LAS ERAS DEL MARQUESADO DEL CENETE (GRANADA)
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LAS ERAS DEL MARQUESADODEL CENETE (GRANADA)FOTOS: JUAN SALVADOR
INTRODUCCiÓN
Este artículo comenzará presentando algunos rasgos generales de la comarca con la intención de contextualizar el estudio realizado sobre las eras;desarrollando, a continuación, una caracterización de las mismas en base asu tipología, estado de conservación,el ciclo de trabajo y sistema de organización, las materias primas y la energía utilizada y su distribución y comercialización. Posteriormente, de maneramás detallada se analizarán los conjuntos considerados más significativos:Aldeire, Ferreira, La Calahorra, Dólar yHuéneja.
La importancia de la agricultura enla comarca se manifestó en la relevancia social y económica que alcanzaronlos labradores y sus fiestas. De igualmanera hoy se puede observar en lagran cantidad y el tamaño de las erasy de otras construcciones auxiliarescomo los pajares o las cámaras de lasviviendas.
La integridad de las eras es buenoaunque el abandono de las laboresagrícolas y las frecuentes lluvias hanfacilitado la caída de una parte de losbalates. Las eras de Aldeire, Dólar,La Calahorra, Ferreira y Huéneja hanido poco a poco perdiendo parte desus muros. Además, la proximidad alos núcleos urbanos con los que nohay discontinuidad y la dinámica decrecimiento urbano han acelerado suproceso de desapar ición perfilándosecomo solares para viviendas o dependencias auxiliares (cocheras detractores , corrales para animales , leñeras, etc.). En La Calahorra prácticamente han desaparecido y, actualmen te, solo queda una pequeñaparte de eras con su empedrado muydeter iorado por el paso de maquinaria agraria pesada.
La posición elevada que, necesariamente, deb ían de tener las eraspara recibir los vientos, las han convertido en privilegiados miradores sobre los núcleos urbanos y el campode secano surcado por la carreteraautovía y los raíles del tren. En la actualidad, estas eras conforman un escenario prop icio para su utili zación
como espac ios de sociab ilidad y esparcimiento.
EL MARQUESADO DEL CENETE
Esta coma rca se encuentra en elnordeste de la provincia de Granada ycomprende ocho poblaciones: Aldeire,Alquife, La Calahorra , Dólar, Ferreira,Huéne ja , Jeres del Marquesado yLanteira. Su población de derecho esde 7.405 habitantes (INE, 1991) Y sudensidad de población de 16,9 habitantes por kilómetro cuadrado (Andalucía, 1990).
La altiplanicie del Marquesado, conuna extens ión de 496 , 9 kilómetroscuadrados y situada en las laderasNorte de Sierra Nevada, presenta lamayor altitud media de todas las comarcas andaluzas (1.214 metros).Ubicada dentro del contexto geológicode la zona bética son los complejosNevado Filábride y Alpujárride los queafloran en este sector. Los materialesmás comunes son micaesquistos ,cuarcitas, mármoles, gneis, etc... en elcomplejo Nevado-Filábride y calizas y
Era en el corral de una casa de lacalle Eras en Jeres del Marquesado.
JUAN SALVADOR LÓPEZ GALÁN
dolomías en el Alpujárride; todos elloscubiertos por materiales detríticoscuaternar ios que rellenan la depresiónGuadix-Baza (Bosque, 1987).
El sistema hidrográfico de la cuencaestá formado por el río Verde o Guadixy sus tributarios, de los cuales los másimportantes nacen en Sierra Nevada ydrenan su vert iente norte. La escorrentía de Sierra Nevada es el principal aporte para el riego. La climatología de esta comarca viene definidapor el ámbito mediterráneo con precipitac iones escasas, particularmenteen verano y su carácte r continental,con una amplitud térmica elevada.
En cuanto a la vegetación de la zona baja está caracterizada por el usohumano y los cultivos de regadío (herbáceos y cereales) y secano (frutales,olivos y almendros). En la ladera deSierra Nevada existen amplias zonasde repoblaciones de pinos y destacala importancia paisajística del castañar en el Barranco de Jeres.
La agricultura acapara el mayor porcentaje de la población activa, cultivándose principalmente los herbáceos (en secano y algunos en regadío),los frutales, entre los que abundan losalmendros, y algunas hortalizas y tubérculos dedicados al autoconsumo.El minifundio es la forma de explotación generalizada, encontrándose lamayuor parte de las parcelas por debajo de 5 has. En cuanto a la ganadería el ganado principal es el ovino ycaprino, habiendo también algunascabezas de ganado porcino (relacionado principalmente con la matanzaprivada), de bovino y de equino. Además existen dos granjas de cerdo ibérico en Huéneja y varias granjas depollos en Huéneja, Aldeire y La Calahorra.
Históricamente, la actual comarcacomenzó a definirse tras la conquistamusulmana adaptándose a un marcofísico perfectamente definido, el altiplano y la sierra, y que llegó a constituirse en un señorío de nombre Senedo Zenete derivado, al parecer, de unade las tribus que se asentaron en estazona. Poster iormente, una vez conquistada la zona por los cristianos, losReyes Católicos concedieron este te-
NARRIA
Era del cerro de San Antonio en Alquile.
rrit ori o al cardenal Mendoza comopremio a los se rvicios prestados, yDon Rodrigo Díaz de Vivar y Mendozaen 1492 constituyó el Marquesado delCenete.
