VOLUMEN 03LOS CAUTIVOS

Parte 01 ................................

Parte 02 ................................

Parte 03 ................................

Parte 04 ................................

Parte 05 ................................

ndice

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ACTO 11 - PARTE 01

[-84:15:32]

Desde el techo del edificio central de Shinto, el cual estaba muy lejos, Sola observaba la silueta del gigantesco monstruo marino siendo tragada por una luz blanca hasta gradualmente desaparecer, en la neblina nocturna de aquel lado.

Su visin ya estaba oscurecida por la neblina, ms an desde tal distancia, ella no poda discernir el progreso de la lucha con sus propios ojos. No haba preparado ningn familiar que pudiera usar inmediatamente para propsitos de exploracin en esta situacin, por lo tanto no tena otra opcin ms que mirar hacia la orilla del ro en la cual el gigantesco monstruo y los jets de combate danzaban salvajemente, mientras se preocupaba por ello.

De cualquier forma, la batalla aparentemente haba concluido su primera etapa, pero los Sellos de Comando en su mano derecha permanecan ah. Eso quera decir que Lancer permaneca en la batalla sano y salvo.

Gracias a Dios

A pesar de estar recibiendo fuertes olas de viento que rugan a esas alturas, Sola estaba momentneamente aliviada. Lancer probablemente traera buenas noticias dentro de poco. Si su victoria fue conjunta con otros Servants, otros Masters tambin recibiran los Sellos de Comandoadicionales como recompensa. Pero esas eran cosas triviales. Ahora, ella era feliz con tan slo recuperar los trazos de los Sellos de Comando que la vinculaban con su Servant.

Si el ruido del violento viento estuviera ausente, Sola probablemente hubiera sentido la presencia de un atacante acechndole por detrs desde las escaleras haca unos momentos. Preocupada por el campo de batalla en el otro lado, baj su guardia. Pero para la dama que no posea conocimiento alguno de defensa personal, mucho menos entrenamiento de combate, no haba forma de evitar culparla.

Repentinamente se tropez. Incluso despus de haber terminado en el suelo de concreto boca arriba, no tuvo tiempo para darse cuenta de lo que haba sucedido. Instintivamente levant su mano derecha para buscar ayuda, pero estaba siendo sujetada bruscamente por alguien. Sin embargo, esa persona obviamente no tena la ms mnima intencin de ayudar a Sola, quien yaca en el suelo. En cambio, un golpe de terrorfico dolor atac su mueca.

Aaa

Desde la superficie de su delgada y fina mueca, como un grifo roto, la sangre fresca brotaba de ella Sola miraba atnita en incredulidad.

Su mano derecha no estaba ah.

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De un solo corte, fue limpiamente cortada. Sus dedos y uas de las cuales tanto se enorgulleca y nunca se olvidaba de cuidar, y tambin los Sellos de Comando que eran ms valiosos que ninguna otra cosa, desaparecieron junto con toda su mano derecha.

Por encima del dolor y el fro de la prdida de sangre, el an ms desesperante sentido de prdida tea la consciencia de sola en la oscuridad total.

Aa, aaaa, aaaaahhhhhh! AAAAAAHHHH!!

Dejando salir un enloquecido grito, Sola se arrastr por el suelo, tratando de hallar el paradero de su mano derecha desaparecida.

No! Lo necesito, si no tengo ESO, no podr convocar a Diarmuid. No ser cuidada por Diarmuid.

Peor an, ella hubiera gastado todos los sellos comandndole mame!, y eso sera suficiente para atarlo. Es por eso que ella se preocupaba tanto por su mano derecha. Cualquiera fuera el caso, incluso al costo de su vida, ella recuperara los Sellos de Comando

Aun as, sin importar cunto buscase en el fro concreto del suelo, aparte de la sangre desparramada, no haba nada ms Despus de eso, ante sus ojos aparecieron las suelas de un par de botas que se vean indiferentes y permanecan tranquilas.

En medio de su borrosa visin causada por la gran prdida de sangre, an postrada en el suelo, Sola mir hacia arriba y vio una mujer de cabello negro desconocida. Sin siquiera demostrar una emocin, menos an piedad, esa mujer mir a Sola inexpresivamente, quien estaba a punto de desmayarse.

Mano Mi Mano

Con su restante mano izquierda, sujet las botas de la mujer, colgndose de ellas despus de lo cual, perdi la consciencia.

Sin ningn sentimiento restante, Hisau Maiya arroj la mano de la mujer mago, la cual haba cercenado con todas sus fuerzas con un cuchillo de supervivencia. Usando mtodos apropiados, los Sellos de Comando restantes en la mano izquierda podan ser recuperados, pero ya que ella no posea tales tcnicas en ese momento, careca de valor alguno.

Maiya rpidamente at la mueca derecha para prevenir ms prdida de sangre, despus de lo cual levant el objetivo inconsciente en su hombro, y con su otra mano libre, llam a Kiritsugu Emiya con su celular.

- Qu sucede, Maiya?

He asegurado a Sola Nuada Re Sophia-Ri en Shinto. Los Sellos de Comando fueron removidos junto su mano derecha, pero su condicin no es crtica.

Est bien. Abandona el lugar rpidamente. Lancer probablemente regrese pronto.

Acto 11 Parte 01

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Entendido.

Despus de llevar a cabo la mnima conversacin y terminado la llamada telefnica, Maiya se apresur a bajar las escaleras rpidamente y llegar a la planta baja. En la costilla de homnculo que haba sido trasplantada por manos de Irisviel, todava haba un dbil dolor ya que deba todava familiarizarse con su cuerpo, pero en cuanto a sus movimientos, no haba problema alguno. Gracias a eso, tal y como antes de quedar herida, Maiya rastre a Lancer y a su nuevo Master, y se las arregl para aprovechar la perfecta oportunidad de capturar a Sola durante la ausencia de Lancer.

Seguramente, la conjetura de Kiritsugu era acertada, pero tal como antes, l todava consideraba a Kayneth, quien haba perdido sus derechos como Master, como el objetivo que deba ser aniquilado. La poltica de Kiritsugu era ser precavido en contra de aquellos que son elegidos como Masters, incluso si pierden sus Sellos de Comando.

Sus verdaderas intenciones al ordenar a Maiya que capture a Sola con vida eran para que aspudiera preguntarle sobre el escondite de Kayneth. La interrogacin seguramente sera una cruel experiencia para Sola, pero incluso de ser ese el caso, no habra simpata o piedad por parte de Maiya.

En la situacin de hombres peleando contra hombres, la crueldad no era algo poco comn. Incluso Maiya misma entenda el simple hecho como tal, ms an Kiritsugu.

***

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La tranquilidad de medianoche acompaando las calles nocturnas de Shinto pareca algo lejano, mientras la ambulancia y carros patrulleros iban de un lado a otro continuamente. Para las personas que se apresuraban mientras hacan brillar sus luces de emergencia, ellos probablemente no entenderan qu situacin los forz a precipitarse en medio de la noche, y tampoco la imagen entera de la situacin. Incluso ellos, tal vez no lo entenderan el da de maana o en adelante.

La sombra de un hombre alto vestido en ropas de sacerdote caminando solo en las calles en medio de la noche, sera objetivo de muchas interrogantes siendo una persona sospechosa bajo circunstancias normales, pero esta noche ellos estaban virtualmente ocupados hasta la muerte a causa de la llegada de sucesivos pedidos de ayuda e instrucciones para bloqueos, as que de ninguna forma tendran tiempo para siquiera preocuparse por un ordinario peatn. Entre los carros de patrulla que pasaban ante Kirei Kotomine incontables veces, ni siquiera uno le prest atencin.

Para Kirei, quien silenciosamente se apresuraba a regresar a la Iglesia de Fuyuki, inmerso en un profundo pensamiento dentro de su mente, no resenta para nada el caos restante en la ciudad que todava tena que calmarse.

Siempre fiel a las instrucciones, obediente a sus responsabilidades, estricto con sus ticas. Kirei ha permanecido as hasta el da de hoy. Su conducta siempre estuvo por encima de sospecha alguna.

Y exactamente por eso esta era la primera vez que tena la confusin de no ser capaz de discernir el significado de sus propias acciones.

Originalmente, Kirei se precipitara a las luchas de Tsaka Tokiomi con la intencin de brindar apoyo a su tutor pero en el momento en el que vio que el oponente de Tokiomi era Mat Kariya, Kirei decidi no unrsele como refuerzo, sino simplemente esconderse en las sombras, una accin equivalente a sabotaje.

Ciertamente era verdad que l conoca la diferencia de fuerzas entre Tokiomi y Kariya, y que la situacin haca que su ayuda fuera prescindible en primer lugar. As que incluso si slo tuviera que permanecer a un lado del combate como espectador, uno podra decir que su decisin estaba acorde con sus principios.

Sin embargo, sus acciones despus de eso, eran una clara digresin de su deber.

En el instante en que Tokiomi hizo caer a Kariya de la azotea del apartamento, como si reconociese una completa victoria, ni siquiera revis el cuerpo del enemigo. Aunque medio impactado por la osada de su tutor, Kirei fue a buscar el cuerpo de Kariya consecuentemente Cuando vio la figura postrada en el fondo del callejn no mucho despus, Kariya todava respiraba.

Naturalmente, siendo el sabueso de Tsaka, dar el golpe de gracia era un deber obvio. A pesar de eso, aquello daba vueltas en la mente de Kirei, eran los contenidos de la conversacin que haba tenido con Archer esa maana.

Si Kirei Kotomine quera entenderse, no slo Kiritsugu Emiya no, priorizando sobre Kiritsugu, l deba observar el destino de Kariya Mat se fue el concejo que se le dio.

Acto 11 Parte 01

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Generalmente, esa sera una conversacin poco placentera. Una broma que ni siquiera mereca el tiempo para orla.

Aun as, con el combate entre Tokiomi y Kariya ante sus ojos, qu podra haberle hecho a Kirei elegir permanecer a un lado como espectador? No tena necesidad de permanecer ah siendo innecesaria su asistencia. No era ms significativo para l el buscar a los dems Masters?

Y entonces, en el instante en que las llamas que cre Tokiomi envolvieron a Kariya Aquello que estaba en su mente, no era ese el sentimiento de abatimiento?

