La Vida Espiritual y La Perseverancia (Español)

8/9/2019 La Vida Espiritual y La Perseverancia (Espaol)

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LA VIDA ESPIRITUAL Y LA PERSEVERANCIA

Swami Paratparananda1

Sabemos bien que para lograr xito en cualquier empeo, profesino carrera, se necesita perseverancia. Esto es mucho ms cierto en la vidaespiritual, pues en sta no hay maquinaria o instrumentos que puedanayudar al ser humano. Sin embargo, la gente, especialmente en la pocaactual, espera tener los resultados de sus acciones de inmediato, o lo msrpido posible. La mayora de los que inician el camino espiritual no tienepaciencia, y por consiguiente, despus de practicar las disciplinas durante

algunos meses cuando ven que no pueden calmar su mente ni sussentidos, y que, por el contrario, stos se vuelven ms turbulentos queantes, se quejan de que no han podido hacer ningn progreso. Y muchasveces se preguntan si estn siguiendo el camino correcto, si despus detodo, Dios, las visiones y cosas por el estilo, no sern nada ms que ideasquimricas, ilusorias, sin sustancia alguna, provocadas por el ayuno y elresultante proceso metablico, de un cerebro afiebrado. En algunos estacondicin de vacilacin y duda puede ser pasajera, en cambio, en otrospuede engendrar reacciones serias, como abandonar el camino y hastaconvertirse en enemigos de la religin, diciendo que en ella no hay nadaque pueda ayudar al hombre, sino que es, ms bien, un impedimento a suprogreso en este mundo. Este estado de duda y vacilacin puede llegar acualquier aspirante y no tan slo a los principiantes. Hasta los que hanseguido el sendero espiritual con todo esmero durante un largo tiempo,pueden llegar a sentirse de esta manera, pero en su caso esa vacilacinno dura mucho. Para ellos ese estado es la noche escura del alma, enque tienen que luchar por lograr un poco de la luz de Dios; saben quepronto va a amanecer y se va a acabar la oscuridad, y que aunque es unaetapa dolorosa deben pasar por ella.

Vamos a analizar por qu sucede esto. Qu es lo que el hombreespera de la religin o de llevar la vida espiritual? Si indagamos bienprofundamente en los motivos que mueven al ser humano a actuar,hallaremos que en la raz de toda actividad se encuentra el deseo por lalibertad y la felicidad. Pero cada uno cree que consiguiendo tal o cualobjeto tendr la felicidad que busca. Entonces se esfuerza por alcanzaresa meta u obtener ese objeto. Sin embargo, no siempre ocurre que seencuentren con experiencias agradables al alcanzar el objeto deseado.Muchas veces se descubre que ste careca de las cualidades del objetoideal y que no era lo que buscaba. Desilusionados de esta manera los

1 Swami Paratparananda, fue Editor de la revista en ingles Vedanta Kesari (1962-1967) y lder espiritual del Ramakrishna

Ashrama, Buenos Aires, Argentina (1973-1988).

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sabios de antao se dieron cuenta de que la libertad y la felicidadpermanentes no pueden hallarse en lo externo, y dirigieron su bsquedahacia adentro, apartndose totalmente de los objetos del mundo. Comoresultado de esta bsqueda alcanzaron su propio espritu y descubrieronque la felicidad eterna estaba en s mismos, a pesar de que la habanestado buscando en todas partes, como ocurre con el almizclero, el quepercibiendo el aroma del almizcle, corre a todos os lados para obtenerlosin resultado y al final, cuando, agotados todos sus esfuerzos y cansado,se acuesta para descansar, descubre que el perfume sala de su propiovientre, y nunca haba estado fuera de l.

El cuadro que pintan las escrituras del hombre que ha realizadontimamente su propio Ser es maravilloso. Este Atman - dicen - es nico,ya que interpenetra todo y es el alma de todos los seres, pero brilla dedistintas maneras a travs de los distintos objetos y seres, y el que loexperimenta ntimamente como su propio Ser, slo ese sabio goza de labienaventuranza eterna, y ningn otro. Ese Atman es eterno entre loperecedero, la Conciencia de los conscientes y es el nico que otorga atodos, los frutos de sus acciones, y slo al que lo ve manifestado en sucorazn, a ese sabio pertenece la paz eterna, y a ningn otro. Dicentambin: El conocedor del Atman va ms all del pesar. Y tambin, Elconocedor de Brahman alcanza lo Supremo.