La población, que había disminuidosensiblemente tras el abandono deestas tierras por parte de los conquistados , no aumentará de forma notablehasta 1560, debido fundamentalmenteal regreso de los moriscos, una vezgarant izados sus derechos de residencia por el Marqués. Este asentamiento significará una corta etapa deprosperidad en la comarca, motivadapor el auge de la economía agrícola,basada en el cereal, y de la industriasedera. Sin embargo, la rebel ión yposterior expulsión de los moriscos en1569 marcará el inicio de una etapade decadencia que se prolongará hasta el siglo XIX. En este siglo se producen una serie de acontecimientos sociales y económicos que van a facilitarel crecimiento demográfico de la comarca: desamortizaciones, roturaciones intensivas de antiguos montes yeriales y, sobre todo, el nacimiento dela minería del hierro en Alquife, Dólar,Jeres y Lanteira que va a influir notablemente en los municipios, suponiendo una nueva vía laboral para la población esencialmente agrícola quemalvive con los productos de unas explotaciones excesivamente parceladas.
Los altibajos de la minería a lo largodel siglo xx, unida a la crisis de unasestructuras agrarias difícilmente modernizables, han supuesto, en los últimos tiempos, una reactivación de laemigración en estos pueblos que hanvisto descender su población entre un
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40 Y un 50% respecto a sus efectivosde 1950. A ello hay que sumar el futuro incierto por el que atraviesa la población de la comarca tras el cierre dela Compañía Andaluza de Minas, pudiéndose ver, en un futuro próximo, incrementada de nuevo la emigración.
CARACTERíSTICAS DE LAS ERASDEL MARQUESADO
El conjunto de eras de Aldeire (erasde Triana, de San Antón, era Grande,eras de San Marcos y las eras de lasColmenillas) forman un excelente conjunto de sistemas construct ivos funda-
Era del cerro de San Antonio en Alquile.
mentales en el proceso de recolecciónde los cereales de la comarca. Soneras empedradas de forma circular orectangular con figuras geométricascon formas de soles radiantes, estrellas, flores o trazando sencillas calleso radios. Los materiales empleadosson piedras de pedernal y de pizarra.
En Huéneja, las eras de la Ermita dela Presen tac ión forman el conjuntomás importante del municipio formadopor más de sesenta eras. Todas estánempedradas y presentan diversas formas, ovaladas y redondeadas, con dibujos radiales o lineales. Cerca de laseras hay varios corrales para encerrarel ganado y numerosos pajares queservían además para guardar las herramientas y resguardarse del calordurante las labores de trilla.
La Calahorra presenta dos conjuntos de eras en torno a las eras Altas,más próximas al pueblo y aliado de lacarretera de Alquife, que ya han sidourbanizadas; y las eras Bajas, situadas a la derecha entrando por Guadix,están siendo rápidamente ocupadaspor viviendas y por naves agrícolas oganaderas.
El cerro de la Calera de Dólar y elcerro de San Antonio en Alquife concentra el mayor número de eras empedradas. En Ferreira existen erasempedradas en las eras Altas y en laseras del Corralón habiendo desaparecido las eras de San Torcuato en elCastañar por su proximidad al núcleourbano. Las eras empedradas de Jeres del Marquesado fueron urbanizadas y aún se puede encontrar algunaen los patios y corrales de las casasdel barrio de las Eras.
Tipología
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Balates y rampas de subida a una era y pajares al fondo. Eras de la Ermitaen Huéneja.
Las eras de la comarca son del tipode era empedrada y están agrupadassiguiendo las curvas de nivel de lasfaldas de los cerros que rodean algunos pueblos como Alqu ife, Alde ire ,Dólar, Ferreira). Construidas con balates de piedra seca se emped rabancon piedras de pedernal y de pizarraformando radios, soles, flores o callesparalelas según la forma de la era ,predominando las formas redondeadas u ovaladas sobre las cuadrangulares o rectangulares. Las eras, mayoritar iamente de prop iedad individual,han sufrido pocas transformaciones ysolo las más cercanas a las poblaciones son convertidas en solares paraedificar nuevas viviendas o naves agrícolas.
Las edificaciones auxiliares, comolos pajares de las eras y los corrales,localizados en los ruedos de los pueblos han sido construidas con los mismos materiales y técnicas que las viviendas: Mampostería de pizarra yargamasa de barro y cubierta plana delauna sobre aleros. Los pajares o casillas de las eras de Huéneja, Dólar oFerreira fueron trans formados paraacoger la maquinaria agrícola actual.
Estado de conservación ytransformaciones
La integridad de las eras de Aldeirey Ferreira es buena, aunque debido asu falta de uso y las lluvias del inviernode 1997 se han caído bastantes «balates» partes de los muros de contención. En La Calahorra y en Huénejalas eras se encuentran en un estadode conservación regular con bastantes balates semiderruidos.
