Las arpías vuelan sobre manhattan.11

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1 | LAS ARPÍAS VUELAN SOBRE MANHATTAN

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2. 2 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN 3. 3 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Jos Jess Villa Pelayo LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN 4. 4 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN 1a edicin en Monte vila Editores, 2013 MONTE VILA EDITORES LATINOAMERICANA C.A., 2013 Apartado Postal 70712, Caracas, Venezuela Telefax (58-212) 263.85.08 www.monteavila.gob.ve DISEO DE COLECCIN xxxxxxxxxxx IMAGEN DE PORTADA xxxxxxxxxxx DIAGRAMACIN xxxxxxxxxxx CORRECCIN xxxxxxxxxxx Hecho el Depsito de Ley Depsito Legal N xxxxxxx 5. 5 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN ISBN xxxxxxxxxxx A Jos Jess Villa Lpez (Chucho). Mi padre. Muerto, prematuramente, en 1972. In memriam. . 6. 6 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Le simulacrenestjamais ce qui cache la vrit cest la vritqui cache quilny en a pas. Le simulacreestvrai. La precession des simulacres Jean Baudrillard 7. 7 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN ACTO I LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN 8. 8 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Mateo 24:1 Ya no habitan el cilicio de la baha. Me han abandonado. Mil ojos de grajos enfermos. Mil hojas en el aire de Manhattan. Drsticos nimbos sin alma que apenas respiran. Las arpas vuelan sobre Manhattan. Una maana fra. 9. 9 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Os alcanzan. Os devoran. Espas de un orden desigual. Hablan del porvenir. Invocan la algaraba. Cantan sobre el corazn de los iluminados. Con vrgenes de acero en la voz. Me han abandonado. Mil ojos de jvenes arqueros. Mil labios de mujeres moribundas. Las arpas vuelan sobre Manhattan. Una maana de cierzo. 10. 10 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Ocultad vuestros sudarios. Habitantes de Castro. Hijos de la muchedumbre. Os entrego estas dbiles manos desgarradas como ofrenda para vuestro da de sacrificio. Una arpa. Otra arpa. Sobre el corazn de los iluminados. Mil ojos de grajos enfermos. Mil ballestas sobre los muros de la ciudad. En la polvareda, 11. 11 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN un semblante de hombre. Vosotros cantis este himno de hijos desesperados. Un labio. Otro labio. Con vrgenes de acero en la voz. Para que las arpas devoren otro atrio con la gloria de los hurfanos. Para que las ventiscas os escondan entre las armaduras. Las arpas vuelan sobre Manhattan. Mil ojos de jvenes arqueros. Mil nios sobre vuestras nubes de hierro. 12. 12 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Tomad tambin mi capa. Habitantes de Castro. Para que gritis en medio de la multitud. Ya no estoy en esta torre de hijos decapitados. Tomad el candelero. Celebrad. Para que las arpas degellen otras ventanas con la gloria de los mrtires. Las arpas vuelan sobre Manhattan Una maana de vitrales lacerados. Algn ngel sobre la techumbre. 13. 13 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Cantad el da de la vspera. Marchad. Mil ojos de grajos enfermos. Mil hojas en el aire de Manhattan. Drsticos nimbos sin alma que apenas respiran. 14. 14 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN LILAS SOBRE BAGDAD Con la agona de hijos y cuervos. Y tus dedos ensangrentados. Con brazos de arcngeles. Gritos, maromas ysilencios. Con alas para los mujahedines. Lilas sobre Bagdad en noches de bombas, sudarios y nios muertos. Para atizar azadones y humaredas. Rumsfeld&Dragones. 15. 15 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Con vuestros carneros y cielos nocturnos. Con C4 y hormigas. Para degollaros en marzo, cuando el mundo duerme. Lilas sobre Bagdad. Con mujeres angustiadas. Para derribar vuestras lunas. Black Hawks y aves silenciosas. Amor de hijos sobre Bagdad, con C4 y hormigas yTomahawks entre las balaustradas. Con olor a mandarina e higueras. La cabeza de Ciro bajo los jardines. En las horas finales de Josafat y los escribas. 