LA SOCIEDAD DE GUERRA Y SU TRANSFORMACIÓN - Dieter Duhm

8/9/2019 LA SOCIEDAD DE GUERRA Y SU TRANSFORMACIN - Dieter Duhm

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LA SOCIEDAD DE GUERRA Y SU TRANSFORMACINDieter Duhm - Mayo 2005

No habr paz en el mundo

Mientras haya guerra en el amor

A diario nos llegan noticias terribles de todas las partes del mundo. El acontecimientoque di origen a este texto fu el brutal asesinato de Lus Eduardo Guerra, coordenador de unaaldea de paz en Colombia, junto con siete habitantes de la aldea, entre los que haba mujeres

jvenes y nios. Es uno de esos pormenores diarios que hoy en da acompaan la guerra de laglobalizacin a escala mundial. Ahora nuestra amiga Gloria Cuartas1, que como alcaldesa

protegi la ciudad de Apartad en Colombia durante aos, recibe amenazas de muerte.Estamos en contacto con estas personas desde hace aos. Una guerra parecida a la deColombia se desarrolla hoy en da en muchas partes del mundo. Por ello, el texto que sigue nose refiere slo a un pas sino a la situacin del mundo entero.

La guerra global tiene sus raices en las estructuras ms profundas de nuestracivilizacin y por tanto no puede ser impedida simplemente a travs de apelos a la paz,aclaraciones tericas o resistencia. El trabajo por la paz global necesita un conceptoglobal nuevo para un futuro sin guerra.

La industria de la guerra es un componente fijo de nuestra civilizacin. Si queremosun futuro sin guerra, necesitamos una nueva civilizacin, una nueva forma de convivencia yuna manera diferente de habitar el planeta. Paz verdadera no es un slogan sino una formadiferente de vida y de sociedad. sta deriva de estructuras sociales que no destruyen sino que,al contrario, fomentan valores bsicos humanos tales como compasin, confianza, apoyomutuo y solidaridad. Para construir estas nuevas comunidades es necesaria una cooperativamundial de personas determinadas. Este texto va dirigido a todas las personas que estn

preparadas y capacitadas para construir o apoyar con todos los medios una cooperativasemejante.

Los EEUU estn preparando las prximas cruzadas dentro del contexto de su nuevoorden mundial. Proyectan el Greater Middle East, una enorme zona de libre comerciodesde Marruecos hasta Paquistn. Es en este contexto donde se planean las guerras contra Irany otros pases, como p.e. Siria. A pesar de todas las declaraciones diplomticas atenuantes, esevidente que esta guerra, igual que estaba la de Irak, est programada mucho antes de que se

buscaran las supuestas armas de destruccin masiva.

Las calles de las aldeas y ciudades de Irn, por las que hoy todava juegan los nios ynias, puede que en breve parezcan las de Falludjah, la ciudad destruda de Irak.

Se sabe realmente qu significa guerra? Realmente se conoce el dolorindescriptible de personas sofocadas bajo los escombros, mutiladas o quemadas? La guerra esesto y slo esto. Los crteles del poder econmico, poltico y militar saben que, a travs desus polticas de conquista, hay nios y nias que morirn quemados, de frio o de hambre y, a

pesar de ello, lo hacen. Saben que familias enteras sern desmembradas y comunidadesdestruidas y, apesar de ello lo hacen. Hablan de paz, de libertad y de democracia pero matan a

1Gloria Cuartas es actualmente la Secretaria General del Frente Social y Poltico, ocup el cargo de Alcaldesa del municipio de Apartaddurante el perodo 1995-1997 y recibe, desde entonces y hasta ahora, constantes amenazas de muerte. (N. de la T.)