Cuando sbitamente se dio cuenta de lo que estaba haciendo, Kirei ya haba empezado a administrar magia curativa de primeros auxilios en el cuerpo de Kariya. Cargando a Kariya, cuya condicin se haba vuelto estable a pesar de estar en un profundo sueo a causa de sus acciones, dej el campo de batalla, y lo deposit en frente de la residencia Mat mientras se ocultaba de la mirada pblica Eso sucedi unos 15 minutos atrs.

Los smbolos de los Sellos de Comando todava estaban en la mano de Kariya. Kirei no presenci el combate en el ro Mion hasta su final, pero sin importar cunto dao haba sido infringido, Berserker aparentemente segua vivo.

Mientras cubra la distancia entre Miyama a las afueras de Shinto con un paso lento, durante el camino que atravesaba la ciudad de Fuyuki, Kirei todava estaba angustiado por el auto cuestionamiento del cual no provena respuesta alguna - Por qu demonios haba hecho algo semejante?

Era algo completamente distinto de su compra y almacenaje de vinos de los cuales el gusto no conoca. Esta no era una accin completamente privada de beneficios. Hasta entonces, Kirei tambin haba hecho cosas sin el permiso de Tokiomi, e incluso entregado falsos reportes en repetidas ocasiones, pero esas no eran cosas que obstruan directamente a Tokiomi. Su esperanza de una confrontacin contra Kiritsugu Emiya y la posesin del Santo Grial de Tokiomi esas no eran cosas en conflicto.

No obstante, prolongar la vida de Kariya Mat quien acechaba a Tokiomi como su nmesis, inequvocamente lo haba convertido en un objetivo de Tokiomi. Un acto de traicin inexcusable. Sin siquiera tener un propsito definido, haba cometido algo absurdo. Esa noche, Kirei claramente haba cruzado la lnea de ser un leal sirviente a Tokiomi.

A pesar de ser consciente de la gravedad de su accin, por qu no albergaba ni un atisbo de arrepentimiento en su corazn, sino ms bien una inexplicable euforia?

Archer - haba sido engaado por ese espritu heroico Rey de Hroes?

Comparado a sus andantes pies, su mente estaba extremadamente desgastada.

Repentinamente, Kirei tuvo una rara sensacin de querer hablar con su padre Risei. A pesar de ser honesto con Kirei en todos los aspectos, l es un padre que nunca sera capaz de comprender las

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preocupaciones de Kirei. Sin embargo, pensando en ello, no tuvo l una charla ntima con su padre antes?

Incluso si terminara volviendo a su padre profundamente decepcionado, si l simplemente le contara sus pensamientos sin miedo alguno mientras que su relacin con su padre definitivamente cambiara, no le proveera eso algo completamente nuevo?

Con esta vaga anticipacin en su corazn, reservando sus preocupaciones para el momento adecuado, Kirei continu su paso en medio de la noche.

Fin Parte 01 ~ Acto 11 Volumen 03

ACTO 11 - PARTE 02

[-82:09:51]

Para el padre Risei, supervisor del cuarto Heavens Feel, sta era una noche extremadamente agotadora.

Esta era la segunda vez que haba asumido el oficio de supervisor del Heavens Feel, pero nunca haba imaginado que una situacin tan difcil se le presentara.

Precisamente por la gran escala de problemas que han surgido, para poder eliminar la evidencia, no slo la Santa Iglesia, sino incluso la Asociacin de Magos estaba actuando en secreto. Para ambos lados de estos dos grandes grupos, la situacin se haba desarrollado hasta el punto que en vez de discutir entre ellos y definir sus respectivas esferas de influencia, ellos priorizaron en considerar cmo atar todos los cabos.

Oficialmente, el extrao incidente cerca del Ro Mion fue atribuido a gases venenosos producidos por reacciones qumicas causadas por desechos industriales este reporte temporalmente engaara al pblico. El camin de medios estaba patrullando constantemente anunciando que inhalar los gases txicos provocara alucinaciones, y aquellas personas viviendo cerca de las costas deban apresurarse al hospital para tratarse. Por supuesto, todos los hospitales que llevaban a cabo el diagnstico en la noche haban sido infiltrados por magos y Ejecutores especializados en el lavado de cerebro a travs del poder de la sugestin; ellos estaban ansiosos esperando rdenes. Sera posible as, eliminar la mayora de las declaraciones de los testigos, no as el origen de los rumores.

El procedimiento de compra de dos mquinas de combate F15 de mercaderes de armas del Medio Este haba sido completado; ese era el resultado de tener a la Torre del Reloj como intermediaria. A pesar de ser aviones modelo-C de segunda mano, en el actual punto crtico realmente no haba nada de tiempo como para tener eso en cuenta. Los dos F15, en los cuales la bandera de Japn haba sido temporalmente pintada, seran entregados a la base area fortificada, todo lo que queda es tomar la oportunidad de cambiar las partes incompatibles, y entonces ensamblar los aviones de combate modelo-J.

La fuerza de defensa Japonesa ciertamente era un grupo inquieto con presupuesto. Un solo avin de combate ya costaba alrededor de un billn de yenes, y ahora un escndalo que involucr la prdida de dos cazas simultneamente que previamente haban ocurrido; este hecho deba ser aniquilado sin importar cmo. Desde este punto en adelante, ellos slo podan usar cazas pre-preparados de reemplazo para ser usados como seuelo en las negociaciones, y encargarse de que las fuerzas de auto-defensa se hagan responsables de destruir la evidencia tambin.

Ya era medianoche cuando las incesantes negociaciones telefnicas finalmente se detuvieron dejndolo as descansar un poco, pero Risei inmediatamente record a un invitado cuando estabaesperando en el vestbulo. Suspirando, tom una silla e inici nuevamente su trabajo, continuando llevar a cabo sus deberes como supervisor.

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Lamento mucho haberlo hecho esperar. He estado muy ocupado esta noche.

En la voz de Risei haba un cansancio excesivo que no poda ser escondido.

De las dbilmente iluminadas bancas vino el sonido de algo como una risa artificial.

Es inevitable. Tiene temas urgentes que atender.

Un ligero, chirrido metlico proveniente de las ruedas de la silla de ruedas acompaaban las carcajadas. La silueta que emerga de la oscuridad permaneca sentada.

La silueta, tan plida casi como si fuera una persona completamente distinta que ni siquiera pudiese hablar, era en realidad el una-vez famoso prodigio Kayneth El-Melloi.

Quin entre aquellos que conocen sus pasadas circunstancias habra pensado que l pudiera haber sido reducido a tal condicin? Pero en sus ojos haba una fuerte determinacin que podra ser llamada obsesin, de la cual la obstinada e intolerante personalidad del antes mago prodigio poda ser vagamente percibida.

A pesar de que Kayneth haba recibido grandes daos corporales que le hacan casi imposible el restablecer su gloria, l haba ms o menos conservado el uso de sus manos a travs de los contactos del clan El-Melloi, a cambio de una asombrosa suma de dinero en gratitud para recompensar a un artesano de muecos residiendo en Japn, y a travs de gran dificultad haba obtenido la habilidad de moverse libremente dentro de los parmetros de movilidad de una silla de ruedas. Su meique izquierdo, cubierto con una gruesa capa de yeso, tambin haba recuperado su sentido de dolor.

Padre, con respecto a mi peticin cul es exactamente su decisin?

En contraste a la cooperativa sonrisa en su rostro, la voz de Kayneth contena como mnimo un ligero tono de amenaza. Aquellos drogadictos probablemente seran as cuando los efectos se hayan ido y hayan demandado ms drogas antes de retirarse. Risei observ el rostro del antes prodigio en la magia; su rostro mostraba paranoia y confusin que no podan ser ocultados.

Que las cosas llegaran a este punto definitivamente no era algo que Risei haba esperado. Sin embargo, un contrato es a fin de cuentas un contrato. Dejando de lado la consideracin de su alianza secreta con Tsaka por el momento, era necesario practicar aquello por lo que haba predicado el honor de la Iglesia.

Ciertamente, en la cruzada contra Caster, el Servant Lancer jug un importante rol; esto tambin ha sido verificado en el reporte del supervisor.

Eso quiere decir que, no hay duda de que soy el indicado para recibir un Sello de Comando?

Sin embargo, es algo como

El Padre Risei frunci el ceo, y vio a Kayneth como si sintiese algo inconcebible.

Acto 11 Parte 02

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Por supuesto, de acuerdo al contrato es necesario entregarle al Master de Lancer su recompensa Seor Kayneth, usted cree que puedo considerarlo un Master?

Una mirada de odio momentneamente apareci en los ojos de Kayneth, pero inmediatamente recobr su comportamiento tan cuidadoso que podra ser considerado caballeresco.

Concerniente al contrato con Lancer, he establecido que sera sostenido por m y mi prometida Sola. Ciertamente no tengo la intencin de proclamarme un Master. Nosotros dos, Sola y yo, somos un Master.

Pero ahora, no estn ambos, la fuente del prana y el control de los Sellos de Comando bajo el cuidado de la Seorita Sola nicamente?

Las muecas expresivas de Kayneth eran difciles de justificar audazmente como una graciosa sonrisa.

A causa de la consideracin estratgica, los Sellos de Comando temporalmente han sido entregados a Sola para su resguardo. Pero el control sobre el contrato con Lancer sigue siendo mo. Si sospechas de ello, puedes preguntar a Lancer directamente por la confirmacin. Y ms importante an, la firma para la aplicacin enviada a la Iglesia es solamente ma.

El padre Risei suspir. Incluso si fuera a cavar profundo en el asunto, hacer objeciones en las pequeas y pocas importantes cosas, sera en vano. La verdadera fuente de la jaqueca de Risei era la inesperada situacin de tener que entregar Sellos de Comando a otro Master que a TsakaTokiomi. En este punto, incluso si fuese a negarse a entregar el Sello de Comando a Kayneth, le sera imposible negarse a entregrselos a su prometida. Incluso si el padre Risei fuese a interferir en el conflicto interno de la faccin Archibald, eso no le traera beneficio alguno.

De acuerdo. Yo reconozco tu estatus de Master. Ven, sir Kayneth, por favor acrcame tu mano.

