Las Rutas escondidas de Mallorca, de Jesús García Pastor.

Un panorama inacabado del paisaje de Mallorca

Pere Freixa i Font,

Profesor e investigador,

Departamento de Periodismo y Comunicación Audiovisual

Universitat Pompeu Fabra, UPF

pere.freixa@upf.edu

Resumen:

Las Rutas escondidas de Mallorca de Jesús García Pastor, publicadas entre1964 y 1980,

suponen una de las aportaciones más singulares y originales de la fotografía de paisaje

española contemporánea. Además de representar un inmenso inventario del paisaje

mallorquín, las Rutas… ofrecen una novedosa forma fotográfica de acercarse al

territorio. En ellas García Pastor construye un dialogo íntimo entre el paisaje y la

experiencia de su tránsito, componiendo para el espectador la posibilidad, casi

cinematográfica, casi virtual, de volver a experimentar sus ochenta y tres viajes.

Palabras clave:

Fotografía de paisaje, fotografía panorámica, Mallorca, Excursionismo, Etnografía.

* * *

Los 83 fascículos de las Rutas escondidas de Mallorca, creados y publicados entre 1964 y

1980, con una periodicidad bimensual1, no aparecen ni citados ni se les referencia en

ninguna antología, historia o directorio de fotografía española, tanto contemporánea

como de la época. Ni tampoco en recopilaciones, exposiciones, guías u obras generales

sobre imagen o fotografía de montaña. Las excursiones fotográficas de García Pastor

parecen desaparecer después de finalizada su publicación, y se mantienen invisibles

para la cultura fotográfica, reduciéndose su presencia exclusivamente al mundo

excursionista mallorquín2. Las fotografías que contienen las Rutas… se realizan de

forma exclusiva para su uso en los fascículos. No se vuelven a publicar ni reeditar, no se

comercializan ni se exponen3. Pocas veces una obra tan extensa y con una presencia en

1

el mercado tan continua y prolongada ha permanecido completamente ignorada por

parte de críticos e historiadores.

Las Rutes amagades de Mallorca, en la versión mallorquina, traducción de Joan Pons

Marquès y Llorenç Moyà Gilabert durante los primeros años4, o las Rutas escondidas de

Mallorca, en la castellana original de García Pastor, suponen la creación de 83 fascículos

editados simultáneamente, uno en cada lengua5; 83 excursiones a pie por Mallorca

contadas en unas 3.000 páginas y, aproximadamente, 7.500 fotografías, muchas de

ellas composiciones panorámicas de dos, tres o más tomas.

Fig. 1: Portada y segunda página de “Pollença-Castell del Rei”, de las Rutas Escondidas de Mallorca, REM, n. 1, 1964.

Cada fascículo se

estructura siguiendo

un mismo esquema

compositivo: una

fotografía de portada

y un título sitúan el

recorrido específico

de la ruta. La segunda

página se dedica a la

reproducción de un

mapa a escala,

realizado por Melchor

Rosselló Simonet,

donde se indica el recorrido y los datos topográficos del territorio que comprende la

excursión. Acompaña el plano una explicación introductoria sobre las características

físicas, como por ejemplo el desnivel o la distancia, apreciaciones culturales,

etnográficas o históricas relacionadas con el recorrido propuesto. Las páginas

siguientes, generalmente entre cuarenta y cincuenta, se dedican a presentar, mediante

fotografías, el recorrido detallado de la ruta. Cada fotografía va acompañada de un

texto explicativo que sitúa y aclara la información visual. En algunos números, García

Pastor incorpora un poema, verso o cita referente a algún aspecto significativo de la

2

ruta. En otros números aporta información histórica y geológica de Mallorca, tanto para

referenciar aspectos genéricos como para contextualizar poblaciones, castillos o

personajes vinculados con alguna singularidad de esa ruta.

De caminatas a descripciones gráfico-geológicas de Mallorca.

El proyecto de García Pastor se idea y se realiza desde un profundo sentimiento

localista y amateur, aunado con el excursionismo que, entendido tanto desde su

dimensión deportiva como cultural, se profesa durante los años cincuenta y sesenta en

Mallorca6. Gran aficionado y admirador de la montaña mallorquina, García Pastor

realiza de forma periódica, con un reducido número de amigos, caminatas por las

sierras y montañas de la isla. A simple vista se puede considerar que la razón de las

Rutas... responde a la voluntad de crear una amplia y completa guía de excursiones por

la isla de Mallorca que sirva para dar a conocer y descubrir a los mallorquines su propia

isla. De esta forma, casi todos los fascículos incorporan alguna recomendación sobre la

dificultad o característica que tendrá la caminata:

“La pujada al Castell d’Alaró bastant fàcil i molt bella, que recomanam a tothom, pot i

hauria d’esser feta -ni que fos per una sola vegada- per moltes de persones no tan fortes ni

àgils ni avesades a grans caminades, a les quals van dirigides aquestes consideracions.”7

La lista de rutas se aleja de los recorridos más habituales que el turismo y el

excursionismo tradicional han creado en la isla, y se adentra en rincones y espacios que,

hasta para los expertos y amantes del paisaje mallorquín, pueden considerarse como

desconocidos:

“El sector de costa que se exten entre el Puig Roig i la Calobra queda tan a esquerra mà i fora

dels itineraris normals dels excursionistes habituals, que en aquest sentit es pot considerar

com inèdit i poc menys que ignorat per a la immensa majoria d’ells, i no diguem per a la

resta dels mallorquins, excepció feta de qualque caçador de cabres salvatges o qualque

pagès dels voltants.”8

3

Fig. 2: Castell d’Alaró, REM, n. 14, fot. 76, 1966.

