Lecturas:Semana 2ª del Salterio

13 De la feria. Dn 9, 4-10; Sal 78, 8-9. 11. 13; Lc 6, 36-38.

14 De la feria. Is 1, 10. 16-20; Sal 49, 8-9. 16-17. 21. 23; Mt 23, 1-12.

15 De la feria. Jer 18, 18-20; Sal 30, 5-6. 14-16; Mt 20, 17-28.

16 De la feria. Jer 17, 5-10; Sal 1, 1-4. 6; Lc 16, 19-31.

17 De la feria. Gn 37, 3-4. 12-13. 17-28; Sal 104, 16-21; Mt 21, 33-43. 45-46. (San Patricio, obispo).

18 De la feria. Miq 7, 14-15. 18-20; Sal 102, 1-4. 9-12; Lc 15, 1-3. 11-32. (San Cirilo de Jerusalén, obispo y doctor de la Iglesia).

19 DOMINGO 3° DE CUARES-MA. Éx 17, 1-7; Sal 94, 1-2. 6-9; Rom 5, 1-2. 5-8; Jn 4, 5-42.

La luz llega a la montaña por la mañana y se va

más tarde, al final del día. La cumbre está más cerca del cielo que las llanuras y es re-presentada como el lugar del encuentro con Dios. El Antiguo Testamento recuerda las montañas de Moisés, Elí-as, Eliseo…

J e s ú s pasa del desierto a la luz de la montaña, de las ten-taciones a la transfigu-ración. El ca-mino de Cris-to es el de todo discípu-lo: una senda ascendente y liberadora por-que la luz de Dios atraviesa las tinieblas de las tentacio-nes y los falsos ideales. Pero primero hay que atravesar las tentaciones sin traicionar a Dios que nos ama. Entonces, se manifestarán su belleza y su energía que nos darán la sabiduría para ver y entender y la capacidad de amar.

editorial

2º domingo de Cuaresma 12 de marzo de 2017

Añ

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Una luz brillante en Cuaresma

P. Aderico dolzAni, ssP.

Jesús se transfiguró delan-te de los discípulos: su rostro brilló como el sol, y sus vesti-duras se tornaron fulgentes, como la luz. Es una descripción de la infinita belleza de Dios,

suma simplicidad. Es la belleza en sí misma,

no es necesario hacer nada: simplemen-te contem-plarla para ser feliz.

E s t o les suce-dió a los discípulos que, exta-

siados, ex-presaban las

incongruencias prop ias de quien no va

más allá de los límites humanos y proponen levantar carpas para los personajes que los hacen felices. Cuando somos realmente felices no pensamos en nosotros porque ya no necesitamos nada, solo que ese momento no pase nunca y se eternice.

Este momento de luz en el camino de la Cuaresma y en las luchas que nos impone

la vida nos habla de Dios y de cómo obra en nosotros. Para acercarnos al Señor transfigurado, debemos dejar la llanura del egoísmo, de mirarnos a nosotros mismos y subir a la montaña de la caridad, un camino que re-quiere esfuerzo y paciencia porque necesitamos tiempo para llegar a la cima.

Hoy Cristo se transfigura y quiere que nos transfiguremos con él en una vida santa.

Usar el celular multiplica por nueve el riesgo de

sufrir accidentes. No uses el celular al conducir. Cuidá tu vida y la de los demás.

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El mensaje de la liturgia

Escalar la montaña y purificar la vida

Abram se encaminó a la tierra prometida, no subió a la montaña, sino que pere-

grinó con la única brújula y seguridad que le dio la palabra del Señor. Tanto escalar, como lo hicieron Jesús, Pedro, Santiago y Juan, como emigrar, como lo hace Abram son la forma de purificar el recorrido de la propia vida.

La Carta a Timoteo nos enseña a cerca de la Manifestación o revelación de Jesu-cristo, e indirectamente entendemos que

la subida de Jesús a la cruz es la gran revelación, anticipada en la transfigura-ción. Él es el modelo de la vida de todos los cristianos, mostrando que para llegar a la cima hay que pasar por un proceso de continua conversión.

Hoy apreciamos el hecho de que son tres discípulos y el Maestro quienes en la cima llegan a la experiencia plena de Dios, y eso se da porque oraron en comunidad. Valoricemos también nosotros la vida de oración en fraternidad. Y, caminando como Abram, dejemos atrás los pensamientos, sentimientos y actitudes del hombre viejo. Este es el itinerario cuaresmal, hasta llegar al encuentro con el Dios vivo y verdadero, el Señor resucitado.

