 amultiples tareas cientificas, especialmente entre 1870 y 1877.En 1870 recorre Europa en busca de un sitio desde donde poderobservar el eclipse de sol del 22 de diciembre en las mejorescondiciones; en 1880 calcu1a el valor de la gravedad en Paris enlas instalaciones del Observatorio.

    En 1862, a la edad de 23 afios, Peirce habia desposado a18

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    una muchacha de la alta sociedad de Cambridge, quien 10abandon6 en 1876. Volvi6 a casarse en 1884 con una francesa,Juliette Annette Pourtalais, Froissy de apellido de solterasegUn el certificado de matrimonio civil de Nueva York. Pero losorigenes de Juliette, de quien no se ha encontrado el acta denacimiento ni la de su primer matrimonio, ni el acta de falleci-rniento de su primer marido ni tampoco la del matrimonioreligioso que supuestamente tuvo lugar en Paris, permanecenaun en el misterio, a pesar de pacientes y minuciosas investiga-ciones. Charles y Juliette no tuvieron hijos.

    En 1887, Peirce se retira con su mujer a Milford, enPennsylvania, don de durante todo el resto de su vida se dedica-ra, con una constancia admirable en medio de dificultadesmultiples, sobre todo financieras, a perfeccionar su filosofia y aconvencer a los fi16sofos de su interes, Sin gran exito, salvoentre los mas grandes, William James y Josiah Royce, y dealgunos 16gicos como Schroeder. Muri6 pobre y desconocido, sinhaber concluido su obra, en Milford, el19 de abril de 1914.

    ** *Podemos preguntarnos por que Peirce no abandon6 el

    Servicio Geodesico por la ensefianza, a la que se habia dedicadocuando apenas habia terminado sus estudios. No es por nohaberlo intentado gran mimero de veces entre 1865 y 1895.Pareci6 incluso haber logrado sus fines cuando se Ie confi6 en1879 la catedra de logica en la Universidad Johns Hopkins.Pero le fue retirada en 1884, y Peirce s610dio ciclos de conferen-cias como los que el pragmatismo, puesto de moda por WilliamJames, le permiti6 dar en 1903.Lafecha de 1884 es un claro indicio de las razones socialesoficiales que motivaron la supresi6n de la catedra de 16gica dePeirce en la Universidad Johns Hopkins. Peirce acababa dedivorciarse y volverse a casar con una mujer que pasaba porexcentrica, y el Medoc no tenia secretos para el. Pero habia otrasrazones inherentes al tema de su ensefianza, la logica, y al modoen que ella impartia. Sus cursos eran dificiles de seguir, llenosde digresiones y non sequitur; segiin una de sus alumnas,

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    Christine Ladd, Peirce "no hacia ningun esfuerzo por Ii .:id tre js f d 1 . 19ar sus1eas en re si y ar es cierta coherencia".l La mat. .. ena era.nueva, po~,clerto, pero su tem~era~ento, su situaci6n social :su formacion (su padre no habia dejado de decirle que s ' Yt 't' , d '1' eria unrna ema lCOmas gran e que e misrno) no 10predisponian 1. d 1 . ~ a asconcesiones, e tipo que rueran. Y el tenia perfecta concienciade ello, segura como estaba de detentar el verdadero met dfilos6fico. ~s~a dolorosa lucidez aparece en este retrato qU~ e~traza. d,eSlm~sm? en una ca~ta a Wil~iam James: "Poco a poco,adquiri un airecillo bravucon que dice 10 que quiere decirsaber: Usted es un tipo muy valeroso en su genero; quien 'e:usted,.no 10se ni me importa, pero yo, como usted sabe, soy elSr. Peirce, famoso por mis multiples descubrimientos cientifi-cos, pero sobre todo por mi extrema modestia, y en eso soyimbatible".2

    Cuando murio, el 9 de abril de 1914, Peirce no habiapublicado mas que un solo volumen: Photometric Researches(1878), donde exponia el resultado de sus trabajos de astrono-mia y geofisica, articulos tecnicos de logica matematioa y demetodologia cientifica y trabajos a destajo: articulos de divulga-cion, colaboraci6n en Diccionarios, resefias de obras cientificasy filos6ficas, que, con la ayuda sustancial de James, le habianpermitido sobrevivir. Dejaba gran cantidad de manuscritos,que su viuda vendi6 a Harvard.

    Le debemos al filosofo norteamericano Morris R. Cohen laprimera antologia de textos de Peirce: Chance, Love and Logic.Esta antologia, publicada en 1923, comprendia un articulo deJohn Dewey sobre la originalidad y Ia fecundidad del pensa-miento de Peirce, y una bibliografia detallada. Esta antologiahizo descubrir a Peirce aljoven16gico ingles F. P. Ramsey, qui enmas tarde haria de ella en Cambridge el tema de sus conversa-ciones con Wittgenstein en 1929 y 1930. N6tese que en esemismo afio 1923 se publicaba la celebre obra de Ogden yRichards, The Meaning ofMeaning, que atraia la atenci6n delpublico sobre la semi6tica de Peirce y que, en la resefia queescribi6 para Mind en 1924, Ramsey mencionaba muy especial-mente "su excelente apendice sobre Peirce". 3Entre 1931 y 1935,se publicaban los seis primeros vohirnenes de los CollectedPapers (Harvard University Press), bajo la direcci6n de Charles20

    Hartshorne y Paul Weiss. Otros dos volumenes aparecieron en1958 bajo la direcci6n de Arthur Burks. Las contribuciones dePeirce ala revista TheNation, reunidas por Kenneth L. Ketnery James E. Cook fueron publicadas por Texas Tech Press encuatro vohimenes, de 1975 a 1987. Una parte de la correspon-dencia de Peirce fue publicada bajo el titulo Semiotic andSignifies. The Correspondence Between Charles S. Peirce andLady Welby (Indiana University Press), gracias al empefio deCharles S. Hardwick, asistido porJames E.Cook, en 1977. Unaprimera edici6n que s610 reunia las cartas de Peirce habiaaparecido en la editorial Whitlock, New Haven, Conn., presen-tadas por Irwin C. Lieb, en 1953. En 1976, Carolyn Eisele hizopublicar en la editorial Mouton los escritos maternaticos dePeirce en cuatro vohimenes, bajo e1titulo TheNew Elements ofMathematics. Esta en curso una edici6n cronol6gica de las obrasde Peirce, establecida por el Peirce Edition Project, cuyo actualdirector es Christian J. W. Kloesel. Hasta hoy han aparecidocuatro vohimenes en la Indiana University Press.