Actualmente están abandonadas ylas que se utilizan, siempre tienen unuso marginal para las actividades agrícolas o ganaderas: Sirven para almacenar alpacas de paja que son cubiertas por grandes plásticos, dejar leñaapilada y ramaje, dejar aperos de labranza o maquinaria agrícola, «encender« el estiércol amontonado, y durante los meses de noviembre y dediciembre se ponen a secar cáscarasde almendra que luego servirán de alimento al ganado.
En la última década se han construido viviendas y corrales para el ganado en las eras más próximas a lascasas: En Huéneja se han constru idoalgunas naves para el ganado y en AIdeire casas y corrales en la era Grande de la calle San Bias, en Ferreira yJeres se formaron las calles Eras yEras de San Marcos respectivamente,
y en Dólar la calle Travesía de SanAndrés.
Los corralesy pajares han sufrido unaprofunda transformación al haber sidoreparados con materiales diferentes alos originales pudiéndosever en un mismo corral un tejado de pizarra, un trozocon teja árabe y otro con uralita.
Casillas
En las eras de Aldeire , Dólar, Ferreira y Huéneja se encuentra, además, otras construcciones llamadas«casillas» o pajares que se utilizabanpara resguardarse del calor en la trilla, sirviendo durante el resto del añopara almacenar la paja y guardar lasherramientas. En Ferreira las erasque no tenían estas casillas constru ían un «cuadrillo» en la pared del balate para meter un botijo y tener elagua fresca .
Ciclo de trabajo
El trabajo de la siega se realizabaen Ferreira con cuad rillas de seis osiete jornaleros y el dueño de la fincao un capataz. Entre los jornaleros unabuena parte de ellos eran emigrantestemporeros de Jaén o de las Alpujarras que, recib ían salario y comida,dormían en las eras, en los corralesdel ganado o, en el mejor de los casos, en el portal de la casa del amo.Esto último motivaba el que durantelos quince o veinte días que duraba lasiega no se cerraban las puertas delas casas de los labradores.
La trilla de los pequeños y medianosla solía realizar la misma familia y sinecesitaban ayuda se la pedían a otrolabrador del pueblo intercambiándosetrabajo. Mientras que una persona trillaba otra descansaba en la «casilla» oa la sombra de las gavillas. La persona que no tenía era debía esperar aque terminase alguno de los propietarios y se la prestase gratis o pagandoalguna pequeña cantidad. Tambiénera frecuente que las familias se ayudasen para volver las parvas, porque«era en ventaja de todos» (Antonio delRío, Ferreira). «Si venía el tiempo malo y tu parva no estaba en malas condiciones se decía: Vamos a la de fulano que está en malas condiciones. Yse juntaban todos allí a ver si podíaamontonar » (Andrés Reyes, Dólar).
Sistema de organización deltrabajo
El trabajo en los pequeños y medianos prop ietarios se organ izaba encuadr illas de dos o tres hombres normalmente de la familia o amigos conlos que se turnan a la hora de sacar laparva. Los grandes propietarios formaban cuadrillas de cinco o seis jornaleros con el amo de la finca o el manigero.
Cada propietario organizaba el espacio de manera independiente perobastante parecida a los demás. Se dejaba un espacio para las gavillas queno se iban a trillar y en el resto de laera se echaba la parva y se trillabacon los trillos tirados por mulos dandovueltas en redondo, en un sentido pri-
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NARRIAmero y después en otro. Sólo a la hora de aventar se guardaba una distancia con las eras colindantes con el finde que el cereal no se saliese de sucontro l.
Materias primas y energíasutilizadas
Los productos que se sembraban enel ..campo» (tierras de secano con riego eventual) de Aldeire eran los queluego se trillaban: cereales (trigo, centeno y cebada), lentejas y garbanzos.También se obten ían otros productossecunda rios como las granzas y la paja que serv ían de comida para los burros y las gallinas.
Cuando el proceso era enteramentemanual se utilizaba la energía humana(carga y descarga, aventar, volver laparva, envasar) y la animal (trilla ytransporte de las gavillas, del trigo o dela paja). En el proceso mecanizado seusaron motores de gasoil o se enganchaban las trilladoras a los tractores.
Distribución y comercialización
Una parte de la producción de cereal se destinaba al autoconsumo y laotra se vendía a los intermediarios omarchantes que iban por las casas ose llevaba al Silo del Servicio Nacionalde La Calahorra o a Guadix. Tambiénse vend ía la paja y las granzas a lospastores para pienso de los animales.
LAS ERAS DE SAN ANTÓNDE ALDEIRE
San Bias, la de las Eras o por la Cuesta de las Eras.
Presentan diversas formas predominando las ovaladas o elipso ides y lasredondeadas sobre las rectangulares .Todas tienen la misma estructura yfunción y están realizadas con los mismos materiales, la misma técnica y siguiendo el mismo procedimiento. Lacomunicación entre ellas se podía realizar gracias a la servidumbre de pasode que gozaban y se hacía a travésde cam inos y rampas empedradascon ..mojones') o pederna les.
Procesos de producción ytransformación
En Aldei re, una vez segadas lasmieses se ataban en gav illas y comenzaba la barcina con los mulos ylas jamugas, también había algunoscarros en el pueblo, hasta tenerla todaen la era. Se trillaba con sol, cuando lamies estaba bien seca , sin rocío nimojada por la lluvia. Los trillos eran de«tablas que llevan por debajo unassierras" y en los que las personas tenían que ir de pie, posteriormente seemplearon trillos de discos en los queya podían ir sentados.