Llegando a saber de ese estado tan lleno de promesas, es naturalque algunos intenten lograrlo, y, con este propsito, antes o despus debuscar la felicidad en otras partes, recurran a la religin. No a la religin

en el sentido que el hombre comn la comprende, es decir, creencia enalgunos dogmas y credos, seguir ciertas normas y cosas por el estilo, sinoa algo que hable de un Ser superior no limitado por ninguna de esascosas, y a algo que ensee los mtodos para alcanzar ese Ser.

La vida espiritual tampoco consiste en adquirir conocimientolibresco ni en saber interpretar bien las escrituras, sino en dirigir la mentehacia Dios. Sri Ramakrishna dice al respecto: Qu vas a aprender deDios por los libros? Mientras te encuentras lejos del mercado slo oyes unmurmullo ininteligible. Pero es muy diferente cuando realmente ests all.Entonces oyes y ves todo con claridad. Oyes a la gente decir: Aqu estn

sus papas. Llvelas y pgueme. Desde la distancia slo oyes el ruidosordo del ocano. Acrcate y vers muchos barcos navegando por aqu ypor all, pjaros que vuelan y olas que rompen. Y concluye SriRamakrishna - No se puede obtener un verdadero sentir por Dios con elestudio de libros. Este sentimiento es algo muy diferente de lo que seaprende de las escrituras. Alcanzar a Dios, verlo, sentir Su presenciantimamente, es religin, dice Swami Vivekananda. Y los que realmentequieren ver a Dios deben trabajar duramente hasta llegar a la meta, puesmuchos son los peligros que estn en el camino: las tentaciones delmundo, las pasiones y la mente veleidosa. Cundo podemos alcanzarlo?

Sri Ramakrishna contesta: Dios se revela al devoto que se siente atradohacia l con la fuerza reunida de estas tres atracciones: la atraccin que

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el hombre mundano siente por las posesiones materiales, la atraccin deuna madre por su hijo, y la atraccin de una fiel esposa por su marido. Siuno se siente atrado hacia Dios con la fuerza combinada de estas tresatracciones, entonces puede alcanzarlo.

Ahora bien, muchas veces ocurre que la gente que se interesa porla vida espiritual por la descripcin del estado maravilloso que se logra alalcanzar a Dios, encuentra que llegar a ese estado no es fcil; querequiere enorme esfuerzo y desapego total. Como consecuencia, lamayora de esa gente se desanima y se aparta del camino, ya sea sbitao gradualmente en diferentes etapas de su aprendizaje. Hay una historiaque ilustra cmo es la mentalidad del hombre comn: Cierta vez unaspirante fue a ver a un maestro espiritual con la intencin de ingresar ensu monasterio. Cuando se acerc al maestro y le pidi que le permitieravivir con el, ste le dijo: "Un discpulo tiene muchos deberes que cumplir."Y seguidamente le dio una larga lista de trabajo que dejaba poco tiempopara el descanso. Entonces el aspirante le pregunt: "Seor, y cualesson los deberes del maestro?" "Recibir servicios de los discpulos, darconsejos a la gente que se le acerca y cosas semejantes," contest elGur. "Entonces hgame enseguida un Gur." dijo el aspirante. Puedeque sea un mero cuento, pero detrs de este relato est la realidad, esdecir, la actitud humana. Por lo general, el ser humano no quiereesforzarse, quiere tener todo as de pronto, salvo en aquellos trabajosque realmente le interesan, y en que los resultados son ms tangibles. Espor eso que corre detrs de los milagros, o mtodos que prometen darle

resultados en muy corto periodo. Lo triste del caso es que hay quienescreen que ya han logrado la liberacin, con slo haber visitado a personasque decan otorgala a cualquiera que se les acercaran. Puede esto sercierto? Sri Shankaracharia en el Vivekachudamoni aclara esta duda dandodos ejemplos: As como la enfermedad no se cura al slo pronunciar elnombre del medicamento, sino que se debe tomarlo, del mismo modo, sintener la experiencia directa de Brahman uno no se libera, por el meropronunciar la palabra Brahman. Sin destruir a los enemigos y sin poseerla riqueza de todo el territorio circunvecino nadie se hace emperador porel solo hecho de repetir 'soy el emperador'. Del mismo modo, sin hacer

desaparecer de la mente el mundo objetivo y sin conocer la verdad delSer, cmo puede haber liberacin repitiendo solamente la palabraBrahman? Ya estamos bastante ilusionados; no agreguemos a nuestrasvidas ms engaos de los cuales no hay salida. No hay atajo paro lavisin de Dios. Hasta que no limpiemos nuestra mente de todos losdeseos mundanos, no podemos esperar que el Seor se revele en nuestrocorazn. Esta es la declaracin de todos los grandes maestrosespirituales.

