La Religión Verdadera - iglesiagalilea.org Religion... · Versículo clave: Miq. 6:8 De la...

3
Versículo clave: Miq. 6:8 Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios. Miqueas 6:8 NTRODUCCIÓN: Cuando leemos Miqueas 6:6-8 podemos ver que los contemporáneos del profeta Miqueas, estaban presentando un culto equivocado. Su adoración consistía solo del ritual, careciendo del sentido más pleno, es decir, la verdad que representaba el ritual. Pensaban que ofreciendo millares de animales y arroyos de aceite, y coronándolos de sacrificios humanos, lograrían agradar a Dios. ¡Qué abominación! ¡Cuán equivocados estaban! Dios llama a todos los hombres, en todas las épocas, a presentar una religión verdadera que satisfaga sus demandas. Conozcamos tres características que manifiestan, según Miqueas, la religión verdadera. DESARROLLO 1) Llevar una vida revestida de justicia: La justicia es un atributo de Dios, por tanto, el hombre para gozar de comunión con Él, debe manifestar un carácter revestido de esa justicia. La base para una moral santa es la justicia divina aplicada a la vida diaria. No basta con conocer lo que es justo, sino que es necesario poner ese conocimiento por obra. Los abusos de los poderosos en contra de los desposeídos, hacen un urgente llamado en las palabras del profeta, a condenar la injusticia de ellos. El "hacer justicia" se manifiesta en una justa relación con el prójimo en asuntos familiares, sociales, políticos, laborales, etc. Presentarse delante de Dios con las manos manchadas por la injusticia, es insensatez del alma. La justicia no es gratuita, exige un alto costo. Pero bien vale la pena pagar tan alto precio, si ello resulta en beneficio de nuestros semejantes. Mitigar el dolor del que sufre, es una necesidad para el hombre que ama la justicia. Debemos atender a las necesidades de nuestros semejantes; sentir nuestro su infortunio, para así 01 La Religión Verdadera

Transcript of La Religión Verdadera - iglesiagalilea.org Religion... · Versículo clave: Miq. 6:8 De la...

Versículo clave: Miq. 6:8

Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer

justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.

Miqueas 6:8

NTRODUCCIÓN: Cuando leemos Miqueas 6:6-8 podemos ver que los contemporáneos del

profeta Miqueas, estaban presentando un culto equivocado. Su adoración consistía solo del

ritual, careciendo del sentido más pleno, es decir, la verdad que representaba el ritual. Pensaban

que ofreciendo millares de animales y arroyos de aceite, y coronándolos de sacrificios humanos,

lograrían agradar a Dios. ¡Qué abominación! ¡Cuán equivocados estaban!

Dios llama a todos los hombres, en todas las épocas, a presentar una religión verdadera que

satisfaga sus demandas. Conozcamos tres características que manifiestan, según Miqueas, la

religión verdadera.

DESARROLLO

1) Llevar una vida revestida de justicia: La justicia es un atributo de Dios, por tanto, el hombre

para gozar de comunión con Él, debe manifestar un carácter revestido de esa justicia. La base

para una moral santa es la justicia divina aplicada a la vida diaria. No basta con conocer lo que es

justo, sino que es necesario poner ese conocimiento por obra. Los abusos de los poderosos en

contra de los desposeídos, hacen un urgente llamado en las palabras del profeta, a condenar la

injusticia de ellos.

El "hacer justicia" se manifiesta en una justa relación con el prójimo en asuntos familiares,

sociales, políticos, laborales, etc. Presentarse delante de Dios con las manos manchadas por la

injusticia, es insensatez del alma.

La justicia no es gratuita, exige un alto costo. Pero bien vale la pena pagar tan alto precio, si ello

resulta en beneficio de nuestros semejantes. Mitigar el dolor del que sufre, es una necesidad para

el hombre que ama la justicia.

Debemos atender a las necesidades de nuestros semejantes; sentir nuestro su infortunio, para así

01

La ReligiónVerdadera

Versículo clave: Miq. 6:8

encontrar justicia y ministrarla al que padece los males del hombre. Busquemos la justicia,

primeramente, con los de la familia de la fe, y posteriormente, con todos. Todo sacrificio u ofrenda

presentada a Dios, que no esté revestida de justicia, es inútil como expresión de genuina

adoración. Dios se agrada cuando nuestra adoración se viste del ropaje resplandeciente de la

justicia.

2) Buscar el bienestar de nuestros semejantes: Cuando hablamos de misericordia, ¿a qué nos

estamos refiriendo? La misericordia, es un atributo de Dios, en cuya virtud, sin sentir tristeza o

compasión por los pecados y miserias de los hombres, los perdona y redime. Es el misericordioso

favor del superior al inferior, completamente inmerecido.

Al ser creados a "imagen de Dios", esa misma virtud está en nosotros. Y es ella la que nos inclina

a dolernos ante los males de nuestros semejantes. Quien no ejerce una actitud misericordiosa

ante de Dios, manifestada en la búsqueda del bienestar de nuestros semejantes, no puede

esperar alcanzar misericordia delante de Él.

“Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzaran misericordia” (Mt 5:7).

Deberíamos atender a los consejos del sabio: “Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad;

átalas a tu cuello, escríbelas en la tabla de tu corazón”. (Pr 3:3) “A su alma hace bien el

misericordioso; más el cruel se atormenta a sí mismo” (Pr 11:17).

La misericordia, al igual que la bondad, son expresiones del fruto del Espíritu que nacen ante los

momentos de crisis de nuestros semejantes. Si no somos capaces de sentir compasión por el que

padece, jamás sabremos lo que es la misericordia, la bondad y el amor hacia el prójimo.

3) Humillarse ante la Presencia de Dios: La humildad es una necesidad, pues esta forma parte

del carácter de Dios (Fil 2:5-8), y es a Él a quien debemos tomar como modelo. Además, demanda

de quien le adora, que se humille ante Él. La humildad no es otra cosa que someternos a otra

persona para caminar junto a ella en comunión. El profeta Amos, pregunta: "¿Andarán dos juntos,

sino estuvieren de acuerdo? (3:3). Nadie puede caminar junto a Dios, si primero no se humilla

delante de Él.

02

La ReligiónVerdadera

Versículo clave: Miq. 6:8

De la humildad, depende el carácter del adorador. Dios se agrada de las pequeñas cosas, como

la humildad sincera, nacida de un corazón rendido a Él, así como se rinde la espiga de trigo ante

el sol, para presentar a este el fruto de su vida. Los millares de sacrificios podrán correr como ríos

de aceite, pero jamás agradaran a Dios, pues por si solos nada valen. Solo el oferente les da valor,

sí este los reviste de genuina humildad.

APLICACIÓN:

El profeta Miqueas, pregunta: ¿Con qué me presentaré ante Jehová, y adoraré al Dios Altísimo?

¿Me presentaré ante él con holocaustos, con becerros de un año? ¡No! ¿Se agradará Jehová de

millares de carneros, o de diez mil arroyos de aceite? ¡No! ¿Daré mi primogénito por mi rebelión,

el fruto de mis entrañas por el pecado de mi alma? ¡No! ¡Me presentaré delante de Él con una vida

revestida de justicia, misericordia y humildad! Ese será mi sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.

03

La ReligiónVerdadera