A mediodía se paraba para comer yse iba a la casa donde se tomaba «unguisado o un cocido con lo que se pillara» y también comían las bestias. Acontinuación se seguía trillando parando, de vez en cuando, para «volverlas parvas " , esta actividad consistíaen darle la vuelta a la paja con las horcas para que se moviera y se fueserecortando.
Cuando se sacaba la parva se hacíaun montón con las horcas y con escobones se barría y se esperaba a quellegara la máquina a aventarlo. Las primeras máquinas las tenían que llevara hombros de una era a otra y paraponerla en movimiento dos hombrestenían «que darle a la cigüeña que eramuy dura , luego vinieron otras másmodernas que tenían un trillo y lo molía todo y por un tubo pasaba a la máquina y salía la paja por un lado y eltrigo por otro, ponían los sacos y seiban llenando y, por último, vinieron lascosechadoras y ya se perdió todo" .
La mejor hora para «ablentar» oaventar era por la noche «porque el aire se quedaba más fijo» y si se aventaba con las máquinas era mejor porque el polvo picaba menos. Cuandose estaba todo el día esperando a queviniera el viento también se aventabade día pero el viento soplaba másfuerte y racheado y hacía más calor.Al terminar de aventar el trigo se llevaba en costales a los trojes de la casa yla paja, si no se metía en las casillasde las eras, se barcinaba al pajar de lacasa con las jamugas y los «arplles« ojarpiles de esparto que los arrieros traían de las Alpujarras. Durante todo elaño «las eras estaban limpias y si secaía un balate se rehacía».
Otros usos o actividadessecundarias
En Aldeire, las eras de San Antónaún tienen un importante uso secundario asociado a rituales festivos, mágicos o religiosos: El día de Todos los
Sin tener en cuenta las eras situadasen los cortijos, en el entorno próximo alpueblo se encuentran las eras de Triana, situadas en el barrio de ese nombre, las eras de San Marcos (en la calle y en el entorno de la antigua ermitade San Marcos) y las eras conocidascomo Las Colmenillas (en la falda delcerro del mismo nombre), además delas eras de San Antón que agrupan elconjunto más importante ya que su número superaba las sesenta.
Las eras de San Antón tienen unsignificado relevante como un marcador de identidad local, por su posicióna los pies del cerro del Castillo, domina todo el pueblo y el campo y se configura como un hito singular del paisaje. Están situadas en el Pago de lasEras, siguiendo las curvas de nivel dela falta del Cerro El Castillo y entre losbarrancos que bajan del mismo, a unaaltitud entre 1310 Y 1330 m., y se accede a ellas por la calle Secano, la de
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Balates de piedra seca de las eras próximas al camino. Eras de la Ermita en Huéneja.
Santos se hace «La Tost á« en las lumbres hechas con la leña que llevan losjóvenes. También iban las mujeres ajugar al corro y a la rueda lanzándosecántaros viejos unas a otras, o a rezaren grupo a San Bias.
Antiguamente, según estudió JuanCarlos Rivas , durante el verano losmayordomos de San Marcos o «sanrnarqueros» iban a las eras recogiendo la limosna para «La Caridad » deSan Marcos consistente en una cuartilla de trigo por cada labrador. La fiestaactual tiene su origen en el voto que lavilla hizo a principios del siglo XVII pidiendo su protección , deb ido a unaplaga de langosta que la asoló, y porla mala cosecha de cereal el hambreocasionó gran mortandad. El concejode la villa nombraba a un vecino,posteriormente fueron dos, con la obligación de recoger en verano la limosna de trigo, para repartir la caridad eldía de San Marcos , y de pedir por lascasas para pagar a los curas de la parroquia que habían realizado la función religiosa .
Con el trigo recogido en las eras losmayordomos elaboraban la <e Encomienda» o medallón en forma de rosa,hecho con una masa de harina de trigo sin levadura, y los roscos de panque serán bendec idos en la procesióndel día 24 de abril y repart idos juntocon trozos de queso después de laprocesión del día de San Marcos. Eldía 26 los mayordomos llevaban «LaCaridad » a los que no la habían podido recoger personalmente y se repartían dos roscos a cada vecino que hubiese dado limosna (Rivas, 1983).
Materiales y técnicas deconstrucción
Los materiales empleados son lapiedra de pizarra y la técnica 'para hacer los balates o muros de las eras esla de piedra seca, sin ninguna argamasa de agarre. Una vez comprado elterreno cada uno se constru ía su propia era siguiendo el mismo procedimiento: El trabajo comenzaba con latarea de «alisar el terreno » mediantela construcción de un balate o murode contención con pizarras a piedraseca, luego se «empedraba con mojones de piedras con solapa- que no tuvieran tierra y se colocaban con un poco de desnivel para que las aguas nose embalsaran.
Los balates se remataban con unalero formado por una hilada de lajasde pizarra sobresaliendo una cuartaparte de las mismas y que están colocadas sobre su lado plano con un ángulo de unos diez grados sobre la ho-
rizontalidad del muro. Con esta inclinación hacía el interior de la era seconsegu ía que los granos de cereal norodasen fuera de la misma.