Ahora vamos a seguir con nuestra indagacin acerca de las causasdel alejamiento de la gente del sendero espiritual. Antes de todo, como ya

hemos visto, est la holganza que hace estimar como demasiado esfuerzodel hombre. Despus, detrs de los esfuerzos no est el debido anhelo,

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no est la sinceridad del propsito. No decimos que todos comiencen as,pero existe toda posibilidad de que uno pierda la firmeza con que empezsu bsqueda de Dios. Mantener el entusiasmo con que uno comienza unempeo, a pesar de obstculos enormes como montaas, es un asuntopara el que muy pocos corazones estn capacitados. Esto es mucho mscierto cuando el resultado no es palpable, no es perceptible por lossentidos. Es por eso que muchos abandonan el camino cuando fracasanen sus primeras tentativas. La tercera razn es el gran contraste queexiste entre la vida religiosa y la vida cotidiana de hoy en da. Es comohablar de polos opuestos; una ensea abnegacin, veracidad, y cmozambullirse en el Espritu; la otra reclama comodidades materiales,satisfaccin de los deseos mundanos y cosas semejantes; y porconsiguiente, induce a uno a cometer errores una y otra vez. El querealmente busca a Dios y quiere llegar a l, no puede servir a dos amos,como dice Jess. Los Upanishads tambin declaran: "Cuando todos losdeseos, que moran en el corazn humano, estn aniquilados, entonces elmortal se vuelve inmortal aqu y de inmediato, y goza de labienaventuranza de Brahman." Y agregan: "Se cortan los nudos delcorazn, se desvanecen todas las dudas y son destruidos todos loskarmas (resultados de las acciones), nicamente cuando uno ve al SerSupremo." Vemos as que el que quiere llegar a Dios debe, tarde otemprano, desarrollar el desapego a las cosas del mundo. En otra ocasinhemos explicado cmo este desapego no significa ni huir de los deberes nivolverse duro de corazn.

Hemos hablado de los que se apartan por completo de la vidaespiritual debido a las distintas causas. Pero, hay quienes cambian cadatanto su sendero al encontrar dificultades o impedimentos en el trayecto,y como consecuencia, no logran nada sustancial. Sri Ramakrishna,mediante un ejemplo, explica cmo se pierden en vano todos losesfuerzos de esas personas: "A la gente le encanta lo sensacional. Podissi dan con una piedra abandonan el lugar y comienzan en otro. Y si allhallan arena tambin abandonan el segundo lugar. Luego empiezan en untercero, y as continan. Cmo han de tener xito en conseguir agua, amenos que continen cavando persistentemente donde comenzaron?

Los sabios dicen que la religin otorga al hombre eternabienaventuranza y libertad. Pero no debemos confundir esa libertad yfelicidad con las mundanas. Un alma que ha asumido un cuerpo estsujeta a las limitaciones del cuerpo y ha de padecer los dolores yenfermedades; no puede evitarlo. Por consiguiente, la verdadera dichapuede existir slo en la Realidad intemporal y transcendental, que es laesencia del hombre. Afirma el Upanishad: "El Purusha, del tamao delpulgar, el Ser ms recndito, siempre mora en el corazn de los hombres.Uno debe separarlo del cuerpo con destreza as como se separa la mdulado la hierba munya. Concelo como Resplandeciente e Inmortal." Se

puede separar al Atman, o Purusha, o Ser, del cuerpo, mente y lossentidos por medio de las disciplinas espirituales como el discernimiento,

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desapego y autodominio; y para eso uno necesita infinita paciencia yperseverancia. Descuido y flaqueza son los grandes enemigos en elcamino. No se puede alcanzar a ese Atman ni por la riqueza, ni por otrosesfuerzos materiales. Lo que nos impide experimentar nuestro propio Seres nuestra inclinacin hacia los goces mundanos. Slo retirando nuestramente de esos objetos podemos llegar a Dios o sentir la presencia de laRealidad transcendental dentro nuestro.