16. 16 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Lilas sobre Bagdad. Con mujeres apesadumbradas. Y carneros y cielos nocturnos. Para degollaros en marzo, cuando el mundo duerme. Para atizar azadones y humaredas. Rumsfeld&Dragones. 17. 17 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN PRECS DELS AUZELS A Arnaut Daniel A Este pequeo navo que delira junto a tu rostro. Me ha dibujado en un rastro solitario. B Alrededor de finas hendijas a travs de las cuales veo las exequias y tus manos tendidas en la acera. C Pero esta sangre no corre para que las murallas se detengan en el sol. Esta calle est vaca Porque cada hombre ha muerto. 18. 18 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN D Tiendo mis manos en tu llaga para saber que ests all. E Ha sido destruido este pueblo con garras de marfil. F Te lo debo a ti, que hurgaste en el corazn de estos hombres y tan slo hallaste escombros. G All rechinan los tambores, das tras da, mientras las campanas tiemblan. Y tiemblan porque nadie las escucha. 19. 19 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN I Pero el pueblo grita en la calle para que su grito sea ms hondo y sus manos caigan y sus manubrios se estremezcan. 20. 20 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN ORGA DE FUEGO SOBRE EL MERCADO DE DTILES Orga de fuego en medio de los abdales. Ulular de clavos, cinabrio y bombas. Y calles sin futuro o con horrores futuros. Nios de Gaza atisban el cielo. Pmpanos flameantes caen sobre el mercado de dtiles. Son cmbalos retorcidos. Miran elfuturo con el asombro de los nios. 21. 21 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Orga de fuego en medio de los pjaros. Ulular de esquirlas, brocales de ceniza. Una nia toma sus cintillos. Corre hacia la multitud. Caen tambin las salamandras. Con rostros humanos. Con voces muertas. Giran. Danzan. Jvenes de Bagdad y Gaza. Una nia toma sus cintillos. Aturdida por la llama. Cegada por la humanidad. Son cmbalos retorcidos. Se trata de otras calles y otros muertos. 22. 22 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN De otros hijos e hijas. Orga de fuego sobre el mercado de dtiles. Ababiles vagan sobre el Tigris. Escuchan libaciones del Ud . Canciones de la ribera oriental. Jvenes de Bagdad y Gaza. Con rostros humanos. Con voces muertas. Acosados por visiones de Luxor. Recluidos en capillas y osarios. Caen pmpanos flameantes en medio del desierto. Se trata de otras calles y otrosmuertos. 23. 23 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN De otros hijos e hijas. Una nia toma sus cintillos. Aturdida por la llama. Cegada por la humanidad. Ornada en osarios de acero. Caen pmpanos flameantes en medio del desierto. Con rostros humanos. Con voces muertas. Orga de fuego sobre el mercado de dtiles. 24. 24 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN PARA EXPLICAR LAS PERIFERIAS "If the doors of perception were cleansed, every thing would appear to man as it is, infinite" William Blake No vivo en este mundo de alambradas. Habito otro, un poco ms curvo, semejante a una cereza,el trasmundo que tus manos han preparado para m como un peso de la conciencia; sobre cuerdas, girando, para explicar las periferias y agitar esta copa de incertidumbre sobre la cabeza de los hombres. Me desplazo en otro espacio, ornado tal vez por la irona, sojuzgado por especias, nicamente por ti. Habito los lmites, como un hombre ms, bajo un cielo de burbujas. 25. 25 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN O, insupportable! O heavy hour! Othello, the Moor of Venice, William Shakespeare 26. 26 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN ACTO II ELEGA PARA UN ARLEQUN 27. 