LA más LindA deL mundo · 2018-03-02 · Tamayo, Mónica Garrote, Justo Amable y Expósito. El...
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LA MÁS LINDA DEL MUNDO
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LA más LindA deL mundo
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asociaciones de cubanos
residentes en el exterior
seguridad y amabilidad:
peldaños para llegar a cuba
javier sotomayor destaca el
potencial del atletismo cubano
ReVisTA de LA emiGRACiÓn CuBAnANo. 214 Edición Digital Primera Semana/
Marzo 2018
Fundada en agosto de 1995. Publicación semanal adscrita a la Dirección de Asuntos
Consulares y de Cubanos Residentes en el Exterior (DACCRE), del Ministerio de
Relaciones Exteriores. República de Cuba.
ConseJo de diReCCiÓnErnesto Soberón Guzmán,
Aimé Osoria Muñoa, Lianet Arias Sosa,
Jorge Petinaud Martínez
ediToRAYolanda Borges Bello
diseÑoRené Marrero Iglesias
CoRReCCiÓnFrancisco A. Muñoz González
ediTAdA PoRVicepresidencia Editorial de Prensa Latina.Agencia Informativa Latinoamericana S.A.
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Telfs.: 7 8321495 y 7 8383649E-mail: [email protected]
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Cubanos residentes en Nicaragua acompañaron a la Embajada
de Cuba en el país durante las tres jornadas del torneo amistoso de béisbol entre Cuba y Nicaragua, desarrollado en el imponente estadio Dennis Martínez, de la capital pinolera.
Con gran entusiasmo los cubanos disfrutaron de los tres partidos, destacándose el último tope del 25 de febrero, en el cual Cuba resultó ganadora, en un intenso y cerrado juego que se extendió a extrainnings.
El encuentro sirvió para fortalecer el trabajo que ha venido
Nicaragua
desarrollando la Asociación de Cubanos Residentes en Nicaragua con el propósito de sumar nuevos miembros para continuar defendiendo los logros de la Revolución y apoyando a la Isla en todos sus reclamos internacionales.
El coloso de Managua fue un espacio propicio para que los cubanos residentes se dieran cita y disfrutaran con doble amor —hacia Cuba y Nicaragua—, en
un espectáculo de solidaridad y amistad entrañables entre ambas naciones hermanas.
La Asociación se suma al agradecimiento del equipo de béisbol cubano al pueblo y las autoridades nicaragüenses por el respeto y la atención brindada, dispuestos a continuar la marcha de la mano de la Isla en próximas jornadas de amor por Cuba.
Embajada de Cuba en Nicaragua
Asociaciones de cubanos
residentes en el exterior
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Cubanos y holandeses se reunieron para iniciar los
festejos en los Países Bajos por el aniversario 60 del triunfo de la Revolución Cubana, que se cumplirá el 1 de enero de 2019.
De acuerdo con un comunicado, durante los próximos meses tendrán lugar actividades de diverso formato para celebrar la fecha, un programa que comenzó con el encuentro de amigos de la solidaridad, jóvenes comunistas y cubanos residentes, celebrado en la Embajada cubana en La Haya.
Durante la velada se reiteró la disposición de continuar construyendo puentes de solidaridad y amor con nuestro país, en medio de poemas, música y un exquisito buffet con la más típica comida de la Isla.
De todas las provincias del país de los tulipanes llegaron los amigos para unirse a la celebración junto al colectivo de la misión estatal cubana.
La Haya, Holanda
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Una representación de los cubanos residentes en Ghana sostuvo un intercambio con Mercedes
López Acea, vicepresidenta del Consejo de Estado de Cuba, durante el Encuentro de Solidaridad con la Isla, en el cual se dieron cita importantes representantes de las organizaciones que integran la Campaña de Solidaridad.
El evento, celebrado en el Centro Recreativo T-Havana Park, devino escenario apropiado para que los cubanos residentes expresaran a López Acea su amor y agradecimiento a Cuba por la posibilidad que tienen muchos de sus hijos de disfrutar de las becas de estudios de Medicina ofrecidas por la Isla. También reiteraron su compromiso con las tradiciones y con los valores nacionales.