Con refinada habilidad Risei traz las desvanecidas marcas en la extendida mano derecha de Kayneth, transfiriendo uno de los Sellos de Comando acumulados en su mueca derecha a la mano de Kayneth. No hubo ningn dolor, todo el proceso fue concluido en unos minutos.

Entonces, por favor continua peleando gloriosas batallas como un Master

Eso es ms que seguro.

Kayneth asinti, sonriente, entonces desenfund una pistola que tena escondida en el asiento de su silla, y apunt al sacerdote que se haba dado vuelta.

El seco sonido de una pistola quebrando el silencio en la sala de Dios.

Kayneth ni siquiera le dio otra mirada al sacerdote que haba cado bruscamente, y observaba perplejo la imagen del Sello de Comando grabada en el posterior de su mano derecha.

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Las cosas haban progresado a este punto pero l slo tena uno comparado con sus oponentes que no haban usado sus Sellos de Comando, l estaba en una posicin de desventaja. Y los Masters de Saber y Rider han obtenido nuevos Sellos de Comando; estas circunstancias definitivamente no podan ser ignoradas.

El asesino del supervisor indudablemente causara un alboroto, pero en este Heavens Feel, haban otros magos aparte de l que utilizaban pequeos soportes, tales como armas. Por lo tanto, el principal sospechoso sera esa mugrosa rata contratada por los Einzbern.

Kayneth no pudo suprimir la carcajada de satisfaccin que flua desde el fondo de su garganta. Estaba inmerso en el xtasis de recuperar su estatus como Master. En cuanto al asesinato del supervisor, una accin que haca que la dignidad y el orgullo de Lord El-Melloi se hundieran profundamente, l no tena intenciones de lamentarse.

***

Acto 11 Parte 02

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Inmediatamente despus de poner un pie sobre la capilla, Kirei sinti la presencia de la muerte.

Un ligero hedor a sangre, y el an ms imperceptible olor del humo. Ciertamente alguien haba cometido un imperdonablemente retorcido acto en esta casa de Dios.

A pesar de que no senta peligro alguno, Kirei todava avanzaba cuidadosamente, pasando por las bancas al llegar al altar, descubri la yaciente silueta en un costado.

Padre

El sollozo que sala de sus labios era dbil. Al mismo tiempo que descubri la silueta del Padre Risei, los entrenados y agudamente obServantes ojos de un Ejecutor, se dieron cuenta del hoyo deuna bala en su espalda y el charco de sangre en el suelo.

Kirei, en un total torpor mental, examin cuidadosamente el cuerpo de su padre.

Levant su manga derecha, revisando el nmero de Sellos de Comando que su padre posea. Tal y como supuso, faltaba uno. Risei entreg un Sello de Comando bajo su poder a alguien, y seguramente fue asesinado por esa persona despus. Uno de los Masters que obtuvo mrito en el proceso de la cruzada contra Caster estaba disconforme con compartir el crdito con las personas junto a las que pele, y entonces cometi tal crimen. Esencialmente no haca falta analizarlo para determinar la secuencia de eventos.

Pero incluso un mago no sera capaz de apoderarse de todos los Sellos de Comando de las manos del cadver de un sacerdote mayor. Los Sellos de Comando en el poder del supervisor estaban protegidos por oraciones sagradas. Sin su permiso, no es posible apoderarse de ellos por medio del uso de la taumaturgia. El Padre Risei, el nico que saba las palabras sagradas, ya estaba muerto, los Sellos de Comando de las previas guerras del Santo Grial preservados hasta ese da ya no podan ser usados.

Eso no estaba bien. El Padre Risei habra permitido que semejante cosa sucediese?

Kirei levant la mano derecha de su padre, descubriendo que haba marcas poco naturales de sangre en sus dedos. Parecan ser marcas hechas por abrasin. El moribundo Padre Risei haba sumergido sus dedos en el charco de sangre, y debi haber dejado pistas en algn lado.

Ya que haba entendido esto, era relativamente sencillo encontrar las palabras en la sangre.

En el suelo, el ltimo testamento escrito en rojo oscuro era jn424 una persona de fe no Cristiana creera que es un mensaje secreto de desconocido significado. Pero para Kirei, que haba heredado la devota fe de Risei, el significado de esta cifra era muy obvio.

John 4:24. Sin olvidarse de ninguna palabra, Kirei recit las sagradas palabras guardadas en su memoria.

Dios es espritu, y los que le adoran deben adorarle en espritu y en verdad

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Como si fuera una respuesta, en la ya fra mueca derecha del Padre Risei, todos los Sellos de Comando brillaron levemente a unsono.

Acompaando un despliegue de apagado dolor, los Sellos de Comando fueron transferidos uno por uno al brazo de Kirei. Atnito, Kirei observ la luz de los Sellos de Comando.

Indudablemente, sa era la fe que un padre le confi a su hijo.

El Padre Risei crey que la primera persona en encontrar su cuerpo definitivamente sera su hijo. Slo as escribi en sangre un cdigo que slo un clrigo podra interpretar. l confi todos los importantes deberes de supervisor administrar los Sellos de Comando, resguardar el Grial, guiar el Heavens Feel en la direccin correcta a su hijo. l verdaderamente crea que su hijo era aquel que podra cargar con esas responsabilidades; incluso en muerte, no tuvo la menor duda de ello.

l no saba que Kirei haba encubierto sus recin obtenidos Sellos de Comando, y haba recuperado el derecho a ser Master

l no saba que su hijo, en un impulso, sembr las semillas del desastre para su benefactor Tokiomi

!

Inesperadamente sintiendo las lgrimas rodar por sus mejillas, Kirei presion sus manos contra su rostro, aturdido.

El derramar lgrimas en frente del cuerpo de su padre y sus ltimos deseos como una persona, eso era natural.

Incluso as, Kirei haba sido envuelto en terror y confusin, casi como si cayese en el abismo del infierno.

l debe enfrentar todo eso directamente en su corazn haba una voz autoritativa dicindole eso.

Los sentimientos que ahora desbordan de tu corazn, Kirei Kotomine debes comprender todo esto, debes aceptar todo esto. Eso es porque

Lgrimas.

Cundo fue la ltima vez que derram lgrimas? Incluso ahora poda recordar claramente que haba sido hace tres aos. Usando una mano para quitar las lgrimas que fluan, esa mujer una vez dijo esto: T me amas.

La habilidad intrnseca en su corazn de esconder sus emociones estaba determinada a bloquear esos recuerdos.

Acto 11 Parte 02

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l no puede regresar. No puede recapacitar. Las lgrimas derramadas aquel da, los sentimientos que alberg ese momento, necesitaban ser arrojados al abismo del olvido.

La respuesta que haba una vez comprendido.

La verdad de la que cuidadosamente se haba dado cuenta.

De no haber enfrentado esto con un corazn abierto y adoptado, y as, el mtodo de la evasin que le permita mantener su condicin actual

l no poda comprender las lgrimas que fluan una vez ms. Los mismos sentimientos que en esa ocasin gritaban las emociones que haban sido selladas y buscaban comprensin.

Pero indiferente a estas advertencias racionales, los recuerdos se le escurran por las grietas entre los sellos.

Esta vez era muy distinto al final que haba esperado l pens esto en ese entonces.

A un lado de la cama, al lado de la frgil y moribunda mujer, no pudo Kirei darse cuenta de aquello que su consciencia deseaba?

Deseando a esta mujer

Deseando ver a esta mujer una vez ms

En profundo amor y confianza a Kirei Kotomine en este aspecto, su padre, y esta mujer, tenan algo en comn.

Tambin son iguales en su absoluta incomprensin hacia la naturaleza de la persona que Kirei es.

Precisamente por esto, hace tres aos Kirei constantemente rezaba de esta forma en su corazn

En los momentos anteriores a la muerte de su padre, pudo probar una vez ms el gozo de la ms grande del mundo mortal

Tal y como esas bestias que persiguen el aroma de la sangre El alma persigue el placer

Como si esos ojos de rub que han estado latentes en el fondo de su corazn, acompaados por una carcajada siniestra, estuviesen susurrndole.

Slo el placer es la forma del alma no dijo eso? La naturaleza de Kirei Kotomine es tambin as

Oh Seor alabado sea tu nombre. Venga a nosotros tu reino. Hgase as tu voluntad en el cielo como en la tierra.

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La oracin familiar que tuvo que recitar todos los das instantneamente sala de su boca, ese deba ser un instinto de auto-preservacin. De esa forma, regres a su rol de clrigo, atando fuertemente un alma que estaba a punto de quebrarse a pedazos.

Perdona a los que nos ofenden, as como tambin perdonamos a los que nos ofenden no nos dejes caer en la tentacin, ms lbranos del mal Amn.

l sell la maldita verdad de las lgrimas cayendo ininterrumpidamente desde su rostro hacia la costa del olvido. Kirei rez por la suerte de su padre en su siguiente vida y dibuj una cruz en su pecho con su mano.

Fin Parte 02 ~ Acto 11 Volumen 03

ACTO 11 - PARTE 03

[-72:43:28]

intil sirviente! Basura que slo sabe presumir!

Lancer slo poda agachar la cabeza tranquilamente y soportar la feroz reprensin en silencio.

Se supona que protegeras a una mujer temporalmente. Pero ni siquiera pudiste hacer eso, es absurdo! As que eso es lo que un tan renombrado caballero es!

Kayneth estaba actualmente maldiciendo, saliva salpicando por todos lados. Pero desde el punto de desconcierto, en comparacin con Lancer que se colm por vergenza, Kayneth estaba realmente fuera de s. A causa de su naturalmente obstinada personalidad, ahora la magnitud de la ira de Lord El-Melloi estaba infundida con indignacin justa hasta el punto de provocar miedo.

Kayneth haba obtenido un nuevo Sello de Comando, satisfecho, regres a la fbrica abandonada que sola ser su escondite, y se dio cuenta que de hecho no haba seales de Sola ah. Lgicamente hablando a estas alturas ella debera haber terminado el combate con Caster y regresado all. l haba esperado en un estado de ansiedad a causa de la preocupacin, y esper hastael solitario regreso de Lancer, cuya expresin era seria.