    ** *Es aun demasiado pronto para decir cual sera ellugar de

    Peirce en la historia del pensamiento. En todo caso, superaralos Iimites geograficos de los Estados Unidos de America. Pei~cesolia compararse con Arist6teles, Duns Escoto y Leibniz, los"tres mas gran des logicos",? segun el. Le reconocia a Leibniz laventaja de haber abordado el campo de la logica moderna antesdel comienzo de la cosecha.f Se Ie reconocera a Peirce lasuperioridad de haber ampliado el campo de la 16gica a lasdimensiones de la semi6tica y de haber dado por fundamento aesta ultima una filosofia fenomeno16gica 0, mas exactamente,fanerosc6pica y pragmatica, cuyo caracter ic6nico e indicial nologran captar los logicos de hoy, fascinados como estan por e1simbolo. Pero llegara el momento en que la filosofia retome supoder de jurisdicci6n y atribuya a la 16gica nuevas fronteras ynuevas funciones. [1977]

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    Notas1. Philip P. Wiener y Frederic H. Yaung (comps.), Studies in th.

    Philosophy of Ch. S. Peirce, Harvard University Press, 1952, p . 291. e2.Citado par R. B.Perry, The Thought and Character ofWilliam JamesBoston, Little, Brown and Co., 1935, vol. I, p. 538. '3.Frank. P. Ramsey, reseiia de The Meaning ofMeaning, Mind, 1924,p.109.4. Citado par Max H. Fisch, "Peirce's Place in American Thaught",ArsSemeiotica, 1988,p. 35.5. Ibid.

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    SEGUNDA PARTEEIpensamiento de PeirceSu lugar en la historia de las ideas

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    1La filosofia de Peirce

    Perspectiva caballeraCharles Sanders Peirce es un 16gico. Su 16gica comprende,

    sin embargo, terrenos tradicionalmente reservados a la psicolo-gia y a la metafisica. Lo que hace que la logica resuelva pro-blemas psico16gicos y metafisicos. EI asunto seria saber si estassoluciones son efectivamente soluciones 16gicas. Tal es la dificilcuestion que plantea la logica de Peirce. Evaluaremos su dificul-tad examinando la teoria peirceana dela significacion y de lossignos 0semiotica y 1adoctrina de las categorias y los conceptosofaneroscopia. En el camino precisaremos e1sentido que cobranen Peirce las palabras "pragmatismo", "pragmaticismo","sinequismo", "tiquismo", "agapismo", y otros nombres quePeirce, poco avaro en neologismos, dio a su filosofia.

    La teoria de la significaci6n y de los signosLa teoria de los signos de 1868,. La teoria de los signos

    encuentra su primera expresi6n en dos articulos publicados enThe Journal of Speculative Philosophy en 1968: "ConcerningCertain Faculties Claimed for Man" y "Some Consequences ofFour Incapacities".

    Dado que todos los pensamientos 0 conocimientos sonsignos, "se sigue que todos los pensamientos deben dirigirseellos mismos a otros pensamientos, puesto que tal es la esenciadel signo" (5.253). El signa es una cualidad material que seaplica de un modo puramente denotativo 0demostrativo y que

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    tiene la funcion de representar. La originalidad de la t ' dP . id 1 eoria eeirce resi een a concepcion de las dos ultimas caracte ' ti'. ns Icasuna vez que se admite que el SIgnOpo see cualidades int ' ,. laci , 1" nnsecass~n relaclOn con e significado, que la palabra "diamante", porejemp 0, se compone de ocho letras.Peirce distingue la "aplicacion denotativa" de un signn d"fu . , t ti "u esu. n~:on repres:n a Iva. na es real; la otra, simbolica. La

    aphca~lOn de:r:~tabva de un signo es el hecho, para ese signo, deestar hgado ffsicamente a su objeto, ya sea directa 0 indirecta_men~:, dado su vinculo con otro signo (5.287). En cuanto a laf~nclO~ representativa, esta "no reside ni en su cualidad mate-nal., m en su pura aplicacion demostrativa, porque es algo quee! signo es, no en si rrnsrno 0 en una relacion real con su objeto,smo respecto de un pensamiento" (ibid.) que 10 interpreta 0~~glin la expresion de Peirce que conservaremos, respecto de unmterpretante".

    ;_,CuM es la naturaleza de ese interpretante? Cuando Peircehabla de "pensamiento que interpreta", con "pensamiento" nodesi?TIa a un sujeto pensanto, sino, directamente, a un pen-samiento 0 conocimiento. Ahora bien, dijimos que todo pensa-miento es un signo. La primera observacion que debe hacersees, ~ues,. que el interpretante de un signo es otro signo, y queel signo mterpretante de un signo requiere el mismo de otrosigna interpretante, sin que sea posible, al parecer, detenerseen un. interpretante final. No obstante, Peirce afirma que noh~y mn~na excepcion a la ley segiin la cual "todos los pensa-mlentos-Slgnos son traducidos 0 interpretados por los pen-samientos-signos siguientes, salvo en el caso del fin brutal detodopensamiento en la muerte" (5.284).1 Lo que puede quererdecir que si el sujeto de la Iogioa, el hombre, desaparece, la seriede los signos se quiebra, pero que, en esta muerte, el Ultimosigno habria tenido urisigno subsecuente, un interpretante. Loque es final no es el signo, sino la vida del hombre que ha llegadoa su termino.

    En resumen, el mundo pensado es un mundo de signos.Cada signo esa la vez interpretante einterpretado: interpretantedel que antecede, e interpretado por el que sigue.