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todos los luchadores por la libertad que se interpongan en su camino. Han construido unmundo de consumismo que genera esclavitud, desesperacin y colapso al otro lado de laTierra. Detrs de los nmeros de la bolsa est el sufrimiento de innumerables personas yanimales. Ms personas de las que se murieron en su momento durante una guerra, se muerencomo consecuencia de la colonizacin y de la globalizacin. Ser posible seguir disfrutando

de nuestros privilegios y reducir nuestros esfuerzos a palabras? Tenemos que encontrarmedios y vias reales para liberar a la Tierra de la guerra.

Formamos parte indirecta de la guerra porque no tenemos tiempo para comprender loque realmente est sucediendo. Nuestra cultura est organizada de tal manera que nadie tengatiempo para entender lo que pasa en realidad. Nosotros participamos en la guerra porque

participamos en una civilizacin que genera guerra por todas partes. La guerra es uncomponente de nuestra civilizacin, de nuestra economa, de nuestro consumismo y denuestras ideas acerca de la vida. Nuestra propia sociedad occidental vive de la industria y delcomercio de armas, de la guerra contra la naturaleza, de la guerra contra poblados ycampesinos del as llamado tercer mundo, de la guerra contra el amor, de la guerra contra

nuestras anclas mentales/espirituales y contra los lugares que son un hogar para la especiehumana. Esta guerra provoca vctimas en Afganistn o en Irak, en Amrica Latina o enPalestina, pero tambin provoca vctimas donde supuestamente hay paz y democracia: en lasoficinas y en las fbricas, en las escuelas y en las familias, en las relaciones amorosas y en losmatrimonios destrudos, en la situacin de los jvenes desarraigados, en el sufrimiento sexualde los jvenes, en las redes pedfilas (como las que se han descubierto en Blgica yrecientemente en Francia y en Espaa). Y, finalmente, en la situacin desesperada de personasque ya no consiguen soportar la red de mentiras de la cultura existente: cada treinta minutosalguien se suicida en Alemania.

Y no formarn tambin parte de la guerra diaria los mataderos, las granjas de pieles ylos laboratorios de experimentacin con animales? ser realmente necesario que el progresode una cultura est ligado a semejante sufrimiento en el mundo animal?

Existe una solucin. La podemos reconocer cuando observamos con la suficientedistancia mental/espiritual el Todo de la vida actual en la Tierra.

Considere la Tierra como un organismo vivo cuyos rganos estn interligados a travsde ciertas frecuencias. Usted mismo es un rgano de dicho organismo. A travs de sus

pensamientos, palabras y actos, ciertas frecuencias son emitidas y stas sirven o para la paz opara la guerra.

Reconocer que todava es parte integrante de la guerra global en tanto se sintieraguiado por los pensamientos habituales de miedo, rabia y venganza. Entonces, cree espaciosdonde pueda encontrar la fuerza para no seguir dando resonancia al poder de la guerra, ni enel mundo ni en usted mismo. Dichos espacios pueden ser: centros especiales de seminarios,centros espirituales, caminos de peregrinacin, comunidades.

Se dar cuenta de que vctimas y agresores estn frecuentemente ligados porestructuras anlogas y que usted mismo podra ser tanto vctima como agresor.

Se trata de una estructura de sufrimiento profundamente comn e histricamente

desarrollada, que genera tanto vctimas como agresores. Los agresores tambin fueronvctimas antes, tambin a ellos les robaron la confianza, el amor y el lugar en el que se sentan



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Durante los siglos pasados se hicieron tentativas de expresar esta Matriz Sagrada enarmonas numricas, en patrones geomtricos, en proporciones de templos y catedrales. Como

personas de hoy, por ello mismo, tenemos que transferirla a las condiciones reales de la vida,del trabajo, del hogar y del amor, a la tcnica y organizacin, a las estructuras sociales y a la

tica ecolgica. La sociedad necesita un nuevo sistema operativo para concretar el cdigode la paz. La civilizacin existente es un sistema operativo de dominio, miedo y violencia. LaMatriz Sagrada es un sistema operativo de apertura, transparencia y conectividad. Crear losprimeros centros y modelos que funcionen para este nuevo sistema operativo es la tareaactual de la humanidad. Nosotros les llamamos Aldeas por la Paz o Biotopos deCura.