A pesar de que era slo una sustitucin temporal, Sola era indudablementetu Master! Realmente no tienes la habilidad para protegerla hasta el final por qu te convertiste en un Servant? Cmo puedes ser tan desvergonzado para regresar solo?

Yo realmente no tendra la dignidad para regresar.

Entonces ten la batalla contra Caster, fue tambin tu infantil estupidez que te alent a negarle la proteccin a tu Master, enfocndote slo en desplegar ese iluso herosmo tuyo?!

Lancer dbilmente sacudi la cabeza. Su belleza natural estaba retorcida por la tristeza, eso quera decir que tambin estaba lleno de remordimiento por ese odioso resultado. Pero ahora Kayneth no tena el tiempo para darse cuenta de eso.

Master, por favor permtame Dado que la Seorita Sola y yo no hemos hecho un contrato oficial, no podemos sentir la presencia del otro

Es precisamente por eso que deberas haber sido an ms cuidadoso, an ms atento!

Kayneth grit inmediatamente, interrumpiendo la explicacin de su Servant.

T

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Usualmente para un Master y un Servant que han formado un contrato, sin importar cul de las partes haya entrado en peligro, se le comunicara a la otra. En realidad, en el bosque Einzbern, fue as que Lancer salv a Kayneth de las circunstancias de emergencia.

Pero esta vez, ya que Lancer y Sola haban entrado en combate sin haber formado un contrato oficial de acuerdo a las leyes de la taumaturgia de contrato, Lancer slo protega a Sola por su deber para con Kayneth, y eso se haba vuelto la causa del desastre.

Al final, para el momento en que Lancer hubo entrado al campo de batalla y regresado a la azotea del edificio central en Fuyuki, Sola, quien se haba quedado all originalmente, haba desaparecido; slo las manchas de sangre dispersas por el suelo eran la nica pista de la seriedad de lo ocurrido.

Lo nico que poda ser confirmado era que Sola segua con vida. El suministro de prana que permita a Lancer permanecer en este mundo y que le daba la fuerza para actuar todava flua sin obstruccin alguna en su cuerpo. Indudablemente, ella haba sido capturada, pero el instigador no pareca tener intenciones de tomar su vida.

De haber sido otro Servant, tal vez le sera posible sentir su aproximada localizacin por el camino del flujo de prana. Pero desafortunadamente, debido a que el contrato que Lancer haba hecho no era uno normalel contratante y el suministrador de prana eran dos personas distintas, su habilidad para sentir al suplidor de prana claramente era extremadamente dbil. Incluso de poder determinar que Sola segua con vida, l no poda sentir para nada, de dnde vena el prana. Sin pistas, buscar por Sola en la ciudad era casi como buscar una aguja en un pajar. Al final, tuvo que regresar solo.

Jaja, Sola ciertamente no deb haberle entregado los Sellos de Comando a ella una batalla de magia seguramente debi haberla sobrecargado

No difiero en eso con respecto a la seorita Sola, yo tambin soy responsable. Pero la seorita Sola tom esa decisin puramente porque deseaba que usted, Sir Kayneth, pudiese recuperar su movilidad. En ese caso, sin importas qu, por favor

Kayneth levant los ojos, abrumado de celos, y mir hacia Lancer.

An tienes la osada de hablar as. No te hagas el estpido, Lancer, debiste haber sido t quien alent a Sola.

Usted por qu sacara semejante conclusin

Hmph, deja de pretender! En las historias de leyenda, eres bastante conocido por ser mujeriego y adltero. No fuiste t quien involuntariamente intent seducir a la prometida de tu seor?

Arrodillado en el suelo con su cabeza agachada, los hombros de Lancer se sacudan violentamente, casi peligrosamente.

Seor mo, sin importar qu, usted debe retractarse de esas palabras.

Acto 11 Parte 03

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Hm, le di a un nervio? No puedes soportar esta ira? En ese caso, ests intentando mostrarme tu verdadero rostro de ferocidad?

Kayneth continu burlndose del Espritu Heroico que vagamente poda controlar sus emociones.

Finalmente has metido la pata. Por un lado me juras eterna lealtad, pronunciando palabras elegantes; y por otro lado, guiado por la lujuria, me traicionas. Siempre hablas de caballera con una orgullosa expresin, creas que iba a alcanzar para engaarme a mKayneth?

Sir Kayneth usted por qu no comprende mi lealtad?!

Lancer solloz. Aquella duda un tanto estremecida era casi lastimera.

Todo lo que quera era defender el honor que siempre he tenido! Slo deseo participar con usted en gloriosas batallas! Master, por qu no comprende el corazn de un caballero?!

Deja de decir esas insolencias, Servant!

Kayneth despiadadamente sacuda las splicas de Lancer con una expresin cruel. La sospecha y disgusto con su Servant en ese punto haban superado el punto de ebullicin en su corazn.

Absurda marioneta. Sin importar qu, slo eres un Servant. Slo eres una sombra que permanece en el mundo real a travs de medio mgicos! La gloria y el orgullo que predicas es slo un truco que los espritus de los muertos usan para confundir a la gente en el mundo. Ms an, eres tan insolente hasta el punto de sermonear a tu Master; date cuenta de los lmites para tu osada!

Ya que lo que haba dicho Kayneth era demasiado, Lancer estaba sin habla. Kayneth, viendo la expresin de Lancer, secretamente senta un placer sdico. Aprovechando la oportunidad, levant su mano derecha, en la cual la imagen de los Sellos de Comando se vea una vez ms, hacia Lancer, el mago orgullosamente ri con fuerza.

Si no te gusta, entonces trata de usar ese orgullo y honor de los que tanto hablas para oponerte a mis Sellos de Comandohn, no eres rival? Esta entonces es tu verdadera habilidad. El espritu yfortaleza de las que hablas no son ni siquiera dignas de mencin ante la presencia de los Sellos de Comando. Esos son los trucos reales de las marionetas tales como los Servants.

Kayneth seor

Enfrentndose a Kayneth quien estaba burlndose fuertemente de l, Lancer dbilmente bajo la cabeza incapaz de dar contestacin alguna. La previa majestuosidad para blandir las lanzas gemelas en la presencia de seores de guerra haca mucho se haba desvanecido sin dejar rastro alguno, ya sea por los dbiles y recados hombros, o los perdidos ojos observando el suelo, era imposible ver en l rastro alguno de herosmo.

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Viendo su miseria, Kayneth finalmente sinti que hubo expresado todas las quejas que fue acumulando continuamente, y se sinti un poco aliviado.

Tal vez hasta ahora, Kayneth finalmente pudo establecer su ideal relacin Master-Servant con este Espritu Heroico. A pesar de ser algo tarde; debera haber sido capaz de, de ser ms temprano en preferencia inmediatamente despus de la convocacinabatir completamente su orgullo. De haberlo hecho antes, este absurdo Servant probablemente no habra tenido otras intenciones y hubiera servido complacientemente.

Master.

Despus de largo silencio, Lancer sbitamente llam a Kayneth con una fra voz.

Qu sucede? Hay algo que quieras decir todava?

No es mi intencin. Parece haber algo acercndose. Probablemente es el sonido de un motor con un dispositivo automtico.

Sin embargo Kayneth no escuch nada. Pero el odo de una persona ordinaria era enormemente incapaz de compararse con el de un Servant.

Un automvil, el cual casi al amanecer, se dirige en esta direccin, hacia esta fbrica abandonada como su objetivo, definitivamente no es un simple hecho que pasa.

Al pensar en ello, en el momento de elegir ese lugar como su fortaleza, el camuflaje, los encantamientos que haba preparado en los alrededores casi haban llegado al punto en el que revelaban puntos dbiles Kayneth se mof de s mismo, que ya no era un mago, y dibuj una seca sonrisa en su rostro.

Lancer, ve inmediatamente y destryelo. No te quedes ah.

Entendido.

Lancer asinti, inmediatamente se transform en su forma espiritual y desapareci.

***

Acto 11 Parte 03

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De acuerdo a las direcciones que Irisviel, quien estaba sentada en el asiento delantero de pasajero, le dio el Mercedes Benz 300SL que Saber estaba conduciendo gradualmente; as abandonaba Shinto y se diriga al este, y entraba en un rea desrtica.

Si sigues derecho por este camino, en el lado izquierdo hay una fbrica abandonada. Ah parece ser que se encuentra la fortaleza de Lancer y el resto.

Despus del intenso combate, no muy lejos del ro, uno podra adivinar que Lancer, quien haba abandonado el campo de batalla sin palabra alguna, probablemente haba regresado al lado de su Master. Despus de escuchar que Kiritsugu obtuvo un reporte sobre el paradero de Lancer, Saberpropuso actuar inmediatamente.

Pensando en ello, ests bien? Tener batallas consecutivas no son una gran carga para ti?

No hay problema, Irisviel. Por el otro lado, espero ser capaz de enfrentarme a Lancer esta noche.

Despus de anunciarlo lgubremente, ahora era saber quien se mostraba preocupada por el pasajero que tena al lado.

Usted, por otro lado, Irisviel, se encuentra bien? No se ve muy bien ahora.

Mientras operaba el volante, Saber observaba a Irisviel a su lado. Saber descubri en un vistazo que el rostro de Irisviel estaba plido y anmico, y que constantemente se secaba sudor fro de su frente. Desde que abandonaron la ribera, haba estado as. A pesar de estar haciendo su mejor esfuerzo por esconderlo, cualquiera podra decir con solo mirarla que estaba esforzndose mucho.

No te preocupes, Saber. Mientras ests a mi lado

Ah, mira. Ese edificio. Ese debe ser.

Hace mucho tiempo, cuando la ciudad todava no haba sido descrita como un rea residencial emergente, este lugar probablemente era usado como algo parecido a un aserradero. La ubicacin que fue abandonada a causa de las progresivas tendencias, olvidada por emergentes y resplandecientes calles, tranquilamente permaneci en el corazn de una pequea rea montaosa.

Lentamente atravesando la puerta principal hacia un suelo vaco, Saber apag el motor del carro. Los alrededores eran tranquilos, Irisviel a un lado del carro, cautelosamente revisaba el rea a su alrededor y entonces asinti.