    La teoria de la significaci6n de 1877-1878. La teoria de lasignificaci on es descripta en los celebres articulos deMonist de26

    'r 1877 y 1878 que fueron publicados en laRevue philosophique en' ~ Idiciembre de 1878 y enero de 1879, con los siguientes titulos~ espectivos: "Comment se fixe la croyance" y "Comment rendre;, r OS idees claires". Este ultimo articulo habia sido eserito direc-i ~amente en frances en 1877. Son la primera expresion del:. 1 pragmatismo norteamericano., ,~ Peirce, como Descartes, esta a la busqueda de la certeza.~~' f La solucion cartesiana no satisface a Peirce, quien quiere saber-. en que se reconoce que una idea es clara y distinta. ,

    fEn el primer articulo, Peirce muestra que el hombre actua''J porque cree en la eficacia de su accion. "Creencia" no significa1 "fe religiosa", sino "habito mental" que determina nuestrasI acciones (VI.556).2 Sin embargo, la accion del hombre no es. . I f corporal; es tambien racional, y el razonamiento depende en-t tonces, como la acci6n, de ese habito mental que es la creencia.-! Peirce 10 dice expresamente: "Lo que nos lleva a extraer def premisas dadas una consecuencia y no otra ~s cierto .ha?i~o

    mental. Una formula de este tipo es denommada prtnciptorector de inferencia" iibid.). Pero 10 que esta primero no es laverdad, sino el habito, creencia 0 certeza, que puede ser falsa,porque "buscamos una creencia que pensamos verdadera" y,desde luego, pens amos que cada una de nuestras creencias esverdadera (VI.559).

    Ala creencia se opone la duda, "estado de incomodidad ydescontento del que uno se esfuerza en salir para alcanzar elestado de creencia" (VI.558). Producir este efecto es 10 propio delrnetodo cientifico. Es por ella que Peirce emplea la palabra"husqueda". La busqueda es, pues, el refuerzo de un habitomental.

    Una vez comprendido -0 admitido=- esto, podemos pasaral examen del segundo articulo. "Hemos reconocido que elpensamiento es conducido ala accion por la irritacion.de la du~ay que esta deja de actuar apenas se alcanza la creencia, es de~lruna vez que el habito recobra sus derechos. La marca esencialdela creencia es el establecimiento de un habito, y las diferentesespecies de creencias se distinguen por los diversos modos deacci6n que producen; entonces, "si las creencias no difieren bajoeste aspecto, si ponen termino a la misma duda creando lamisma regla de accion, simples diferencias en el modo de

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    percibir no bastan para convertirlas en creencias diferentes.como tampoco tocar una melodia con diferentes teclas (si) ,tocar melodf dif c es -ocar me 0 las I erentes" (VII.45). De allf se desprende la re I "'i;que debe seguirse para hacer claras las ideas: "Considerar Y a , C I : l 1 E 2fi t ' ti os ~.e ~c os prac ICOSque pensamos pueden ser producidos por elobjeto de nuestra concepcion. La concepcion de todos estoefectos es la ~o~c~pcion del objeto" (VIl.48). Es 10 que se h: .~llamado el prmcipio del pragmatismo.

    Este principio no solo permite precisar si una mismapalabra tiene dos significaci ones diferentes 0 si dos palabrasque tienen las mismas consecuencias practicas tienen una solasignificacion: tambien permite precisar la significacion de un"objeto". GQue significaci on asignamos a la palabra "duro"cuand_.odecimos que una cosa es dura, se pregunta Peirce?Creemos significar, responde, que un gran numero de otrascosas no pueden rayarla. Pero una cosa solo sera dura despuesde haber sido sometida a un test, a una prueba, es decir a unintento de rayarla con divers as cosas consideradas como duras.En tanto esta experiencia no tenga lugar, "no hay absolutamen-te ninguna diferencia entre una cosa dura y una cosa blanda".

    Si no se profundiza demasiado, la teoria de Peirce escomprensible. Evidentemente, no se puede saber que una cosaes dura antes de haber verificado, experimentado su dureza. Elresultado de este test es 10 que nos garantiza la dureza de lacosa. Pero si se pesan las palabras que Peirce utiliza paraexpresar su concepcion, quedamos algo desorientados. GLaexperimentacion de la idea que tenemos de una cosa cambia lanaturaleza de esa cosa? Si, por una razon cualquiera, nopodemos verificar la dureza del diamante, Gsesigue de esto queel diamante no es duro y que puede ser blando? Peirce 10 afirma.Su teoria parece entonces bastante fragil. La verificacion deuna idea, subjetiva por definicion, no depende, como podriaesperarse, de los efectos de una cosa sobre un sujeto, indepen-diente del sujeto que los experimenta, sino de los efectos sobreuna cosa de una experimentacion llevada a cabo por un sujeto;la concepcion -subjetiva- de estos efectos constituye, como 10hemos visto, la concepcion completa -objetiva- de la cosa.

    Consciente de esta dificultad, Peirce se vio obligado a .precisar en 1903 el sentido de sus afirmaciones de 1878. El no28

    e poner en duda la realidad de la dureza del diamante, seaere .' 1 rifiono verificada su dureza, SIno q_uesostiene que a no .ve lca-. 'n le impide a "la dureza del diamarite tener la realzdad que