Si se diese la creacin de nuevas comunidades coherentes con la Matriz Sagrada enalgunos lugares de la Tierra, entonces se generara, muy probablemente, un efecto de campoglobal capaz de liberar fuerzas de paz y de cura que hoy en da todava estn ocultas pormiedo y preocupacin. Por favor, concdase un tiempo para comprender este proceso. (Es

como si una proyeccin hologrfica fuese sensibilizada por un rayo lser con un ngulonuevo: surge una nueva imagen, la realidad se trasforma.)

El camino para superar la guerra no termina en una profundidad de esprituiluminada. El mundo no necesita slo buenas personas, por encima de todo necesitanuevas formas de vida reales para un futuro sin guerra. Necesita modelos para unanueva civilizacin, para que podamos comenzar a habitar nuestro planeta de unamanera nueva que sea coherente con las leyes de la vida.

Para realizar la paz, tenemos que saber qu es la paz. Debemos aprender las reglas dela confianza y del amor, tan nueva y profundamente como si estuvieramos en la Tierra por

primera vez. Nosotros abordamos reas que, hasta ahora, estaban atribuidas a la religin o a lapsicologa profunda. Pero no ser sta precisamente una caracterstica del nuevo modo depensar: comprender que estas reas internas del ser humano tienen un significado polticosignificativo? no ser una cuestin poltica de primera lnea la runa diaria de millones de

personas debido a la frustracin amorosa, al odio y a los celos?

Aprendemos las leyes de la paz universal al aprender las leyes de la confianza en lacomunidad universal. Porque toda la vida existe en comunidad. Si queremos sobrevivirnecesitamos nuevas formas de comunidad: comunidad con personas y pueblos, con animalesy plantas, con todos los seres de la naturaleza y de la creacin. Necesitamos comunidades de

coevolucin, de cooperacin y de apoyo mutuo de todos los participantes, porque todossiguen el mismo instinto de vida, todos estn guiados por el ser, por la conciencia, por elcdigo gentico, todos juntos forman la gran familia de la vida en la Tierra.

El redescubrimiento de la comunidad, la capacidad de vivir en comn, ladisponibilidad para la cooperacin con todos los seres - sta es la tarea-clave de nuestrotiempo. La conocida biloga Lynn Margulis lo dice en estos trminos:

Si quisiramos sobrevivir a las crisis ecolgicas y sociales que hemos creado,

probablemente estaramos obligados a involucrarnos en iniciativas comunitarias

totalmente nuevas y dramticas.

El grupo de rock aleman Die rzte (Los Mdicos) cant:



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Tu violencia es slo un grito mudo por amor.

Tus botas militares ansan ternura.

La conexin entre la falta de amor y la disposicin a la violencia queda claramente sealada.

Ellos continan:

Nunca aprendiste a articularte y tus padres nunca tuvieron tiempo para ti. (...) Porquetienes problemas que no le interesan a nadie, porque tienes miedo del cario, por eso

t eres un fascista.

Estas son conexiones que tenemos que ver y que cambiar, si queremos ponerle fin a la guerra.

La expansin colectiva de violencia que vivimos en la Tierra es la explosin deenergas que han estado reprimidas y bloqueadas durante mucho tiempo, energas que notenan cabida en el sistema establecido. Los chavales americanos que atraviesan Bagdad en

tanques y bombardean casas al son de la msica alta, vienen de un contexto que fue incapazde proporcionarle una direccin positiva a estas energas desbordantes. Sabine Lichtenfels,co-fundadora del Biotopo de Cura Tamera en Portugal, escribe:

La guerra proviene de energas retenidas durante mucho tiempo. La guerra proviene

del considerar parte de tu alma como mala, de juzgarla y, as, privar continuamente

al Mundo de esta parte de tu fuerza, hasta que sta revienta por s misma y se vuelvedestructiva.