Adems, es sabido cun fuertes son las atracciones de las cosas delmundo, cun hondo nuestra mente est sumergida en ellas; como unasolucin saturada, la mente no puede absorber nada ms de otra cosa.Este es esencialmente el caso de la gente de hoy en da. Dios no tiene unlugar en su programa diario. Con la mente en estas condiciones es quedebemos comenzar a trabajar. Por supuesto, hubiera sido mucho mejor situviramos una mente pura. Pero no todos somos afortunados en esteaspecto. Por otra parte, no se puede lograr la pureza mental con slodesearlo, sino con el cultivo de cualidades tales como desapasionamientoy renunciamiento, y el que hace a los objetos del mundo la meta de suvida nunca puede llegar a tener pureza de mente. Sri Ramakrishna deca:"Los rganos internos se dominan en forma natural por medio de ladevocin. A medida que el amor a Dios crece, los placeres de los sentidosparecen ms y ms desabridos." Las atracciones del mundo pierden suhechizo para la persona que se mueve hacia Dios. Debemos movernoshacia l, llamndolo con un corazn anhelante. Se puede preguntar:"Cmo podemos con nuestra mente tan manchada llamar a Dios, la

Pureza misma, y pedirle que se revele all?" Pero entonces, cundo se vaa comenzar? Cmo se purificar nuestra mente? Si se aguarda hasta quetodas las impurezas de la mente hayan desaparecido, antes de llamar aDios, entonces suceder como con la persona que fue al mar parabaarse y se qued esperando a que las olas se calmaran; ni las olascesaron ni el hombre pudo tomar su bao. Por eso es menester quecomencemos a clamar al Seor en el mismo momento en que sintamosque existe un Ser eterno, quien siendo nuestro Padre, Padre, Amigontimo o Alma de nuestra alma, va a liberarnos de esta rueda denacimiento y muerte, a pesar de todas nuestras faltas, si slo lo

deseamos con sinceridad.Hay un dicho snscrito: "Uno debe practicar las disciplinasespirituales aun cuando es joven, pues la vida es tan incierta como lagota de agua sobre una hoja de loto." Siguiendo ese consejo debemoscomenzar las prcticas lo antes posible, porque si dejamos llevarnos porlas tendencias innatas y corremos detrs de los objetos del mundo,entonces esas inclinaciones se fortalecern y nos atarn ms fuertementeal mundo objetivo. Los surcos que esas impresiones sensorias dejarn enel cerebro se profundizarn y se ensancharn; como consecuencia, nosharn sus esclavos para siempre, sin esperanza de redencin. Como ya

hemos dicho, los dos senderos de la vida son diametralmente opuestos,por consiguiente, ms lejos uno avanza en el sendero mundano ms duro

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tendr que trabajar para ir hacia Dios. Desgraciadamente, la juventud noes permanente, el hombre envejece da a da, y va perdiendo su fuerzafsica y tambin sus facultades. Se la hace muy difcil, entonces, aplicarsea una nueva clase de vida, adoptar un nuevo camino. Ser, a pasar de siimpelido por la fuerza de los viejos hbitos a seguir el sendero yarecorrido. Sabemos cun fuertes son los hbitos; casi imposibles de servencidos. Por lo tanto, antes que ellos se conviertan en nuestranaturaleza, debemos descartarlos por el mtodo del discernimiento. Deun modo u otro debemos comenzar a recorrer esa senda elevada y,luego, con toda tenacidad, adherir a ella; slo entonces vendrn losresultados. Pero el aspirante tiene que esforzarse con intrepidez paraalcanzar la meta sin flaquear ni importarle el tiempo que le lleva parallegar a ella. Hay un canto bengal que dice: 'Zambllete hondo, ohmente, tomando el nombre de Kali, en el ocano de tu corazn, dondeyacen muchas gemas. Pero no creas nunca que el fondo del mar carecede ellas si resultan infructuosas tus primeras tentativas; con firmedeterminacin y autodominio sumrgete y brete camino hacia el reino dela Madre Kali. En las profundidades del ocano de la celestial Sabidurayacen las maravillosas perlas de la Paz, y t mismo puedes juntarlas, sislo tienes amor puro y cumples con los mandamientos de las Escrituras."Con la perseverancia uno obtiene todo lo que le da paz.

