INSTITUTO PARA EL FOMENTO Y EL DESARROLLO DEL SEGURO

LA SEGURIDAD CONTRA ROBO

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1. ASPECTOS GENERALES Las medidas de seguridad contra robo e intrusión son sistemas, procedimientos o ingenios físicos encaminados a reducir dichos riesgos basándose en los siguientes principios: • Inducir al autor a desistir (efecto disuasorio). Deben ser visibles. • Dificultar la realización, prolongando el tiempo para alcanzar el objetivo,

obligando además a utilizar herramientas no sencillas. • Posibilitar la identificación y/o captura en el acto del autor o autores del

hecho. No es posible una seguridad total. Las medidas consiguen ciertos “niveles de seguridad”. La consecución de un nivel aceptable de seguridad dependerá de: • Grado de peligro de las mercancías a proteger • Aceptación de las medidas por parte de los empleados y/o clientes y

visitantes del establecimiento. • Desembolso • Compatibilidad con la seguridad contra otros riesgos. Tipos de medidas de seguridad contra robo • Medidas organizativas (medios personales) • Medidas o dispositivos mecánicos (protección física) • Sistemas de alarma (protección electrónica)

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2. MEDIDAS ORGANIZATIVAS (MEDIOS PERSONALES) Son medidas precautorias de tipo general y que se traducen en normas generales de organización así como en actuaciones personales concretas. Entre otras podríamos citar las siguientes: � Vigilancia personal

� Ya sea mediante vigilantes profesionales o no. � Para ser efectiva debe ser “vigilancia permanente” es decir 24 horas

al día de los 365 días del año. � Es, sin duda, la medida más eficaz pero a su vez la más cara.

� Normas para responsables de seguridad y vigilantes

� Comprobar cierres y conexión alarmas � Hacer registros � Comprobar luces

� Controles de personal

� No dar a conocer medidas de seguridad y stocks valiosos. � Precaución con el nuevo personal.

� Adiestramiento del personal. Mentalización. � Llaves

� Controlar a quién se le dan duplicados � Iluminación exterior e interior

� Una iluminación suficiente puede actuar como elemento disuasorio

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3. MEDIDAS O DISPOSITIVOS MECÁNICOS (PROTECCIÓN FÍSICA) La seguridad física es el conjunto de elementos materiales que retrasan el éxito de la acción delictiva y sirven de soporte a los subsistemas electrónicos. Suponen un obstáculo, haciendo más difícil el robo ya que prolongan el tiempo de actuación, alargando la fase de fractura y de recolección. Hay dos principios fundamentales a tener en cuenta en el diseño de protecciones físicas:

“Un ladrón salvará cualquier obstáculo si tiene tiempo y no es

molestado” “La resistencia de una cadena es igual a la de su eslabón más débil”

Damos a continuación algunas definiciones acerca de diversos tipos de protecciones físicas. PUERTAS Hay dos sistemas de forzamiento de puertas: � No destructivos: ganzúas, llaves falsas, etc. � Destructivos: rotura de cilindros, corte del pestillo, ataque con ácidos,

palanqueta, impacto, rotura del cerco o del marco, rotura del muro, etc. Existen diferentes tipos de puertas a efectos de seguridad. De mayor a menor seguridad, los tipos son: acorazadas, blindadas y de seguridad. Cada una tiene características y precios diferentes. La más sencilla y barata es la puerta de seguridad. El elemento que diferencia una puerta blindada y una acorazada es la plancha de acero que se coloca entre la madera a modo de relleno. En una puerta acorazada la cantidad de acero es mayor que la que contiene una blindada, por lo que el precio final de la puerta también es más elevado. Indicamos a continuación las características de cada una.