    ~: otro modo sin duda habria tenido:~{5.457). G~n que co~sisteentonces la realidad de la dureza del diamante mdependlente-

    ente de su verificacion experimental? Es la "verdad de una;oposicion general condicional". cuya forrr.lUlaci~n es _la si-guiente: "Si cierto tipo de srist.ancra es sometIdo a cierto tIp~ deccion (agency), se seguira cierto tipo de resultado sensible

    aonforme a la experiencia adquirida hasta entonces" (ibid.).cd' Asi precisada, la teoria de la significacion pue e resumirsecomo sigue: la significacion de una idea 0 creencia depende delaactualizacion por un sujeto de una posibilidad real objetiva,actualizacion que refuerza un habito mental subjetivo descrip-to como creencia en esa posibilidad real.La ultima teoria de la significaci6n y de los signos. En susescritos posteriores a 1904 referidos ala teoria de la significa-cion y de los signos, recopilados en los Collected Papers bajo larubrica "A Survey of Pragmaticism", Peirce defiende 10 que elllama entonces su "pragmaticismo" contra los otros pragmatis-mos, y propone su teoria de la semiosis 0 signo-accion. quevamos a sxaminar.i'Peirce define primero el interpretante del signo. El inter-pretante deun signo es su resultado significativo, "the sig~ificateoutcome of a sign" (5.474). Un signo puede tener tres tipos deinterpretantes respectivamente: afectivo (emotional), energeti-CO y logico. "El primerefecto propiamente significativo de unsigno es el sentimiento que produce. Hay casi siempre unsentimiento que interpretamos como la prueba de que compren-demos el efecto propio del signo, aun cuando esta base deverdadsea a menudo muy fragil. Este interpretante afectivo, como 10denomino, puede sermucho mas que un simple sentimiento dereconocimiento (acknowledgment) y, en ciertos casos, es elunico efecto propiamente significativo que el signo produce."Asi, un fragmento musical es un s~gno cuyo interpretanteafectivo es el unico interpretante. El mterpretante energetIcoimplica un esfuerzo para actuar por parte del sujeto, ya seacorporalmente, ya sea mentalmente. Aun mental, este inter-pretante no es la "significacion de un concepto" (5.475), en que

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    consist~ ~n cambio ~l interpretante logico (5.476). El interpre;tant~ logico de un SIgnOes, pues, su significacion, efecto sign],ficativo de ese signo.

    . Significaci6n-efecto significativo, l,cu

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    Las categorias y la faneroscopia

    Dejando de lado la influencia indirecta de las id1 " 1 easevo ucionistas, a teoria de la significacion y de los signos. . ~apnmera VIsta una creacion original. Pero se comprende me'. 1 ., d aorsi se a situa entro de una teoria mas amplia como la te 'c ,. d onalaneroscoplca, onde se detectan con mayor facilidad las i _fluencias que Peirce recibio, sean estas las de Kant y de DunsEscoto 0 las de las matematicas y el evolucionismo.

    . ,Las categorias :AI igual que para la teoria de la signifi-cacron y de los .SlgnOS,losCollected Papers encierran dos gruposde textos refendos a las categorias. El primero fue compuesto enlos a~os 1867-1868 simultaneamente con la primera teoria delos signos; el segundo, en los afios 90.

    Reproduc~mos a continuacion un largo extracto de unarticulo de Peirce, "The Architecture of Theories" aparecido enel Monist en enero de 1891. '

    Si la :antidad de paginas que se me ha atribuido fuera mayor,d.e,benamos~r~r ahora la Importancia para la filosofia de la concep-CIOnrnatematica de continuidad, Casi todo 10 que es verdadero enHeg,eles el debil resplandor de una concepcion que las matematicasha~Ian hecho claras largo tiempo antes y que las investigacionesrecientes han aclarado aun mas (6.81).Entre los,nu~erosos principios de la logica que hall an su aplicacionen filo~ofia,solopuedo mencionar uno. Tres concepciones se encuen-t:an slemp:-e a cada paso en todas las teorias logicas, y en loss~stemas mas acabado~ aparecen comoestrechamente ligadas entreS1. . Las llamo concepcionas [.. .] de Primero, Segundo y Tercero.Pnme~o esla concepcion del ser 0del existir independientemente decualquier otra cosa. Segundo es la percepcion del ser relativo aalguna otra cosa, la concepcion de la reaccion contra alguna otraco~a.Tercero es la concepcion dela mediacion por la cual un Primeroy un Segundo se ponen en relacirin. Para ilustrar estas ideas, voy amostrar co~o entran en las que hemos examinado. El origen delascosas, con~lderado nocomo conducente a algo, sino en si, contiene laIdea.de.~nmero, eltermino de las cosas la de Segundo, el proceso demediacion entre el origen y el termino, la de Tercero [...]. Enpsicologta, el sentimiento (feeling) es Primero la sensacion dereaccion, Segunda, la concepcion general, Tercera 0 mediacion. Enbiologia, la idea de produccion fortuita de variedadas anonnales(arbitrary sporting) es Primera, la herencia es Segunda, elproeeso

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    por el eual se fijan los caracteres accidentes es Tercero. El Azar esprimero, la Ley, Segunda, y la tendencia a adquirir habitos, Terce-ra. El Espiritu es primero, la Materia es Segunda, la Evolucion esTercera (6.32).Tales son los principales materiales con los que habria que construiruna teoria filosofica para que esta fuera representativa del estadode eonocimiento al eual nos ha conducido el siglo XIX (6.33).

    Esta cit a de Peirce va a permitirnos precisar, si se lacompara con los textos de 1867 y 1868, cuales son las transfor-maciones que Peirce introdujo en su primera teoria y detectarque conjuncion de influencias condujo a Peirce a su logica de lascategorias.

    La nocion misma de categoria nos remite enseguida aKant. Asi como Bacon intentaba adaptar la logica deAristotelesa la ciencia de su epoca cuando escribia su Novum Organum,Peirce intenta reescribir la logica de Kant cuando diserta "sobreuna nueva lista de categorias". On a New List o{Categories, tales el titulo de su estudio de 1867. Para Peirce, la Critica de Kantes logica. Peirce elogia a Kant por haber comprendido que lametafisica se apoya en la logica" y que la logica tiene como baseel razonamiento matematico.

    Si bien en nuestra cita no se encuentra la terminologiakantiana -"objeto trascendental", "ego trascendental"-, y sibien, en 1890, Peirce ya no intenta reducir "1 0 multiple a launidad" como en 1867, sigue afirmando "la importancia de laconcepcion matematica de continuidad". Los nombres de lascategorias vienen de la concepcion kantiana del mimero: "Uni-dad de la sintesis de 10 multiple de una intuicion cualquiera deelementos homogeneos" (Critica de la raz6n pura, A.143). Dadoque las categorias y los numeros son las funciones de la unidaden 10 multiple, las categorias son rnimeros: Uno, Dos, Tres,Primero, Segundo, Tercero, 0principios del mimero: Primeridad,Secundidad, Terceridad.