LAS ERAS DE LA ERMITA DE SANANDRÉS DE DÓLAR
Entre las eras que ya han desaparecido podemos citar las eras de la calleEscuelas , las de la calle Prolongaciónde San Andrés y las eras de la calleBarrio de las Eras mencionadas en elLibro de Apeo de Dólar de 1572. Delas que aún permanecen las más significativas son la de la Ermita de SanAnton io y las de San Andrés.
Las eras de San Andrés están situadas siguiendo las curvas de nivelde la falda del Cerro de La Calera, auna altura de 1.200 y 1.218 m., y sepuede llegar a ellas por la calle Prolongación de San Andrés. El conjuntoestá formado por unas veinte erasque presentan diversas formaspredominando las rectangulares sobre las ovaladas y en su entorno seencuentran la ermita de San Andrés yel cementerio.
Otros usos o actividadessecundarias
Las mayordomas de la Hermandadde la Virgen de la Cinta salían en elverano pidiendo una cuartilla de cebada o media fanega para la «función delas mozuelas». Con lo que sacaban,después de venderlo, costeaban lamúsica de la procesión y la de un baile que se hacía en la calle. En la erade la ermita de San Antonio se bendecían los animales después de la misadel día de su fiesta .
Procesos de producción ytransformación
El proceso de trabajo durante la siega estaba marcado por los descansos:«Todo el mundo salía a las seis de lamañana , llegaban echaban un revezo,fumaban y le decían al dueño : «VayaUd. a hacer las migas». Com ían seechaba otro revezo y se fumaba. Ledec ían: «Haga Ud. el gazpacho». Ydespués del gazpacho otro cigarro , yluego otro cigarro mientras ven ía eldueño por la olla y por la tarde otro cigarro o dos».
El transporte de la mies se hacíacon carros de llantas o con las albardas y dos palos en los mulos. «Se leiban enganchando (las gavillas) mientras podías o podía el mulo». Se lIeva-
NARRIAba a la era y se iba emparvando y antes de empezar a trillar se le daba unavuelta si se había mojado. La mecanización del campo fue progresiva , primero se aventaba con la horca , luegocon unas máquinas con motor y porúltimo, llegaron los «trillos locos» y lascosechadoras. Mientras duraba la trillase solía ir a la era a dormir por la noche, haciéndolo encima de la paja ode la cebada .
Una vez terminada la trilla se aprovechaba la noche para meter la pajaen el pajar «por que no hace calor y elpolvillo pica menos ». Cuando se llevaba hasta la casa se utilizaba la piquera para entrarla al pajar con la ayudade la carrucha situada en el dintel dela piquera . Los productos que se metían eran las pajas y las granzas del trigo, centeno y cebada . Antes la paja seutilizaba fundamentalmente como comida de los animales, hoy se abandona en el campo y se quema con losrastrojos ante su poca utilidad.
Materiales y técnicas deconstrucción
Los materiales empleados son lapiedra del terreno con algunas piedrasde pizarra y la técnica para hacer losmuros o balates es la de piedra seca,sin ningún tipo de argamasa de agarre. Se empedraba con piedras del terreno que se colocaban buscando lacara más plana, y con piedras de pizarra puestas a sard inel. En las erasrectangulares predominan los empedrados con dibujos de calles paralelasyen las de planta circular o elíptica losmotivos radiales . En las primeras setrazaban calles de líneas rectas conlas piedras de mayor calibre , y se disponían paralelas entre sí y perpendiculares al cerro, a todo lo ancho de laera , rellenándose a continuación deotras piedras más menudas. En laseras de forma circular se comenzabael empedrado colocando una piedraredonda , que podía ser de pizarra, porsu cara plana en el centro de la era, seclavaba un clavo y con una cuerda setrazaban los diferentes círculos concéntr icos y líneas radiales, sencillas odobles , a sardinel o tableada , con elfin de consegu ir motivos geométricoscon la forma de un sol radiante o de unabanico. La era comunal cont igua a laermita de San Antón presenta un empedrado con figura de rosa, representat ivo de los que se encuentran en losconjuntos de eras del cerro de la Calera.
Los balates o muros de contenciónse remataban con un alero formadopor una hilada de piedras que sobre-
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NARRIA
Superposición de materiales de construcción en un pajar. Las Eras en Ferrelra.
Los muros de cincuenta centímetrosaproximadamente son de mampostería de piedras calizas , del terreno , y«barro para cimentar .. con algunas hiladas de lajas de pizarra. Las esquinas están realizadas con piedras rectangulares de mayor tamaño cruzadasentre sí para dar más resistencia a launión de los muros. La armadura esun forjado de piso con una leve inclinación compuesto de tres jácenasapoyadas en los muros de los ladosmayores, paralelas a la fachada y auna distancia de entre uno y dos metros. Sobre éstas y los muros se apoyan rollizos dispuestos perpendicularmente a la fachada y separados entresí entre veinte y treinta centímetros.La cubierta plana es un «terrao» formado con cañizo y una capa de launade veinticinco centímetros y rematadopor un alero de pizarra. Tiene el suelode tierra del que sobresalen los gruesos peñones del cerro.
salen un poco sobre el muro y que están colocadas de forma tablada.
