La Técnica de La Tortuga Para Disminuir Las Conductas Disruptivas
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UNIVERSIDAD DE
HUÁNUCO
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN Y HUMANIDADES
PROYECTO DE TESIS:
INFLUENCIA DEL JUEGO EDUCATIVO LA TORTUGA EN LA DISMINUCIÓN DE AGRESIVIDAD EN LOS ESTUDIANTES DE 5
AÑOS DEL NIVEL INICIAL DE LA I.E.
ALUMNA: IRIS
TINGO MARÍA – PERÚ
2015
ÍNDICE
CAPÍTULO I
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
1.1 DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA…………………………………………………………. 05
1.2 FORMULACIÓN DEL PROBLEMA……………………………..………………………. 08
1.3 OBJETIVOS GENERALES Y ESPECÍFICOS …………………………………………… 08
1.3.1 Objetivo General………………………………………………………………. 08
1.3.2 Objetivos Específicos……………………………………………………..….. 08
1.4 JUSTIFICACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN …………………………………………….. 09
1.5 VIABILIDAD O FACTIBILIDAD………………………………………………………………. 09
CAPÍTULO II
MARCO TEÓRICO
2.1 BASES TEÓRICAS…………………………………………………. 10
2.2 ANTECEDENTES ………………………….……………………….. 51
2.3 DEFINICIÓN DE TÉRMINOS BÁSICOS ………………………… 58
2.4 HIPÓTESIS…………………………………………………………. 58
2.5 VARIABLES………..………………………………………………. 59
2.5.1 Variable independiente …………..……………………………. 59
2.5.2 Variable dependiente …………………………………………… 59
2.6 CUADRO DE OPERACIONALIZACIÓN DE VARIABLES……….. 60
-2-
CAPÍTULO III
MARCO METODOLÓGICO
3.1 MÉTODO Y DISEÑO………….……………………………………… 61
3.2 TIPO Y NIVEL DE INVESTIGACIÓN…………………………….... 61
3.3 POBLACIÓN Y MUESTRA………………………………………….. 61
3.4 TÉCNICAS, INSTRUMENTOS Y MATAERIALES……………….. 62
3.4.1 Para la recolección de datos …….……………………………… 62
3.3.2 Para la presentación de datos.………………………………….. 62
3.3.3 Para el análisis e interpretación de los datos. ..………………... 63
CAPÍTULO IV
ASPECTOS ADMINISTRATIVOS
4.1 CRONOGRAMA ………….…………………………………………… 64
4.2 RECURSOS HUMANOS Y FÍSICOS …..……………………………. 65
4.3 PRESUPUESTO Y FINANCIAMIENTO…..………………………… 65
BIBLIOGRAFÍA
ANEXOS
-3-
CAPÍTULO I
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
I.1 DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA.
Los maestros y maestras en el Perú estamos experimentando que la indisciplina y la
violencia están aumentando dentro de las aulas. Nuestros estudiantes conversan, gritan,
se distraen y hacen desorden con sus compañeros, mientras hablamos. Queremos
dialogar y esto se hace difícil. La violencia se expresa de múltiples formas en las
escuelas, desde la sutil agresión psicológica hasta la cruel agresión física.
Los medios de comunicación nos informan con frecuencia, situaciones de violencia en
las instituciones educativas. Actos de violencia que adquieren tintes dramáticos:
profesores que son agredidos por sus alumnos o por los padres de éstos; directores que
son desalojados por los padres a viva fuerza; crueldad en las relaciones entre los
propios alumnos; acoso sexual de profesores, etc.
Cuando se pregunta a los estudiantes ¿cuáles son los maltratos que se dan en la
institución educativa y en el aula?, responden: insultar; hablar mal de los compañeros;
poner motes; esconder las cosas; aplicarles la ley del hielo; ignorar al compañero,
excluirlo del grupo; amenazar para meter miedo; robar objetos propiedad de los
compañeros; romper cosas; pegar; acosar sexualmente; obligar a realizar actos contra la
voluntad y amenazar con armas.
El tema de la violencia en las instituciones educativas, desde las aulas, debería ser una
de las prioridades en la preocupación del estado, las familias y de los docentes.
En nuestro país, existen diversas investigaciones relacionadas con el comportamiento
escolar ligado a los valores familiares, que plantean que el comportamiento escolar que
muestra el estudiante en las aulas tiene mucho que ver con los valores familiares
practicados en sus hogares.
También existen problemas de violencia escolar. Se manifiestan frecuentemente, son
una realidad cotidiana en nuestras aulas, mostrándose de manera recurrente. Otros son
-4-
los problemas de disciplina y convivencia, que llegan a angustiar al profesorado, desde
los primeros niveles de la educación.
En nuestra región Huánuco, este problema no está ausente en nuestras aulas; es por esta
razón que muchos docentes muestran su gran preocupación por mejorar los
aprendizajes de nuestros estudiantes y asimismo el comportamiento de éstos en las
aulas, ya que es indispensable la presencia de conductas adecuadas de los estudiantes
para generar buenos aprendizajes.
La preocupación de dar solución al comportamiento inadecuado que presentan los
estudiantes, ha motivado a realizar diversas investigaciones en los últimos años que ha
permitido acumular importante evidencia empírica acerca de las relaciones entre el
comportamiento escolar y diversos indicadores de desarrollo. En las últimas décadas, se
ha incrementado los estudios que tratan de explicar el comportamiento escolar a través
de la disciplina en las aulas, aunque se trata de una antigua aspiración de los/as
educadores/as, este concepto se ha sentido con más fuerza en los últimos años,
sustentando diversas propuestas reflexivas sobre esta situación problemática
En el caso de la Institución Educativa ………. Esta realidad no es ajena se observa,
enfrentamiento entre los niños, incidiendo en el mal comportamiento entre pares,
agresividad física y verbal, deficiente práctica de valores, etc. Esta situación
problemática se registra en el Proyecto Educativo Institucional concretamente en el
diagnóstico institucional constituyendo una debilidad que tiene que ser superada en el
marco de una educación en valores.
El comportamiento escolar es fundamental para que las acciones educativas se
desarrollen en forma adecuada y es necesario revertir la situación planteada a través de
un plan de acción haciendo uso de estrategias de tipo afectivo con estudiantes del nivel
inicial de la institución arriba mencionada.
-5-
I.2 FORMULACIÓN DEL PROBLEMA
Problema General
¿De qué manera influye la aplicación del juego educativo “La tortuga” en la
disminución de agresividad en los niños y niñas de la Institución Educativa Inicial N°
089 del Centro Poblado Menor Ricardo Palma de Tingo María?
Problemas específicos
¿En qué medida influye la aplicación del juego educativo “La tortuga” en la
disminución de la agresividad física en los niños y niñas?
¿En qué medida influye la aplicación del juego educativo “La tortuga” en la
disminución de la agresividad en los niños y niñas?
I.3 OBJETIVOS GENERALES Y ESPECÍFICOS
Objetivos generales
Determinar la influencia que tiene la aplicación del juego educativo “La tortuga” en la
disminución de las conductas agresivas de los estudiantes
Objetivos específicos
- Identificar la influencia de la aplicación del juego educativo “La tortuga” en la
disminución de la agresividad física de los niños y niñas de la Institución
Educativa Inicial 089 del Centro Poblado Menor Ricardo Palma de Tingo María.
- Establecer la influencia de la aplicación del juego educativo “La tortuga” en la
disminución de la agresividad verbal de los niños y niñas de la Institución
Educativa N° 089 del Centro Poblado Menor Ricardo Palma de Tingo María.
-6-
I.4 JUSTIFICACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN
El presente trabajo de investigación se justifica porque servirá de guía a los docentes
para poner en práctica estrategias en base a juegos para disminuir las conductas
agresivas de sus alumnos, y poder de alguna manera superar esta “crisis” en las que nos
encontramos los docentes, cuando no sabemos cómo actuar frente a las conductas
agresivas de nuestros niños.
Asimismo servirá para los padres, porque podrán practicar ellos mismos en sus
hogares con sus hijos y ayudar en el proceso de mejoramiento de su desarrollo integral.
Estas estrategias permiten coadyuvar en la difícil tarea de educar a sus propios hijos
complementando la labor docente.
I.5 VIABILIDAD Y FACTIBILIDAD
Para ejecutar el presente proyecto de investigación, se cuenta con potencial humano,
financiero y materiales; que serán subsidiados integralmente por la tesista, además y lo
más importante con la colaboración desinteresada de la institución educativa y los
padres de familia.
-7-
CAPÍTULO II
MARCO TEÓRICO
2.1. BASES TEÓRICAS
En contexto teórico considerado en este estudio se desarrolló teniendo como
referencia las teorías del aprendizaje social y el conductismo, que destaca el papel de
las influencias ambientales en el modelamiento de la conducta; vista la conducta
como la manera de comportarse de un sujeto como respuesta a una motivación que
pone en juego componentes psicológicos, motores y fisiológicos. Considerando
específicamente las estrategias de los programas de modificación conductual
planteados por Kazdin (2000), quien señala que la conducta opera en el ambiente
para producir consecuencias, que bien pueden ser trabajadas a través de un sistema de
recompensas para promover un condicionamiento positivo en las personas y por ende
obtener cambios positivos en sus comportamientos; por ello, se consideran los
criterios de la metodología de economía de fichas para caracterizar el enfoque que se
requiere abordar a través del programa de modificación conductual.
ENFOQUE FILOSÓFICO CONCEPTUAL SOBRE CONDUCTAS EN NIÑOS
La conducta ha sido estudiada desde diversos contextos (psicólogos, médicos,
pedagogos) dado que refiere al comportamiento de los seres vivos, a la manera de
comportarse ante cada situación. Desde esta perspectiva, el enfoque conductual
presenta la conducta como su principal punto focal. De acuerdo a este enfoque,
Casalta (1992) plantea que la conducta “son rasgos y propiedades internas atribuidas
a las personas, son clases de conducta reconocibles en la observación directa y con
propiedades físicas accesibles al observador” (p.7); desde esta perspectiva, la
-8-
conducta está referida a una respuesta interna de cada persona ante una situación
determinada y tiene que ver con su contexto sociocultural.
Según Moles (1991) destaca que la conducta es “toda reacción observable de un
sujeto, definiéndose éstas en verbales, musculares y glandulares.” (p. 17).
En atención a estos planteamientos, la conducta es toda repuesta emitida por el
individuo, medible y observable, por lo tanto pueden ser aprendidas o enseñadas
mediante un aprendizaje adecuado, según la interacción de diferentes factores
(individuales, como biológicos, psicológicos y socioculturales) con el medio donde se
desarrolla el individuo.
Al respecto, cabe destacar que en el salón de clase se observan diferentes conductas
no operativas o desadaptadas, en cuanto al desarrollo social de los niños, y su entorno
manifestándose con mucha frecuencia la conducta agresiva. En la presente
investigación se tomará como base la definición de conducta dada por Moles
(1991), ya que se analizaran las conductas agresivas físicas y verbales, como
reacciones observadas del sujeto.
Según Moles (2000), la conducta se define como “las manifestaciones
viscerales, musculares o glandulares que se dan en un organismo y que pueden ser
medibles, observables y cuantificables” (p.28). Esto implica que conducta es todo lo
que hacemos, desde salivar hasta conducir un automóvil, pero que debe cumplir con
la condición de ser objetiva u observable.
Esto se explica, según Skinner (1974) con el desarrollo de todo un modelo de
aprendizaje que se ha denominado operante o instrumental en función del manejo
que se hace sobre el ambiente circunscrito a una conducta determinada, para
establecer las relaciones antecedentes y consecuentes, o sea conocer las condiciones
-9-
que facilitan la aparición de la conducta y las contingencias posteriores que facilitan
su fortalecimiento y mantenimiento. Las conductas operan bajo el principio de que la
conducta es aprendida y le otorgan gran importancia a la influencia del ambiente;
dado que, por medio del reforzamiento es posible fomentar muchos tipos de
conducta.
Desde esta perspectiva, el estudio de la conducta se basa en un análisis crítico
constructivo sobre las formas de actuar que se han de considerar lógicas dentro del
contexto del desarrollo evolutivo y psicosocial del individuo en atención a su ámbito
sociocultural y las manifestaciones contrarias a lo que se espera de cómo la persona
se comporte.