    La primeridad consiste en "ser 0 existir independiente-mente de cualquier otra cosa"; es el Espiritu, la cosa en si, elnoumeno que escapa al entendimiento humano (1.357), pero delcual sin embargo puede tomarse conciencia: es sentimiento(feeling).Atraves de ella se alcanza la unidad del universo, pero

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    ~His. ac~ de 10 expresable, de mo~o que ~o es mas que unposible (1.304) que siernpra se aleja: es 10 ir'realizablj, E "1

    origen de las cosas, considerado no como conducente a alg0 s. e .- L "fi'" ,SInoen Sl. uego, es enomeno, punta de partida. En tanto qK t 1f '. ue,para an, e enomeno no dice nada del noillneno para Pei. id d ' irespor su primeri ~ ,el fenomono es de la naturaleza del noums '

    simple posible, irrealizable notimeno, partida sin llegada y ~o,b " ,." , SInem argo noumeruco .La secundidad es "la concepcion del ser relativo a otra

    cosa". Es la categoria de la existencia, el encuentro con el hecho Ibruto del mundo exterior, la sensacion dereaccion la "materia"el "termino" de las cosas. "Decir que una mesa e~iste, es deci;q~,e [...J produce efectos inmediatos sobre los sentidos, y tam- !bien que produce efectos puramente fisicos" (1.457). La influen- Icia de Kant deja ellugar aqui a la de Duns Escoto: "Respecto de Ila secundidad de los individuos, 10 singular de Duns Escoto Ideterminado, operacional, implicatorio de un modo de ser 0 d~ "perfeccion que le es propio, puede ser considerado como lafuente escolastica de la categoria peirciana", escribe C. McKeon Iquien cita a Peirce: "Hieet nunc es la expresion que se encuentr~ Ifconstantemente en la boca de Duns Escoto, el primero enelucidar la existencia individual" (1.458).7

    La terceridad de 1890 da testimonio de la influencia del Ievolucionismo a expensas de la de Kant. En 1867, la terceridad Ies la categoria de la Representacion, "la ultima concepcion Iantes de pasar del ser a la sustancia", "no une una concepciona.la sustancia como las otras dos referencias, sino que une !directaments 10 multiple de la sustancia misma" (1.554). En I1891, "Tercera es la concepcion de la mediacion por la cual un fPrimero y un Segundo se ponen en relacion'' . Es la "concepciongeneral", el proceso de integracion, de unificacion la "Evolu- Icion". Por ende, la terceridad es la categoria del devenir, entanto que la secundidad esla categoria del pasado yla primeridadIa categoria del eterno presente.

    La terceridad es la categoria por excelencia de 10 general,pero de una generalidad teleologica; su naturaleza modal es "lad.el ~uturo condicional que debe considerarse como una 'poten-cialidari real' en nuestra experiencia y en la naturaleza mis-ma".8 En el mismo orden de ideas y por comparacion, la34

    naturaleza modal de la secundidad es la de una actualidadcategorica; la naturaleza modal de la primeridad es la de unaposibilidad logica.

    Son tres ordenes jerarquicos de generalidad: la categoriadebe su caracter general a Kant y lajerarquia de su generalidada la Escolastica. Las categorias son generales porque sonconceptos, incluida la categoria de la existencia, la secundidad,que es por definicion la zona determinada, legalizada, del servago de la primeridad. Este ser vago es general, puesto que es"pura posibilidad logic a". Acabamos de decir, por 10 dernas, quela terceridad es la categoria de la "concepcion general". Es en lostextos de 1867-1868 donde se manifiesta la influencia de laEscolastica: la primeridad es 10 que la Escolastica llama eltercer grado de abstraccion, el ens ut sic; la secundidad es elsegundo grado de abstraccion, el ser cuantitativo, la materia; laterceridad es el primer grado de abstraccion, el ens sensibile,que "une directamente 10 multiple de la sustancia misma".Peirce aprecia este orden inverso, ya que para el el punta departida de la "dialectics" es el concepto, el Espiritu, 10 Uno delcual deduce Dos 0 Tres. Por 10 tanto, no se puede hablar deabstraccion. Estamos en pleno idealismo, como en la teoria delos signos (primera version). Y sin embargo, Peirce afirma que"incluso una percepcion es una abstraccion" (4.235), que elespiritu se alimenta "de hechos de observacion" (5.392) y que loselementos de todos los conceptos entran en el pensamientologico por la puerta de la percepcion (5.212).

    No es posible comprender el pensamiento de Peirce si noscontentamos con comprobar que Peirce se contradice, enten-diendo por ella que la contradiccion es un mas-all a del sistema;nos parece, en cambio, que elucidando esta contradiccion sealcanzara el pensamiento mismo de Peirce, quien, no 10 olvide-mos, define el pensamiento por la dificultad: el hombre piensaprecisamente porque hay contradiccion.

    La faneroscopia. La dificultad que encontramos en lateoria de la significacion y de los signos vuelve a encontrarse enla logica de las categorias. En aquella, la mente interpreta elsigno, 0, mejor, elhabito mental es la significaci on del signo. Porotra parte, el signo es el efecto practico de nuestra mente y desus conceptos en 10 real. El signo es ellugar del espiritu y de la

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    '~~materia. En la 16gica de las categorias, estas son produccio ~~~dial~cticas del espiritu, y sin embargo Peirce afirma que t:S .:comrenza con la "observaci6n" y la "percepci6n". Por u 1 dO ~P' . hi' naoerrce quiere pro birle a la psicologia la entrada de la 16m .I t ffsi I b~Caya me a .lslca y, por e otro, apela a la psicologia para explicar I~resencla en el espiritu de las categorias que supuestament:este produce.