Embajada de Cuba en Ghana
Promocionar arte y cultura fue el objetivo de la colección “Arte más allá de Cuba”, inaugurada el
22 de febrero de 2018 en la sala 1 del Centro Cultural Olimpo, ubicado en la ciudad de Mérida, Yucatán, México.
La muestra colectiva, que comparte la Galería Arte1010, contó con 28 trabajos de los artistas cubanos Missael Acosta Hernández, Radiel Lezcano, Alicia de la Campa, Ángel León, Sinecio, Radimis Miguel Borges Tamayo, Mónica Garrote, Justo Amable y Expósito.
El evento, con una importante presencia de destacados artistas locales y cubanos, así como del cónsul general de Cuba, Mario Jorge García Cecilia, fue valorado como una interesante muestra cultural de nuestro país. Las 28 obras permanecerán expuestas hasta el mes de marzo.
Consulado General de Cuba en Mérida, Yucatán
Ghana
Yucatán, México
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Los cubanos residentes en Grecia están realizando varias acciones
importantes para fomentar el intercambio cultural y deportivo heleno-cubano, de lo cual da fe el número cada vez más creciente de proyectos y acciones permanentes que vienen teniendo lugar en espacios importantes en el presente y de cara al futuro.
Tuvo lugar, además, una concurrida apertura de la exposición de pinturas Ink traces, de José Escobar, cubano residente en Salónica. El hecho cultural ocurrió
Grecia en la céntrica galería Ro, de la segunda ciudad de Grecia.
Del mismo modo, se realizó en esa ciudad un prometedor encuentro para la promoción del intercambio deportivo con Cuba. El mismo promoverá el desarrollo de acciones en corto plazo en nuestro país, una evidencia del potencial de los deportistas cubanos residentes en Grecia para gestionar e impulsar proyectos conjuntos, a partir del prestigio que tiene el deporte de la Isla.
También un proyecto deportivo relevante y con alto impacto en
la sociedad griega es la Academia JAE, en Amaliada, Peloponeso, bajo la permanente conducción del respetado profesor Juan Alfredo Escobar Osorio, subcampeón mundial de taekwondo. En abril la JAE va a inaugurar en Amaliada un campamento de verano para niños y jóvenes.
Asimismo, tuvo lugar un inolvidable encuentro con una nutrida representación de amigos de Cuba, para celebrar el aniversario 59 del triunfo de la Revolución Cubana y el 1er. aniversario de la Asociación de Cubanos Residentes en Salónica. Este encuentro, promovido por la Asociación Heleno-Cubana de amistad con Cuba, consolidó aún más la inquebrantable amistad entre Grecia y Cuba.
Un encuentro con autoridades de la ciudad de Marathonas, para ultimar detalles sobre la próxima apertura de la exposición de fotografías Cuba en el corazón, tuvo lugar recientemente para organizar el 1er. Festival Cubano de Marathonas, del que serán protagonistas los artistas cubanos residentes en Grecia.
El Festival se realizó en el estadio de la histórica ciudad y demostrará, una vez más, el activo e importante papel de la comunidad de cubanos residentes en Grecia en la promoción del intercambio heleno-cubano a través del desarrollo de proyectos duraderos, colectiva e individualmente enriquecedores, con un impacto positivo en las relaciones entre los dos pueblos hermanos.
Embajada de Cuba en Grecia
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Al decir reciente de un joven periodista en un diario cubano, la roca más grande del país es la
que guarda aquí los restos del líder histórico de la Revolución, Fidel Castro.
Por supuesto, la metáfora aludía a las dimensiones morales y simbólicas del monolito donde descansan sus cenizas, convertido ya en sitio de culto para millones de cubanos y otros ciudadanos del mundo, que acuden a expresar su homenaje a uno de los más grandes estadistas y revolucionarios de la era moderna.