A lo largo de los años en que se mantiene la edición de las Rutas..., García Pastor

sostiene la voluntad pedagógica de convertir sus recorridos en una aportación al

excursionismo mallorquín, con el fin de descubrir y hacer admirar el paisaje de

montaña de la isla. La apreciación de una isla desconocida, escondida y, en cierto

modo, aún salvaje, virgen e indómita, se mantiene inalterada diez años y cincuenta y

tres números más tarde:

“El paraje es extraordinario, y tan oculto, que ha podido conservar todas las esencias de la

Mallorca ancestral perdida entre abruptas montañas. El lugar, muy a trasmano, es

difícilmente alcanzable, y ni siquiera los habituales excursionistas lo incluyen demasiado

frecuentemente en sus programas.”9

Fig. 3: Puig Des Verger (Desde Biniaraix, por el Coll d’En Cer y el Portell de Sa Costa), REM, n. 41, fot. 14, 1970.

Desde esta doble voluntad, descubridora y pedagógica, García Pastor va añadiendo

rutas a su colección. Y esta adquiere lentamente, la dimensión de una amplia obra

sobre el territorio mallorquín. Tal y como se presenta la colección en los folletines

4

publicitarios editados en la época, las Rutas... deben ser alguno más que una serie de

caminatas lúdicas por la isla:

“Rutas escondidas de Mallorca es una publicación, que aspira a recoger gráficamente los

parajes menos conocidos, y otros que no lo son tanto, de nuestra maravillosa isla,

agrupándolos según unos derroteros determinados. Ello hace que tenga dos facetas, una de

interés geográfico y otra de interés turístico.

Más que una publicación para excursionistas lo es para los que, no siéndolo, no tendrán

otra ocasión, si no es así, de conocer nuestro entrañable y espléndido paisaje hasta en sus

parajes más recónditos, y la peculiaridad de algunos aspectos menos conocidos de la vida

agro mallorquín.”10

Con la progresiva publicación de fascículos, se va vislumbrando la voluntad de García

Pastor de dibujar, mediante el entramado de excursiones, una compleja representación

de Mallorca, que sobrepasa la exclusiva descripción de cada trazado concreto realizado

por la isla. Parece como si García Pastor quisiera reconstruir un gran mural panorámico

o una recreación virtual. Cada punto geográfico de la montaña mallorquina es recorrido

e indexado una y otra vez desde distintos derroteros que lo discurren y muestran, como

si de una reproducción tridimensional se tratase. La suma de las rutas permite obtener

una reconstrucción fotográfica completa de la visión que del paisaje de Mallorca tiene

García Pastor.

A partir del número 40, publicado el 1971, empieza a utilizar el término “gráfico-

geográfica” para describir la finalidad de sus rutas visuales:

“(…) En él [el recorrido de la Ruta], como queda dicho, se describe la parte norte de la

península de Alcudia; otro, más adelante, que recorrerá la parte sur y oriental por Alcanada

y el Cap de Menoría, completará la descripción gráfico-geográfica de esta avanzada punta

mallorquina sobre el mar.”11

Término que retomará de nuevo porque le permite distanciarse de la concepción

exclusivamente excursionista de su trabajo y le confiere una dimensión de conjunto. De

este modo, cada recorrido forma parte de una unidad más extensa que redimensiona la

amplitud de la ruta concreta y sobrepasa el acto específico de recorrer un fragmento de

territorio:

5

Per això, en la descripció gràfico-geogràfica de Sa Comuna de Bunyola concebirem aquesta

nova ruta que ara publicam, ruta que, endemés de completar la publicada en el fascicle

anterior, té aquesta altura del Puig de N’Eimeric com a motiu central.”12

Descubrimos, de esta manera, la voluntad de García Pastor de recorrer

exhaustivamente todos los rincones montañosos de la isla, de forma meticulosa y

planificada13, como si de una exploración topográfica o reconstrucción virtual se

tratara. Las Rutas… se convierten así en una obra personal que tiene, en la forma

panorámica y en la estructura narrativa, casi cinematográfica algunas veces, el encargo

de convertirse en memoria y testimonio de un territorio en peligro de transformación.

Fig. 4: Alaró - Talaia de Ca’ls Reis (Pel Pas de S’Escaleta), REM, n. 23, fot. 30, 1968 y Lloseta - Ses Cases Noves (Por S’Estorell y Biniatzent), REM, n. 37, fot. 31, 1969.