La gente reza a Dios por varias razones: algunos desean riquezas,otros, hijos, estos otros, ayuda para vencer las aflicciones opreocupaciones, y muy pocos lo quieren por l mismo. Sri Krishna declara

en el Bhagavad Guita: "Oh Aryuna, cuatro clases de personas, que son degran mrito Me adoran a M: los que se encuentran en dificultades, losque quieren saber de M, los necesitados, y el hombre de Conocimiento.Entre ellos, este ltimo, estando siempre unido a M y teniendo unadevocin incambiable, sobresale. Yo soy muy querido para l y l esquerido por M." No hay duda que los que toman el nombre de Dios, creenen Su existencia y le rezan, son gente con acciones meritorias a sucrdito, pero el hombre que no quiere saber nada sino de Dios, es muyquerido por el Seor. Por qu? Porque la primera y tercera clase depersonas mencionadas por Krishna quieren a Dios como un medio para

satisfacer sus necesidades. La segunda clase slo es de indagadores, quequieren saber si Dios existe o no. Pero, el hombre de Conocimiento loquiere por l mismo, lo quiere como el soplo de su vida. Slo aquellaspersonas que alcanzan ese estado, adoran a Dios en el verdadero sentidode la palabra.

Un verso snscrito aconseja: "Volvindose como Dios uno debeadorarlo." Dios es pureza misma; por eso cuando la mente de uno sevuelve pura como la misma pureza, entonces se puede decir que laadoracin a Dios por esa persona es verdadera, y es de mucho valor.Siendo esta la condicin tenemos que preguntarnos qu derecho tenemos

para quejarnos que no hayamos logrado nada, que Dios no escuchanuestras plegarias y cosas semejantes. Hacemos nuestra parte del

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trabajo y dejamos que Dios se ocupe del resto.Y cmo purificar esta mente manchada? Mediante el recuerdo

constante de Dios. Sri Ramakrishna dice: "Agrrate de los pies del Seorcon una mano mientras con la otra haces tu trabajo en el mundo, ycuando ests libre de tus obligaciones sete a l con tus dos manos." Esees el mtodo que todos pueden tratar de adoptar en su vida diaria, aunen el medio de sus mltiples deberes.

Este mundo es un campo de batalla donde cada uno tiene queluchar por s mismo. As como el alimento tomado por otro no nos nutre,as como el remedio ingerido por otra persona no cura la enfermedad delque la padece, as mismo los esfuerzos hechos por otros no van abeneficiarnos espiritualmente. Si queremos progresar en el senderoespiritual, debemos seguir con constancia las prcticas adecuadas anuestro temperamento y capacidad. Se puede preguntar: "No ha habidopersonas que han tomado el sufrimiento de los dems y los hanliberado?" Cuntos puedan hacerlo? Solamente las Encarnaciones deDios y sus apstoles estn capacitados para eso, no otros. Y lasEncarnaciones vienen al mundo muy de vez en cuando. Aun as cuntosrealmente llegan a ponerse en contacto con tales personalidades,cuntos toman refugio a sus pies? Cuntos los reconocen? Sri Krishnaexpresa en el Bhagavad Guita: "Gente de poca comprensin, sinconocerme como el Seor del universo, Me menosprecian a M, que hetomado forma humana." Muy pocos, en verdad, son capaces de reconoceruna Encarnacin durante su vida terrenal. No poseemos los ojos divinos,

ni aquella pureza de la mente que puede revelar las cosas como son. Enesas circunstancias el nico modo que le queda a uno es luchar y abrirsecamino y salir de este laberinto por fuerza del trabajo. La prcticaincesante de las disciplinas espirituales y el recuerdo constante de Diosson los nicos mtodos por los cuales uno puede superar sus defectos.

Sri Ramakrishna aconsejaba a sus discpulos: "Estableced algunarelacin con Dios, como por ejemplo, la de un servidor, la de un hijo, unamigo, u otra cualquiera que convenga a vuestros temperamentos.Hacedlo vuestro." Todas estas actitudes las conoce casi toda humanidad.Cunto no ama una madre a sus hijos! Cuando los nios se encuentran

enfermos, la madre sacrifica su sueo, comida y otras comodidades paraatenderlos, y aun cuando estn sanos trata de brindarles todo el confortode que es capaz. Uds. seguramente deben tener amigos, verdaderos,cuya presencia les llena de alegra, y a quienes ansan a ver. Tambin,hay servidores fieles, a quienes no les importan las palabras o tratosduros ocasionales del amo, pues saben que ste los quiere y que los tratado esta manera para su bien. Lo que necesitamos es cultivar una u otrade estas actitudes para con Dios, y desarrollar amor por l. Tambin, unopuede seguir el sendero de conocimiento o de yoga. "La conclusin final -afirma Sri Ramakrishna - es que, cualquiera sea el camino que sigas, el

yoga es imposible a menos que la monte se aquiete. La mente de unyogui est bajo su dominio; y no l bajo el dominio de su mente. Cuando