No obstante, la comparación entre la roca sagrada y la conocida como la Gran Piedra está tejida con los hilos invisibles y trascendentes de la historia: la del cementerio de Santa Ifigenia fue extraída, precisamente, de las estribaciones de esa formación
la roca inmensa y el grano de maíz
montañosa, donde él y algunos de sus compañeros se refugiaron después del fallido asalto al cuartel Moncada, el 26 de julio de 1953.
Fue allí donde, podría decirse, comenzó su sobrevida, cuando la providencia puso al frente de la pequeña tropa del ejército del dictador Fulgencio Batista —que los perseguía— al teniente Pedro Sarría, quien lo salvó de una muerte segura al intuir, quizás, la grandeza de aquel hombre de ideas y acción.
La Sierra Maestra, el principal macizo montañoso cubano, al cual pertenece esta geografía suroriental, fue el ámbito fundamental en el que se desarrollaron las acciones bélicas de la última y decisiva etapa insurreccional contra el régimen tiránico, iniciada tras el desembarco del yate Granma, procedente de
POR MARTA CABRALES
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México —el 2 de diciembre de 1956— y finalizada con el triunfo del 1 de enero de 1959.
De tal manera, el sencillo conjunto monumental, realizado por un equipo dirigido por el arquitecto Eduardo H. Lozada León, encierra notables significados que alcanzan también a otros elementos, como las columnas del cercado, cuya parte superior evoca al monumento a la caída en combate de José Martí en Dos Ríos.
Las piedras en el breve camino al túmulo son chinas pelonas que provienen del entorno de las desembocaduras de los ríos La Plata y Uvero, donde el Ejército Rebelde combatió victoriosamente bajo el mando de Fidel. Los helechos y las posturas de café en la vegetación complementan los aires frescos de las serranías orientales.
A más de 23 kilómetros de la necrópolis —Monumento Nacional—, se yergue cuesta arriba, a unos 1 226 metros sobre el nivel del mar, el que es considerado por muchos como el peñasco más pesado
del planeta, un bloque de brecha volcánica de 72 mil toneladas de peso, 55 metros de largo y 25 de ancho.
En ese Paisaje Natural Protegido, al que da nombre la Gran Piedra, en la Reserva de la Biosfera Baconao, es también de privilegio la hacienda La Isabelica, como parte de parajes cafetaleros declarados Patrimonio Mundial por la Unesco.
La roca-tumba granitoide, de poco menos de 50 toneladas y unos cuatro metros de altura, con la urna de cedro en su interior, rebasa cualquier intento de cálculo. Las cinco letras en bronce con el nombre de “Fidel” en la humilde tarja de mármol verde remedan el apotegma martiano de la gloria del mundo contenida en un grano de maíz.
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más linda del mundoPara los cubanos, la bandera nacional entraña el sentimiento
profundo, la lágrima indiscreta, el valor ejemplar, la alegría retornada, el amor al terruño, el remolino de pasiones. La bandera es Cuba. La bandera es la Patria.
Cuando se la ve, en lo alto del asta, se percibe en el viento la protección espiritual de este símbolo nacional cual si se tratara de la madre que guía, enseña, educa y prepara para la vida.
Es este el pabellón tricolor que acompañó en épocas pasadas, y lo hace también ahora, las luchas patrióticas del pueblo cubano. Solo el pensamiento de que una bota extranjera intente mancillarla calienta la sangre de un pueblo que en ella se ha visto siempre representado.
Al aire flota orgullosa, como una dama elegante envuelta en traje de seda, cuando abraza a los jóvenes, hacedores de magia en el arte, en el deporte, en la academia; en tierra extranjera, cuando identifica los campamentos del llamado “ejército de las batas blancas”, integrado por personal de la salud encargado, además, de entregar la esperanza a los más vulnerables de este mundo.
Siempre está presente en cada uno de los momentos importantes de esta isla, antes y ahora.
Cuenta la historia que el general venezolano Narciso López, en sus discursos, evocaba la existencia de una Cuba libre de España, pero con pretensiones de anexarla a Estados Unidos; se encontraba entonces —en 1849— en la ciudad estadounidense de Nueva York, cumpliendo tareas patrióticas.