Junto al término “descripción gráfico-geográfica” aparece también el término “obra”

para referirse al conjunto de las rutas.

Así, refugiado en el excursionismo, escudado en la tranquilidad amateur que le ofrece

caminar y narrar en primera persona los caminos y las montañas de Mallorca,

acompañado por unos cuantos amigos, y algunas pocas veces por la familia, seguro en

un riesgo editorial que le implica como autor, editor y productor, cada nuevo número

de las Rutas... ofrece una nueva capa del entramado minucioso de este proyecto que

6

García Pastor construye. Cada nuevo fascículo es una muestra más del extremo

empeño puesto en el detalle para no dejar fisuras entre cada uno de los trazos que

dibuja sobre el mapa de la isla.

Durante estos años, en los textos empiezan a aparecer referencias no sólo a los

fascículos anteriores que se imbrican con el recorrido que se está realizando, sino

también a las futuras trazas que se prevé realizar, como lo demuestran los comentarios

de los fascículos 53 y 55:

“Amb la Ruta anterior, des de Fornalutx a la vall dels Bini, obrirem una bretxa vers

l’arraconada zona dels vessants septentrionals del Puig Major. Ara, amb la present i

altres que la seguiran, ens ha parescut oportú eixamplar aquesta bretxa i donar una

completa descripció d’aquells abruptes i solitaris paratges.”14

“L’itinerari descrit al present fascicle de les Rutes ve a completar amb els tres

anteriors (Rutes nn. 52, 53 i 54), la descripció gràfica-geogràfica de la zona

muntanyenca dels vessants septentrionals del Puig Major, i els seus contraforts i

descensos secundaris vers la mar als sectors de Sa Costera, Cala Tuent i Sa

Calobra”15

Transformación del territorio y reconstrucción fotográfica del paisaje

Podemos considerar que las caminatas por Mallorca buscan también ser un contrapeso

a la transformación implacable que empieza a sufrir el conjunto de las Baleares16,

sobretodo Mallorca e Ibiza, a partir del boom económico que supone la expansión

masiva del turismo durante los años sesenta. Recordemos que el año 1964, inicio de la

publicación de las Rutas Escondidas de Mallorca, fue también el año de la inauguración

del hotel 1.000 de las Baleares, el lujoso Hotel del Mar, en Calviá. La celebración de la

efeméride, contó con la presencia de tres ministros: Fraga Iribarne (Información y

Turismo), Castiella (Exteriores) y Lopez Rodó (futuro ministro el año siguiente,1965). Se

sumaron al acto un numeroso grupo de lo que se empezaba a conocer como turismo

con clase: El Cordobés, los Duques de Alba, los presidentes de Sabena y Pan Am y el

delegado del New York Herald en París, entre otros. Desde finales de los años

7

cincuenta, compañías aéreas, ministros, famosos y playa participan en la

transformación del turismo interior y aristócrata de la isla, en un turismo de sol y playa

masivo, motor de los cambios económicos y sociales de la isla17.

Fig. 5: Pollença - Cales Castell i Sant Vicenç (Pel Pas dels Pecasdors), REM, n. 31, fot. 54 y 61, 1969.

En este mismo período, desde la historia y las ciencias sociales, empiezan a hacerse

públicos trabajos que muestran el interés creciente por conocer y comprender la isla18.

Pero García Pastor busca en sus propuestas describir una manera distinta de acercarse

al territorio y al paisaje que lo representa, desde la innovación en la presentación visual

del contenido hasta la selección de derroteros y recorridos poco habituales, tanto para

turistas como paisanos. Busca encontrar un espacio y un discurso del territorio que

rehuya tanto el academicismo como el tradicionalismo que representan sociedades

como el Fomento de Turismo de Mallorca, con sus grupos de caminatas y excursiones

por la isla19. García Pastor se acomoda en el excursionismo o senderismo deportivo para

empezar a construir sus crónicas personales de la isla.

8

““El seu recorregut [ Sa Capella Blava] és agradable i variat, i al llarg de tot ell es recull la

impressió d’una Mallorca distinta, evidentment ja passada i en liquidació, però encara

atractívola, serena i bella, i tan ignorant d’aquesta altra que se’ns ve damunt, com si enlloc

de trobar-se al costat mateix d’unes carreteres recorregudes depressa per gent de tots els

confins i llengües, estigués a milers de kilòmetres del, segons sembla, encara incipient

batibull babèlic del turisme de mases que afortunadament (?) ens està invadint.”20

Más las Rutas… no son solamente una guía de excursiones o caminatas a pie por la isla

de Mallorca. A pesar de que buscan servir como reclamo y fomentar el excursionismo

local, a pesar de resolver bien la descripción de un recorrido por un espacio físico, no

responden, ni formal ni conceptualmente a lo que generalmente se conoce como guía

de itinerarios excursionistas:

“Realment, aquesta no és una “ruta amagada” per a molts, però si, malgrat tot, per a

bastants. El nostre treball, d’altra banda, no pretén tan sols donar uns itineraris poc

habituals per a excursionistes - en el més ampli sentit del mot -, sinó que, amb major

ambició i amb el pretext d’uns recorreguts realitzables en una forma o altra, aspira a recollir

aspectes poc coneguts del nostre meravellós paisatge, i a reunir un extens corpus fotogràfic

amb la possible perfecció, que fixi la Mallorca actual - semblant encara en molts aspectes a

la passada -; una Mallorca que, millor o pitjor, és en la que ens ha tocat de viure i que

afortunadament conserva encara part de les característiques essencials que han

fonamentat i extès la seva fama universal; una Mallorca que s’està transformant - qui sap si

en millor o pitjor -, disolta en la marea muntant del poderós turisme de masses.”21

Fig. 6: Península de Formentor II. Casas de Cala Murta - Punta del Faro, REM, n. 43, fot. 115, 1970.

Así, a través de las Rutas…, García Pastor va tejiendo un inventario personal de todo

aquello que, con significado propio, se encuentra en peligro de extinción: topónimos,

possessions, árboles, torrentes, pozos, caminos, senderos y hasta montañas, cerros o

9

montículos; la orografía de Mallorca, muda y convertida en telón de fondo de las

ventanas de hotel o las tumbonas de la playa, recobran vida y recuperan, quizás por

última o penúltima vez, identidad, nombre propio y existencia. El fotógrafo recupera en

sus imágenes la lentitud de la observación minuciosa, capaz de transformar el paisaje

en protagonista absoluto, y convertir al observador en personaje ínfimo que lo habita

por unos instantes. Desde la primera persona narra cada trayecto reforzando la

singularidad del registro, reclamando la validez de la mirada como catalizador de

significados:

“A partir de aquí, en nuestra marcha hacia el Puig de N’Alí, por estas alturas no hay sendero

alguno. Sirva de orientación la configuración del paisaje y esa “sitja” que atravesamos. Y,

mientras esté allí, también ese triple pino que aparece en la fotografía.”22

Un proyecto inacabado

En la introducción al fascículo 61, publicado el 1973, Península de Artà, 1ª Parte Interior,

García Pastor muestra, por primera vez, indicios de la dimensión inabarcable de su

proyecto. El territorio mallorquín se transforma demasiado deprisa, el cambio

económico y social del turismo desbarata la posibilidad de acabar el retrato completo

de Mallorca que la obra de las Rutas… se había propuesto:

“Per la part nostra, per a fer la descripció gràfica-geogràfica de la península d’Artà en

aquesta obra de les Rutes, teníem el projecte de realitzar dins ella sis recorreguts. (...)

Dissortadament aquestes tres darreres crec que no les podré dur a terme. Amb això hauria

quedat descrit el particular aspecte d’aquesta extensa península en la forma com ha estat

fins ara al llarg de centúries, abans de que l’ona urbanitzadora -ja en marxa allà amb forta

empenta- ocupi tota la perifèria marítima.”23

10

Fig. 7: Castell d’Alaró, REM, n. 14, fot. 63, 1966.

Prontas a llegar al fin abrupto de su publicación24, las Rutas… evidencian el desánimo

de García Pastor al comprobar la imposibilidad de modificar el ritmo de las

transformaciones que sufre la isla de forma incuestionable. El grandioso panorama

completo de la montaña mallorquina se aleja cada vez más tanto por su imparable

transformación como por el abandono y pérdida de sus personajes y actores. En el

fascículo 80, La Cucurulla de Fartáritx ,de 1978, escribe:

“Ya no hay payeses en las casas del predio, ni ancestral vida campesina. Por lo menos, a

nuestros ojos montañeros, la facilidad del actual acceso sin esfuerzo y la visión de

automóviles estacionados en aquel altiplano, ha hecho que el sugerente y sugestivo rincón

pierda su nostálgica intimidad y gran parte de su atractivo. La carretera, no hay duda, es un

gran beneficio para todo aquel sector y sus parcelas rústicas. Felicitamos a los usuarios.

Para nosotros es como si hubiéramos perdido un amigo entrañable. Uno más.”25

Fotografía y narración fotográfica

Las Rutas Escondidas de Mallorca son, básicamente, recorridos fotográficos por el

paisaje de Mallorca. “Las fotografías constituyen la parte más importante de las Rutas. El

texto además, explica y aclara”.26 Autodidacta y voluntaria e intencionadamente

amateur27, para García Pastor lo fotográfico supone la forma más eficaz de transcribir

sus emociones visuales. La fotografía implica una traslación donde lo plástico va

definiéndose con el uso. A partir de los primeros diez o quince fascículos, podemos

considerar que García Pastor ha establecido dos grandes categorías para ordenar sus

11

excursiones. Por un lado, nos encontramos con las rutas que tienen como finalidad la

descripción de un territorio conocido y transitado, en las que el paisaje humano se

convierte en protagonista. Y por otro lado, el conjunto de rutas que presentan el

descubrimiento de una abrupta zona montañosa o proponen un nuevo recorrido para

realizar una ascensión ya conocida. Para ambas categorías, García Pastor, acabará

desarrollando estrategias y recursos fotográficos distintos. Responsable de la toma,

revelado y copiado fotográfico así como de la selección y ordenación de las imágenes

que conforman cada fascículo, utilizará tanto recursos fotográficos como compositivos

para estructurar el discurso.