27 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN ELEGA PARA UN ARLEQUN A Jos Jess Villa Lpez Me hallo aqu. Junto a la ms insegura y tal vez menos libre de las rosas muertas que custodian esta tumba. Y aun cuando no entiendas mi secreto. Mi secreto es no verte. Mi secreto es la astucia. 28. 28 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN SIENA EN EL CIELO DE ABRIL A Mara Carolina Villa Pelayo Ha muerto el tiempo de las rosas [artilugios de ramas, cuencas de huesos] Ha muerto el tiempo de las rosas el da de la extincin, bajo la penumbra. En medio de una soledad casi perfecta. Ha muerto el tiempo de las rosas. Pero el tiempo de las rosas siempre muere. Jams regresa. Jams retorna hasta ti. Te vigila en la nocturnidad. Te pronuncia en el sueo. Te habla en la voz de las cenizas, tras la bondad de la otra muerte. 29. 29 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Anuncia el vaco de los ojos, el rictus del insomnio, los ambages del da. Anuncia el siena en el cielo de abril, el cabo de los labios, esta vspera de rosas muertas. Ha muerto el tiempo de las rosas. Pero el tiempo de las rosas siempre muere. Jams regresa. Jams retorna hasta ti. Ha muerto el tiempo de las rosas. [arcos de sangre, encajes de cilicio] 30. 30 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN NOCHE DE CIMBELES (Autorretrato sin leo) Ya pasaron mis mejores das. En mis noches estoy seco, como el roble de la avenida Oakland. Soy una trampa, un bufn, en medio de otros hombres ms clebres y probablemente ms audaces que yo. En mis noches estoy seco. Siempre lo estoy. Algn viejo duerme en el flanco occidental de la acera. Me confunde con un hombre. 31. 31 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Yo debera recompensar su desprecio. Otro rbol me espera, sobre el pavimento. Se trata de mis manos. Hostiles espinos custodios. Ya pasaron mis mejores das. En el borde, una vihuela me consuela. Unos metros ms all, la risa de una rueca o de una nia que llora. No debo mirarme en el espejo. Ya no confa en m. Me desprecia como el viejo de la avenida Oakland. Apenas unos das en la calle y ya nadie me comprende. 32. 32 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Soy [en sntesis] una curiosa forma de metstasis. Me distrae una carcajada. Proviene de un agujero. Es la hija de un hombre rico que circula bajo la rambla. Debo ocultarme. Es una vihuela vieja pero inocente. Habla de m. Mil veces me desprecia. An soy un hombre, le explico. Me resisto al consuelo. Siempre me resisto. 33. 33 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN DRAGONES DE NARBONNE A Amrica Pelayo Tengo un sueo de rosas negras sobre un csped de hilos y argamasa. Tengo un sueo tibio como una clavija de fuego. Tengo un sueo de tamboriles y lades [un poco ms de lades] sobre un piso de cemento. Son tres o cuatro dragones de Narbonne. Tengo un sueo sobre m mismo. En el futuro. Un laberinto 34. 34 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN de callejuelas y arcngeles. Ella no est, por supuesto. Tengo un sueo de murdagos, con calabazas y rosas [un poco ms de rosas] Tengo al fin una nfima piedra del mundo que aspiro. Es una epifana. Lo s. Una nia frente a m con gape y mordazas [un poco ms de gape] Una drada que guarda estas palabras. Tengo un sueo de rosas negras sobre un csped de hilos y argamasa. 35. 35 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Una nfima piedra del mundo que aspiro. Tengo un sueo tibio como una clavija de fuego. Una nia frente a m. Respira, angustiada, bajo la cpula de escondites y seoritas. Tengo un sueo de murdagos. Jams me abandona. En el futuro, un laberinto de callejuelas y arcngeles. Ella no est, por supuesto. 36. 36 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN NGELES Y PERISCOPIOS A Natasha Martina Villa Pelayo Un ngel me mira exttico en medio de la muchedumbre. Grita mi nombre. 37. 