En una ocasión, cansado, se quedó dormido, recostado en un banco; al
despertarse, miró hacia las
alturas y contempló, en el amanecer, celajes azules y blancos, que contrastaban con el rojo de un sol pujante. El planeta Venus aún refulgía en el cielo neoyorquino.
Entonces el general pensó en que aquella imagen creada por la naturaleza poseía los atributos que él había pensado para la bandera que representaría la futura lucha por la libertad de Cuba: los colores azul, rojo y blanco.
Se puso entonces en contacto con un amigo, el patriota, poeta y dibujante cubano Miguel Teurbe Tolón, quien diseñó el emblema que
POR LÍDICE VALENZUELA
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desde entonces identifica a la Isla antillana. Emilia, la esposa de Teurbe, cosió la enseña patria con tela de raso, a mano. La primera bandera midió medio metro de largo por 35 centímetros de ancho. Un estrecho bies, de trencilla, bordeó la estrella, colocada en un triángulo rojo.
Cuando diseñó la bandera, el poeta Teurbe Tolón tuvo en cuenta que entonces Cuba estaba dividida en tres departamentos: occidental, central y oriental. De ahí que primero dibujara las tres franjas, en un azul celeste
(luego cambiadas por el azul marino o turquí), en tanto las dos blancas representan la pureza y la justicia de la causa libertadora.
La enseña también exhibe un triángulo equilátero rojo, que simboliza la sangre de los caídos; la estrella, con una de las cinco puntas hacia arriba, identifica las ansias de libertad y de soberanía del pueblo isleño.
Originalmente, la bandera poseía la estrella con una punta hacia el extremo libre del triángulo, posición que fue cambiada por el primer presidente de la República, Tomás Estrada Palma, quien en un decreto del 21 de abril de 1906 determinó que una de las puntas mirara hacia arriba. También la regulación determinó que las tres franjas azules fueran de color turquí, una tonalidad oscura y profunda, semejante al añil, al índigo o al azul de Prusia.
La bandera cubana, de forma rectangular, de doble largo que ancho, fue proclamada como tal en la Asamblea de Guáimaro, territorio de Camagüey, el 11 de abril de 1869, meses después del inicio de la Guerra de Independencia el 10 de octubre de 1868, liderada por el intelectual y patriota Carlos Manuel de Céspedes. Narciso López había sido ejecutado antes por la colonia española por sus acciones conspirativas.
Existían entonces dos banderas, la que representa a la nación y la que había utilizado Céspedes cuando se alzó en su hacienda La Demajagua. Los colores eran los mismos, pero el diseño era diferente.
La Asamblea reconoció como enseña patria la diseñada por Teurbe Tolón, pues fue idealizada cuando aún en la Isla no había sido encendida la llama de la rebeldía nacional mediante las armas. La de Céspedes no fue desdeñada, y desde entonces presidió las reuniones de las
Asambleas de la República en Armas y después el Congreso Nacional. En la actualidad acompaña a la creada en Nueva York en las sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento) de Cuba.
Antes de Guáimaro, ya había sido enarbolada por Narciso López, en la ciudad de Cárdenas, en la actual occidental provincia de Matanzas, el 19 de mayo de 1850, aunque las memorias plantean que antes ese militar la había presentado en Nueva York en el círculo de exiliados cubanos.
La enseña cubana es motivo de inspiración para poetas y pintores, historiadores y filósofos, pues ha estado vinculada a la vida de la nación, durante más de 100 años, al igual que el Escudo Nacional y el Himno de Bayamo (himno nacional). Hay más de un centenar de textos que la ensalzan.
Uno de los grandes literatos cubanos, José María Heredia (1803-1839), compuso La estrella de Venus, que autores indican como coincidencia con la observada por López en Nueva York y que es uno de los símbolos del pabellón nacional.
En 1901, poco antes de la proclamación de la naciente república cubana, en una carta al patriota puertorriqueño Sotero Figueroa, el Generalísimo Máximo Gómez, estratega militar de las dos grandes guerras independentistas de Cuba, escribió: “Debemos preservar lo que aún queda de la etapa libertadora: su historia y su bandera”. La orden del ilustre dominicano ha sido cumplida con creces.