CONCEPCIONES SOBRE CONDUCTAS AGRESIVAS EN NIÑOS
La violencia y en especial la conducta agresiva en el ambiente escolar constituyen
indiscutiblemente un tema de gran relevancia social y de mucha vigencia en la
actualidad, razón que ha llevado a estudiosos de diferentes campos y latitudes ha
dedicarle mucho empeño para la comprensión, explicación y manejo de este
comportamiento. La agresividad ha sido definida desde una perspectiva
multidimensional, abarcando posiciones sociales, culturales, psicológicas,
ambientales hasta las puramente biológicas y mecanicistas; existiendo connotaciones
morales, sociales, ideológicos, religiosos, culturales, edad y sexo para definir y
explicar este fenómeno. Según Fuentanza (1998) para definir la agresión es
indispensable partir de la base de que esta se manifiesta como una forma de conducta
entre las múltiples conductas que el individuo puede manifestar y las cuales van a
estar muy ligadas a la situación en la que vive.
-10-
Duque y Bedoya (2000) señalan que las conductas agresivas, son actos intencionales
de naturaleza física, verbal, gestual y/o actitudinal mediante el cual un niño/a daña,
produce conflicto, lastima o crea malestar en otros.
En este mismo orden de ideas, Berkowitz (2000) señala que las conductas agresivas
representan “cualquier forma de conducta que pretende herir física o
psicológicamente a alguien con la finalidad de destruir o perjudicar al organismo que
la provoca” (p. 33). Uno de los aspectos que destaca esta definición, es la
intencionalidad del sujeto obtener algo por diferentes medios ya sea a través de la
coacción física verbal o gestual.
Por su parte, Caims (2001), considera que la conducta agresiva se genera en el
ambiente familiar por medio del aprendizaje, ya que cada individuo parece desarrollar
un nivel específico de agresividad desde muy temprano el cual permanece
relativamente estable a través del tiempo y de las situaciones; sin embargo cualquiera
que sea el repertorio con que el niño nazca , la agresión será una forma de interacción
aprendida por lo que se hace imperativo tomar en cuenta el entorno familiar que es
notablemente significativo para el niño.
No se puede hablar propiamente de "conducta agresiva" como si se tratase de una
única forma de conducta, sino de distintas formas de agresión. La agresividad puede
expresarse de muy diversas maneras y no son rasgos estables y constantes de
comportamiento, por lo que debemos tener en cuenta la situación estímulo que la
provoca.
En este mismo orden de ideas, Olweus (2000), señala que las conductas agresivas
son un tipo de trastorno del comportamiento y/o de la personalidad, que trasciende al
-11-
propio sujeto. Parece haber una gran estabilidad o consistencia longitudinal en la
tendencia a mostrarse altamente agresivo con independencia del lugar y del momento.
Según este autor, aunque la agresividad puede tomar diversas formas de expresión,
siempre tendrá como característica más sobresaliente el deseo de herir. El agresor
sabe que a su víctima no le gusta lo que está haciendo y, por tanto, no tiene que
esperar a que el grupo evalúe su comportamiento como una violación de las normas
sociales, sino que la víctima ya le está proporcionando información directa sobre las
consecuencias negativas de su acción, lo cual hace que, con frecuencia, se refuercen y
se mantengan esas mismas conductas. Es lo que se conoce como "Agresividad hostil o
emocional”, y habrá que distinguirla de otro tipo de conducta agresiva que no tiene la
finalidad de herir, la llamada "Agresividad instrumental", que es "la que sirve de
instrumento para...".
Es por ello, que hay que distinguir los agresores con orientación instrumental, que
suelen ser aquellos que quieren demostrar ante el grupo su superioridad y
dominio, de los agresores hostiles o emocionalmente reactivos, aquellos que usan la
violencia porque se sienten fácilmente provocados o porque procesan de forma
errónea la información que reciben y, además, no cuentan con respuestas alternativas
en su repertorio. No son frecuentes los comportamientos agresivos mixtos, es decir,
los que reúnen ambas condiciones.
Por su parte Arroyo (2000) señala que la agresividad es un trastorno que, en exceso, y
si no se trata en la infancia, probablemente originará problemas en el futuro, cómo el
fracaso escolar, la falta de socialización, dificultad de adaptación, entre otros. Por
ello, cuando se habla de agresividad se está hablando de hacer daño, físico o psíquico,
a una otra persona. De una acción intencionada manifestada a través de patadas,
arañazos, gritos, empujones, palabrotas, mordidas, corrida del pelo a otra persona.-12-
En atención a estos planteamientos, un buen pronóstico a tiempo sobre la conducta
agresiva, mejora siempre una conducta anómala que habitualmente suele predecir
otras patologías psicológicas en la edad adulta. Un comportamiento excesivamente
agresivo en la infancia si no se trata derivará probablemente en fracaso escolar
y en conducta antisocial en la adolescencia y edad adulto porque principalmente son
niños con dificultades para socializarse y adaptarse a su propio ambiente. El
comportamiento agresivo implica las relaciones sociales que va estableciendo a lo
largo de su desarrollo y dificulta por tanto su correcta integración en cualquier
ambiente. El trabajo por tanto a seguir es la socialización de la conducta agresiva, es
decir, corregir el comportamiento agresivo para que derive hacia un estilo de
comportamiento asertivo.
TEORÍAS SOBRE LA AGRESIVIDAD
Existen diversas teorías acerca de la agresividad, cada una de las cuales contribuye a
explicar una dimensión del fenómeno. En 1983, Mackal efectuó una clasificación
según el elemento que considera determinante para su formulación y las englobó en 6
epígrafes:.
Teoría Clásica del Dolor: el dolor está clásicamente condicionado y es siempre
suficiente en sí mismo para activar la agresión en los sujetos (Hull, 1943; Pavlov,
1963). El ser humano procura sufrir el mínimo dolor y, por ello, agrede cuando se
siente amenazado, anticipándose así a cualquier posibilidad de dolor. Si en la lucha no
se obtiene éxito puede sufrir un contraataque y, en este caso, los dos experimentarán
dolor, con lo cual la lucha será cada vez más violenta. Hay, por tanto, una relación
directa entre la intensidad del estímulo y la de la respuesta.
-13-
Teoría de la Frustración. (Dollard, Miller y Col., 1938): cualquier agresión puede
ser atribuida en última instancia a una frustración previa. El estado de frustración
producido por la no consecución de una meta, provoca la aparición de un proceso de
cólera que, cuando alcanza un grado determinado, puede producir la agresión directa
o la verbal. La selección del blanco se hace en función de aquel que es percibido
como la fuente de displacer, pero si no es alcanzable aparecerá el
desplazamiento.
Teorías Sociológicas de la Agresión. (Durkheim, 1938): la causa determinante de la
violencia y de cualquier otro hecho social no está en los estados de conciencia
individual, sino en los hechos sociales que la preceden. El grupo social es una
multitud que, para aliviar la amenaza del estrés extremo, arrastra con fuerza a sus
miembros individuales.
La agresividad social puede ser de dos tipos: individual, es fácilmente predecible,
sobre todo cuando los objetivos son de tipo material e individualista, o bien grupal.
Esta última no se puede predecir tomando como base el patrón educacional recibido
por los sujetos, sino que se predice por el referente comportamental o sujeto colectivo,
el llamado "otro generalizado", al que respetan más que a sí mismos y hacia el cual
dirigen todas sus acciones.
Teoría Catártica de la Agresión: surge de la teoría psicoanalítica (aunque hay varias
corrientes psicológicas que sustentan este concepto), la cual considera que la catarsis
es la única solución al problema de la agresividad. Supone una descarga de tensión a
la vez que una expresión repentina de afecto anteriormente reprimido cuya liberación
es necesaria para mantener el estado de relajación adecuado Hay dos tipos de
liberación emotiva: la catarsis verbalizada y la fatiga.
-14-
Etología de la Agresión: surge de etólogos y de teorías psicoanalíticas. Entienden la
agresión como una reacción impulsiva e innata, relegada a nivel inconsciente y no
asociada a ningún placer. Las teorías psicoanalíticas hablan de agresión activa (deseo
de herir o de dominar) y de pasividad (deseo de ser dominado, herido o destruido). No
pueden explicar los fines específicos del impulso agresivo, pero si distinguen distintos
grados de descarga o tensión agresiva.
Teoría Bioquímica o Genética: el comportamiento agresivo se desencadena como
consecuencia de una serie de procesos bioquímicos que tienen lugar en el interior del
organismo y en los que desempeñan un papel decisivo las hormonas. Se ha
demostrado que la noradrenalina es un agente causal de la agresión.
Lo que parece quedar claro de todo lo anterior es que, aunque la agresividad está
constitucionalmente determinada y aunque hay aspectos evolutivos ligados a la
violencia, los factores biológicos no son suficientes para poder explicarla, puesto que
la agresión es una forma de interacción aprendida.
Por su parte Umbert (2000), señala que las teorías del comportamiento agresivo se
engloban en: Activas y Reactivas. Las activas son aquellas que ponen el origen de la
agresión en los impulsos internos, lo cual vendría a significar que la agresividad es
innata, que se nace o no con ella. Defensores de esta teoría: Psicoanalítica y
Etológica. Las reactivas ponen el origen de la agresión en el medio ambiente que
rodea al individuo. Dentro de éstas están las teorías del impulso que dicen que la
frustración facilita la agresión, pero no es una condición necesaria para ella, y la teoría
del aprendizaje social que afirma que las conductas agresivas pueden aprenderse
por imitación u observación de la conducta de modelos agresivos.
-15-
Para los efectos de la presente investigación se considerarán los aspectos que
fundamentan la teoría del aprendizaje social planteada por Bandura (1970), quien
considera que habitualmente cuando un niño emite una conducta agresiva es porque
reacciona ante un conflicto. Dicho conflicto puede resultar de:
1. Problemas de relación social con otros niños o con los mayores, respecto de
satisfacer los deseos del propio niño.
2. Problemas con los adultos surgidos por no querer cumplir las órdenes que éstos le
imponen.
3. Problemas con adultos cuando éstos les castigan por haberse comportado
inadecuadamente, o con otro niño cuando éste le agrede.
Sea cual sea el conflicto, provoca en el niño cierto sentimiento de frustración u
emoción negativa que le hará reaccionar. La forma que tiene de reaccionar dependerá
de su experiencia previa particular. El niño puede aprender a comportarse de forma
agresiva porque lo imita de los padres, otros adultos o compañeros. Es lo que se llama
Modelamiento. Cuando los padres castigan mediante violencia física o verbal se
convierten para el niño en modelos de conductas agresivas. Cuando el niño vive
rodeado de modelos agresivos, va adquiriendo un repertorio conductual caracterizado
por una cierta tendencia a responder agresivamente a las situaciones conflictivas que
puedan surgir con aquellos que le rodean.
El proceso de modelamiento a que está sometido el niño durante su etapa de
aprendizaje no sólo le informa de modos de conductas agresivos sino que también le
informa de las consecuencias que dichas conductas agresivas tienen para los modelos.
Si dichas consecuencias son agradables porque se consigue lo que se quiere tienen
una mayor probabilidad de que se vuelvan a repetir en un futuro.
-16-
Factores determinantes de la Agresividad Infantil
La agresividad es una conducta instintiva o aprendida que existe por un mecanismo
psicológico que una vez estimulado suscita sentimientos de enojo y cambios físicos.
Según Storr (2001), la conducta agresiva es un problema social que se presenta en
cualquier etapa del desarrollo humano, por ello considera que la agresión tiene un
papel importante en la interacción de todo ser humano, por esto, existe una gran
diversidad de estudios e investigaciones que centran su atención en establecer alguna
explicación a las conductas agresivas.
En general, la conducta agresiva infantil es uno de los problemas que más preocupa a
padres y maestros. El comportamiento agresivo complica las relaciones sociales que
va estableciendo a lo largo de su desarrollo y dificulta por tanto su correcta
integración en cualquier ambiente. El trabajo por tanto a seguir es la
socialización de la conducta agresiva, es decir, corregir el comportamiento agresivo
para que derive hacia un estilo de comportamiento asertivo.
Para Alonso (1999) en el caso de los niños la agresividad se presenta generalmente en
las siguientes formas:
La agresividad física: Se presenta en forma de acto violento (patadas, empujones,
puñetazos, cachetadas, jalones de pelo, etc.)