Fig. 8: Manacor de la Vall - Massanella (Per El Rafal i Els Tossalls Vells), REM, n. 17, fot. 22 y 23, 1967.

Fotografía y fotografía panorámica

Desde el primer fascículo, García Pastor reproduce imágenes panorámicas compuestas,

formadas por la yuxtaposición de dos o más tomas. Esta práctica, que supone en un

inicio tan solo una pequeña parte de las fotografías, se mantiene en todas las entregas

12

de las Rutas…y se convierte, en algunos fascículos, en la base del discurso visual. Para

García Pastor, el discurso panorámico supone, sobretodo, la posibilidad de establecer el

contexto de aquello que se establece como motivo de la imagen:

“Para situar el contexto del paisaje la Font de S’Ermita, pues no es demasiado fácil de

encontrar para quien la busca por primera vez, aquí ofrecemos una panorámica del

sector.”28

Fig. 9: Torrent de Pareis. I) Escorça - L’Entreforc i la Fosca, REM, n.15, fot. 55, 57, 67 y 70, 1966.

Supone también, en muchas otras ocasiones, la forma elegida para representar

gráficamente el recorrido de la mirada a lo largo de un paisaje. La acumulación de

tomas, en estas imágenes compuestas, sitúan al espectador en el centro, en un punto

de observación a partir del cual se despliega circularmente el territorio. La composición

panorámica permite, de este modo, extenderse horizontal o verticalmente, según la

distancia y las características del motivo lo aconsejen.

A pesar de su gran tamaño, el formato final de las Rutas…, no permite la reproducción

de composiciones panorámicas de más de cuatro tomas verticales. Esta limitación se

13

resuelve, generalmente, reproduciendo las panorámicas de forma seccionada, creando

varias composiciones y, excepcionalmente, añadiendo alguna página desplegable29.

“Esta vista es continuación hacia la derecha de la siguiente, para dar una panorámica

completa de la Cala En Gossalba, tomada desde su orilla derecha. ¡Lástima que no hayan

podido ofrecerse unidas! Aquí se muestra la entrada de la cala y la punta del Morro del

Pont,…”30

Fig. 10: Península de Formentor II. Casas de Cala Murta - Punta del Faro,REM, n. 43, fot 100-101 y 103-104, 1970.

Fotografía de paisaje humano

Muy a menudo, el territorio recorrido por una ruta transcurre por espacios poblados y

ocupados por actividades humanas; cultivos, huertos o prados para ganado. El paisaje

transformado por la actividad humana es presente en las Rutas, y permite a García

Pastor acercarse a las formas de vida agrícolas, sumidas en un acelerado proceso de

abandono y transformación.

García Pastor retrata los caseríos, las possessions, que han estructurado el campo

mallorquín durante siglos. Mayoritariamente cerradas, siempre que le es posible,

presenta su interior y las fachadas principales. Algunas veces, las más pocas, aparecen

los personajes que las habitan: campesinos y jornaleros desplazados a las poblaciones

14

vecinas que se trasladan a la possessió para realizar las labores agrícolas. Caminos,

fuentes, pozos, puentes, casas o árboles se cruzan en el recorrido de la ruta, que suele

tener como fin una ermita, santuario o monte de tradición popular. Como el Puig de

Randa, el Santuario de Lluc o la Ermita de Belén, en Artá.

“... proyectamos y estudiamos un derrotero más amplio, dando por resultado el descrito en

este fascículo; derrotero que, más que un simple ascenso al Puig d’Inca, viene a ser un

circuito con subida y bajada un poco forzadas. Ello ha permitido una mayor variedad de

vistas y panorámicas y la inclusión de otros aspectos interesantes de viejos predios con

rústica arquitectura”31

Fig. 11: Camino viejo de Pollença a Lluc, REM, n. 36, fot. 29, 1969.

García Pastor reconstruye estas rutas utilizando prácticamente sólo imágenes

panorámicas, compuestas por una doble toma. En ellas, la presencia de los caminos y

los caminantes, el espacio transcurrido y la trayectoria, es decir, la descripción del

tiempo en el espacio, se complementa con la visión adicional del contexto. El formato

panorámico permite a García Pastor mostrar no sólo la dirección que toma el recorrido

sino también la mirada circundante, el paisaje transitado, trasladando al espectador

una visión más interesada en la comprensión y el descubrimiento del trayecto que en la

obtención de una meta final. Construidos de forma circular, estos derroteros empiezan

y acaban en un mismo punto. Más que una ascensión o descenso, cada una de estas

rutas por el paisaje humano de la isla supone un redescubrimiento, un reencuentro con

uno mismo. Con la nostalgia y la certeza de saberse en vías de extinción:

15

“23.- (...) L’edificació principal [Son Morei Vell] i demés instalacions indiquen que es devia

tractar d’una possessió important i de noble ascendència, avui totalment venguda a menys

i en completa decadència. Tot el seu aspecte actual indica una absoluta desatenció i falta de

cura. Perteneix a una família pagesa, pel que vérem i se’ns va dir, amb dos fills majors que

enyoren altres llocs menys solitaris i amb millors perspectives de vida.”32

Fig. 12: Puig de Bonany (Des de Petra), REM, n. 29, fot. 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15 y 16, 1968.