LOS PAJARES DE LAS ERASDE DÓLAR
En todas las eras había «corrales» opajares que servían para almacenar lapaja y guardar las herramientas, también se utilizaban para descansar resguardado del sol durante la trilla . Seencuentran en estado de abandonoprogresivo y en los últimos años hansido reconstruidas como dependencias auxiliares de actividades ganaderas o agrícolas o como viviendas unifamiliares. La cub ierta de launaneces ita de una sencilla pero constante reparación, repon iendo la tierraarrastrada por la lluvia. Las goterasproducidas en la misma arrastran lalauna al inter ior del corra l y el aguaproduce humedades y el reblandec imiento de la madera que acaban pordañar los rollizos y hacerlos quebrad izos.
El corral o pajar de las eras de la Ermita está situado en el Cerro de LaCalera y su integridad es mala, de inminente ruina, por la ausenc ia de lasoportunas reparaciones y por el abandono de su uso original.
Este corral es una habitac ión conuna crujía solamente de unos tres metros de ancho por seis de largo, aproximadamente. De planta rectang ular,se accede a ella directamente a travésde un vano con la puerta descolgada.Está adosado al cerro y aprovechandosu desn ivel apoya los muros de susdos lados mayores en la roca directa-
mente. La fachada principal está en ellado menor orientada al Este, con unvano adintelado con un rollizo; en lafachada posterior hay una ventanaadintelada con dos rollizos pequeñosy protegida con un postigo de maderade dos hojas y una reja.
Materiales y técnicas deconstrucción
Los mate riales empleados son lapiedra caliza del terreno con algunaspiedras de pizarra y la técnica para hacer los muros es la de la mamposter íade piedra con argamasa de agarre.
Era del cerro de San Antonio en Alqulfe.
LAS ERAS BAJAS DE LACALAHORRA
En el entorno próximo al núcleo urbano encontramos dos agrupamientosde eras, las eras Bajas, con entradapor la Carretera de Guadix y las erasAltas junto a la carretera de Alquife.
Las eras Bajas están situadas en elPago de las eras Bajas, a los pies delCerro El Castillo entre el barranco dela rambla de San Gregorio, a una altitud entre 1.190 y 1.200 m. Forman unconjunto de entre cuarenta y cincuenta eras de formas diversas en las quepredominan las ovaladas y las redondeadas sobre las rectangulares .
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Otros usos o actividadessecundarias
Los mayordomos de San Marcoselegían a ocho personas que iban alas eras durante el verano recogiendolos donativos cons istentes en unacuartilla de cebada o de trigo para hacer los «roscos de San Marcos». Estos donat ivos hoy se recogen en lastiendas y en la cuenta corr iente de unCaja de Ahorros y con ellos se elaboran dos o tres mil roscos que se reparten a la salida de la misa y antes de laprocesión. La procesión llegaba hastalas eras donde se bendecían los roscos que luego se daban a los animales domésticos con el fin de preservarlos de enfermedades.
Materiales y técnicas deconstrucción
Los materiales empleados son lapiedra y la técnica para hacer los balates es la piedra seca y para hacer elsuelo de la era el empedrado. Todaslas eras se delimitaban con una hiladade piedras de mayor calibre para marcar la separación entre unas y otras .Solo en aquellos sitios donde la inclinación del terreno era grande, comoen la falda del cerro del Castillo, se hacían unos balates de piedra seca y seremataban con una hilada de piedraspara formar un borde.
LAS ERAS DE FERREIRA
Son varios los grupos de eras queencontramos en Ferreira : Las eras deSan Torcuato que debían su nombre ala desaparecida ermita, las eras delCorralón , las eras Altas y, por último,la agrupación conocida con Las Eras.
Las Eras están situadas siguiendolas curvas de nivel de la falda del Cerro Las Coloradas y entre los barrancos que bajan del mismo, a una alturaentre 1.250 y 1.270 m. de altitud, accediendo a ellas por la calle Eras o porla carretera que va a Dólar. Es la agrupación más numerosa de eras conmás de cuarenta y presentan formasvar iadas en las que predominan lasovaladas y las redondeadas sobre lasrectangulares.
Procesos de producción ytransformación
El trigo y la cebada se segaba concuadrilla de segadores que venían deJaén y de las Alpujarras, estaban formadas por una media de seis hom-
bres y trabajaban de sol a sol con unrendimiento de fanega y media por jornada. La faena duraba unos quince días. El amo debía de suministrar les lacomida de migas y olla y un sueldo enmetálico . «También se segaba con gitanos que venían de la Alpujarra y detodas partes, dormían en los portales,en los corrales y en las eras». El señorAntonio, de joven, estuvo trabajandodos o tres años durante el verano aquince pesetas el jornal más la comida con un horario de doce o catorcehoras de trabajo.
Se salía a la una de la mañana conel carro a barcinar a Los Atochares(pago de Derramaores, pago de LaCalderona, pago de Esparragueras ypago del Cerrillo de los Muertos), y sellegaba al pueblo con el primer viaje alas doce o doce y media de las tarde ,se comía y a las dos y media se sal íade nuevo volviendo a llegar al pueblo,con la segunda carga, a las ocho onueve de la noche.