La agresividad verbal. Se presenta en forma verbal tales como insultaod,
palabrotas...).
Los arrebatos son un rasgo normal en la infancia pero algunos niños persisten en su
conducta agresiva y en su capacidad para dominar el mal genio. Este tipo de niños
hace que sus padres y maestros sufran siendo frecuentemente niños frustrados que
viven el rechazo de sus compañeros no pudiendo evitar su conducta.-17-
En este orden de ideas, Storr (2001) señala que uno de los factores que influyen en la
emisión de la conducta agresiva es el factor sociocultural del individuo,
teniendo en cuenta que uno de los elementos más importantes del ámbito
sociocultural del niño es la familia. Dentro de la familia, además de los modelos y
refuerzos, son responsables de la conducta agresiva el tipo de disciplina a que se les
someta. Se ha demostrado que tanto un padre poco exigente como uno con actitudes
hostiles que desaprueba constantemente al niño fomentan el comportamiento agresivo
en los niños.
De acuerdo con el citado autor, otro factor familiar influyente en la agresividad en los
niños es la incongruencia en el comportamiento de los padres, incongruencia que se
da cuando los padres desaprueban la agresión castigándola con su propia agresión
física o amenazante hacia el niño. Asimismo se da incongruencia cuando una misma
conducta unas veces es castigada y otras ignorada o bien cuando el padre regaña al
niño pero la madre no lo hace. Además, las relaciones deterioradas entre los propios
padres provoca tensiones que pueden inducir al niño a comportarse de forma agresiva.
Pero también dentro del factor sociocultural, influirían tanto el tipo de barrio donde se
viva, como expresiones que fomenten la agresividad "no seas un cobarde".
Para Alonso (1999), en el comportamiento agresivo también influyen los factores
orgánicos que incluyen factores tipo hormonales, mecanismos cerebrales, estados de
mala nutrición, problemas de salud específicos. También cabe mencionar el déficit en
habilidades sociales necesarias para afrontar aquellas situaciones que resultan
frustrantes. Parece que la ausencia de estrategias verbales para afrontar el estrés a
menudo conduce a la agresión.
Este mismo autor señala que otros factores implicados en el desarrollo de la
agresividad son los cognitivos y los sociales, desde cuyas vertientes se entiende la -18-
conducta agresiva como el resultado de una inadaptación debida a problemas en la
codificación de la información, lo cual hace que tengan dificultades para pensar y
actuar ante los problemas interpersonales y les dificulta la elaboración de respuestas
alternativas. Estos déficits socio-cognitivos pueden mantener e incluso aumentar las
conductas agresivas, estableciéndose así un círculo vicioso difícil de romper.
Plantea Alfonso (1999) que cuando un niño agresivo es rechazado y sufre repetidos
fracasos en sus relaciones sociales, crece con la convicción de que el mundo es hostil
y está contra él, aunque esto no le impide que se autovalore positivamente. Sin
embargo, para orientar su necesidad de relaciones sociales y manejar positivamente su
autoestima busca el apoyo social de aquellos con los que se siente respaldado, que son
los que comparten con él sus estatus de rechazados, creándose así pequeños grupos
desestabilizadores dentro del grupo.
Tampoco se debe olvidar la influencia que tienen los factores de personalidad en el
desarrollo de la agresividad, puesto que el niño agresor suele mostrar una tendencia
significativa hacia la conducta psicótica. Le gusta el riesgo y el peligro y posee una
alta extraversión que se traduce en el gusto por los contactos sociales, aunque en ellos
habitualmente tiende a ser agresivo, se enfada fácilmente y sus sentimientos son
variables. Todo lo anterior hace que este tipo de niño tienda a tener "trastornos de
conducta" que le lleven a meterse en problemas con sus iguales e incluso con adultos.
Sin menospreciar los factores biológicos, los cognitivos, los sociales y los de
personalidad, para Alfonso (1999), los factores que cobran un papel especialmente
importante en la explicación de la aparición de conductas violentas, son los factores
ambientales. Cobra especial importancia el papel de la familia puesto que si la
agresividad como forma de resolver problemas interpersonales suele tener su origen al
-19-
principio de la infancia, parece claro que en buena parte se deba fraguar en el
ambiente familiar.
El modelo de familia puede ser preeditor de la delincuencia de los niños, puesto que el
clima socio-familiar interviene en la formación y desarrollo de las conductas
agresivas. Los niños agresivos generalmente perciben en su ambiente familiar cierto
grado de conflicto. Las conductas antisociales que se generan entre los miembros de
una familia les sirven a los jóvenes de modelo y entrenamiento para la conducta
antisocial que exhibirán en otros ambientes, debido a un proceso de generalización de
conductas antisociales.
Agentes Familiares y Socioculturales Determinantes de la Conducta Infantil
Existen distintas conductas que pueden considerarse como casos de agresión, sin
embargo, a pesar de que, tomen distintas formas todas tienen un común denominador,
cual es dañar o lesionar a otra persona. Bandura (1986), plantea que la agresión es
adquirida por aprendizaje social a través de la observación.
De acuerdo con el citado autor, para la teoría del aprendizaje social: la conducta
agresiva puede adquirirse meramente por la observación y la imitación de la
conducta de modelos agresivos y no requiere necesariamente la existencia de un
estado de frustración previa. Según esta concepción de la agresividad no existiría una
pulsión agresiva, sino que sería el resultado de procesos de aprendizaje.
Esta teoría acentúa la importancia de los procesos vicarios, simbólicos y
autorregulatorios en el funcionamiento psicológico; reconoce el rol de la observación
influyendo notablemente en los pensamientos, afectos, y conducta humana. Por otra
parte, enfatiza la importancia del aprendizaje social dado que destaca el rol de los
procesos de autorregulación, es decir, la capacidad de las personas de discriminar,
-20-
seleccionar, organizar y transformar los estímulos que los afecta, concibiendo al
individuo como agente de su propio cambio.
Por lo tanto esta teoría explicaría a la conducta humana, como la interacción reciproca
de tres elementos: cognitivos, comportamentales y ambientales; lo cual permite que
los individuos puedan influir en su destino y en la autodirección de sus límites. En
general existe coincidencia al concebir la interacción entre la experiencia y los
factores fisiológicos determinantes de la conducta.
Bandura (1986) sostiene que el aprendizaje por observación o vicario consiste en
aprender observando a otros. Creía que las teorías conductuales tradicionales
descuidan el poderoso efecto que el modelamiento y la imitación tienen sobre el
aprendizaje. Las personas (y los animales) aprenden al observar como aprende otra
persona ( o animal), lo que cuestiona la idea conductual de que los factores cognitivos
son innecesarios para explicar el aprendizaje. Si la gente aprende observando,
entonces debe dirigir su atención, formar imágenes, recordar, analizar y tomar
decisiones que afectan el aprendizaje.
Desde este contexto, se plantean dos formas principales de aprendizaje observacional.
Primero puede ocurrir mediante reforzamiento vicario, como cuando vemos que otros
son recompensados o castigados por realizar ciertas acciones y luego modificamos
nuestra conducta como si hubiéramos recibido las consecuencias. Por ejemplo, si
usted felicita a dos de sus alumnos por las ilustraciones de sus trabajos, otos alumnos
que hayan observado el episodio la próxima vez le entregaran sus trabajos con
ilustraciones. Esto demuestra el reforzamiento vicario. El castigo también puede
ser vicario: uno desacelera el límite de velocidad permitido después de ver que
muchas personas son multadas por exceso de velocidad.
-21-
En la segunda clase de aprendizaje observacional, el observador imita la conducta del
modelo aunque éste no recibe reforzamiento o castigo mientras el sujeto lo mira. A
menudo el modelo exhibe algo que el observador desea aprender y por lo que espera
ser reforzado, como la forma adecuada de colocar las manos al tocar el piano o de
armar el equipo de laboratorio. Pero la imitación también ocurre cuando el observador
desea parecerse a un modelo al que admira.
Existen cuatro elementos importantes a considerar del aprendizaje observacional:
• Atención. El niño para aprender presta atención a los rasgos significativos
de la conducta de sus padres ( o del modelo agresivo). La atención prestada al
modelo está delimitada por la atracción interpersonal. El observador se identifica
con el modelo por sus cualidades atrayentes.
• Retención. La capacidad de procesar la información a partir de sus experiencias
anteriores y de las exigencias de la situación, y la capacidad de recordar cosas,
conductas, hechos, permite que estos puedan influir a las personas mediante la
representación de imágenes, representación verbal y la técnica de repetición, el
aprendizaje y la retención resultan mejor. En el caso del niño pequeño, las
acciones de los modelos provocan directamente respuestas de imitación. Siendo
capaces de reproducir estas respuestas aunque el modelo no esté presente mucho
después de haber observado la conducta.
• Reproducción. Transformar las representaciones simbólicas en acciones, lo
que es posible cuando se organizan temporal y espacialmente las propias
respuestas. En ocasiones necesitamos mucha práctica, retroalimentación y
entrenamiento de ciertos puntos sutiles antes de reproducir la conducta modelo. En
esta fase, la práctica hace que la conducta resulte más uniforme y más experta.
-22-
• Motivación y reforzamiento. El niño aprende a adoptar conductas dependiendo
de las consecuencias de éstas. Tenderá a reproducir conductas cuando sus
consecuencias sean valiosas y por el contrario, cuando tengan efectos poco
gratificantes tendrá menor probabilidad de adoptarlas. Podemos adquirir por
observación una nueva destreza o conducta pero no exhibirla a menos que haya
cierta motivación o incentivo. En el aprendizaje observacional el reforzamiento
cumple diversas funciones.
Si se anticipa que serán reforzados por imitar las acciones de un modelo, se sentirán
más motivados para prestar atención, recordar y reproducir las conductas. Además,
el reforzamiento es importante para mantener el aprendizaje, ya que es poco
probable que una persona que intenta una nueva conducta persista si no recibe
reforzamiento. (Barton, 1981; Ollendick, Dailey y Shapiro, 1983) citado por
Woolfolk, 1999).
En el caso del niño, este carece de la facultad d integrar distintos atributos o hechos
que le permitan establecer la contingencia necesaria entre una acción y sus
consecuencias, por lo cual se constituye en un sujeto receptivo que replica lo
observado potencialmente. Con el tiempo podrá desarrollar la capacidad de
autoevaluación, por lo tanto habrá desarrollado la capacidad de integración lo que será
determinante en la ejecución o no de lo aprendido por observación.
En la niñez el aprendizaje es imitativo, instantáneo, generalizando lo aprendido a otras
situaciones, en ello va a influir las características del modelo y la frecuencia con que
ocurre el modelado. Es por esto, que el niño acabará por reproducir conductas
agresivas con mayor facilidad, cuando esté sujeto a una invasión masiva y frecuente
de estímulos agresivos, emanados especialmente de sus padres (modelos de gran
poder afectivo), lo cual se acompaña del refuerzo recibido cada vez que el niño se -23-
somete a la agresión siendo implícita o directamente aprobado por ello. Por el
contrario, sancionado cada vez que no lo haga. (someterse).
Al respecto, Bandura (1965), en un experimento clásico sobre el aprendizaje por
observación, donde grupo de niños en edad preescolar después de ver una película
en la que un adulto golpeaba una muñeca de plástico con un vaso, la tiraba al aire, la
pateaba, la bofeteaba, después se dejó a cada niño jugando solo en una habitación con
juguetes en los que estaba la muñeca, muchos de los pequeños que habían visto la
película imitaron el comportamiento del adulto e incluso idearon modos nuevos de
golpear la muñeca. Los niños que no habían visto la película no mostraron ninguna de
las conductas agresivas del adulto. El experimento demostró que los niños aprenden
por pura observación.
Para Bandura e Ingesta (1984) “En la sociedad moderna hay tres fuentes principales
de conducta agresiva que reciben atención en grados variables, siendo los principales
factores que influyen en el modelamiento”. Estas son influencia familiar, influencia
sociocultural y modelamiento.
Influencias Familiares: El entorno familiar puede ser la esfera principal en la que se
aprende el comportamiento agresivo, ya que, esta desempeña una influencia
fundamental en la conducta el niño, es allí donde los niños disponen de muchas
oportunidades para observar modelos agresivos.