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El exsaltador de altura cubano Javier Sotomayor
resaltó el potencial del atletismo nacional para enfrentar con éxito los venideros compromisos internacionales, entre ellos los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla-2018.
En declaraciones a Correo de Cuba, el recordista mundial destacó la irrupción de jóvenes figuras en las áreas de salto y de lanzamiento, durante una ceremonia de premiación a los mejores deportistas juveniles del país el pasado año, celebrada en el Memorial de La Denuncia.
Citó, entre las nuevas promesas, al triplista Jordan Díaz, quien ganó el título mundial juvenil de Nairobi-2017, con 17,30 metros, la mejor marca de la historia para menores de 18 años; el saltador de largo Maikel Massó, y la jabalinista Marisleisys Duarte.
Además, elogió la labor de los entrenadores cubanos en el perfeccionamiento y la mejora del desempeño de los atletas más
noveles y la acertada preparación para poder retener el primer lugar en la cita centrocaribeña, del 19 de julio al 3 de agosto.
En ese sentido, Díaz se refirió a la gira efectuada por Europa, donde alcanzó nuevos triunfos en su carrera, y recordó la marca lograda en la tercera prueba de confrontación de la selección nacional, con 17,32 metros, un registro que supera lo logrado en la justa de Kenia.
El estelar juvenil, de solo 16 años de edad, expresó su
deseo de integrar la representación cubana en
Barranquilla, para regalarle a la afición
nacional la medalla de oro,
pero reconoció que el área del
triple salto en el país cuenta con
muchos atletas de alto nivel y resultados muy parejos.
Según él, el atletismo cubano tiene fuerza para ganar en la lid centrocaribeña y aportar la mayor cantidad de preseas a la delegación, impulsado en buena medida por los más jóvenes.
Calificó, asimismo, de buena la preparación para enfrentar el reto de Barranquilla y adelantó su deseo de participar en los Juegos Olímpicos de Tokio-2020 y conseguir un metal.
En la pasada cita centrocaribeña de Veracruz-2014, Cuba totalizó en el certamen atlético 22 medallas de oro, 14 de plata y ocho de bronce, para casi triplicar la ventaja sobre el
segundo en la tabla de posiciones, México,
quien acumuló 8-11-10.
destaca el potencial del atletismo cubano
POR ADRIáN MENGANA
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Por ADáN IGLESIAS
Los senadores Jim McGovern, de Massachusetts; Gary Peters, de Míchigan; Patrick Leahy, Vermont; Ron Wyden, de Oregón, y Susan Davis, de California.
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Miembros de una delegación bicameral del Congreso
norteamericano expresaron la necesidad de dar continuidad al proceso hacia la normalización de los nexos entre Cuba y Estados Unidos, iniciado bajo la administración del expresidente Barack Obama.
El grupo encabezado por el senador demócrata Patrick Leahy, vicepresidente del comité de asignaciones de la Cámara alta, realizó una visita a Cuba para analizar junto a autoridades locales los cambios de la política de Washington hacia la Isla desde que el presidente Donald Trump asumió la jefatura de la Casa Blanca en enero de 2017.
Durante una conferencia de prensa en la Embajada estadounidense en la capital cubana, Leahy se refirió a la reunión que él y sus acompañantes sostuvieron la víspera con el Presidente cubano, Raúl Castro.
Valoró que el encuentro tuvo lugar en un ambiente extremadamente franco y
Por ROBERTO GARCÍA agradable, que sirvió para constatar el deseo de la parte cubana de seguir adelante en el mejoramiento de los vínculos bilaterales, a pesar de las actuales circunstancias.
El senador por Vermont reprochó el rumbo impuesto por Trump a la política hacia la nación caribeña, en particular las medidas relacionadas con la reducción del personal diplomático en La Habana y la expulsión de integrantes de la sede cubana en Washington.
Este es un grave error que daña los intereses de los dos gobiernos y pueblos, sobre todo de quienes tienen necesidad de viajar en uno u otro sentido, por razones familiares o de negocios, y tantas otras cosas que quedaron congeladas, con el pretexto de los incidentes de salud reportados por diplomáticos estadounidenses en la capital cubana.