16

Fig. 13: Puig de Bonany (Des de Petra), REM, n. 29, fot. 53, 54, 55, 56, 61, 62, 63 y 64, 1968.

Épica del paisaje

Identificado con la tradición excursionista, para García Pastor la montaña es el motivo

central de las caminatas. El conocimiento de la montaña supone el reconocimiento de

uno de los límites del territorio, el vertical, que con la longitud y latitud permiten situar

cualquier referencia en el espacio. En el caso de una isla como Mallorca, todo el

territorio es conocido, colonizado e indexado33. Las excursiones para descubrir el

territorio que García Pastor propone tienen, en los años sesenta y setenta, más de

recuperación, personal o colectiva, que de expedición de reconocimiento o

investigación.

A pesar de su limitada superficie y de contar sólo con alturas medias, el montañismo de

las Rutas… mantiene paralelismos con la tradición montañista alpina desarrollada en el

resto de Europa y América. García Pastor se deleita en encontrar recodos y rincones

difícilmente transitados por seres humanos.

17

Se podría decir que la épica del territorio virgen, presente en las crónicas visuales sobre

los Alpes de los hermanos Bisson, o sobre el Oeste americano de William Henry Jackson,

Timothy O’Sullivan o Carleton Eugene Watkins, reaparece años después en las

fotografías de García Pastor34. El abrupto paisaje de la Sierra de Tramontana, los

roquedales y las bruscas torrenteras, se convierten en el escenario que recorren la

mayoría de las rutas. García Pastor construye su homenaje a la isla, a un paisaje que

permite tanto la identificación como la salvación. Que ofrece la posibilidad de

establecer un reencuentro con la naturaleza y el ser humano. Un paisaje que toma en

su comprensión unitaria, en cuanto es visto como un todo, dimensión trascendente. El

fotógrafo busca incesantemente las últimas posibilidades de encuentro con el paisaje

redentor, paisaje que en su majestuosidad redimensiona la condición humana y

reordena por unos instantes el orden cosmológico:

“En aquest ignorat racó, a l’abric de l’alt muradal inaccessible de la cara occidental del Puig

de Pedruixella, ens aturam unes hores per a menjar i reposar. Tot és aquí pacífic, alegre i

senzill. En aquest paratge recòndit la vida flueix lenta, mansa i monòtona, com el córrer

silenciós d’una humil fontanella. Trobant-nos allà, guanyats per aquella pau, insignificants i

efímers davant la grandiosa i perdurable naturalesa que ens envolta, resulta inexplicable

l’existència de tants il·lusos que, jugant a ésser trascendents. (...) Un pensa des d’aquí, què

significarà tot això quan, finit el transitori i breu inquilinat de la humanitat sobre la terra - i

molt més abans per a cada ú en particular -, incanviat encara l’aspecte d’aquests

grandiosos i sempiterns paisatges, no quedi de la seva obra ni vestigi que recordi el seu

pas.”35

Fig. 14: Puig de N’Alí (Desde Caimari por Els Horts), REM, n. 33, fot. 45 y 46, 1969.

18

Conclusiones

Las Rutas escondidas de Mallorca de Jesús García Pastor, publicadas en el período

comprendido entre 1964 y 1980, supone una de las aportaciones más singulares y

originales de la fotografía de paisaje española contemporánea. Más allá de representar

un inmenso inventario del paisaje mallorquín, las Rutas… ofrecen una novedosa forma

de acercarse al territorio. García Pastor reconstruye, utilizando una sucesión de

imágenes panorámicas compuestas, un dialogo íntimo entre el paisaje y la experiencia

de su tránsito, componiendo para el espectador la posibilidad, casi cinematográfica,

casi virtual, de volver a experimentar cada uno de sus ochenta y tres viajes.

Fig. 15: Sa Mola des Ram (Des d’Esporles, per l’ermita de Maristella), REM, n.47, fot. 49 y 50, 1971.