Para Bandura (1984), “Fuente y reforzadora de la agresión es la modelada y reforzada
por los miembros de la familia”. Estudios de los determinantes familiares de la
agresión antisocial informan que hay una incidencia mucho mayor de modelamiento
agresivo familiar en el caso de los muchachos delincuentes. Con toda seguridad los
padres que castigan físicamente a sus hijos, sirven de modelo para un comportamiento
-24-
agresivo. Por otro lado, los padres de los niños con problemas de agresividad dan más
ordenes, hacen críticas en forma humillante y regañona, comportamiento que será
luego imitado por los niños.
Influencias Socioculturales: El desarrollo de un niño se produce en un
contexto sociocultural que se puede considerar como un campo o territorio en el que
se superpone o interactúan las influencias sociales, ya que el niño está inmerso en su
familia, colegio y vecindario con quienes interactúa continuamente.
Según Bandura, (1984) “La familia está intrínsicamente unida a otros sistemas
sociales, además la cultura en que reside una persona y con la cual tiene contactos
repetidos constituye otra importante fuente de agresión. Las tasas más elevadas de
conductas agresivas se encuentran en medios en donde abundan los modelos
agresivos y en donde se considera que la agresividad es un atributo muy valioso”.
Como ser social, el niño se enfrenta al conflicto, que surge cuando aparecen intereses
contrapuestos, algo inherente a toda relación humana, como seres únicos, distintos,
que somos. Ese conflicto despierta en el sujeto cierto nivel de agresividad, como una
fuerza que ofrece resistencia. Cuando esta agresividad se convierte en acto corre el
peligro de llegar a una conducta violenta, como una vía de resolver el conflicto. El
niño debe poder aprender, entonces, a dominar su agresividad y también a evitar que
la agresividad de los otros lo afecte y lo haga reaccionar. A raíz de esto surge la
necesidad de encontrar otras vías de solución alternativas, la palabra y la negociación
son dos de ellas.
El modelamiento: es el tercer factor fuente principal de la conducta agresiva. Gran
parte del aprendizaje social ocurre por observación casual o directa de modelos de la
vida real; sin embargo, los estilos de conducta pueden ser transmitidos a través de
-25-
imágenes y palabras lo mismo que a través de acciones”. Castigar a un niño por su
conducta agresiva dándole una bofetada o una paliza puede enseñarle a ser más
violento. Al observar modelos se puede aprender a mostrar amor, respeto e interés, lo
mismo que hostilidad y agresión. El modelamiento, no es más, que cambios en la
conducta, pensamiento o emociones que ocurren al observar a otra persona.
TÉCNICAS DE MODIFICACIÓN DE CONDUCTAS
Existe una serie de técnicas de modificación de conductas que pueden ayudar a
orientar o canalizar las conductas no deseadas que pueda presentar cualquier persona.
Para kazdin (2000), las técnicas de modificación conductual se aplican para tratar
problemas clínicos como ansiedad, depresión, agresión, drogadicción maltrato infantil
y conyugal, otros; en una amplia variedad de personas y poblaciones, incluyendo
niños, adolescentes y adultos en escenarios cotidianos como el hogar, la escuela y el
lugar de trabajo, así como también en poblaciones especiales como pacientes
psiquiátricos prisioneros, residentes de asilos de ancianos y niños autistas.
Para Ribes (1994), la modificación de conducta sirve para afirmar o enseñar
conductas apropiadas y eliminar las inapropiadas. Toda conducta humana, se repite a
consecuencia de una recompensa. Considera que las técnicas de modificación de
conducta se pueden clasificar en tres grupos:
1) Para implantar una conducta.
2) Para mantener o incrementar una conducta.
3) Para reducir una conducta.
a. Técnicas para implantar conductas: Se utiliza la técnica o técnicas para
implantar una conducta cuando esta conducta no se encuentra en el repertorio del
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paciente. Las cinco (5) técnicas más comúnmente aplicadas son las siguientes:
1. Moldeamiento,
2. Modelamiento
3. Instigación,
4. Instrucciones verbales,
5. Sugerencias.
a.1 Moldeamiento: es el reforzamiento sistemático e inmediato de
aproximaciones a la conducta blanco (conducta que se desea instaurar) hasta
que esta aparezca en el repertorio de conducta, es decir se instale. Se debe
especificar con precisión al paciente, la conducta seleccionada para el
moldeamiento, seleccionar reforzadores potentes y utilizarlos cada vez que la
conducta del paciente se aproxime a la deseada.
a.2 Modelamiento: es el aprendizaje mediante la observación e imitación,
consiste en una herramienta en la que se utiliza un modelo que ejecute
conductas verbales y motoras exactas que se esperan del paciente, mientras
éste observa y escucha. Este modelaje puede ser en vivo o por medio de
filmaciones lo que se vendría siendo modelaje simbólico. Para el uso eficaz
del modelamiento se deben seleccionar modelos competentes con estatus o
prestigio, la complejidad de la conducta modelada debe ser apta para el nivel
de comportamiento de la persona, utilizar refuerzos positivos luego de emitir
la conducta esperada.
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a.3 Instigación: es una ayuda especial, manual, verbal o visual, que se le da a la
persona durante la intervención para incrementar el éxito en la actividad. Las
instigaciones pueden clasificarse en físicas, visuales y verbales. Las
instigaciones físicas, a su vez pueden ser totales y parciales. La instigación
física total es el máximo grado de apoyo y ayuda, también conocido como
asistencia u orientación manual o física. Las instigaciones visuales son
indicadores visuales adicionales para producir una respuesta, surte el
efecto de instigador visual y produce en el paciente la respuesta
esperada. Las instigaciones verbales son sugestiones auditivas adicionales
como por ejemplo sonar los dedos para indicarle al paciente que se culminó
el tratamiento realizado durante la cita en cuestión.
a.4 Instigaciones verbales: son normas o pautas específicas que indican a la
persona el comportamiento concreto a producir, es decir que resultados y
bajo que circunstancias en particular. Las instrucciones verbales
específicas aceleran el proceso de aprendizaje. Consiste en decirle a la
persona exactamente lo que va a hacer, en una situación donde pueda tener
dificultades para ejecutar o recordar la ejecución. Las instrucciones
deben ser sencillas, cortas y deben contener palabras que sepamos que el
paciente comprende y evitar términos técnicos o en tal caso aclararle muy
bien el significado, para obtener la respuesta esperada. Por ejemplo, cuando
se hace un récipe se debe aicionalmente darle las instrucciones verbales
para explicarle minuciosamente cuantas veces va ha tomar el medicamento y
a que horas, durante cuantos días y aclarar cualquier pregunta con relación a
la medicación.
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a.5 Sugerencias: existen dos clases de sugerencias la sugerencia directa es una
incitación para iniciar una serie de respuestas y es dirigida específicamente a
una determinada persona, por ejemplo se le dice al paciente: "que te
parece si colocamos anestesia para evitar que algo te pueda molestar". La
sugerencia indirecta es cuando se incita a otra persona diferente de aquel al
que se desea enseñar, en este caso el operador delante del paciente al cual
está planificado efectuarle una tratectomía, él dice al asistente: "sabes el
paciente anterior se portó excelentemente cuando le realicé la limpieza."
b. Técnicas para mantener o incrementar conductas: cuando se quiere hacer
énfasis en mantener o incrementar una conducta seleccionada denominada
conducta blanco, se pueden utilizar las siguientes técnicas:
1. Reforzamiento.
2. Contratos de contingencia.
3. Economías de fichas.
c. Técnicas para reducir conductas: si lo que se pretende es reducir la frecuencia
con la que se observa una conducta, se pueden utilizar las técnicas siguientes:
1. Extinción
2. Saciedad
3. Castigo
4. Reforzamiento de conductas incompatibles
c.1 Extinción: es la discontinuación o eliminación del reforzador de una conducta
que anteriormente se reforzaba. La manera más efectiva de erradicar una
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conducta reforzada anteriormente es ignorándola y para ello se debe ser
constante y persistente. Por lo general en el inicio de la aplicación de esta
técnica la persona se confunde por la ausencia del reforzador que antes obtenía
y por ende por lo general aumenta la conducta blanco por un lapso breve y
durante el transcurso del programa la conducta en cuestión disminuye hasta
extinguirse.
c.2 Saciedad: es la disminución o eliminación de una conducta inadecuada
consecuente al reforzamiento continuo y aumentado de la misma conducta.
Así por ejemplo, cuando una persona que es un paciente en una determinada
consulta médica, en varias oportunidades pide permiso para ir al baño, con lo
que interrumpe o demora la atención del médico, se le puede indicar que vaya
durante cinco (5) minutos al baño y no salga hasta tanto no termine de hacer lo
debido y luego no volverá hasta concluir el tratamiento pautado en la cita.
c.3 Castigo: consiste en suministrar un estímulo punitivo inmediatamente después
de presentarse la conducta blanco, provocando que la frecuencia de esta
disminuya. Es aplicar al sujeto un estímulo adversivo como consecuencia de
una respuesta inaceptable. Es cualquier estímulo que al estar presente
disminuye la probabilidad de que se produzca una respuesta. El castigo puede
ser positivo cuando se añade un estímulo adverso o negativo cuando se
elimina un estímulo placentero.
La persona que proporciona el castigo debe mantener la calma durante su
administración, ya que la ira y la frustración pueden reforzar el
comportamiento no deseado pueden alterar la consistencia o intensidad del
castigo. Es una técnica que se recomienda cuando las técnicas menos
adversivas han sido ineficaces, ya que pueden provocar comportamientos -30-
agresivos, efectos emocionales secundarios como el llanto y el miedo en
general. Ejemplos del castigo son las nalgadas, reprimendas, trabajo adicional
no deseable o la privación de algo que se considera deseable.
c.4 Reforzamiento de conductas incompatibles: es la disminución de una
conducta que es incompatible con la conducta que deseamos modificar. Así
por ejemplo al niño que acostumbre a agarrarle la mano al odontólogo para
intentar retirarla mientras se le está trabajando en boca, se le pide que coloque
la mano en los bolsillos y se le refuerza el buen comportamiento diciéndole
que es un niño muy obediente por meterse las manos en el bolsillo.
LA TÉCNICA DE LA TORTUGA (Programa de autocontrol)
Es un juego colectivo en la clase en el cual los niños y niñas se imaginan que son
tortugas y que se esconden en su caparazón, doblando y juntando los brazos a sus
cuerpos inclinando la cabeza y cerrando los ojos.
Relajan sus músculos para hacer frente a las tensiones emocionales.
Buscan respuestas alternativas adecuadas socialmente para solucionar los
problemas.
¿En qué circunstancias han de adoptar los/as niños/as la respuesta de la tortuga?
- Cuando un niño o niña se dé cuenta de que va a agredir a otro.
- Cuando un niño o niña está frustrado(a), enfadado(a) o a punto de iniciar una
rabieta.
- Siempre que el maestro o la maestra diga la palabra “tortuga “.
OBJETIVO: Enseñar al niño y niñas a controlar sus propias conductas disruptivas.
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TIPO DE CONDUCTAS: De impulsividad: agresiones, conductas disruptivas.
APLICACIÓN: Medio natural: AULA.
RESPONSABLE DE LA APLICACIÓN: Profesor (a)
DURACIÓN: Aproximadamente seis semanas
¿EN QUÉ CONSISTE LA TÉCNICA?:
“TORTUGA – RELAJACIÓN – SOLUCIÓN DE PROBLEMAS”
Esta técnica utiliza la analogía de la tortuga, la cual como bien se sabe, se repliega
dentro de su concha cuando se siente amenazada.
De la misma manera, se le enseña a los niños a replegarse dentro de su caparazón
imaginario cuando se sienta amenazado/a, al no poder controlar sus impulsos y
emociones ante estímulos ambientales, etc... En la práctica:
• Se enseña a los niños a responder ante la palabra clave “tortuga”, encogiéndose,
cerrando su cuerpo, metiendo la cabeza entre sus brazos. Después de que el/la
niño/a ha aprendido a responder a la tortuga, se le enseña a relajar sus músculos
mientras hace la tortuga. La relajación es incompatible con la elevación de la
tensión de los músculos necesaria para mostrar una conducta disruptiva/agresiva
y por tanto, decrece la probabilidad de la ocurrencia de esa conducta.