Sobre estos hechos, Leahy destacó la cooperación del Gobierno de la mayor de las Antillas en la búsqueda de la verdad sobre el tema y opinó que las autoridades de la Isla no tienen la menor intención de dañar a los norteamericanos que vienen a La Habana.
Al respecto señaló que ni él ni sus colegas de la delegación tuvieron ningún temor de venir aquí, pues saben que no existe peligro alguno; incluso viajaron con sus esposas y, en el caso de Leahy, también con su nieta de 13 años.
El grupo, que partió de regreso a su país, lo integraron, además, los igualmente senadores Ron Wyden, de Oregón, y Gary Peters, de Míchigan, así como los representantes Kathy Castor, de Florida (quien no participó en la conferencia de prensa); Jim McGovern, de Massachusetts, y Susan Davis, de California.
Por su parte, McGovern deploró las recientes medidas de reducción de las sedes diplomáticas y otros cambios impuestos por la Casa Blanca a los vínculos bilaterales, ya que afectan los viajes de los cubanos a la nación norteña y de los estadounidenses a la Isla.
Los legisladores sostuvieron un encuentro el lunes con el director general para Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Carlos Fernández de Cossio, quien agradeció los esfuerzos de estos miembros del Capitolio para mejorar las relaciones.
congresistas de ee. uu. ratifican necesidad de mejorar nexos con Cuba
Abelardo Domínguez, especialista de Desarrollo y Negocios de la Empresa Agroforestal Macurijes.
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Eliminar una planta invasiva como el marabú, obtener de su tronco carbón vegetal —de alta
demanda en el mercado internacional— y en el proceso fabricar energía eléctrica es una de las estrategias de Cuba para emplear la biomasa forestal.
A propósito del Proyecto Marabú, Correo de Cuba conversó con Abelardo Domínguez, especialista de Desarrollo y Negocios de la Empresa Agroforestal Macurijes, quien explicó que el carbón producido a partir de esa planta tiene todo el mercado cubierto debido a su alto nivel de combustión.
Las exportaciones de esta hulla vegetal comenzaron hace unos cinco años, dijo y amplió que su uso tiene ventajas por ser una biomasa sin costo alguno y con un elevado potencial energético que posibilita su empleo en bioeléctricas.
Domínguez explicó que la empresa Macurijes está por concretar un negocio con un socio europeo para generar electricidad a partir de los desperdicios de la industria forestal, como son las plantaciones degradadas del marabú y de eucalipto.
La suscripción de dicho acuerdo se prevé para el primer trimestre de este año y, luego de su ejecución, iniciar la producción de electricidad en 2019.
Asimismo, se desarrollan otros proyectos con el marabú, entre ellos uno en la provincia Camagüey con
cuba aplica estrategias para convertir biomasa forestal en energía
la empresa vietnamita Tintan —en proceso de firma— y otros en Villa Clara y Ciego de Ávila; en todos ellos está previsto que una vez eliminado el espinoso arbusto se sembrarán plantaciones energéticas para darle sostenibilidad al proyecto, añadió el especialista.
Especificó que en el caso de Camagüey se pretende generar unos 60 megavatios y agregó que una vez erradicado el marabú se cultivará sorgo dulce para alimento animal, cuyos residuos se utilizarán también en la bioeléctrica, además de las nuevas plantaciones forestales, que en total ascenderán a unas 18 mil hectáreas.
La perspectiva del Proyecto Marabú es eliminar la planta, destacó y explicó que se trata de un arbusto invasivo, cuyos rendimientos de madera son muy bajos, entre los 35 y 40 toneladas por hectáreas, mientras que una plantación de bosque energético de eucalipto a los siete años puede alcanzar las 150 toneladas por hectáreas, acotó.
Sin embargo, Domínguez señaló que el marabú es una planta que forma suelo, pues al ser tan intrincada protege la tierra de la erosión del viento y del agua, por lo que las fertiliza y prepara para nuevos cultivos.