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PUERTAS BLINDADAS Se utilizan como puerta principal de acceso a oficinas, comercios y también en domicilios particulares. Las hojas de que se compone pueden estar fabricadas con madera, aleaciones y metal. Están recubiertas con una chapa de acero de dos milímetros de grosor en las dos caras que conforman la puerta. Principales características: Cerradura: normalmente poseen un cilindro que impide su extracción a través de ganzúas o taladros, soportando un peso de hasta 500 kilogramos, aunque dependerá del modelo elegido y del tamaño de la puerta. Los expertos aconsejan instalar una cerradura con doble escudo de seguridad. Llaves: suelen ser computadas, es decir, fabricadas a medida para una puerta concreta. Resulta muy difícil hacer copias de las llaves. Por ello, una vez instalada la puerta, se hace entrega de cinco llaves para que el dueño de la vivienda las reparta como desee. Es recomendable dejar un juego fuera del domicilio, bajo la responsabilidad de una persona de confianza. De lo contrario, ante el olvido o pérdida de la llave, quienes han realizado la instalación de la puerta tardarán una media de entre cuatro y cinco horas para abrirla. Y sólo se puede abrir si se rompen la cerradura y parte de la placa de acero. Perfiles: planchas de acero del interior de la puerta. Evitan el empleo de palancas para forzar su apertura. Mirilla o visor panorámico de 180 grados. Materiales incombustibles: fabricadas con materiales que impiden el paso del fuego, humo, gases y calor. También es un buen aislante acústico. Bloqueo por los cuatro costados: una vez que se acciona la llave, la puerta queda bloqueada por cuatro lados. Esto significa que las barras de acero previamente colocadas se mueven al unísono. Una barra lo hace hacia el marco del techo, la segunda hacia abajo, la tercera va hacia el lado de las bisagras y la cuarta se mueve del lado de la cerradura. En el mercado también hay puertas blindadas que no tienen la particularidad de bloquearse por los cuatro lados. A diferencia de estas, tienen varillas roscadas con un capuchón de plomo en la punta. No obstante, los expertos recomiendan la primera opción. Inconveniente: A pesar de constar de barras de acero, la madera de su interior permite que alguien pueda entrar introduciendo palancas entre los huecos compuestos por madera.

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PUERTAS ACORAZADAS Actualmente, y ante el auge y el abaratamiento de las puertas blindadas, las acorazadas se utilizan casi de manera exclusiva para cámaras que contienen objetos de gran valor como muebles antiguos, obras de arte etc. Asimismo, se utilizan como sistema de protección en museos y palacios de congresos donde se celebran eventos especiales. Las puertas acorazadas, menos vulnerables que las blindadas, están formadas por tubos de acero y hormigones especiales, así como de diversas aleaciones y los llamados rigidizadores, elementos que se insertan en la superficie de la puerta para mantener la solidez de las chapas de acero colocadas en los planos interior y exterior. Sobre las chapas de acero se colocan los tableros con la madera que se desee. El más barato es el sapelli; el nogal, roble y pino son los más caros. Su principal cualidad es su alta resistencia a cualquier ataque. Principales características: Mecanismos de cierre. Se encastran en la estructura del marco. La cerradura que se suele instalar en este tipo de puertas se considera como una de las más seguras del mercado. Su éxito radica en que los pestillos suelen ser oblongos o redondeados y rectangulares. Una vez que se cierra la puerta, la cerradura se activa en la parte frontal, inferior, superior y lateral. Cerradura. Otra alternativa es la instalación de una cerradura de combinación. Son aquellas que sirven para bloquear la caja y pueden ser mecánicas, retardadas, electrónicas, digitales, etc. Bisagras: dotadas de refuerzos que impiden la acción de sierras o palancas.

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Cerco y anclajes: son de hierro macizo y como el interior de la puerta está formado completamente por acero no hay puntos vulnerables. Inconveniente: El precio

PUERTAS DE SEGURIDAD Es la más utilizada en viviendas particulares. Principales características: No tienen por qué estar formadas por placas de acero. La materia base de la que están hechas puede ser madera, metal o PVC, y se refuerza con perfiles horizontales y verticales resistentes al fuego y gas. Precio: el coste es mucho menor que una puerta blindada o acorazada. Cerradura: dispone de bombillos de seguridad que impiden su extracción utilizando ganzúas. Inconveniente: es menos segura que las otras dos. No todas presentan perfiles que evitan la utilización de palancas para forzar su apertura.