• Se enseña a los niños a utilizar las técnicas de solución de problemas para evaluar
las distintas alternativas para manejar la situación que le ha llevado a hacer la
tortuga.
El primer paso en el aprendizaje de la Tortuga es definir específicamente en qué
conductas agresivas objetivo nos gustaría que el niño o la niña utilizara la tortuga. Es
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importante definir las conductas objetivo para que sean fácilmente observables, y se
puedan distinguir perfectamente cuales son dentro del repertorio conductual del/la
niño/a. Por ejemplo, un problema bastante común en clase son las peleas; pelearse es
una extensa categoría conductual, que incluye muy diversas manifestaciones:
puñetazos con o sin provocación, golpes en respuesta a burlas, empujar, insultar,...
Hay que definir operativamente la categoría para saber en qué momentos se debe
utilizar la técnica de la Tortuga.
Una adecuada definición de “pelearse” podría ser: “dar puñetazos y puntapiés sin
sacudidas accidentales”, también sería válida: “dar puñetazos y puntapiés además de
sacudidas accidentales”
Es necesario tomar de antemano este tipo de decisiones antes de introducir la Tortuga
y ser muy consistentes con la definición. Se puede decidir seleccionar unas pocas
conductas o elegir muchas, siempre que las definamos operativamente cada una de
ellas, siendo recomendable escribir la definición para evitar errores y para facilitar la
implantación de la técnica por los distintos agentes, así como para posibles réplicas
del programa.
I. DESARROLLO DE LA TÉCNICA
PRIMERA SEMANA
Durante esta primera semana, la técnica de la Tortuga se pone en práctica de
dos formas diferentes:
- Periodo de práctica dirigida
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- Periodo de clase normal
Es recomendable dejar un periodo de 15 minutos cada día para la práctica
dirigida, preferiblemente siempre a la misma hora, como un descanso entre las
actividades académicas.
Los niños deben responder a la palabra clave “Tortuga”. Esta respuesta se
enseña en tres fases:
- FASE 1: Historia inicial
Se empieza contando la historia de la tortuga.
- FASE 2: Práctica en grupo
Después de contar la historia, se pasa a la segunda fase en la que toda la
clase tiene que responder a la Tortuga mirando la actuación del/la
profesor/a.
Sentada frente a la clase la profesora o profesor dirá algo como:
“¡Oh! Siento que me estoy enfadando con Juan porque me pegó, pero podría
ser lista y fuerte y hacer la Tortuga. Pongo mis brazos y mis piernas cerrando
mi cuerpo, y mi cabeza la inclino y apoyo mi barbilla en mi pecho y digo:
Tortuga”
En este momento se hace una pausa y se queda sin decir nada y más tarde
estando en la misma postura dice:
“Es tan agradable estar en mi concha que se me pasan las ganas de pegar a
Juan”
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Se le pide a la clase que imagine escenas parecidas y que todos/as hagan la
Tortuga; se repiten la secuencia 5 o 10 veces hasta que se verifique que todos/as
los/as niños/as la han aprendido. La enseñanza de esta parte de la prueba se
puede plantear como un juego. El/la profesor/a explica a los/as niños/as que va a
ponerse de espaldas y que tan pronto como se vuelva hacia la clase y diga
“Tortuga” toda la clase la hará. Inmediatamente tiene que reforzar la ejecución
de la misma.
- FASE 3: Práctica individual
Esta es la tercera fase. Si durante la fase anterior el/la profesor/a se dirigía a
todo el grupo, poniendo ejemplos, a los que toda la clase debía responder
haciendo la Tortuga, en la práctica individual se va dirigiendo a cada niño/a por
separado planteándole una o varias situaciones problemáticas de las que
habitualmente se dan en clase. El/la profesor/a irá reforzando intensamente y de
forma inmediata las buenas realizaciones. Hay que instruir a la clase para que
refuerce mediante aplausos y/u ovaciones a cada niño/a que ejecute la respuesta
de la Tortuga.
Es importante animar a la clase a que aplaudan y se pongan contentos/as cuando
un/a niño/a realice la tortuga. Hasta ahora, conseguía atención inmediata por su
conducta impulsiva y disruptiva, a partir de ahora, él/ella conseguirá aprobación
y atención de sus compañeros/as por controlarse. Sólo a través de este apoyo
el/la niño/a se atreverá a hacer la Tortuga con la esperanza de que su nuevo
autocontrol sea aceptado por sus compañeros/as y no lo percibirá como algo
inútil.
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Se ha observado que con niños/as particularmente disruptivos/as, las alabanzas
algunas veces no funcionan como refuerzo. En estos casos se pueden utilizar
caramelos, gominolas,... El/la profesor/a puede coger un montón de estas
golosinas y mientras los/as niños/as practican tanto en grupo, como de forma
individual, ir paseándose por la clase y dándolas a quienes responden
correctamente.
El resto de días de la semana, durante los 15 o 20 minutos de práctica se
tomarán como conductas objetivo los incidentes que hayan ocurrido durante el
resto del día. Una forma de hacerlo es recordar la historia de la Tortuga e
insertar los nuevos ejemplos en la misma. Hacer ver a los/as niños/as como
podrían haber utilizado en esas situaciones el nuevo truco cuando se han
pegado, se han burlado de algún compañero/a o se han quitado algo. El/la
profesor/a describirá la situación y modelará la respuesta de la Tortuga y pedirá
a la clase que le imite. Se reforzará a los/as niños/as por su respuesta inmediata.
ACTIVIDADES FUERA DEL PERIODO DE PRÁCTICA
Hay que tener presente que fuera del periodo de práctica en esta primera semana
hay que:
• Continuar registrando el número de conductas problema
• Alabar todas las Tortugas realizadas fuera del periodo de práctica
• Animar a los otros/as niños/as a que refuercen a sus compañeros/as cuando
hagan la Tortuga
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• Alabar a aquellos/as que ya refuercen a los/as compañeros/as que ya han
hecho la Tortuga.
Estos pasos son cruciales, los/as niños/as no utilizarán la técnica si no son
recompensados por realizarla. Se refuerza cualquier intento de Tortuga que el/la
niño/a haga a lo largo de la clase. Cuando se vea al/la niño/a realizando alguna
de las conductas disruptivas objetivo se le debe dar indicación de realizar la
Tortuga. Se le puede decir algo como: “Tortuga” o “Ahora puedes hacer la
Tortuga” Se le incita a ello y se le refuerza inmediatamente si la realizan.
No hay que alarmarse por tanto refuerzo a dispensar, ya que más tarde ya no se
necesitará este refuerzo tan inmediato.
SEGUNDA SEMANA
A lo largo de la segunda semana el objetivo es solidificar las estrategias
aprendidas en la primera semana y poner al/la niño/a en disposición para el
entrenamiento en relajación. Se pretende:
• Ayudar al/la niño/a a discriminar entre las situaciones apropiadas de las
inapropiadas en la respuesta de la Tortuga.
• Incrementar las tortugas espontáneas fuera del periodo de práctica
Sigue manteniéndose los periodos de práctica de 15 minutos de duración.
Se le sigue recordando al/la niño/a que tienen que hacer la Tortuga en cualquier
momento a lo largo del día y por supuesto se sigue recompensando
inmediatamente después de que ellos/as respondan con la Tortuga.
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Continuar alentando y reforzando a los/as compañeros/as que refuercen las
tortugas:
- Cómo discriminar respuestas de Tortuga apropiadas de las inapropiadas
Es probable que algunos/as niños/as emitan la respuesta de la Tortuga para
obtener el refuerzo, sobre todo cuando se están utilizando refuerzos externos
tales como caramelos, golosinas,... Por ello es importante enseñar a los/as
niños/as a discriminar entre las situaciones de Tortuga adecuadas de las que no
lo son.
• Una respuesta apropiada se da cuando un/a niño/a es víctima de una conducta
agresiva tal como un golpe de otro/a niño/a. Si el/la profesor/a u otro/a niño/a
da la clave verbal para hacer la Tortuga, esa respuesta es adecuada.
• Una Tortuga inadecuada puede ocurrir en las siguientes situaciones:
- Cuando dos o más niños/as hacen un trato entre ellos/as para hacer la
Tortuga y recibir los refuerzos.
- Cuando un/a niño/a emite una conducta de ataque tal como golpear y
después hace la Tortuga.
- Cuando un/a niño/a hace la Tortuga para atraer la atención del/la
profesor/a. El/la niño/a esperará para ver si el/la profesor/a le mira y
entonces hará la Tortuga.
• La Tortuga cuestionable es una tercera categoría. Incluye aquellos casos
donde el/la niño/a espontáneamente hace la Tortuga sin razón aparente, y es
imposible decir si está respondiendo a un impulso de hacer una conducta de
ataque o si está tratando de llamar la atención. También se incluirán aquellas
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en las que un/a niño/a comienza a hacer una conducta agresiva pero hace la
Tortuga en la mitad del estallido.
La discriminación se enseñará recompensando las Tortugas apropiadas y/o
cuestionables y no recompensar las inapropiadas durante los periodos regulares
de clase. Se explica a la clase las diferencias entre las tres respuestas de la
Tortuga mediante ejemplos. De este modo el/la profesor/a podría decir algo
como:
“Juan pintó un garabato en el papel de María, ésta se enfadó y le pegó, pero de
repente María recordó lo que la Tortuga decía y se metió dentro de su concha.
¿Es ésta una buena Tortuga?”
La forma más efectiva enseñar esta discriminación es reforzando las Tortugas
apropiadas y extinguiendo las inadecuadas.
Al final de la segunda semana se evaluará lo que ha estado sucediendo, para
ello, el/la profesor/a examinará los registros de conducta. Si los/as niños/as han
empezado a discriminar entre Tortuga apropiadas de las inapropiadas, y si se
empieza a ver una disminución de las conductas disruptivas o un aumento de
Tortugas adecuadas, se puede empezar con el entrenamiento en relajación.
Si ninguno de estos criterios han sido encontrados se deberá continuar con las
mismas actividades de esta segunda semana varios días más.
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- Provocación al azar
Cuando los/as niños/as ya discriminan situaciones apropiadas para hacer la
Tortuga, se pretende enseñarles a usar la técnica espontáneamente, sin
incitación del/la profesor/a. En la primera semana, el/la profesor/a gritaba
“Tortuga” cuando veía una situación problemática incipiente entre dos o más
niños/as. Ahora pretende ayudar a los/as niños/as a reconocer por ellos/as
mismos/as las situaciones sin ninguna incitación. Para ello se utilizará la técnica
de provocación al azar.
El/la profesor/a puede incrementar el número de oportunidades que los/as
niños/as tienen para emitir respuestas de Tortuga, eligiendo aleatoriamente un/a
niño/a que esté muy ocupado/a en alguna actividad y provocando en él/ella una
conducta de ataque; por ejemplo, ir al pupitre de María y pintarle en su hoja,
entonces María haría la tortuga y el/la profesor/a la recompensaría. Si ella no
emitiera la tortuga, se le explicaría que esta hubiera sido una muy buena
oportunidad de hacerlo.
Los/as niños/as reaccionan con sorpresa la primera vez que el/la profesor/a los
provoca pero aprenden rápidamente a considerar estas provocaciones como una
clave para la Tortuga. Estas provocaciones al azar se mantienen durante varios
días, hasta que todos/as los/as niños/as respondan con la tortuga. El paso
siguiente consiste en elegir a un/a niño/a para que, sin que lo sepan los/as
demás, sea el que provoque a los/as otros/as niños/as. Tanto el/la profesor/a
como el/la niño/a que provoca deberán alabar abundantemente al/la niño/a
atacado/a si este hace la Tortuga. Se le corregirá si devuelve el golpe o realiza
cualquier otra conducta inadecuada.
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Las provocaciones al azar se repiten dos o tres veces al día cambiando de
niños/as tanto como sujetos que provocan, como de objeto de provocación. El/la
profesor/a debe controlar la actuación del/la provocador/a para asegurarse de
que las cosas se realizan correctamente.
II. ENTRENAMIENTO EN RELAJACIÓN
La fase dos del programa de entrenamiento de la Tortuga incluye enseñar a los/as
niños/as a relajarse, a soltar sus músculos cuando ellos están realizando la Tortuga.