La aspiración es eliminar el marabú para devolver a los terrenos sus usos iniciales: en la ganadería, sembrar pastos; si es la actividad forestal, plantar bosques, o en cultivos varios, concluyó.
POR TEYUNé DÍAZ
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POR ROBERTO F. CAMPOS
La mayoría de los turistas que llegan a Cuba —más de cuatro millones el pasado año—
comentan hoy, como lo más impresionante del viaje, la gente y la seguridad de las calles, pese a buscar en sus vacaciones playas y naturaleza. Tales respuestas las dan a sus guías y a reporteros, quienes insistentemente buscan grietas en las opiniones de los que escogen a esta isla como el lugar ideal para descansar.
peldaños para llegar a CubaEllo lo corroboraron algunos profesionales del sector de
los viajes de los Estados Unidos que, reunidos en La Habana, coincidieron con tales pareceres y por lo tanto pusieron un granito más de arena en el atractivo de este destino.
Esa cita agrupó esta semana a ejecutivos de compañías de los sectores de agencias de viajes, hoteles, turoperadores, aerolíneas y cruceros, quienes manifestaron su interés en continuar con las relaciones comerciales con Cuba y sus autoridades.
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Y es que precisamente los estadounidenses son una especie de botón de prueba para la industria recreativa cubana; por un lado, por las prohibiciones que tienen sus ciudadanos por viajar libremente a este territorio; por el otro, lo atractivo que representa para ellos.
Durante 2017 alrededor de 620 mil estadounidenses viajaron a Cuba, siempre reconociendo que estuvieron ante altos niveles de seguridad y satisfacción.
De ahí que los argumentos de los profesionales norteños sobre los aspectos sobresalientes del turismo aquí entren en contradicción con la alerta de viaje que publicó el Departamento de Estado el pasado septiembre y que a principios de enero tuvo que levantar y pasarla a reconsideración.
Ahora, el presidente estadounidense, Donald Trump, vuelve a la carga en su reciente discurso sobre el estado de la nación, al recrudecer sus palabras contra varios países, entre ellos Cuba.
Tales criterios los vierte a pocas horas de que la Asociación de Turoperadores de Estados Unidos, en voz de su presidente, Terry Dale, asegurara estar abierta a negocios con un país seguro, maravilloso y legal para sus viajeros.
Por otro lado, informes oficiales señalaron oportunamente que la Isla cuenta con más de 67 mil habitaciones hoteleras, a las que se suman dos mil
restaurantes privados y más de 21 mil habitaciones en alojamientos familiares.
Canadá sigue como el primer mercado emisor de viajeros hacia Cuba, con el 34 por ciento del total de llegadas. Estados Unidos y Canadá juntos abarcan el 45 por ciento del global de recaladas, seguidos por Europa, con el 33 por ciento.
A la Isla vuelan 68 líneas aéreas que enlazan con 70 ciudades importantes del mundo; en cuanto a los cruceros, operan 25 barcos, a los que se sumarán muchos más, con 265 escalas y más de 170 mil pasajeros, según datos de 2017.
Parafraseando un viejo refrán, tantas miradas no pueden estar equivocadas en un mundo que ofrece destinos a veces muy bellos e interesantes, pero con problemas de seguridad y donde la gente incluso puede llegar a rechazar a los recién llegados.
Por CIRO BIANCHI
símbolo de La HabanaLa torre del Castillo de la Fuerza sirve de pedestal a
la estatua en bronce de una mujer que luce en su mano izquierda la cruz de la Orden Militar española de Calatrava e indica a los marinos la dirección del viento. Está en el mismo lugar desde 1631, cuando los habaneros quisieron perpetuar con ella la memoria de doña Inés de Bobadilla, la esposa de Hernando de Soto, el afiebrado explorador que, después de haber jugado al ajedrez en Perú con el inca Atahualpa —que era su prisionero—, buscó, sin encontrar, en 1539 —en la Florida—, la fuente de la eterna juventud.
Doña Inés lo sustituyó en el Gobierno de la Isla —es la única mujer que en más de 500 años ha desempeñado en Cuba la máxima autoridad— y, dice la leyenda, todas las tardes subía a esa torre a atisbar en el horizonte el regreso del marido.