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la mente est quieta, el prana (fuerza vital) deja de funcionar. Entoncesse logra kumbahaka (retencin de la respiracin). Otro puede obtener esemismo kumbahaka por medio de bhaktiyoga: el prana deja de funcionartambin por medio del amor a Dios." As pues, vemos que por cualquiersendero que uno siga llega a ver al Seor, o al Ser Supremo, si slo sepersiste con intrepidez hasta el final.

No tenemos que sentirnos desamparados mientras recordemos queexiste Uno que nos ha trado al mundo y que, morando en nuestrocorazn, nos cuida. Quizs sintamos miedo de que l est observndonoscuando cometemos errores; pero eso miedo no es malo. Porque estocontendr nuestras inclinaciones viciosas y as ayudar a limpiar nuestramente. En verdad nada escapa a Su observacin, nada est fuera de Sualcance, pues l es el Espritu Interno de todos nosotros. Entonces,debemos temblar, gemir y romper a llorar temiendo la ira del Seor? Porsupuesto, debemos estar preparados para cosechar el fruto de nuestrasacciones, buenas o malas. El mero llorar y lamentarnos no va aayudarnos: a menos que corrijamos nuestros hbitos viciosos. Dios, comouna bondosa y cariosa madre perdona nuestras faltas y nos brindafuerza para aguantar la carga de nuestras acciones, cuando sta caesobre nosotros. Y cuida que en esos momentos no zozobremos en el marde la desesperanza.

Adems, este llamar a Dios con perseverancia y anhelo nos capacitaa mantenernos firmes ante todos los trastornos y dificultades. He aqu uncanto que ensea como debemos clamar a Dios:

Clama a tu Madre Shyama con verdadero clamor, oh mente ma.Y cmo puede Ella mantenerse alejada de ti?Cmo puede Shyama no aparecer?Cmo puede tu Madre Kali quedar apartada de ti?Oh mente ma, si tienes fervor, llvale una ofrenda de

hojas de bel y flores de hibisco;Pon a Sus pies tu ofrendaY mezcla con ella la fragante pasta de sndalo del Amor.

"El anhelo - declara Sri Ramakrishna - es como la rosada aurora.Despus de la aurora sale el sol. El anhelo es seguido por la visin deDios." Pero, ese anhelo no viene si no perseveramos con nuestrasprcticas.

Ahora vamos a ver qu clase de perseverancia se necesita paraalcanzar la meta. Sri Ramakrishna ilustraba esto con algunos ejemplos:"Mientras haya fuego bajo la olla, la leche en ella hierve y se levanta,pero tan pronto como se quita el fuego la leche queda quieta; del mismomodo el corazn del nefito bulle de entusiasmo mientras contine consus ejercicios espirituales." Si los deja aunque sea por un corto perodo, le

costar mucho reanudarlos. "Aquel que viene de familia de labradores nodeja de cultivar la tierra aunque no llueva durante doce aos; por el

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contrario, un comerciante que acaba de dedicarse a la agricultura sedesanima a la primera sequa. Asimismo, un verdadero creyente jams sedescorazona aunque no logre ver a Dios a pesar de haber llevado todauna vida de intensas prcticas." La gente que va a pescar sabe cuntotiempo tienen que esperar, a veces, antes de que un pez trague elanzuelo; pasa lloras enteras con paciencia aguardando un pez grande. Undevoto, que quiere ver a Dios, debe tener esa paciencia y perseverancia.Hay un verso en el Upanishad: "Este Atman no puede ser alcanzado por eldbil." Aqu "dbil" no solamente se refiere a la debilidad fsica sinotambin a la del corazn. El que se asusta o se desanima cuandoencuentra que no hace ningn progreso en su camino, no puede llegar ala meta.

Vemos as que sin perseverancia no se logra nada, ya sea de estemundo o del mundo espiritual, y los que persisten y perseveranno obstante todos los obstculos y contratiempos al final sonrecompensados.

Que Dios nos otorgue esa bendita virtud de perseverancia para quepodamos, por Su gracia, verlo antes de partir de este mundo!

La Vida Espiritual y La Perseverancia (Español)

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