Durante la práctica de la Tortuga se introduce la relajación con una explicación a
través de la siguiente historia:
“La pequeña Tortuga iba a la escuela cada día más contenta, y se introducía dentro
de su concha cada vez que otros/as niños/as le pegaban, le insultaban, le rayaban
en su hoja, o cundo ella se encontraba rabiosa, enfadada sin saber muy bien el
motivo... Su profesora estaba muy contenta y le animaba a que lo siguiera haciendo
y a veces le premiaba. Pero la pequeña Tortuga en ocasiones tenía sensaciones de
enfado o rabia, o se encontraba mal después de que se metieran en su concha y
aunque se quedara allí, no desaparecían. Ella quería ser buena llevarse bien con sus
compañeros, obtener el premio que a veces le daban, pero los sentimientos de
enfado a veces eran muy fuertes y le tentaban diciéndole “Pequeña Tortuga, por
qué no le devuelves el golpe cuando el/la profesor/a no te está mirando y te quedas
tan tranquila...” La Tortuga no sabía qué hacer, estaba muy desconcentrada, ella
quería meterse dentro de su concha pero estos sentimientos de enfado la tentaban
para hacerlo mal.
Entonces recordó a la vieja y sabia Tortuga que la había ayudado hacía tiempo.
Antes de ir a la escuela corrió a la casa de la enorme Tortuga, se lo contó todo y le
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preguntó que podía hacer. Le dijo: “Tengo sentimientos de enfado en mi estómago
después de meterme en mi concha. Los sentimientos me dicen que pegue pero yo
no me quiero meter en líos, ¿qué puedo hacer para detener mis sentimientos de
enfado?”
La Tortuga más sabia de las sabias, Tortuga de la ciudad, tenía la respuesta,
sacudió por un momento su cabeza, se quedó un rato callada, y entonces le dijo a la
pequeña Tortuga:” Cuando estés dentro de tu concha, relájate. Suelta todos tus
músculos, y ponte en situación como si te fueras a dormir, deja que tus manos
cuelguen, relaja tus pies, no hagas nada de fuerza con tu tripa, respira lenta y
profundamente, deja ir todo tu cuerpo y los sentimientos de enfado también se
irán... piensa en cosas bonitas y agradables cuando te estés relajando. Si no te sale
yo le diré a tu profesor que te enseñe.”
A la pequeña Tortuga le gustó la idea. Al día siguiente cuando fue a la escuela se
lo contó a su profesor todo lo que la vieja Tortuga le había enseñado. Cuando un
compañero le hizo rabiar se metió en su concha y se relajó, soltó todos sus
músculos y se quedó un ratito fijándose cómo la tensión y los malos sentimientos
desaparecían. La Tortuga se puso muy contenta, continuó consiguiendo más
premios y alabanzas y al profesor le gustó tanto la idea que le enseñó a toda la
clase.”
Con el fin de conseguir una relajación profunda, es preciso comenzar
diferenciando entre estados de tensión y de relajación de cada músculo. Esta
habilidad se puede enseñar en dos fases:
• Se practica tensar y relajar grupos de músculos variados en el cuerpo
alternativamente y se van dando instrucciones para que se centren en las
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sensaciones que se tiene si un músculo está tenso o está relajado.
• Una vez que sepan relajarse siguiendo estas instrucciones, se les propondrá
relajar los músculos sin tensar previamente.
- FASE 1: Tensar y soltar
Tras contar la historia introductoria, se instruye a los/as niños/as primero a
tensar los músculos lo más fuerte que puedan fijándose en las sensaciones que
notan con esos músculos tan tensos, y después que los suelten de repente, y
que se fijen bien cómo va desapareciendo la tensión y lo bien que se van
quedando esas partes del cuerpo que van relajando.
Los músculos se relajan siguiendo el siguiente orden:
- Apretar bien las manos
- Doblar los brazos en arco en dirección a los hombros para tensar los brazos.
- Estirar las piernas como si quisieras tocar lo que tienes en frente de ti.
- Apretar firmemente los labios uno contra otro
- Cerrar los ojos fuertemente
- Empujar el estómago hacia arriba
- Coger aire profundamente, llenar los pulmones y retenerlo.
Presentar las instrucciones de relajación, despacio, con voz monótona, y con
pocos cambios en la inflexión de la voz. Podría ser algo como:
“Haz un puño con cada mano, muy bien, mantenlas apretadas tanto como te
sea posible, cuenta hasta diez tensando cada vez más, y luego sueltas ¡Suelta!
-43-
Y siente lo bien que está, nota como se fue relajando, estate unos segundos
fijándote en lo que notas cuando estás relajado/a. Ahora otra vez, vuelve a
cerrar los puños, mantenlos fuertemente cerrados, cuenta hasta diez, 1,2,3,
fuerte, 4,5,6, más fuerte, 7,8, tan fuerte como puedas, 9, 10 ¡Suelta!, deja tus
puños abrirse muy despacio, déjate ir, suelta y cuenta al revés hasta cero,
9,8,7, fijándote cómo va desapareciendo la tensión, 6,5,4, siente lo agradable
que es esto, 3,2,1, relájate y 0. Fíjate en lo que notas cuando estas relajado/a”
El/la profesor/a se paseará por la clase para asegurarse que los/as niños/as
realmente están tensando y relajando. Les refuerza y les ayuda para que relajen
sus músculos. Una forma de comprobar si están tensando es poner la mano
encima del músculo y comprobar la tensión. Sólo si experimentan la tensión
realmente aprenderán a reconocer el contraste entre el estado de tensión y la
relajación.
Se repiten varias veces las sesiones de prácticas. Posteriormente se integrará la
Tortuga y la relajación de tal forma que cuando estén en posición de Tortuga
se les incita a tensar su cuerpo entero, contando el/la profesor/a de 1 a 10,
después de lo cual los/as niños/as deberán relajar de repente todo su cuerpo.
Este procedimiento se repite en 3 o 4 sesiones de prácticas.
- FASE 2: Relajando
Se pasa a esta fase cuando se comprueba que han aprendido a relajarse tal y
como se ha descrito anteriormente.
En esta fase se les instruye para que relajen sus músculos sin la secuencia de
tensar – relajar. De nuevo se empieza por los puños para seguir con la
secuencia de manos, piernas, labios, ojos, estómago, y pecho.-44-
Se podría decir algo así como:
“Relaja tus manos. Fíjate en lo a gusto que se está. Siente como se relajan tus
manos, en el cosquilleo que notas, lo agradable que es”.
“Voy a contar al revés de 10 a 0, con cada número que diga vais a intentar
estar cada vez más y más relajados como la pequeña y bonita tortuga”
Se pueden utilizar también escenas agradables en imaginación mientras van
soltando los músculos, por ejemplo:
“Imagínate que te estás comiendo un helado muy rico” “que estás tumbado/a
en un prado verde, con la hierba muy suave y muy fresquita, y hace un sol
muy bueno....”
(Está demostrado que imaginar este tipo de escenas aumenta la relajación en
los/as niños/as)
El entrenamiento en relajación dura de una a dos semanas completas. El
criterio para pasar a la siguiente fase es del programa es el grado de relajación
de los músculos. Al finalizar el tratamiento en relajación, los/as niños/as han
de ser capaces de dar la respuesta de tortuga y asumir inmediatamente la
posición de relajación.
III. SOLUCIÓN DE PROBLEMAS
Es la última y más importante etapa de La Técnica de la Tortuga. Consiste en
cinco pasos:
-45-
- PASO 1: Definición muy clara de la situación problemática
- PASO 2: Pensar cosas (alternativas) para hacer frente a la situación
problemática.
- PASO 3: Evaluar las consecuencias de cada una de ellas y seleccionar la
mejor.
- PASO 4: Poner en práctica la solución elegida.
- PASO 5: Verificar los resultados.
Aunque este procedimiento parece demasiado complicado para los/as niños/as
pequeños/as, en la práctica estos pasos son fácilmente comprensibles.
El procedimiento a seguir es proponer una historia a modo de dilema y
preguntar acerca de su resolución. Para ello se define, en primer lugar,
claramente el problema. Sería conveniente utilizar situaciones reales que se
hubieran dado en clase, junto a otros ejemplos. Hay que asegurarse que los/as
niños/as comprenden la naturaleza del problema que se les está planteando.
Se continúa con los pasos 2 y 3, en los que se generan soluciones y se evalúan
las consecuencias de cada una de ellas. Si en este punto se les pregunta a los/as
niños/as qué pueden hacer en la historia problemática, la mayoría
inmediatamente gritarían “tortuga”. Se acepta la respuesta pero se pregunta
qué cosas se podrían hacer después de haber hecho la Tortuga. Se cuestiona a
los/as niños/as hasta que ellos puedan sugerir caminos de acción alternativos,
si no pueden, se les suministra. Cada solución que se proponga se tiene en
cuenta y se discute. Se consideran las consecuencias positivas y negativas de
cada solución para que ellos puedan ver las diferentes consecuencias, y sólo
-46-
sugerirlas en último extremo. Tras un periodo de discusión en grupo, hay que
intentar conseguir que la clase llegue a un consenso acerca de la mejor
elección para resolver la situación problemática. Ejemplo:
“Miguel tira una silla en mitad de la clase y empieza a arrastrarla. Se da cuenta
que el pupitre de Pedro está en su camino y que si sigue arrastrándola la silla
tropezará con él. ¿Qué puede hacer Miguel?”
Alumno/a: “Miguel tiraría la silla y le daría a Pedro”
Profesor/a: “¿qué pasaría?”
Alumno/a: “Pedro se pondría furioso y le pegaría a Miguel en la cabeza o
discutirían”
Alumno/a: “el/la profesor/a les castigaría a los dos”
Profesor/a: “¿qué otras cosas podría hacer Miguel?”
Alumno/a: “pedirle a Pedro que se apartara”
Alumno/a: “Pedro no se movería”
Alumno/a: “entonces Miguel apartaría a Pedro fuera de su camino”
Alumno/a: “Miguel tendría que mover su silla por otro sitio, alrededor de
Pedro”
Alumno/a: “pero hacer eso es demasiado trabajo”
Alumno/a: “pero Miguel no se metería en líos y podría entrar en la lotería
de la Tortuga”
-47-
Profesor/a: “entonces, ¿cuál sería la mejor cosa que Miguel puede hacer
para no meterse en líos, y entrar a participar en la tortuga?”
Alumno/a: “Miguel debería moverse esquivando a Pedro para no
molestarle”
Profesor/a: “correcto, de esa forma no se metería en líos, no se pelearían y
podría entrar en el juego”
Se repiten estos diálogos, intentando entre toda la clase ver las distintas
posibilidades que hay a la hora de actuar y las distintas consecuencias que de
cada una de ellas se derivan, poniendo numerosas situaciones problemáticas
que se den en el aula. Estas situaciones deben ser propuestas tanto por el/la
profesor/a como por los/as alumnos/as. Cuando los/as niños/as hayan
aprendido a generar y evaluar las soluciones en grupo, se repetirán estas
situaciones con los/as niños/as individualmente, repitiendo cada uno de
ellos/as una secuencia de Soluciones de Problemas entera en voz alta en la
clase. La clase evaluará las soluciones propuestas por el/la niño/a y alabará las
más adecuadas.
Para lograr que aprendan el concepto de elección de una solución adecuada,
también se puede utilizar la estrategia de hacer la siguiente pregunta: “¿qué
necesitas ahora? ¿Cuál es la mejor manera de conseguirlo sin meterte en líos?”
Ejemplo: “Juan empieza a chillar porque está teniendo problemas en hacer una
construcción de madera. Para y hace la Tortuga.:
Profesor/a: “¿qué necesitas Juan?”
Juan: “que me ayuden y me digan cómo hacerlo”
-48-
Profesor/a: “¿cuál es la mejor manera de conseguir esa ayuda?”
Juan: “pedirle a alguien por favor que me ayude, ¿me podrías ayudar?”
Profesor/a: “muy bien, me gusta mucho ayudarte cuando me lo pides de esa
forma.”