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PROTECCIONES DE VENTANAS Y ESCAPARATES REJAS FIJAS Realizadas con distintos tipos de materiales. El nivel de seguridad va a depender del sistema de fijación a la pared así como de la resistencia al corte del material del que estén construidas. PERSIANAS, CONTRAVENTANAS No proporcionan una gran seguridad, sobre todo si el material del que están hechas es madera. CIERRES NO OPACOS Cierres de tijerilla

Cierres tubulares

Cierres de anillas

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Cierres articulados

CIERRES OPACOS Cierres ciegos ondulados

Cierres de chapa articulada

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Cierres semiopacos: Cierre enrollable microperforado (aluminio anodizado) (1)

Combinaciones de cierres

(1) Todas o parte de las lamas están troqueladas con pequeños agujeros que dan un efecto de transparencia que permite la visión de los productos expuestos, la vigilancia del local y una seguridad similar a la que proporciona un cierre del tipo opaco.

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Cristales de seguridad

Están compuestos por dos o más lunas unidas íntimamente por interposición de láminas de material plástico (butiral de polivinilo), que se adhiere al vidrio mediante tratamiento. Variando la naturaleza, número y espesor de sus componentes se obtienen conjuntos de características diferentes con diferentes grados de seguridad: � Vidrio antimotín o antidisturbios, formado por 2 vidrios de 6 mm de

espesor unidos una lámina de butiral de polivinilo de 0,38 mm de espesor (6+6). Está preparado para soportar los típicos impactos originados en un motín (lanzamiento de piedras, cócteles molotov, balas de goma, etc.).

� Vidrio antirrobo. Acristalamiento con un grado de seguridad capaz de

impedir durante un cierto espacio de tiempo el acceso al lugar protegido ante un ataque realizado con un hacha, palanqueta, zapapico o herramientas similares. Una configuración típica es la de 3 vidrios de 6 mm de espesor cada uno entre los que se han colocado láminas de butiral de polivinilo de 0,38 mm de espesor (6+6+6). Este tipo de acristalamiento se instala en joyerías, peleterías, ópticas, armerías, objetos de arte, áreas exteriores de bancos, etc. Presenta un tiempo de resistencia reducido en función de la herramienta de ataque empleada, del número de agresores y de las dimensiones del acristalamiento.

� Vidrio antibala o blindado, adecuado para impedir el paso a su través

de proyectiles de armas de fuego. Una configuración típica es la formada por 4 vidrios de 6 mm de espesor cada uno, separados por láminas de butiral de polivinilo de 0,38 mm de espesor (6+6+6+6). También se consideraría antibala un vidrio de tres capas de 8 mm. Se utiliza en los recintos o bunkers de caja de los bancos, centrales de seguridad, puestos de vigilantes de seguridad, etc.

Protección de escaparates mediante “defensas” en la acera

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OTRAS PROTECCIONES FÍSICAS

• Ladrillos vítreos o vidrio acorazado

• Protecciones de claraboyas, tragaluces, conductos de ventilación, etc.

• Cercas y vallas de entrada al recinto

• Barreras de entrada

• Protecciones del edificio como tal: � Tejados (edificios colindantes) � Paredes y techos � Escaleras de incendios � Tuberías de desagüe

• Protecciones individuales de objetos • Cajas fuertes y cámaras acorazadas (2)