Ciertamente hay rastros de encantamientos de magia. Pero lo que es extrao es que no parecen haber sido cuidadosamente dispuestos; ya estn mostrando defectos.

No, es este lugar. Irisviel.

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Saber, quien se baj del carro un poco despus, afirm con una expresin calmada. Este altamente habilidoso espadachn probablemente ha percibido con sus agudos sentidos el olor de la batalla.

Efectivamentecomo si afirmara la sentencia de Saber, en frente de la silenciosa tierra abandonada repentinamente apareci una figura apuesta sujetando una lanza.

As que fueron capaces de encontrar este lugar no ha de haber sido fcil, Saber.

Despus de investigar, micompaero me inform sobre su escondite.

La palabra Master casi se le escapa de los labios, pero finalmente no lo dijoesto dej ver el atisbo de emocin que incluso Saber misma no conoca. Por supuesto, en principio era por el bien de ocultar la realidad de quin era su verdadero Master. Pero, la razn ms fundamental an era subconsciente, no quera admitir que Kiritsugu era su Master.

La expresin de Lancer era grave, muy diferente a la usual, dudando por un largo perodo para escoger las palabras en su cabeza, y entonces hacindole a la visitante una pregunta.

Dnde est la prometida de mi Master? Saber, no me dirs que no sabes?

Las expresiones de Saber e Irisviel se tornaron confusas, y se miraron la una a la otra.

No lo s qu sucedi?

Nada. Haz como que nunca pregunt.

Lancer suspir prolongadamente; la cantidad de alivio contenida en l era por mucho superior a su decepcin. Originalmente no tena pensado preguntarle eso a Saber. Que la persona que era su rival usara mtodos tan despreciables como tomar un rehn slo de pensar en ello, Lancer lo encontraba detestable.

Ahora que lo pienso, Saber, te encuentras bien? No creo que hayas venido aqu a charlar conmigo.

Pero no utilizaste mucha de tu energa en la batalla contra Caster?

Con respecto a eso, creo que el resto de los Servants estn igual.

Saber ignor el tema como si fuera algo natural. Efectivamente era tal y como ella dijo, en la batalla contra Caster en el ro, cada Servant haba utilizado grandes cantidades de prana.

As que predije que esta noche nadie iniciara un ataque, en cambio, tomaran la postura defensivaprecisamente por eso, no hay necesidad de preocuparse de que nuestro combate sea interrumpido por personas que no tienen que ver con l.

Acto 11 Parte 03

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Ya es casi de maana Todava queda algo de noche, no podemos desperdiciar esta gran oportunidad, no sabemos en qu mes de qu ao tendremos otra oportunidad de enfrentarnos sin preocupaciones. No creo que debamos perder esta oportunidad t qu piensas, Lancer?

Lancer, cuya expresin usualmente atractiva haba sucumbido ante las preocupaciones de su corazn, finalmente volva a sonrer.

Saber en este momento lo nico que puede traer un calmada y refrescante brisa a mi corazn, es este puro deseo de luchar tuyo.

A decir verdad, un poco antes Saber tambin haba estado secretamente sorprendida del por qu Lancer haba perdido su previa majestuosidad. Hasta que vio su sonrisa y descubri que sus preocupaciones eran innecesarias. Un hombre con semejante sonrisa claramente no necesitaba de la preocupacin o inquietud de ningn tipo. Esa clase de sonrisa era slo de una persona que ha atravesado todas las dificultades y se mostraba firme en las creencias podra tener.

Lancer blandi la lanza roja como si desease espantar todas sus preocupaciones y lamentos en su corazn, la punta de la lanza estaba dirigida a Saber.

Saber tambin liber la Barrera del Viento del Rey; la preciosa espada dorada fue revelada en medio de un torbellino. Enfrentada a la Gae Dearg de Diarmuid, usar la presin del aire para ocultar la hoja de la espada resultaba intil.

Y lo ms importante era que, el Rey de Caballeros crea que era su rival originario de otro tiempo pero que haba conocido por coincidencia en este mundo, un Espritu Heroico digno de recibir la luz de la espada en la cual ella haba acumulado toda la gloria que brillaba ahora sobre l.

La luz matutina era radiante, el cielo de un dbil rojo, todos los espritus de lucha concentrados entre los dos Servants eran tranquilos y ansiosos por tomar la ofensiva. Si los sentidos de uno fueran realmente agudos, slo con encontrarse en medio del torbellino de sus determinaciones hara que uno sienta dolor casi como si fuera golpeado, tal vez, incluso podra provocarle un ataque cardaco.

Cada clula en el cuerpo de Irisviel temblaba con la anticipacin del golpe letal, sin mencionar el aura, incluso la circulacin de su sangre estaba estancada.

Entoncesambas partes avanzaron al mismo tiempo con sus majestuosos espritus como arcoris en el cielo, y los golpes ruidosos eran claros como el de una tela desgarrndose.

Los dos hroes que no haban tenido oportunidad de combatir en estos tres das, esta noche finalmente tenan la oportunidad de enfrentarse, y as, una intensa batalla estaba a punto de comenzar una vez ms.

La situacin de la batalla esa nochepor un lado era la reproduccin del combate en los almacenes, pero la batalla de sus armas cruzando era incluso ms intensa que la primerams fiera, ms directa, ms determinante, era un choque directo de fuerza contra fuerza.

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Entre los dos no haba necesidad de evaluacin mutua, ni el uso de trucos para confundir al otro. Lancer blanda slo una lanza desde el principio; la hoja de la espada de Saber estaba tambin completamente revelada. Ninguno us trampas o trucos. Ms rpidos, ms imponentes. Cada vez que uno haca una movida, el otro inmediatamente contestaba con toda su fuerza con un golpe que sera capaz de contrarrestar el primero. Un simple concurso de habilidades, la hoja de espada contra la punta de la lanza, ms intensa, ms ardiente.

La espada sagrada se entrelazaba con la lanza demonaca, en direccin opuesta; las chispasvolando eran simplemente deslumbrantes. El choque entre los preciosos artefactos de leyenda, guiados por fuerza y velocidad ms all de lo humano, sobrepasaban la velocidad del sonido, casi rozando la velocidad de la luz. La observacin haca mucho que haba perdido sentido en esta trascendental batalla. Esas habilidades divinas, llevadas al lmite al punto de esa feroz batalla, mientras llevaban a cabo una competencia entre ambos.

Un desconocido nmero de rondas haban sido peleadas; tal vez decenas, tal vez cientos de rondas. Era simplemente imposible de determinar con ojos mortales. Despus de que la lanza y la espada de ambos chocaron, finalmente se separaron, y se alejaron el uno del otro.

Saber, t

Lancer empez a hablar, pero fue incapaz de continuar, su rostro mostraba una expresin de angustia y confusin.

Esta noche, a pesar que la tcnica de Saber haba cambiado slo un poco, ciertamente era ms dbil en fuerza que la primera vez y se contena un tanto. Lancer no fue incapaz de darse cuenta de esto. Y eso no se deba al gasto de fuerza fsica de Saber, sino ms bien que su tcnica misma haba cambiado.

Saber tena fuertemente presionado su pulgar derecho contra su palma, sin estar sujetando la espada en realidad. Los cuatro dedos restantes estaban ligeramente alrededor de la espada, controlndola, su mano izquierda estaba slo de apoyo. Cuando atacaba, no usaba nada de la fuerza de su mano izquierda.

Claramente haba sido Saber quien haba tomado la iniciativa de pronunciar sus intenciones de enfrentarse a l, pero deliberadamente ella no estaba usando su mano izquierda, usando slo la mano derecha para sostener la espada dorada.

Por supuesto, Lancer entendi la razn detrs de aquello.

En efecto, Lancer una vez utiliz la lanza demonaca Ge Buidhe para sellar la fuerza de la mano izquierda de Saber, pero en la batalla en contra Caster la ltima noche, Lancer destruy la lanza amarilla, pro-activamente renunciando a su principal ventaja. Pero el orgullo de Saber no se conformara con aceptar la concesin de Lancer, de esa forma ella intencionalmente no estaba usando su mano izquierda. Esa, entonces, era una accin de verdadera caballera.

Peroincluso esa concesin que era tan noble como para inspirar respeto instantneoLancer rechazaba esa accin desde su corazn.

Acto 11 Parte 03

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Si la accin de destruir a Ge Buidhe haba provocado la preocupacin innecesaria de Saber, al final de cuentas, querra decir que las acciones de Lancer haban desalentado el entusiasmo del combate entre ambos. Un combate en el cual ninguno albergue arrepentimientos, haciendo uso de todas su fuerzas para enfrentarse, eso era lo que Lancer haba deseado. Saber se contena porque no poda dejar de lado su consideracin sobre la equidad de la circunstancia, esto provocaba que Lancer estuviera un tanto disconforme con la batalla.

Sera un problema para m que me malinterpretes, Lancer.

Como habiendo adivinado lo que estaba pensando Lancer, Saber sacudi la cabeza con una seria pero calma expresin.

Si he de usar mi mano izquierda, mi vergenza definitivamente entorpecera mi espada. Enfrentada a tus soberbias habilidades con la lanza, ese sera un error fatal.

Saber

Entonces, Dirarmuid, esta es en realidad la mejor estrategia para poder utilizar toda mi fuerza y as poder derrotarte.

Saber lo dijo determinada, sostener la espada con una mano ciertamente era algo pesado, Saber baj la espada ligeramente, y asumi su guardia.

El brillo en sus ojos simplemente inspiraba asombro, un fresco y claro deseo de lucha. No haba descuido, ni tampoco duda alguna.

Tal vez para ella, la extensin de la herida en su mano izquierda era de segunda importancia en el combate. Tal vez el pilar ms importante en la habilidad de Saber para obtener la victoria era claramente su deseo de lucha y pasin por el combate que haban sido pulidos hasta la pureza.

Para interrumpir su confusin, ella prefera renunciar a su mano izquierdael orgullo escondido en su corazn, entonces, era su mayor arma.

Es en esto que el Rey de Caballeros es ms noble.

Saber ahora indudablemente se haba aferrado a la resolucin de pelear hasta la muerte. Ella tambin deseaba enfrentarse a Lancer desde el fondo de su corazn bajo esas condicionesdespus de entender sus intenciones, Lancer se sinti un tanto intenso y liberado, como si hubiera sido golpeado por electricidad.