    ~ste ultimo punta es bastante facil de elucidar, si tenemosel cuidadn de asignarle a la palabra "abstracci6n" s610 10P' 1 . L I queelrc~ e ~s~gna. a p~ abra "abstracci6n" es un termino 16gico,no PSICO~?~co.,EI_l,p~lcolOgia, se deberia emplear mas bien lapalabra dlsoclaclOn. La abstracci6n logica 0 "preescisi6n" esel acto de suponer (con conciencia de su caractcr ficticio 0 no)

    algo r~l~tiv~ a un elemento de un percepto sobre el cual se apoyae! espiritu sin tener en cuenta otros elementos". En la "disoci _cion" psicologica, tambien es posible atender solamente a unelemento, pero no pueden notenerse en cuenta otros elementos'por el co~trario, el elemento solo tiene existencia psico16gica po;l~s .dema~ elementos (1.549 n.), S610pensando en la abstraccionlogica Peirce ha podido decir que "incluso un percepto es unaabstraccion" (4.235). El percepto 0phaneron, como tam bien 10llama, es una entidad fisica, no psiquica; por 10tanto no es un"conocido", sino mas bien un objeto de analisis. '

    A este analisis de los perceptos 0phanera, Peirce le da elnombre de faneroscopia. Tambien se Ieda el nombre de fenome-nologia.9 Los perceptos 0phanera son "evidencias de los senti-dos". Irrealidad ultima mas alla de la cual no puede ir nuestra .men,te, "los perceptos no son representativos de ninguna otrareahdad _masque ~llos mismos" (2.143). La mente que elaboraesta realidad gracias a la faneroscopia puede a la vez separars~~ elementos formales propios, tarea de la abstraccion hipos-tatica, y descubrir en ese proceso las categorias tarea de laabduccion. '

    La abduccirin de las categorias no es una inferencia infali-ble; por el contrario, es una aventura injustificable en si mismapuesto que el pensamiento no tiene nada en cormin con e1percepto. Es solamente justificable aposteriori mediante deduc-c~ona partir de las categorias que, en surna, son menos concep-crones que "apreciaciones generales sobre concepciones" (1.353).1036

    t I I i C f ! ! ; ~_j, ."

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    En todo percepto, es posible "discriminar" las tres catego-nas de primeridad, secundidad y terceridad. La primeridad esla experiencia en estado puro, sin otra referencia mas que a ellaIllisma; la secundidad es la reaccion de la mente ala experienciapura del percepto; la terceridad es la reacci6n en tant,o ~~ereaccion, separada de la mente y del percepto, la mediacionpura. Vuelven a encontrarse aqui los tres estados de la esenc~aconcebidos por Avicena y aceptados por Duns Escoto: la esenciain re (para ser mas precisos, habria que decir in percepto) seriala primeridad, "singular absoluto" (5.311), La esencia in menteseria la secundidad: en la mente, constituye el verdaderouniversal, susceptible de ser determinado por reacci6n con 10existente unico pero indeterminado (vago, dice Peirce) en simismo. La esencia, "naturaleza absoluta", ni en las cosas, ni enla mente, seria la terceridad.

    Esta comparaci6n va aun mas lejos de 10 que pretendePeirce. Para el, las categorias son formales sin referencia ma-terial alguna. Peirce insiste en el caracter mental de la elicita-ci6n de las categorias. Ahora bien, aunque la esencia deAvicenatambien es formal (ya sea que se la conciba en las cosas, en lamente, 0en si misma, siempre esta concebida en la mente), tieneuna referencia material. Peirce no puede evitar tampoco quesus categorias tengan una referencia material: la primeridad esser en si, espiritu pero tambien cualidad, feeling, de un perceptoque, por definicion, esta fuera del espiritu. Aun cuando no seaobjeto de conocimiento, como 10veremos, es objeto de analisis,punta de partida. Puesto que la secundidad es la categoria de laexistencia, de la reacci6n con elmundo exterior, seria paradojicoque no tuviera contacto con el mundo exterior: "Una cosaexistente, dice Peirce, es simplemente una pura cosa quereacciona (a blind reacting thing), ala cualle es ajena no solotoda generalidad, sino tambien toda representacion" (5.107).La terceridad, por ultimo, es la categoria de la mediaci6n. ~Seriaunicamente la categoria de la mediaci6n de los conceptos? ~Noes, por el contrario, la categoria de la extension temporal,material, del poder de la mente tendido hacia el futuro, hacia laaccion? ~No es, en suma, la tendencia del espiritu hacia surealizaci6n, ese habito mental del que Peirce habla en su teoriade la significaci on y de los signos? Nos parece muy probable.

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    Entonces, i,Peirce habria fracasado en su intento de cons-truir una logica puramente formal? No 10 creemos, porque 10 'que hemos mostrado hasta aqui es que el percepto es el puntode partida fisico de un analisis logico y no un pun to de partidapsicologico, que el habito mental es un habito logico, y que laaccion que el habito orienta es una trarisformacion fisica delmundo.

    Si la abduccion es una operacion logica, i,la abstraccionhipostatica es una operacion psicologica? No; es tambien unaopera cion logica. La abstraccion hipostatica no consiste enseparar de un percepto la esencia de una cosa de la cual elpercepto seria la especie impresa (la imagen sensorial); consisteen "tomar la caracteristica de un percepto" para darle "unaforma proposicional en unjuicio" (4.235), en transformar estacaracteristica predicativa en un sustantivo, en un ser de razon,un ens rationis. Asi, frente a un percepto dado, el de undiamante, por ejemplo, podemos formar eljuicio perceptual: "EIdiamante es duro". Este juicio sigue siendo solo factual. Sitransformamos por abstraccion hipostatica el predicado adjeti-vo en sustantivo, duro en dureza (tal es el senti do de "hiposta-tico"), descubrimos un ser de razon: dureza. Este acto es l6gicoy no psicologico.

    i,Este acto nos hace conocer el percepto? De ningun modo,como tampoco la abduccion. A proposito del percepto, formamosun ser de razon que, por deduccion, nos pondra en contacto conuna realidad que no sera el percepto, pero sobre la cual, graciasa ese ser de razon, sera posible actuar.