Luego se hacían las «hacinas» omontones de la mies en la era parahacer la parva y emparvar. Cuando seterminaba de trillar «se sacaba el pez»amontonando el grano con una formaalargada o redonda . Si llegaba la noche y estaban a medio aventar se quedaban durante toda la noche en la era.
El viento bueno para aventar era eldel Norte , el de Guadix, que entra solano, de levante, y la mejor hora en torno a las once de la mañana y con todaseguridad, por la tarde cuando el aireestaba fijo. Se miraba a la veleta de latorre de la iglesia para orientarse y saber cuál era el momento más oportuno. Durante toda la noche se aprovechaba para llevar la paja a la casa conla bestia y unas angarillas. Cuando llegaba el día y cambiaba el viento seseguía trabajando. Al final de la tarea ,el trigo se transportaba en costales yse guardaba en los atrojes que habíaen las cámaras de las casas. Posteriormente vin ieron las máqu inas deaventar y trabajaban toda la noche iluminados por un farolillo .
Materiales y técnicas deconstrucción
El mater ial empleado para hacer elbalate es la piedra de pizarra del terreno y la técnica es la de piedra seca.El empedrado se hacía con piedra pedernal y se le dotaba a la era de unpequeño desnivel para evitar que seembalsara el agua .
El proceso constructivo de empedrar un «terrapl én» conllevaba estospasos: Primero se buscaba el centro yse trazaba con un compás un círculo,
NARRIAa continuación se trazaban radios conhiladas rectas de piedras colocadassucesivamente, y por último, el espacio entre los radios se rellenaba conpiedras que «encajaban» en la tierra.Las distintas líneas rectas y los círculos concéntricos formaban motivos artísticos como calles paralelas o solesradiantes. También hay eras que notienen ningún dibujo y con las piedrasdel empedrado colocadas de manerairregular.
Los balates se hacían de mamposter ía a piedra seca pero con «pareddorm ía». Para darle esta inclinación alparamento se colocaban las piedras«de mayor a menor », es decir, dándole al muro mayor anchura en su base yaminorándola conforme se gana en altura . Con esta técnica «se hace másfuerza» en los paramentos que si están «a plomo», dando muy buen resultado en tiempos de lluvias o de humedales en los que se «recatean» laspiedras .
Estos balates se coronaban con un«anillo de piedra» o murete de unosveinte cms. de altura hecho de mampostería concertada de dos hojas trabadas con barro de launa. También seremataban con un alero formado poruna hilada de lajas de pizarra colocadas a sardinel o tableadas , que sobresalen una cuarta parte de las misamasy que están colocadas con un ángulode unos quince grados sobre la horizontal del muro. Con esta inclinaciónhacia el interior de la era o con el «anillo» se consegu ía que los granos decereal no rodasen fuera de la misma.
El pajar tiene los muros de mampostería concertada de pizarra y barroy como cubierta tuvo un terrao de launa , que hoy ha sido sustituido porunas planchas metálicas onduladas.La «casilla» para descansar tieneiguales muros que el pajar.
ERAS DE LA ERMITA DE LAPRESENTACiÓN DE HUÉNEJA
El término municipal de Huéneja esel mayor de la comarca y la importancia que alcanzó su agricultura de secano se puede constatar en el númeroe importancia de sus eras y de algunas de las dependencias de las viviendas (pajares, atrojes y pajares).En el entorno próximo del núcleo urbano, sin contar las numerosas erasde los cort ijos , encontramos var iosgrupos de eras : Las eras de Cagarr ia,a un kilómetro de distancia del pueblosituadas en la carretera hacia Fiñana,las eras de la Balsa y las eras de la Ermita que agrupan el conjunto más importante.
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NARRIA
Detalle del centro de una era. Eras de la Ermita en Huéneja.
Para empedrar las eras se empleaban las «piedras vivas» de cantera,que se cogían de los pedregales. Aestas piedras «se les van buscandolas caras» y las más gruesas son lasque se ponían para separar unas erasde otras «se apartaban para hacer lalinde». Se le hacían unos «dibujillos»de soles o calles paralelas con una fila de piedras más finas «muertas»,solamente «por hacer un dibujo, porponer un adorno».
Los muros del corral de la bisabueladel señor Manuel tienen en su mampostería además otro tipo de piedra lallamada «blanca, que es una piedra caliza, piedra mortecina que no vale» para empedrar las eras. El corral tiene unacubierta plana con un terrao de launa.
CONCLUSIONES
Las eras están situadas siguiendolas curvas de nivel de la falda del cerro Dólar, a una altitud entre 1.190 y1.200 rn., en un paraje con una pequeña inclin ación y se llega a ellaspor la ca rretera que va a la Ermitadesde el pueblo o por la entrada delkilómetro 247 de la carretera N-324.También , el Cordel de Dólar a Fiñanacruza por entre las eras.
Este conjunto de eras superaba lassesenta con formas ovaladas y redondeadas predominantemente.