En estas circunstancias, podemos comprender las crueldades sdicas que acompaancada guerra, p.e. las torturas sexuales en Irak.

Se le pregunta a un joven el porqu est en los mercenarios. l responde: Porquequiero convertirme en un hombre de verdad.

No superaremos estos problemas slo con resistencia poltica y apelos morales ointerioridad espiritual. Definitivamente, necesitamos nuevas formas de convivencia, nuevascomunidades y nuevos espacios de vida, en los que sea posible volverse un hombre de verdadcon medios ms suaves, donde no tengamos miedo al amor y no necesitemos botas militares

para esconder nuestros deseos.

Si queremos ponerle fin a la guerra, tenemos que acabar con ella donde nace ycrece todos los das: en nuestras condiciones de vida diarias, en el constante stress deltrabajo estpidoy montono, en los mtodos de maximizacin y distribucin del lucro,en las oficinas y fbricas, en las escuelas y familias, en las tragedias de amor, en nuestrasideas sobre lo qu es ser hombre o ser mujer, en nuestras ideas de sexualidad y amor, enlas jaulas demasiado pequeas de nuestra vida profesional, social y sensual.

Queremos que la juventud del Mundo no vaya ms a la guerra? Entonces necesitamosobjetivos de vida ms altos, de una vida que valga la pena vivir y de mejores oportunidades

para dar un sentido activo a la fuerza de la juventud.



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Queremos terminar con la violencia sexual a escala mundial? Entonces tenemos quecrear condiciones de vida reales en las que la alegra sexual pueda ser experimentada sinviolencia, sin humillaciones y sin restricciones innecesarias.

Queremos acabar con los abusos a los nios? Entonces construyamos condiciones de

vida en las que no pase por la cabeza de nadie ver a una criatura como un objeto sexual.

Queremos liberar al mundo del despotismo, la traicin y la mentira? Entoncesconstruyamos condiciones reales en las que despotismo, traicin y mentiras dejen de tener unaventaja evolutiva.

No slo soar, hablar, desear, apelar sino construir, realmente construir! El mundocambiar para mejor tan pronto como demostremos que ello es posible. Para eso tenemos quecrear modelos convincentes. Los conocimientos existen o estn en autntico desarrollo yaguardan su comunin en lugares adecuados. Para la implantacin de Aldeas por la Pazorientadas hacia el futuro, hay conceptos tanto sociales como tecnolgicos disponibles, pero

hasta el momento no han podido ser realizados en la escala necesaria debido a la falta deapoyo financiero y de divulgacin (vid. www.tamera.org). Si tuviera dinero, por favor, apoyeel desarrollo de dichos modelos. Si fuese periodista, ayude entonces a difundir estainformacin positivamente. Si fuese conocido, por favor utilice su nombre y su influencia

para la redistribucin del dinero en el sentido de la paz.

Tenemos que hacer todo esto si tenemos la seria intencin de terminar la actual guerraen el mundo.

Agradecemos a amnista internacionaly a todos los grupos de paz sus esfuerzos. Nossentimos ligados a las personas que protegen la vida en muchos lugares del mundo y resistena la injusticia global. Pero adicionalmente tenemos que hacer visible el objetivo positivo de lahumanidad. Creemos los primeros modelos convincentes y materialicemos los conceptosexistentes. Nos alegramos desde ahora por todos aquellos que quieran cooperar con nosotrosen ese sentido. El mundo necesita ahora la unin de los/as ms dedicados/as trabajadores/as

por la paz para crear un nuevo Forum en la Tierra: una cooperativa mundial para un futuro senguerra.

En nombre de nuestros nios y nias y de todas las generaciones venideras.Al servicio de todas las criaturas.

Para ms informacin:

Verlag Meiga PortugalBiotopo de Cura I TameraMonte do Cerro7630 ColosPortugal

Email: [email protected](en alemn y ingles)

mailto:[email protected]://www.dieter-duhm.de/mailto:[email protected]://www.dieter-duhm.de/

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