    Las categorias a las que conduce la abduccion son tambienseres de razon, pero tienen menos realidad experimental quelos conceptos 0concepciones, que los seres de razon a los cualesconduce la abstraccion hipostatica. Las categorias son princi-pios logicos explicativos y constitutivos de las concepciones. Son"ideas generales sobre concepciones", pero "ideas generales"reales. En lajerarquia de realidad de los seres de razon, existemin un grado mas alto, aquel al cual conduce la induccioncientifica, que es una abstraccion hipostatica cuyos elementosfactuales estan mas severamente controlados que los elemen-tos perceptuales de los conceptos.

    El ser derazon conceptual, como 10 hemos dicho, es real. En38

    I

    efecto, sea 0 no real la palabra "dureza", "la propiedad, elcaracter, el predicado, la dureza no es invento de los hombres,como la palabra, sino que esta real y verdaderamente en lascosas duras y es una en todas ellas como habito, disposicion 0comportamiento" (1.27 n.). El nominalismo, dice Peirce, debeadmitir que la "dureza" es "verdaderamente aplicable a algo,pero cree que hay subyacente un ser en si, una realidadincognoscible" (5.312).

    La abstraccion hipostatica no se parece, pues, ala abstrac-cion aristotelico-tomista. Segun esta, el espiritu se comunicacon la esencia, el ser de la cosa, gracias al concepto, forma de lacosa en el espiritu, elaborada por el espiritu en tanto queintelecto agente a partir del percepto, especie expresa de lacosa. Para Peirce, la abstraccion no afecta al ser de la cosa, sinoa un ser de razon; el concepto no es la forma de la cosa, sino laindicaci6n de una accion posible sobre 10 real. En esto Peirce esun realista a la manera de Duns Escoto, pues tanto para unocomo para otro, "los principios generales, las concepciones y lasleyes actiian realmente en la naturaleza" (5.101). La abstrac-cion no es, pues, una intuicion directa, sino el descubrimientopor la naturaleza de una mediaci6n, el ser de razon, principio,concepto 0 ley, para organizar logicamente 10 real. No es masque una aproximacion. Se 10 ve claramente por los fracasos quesufren la abduccion, la abstraccion y la induccion, fracasos cadavez menos numerosos, no obstante, a medida que la cienciaprogresa hacia la ley unica de la naturaleza que es su ideal. Tales la razon del falibilismo de Peirce y de su fe en la Verdad final;el fracaso, en efecto, es 10 que hace posible la organizacion logicade 10 real y, por 10 tanto, la verdad.

    La semi6tica y la faneroscopiaNos parece posible ahora traducir la teoria de la semiosisen terminos faneroscopicos, y responder de este modo a la

    pregunta que formulamos al comenzar nuestro estudio sobre lafilosofia de Peirce: i,las teorias de Peirce son teorias logicas? i,N0serian mas bien teorias psicologicas y metafisicas?

    "Los elementos de todos los conceptos, escribe Peirce,entran en el pensamiento logico por la puerta de la percepcion

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    y salen por la puerta de la acci6n intencional (purposive)"(5.212).

    Ahora bien, sabemos que todo signo esconcepto;el signo es,pues, un ser deraz6n real que semanifiesta enla naturaleza porla acci6n ejercida sobre ella, acci6n sugerida por un habitomental. Este habito mental, interpretante logico,es la traduc-ci6n logica deuna organizaci6n natural que su accionintencio-nal sobre la naturaleza permite descubrir.

    Por consiguiente, el signo, comoel concepto, es a la vez unser de razon in mente y un ser de raz6n in reo La confusionproviene de nuestro lenguaje, que nos conduce a concebir elsigno en la cosa y la significacion 0 concepto en la mente.Tambien proviene de Peirce, quien no hizo las distincionesnecesarias. Admitiendo que el signo sea identico al concepto,hubiera sidofacil decir que elsigna esconcepto en lamente y elconcepto, signa en las cosas, 0que10que esconceptoen lamentees signa en las cosas, y 10que es habito 0 significacion en lamente es"principio general" en las cosas.Lamente organiza lascosas, la naturaleza, y la naturaleza se abre a la mente pormedio de la accion: en efecto, mediante la accion los signos sevuelven conceptos, y losprincipios de las cosas, queconstituyenleyes dela naturaleza, se vuelven habitos mentales, leyes de lamente.

    LLateoria dePeirce es psicologica?EIpercepto esun hechofisico, nos dice Peirce. Sea, pero la abduccion, la abstraccionhipostatica, la induccion, Lson verdaderamente operacioneslogicas? Estamos de acuerdo en que producen seres 16gicos,categorias, conceptos, leyes, pero LIasoperaciones mismas sonlogicas? Peirce asi 10cree porque son funciones formales de lamente. Nosotros creemos que hay allf un abuso de lenguaje yque Peirce hubiera podido aceptar que, en tanto funciones delamente, de la psyche, son psicologicas. Reconocemos en esto lapreocupaci6n de Peirce por evitar hacer creer que asigna alhombre un lugar aparte en la naturaleza: su posici6nes confor-me al principio de continuidad que el defiende cuando dice quesu filosofia es un "sinequismo" y que eleva a la dignidad deterceridad en su teoria de las categorias.

    Esta ultima afirmacion no parece permitir ninguna dudasobre la respuesta a la segunda parte de la pregunta: Llalogi-40

    ca de Peirce es una metafisica? Y sin embargo, si bien larespuesta de Peirce deja de ser negativa en la primera decadadel siglo XX,11 habria podido serlo aun,12 porque todas lasrnetafisicas se caracterizan segun eP 3 por esa "ficcionmetafi-sica"(metaphysical figment) (5.312) deuna realidad que subya-cea las apariencias, noiimeno 0esencia, cuya existencia Peirceniega. Sin embargo, Peirce secontenta conbautizar todas estasrnetafisicas de"nominalismos" y reservarse casi exclusivamen-te el epiteto de "realista", exceptuando a Duns Escoto, y aSchelling. S610eneste sentido la logica de Peirce es una me-tafisica. Tenemos derecho incluso a preguntarnos si no seriamas justa decir que la metafisica realista dePeirce es la 16gicadela naturaleza. Es, en todo caso, segun 10admite Peirce, unrealismo logico. Concepci6n muy proxima de la de Schelling,para quien las formas del pensamiento son las formas de larealidad. Secomprende entonces que Peirce haya podido escri-bir en una carta a James que su filosofia es un "Schellingismotransformado ala luz de la ciencia moderna'U?