37 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Die CREATUR istnichtimPleroma, sondern in sich. Das PleromaistAnfangund Ende der Creatur. Septem Sermones ad Mortuos Karl Gustav Jung 38. 38 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN ACTO III LA OTRA MITAD DE ARIADNA 39. 39 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN LA OTRA MITAD DE ARIADNA THE OTHER HALF OF ARIADNE La otra mitad de Ariadna habita un pozo. The other half of Ariadne inhabit a well. Es una hechicera Sheis a witch que escribe poemas para m whowritespoemsfor me en medio de la noche. in the middle of the night. La otra mitad de Ariadna es un hueco, The other half of Ariadne is a hole, tan slo un hueco. justanemptyhole. Ella es la mitad de otra mitad 40. 40 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN She is the half of another half queahora no est whichis not now. Ella esunamitadsecreta She is a secret half que me habla durante la noche. who speaks to me in the night. La mitad de Ariadna The half of Ariadne que ahora existe wichexistsnow habita el Peyotl, inhabitthePeyotl. Ella escribe con plumas y garfios. She writes with feathers and hooks. La otra mitad de Ariadna soy yo The other half of Ariadne is me. 41. 41 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Esa mitad es un hueco. That half is a hole. 42. 42 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN LA NIA DE LOS ESCARABAJOS Ese cabello que no puedo tocar. Esos labios que apenas beso. Dnde te ocultas de m, nia de los escarabajos? Ese cabello que no puedo tocar. Esos labios que apenas beso. 43. 43 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN UN POEMA PARA SYLVIA PLATH A POEM FOR SYLVIA PLATH Soy dos mitades. I am in two halves. En realidad, As the matter of fact I am soy slo una mitad just in onehalf. que ahora habita un hueco. Inhabiting a hole. La mitad de m mismo que soy yo This half of myself that I am se ha marchadoa causa de ti is already gonebecause of you. Fui persuadido 44. 44 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN I waspersuaded por las exhalaciones de un marioneta. by the exhalations of a puppet. Yo soy esa marioneta. I am thatpuppet. Ejecutadopor un injusto verdugo. Executed by an injust hangman. La mitad de m mismo que soy yo The half of myself that I am no existe ms. doesntexistanymore. Por tanto, Therefore, soy parte de algo Im just a part of something cuyo nombre apenas recuerdo. whosename I barelyrecall. 45. 45 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Teresesenombre. You are that name. Soy las dos partes de un hombre I am two halves of a man que existe whoonlyexist nicamente en el exilio. inexile. 46. 46 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN MI NOVIA EN SU MERCEDES BENZ-NEGRO A Astrid Lander, la novia Mi novia es un ave sin luz. Habita una cavidad. Todos los das revolotea sobre m, como celaje de espigas y auzels. Escribe poemaspara m. Me necesita. Me golpea. Es un acto de insensatez. Lo s. Sus plumas, trementina y hojillas. Su voz, pndulo y laceracin. 47. 47 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Me ha herido cuando yo dorma, cuando no poda defenderme. Conduce su Mercedes-Benz negro bajo el insomnio de otra noche. Me conoce. Me desafa. Cree en la ausencia de bondad. Con la soledad de una nia con hermanas y sus bordados de ngel enfermo. Su cabello que ha peinado mil veces. Odia las Cntigas de Santa Mara. Cree en la ausencia de bondad. En ella, 48. 48 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN el corazn de una bruja que me castiga. Sus dedos, giles fraudes. La he lastimado. Lo s. Todos los das revolotea sobre m. Me persigue con su burka e imposturas. A quin puede engaar? Me ha traicionado. En das de horca y precipicios. Un ardor cnico en el vientre. En realidad, no la conozco. Necesita la absolucin de las cavernas. 49. 