I. RITO DE ENTRADA

ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 26, 8-9

Mi corazón sabe que dijiste: “Busquen mi rostro”. Yo busco tu rostro, Señor, no te apartes de mí.

O bien: Cf. Sal 24, 6. 2. 22

Acuérdate, Señor, de tu compasión y de tu amor, que son eternos: que nues-tros enemigos no triunfen sobre nosotros. Dios de Israel, líbranos de todas nuestras angustias.No se dice el Gloria a Dios.

ORACIÓN COLECTA Padre santo, que nos mandaste escu-

char a tu Hijo amado, alimenta nuestro espíritu con tu Palabra, para que, después de haber purificado nuestra mirada interior, podamos contemplar gozosos la gloria de su rostro. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos.

II. LITURGIA DE LA PALABRA

1ª LECTURA Gn 12, 1-4a

Lectura del libro del Génesis.El Señor dijo a Abrám: “Deja tu tierra

natal y la casa de tu padre, y ve al país que yo te mostraré. Yo haré de ti una gran nación y te bendeciré; engrandeceré tu nombre y serás una bendición. Bendeciré a los que te bendigan y maldeciré al que te maldiga, y por ti se bendecirán todos los pueblos de la tierra”. Abrám partió, como el Señor se lo había ordenado.Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.

SALMO RESPONSORIAL Sal 32, 4-5. 18-20. 22

R. Señor, que descienda tu amor sobre nosotros.

La palabra del Señor es recta y él obra siempre con lealtad; él ama la justicia y el derecho, y la tierra está llena de su amor. R.

Los ojos del Señor están fijos sobre sus fieles, sobre los que esperan en su

Nuestra Misa Ciclo A Color: Morado2º domingo de Cuaresma

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misericordia, para librar sus vidas de la muerte y sustentarlos en el tiempo de indigencia. R.Nuestra alma espera en el Señor: él es nuestra ayuda y nuestro escudo. Señor, que tu amor descienda sobre nosotros, confor-me a la esperanza que tenemos en ti. R.

2ª LECTURA 2Tim 1, 8b-10

Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo.

Querido hijo: Comparte conmigo los sufrimientos que es necesario padecer por el evangelio, animado con la fortaleza de Dios. Él nos salvó y nos eligió con su santo llamado, no por nuestras obras, sino por su propia iniciativa y por la gracia: esa gracia que nos concedió en Cristo Jesús, desde toda la eternidad, y que ahora se ha revelado en la manifestación de nuestro Salvador Jesucristo. Porque él destruyó la muerte e hizo brillar la vida incorruptible, mediante la Buena Noticia.Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.

VERSÍCULO Cf. Mt 17, 5

Desde la nube resplandeciente, se oyó la voz del Padre: “Éste es mi Hijo amado, escúchenlo”.

EVANGELIO Mt 17, 1-9

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo.

Jesús tomó a Pedro, a Santiago y a su hermano Juan, y los llevó aparte a un monte elevado. Allí se transfiguró en presencia de ellos: su rostro resplandecía como el sol y sus vestiduras se volvieron blancas como la luz. De pronto, se les aparecieron Moisés y Elías, hablando con Jesús. Pedro dijo a Jesús: “Señor, ¡qué bien estamos aquí! Si quieres, levantaré aquí mismo tres carpas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías”. Todavía estaba hablando, cuando una nube luminosa los cubrió con su sombra y se oyó una voz

que decía desde la nube: “Éste es mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta mi predilección: escúchenlo”. Al oír esto, los discípulos cayeron con el rostro en tierra, llenos de temor. Jesús se acercó a ellos y, tocándolos, les dijo: “Levántense, no tengan miedo”. Cuando alzaron los ojos, no vieron a nadie más que a Jesús solo. Mientras bajaban del monte, Jesús les ordenó: “No hablen a nadie de esta visión, hasta que el Hijo del hombre resucite de entre los muertos”.

Palabra del Señor.A. Gloria a ti, Señor Jesús.

ORACIÓN DE LOS FIELES R. Ayúdanos, Señor, a escucharte y se-guirte.