(2)Caja fuerte autónoma: � Pared de defensa con un espesor de protección de 65 mm. � Compuesto especial de alta resistencia alojado entre las chapas de acero de

la caja fuerte, complementado con armaduras metálicas integradas. � Ofrece protección contra el fuego � El sistema de cierre consiste en cerradura mecánica con combinación

mecánica o electrónica

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4. SISTEMAS DE ALARMA (PROTECCIÓN ELECTRÓNICA) Es el conjunto de elementos técnicos destinados a advertir localmente o a distancia de cualquier incidencia que pueda representar una intrusión (o un intento de intrusión) en un local. Los sistemas de alarma contra robo están concebidos para detectar, lo antes posible y de forma fiable, la penetración en los locales vigilados e incluso el intento de penetración. Sin embargo, y a diferencia de las medidas mecánicas (protección física), no impiden ni dificultan la factura. Así pues, el grado óptimo de seguridad solamente puede conseguirse, además de con las medidas lógicas de orden organizativo, mediante una adecuada combinación y complementación de medidas mecánicas (protección física) y de una instalación de alarma contra robo (protección electrónica). En el supuesto más sencillo, una instalación de alarma contra robo consta de tres elementos:

Sentidos

Detector

El detector observa los cambios (fuerzas y movimientos) que se producen en el curso de un robo con fractura.

Cerebro Central

La central de señalización y control analiza la señal procedente del detector y, en caso necesario, desencadena la alarma.

Voz – acción

Dispositivo de alarma

El dispositivo de alarma señaliza que se está cometiendo un robo con fractura, mediante alarma acústica, óptica o silenciosa.

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DETECTORES Elemento de la instalación de alarma que observa una magnitud física apropiada para avisar de la intrusión al área vigilada. Puede ser de forma permanente o a intervalos de tiempo. Describimos a continuación algunos tipos de detectores que se utilizan habitualmente en protección contra robo. � Detectores de rotura de cristal

Las superficies de vidrio (ventanas, puertas, escaparates, etc.) son puntos débiles como entrada a los locales a proteger. Mediante detectores electrónicos que se aplican a las superficies de vidrio, puede controlarse la rotura de las mismas. Los detectores de rotura de cristal se componen de un transformador piezocerámico, que convierte las oscilaciones sísmicas que se producen en caso de rotura del cristal en señales eléctricas, provocando la alarma.

� Barreras de microondas (o infrarrojos)

Equipos de emisor/receptor montados en oposición. Al intentar atravesar la zona vigilada, el intruso interrumpe total o parcialmente el haz de microondas generado por el emisor, lo que es captado por el receptor, que provoca la alarma.

� Detectores ultrasónicos

Dispositivo emisor que genera señales ultrasónicas inaudibles e inofensivas para personas y cosas, que se reflejan en los objetos y son captadas por el receptor. Cualquier movimiento del intruso modifica las características de la señal reflejada y provoca la alarma (pueden tener el emisor y el receptor separados).

Detector acústico digital de rotura de cristal.

Señala la presencia de un intruso mediante la detección del sonido de cristales

rompiéndose.

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� Detectores volumétricos de radar

Emiten y reciben microondas, comparando la frecuencia de las ondas emitidas con la de las recibidas. El movimiento del intruso varía la frecuencia de la señal reflejada y provoca la alarma. Lo que detectan es el movimiento.

� Detectores volumétricos de infrarrojos

Se basan en el principio de que todos los cuerpos desprenden energía por radiación (incluyendo el cuerpo humano). El detector infrarrojo recibe la energía infrarroja de la radiación existente en la zona vigilada, estando diseñado de forma que activa la alarma al aumentar repentinamente la energía infrarroja recibida. Lo que detectan es la presencia.

Detector volumétrico de movimiento vía radio (868 Mhz). Cobertura 11 m.

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VULNERABILIDAD AL SABOTAJE Muchos de los sistemas electrónicos que hemos descrito son vulnerables al sabotaje de modo que los intrusos van a poder inutilizar los sistemas y cometer el delito sin que éstos funcionen. Este será un parámetro importante a la hora de elegir el sistema adecuado al fin que se persiga. Entre los diversos métodos que se utilizan para inutilizar los sistemas de seguridad contra intrusión podemos citar: • Corte de fluido eléctrico • Corte de cable telefónico • Rociar con spray los detectores de infrarrojos • Los magnéticos, con el corte del cable o superposición de una placa

metálica • Los sísmicos, con golpear transcurrido un tiempo prudencial