    Lo que es mas justa que decir que es un kantismo sintrascendentalismo,15 pues, si bien es cierto que Peirce noadmite "un absolutamente incognoscible" (2.654 n.), no esporque no exista, sino porque se hara "conocido"con el tiempo.Su "incognoscible" no es una realidad subyacente, sino unarealidad ultima que sevolvera 10 "conocido"algun ilia gracias altrabajo de todos los investigadores. Esta realidad ultima es laVerdad, obra comunitaria y ya no intuicion pura de la menteindividual: "La verdad es el acuerdo deuna afirmaci6n abstrac-ta con el limite ideal hacia e1 cual tiende infinitamente lainvestigacion para producir la creencia cientifica, acuerdo quela afirmaci6n abstracta puede poseer en virtud de su inexacti-tud yde su parcialidad, y esta confesi6nesun elemento esencialde la verdad" (5.565)..Esta definicion de la verdad queda justificada por toda lafilosofia dePeirce, cuyas denominaciones divers as responden alas diferentes partes deesta definicion. Lafilosofia dePeirce esun falibilismo y un pragmaticismo: el condicional comunitariode la investigacion sin fin tiende hacia el indicativo de laVerdad. Es un tiquismo y un agapismo: el tiquismo 0 teoria delazar del descubrimiento inexacto y parcial (tododescubrimien-

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    to es del espiritu, aun cuando sea descubrimiento de una ley dela materia; es, pues, parcial) de los "principios generales" daorigen a una "cosmologia evolucionista" 0 agapismo "en la cualtodas las regularidades de la naturaleza y del espiritu sonconsideradas como productos del crecimiento" 0 evolucion -,sometida a la "ley de amor" (6.302). Es un realismo logico: elagapismo dirige la evolucion hacia ellimite ideal de la "racio-nalizacion de 10 real" (5.433), 0 mejor dicho una 16gica realista,"un idealismo a la manera de Schelling, quien sostiene que lamateria no es mas que espiritu en especie y parcialmente fijo enun estado determinado" (6.102).

    ConclusionPeirce no ejerci6 practicamente ninguna influencia en la

    filosofia europea de su tiempo, excepto tal vez en la filosofiaitaliana. Sin el, la filosofia norte americana no seria 10que es.James no habria resistido los llamados del nominalismo. Royceno habria sustituido la poesia del trascendentalismo por la16gica de la Comunidad de Interpretacion. Dewey Ie debe suteoria de la investigacion, Mead su filosofia del acto. Dewey nopudo salvar el pragmatismo mas que devolviendole al principiode Peirce su sentido original. No faltan puntos de contacto delrealismo critico y del naturalismo con la filosofia de Peirce. (. ..)

    El empirismo logico norteamericano considera los Collec-ted Papers como la obra fundamental del movimiento del cualC. 1. Lewis, discipulo de Peirce, es uno de los representantesmas notables. (. .. ) Para finalizar, deseamos que la filosofiaeuropea (sin excluir la filosofia inglesa que en conjunto ladesconoce, excepto ellogico F.P. Ramsey, de Cambridge) exami-ne seriamente una filosofia cuya dificultad tiene en su origenuna preocupacion por no hablar sino para decir algo significa-tivo: el fi16sofo supera a menudo otras dificultades, pero querecompensan menos.l'' [1954JVision lateral

    Cualquiera sea el angulo, mas 0menos estrecho, que seelija para abordarlos, los escritos de Peirce, -arliculos de42

    ftiti!

    circunstancias como las Contributions ala revista The Nation,sobre temas multiples y diversos, 0 estudios propiamente filo-s6ficos sobre una cuestion determinada como la realidad deDios- son otras tantas ocasiones para que Peirce retome losprincipales temas de su filosofia. Examinaremos aqui esosdiferentes temas en el segundo volumen de las Contributions,que contiene los trabajos de seis afios: 1894-1900.17

    La moral terminol6gica. En una resefia de una obra depsicologia, Peirce nos recuerda el principio de su "moral ter-rninologica". Para remediar la imprecision y la incoherencia desu terminologia, dice Peirce, el psicologo moderno debe ins pi-rarse en la experiencia de las demas ciencias, que muestra que'la unica base posible para una terminologia cientifica univer-salmente aceptada es atenerse con rigor a la regla de que lapalabra propuesta para designar un concepto cientifico poraquel que introdujo por primera vez ese concepto en la cienciasea adoptada por todos, a menos que haya solidas objecionescontra esa adopcion (The Psychology ofSuggestion, 25 de agostode 1898, p.166).

    Realismo contra nominal ismo.Aun cuando se haya tildadoa Peirce de empirista, su constante posicion "realista" tendriaque haber hecho justicia desde hace tiempo a esa interpreta-ci6n. En efecto, s610hay dos actitudes que puedenadoptarserespecto del problema de los universales. 0 bien se adhiere "ala secta del nominalismo ingles -la escuela de Occam, deHobbes, Locke, Hartley, Berkeley, Hume, Bentham y los Mill"cuya doctrina heredada de la era precientifica es que todageneralizacion es un simple asunto de conveniencia, 0 bien unose ubica junto a Duns Escoto, y es esto 10que hace "el hombrede ciencia", quien "sin teorizar" a proposito de los "generales""sostiene implicitamente que las leyes actiian realmente en lanaturaleza y que la clasificaci6n que tanto le cuesta encontrares la expresi6n de hechos reales" (Huxley's Essays, 11 de enerode 1894, p. 19). Pues la haecceidad no es para Duns Escoto, como10piensa Windelband, una "forma", sino un "principio formal"(FourHistories ofPhilosophy, 1, 2 de septiembre de 1894, p. 75).

    El idealismo, tanto el de Kant y el de los po.skantianoscomo el idealismo ingles, "al cual suscriben escritores comoErnst Mach", es un nominalismo (Helmholtz, 13 de septiembre

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