La gloria brilla desde la espada del Rey de Caballeros. Es verdaderamente grandioso que haya podido encontrarme contigo.

El camino que ambos anticipaban era el mismo.

De ser un angosto puente en el cual era imposible darle paso al otro, la persona en pisarlo primero deba ser vista respetuosamente por la otra persona que dio un paso atrs.

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Precisamente stasin preocupaciones, sin distracciones, donde sus vidas estaban en riesgo, exploracin y persecucin de lanza y espada, era una batalla verdaderamente digna.

Las expresiones de ambos eran extremadamente ansiosas y serias, pero en la punta de sus labios, se esbozaban los dejos de una sonrisa.

Caballero principal de los Caballeros de Fianna, Diarmuid ua Duibhne ataca!

Me parece bien. Rey de Bretaa, Arturia Pendragon cumple con esta batalla!

Los dos se enzarzaron una vez ms, hojas blancas chocando, chispas volando; en el centro, se poda ver la dicha de aquellos para quienes la batalla es el significado de sus vidas, resplandeciendo brillantemente.

Fin Parte 03 ~ Acto 11 Volumen 03

ACTO 11 - PARTE 04

[-72:37:17]

Kayneth se esconda en las sombras, adentrado en la fbrica abandonada mientras contemplaba la situacin de la batalla afuera. Los pensamientos en su corazn, contrarios a la incorrupta predisposicin de aquellos caballeros, slo hervan con ansiedad.

Ya que el vencedor todava no haba sido decidido, se estaba volviendo ms y ms nervioso cada segundo que pasaba con esos ansiosos sentimientos.

Por qu no pudo vencer?

A pesar de que Saber subestimaba tanto a Lancer, por qu la lanza de Lancer era todava incapaz de llegar a Saber?

La respuesta se volvi clara despus de una cuidadosa reflexin eso es, Lancer es muy dbil, muy inferior a Saber.

En ese momento, lament profundamente el no haber conseguido el Espritu Heroico de Alejandro.

De haber conseguido al Rey de Conquistadores tal como haba planeado, las cosas no habran llegado a ese punto. Habiendo perdido su Reliquia Sagrada en un momento tan crucial, se vio obligado a convocar a Diarmuid como sustituto por las prisas. Siempre que un mago de primera clase, Master autntico como l estuviera presente, esas diminutas desventajas podan ser emendadas incluso si los rangos del Espritu Heroico fuesen reducidos. Aquello de lo que carezca el Servant sera compensado con su propio talento, Lord El-Melloi en efecto tena esa temeraria actitud.

Sin embargo, justo ahora, habiendo perdido su Circuitos Mgicos, Kayneth haca mucho haba perdido su antigua confianza. Para poder sobrevivir en esta guerra con su nico Sello de Comando restante y un Servant inferior, tena que ser an ms prudente que antes.

Cuando no hay una clara oportunidad de victoria, lo correcto sera escapar inmediatamente con su Master. A pesar de no haber estado preguntando cmo hizo Lancer para perder a Ge Buidhe, las posibilidades de vencer contra Saber se volvieron incluso ms esquivas en cuanto ella recuper la fuerza de su mano izquierda.

Por el momento no haba tiempo para entablar combates; Lancer tena otros deberes que priorizar sobre eso. Sera imposible para el actual Kayneth buscar y rescatar a Sola por su cuenta. Era algo que simplemente no poda hacer sin su Servant.

Pero qu tan estpido es ese Lancer? No se puede dar cuenta de la seriedad de la situacin?

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Irritado, Kayneth rascaba su cabeza repetidamente. Qu grandioso sera si pudiera usar un Sello de Comando justo ahora! Por qu tena que tener slo uno en su mano? Era una lstima que Sola se haya llevado los otros Sellos de Comando. Si tan solo hubiera sido capaz de confiar en Kayneth

Entonces, el cuello de Kayneth repentinamente sinti un flujo de aire poco natural.

Un pedazo de papel revolote a su lado. Era un pedazo de anotador extremadamente ordinario, pero Kayneth fij sus ojos en las pocas y concisas palabras con una mirada mortal.

Si no quieres que tu amada muera, entonces date vuelta lentamente

Impactado, los ojos de Kayneth se ensancharon, movi las ruedas de la silla de ruedas para cambiar la direccin que enfrentaba su cuerpo. En las negras profundidades de la fbrica abandonada, la luz entrante proveniente del cielo iluminaba un nico lugar como si se tratara de una linterna.

La silueta de una mujer, tendida en el suelo profundamente como si estuviera dormida, emerga de la dbil y tenue luz.

!

Kayneth nunca confundira esos rasgos sin importar cun tenue fuese la luz o qu tan grande sea la distancia.

A pesar del dolor y el agotamiento en el metlico rostro de Sola evidenciaba que algo haba sucedido, la mecha de cabello sobre sus labios temblaba como si fuese volada por una brisa. Esa era la prueba de su aliento. Ella segua con vida.

Kayneth olvidando la advertencia casi dej salir un sollozo. Entonces, como un espectro emergiendo de la oscuridad, una figura humana se mostraba debajo de la dbil luz para mostrarse.

Un viejo abrigo, esos revueltos cabellos y deslucidos bigotes, y slo ese par de ojos que diferan de su aspecto lgubre, fieramente emitan una filosa luz ese hombre inolvidable, el nico que haba sido capaz de desgarrar todos los circuitos mgicos en el cuerpo de Kayneth, ese odioso lacayo de los Einzbern.

Probablemente haba transportado a la inconsciente Sola en silencio desde la puerta trasera durante la distraccin creada por Lancer y Saber concentrndose en pelear el uno con el otro. El can de la ametralladora en la mano del hombre apuntaba preparada a la frente de Sola.

Tena que ser ese bastardo

Kayneth ya haba experimentado esa viperina crueldad y perfecta prudencia de antemano. Comparado con la furia y el odio una profunda desesperacin por mucho sobrepasaba todas las dems emociones y le hizo agachar la cabeza impotente.

Acto 11 Parte 04

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Efectivamente era la peor situacin en la que poda pensar Kayneth. La mujer que amaba haba sido capturada por el enemigo ms difcil que quisiese imaginar.

No obstante, justo antes de rendirse al pnico, la voz de la razn detuvo a Kayneth.

Deba haber un propsito para aquel hombre para deliberadamente mostrarse y dejarle a Kayneth confirmar el bienestar de Sola.

Kayneth regres su cabeza y dio un vistazo hacia Lancer, quien estaba peleando con todo lo que tena en el rea abandonada. A juzgar por la posicin de ambos Servants en combate, la ubicacin de Sola estaba en un punto ciego que ellos no podan ver. Ambos estaban completamente ocupados tratando de derrotar al poderoso enemigo en frente suyo, ignorando completamente al nuevo invasor.

Kayneth pudo adivinar qu era lo que el hombre quera, as que silenciosamente agach la cabeza demostrando sus intenciones de obedecerle.

El hombre sac un rollo de pergamino de su abrigo y lo lanz al aire despus de abrirlo levemente. A pesar de que el peso del pergamino no se comparaba con el del pedazo de anotador de antes, simples manipulaciones en el aire eran suficientes para hacerlo volar con el viento. Como una medusa, el pergamino flot por el espacio lenta y pausadamente, hasta aterrizar sobre las rodillas de Kayneth.

A pesar de que otros slo veran unas figuras carentes de significado y formas bien dibujadas, lo que estaba grabado en l era, para Kayneth, un perfecto documento de magia escrito en un formato que le resultaba familiar.

Slo que el contenido era muy inusitado.

Magia de Atadura: Objetivo Kiritsugu Emiya.

Las Crestas de la familia Emiya por este medio comandan: Una vez que las siguientes condiciones se cumplan, este juramento se convertir en una orden y atar al objetivo sin excepcin.

Juramento:

Para la quinta cabeza de la casa Emiya, Kiritsugu, hijo de Noritaka: concerniente a ambos, Kayneth El-Melloi Archibald y Sola-Ui Nuada Re Sophia-Ri, cualquier intencin y/o accin de homicidio y perjuicio sern prohibidas por la eternitad.

Condiciones:

!

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Pergamino de auto-Geis una de los ms despiadados contratos de magia que slo deberan ser usados entre las traicioneras sociedades de magos cuando era necesario hacer un contrato inquebrantable bajo cualquier medio.

Es una maldicin impuesta que fuerza el uso de las funciones de las propias Crestas Mgicas sobre uno mismo. Tericamente, tiene un poder que no puede ser borrado por ningn medio. Incluso si el Conjurador perdiese la vida, las Crestas Mgicas ataran el alma del difunto y no se heredaran a las siguientes generaciones. Es una muy peligrosa magia. Para los magos, una negociacin que involucra la ofrenda de tal declaracin significaba de hecho la mxima concesin.

A pesar de ser algo que Kayneth no vea muy a menudo, estaba redactado efectivamente en su escritura, sin bache alguno. La firma hecha con la sangre del declarador mismo estaba evidentemente latiendo con prana, demostrando que el conjuro ya haba sido establecido y estaba trabajando.

Eso quera decir que cuando las condiciones grabadas en el fondo de la declaracin sean cumplidas, ese hombre Kiritsugu Emiya entregara una parte de su libre albedro, y el contrato sera confirmado con una maldicin inquebrantable.

Sosteniendo el pergamino con manos temblorosas, Kayneth lea las condiciones para establecer el contrato una y otra vez. Como esperando que los contenidos cambiaran en la siguiente oportunidad, obstinadamente contemplaba esas palabras repetidamente. Dedic su entero juicio a considerar si los contenidos daban lugar a alguna grieta que pudiese formar contradicciones.

No obstante, a diferencia de los temblorosos pensamientos de Kayneth, la parte ms lgica de su corazn ya haba aceptado su sumisin. La posibilidad de que su amada y l puedan regresar a su hogar con vida en ese momento, no era ese su mayor deseo?

Si dudaba unos momentos ms, Kiritsugu Emiya probablemente jalara el gatillo. Una vez que la primera bala se llevase la vida de Sola, el can definitivamente apuntara a Kayneth mismo. No tena eleccin. Si perder todo o considerar ese contrato como su ltima esperanza esa era la nica diferencia.