III. LITURGIA DE LA EUCARISTÍA

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Te pedimos, Señor, que este sacrificio

borre nuestros pecados y santifique el cuerpo y el alma de tus fieles, para que podamos celebrar dignamente las fiestas pascuales. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE COMUNIÓN Mt 17, 5

Éste es mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta mi predilección: escúchenlo.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Después de haber recibido estos glo-

riosos misterios, Padre, te damos gracias porque, aun viviendo en la tierra, ya nos haces partícipes de los bienes del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ORACIÓN SOBRE EL PUEBLO Señor, bendice a tus fieles y protégelos

constantemente; haz que se identifiquen de tal modo con el Evangelio de tu Hijo, que anhelen siempre aquella gloria con la que se mostró a los Apóstoles, y puedan alcanzarla felizmente. Por Jesucristo, nuestro Señor. D

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El Domingo. Semanario de uso litúrgico. No reemplaza el uso de los leccionarios. Edita: Sociedad de San Pablo (Paulinos). dirEctor: P. Aderico Dolzani, rEdacción: P. Fernando Teseyra, mail: director.eldomingo@sanpablo.com.ar dirEcción, rEdacción y adminis-tración: Riobamba 230 Cl025ABF CABA, Argentina, tel.: (011) 5555-2400, fax: (011) 5555-2425. suscripcionEs: L. a V. de 9 a 18, tels.: (011) 5555-2417/21/24, fax: (011) 5555-2439. Impreso por G.S. Gráfica S.R.L., Charlone 958 B1868DZF Piñeyro,

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Santo contemporáneo: San José Gabriel del Rosario Brochero

Al santo “cura gaucho” le debíamos una men-ción y reconocimiento en este espacio. Por cuestiones de tiem-po (EL DOMINGO se elabora con muchos meses de anticipación) no pudimos hacerlo en la fecha de su canonización, por ello nos parece oportuno recordarlo ahora, a pocos días de celebrarse su fiesta, el próximo jueves 16. Desde aquella emotiva ceremonia del pasado octubre, cuando el Papa lo proclamó santo, se ha hablado y escrito mucho sobre Brochero. Diversos medios de toda índole –hasta revistas faranduleras– se hicieron eco de la vida, obra y virtudes de quien se convirtió en el primer santo que nació, vivió y murió en Argentina. Precisamente, al recordar su memoria, tenga-mos en cuenta que además de todo lo folclórico y particular que su imagen reúne, es un santo poseedor de una gran espiritualidad, y pode-mos encontrar en él un verdadero modelo de ciudadano, ya que no solo se consagró como sacerdote anunciando el Evangelio, sino que además, se “gastó” la vida en el esfuerzo por promover y alcanzar la dignidad, el desarrollo y la educación de su pueblo mediante la cons-trucción de iglesias, escuelas rurales, caminos y hasta un ramal ferroviario que quedó trunco. Un hombre “inclusivo” de veras, que supo llegar a todos, incluidos a los bandoleros de su época. Y que, como dijera Mons. Olivera, parafraseando a Francisco, “Brochero fue un cura que se puso la Patria al hombro”.

El rincón de los jóvenesPor Jorge Blanco

Información general

Para que todos conozcamos más a BrocheroA través de bellas ilustraciones, en el libro San José Gabriel Brochero, nuestro cura gau-cho, los más chicos y sus padres pueden encontrar los episodios más significativos de la vida del Sacerdote gaucho, con su

estilo pícaro y frontal, espiritual y cercano. Y jóvenes y adultos se encontrarán con él en el CD Canto Brocheriano, una obra fundamental para descubrirlo desde lo musical. DD

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Puntos Corazón“Sal de tu tierra para el país que yo te indicaré” (Gn 12, 1).

Puntos Corazón es un movi-miento católico fundado en 1990, que pro-pone a los jóvenes la posibilidad de misionar durante uno o dos años de su vida al servicio de las personas más sufridas, creando con ellas lazos de amistad y de confianza. A imagen de María al pie de la cruz de su Hijo, los misioneros intentan vivir la compasión y la consolación, compartiendo la vida de sus ba-rrios y visitando hospitales, orfanatos, asilos, etc. De ese modo, buscan acercarse a cada hombre, particularmente a su sufrimiento y revelarle así la persona de Cristo. Los pilares de la misión son la oración, la vida en comu-nidad y el apostolado; y actualmente hay 40 casas Puntos Corazón ubicadas en 25 países. Por lo tanto, quienes deseen informarse más pueden hacerlo en:

www.puntoscorazon.org.ar contacto@puntoscorazon.org.ar (011) 4815 3474