49 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Desprecia mis rosas. Me conoce. Mi novia en su Mercedes-Benz negro. Escribe poemaspara m. Ojos verdes. Dorada la entrepierna. Horada mi boca. Incapacita mis labios. Desde la avenida, las luces de su habitacin vaca. Con velos de novias, cuando amanece y no sabes qu hacer porque apenas dormiste, mi ngel de cadalso, con tu pesadilla a cuestas, con la soledad 50. 50 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN de una nia con hermanas, como en tus fotografas, en el vagn de tren de la Hacienda, bajo la cascada y tus bales y puertas del siglo XVIII. Mientras conduces, ojos airados, piel airada. Mi novia en su Mercedes-Benz negro. Es un ave sin luz. Todos los das revolotea sobre m. 51. 51 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN UN DOMINGO DE HUMO CON SALMONES Mientras arde la torre. Un domingo de humo con salmones. Sobre tu entrecejo y las torceduras. Estoy yo. Uncido a tu piel. Cebolla en mano, frente a la mesa. Esperndote. Con vino y salmones. Con remilgos que brotan de ti. Y por ti. Mientras el Conde de Trencavel narra tus historias de amor y desamor. Un domingo de humo con sol. Mientras arde la torre un joven estpido explora tus senos. 52. 52 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Con remilgos brotan de ti un domingo de humo con sol. Mientras arde la torre. Y nos mira la lengua de la montaa. Sentado, sobre el pavimento. Esperando. Con vino y salmones. Y mi dedo en tu hombro. Un joven estpido explora tus senos. Un domingo de humo con salmones. 53. 53 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN TARDE DE GUACAMAYAS Apenas soy un ngel junto a ti esta tarde de guacamayas. Apenas soy un ngel que te visita y proclama tu nombre. Sobre tu seno, el arco iris. Insipiente, tartamudo. Sealo tu cabello en el aire dorado de los centauros. Vine a explicarte, acaso tardamente, esta tarde de guacamayas en la que te amo. 54. 54 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Apenas un sol hueco, con alambres. De nuevo tu voz. en el mrmol de las escalinatas. Me levanto, como Agamenn, sobre el espacio de las goras y mausoleos. Apenas soy un ngel que te visita y cierra la puerta. Insipiente, tartamudo. Para besarte aunque quieras o no quieras, en esta tarde de guacamayas inocentes. Para escarnecerte. 55. 55 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Aunque no quieras o s quieras. Apenas un sol hueco, con alambres. En la arcada que Dios ha preparado para nosotros en esta tarde de guacamayas agonizantes, aunque no quieras o s quieras. Para escucharte hablar de otras aves. Apenas un sol hueco, con alambres. Un ngel sobre el desvaro de las caminatas. Sobre bordes 56. 56 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN de serpentina y mosquitos. En el cielo, con un beso de amor lombardo, como aguijn, aunque quieras o no quieras, corazn de guacamaya. 57. 57 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Sorsimmanis etinanis, rota tu volubilis, statusmalus, vanasalus semperdissolubilis, obumbrata etvelata, michiquoqueniteris; nunc per ludum, dorsumnudum, fero tui sceleris. Versos de Goliardos Carmina Burana, Carl Orff 58. 58 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN ACTO IV MIRNDOME DESDE LA BAHA DEL CUERNO DORADO EN LA IGLESIA DE LA CALLE KORSAKOVA 59. 59 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN MIRNDOME DESDE LA BAHA DEL CUERNO DORADOEN LA IGLESIA DE LA CALLE KORSAKOVA El amor es negro, como el baco. Durante la maana, el aire se cuela por una hendija apenas mrbida cuya virtud ltima es curvar la luz del da; deshace el vitral occidental y vaga en medio de la nube de cenizas que cruza la capilla; termina en un rbol sin hojas, en la curva oriental de una rama. La luz all es menos plida, tal vez oblicua, como el cielorraso de cedro que los das han consumido. De repente, un castao profundo, una ventisca accidental, cierta escaramuza de polvillo en medio del baco. Martina, al final del pasillo, en una banca de pilastra, como estatua de sal, cobriza, en la esfera de la sombra. Mira el gorrin que acaba de 60. 