Con una tenue y vaca mirada como si fuese un caparazn vaco, observ al ltimo Sello de Comando en su mano derecha y dio la ltima orden inquebrantable como Master de Lancer.

Sin seal alguna, sin razn el carmes brillante desparramado por toda la tierra.

Todos parecan estar igual de impactados. Saber, Irisviel, e incluso Lancer mismo abrieron los ojos ante ese sumamente abrupto final el propio shock de Lancer seguramente era el ms intenso, ya que no tena ni la ms mnima pizca de expectacin o preparacin para tal agona y desesperacin.

Aturdido, Lancer vio a las flores carmes que goteaban de la lanza roja hacia el suelo. Sin importar cmo, no poda creer que esa era su propia sangre.

Su tan amada lanza atraves su corazn. No haba sido otra cosa ms que sus propias manos quienes forzosamente apualaron la punta de la lanza en su propio cuerpo.

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Por supuesto, no era esa su intencin, ni tampoco su deseo. Lo que esta lanza carmes se supona deba atravesar era el corazn de Saber, y aquello que deba atravesar su propio corazn era la espada sagrada de Saber.

Capaz de quitarle todo con slo un capricho, indiferentemente de su espritu de lucha o creencias no exista tal poder aparte de los Sellos de Comando.

Al estar tan concentrado en su duelo con Saber, no se dio cuenta de la amenaza secreta que se ocultaba en la fbrica abandonada a su lado hasta el final.

Usa todos los Sellos de Comando restantes, y haz que tu Servant acabe con su propia vida esa era la condicin requerida en el pergamino de Auto-Geis que Kiritsugu trajo. l demandaba a Kayneth usar todos los Sellos de Comando y destruir por completo a su Servant una completa retirada de la Guerra del Santo Grial.

Ah

Lgrimas carmines brotaban de los amplios ojos de Lancer.

Para l, sta era la segunda vez que era asesinado por su seor. Era precisamente porque Diarmuid ua Duibhne haba sido sometido a tal desdichado final que deseaba tan profundamente poder regresar a este mundo desde el Trono de los Hroes. Sin embargo, el final que recibi fue una repeticin de aquella tragedia slo experiment la desesperacin y desdicha una vez ms.

El Espritu Heroico mir hacia atrs suyo con ojos hmedos de sangre y lgrimas. Slo entonces, dos Masters salieron de la fbrica abandonada para presenciar su fin. Ellos eran Kayneth, sentado en su silla de ruedas con una mirada vaca e inexpresiva y otro hombre, quien se ergua sosteniendo al cuerpo comatoso de Sola en sus brazos. l era el verdadero Master annimo de Saber que vio en el castillo Einzbern.

Acaso t entonces

Postrado sobre un charco de su propia sangre, Lancer hizo su mayor esfuerzo para hablar con una dbil y afnica voz.

Deseas tanto la victoria?! Tanto deseas ganar el Santo Grial? Incluso dispuesto a pisotear mi nico deseo verdadero t, no tienes vergenza?!

Su belleza se retorca entre sangre y lgrimas, cambiando su aspecto en uno completamente diferente, smil al de un demonio. Lancer, olvidndose de todo excepto su odio, ya no distingua entre aliado o enemigo. Pensando en Kiritsugu, Saber y todas las dems cosas en el mundo, solt un rugido vengativo desgarrando su propio corazn.

Imperdonable Nunca se los perdonar! Ustedes, hombres muertos que son esclavos del prestigio, y han profanado la gloria de los caballeros que mi sangre manche sus sueos! Maldigo al Santo Grial! Maldigo sus deseos para que se conviertan en desastres! Cuando caigan en la sartn del infierno, no se olviden de m, Diarmuid ni de mi ira!

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Mientras iba gradualmente perdiendo su cuerpo material y desapareca como una nebulosa sombra, profera maldiciones hasta su ltimo final. Ya no era ms la gloriosa figura de un Espritu Heroico, sino nicamente un espritu malvado gritando su resentimiento. El Servant Lancer finalmente haba sido eliminado.

Enmudecido, Kayneth mir hacia el espacio vaco dejado por la desaparicin de Lancer. Tranquilamente, Kiritsugu deposit a Sola, quien segua profundamente dormida, sobre sus rodillas. Mientras Kayneth suavemente acariciaba el demacrado rostro durmiente de su amada, le pregunt a Kiritsugu con una dbil voz.

Entonces, tu atadura ha sido?

Ah s, est establecida. Ya me es imposible asesinarte

Kiritsugu lentamente retrocedi mientras sacaba un cigarrillo de su bolsillo y lo encenda tal vez, esa era la seal.

Por lo menos, para m.

Mientras Kayneth murmuraba en voz baja, Maiya Hisau, quien presenci todo desde las sombras muy lejos de all, silenciosamente jal el gatillo del rifle de asalto. Steyr AUG.

Kayneth y Sola fueron capturados por la mira de la lente de visin nocturna y fueron despiadadamente envueltos en una lluvia de municiones automticas. Para ambos, que haban perdido la proteccin del Volumen Hydragyrum y no tenan un Servant a su servicio, la lluvia de municiones de 5.56mlm de alta velocidad era una inexorable tormenta de muerte. Bajo el salvaje poder de las balas que tanto haban despreciado en el pasado, los cuerpos del mago y su prometida fueron despedazados y cayeron al suelo de concreto.

l slo dud de la autenticidad magia de Auto-Geis del pergamino, pero se olvid de la trampa escondida detrs del significado del importante contrato. Eso finalmente le arrebat el destino al genio mago.

Uuuu Ahhh!!

Tal vez Sola, quien muri de por las balas sin dolor, fue la ms suertuda. Trgicamente, incluso despus de haber sido despedazado y cado al suelo de su silla de ruedas, Kayneth todava segua respirando. Haba recibido muchas heridas fatales por todo su cuerpo y ya no tena esperanzas de sobrevivir. Sin embargo, aunque slo le quedaran algunos segundos de vida, seran unos segundos cruelmente largos de tener que pasarlos soportando el sufrimiento y la agona de la muerte.

Ahh Mata Mtame

Lo siento, ese fue un contrato que no puedo romper.

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Kiritsugu ignor los dbiles y suplicantes sonidos a sus pies, y respondi con una voz indiferente mientras exhalaba el humo que haba inhalado.

El sollozante sonido no continu mucho. Saber no soport seguir mirando y us su espada para quitarle la cabeza a Kayneth, terminando con su sufrimiento.

Al final, la espada del Rey de Caballeros no cumpli la promesa hecha con Lancer. Por el contrario, termin muy lejos de la fe y gloria, y fue manchada con la sangre del final del sufrimiento de alguien herido y sin salvacin.

Kiritsugu Emiya

Los iris azules ardan con un fuego fro. Esos no eran ojos acostumbrados a mirar amigos, ni tampoco era una mirada usada para enfrentar a camaradas en un sentido ms amplio. Idntica a cuando se enfrent a la locura de Caster y la arrogancia de Archer, era una mirada aguda como una hoja usada para penetrar a aquellos que ha reconocido como enemigos.

Finalmente lo entiendo ahora; eres un hombre sin morales. En un principio pens que incluso si nuestros caminos diferan, nuestras metas eran la misma, pero fui muy ilusa

Kiritsugu permaneci en silencio. No haba necesidad de responder. Eso era porque las acciones que haba presenciado Saber eran innegablemente malvadas.

Hasta ahora, haba credo en las palabras de Irisviel y nunca dud de tu personalidad. No obstante, incluso si un hombre como t dice ahora que va a salvar el mundo con el Santo Grial, no creer ni una sola palabra ms. Respndeme, Kiritsugu! Engaaste incluso a tu esposa? Cul es tu verdadero propsito para buscar el todopoderoso realizador de deseos?!

Kiritsugu a pesar de que sus ojos estaban en Saber como si demostraran irritacin, la boca que sostena un cigarrillo no pronunci una sola palabra. Era una mirada usada para observar a un perro salvaje ladrando. Meramente contena una separacin decisiva resignada a tratar de entenderse el uno al otro usando palabras desde el inicio.

Dentro del corazn de Saber, ya haba una resuelta y calma decisin que deca l debe morir.

Tal vez, al final, lo nico que restara entre ella y su Master sera enfrentarlo con su espada. Incluso si se le prohiba con los Sellos de Comando, esta obvia enemistad no poda ser alterada. Esa podra ser la mayor fractura en su grupo durante la Guerra del Santo Grial. Sin embargo, sin importar qu, mientras ella est con Kiritsugu Emiya, es muy probable que ella no sea capaz de obtener el Santo Grial que verdaderamente desea.

Incluso si mi espada gana el Santo Grial, si he de confiarte el Grial a ti, entonces yo

Ese ocaso sobre Camlann atraves sus ojos. El deseo escondido en su corazn hizo que sus palabras se debilitaran al final.

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Un sonido detrs suyo interrumpi la dolorosa pausa.

Respndeme, Kiritsugu. Sin importar qu, esta vez tienes la obligacin de darme una explicacin.

Incluso Irisviel, que confiaba plenamente en su esposo, no pudo evitar levantar la voz en su pregunta.

Distinta de Saber, ella conoca completamente la forma de pensar de su esposo y lo entenda. Sin embargo, haba una vasta diferencia entre sus creencias expresadas en palabras y sus abrumadoras acciones ante sus ojos.

Ella ya haba tenido una fra premonicin que deca podr ser que? en su corazn cuando Lancer le pregunt sobre la prometida de Lord El-Melloi un tiempo atrs. Aun as, la consciencia en su corazn negaba esa probabilidad. Sin importar qu, que l llegase a tal punto

Al final, incluso como su esposa, Irisviel subestim la crueldad de Kiritsugu.

Hablando de eso, esta es la primera vez que presencias mi mtodo de eliminacin, Iri.

Rompiendo el silencio que haba mantenido hasta ahora, Kiritsugu respondi con una seca voz. La dbil y fra mirada que le daba a Saber se encoga y retroceda con vergenza mientras volteaba hacia Irisviel.

No, Kiritsugu. No me hables a m, dselo a Saber. Ella necesita discutirlo contigo.