1 La bimensualidad se mantiene durante la mayoría de años. A partir de 1971 la publicación se vuelve más irregular, y en los últimos años, 1978 y 1979, se publican cuatro fascículos, con periodicidad trimestral. Aunque existe una primera suscripción y, por tanto, un cierto compromiso de edición, en los fascículos no consta la periodicidad de la obra. 2 La herencia de las Rutas Escondidas de Mallorca puede reseguirse en algunas obras del excursionismo y la cultura mallorquina, básicamente en VALERO i MARTÍ, Gaspar: Camins i Paisatges: itineraris culturals per l’illa de Mallorca, 6 vol., Palma de Mallorca: La Foradada, 1994. Gaspar Valero solicita y publica una introducción de Jesús García Pastor en su obra. También en PALOS i VADELL, Benigne: Itineraris de Muntanya, Palma de Mallorca: Moll, 1983, compañero de García Pastor que aparece fotografiado en muchas de las Rutas... La obra de las Rutas..., más allá de estas excepciones, se mantiene desconocida fuera del estricto ámbito del excursionismo y montañismo mallorquín. 3 Entrevista del autor a Jesús García Pastor, Palma de Mallorca, 13 septiembre del 2006. 4 Joan Pons Marquès, realiza la traducción del castellano desde el fascículo 1 hasta, aproximadamente el 40. Llorenç Moyà Gilabert prosigue las traducciones durante algunos números. A partir del número 49 desaparece la referencia del traductor, labor que pasa a ejercer el propio J. García Pastor con la colaboración de su hijo, Lluís García Sevilla. Entrevista del autor a Jesús García Pastor, Palma de Mallorca, 13 septiembre de 2006. 5 Tiraje de 500 ejemplares para la edición en castellano, y 200 para la catalana. Entrevista del autor a Jesús García Pastor, Palma de Mallorca, 13 de septiembre de 2006. 6 Director de la Biblioteca Provincial, profesor de Latín y Griego, licenciado en Filosofía y Letras, Jesús García Pastor se presenta a menudo en su obra como excursionista antes que fotógrafo. Son muchos los comentarios que podemos encontrar en los pies de fotografía que hacen referencia a la falta de oficio y amateurismo fotográfico de su trabajo. Como excursionista, García Pastor empieza a participar, a

19

mediados de los años cincuenta, en las excursiones que organiza el Fomento del Turismo de Mallorca. Entrevista del autor a Jesús García Pastor, Palma de Mallorca, 13 de septiembre de 2006. 7 GARCÍA PASTOR, Jesús: “Castell d’Alaro”, en Rutes amagades de Mallorca, n. 14, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1966, fot. 42. 8 GARCÍA PASTOR, Jesús: “Torre de Lluc”, en Rutes amagades de Mallorca, n. 26, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1968, introducción. 9 GARCÍA PASTOR, Jesús: “Puig Tomir. Desde Lluc, por Es Pedegaret y Alcanela”, en Rutas escondidas de Mallorca, n. 79, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1978, fot. 61-62. 10 Folletín publicitario para la suscripción, encuadernación o compra de fascículos: “Una obra de excepcional categoría que le enorgullecerá poseer: Rutas Escondidas de Mallorca, por Jesús Garcia Pastor”, s/d (Por el número de fascículos publicados, aproximadamente editado en 1975). 11 GARCÍA PASTOR, Jesús: “Sa Talaia de la Victoria (Alcudia)”, en Rutas escondidas de Mallorca, n. 40, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1970, introducción. 12 GARCÍA PASTOR, Jesús: “Puig de N’Eimeric”, en Rutes amagades de Mallorca, n. 46, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1971, introducción. 13 En Mallorca Altiva, García Pastor reconoce la intención de realizar, aproximadamente, unas ciento cincuenta rutas, aunque no consta explícitamente cuales debían ser. Aún así, en varios fascículos García Pastor adelanta la planificación de algún recorrido concreto, generalmente relacionado con el que se está realizando en ese momento. GARCÍA PASTOR, Jesús: Mallorca Altiva, Palma de Mallorca: Miquel Font, Editor, 2ª Edición revisada, 2000. 14 GARCIA PASTOR, Jesús: “La Muntanya de Montcaire (Des de Sóller, pel Mirador de Ses Barques i el Pas des Pinot)”, en Rutes amagades de Mallorca, n. 53, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1972, introducción. 15 GARCIA PASTOR, Jesús: “Es Clots Carbons i Ses Monjoies (Des d’Es Bosc, pel Camí de la Barra, el Pas de S'Estaca i el de Ca'n Termes)”, en Rutes amagades de Mallorca, n. 55, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1972, introducción . 16 Preguntado al respecto en la actualidad, J. García Pastor no considera que su obra tenga ninguna intención política ni de transformación social. Entrevista del autor a Jesús García Pastor, Palma de Mallorca, 13 de setiembre de 2006. 17 BUADES, Joan. On brilla el sol. Turisme a Balears abans del boom. Eivissa: Res Pública Edicions, 2004. pp.185-186. Para Jean Besson, la transformación o “mutación” que sufren las islas durante estos años a raíz del turismo supone su claudicación en el desarrollo de otros mecanismos económicos e industriales. BESSON, Jean: La Terre et les Hommes aux Îles Baléares. Aix de Provence: Edisud, 1977. 18 El mismo 1964 aparece el primer volumen de BARCELÓ PONS, Bartolomé (Dir) y ROSSELLÓ VERGER, Vicente Ma.: Las islas Baleares, Estudio geográfico y económico, Palma de Mallorca: Cámara Oficial del Comercio, la Industria y Navegación de Palma de Mallorca, 1964. En 1963 se había publicado la primera edición de MASCARÓ PASARIUS, José: Corpus de Toponimia de Mallorca, Palma de Mallorca: José Mascaró Rius, 1963, y en 1960, REY PASTOR, Julio y GARCIA CAMARERO, Ernesto: La cartografía mallorquina, Madrid: Departamento de Historia y Filosofía de la Ciencia del Instituto Luís Vives. Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1960. Es de suponer que Jesús García Pastor, en su doble condición de Director de la Biblioteca Provincial y del Archivo de registro de Hacienda conocía la existencia de estas publicaciones. 19 “El excursionismo a pie -que es el verdadero excursionismo- obliga a no trasnochar la víspera y a levantarse temprano el día de la marcha, cosas ambas acordes con los principios médicos fundamentales; como lo están, igualmente, curtirse a los rayos del sol y respirar a pleno pulmón aire salitroso de las marinas o el purísimo de las alturas, a la vez que se evitan los locales con poca ventilación