60 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN horadar la cpula. Una foto en metal y en negro, lejos de Mosc; un abrigo, una elipse de fondo que simula un rbol muerto. La fotografa de Vassili, en sus manos, clida, agria. La falda es de muselina roja, bermelln en los ojos. Martina prefiere no estar all. Quiere algo de claridad, ms all de la nave central. Acaso afuera, en la calle. Otro gorrin cruza, con alguna inocencia, el bside inclinado que conduce a la puerta. Ha muerto un poco ms abajo, frente a la acera cuyo nombre es un misterio. Gorochenko, Misha, Boris, Bordin. El misterio es el baco y el amor muerto y el jolgorio, sordo, de los nios en la calzada. El halo de luz es desigual. Invade el polvo que circula libremente por los cmulos. El gorrin ha muerto junto a la villa derruida, en el golpe de ceniza que adviene 61. 61 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN repentinamente desde el mar del Japn durante la tarde. * * * La segunda guerra la mat. Era circular, honda, una puerta de bronce, un rosetn, un arbotante, una torre octagonal, un boceto de liebre en algn azulejo. Ahora slo hay ladrillos, restos de un mundo de bacos, infinitesimal, desnudo. En la calle, el rbol contina sufriendo. Alza sus ramas hacia el cielo como si deseara extraviarse en los cirros de plvora que an rondan la acera. Martina es un beso. El cobalto seduce su boca. Hechiza sus manos. * * * El rbol ya no crece, obedece al cilicio. Boca de rbol, manos de rbol, en un beso de rbol muerto. Beso de leo, ngrimo, dcil, como el beso del mes de luz en mi boca, con magenta. Amor 62. 62 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN que crece en la cpula de oro. Oro en la franja de huesos. Huesos en las traceras. Huesos en la tumba de la calle, en la boca de la arcada. Amor negro, nfalo, sobre la mano de una nia con candiles. Huesos en el pinculo, en las espadas, en las columnillas. Un beso. Otro beso. Sal de besos en el aire. * * * El transiberiano huye de Vladivostok durante la luna invernal. Conoce su curvatura. Presiente su inequvoca luz, quizs el horizonte axial, el nudo de Leonardo. En la pared hay un trazo de malva, una hoz de castaos, una luna imperfecta e incipiente. Pero la pared ya no est. La boca ya no est. Tan slo los ojos de Martina y sus labios y su cabello erizado por el hielo, estril, verde. Ojos de grava ahora marchitos por 63. 63 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN la calle. VassiliNikolaevichKrimakov. Nombre de triforio. Nombre de braza. Nombre de cornisa. El gorrin regresa al vitral inferior, ahora es menos rseo, acaso vtreo. Simula un menhir, un crculo de sombras, la escalinata hacia la bveda, la mueca de una torreta invertida. Un fragmento de ala en las laceras del viento destruye el silencio, abate el capitel. Ha invadido la intil estela ocre que circunda la capilla: el arsamandi cuya voz es menos cnica en el entramado del coro, junto al vitral de la galera norte. El cirio de hierro en la voz lapidada. Vil razzadannata. El amor negro, otra vez. Una escalera conduce a la torre masiva del lado septentrional. Apenas puede verse. El gorrin la ha tomado, la examina. Martina, afuera, en la nieve. Una crislida en la voz. Una rama de sangre en la voz. Un abalorio en la voz. 64. 64 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Pero la casa destruida por la guerra todava est all. No le teme al fro. Una hoja seca y perfecta la ha conquistado. El cobertizo no es cadmio. Sostiene la cimbra de una rosa, inusual y asimtrica, ad aeternus. Rembrandt, la paleta de Rembrandt, la luna de Rembrandt en Martina. Ojos, boca, labios de huesos, de mujer. El bculo es menos obvio. El pastor ya no est. Martina en el rseo, en la expresin tmida, blanca, de la nica pared que permanece en la villa y que ahora esboza una sonrisa de cadalso. El viento la orienta hacia el sur, hacia la playa. La rosa del jardn es una parbola y desea morir, umbral, tinglado de ave muerta. * * * La fotografa. En ella, un hombre en Mosc. Domina una escalera, un patio anterior, un bosque sin hojas, una calle 65. 