No, no tengo nada de qu hablar con ese Servant. No hace falta decir nada a un asesino dominado por la gloria y el honor.

Temerariamente pronunci palabras que insultaban a Saber mientras mantena una discusin frontal con Irisviel. Por supuesto Saber no se quedara tranquila.

No te atrevas a humillar a la caballera en frente mo, bestia!

Incluso enfrentado a los iracundos gritos del Rey de Caballeros, quien elevaba sus cejas con furia, Kiritsugu permaneca firme como una piedra. An no le prestaba atencin a Saber, en cambio con su mirada puesta en su esposa. Sin embargo, esta vez, finalmente empez a soltar sus palabras interminablemente.

La caballera no puede salvar al mundo. As fue en las historias pasadas, y as ser en el futuro. Esos tipos promovan la idea de que haba una diferencia entre el bien y el mal cuando se trataba del mtodo de combate, y actuaban en el campo de batalla como si tuviesen orgullo. Es por culpa de esos hroes que las eras fueron cubiertas con esa ilusin, cuntas juventudes crees que fueron engaadas por la gloria de tal coraje, desangrndose hasta su muerte?

Esa no es una ilusin! Incluso si se trata de una cuestin de vida o muerte, siempre que se trate de las acciones humanas debe haber reglas y creencias que no permitan violacin alguna. La

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justicia no se debe perder! De otro modo, las interminables llamas de la guerra una vez ms convertirn este mundo en un infierno al final!

Saber refut justamente. Sin embargo, Kiritsugu resopl sarcsticamente.

Lo ves, justo as tal y como dijiste, Iri. Este Espritu Heroico se atreve a creer que el campo de batalla es mejor que el infierno.

Qu absurdo! Sin importar en qu era, el campo de batalla siempre ha sido un autntico infierno. En el campo de batalla, no hay lugar para la esperanza. Lo que yace all es slo la fra desesperacin y el pecado denominado victoria, construido a partir del sufrimiento de los vencidos.

Todos aquellos que se encontraron all admitieron ampliamente la maldad y la estupidez de ese acto llamado guerra. Mientras existan personas que no se arrepientan y no lo consideren como el ms malvado tab, entonces el infierno interminablemente aparecer en el mundo.

Para Saber, que slo conoca al extremadamente cruel e insensible Kiritsugu, era la primera vez que vea el otro lado de Kiritsugu Emiya un hombre casi aplastado por una infinita angustia y depresin, su monlogo era cercano a la lamentacin.

Sin embargo, los humanos no se dieron cuenta de la verdad, sin importar cun altas se volvieran las montaas de cadveres. Y eso es porque sin importar la era, los valientes y temerarios grandes hroes siempre han deslumbrado los ojos de las multitudes con sus esplndidas leyendas heroicas.Es por culpa de esas lamentables acciones de esos idiotas y su negacin a admitir que el derramamiento de sangre en s es maldad pura, que la esencia de los humanos ha permanecido igual desde la Edad de Piedra!

Quien era el objetivo de esos ojos inundados de ira eso ya era obvio sin necesidad de aclararlo.

Desde el da que las llamas de la guerra iniciaron en la tierra de Fuyuki, Kiritsugu probablemente empez a ver las brillantes figuras de los Espritus Heroicos ante l, aquellos que se enorgullecan de su coraje y resolucin, con esa intolerante ira en su corazn.

Aquellos que desplegaban tal herosmo, y aquellos que anhelaban tal herosmo; la ira dirigida hacia ellos no tena lugar adnde ir era un odio hacia el entero concepto de Espritus Heroicos que fueron creados a partir de las oraciones de los hombres.

Entonces Kiritsugu, la humillacin hacia Saber era a causa de tu odio hacia los Espritus Heroicos?

Cmo podra serlo? Nunca mezclo emociones personales. Necesito obtener el Santo Grial y salvar al mundo. Slo estoy usando el mtodo ms apropiado en el proceso de la lucha para ese fin.

De haber peleado como haba planeado antes, y de haber capturado a Sola y eliminado inmediatamente, entonces Lancer, cuyo suministro de prana se habra detenido, naturalmente

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desaparecera. Sin embargo, lo que Kiritsugu emple fue una estrategia que remova completamente la posibilidad de que un Servant, habiendo perdido a su Master, forme un contrato con alguien ms para regresar al campo de batalla. Y basndose en el resultado de la batalla contra Caster, l predijo que Kayneth, protegido por la iglesia de Fuyuki, obtendra Sellos de Comando Extra. Por lo tanto, prepar una trampa tan complicada y retorcida.

Haciendo uso del Sello de Comando del Master enemigo para eliminar al Servant, y luego as al Master, una completa remocin de obstculos durante ese tiempo, lo que requera de Saber no era vencer sobre Lancer, sino distraer su atencin mientras Kiritsugu convenca a Kayneth, actuando slo como un seuelo.

El mundo es y ser, la naturaleza humana como siempre, es imposible eliminar las batallas. Al final, matar es un mal necesario. De ser as, es mejor hacerlo con la mayor eficiencia y con el menor costo, menor tiempo. Si quieres pensar en ello como algo sucio, bajo y corrupto, entonces hazlo. La justicia no puede salvar al mundo. No tengo inters en cosas como esa.

Saber record el final de Lancer, desapareciendo con sus ojos inundados de ira. Entonces, observ los trgicos restos del hombre y la mujer, colapsados en un charco de sangre, y la expresin de angustia grabada en sus rostros, y habl.

Incluso as, t

Mientras Saber estaba a punto de soltar sus pensamientos, sbitamente se dio cuenta de que su propia voz era ms suave y calma de lo que pens que sera. Ella se dio cuenta que sus complicadas emociones hacia Kiritsugu ya no eran su previa furia, sino que haban cambiado a una clase de lstima.

Es cierto, tal vez sea un hombre que deba ser compadecido.

No es l mismo quien necesitaba la salvacin, y no este mundo?

Kiritsugu Emiya, no s a qu clase de traiciones te has visto sujeto en el pasado ni por qu has cado en la desesperacin. Pero esa ira, esa lamentacin, son indudablemente cosas que aquellos que han perseguido la justicia poseen. Kiritsugu, en tu juventud debiste haber querido ser un hroe de la justicia. Debiste haber credo en ello y debiste haber querido convertirte en un hroe capaz de salvar al mundo ms que ningn otro no es as?

Hasta ahora, las nicas actitudes que Kiritsugu le haba mostrado a Saber eran completa indiferencia y un fro desprecio. Pero ahora, Kiritsugu habiendo odo el tranquilo cuestionamiento de Saber los ojos que haba puesto en su Servant mostraban otras emociones por primera vez.

Era una clera que pareca estar por desatarse.

El sonido de un carro interrumpi el silencio del amanecer. Entonces, el pequeo camin que Maiya Hisau conduca entr al patio de la fbrica abandonada con brillantes luces encendidas. Ella

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deba estar all para llevarse a Kiritsugu hacia Shinto despus de haber concluido su deber como tiradora.

Kiritsugu desprendi sus ojos de Saber y camin hacia el camin, sin siquiera voltear, abri la puerta del pasajero. Saber todava segua hablndole a sus espaldas. Haba algo que tena que decir sin importar qu.

Kiritsugu lo comprendes? Si cometes actos malvados a causa de tu odio hacia el mal, al final todo lo que quedar ser ms maldad. La furia y el odio que brotaron provocarn nuevas guerras una vez ms.

Enfrentado a las pesadas palabras de Saber, era como si Kiritsugu tuviera la intencin de darse vuelta y contestar sin embargo, cambi de opinin al final, y dijo mientras miraba hacia el vaco aire.

Detendr los interminables ciclos. Es por eso que necesito el Santo Grial.

Efectivamente, como si hablara consigo mismo, lo dijo en voz alta.

Usar este milagro para completar la revolucin de este mundo, la revolucin de todas las almas humanas. Har que la sangre derramada en la ciudad de Fuyuki sea el ltimo derramamiento de sangre de todos los seres humanos.

Para ello, si debo cargar con todos los males de este mundo eso no importa. Si con eso puedo salvar el mundo, entonces estar contento de recibirlos.

Kiritsugu solt la determinacin dentro de su corazn con tal calma y uniformidad que ni siquiera Saber pudo encontrar palabras para contestarle.

Incluso si su mtodo y caminos eran insoportablemente malvados su fe en buscar el Santo Grial era pura y desinteresada. Ella tena que admitir que si exista algn Master en la guerra digno de obtener el Santo Grial, entonces indudablemente sera Kiritsugu Emiya.

Sin palabras, Saber presenci la partida del camin que Kiritsugu manejaba. El primer rayo de amanecer brill a su lado. La oscura noche que convirti a Fuyuki en un reino demonaco haba terminado, y las calles una vez ms llevaban la mscara de ordinario bajo la luz del sol.

Kiritsugu ya se ha ido?

Irisviel?

Ya que Saber tuvo el tiempo para pensar en lo extrao de la pregunta, fue incapaz de detectar inmediatamente la extraez de Irisviel.

Esa vaga y vaca mirada, el rostro plido y el sudor cayendo de su frente como una catarata

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Ella probablemente se estaba esforzando para contenerse mientras estaba al lado de su esposo y pretenda que no suceda nada. Irisviel se desmay tan pronto como se relaj, y colaps como unamarioneta cuyas cuerdas han sido cortadas.

Aunque Saber inmediatamente corri a sostenerla, el extrao calor proveniente de su delgado cuerpo entre sus brazos la hizo darse cuenta de que Irisviel estaba en una condicin crtica.

Irisviel?! Resiste!

***

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Desde la resuelta y franca forma en la que Kiritsugu Emiya declar su determinacin fuertemente aquella maana, se poda ver que esas palabras eran verdades de su corazn sin falsedad alguna.

Pero lo que esas increbles, y ominosas palabras significaron al final Kiritsugu finalmente lo entendera claramente unos das despus.

En una desesperacin ms profunda que la misma desesperacin.

En un lamento ms profundo que el lamento mismo.

Fin Parte 04 ~ Acto 11 Volumen 03

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Traductores: Aster von Einsbern, Supermexicano, Gary y AlenafiEditor: Marck

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