2.2 ANTECEDENTES
La agresividad que manifiestan los niños en edad preescolar ha sido motivo de estudio
por diversos investigadores que abordan diferentes estrategias y técnicas para la
modificación de las conductas agresivas en los infantes; cuyos resultados son de gran
significación para los objetivos planteados en la presente investigación por
cuanto destacan que el docente debe tratar de modificar este tipo de conductas
agresivas en los niños para que mejoren sus niveles de desarrollo socioemocional, se
integren de una mejor manera y pueda favorecer su formación integral. Entre estos
estudios se pueden señalar los realizados por:
INTERNACIONAL
Benitez de C. (1999) realizó un estudio titulado: Propuesta de Orientación
dirigida a docentes para la disminución de conductas agresivas de los niños. Tuvo
como objetivo elaborar, a partir de un diagnóstico una propuesta de orientación
dirigida a docentes para la disminución de conductas agresivas en los niños del Centro
Docente N°24 Las Angustias del Municipio San José de Cúcuta, Norte de Santander -
Colombia. El estudio se inscribe en la modalidad de proyecto factible, por ser un
programa que permitirá satisfacer las necesidades detectadas en el grupo social de
niños. La población estuvo conformada por 50 niños, de los cuales 35 son de sexo
masculino y 15 de sexo femenino; los 50 padres de familia o representantes de los
respectivos niños y 15 docentes del Centro Docente No 24. El proyecto se apoyó en la -49-
fase diagnóstica detectando que existen en los niños comportamientos agresivos
físicos y verbales y la existencia de condiciones socio-afectivas asociados a las
conductas agresivas del niño. Las conclusiones de este estudio de Benitez, indican
que los docentes carecen de estrategias para el manejo de conductas agresivas. Se
diseñó la propuesta basada en cinco estrategias para la disminución de conductas
agresivas de los niños las cuales serán dadas en orientación a los docentes a través de
dos talleres con una duración cada uno de 24 horas teórico prácticas.
Este estudio sirve de base a la presente investigación por cuanto hace referencia a la
importancia que tiene el hecho de disminuir las conductas agresivas en los niños para
favorecer su formación integral en el contexto escolar.
Fuentes (2001) realizó un estudio titulado: Efectos de un programa de
modificación de conducta sobre la agresividad en los niños del tercer nivel de
preescolar. El objetivo del estudio consistió en determinar los efectos de un
programa de modificación de conducta sobre la agresividad en los niños. La
realización de este estudio permitió a través de las teorías que se manejen bajo una
concepción conductista diseñar y aplicar un programa para disminuir dichos
comportamientos y los efectos y así poder aumentar el rendimiento académico de
estos estudiantes. Por consiguiente, las teorías que sustentan la investigación son las
de Ford, Urban y Bandura, para quienes la conducta se adquiere o aprende por dos
razones: primero con el fin de eliminar una situación nociva y segundo para inducir
sensaciones positivas o llegar a algún estado satisfactorio.
Para corroborar estos planteamientos se ejecutó una investigación de tipo
experimental de campo, con una muestra conformada por 10 niños del III nivel de
-50-
preescolar en el Jardín de Infancia Chiquinquirá en Maracaibo, Estado Zulia. Los
resultados obtenidos permitieron concluir que el índice de tasa de respuesta de
conductas agresivas, disminuyó en un 67 y 50% luego de aplicarse el programa de
modificación de conductas agresivas. En las conclusiones señala que las conductas
agresivas que se aprenden o se cambian como resultado de las consecuencias
generadas en el ambiente; pueden ser modificadas en beneficio de los niños por medio
de las técnicas de extinción de conductas agresivas y aumento de
comportamientos pro-sociales que pueden aplicarse en el contexto preescolar.
Este estudio es un aporte a la presente investigación dado que permite
establecer la viabilidad de aplicar programas de modificación de conductas para
niños preescolares.
Ferrer (2002) realizó una investigación la cual titulada: Efectos de un Programa
de Modificación Conductual para Incrementar las Actividades de Escritura en
el Aula Regular, en dicho trabajo se planteó determinar los efectos de un programa
de modificación conductual para incrementar la frecuencia en el cumplimiento de las
actividades de escritura en niños con dificultades de aprendizaje de la Escuela Básica
“Juan Crisostomo Falcón” durante el año escolar 200-2001. La población estuvo
constituida por cuarenta niños que acuden al Aula. Integrada en el turno de la tarde,
quedando la muestra conformada por ocho niños a través de un muestreo
intencional. El tipo de investigación fue de naturaleza experimental de nivel
explicativo de campo bajo la modalidad diseño de reversión A-B-A. La técnica e
instrumento de recolección de datos fueron la observación y el registro de producto
permanente.
-51-
El procedimiento se inició dictando un taller a los docentes de los niños para
entrenarlos en la aplicación del programa; los datos fueron analizados
comparativamente atendiendo a los porcentajes arrojados en las mediciones. Los
resultados obtenidos mostraron que al aplicar el programa a los niños que no
culminaban sus actividades de escritura, se observó un incremento con respecto al
número de palabras que copiaban antes de la aplicación del mismo. Se concluyó a
través del reforzamiento positivo se logra el incremento de conductas.
Los resultados de este estudio son un referente para los objetivos de la presente
investigación por cuanto destacan la importancia que tiene la aplicación de un
programa de modificación de conductas en niños con problemas de agresividad.
Cotis (2002) realizó un estudio titulado: Programa de Actualización Docente
para el Manejo de Conductas Agresivas en Niños Preescolares. Tuvo como
objetivo diseñar un programa de actualización sobre manejo de conductas agresivas
dirigido a los docentes de preescolar. Se fundamentó en el enfoque de la teoría de
Bandura sobre el aprendizaje por modelamiento. En lo metodológico consideró los
criterios de la modalidad proyecto factible bajo una investigación de campo de
carácter descriptivo. La población la representaron 57 docentes de preescolar en el
Municipio Torres del Estado Lara, a quienes se les aplicó una encuesta y fueron
observados en sus actividades de clase.
Los resultados le permitieron concluir que los niños manifiestan frecuentemente
conductas agresivas tanto hacia otros niños como hacia el docente, pero estas
situaciones no son debidamente atendidas por los docentes ya que no están
actualizados en el manejo de conductas agresivas y se limitan a etiquetar a los niños
de agresores pero no aplican las estrategias adecuadas para solventar tal situación. Se
diseñó el programa de actualización basado en una jornada de dos talleres cada uno -52-
con una duración de 20 horas teórico prácticas, y luego una jornada de evaluación de
control y seguimiento para evidenciar la utilidad que le dan a las estrategias para el
manejo de conductas agresivas tratadas en el taller.
Este estudio sirve de base a la presente investigación teniendo en cuenta que aporta
datos en torno a las manifestaciones agresivas que presentan los niños de educación
preescolar y la necesidad de que el docente cuente con las estrategias necesarias para
contribuir a erradicar esta problemática desde el ambiente escolar.
Quintero (2003) llevó a cabo una investigación titulada: Manejo operativo de las
técnicas de modificación y disminución de las conductas agresivas en los niños
del nivel preescolar en el Municipio Mara en Maracaibo, Estado Zulia. El
propósito del estudio fue diagnosticar el conocimiento y manejo que le dan los
docentes del nivel preescolar a las técnicas de modificación y disminución de
conductas agresivas manifestadas por los niños. La investigación empleó un diseño de
campo de carácter descriptivo. Se consideró una población de 35 docentes a quienes
se les aplicó un cuestionario conformado por 44 items de los cuales 24 miden las
conductas agresivas en los niños y 20 items miden las técnicas conductuales
empleadas por los docentes para la modificación y disminución de la agresividad.
NACIONALES
- Lucía Puga Villanueva, realizó una investigación titulada “Relaciones
interpersonales en un grupo de niños que reciben castigo físico y emocional”,
cuyo objetivo fue Describir las características de las relaciones interpersonales de
niños en educación inicial de 5 años, de nivel socioeconómico bajo que reciben
castigos físicos y emocionales como parte de la disciplina cotidiana en el hogar, en
-53-
una Institución Educativa de Lima. Concluyeron que el 48% de los niños estudiados
manifestaban relaciones interpersonales de inhibición, 43% manifestaban relaciones
interpersonales agresivas y 9% tenían conductas asertivas.
- Cárdenas Flores Verónica, Cosiatado Carrasco Graciela y Livia Vicente
Sandra, realizaron una investigación titulada “Contenidos televisivos violentos
asociados a la conducta agresiva de niños de 8 a 12 años”, cuyo objetivo fue
determinar el nivel de exposición a contenidos televisivos explosivos y su asociación
con la conducta agresiva en niños y niñas de 8 a 12 años de una e una institución
educativa del distrito de Comas en Lima, Perú. Material y métodos: se realizó un
estudio descriptivo y de corte transversal. La población estuvo conformada por 350
niños que cumplieron los criterios de inclusión, la muestra de 115 niños fue
seleccionada utilizando el muestreo sistemático. Los instrumentos usados fueron
estructurados y previamente validados. Resultados: los resultados mostraron que del
total de niños evaluados el 67,83% mostró riesgo de presentar conductas agresivas.
Quince escolares presentaron bajo nivel de exposición a contenidos televisivos
violentos. Entre ellos, el 93,3% no presentó conductas agresivas. Entre el total de
escolares con alto nivel de exposición a contenidos televisivos violentos, hubo una
igualdad de porcentaje de 45,5%, tanto en riesgo de conducta agresiva, como en
conducta agresiva. Se observa que el mayor porcentaje de niños (77,4%) presentó un
nivel de exposición medio a contenidos televisivos violentos. Conclusiones: cerca de
las tres cuartas partes de los niños encuestados tienen un nivel de exposición medio.
Si este porcentaje se suma al 10% del nivel de exposición alto, se tiene un total de
más del 87% de niños expuestos a contenidos televisivos violentos. Asimismo, los
niños presentaron riesgo de conducta agresiva, existiendo asociación entre el nivel de
-54-
exposición a contenidos televisivos violentos y la conducta agresiva en los niños de 8
a 12 años.
- Castro (1996) investigo acerca de las características familiares y psicosociales
que influyen en la conducta agresiva de los niños preescolares del cono norte de
Lima, hizo un estudio descriptivo analítico de corte transversal de treinta niños entre
3 y 6 años de edad con sus respectivos parientes (82 adultos), los instrumentos que
empleo fueron: ficha de recolección de datos de la familia, un cuestionario de
agresividad para niños (preferencias televisivas) y otra para adultos de Buss Durkee,
los resultados a los que llegó le permitieron establecer que existe relación entre los
modelos de la conducta; padres familiares, la televisión y la conducta del niño. Por lo
tanto concluyo que le puntaje de agresividad del niño tiene que ver con una mala
relación con sus familiares (agresiva-autoritaria) encontró además una relación
estadísticamente significativa entre la agresividad del niño sus preferencias por
programasinfantiles de televisión (programas infantiles agresivos), además hallo que
en las familias conformadas por más de 5 miembros presentaba un agresividad alta.
- Alarcón Revilla y Carmela María de Jesús. Realizaron una investigación
titulada Estilos disciplinarios de padres de familia y la conducta agresiva de sus
hijos adolescentes en un colegio estatal del distrito del Agustino-Lima en el año
2011. Se realizó una investigación con el objetivo de describir y establecer si existe o
no relación significativa entre el estilo disciplinario de los padres y la conducta
agresiva de sus hijos(as), alumnos de una institución educativa estatal en El Agustino.
La investigación es descriptiva, correlacional comparativa, la muestra fue de 110
alumnos de ambos sexos entre 11 a 13 años y 110 padres de familia. Se aplicó dos
instrumentos: Estilos disciplinarios de los padres y la Guía de observación sobre
conductas agresivas en el aula. Los resultados indicaron que existe relación entre el
-55-
estilo autoritario del padre y la conducta agresiva de excluir de su hijo(a). El estilo
autoritario de la madre está relacionada con la conducta agresiva de poner apodos y la
de insultar de su hijo(a). El estilo permisivo del padre está relacionada con las
conductas agresivas de culpa y de burla en su hijo(a). No se encontró relación entre el
estilo democrático del padre y de la madre y las conductas agresivas de los hijos.
2.3 DEFINICIÓN DE TÉRMINOS BÁSICOS
Agresividad: reacción inadecuada ante una determinada situación, que se
despliega para canalizar la frustración. (Ribes, 1995)
Agresividad Física: son acciones que tienen como propósito causar daños a
otros individuos. (Ribes, 1995).
Agresividad Verbal: son acciones que se producen cuando se utilizan
palabras hirientes o burlonas, provocando cambios conductuales en el
individuo. (Ribes, 1995).