Jamás volvió, e Inés languideció de tristeza. Hernando de Soto murió en su búsqueda afanosa, y sus compañeros lo enterraron en el lecho del río Misisipi para que los indios no profanaran su cadáver. Los habaneros, para exaltar la fe de aquella mujer en su espera, encargaron la estatua y la colocaron en La Fuerza, sin saber que La Giraldilla —como se conoce la escultura— terminaría convirtiéndose en el símbolo de la ciudad. La pequeña estatua se inspiró en La Giralda de Sevilla y fue realizada en bronce por el fundidor habanero Gerónimo Martín Pinzón.
La Fuerza es la más antigua de las fortalezas cubanas y una de las primeras de América. Su arquitectura es típica del Renacimiento europeo: un cuadrado rematado por cuatro baluartes y rodeado de un foso con puente levadizo.
Hubo un gobernador de la Isla que nombró a su hijo, de 14 años de edad, capitán de este castillo, y parece
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Por CIRO BIANCHI Por LUCÍA ARBOLáEZ
sangría a la cubana
Preferida por muchas personas, la sangría es bienvenida, sobre todo, en meses de verano, cuando se agradece
una bebida refrescante, ya sea para ingerir sola o como acompañante de las comidas o algún que otro bocadillo.
La cantidad de azúcar empleada en su elaboración depende de las frutas a utilizar, así como del gusto de los comensales.
Generalmente se hace un poco más dulce cuando se sirve como refresco que para acompañar los platos.
En su preparación se emplea una jarra de cristal donde se vuelca el jugo de dos o tres limones y cuatro naranjas o dos toronjas.
A esa mezcla se le añaden cuatro cucharadas de azúcar y una piña pelada y cortada en trocitos. Se coloca en el frío y, al momento de servirla, se le agrega una botella de vino tinto y varios cuadritos de hielo.
Se suele servir en vasos si se ingiere como refresco y en copas cuando acompaña las comidas.
Se pueden emplear otros ingredientes en su preparación:
½ taza de jerez o triple seco1 taza de limonada preparada½ taza de jugo de naranja2 o 3 cucharadas de azúcar (al gusto)1 botella de vino tinto1 naranja en rebanadas1 limón en rebanadas1 botella de agua natural o con gas
que en un tiempo la disciplina de su guarnición dejaba tanto que desear que otro gobernador encerraba a los soldados por la noche en la fortaleza y guardaba la llave debajo de la almohada.
Lo cierto es que, de origen, fue una obra desafortunada desde el punto de vista militar. Se construyó en 1538 y quedó en ruinas cuando el corsario francés Jacques de Sores atacó y ocupó La Habana en 1555.
La reconstruyeron tres años después en un lugar cercano al de la fortaleza primitiva y sufrió modificaciones que mejoraron su potencial defensivo en 1587, fecha de la llegada a Cuba del ingeniero romano Juan Bautista Antonelli, a quien se confió un vasto plan de fortificaciones que culminó con la construcción de los castillos de El Morro y La Punta, tres fortalezas que blasonaron en el escudo armas de la primitiva villa, al otorgársele el título de ciudad en 1592, y que aseguraron, con el fuego cruzado de sus cañones, la defensa de La Habana.
En 1899, en los días de la intervención militar norteamericana, se instaló en La Fuerza el Archivo General de la Isla, para volver después a ser sede de instituciones armadas, hasta que en 1938, y durante veinte años, albergó a la Biblioteca Nacional. Después radicaron allí, sucesivamente, el Museo de Armas y el Museo Nacional de la Cerámica.
La edificación fue sometida recientemente a un concienzudo proceso de restauración. Su ubicación, en el ángulo noreste de la Plaza de Armas, es de privilegio. Desde esa plaza o desde la Avenida del Puerto se hace perfectamente visible la figura grácil de La Giraldilla, una mujer que acecha y espera, que recibe y saluda al viajero y queda prendada en sus recuerdos como símbolo e insignia de La Habana de ayer, que vive siempre.
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