65 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN desierta y tal vez inspida: hoja de pndulo, cliz de vitral. El tiempo de las rosas, muerto, esquivo. El primer abalorio, la gua del baco, la cuenta de vidrio, el rbol sin vida al final de la calle M. I. Korsakova, el brigadier. El beso para siempre, el beso que ahora es un manto de fuego, incierto, plano. * * * El viento metlico de la baha del Cuerno Dorado sacude el campanil. Est ebrio. Disimula la tristeza de las balaustradas del prtico norte. Martina en el semicrculo de la capilla. En rojo, en labios de mrmol, en cuencos de fugas. Mira el salitre en la silueta de las velas y el cuerno urico que ha destrozado el capitel, tambin de oro. Quiere marcharse, un prpado de luz la espera al fondo, tras la puerta. La convoca. El viento sacude de nuevo el 66. 66 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN campanil. Brazos de hierro, balas de hierro, alabastro blanco bajo sus pies. Mrmol de contrafuerte. Ahora est en la calle. Ha preferido marcharse. La mirada en el rbol muerto: hojas negras, ramas negras. La gente ya no pasa por aqu. Apenas un ruido de fondo, en crculos, en golpes de sol momentneos, en murmullos que trasiegan el relieve ingrvido del cielo. 67. 67 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN POSTAL DE MOSC Perd mi postal de Mosc. Mi postal era un rifle en mis manos. La tierra donde quera habitar. Perd lo nico que tena. Las canciones de la tierra. En mi postal, un par de nios sobre la nieve. Mi padre era un hombre sabio. Ahora lo s. Me conoca. Escribi: Mi negrito est all con una hermosa y joven muchacha La mujer de mis sueos. 68. 68 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN S que l me amaba. Por ello, envi a esta nia de nubes para cuidarme en mis horas de ira y soledad. Estaba equivocado. Me coloc, sin querer, en un prado helado y vaco para verme rer al lado de mi amada. Pero los amantes no son as. Perd mi postal de Mosc. Mi rostro a travs del tiempo. Dos nios amndose con acordeones. Mi padre era un hombre bondadoso. Creo que debo decirle hoy: Jams ver ese amor Nac para morir 69. 69 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN en un campo de infelicidad perpetua. Tal vez lo sabas. Nada merezco, slo el fusil y las balas. Quiz una rosada rosa en mis manos para mi da de exterminio. Perd mi postal de Mosc. Pero todava conservo una, la postal de mi hermana. Hoy quiero mostrarla al mundo con las ltimas canciones de mi balalaika. 70. 70 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN CON MARTINA EN EL TRANSIBERIANO Martina es un ave esquiva, dudosa. Me atrae su silencio. Me seduce su voz. Me aturde el giro de su boca, el delirio de sus manos. Yerta, tibia, como la risa de los nios en la plaza. 71. 71 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN CANTO XX La cruz de hierro en la herida. La cruz de hierro en la bifurcacin. La cruz de hierro en la mejilla, en la garganta de la fosa, en la mirada ausente de un nio que cruza la montaa helada. La cruz de hierro en las alas de la pantera, en la minusvlida luz de una carabina, en las manos sudorosas, en el seno de una mujer que ha amado durante los das del aullido. La cruz de hierro en la imaginacin de la risa. 72. 72 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN en la bveda de los ojos, en el declive de los labios, en la voz de un nio que pronuncia mi nombre desde la alambrada. 73. 