20

y se eluden las ocasiones de envilecimiento de cuerpo y espíritu que las ciudades brindan”. FONT MARTORELL, Gabriel: Cincuenta excursiones a pie por la isla de Mallorca, Palma de Mallorca: Fomento de Turismo de Mallorca, 1964, p.13. 20 GARCIA PASTOR, Jesús: “La Capella Blava”, en Rutes amagades de Mallorca, n. 19, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1967, introducción. 21 GARCIA PASTOR, Jesús: “Castell d’Alaró”, en Rutes amagades de Mallorca, n. 14, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1966, introducción. 22 GARCÍA PASTOR, Jesús: “Puig de N’Ali (Desde Caimari por Els Horts)”, en Rutas escondidas de Mallorca, n. 33, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1969, fot. 29-34. 23 GARCIA PASTOR, Jesús: “Península de Artà, I. Part interior”, en Rutes amagades de Mallorca, núm. 61, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1973, introducción. 24 En su antología de poesías, García Pastor escribe referente al final de las Rutas…: “La colección había de ser mucho más amplia y completa, pero una dolorosa fatalidad truncó el proyecto; y la ha dejado así”. GARCÍA PASTOR, Jesús: Antología de Poesías paisajistas mallorquinas, Palma de Mallorca: Ediciones Cort, 1977. 25 GARCÍA PASTOR, Jesús: “La Cucurulla de Fartáritx (Desde Pollença, por El Rafal y L’Assarell)”, en Rutas escondidas de Mallorca, n. 80, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1978, fot. 57-58. 26 Entrevista del autor a Jesús García Pastor, Palma de Mallorca, 13 de setiembre de 2006. 27 Preguntado sobre si las Rutas fotográficamente deben considerarse amateurs, García Pastor contesta: “Sí, naturalmente. La fotografía de las Rutas o la fotografía de los vídeos, para mi no ha sido nada profesional, ni por asomo. Han sido siempre una manera de distracción, entretenimiento y ejercicio de grandes caminatas, principalmente, por la montaña con sus abruptedades y paisajes. Por tanto, ese trabajo que fue mucho y complicado, debe considerarse totalmente “amateur”. Entrevista del autor a Jesús García Pastor, 13 de setiembre de 2006. 28 GARCÍA PASTOR, Jesús: “Puig Major. Vuelta de los “Cingles””, en Rutas escondidas de Mallorca, n. 81, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1978, fot. 51. 29 Se utilizan páginas desplegables en las Rutas nº 31 “Pollença - Cales Castell i Sant Vicenç (Pel Pas dels Pecasdors)”, de 1969 y en el nº43, “Península de Formentor II. Casas de Cala Murta - Punta del Faro”, de 1970. 30 GARCÍA PASTOR, Jesús: “Península de Formentor II. Casas de Cala Murta - Punta del Faro”, en Rutas escondidas de Mallorca, n. 43, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1970, fot. 100. 31 GARCÍA PASTOR, Jesús: “Puig D’Inca”, en Rutas escondidas de Mallorca, n. 44, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1970, introducción. 32 GARCIA PASTOR, Jesús: “Artà - Ermita de Betlem”, en Rutes amagades de Mallorca, núm. 20, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1967, fot. 23. 33 GARCIA PASTOR, Jesús: Mallorca Altiva. Fisiografia de la mallorca montuosa i relació sistemàtica d’altures, Palma de Mallorca: Miquel Font Editor, 1995. 2º Edición revisada, 2000. Catalogación de la orografía y la toponimia de Mallorca, de todos los montes y picos de más de 300 metros de altitud. 34 Jesús García Pastor no reconoce la influencia de ninguna tradición o referencia visual. Tanto fotográfica como literaria o cinematográfica. Entrevista del autor a Jesús García Pastor, Palma de Mallorca, 13 de setiembre de 2006. 35 GARCIA PASTOR, Jesús: “Mortitx - La Malé ( Per Pedruixella i Ariant)”, en Rutes amagades de Mallorca, núm. 13, Palma de Mallorca: Imprenta politécnica, 1966, fot. 57-58.

21