Condicionamiento Operante: proceso en el cual se ejerce control sobre la
conducta de una persona en cierto ambiente por medio de la aplicación del
refuerzo. (Moles, 2000)
Conducta Agresiva: comportamiento o respuesta inadecuada de un individuo
ante situaciones. (Moles, 2000)
2.4 HIPÓTESIS
Hipótesis general
La aplicación de la técnica de la tortuga disminuye las conductas agresivas de los
niños y niñas de la Institución Educativa ------ de Tingo María.
Hipótesis específicas
-56-
- La aplicación de la técnica de la tortuga influye en la disminución de la
agresividad física de los estudiantes de 5 años de la Institución Educativa N° -----
- La aplicación de la técnica de la tortuga disminuye la agresividad verbal de los
estudiantes de la Institución Educativa --- de Tingo María.
2.5 VARIABLES
Variable independiente
La técnica de la tortuga
Variable dependiente
Conductas agresivas
-57-
CUADRO DE OPERACIONALIZACIÓN DE LAS VARIABLES
-58-
OPERACIONALIZACIÓN DE LAS VARIABLESVariables Dimensiones Indicadores
- Independiente.La técnica de la tortuga
Desarrollo de la técnica
Técnica de relajación
Técnica de solución de problemas.
- Historia inicial- Práctica en grupo- Práctica individual
- Apretar bien las manos- Doblar los brazos en arco en dirección a
los hombros para tensar los brazos- Estirar las piernas- Apretar los labios uno contra otro.- Cerrar los ojos fuertemente.- Empujar el estómago hacia arriba.- Coger aire profundamente, llenar los
pulmones y retenerlo.
- Definición clara de la situación problemática.
- Pensar en alternativas para hacer frente a la situación problemática.
- Evaluar las consecuencias de cada alternativa y seleccionar la mejor.
- Verificar los resultados.
- DependienteAgresividad
- Agresividad física
- Agresividad verbal
- Golpea a sus compa-ñeros con patadas.- Muerde a sus compa-ñeros.- Golpea a sus compa-ñeros con sus
manos.- Arañan a sus compa-ñeros.- Emplea algún objeto para golpear a sus
compañeros.- Empuja a sus compañeros.
- Insulta a sus compañeros.- Se burla de sus compañeros.- Grita a sus compañeros.- Amenaza a sus compañeros.
CAPÍTULO III
MARCO METODOLÓGICO
3.1 MÉTODO Y DISEÑO DE LA INVESTIGACIÓN
G.E. 01 -------------- X ------------ 02
G.C. 03 -------------- X ------------ 04
G.E. = Grupo Experimental.
G.C. = Grupo de Control
X = Aplicación de la técnica de la tortuga
01 y O3 = Medición antes del experimento
02 y 04 = Medición después del experimento
3.2 TIPO Y NIVEL DE INVESTIGACIÓN
El tipo de investigación corresponde al experimental, en el nivel cuasi experimental,
pues se encuentran las dos variables: causa – efecto. En este caso se tratará de
disminuir las conductas agresivas de los niños, mediante la aplicación de la técnica de
la tortuga.
3.3 POBLACIÓN Y MUESTRA
Población
La población en estudio estará conformado por los niños y niñas de 5 años de la
Institución Educativa Inicial N° -------- de Tingo María, con un total de --- alumnos.
-59-
Cuadro N° 01
Población de estudiantes de la Institución Educativa Inicial N° 089
SECCIÓN VARONES MUJERES TOTAL
4 Años 7 4 11
5 Años 10 9 19
TOTAL 17 13 30
Fuente: Nómina de Matrícula 2014
Muestra
La muestra estará conformado por los niños y niñas de 4 años.
Cuadro N° 02
La muestra de estudiantes de 4 años del nivel inicial de la Institución
Educativa Inicial N° 089
SECCIÓN VARONES MUJERES TOTAL
“4 Años” 7 4 11
TOTAL 7 4 11
Fuente: Nómina de Matrícula 2014
3.4 TÉCNICAS E INSTRUMENTOS DE RECOLECCIÓN DE DATOS
3.3.1 Técnicas de recolección de datos
- Observación
3.3.2 Instrumentos de Recolección de datos
- Ficha de observación
- Cuaderno anecdotario
-60-
3.5 Técnicas de procesamientos y análisis de datos
Para el procesamiento se empleará la media aritmética y para la presentación de los
datos se emplearán cuadros y gráficos estadísticos
-61-
CAPÍTULO IV
ASPECTOS ADMINISTRATIVOS
4.1 CRONOGRAMA
ACTIVIDADES
2014 2015
J A S O N D E F M
Elección del tema. X
Revisión de Literatura. X X X
Formulación de hipótesis y
variables.
X X X
Redacción del marco teórico. X X
Elaboración de instrumentos X X
Elaboración del Plan de
Investigación.
X X X
Aprobación del Plan de
Investigación.
X
Recolección de datos X X X X
Aplicación de la técnica X X X
Tratamiento estadístico de
datos.
X X
Redacción del informe X X
Presentación del informe X X
-62-
4.2 RECURSOS HUMANOS Y FÍSICOS
Recursos humanos.
- Asesor Metodológico
- Asesor técnico
- Tesista
Recursos físicos
- Plumones y colores
- Papel bond
- Lapiceros
- Pizarra
4.3 RECURSOS FINANCIEROS
Financiamiento
La investigación será financiada por la tesista, con apoyo de la Institución Educativa.
Presupuesto
Cuadro N° 03
GASTOSCOSTOS DEOPERACIÓN
1. MATERIALES- Útiles de escritorio
PlumonesPizarraPapel bon
150.00
2. SERVICIOS- Tipeo e impresión- Fotocopias
300.00 250.00
TOTALES 700.00 Los precios son en Soles.
-63-
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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Cotis, M. (2002) Programa de Actualización Docente para el Manejo de Conductas
Agresivas en Niños Preescolares.
-64-
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Clínico. Caracas: Greco.
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Agresividad. Buenos Aires: Paidos.
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-65-
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Experimental Simón Rodríguez.
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de Especialización, Maestría y Tesis Doctoral. Caracas.
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Preescolares. Trabajo de grado no publicado. Centro de Investigaciones Psicológicas y
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México: Manual Moderno S.A.
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Zambrano, M. (2002), Plan de orientación para el manejo operativo de técnicas
conductuales por parte de los docentes para disminuir conductas agresivas de los
alumnos”. Trabajo Especial de Grado. Universidad de los Andes.
-66-
ANEXOS
-67-
FICHA TÉCNICA DEL JUEGO EDUCATIVO “LA TORTUGA”
NOMBRE DEL JUEGO : LA TORTUGA
OBJETIVOS :
- Enseñar a los niños y niñas estrategias para relajarse.
- Fomentar el autocontrol de la conducta impulsiva.
- Desarrollar la capacidad de conocer, expresar y manejar las emociones.
- Controlar la agresividad, analizando adecuadamente las situaciones y responder
con autocontrol.
TIPO DE CONDUCTA : De agresividad: físicas, verbales y conductas disruptivas.
PARTICIPANTES : Niños de 3 a 8 años de edad.
APLICACIÓN : En el aula
DURACIÓN : Seis semanas.
¿EN QUE CONSISTE EL JUEGO?
El juego consiste en ayudar a los niños y niñas a aprender a relajarse, replegando su cuerpo,
como hacen las tortugas. De esta forma relajarán sus músculos y evitaran actuar de forma
impulsiva. A través de una dinámica que comprenden por analogía con la tortuga, los
pequeños aprenderán una técnica útil y sencilla para relajarse y controlar sus impulsos. Es
importante desarrollar habilidades de autocontrol ante conductas impulsivas. Con la técnica
desarrollaran también habilidades para reconocer, expresar y manejar sus emociones. Con
esta técnica de fácil aplicación, proporcionamos a los niños y niñas medios para canalizar su
propia ira.
CUENTO DE LA TORTUGA:
“Antiguamente había una hermosa y joven tortuga, tenía 4 años y acababa de empezar el
jardín. Su nombre era Pequeña Tortuga. A ella no le gustaba mucho ir al jardín, prefería estar
en casa con su hermano menor y con su madre. No le gustaba aprender cosas en el colegio,
ella quería correr, jugar,... era demasiado difícil y pesado hacer las fichas y copiar de la
pizarra, o participar en algunas de las actividades. No le gustaba escuchar a la profesora, era
mucho más divertido hacer ruidos de motores de coches que algunas de las cosas que la
profesora contaba, y nunca recordaba que no los tenía que hacer. A ella lo que le gustaba era
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ir enredando con los demás niños, meterse con ellos, gastar bromas. Así que el colegio para
ella era un poco duro.
Cada día en el camino hacia el jardín se decía a sí misma que lo haría lo mejor posible para
no meterse en líos. Pero a pesar de esto, era fácil que algo o alguien la descontrolara, y al
final siempre acababa enfadada, o se peleaba o le castigaban. “Siempre metida en líos”
pensaba “como esto siga así voy a odiar el colegio y a todos” y la Tortuga lo pasaba muy
pero que muy mal. Un día de los que peor se sentía, encontró a la más grande y vieja tortuga
que ella hubiera podido imaginar. Era una vieja tortuga que tenía más de trescientos años y
era tan grande como una montaña. La Pequeña Tortuga le hablaba con una vocecita tímida
porque estaba algo asustada de la enorme tortuga. Pero la vieja tortuga era tan amable como
grande y estaba muy dispuesta a ayudarla “¡Oye! ¡Aquí!” dijo con su potente voz, “Te
contaré un secreto ¿Tú no te das cuenta que la solución a todos tus problemas la llevas
encima de ti?” La Pequeña Tortuga no sabía de lo que estaba hablando “¡tu caparazón” ¡tu
caparazón!” le gritaba “¿para qué tienes tu concha? Tú te puedes esconder en tu concha
siempre que tengas sentimientos de rabia, de ira, siempre que tengas ganas de romper cosas,
de gritar, de pegar... Cuando estés en tu concha puedes descansar un momento, hasta que no
te sientas tan enfadada. Así la próxima vez que te enfades, ¡métete en tu concha! A la
Pequeña Tortuga le gustó la idea y estaba muy contenta de intentar este nuevo secreto en la
escuela.
Al día siguiente lo puso en práctica. De repente una niña que estaba delante de ella
accidentalmente le dio un golpe en la espalda. Empezó a sentirse enfadada y estuvo a punto
de perder sus nervios y devolverle el golpe, cuando de pronto recordó lo que la vieja tortuga
le había dicho. Se sujetó los brazos, las piernas y cabeza, tan rápido como un rayo, y se
mantuvo quieta hasta que se le pasó el enfado. Le gustó mucho lo bien que estaba en su
concha donde nadie le podía molestar. Cuando salió, se sorprendió de encontrarse a su
profesora sonriéndole, contenta y orgullosa de ella. Continuó usando su secreto el resto del
año. Lo utilizaba siempre que algo o alguien le molestaba, y también cuando ella quería
pegar o discutir con alguien. Cuando logró actuar de esta forma tan diferente, se sintió muy
contenta en clase, todo el mundo la admiraba y quería saber cuál era su mágico secreto”.
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FICHA DE OBSERVACIÓN
ESTUDIANTE: _________________________________________________
FECHA : _________________________________________________
Ficha para diagnosticaR la presencia de conductas agresivas en los niños y niñas de 5
añosINDICADORES ESCALA OBSERVACIONES
AGRESIVIDAD DIRECTA(Agresividad física)
SIEMPRE4
A VECES
NUNCA OBSERVACIONES
1. Golpea a sus compañeros con patadas.
2. Muerde a sus compañeros.
3. Golpea a sus compañeros con sus manos.
4. Arañan a sus compañeros.
5. Emplea algún objeto para golpear a sus compañeros.
6. Empuja a sus compañeros.
AGRESIVIDAD DESPLAZADA(Agresividad hacia los objetos que lo
rodean)1. Tira los objetos que encuentra
rápidamente.
2. Tira sus útiles escolares.
3. Golpea los objetos que lo rodea.
AGRESIVIDAD CONTENIDA(Agresividad oral y gestual)
1. Insulta a sus compañeros.
2. Ser burla de sus compañeros.
3. Grita a sus compañeros.
4. Amenaza a sus compañeros.
5. Les hace gestos inapropiados a sus compañeros.
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