73 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN MARTINA SOBRE EL LAGO DEL PARQUE PUSHKIN Un serojo se desplaza hacia mi boca. Una espina amarilla, una especie de nenfar ureo e incipiente que ahora quiere asesinarme. Viene del fondo y es semejante a una boca fra y agria. Quiere abandonar el lago. Ha sido torturado por el pequeo nogal que lo acecha. Se mueve dcilmente en la turbulencia, vasto, triste. Apenas existe. Desea respirar, un poco ms arriba, en la cuenca de hojas. Me mira con algn detalle. Pero una nube de polvo salta de repente sobre mis manos y lo detiene. Acaso una traza del viento dorado de la Baha. Ahora est muerto. Y el aire es perfecto y vaco como la voz de tus labios, como el fnix que quiz vi en la calle 74. 74 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Leninskaya. Un fusil. Una carabina de minero. Un casco de ceniza. Aqu, sobre el lago, un da de invierno. Tal vez me ofrezca su vida. Se ha marchado, lentamente, hacia los rboles que protegen el lado sur, junto al varadero. Al fin. Me asalta una curva de ala dorada, un haz de neblina, una hoja que ha decidido dividir el lago. 75. 75 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN El manjar sagrado nos trasmuta Gracias al canibalismo ertico el hombre cambia, esto es, regresa a su estado anterior. El arco y la lira Octavio Paz 76. 76 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN ACTO V CNTIGA PARA UNA DONCELLA DE ELEUSIS 77. 77 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN CNTIGA PARAUNA DONCELLA DE ELEUSIS Me desvest ante ti porque eras tan frgil, porque tus manos encuentran las calles entregadas a la tristeza, porque me sorprendes, mirndome en ti, enelsemicrculo de la capilla. Alej de m cada trenza, cada labio, cada vestido, cada niebla insostenible. 78. 78 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Helios, estoy muy sola en este stano, espacio vacuo para los vientres. No s porque soar. No hay ninfas ni goras ms all de nuestra montaa. Jams he pertenecido a hombre alguno. Pero eres tan solitario como yo. No soy quien te arrulla, ni quien lamenta sobre tus besos. He hurtado cuanto solas esconder en las vasijas. Y mi nfima alforja se ha roto y su pauelo ureo se abre en la soledad. 79. 79 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Espero que unjas mi voz con aquellas lgrimas, porque estoy desnuda, sin vida, en el satn tracio que ilumina la ventana. Cuando vi tu desnudez sent miedo, porque hay nocturnos en la noche Y no sabemos qu hacer con aquellos lebrillos negros. Me es imposible morir, porque no hay lugar para m entre quienes suean. 80. 80 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN Escond mis senos bajo tus brazos y llor una noche se sepias, una tarde de celosas. Deseo romper tus alas y dejarlas batir en el horizonte. Deseo llorar sobre este orculo de piedras y rasgar mis vestidos poco a poco. He dormido aqu porque el campanario sigue vaco. Entre pauelos bordados en silencio. Pero he all la cripta, junto a la rosa 81. 81 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN NDICE ACTO I/ LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN7 LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN8 LILAS SOBRE BAGDAD 14 PRECS DELS AUZELS 17 ORGA DE FUEGO SOBRE EL MERCADO DE DTILES 20 PARA EXPLICAR LAS PERIFERIAS24 ACTOII/ELEGA PARA UN ARLEQUN26 ELEGA PARA UN ARLEQUN 27 SIENA EN EL CIELO DE ABRIL 28 NOCHE DE CIMBELES 30 DRAGONES DE NARBONNE 33 NGELES Y PERISCOPIOS 36 ACTO III/ LA OTRA MITAD DE ARIADNA 38 LA OTRA MITAD DE ARIADNA 39 LA NIA DE LOS ESCARABAJOS 42 UN POEMA PARA SYLVIA PLATH43 MI NOVIA EN SU MERCEDEZ-BENZ NEGRO46 UN DOMINGO DE HUMO CON SALMONES51 TARDE DE GUACAMAYAS53 82. 82 | LAS ARPAS VUELAN SOBRE MANHATTAN ACTO IV/ MIRNDOME DESDE LA BAHA DEL CUERNO DORADO EN LA IGLESI DE LA CALLE KORSAKOVA 58 MIRNDOME DESDE LA BAHA DEL CUERNO DORADO EN LA IGLESIA DE LA CALLE KORSAKOVA 59 POSTAL DE MOSC 67 CON MARTINA EN EL TRANSIBERIANO70 CANTO XX71 MARTINA SOBRE EL LAGO DEL PARQUE PUSHKIN 73 ACTO V/CNTIGAS PARA LA DONCELLA DE ELEUIS 76 CNTIGAS PARA LA DONCELLA DE ELEUSIS77