Procesos de producción ytransformación
Lo primero que se trillaba eran laslentejas a finales del mes de mayo yen torno a la festividad de San Antonio, el 13 de junio, comenzaba la siega de los cereales. La gran extensióndel término municipal con llevaba elque la barcina se realizase de manera simultánea a la siega. Se salía delpueblo de noche y al amanecer se habían recorri do cinco kilómetros, en undía solo se podían dar tres viajes llevando cada vez una reata con cuatromulos.
En la era se preparaba la parva para trillar, pudiendo un mismo labradorsacar varias parvas a la vez en variaseras o en una de manera sucesiva.Por la mañana los hombres se iban alas era a trillar y las mujeres o los niños les llevaban el desayuno. «Se podía estar el día entero subido en el trillo. Si al mismo tiempo que se trillaba,en otra era cercana se estaba aventando todo el polvarín venía encima y
hacía esta tarea insufrible. Cuando seaventaba a bieldo los caminos se llenaban de paja. Durante esos días sedormía en la era y en cuanto se terminaba de meter la raspa se aprovechaba la noche para llevar el grano y lapaja a la casa» (Manuel, Huéneja).
Materiales y técnicas deconstrucción
El material empleado para hacer elbalate es la piedra «muerta» o pizarradel terreno y la técnica es la de piedraseca. También hay algunos muros conlos diferentes tipos de piedras que encontramos en el entorno, «muerta, viva y mortecina», y con un grueso tendel de tierra. El empedrado se hacíacon piedra «viva» recogida de los pedregales y piedras «muertas» mas finas para hacer los dibujos.
El proceso construct ivo de empedrar una era es el siguiente: En primerlugar, se hacía una zanjilla para empezar el balate que se hacía con «piedras muertas, de las que no se pueden poner en las eras». Estas piedrasmuertas son de color negro, de pizarra, que se desgastan y se rompen.También se utilizaban para la construcción de los balates varias hiladasde lajas de pizarras clavadas en la tierra verticalmente sobresaliendo conuna altura de treinta a cincuenta centímetros. Esta segunda forma de hacerlos balates para rodear la era es lamás frecuente en aquellas eras queestaban próximas a los caminos paraevitar el que los granos rodasen fuerade la era.
Las eras del Marquesado del Ceneteson, según su tipología, empedradas,con formas circulares, ovaladas o rectangulares y presentan figuras radialescon soles, estrellas, flores y figuras longitudinales con calles formadas por radios paralelos. Son agrupaciones importantes ubicadas siguiendo lascurvas de nivel de los cerros y expuestas a los vientos dominantes. Los balates de piedras de pizarra se realizaroncon la técnica de la piedra seca y todostienen un remate de aleros de pizarrapara evitar que los granos rueden a laseras colindantes o al camino próximo.
Se encuentran en un estado de conservación bueno pero muy amenazadas por la construcción de naves agríco las y viviendas. La ausencia dereparaciones en los balates y las lluvias aceleran el proceso de deterioro yerosión de las eras. Los pajares, corrales o casillas de las eras han sido
. transformados y ampliados con nuevos mater iales para utilizarlos comogarajes de tractores o reconstru idoscomo naves agrícolas.
La proximidad a los núcleos urbanosy su ubicación en las laderas de loscerros los configuran como singulareshitos en el paisaje, extraordinarios miradores o zonas de recreo y juegospor lo que podrían convertirse en parques periurbanos.
Por último, las eras son estímulos dela memoria social y parte esencial dela identidad de la comarca que nosayudan a entender la importancia de laagricultura y el proceso de producción,recolección y transformación de loscereales presentando valores etnológicos para ser incluidas en el CatálogoGeneral del Patrimon io Histórico deAndalucía y gozar de la protección desu régimen jurídico.
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NOTAS
1. El trabajo de campo se realizó en losocho pueblos del Cenete durante dos campañas, entre 1996 y 1998, en el marco deun ambicioso proyecto de la Dirección General de Bienes Culturales de la Consejer íade Cultura (Junta de Andalucía) denomina do Inventario de Arquitectura Tradicional deAndalucía que tenía como fines seleccio nar, documentar y proteger bienes inmuebles y espacios de interés etnológico dedicados a la producción y transformación , avivienda y a las actividades o relaciones desociabilidad. Agradezco la colaboraciónque prestaron las autoridades locales y losamigos e informantes de los pueblos delMarquesado del Cenete, los verdaderosprotagonistas de este artículo.
FUENTES ORALESIINFORMANTES
Andrés Reyes, vecino de Dólar, agricultor,de 60 años aproximadamente.
Antonio Cárdenas Requena, vecino de AIdeire, agricultor, de 60 años aproximadamente .
Antonio del Río Río, vecino de Ferreira,guarda forestal jubilado y agricultor, de67 años.
Antonio Moreno, alcalde de La Calahorra ,exminero, 40 años aproximadamente.
Antonio Osorio, técnico del Ayuntamientode Dólar, de unos 35 años aproximadamente.
Manuel Rodríguez Triviño, vecino de Alde ire, jubilado , de más de 70 años.
Remedio Morales, vecina de La Calahorra ,ama de casa, de 72 años .
Rosa Gámez Gómez , vecina de Ferreira,ama de casa, de más de 60 años.
Tomás Fernández Ruíz, vecino de Aldeire,agricultor , 65 años aproximadamente.
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